La Manzana de las Luces

Manzana ubicada en el barrio de Monserrat (antiguo barrio de Catedral Sur) de la Ciudad de Buenos

Aires, comprendida entre las calles Perú,

Alsina, Bolívar y Moreno. El ingreso es

por Perú 272.

Su historia se inicia en 1661 cuando la Compañía de Jesús trasladó aquí su sitio

primitivo en la actual Plaza de Mayo.

Hasta 1767, los jesuitas edificaron esta manzana: la Iglesia de San Ignacio y su colegio y la Procuraduría de las Misiones. De la época del virreinato son las Casas virreinales de renta, construidas por el Virrey Vértiz.

Iglesia de San Ignacio

Desde 1712, según planos del jesuita Juan Krauss, comenzó a edificarse la iglesia actual, que conserva aquella torre sur y muro fronal originales: junto con un tramo de galería subterránea del desaparecido Fuerte, son los elementos arquitectónicos más antiguos de la ciudad. 

Y de la época independiente la Sala de representantes y el Colegio

Nacional de Buenos Aires.

Sala de Representantes

Ámbito legislativo creado a consecuencia de la disolución de los cabildos en 1821, fue obra del gobierno de Martín Rodríguez. Su arquitecto, el francés Próspero Catelin, le dio forma de hemiciclo y estilo neoclásico.

Mercado de las Luces: en el Antiguo Claustro de las Misiones Jesuíticas, se

puede encontrar piezas de arte, bijouterie, platería y raros minerales entre otras

cosas.

Procuraduría de Misiones

Este conjunto edilicio se construye en 1730 y los planos se atribuyen al arquitecto jesuita Juan Bautista Prímoli. Se trata de una construcción de dos plantas de ladrillos, bóvedas de canon corrido y revestimiento de cal.

Se encargaba de administrar y capitalizar los beneficios del comercio de las misiones. Tenia

además a su cargo alojar y mantener a los indígenas de las reducciones que venían a Buenos Aires para

desempeñar diferentes tareas. El beneficio económico que de ello derivaba, estaba destinado a

las comunidades indígenas y a prestar apoyo al

Colegio de San Ignacio .

Túneles

El primer sistema defensivo de Buenos Aires incluyó una pequeña red de túneles de interés colonial, que consistía en la construcción de puntos elevados, como las torres de las iglesias, para poder visualizar los movimientos de los extraños o enemigos, conectados a través de

túneles con lugares de escape. • Los túneles de la

Manzana de las Luces tal vez intentaron ser parte de un sistema de defensa que quedó inconcluso, por donde era posible escapar, aunque dificultosamente. Luego se les pudo haber dado otro uso, como primitivo sótano o almacén subterráneo.