la luz de dios

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LA LUZ DE DIOS La Iglesia de Dios de la Fé de Jesús Tomo: VII, No. 319 “Y dijo Dios sea la luz y fue la luz” (Génesis 1:5) Y cuando esto sucedió el universo entero se llenó de luz, y al igual que David, cuando vemos los cielos quedamos fascinados por la luminosidad del universo, que ahora sabemos está plagado de miríadas de estrellas y que cada una es un sol que, debido a las distancias astronómicas, las vemos reducidas a pequeños puntos de luz. No es extraño que los pueblos primitivos adorasen las estrellas creyéndolas divinidades, (Isaías 47:13) cultos idolátricos prohibidos al pueblo de Dios, (Deuteronomio 4:19) A las estrellas les han dado los nombres de los dioses mitológicos, y todavía hoy la astrología hace creer que las estrellas inciden sobre la vida de los hombres. EL CIELO DE DIOS Y SUS ESTRELLAS Así como hay estrellas naturales, las hay también espirituales y simbólicas, pero todas son hechura de Dios, aunque las hay también venidas de la paternidad divina. Santiago dice que Dios es el Padre de las luces, (Santiago 1:17) o sea que estas luces son sus hijos. La luz es necesaria para disipar las tinieblas del mundo que fueron predichas. (Isaías 60:2) “Sobre ti nacerá Jehová” ¿Pero, como nacería Jehová en medio de las tinieblas? (Malaquías 4:2) Y así el sol de justicia vino para alumbrar a las naciones. (Mateo 4:16) Y por eso pudo decir: Yo soy la luz del mundo”. (Juan 8:12) Sí, Jesús es la luz que nos dio la luz. (Salmos 36:9) LA LUZ DE SU PALABRA “Porque el mandamiento es antorcha y la enseñanza luz; y camino de la vida las reprensiones de la enseñanza.” (Proverbios 6:23). Jesús es la fuente de nuestro saber, o como Pablo lo dijo: “En él están escondidos todos los tesoros de sabiduría y conocimiento.” (Colosenses 2:3) Sabemos que enseñanza y doctrina son sinónimos, pero en síntesis es el conocimiento de Dios y de su voluntad.

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LA LUZ DE DIOS

La Iglesia de Dios de la Fé de Jesús Tomo: VII, No. 319

“Y dijo Dios sea la luz y fue la luz” (Génesis 1:5) Y cuando esto sucedió el universo entero se llenó de luz, y al igual que David, cuando vemos los cielos quedamos fascinados por la luminosidad del universo, que ahora sabemos está plagado de miríadas de estrellas y que cada una es un sol que, debido a las distancias astronómicas, las vemos reducidas a pequeños puntos de luz. No es extraño que los pueblos primitivos adorasen las estrellas creyéndolas divinidades, (Isaías 47:13) cultos idolátricos prohibidos al pueblo de Dios, (Deuteronomio 4:19) A las estrellas les han dado los nombres de los dioses mitológicos, y todavía hoy la astrología hace creer que las estrellas inciden sobre la vida de los hombres.

EL CIELO DE DIOS Y SUS ESTRELLAS

Así como hay estrellas naturales, las hay también espirituales y simbólicas, pero todas son hechura de Dios, aunque las hay también venidas de la paternidad divina. Santiago dice que Dios es el Padre de las luces, (Santiago 1:17) o sea que estas luces son sus hijos. La luz es necesaria para disipar las tinieblas del mundo que fueron predichas. (Isaías 60:2) “Sobre ti nacerá Jehová” ¿Pero, como nacería Jehová en medio de las tinieblas? (Malaquías 4:2) Y así el sol de justicia vino para alumbrar a las naciones. (Mateo 4:16) Y por eso pudo decir: “Yo soy la luz del mundo”. (Juan 8:12) Sí, Jesús es la luz que nos dio la luz. (Salmos 36:9)

LA LUZ DE SU PALABRA “Porque el mandamiento es antorcha y la enseñanza luz; y camino de la vida las reprensiones de la enseñanza.” (Proverbios 6:23). Jesús es la fuente de nuestro saber, o como Pablo lo dijo: “En él están escondidos todos los tesoros de sabiduría y conocimiento.” (Colosenses 2:3) Sabemos que enseñanza y doctrina son sinónimos, pero en síntesis es el conocimiento de Dios y de su voluntad.

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David clamaba: “Envía tu luz y tu verdad, estas me guiarán, me conducirán...” (Salmos 43:3) La luz llegó y así vemos que la luz en las tinieblas resplandece. (Juan 1:5) En las tinieblas se representa el error, la ignorancia, el ateísmo, y la ciencia falsa que niega la realidad del mundo espiritual. Quienes aman las tinieblas, pretenden justificar sus malas obras propagando sus dislates y apoyándose en las teorías “científicas”. Jesucristo los pone en evidencia en su palabra. (Juan 3:19-21 y Mateo 6:23)

LA LUZ DEL MUNDO

“vosotros sois la luz del mundo...” (Mateo 5:14) Es muy bonito oír a Jesús decirnos esto, pero con ello el Señor nos ha dado una gran responsabilidad y un gran trabajo, porque si somos luz debemos alumbrar, con buenas obras y no esconder la luz de Dios debajo del almud sino en el candelero. Tal vez pensemos que no tenemos toda la luz, pero Salomón ha dicho: “La senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto.” (Proverbios 4:18) Cualquier cosa que sepamos de la palabra de Dios, tendrá más valor y fuerza que las aseveraciones de los inconversos. Haga la prueba y lo comprobará.

LOS HIJOS DE LUZ

Alumbrar es arder… dijo el poeta y arder es hacer con pasión lo que queremos. “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.” “Brilla en el sitio donde estés”; nos dice un himno, para cumplir lo que Daniel predijo: “Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento, y los que enseñan a justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.” (Daniel 12:3) Está escrito que los Filipenses resplandecían como luminarias. (Filipenses 2:15) Cuando en la Biblia se pronuncia un “AY”, significa dolores, penas. Juicio. “ay de los que hacen de la luz tinieblas y de las tinieblas luz…” (Isaías 5:20) “Porque todos vosotros sois hijos de luz, e hijos del día; no somos de la noche, ni de las tinieblas.” (1 Tesalonicenses 5:5) Sí, somos hijos de luz porque Dios es luz,

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habiéndonos rescatado de las tinieblas para traernos al reino de su amado Hijo. (Colosenses 1:13) Pedro, con la inspiración del mismo espíritu, dice que nos ha llamado de las tinieblas a su luz admirable, para que anunciemos las virtudes de Cristo. (1 Pedro 2:9)

LAS ESTRELLAS MÁS LUCIENTES

>La Estrella de primera magnitud (Apocalipsis 22:16 y 2 Pedro 1:19) El Lucero es la estrella mayor y más fulgente. La estrella de Belén fue un signo especial para guiar a los magos hasta el niño Jesús. > Los mártires (Mateo 24:29 y Apocalipsis 12:4) Ninguna estrella literal puede caer en tierra sin destruirla. > Los predicadores (Apocalipsis 1:20; Daniel 12:3) Ángeles significa mensajeros, y los predicadores desempeñan esta función. > Los ángeles (Job 38:7) Esto sucedió al tiempo de la creación con los ángeles alabándole y sus hijos en el sentido creativo regocijándose. > Los creyentes (1 Corintios 12:4). Así como las estrellas son diferentes en gloria, también los creyentes lo somos, unos más lucientes que otros. > Apóstoles y Patriarcas (Apocalipsis 12:1; Génesis 37:9,10). La mujer es figura tanto de la iglesia como de Israel. Por todo esto: Cuando veamos en la Biblia la palabra cielo, distingamos si es literal o espiritual para no errar como los demás.

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CUESTIONARIO 1- ¿CUÁL CREE UD. QUE SEA LA LUZ DE (GÉNESIS 1:5)? R- La luz del sol se creó hasta el cuarto día. Por eso unos creen que fue Cristo, otros que los ángeles, otros no lo entienden. Piense Ud. en otras clases de luz que existen y ahí estará la respuesta.

2- ¿DE QUÉ LUZ HABLA (JUAN 1:4)? R– De algún modo o forma la vida es luz.

3- ¿Quiénes SON LAS ESTRELLAS ERRÁTICAS DE JUDAS 13? R– Según el contexto son los apóstatas o herejes. 4- ¿CUÁL LUZ NOS DIO LA LUZ? (Salmos 36:9). R– La luz de la palabra, de la verdad, del conocimiento. 5– Según Pedro ¿Dónde debe nacer el lucero de la mañana? R– (2 Pedro 1:19) 6- ¿QUÉ ESTRELLA ESCOGIÓ JESÚS PARA REPRESENTARSE ASI MISMO? R– (Apocalipsis 22:16) 7- ¿TODAVÍA EL MUNDO CREE QUE LAS ESTRELLAS MANEJAN O INFLUYEN EN LA VIDA DE LOS HOMBRES? R– Si no lo crees te bastará con leer los periódicos. 8- ¿DÓNDE DICE QUE DIOS PROHIBIÓ EL CULTO A LOS ASTROS DEL CIELO? R– (Deuteronomio 4:19) 9– “VOSOTROS SOIS LA LUZ DEL MUNDO” ¿QUIENES? R– Los que tienen la luz de Dios: Su Palabra