la construcción de los issues en la esfera pública mediatizada

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Título La construcción de los issues en la esfera pública mediatizada Subtítulo Haga clic aquí para escribir texto. Resumen Partiendo del supuesto de que un sistema democrático requiere un espacio público de conocimiento, comunicación y deliberación sobre los asuntos percibidos como de interés común, en el que son básicos los medios de comunicación convencionales y en red, este proyecto pretende estudiar el papel de la información sobre los asuntos (issues) que suscitan una controversia pública, al objeto de comprender la mediación comunicativa de la relación entre ciudadanos, instituciones y actuaciones políticas. El asunto, issue, será abordado como un concepto teórico del que se derivan importantes consecuencias metodológicas. Conocer cómo se construyen los asuntos y el papel que

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Proyecto del Grupo Semiótica, Comunicación y Cultura (UCM) Proyecto I+DPartiendo del supuesto de que un sistema democrático requiere un espacio público de conocimiento, comunicación y deliberación sobre los asuntos percibidos como de interés común, en el que son básicos los medios de comunicación convencionales y en red, este proyecto pretende estudiar el papel de la información sobre los asuntos (issues) que suscitan una controversia pública, al objeto de comprender la mediación comunicativa de la relación entre ciudadanos, instituciones y actuaciones políticas. El asunto, issue, será abordado como un concepto teórico del que se derivan importantes consecuencias metodológicas. Conocer cómo se construyen los asuntos y el papel que juegan los medios informativos en los procesos de conocimiento y controversia pública precisa observar tanto los resultados (los relatos mediáticos sobre los asuntos) como los procesos de producción en los actuales contextos de convergencia tecnológica y de nuevas formas de comunicación, que han modificado el papel de los mediadores así como los procesos de producción informativa. Proponemos analizar, por tanto, la construcción de los asuntos públicos desde una doble perspectiva metodológica: una etnografía de la producción de información sobre esos asuntos y un análisis de los textos resultantes de ese hacer informativo. Tomando en cuenta esta doble dimensión, en nuestro análisis proponemos fijarnos en:• cómo participa la información en la producción del conocimiento y la controversia pública sobre determinados asuntos; • cómo se forman focos de interés y cómo los actores interesados utilizan los medios para promover su perspectiva; • cómo evoluciona la formación de opiniones, de relatos hegemónicos o mayoritarios y contra-hegemónicos; • cómo es recogido el debate y su evolución en los medios, la contraposición o la aproximación entre las perspectivas en conflicto, la búsqueda de intereses o valores comunes, etc.

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TtuloLa construccin de los issues en la esfera pblica mediatizada

SubttuloHaga clic aqu para escribir texto.

ResumenPartiendo del supuesto de que un sistema democrtico requiere un espacio pblico de conocimiento, comunicacin y deliberacin sobre los asuntos percibidos como de inters comn, en el que son bsicos los medios de comunicacin convencionales y en red, este proyecto pretende estudiar el papel de la informacin sobre los asuntos (issues) que suscitan una controversia pblica, al objeto de comprender la mediacin comunicativa de la relacin entre ciudadanos, instituciones y actuaciones polticas. El asunto, issue, ser abordado como un concepto terico del que se derivan importantes consecuencias metodolgicas. Conocer cmo se construyen los asuntos y el papel que juegan los medios informativos en los procesos de conocimiento y controversia pblica precisa observar tanto los resultados (los relatos mediticos sobre los asuntos) como los procesos de produccin en los actuales contextos de convergencia tecnolgica y de nuevas formas de comunicacin, que han modificado el papel de los mediadores as como los procesos de produccin informativa. Proponemos analizar, por tanto, la construccin de los asuntos pblicos desde una doble perspectiva metodolgica: una etnografa de la produccin de informacin sobre esos asuntos y un anlisis de los textos resultantes de ese hacer informativo. Tomando en cuenta esta doble dimensin, en nuestro anlisis proponemos fijarnos en:cmo participa la informacin en la produccin del conocimiento y la controversia pblica sobre determinados asuntos; cmo se forman focos de inters y cmo los actores interesados utilizan los medios para promover su perspectiva; cmo evoluciona la formacin de opiniones, de relatos hegemnicos o mayoritarios y contra-hegemnicos; cmo es recogido el debate y su evolucin en los medios, la contraposicin o la aproximacin entre las perspectivas en conflicto, la bsqueda de intereses o valores comunes, etc.

AutoresFouce, Hctor; Peamarn, Cristina; Saiz Echezarreta, Vanesa;

Palabras claveesfera pblica, asuntos pblicos, relato informativo, controversias, emociones, convergencia comunicativa

Comunicacin

1.Introduccin: el papel de la informacin en el nuevo entorno socialEl papel de los medios de comunicacin en la esfera pblica ha sido un tema central en las discusiones sobre la configuracin de las sociedades democrticas, pero ha cobrado nueva relevancia en los ltimos aos al calor tanto de la transformacin de los medios de comunicacin como de las nuevas prcticas polticas que marcan el devenir de la sociedad de la informacin. No cabe duda de que el viejo sistema de medios ha sufrido notables sacudidas en la ltima dcada. Como ha sealado Mantini (2014), las transformaciones estructurales del mercado de la comunicacin, que han desembocado en la creacin de grandes conglomerados mediticos (Reig, 2011), han hecho que el motor de los medios de comunicacin convencionales sean los valores neoliberales de facturacin y beneficio por encima de los principios democrticos de la libertad de expresin e informacin, pluralismo y participacin. Este modelo empresarial sufre una crisis de ingresos desde hace ms de una dcada, que est transformando radicalmente la cultura profesional y la situacin laboral de los periodistas (Diezandhino, 2012). Las cada vez ms precarias condiciones laborales (APM, 2012) estn afectando a las prcticas profesionales y a las rutinas productivas, abocadas tambin a la transformacin a causa de los nuevos hbitos y prcticas de consumo de los usuarios de la comunicacin (Boczkowski y Peer, 2011). No cabe duda de que las tecnologas han marcado el devenir de los medios en nuestros das. Junto con los grandes peridicos y cadenas de televisin existe ahora un entorno meditico enormemente plural y dinmico que permite a los ciudadanos hacer oir su voz. Estas posibilidades han creado un espacio pblico caracterizado por una relativa ausencia de gatekeepers y por la pluralidad de voces y perspectivas, de modo que son muchos los autores que se han aprestado a celebrar la expansin de la esfera pblica. Pero, como seala Bohman, ese potencial depende no slo de las tecnologas y las instituciones que conforman los marcos de la red, sino tambin de cmo los participantes contestan y cambian esas instituciones y de cmo interpretan internet como espacio pblico. Depende, en definitiva, de la mediacin de la agencia, ms que de la tecnologa (Bohman 2010: 255).Hay que recalcar que los medios de informacin profesionales online y offline y sobre todo la televisin siguen contando con la preferencia de los pblicos a la hora de informarse sobre la actualidad poltica. Estos constituyen el primer plano de visibilidad de la escena pblica. Sin embargo, los medios digitales han supuesto el desarrollo de una rica diversidad de entornos y redes de comunicacin donde han surgido mltiples espacios de informacin y debate. No se puede hablar ya de una esfera pblica, sino de una diversidad de micro y macro-esferas (sectoriales, locales, globales) y de espacios que han mostrado su capacidad de afectar, en combinacin o en convergencia con los medios tradicionales y convencionales, a las elecciones polticas, al cambio de regmenes dictatoriales y otras muy diversas situaciones colectivas.Esta nueva situacin obliga a revisar el alcance de buena parte de los discursos crticos que, especialmente desde la teora poltica, han descalificado sistemticamente la informacin meditica tildndola de manipuladora, parcial y falsa, un mal absoluto del que no cabe esperar prcticamente nada (Peamarn, 2014). Como ha sealado Peamarn, estos anlisis confunden el estado actual de los medios con su naturaleza. Salir de estas posiciones de rechazo generalizado de la informacin obliga a ampliar el marco de la reflexin.Entendemos que el papel de los medios en la construccin de lo comn es central, de modo que es necesario detenerse en los procesos de mediatizacin, una dinmica de participacin de los sujetos sociales en el entorno virtual de los flujos mediticos deslocalizados, donde adquieren recursos cognitivos y simblicos que, una vez apropiados y territorializados en procesos intersubjetivos en los que son mediadores los amigos, la familia, la educacin, las redes sociales entran a formar parte de los materiales de los que se sirven esos sujetos para formar sus identidades y sus modelos cognitivos, ticos, estticos, polticos. (Peamarn, 2008, 67).2.Antecedentes e hiptesisA la luz de estas reflexiones, el grupo de investigacin Semitica, comunicacin y cultura, perteneciente a la Universidad Complutense de Madrid, ha iniciado una investigacin sobre la construccin de los asuntos pblicos en la esfera pblica mediatizada a travs del anlisis semitico y etnogrfico de la informacin. Si bien esta investigacin est siendo iniciada, viene precedida de un intenso trabajo terico y de reflexin metodolgica, que es la que se presenta en las pginas siguientes. Una primera aproximacin a los problemas planteados en el proyecto ha sido realizada por Marina Mantini, que a lo largo de un ao ha estado trabajando en torno a las representaciones mediticas de los conflictos educativos. En este primer acercamiento al campo, nos interesaba observar si los relatos informativos de los medios convencionales discurren en paralelo o se cruzan en algn momento con los de los colectivos que expresan sus puntos de vista a travs de las redes sociales. El anlisis de este posible entrecruzamiento es observable en el texto, pero la perspectiva metodolgica elegida, que combina el anlisis del discurso con la etnografa, nos acerca al trabajo cotidiano de los periodistas, que se ha visto notablemente transformado al multiplicarse y complejizarse las fuentes, que ya no son meras suministradoras de informacin a los intermediarios, sino que son ahora capaces de crear y divulgar un discurso propio a travs de medios alternativos (blogs, redes sociales)La investigacin que se presenta en las pginas que siguen descansa sobre las siguientes hiptesis: 1. La formacin de asuntos controvertidos (issues), que adquieren un desarrollo significativo en los medios, es un enclave privilegiado para comprender el papel mediador de la informacin y las formas de participar en el ejercicio del poder en la esfera pblica mediatizada. Esta hiptesis est sostenida sobre dos supuestos: el primero es que el issue traduce y condensa conflictos sociales; el segundo es que las prcticas de consumo de la informacin tienden a articularse cada vez ms en torno a asuntos especficos de los que se tiene conocimiento mediante, sobre todo, las redes sociales- que por el consumo tradicional de medios. Por otra parte, sostenemos que la funcin informativa est sometida a profundas transformaciones pero an es central en la articulacin de la esfera pblica mediatizada.2. La transformacin de las condiciones de produccin en el contexto de convergencia tecnolgica ha afectado profundamente las rutinas y modos de produccin de la informacin y ha cambiado la relacin entre medios y ciudadana. Estas modificaciones han afectado de modo particular a la pautas de conformacin de los issues y al desarrollo de las controversias en la esfera pblica mediatizada. Las nuevas tecnologas han permitido una ampliacin del nmero de actores, voces y foros que participan en la esfera pblica, pero no est claro que eso suponga necesariamente un enriquecimiento de las fuentes periodsticas y de las perspectivas representadas. A pesar de todos estos cambios, los medios de difusin mayoritaria y de referencia siguen teniendo hoy el papel fundamental de generar el primer plano de la escena pblica.3. Los relatos mediticos configuran las perspectivas cognitivas, valorativas y afectivas desde las que se presentan los issues en la esfera pblica y articulan las controversias sobre los asuntos pblicos. Puesto que los relatos siempre incorporan de modo parcial las razones, intereses, emociones y valores de los actores implicados, el enmarcado que realizan pretende orientar la percepcin del asunto, su valoracin y las relaciones afectivas de los destinatarios con respecto al asunto y a los participantes.Existe una relacin de interdependencia entre los relatos mediticos y la evolucin de las controversias. Los medios de referencia no siempre dan cabida a la controversia sino que, con frecuencia, obstaculizan la inclusin de ciertas perspectivas y favorecen otras en funcin de sus intereses ideolgicos4. Las controversias avanzan no slo en funcin de los hechos y argumentos presentados en los relatos mediticos sino tambin de los cambios de perspectiva, en los que resultan fundamentales los aspectos emocionales, que tienen efectos sobre las valoraciones de los asuntos. La imparcialidad en la informacin implica considerar cmo se seleccionan y presentan los diversos puntos de vista particulares, as como su eventual desplazamiento hacia un horizonte de preocupaciones y valores comunes. Este desplazamiento requiere tanto de la comunicacin de razones y argumentos como de emociones. Por ello, la investigacin atender al modo en que los relatos informativos traducen las dimensiones afectivas de la controversia.5. La marcada alineacin ideolgica de la prensa espaola permite pensar que los profesionales de la informacin no siempre gozan de la autonoma necesaria para la eleccin de los asuntos y en la seleccin y presentacin de los diversos puntos de vista. Los principios deontolgicos de imparcialidad y neutralidad entran frecuentemente en colisin con las orientaciones que se imponen por parte de la empresa. Dada la situacin de crisis y la precariedad en la situacin laboral, resulta verosmil pensar que tales conflictos afectan de forma determinante a la prctica profesional. Trataremos no slo de verificar esta hiptesis sino mostrar cmo los profesionales de la informacin encaran y resuelven esta situacin.Por otra parte, sostenemos que existe una clara vinculacin entre sentimentalidad y moralidad en dos sentidos. En primer lugar, porque todo valor implica una cierta inclinacin afectiva; y en segundo, porque, en muchas ocasiones, los valores morales encuentran una justificacin inmediata en los sentimientos morales que se creen compartir con el resto de la sociedad.3. La construccin informativa de los asuntos controvertidos (issues)La investigacin en curso que aqu presentamos aborda la nueva esfera pblica a travs de la construccin informativa de los asuntos controvertidos, centrndose en el nexo asunto-relato-controversia. Una funcin fundamental de los medios de comunicacin consiste en seleccionar las cuestiones de inters para la ciudadana, darles forma a travs de relatos informativos y presentar una muestra de opiniones relevantes al respecto. Son por ello un elemento central de la Esfera Pblica entendida, desde Habermas, como el espacio de mediacin comunicativa entre las preocupaciones e intereses de la ciudadana y las instituciones y representantes polticos a quienes compete tomar decisiones al respecto. Entendemos que para valorar la funcin de los medios en una esfera pblica democrtica es preciso analizar la cadena informativo-polmica que vincula los asuntos de inters con los relatos y controversias que conforman la opinin y orientan las actuaciones polticas. El asunto (issue) surge como cuestin de potencial inters para los pblicos, en unos casos promovido desde los medios de comunicacin o las instituciones polticas, mientras en otros casos es propuesto desde la sociedad civil, desde el exterior de la esfera pblica oficial (Habermas, 1992). Consideramos fundamental este dinamismo del espacio pblico de comunicacin, espacio polmico conformado por una diversidad de perspectivas, valores e intereses, a menudo contrapuestos e incluso incompatibles (Arendt, 1974; Fraser, 1993). Atender a ese carcter polmico no implica ignorar la necesidad de acuerdos, sino entender la EP como un espacio necesariamente abierto y fluido que hace posible la discusin democrtica de perspectivas y valores innovadores, que incorpora las prcticas y las polticas imprescindibles para construir sociedades inclusivas y abiertas.Sostenemos que observar la aparicin y el desarrollo de asuntos controvertidos nos permite indagar la innovacin en la EP, las dinmicas por las que se introducen en ella problemas y perspectivas antes ausentes, se forman voces, discursos y sujetos que pueden transformar la propia EP y las relaciones de poder que la tensionan.Nos interesa, por tanto, analizar los elementos que construyen mediticamente los issues (o asuntos relevantes), definiendo el issue como un asunto que suscita controversia pblica, alrededor del cual se genera un conflicto entre distintos actores que, de una manera u otra, estn involucrados en l y luchan en la arena meditica para impulsar sus intereses, valores y perspectivas. Nuestro enfoque sobre el issue es por lo tanto distinto de teoras que consideran el issue como un objeto que se define y delimita con anterioridad respecto a su posicionamiento en el espacio pblico, indica Mantini (2014). Frente a estas aproximaciones, defendemos un punto de vista constructivista y performativo sobre el estudio de los medios, interesado en la produccin de sentido de la informacin. Puesto que las noticias contribuyen a construir la realidad (Tuchmann, 1999), entendemos que cualquier forma de comunicacin no slo representa, sino que funda el mismo objeto del intercambio comunicativo. Nuestra cuestin central es esa construccin del objeto de la comunicacin, el issue, en las prcticas informativas. En ellas el issue toma una forma discursiva y dialgica; es el resultado de un proceso de conflicto y es siempre controvertido, ya que confluyen en l perspectivas diferentes y hasta contrapuestas, en lnea con las ideas de pluralidad y de democracia deliberativa de Hannah Arendt.La capacidad de influir en la configuracin de los asuntos pblicos, en la agenda meditica y en la poltica, es una dimensin fundamental del poder en las actuales sociedades democrticas (Lukes 2005). Aquellos actores sociales que consiguen que sus intereses y perspectivas se conviertan en asuntos relevantes de la esfera pblica ejercen una forma de contra-poder o logran participar del poder de establecer la agenda. El desarrollo en el tiempo de los discursos informativos sobre esos asuntos sigue y contribuye a conformar el debate entre las diferentes perspectivas y actores interesados en ellos (sociedad civil, expertos, instituciones, actores polticos, etc.) que condicionar las opiniones. Nos interesa, por tanto, ms all de los estudios clsicos sobre la agenda, comprender los procesos de innovacin social y poltica: cmo se utilizan los medios actuales para introducir nuevos asuntos y perspectivas en la esfera pblica, cmo se construyen los relatos informativos y las controversias y cmo, a lo largo de cierto tiempo, stas avanzan o se bloquean, adquieren un sentido u otro.Las nuevas prcticas informativas online, adems de haber socavado el modelo de negocio de los medios de informacin, estn cambiando profundamente los hbitos de acceso y las relaciones entre productores y receptores (a menudo tambin periodistas-ciudadanos, participantes en los foros en red fuera y dentro de los propios medios periodsticos, etc.). La inmensa capacidad de archivo de estos medios y su potenciacin de la interactividad han transformado notablemente a los pblicos y han sido valorados muy positivamente por diversas voces, alguna de las cuales apunta una brecha significativa entre las prcticas de las instituciones polticas existentes y el mayor potencial de interaccin comunicativa (Bohman 2010: 251).Sin embargo, diversos analistas han sealado, de forma menos optimista, que la televisin es an el medio a travs del cual se obtiene el acceso preferente a la informacin poltica, incluso entre los usuarios habituales de la red, como los jvenes (Freedman 2010: 49). Como indica Gitlin, buena parte de los blogs informativos recopilan sus informaciones de los peridicos digitales y son pocas las webs que cuenten con los recursos y las habilidades para sacar a la luz hechos novedosos o realizar reportajes. Los blogs generalmente amalgaman y enlazan, una funcin necesaria en un periodismo que permite intervenir a los ciudadanos. Observa adems en el auge de blogs, de sitios y webs de opinin una nueva vitalidad del discurso poltico y una mayor implicacin en l, al menos entre los jvenes (Gitlin 2011: 96). Varios estudios sealan cmo estos medios se han integrado con los ms tradicionales y convencionales potenciando nuevas formas de esfera pblica. Los movimientos de indignacin, como las revoluciones de Tnez y Egipto en 2011, el 15M espaol o Occupy Wall Street se originaron por una llamada a la accin desde el espacio de los flujos y que extendieron de forma viral para transformar la indignacin en esperanza mediante la deliberacin en el espacio de autonoma que construyen en las redes y en las asambleas., sin olvidar el importante papel que cumplieron, por ejemplo, cadenas de TV como Aljazeera (que a su vez se sirvieron de las informaciones e imgenes que les aportaban lo telfonos mviles e internet) en las sublevaciones rabes (Castells 2012: 214-215). En esta lnea, Sampedro y Lpez (2005: 120) han sealado que los foros de discusin, los weblogs y la contra-informacin (desde los telfonos mviles a las emisoras convencionales de radio nacionales y extranjeras), se erigieron en medios alternativos con trascendencia en las urnas en medio del trauma y la desinformacin que sigui a los atentados del 11M de 2004 en Madrid.En su estudio sobre la configuracin de los issues relacionados con los conflictos educativos del ltimo ao, Marina Mantini (2014) seala que las ediciones online de los peridicos de referencia como El Pas y El Mundo mantienen esquemas clsicos a la hora de construir la informacin sobre, por ejemplo, la huelga general en educacin del 18 de octubre de 2012. Si bien buena parte de la informacin sobre la huelga y las llamadas a la protesta ha sido elaborada desde plataformas ciudadanas con fuerte presencia en internet, como Soy Pblica o Yo estudi en la pblica, las voces que pueblan estos reportajes son las de los participantes institucionales (partidos, sindicatos, organismos pblicos y algunas asociaciones de padres y madres y organizaciones estudiantiles) o los testimonios aislados de personas directamente implicadas. Es significativa la manera en que El Pas hace suyas las perspectivas sustentadas por varios de los colectivos opositores organizados aunque generalmente no son explicitadas como fuentes (Mantini, 2014). La brecha entre instituciones polticas y nuevas formas de interaccin comunicativa ya sealada es observable aqu entre esas nuevas prcticas de comunicacin y las formas habituales en el periodismo profesional.A travs del estudio de los issues pretendemos comprobar si los medios seleccionados privilegian un marco de sentido y si este corresponde a la perspectiva de una de las partes. Nos interesa tambin analizar si las diferentes perspectivas en conflicto son representadas o si, por el contario, algunas son excluidas o presentadas de forma vicaria. En funcin de esto, estaremos en condiciones de conocer si el texto periodstico expresa los intereses y valores de los varios actores y de qu manera los valora y articula. De este modo, podremos reflexionar sobre si esos textos contribuyen a la deliberacin pblica a travs de la confrontacin de los distintos puntos de vista, en bsqueda de intereses o valores comunes o, de forma inversa, privilegian los discursos hegemnicos y la falta de discusin pblica (Mouffe, 2007)4. Relatos informativos y construccin de sentido De los estudios sobre los relatos informativos nos interesan particularmente aquellos que entienden que a travs de los relatos los medios construyen el sentido de los acontecimientos, situaciones y procesos de los que tratan, as como de los actores involucrados en ellos (Lorusso y Violi 2004; Fabbri, 2007). Mientras los relatos histricos describen un evento del pasado a la luz de lo acontecido posteriormente (Danto, 1989; Ricoeur, 1985), los relatos de la actualidad carecen de final y se enuncian desde la ignorancia de lo que suceder despus. En los relatos informativos el sentido de los acontecimientos y asuntos del presente est orientado desde el futuro, desde la anticipacin de las consecuencias (Arquembourg 1998), o desde una perspectiva de valor, una estimacin de lo deseable o temible (Peamarn 2014). Al unir los materiales bajo una cierta descripcin, estos relatos construyen el sentido y valor de las situaciones y acontecimientos, pero llevan tambin las marcas de las formas en que se define esa situacin entre los actores implicados. El relato informativo, que circula velozmente de un soporte a otro cambiando de forma y de gnero, es mvil y fluido, tiende a la hibridacin y serializacin. No es un objeto acabado sino una produccin abierta en parte compartida por los actores de la escena pblica (Arquembourg y Lambert, 2005). Nos interesa aqu preguntarnos, adems de por las formas especficas de estos relatos contemporneos, por su contribucin a la comprensin de los asuntos controvertidos y por su papel en la esfera pblica. En nuestras sociedades democrticas nadie cuestiona que los medios y gneros informativos sean indispensables para aportar a los ciudadanos informacin fiable sobre las cuestiones que les ataen (Dewey 2004). Dado que estas cuestiones que ataen a muchos suelen ser controvertidas se espera de los medios que den a conocer, respetando cierta imparcialidad, el espectro de opiniones relevantes en torno a los asuntos de inters para la ciudadana. El inters por la democracia se traduce en un inters por aquellos recursos de comunicacin gracias a los cuales las perspectivas en conflicto pueden aproximarse y encontrar de algn modo un valor comn o un inters compartido (Krause, 2008) que permita el desarrollo de las controversias y el acuerdo en la accin. Entendemos que preguntarse cmo se hacen pblicas las diversas perspectivas sociales sobre los asuntos comunes y cmo se realizan las controversias entre ellas es una cuestin ineludible a la hora de valorar la calidad de la democracia.Relatos y controversias estn entrelazados. De una parte, los relatos mediticos contribuyen de manera decisiva a la orientacin de las controversias pblicas. A su vez las controversias se presentan en formas que pueden ser entendidas narrativamente, ya que su enunciacin en cada ocasin prefigura una conclusin, un relato posible de la resolucin del asunto (Terzi y Bovet, 2005). Partimos de la idea de que en los textos informativos hay siempre una dimensin polmico-conflictiva, como la hay en todo relato, que se construye desde una perspectiva que elige presentar el recorrido de un sujeto enfrentado a algo o alguien que se le opone, un anti-sujeto, cuando la misma situacin podra ser presentada desde el punto de vista del anti-sujeto, lo que supondra otra perspectiva y dara lugar a otro relato (Lorusso y Violi, 2005: 83-85; Mantini, 2014; Peamarn 2014). Como hemos sealado, las transformaciones actuales en la produccin, circulacin y recepcin de la informacin estn cambiando las caractersticas del espacio pblico, que es ahora un espacio pblico hipermediatizado (Peamarn, 2008), en el que es importante estudiar la manera en la que las controversias son construidas utilizando los recursos de los diferentes medios online y offline para comprender cmo estos dan voz a las diferentes perspectivas de los actores. Resulta significativo, como hemos visto en relacin a los issues, que los medios de referencia limiten las perspectivas incorporadas, en abierto contraste con la amplia pluralidad de ese otro espacio comunicativo de las redes online. Entendemos por perspectiva la visin o la concepcin que posee un sujeto de un objeto de valor. Esta relacin cognitiva y valorativa motiva la accin del sujeto de cara a lograr su objeto, configurando as el relato de su xito o fracaso (en este sentido, para la semitica, la dimensin narrativa est inscrita en todo texto, en el desarrollo de la relacin entre los sujetos y los objetos de valor). La perspectiva se distingue del punto de vista porque la primera es determinada por la historia que se elige contar, mientras el punto de vista pertenece a algn actor del relato y a quien interpreta la historia (Lorusso y Violi, 2004, p.15), pero ambas tienen una triple dimensin: perceptiva, cognitiva y valorativa (Casetti y Di Chio, 1991). Mantini (2014) ha identificado dos grandes perspectivas en los discursos mediticos sobre la educacin analizados -como trabajo previo a la investigacin en curso del grupo. Por una parte, una perspectiva que sita el conflicto en el marco de un macro-relato de la politizacin (identificada con la toma de partido de uno u otro partido poltico) de nuestra vida pblica: las reformas en educacin no son necesariamente negativas aunque para algunos planteen problemas debido al contexto actual de crisis econmica. El origen de las protestas es la oposicin de un sector poltico a la lnea del gobierno. En contraste, emerge una perspectiva que construye un macro-relato de la posicin ideolgica, segn el cual el gobierno se aprovecha de la crisis econmica del pas para desmantelar el sistema educativo pblico, en virtud de un modelo elitista que defiende los privilegios de unos pocos. Ciertamente, el relato de los medios analizados no coincide de forma simtrica con ninguna de las dos perspectivas, pero cada medio marca una orientacin de sentido hacia una u otra. Si bien El Pas insiste en la fuerte conflictividad y el drama social que reflejan las cifras, asumiendo como propia la idea de recortes incluida en la perspectiva ideolgica, elude o margina cuestiones fundamentales del conflicto sealadas como centrales por las organizaciones y plataformas en red opositoras: la prdida de asignaturas ms centradas en la formacin y el desarrollo humano frente a las instrumentales; la reduccin de la diversidad lingstica y cultural; la supresin de los comedores escolares o el trasvase forzoso de alumnos a las escuelas privadas. El Mundo ofrece una visin del conflicto ms habitualizado, menos grave y exasperado. Aunque no evita presentar las crticas a las reformas del gobierno, las inserta en un clima general y ordinario de oposicin entre organizaciones. Es decir, se inscribe en la perspectiva que sostiene que el problema es la politizacin de las reformas educativas.El trabajo de Mantini proporciona un punto de anclaje a esta investigacin, funciona como una foto fija que permite identificar las perspectivas, los relatos y las controversias sobre el issue del conflicto en torno a las reformas educativas en un momento dado. La investigacin en curso pretende observar si se producen en cada medio analizado, a lo largo de cierto tiempo, desplazamientos en los discursos y relatos sobre un asunto determinado, formas de aproximacin a una posible conclusin de las controversias, a pesar de que no se admitan totalmente las posiciones del adversario.5. Las dimensiones afectivas de la controversiaEn lnea con las varias voces que han cuestionado las concepciones excesivamente racionalistas de la esfera pblica (Arendt, 1974; Krause, 2008; Maiz, 2010; Castells, 2012), entendemos que, de una parte, la democracia requiere cierto grado de vinculacin afectiva con los valores pblicos compartidos (Habermas, 1992). Por otra parte, como demuestran numerosos estudios en este campo (Lakoff, 2006; Castells, 2012; Maiz, 2010; Krause, 2008), la formacin de opiniones es funcin, no slo de la comunicacin de argumentos y razones, sino tambin, o sobre todo, de la de sentimientos. Y es fcil observar que los valores y las emociones son componentes infaltables de los relatos informativos. La mediatizacin y el proceso deliberativo en torno a issues de inters comn, inevitablemente conllevan en la actual esfera pblica las dimensiones valorativa y emocional, a menudo superponindose, o enmarcando, a los argumentos sobre los intereses particulares y comunes y al discurso racional. Por tanto, una visin realista de la esfera pblica y un anlisis en consecuencia deben abrir el campo de indagacin terico-metodolgica para incluir, junto a los intereses y las razones, la dimensin emocional-valorativa como un eje fundamental de la investigacin. Consideramos, con Arendt y Krause, que atender a los intereses, la racionalidad, e incluso al supuesto de la bsqueda del bien comn, no implica excluir la consideracin de los afectos que marcan nuestra relacin con los otros y con los asuntos mismos. Por ello este proyecto incorpora, para la elaboracin de sus herramientas analticas, los trabajos de varios miembros del grupo orientados a relacionar la tradicin semitica en el estudio de las pasiones (Greimas y Fontanille, 1994; Fabbri, 1999; Pezzini, 1991), las aportaciones contemporneas de la sociologa de las emociones (Jasper, Godwin y Polleta, 2001) y su discusin en el campo del pensamiento poltico (Mouffe, 2007; Krausse, 2008; Nussbaum, 2008). Entendemos que el desarrollo de un proceso deliberativo requiere de sus participantes, de una parte, la capacidad de desplazar su punto de vista para captar la perspectiva de los otros, lo que a menudo se produce por la comunicacin de emociones (Boltanski, 1993; Nussbaum, 2008; Krause, 2008); de otra parte, la capacidad de evaluar los intereses, valores y afectos parciales desde la consideracin de lo que puede ser aceptado (endorsable) por la sociedad en su conjunto (Krause, 2008). El debate pblico gracias al cual se forman los juicios polticos precisa cierta reflexividad, adems de que los medios apliquen criterios de objetividad e imparcialidadComo es sabido, los medios de comunicacin saturan con emociones el espacio pblico. Pero los medios vehiculan afectos en modos que pueden contribuir, bien a hacer avanzar el proceso deliberativo o bien a obstaculizarlo (por ejemplo, con la insistencia en la contraposicin y la crispacin). Consideramos necesario, por tanto, dotarnos de instrumentos para evaluar los modos en que la incorporacin de emociones a los relatos y controversias informativos afecta a la aplicacin de los valores deontolgicos, como el de imparcialidad, y al proceso de informacin y deliberacin sobre los asuntos pblicos.Esta perspectiva que vincula la construccin de asuntos con la de relatos y controversias en la esfera pblica, incorporando al anlisis de estos procesos la dimensin emocional, es seguramente innovadora en su planteamiento. Est adems comprometida con la indagacin de las prcticas y polticas que permiten construir sociedades inclusivas y abiertas y con el estudio de las formas de innovacin y creatividad que se estn produciendo en el mbito de la comunicacin ciudadana y profesional, de las que tratar de comprender cmo se desarrollan y cmo inciden en la transformacin del espacio pblico.6. Notas sobre la metodologaComo ya hemos sealado, la investigacin centra su atencin en dos mbitos diferentes: los productores de la informacin y los relatos de los medios. En consecuencia, dos son los procedimientos metodolgicos bsicos para enfrentarse a esos dos mbitos: uno de carcter etnogrfico que nos permita indagar cmo las empresas y los productores de informacin seleccionan las voces, las perspectivas y cuestiones relevantes, las hacen pertinentes y las difunden; y otro de carcter sociosemitico, que analice los relatos y controversias mediticos sobre los issues seleccionados.Como no puede determinarse a priori cundo aparece un determinado asunto y durante cunto tiempo va a permanecer y desarrollarse en los medios, estimamos que el tiempo de duracin del proyecto es suficiente para obtener datos relevantes y suficientes para nuestro anlisis. El anlisis se realizar mediante el enfoque follow the conflict (Marcus, 1995), centrado en el seguimiento de un issue. Este seguimiento nos permitir realizar etnografas y anlisis del discurso de las lgicas sociales y simblicas que articulan la construccin de los asuntos pblicos. El uso de los procedimientos etnogrficos para el anlisis de los procesos de informacin y, ms concretamente, para el conocimiento y la descripcin de las prcticas periodsticas, est bien acreditado por estudios clsicos como los de Tuchman (1983), pero tambin de otros ms cercanos a la actualidad como los realizados por Boczkowski (2006, 2010). Como sealan Boyer y Hannerz (2006), investigar las prcticas informativas es una oportunidad para reflexionar, adaptar y renovar las metodologas de investigacin a contextos complejos, multisituados (Marcus, 1995) y marcados por una constante reflexividad, cuyos resultados pueden iluminar otras reas del conocimiento social, ms an si consideramos la centralidad de la comunicacin en la sociedad actual. Hay que reconocer que la aplicacin del mtodo etnogrfico no es de uso corriente en las investigaciones en comunicacin. A pesar de las dificultades, las experiencias han mostrado la eficacia de esta metodologa para llegar a comprender las dinmicas sociales investigadas.Dado que la actuacin de los profesionales se realiza, al menos en parte, a travs de las redes digitales y viene condicionada por la de otros actores que intervienen en las controversias a travs de ellas, el trabajo etnogrfico tendr necesariamente una doble cara. Por una parte tendr que seguir los procedimientos de la etnografa tradicional cara a cara y, por otra parte, los de una etnografa digital o ciberetnografa (Mrquez, 2013) que observe y analice a los actores que encauzan su accin a travs de las distintas redes informticas. Al combinar investigacin on line y off line, nuestro trabajo puede ser descrito como una etnografa mixta (blended ethnography), esto es, un tipo de etnografa a medio camino entre la tradicional etnografa cara a cara y la nueva ciberetnografa desarrollada en plataformas digitales (Konizets, 2010). Pensamos que, en una situacin como la actual, donde Internet y las redes sociales estn tan integrados en el trabajo cotidiano de los periodistas, la investigacin on line es tan necesaria como la off line si queremos entender el verdadero alcance y complejidad del trabajo periodstico en la sociedad de la informacin y el conocimiento. Hemos, pues, de distinguir estas dos facetas de la observacin etnogrfica. Al mismo tiempo, el trabajo etnogrfico online resulta necesario a la hora de incluir en el anlisis actores tradicionalmente excluidos de la produccin de informacin, especialmente, los movimientos sociales y ciudadanos que se han interpuesto con fuerza como productores de informacin a travs de diferentes canales de comunicacin y como fuentes organizadas de la misma.Como ya hemos sealado, los relatos de la actualidad difundidos por los medios en tiempo real tienen ciertas peculiaridades. Los relatos de la actualidad carecen de final y se enuncian desde la ignorancia de lo que suceder despus. Los estudios llevados a cabo sobre esta cuestin cuentan con la dificultad de definir el relato informativo, que no es un relato cerrado, sino relativamente abierto y dotado de una alta movilidad y fluidez, que circula velozmente de un soporte a otro (intermedialidad) cambiando de forma y de gnero (hibridacin, serializacin). En definitiva, nos interesa preguntarnos por la forma especfica que adquieren estos relatos contemporneos y por cmo configuran el sentido de los asuntos controvertidos de la esfera pblica.Las controversias que son objeto de esta investigacin tienen tambin su propia peculiaridad, de tal manera que slo puede ser comprendidas desde los procesos de innovacin social y poltica caractersticos de la forma en que se construye la esfera pblica en la actualidad. Esta peculiaridad obliga a un tipo de anlisis que no siempre coincide con las perspectivas utilizadas en otros contextos. En especial estamos interesados por el dinamismo y la apertura de la actual esfera pblica y sobre todo, por cmo ciertos actores utilizan los medios actuales para introducir nuevos asuntos y perspectivas en la esfera pblica y or cmo. evolucionan los relatos y las controversias en el tiempo, si se producen procesos de dilogo y aproximacin que hagan posible el espacio de deliberacin y acuerdo sobre los asuntos comunes.7. ConclusinLa investigacin en curso ofrece una aproximacin novedosa al estudio de las relaciones entre el discurso periodstico y el espacio pblico en una sociedad democrtica. Intenta dar cuenta de cmo las nuevas prcticas informativas estn construyendo un nuevo modelo de esfera pblica mediatizada, en el que una pluralidad creciente de voces alterna su emisin entre las calles, los medios tradicionales y las redes online. Entendemos que los usos de la tecnologa proporcionan recursos para crear nuevos canales y entornos de comunicacin, pero tambin que estos conviven con un ecosistema meditico en el que los medios periodsticos profesionales online y offline siguen siendo la puerta de acceso de la mayora de los ciudadanos a la informacin que construye el sentido del mundo comn. El encadenado de asunto, relato y controversia nos permite analizar tanto los procesos de construccin de asuntos relevantes en el discurso meditico como su relacin con el entorno social, como fuente y como resultado de la accin de los medios. En especial, nos permite analizar la forma en que ciertas visiones no hegemnicas logran llegar a los medios y situar sus preocupaciones y perspectivas en la discusin cvica.Esta aproximacin terica nos ha obligado a adoptar una metodologa poco explorada en el estudio de los medios, que combina el anlisis del discurso con la etnografa. Nos permitir estudiar el trabajo de los productores de informacin al tiempo que los textos producidos por estos, entendidos como una cadena circular que da forma a un entorno social y meditico altamente complejo en el que los periodistas han perdido el monopolio de la informacin sin que por esto se haya creado un entorno informativo totalmente abierto e igualitario.BibliografaAPM-Asociacin de la Prensa de Madrid (2012): Informe anual de la profesin periodstica 2012, MadridArendt, Hanna (1974): La condicin humana. Barcelona: Seix BarralArquembourg, Jocelyne (1998): Narraciones televisivas en tiempos de crisis: Irak 1998. Comunicacin y Medios, 8, pp. 83-97.Arquembourg, Jocelyne y Lambert, Frdric. (2005). Prsentation. Rseaux 4/2005, 132, pp. 9-23.Boczkowski, Pablo (2006): Digitalizar las noticias. Innovacin en los diarios online. Buenos Aires: Manantial.Boczkowski, Pablo (2010): News at work. Imitation in an Age of information abundance. 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