la consanguinidad en vizcaya y su capital de 1918 a 1966

46
KOBIE (Serie Antropología Cultural) Bilbao Bizkaiko Foru Aldundia-Diputación Foral de Bizkaia N.º 4, 1989/90 LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 Claudia Zudaire Huarte (1) RESUMEN En este trabajo se estudia la consanguinidad de toda la Provincia de Vizcaya, globalmente, y de los 12 arciprestazgos que comprende, y de su capital, Bilbao: en cada circunscripción se incluyen los datos de los libros de cada parroquia. Es- ta consanguinidad es debida a los matrimonios verificados entre tio(a)-sobrina(o) carnales (3.º), primos hermanos (4.º), primos de grado desigual (tia-sobrina segunda) (5.º) y primos segundo (6. 0 ); se establece la frecuencia (%) de los diversos grados y su evolución en el período que se extiende de 1918 a 1966, ambos inclusive; se fija la influencia de cada grado en la evolución y la influencia de cada villa en su arciprestazgo y de cada distrito en el conjunto; se completa con datos referentes a años anteriores. Finalmente se da el coeficiente de consanguinidad para cada población ordenádolas según su gradiente. Los datos se recogen en las tablas adjuntas. SUMMARY In this paper consanguinity in Biscay is studied. It is trated both as a whole and its 12 ecclesiastical circumscriptions (or "arciprestazgos") wich the province is devided into, plus in its capital Bilbao; data taken out from ali parochial books are included in their respective tables. This consanguinity is due to marriages carried out betwen uncle and nice (aunt and nephew) (3rd), first cousins (4th) cousins in unequal degree /uncle and second nice) (5th) and second cousins (6th). The frequency (%) in the different degrees and its evolution from 1918 to 1966 incl. are determined; the influence of each degree on its evolution and that of each town on the circumscription and the influence of these on the whole is fixed; Finally, the consanguinity coefficient in each town is given in descending order. See the annexed tables. LABURPENA Lan honetan ikertzen da Bizkaia probintzian ematen den odolkidetasuna. Gai hori tratatzen da bere osotasunean eta pertako 12 artzipresterrietan eta Bilbo haren hiriburuan banan-banan; artzipresterri bakoitzean parrokia bakoitzeko libu- ruetatik bildutako datu guztiak satzen dira. Odolkidetasun hau honako ezkontza mota hauetatik sortzen da: osaba-ema- kumezko iloba (3.ª), lehengusu (4.ª), gradu desberdinetako lehengusu (osaba-emakumezko bigarren iloba) (5.ª) eta besten- gusuren artekoetatik (6.ª); gradu ezberdinetako maiztasuna (%) ezartzen da eta honen bilakaera 1918, enetik 1966. era, biak barne; mugatzen da gradu bakoitzak bilakaeran duen eragina, herri bakoitzak artzipresterrian daukana eta hauek probintzian bere osotasunean; aurreko urteetatik jasotako datuekin osatzen da lana. Azkenik, herri bakoitzeko odolkide- tasun anizkidea gehien ematen denetik gutxien gertatzen denera adierazten da. Ikus ondoko taulak. (!) Colegio N.• Sra. del Buen Consejo. 31795 LECAROZ (Navarra).

Upload: others

Post on 25-Jun-2022

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

KOBIE (Serie Antropología Cultural) Bilbao Bizkaiko Foru Aldundia-Diputación Foral de Bizkaia N.º 4, 1989/90

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

Claudia Zudaire Huarte (1)

RESUMEN

En este trabajo se estudia la consanguinidad de toda la Provincia de Vizcaya, globalmente, y de los 12 arciprestazgos que comprende, y de su capital, Bilbao: en cada circunscripción se incluyen los datos de los libros de cada parroquia. Es­ta consanguinidad es debida a los matrimonios verificados entre tio(a)-sobrina(o) carnales (3.º), primos hermanos (4.º), primos de grado desigual (tia-sobrina segunda) (5.º) y primos segundo (6.0

); se establece la frecuencia (%) de los diversos grados y su evolución en el período que se extiende de 1918 a 1966, ambos inclusive; se fija la influencia de cada grado en la evolución y la influencia de cada villa en su arciprestazgo y de cada distrito en el conjunto; se completa con datos referentes a años anteriores. Finalmente se da el coeficiente de consanguinidad para cada población ordenádolas según su gradiente. Los datos se recogen en las tablas adjuntas.

SUMMARY

In this paper consanguinity in Biscay is studied. It is trated both as a whole and its 12 ecclesiastical circumscriptions (or "arciprestazgos") wich the province is devided into, plus in its capital Bilbao; data taken out from ali parochial books are included in their respective tables. This consanguinity is due to marriages carried out betwen uncle and nice (aunt and nephew) (3rd), first cousins (4th) cousins in unequal degree /uncle and second nice) (5th) and second cousins (6th). The frequency (%) in the different degrees and its evolution from 1918 to 1966 incl. are determined; the influence of each degree on its evolution and that of each town on the circumscription and the influence of these on the whole is fixed; Finally, the consanguinity coefficient in each town is given in descending order. See the annexed tables.

LABURPENA

Lan honetan ikertzen da Bizkaia probintzian ematen den odolkidetasuna. Gai hori tratatzen da bere osotasunean eta pertako 12 artzipresterrietan eta Bilbo haren hiriburuan banan-banan; artzipresterri bakoitzean parrokia bakoitzeko libu­ruetatik bildutako datu guztiak satzen dira. Odolkidetasun hau honako ezkontza mota hauetatik sortzen da: osaba-ema­kumezko iloba (3.ª), lehengusu (4.ª), gradu desberdinetako lehengusu (osaba-emakumezko bigarren iloba) (5.ª) eta besten­gusuren artekoetatik (6.ª); gradu ezberdinetako maiztasuna (%) ezartzen da eta honen bilakaera 1918, enetik 1966. era, biak barne; mugatzen da gradu bakoitzak bilakaeran duen eragina, herri bakoitzak artzipresterrian daukana eta hauek probintzian bere osotasunean; aurreko urteetatik jasotako datuekin osatzen da lana. Azkenik, herri bakoitzeko odolkide­tasun anizkidea gehien ematen denetik gutxien gertatzen denera adierazten da. Ikus ondoko taulak.

(!) Colegio N.• Sra. del Buen Consejo. 31795 LECAROZ (Navarra).

Page 2: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

228 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

En las publicaciones precedentes habíamos abordado el tema de la consanguinidad en alguna parcela de la Provincia de Vizcaya y limítrofes, juzgadas a priori como interesantes por el contraste fisiográfico y su comporta­miento endogámico supuestamente vario. Estos fragmen­tos sirven de prólogo a este artículo que abarca toda la Provincia de Vizcaya y su capital, Bilbao.

Cuantos hayan gozado de la oportunidad de platicar con sujetos de distintos estamentos sociales habrán podi­do percibir las apreciaciones que sobre los problemas creados por la repetida consanguinidad en tal o cual po­blación emiten los espontáneos observadores, vertidas, a veces, a un lenguaje poco técnico pero elocuente. Este análisis que presentamos ofrece una base técnica que re­valide o invalide tales estimaciones.

Por razones obvias, el trabajo presenta tres secciones: la Provincia, en conjunto, los arciprestazgos y la Capital. En la primera, examinamos el fenómeno tomando a la Provincia como unidad; en la segunda los diversos arci­prestazgos en que se dividió la Provincia tradicionalmen­te hasta la creación de nuevas diócesis; y en la tercera, la capital Bilbao; consideraciones adyacentes completarán el panorama. Aunque la Provincia, como división territo­rial, no constituya un coto para cualquier problema bio­lógico, puede servimos de marco para este estudio y en­cajar de alguna manera los datos estadísticos y sus análi­sis. El inconveniente de asumir como unidades los arci­prestazgos no se hubiera solventado mejor cimentándo­nos en otras divisiones; por otra parte, este módulo es aceptable y se adapta a la configuración paisajística con relativa precisión. Añádase a esto que las fuentes de in­vestigación han sido los registros eclesiásticos. Bilbao queda fuera del capítulo, pues el medio urbano puede imprimir connotaciones típicas al tema.

El periodo tratado comprende del año 1918 al 1966, ambos inclusive. Además de las razones prácticas naci­das de las circunstancias de la adquisición de datos, nos induce a cerrar el estudio la demografía de Vizcaya, muy cambiante ya en esta época por el desmesurado creci­miento de algunas áreas y por la importancia de la inmi­gración que deforma y transforma las observaciones; por otra parte, el período es suficiente para implicar dos ge­neraciones. Ajeno al problema, pero de radical influencia sobre él, es el hecho de la guerra civil, que señala el cambio en la pauta endogámica. Los apuntes numerosos de los años anteriores al 18, complementan las inferen­cias.

Grados de consanguinidad y fuentes

Los grados que se incluyen en estas pagmas son los . que por ley eclesiástica requerían dispensa y por tanto

quedaban inscritos: matrimonio entre tío (a) y sobrina (o), entre primos hermanos, entre primos segundos, y en­tre primos de grado desigual, es decir con la hija(o) del primo hermano: Los designamos en el texto y en las ta­blas como sigue: T.S. ó 3.0

, P.H. ó 4.0, P.S. ó 6.0 y ts. ó

5.º; (la numeración es la conocida como del derecho ger­mánico, no la del romano). En los años precedentes al

Código de Derecho Canónico (1918) se registraban tam­bién otros parentescos más alejados. Existen casos de en­tronque múltiple, vgr. primos por línea paterna y mater­na, pero no son frecuentes y se anotarán en su lugar. En las tablas alteramos un poco el orden lógico y enfrenta­mos los matrimonios P.H. y los P.S. por ser los más fre­cuentes y los que marcan el estilo de emparentamiento.

Las fuentes de donde hemos extraído los datos son: El Registro General de la Agencia Preces (1925-46 y 1946-80); el Registro General de la Vicaría, tumo 1, libro 11 (1901-32) del obispado de Vitoria; en el primero de di­chos registros se consignan todos los oficios, concesiones, dispensas varias, privilegios, certificaciones, etc. que se tramitan via nunciatura; entre estas múltiples anotacio­nes se insertan las dispensas de parentesco para contraer matrimonio, con indicación de nombres y apellidos de los contrayentes, grado de parentesco de los mismos, y parroquia a que pertenecen, por orden cronológico de entrada. A partir del año 56, las fuentes han sido los car­tapacios, acumulados año por año, en el Archivo de la Diocesis de Bilbao, donde entre otros se encuentran los expedientes matrimoniales y por tanto las dipenasas, (1). El dato comparativo necesario para determinar la fre­cuencia de consanguíneos, es el número total de matri­monios (T.M. en nuestras tablas), y lo obtuvimos gracias a la amabilidad de párrocos y ecónomos de los diversos puntos en el 90% del total, y el resto revisando los extrac­tos remitidos al obispado y los libros in situ. La costum­bre de celebrar las nupcias en santuarios o iglesias dis­tintas a la de los contrayentes nos ha impulsado a inten­tar otra precisión: repasar los libros de los centros más frecuentados, Begoña, Urquiola, Lezo y otros, entresacan­do todos aquellos matrimonios a su respectiva parroquia; de la lectura de más de cuarente mil partidas, más de diez mil han engrosado las cifras de muchas poblacio­nes. Si bien esta fidelidad no altera considerablemente el resultado final a nivel de Provincia, sí lo hace en el de poblaciones e incluso arcipestazgos.

En las diversas tablas ofrecidas en el artículo, además de las sumas diversas, se presentan las frecuencias de matrimonios consanguíneos, en tantos por ciento, prime­ramente la frecuencia total de bodas entre parientes y en las siguientes columnas dispuestas por grados, 3.0

, 4.º, 6.0

y 5.º; ya hemos indicado antes la razón de este órden. Además se incluye la distribución de frecuencias a lo lar­go del periodo estudiado, por años, para facilitar el en­tendimiento de la evolución de la consanguinidad, si ocurre. La simple inspección de números, da en primera aproximación idea de este punto, pero matemáticamente existe una expresión que es el coeficiente de regresión, cuyo valor muestra el decrecimiento (si es negativo) o el

(1) Agradezco vivamente al limo Sr. Dn. Felipe Beitia, canciller secretario de la Diócesis de Vitoria, Dn. Julio Martin Zubilla­ga en el Registro General, Dn. Isidro Ortiz en el obispado de Bilbao y a los párrocos de Begoña, Urquiola y Lezo por las facilidades y ~tendones que me dispensaron durante mis in­vestigaciones, y a todos los párrocos que remitieron sus da­tos.

Page 3: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 229

1 • 1 ,.

I 1 . ,____ ~ . '

MÚNG. • : -~~--~ • : .\ •• ,-;........ • ) • • ¡

• \

0

dÜER.. /. I ;-------\ ' /

' / / •BI~ \ • .... --;-_/ .. /.

• -_-1,-...... • '----< .!........._ • l ............. _., 1

1 ........ - - --:-;-- / \: 1 \

: \ ' DIJR. 1 • • \.

1 • '\,

\ v~LL. 1 1 1 1 1.

\ I '\ !

Mapa de la configuración aproximada de los arciprestazgos existentes en los años del estudio.

crecimiento (si es positivo) de la consanguinidad a lo lar­go de los años, aspecto importante que revela si el hábito de matrimoniar los parientes permanece estático o si mu­da. Finalmente añadiremos el coeficiente de consanguini­dad, tanto de los arciprestazgos como de cada una de las poblaciones. Aunque quedó justificado el concepto en un artículo previo (ZUDAIRE, 1981), recordamos algunas ideas. Los consanguíneos son tales por tener algún ante­pasado común, y esto hace probable que posean genes idénticos, tantos más cuanto más próximo sea el antepa­sado común; si contraen matrimonio, la probabilidad de que sus hijos hereden esos genes idénticos es mayor cuanto más próximo sea su parentesco, es decir que la probabilidad de homocigosis aumenta; mirando el rever­so del problema, podemos decir que a medida que se alejen de los antepasados comunes en sucesivas genera­ciones, menor número de genes idénticos procedentes de ellos poseerán. La generalización y extensión de estos conceptos a la población es lo que denominamos coefi­ciente medio de consanguinidad (F) que indica la fre­cuencia de homocigóticos comparada con la de una po­blación panmíctica.

Teniendo en cuenta que muchas disfunciones y enfer­medades se manifiestan como tales al hallarse los genes causantes en estado homocigótico, se comprende el inte­rés de esta valoración. Demás está advertir que la proba­bilidad de homocigosis en un matrimonio de P.H. o de ts. o de P.S. es respectivamente, un medio, un cuarto y un octavo de la probabilidad del matrimonio de tio con sobrina.

Consanguinidad en Vizcaya, Provincia

El englobar el territorio provincial como un todo ho­mogéneo exige adecuar el tratamiento del tema al contex­to. Por supue.sto se comentan, en las líneas que siguen,

los valores absolutos de parentesco matrimonial, pero se insiste, por exigencia del asunto, en su evolución. El pri­mer aspecto, aislado, podría enmascarar la realidad, difu­minando la diversificada pauta endogámica de las dife­rentes áreas; no así el segundo que, aun siendo general, señala la tendencia manifestada por la consanguinidad en el transcurso del tiempo.

Hemos contabilizado 3.114 bodas de parejas emparen­tadas entre las 113.639 verificadas en estos 49 años, lo que monta un 2,74% de enlaces consanguíneos, distribui­dos por grados así: 100 (0,09%) de T.S. o 3.0

, 1.481 (1,30%) de P.H. o 4.º, 1.194 (1,05%) de P.S. o 6.0 y 339 (0,30%) de ts. o 5.0

• Esto comporta que de 100 matrimonios consan­guíneos, 47 son de 4.0

, 38 de 6.0, poco más de 3 de 3.0 y

unos 11 de 5.0, (2).

Este tipo denominaremos "N.' lo que significa que pre­dominan los enlaces de 4.0 sobre cualquier otro; ahora bien como la superioridad es poco preminente respecto del 6.0

, en muchas ocasiones es éste el que predomina, inviertiéndose el modelo o tipo. El Coeficiente de con­sanguinidad, siguiendo a Serra (1959) y otros autores y por mantener el mismo criterio que otras publicaciones anteriores (Zudaire, 1979) lo daremos multiplicado por mil, y es igual a 1.188 (en tanto por uno, igual a 0.118846), tal es la intensidad de homocigosis provocada por la práctica endogámica en dos generaciones. Más adelante, al intercalar las tablas correspondientes, com­pletaremos estas observaciones.

El cambio experimentado por la pauta consanguínea en este período brinda un mayor interés que el índice abstracto. Como preámbulo a estas consideraciones reca-

(2) Se habrá advertido que en el texto al comentar las frecuen­cias en tantos por ciento, omitimos dos cifras decimales que en las tablas constan, por facilitar la lectura.

Page 4: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

230 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

,,/', / ' - -./ '----........ .......

', ,----............ ' /,; ' ... ___ , .... ----\v"

¡;¡ .., '° "' N

~ .. ~ ~ ~ .... ;ji; ~ ¡;¡ :;: t8 N N N .., .., ....

.!, ' ' ,.!. ' ' ~ ' 1 1 1 1

~ 1 .1.

~ 4' o ¡:¡ !;¡ : : ~ lí\ N N .., IO '° "' "' = = "' = "' "' "' "' "' "' =

Gráfica de la evolución de la consanguinidad, por trienios (salvo el período 36-39): en trazo continuo. la Pro­vincia (excluido Bilbao) en trazo discontinuo, Bilbao.

bamos la atención sobre el incremento espectacular que experimenta la suma de bodas anuales: si la media de bodas añales fué de 1.924 durante los 18 primeros años (1918-35) 2.914 fué en los últimos, y esto traducido a otros términos equivale a decir que casi la mitad (46%) de los 113.639 matrimonios se contrajeron en ellos (1949-66); ocioso parece subrayar el influjo de este dato sobre los resultados. Detallemos un poco más: dividiendo el período en 7 subperíodos se destaca el hecho de que los dos primeros septenios son absolutamente parejos en cuanto al número total de bodas; en las dos siguientes, pese a la recurrencia de la guerra, se rebaja tan solo en un militar; se acentúa la recuperación en el siguiente estabilizándose en unso 2.500 al año, y en unos 3.000 en los dos últimos. No se puede soslayar la contribución de los inmigrantes a esta especie de exaltación vital.

Aunque el balance final sitúa a la consanguinidad en el tipo "A:' es más exacto hablar de dos tipos netamente diferenciados "A:' y "B" correspondientes a dos etapas también distintas. Hasta el año 1935, la supremacia del 4.0 sobre el 6.0 es muy conspicua, superándole casi en dos tercios; en 1945, son más los enlaces de 6.0 que los de 4.0

,

y desde entonces hasta el final la situación se repite, sal­vo en cinco fechas. Hasta la guerra, pues, preponderan los enlaces de primos hermanos, después se imponen los primos segundos; esta inversión se gesta por la drástica caída de las uniones de 4.0 en la fase final, (menos que la mitad de la primera) mientras que las de 6.0 no men­guan; parece que no experimenta rechazo esta forma de matrimoniar.

Patente queda esta evolución en la tabla del índice de consanguinidad o de frecuencias por años y grados. Al

coincidir en el año 1918 el máximo número de matrimo­nios familiares con el mínimo total, se dispara un poco el porcentaje, pero caso omiso de este detalle, la propor­ción se mantiene bastante estable, apreciándose una leve tendencia al decremento. Hasta el año 35, la media de casamientos emparentados se fija en 4,20%, valor clara­mente alto, superado en más de la mitad de los años; en la última parte se rebaja mucho, a 1,77%; el declive está definitivamente asentado, la mitad de los años no alcan­zan siquiera esta cifra. Advertimos de paso que, salvo cuando se indique otra cosa, los períodos que compara­mos son los comprendidos entre los años 1918 a 1935 y 1949 a 1966, es decir los 18 primeros y últimos. Esta tan considerable diferencia porcentual que acabamos de in­dicar, incide definitivamente en la homocigosis; en efec­to, los coeficientes de consanguinidad son 1,995 y 0,645 para el primero y último lapso respectivamente, y la homocigosis por lo tanto es tres veces mayor. En el decurso de los años hay dos fisuras que provocan un brusco desvío de la consanguinidad: desde el 42, se afin­ca en menbos del 3% y desde el 57 por debajo del 2%.

Durante los años de la guerra los novios emparentados se retraen de acudir a la vicaría más que el resto de la población, pero se recuperan con creces en el trienio si­guiente; en las columnas de frecuencias porcentuales este detalle queda desdibujado por la exuberancia connubial subsiguiente a la guerra. A este radical descenso de la cuota consanguínea contribuyen terminantemente los grados 3.0 y 4.0

, tendentes a extinción, y muy poco los otros dos; por otra parte, como se ha advertido, el creci­miento de la cifra de bodas celebradas en la última déca­da reduce grandemente la importancia numérica de los enlaces cognaticios.

Page 5: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 231

Complemento interesante de cuanto venimos diciendo será la relación de los arciprestazgos que más han influi­do en esta evolución. En valores absolutos, han contri­buido decisivamente a la declinación de la consanguini­dad, por orden, Algorta, Durango, Bermeo, Lequeitio, Guernica y Valmaseda; mucho menos, Munguia, Mar­quina y Villaro y, casi nada, .Carranza y Sestao; en valo­res relativos, Bermeo, Lequeitio, Durango, Valmaseda y Guernica han sido los más eficaces.

Los coeficientes de regresión respectivos son: Consanguinidad general: byx = -0,0794 Consangu~n~dad de 3.0

: byx = -0,0058 Consangu1mdad de 4.º: byx = -0,0515

Consanguinidad de 5.0: byx = -0,0065

Consanguinidad de 6.º: byx = -0,0157 Números que declaran el sesgo, en este caso disminu­

ción, del problema que analizamos y el influjo de cada uno de los grados en el mismo: distribuida la regresión uniformemente a lo largo de los 49 años, se concretiza en 0,0794% al año para la consanguinidad en general, 0,0058% anual para el 3.0

, etc. En los primeros años ape­nas se produjo evolución alguna; más aún los datos de los párrafos inmediatos corroboran el arraigo que la cos­tumbre tenía de antaño, mantenida estática casi desde principios de siglo.

CONSANGUINIDAD EN WS a

Presentamos el análisis minucioso del tema sobre la base de estas unidades administrativas por obvias razo­nes. El mapa adjunto suministra una imagen aproxima­da del territorio comprendido en ellas; ordenadas de ma­yor a menor son: Carranza, Lequeitio, Marquina, Mun­guia, Villaro, Ceberio, Bermeo, Guernica, Valmaseda, Durango, Algorta y Portugalete; el criterio seguido ha si­do el número total de bodas celebraciones en los 49 años,. no el territorio ni los habitantes; Algorta correspon­de al antiguo de Bilbao; la Capital y sus anexiones se estudian aparte. La gran diferencia de tamaño poblacio­nal entre estas divisiones eclesiásticas no es óbice ni a la objetividad ni a la claridad del estudio. El orden adopta­do abre la puerta a múltiples comparaciones. Las correc­ciones introducidas respecto de cifras manejadas en ante­riores ensayos no importan apenas nada, y se presentan por fidelidad a pequeños nuevos detalles.

Las entidades que aparecían en las estadísticas de los años 40 (mitad del período) se han conservado en su in­dependencia, aunque después hayan sido absorbidas por otras, y consiguientemente, los datos de las parroquias tradicionales o fundadas antes de 1966 (último compren­dido en el estudio) se acumulan y se integran en la res­pectiva población, y así debe entenderse que al hablar, por ejemplo, de Durango o Basauri o Lequeitio, etc. se incluyen los de todas las parroquias de estos lugares.

CARRANZA

Las feligresías abarcadas en este apartado, cada una de las cuales incorpora diversos barrios, ocupan el valle de este nombre coincidente con la división eclesiástica. Si­tuado en el límite poniente de Vizcaya, lindante con Bur­gos y Santander, se encaja como una cuña montuosa y agreste, ligeramente estrangulada, al oeste de Valmaseda.

La estadística diocesana atribuye al área, en su conjun­to, poco más de cinco mil habitantes, apiñados en las iglesias listadas a continuación; Aedo, Aldeacueva, Ber­nales, Biañez, La Calera, Lanestosa (ya en Santander), Lanzas Agudas, Matienzo, Pando, Presa, Ranero, San Ciprián, Carranza (San Esteban de), Sangrices, Santeci­lla, Sierra y Soscaño.

Unos 800 moradores contaban los núcleos de Aedo, Biáñez y Lanestosa, los más poblados, siguiendo en im­portancia Carranza y Soscaño con unos 350, y siendo considerablemente menores los demás, lo que convierte a esta zona en la más diminuta y enclaustrada de la Pro­vincia.

El valor medio del indice de consanguinidad (frecuen­cia en %) es el más alto de los registrados, 7,08%, que se ajusta a los 142 matrimonios emparentados entre los 2.005 celebrados en todo este tiempo. Prevalecen los enla­ces de 4.0 sobre los de 6.0

, es decir tipo "A'.';· no son fre­cuentes las bodas en otros grados, aunque lo son más que en el resto de las divisiones territoriales. Los 142 en­laces se distribuyen de la siguiente forma: 8 matrimonios (0,39%) de T.S., 67 (3,34%) de PH, 53 (2,64%) de PS y 14 (0,69%) de ts; de los 8 registros de TS, 5 pertenecen a Aedo. Los parentescos complejos entre los contrayentes son más bien escasos: un caso (1950) en Aldeacueva de 4.0 y 6.0 simultáneamente, dos en Biañez, de 6.0 cuadruple (1929) el primero y de 4.0 y 6.0 (1930) el segundo, uno en Presa (1955) de 6.0 doble (1955).

Cuatro poblaciones se disparan, Aldeacueva (10,78%), Lanzas Agudas (10,52%), Presa (10,71 %) y Santecilla (17,24%), sin duda por razón de su pequeño tamaño; Aedo (8,03%) y Biáñez (6,16%) constituyen la sorpresa en­tre las de su dimensión; Pando (9,75%), Ranero, Carran­za, Sangrices, Soscaño y Bernales (5,40%), en orden decreciente, mantienen la tónica de la zona; los restantes poblados, alcanzan cotas por encima del 3%, salvo Matienzo, y no se alejan, por tanto, de una tradición consanguinea fuerte. Aunque el conjunto sea del tipo "A'.', adviértase que solo cinco parroquias concuerdan; en siete empatan el número de enlaces de PH y PS, y en cinco superan los de PS.

La tabla del índice -frecuencia- de consanguinidad, por años, confirma el arraigo de esta pauta: se comprue­ba su decrecimiento, pero con morosidad. En efecto, si fueron 55 las bodas de cognatos en la primera fase, son 48 las de la última, declinando el indice de 8,22% a 6,29% al final, todavia alto evidentemente; si bien hay cinco fe­chas en que no se alcanza el 3% y otras en que se rebasa por poco, aún se supera éste limite por amplio margen en otras ocho. Cooperan a la merma de la consanguini­dad el 3.0 (el último caso se produjo en 1939) y el 4.0 que

Page 6: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

232 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

tiende a extinguirse; lo contrario ocurre con el 6.º que creció en varios centros. Lanestosa contabilizó el último matrimonio consanguíneo en 1947, Pando en 1951, Sos­caño en 1942, siendo estas tres parroquias las que más influyen en el descenso general; sigue Aedo con cinco re­gistros menos en la última fase y Biáñez con dos; el resto ofrece una distribución muy dispersa o poco diferencia­da que no incide en la evolución.

El coeficiente de regresión es: byx = -0,1017, lo que comporta una disminución de 0,1017% anual. El coefi­ciente de consanguinidad o valor de homocigosis es 3,2185 (por mil), casi tres veces mayor que el de la Pro­vincia; su influjo es de escaso relieve por el pequeño por­te de sus vecindarios; eliminado este distrito, el índice ge­neral hubiera sido solo dos centésimas menor que el anotado.

La tradición queda confirmada por el número de dis­pensas que hemos recogido de los años precedentes al período estudiado.

LEQUEITIO

Las parroquias de este arciprestazgo, salvo tres situa­das en la costa al oeste de Lequeitio, se localizan en el valle del Lea-Lequeitio, siendo por orden alfabético, las siguientes: Amorato, Arbácegui, Aulestia de Murélaga, Bedarona, Ea, Guerricaiz, Guizaburuaga, Ispaster, Lequeitio, Mendeja y Nachitua. Lequeitio, Bedarona, Ea y Nachitua son costeras, asomándose al mar, un poco a distancia, Ispaster. Lequeitio, la mayor, superaba los cin­co mil habitantes (a mitad del periodo); Aulestia, Ispaster y Ea contaban el millar, Bedarona, la menor, sumaba unos tres cientos. A priori, por situación y tamaño, podr­ía presumirse un resultado bastante diferente del que va­mos a ver.

De los 3.403 matrimonios totalizados, más de 470 se han añadido con los entresacados de los libros de los santuarios aludidos más arriba, siendo Lequeitio la villa del distrito que más bodas ha efectuado fuera de sus pa­rroquias, más de 300. Los consanguíneos son 172 (5,05%), a saber, 7 (0,20%) de TS, 60 (1,76%) de PH, 88 (2,58%) de PS y 17 (0,50%), de ts; por tanto pertenece al tipo "B" superando los PS a los PH considerablemente, lo que implica que su contribución a la homocigosis no sea tan fuerte; los enlaces de TS y ts aun no siendo muchos, conservan cierto relieve, casi parejo al que poseen en Carranza y superior al de todos los demás arciprestazgos, salvo el caso de los ts de Munguia. Apenas se registran parentescos complejos: un caso de 5.0 y 6.0 simultáneos en Lequeitio (1928) y otro de 4.0 doble en Mendeja (1943).

Los datos de Bedarona son incompletos por haber de­saparecido algún folio correspondiente a los años veinte; sin riesgo de yerro hay que admitir, al menos, una vein­tena de matrimonios sobre los anotados. Dejando de la­do por esta razón a Bedarona, la zona en general, alcan­za cotas muy altas; Nachitua se exceptúa y Ea y Lequei­tio tienden a rebajar la media con poca decisión; los res­tantes poblados la exceden claramente. Aunque el distri-

to muestre clara predominancia de los enlaces de PS so­bre los PH, cuatro villas se despegan del modelo, Arbá­cegui, Ea, Mendeja y Nachitua, descollando llamativa­mente Mendeja que, de sus doce dispensas, once las tie­ne de PH.

El sesgo de la pauta de matrimoniar en el decurso del periodo es similar al de otras regiones, pero presenta ciertos rasgos originales. La desviación se produjo des­pués de la conmoción bélica: en los 18 primeros años (1918-36) se casaron 96 parejas de parientes (más de 5 por año) y sólo 76 en todos los demás, la caída es muy pronunciada.

Descuellan por su alta frecuencia algunas fechas como el año 18, el 25, el 32, el 40 ... Hasta la guerra, solo encon­tramos dos momentos (1931 y 1935) cuyo índice es infe­rior a 3%, y cuatro (1919, 24, 33 y 34) con índice por de­bajo de 5%; los restantes presentan valores muy altos, con una media próxima a 8 que contrasta vivamente con la de la fase final, casi cinco puntos más baja. También en esta circunscripción despierta curiosidad el año 40 con diez dispensas (máxima concentración de PH), como si las bodas entre cognatos planeadas con anterioridad se hubieran pospuesto hasta la estabilización de la vida so­cial. El boom de matrimonios no es tan espectacular co­mo en otros distritos en la década postbélica.

Si bien todos los grados descienden, no lo hacen con la misma resolución: los grados 3.0 (ningún caso. desde el 51) y 4.0 declinan con firmeza, los otros dos, lentamente. Más que de una evolución podría hablarse de una ruptu­ra con el hábito consanguíneo: en el último lapso, solo en dos ocasiones se supera el valor medio. La mitad de las villas se liberan pronto: Amorato registra sus últimos restos los años 43 y 57; Aulestia, el 55; Ea, el 52; Guerri­caiz, el 56; Guizaburuaga desde el 32, sólo anota el 50 y 51; Mendeja, uno desde el 43, Nachitua, el 46 y el 60; los demás núcleos disminuyen con lentitud. De acuerdo con el coeficiente de regresión byx = -0,1652 la disminución anual sería de 0,1652%. Aun cuando la frecuencia (%) de consanguíneos sea casi tan alta como la de Munguia, el coeficiente de consanguinidad, contribución a la homoci­gosis, es bastante menor, debido a la prevalencia de los PS sobre PH, y es F = 1,9193, bastante superior a la pro­vincial 1,1884. El número de dispensas recogidas en los siete años anteriores al inicio de este trabajo, sugieren lo arraigado de la costumbre.

MAR QUINA

Este arciprestazgo abarca los siguientes núcleos: Ama­lloa, Barínaga, Berriatúa, Bolibar, Cenarruza, Echeberria, Guerena, Marquina y Ondarroa; viene a formar una banda colindante con la Provincia de Guipúzcoa, recos­tándose algunos poblados en las proximidades de Urko, Oiz y Urkarregui.

Sin sumar los matrimonios contraídos fuera de las pa­rroquias el total de 3.551 que manejamos, hubiera queda­do rebajado a 2.970; los consanguíneos son 155 (4,36%): 6 (0,17%) de TS, 62 (1,74%) de PH, 75 (2,11%) de PS y 12 (0,33%) de ts. Como ocurre en el área precedente, perte-

Page 7: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

:-

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 233

nece al tipo "B", prevaleciendo los PS sobre los PH; en cien uniones entre parientes, 4 podrían ser de TS, 40 de PH, más de 48 de PS y casi 8 de ts: es exiguo el peso de los TS y un poco mayor el de los ts. Los parentescos complejos son apenas apreciables: uno en Ondarroa de 6.0 doble (1963). En armonía con el tipo "B" se presentan Ondarroa, Marquina, Echevarría, Bolibar y Barínaga; Amalloa y Berríatúa son del opuesto con prevalencia de los PH, y Cenarruza y Guerena empatan ambos tipos de · parentesco.

Cinco poblaciones cargan la densidad endogámica, mientras Barínaga, Guerena y Ondarroa la rebajan, man­teniéndose Marquina casi a la par de la media. El influjo de Guerena con el balance final es casi imperceptible; sorprende la contribución de Marquina que puede anto­jarse excesiva en relación a sus habitantes y también la de Ondarroa (2,95%); Amalloa (7,69%), Berríatúa (7,66%), Bolibar (7,38%) y Cenarruza (6,29%) muestran las más al­tas frecuencias, decisivas en el resultado final.

La tabla de frecuencias, por años, da idea del desarro­llo de la consanguinidad durante el período que nos ocu­pa. En su primera parte se producen 71 enlaces de empa­rentados, y 46 en la última: de 6,65% se pasa a 2,83%. A pesar de que la dispersión sea muy irregular, se aprecia a primera vista la alta densidad de la primera fase, en la que frecuentemente se leen porcentajes muy superiores a la media; contrastan los tres años que no se llega al 2% y el año 25 que no inscribe ninguna dispensa. En la fase final se ofrece un panorama opuesto: solo cinco veces se sobrepuja la media global y tres veces se mantiene a ce­ro.

Amalloa (la villa de más elevado índice) termina con el hábito consanguíneo para el año 42, Berríatúa se libe­ra lentamente anotando algunos enlaces en la década de los 50, Bolibar los acumula en los años 20 y en los 40 prolongados; parecido es el signo de Echevarría; Cena­rruza inscribe 7 de los 9 expedientes entre el 45 y el 58; Marquina suma mayor número en el primer periodo, reservando todavía bastantes hasta muy avanzado el se­gundo; Ondárroa apenas difiere en cifras absolutas en to­do el tiempo, sí en relativas merced al aumento del nú­mero de bodas. Respecto de los diversos grados, es pal­maria la gran disminución de uniones de PH en el últi­mo tercio, más modesta la de TS y ts, aumentando por el contrario el número de PS. Este detalle del apego a casar los PS y su prolongación en el tiempo lo hemos adverti­do en varios arciprestazgos: es la forma de matrimoniar los parientes que menos rechazo experimenta y más len­ta ert su eliminación. De acuerdo con el coeficiente de regresión, byx = -0,0911, la disminución homogénea se­ria de 0,0911 % anual. El coeficiente de consanguinidad, valor de homocigosis, es F = 1,7381, inferior a los obteni­dos en los dos arciprestazgos precedentes, pero bastante superior al de la Provincia. No era menor la densidad en los años precedentes pues en 7 años se registran 26 dis­pensas.

MUNGUIA

Las parroquias comprendidas bajo este epígrafe se aso­man casi todas al valle del río Butrón-Plencia, hallándo­se su caserío bastante disperso si bien constituyen un complejo de cierta homogeneidad; es frecuente en la Geografía del País la alusión a los edificios "esparcidos por cerros y cortas planicies" o reunidos en "pequeños núcleos" por terreno accidentado. Y son: Fica, Frúniz, Gámiz, Gatica, Larrauri, Laucariz, Lauquiniz, Lemoniz, Líbano de Arríeta, Maruri, Meñaca y Munguia que es la más poblada. El ámbito del vecindario es bastante am­plio, desde los 255 y 375 habitantes de Laucariz y Fica respectivamente a los 3.000 de Munguia, manteniéndose la razón matrimonios/habitantes en torno a 0,38, salvo t<n Líbano y Larrauri.

Entre los 4.036 matrimonios (455 agregados de los li­bros de los santuarios), 229 fueron consanguíneos (5,67%): 8 (0,89%) de TS, 86 (2,13%) de PH, 99 (2,45%) de PS y 36 (0,89%) de ts; aventajan las uniones de PS sobre las de PH, no excesivamente, siendo del tipo "B". En 100 bodas de cognatos, menos de 3 serian de TS, casi 38 de PH, 43 de PS y unos 16 de ts; llama la atención la rele­vancia de este último grado (5.0

) muy por encima de lo que acontece en todas las demás demarcaciones. En la primera parte, PH y PS suman números prácticamente iguales. Cuatro lugares, Gatica, Laucariz, Lauquiniz y Maruri no concuerdan con el tipo general, gandno los PH a los PS.

Salvo Gatica, todas las parroquias presentan un indice superior a 4. Lemoniz (8,33%) y Fica (8,00%) son cimeras, siguiéndoles de cerca Fruniz (7,46%), Laucariz (7,60%) y Larrauri (6,93%) cuyo denominador común es el terreno accidentado con gran dispersión populacional; Lauquiniz (5,46%), Maruri (4,36%), Meñaca (4,66%), Munguia (4,19%) con Gatica (3,64%) completan el cuadro; obsérvese que la fuerte densidad consanguínea es, aunque con variaciones, general, no hay una sola excepción; casi siempre se en­cuentra algún pueblo que se despega de la tónica común. Fica resulta muy singular: siendo la razón de matrimo­nios/población mayor que 0,5, extraña tal porcentaje de 8,00.

Este conjunto del Butrón mantiene con mayor tenaci­dad su apego por matrimoniar parientes; compárese, por ejemplo, con el precedente. Si entre los años 18 al 35 se constatan 98 de tales bodas, hay todavía 72 en los 49-66. Resalta asimismo la considerable cuota de parentesco del 36 al 48, pareja casi con la inicial. En cuatro ocasiones (año 1919, 22, 31 y 32) se sobrepuja el 10% en la primera parte, y en dos (años 42 y 54) en la postrera; las tasas ba­jas, casi inexistentes en el primer tercio, son más comu­nes al final: en cinco ocasiones se logra un valor inferior a la mitad del medio, aunque ello se debe a veces, no a mengua de endogamia, sino a incremento de las nupcias. La exaltación matrimonial se produjo con gran brío tras la relativa abstención durante la guerra, no yendo a la zaga los emparentados. Todos los grados, salvo el 3.0

, TS, recortan su aportación en escasa cuantía, muy poco el 5.0

, poco más el 6.0 y más decididamente el 4.0, de mane­

ra que si bien se mueve de un porcentaje de 6,98% al

Page 8: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

234 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

princ1p10 a un 4,32% en la última secc10n, se debe en gran parte a la subida del número de bodas. Gatica ter­mina con la consanguinidad en 1946, Laucariz el 49, Larrauri solo registra tres expedientes desde el 44, Lau­quiniz, Lemoniz, Líbano y Meñaca disminuyen un po­quito, y, por eI contrario, Fica, Gámiz, Frúniz y Munguia inss;¡i.ben mayor número de dispensas. El coeficiente de regresión byx = -0,0810 da la medida del retroceso, su­puesto homogéneo, del 0,081 % anual. El coeficiente de consanguinidad (F) 2,2415, casi duplica el valor de la Provincia. El número de registros de los años 1911 al 17 sugieren la tenacidad del comportamiento, 40 expedien­tes, un poco rhás incluso que en la primera porción del estudio. Este arciprestazgo presenta indiscutible originali­dad respecto de otros de la Provincia y del conjunto.

VILLARO

Se aproxima a una unidad natural ya que todas las pa­rroquias incluidas se alinean a lo largo de la carretera que por Barazar enlaza Bilbao y Vitoria, entre las vallo­nadas de los ríos Arrastia e Indusi; Ubidea, muy alpres­tre, es el límite sur y Bedia, llanera, el límite norte. La dispersión del caserío dejará notar su influencia; en oca­siones el núcleo principal albergó menos moradores que los barrios· diseminados por las alturas o acostados a sus faldas; este desparramiento retrocedía rápidamente en la última década de nuestro estudio. Se consignan en este apartado las parroquias de Aranzazu, Bedia, Castillo, Elejabeitia, Ceanuri, Dima, Lemona, Ubidea, Villaro y Yurre.

Como en las circunscripciones precitadas, también tu­vo adhesión la moda de solemnizar la boda en los san­tuarios: unas 500 partidas tienen tal procedencia. De los 4.555 enlaces asentados, 166 (3,64%) se verificaron entre deudos: uno (0,02%) de TS, 83 (1,82%) de PH, 71 (1,55%) de PS y 11 (0,24%) de ts; hay prevalencia de los PH sobre PS, poco relevante; por tanto del modelo "X'. En 100 uniones de parientes, la mitad serían de PH, casi 43 de PS y 7 de ts. Sin modificar apenas nada, podía haberse suprimido ese único registro de TS, parece evidente que, conscientes o no, los habitantes de esta zona evitaron es­ta forma de casamiento; porcentualmente es asimismo el distrito que menor número de bodas de 5.0 cifra. Estos apuntes confieren una acusada originalidad respecto de los demás puntos. Ubidea y Villaro son del modelo opuesto "B", Aránzazu y Castillo-Elejabeitia empatan los de 4.0 y los de 6.0

• Tres núcleos se descaran por su inten­sidad: Ceánuri (6,00%), Dima (4,95%) y Ubidea (4,59%); Aránzazu, el menos poblado de los nueve que componen esta unidad, alcanza un 3,25%; los demás se mueven en una zona aceptable, desde 2,32% de Castillo-Elejabeitia a 2,56% de Bedia. Pudieran desconcertar los valores de Ceánuri y Dima, teniendo en cuenta su dimensión, si no hubiéramos encontrado en Munguia números incluso su­periores; Ubidea justifica sus datos por su orografía y ta­maño; Lemona y Yurre con parecido censo y semejante razón matrimonios/habitantes, concuerdan en su frecuen­cia consanguínea.

La trayectoria seguida en estos 49 años, ha sido zigza­gueante y poco decidida hasta época avanzada, en el conjunto, difiriendo mucho el comportamiento de los po­blados. Las uniones con dispensa que contaron 75 en la primera parte, se restringen a 54 en la postrera; esta men­gua adquiere mayor importancia en términos porcentua­les, por el crecimiento del registro de bodas, de forma que de 5,25% se reduce a 2,55%. Durante el trienio 36-39 se abstienen totalmente los emparentados, no se registra una dispensa, es el único arciprestazgo donde esto acon­tece. Hasta el año 35, solo en tres fechas no se sobrepasa el 3% anual, mientras que en nueve ocasiones se logra en el último período, rebajando el índice, a veces, por deba­jo del 2 e incluso del uno. El recorte es drástico en los PH, que montan 19 en la etapa final frente a 42 en la inicial, y es la década de los 50 la que señala la casi ex­tinción; por el contrario los PS suben, por lo que la dé­cada inmedíata a la postguerra no significó el despego de la endogamia; se invirtió el modelo pasando a ser "B".

Cambian parentoriamente su comportamiento, Bedia, cuyos 13 enlaces entre deudos tienen lugar antes del 44, Yurre que desde el año 50 solo cuenta un enlace; Dima todavía asienta 11 en la fase final; Ceánuri sólo rebaja en tres unidades la suma de los últimos años; Lemona y Castillo Elejabeitia -caso extraño- acumulan la mitad en los últimos años; Aránzazu, Ubidea y Víllaro influyen apenas en la declinación de la consanguinidad por el corto número de expedientes o su irregular distribución; Bedia, Yurre y Dima -muy poco Ceánuri- deciden el cambio. El descenso, homogéneamente interpretado sería de 0,0871% anual de acuerdo con el coeficiente de regre­sión.

El coeficiente de consanguinidad es 1,4854, ligeramente por encima del provincial y bastante inferior al de Mun­guia; la situación varía bastante en el primer tercio del tiempo estudiado. En los siete años precedentes la cos­tumbre tenía arraigo como lo sugieren las 27 dispensas (ninguna de TS) que se cuentan.

CEBERIO

En conjunto se sitúa este arciprestazgo al oeste del de Villaro y participa, en parte, de sus condiciones; sus felig­resías se ordenan entre los ríos Altube y Nervión, salvo Ceberio, despejado hacia el este en la cuenca del río de su nombre. Se incluyen los poblados de Albizu-Elexaga, Aracaldo, Arrancudiaga, Arrígorriaga, Ceberio, Mirava­lles, Murueta de O., Olarte, Orozco, Urigoiti, Zarátamo y Zollo. Al valle de Orozco pertenecen además del núcleo de San Juan de Orozco, Albizu, Murueta, Olarte y Uri­goiti, predominando el terreno áspero y montuoso que atraviesan los ríos Altube y Arnauri engrasadores del Nervión; Urigoiti al sur y Zarátamo al norte, asomándose a Bilbao, son sus puntos extremos.

La consanguinidad sigue el modelo "B", pero es poco acentuado el predominio de los PS sobre los PH, siendo 6 las parroquias que concuerdan con él y cinco las dis­cordantes. De los 5.206 enlaces matriculados (300 en san­tuarios), 161 (3,09%) son emparentados: 8 (0,15%) de TS,

Page 9: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 235

67 (1,28%) de PH, 73 (1,40%) de PS y 13 (0,24%) de ts. En 100 de tales uniones, 5 aproximadamente serían de 3.0

, 41 de 4.0

, 45 de 6.0 y 8 de 5.0• Recogemos un parentesco

complejo en Murueta de 4.0 doble (1943). Siete de las do­ce villas tienden a elevar la media, y cinco la rebajan. Albizu y Urigoiti -muy parcas- solo alistan una dis­pensa; Murueta es la tercera de índice más bajo; Olarte (6,66%) y Aracaldo (4,59%) se alejan -por exceso- del valor medio, pero su influjo no es muy decisivo; Arran­cudiaga (3,48%), Ceberio (3,74%), Orozco (3,12%), Zaráta­mo (3,39%) y Zollo (3,40%), aunque dispares en habitan­tes y matrimonios, fluctúan ligeramente por encima de la media; las cuatro villas mayores divergen notablemente en su comportamiento, mientras Arrigorriaga (2,77%) y Miravalles (1,97%) tienden a disminuir el valor final, Ceberio (3,74%) y Orozco (3,12) a elevarlo.

Veamos cómo se han comportado a lo largo del tiem­po: el mero contaje de datos nos da la primera aprecia­ción: en el primer lapso enumeramos 69 casamientos emparentados, por 52 en el último, en términos porcen­tuales 3,75% y 2,44% respectivamente, corta diferencia beneficiada por el aumento de bodas. Cinco veces el por­centaje es inferior a 3 hasta el año 35, y 9 veces en la úl­tima sección que, además, incluye tres años sin registro alguno. En la Postguerra hay mayor exaltación connu­bial entre los prometidos familiares que en el resto: 19 dispensas en tres años y 11 en los siguientes (39-44) pare­ce denotar una suerte de compensación frente a la con­tención previa: fenómeno éste apreciable en otros distri­tos, pero no con tal pujanza. Este decremento se debe, sobre todo, a la caída casi total de los enlaces de PH y a la pequeña cooperación de los TS; por el contrario los PS no solo se mantienen sino que aumentan, y los ts no influyen; no es la única circunscripción en que esto ocu­rre. Aracaldo elimina toda unión de parientes desde el año 41; Zarátamo desde el 46, Zollo desde el 48; Orozco acorta considerablemente su tasa; Arrancudiaga los re­parte igualitariamente; Arrigorriaga solo poda una uni­dad; Ceberio, dos; Miravalles, nada; Olarte añade algu­no; los demás pueblos no intervienen por su minima in­cidencia. Siendo el coeficiente de regresión byx = -0,0508, (el menor de todos los distritos) la disminución homogénea es de 0,0508% anual. No parte el cálculo de cifras muy elevadas, que hubieran motivado un descenso mayor, pero por todo lo dicho se aprecia que el ritmo re­gresivo es lento. En los siete años antecedentes contamos 26 registros. El coeficiente de consanguinidad es 1,2936, un poco superior al provincial, ocupando el noveno puesto en el conjunto de arciprestazgos.

BERMEO

Este conjunto, el menor por el número de localidades, no por el de sus vecinos, abarca los siguientes centros: Albóniga, Busturia (con Altamira), Baquio, Bermeo (con Mañuas), Mundaca, Pedernales y San Pelayo de Baquio, casi todos se hallan pegados al mar o a la margen iz­quierda de la ría de Guernica.

El número total de matrimonios es de 5.871, de los cuales son consanguíneos 175 (2,98%), índice, por tanto, inferior a 3. Ha sido muy socorrido el solemnizar la bo­da fuera de la propia parroquia (más de 800) destacando Bermeo y Busturia, sobre todas. Las 175 parejas de deu­dos se disponen así: 10 (0,17%) de TS, 95 (1,61 %) de PH, 51 (0,87%) de PS y 19 (0,32%) de ts, por lo tanto del tipo "A:' con tal preponderancia de los PH que suman más que todos los otros tres grados juntos; reduciendo estos datos a 100, 54 serían de PH, unos 5 de TS, 30 de PS y 10 de ts. Los parentescos múltiples anotados se reducen a uno doble de PH en Albóniga (1930), dos de PH dobles en Busturia (1926 y 39) y uno doble de PH en Baquio (1953). En un distrito donde la media no sobrepasa el 2,98%, descuellan, por su demasía, Busturia (7,68%), Baquio (6,62%) y Mundaca (4,23%); Albóniga, Pedernales y Bermeo no alcanzan la media y San Pelayo no registra ninguna pareja de deudos. Evidentemente produce sor­presa el índice de las tres villas, aparentemente, por su situación, más abiertas a las comunicaciones y trasiego vecinal.

La tendencia regresiva de la endogamia es patente co­mo en ningún otro distrito, tal vez, y terminante en las últimas décadas: en efecto, de los 175 enlaces emparenta­dos, 100 se producen en la primera parte (más de 5 por año) y solo 38 en la última. El cambio subsiguiente a la guerra implica un giro tajante en la pauta matrimonial, mucho más tendente a la panmixia desde esa fecha. Has­ta el año 35, en doce ocasiones la frecuencia es superior al 4%, alcanzando el año 21, un llamativo 8,26%, y desde esta fecha hasta el final solo el año 43 se asoma un 4,4%. Hay ciertamente una pequeña elevación de uniones fami­liares en la década de los cuarenta, pero queda práctica­mente anulada por la profusión de casaderos. La reduc­ción se evidencia por los frecuentes porcentajes inferiores a 2 e incluso a 1 anotados en el último tercio. El año 37 supuso la despedida del 3.º; es radical el retroceso del 4.º, aunque no se extingue, menor el del 6.0 y poco percepti­ble el de 5.0

• En los últimos años se invierte totalmente el modelo que de ser ampliamente "A:' pasa a ser clara­mente "B". La participación de la feligresía es muy varia: Albóniga termina su aportación con los años de la post­guerra, pues de 23 casos sólo 3 se producen con posterio­ridad (1940, 43 y 64), Mundaca poco después inscribien­do sólamente 2 de sus 22 registros tardíamente (1962 y 63); Bermeo trueca más lentamente (no tanto en PH) y Busturia conserva su cuota hasta los años 50 sin llegar a desprenderse totalmente; Baquio dispersa irregularmente, a lo largo de los años. La regresión anual de 0,0751 %, de acuerdo con su coeficiente byx = -0,0751, hubiera sido más significativa sin los datos de los últimos años. Los siete años predecesores aún hubieran elevado el índice con sus 42 enlaces consanguíneos. El coeficiente de con­sanguinidad es (F) 1,4610, poco inferior al de Villaro y por encima del de Ceberio, pese a que su frecuencia es menor a la de ambos, por la preponderancia de los PH. La contribución de Bermeo a la homocigosis fué consi­derable hasta el año 35, pero mucho menor desde la dé­cada de los cuarenta; el coeficiente dado calcula su parti­cipación en la totalidad de los 49 años.

Page 10: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

236 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

GUERNICA

Se listan aquí los poblados próximos a la ría de Guer­nica que forman, en las inmediaciones de' los rios Oka y Golako, una desigual franja, ensanchándose ésta a la al­tura de Navamiz y al este de Luno hacia Morga. Esta configuración entraña pluralidad de orografías y localiza­ciones, probablemente reflejada en los resultados, costa­neras, montuosas o ribereñas: Acorda, Ajanguiz, Albiz de Mendata, Gauteguiz de Arteaga, Arrazua, Canala, Corte­zubi, Elanchove, Ereño, Forna, Gavica, Gorocica, Guer­nica, Ibarranguelua, Luno, Mendata, Morga, Múgica (Ugarte de), Murueta, Navamiz y Rigoitia; a este conside­rable número de pueblos no corresponde una gran densi­dad de avecindados.

De los 6.245 matrimonios contabilizados, 1.230 se veri­ficaron fuera de la propia parroquia, siendo Ibarrangue­lua (la mitad) y Guemica (un tercio) los más constantes en esta práctica. En la tasa endogámica pesa la aporta­ción de las villas medias: la frecuencia consanguínea es de 4,06%, correspondiente a 254 enlaces de cognatos: 9 (0,14%) de TS, 122 (1,95%) de PH, 99 (1,58%) de PS y 24 (0,38%) de ts; por tanto pertenece al tipo "/\'; en 100 uniones de allegados, un poco más de 3 serian de TS, 48 de PH, 39 de PS y casi 10 de ts. Catorce entidades siguen el mismo modelo, mientras que Acorda, Ajanguiz, Ereño y Luno siguen el opuesto, y Morga, Murueta y Navamiz igualan los PH y PS. Constatemos que el índice global es francamente alto, 4,06%, sobrepujando al de Villaro, Ber­meo y Ceberio y, por supuesto, al de los arciprestazgos más poblados, Apenas hay parentescos complejos: uno de 6.0 doble en Ajanguiz (1954) y otro del mismo grado en Rigoitia (1953). Por su tributo al problema que estu­diamos, pueden apiñarse los 21 núcleos de esta circuns­cripción en tres grupos bastante bien definidos: feligre­sías con bajo índice, Acorda, Canala, Gavica, Forua, Murueta y Guemica, destacando Gavica (0,00%), Canala (1,13%) y Forna (1,43%); su influjo, sin Guemica, es muy pequeño en el total, apenas variarla en 0,3%; feligresías de elevado índice, Arteaga (Gauteguiz de) (5,94%), Corte­zubi (5,24%), Elanchove (6,56%), Ereño (5,22%), Gorocica (4,19%), Ibarranguelua (7,29%), Mendata (5,50%), Morga (5,44%) y Rigoitia (6,63%); esta serie es tanto más llamati­va cuanto que la mayoría de los vecindarios excedían el millar de habitantes, por los años cuarenta, exceptuándo­se Ereño, Gorocica y Mendata; feligresías con valores ínferiores al medio, pero relativamente altos: Albiz (3,07%), Arrazua (3,96%), Ajanguiz (4,06%), Luno (3,99%) Múgica (3,26%) y Navamiz (3,18). La fisiografía y la dis­persión tendrán algo que ver con estos resultados.

El retroceso consanguíneo, en primera aproximación, aparece claro pues de 130 uniones de este rango al co­mienzo se salta a 77 al final, de 6,25% a 2,81 %, respecti­vamente, índice éste último determinado en considerable medida por la crecida de casamientos. Durante los 18 primeros años, solo en tres fechas no se alcanza la cota del 3%, consiguiéndolo, en cambio, en ocho del 49 al 66. Durante la contienda casi se interrumpen los maridajes de familiares, recuperándose con fuerza en la inmediatez posterior; el viraje, un poco lento por entonces, se atisba-

ba en TS y PH y luego en PS; curiosamente los de 5.0

suman algunos más en la última fase. Notese cómo a pe­sar de ello, el índice es inferior al global en quince oca­siones de dicha fase, debido sobre todo al descenso de TS (última inscripción en 1953), y al de PH (reducido a menos de la mitad) y con menor relieve al de PS; por es­ta razón el modelo que en conjunto era del tipo "X', se trueca en el "B". La participación de los lugares en esta merma es muy diversa: Forna registra todas sus dispen­sas antes del 27, Canala inscribe el suyo el 25, Navamiz no apunta ninguna desde el 40, Gorocica desde el 49, Arrazua, Elanchove y Ajanguiz, solamente tres desde esa fecha, Ibarranguelua cuatro, Arteaga cino; Guemica, Morga y Rigoitia recortan con más morosidad; Cortezu­bi, Luno y Múgica cuenta alguno más al finalizar; Ereño los distribuye muy aleatoriamente; en Albiz solo se encuentran en los últimos años, tal vez se incluyeron an­tes junto con los de Mendata. La tradición estaba ya asentada como lo insinúa el hecho de que hayamos ras­treado, al menos, 53 parejas emparentadas que marida­ron en los siete años antecedentes. El coeficiente de re­gresión byx = -0,1136 indica el rápido descenso homo­géneamente considerado de 0,1136% anual, que debe interpretarse a la luz de los valores frecuentemente altos del inicio.

El coeficiente de consanguinidad es bastante superior al provincial, F = 1,7689, aunque en su descargo debere­mos añadir que su contribución a la homocigosis descen­dió muchísimo en la última parte.

VALMASEDA

Las condiciones de topografía y amplitud de esta uni­dad proporciona diversificación de situaciones, tal vez, como en ningún otro distrito del estudio. La consangui­nidad tiende a ser baja, pero con un ámbito amplio, solo superior a dos arciprestazgos, pese a la dimensión de sus pueblos; quedan incluidos los siguientes: Arcentales, Ave­llaneda, Beci, Carral, Galdames, Goicouria, Gordejuela, Gueñes, Iratzagorria, Labaluga, Labarrieta, La Cuadra, La Herrera, Mercadillo, Sopuerta, Montellano, Ocharan, Sodupe, Traslaviña, Trucios, Valmaseda, Zaldu y Zalla.

Anotados en las partidas 7.657 casamientos (unos 500 en diversos santuarios), 211 (2,75%) se verificaron entre deudos: 7 (0,09%) de TS, 98 (1,28%) de PH, 74 (0,96%) de PS y 32 (0,41%) de ts. En un centenar de emparentados, menos de 3 serían de TS, más de 46 de PH, 35 de PS y 15 de ts. Se ajusta al tipo "/\' con neta primacía de los de 4.0

• Los valores más altos no corresponden a pequeñas vecindades, con la salvedad de Goicouría a que no pode­mos conceder mayor peso, síno a otras más populosas como Arcentales (8,03%), Gordejuela (5,02%), Zalla (4,35%) y Güeñes (4,26%); en el polo opuesto topamos con Sodupe, Valmaseda, Labaluga, Traslaviña y Mercadi­llo cuyas frecuencias varían de 1,12% en la primera a 1,50% en la última; Galdames (2,65%), y Trucíos no lle­gan a la media global; los pueblos restantes con un cen­so entre 300 y 500 habitantes divergen en su comporta­miento: La Herrera y Montellano se mantienen con tasas

Page 11: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 237

discretas y, en cambio, Beci (3,00%), Carral (3,19%), Laba­rrieta (4,92%) e Iratzagorria (7,62%) las tienen altas.

La declinación del parentesco conyugal es evidente, aunque sorprendan las altas cifras del 54 y 56. En la pri­mera sección se consuman 101 uniones y 55 en la con­clusiva; lo que traducido en porcentajes significa 3,85% y 1,73% respectivamente, beneficiándose éste último dato del aumento de bodas. Siete veces se excede el valor me­dio en la primera parte y solo tres en la última, siendo frecuentes los años cuyo índice es inferior a la media. Llamativa es la irrupción de parejas emparentadas (25i) del 40 al 42 que tiende a prolongarse; paradójicamente preludian el cambio. Declina fuertemente el número de PH, pero mucho más todavía el de ts (5.0

) dato este típico y original de este arciprestago que casi elimina este tipo de enlaces; el retroceso de los PS se demora hasta el fi­nal. Omitiendo las parroquias con uno o dos registros, revisamos el comportamiento del área. Labaluga alista su última dispensa el año 55, Gordejuela, Iratzagorría, Labarrieta, y Valmaseda el 56, Galdames, Sodupe y Tras­laviña el 57, La Cuadra el 59, Arcentales el 60, Trucíos y Zalla el 63; Mercadillo registra los tres casos tardíamente. El contaje de los asientos (33) realizados entre el año 11 y el 17 insinúa la pervivencia anterior del fenómeno. El coeficiente de regresión b~ = -0,0864, homogeniza el decrecimiento en 0,0864% al año. El coeficiente de con­sanguinidad .es ligeramente superior al provincial 1,1957; aunque por lo dicho más arriba, se entiende que la apor­tación a la homocigosis es casi tres veces mayor en los primeros años.

DURANGO

Este arciprestazgo extenso en superficie y parroquias despliega considerable heterogeneidad en su retorcida geografía, reconditez de algunos parajes y dificultosa comunicabilidad. En él se inventarian Abadiano, Amore­bieta, Apatamonasterio, Arrázola, Axpe de Elorrio, Elo­rrio, Bemagoitia, Berriz, Durango, Echano, Ermua, Garay, Ibárruri, !zurza, Mallavia, Mañaria, Márzana, Ochandiano, Yurreta y Zaldivar. A la mayor parte de es­tas unidades hay que aplicar el apelativo de montuosas o ásperas o el de desparramadas, con excepción de las ubi­cadas junto a vía de comunicación más o menos princi­pal.

La media global (3,14%) de consanguíneos puede lla­mar la atención a la vista del cómputo de matrimonios, 10.481 (más de un millar en los santuarios, sobre todo Urkola). Las 330 uniones entre allegados se adjudican como sigue: 9 (0,08%) de TS, 152 (1,45%) de PH, 135 (1,28%) de PS y 34 (0,32%) de ts; corresponde al modelo ".N.', primando los PH sobre los demás grados. En cien enlaces de esta condición, no llegarían a 3 los de TS, 46 serían de PH, 41 de PS y 10 de ts. Los parentescos com­plejos se reducen a dos ejemplares de 6.0 doble en Amo­rebieta (1947 y 57), uno de 6.0 doble en Arrázola (1947) y uno de 4.0 doble en Mallavia (1932). La mayor parte de las parroquias siguen el mismo modelo "/'l.', exceptuán-

dose Ermua, Mallavia, Yurreta y Zaldívar que son del "B", y Bemagoitia, Ibárruri y Ochandiano que empatan los enlaces de 4.0 y 6.0

• Solamente seis libros de partidas registran enlaces de TS. Los pueblos pequeños, con ex­clusión de Bemagoitia, detentan frecuencias bajas, Mar­zana (0,68%), Garay (1,25%), Echano (1,66%); Ermua (1,71 %) y Durango (1,98%) les acompañan en el pequeño arraigo por matrimoniar los deudos. En el extremo opuesto se emplazan Elorrio (11,74%), Mañaria (8,69%), Bemagoitia (6,55%) Ibárruri (6,35%) y Arrázola (5,97%). Elorrio probablemente inscribió conjuntamente los de Axpe, pero aun considerándolos unitariamente alcanzar­ían el 9%. Abadiano, Yurreta y Ermua son muy ilustrati­vos: con un número muy poco diferente de matrimonios, discrepan notablemente en sus tasas: 3,75%, 2,43% y 1,71% respectivamente. Las dos villas mayores Durango y Amorebieta, coherentes con su estructura, divergen en sus índices apreciablemente, 1,98% de la primera frente a 3,19% de la segunda; además de las citadas, Yurreta e !zurza y Ochandiano cooperan a moderar la media; Berriz se sitúa ligeramente por debajo de este valor, y la comentada Amorebieta, con Zaldívar, Abadiano y Mallavía levemente por encima.

El sesgo de la cognación en este distrito es también os­tensible con solo atender superficialmente la tabla del desarrollo por años: los emparentados en el primer per­íodo doblan con creces a los del último, cayendo el por­centaje de 5,3% a 1,5%, favorecido este último por el cre­cimiento de las bodas. Solo en dos, de los 18 primeros años, la cuota es inferior al valor medio, mientras que solo en dos de los últimos es superior. Dos años se signi­fican anómalamente, el 40 y 43, en que se recrudece el hábito de reemparentar, pero son meros episodios, como ya lo hemos observado en otros distritos. El declive es muy firme desde los años cincuenta. Los enlaces de TS sólo cuentan uno desde el 49, los de PH se reducen sobre todo al final, también declinan fuertemente los de ts, mientras se muestran un poco más reticentes los de PS, de forma que desde el año 44, casi todos los años, pre­ponderan sobre los de PH. Son destacables por su envi­te en este proceso Abadiano que solo cuenta 4 episodios desde el año 49, habiendo mantenido una intensa cuota anteriormente, Berriz con solo 2, Echano que elimina la tradición el 45, Mallavia con solo 3 dispensas en el tercer período, Ochandiano con dos, Mañaria con uno, Zaldíavar con 3 y Elorrio que reduce a menos de un ter­cio su parte; Amorebieta, Ermua y Yurreta colaboran con menos empeño; los restantes poblados no ejercer apenas influjo por su distribución irregular o su mínimo núme­ro; !zurza solo presenta tres dispensas, dos de ellas en los años sesenta. El coeficiente de regresio, byx = -0,1226 (notable por comenzar de valores no muy altos, aunque si muy persistentes) traduce el declive a 0,1226% anual. No difería mucho la conducta respecto de este fe­nómeno previamente, pues en los siete años anteriores se contabilizan 72 enlaces entre deudos. Tanto por su fre­cuencia como por su coeficiente de consanguinidad, que es 1,3163, rebasa los valores de la Provincia, pero es deci­sivo su efecto en su decadencia.

Page 12: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

238 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

ALGORTA

Ya hemos prevenido que los centros que abraza esta circunscripción pertenecían al antiguo arciprestazgo de Bilbao, del que los desmembramos para presentar la ca­pital por separado; descuella por la densidad de morado­res y ha experimentado recientemente un desmesurado crecimiento; casi todos los puntos se emplazan en una ancha banda paralela al lbaizabal y Nervión, que se extiende hasta el mar, quedando algunos ligeramente marginados respecto de las vías más frecuentadas, no tanto por la distancia cuanto por la morfología del paisa­je. Incluimos en este apartado: Algorta, Alonsótegui, Ba­rrica, Basauri, Berango, Derio, Echévarri, Erandio, Gal­dácano, Gorliz, Guecho, Lamiaco, Larrabezúa, Las Are­nas, Lejona, Lujua, Plencia, Lezama, Sondica, Sopelana, Urduliz y Zamudio. Alguno de estos lugares ha sido ane­xionado al "gran Bilbao" pero durante el tiempo abarca­do por el estudio, conservaba su independencia social.

La primera observación sobre la tasa de consanguini­dad (2,22%) empuja a considerarla casi excesiva, aun siendo inferior a la media provincial; se ajusta a los 576 enlaces entre deudos en el total de 25.891 (de ellos más de 2.000 en los santuarios). Pesan ostensiblemente en el balance final los índices de Derio (4,84%), Lezama (4,48%), Larrabezúa (4,35%) y Gorliz (3,90%) y un poco menos, los· de Zamudio (3,53%), Sopelana (3,41%), Lujua (3,14%), Berango (3,08%) y Barrica (3,15%); son nueve las localidades que aventajan palmariamente el valor medio; otras lo hacen moderadamente: Urduliz (2,96%), Lejona (2,70%), Algorta (2,45%), Galdácano (2,31 %) y Sondica (2,28%); tan solo 8, de las 22 enunciadas, están por deba­jo de la media: Alonsótegui (1,57%), Basauri (1,52%), Echévarri (1,53%), Erandio (1,98%), Guecho (2,13%), Lamiaco (1,55%), Las Aremas (1,25%) y Plencia (1,51 %); repárese que estas poblaciones suman más de la mitad de los matrimonios celebrados. Cuatro villas saldan ma­yor número de matrimonios que todo el valle de Carran­za. A mitad de los 49 años que estudiamos, casi todas ellas rondaban y algunas desbordaban ampliamente, el millar.

En conjunto se atiene el tipo "/\', preferencia de los PH sobre los PS, y al mismo se adscriben la mayoría de las villas, salvo Derio, Larrabezúa, Plencia y Sondica en las que prevalecen loE PS, y Gorliz donde empatan. Muy poca incidencia de TS -llaman la atención los cuatro registros de Algorta- y baja la de ts. En un centenar de uniones de parientes, menos de 3 serían de TS, 51 de PH, 35 de PS y 11 de ts. Por grados, los 576 enlaces y el índice -frecuencia- global se prorratean de esta forma: 14 (0,05%) de TS, 295 (1,13%) de PH, 204 (0,78%) de PS y 63 (0,24%) de ts; la suma de bodas de primos hermanos supera a las de todos los demás grados juntos. Poblacio­nes cuyo vecindario oscilaba entre los mil y dos mil ha­bitantes (a la mitad del período) conservaban tasas eleva­das de consanguinidad, exceptuándose Echévarri y Plen­cia. Derio, Lezama, Larrabezúa, Górliz y, en distinta me­dida, Barrica, Berango, Zamúdio y Urduliz hayan pagado tributo al emplazamiento y a la dispersión; Galdácano, tal vez, a sus barrios.

La tendencia a restringir la consanguinidad se apunta ya por los años 30; es muy divag¡mte la disposición de los años de postguerra, afirmándose la propensión preci­tada en los tempranos cincuenta. Hasta el año 35 se lle­van a efecto 272 enlaces de allegados (unos 15 por año) y 171 (unos 9,5 por año) en los finales; las frecuencias anuales oscilan entre 3 y 7% en la primera sección, mien­tras que desde el año 51 al final no se alcanza nunca el 2%, y en seis ocasiones ni el 1 %; debe tenerse en cuenta la crecida de matrimonios consiguiente a la de vecinos. Sostienen este declive la reducción a la mitad de los en­laces de PH y la de ts, casi en igual cuantía; los TS se acumulan casi todos en la primera parte, pero su peso es insignificante; los PS, como en otros distritos, se prolon­gan casi a la par. Tercian en este proceso las parroquias con muy diversa conducta: desde el año 60 apenas regis­tran expedientes Alonsótegui, Barrica, Berango, Derio, Guecho, Lam~bezúa, Lezama, Lujua y Urduliz; apenas rebajan las cifras absolutas, aunque sí los porcentajes, Basauri, Algorta y Las Arenas; experimentan un fuerte rebrote, mediados los 40, Alonsótegui, Guecho y Lezama; Erandio, Galdácano, Gorliz, Lejona, Plencia y Sopelana recortan con firmeza su aportación. Más de 80 expedien­tes se datan en los años del 1911 al 17, que acreditan la radicación de la costumbre. El coeficiente de regresión b = -0,0816, adjudica un descenso homogéneo de ofsl6% anual. El valor de la homocigosis, dado por el coeficiente de consanguinidad es 0,9789, menor que el de la Provincia; también habría que señalar aquí que su contribución fué casi tres veces mayor durante la primera parte.

PORTUGALETE

Casi todas las unidades de este sector se encuentran en territorio paralelo a la carretera Bilbao-Santander, muy poblado y con buenas comunicaciones: Abanto Las Ca­rreras, Abanto, Gallarta, Baracaldo (con Luchana y Cru­ces), Ciérvana, Musques, Somorrostro, Ortuella, Pobeña, Portugalete, El Regato, La Arboleda, San Salvador del Valle, Santurce y Sestao; no es preciso insistir que la ma­yoría de estos centros cuentan con más de una parro­quia, y que se utilizan los datos de todas ellas, anteriores al 66. Pobeña, Musques y Ciérvana se alejan un poco, mirando al mar.

Descuella esta zona por el bajo porcentaje, el menor de toda la Provincia. De los 34.738 casamientos anotados (más de 1.300 fuera de sus parroquias), 543 (1,56%) se efectuaron entre allegados: 13 (0,03%) de TS, 294 (0,84%) de PH, 172 (0,49%) de PS y 64 (0,18%) de ts. Es irrelevan­te la participación de los TS -anotados solamente en 6 parroquias- y más interesante la de ts, presente en todos los pueblos menos Abanto, Las Carreras. Se atiene al ti­po "/\', señoreando los PH a todos los demás grados: en cien bodas de este rango poco más de 2 son de TS, más de 54 de PH, casi 32 de PS y cerca de 12 de ts. Concuer­dan los pueblos con el tipo excepto El Regato, Ciérvana y Ortuella. Parentesco múltiple muy escaso: un caso de PH y PS simultáneamente en Baracaldo (1956) y otro de

Page 13: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 239

PH de doble en Santurce (1964). De los 14 núcleos men­cionados, dos tienen una frecuencia ~uy elevada, Mus­ques (12,30%) y Ciérvana (9,88%); Pobeña (3,37%) y El Regato (2,88%) exceden la media zonal y provincial; las otras diez se sitúan por debajo de la media de la Provin­cia, Baracaldo con 2,05%, y las nueve restantes sin alcan­zar este valor; distinguense Ortuella y Somorrostro que no llegan al 1 %. La pequeña parroquia de Santa Juliana de Musques, unida a Somorrostro, no seria tan enigmáti­ca y su cuota seria normal. En Baracaldo podía presa­giarse menor porcentaje, tal vez la migrac;ión interior y exterior ha provocado la convocatoria de allegados. Sien­do el indice global bajo, Gallarta, Ortuella, Portugalete, La Arboleda, San Salvador, Santurce y Sestao aún tiran hacia abajo. Evidentemente este arciprestazgo modera en considerable medida el resultado de toda la Provincia.

Partiendo de valores poco importantes, tiende a empe­queñecerlos: frente a las 221 dispensas de la primera ge­neración, presenta 196 en la última, desnivel menos es­pectacular que en otros distritos; ahora bien, el engrosar la media de nupcias anuales de 500 a 900, los porcentajes se transforman de 2,35% a 1,50% al final. Es la zona cu­yos valores a lo largo de todos los 49 años se mantienen más bajos. A la declinación coadyuvan los PH y los TS; se sigue aferrado a los enlaces de PS y ts que tienden a crecer en cifras absolutas, razón por la que la consangui­nidad es de tipo "B" en los últimos decenios y el retroce­so, lento. El impulso de recuperación que se exhibe in­tenso entre los deudos casaderos (49 bodas en el trienio 39-41) es igualmente poderoso en todo el vecindario, recredido por la inmigración. Abandonan los enlaces emparentados, en 1946, El Regato, en 1955 Pobeña, en 1957 La Arboleda; San Salvador solo anota tres partidas desde el 49; Sestao y Portugalete menguan considerable­mente su cuenta, y un poco menos los Abanto, Ciérvana, Musques y Ortuella; el resto apenas modifica sus hábi­tos; Baracaldo cuenta más dispensas en los últimos dece­nios, teniendo mucho que ver con ello la inmigración. Nótese que la merma se produce, sobre todo, en aquellas parroquias cuya cota es más elevada. No difería mucho la conducta en los años precedentes que apuntan 80 re­gistros en siete.

El coeficiente de regresión byx = -0,0377, nos da la medida homogénea de la disminución equivalente a 0,0377% al año, crédito no muy crecido por partir de po­siciones poco levantadas, aunque fijamente mantenidas

·hasta los años treinta. De todo lo expuesto fácilmente se adivina que el coeficiente de consanguinidad es el más exiguo, muy inferior al provincial.

Epítome

Las tres últimas tablas dan pie para las reflexiones conclusivas. En la primera, los arciprestazgos se sistema­tizan de acuerdo con la suma total de matrimonios; en la segunda, sobre la base del coeficiente de consanguinidad; la tercera -más minuciQsa- agrupa no los dis_tritos sino los vecindarios.

Se advierte, ante todo, cómo no concuerda el ordena­miento por magnitud con el cimentado en los porcenta­jes: Munguia precede, en este segundo supuesto, a Mar­quina y Lequeitio; Guemica antecede a Villaro, Ceberio y Bermeo, de manera que la disposición de los arcipres­tazgos según este criterio, es la siguiente: Carranza, Mun­guia, Lequeitio, Marquina, Guemica, Villaro, Durango, Ceberio, Bermeo, Valmaseda, Algorta y Portugalete. En los párrafos dedicados a cada demarcación, puede repa­sar el lector, las observaciones pertinentes a cada una de ellas.

Las dos zonas más populosas pesan decisoriamente en los valores medios de la Provincia; téngase presente que en ellas se han oficiado más de la mitad de los matrimo­nios, y tanto monta este detalle que, excluidas éstas, las restantes alcanzan un porcentaje bastante más alto (3,76%); no es impertinente esta reflexión, medítese qué vasto territorio provincial ha estado inmerso en intensi­dad consanguínea, más que notable: salvando las pobla­ciones que, en cada comarca, son excepción, la mitad de la población ha vivido una fuerte endogamia, más inten­sa aún en la primera parte.

Los modelos de consanguinidad son diferentes: en ocho circunscripciones se prefieren los enlaces de P.H., y en cuatro, los de P.S.; éstas últimas son Lequeitio, Mar­quina, Munguia y Ceberio, en orden decreciente, siendo en Ceberio casi desdeñable el predominio- de los P.S. Las que privilegiaron los enlaces de P.H. (tipo "A") truecan su pauta, menguando, a veces tajantemente, el número de enlaces de P.H. al punto de invertir el modelo.

Aun careciendo de relieve, en general, las uniones de 3.0 (T.S.) descuellan por su valor relativo en Carranza, Lequeitio, Munguia y Bermeo; y por opuesta razón resal­tan en Villaro, con un solo registro en 49 años. Similar ponderación puede hacerse respecto del 5.0 (t.s.): Mun­guia, Carranza, Lequeitio menudearon estas bodas y, en cambio, las recortaron Portugalete, Villaro y Algorta.

Carranza se diversifica por la parvedad de sus apiña­mientos y por el lento retroceso de la consanguinidad; en este capítulo, se le emparejan Munguia -quizá el más persistente-, Ceberio y Guemica. Antagónico fué el comportamiento de Lequeitio, Marquina y Bermeo (el más llamativo por no haberse apoyado en aumento de nupcias): cercenaron con decisión, a partir de la década de los cuarenta, el reemparentamiento conyugal, aunque, alguna vez, por ejemplo en Lequeitio, rebroten con cierto ímpetu las parejas emparentadas. Durango fué un tanto remisa en adherirse al cambio, pero lo hizo después con eficacia, lo mismo que Algorta. Villaro despunta porque casi todos sus expedientes son de PH y PS (154 entre 166); Algorta, Portugalete y Bermeo se despegan en cuan­to que los PH adicionan más que los otros tres grados; en la mayoría, los PS y ts se mantienen e incluso suben, a lo largo de los 49 años, con la salvedad de Valmaseda y Algorta. No siempre coincide dimensión exigua de la villa con elevada densidad endogámica. En los distritos de más alta frecuencia existe alguna población donde la consanguinidad es módica o nula, y en los de más baja surge siempre alguna excepción: en cada área se diferen­cian sub-populaciones.

Page 14: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

240 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

En la segunda tabla de arciprestazgos se organizan por su coeficiente de consanguinidad (F), es decir, por su aportación a la homocigosis. Las divergencias se apre­cian inmediatamente: Guemica antecede a Marquina; Bermeo se antepone a Durango y Ceberio: su cuota de P.H. y T.S. deciden su coeficiente.

En la tabla final se agrupan todos los términos estu­diados en seis conjuntos, por su magnitud, y en cada uno de ellos se listan según su participación en la homocigo­sis o duplicación de genes, comenzando por los de ma­yor cuantía y terminando por los que, al carecer de unio­nes consanguíneas, no han contribuido a la cuestión.

Salta a la vista la diversidad de comportamientos de las agrupaciones, concorde por otra parte con su vecin­dario, en cuanto a la frecuencia, que se sitúa respectiva­mente en tomo a 1,4%, 1,8%, 2,4%, 3,8%, 4,0% y 4,5% res­pectivamente. Opuestas a este principio encontramos po­blaciones cuya práctica endogámica no armoniza con su censo: Baracaldo, Lequeitio, Galdácano, Ondárroa, Elo­rrio, Munguia, Amorebieta y otras. El límite de los tres mil habitantes parece constituir para la Provincia la ba­rrera que deslinda los poblados por su alta o baja inci­dencia endogámica; entiéndase esto con salvedades, pues no son raras las exclusiones.

El criterio de ordenación de las villas según el coefi­ciente de consanguinidad (F) no coincide con el del por­centaje, como puede comprobarse; por ejemplo, en los cinco primeros pueblos de la serie de mil a tres mil habi­tantes. En cada ocasión puédese verificar a qué se debe tal vuelco: preponderancia de los PS, alcance de los TS e incluso de los ts; no se debe olvidar que las constantes de los grados 3.0

, 4.0, 5.0 y 6.0 son respectivamente 1/8, 1/6,

1/32 y 1/64. Este desacuerdo entre los dos criterios (por­centaje y coeficiente (F) abarca aproximadamente la ter­cera parte de los núcleos listados; esto nos fuerza a reco­nocer que el factor dimensión del poblado o dispersión del caserío no ha sido el único responsable de la alta in­cidencia; otros lo mediatizan o anulan, como la comuni­cabilidad, desaparición del aislacionismo poblacional, condiciones sociológicas y fisiográficas, etc.; la emigra­ción e inmigración y la baja del ruralismo han promovi­do la merma de la consanguinidad.

Este cálculo del coeficiente representa el valor global de los 49 años; ahora bien, la homocigosis fué mucho mayor en . la primera parte del período, tanto por la fre­cuencia de matrimoniar deudos como por el predominio neto de los PH, por lo que los coeficientes no muy eleva­dos a primera vista, no son desdeñables.

BILBAO

Incluye este capítulo los datos referidos al primer Bil­bao, Deusto y Begoña, no las zonas anexionadas poste­riormente.

Las parroquias cuyos doc;vmentos han servido para confeccionar las tablas son: .S. Antonio, S. Francisco de Asis, S. Nicolás, S. Pedro de Deusto, S. Vicente mártir, Santos Juanes, Nr.ª Sr.• de Begoña, Santiago (desde 1923),

Nr.• Sr.ª del Carmen (1934), S. Luis Beltrán y Nr.• Sr.• del Rosario (1947), S. Pablo de Deusto (49), S. Ignacio (49), Nr.• Sr.• de Lourdes, Inmaculada Concepción, Corpus Christi, Asunción de Nr.• Sr.•, Sagrada Familia, S. Rafael, La Peña, Asunción-Oyargan, Bolueta, Nr.• Sr.• de los Re­yes, S. Feo de Paula, Nr.ª Sr.ª del Pilar, Nr.ª Sr.• de Fáti­ma, S. Feo Javier, S. José Elorrieta, Nr.• Sr.ª de Covadon­ga, Castrejana, Buya, Ibarrecolanda, Santa Cruz, S. Vicente Arcocha, Asunción Ciudad Jardín, (todas desde el 56), Cobetas (60), Santísima Trinidad (62), Santos Justo y Pastor (63), Resurrección (63), Arangoiti (64), Sacra­mentinos (65), Pasión del Señor (65), Maria Reina (66). Al expansionarse la ciudad ha invadido, en alguna medi­da, otras demarcaciones, pero las parroquias mentadas parecen participar, desde su origen, del medio urbano.

El desarrollo del tema en los puntos precedentes nos exime de ulteriores insistencias. Coadyuvó a que pusiéra­mos límite al estudio la cuantía siempre creciente de ma­trimonios consanguíneos entre los inmigrantes. El mero recorrido de los apellidos de los expedientes define el es­tado de la cuestión: es sabido que muchos apellidos, ori­ginariamente advenedizos, se naturalizan al paso de las generaciones pero no lo es menos que la proporción de estos apellidos en las dispensas hubiera permanecido invariada, salvo nuevos trasvases: durante los primeros años (18-35) se anotan unos cinco apellidos de este géne­ro anualmente, mientras que en los últimos se numeran cuatro veces más; en la última década pudimos compro­barlo en los propios sumarios (3).

Al igual que en la Provincia, el guarismo de casamien­tos anuales se alzó vertiginosamente: dividido todo el período en septenios, hallamos que el último duplica ge­nerosamente al primero. El que incorpora el trienio béli­co (32-38), solo pierde dos millares respecto del preceden­te; el desquite es tan exuberante que el posterior septenio le rebasa en más de tres mil; espectacular el a:iío 40, no superado hasta el 54; las dos últimas septenas, que cam­pean sobre todas, difieren poco entre sí. La presteza de recuperación postbélica es más viva que en la Provincia.

Los consanguíneos registrados son 1.012, a saber: 38 (0,05%) de TS, 559 (0,76%) de PH, 305 (0,42%) de PS y 110 (0,15%) de ts. De cada cien matrimonios de esta índole menos de 4 corresponden a los TS, más de 55 a los PH: 30 a los PS y casi 11 a los ts, proporciones que trocaron radicalmente al correr los años. La frecuencia de casa­mientos entre deudos, 1,38% del total, es muy inferior a la de la Provincia, pero superior a la de Sestao, Portuga­lete y otras villas. Quizá lo más sorprendente es la preva­lencia de los PH sobre todos los grados; los maridajes de ts (5.º) no son profusos, pero a priori podía aventurarse menor dosis.

(3) Ciertas estadísticas que corren impresas no han servido para comparar inmigración y consanguinidad fiablemente. Según el censo, Bilbao aumentó, de 1925 al 35, en unos treinta y cuatro mil habitantes, y los inmigrantes, según esas fuentes, rebasaron los sesenta mil. En publicación oficiosa de 1963 citando al 1.N. de E., se calcula en 211.934 los llegados en lo~ últimos 25 años a toda la Provincia, y la precitada fuente atribuye mayor número solo a Bilbao.

Page 15: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 241

Cómo evolucionó esta cuestión en la gran ciudad? Compárese el primer sector (1918,35) con el último (49-66): censo de casamientos de parientes, 390 en el prime­ro, 432 en el último jcrece en cifras absolutas!, comporta­miento singular. Referidos estos datos a cien matrimo­nios, las proporciones varian: en el primer tramo, 4 bo­das, poco más corresponden a TS, más de 61 a PH, 25 a PS y 10 a ts, y en el segundo el reparto es de 3 de TS, 48 de PH, 36 de PS y 12 de ts: substancial rebaja de los PH, ligera de los TS y considerable incremento de PS y ts.

Debido al gran despliegue de bodas, la frecuencia se desplaza de 1,93% a 1,16% al finalizar; fácilmente se sobrepaia el 2% en la primera etapa, y no aparece nunca en la última. Sin pretender aquilatar afiladamente, se de­be atribuir esta raro proceder a la inmigración: en efecto, en la primera fase, restadas aquellas parejas cuyos apelli­dos no son originarios, contamos todavía unos 424 casa­mientos consanguíneos; por el contrario, en la última, de los 432 emparentados, solo unos 150 son los probables oriundos, los demás son el tributo de la inmigración. Pese a todo, la población bilbaina ha disminuido su cuo­ta endogámica. En cuanto a la homocigosis, las divergen­cias son palmarias: el coeficiente global F es de 0,653 por mil, pero en el primer plazo, debido al agolpamiento de enlaces de PH, sobrepasa este valor, F = 0,977, minorán­dose a F = 0,506 en las dos últimas décadas.

Con estas líneas queda pergeñado y definido el com­portamiento y pauta endogámica de la Província de Viz-

caya, su variación acorde con las sub-populaciones, las convergencias y divergencias de las demarcaciones rura­les y urbanas, factores impulsantes o diluyentes, arraigo tradicional y el sesgo evolutivo a lo largo de los 49 años analizados.

BIBLIOGRAFIA

AYALA Feo. J.; Kiger J.A. 1984. Genética Moderna. Omega, S.A. Barcelona, 836 pp.

SERRA, A; Soini A. 1959. La consanguinité d'une population. Population 14, 1.0

• 47-72. SERRA A 1961. La consanguineita e i soui effetti nelle popolazione

Umane. De Genetica Medica, III. 119-149. V ALLS A 1978. Contribución al conocimiento de la consangui­

nidad en España. Una muestra de población gallega. Pers­pectivas de la Antropología Española, Akal ed. 39-57.

V ALLS A 1980. A contribution to the knowledge of consanguinity in Spain. Inbreeding and endogamy in the Burgos population. Actas 11 Symp. Antrop. Biol. Esp. 144-158.

V ALLS A 1982. Antropología de la consanguinidad. Ed. de la Universidad complutense. Madrid, 195 pp.

ZUDAIRE H.C. 1981. Coeficiente de consanguinidad en zonas de Alava, Guipúzcoa y Vizcaya. Munibe, 3-4. 245-254.

ZUDAIRE H.C. 1986. Consanguinidad en Vizcaya. Munibe, 38. 19-33.

Page 16: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

242

AÑOS

1918 1919 1920 1921 1922 1923 1924 1925 1926 1927 1928 1929 1930 1931 1932 1933 1934 1935 1936 1937 1938 1939 1940 1941 1942 1943 1944 1945 1946 1947 1948 1949 1950 1951 1952 1953 1954 1955 1956 1957 1958 1959 1960 1961 1962 1963 1964 1965 1966

M.C. T.S. P.H.

101 5 53 95 7 60 97 6 50 77 6 37 94 3 46 82 2 49 76 6 48 98 5 50 95 4 54 86 2 40 78 6 41 85 2 49 65 4 32 67 5 34 79 3 43 69 1 31 58 1 30 54 2 30 25 1 14

9 1 4 16 11 66 2 36

100 2 47 88 2 51 63 1 35 65 1 32 58 1 32 71 1 28 50 21 68 3 31 51 1 19 64 1 26 62 29 50 4 16 57 2 20 57 2 20 66 2 26 62 18 71 26 58 27 55 1 26 41 1 8 48 20 46 19 38 15 44 13 38 12 29 12 42 1 10

CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

P.S. t.s.

33 10 22 6 28 13 26 8 35 10 25 6 18 4 29 14 29 8 33 11 24 7 25 9 25 4 19 9 24 9 30 7 20 7 17 5 10

4 4 1

21 7 35 16 28 7 20 7 27 5 18 7 30 12 26 3 25 9 23 8 31 6 28 5 24 6 27 8 27 8 30 8 35 9 41 4 27 4 22 6 28 4 18 10 23 4 21 2 21 10 20 6 12 5 26 5

T.M.

1640 1997 2097 1977 1950 1840 1871 1815 1905 1913 1976 2029 2080 2198 1840 1752 1781 1981 1367

725 719

1442 2717 2523 2308 2404 2288 2399 2433 2655 2557 2435 2569 2552 2591 2654 2951 3048 3480 3168 3232 3205 2975 3102 2755 2933 2897 2888 3025

Abs. T.S.

6.1585 0.3049 4.7571 0.3505 4.6257 0.2861 3.8948 0.3035 4.8205 0.1538 4.4565 0.1087 4.0620 0.3207 5.3994 0.2755 4.9869 0.2100 4.4956 0.1045 3.9474 0.3036 4.1893 0.0986 3.1250 0.1923 3.0482 0.2275 4.2935 0.1630 3.9384 0.0571 3.2566 0.0561 2.7259 0.1010 1.8288 0.0732 1.2414 0.1379 2.2253 4.5770 0.1387 3.6805 0.0736 3.4879 0.0793 2.7296 0.0433 2.7038 0.0416 2 .. 5350 o. 0437 2.9596 0.0417 2.0551 2.5612 0.1130 1.9945 0.0391 2.6283 0.0411 2.4134 1.9592 0.1567 2.1999 0.0772 2.1477 0.0754 2.2365 0.0678 2.0341 2.0402 1.8308 1.7017 0.0309 l. 2793 o. 0312 1.6134 1.4829 1.3793 1.5002 1.3117 1.0042 1.3884 0.0331

P.H. P.S.

3.2317 2.0122 3.0045 1.1017 2.3844 1.3352 1.8715 1.3151 2. 3590 l. 7949 2.6630 1.3587 2.5655 0.9621 2.7548 1.5978 2.8346 1.5223 2.0910 1.7250 2.0749 1.2146 2.4150 1.2321 1.5385 1.2019 l. 5469 o. 8644 2.3370 1.3043 1.7694 1.7123 1.6844 1.1230 1.5144 0.8582 1.0241 0.7315 0.5517 0.5517 1.5299 0.5563 2.4965 1.4563 1.7298 1.2882 2.0214 1.1014 1.5165 0.8666 1.3311 1.1231 i.3986 o.7867 1.1672 1.2505 0.8631 1.0686 1.1676 o. 9416 0.7431 0.8995 1.0678 1.2731 1.1288 1.0899 0.6270 0.9404 o. 7719 l. 0421 o. 7536 1.0173 0.8811 1.0166 0.5906 1.1483 0.7471 1.1782 0.8523 0.8523 0.8045 0.6807 0.2496 0.8736 0.6723 0.6050 0.6125 0.7415 0.5445 0.7623 0.4432 0.7160 0.4142 0.6904 0.4155 0.4155 0.3306 0.8595

t.s.

0.6098 0.3005 0.6199 0.4047 0.5128 0.3261 0.2138 0.7713 0.4199 0.5750 0.3543 0.4436 0.1923 0.4095 0.4891 0.3995 0.3930 0.2524

0.1391 0.4854 0.5889 0.2774 0.3033 0.2080 0.3059 0.5002 0.1233 0.3390 0.3129 0.2464 0.1946 0.2351 0.3088 0.3014 0.2711 0.2953 0.1149 0.1263 0.1856 0.1248 0.3361 0.1289 0.0726 0.3409 0.2071 0.1731 0.1653

Total 3114 100 1481 1194 339 113639 2.7403 0.0880 1.3032 1.0507 0.2983

Tabla !. Provincia de Vizcaya. Suma global y frecuencia (%) de matrimonios consanguíneos absoluta y por grados, y evolución por años. M.C.= total de matr. cons. T.S.=matr. de tío-sobrina carnal; P. H. =idem de primos hermanos; P. S. =idem de primos segundos; t. s. =idem de primos de grado desigual (tia-sobrina segunda) • T. M. = total matr. Abs=por­centaje global (frecuencia).

Page 17: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C.

AEDO 31

ALDEACUEVA 11

BERNALES 2

BIAÑEZ 23

LA CALERA 1

LANESTOSA 6

LANZAS AGUDAS 8

MATIENZO 2

PANDO 4

PRESA 6

RANERO 6

SAN CIPRIAN 1

CARRANZA 11

SANGRICES 7

SANTECILLA 10

SIERRA 4

SOS CAÑO 9

Total 142

Tabla II. Suma total

T.S.

5

1

1

1

+

8

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

14 8 4 386 8.0311 1.2953

6 4 1 102 10.7843

1 1 37 5.4054

15 7 1 373 6.1662

1 30 3.3333

2 3 1 198 3.0303

3 3 1 76 10.5263 1.3158

2 69 2.8986

1 1 1 41 9.7561 2.4390

2 4 56 10.7143

2 3 1 75 8.0000

1 22 4.5455

5 5 125 8.8000 0.8000

3 3 1 105 6.6667

4 4 2 58 17.2414

2 2 88 4.5455

~ 2 1 164 5.4878

67 53 14 2005 7.0823 0.3990

y frecuencia absoluta y por grados, de en las poblaciones del arciprestazgo de Carranza.

243

P.H. P.S. t.s.

3.6269 2.0725 1.0363

5.8824 3.9216 0.9804

2.7027 2.7027

4.0214 1.8767 0.2681

3.3333

1.0101 1.5152 0.5051

3.9474 3.9474 1.3158

2.8986

2.4390 2.4390 2.4390

3.5714 7.1429

2.6667 4.0000 1.3333

4.5455

4.0000 4.0000

2.8571 2.8571 0.9524

6.8966 6.8966 3.4483

2.2727 2.2727

3.6585 1.2195 0.6098

3.3416 2.6434 0.6983

matrimonios consanguíneos

Page 18: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

244 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 7 5 2 34 20.5882 1919 6 1 4 1 29 20.6897 1920 3 2 1 37 8.1081 1921 2 1 1 44 4.5455 1922 2 1 1 37 5.4054 1923 7 1 5 1 38 18.4211 1924 35 1925 2 1 1 26 7.6923 1926 2 1 1 36 5.5556 1927 4 2 2 42 9.5238 1928 4 2 2 39 10.2564 1929 2 1 1 36 5.5556 1930 4 1 3 34 11. 7647 1931 2 2 48 4.1667 1932 2 2 37 5.4054 1933 4 2 1 1 34 11.7647 1934 1 1 40 2.5000 1935 1 1 43 2.3256 1936 1 1 32 3.1250 1937 12 1938 3 2 1 17 17.6471 1939 2 1 1 31 6.4516 1940 9 4 4 1 63 14.2857 1941 5 2 2 1 70 7.1429 1942 4 2 1 1 48 8.3333 1943 2 1 1 57 3.5088 1944 4 4 48 8.3333 1945 2 2 40 5.0000 1946 43 1947 6 1 3 2 58 10.3448 1948 1 1 54 1.8519 1949 3 2 1 47 6.3830 1950 2 2 60 3.3333 1951 7 2 5 42 16.6667 1952 3 3 37 8.1081 1953 3 3 42 7.1429 1954 1 1 44 2.2727 1955 6 5 1 51 11. 7647 1956 2 2 58 3.4483 1957 5 4 1 46 10.8696 1958 2 1 1 53 3.7736 1959 1 1 47 2.1277 1960 2 2 37 5.4054 1961 4 2 1 1 42 9.5238 1962 2 1 1 26 7.6923 1963 33 1964 3 1 2 23 13.0435 1965 1 1 37 2.7027 1966 1 1 38 2.6316

Tabla III. Evolución de la frecuencia (%) de matr.cons. en Carranza

CARRANZA

Page 19: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C. T.S.

AMOROTO 13 2

ARBACEGUI 16

AULESTIA 26 1

BEDARONA 8

EA 5

GUERRICAIZ 10

GUIZABURUAGA 11 1

ISPAS'.fER 14 2

LEQUEITIO 47

MENDEJA 12

NACHITUA 10 1

Total 172 7

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

4 7 216 6.0185 0.9259

8 7 1 230 6.9565

8 13 4 397 6.5491 0.2519

1 5 2 68 11.7647

3 2 150 3.3333

4 5 1 155 6.4516

3 6 1 105 10.4762 0.9524

1 10 1 272 5.1471 0.7353

12 29 6 1235 3.8057

11 1 143 8.3916

5 3 1 432 2.3148 0.2315

60 88 17 3403 5.0544 0.2057

P.H.

1.8519

3.4783

2.0151

1.4706

2.0000

2.5806

2.8571

0.3676

0.9717

7.6923

1.1574

1.7632

Tabla IV. Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios neos en las poblaciones del arciprestazgo de Lequeitio

245

P.S. t.s.

3.2407

3.0435 0.4348

3.2746 1.0076

7.3529 2.9412

1.3333

3.2258 0.6452

5.7143 0.9524

3.6765 0.3676

2.3482 0.4858

0.6993

0.6944 0.2315

2.5860 0.4996

consanguí-

Page 20: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

246 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 10 1 1 6 2 64 15.6250 1919 3 2 1 66 4.5455 1920 4 3 1 56 7.1429 1921 7 3 2 2 79 8.8608 1922 5 3 2 60 8.3333 1923 5 1 3 1 52 9.6154 1924 3 2 1 78 3.8462 1925 12 2 6 4 75 16.0000 1926 8 1 6 1 73 10.9589 1927 4 3 1 70 5.7143 1928 6 2 4 58 10.3448 1929 5 1 2 1 1 58 8.6207 1930 5 1 4 65 7.6923 1931 1 1 63 1.5873 1932 9 5 4 77 11.6883 1933 4 1 2 1 85 4.7059 1934 3 2 1 67 4.4776 1935 2 1 1 74 2.7027 1936 1 1 41 2.4390 1937 1 1 20 5.0000 1938 24 1939 4 2 1 1 41 9.7561 1940 10 1 7 2 84 11.9048 1941 3 3 81 3.7037 1942 1 1 82 1.2195 1943 4 1 3 57 7.0175 1944 2 1 1 63 3.1746 1945 1 1 61 1.6393 1946 1 1 72 1.3889 1947 3 3 63 4.7619 1948 3 2 1 64 4.6875 1949 3 1 2 60 5.0000 1950 2 1 1 68 2.9412 1951 3 1 1 1 69 4.3478 1952 3 2 1 75 4.0000 1953 2 2 71 2.8169 1954 5 2 3 73 6.8493 1955 4 3 1 80 5.0000 1956 2 2 84 2.3810 1957 3 2 1 89 3.3708 1958 1 1 79 1.2658 1959 91 1960 5 3 2 83 6.0241 1961 1 1 93 1.0753 1962 3 1 2 78 3.8462 1963 2 1 1 97 2.0619 1964 80 1965 78 1966 3 3 82 3.6585

Tabla V. Evolución de la frecuencia (%) de matr.cons. en Lequeitio

LEQUEITIO

Page 21: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION

AMALLOA

BARINAGA

BERRIATUA

BOLIVAR

CENARRUZA

ECHEVARRIA

GUERENA

MARQUINA

ONDARROA

Total

Tabla VI. Suma

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

7 6 1 91 7.6923

4 1 2 1 140 2.8571

26 1 15 8 2 339 7.6696 0.2950

20 1 7 10 2 271 7.3801 0.3690

9 4 4 1 143 6.2937

13 1 5 7 292 4.4521 0.3425

2 1 1 67 2.9851

33 2 12 16 3 821 4.0195 0.2436

41 1 11 26 3 1387 2.9560 0.0721

155 6 62 75 12 3551 4.3650 0.1690

total y frecuencia absoluta y por grados, de en las poblaciones del arciprestazgo de Marquina

MARQUINA

247

P.H. P.S. t.s.

6.5934 1.0989

0.7143 1.4286 0.7143

4.4248 2.3599 0.5900

2.5830 3.6900 0.7380

2.7972 2.7972 0.6993

1.7123 2.3973

1.4925 1.4925

1.4616 1.9488 0.3654

0.7931 1.8745 0.2163

1.7460 2.1121 0.3379

matrimonios consanguíneos

Page 22: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

248 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 8 4 4 67 11.9403 1919 1 1 61 1.6393 1920 3 1 2 63 4.7619 1921 6 2 3 1 76 7.8947 1922 8 4 4 71 11.2676 1923 3 2 1 72 4.1667 1924 1 1 51 1.9608 1925 49 1926 1 1 58 1.7241 1927 3 1 1 1 70 4.2857 1928 7 3 3 1 58 12.0690 1929 4 4 51 7.8431 1930 4 1 3 61 6.5574 1931 7 3 4 69 10.1449 1932 4 3 1 68 5.8824 1933 2 2 65 3.0769 1934 5 3 2 63 7.9365 1935 4 4 62 6.4516 1936 3 2 1 45 6.6667 1937 20 1938 1 1 16 6.2500 1939 2 1 1 50 4.0000 1940 4 2 2 86 4.6512 1941 2 1 1 80 2.5000 1942 3 2 1 80 3.7500 1943 2 1 1 74 2.7027 1944 2 2 85 2.3529 1945 8 1 6 1 64 12.5000 1946 2 1 1 50 4.0000 1947 3 3 70 4.2857 1948 6 3 3 71 8.4507 1949 3 3 62 4.8387 1950 2 2 80 2.5000 1951 3 1 2 77 3.8961 1952 5 1 3 1 67 7.4627 1953 1 1 84 1.1905 1954 4 1 3 89 4.4944 1955 1 1 81 1.2346 1956 2 2 97 2.0619 1957 1 1 98 1.0204 1958 8 1 3 3 1 89 8.9888 1959 3 3 112 2.6786 1960 7 2 3 2 95 7.3684 1961 106 1962 2 2 94 2.1277 1963 2 2 95 2.1053 1964 2 2 95 2.1053 1965 102 1966 102

Tabla VII. Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Mar quina

MARQUINA

Page 23: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION

FICA

FRUNIZ

GAMIZ

GATICA

LARRAURI

LAUCARIZ

LAUQUINIZ

LEMONIZ

LIBANO DE A.

MARURI

MEÑACA

MUNGUIA

Total

Tabla VIII. neos en las

M.C.

16

20

18

14

17

7

13

33

25

12

12

42

229

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

4 9 3 200 8.0000

8 12 268 7.4627

7 10 1 345 5.2174

8 3 3 384 3.6458

1 6 8 2 245 6.9388 0.4082

1 3 1 2 92 7.6087 1.0870

1 6 4 2 238 5.4622 0.4202

3 11 14 5 396 8.3333 0.7576

2 8 11 4 335 7.4627 0.5970

4 4 4 275 4.3636

4 5 3 257 4.6693

17 18 7 1001 4.1958

8 86 99 36 4036 5.6739 0.1982

P.H.

2.0000

2.9851

2.0290

2.0833

2.4490

3.2609

2.5210

2.7778

2.3881

1.4545

1.5564

1.6983

2.1308

Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios poblaciones del arciprestazgo de Munguía

Munguia

249

P.S. t.s.

4.5000 1.5000

4.4776

2.8986 0.2899

0.7813 0.7813

3.2653 0.8163

1.0870 2.1739

1.6807 0.8403

3.5354 1.2626

3.2836 1.1940

1.4545 1.4545

1.9455 1.1673

1.7982 0.6993

2.4529 0.8920

consanguí-

Page 24: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

250 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 2 1 1 58 3.4483 1919 8 1 3 4 66 12.1212 1920 7 2 4 1 95 7.3684 1921 1 1 60 1.6667 1922 9 2 4 3 89 10.1124 1923 4 2 1 1 73 5.4795 1924 7 6 1 81 8.6420 1925 4 1 2 1 89 4.4944 1926 9 6 3 92 9.7826 1927 5 1 3 1 82 6.0976 1928 3 1 1 1 77 3.8961 1929 3 1 2 85 3.5294 1930 4 3 1 79 5.0633 1931 8 1 1 4 2 75 10.6667 1932 11 7 1 3 78 14.1026 1933 3 1 2 67 4.4776 1934 6 1 4 1 75 8.0000 1935 4 1 3 84 4.7619 1936 3 1 2 66 4.5455 1937 2 2 13 15.3646 1938 1 1 21 4.7619 1939 1 1 33 3.0303 1940 7 4 3 107 6.5421 1941 4 2 2 104 3.8462 1942 11 3 6 2 87 12.6437 1943 6 1 2 3 81 7.4074 1944 5 3 2 104 4.8077 1945 7 1 5 1 104 6.7308 1946 5 2 3 83 6.0241 1947 3 2 1 78 3.8462 1948 4 1 3 85 4.7059 1949 3 1 2 95 3.1579 1950 6 2 3 1 81 7.4074 1951 1 1 70 1.4286 1952 4 2 1 1 84 4.7619 1953 4 1 1 2 90 4.4444 1954 10 1 3 5 1 97 10.3093 1955 6 1 1 4 114 5.2632 1956 3 1 2 118 2.5424 1957 3 3 102 2.9412 1958 5 1 2 2 100 5.0000 1959 2 2 99 2.0202 1960 2 2 92 2.1739 1961 6 4 2 88 6.8182 1962 3 2 1 78 3.8462 1963 7 1 4 2 101 6.9307 1964 79 1965 1 1 83 1.2048 1966 6 1 3 2 94 6.3830

Tabla IX. Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Munguía

MUNGUIA

Page 25: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C. T.S.

ARANZAZU 4

BEDIA 13

CASTILLO-ELEJ 8

CEANURI 47

DIMA 43

LEMONA 16 1

UBIDEA 8

VIL LAR O 8

YURRE 19

Total 166 1

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

2 2 123 3.2520

7 6 506 2.5692

4 4 344 2.3256

22 20 5 783 6.0026

22 19 2 873 4.9255 -10 4 1 667 2.3988 0.1499

1 6 1 174 4.5977

1 5 2 333 2.4024

14 5 752 2.5266

83 71 11 4555 3.6443 0.0220

P.H. P.S. t.s.

1.6260 1.6260

1.3834 1.1858

1.1682 1.1682

2.8097 2.5543 0.6386

2.5200 2.1764 0.2291

1.4993 0.5997 0.1499

0.5747 3.4483 0.5747

0.3003 1.5015 0.6006

1.8617 0.6649

1.8222 1.5587 o.2415

Tabla X.Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Villaro.

VIL LAR O

251

Page 26: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

252 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 2 1 1 65 3.0769 1919 3 3 97 3.0928 1920 7 4 3 91 7.6923 1921 3 3 95 3.1579 1922 3 2 1 87 3.4483 1923 5 2 2 1 84 5.9524 1924 6 5 1 82 7.3171 1925 6 2 1 3 65 9.2308 1926 5 4 1 71 7.0423 1927 2 2 72 2.7778 1928 4 2 2 76 5.2632 1929 6 3 2 1 82 7.3171 1930 2 1 1 81 2.4691 1931 5 5 101 4.9505 1932 5 2 3 67 7.4627 1933 6 1 5 74 8.1081 1934 3 2 1 66 4.5455 1935 2 2 72 2.7778 1936 41 1937 9 1938 19 1939 4 4 33 12.1212 1940 9 1 7 1 118 7.6271 1941 8 6 2 81 9.8765 1942 1 1 94 1.0638 1943 3 2 1 104 2.8846 1944 3 2 1 98 3.0612 1945 1 1 96 1.0417 1946 5 3 2 107 4.6729 1947 1 1 115 0.8696 1948 2 1 1 91 2.1978 1949 4 3 1 115 3.4783 1950 6 3 2 1 126 4.7619 1951 4 1 3 141 2.8369 1952 2 1 1 102 1.9608 1953 5 1 3 1 122 4.0984 1954 2 1 1 133 1.5038 1955 4 2 2 154 2.5974 1956 5 1 3 1 166 3.0120 1957 1 1 117 0.8547 1958 3 2 1 126 2.3810 1959 7 1 2 4 126 5.5556 1960 1 1 112 0.8929 1961 2 2 99 2.0202 196~ 3 3 98 3.0612 1963 2 2 103 1.9417 1964 1 1 92 1.0870 1965 2 1 1 93 2.1505 1966 96

Tabla XI. Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Villaro

VILLARO

Page 27: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C. T.S.

ALBIZU 1

ARA CALDO 4 1

ARRANCUDIAGA 9 1

ARRIGORRIAGA 40

CEBERIO 30 3

MIRAVALLES 12

MURUETA 3

OLARTE 11 1

OROZCO 33

URIGOITI 1 1

ZARATAMO 12

ZOLLO 5 1

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

1 111 0.9009 -2 1 87 4.5977 1.1494

5 3 258 3.4884 0.3876

14 21 5 1444 2.7701

16 9 2 801 3.7453 0.3745

3 6 3 607 1.9796

2 1 137 2.1898

3 7 165 6.6667 0.6061

12 19 2 10651

3.1250

40 2.5000 2.5000

9 3 353 3.3994

1 2 1 147 3.4041 0.6803

P.H. P.S. t.s.

0.9009

2.2989 1.1494

1.9380 1.1628

0.9695 1.4543 0.3463

1.9975 1.1236 0.2497

0.4942 0.9885 0.4942

1.4599 0.7299

1.8182 4.2424

1.1364 1.7992 0.1894

2.5496 0.8499

0.6803 1.3605 0.6803

Tabla XII. Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Ceberio.

ceberio

253

Page 28: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

254 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 5 3 2 120 4.1667 1919 9 1 4 3 1 129 6.9767 1920 5 2 3 103 4.8544 1921 1 1 105 0.9524 1922 4 2 2 97 4.1237 1923 6 3 3 95 6.3158 1924 4 2 2 106 3.7736 1925 3 3 89 3.3708 1926 2 1 1 83 2.4096 1927 3 1 1 1 88 3.4091 1928 2 1 1 102 1.9608 1929 4 4 102 3.9216 1930 5 3 2 118 4.2373 1931 5 1 3 1 104 4.8077 1932 1 1 93 1.0753 1933 3 1 1 1 85 3.5294 1934 5 2 2 1 99 5.0505 1935 2 2 120 1.6667 1936 1 1 85 1.1765 1937 42 1938 1 1 33 3.0303 1939 4 1 3 74 5.4054 1940 6 3 1 2 105 5.7143 1941 9 3 5 1 112 8.0357 1942 3 1 2 114 2.6316 1943 4 2 2 122 3.2787 1944 4 1 1 2 98 4.0816 1945 1 1 125 0.8000 1946 2 1 1 101 1.9802 1947 4 1 2 1 117 3.4188 1948 1 1 103 0.9709 1949 6 1 4 1 127 4.7244 1950 4 2 2 105 3.8095 1951 1 1 129 0.7752 1952 5 4 1 125 4.0000 1953 4 2 1 1 139 2.8777 1954 3 1 1 1 163 1.8405 1955 7 4 3 157 4.4586 1956 2 2 125 1.6000 1957 5 2 3 127 3.9370 1958 2 2 124 1.6129 1959 3 2 1 123 2.4390 1960 108 1961 115 1962 2 2 101 1.9802 1963 3 1 1 1 99 3.0303 1964 3 1 2 101 2.9703 1965 80 1966 2 2 89 2.2472

Tabla XIII. Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Ceberio.

CEBERIO

Page 29: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C. T.S.

ALBONIGA 23

BUSTURIA 38 1

BAQUIO 24 3

BERMEO 66 3

MUNDACA 22 3

PEDERNALES 2

S. PELAYO

Total 175 10

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

14 6 3 949 2.4236

22 10 5 495 7.6768 0.2020

10 10 1 362 6.6298 0.8287

34 21 8 3319 1.9886 0.0904

14 3 2 520 4.2308 0.5769

1 1 88 2.2727

138

95 51 19 5871 2.9808 0.1703

P.H. P.S. t.s.

1.4752 0.6322 0.3161

4.4444 2.0202 1.0101

2.7624 2.7624 0.2762

1.0244 0.6327 0.2410

2.6923 0.5769 0.3846

1.1364 1.1364

1.6181 0.8687 0.3236

Tabla XIV. Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Bermeo.

PEDERNALES

255

Page 30: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

256 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 5 1 3 1 121 4.1322 1919 6 2 4 132 4.5455 1920 6 2 4 130 4.6154 1921 11 1 6 1 3 133 8.2707 1922 3 2 1 133 2.2556 1923 2 1 1 132 1.5152 1924 4 3 1 122 3.2787 1925 7 2 4 1 127 5.5118 1926 5 3 1 1 113 4.4248 1927 3 1 2 116 2.5862 1928 7 1 5 1 122 5.7377 1929 5 1 3 1 118 4.2373 1930 8 1 4 3 112 7.1429 1931 3 2 1 138 2.1739 1932 8 6 2 138 5.7971 1933 6 5 1 122 4.9180 1934 3 2 1 140 2.1429 1935 8 5 3 144 5.5556 1936 3 1 2 93 3.2258 1937 1 1 53 1.8868 1938 1 1 37 2.7027 1939 3 1 1 1 80 3.7500 1940 2 1 1 149 1.3423 1941 5 4 1 130 3.8462 1942 3 2 1 143 2.0979 1943 7 4 2 1 159 4.4025 1944 5 4 1 128 3.9063 1945 3 3 106 2.8302 1946 1 1 109 0.9174 1947 1 1 128 0.7813 1948 2 1 1 151 1.3245 1949 2 1 1 117 1.7094 1950 3 2 1 137 2.1898 1951 2 2 130 1.5385 1952 2 1 1 107 1.8692 1953 3 1 2 94 3.1915 1954 2 2 107 1.8692 1955 2 2 117 1.7094 1956 97 1957 112 1958 2 2 119 1.6807 1959 3 3 119 2.5210 1960 1 1 130 0.7692 1961 1 1 118 0.8475 1962 3 2 1 105 2.8571 1963 5 2 1 2 137 3.6496 1964 3 2 1 118 2.5424 1965 3 1 2 133 2.2556 1966 1 1 115 0.8696

Tabla XV. Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Bermeo.

BERMEO

Page 31: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C. T.S.

A CORDA 3

AJANGUIZ 10

ALBIZ-MENDATA 4

ARTEAGA 22

ARRAZ U A 13 1

CANA LA 1

CORTEZUBI 14

ELANCHOVE 18 1

EREÑO 8 1

FORUA 3

GAVICA

GOROCICA 7

GUERNICA 27 1

IBARRANGUELUA 21

LUNO 16

MENDATA 11

MORGA 20

MUGICA (Ug.) 19 1

MURUETA 3 1

NAVARNIZ 7 2

RIGOITIA 27 1

Total 254 9

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

1 2 124 2.4194

1 8 1 246 4.0650

2 1 1 130 3.0769

13 8 1 370 5.9459

7 4 1 328 3.9634 0.3049

1 88 1.1364

9 4 1 267 5.2434

7 6 4 274 6.5693 0.3650

3 4 153 5.2288 0.6536

3 209 1.4354

70

6 1 167 4.1916

17 6 3 1225 2.2041 0.0816

9 8 4 288 7.2917

4 11 1 401 3.9900

5 6 200 5.5000

9 9 2 367 5.4496

8 7 3 582 3.2646 0.1718

1 1 129 2.3256 0.7752

2 2 1 220 3.1818 0.9091

14 11 1 407 6.6339 0.2457

122 99 24 6245 4.0673 0.1441

257

P.H. P.S. t.s.

0.8065 1.6129

0.4065 3.2520 0.4065

1.5385 0.7692 0.7692

3.5135 2.1622 0.2703

2.1341 1.2195 0.3049

1.1364

3.3708 1.4981 0.3745

2.5547 2.1898 1.4599

1.9608 2.6144

1.4354

3.5928 0.5988

1.3878 0.4898 0.2449

3.1250 2.7778 1.3889

0.9975 2.7431 0.2494

2.5000 3.0000

2.4523 2.4523 0.5450

1.3746 1.2027 0.5155

0.7752 0.7752

0.9091 0.9091 0.4545

3.4398 2.7027 0.2457

1.9536 1.5853 0.3843

Tabla XVI. Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Guernica.

GERNICA

Page 32: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

258 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 17 11 5 1 97 17.5258 1919 5 3 2 140 3.5714 1920 11 6 4 1 119 9.2437 1921 3 1 1 1 119 2.5210 1922 7 1 2 4 109 6.4220 1923 3 2 1 108 2.7778 1924 4 2 2 110 3.6364 1925 7 2 4 1 107 6.5421 1926 7 5 2 124 5.6452 1927 10 4 3 3 114 8.7719 1928 6 1 3 1 1 120 5.0000 1929 13 1 5 6 1 118 11.0169 1930 3 3 104 2.8846 1931 7 4 2 1 127 5.5118 1932 10 3 7 125 8.0000 1933 6 2 4 104 5.7692 1934 6 4 2 110 5.4545 1935 5 3 1 1 122 4.0984 1936 81 1937 2 2 46 4.3478 1938 32 1939 6 3 1 2 61 9.8361 1940 5 3 1 1 143 3.4965 1941 6 3 3 126 4.7619 1942 4 3 1 130 3.1769 1943 4 4 163 2.4540 1944 2 2 120 1.6667 1945 6 3 2 1 127 4.7244 1946 3 2 1 125 2.4000 1947 6 3 3 137 4.3796 1948 3 2 1 138 2.1739 1949 5 1 1 3 111 4.5045 1950 2 2 142 1.4085 1951 3 1 2 129 2.3256 1952 6 1 1 3 1 136 4.4118 1953 5 1 3 1 135 3.7037 1954 6 1 3 2 150 4.0000 1955 5 1 2 2 156 3.2051 1956 11 4 7 179 6.1453 1957 6 3 3 187 3.2086 1958 1 1 182 0.5495 1959 4 2 2 176 0.2727 1960 6 3 1 2 170 3.5294 1961 2 2 162 1.2346 1962 2 1 1 136 1.4706 1963 2 1 1 140 1.4286 1964 5 2 3 147 3.4014 1965 1 1 151 0.6623 1966 5 2 3 150 3.3333

Tabla XVII. Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Guernica

GUERNICA

Page 33: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C.

ARCENTALES 18

AVELLANEDA 1

BECI 3

CARRAL 3

GALDAMES 24

GOICOURIA 2

GORDEJUELA 20

GUEÑES 20

IRATZAGORRIA 9

LABALUGA 6

LA BARRIETA 7

LA CUADRA 7

LA HERRERA 4

MERCADILLO 3

MONTE LLANO 2

OCHARAN 1

SODUPE 9

TRASLAVIÑA 3

TRUCIOS 7

VALMASEDA 18

ZALDU 1

ZALLA 43

Total 211

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

1 5 9 3 224 8.0357 0.4464

1 42 2.3810

1 1 1 100 3.0000

1 2 94 3.1915

1 10 11 2 905 2.6519 0.1105

1 1 33 6.0606

9 7 4 398 5.0251

1 9 9 1 469 1 4.2644 0.2132

2 4 3 118 7.6271

3 2 1 430 1.3953

4 1 2 142 4.9296

1 4 2 324 2.1605 0.3086

2 1 1 179 2.2346

2 1 200 1.5000

1 1 72 2.7778

1 107 0.9346

1 4 4 802 1.1222 0.1247

2 1 201 1.4925

1 3 2 1 309 2.2654 0.3236

1 4 8 5 1481 1.2154 0.0675

1 40 2.5000

30 12 1 987 4.3566

7 98 74 32 7657 2.7556 0.0914

259

P.H. P.S. t.s.

2.2321 4.0179 1.3393

2.3810

1.0000 1.0000 1.0000

1.0638 2.1277

1.1050 1.2155 0.2210

3.0303 3.0303

2.2613 1.7588 1.0050

1.9190 1.9190 0.2132

1.6949 3.3898 2.5424

0.6977 0.4651 0.2326

2.8169 0.7042 1.4085

1.2346 0.6173

1.1173 0.5587 0.5587

1.0000 0.5000

1.3889 1.3889

0.9346

0.4988 0.4988

0.9950 0.4975

0.9709 0.6472 0.3236

0.2701 0.5402 0.3376

2.5000

3.0397 1.2158 0.1013

1.2799 0.9664 0.4179

Tabla XVIII. Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Valmaseda

VALMASEDA

Page 34: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

260 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 11 5 3 3 112 9.8214 1919 6 1 2 2 1 154 3.8961 1920 8 1 5 1 1 167 4.7904 1921 3 2 1 156 1.9231 1922 6 2 3 1 153 3.9216 1923 7 2 2 3 127 5.5118 1924 4 3 1 143 2.7972 1925 7 2 3 2 135 5.1852 1926 14 7 4 3 133 10.5263 1927 5 1 4 129 3.8760 1928 2 2 153 1.3072 1929 8 5 3 169 4.7337 1930 3 2 1 156 1.9231 1931 4 1 1 2 152 2.6316 1932 4 1 1 1 1 157 2.5478 1933 6 3 2 1 139 4.3165 1934 2 1 1 138 1.4493 1935 1 1 148 0.6757 1936 3 2 1 109 2.7523 1937 51 1938 2 2 43 4.6512 1939 2 2 109 1.8349 1940 7 4 2 1 177 3.9548 1941 7 5 1 1 184 3.8043 1942 11 1 7 2 1 176 6.2500 1943 2 1 1 172 1.1628 1944 4 4 165 2.4242 1945 6 1 2 3 169 3.5503 1946 4 2 2 148 2.7027 1947 5 1 3 1 188 2.6596 1948 2 1 1 172 1.1628 1949 4 2 1 1 172 2.3256 1950 5 1 4 165 3.0303 1951 4 1 1 2 166 2.4096 1952 3 1 2 168 l. 7857 1953 6 1 2 3 176 3.4091 1954 9 2 5 2 213 4.2254 1955 198 1956 10 4 6 239 4.1841 1957 4 3 1 186 2.1505 1958 1 1 196 1.0417 1959 2 1 1 224 0.8929 1960 2 1 1 179 1.1173 1961 1 1 169 0.5917 1962 175 1963 2 1 1 141 1.4184 1964 143 1965 137 1966 2 2 126 1.5873

Tabla XIX. Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Valmaseda.

VALMASEDA

Page 35: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

AÑOS M.C.

1918 6 1919 9 1920 10 1921 16 1922 16 1923 8 1924 12 1925 11 1926 12 1927 12 1928 7 1929 7 1930 6 1931 7 1932 6 1933 10 1934 9 1935 4 1936 1937 1 1938 2 1939 8 1940 12 1941 8 1942 5 1943 12 1944 9 1945 6 1946 8 1947 9 1948 5 1949 9 1950 5 1951 6 1952 8 1953 4 1954 4 1955 2 1956 7 1957 9 1958 5 1959 3 1960 3 1961 2 1962 3 1963 1 1964 2 1965 2 1966 2

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

3 2 1 151 3.9735 6 2 1 179 5.0279 6 1 3 193 5.1813

2 9 5 171 9.3567 1 7 6 2 185 8.6486

5 3 174 4.5977 6 4 2 155 7.7419 7 4 163 6.7485

1 6 3 2 183 6.5574 7 5 _, 169 7.1006 2 3 2 163 4.2945 3 4 173 4.0462 3 2 1 212 2.8302

1 3 3 206 3.3981 3 2 1 163 3.6810 5 4 1 176 5.6818 4 4 1 164 5.4878 3 1 182 2.1978

117 1 61 1.6393 2 37 5.4054 5 3 107 7.4766

1 4 4 3 242 4.9587 5 1 2 230 3.4783 4 1 197 2.5381 5 6 1 216 5.5556 3 5 1 189 4.7619 2 3 1 236 2.5424 1 7 212 3.7736

1 3 5 238 3.7815 1 1 3 235 2.1277

5 3 1 252 3.5714 1 4 223 2.2422 2 3 1 250 2.4000

1 1 5 1 248 3.2258 1 3 232 1.7241 1 3 224 1.7857 1 1 270 0.7407 2 4 1 306 2.2876 5 3 1 296 3.0405 3 2 291 1.7182

3 289 1.0381 2 1 272 1.1029 1 1 268 0.7463 2 1 300 1.0000

1 312 0.3205 1 1 276 0.7246

2 328 0.6098 1 1 365 0.5479

Tabla XXI. Evoluci6n de la frecuencia (%) de matr. cons. en Durango.

DURANGO

261

Page 36: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

262 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

POBLACION M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S. P.H. P.S. t.s.

ABADIANO 28 16 9 3 746 3.7534 2.1448 1.2064 0.4021

AMOREBIETA 56 2 29 23 2 1754 3.1927 0.1140 1.6534 1.3113 0.1140

APATAMONASTERIO 98

ARRAZOLA 8 1 4 3 134 5.9701 0.7463 3.2258 2.2388

AXPE-ELORRIO 3 3 125 2.4000 2.4000

BERNAGOITIA 4 2 2 61 6.5574 3.2787 3.2787

BERRIZ 20 8 7 5 653 3.0628 1.2251 1.0720 0.7657

DURANGO 44 1 23 15 5 2212 1.9892 0.0452 1.0398 0.6781 0.2260

ECHANO 10 5 4 1 599 1.6694 0.8347 0.6678 0.1669

ELORRIO 35 19 15 1 298 11.7450 6.3758 5.0336 0.3356

ERMUA 13 3 7 3 757 1.7173 0.3963 0.9247 0.3963

GARAY 2 2 160 1.2500 1.2500

IBARRURI 23 2 9 9 3 362 6.3536 0.5525 2.4862 2.4862 0.8287

IZURZA 3 1 2 116 2.5862 0.8621 1.7241

MALLAVIA 15 2 4 8 1 396 3.7879 0.5051 1.0101 2.0202 0.2525

MAÑARIA 20 10 6 4 230 8.6957 4.3478 2.6087 1.7391

MARZAN A 1 1 147 0.6803 0.6803

OCHANDIANO 14 7 7 493 2.8389 1.4199 1.4149

YURRETA 19 1 6 11 1 780 2.4359 0.1282 0.7692 1.4103 0.1282

ZALDIVAR 12 4 6 2 360 3.6923 1.2308 1.8462 0.6154

Total 330 9 152 135 34 10481 3.1486 0.0859 1.4502 1.2882 0.3244

Tabla XX. Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Durango.

DURANGO

Page 37: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION

ALGORTA

ALONSOTEGUI

BARRICA

BASAURI

BE RANGO

DERIO

ECHEVARRI

ERANDÍO

GALDACANO

GORLIZ

GUECHO

LAMIACO

LARRABEZUA

LAS ARENAS

LEJONA

LYJUA

PLENCIA

ST!! M!! LEZAMA

SONDICA

SOPE LANA

URDULIZ

ZAMUDIO

Total

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966 263

M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M.

40

16

12

62

18

19

10

81

56

17

18

10

27

36

33

19

10

21

14

19

14

24

4 21 14

1

1

11

6

4

4

36 21

10 6

6 11

1 1627

1 1015

1 380

5 4068

2

1

583

392

5 4 1 653

2 34 32 13 408~

1 29 19 7 2415

1

1

7

12

6

7

4

3

9 16

24 8

1 16 10

1

1

11

3

14

5

14

6

10

7

5

7

7

5

3

7

3

1

435

843

643

2 620

4 2862

6 1222

1

1

2

4

7

604

659

468

612

556

472

679

576 14 295 204 63 25891

Abs. T.S. P.H. P.S. t.s.

2.4585 0.2459 1.2907 0.8605 0.0615

1.5764 1.0835 0.3941 0.0985

3.1579 0.2632 1.5789 1.0526 0.2632

1.5241

3.0875

0.8850 0.5162 0.1229

1.7153 1.0292 0.3431

4.8469 0.2551 1.5306 2.8061 0.2551

1.5314 0.7657 0.6126 0.1531

1.9838 0.0490 0.8327 0.7837 0.3184

2.3188 0.0414 1.2008 0.7867 0.2899

3.9080 1.6092 1.6092 0.6897

2.1352 0.1186 1.4235 0.4745 0.1186

1.5552 0.1555 0.9331 0.4666

4.3548

1.2579

1.4516 2.5806 0.3226

0.8386 0.2795 0.1398

2.7005 0.0818 1.3093 0.8183 0.4910

3.1457 1.8212 1.1589 0.1656

1.5175 0.1517 0.4552 0.7587 0.1517

4.4872

2.2876

3.4173

2.9915 1.4957

0.8170 1.1438 0.3268

2.5180 0.8998

2.9661 0.2119 1.2712 0.6356 0.8475

3.5346 1.4728 1.0309 1.0309

2.2247 0.0541 1.1394 0.7879 0.2433

Tabla XXII.Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Algorta.

ALGORTA

Page 38: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

264 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 17 10 6 1 300 5.6667 1919 20 1 13 4 2 375 5.3333 1920 15 1 9 4 1 438 3.4247 1921 14 6 7 1 370 3.7838 1922 17 11 5 1 414 4.1063 1923 15 10 5 407 3.6855 1924 18 3 11 3 1 380 5.8442 1925 26 13 9 4 370 7.0270 1926 15 10 4 1 441 3.4014 1927 23 1 12 7 3 435 5.2874 1928 16 1 8 5 2 428 3.7383 1929 14 10 3 1 469 2.9851 1930 8 3 4 1 481 l.t;J632 1931 8 4 1 3 489 1.6360 1932 11 1 5 2 3 393 2.7990 1933 10 5 4 1 350 2.8571 1934 12 7 3 2 406 2.9557 1935 13 2 6 3 2 424 3.0660 1936 7 3 4 329 2.1277 1937 177 1938 ,3 2 1 145 2.0690 1939 15 7 6 2 284 5.2817 1940 9 6 2 1 569 1.5817 1941 17 2 9 4 2 560 3.0357 1942 10 5 4 1 489 2.0450 1943 11 4 6 1 499 2.2044 1944 8 4 2 2 493 1.6227 1945 17 9 5 3 520 3.2692 1946 11 6 4 1 533 2.0638 1947 16 1 8 5 2 627 2.5518 1948 9 3 4 2 671 1.3413 1949 11 4 6 1 548 2.0073 1950 16 10 5 1 630 2.5397 1951 10 1 5 3 1 599 1.6694 1952 9 5 3 1 632 1.4241 1953 11 5 5 1 672 1.6369 1954 11 8 2 1 689 1.5965 1955 13 5 8 717 1.8131 1956 11 5 6 872 1.2615 1957 7 2 5 774 0.9044 1958 13 6 6 1 762 1.7060 1959 6 2 3 1 759 0.7905 1960 7 3 2 2 714 0.9804 1961 10 2 7 1 792 1.2626 1962 5 2 3 664 0.7530 1963 10 5 5 709 1.4104 1964 10 4 4 2 731 1.3680 1965 6 2 3 1 664 0.9036 1966 5 1 2 2 697 0.7174

Tabla XXIII.Evolución de la frecuencia (%) de matr. cons. en Algorta

ALGORTA

Page 39: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C.

ABANTO L. c. 14

ABANTO G. 27

BARACALDO 171

CIERVANA 51

MUSQUES (S.Jul.) 16

MUSQUES (Somor) 9

ORTUELLA 17

POBEÑA 8

PORTUGALETE 51

EL REGATO 4

SAN SALVADOR 25

s. s. (La Arb.) 17

SANTURCE 57

SESTAO 76

Total 543

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

10 4 806 1.7370

13 11 3 2219 1.2168

4 97 50 20 9441 2.0521 0.480

17 25 9 516 9.8837

9 5 2 130 12.3077

4 3 2 1157 0.7779

1 6 9 1 1774 0.9583 0.0564

4 2 2 237 3.3755

3 30 14 4 4590 1.1111 0.0654

3 1 139 2.8777

17 6 2 1783 1.4021

13 2 2 1241 1.3699

1 27 22 7 4074 1.3991 0.0245

4 47 16 9 6661 1.1410 0.0601

13 294 172 64 34738 1.5631 0.0374

265

P.H. P.S. t.s.

1.2407 0.4963

0.5858 0.4957 0.1352

1.1640 0.6000 0.2400

3.2946 4.8450 1.7442

6.9231 3.8462 1.5385

0.3457 0.2593 0.1729

0.3382 0.5093 0.0564

1.6878 0.8439 0.8439

0.6536 0.3050 0.0871

2.1583 0.7194

0.9534 0.3365 0.1122

1.0475 0.1612 0.1612

0.6627 0.5400 0.1718

0.7056 0.2402 0.1351

0.8463 0.4951 0.1842

Tabla XXIV. Suma total y frecuencia absoluta y por grados, de matrimonios consanguíneos en las poblaciones del arciprestazgo de Portugalete.

SESTAO

Page 40: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

266 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

AÑOS M.C. T.S. P.H. P.S. t.s. T.M. Ind. cons.

1918 11 2 8 1 451 2.4390 1919 19 15 4 569 3.3392 1920 18 2 9 3 4 605 2.9752 1921 10 6 4 569 l. 7575 1922 14 1 8 2 3 515 2. 7184 1923 17 12 4 1 478 3.5565 1924 13 3 7 3 528 2.4621 1925 13 8 3 2 520 2.5000 1926 15 2 10 3 498 3.0120 1927 12 6 4 2 526 2.2814 1928 14 10 4 580 2.4138 1929 14 11 1 2 568 2.4648 1930 13 1 6 4 2 577 2.2530 1931 10 8 2 626 1.5974 1932 8 6 1 1 444 1.8018 1933 9 5 4 451 1.9956 1934 3 2 1 413 0.7264 1935 8 3 4 1 506 1.5810 1936 3 3 328 0.9146 1937 2 1 1 221 0.9050 1938 2 2 295 0.6780 1939 15 1 9 4 1 539 2.7829 1940 20 8 6 6 874 2.2883 1941 14 11 3 765 1.8301 1942 7 5 1 1 668 1.0479 1943. 8 5 2 1 700 1.1429 1944 10 5 2 3 697 1.4347 1945 13 6 5 2 751 1.7310 1946 8 2 5 1 850 0.9412 1947 11 6 2 3 836 1.3158 1948 13 6 3 4 722 1.8006 1949 11 6 4 1 729 1.5089 1950 9 3 5 1 752 1.1968 1951 6 2 3 1 750 0.8000 1952 7 4 2 1 810 0.8642 1953 9 5 4 797 1.1292 1954 9 5 2 2 969 0.9288 1955 12 4 7 1 953 1.2592 1956 16 9 5 2 1139 1.4047 1957 14 7 7 1034 1.3540 1958 12 5 6 1 1111 1.0801 1959 7 1 4 2 1040 0.6731 1960 12 6 5 1 983 1.2208 1961 17 6 10 1 1050 1.6190 1962 10 4 4 2 900 1.1111 1963 8 2 4 2 966 0.8282 1964 9 3 4 2 1012 0.8893 1965 13 7 2 4 1002 1.2974 1966 15 1 6 8 1071 1.4006

Tabla XXV. Evoluci6n de la frecuencia (%) de matr. cons. en Portugalete.

PORTUGALETE

Page 41: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

POBLACION M.C. T.S.

CARRANZA 142 8

LEQUEITIO 172 7

MARQUINA 155 6

MUNGUIA 229 8

VILLARO 166 1

CEBERIO 161 8

BERMEO 175 10

GUERNICA 254 9

VALMASEDA 211 7

DURANGO 330 9

ALGORTA 576 14

PORTUGALETE 543 13

Total 3114 100

Tabla XXVI. Resumen Vizcaya.

Arciprestazgo

CARRANZA

MUNGUIA

LEQUEITIO

GUERNICA

MARQUINA

VIL LAR O

BERMEO

DURANGO

CEBERIO

VALMASEDA

ALGORTA

PORTUGALETE

PROVINCIA

Tabla XXVII.

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

P.H. P.S. t.s. T.M. Abs. T.S.

67 53 14 2005 7.0823 0.3990

60 88 17 3403 5.0544 0.2057

62 75 12 3551 4.3650 0.1690

86 99 36 4036 5.6739 0.1982

83 71 11 4555 3.6443 0.0220

67 73 13 5206 3.0926 0.1537

95 51 19 5871 2.9808 0.1703

122 99 24 6245 4.0673 0.1441

98 74 32 7675 2.7556 0.0914

152 135 34 10481 3.1486 0.0859

295 204 63 25891 2.2247 0.0541

294 172 64 34738 1.5631 0.0374

1481 1194 339 113639 2.7403 0.0880

de las frecuencias de consanguinidad de

267

P.H. P.S. t.s.

3.3416 2.6434 0.6983

1.7632 2.5860 0.4996

l. 7460 2.1121 0.3379

2.1308 2.4529 0.8920

1.8222 1.5587 0.2415

1.2870 1.4022 0.2497

1.6181 0.8687 0.3236

1.9536 1.5853 0.3843

1.2799 0.9664 0.4179

1.4502 1.2880 0.3244

1.1394 0.7879 0.2433

0.8463 0.4951 0.1842

1.3032 1.0507 0.2983

toda la Provincia de

Matrimonios Frecuencia (%) Coeficiente (por mil)

2005 7.0823 3.218

4036 5.6739 2.241

3403 5.0544 1.919

6245 4.0673 1.768

3551 4.3650 1.738

4555 3.6443 1.485

5871 2.9808 1.461

10481 3.1486 1.316

5206 3.0926 1.293

7657 2.7556 1.195

25891 2.2247 0.978

34738 1.5631 0.710

113639 2.7403 1.188

Lista de arciprestazgos por orden decreciente de Coeficiente de consanguinidad

y resumen de la Provincia; no incluye Bilbao.

Page 42: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

268 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

Denominaci6n Frecuencia (%) Coeficiente (por mil)

Poblaciones que superan los 10000 habitantes.

BARACALDO 2.0521 0.956 SES TAO 1.1410 0.595 PORTUGALETE 1.1111 0.565

Poblaciones de 5000 a 10000 habitantes.

LEQUEITIO 3.8057 1.126 GALDACANO 2.3188 1.015 ONDARROA 2.9560 0.946 BERMEO 1.9886 0.927 DURANGO 1.9892 0.883 ERANDIO 1.9838 0.837 S. SALVADOR D. V. 1.4021 0.683 BASAURI 1.5241 0.672 SANTURCE 1.3991 0.583 ORTUELLA 0.9583 0.379

Poblaciones de 3000 a 5000 habitantes.

ELORRIO 11. 7450 4.876 AXPE+ELORRIO 7.7079 3.328 MUNGUIA 4.1958 1.561 AMOREBIETA 3.1927 1.416 ALGORTA 2.4585 1.273 LEJONA 2.7005 1.202 GUERNICA 2.2041 1.122 GALDACANO 2.3182 1.016 ARRIGORRIAGA 2.7707 0.941 SOMORROSTRO+MUSQES 1.9425 0.825 ALONSOTEGUI 1.5764 o.769 ABANTO GALLARTA 1.2168 0.486 VALMASEDA 1.2154 0.443

Poblaciones de 1000 a 3000 habitantes

BERRIATUA 7.6696 3.687 BUSTURIA 7.6768 3.662 LEMONIZ 8.3333 3.630 LIBANO DE A. 7.4627 3.125 ARCENTALES 8.0357 2.999 RIGOITIA 6:6339 .. 2.956 IBARRURI 6.3536 2.892

Tabla XXVIII. Coeficiente de consanguinidad. Las villas de la Provincia seriadas en seis grupos por sus habitantes, se catalogan, en cada uno, atendiendo al gradiente del mismo (influjo decreciente de homocigosis).

Page 43: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

Denominación Frecuencia Coeficiente (por

Poblaciones de 1000 a 3000 habitantes (continúa) •

BOLIBAR 7.3801 2.883 ELANCHOVE 6.5693 2.851 IBARRANGUELUA 7.2917 2.821 ARTEAGA GAUTEGUIZ 5.9459 2.618 MUNDACA 4.2308 2.614 AULESTIA DE MUR. 6.5491 2.401 CEANURI 6.0026 2.355 ZALLA 4.3566 2.212 LEZAMA STA.MARIA 4.4872 2.103 MORGA 5.4496 2.086 GORDEJUELA 5.0251 2.002 DIMA 4.9255 1.987 CEBERIO 3.7453 1.970 ISPASTER 5.1471 1.838 GUEÑES 4.2644 1.832 DERIO 4.8469 1.794 SOPE LANA 3.4173 1.714 GATICA 3.6458 1.668 ABADIANO 3.7534 1.655 MARQUINA 4.0195 1.637 GORLIZ 3.9080 1.472 EA 3.3333 1.458 MUGICA 3.2646 1.423 LARRABEZUA 4.3548 1.411 LUJUA 3.1457 1.371 BE RANGO 3.0875 1.340 YURRE 2.5266 1.267 LEMONA 2.3988 1.265 TRUCIOS 2.2654 1.214 ZAMUDIO 3.5346 1.197 BERRIZ 3.0628 1.172 GUECHO 2.1352 1.149 LUNO 3.9900 1.130 OCHANDIANO 2.8398 1.109 GALDAMES 2.6519 1.088 OROZCO 3.1250 1.051 CASTILLO ELEJ. 2.3256 0.913 YURRETA 2.4359 0.901 ABANTO LAS CAR. 1.7370 0.853 LAMIACO l. 5552 0.850 PLENCIA 1.5175 0.640 MIRAVALLES 1.9769 0.618 VILLARO 2.4024 0.617 LABALUGA 1.3953 0.581 EL REGATO 2.8777 0.562 ERMUA l. 7173 0.516

269

mil)

Page 44: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

270 CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

Denominación Frecuencia Coeficiente (por mil)

Poblaciones de 500 a 1000 habitantes.

AEDO 8.0311 4.536 MAÑARIA 8.6957 3.668 CIERVANA 9.8837 3.361 BAQUIO 6.6298 3.280 BEDARONA 11. 7647 2.987 BIAÑEZ 6.1662 2.890 AMOR OTO 6.0185 2.821 LARRAURI 6.9388 2.806 ARBACEGUI 6.9565 2.785 LAUQUINIZ 5.4622 2.626 FRUNIZ 7.4627 2.565 O LAR TE 6.6667 2.557 CORTEZUBI 5.2434 2.458 EREÑO 5.2288 2.451 MENDATA 5.5000 2.031 NAVARNIZ 3.1818 1.989 ECHEVARRIA 4.4521 1.873 GAMIZ 5.2174 1.812 ZARATAMO 3.3994 1.726 MALLAVIA 3.7879 1.657 ARRAZUA 3.9634 1.658 MEÑACA 4.6693 1.641 MARURI 4.3636 1.591 BARRICA 3.1579 1.563 POBEÑA 3.3755 1.450 URDULIZ 2.9661 1.423 LA CUADRA 2.1605 1.254 ZALDIVAR 3.6923 1.250 NACHITUA 2.3148 1.194 ALBONIGA 2.4236 1.120 MURUETA O. 2.1898 1.026 LANESTOSA 3.0303 1.026 FORUA 1.4354 0.897 BEDIA 2.5692 0.897 BARINAGA 2.8571 0.893 AJANGUIZ 4.0650 0.889 SONDICA 2.2876 0.791 MERCADILLO SOP. 1.5000 0.781 LA ARBOLEDA 1.3699 0.730 TRASLAVIÑA 1.4925 0.700 ECHAN O 1.6694 0.678 SODUPE 1.2222 0.623 ECHEVARRI 1.5314 0.622 ALBIZU ELEXAGA 0.9009 0.141

Page 45: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

Denominación Frecuencia Coeficiente

Poblaciones inferiores a 500 habitantes.

AVELLANEDA 2.3810 0.744 A CORDA 2.4194 0.756 CAN ALA 1.1364 0.710 IZURZA 2.5862 0.673 LA CALERA 3.3333 0.520 MATIENZO 2.8986 0.453 MARZAN A 0.6803 0.213 GARAY 1.2500 0.195 OCHARAN 0.9346 0.146 APATAMONASTERIO 0.0000 0.000 GAVICA 0.0000 0.000 SAN PELAYO DE B. 0.0000 0.000 SANTECILLA 17.2414 6.465 PANDO 9.7561 5.716 LANZAS AGUDAS 10.5263 5.140 MENDEJA 8.3916 4.917 CARRANZA S. E. 8.0000 4.750 ALDEACUEVA 10.7843 4.595 AMALLOA 7.6923 4.293 LAUCARIZ 7.6087 4.246 GUIZABURUAGA 10.4762 4.167 PRESA 10. 7143 3.348 ARRAZ OLA 5.9701 3.299 URIGOITI 2.5000 3.125 ARACALDO 4.5977 3.053 SAN CIPRIAN 4.5455 2.841 GOICOURIA 6.0606 2.841 RANERO 8.0000 2.708 SOSCAÑO 5.4878 2.668 BERNAGOITIA 6.5574 2.561 SANGRICES 6.6667 2.530 FICA 8.0000 2.422 CENARRUZA 6.2937 2.404 IRATZAGORRIA 7.6271 2.383 GOROCICA 4.1916 2.339 GUERRICAIZ 6.4516 2.318 LABARRIETA 4.9296 2.311 BERNALES 5.4054 2.111 ARRANCUDIAGA 3.4884 1.877 SIERRA 4.5455 l. 775 ZOLLO 3.4014 1.701 MURUETA DE G. 2.3256 1.575 ZALDU 2.5000 1.562 ALBIZ DE M. 3.0769 1.322 ARANZAZU 3.2520 1.270 GUERENA 2.9851 1.166 BECI 3.0000 1.109 MONTE LLANO 2.7778 1.085 UBIDEA 4.5977 1.077 CARRAL 3.1915 0.997 LA HERRERA 2.2346 0.960 PEDERNALES 2.2727 0.888

271

{por mil)

Page 46: LA CONSANGUINIDAD EN VIZCAYA Y SU CAPITAL DE 1918 A 1966

272

AÑOS M.C.

1918 10 1919 26 1920 32 1921 22 1922 25 1923 15 1924 26 1925 28 1926 25 1927 23 1928 11 1929 30 1930 23 1931 24 1932 21 1933 1934 1935 1936 1937 1938 1939 1940 1941 1942 1943 1944 1945 1946 1947 1948 1949 1950 1951 1952 1953 1954 1955 1956 1957 1958

16 23 10

5 1 4

11 20 24 19 20 15 21

9 20 21 14 18 13 27 15 20 25 26 21 38

1959 24 1960 22 1961 31

T.S.

1 1

2 1 2

1 1 1 1 3

1

1

1

1 1 2

1

2

3 1

2 1 2 1

1

1962 19 1 1963 35 1964 25 1965 33 1 1966 26 1

TOTAL 1012 38

P.H.

4 16 16

6 17 11 18 20 16 19

6 20 18 11 11 12 16

4 3

3 4

13 13 13

9 9

11 7

13 12

6 11

8 17

7 12 10 15 11 15 14 10 10 13 14 13 11 11

559

P.S.

4 8

11 9 4 1 5 6 7 2 1 6 4 9 7 3 5 3 1 1 1 5 3 7 4 8 5 6 1 6 4 3 3 4 7 4 5 9 9 9

14 6 9

14 3

17 10 19 13

305

CLAUDIO ZUDAIRE HUARTE

t.s.

1 1 5 5 3 1 3 1 1 1 3 1 1 4 2 1 1 3

1 3 2 2 2 1 2 1 1 5 2 3 1 1 3 1 5 2 1 8 4 3 7 2 4 2 2 1

110

T.M. Abs. T.S. P.H. P.S. t.s.

901 1.1099 0.1110 0.4440 0.4440 0.1110 1278 2.0344 0.0782 1.2520 0.6260 0.0782 1211 2.6424 1.3212 0.9083 0.4129 1258 1.7488 0.1590 0.4769 0.7154 0.3975 1126 2.2202 0.0888 1.5098 0.3552 0.2664 1099 1.3649 0.1820 1.0009 0.0910 0.0910 1047 2.4833 1.7192 0.4776 0.2865 1134 2.4691 0.0882 1.7637 0.5291 0.0882 1112 2.2482 0.0899 1.4388 0.6295 0.0899 1134 2.0282 0.0882 1.6755 0.1764 0.0882 1139 0.9658 0.0878 0.5268 0.0878 0.2634 1173 2.5575 0.2558 1.7050 0.5115 0.0853 1252 1.8371 1.4377 0.3195 0.0799 1250 1.9200 0.8800 0.7200 0.3200 1026 2.0468 0.0975 1.0721 0.6823 0.1949 1032 1.5504 1.1628 0.2907 0.0969 1027 2.2395 0.0974 1.5579 0.4869 0.0974 1007 0.9930 0.3972 0.2979 0.2979

783 0.6386 0.1277 0.3831 0.1277 520 0.1923 609 0.6568 0.4926

1085 1.0138 0.0922 0.3687 1622 1.2330 0.0617 0.8015 1506 1.5936 0.1328 0.8632 1442 1.3176 0.9015 1328 1.5060 0.0753 0.6777 1319 1.1372 0.6823 1326 1.5837 0.1508 0.8296 1420 0.6338 0.4930 1447 1.3822 0.8984 1480 1.4189 0.8108 1355 1.0332 0.2214 0.4428 1446 1.2448 0.0692 0.7607 1494 0.8701 0.5355 1548 1.7442 0.1292 1.0982 1564 0.9591 0.0639 0.4476 1850 1.0811 0.1081 0.6486 1936 1.2913 0.0517 0.5165 2437 1.0669 0.6155 2253 0.9321 0.4882 2327 1.6330 0.0430 0.6446

0.1923 0.1642 0.4608 0.0922 0.1850 0.1850 0.4648 0.1328 0.2774 0.1387 0.6024 0.1506 0.3791 0.0758 0.4525 0.1508 0.0704 0.0704 0.4147 0.0691 0.2703 0.3378 0.2214 0.1476 0.2075 0.2075 0.2677 0.0669 0.4522 0.0646 0.2558 0.1918 0.2703 0.0541 0.4649 0.2583 0.3693 0.0821 0.3995 0.0444 0.6016 0.3438

2456 o.9772 o .. 5700 0.2443 0.1629 2148 1.0242 0.4655 0.4190 0.1397 2354 1.3169 0.4248 0.5947 0.2974 2355 0.8068 0.0425 0.5520 0.1274 0.0849 2480 1.4113 0.5645 0.6855 0.1613 2453 1.0192 0.5300 0.4077 0.0815 2375 1.3895 0.0421 0.4632 0.8000 0.0842 2388 1.0888 0.0419 0.4606 0.5444 0.0419

73312 1.3804 0.0518 0.7625 0.4160 0.1500

Tabla XIX. Bilbao. Suma total, frecuencia absoluta y por grados de matrimonios consanguí­neos y su evolución.