la anónima / año uno / número cuatro / octubre 2013

28

Upload: ser-sur-ediciones

Post on 22-Mar-2016

218 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

La Anónima es una revista poética bimestral que se declara autogestiva y colectiva. Completamente gratuita nació en la Escuela de Música Popular de Avellaneda ante la falta de un espacio creativo donde todos puedan compartir y aprender la otra música, la de las letras. A diferencia de otras publicaciones, la Anónima no selecciona por gusto o calidad, todo el material recibido se publica. Además de la diversidad de los escritos, la revista cuenta con una tira cómica, una sección de recomendaciones subjetivas realizada por los lectores y una partitura con su audio correspondiente. La convocatoria para recibir material, sugerencias, criticas y otras cuestiones esta siempre abierta, podés escribirnos a [email protected] Podés conseguir tu ejemplar impreso en la Biblioteca de la EMPA o visitar los siguientes sitios para leer, difundir y compartir la edición digital: facebook.com/revistalaanonima sersurediciones.blogspot.com La Anónima no es de nadie, es de todos

TRANSCRIPT

Page 1: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013
Page 2: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Falsa editorial

Busca y mira el recuerdo que trazan todas las luces, son ancestros que ofrecen luz para sembrar. Abre tu tierra al fin. Crece sabiendo amar, muere sin dudar.Cruza el abismo del hombre y lame la piel cuarteada.Ve

Coordinación y malabares por Matías Ciccolella

Asistencia de amor y arte por Lucrecia Girerd

Despliego de ideas y centro de cómputos por Flavius Volátil

Edición y arte de tapa por Ser Sur Edicionessersurediciones.blogspot.com Contacto revistalaanó[email protected]

1

mas allá de las mentes y vence los miedos de siglos.Viaja a través de ti, quiebra tus males, hunde tu ser al barro. Deja partir la sal y bebe de la cruz azul. Vierte tu mar en otro.

Page 3: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Paisaje Urbano #1

Mientras financio mi muertea plazo fijo del tabaco,un pájaro se desploma en la tormenta.

Millones de luces intentan abrirse pasoen una encrucijada sin semáforos.

Buscan volver adonde no recuerdan:paisajes de arrabalen la nostalgia del alma.

Alguien se pierde en el crepúsculo.Otro, encuentra la trascendenciaal amparo de las sábanas.

Un tercero, lee los versos malditosde un poeta francés,pensando en las maravillasde la reproducción técnica.

Un ángel caeflechado a bocinazos.

Olvidamos.Recordamos,con el simple gusto de volver a olvidar.

Pasajes incompletos de la memoria involuntaria.

Y todo se escapa,como el aguapor el alcantarillado público.

Y así el tiempo nos recuerda,en su pendencia de Domingo,al poder plenipotenciariode un monarca perdido.

Juan Martín Vidal / Constitución, Buenos Aires / poeta / [email protected]

2

Page 4: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Paradojas.

Noches azules para dos,cielos muertos de Montevideo,y un millar de fotos naciendo en sepia.

El imán de la brújula indica rumbos dispares,viento sur huracanadoy un viento norte enciende deseos imposibles.

Los pinceles de Mirópintan destinos surrealistas,las sombras siempre están.

Paradojas aladas,mil colores que ocultan miedos,y tanto amor para un vacío insaciable.

Gabriela Rivero / Ushuaia / docente / gabrielariveroautora.blogspot.com.ar

////////////////////

Una luna sola.

Lloro todo su mar,el silencio la escucha...y deja de penar.Y al alba se dejórozar por el sol,que la abrazó fuerte…con su cálido rayo.Una luna sola,salió a rodar...vestida de blanco...bajo las estrellas.Hasta que la alcanzó su amor,un astro gigante...que en sus ojos se vió.Dónde vas luna sola?,todo el cielo nuestro es...No estés dormida,una flor despertaré. Hace mucho tiempoque te quiero encontrar...y hoy ya no eres sola...mi luna de papel.

Roberto Ayala / músico / poeta / [email protected]

3

Page 5: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

4

Largos caballos

Se alejan los caballos largosa galope cristal

tan pálidos sus cascos sorprenden

y las fauces marchitasbabean un ansia

de rocíos

Son ciegos corceles de la lunadesconocen fechas y rediles

solo atienden a la música que ronda

esa es su mejor guía

cuando fascinados por acentos cósmicostienden a extraviarsepersiguiendo diluvios

a la luzparecen nuevos

los desnudos caballos

de la luna

Albin Láinez / Luis Guillón, Buenos Aires / poeta / arlane-simbionte.blogspot.com.ar

Page 6: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Verde mujer verde en la lejanía

Ella clavó su mirada.Ni vos ni yo, todavía lo notamos.Ella observa y pide. Quizás pase mucho tiempo más así.Ni vos ni yo, todavía lo sabemos.

Está extrañada y no es la única.No mide su tristeza, porque entiende que ya TODO ESTÁ MEDIDO. YA TODO ESTÁ ME-DIDO. TODO ESTÁ MEDIDO. TODO. ESTÁ. MEDIDO.

Camina como de costumbre hasta ese sitio que la recibe,no sonríe, solo mira de costado. Pisa de costado –entre otras cosas–murmura,observa tímida y prepotente Es la maltrecha mujer que sugiere.De vez en cuando le tiende la mano la luna lunera,y siente despertar.Extasiada piensa en verde,sabe de cambios de estación y de frutos podridos.Consiente al cielo más que a la tierraY vive gracias a las tormentas eléctricas.

Yo me la cruzo de vez en cuando, y le digo:Verde cuando madura, ¡¡¡rojo!!!¡¡¡Es que quiero que me mire de frente!!! Pero no.Comprendo su defecto, sé que le resulta imposible.A veces pienso que si yo fuese ella, también miraría a la tierra de costado.Quisiera tanto que un día me suba a donde está,Y de poder elegir, no bajaría. Mientras tanto la contemplo, quizás sea yo la que algún día, mire desde allí arriba.

Martina Petersen Tou / Parque Patricios, Buenos Aires / bailarina / [email protected]

5

Page 7: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

6

Silencio rebelde

Nunca

Calles

Silencio

Rebelde

O sencillamente

El silencio tenebroso

Nos vencerá!

////////////////////

Conciencia sensible

Flaca, bésame con conciencia sensible

Rompe tus cadenas y las mías

Abraza la libertad,

Aproxímate a los cuadros memorables de

Algún pintor famoso.

Guarda la corona, extiende los brazos,

Conspira en el silencio

Que tal vez un solitario llamado como yo,

Nervioso como yo;

Te grite: Flaca, caminemos juntos con conciencia sensible.

Emilio Pino Salinas / poeta, escritor, comunicador alter-nativo, militante revolucionario / Villa de Cura, Estado Aragua, Venezuela / [email protected]

Page 8: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

7

Page 9: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

El tiempo

Cuerpo enredadoun pellizco de té blanco confunde cultos en hebras verdes una nada desmenuza y succiona el paso del tiempo crece son movimientos agigantados ilustraciones a mil columnas. Invisible serpentea, coqueteándonos para deslizarse nos deslizamos ciegos en él buscando algún después o un mientras tanto lógico e inasible. Triturador de esperas solidario auxilio un hoy apareciendo lentamente cuando todo está perdido los ecos repiten el tiempo cura. Quizá todo lo inunda, murmuro. Varias torres de cristal y hormigón donde se almacenan vidas agujas que desangran me desangro a veces relojes hambrientos y ricos banquetes el devenir es igual solo huellas en la arena. ¿Tripulantes de una súbita expedición?Incendio voraz tan extraño como uno mismo.El tiempo, ¿cuánto destiempo abarca lo que no es? Misticismos del fuego intentando armar contornosargumentos en ríos caudalosos.Fluir siempre frecuentas la misma imagen una elección iniciática esa decisión de ser aun cuando las carreteras horas se pierdan… Intempestivocomo el gramo de tu corazón ausente.

Claudia Ainchil / poeta y periodista / ainchilclaudia-poesia.blogspot.com/

8

Page 10: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Buen día

El niño, tras un profundo periodo de sueño, despierta. Torpemente se deja caer de la cama y gatea unos metros hasta acercarse a la puerta del cuarto. Después de un par de intentos logra ponerse de pie para salir de la habit-ación. Se dirige a la cocina con hambre, eso lo angustia hasta el llanto, y luego de unos segundos se calma para hacerse el desayuno. Mientras calienta el agua para el café y el pan se carboniza en la tostadora, va al baño a orinar y se pellizca, frente al espejo, unos granitos que asoman en su pómulo derecho. Recuerda que había dejado el agua calentándose en la hornalla y corre despavorido hacia la cocina a apagar el fuego y evitar que la pava se derrita, probablemente. Terminada la preparación del alimento se dispone, acomodado en la mesa del living, a comerlo. Mientras eso ocurre, se queja de los dolores que tiene cer-ca de las muelas del fondo de su boca, y considera que su barba está lo suficientemente larga como para propinarle a su rostro una prolija afeitada. Pero ya era hora de correr hacia el trabajo y no había tiempo suficiente para hacer tal cuidado a su aspecto en ese momento. Se viste apre-surado. Siente una molestia en la cintura mientras lucha con el pantalón para introducir uno de sus pies en la ab-ertura correcta. Sale a la calle. Enciende el auto que tanto trabajo le cuesta pagar. Putea a cuanto auto vecino le es necesario en el transcurso del viaje hacia la oficina. Mien-tras cumple con la jornada laboral siente como sus rodil-las lo matan. Quiere ir al baño a cada rato y, cuando va, se le hace intolerable el ardor que le implica en casi todo el cuerpo el tener que hacer algo tan natural como mear. Casi cumpliendo con la disposición horaria obligatoria, le disgusta sobremanera la estructura sintética que tiene en su boca a la que llaman dentadura. De regreso a casa, su compañera de vida, que recién llega de su último día de trabajo “después de tantos años”, prepara unos mates y se sientan en las reposeras a ver televisión y a recordar cuando sus hijos eran pequeños, como se han ido a otra ciudad a estudiar, han formado sus propias familias, y to-das esas cosas. La hora de la cena es sombría y distante, la comida fría, sin sabor, prácticamente sin sentido. No puede dejar de pensar en esa mujer que le ha regalado sus más preciados momentos. Luego de un té caliente, solitario, en su casa que le parece cada vez más inmensa, toma su bastón y se dirige al cuarto, lentamente, de pie a bastón a pie y se acuesta a morir.

Gonzalo Del Valle / Gualeguaychense en Constitución / estudiante de antropología y música / [email protected]

9

Page 11: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

10

Flores

Ahí va…Entre el viento va…Una pequeña esperanza y su vozCon eso alcanza…Atrás…Siempre algo queda atrás…Se lleva con ella la ultima florMañana veráSon los mismos caminosLos que hoy me alejanLos mismos sonidos…Los mismos aromas…La misma esperanza…Las calles, sus sombras,El sol, la arena…Los mismos sentidos…Tu luz y su andar…Con eso alcanza…

Maximiliano Villanueva / musico, artesano / otras-golondrinas.blogspot.com.ar/ [email protected]

////////////////////

Viajando de oeste a surcomprendoque voy cargada de estratosfera de perchas y recuerdos llevo a cuestas cien bufandaszapatos viejosfotos viejas señalespara transitar el viento viajo a un mundo que nunca termina el airecontamina los pañuelosque llevo en mis bolsillos en cada viajeabro más y másmis ojosveo a los que se fueron a los que hoy desfilancomo peces sin agua.

Ivana Szac / poeta / [email protected]

Page 12: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

A paso de Viento

Aquí en mi terrazaLas ropas yo tiendoTu huella persigoVientoYa casi te toco

Los demás que no me creanPero que te acaricio es ciertoEllos no fruncen bien el ceñoNo mientas porque casi te acaricioViento

Ya es sabido que te callasCuando ellos vienen tú te callasY te fugas y me dejasA una burla se asemeja

Y me creen mujer locaY entonces de mí huyenY luego en todo te aparecesAunque no te llameAunque no te bese

Igual vienes y me buscasViento, a pesar míoY yo te doy la espaldaÉsta. ¿La oyes?Y entonces tú me rozasY yo me escalofrientoPero ellos dos que no me creanSi otra vez yo te me inventoSi te sigo bien atento En tu eterna mudanza

¡Ah, Viento lisonjeroViajero de los tiemposJuro serte tan fiel!

Que conserven mis ropas, ellosPues ya no las necesito

Apenas yo dé un pasoMi terraza será cielo.Tú y yo seremos VientoY meceremos cada cosa.

Andrea Varchasky / música / actriz / [email protected]

11

Page 13: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Lejos la más cercana distancia

Despierto, me escucho y tiembloAúllo lejos muy profundoTe olvido, me planto y sigo mi sentidoDestello un augurio, sufro dentro tuyoMe enseño el camino adverso en los sueñosNo entiendo, lloro mientras cambian los cielosLa eternidad un miedo, el presente un desconciertoRecuerdo, me quiebro Libertad, una disonanciaLejos la más cercana distanciaAbrazo frío, un recuerdo marchitoDistancia la plegaria más exactaCompletamente inyectada en el destino de un enamo-radoAmor, una libertad eterna, presa de un sufrimiento ar-raigadoUn latifundio de nuestro cariño Voces corren por dentro de mi corazónY tu sonrisa me transitaY tus palomas me abriganSigo pensando en vos

Sebastián David / Parque Patricios, Buenos Aires / músico/[email protected]

////////////////////

oh si,este espacio

esta en blancopara que mandes tus publicidades y nos ayudes a mantener viva la poesía de

todos

escribinos arevistalaanó[email protected]

12

Page 14: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Ejercicio PlectroGuido Diciervo

[email protected]

Busca el audio de esta partitura en la edición digital o en los links de la última página

Page 15: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Ejercicio PlectroGuido Diciervo

[email protected]

Busca el audio de esta partitura en la edición digital o en los links de la última página

Page 16: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Recomendaciones subjetivas(las mismas son válidas para cualquier día del año ya sea bis-iesto o no, ninguna de ellas ha sido subsidiada)

Eppurse Muove

Así nacimos, creyendo en nosotros mismos, siguiendo el camino del corazón y sabiendo que de esta forma el destino nos prepararía cosas increíbles. Con esa fe y con muchas ganas, transitamos por el camino de la música, aprendiendo, probando, conociendo, ensayando, cambi-ando. Pero por sobre todas las cosas creciendo juntos, interactuando con otras diversas formas de arte, con or-ganizaciones sociales, siempre en la búsqueda que nos acompañó desde un principio: la identidad, la música. Con distintas influencias, Eppurse Muove mezcla los so-nidos de la tierra y construye sus letras como un grito a la desidia, al tedio, turbando al silencio y respetando sus pausas... el momento en que el hombre queda des-olado al descubrir la insignificancia que tiene en la tierra y el universo... es el punto exacto que nosotros elegimos para componer y comenzar a escribir nuestras historias de luchas, esperanzas y poesías... Esto somos, Eppurse Muove, somos nosotros, son nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros hijos, nuestros amigos, y cada una de esas tantas personas que crean, contagian, construyen y luchan, en estos tiempos siempre difíciles que nos toca vivir y que, a pesar de todo, sin embargo se mueven...

eppurse.blogspot.com.arfacebook.com/eppursemuovemusica

Envía tus subjetividades a [email protected]

15

Page 17: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

16

Page 18: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

17

Volver a leer

¿Qué tal amigos de La Anónima? A partir de este número y en lo sucesivo estaré publicando en esta sección una se-rie de consejos que espero puedan sernos útiles a la hora de generar un texto o de publicar nuestros escritos.El primero de ellos es, justamente como el título lo in-dica, volver a leer.Muchas veces nos pasa que abrimos una revista, un fan-zine o por qué no un diario o un libro y salta a nuestra vista un error garrafal y nos preguntamos ¿cómo es que nadie se dio cuenta de semejante barbaridad? Suele suceder. Generalmente los equívocos más gruesos aparecen porque en el afán de terminar o de mandar a tiempo un trabajo, ni bien pusimos el punto final, lo guardamos y sin siquiera pegarle una mínima hojeada, lo enviamos. No es de extrañar que en un montón de casos haya erratas que hasta el más incauto se puede dar cuenta. Aberraciones que el mismísimo word nos marcaría con una rayita roja abajo.Es muy importante, después de escribir y antes de en-viar un texto a cualquier lugar (así sea a un amigo) volver a leer lo escrito. Es altamente recomendable una lectura minuciosa de cada palabra del escrito, sobre todo si está en proceso de impresión. Bajo ningún punto de vista es una pérdida de tiempo hacerlo. Muchas veces, por dar por hechas las cosas se nos escapan las faltas más notorias.Si bien ese es el vicio más común, el de no corregir por escasez de tiempo, no es el único. Otro de los problemas que nos suelen acuciar está más bien relacionado con el ego de cada autor. No es de ex-trañar que a más de uno le pase o le pasó que se haya “en-amorado de su obra” de tal manera que imposible le sea considerarla sujeta a cambio alguno. Es habitual creer en la fantasía de la originalidad, la genialidad, la inspiración y otros tantos demonios con los que nos conformamos por pura holgazanería. Es una gran mentira. No hay es-crito que no pueda ser puesto en tela de juicio y ser hecho y rehecho cuantas veces sea necesario. No hay obra en el mundo que revista carácter de definitiva. Es muy difícil, pero hay que hacerlo. En algún momento de nuestra labor hay que perderle el celo a lo escrito y darlo a que otras manos se posen sobre su cuerpo. Es necesario y sano.Pero no solo prestarlo y que sea otro quien lo toque. Sino también cada uno hacer lo propio con el suyo todas las veces que sea posible. Releer un texto es interrogarlo, preguntarle acerca de su sentido y su valor. Justamente, si puede responder es porque puede mutar. Si se queda estático, uniforme y firme para siempre es probable que muchas respuestas no tenga.Por eso se recomienda leer varias veces el escrito. Tanto por su parte formal, visible, como por su costado profun-do. La corrección no es un detalle menor que hay que ob-viar o menospreciar. Por el contrario es parte del proceso de escritura y en muchos casos es la escritura misma.

Gito Minore / [email protected]

-----------------------------

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

--------------------------------------------------------------------------------------------

Page 19: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

18

Si el suelo de tu huella puede saltar hacia delante,entonces por qué no vamos a poder escucharlos hablar.Si de todos modos, calla el que quiere callar. Sin girar la mirada, siquiera una pestaña,creo ver por la hendidura de esas llaves ermitañas. No escuches esas voces, las que te tiran al piso. No atiendas esas llamadas que suenan tan pesadas. Casi sin oír y sin mirar, pero siempre gritando,hasta que lleguemos a flotar con nuestros pulmones a punto de estallar. Solo ahí podré ver si mi plan funcionaba,y sabiendo que el esfuerzo nunca es en vano.

LizzBeth / Remedios de Escalada, Buenos Aires / artista y poeta / [email protected]

////////////////////

Duerme Conmigo

Ven duerme conmigobajo la noche líquida,bajo los brazosnegros de un árbol,respirando el follajeverde del cielo,oyendo cantaral fruto prohibido.Alas en vuelode un beso sin plumas,el mismo que lejosnos llevará más lejos del cielo.Ven duerme conmigopara fundir tu cuerpocon el mío, hastala luz del alba,y así el mundo escucharáun sueño en voz alta.

Diego Iván Ramón López / Oaxaca, México / escritor / [email protected]

Page 20: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

El poeta y su pipa

Oh Ana, con amor siempre Ana. Te fuiste a la mañana, dí mil vueltas en la cama, herida que no sana, como un cuchillo me rebana.Y el color de nuestra flor se expande como un círculo gigante, le pido al sol que te ablandes y tu corazón me demande.Siempre fuímos muy sinceros y aclaramos desde cero. Ni te amo, ni te espero, y si yo quiero, no te veo. Pero ahora algo a acontecido, estoy arrepentido, dolido, en-tristecido y compungido.

Oh jazz, jazz, jazz. Música que odiás, sonidos comple-jos, para un vínculo complejo. Que me alejo y te dejo, te deseo y no te veo, te creo pero niego.

Yo recuerdo aquella fiesta, te noté un poco molesta, cuando dije mi propuesta.

Susurré despacio.

Hoy me voy con Julieta y vos te vas con Ignacio.

Con calor recuerdo, la pasión de un invierno. Me rendía a tus besos - el infierno - . Me perdía en tus ojos - El Infierno -. Yo caía en tus brazos – ¡el InFiErnO! -. Adoraba tu cuerpo - ¡eL INFiErNO! - . Escuchaba tu voz – ¡EL INFIERNO!

Dulces, regalos, bombones, helados. No logro volver a traerte a mi lado. Quiero que sepas que sí alguien se aleja, el espejo refleja lo que la ausencia deja. Se ha equivocado el destino sagrado, a destrozado la suerte de dos enamorados.

Abrimos la puerta del amor libre, y un horrible eclipse que hasta el alma destiñe, se acercó augurando lo que la intuición ya estaba anunciando.

Dormís en la cama de un romance incierto, agitás los brazos en un cruel desierto. Y no estás soñando, estás bien despierto.

19

Page 21: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Posmodernos, pero tiernos. Enfermos de los cuernos. Corazón rengo, sos todo lo que tengo. Te advierto que ahora vengo, y ya no me detengo.

Ana, he pensado estas semanas. Te deseo en la aurora y te quiero para mí, sola o mi estructura se inmola contra una inmensa ola.

Yo propongo: Abandonemos esta infamia, demos bien-venida a la vieja y querida monogamia.

Adiestradores de Moscas / Agrupación misteriosa de aún más misteriosos intereses / adiestrandomoscas.com.ar / facebook.com/soyadiestrador / [email protected]

////////////////////

Entremos a la mansiónla mansión erectaatravesada por venasmientras el poema hacesu estriptís de carne,expiación;pero lo más importante,el amuleto en la cartera de la prostitutamuerta;la cartera es parte de su cuerpo,el amuleto revierte los valores,como un eclipse en la jeta travesti;y toda palabra, toda miradaes un reflectorsobre la escena del crimen;una plaza,una prostituta sonriendo,una cartera de piel humanaque se erizay un auto que frenaen los márgenes del poemadonde la sordidez y la violenciason la intravenosade un amor de verano.

Axel Alfaro /Villa Ortúzar, Buenos Aires / poeta

20

Page 22: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

21

Page 23: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

22

Esta fabulosa tira pertenece al dibujante Juan Panno,podes ver sus fabulosidades en juanno.blogspot.com

Page 24: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

A July Belén

Belén donde todos buscanPero pocos llegan,Y a casa retornan con historias vividas en el corazón.

No hay quien no aprendaLo que debía saber.Ni quien cure su enfermedaden la estadía de tu tierra.

Se tornan en niñoslos sabios cristospara ver el sol como es en realidad.Ya vacíos de su egoResucitan su verdad.

Perdonan mis pies suciosLa grandeza de tu corazón.Tierra donde todos buscanPero pocos llegan.Ahí está el ansiado sol.

En silencio se dice tu nombrePara que lo bello El mal no lo encuentre,Y haga de ti un lugar másEn este oscuro mundo sin razón.

Chensky

23

Page 25: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Burla III

¿Sabés? porque las burlas son imparesse acovachan desde los árboles y respiran agitadas.son {aves vibrantes}.

una columna de luna oceánica#descomposición# del tiempoun buzo lanzándose (de espaldas) hacia el mar –olvidando– su condición de buzo y hasta su condición de paralele(piped)(l)o cuando las olas azotan,las piedras de los elephants marines (tropas) hacia elmar, olvidando su condimento roturación de pueblos otomanos.

ah, los niños arios patinan.[*vals*]

Nahuel Lanfranchini / José Marmol / músico, docente / [email protected]

////////////////////

Con el resplandor

Los pétalos rojosDébiles despojosDe una hermosa flor Detienen el vueloY caen al sueloCon el resplandor En los verdes brazosRompe en mil pedazosEl dulce color ¿Qué es este desvelo?Preguntas al cieloY ves el dolor Es la luna llenaQue desnuda hielaVelando de plata al Amor.

Vale / La Unión, Ezeiza / preceptora /cantante /[email protected]

24

Page 26: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

25

La víspera de lo rarosale a buscar el juegoque se pierde, que no encuentraen el pasado que pesa. El péndulo indica una direcciónpero si no quiere ir hacia allí…nadie podrá obligarlodespués de todo, es libre. Muerde el polvo entre sus sábanasmeditando lo vivido,siente renacer su espíritu,pero es tan fácil confundirse… Sus ojos rodean las paredesescaneando la pinturaesperando encontrar allílas respuestas incorrectas. Mejor simular una fortalezaaunque posiblemente esta no exista,que le permita resistirel embate de los sentimientos nocturnos. Y aunque olfatee el caminohay demasiada hierba huidiza,innumerables pájaros esquivosy miles de flores infinitamente atractivas. Se sabe rodeado.El verde ha invadido su pecho.Y sus manos, tan suyasquizás ahora también un poco de ella.

Ana Sofía Stamponi / San Cristóbal, Buenos Aires / cantante / [email protected]

Page 27: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013

Chau che

Chau che, nos vemos en el próximo número pero antes, algunas aclaraciones importantes que intentarán no aburrirte.

Recomendamos fervientemente abrir esta revista para apreciar el arte de tapa/contratapa realizado por Ser Sur Ediciones.

Si ya leíste este número no lo tires, ni lo guardes en un cajón, compartílo, regalalo, dejalo en un banco de plaza, dáselo a un desconocido o inventa.

Esta revista gratuita, se declara autogestiva y colectiva. Para mantenerla viva, es preciso regarla a diario y ver que no le falte sol.

Los escritos aquí publicados pertenecen a sus correspondientes autores, está prohibido su uso sin mencionarlos.

Los escritos de este número fueron corregidos, arreglados y/o diagramados según las exigencias de sus autores y el espacio disponible. Algunos signos de puntuación fueron añadidos o suprimidos según la lógica del escrito. Se pide disculpas por errores, fallas o correcciones innecesarias.

Todo el material recibido será publicado en el próximo núme-ro. No hay selecciones por “calidad” o gusto.

Agradecemos el apoyo y la motivación del Ceempa, de la Co-operadora Aníbal Arias, de la EMPA y de las anónimas y anón-imos que colaboraron de alguna forma.

Un aplauso por el aporte desinteresado del dibujante Juan Panno.

Otro aplauso para la Biblioteca de la EMPA que se toma las molestias de distribuir y difundir la revista.

Y una ovación para Adriana Hernández y Javier Marincovich por el espacio cedido para crear e imprimir y también para Juan Carlos Cicolella por su corrección veloz.

La convocatoria esta abierta las 24 hs. El cierre del próximo número es el 15 de Noviembre, enviá tus escritos, propuestas, sugerencias y/o reclamos, con nombre completo o seudónimo, profesión o vocación y mail a [email protected].

Descarga, visita y compartí en facebook.com/revistalaanonima o en sersurediciones.blogspot.com.

La Anónima no es de nadie, es de todos.

26

Page 28: La Anónima / Año uno / Número cuatro / Octubre 2013