la actitud después de la revelación -...

3
La Actitud Después De La Revelación Hermano Carlos Monterroso Guatemala, 6 de febrero del Año De La Revelación www.ebenezer.org.gt 1 Hablar de familias no es sencillo sobre todo cuando contamos con una y los tenemos frente a nosotros al momento de exponer la palabra, por ello es que no podemos hablar de algo que no hemos vivido. Ahora bien, siguiendo las enseñanzas que últimamente hemos recibido, sabemos que necesitamos revelación para poder vivir en familia. Mateo 10:26-27 (LBLA) Así que no les temáis, porque nada hay encubierto que no haya de ser revelado, ni oculto que no haya de saberse. 27 Lo que os digo en la oscuridad, habladlo en la luz; y lo que oís al oído, proclamadlo desde las azoteas. De acuerdo a este pasaje, entendemos que es necesaria la revelación del Señor para que descubramos cosas dentro de nuestra familia para que sean restauradas, y podamos ser arrebatados en familia. Tal vez nos hemos dado por vencidos para proseguir en el camino de la santidad, pues no podemos permanecer en él, pero la revelación de Dios hará que estemos firmes en este camino y podamos llegar a la meta, que es ser arrebatados. Posiblemente, en casa hay cosas ocultas que no nos decimos unos a otros, podemos pedir revelación de Dios para saber qué hacen nuestros hijos, qué piensan, por qué cosas o personas están siendo oprimidos. Por eso los esposos necesitamos revelación del Señor para saber quién es nuestra esposa para el Señor, saber que es una princesa de Él y como tal debemos tratarla. Apocalipsis 1:1 (LBLA) La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la dio a conocer, enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan, Vemos en este versículo que la hay una relación directa entre la revelación y el dar. La palabra dio viene de G1325 didomi, que significa aventurarse, dar, entregar. Esto nos dice que Dios se aventuró al darnos a su Hijo, para venir a cumplir con el propósito de la salvación de nuestras almas. Ahora veremos algunas actitudes de familias que tuvieron revelación: El padre del hijo pródigo de alguna manera supo que su hijo regresaría, por ello el hermano mayor no pudo entender por qué el padre esperaba todos los días que su hijo regresara (Lucas 15:20). Rebeca también tuvo revelación de quién era el que le salió al encuentro, supo que era el hombre del que le habían hablado y con el cual se casaría (Génesis 24:65-66). Esto nos indica que necesitamos revelación para saber quién es nuestro conyugue, pues puede ser una persona que Dios usará para salvar una nación, y a nosotros se nos da el privilegio de restaurarla para que cumpla con su propósito delante del Señor. José tuvo revelación del Señor para no dejar a María (Mateo 1:19-24). A continuación algunas familias que no tenían revelación: Los hermanos de José, no tuvieron la misma revelación de su hermano menor, pues no sabían el propósito de Dios para su hermano. No debemos permitir que el enemigo nos engañe para no permitirle a nuestros hermanos tener otros hermanos.

Upload: lyquynh

Post on 08-Jul-2018

218 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

La Actitud Después De La Revelación Hermano Carlos Monterroso Guatemala, 6 de febrero del Año De La Revelación

www.ebenezer.org.gt

1

Hablar de familias no es sencillo sobre todo cuando contamos con una y los tenemos frente a nosotros al momento de exponer la palabra, por ello es que no podemos hablar de algo que no hemos vivido. Ahora bien, siguiendo las enseñanzas que últimamente hemos recibido, sabemos que necesitamos revelación para poder vivir en familia. Mateo 10:26-27 (LBLA) Así que no les temáis, porque nada hay encubierto que no haya de ser revelado, ni oculto que no haya de saberse. 27 Lo que os digo en la oscuridad, habladlo en la luz; y lo que oís al oído, proclamadlo desde las azoteas. De acuerdo a este pasaje, entendemos que es necesaria la revelación del Señor para que descubramos cosas dentro de nuestra familia para que sean restauradas, y podamos ser arrebatados en familia. Tal vez nos hemos dado por vencidos para proseguir en el camino de la santidad, pues no podemos permanecer en él, pero la revelación de Dios hará que estemos firmes en este camino y podamos llegar a la meta, que es ser arrebatados. Posiblemente, en casa hay cosas ocultas que no nos decimos unos a otros, podemos pedir revelación de Dios para saber qué hacen nuestros hijos, qué piensan, por qué cosas o personas están siendo oprimidos. Por eso los esposos necesitamos revelación del Señor para saber quién es nuestra esposa para el Señor, saber que es una princesa de Él y como tal debemos tratarla. Apocalipsis 1:1 (LBLA) La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la dio a conocer, enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan, Vemos en este versículo que la hay una relación directa entre la revelación y el dar. La palabra dio viene de G1325 didomi, que significa aventurarse, dar, entregar. Esto nos dice que Dios se aventuró al darnos a su Hijo, para venir a cumplir con el propósito de la salvación de nuestras almas. Ahora veremos algunas actitudes de familias que tuvieron revelación: El padre del hijo pródigo de alguna manera supo que su hijo regresaría, por ello el hermano mayor no pudo entender por qué el padre esperaba todos los días que su hijo regresara (Lucas 15:20). Rebeca también tuvo revelación de quién era el que le salió al encuentro, supo que era el hombre del que le habían hablado y con el cual se casaría (Génesis 24:65-66). Esto nos indica que necesitamos revelación para saber quién es nuestro conyugue, pues puede ser una persona que Dios usará para salvar una nación, y a nosotros se nos da el privilegio de restaurarla para que cumpla con su propósito delante del Señor. José tuvo revelación del Señor para no dejar a María (Mateo 1:19-24). A continuación algunas familias que no tenían revelación: Los hermanos de José, no tuvieron la misma revelación de su hermano menor, pues no sabían el propósito de Dios para su hermano. No debemos permitir que el enemigo nos engañe para no permitirle a nuestros hermanos tener otros hermanos.

La Actitud Después De La Revelación Hermano Carlos Monterroso Guatemala, 6 de febrero del Año De La Revelación

www.ebenezer.org.gt

2

Jacob tampoco tuvo revelación pues sus hijos lo engañaron, permitió que no le dijeran la verdad de lo que sucedió con su hijo José. Agar no tuvo revelación cuando fue desechada de delante de su señora, y pensó que moriría en el desierto, pero todo cambió para ella y para su hijo cuando vino la revelación. El hermano del hijo pródigo no tuvo revelación, pues tenía celos de su hermano que se gastó su herencia. Saúl es otro personaje que quería mantenerse en el poder y quería que su hijo lo sucediera, pero no había entendido o no tuvo la revelación de quién lo debía suceder, era David. Esto nos dice que entre la familia puede haber competencia. Pero, para no pasar por esto, debemos tener la revelación de quienes somos y el llamado que nos ha hecho el Señor a cada uno, para no envidiar a los nuestros, o competir entre hermanos o entre padres e hijos. Dios trae Su revelación a nuestra vida pero espera que tomemos una acción derivada de ella, si en realidad entendemos la revelación que Dios nos da, debe haber un fruto de esto, es decir, que Dios espera que nosotros hablemos de lo que nos fue revelado para salvación de los demás. Mateo 25:29 (LBLA) Porque a todo el que tiene, más se le dará, y tendrá en abundancia; pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. Según el conocimiento general, si no tenemos nada, no nos pueden quitar nada. La palabra tiene viene de G2192 echo que significa acompañar, concebir. La revelación tiene el fin de concebir en nosotros y un día dar a luz el propósito que puso en nosotros. La palabra quitará del G142 airó significa poner en suspenso, nos habla de que es muy importante que pongamos a trabajar lo que nos ha dado el Señor, es decir, que no debemos ponerlo en suspenso. De cada revelación que Dios nos da, Él espera un producto o resultado, y cuando el Señor ve ese fruto, se agrada y entonces da una revelación mayor. De esta revelación mayor, se da un fruto mayor, lo cual nos llevará a una espiral virtuosa donde la revelación es mayor cada vez, porque el fruto también lo es. Ahora bien, cuando en una persona no hay un fruto de la revelación, aún la revelación que se le dio, le es quitada y le es dada el que si dio un fruto agradable de la revelación. Esta es una muy buena explicación del versículo que acabamos de leer. Lucas 12:48 (LBLA) …pero el que no la sabía, e hizo cosas que merecían castigo, será azotado poco. A todo el que se le haya dado mucho, mucho se demandará de él; y al que mucho le han confiado, más le exigirán. Necesitamos que nos den mucho para que tengamos más probabilidades de dar fruto agradable. Dios va traer revelación a nuestra casa para que demos frutos y seamos restaurados, esto lo debemos compartir para que otros también sean restaurados, también tengan revelación y den frutos. Los primeros a quienes debemos compartir la revelación es a nuestros hijos, debemos hablarles de las cosas grandes que Dios ha hecho con nosotros, sus padres, para que ellos vean el Dios grande en el que creemos, para que tengan la oportunidad de ser salvos y obtener también revelación.

La Actitud Después De La Revelación Hermano Carlos Monterroso Guatemala, 6 de febrero del Año De La Revelación

www.ebenezer.org.gt

3

De la misma forma que los judíos bendicen a sus hijos todas las semanas, así debemos bendecirlos mucho más también para que puedan subirse en nuestros hombros y hagan cosas más grandes que nosotros. Debemos pedirle al Señor que nos revele quiénes son nuestros hijos, para poder ministrarlos y que lleguen a ser quien el Señor nos revele. También las esposas de aquellos que saben que llegarán a ser ministros del Señor, tienen una participación, por lo que también debemos pedir revelación de quiénes somos y quienes son ellas para poder contribuir a su crecimiento y desarrollo espiritual, y puedan cumplir con su función en la obra de Dios. Lucas 6:38 (LBLA) Dad, y os será dado; medida buena, apretada, remecida y rebosante, vaciarán en vuestro regazo. Porque con la medida con que midáis, se os volverá a medir. Esta es la medida en que Dios quiere darnos, de acuerdo a como le demos, pero esto también es una revelación del Señor. Proverbios 4:18 (LBLA) Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va aumentando en resplandor hasta que es pleno día. No nos podemos conformar con la revelación que tuvimos en el pasado, aún la que tuvimos hoy posiblemente, sino debemos pedir revelación en cada momento de nuestra vida, para poder vivir de acuerdo a la voluntad de Dios. En la medida en que vayamos avanzando en la revelación que nos da el Señor, en esa medida el Señor protegerá a los nuestros, porque podremos saber los peligros a los cuales están enfrentándose y podemos clamar por ellos.