josué y jueces - amazon simple storage service · el reino del norte había sido destruido en 722...

Josué y Jueces

Entrando a la tierra prometida

Espiral en descenso

B A P T I S T WAY

Estudios Bíblicos

Transformadores

ESTUDIOS BÍBLICOS

TRANSFORMADORES

Josué y JuecesEntrando a la Tierra Prometida

Espiral en Descenso

Escritores del Comentario BíblicoDavid Tamez: Lecciones 1-4

Armando de la Garza: Lecciones 5-6Jonathan Hernandez: Lecciones 7-10

Sandra Cisneros: Lecciones 11-13Juan de la Garza: Comentario y Plan de Enseñanza

Cuerpo de ProducciónJavier Elizondo

Juan Tovías

Asistentes de RedacciónElizabett Puerta Mego

Copyright © 2006 por BaptistWay.Reservados todos los derechos.

Baptist General Convention of Texas, 333 NorthWashington, Dallas TX 75246-1798.

A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas son tomadas de la Versión Reina Valera, Revisión de 1960, propiedad de las Sociedades Bíblicas en América Latina.

Usadas con permiso.Primera edición: Marzo de 2006.

JOSUÉ Y JUECES: Entrando a la tierra prometida - Espiral en descenso

2

3


U N I D A D 1 : E N T R A N D O A L A T I E R R A P R O M E T I D A

Fecha de Estudio

LECCIÓN 1 ________ Cuando las cosas no son como eran antes (Josué 1) 5

LECCIÓN 2 ________ Dios y la gente imperfecta (Josué 2:1-14; 6:22-25) 11

LECCIÓN 3 ________ Cuando llegas a las orillas del agua (Josué 3:7-17; 4:15-24) 17

LECCIÓN 4 ________ El peligro de actuar sin Dios (Josué 7:1-12, 16-21) 23

LECCIÓN 5 ________ Dios da la victoria (Josué 9:3-15; 10-6-14, 40-42) 29

LECCIÓN 6 ________ Decide hoy servir al Señor (Josué 24-1-3a, 13-25) 35

U N I D A D 2 : E S P I R A L E N D E S C E N S O

LECCIÓN 7 ________ El espiral en descenso (Jueces 2:6-7, 11-19) 41

LECCIÓN 8 ________ Débora - profetisa, juez, esposa (Jueces 4:1-17, 21; 5:1-3, 12-13) 47

LECCIÓN 9 ________ Gedeón - luchando ante la incertidumbre (Jueces 6:7-18, 21-22, 36-40) 53

LECCIÓN 10 ______ Gedeón - dependiendo en los recursos de Dios (Jueces 7:2-8, 16-21) 59

LECCIÓN 11 ______ Abimelec - liderazgo indigno (Jueces 8:22-23; 8:22 - 9:15) 65

LECCIÓN 12 ______ Sansón - potencial desperdiciado (Jueces 13:1-7; 16:18-30) 71

LECCIÓN 13 ______ Un pueblo decae en pedazos (Jueces 17:1-6; 18:1; 19:1; 20:1-5; 21:25) 77

UNIDAD 1JOSUÉ: ENTRANDO A LA TIERRA PROMETIDA

El libro de Josué inicia con instrucciones de Dios para Josué quien sería el nuevo líder ya que Moisés había fallecido. El mandato del Señor es que Josué guiara al pueblo de Israel a cruzar el río Jordán y así entrar a la tierra prometida. (Josué 1:1). El libro concluye con Josué guiando al pueblo de Dios en una gran ceremonia de adoración renovando el pacto con Dios. Entre estos dos eventos, capítulos 1—12 describe la campaña militar por medio de la cual el ejército de Israel conquistó toda la tierra prometida. Los capítulos 13—22 nos hablan de la distribución de la tierra a las tribus de Israel repartidas a los dos lados del Jordán. El libro con-cluye con dos últimos capítulos 23—24, en los cuales Josué desafía al pueblo a seguir a Dios.

Las lecciones en este estudio pueden ser entendidas por si mismas. Sin embargo, podemos entenderlas mejor si reconocemos que el libro de Josué cabe en dos categorías de libros del Antiguo Testamento.

Josué entre los Profetas MayoresPrimero, el libro es el primero de una serie de libros que los hebreos llamaban Los Profetas. Los líderes judíos veían la Biblia Hebrea en tres divisiones mayores—la Ley, los Profetas, y los Escritos. La Ley consiste de los primeros cinco libros de la Biblia—Génesis, Éxodo, Levíticos, Números y Deuteronomio. Los Profetas consistían de los profetas mayores y profetas menores. Los profetas menores son los que nosotros llamamos libros proféticos—Isaías, Jeremías, y el resto de los profetas. Los profetas mayores incluían lo que nosotros llamamos los libros históricos—Josué, Jueces, 1ª y 2ª de Samuel, 1ª y 2ª de Reyes. Los profetas mayores fueron llamados “mayores” solo porque fueron colocados en la Biblia Hebrea antes que los profetas menores.

Israel consideró que los libros en Los Profetas Mayores y Menores eran necesarios para entender los eventos que sucedieron durante ese período de la historia que cubrió alrededor de 700 años.

Josué y La Historia DeutoronomicaLa segunda categoría en cual el libro de Josué cabe, enfoca más la necesidad de Israel de entender su historia. Como adoradores de Dios, Israel batallaba para comprender las cosas malas que les sucedían como nación. El Reino del Norte había sido destruido en 722 a.C. El Reino del Sur seria destruido y llevado en exilio en 587 a.C. Cuando el último libro de los Profetas Menores fue escrito, El Reino del Sur ya había sido destruido, véase (2ª de Reyes 25:1-12).

Seguidores genuinos de Dios miraban a su alrededor como la tragedia los agobiaba y se preguntaban que había pasado con el sueño visionario. Ellos encontraban respuesta al ver su historia como nación. La histo-ria demostraba que ellos se habían olvidado de Dios y como consecuencia podían ver con mayor claridad la visión de estos hebreos genuinos: el pecado acarrea castigo; obediencia trae bendición.

Estas ideas complementarias guiaron a los antiguos escritores hebreos, inspirados por Dios, a escribir lo que llamamos historia deuteronómica. Los Profetas Menores—los libros de Josué, Jueces, 1ª y 2ª de Samuel, y 1ª y 2ª de Reyes—consideran la historia de Israel desde este punto de vista teológico. El enfoque no es solo sobre eventos sino sobre el significado de estos eventos. El enfoque es particularmente lo que el evento ense-ñaba sobre el llamado de Dios para Israel y la respuesta del pueblo a través de los siglos.

Aprendiendo del libro de JosuéConforme usted estudia el libro de Josué, tenga en mente que una fuerte razón en el libro es que el evento que se estudia ayudó a Israel a entender como Dios los guiaba y como ellos respondían como pueblo. Esta men-ción del llamado de Dios a Israel suena claro y fuerte en el libro de Josué. Los hebreos obedecieron, más no siempre. Cuando Israel obedeció, Dios los bendijo; cuando desobedecían, Dios los castigaba.

Permitamos que el libro de Josué nos recuerde el llamado de Dios al compromiso. Lo que Pablo escribió de otros eventos del Antiguo Testamento declara que: “Estas cosas... se escribieron para nuestra instrucción.” (2ª de Corintios 10:11).

UNIDAD 1: Josué - Entrando a la tierra prometida

JOSUÉ Y JUECES: Entrando a la tierra prometida - Espiral en descenso 4

5

U N I D A D

1¿Quiénes? ¿Nosotros?

U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Lección 1

CUANDO LAS COSAS NO SON COMO ERAN ANTESCOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contexto El libro anterior al de Josué es el libro de Deuteronomio. El libro de Josué contiene cinco ideas que indican su conexión con el libro de Deuteronomio: guerra santa; distribución de la tierra; unidad de Israel; Josué como el sucesor de Moisés; y los pactos. Adicionalmente, Josué 1 introduce diferentes temas que se encuentran a través del libro de Josué. Algunos de los temas incluyen: Josué como el nuevo líder de Israel; el cruzamiento del Río Jordán; la conquista de la tierra; todo el pueblo de Israel, incluyendo las tribus que se asentaron al lado Este del Río Jordán; obediencia a los pactos; repartición de la tierra; y la tierra como regalo de parte de YHWH. (YHWH representa las cuatro consonantes hebreas del nombre personal de Dios revelado a Moisés, generalmente escritos como Yahweh y traducido al espa-ñol como El Señor). Después de presentar estos temas, el escritor del libro de Josué desarrolla cada tema a través del resto del libro.

El libro empieza con una nueva generación de israelitas enfrentando cambios mayores. Dios había nombrado a Josué como el sucesor de Moisés. La selección de Josué después de la muerte de Moisés demuestra que el Señor no dejará al pueblo escogido sin un líder divinamente nombrado, particularmente cuando las cosas no son como solían ser.

Los diálogos presentados en Josué 1:1-18 reflejan muchas ca- racterísticas de lo que es conocido como teología deuteronómica. Las bases de la teología deuteronómica muestran que la obe-diencia trae descanso y la rebelión trae muerte y destrucción. Por lo tanto, la historia completa de la historia deuteronómica está basada en el éxito de Israel y en la falla de obedecer al tora, las instrucciones de Dios. Las bendiciones resultan de la obediencia, y las maldiciones resultan de la rebelión. Josué 1:7 viene a ser un mandamiento clave en el libro de Josué y en la historia total deu-teronómica.

Enfocándose en el significado El cambio dentro de la iglesia es inevitable. Ministros vienen y van. Programas y necesidades del ministerio cambian. Comunidades sufren transiciones. El liderazgo deberá de trans-ferirse a una nueva generación. La iglesia puede exitosamente cruzar los puentes del cambio y entrar a la tierra prometida o per-manecer en el otro lado del Río Jordán.

Josué había servido a Moisés detrás del escenario por muchos años. Antes de que Josué se convirtiera en el líder, él había sido esclavo en Egipto. Josué probó su fidelidad en las cosas o tareas más pequeñas. Finalmente, Yahweh (Jehová) lo escogió para diri-gir a su pueblo hacia su herencia.

Parece que Dios usa aquellos que están preparados. Josué pri-

U N I D A D


U N I D A D

1Josué: Entrando a la

tierra prometida

Texto Focal: Josué 1

Trasfondo Bíblico: Josué 1

Enfoque Principal: Dios nos llama y desafía a responder positivamente aun cuando las circunstancias de la vida son cambiantes. Debemos estar concientes que Él nos acom-paña con su poderosa presencia.

Algo en que pensar¿Cómo se siente usted en situacio-nes de cambio?

Aplicación personalIdentificar maneras positivas para responder a situaciones de cam-bio basándose en las experiencias vividas por Josué.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase para que iden-tifique maneras positivas para responder a situaciones de cambio basándose en las experiencias vividas por Josué.

mero aprendió acerca del liderazgo como un siervo, y compartió el liderazgo una vez que él estuvo a cargo. Toda su vida meditó en la tora.

El pueblo de Dios necesita entender que Dios ya está en el proceso de conceder sus promesas. Algunas veces usted necesita aprender a vivir con las promesas de Dios antes de que se conviertan en realidad. Remueva las cortinas de la duda y aprenda a mirar a través de los ojos de la fe.

El entusiasmo es grande al comienzo de la tarea. La prueba verdadera viene al final de la experiencia. ¿Estará usted tan deseoso de obedecer mientras que el tiempo pasa?

La iglesia moderna continúa el trabajo de los apóstoles. La obediencia a las enseñanzas de Jesús y sus após-toles en un mundo cambiante forma la base del éxito. Así que, el libro de Josué provee un mensaje relevante para cada generación.

PLAN DE ENSEÑANZA - LECCIÓN Y PREGUNTAS

1. Antes de que la clase comience, escriba estas palabras en un pizarrón, o póster: “Dios nos llama a responder a circunstancias cambiantes con acciones valerosas, reconociendo que Dios está con nosotros”.

2. Usando “La introducción de Josué” de una corta lección describiendo el contexto de la lección de hoy. Lea en voz alta la idea principal. Refiérase al párrafo de introducción de la Guía de Estudio.

3. Pida a la clase que comparta ejemplos de cambio y retos que vemos en el mundo de hoy. Mientras ellos comparten, escriba las ideas en el pizarrón. Ore y pida a Dios que guíe a la clase a un entendimiento de cómo responder a los cambios y retos en el mundo de hoy.

Guía de Estudio Bíblico

4. Escriba en el pizarrón el siguiente bosquejo:

(1) Una ______________ designación para un nuevo _________________________. (2) ___________________ para un nuevo _________________________________. (3) Josué_______________ a Dios. (4) La_________________ afirmó a su ______________Líder.

5. Enliste a un voluntario para que lea Josué 1:1-4 en voz alta. Llene en las líneas del primer punto en el bosquejo y en el pizarrón con las palabras Nueva y Líder. Presente una corta lección usando la información de la Guía de Estudio relacionada con estos versículos.

6. Invite a un voluntario para que lea Josué 1:5-9. Llene en las líneas del punto dos en el bosquejo y en el pizarrón con las palabras Animo y Líder. Presente una corta lección usando los comentarios de la Guía de Estudio relacionados con estos versículos.

7. Pida a un voluntario que lea Josué 1:10-15. Llene en la línea del punto tres en el bosquejo y en el pizarrón Obedeció. Presente una corta lección usando la información en la Guía de Estudio relacionada con estos versículos. Luego pregunte, ¿Por qué ayuda el tener apoyo de parte de amigos cristianos cuando se enfrenta al temor?

8. Llame a un voluntario para que lea Josué 1:16-18. Llene en las líneas del punto cuatro en el bosquejo y en el pizarrón. Gente y Nuevo. Presente una corta lección usando los comentarios de la Guía de Estudio relacionados con estos versículos. Luego pregunte, ¿Cómo se relaciona la unidad con la efectividad de la iglesia que lucha con el cambio?

LECCIÓN 1: Cuando las cosas no son como eran antes.


Aplicación

9. Dirija a la clase para que mire a la lista en el pizarrón que fue hecha durante el paso 3. Pida retos adiciona-les que tratan con el cambio que enfrenta la iglesia. Escríbalos en el pizarrón junto con los demás. Anime a cada miembro a que se enfoque silenciosamente en uno o dos artículos enlistados. Permita tener un minuto en completo silencio para realizar éste enfoque. Luego, lea lentamente Josué 1:9 a la clase. Rete a la clase a que busque maneras positivas de responder al cambio en sus vidas y en la iglesia. Concluya con una oración.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónCuando el Señor por su gracia puso sus ojos en mí, y me llamó al ministerio, experimenté momentos de cam-bios radicales en mi vida y en la de mi familia. Fueron momentos de inestabilidad en los que fue necesario dejar el ejercicio de una profesión bien remunerada, dejar casa, familia, iglesia, amigos, cultura, etc. y venir a los Estados Unidos para obtener una preparación ministerial. Cuando el Señor me desafió, no fue nada fácil responder positivamente a su llamado. El pasar por momentos de incertidumbre y soledad fue en muchas ocasiones una experiencia frustrante, nada halagadora. En tres oportunidades estuvimos a punto de regresar a nuestra patria con nuestras maletas hechas. Mi oración a Dios en esos momentos fue: “Señor, la única razón de mi presencia en este país es el haber respondido a tu llamamiento para servirte.” Con lágrimas en los ojos recuerdo de mis diálogos con el Señor Jesús. “Estoy aquí con la única finalidad de obtener una mejor pre-paración para el servicio. Si me equivoqué al escuchar o discernir tu voz, por favor te ruego me perdones y listo estoy para regresar.” Vez tras vez, escuche su voz de afirmación indicándome que su voluntad era que continuara aquí.

Ciertamente los problemas y dificultades nunca estuvieron ausentes, pero mientras caminé con fe, siempre experimenté su gracia. La realidad de su presencia y la seguridad de haber escuchado con toda claridad su voz, fue lo que me sostuvo en la tarea. El saber que estaba obedeciendo solamente a Él, me fortalecía cada día para la lucha. En tiempos cambiantes, cargados de incertidumbre, cuando las cosas no son como debieran ser, seguir en obediencia sus instrucciones y tener el coraje y valor para continuar esforzadamente mientras cumplimos con nuestra tarea, nos asegurará la victoria.

La nueva tarea para el nuevo líder (1:1-4) La validez de la tarea radica en quien la ha asignado. Josué había experimentado la presencia, gracia y amor de Dios además de haber sido testigo presencial de los hechos portentosos de Jehová de los ejércitos, quien había sacado con brazo poderoso a su pueblo de la esclavitud en Egipto. Josué fue testigo ocular cuando el Todopoderoso abrió el mar rojo y el pueblo pasó en seco librándoles así del ejército de faraón, quien venía en persecución de los hijos de Dios, y muchos otros actos más de la demostración del poder y la gracia de Dios. Moisés, no está más con ellos, ha muerto, y el pueblo necesita un nuevo líder (Josué 1:1).

Dios está en control absoluto de todas las cosas. Que emocionante es saber que aunque las circunstancias puedan ser inestables, tenemos un Dios que está en control integral de todas las cosas, el rige y controla total-mente todo el universo. En tiempos cambiantes, Él está dando dirección, preparando las cosas y eventos en la historia, para bendición de sus hijos. La Biblia dice: “a los que aman a Dios todas las cosas les ayudan a bien.” Dios estaba tomando en sus propias manos la trayectoria de los asuntos de la vida del pueblo de Israel, dándole dirección. Él habló a Moisés instruyéndole para que delegara el cargo al nuevo líder que le suced-ería. Este acto seria hecho solemnemente en presencia del sacerdote Eleazar y el pueblo. Que emocionantes palabras se describen en la Biblia respecto a la experiencia personal de Josué con Dios. ¡Que gran realidad! La Biblia dice: “Jehová habló a Josué.” Dios habla, esa es la verdad, allí es donde empieza la validez de todo liderazgo. Un llamado personal. Dios habló a su siervo y le dio instrucciones específicas. Debía tomar la ini-ciativa, levantarse y tomar acción.

El Dr. Charles A. Tidwell dice que un líder es aquel que sabe guiar a un grupo hacia el cumplimiento de sus objetivos y realización de su propósito haciendo el mejor uso de los recursos espirituales, humanos, físicos y



financieros. Y añade diciendo: Es la dirección provista por líderes de la iglesia para capacitarla a realizar su función como tal. Es decir, esta dinámica se da en la participación colectiva del mismo pueblo. Dios dijo a Josué: “levántate y pasa este Jordán, tu y todo este pueblo”(v. 2). En la tarea asignada, Dios está incluyendo a todo el pueblo. Que pertinentes son estas palabras, sobretodo en la época que nos está tocando vivir, cuando tenemos un pueblo que hasta cierto grado desconoce su identidad. Hay quienes piensan que somos bautistas solo por la manera en que practicamos el bautismo, si ciertamente esta práctica nuestra, es la práctica bíblica, no es lo que nos distingue desde nuestra formación como grupo nacido de la reforma radical, lo que nos distingue y para hacer justicia a nuestras raíces es lo que el destacado historiador Justo Anderson dice en su “Historia de los Bautistas” debían de llamarnos “iglesistas” debido al énfasis radical en el gobierno soberano de la iglesia sin la intervención externa de persona o grupo alguno.

“Tu y todo este pueblo” (v.2) habla de la inclusión de toda persona. Dios llamó a Moisés, a Josué, a Pedro, a Pablo y continúa llamando a quien Él quiere; Él es Soberano. ¿Le está llamando a usted a seguirle cada día? Aprenda a escuchar la voz de Dios, Él dijo: “Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen” (Jn. 10:27) Escúchelo y sígale, ¡Él es soberano! Su iglesia, necesita también responder en una manera radical al Señor que continúa llamándole a ir hasta lo último de la tierra para llevar las gloriosas buenas nuevas de salvación en compañía de sus líderes. Su promesa es incuestionable… estará con nosotros todos los días hasta el fin del mundo.

La nueva tarea para el nuevo líder dada claramente en el versículo 2 es cruzar el Jordán. “Ahora… leván-tate… pasa… ” son palabras que se encuentran en tiempo imperativo no están diciendo otra cosa, sino la urgencia y lo apremiante en obedecer sin demora al Señor. (No tardes, no te entretengas, no te distraigas, cruza inmediatamente, no te retraces). En tiempos inciertos y cambiantes el Señor Jesucristo sigue llamando con voz de mando a su iglesia: Sígueme, Él no permite demoras ¡Vallamos a conquistar a este mundo perdido para Cristo!

Palabras de aliento para el nuevo líder (1:5-9)Jamás podría existir otro líder como Moisés, pues Dios nos hace únicos e irrepetibles. Moisés ya no estaría mas con el pueblo, pero lo hermoso es saber que Dios si prolongaba su presencia entre ellos. Ahora que Moisés había muerto Dios continuaría su obra de liberación bajo el liderazgo de Josué, quien había estado al lado de Moisés durante todo el peregrinaje por el desierto. Dios mismo había elegido a este valiente caudillo, pero sabía que Josué al iniciar con tan gigantesca tarea necesitaba de una palabra de estímulo: “Como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré ni te desampararé.” (v.5) Estas eran las palabras precisas que Josué necesitaba. La nueva tarea para el nuevo líder consistía en guiar a un pueblo de más de dos millones de perso-nas a tomar posesión de la tierra prometida. Tenían que conquistarla.

La tierra prometida ubicada entre los ríos Hidequel y Éufrates se encontraba poblada por un sinnúmero de ciudades que se habían asentado siglos antes en aquellos territorios y una vez que se habían liberado del dominio del imperio egipcio habían construido sus fortalezas para salvaguardarse de sus enemigos y así pro-teger a sus habitantes. Jericó, una de las ciudades con más historia en la antigüedad, fue la primera ciudad que tendría que conquistar Josué y todo ese pueblo, así que, decidió enviar espías a explorar aquella ciudad antes de su conquista. ¡Que gran desafío para el nuevo líder! Es verdad que por naturaleza respondemos intimida-dos hacia lo desconocido, nos da temor lo inexplorado, sin Dios esto podrá tener cierta justificación, ¡pero que emocionante aventura es caminar acompañado del soberano y omnipotente Señor Jesucristo!

Las palabras de aliento para el nuevo líder fueron; “como estuve con Moisés, estaré contigo,no te dejare ni te desampararé…” Dios continúa en pleno siglo XXI auxiliando con su poderosa presencia a cada líder, a cada iglesia y a cada discípulo que se atreve a obedecerle y seguirle sin ningún temor. Él continúa manifestando la gloria de su presencia en medio de toda congregación que se somete a su señorío, le sigue fiel y confiada-mente en la conquista de los principados y potestades, derrocando inconteniblemente a los gobernadores de las tinieblas. Él está con su pueblo, mientras éste enfrenta diariamente nuevos desafíos. La realidad es que al vivir la vida cristiana, constantemente enfrentamos, día a día la lucha que no es contra sangre y carne, pero nos alienta saber que como estuvo con Moisés, y estuvo con Josué, estará también con nosotros, pues así, Él lo prometió. “Todos los días hasta el fin del mundo…”(Mt. 28:20b) Él es eterno e inmutable. ¡Él no cambia!

LECCIÓN 1: Cuando las cosas no son como eran antes


Seguir las instrucciones de Dios es tener garantizado el éxito. Las palabras de aliento para el nuevo líder debieron sonar maravillosas. ¿No es verdad que con frecuencia acudimos a pedir consejo cuando enfrenta-mos algo desconocido? ¿No es verdad que pedimos consejo cuando sentimos el desafío de encarar situacio-nes inestables o cambiantes? Si usted es como yo, acudirá a personas con mayor experiencia, eso es bueno. Pero que incomparable bendición para el nuevo líder es recibir la dirección misma de Dios, lo cual es el fundamento preciso para el éxito de todo líder, de toda iglesia y de todo cristiano. Con frecuencia la opinión popular sustenta que el éxito y la prosperidad se obtienen como resultado del poder personal o las relaciones sociales que se tengan, o del esfuerzo por la superación personal. Sin embargo, Dios en su palabra santa des-miente tales conceptos y nos instruye una vez más, sobre los criterios correctos. No lo olvide, es tan simple. Si un líder, una iglesia o un discípulo del Señor Jesucristo desea obtener el éxito y la prosperidad, entonces deberán observar las siguientes tres verdades:

1. Sea fuerte y valiente porque la tarea en la empresa divina no es fácil.2. Obedezca la ley de Dios incuestionablemente y3. Lea y estudie la Palabra de Dios, meditando en ella.

Si usted desea tener éxito, entonces simplemente le invito a seguir los consejos de Dios dados a Josué. “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.”(v. 8)

Se han escrito muchos libros. Algunos son muy buenos otros malísimos, algunos son divertidos y otros abu-rridos, algunos son verdaderamente hermosos y otros son solo una lástima y vergüenza. “No hay fin de hacer muchos libros” dijo el poeta (Ec. 12:12) A lo largo de la historia, egipcios, sumerios, asirios, babilonios, fenicios, hititas, persas y otros pueblos de la región produjeron un importante tesoro de obras literarias; pero ninguna de ellas alcanzó los niveles de expresión y temas de valor religioso del Antiguo Testamento. Pero si usted desea obtener el éxito, preste atención al libro sagrado, la Biblia, léala, medite en ella, vívala… enton-ces hará prosperar su camino y todo le saldrá bien. Probablemente no logre alcanzar el éxito de acuerdo a los estándares del mundo como lo dice el Dr. Bruce B. Barton, pero lo logrará a los ojos de Dios, y la opinión del Señor es la que finalmente cuenta, pues esta dura para siempre.

El nuevo líder obedeciendo a Dios (1:10-15)La obediencia a Dios y su Palabra es la clave para el éxito. Obedecer a Dios es de vital importancia, Josué lo sabia, y por ello dio prontamente instrucciones a los oficiales del pueblo. Estas son un eco de las palabras dadas por Moisés en Deut. 1:8; 4:1; 6:18; 8:1 y 9:1. De igual manera las instrucciones del nuevo líder a las tribus orientales son casi una replica de las palabras de Moisés en Deut. 3:18-20. Esta realidad nos muestra la fidelidad de Josué en dirigir al pueblo con las mismas instrucciones de Dios. La obediencia a Dios siempre traerá como consecuencia resultados positivos.

Este pasaje bíblico nos muestra una división en cuanto a las instrucciones.

1. Las órdenes dadas a los oficiales del pueblo. Estos debían de comunicar al pueblo lo importante que era el estar preparados con alimentos para resistir durante el tiempo de batalla que duraría la conquista. Los ofi-ciales comunicarían “dentro de tres días pasareis el Jordán.” (v. 11) Una batalla demanda tiempo de prepara-ción, la alimentación es de vital importancia. ¿Cómo se prepara usted para la batalla espiritual? ¿Está usted alimentándose espiritualmente en una manera adecuada para salir triunfante en las batallas diarias de la vida? La preparación espiritual es la causa real de la victoria. La obediencia al seguir las instrucciones de Dios, es vital.

2. Las órdenes dadas a las tribus orientales. Tiempo atrás las tribus de Gad, Rubén y la media tribu de Manasés habían consultado a Moisés haciéndole la petición de ocupar las fértiles tierras que se localizaban al este de la tierra prometida, en la Tras Jordania, las cuales tenían abundancia de alimento para sus ganados. Esta petición les fue concedida con la condición de ayudar a sus demás hermanos a entrar y conquistar la



tierra prometida hasta que “les haya dado reposo igual que ha vosotros.” Después de ello regresarían a sus hogares. ¡Que interesante enseñanza se encuentra aquí! Nos recuerda la verdad de la vida cristiana, esta se da en comunidad. Nuestra responsabilidad como parte del pueblo de Dios va más allá de la satisfacción de nuestras necesidades o deseos personales, esta incluye a cada uno(a) de nuestros(as) hermanos(as). El apóstol Pablo lo expresa cuando hace referencia a los dones espirituales en su carta a los Efesios “hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.” (4:13) ¿Está usted siendo instrumento de bendición a sus hermanos(as)? ¿Está ayudándoles en la lucha por la conquista? ¿Está juntamente con ellos, a través de su iglesia, peleando diariamente la batalla de la fe?

La finalidad de este acuerdo era salvaguardar la unidad de las tribus mientras estas trabajaban juntas en la persecución de metas comunes. Las órdenes dadas por el nuevo líder eran resultado de su obediencia a Dios. Nunca olvidemos que la fe es amiga de la obediencia, trabajan juntas. Estas tribus cumplieron con su compro-miso ante Dios (Josué 22) ¿Cumpliremos con el nuestro? ¡La obediencia es la clave para la conquista! Dios desea que seamos exitosos. Si vamos a lograrlo, ¡simplemente obedezcámosle! El pueblo afirmando al nuevo líder (1:16-18)El pueblo había recibido instrucciones directas de Dios y estaba dispuesto a obedecerlas y no solo eso, sino también a trabajar conjuntamente en armonía con el nuevo líder. Ellos hacían una demanda por demás justi-ficada; “solamente que Jehová, tu Dios, esté contigo” y “Tú, solamente esfuérzate y se valiente.” Para poder lograr sus objetivos de conquistar la tierra, el pueblo tenía que obedecer a Dios y seguir su plan. Dios tenía el plan. Para implementar el plan se necesitaba un líder. Dios les proveyó del líder. Ahora el pueblo afirma a su líder (v. 16-17).

Cuan ilustrativa resulta esta experiencia en la vida del pueblo de Israel. Ello nos recuerda que en tiempos cambiantes y de inestabilidad, Dios tiene un plan perfecto para nuestras vidas. Él desea lo mejor para nosotros. No pretendamos lograr el éxito a nuestra propia manera, es menester estar de acuerdo con su divino plan, conocerlo es un imperativo, su Palabra Santa nos lo da a conocer, ponerlo en acción es una necesidad. Si vamos a conquistar nuevos horizontes en el nombre de Jesús, debemos estar plenamente de acuerdo con el liderazgo y estar dispuestos a apoyarlo, solamente que Jehová, tu Dios, este contigo. ¿Ha visto la mano de Dios en la vida de sus líderes? ¡Trabaje con ellos! ¿Es evidente la presencia de Dios en sus vidas? ¡Únase a la labor!

Dios había llamado a Josué para una gran tarea. Cuando el Señor confirió a Josué tal responsabilidad, insis-tentemente le recordó lo importante que sería tener éxito en su nueva asignatura; tres veces le dijo que se esforzara y fuera valiente (1:6, 7, 9). Ahora que Josué está siendo afirmado como el nuevo líder por el pueblo recibe las mismas palabras de desafío. Al escuchar el mensaje del Señor por medio de los labios del pueblo, Josué fue desafiado a creerle a Dios. En su relación de dependencia constante con Dios halló la fortaleza y el coraje que necesitaba para lograr la conquista.

ConclusiónCuando las cosas no son como eran antes. Cuando se encuentre en momentos de transición e inestabilidad, en momentos de cambio. Recuerde que el éxito depende de nuestra obediencia radical a Dios, Él habla. Sigamos atentamente sus instrucciones, vayamos a su Palabra Santa para conocerlas. Acudamos constantemente a Él en oración. Recordemos la importancia de la vida de comunidad y no descuidemos la vida corporal de la igle-sia. Tengamos confianza en su sabiduría, obedezcámosle, podemos confiar en Él que nos prometió su gloriosa presencia, todos los días hasta el fin del mundo. Amén.

LECCIÓN 1: Cuando las cosas no son como eran antes


11

U N I D A D


COMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoUsted podría llamar a Josué 2 como “logrando las oportuni-dades”. Dos espías israelitas y una prostituta llamada Rahab se encontraron en el lugar correcto y en el tiempo preciso. El capí-tulo describe como una prostituta salvó a Israel. Como resultado los israelitas incorporaron un nuevo clan cananeo en medio de sus tribus.

Los israelitas basaron su plan para capturar a Jericó en infor-mación obtenida a través de un cuidadoso reconocimiento y las aseveraciones de una prostituta. Los espías enviados a Jericó tomaron una cuidadosa información del terreno que rodeaba a Jericó mientras que se escondían en las montañas después de hacer un detallado mapa de la ciudad.

El texto describe tres grupos principales: los espías, la prostituta, y los hombres del rey. Los espías vinieron a espiar la tierra con el propósito de causar muerte y destrucción, pero se encontraron con una discusión teológica acerca de la salvación de Yahweh (Jehová). Los hombres del rey deseaban matar a los mensajeros de Yahweh, (Jehová) pero se encontraron con una carrera de patos salvajes. La prostituta podría haber visto otra oportunidad para hacer negocio con los espías que habían llegado, pero ella pronto se dio cuenta de que tenía una oportunidad aún mayor.

El capítulo 2 es el primero de varias tradiciones de causas u orí-genes relacionadas a Jericó y a sus alrededores. Una tradición de causa u origen es una historia que explica una práctica o el origen de la práctica. El capítulo incluye una combinación de tradiciones importantes abrazadas por el Israel antiguo.

Enfocándose en el significadoSantiago 2:25 habla altamente de Rahab, una prostituta, no porque era prostituta, sino por su fe. Dios no solamente usa a la gente atractiva o moral del mundo. Sino que el Señor puede usar a la más inesperada e inmoral de las personas para avanzar el propósito de su reino en el mundo. Las personas de todas las áreas o experiencias deberán de permanecer abiertas a la palabra de Dios.

Rahab basó su confirmación de su salvación en el trato que dio a los espías. Nuestro Señor también nos enseña la importancia de cómo nosotros tratamos a nuestros semejantes (Mateo 25:31-46).

Los sucesos en Jericó enseñaron a Israel que Dios, no la gente, hace los planes para ocupar la tierra prometida. El Señor dio la bienvenida a los extranjeros (aun malos cananeos y prostitutas) siempre y cuando ayudaran al pueblo de Dios a conquistar la tierra.

U N I D A D


tierra prometida

Texto Focal: Josué 2:1-14; 6:22-25

Trasfondo Bíblico: Josué 2:1-24; 5:13-6:27

Enfoque Principal: Dios usa a gente imperfecta aunque otros los subestimen

Algo en que pensar¿Qué significa para usted el que Dios use a gente imperfecta y sub-estimada por otros?

Aplicación personalIdentificar las implicaciones para la vida en el contexto de la actu-alidad, respecto a los elogios que la Biblia hace de Rahab..

Meta de enseñanzaDirigir a la clase para que men-cione implicaciones para la vida de hoy, respecto a los elogios que la Biblia hace de Rahab.

Lección 2

DIOS Y LA GENTE IMPERFECTA

LECCIÓN 2: Dios y la gente imperfecta



1. Antes de que la clase comience, escriba en un pizarrón la palabra, “Imperfecciones”. Después de empezar la sesión con una oración, invite a la clase a contestar la siguiente pregunta: ¿Cuáles son algunas imperfec-ciones con las cuales, nosotros como humanos, siempre batallamos mientras que vivimos nuestras vidas? (Algunos ejemplos pueden ser: juzgar, mentir, perder el temperamento, o responder con enojo). Si es posi-ble, escriba estas en el pizarrón debajo de la palabra “Imperfecciones”.

2. Lea la idea principal de la lección de hoy a la clase: Dios usa a gente imperfecta aunque otros los subesti-men”.


3. Prepare y distribuya una hoja a cada miembro de la clase. La hoja deberá de verse como el ejemplo de abajo.

Gente imperfecta y situaciones La Gracia de Dios en acción

4. Presente una corta lectura usando la Guía de Estudio y “Comentario Bíblico” Acerca de Josué 2:1-14 y 6:22-25. Instruya a la clase a que escriba cualquier imperfección en personas o

en circunstancias debajo de la columna correcta y que de ejemplos o palabras de cómo la gracia de Dios es vista en la historia a pesar de estos retos.

Aplicación

5. Pida a la clase que identifique barreras en sus propias vidas que algunas veces les detienen de hacer la vo-luntad de Dios.

6. Recuerde a la clase acerca de Rahab, y rétela a que piense acerca de razones que la gente busca en ciertas clases de personas como posibles herramientas para el trabajo de Dios.

7. Lea Santiago 2:25 y Hebreos 11:31 en voz alta. Pida a la clase que mire al pizarrón una vez más y en silencio que lean los ejemplos que ellos enlistaron en el paso 1 como imperfecciones con las cuales todos lidiamos en nuestras vidas diarias. Recuérdeles que Dios puede y usa gente de todas clases para lograr su trabajo. Rételos a que no permitan a Satanás desanimarlos de servir a Dios debido a alguna imperfección en sus vidas. Termine leyendo Mateo 7:1-2 y diga una oración.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónDurante mi ministerio de enseñanza como profesor de un seminario, tuve la oportunidad de conocer allí a muchos jóvenes y señoritas quienes habían sido llamados al servicio. Algunos de ellos muy inteligentes, quienes destacaban en sus estudios y a quienes les asegurábamos un futuro muy prometedor en el ministerio.

También entre ellos, estaba un estudiante a quien continuamente le veíamos con problemas académicos. Como estudiante era un total fracaso. En adición a todo esto su personalidad no era muy atractiva, era evidente que había llevado una vida difícil, las marcas de una vida desordenada y los efectos de problemas de adicción en el pasado, habían dejado una huella muy profunda. Sus neuronas habían sido afectadas extremadamente.

Finalmente, este estudiante graduó junto con muchos otros a quienes tuve la oportunidad de ayudar en su formación ministerial. Tristemente después de algún tiempo de servicio algunos regresaron desalentados por diferentes causas a sus ocupaciones previas. Otros más, nunca aceptaron la responsabilidad y el desafío de dirigir algún ministerio, cuando muchos de ellos, eran de los estudiantes con excelentes calificaciones.

El tiempo ha transcurrido y aquel joven de quien no esperábamos mucho, es un ejemplo viviente de lo que Dios puede hacer con gente imperfecta, aunque otros los subestimen. Tiene un ministerio exitoso en donde continúa ganando gente para el Señor Jesucristo. Recibió como herencia de su padre, una casa en donde acoge a personas con problemas de adicción, les presenta al Señor Jesucristo como su Salvador personal y les muestra el verdadero camino a la recuperación. Todavía existe gente imperfecta y menospreciada que con-tinua mostrando la hospitalidad y poniendo a la disposición de Dios su casa para ser usada para la gloria de Dios. ¡Bendito sea el Señor!

En este capítulo estudiaremos la historia de otra persona. Una persona imperfecta, quien habiendo llevado una vida de inmoralidad era menospreciada por la sociedad, pero que fue usada para ayudar a los israelitas a tomar posesión de la tierra prometida al conquistar Jericó. El continúa usando a muchos de nosotros aun con nuestras imperfecciones.

La hospitalidad de Rahab hacia los espías israelitas (2:1-3)Sitim era un campamento que estaba localizado al este del Jordán frente a Jericó, campamento que había sido establecido bajo el liderazgo de Moisés. (Num. 25:1) Ahora Josué está enviando a dos espías a reconocer la tierra y a Jericó. Jericó sería un lugar estratégico para continuar con el proceso de la conquista. Y nos hac-emos la siguiente pregunta. ¿No era acaso suficiente con saber que Dios había dado la orden de avanzar? ¿No era suficiente el compromiso que el pueblo había hecho de obedecer?

Para Josué no era suficiente. El como estratega militar sabía cuan importante era la preparación militar que un jefe sabio y prudente debía realizar. Esto nos recuerda de un principio en la vida cristiana. El que Dios nos prometa su presencia y ayuda, no nos autoriza a ser descuidados y dejar de actuar con prudencia y sabiduría. Josué sabía cuan importante era el que nuestras obras muestren realmente la fe que tenemos. Dios le había ordenado que fuese valiente y que se esforzara. Si usted quiere ser bendecido por Dios entonces no olvide que debe actuar en sabiduría y prudencia esperando los resultados que Dios finalmente le dará. La ignorancia, no es amiga de la fe, nunca han estado casadas. No existe la fe ciega que pueda ser aprobada por Dios, no es esto lo que agrada al Señor. Santiago dice: Pero alguno dirá: “Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras y yo te mostraré mi fe por mis obras” (2:18).

“Y entraron en casa de una ramera que se llamaba Rahab.” La razón por la cual entraron en casa de una ramera tiene varias explicaciones que han sido presentadas por eruditos muy respetados. Para nuestros propósitos es necesario decir que era lógico estar en un lugar donde sería más posible pasar inadvertidos y en un lugar donde fácilmente podrían recibir información militar de las personas que numerosamente acudían allí. La manera en que fueron librados y la información que lograron reunir, muestran vívidamente como Dios estuvo presente en este evento. Rahab sabía junto con todo el pueblo, como los reyes de los amorreos habían sido conquistados por los judíos. Estos actos de la poderosa mano de Dios habían sido usados por Él, para guiar la fe de esta mujer. Desestimada y menospreciada por la sociedad sin embargo, Rahab se estaba con-virtiendo en un héroe de la fe, sus obras la harían inmortal por todas las generaciones. ¿No resulta emocio-nante saber que a lo necio y lo vil escogió Dios para avergonzar la sabiduría del mundo? ¿No es verdad que Él continua usando a aquellos que aceptan la revelación divina? (1 Cor. 6:9-11) ¡Su nombre aparece en la genealogía del Señor Jesucristo! (Mt. 1:5). Dios continua honrando la hospitalidad de la gente que en fe sirve al Señor. Dios no mira a la gente por lo que es, sino por lo que Él sabe que llegarán a ser. “Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros” (2 Cor.4:7). Dios sigue usando a gente imperfecta, aunque otros las subestimen.

La protección de Rahab hacia los espías israelitas (2:4-7)Rahab al ser interrogada por los servidores del rey solo desea dar protección a los espías israelitas. Empieza diciendo “es verdad”, pero la verdad es que está incurriendo en la mentira. ¿Qué podemos entonces decir al respecto? Ella dijo a los mensajeros “no supe de donde eran” y “no sé a donde han ido.” No olvidemos que esta mujer está en proceso de desarrollo. Ella solo ha empezado a identificarse con el pueblo de Dios. Su fe es una naciente fe que necesita ser enseñada, ella debería ser instruida para crecer en su madurez espiritual.

Cada creyente sin importar cual sea su condición, de igual manera podrá ser usado por el Señor. Pero eso



si, deberá recordar, cuan importante es que consintamos ser instruidos como discípulos del Señor Jesucristo y permitir que su Espíritu Santo vaya transformando nuestras vidas según su imagen y semejanza. Aunque Rahab estaba iniciando el cambio en toda su manera de vivir, una cosa es cierta. Ella se identifica sin nin-guna duda con los hijos de Dios y está dispuesta a padecer las consecuencias al ser juzgada por una sociedad, al rechazar su identidad. ¿Con quién se identifica usted? ¿Es esta sociedad con sus costumbres hábitos o demandas la que determina su manera de conducirse? ¿Se identifica usted con los hijos de Dios, sin importar las consecuencias de rechazo que pudieran venir por seguir en unidad al pueblo de Dios y al Señor de ese pueblo? ¡Rahab lo hizo protegiendo así la causa de Dios! ¿Lo hará usted? El sigue usando gente imperfecta aunque otros los subestimen. ¡Créale a Dios y Él se glorificará en su vida!

Al ser confrontada Rahab por los mensajeros del rey debía hacer una elección. Si daba la información a los mensajeros, la vida de los espías estaba de por medio. Seguramente que los matarían. Al ocultar la verdad, de esta manera les salvaguardo no solo su existencia, pero al obrar de esta forma participó en el cumplimiento del plan de Dios. Cuando usted se encuentra en situaciones donde debe elegir y tomar decisiones ¿son estas tales que ayudan para el avance del reino de Dios? ¡El Señor Jesucristo continúa usando gente imperfecta para proteger a los suyos! ¡Pidámosle que nos perfeccione mediante el poder de su Espíritu Santo!

La negociación de Rahab con los espías israelitas (2:8-14)Rahab tenía más que solamente conocimiento intelectual de lo que Dios había hecho con los reyes amorreos, ella tenía convicciones personales. Tenía fe. No solo muestra interés por ella misma, sino que actúa a favor de toda su familia y desea entrar en negociaciones. Rahab pide que le concedan la vida tanto a ella como a la totalidad de sus familiares. Rahab reconoce que Dios no es solo Dios de los israelitas, sino Dios del universo, “arriba en los cielos y abajo en la tierra” (v.11) quien está en control absoluto de todo el universo.

La fe expresada por Rahab durante las negociaciones le condujo a la vida, mientras que la incredulidad de los cananeos los llevó hacia la muerte. Esta fue una enseñanza del apóstol San Pablo a los hermanos de Corinto cuando dijo; “Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento. Porque para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden; a estos ciertamente olor de muerte para muerte, y a aquellos olor de vida para vida.” (2 Cor. 2:14–16).

La confesión de Rahab es muy instructiva para nosotros. Su declaración de fe no está cimentada solo en lo que ella creía, sino en lo que sabía. Su declaración está fundamentada en el conocimiento de los sucesos pre-vios. Nuestro Dios es un Dios que está involucrado en la historia, de hecho, Él es el autor de la historia. El cruce del mar rojo en seco al salir de Egipto hacía 40 años y ahora en adición la derrota contundente de los dos reyes de los Amorreos, que era historia fresca, alimentaba la fe de aquella mujer tenida en nada por la sociedad. Su afirmación “Jehová vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra” (v.11) expresa la confianza absoluta que tenia en que su Dios, El Dios suyo, podría ser también su Dios, Él es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra.

Después de haber manifestado su fe (9–11), Rahab buscó salvación dentro de la comunidad del pacto (12–13). En el versículo 12 la palabra misericordia es una forma abreviada de decir ayuda indudable a un com-pañero de pacto en necesidad. Los hebreos prometieron tener misericordia con aquella mujer destituida de la sociedad, y en su momento, cumplieron con el acuerdo de su negociación. Siglos mas tarde el Señor Jesús diría: “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.” (Mt. 5:7) La salvación es de Dios y Él la hace posible “para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” (Jn. 3:16b) Él es el “Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.” (2 Cor. 1:3-4). Dios sigue usando gente imperfecta para mostrar su misericordia y desea usar la vida suya como usó la de los espías judíos para extender su gracia y amor a otras personas. ¿Está usted dispuesto a que el Señor Jesucristo le use, aun cuando le enviara hasta lo último de la tierra? Hay mucha gente como Rahab que podría estar esperando la revelación de Dios y lista para pedir misericordia del Señor.



La liberación de Rahab por los espías israelitas (6:22-25)La vida religiosa de aquella nación que ahora estaba siendo conquistada por el pueblo de Dios era verdade-ramente decadente. El dios baal era representado mediante una imagen de toro o de serpiente. En cada pueblo se tenía un santuario, el cual era ubicado debajo de un árbol o en la cúspide de algún cerro, donde se le ofrecían sacrificios de animales y donde de igual manera se le ofrecía en adoración, la vida misma de los niños. Además de todo esto, incluían en sus rituales orgías donde corría el vino embriagando a sus seguidores quienes creían complacerle con toda clase de degeneraciones sexuales. En consecuencia el culto incluía ritos sexuales.

Cuando meditamos sobre la liberación de Rahab por los espías israelitas, no podemos, sino darle gracias a Dios, por su misericordia. En medio del juicio inminente hay salvación. La salvación es para todo aquel que como Rahab, aun con sus imperfecciones y menospreciada por el pueblo, deposite su fe en el único y sabio Dios verdadero. El Dios y Padre de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

Josué, al cumplir con el plan divino de conquistar aquella ciudad, expresa unas palabras de gran valor para nuestros tiempos. Dice: “Como lo juraste” - dirigiéndose a los espías- Esto es un recordatorio para nosotros, respecto a la ética que debe caracterizar a los hijos de Dios. La infidelidad está a la puerta en todas las áreas de la vida. Con frecuencia en los negocios los comerciantes y empresarios no cumplen con sus acuerdos. Los matrimonios con cuanta facilidad se disuelven. Con que predisposición las personas rompen sus juramentos, sus acuerdos, sus pactos. No debe ser así en el pueblo de Dios. Ser liberado de nuestra antigua y vana manera de vivir es el plan de Dios y debemos ser fieles y cumplir las promesas que hacemos.

“Mas Josué salvó la vida de Rahab la ramera” que magistrales palabras han quedado registradas en la historia sagrada, ellas son para nuestra instrucción. Dios es un Dios misericordioso que está dispuesto a usar la vida de cualquier persona aunque esta sea imperfecta y desestimada por la sociedad. Un Dios que se muestra inte-resado por todos los pueblos sin distinción de origen étnico. El actuar de Dios nos muestra una vez más que Él no es excluyente, sino por el contrario es incluyente, Él desea que todos los pueblos de la tierra le conoz-can y le adoren. En este caso tenemos a una mujer y una prostituta. ¡Bendita gracia de Dios! Dijera el apóstol a los gentiles en su libro a los Gálatas “pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa.” (Gal. 3:26-29).

Esta mujer imperfecta, menospreciada por la sociedad y en adición a todo esto, siendo una pagana. Es la típica representación de todo creyente. Escuchó la voz de Dios y creyó a la revelación, aceptando las prome-sas y convirtiéndose así en un miembro mas de esa tan grande “nube de testigos.” (He. 12:1; Stg. 2:25).

“Y habitó ella entre los israelitas hasta hoy.” La Biblia declara que Rahab y su familia, con todas sus perte-nencias fueron sacados fuera del campamento de Israel. No sabemos por cuanto tiempo, pero la realidad es que tendría suficiente, si así lo hubiera deseado, para ir a cualquier otro pueblo cercano. Nadie le forzó a permanecer con Israel ni hacerse parte de este pueblo. Fue una decisión voluntaria. Así es el cuadro de la liberación. Dios ha prometido traer la liberación del juicio y la muerte segunda a toda persona sin importar su origen étnico ni su nivel intelectual. La identificación con el pueblo de Dios fue un asunto de elección per-sonal para Rahab y continua siendo para cualquier persona que acepta en fe, la revelación de Dios y el regalo de su gracia manifestado por su misericordia. Tuvo misericordia de Rahab y sigue teniéndola en abundancia para cada persona aun cuando sea imperfecta y menospreciada por la sociedad.

Conclusión: Dios todavía usa gente imperfecta, aunque esta sea desestimada por la sociedad. El Señor continúa poniendo su mano sobre la vida de las personas, no por lo que son, sino por lo que llegarán a ser. La importancia de prestar atención a la Palabra de Dios es crucial y la hospitalidad es una característica deseable en la vida de todo discípulo del Señor Jesucristo. De la vida de Rahab aprendemos cuan importante es la identificación con el pueblo de Dios. Ella sin ningún temor prefirió identificarse con el pueblo del Señor. La salvación es de Dios y Él es el único que la hace posible, pero en la comunidad del pacto se encuentra la misericordia. Dios



sigue usando gente imperfecta para mostrar su misericordia y desea usar también su vida como usó la de los espías, para extender su gracia y amor a otras personas. La identificación con el pueblo de Dios fue un asunto de elección personal para Rahab y continua siendo para cualquier persona que acepta en fe la revelación de Dios y el regalo de su gracia manifestado por su misericordia. El Señor mostró misericordia con Rahab y continúa manifestándola abundantemente para cada persona aunque esta sea imperfecta y menospreciada por la sociedad. Dios desea hacer grandes cosas con su vida. Crea en Él, identifíquese con Dios y permita que al usar su vida, sea traída honra y gloria al Señor Jesucristo. Amén.



17

Lección 3

CUANDO LLEGAS A LAS ORILLAS DEL AGUA

COMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoJosué 3 y 4 están íntimamente relacionados. Como Israel se man-tuvo maravillado acerca de Moisés cuando cruzaron el mar en Éxodo 14—15, así Israel ahora permanecía maravillado de Josué cuando cruzaron el Río Jordán. El pasaje empieza con Israel esperando recibir su herencia de parte de Yahweh (Jehová). Sin embargo, un río inundado permanecía entre la gente y su here-dad. ¿Cómo podrían cruzar esta insuperable barrera y entrar en su heredad? Ellos necesitaban una intervención divina. Yahweh (Jehová), a través de una serie de acontecimientos, capacitó a Israel para cruzar sobre tierra seca un río desbordado.

El Israel antiguo repetía esta historia como un recordatorio de la forma en que sus ancestros entraron a la Tierra de la Promesa. La historia forma un mensaje de instrucción oral para Israel cuando se observa la referencia de la importancia de las piedras memoriales en Josué 4:6-7, 21-24. El escritor claramente hace un paralelo de esto con los acontecimientos de Israel cuando cruzó el mar en Éxodo 14—15.

Enfocándose en el significadoCuando cruzamos a través de las crisis de la vida, la gente necesita que otras personas se paren en medio como animadores. La presencia de Dios no siempre es visible en una forma material. Usted es llamado para ser la presencia de Dios para aquellos en la orilla de las aguas de la vida.

Los sacerdotes llevaron el arca hacia el centro del Río Jordán, que estaba inundando las orillas y que era un obstáculo mayor para los israelitas. Josué no animó a la gente a que se mantuviera inmóvil, sino a que se moviera. La gente debería de cruzar el Jordán. Ellos nunca heredarían la Tierra Prometida si permane-cían en el lado Este. Ellos perderían las bendiciones de Dios si permanecían cómodos donde ellos estaban en el desierto. Ya sean los sacerdotes parándose en el centro del Jordán, los diplomáti-cos en la crisis del Medio Oriente, el receptor parándose en el centro del grupo de jugadores, o supremamente, Jesús en la cruz, alguien deberá de pararse en el centro para animar a los demás a cruzar sobre las crisis de la vida. Los sacerdotes y la gente no se mantuvieron inmóviles sino que se movieron hacia la meta.

Cuando usted se encuentra en la orilla de las aguas, mire hacia el centro del río inundado por la presencia de Dios. Cuando usted ve a otros en la orilla de las aguas, tímidos y temerosos, usted deberá de pararse en el centro de las caudalosas aguas para animarlos a ellos, como la presencia de Cristo.


1. Invite a la clase a compartir barreras del pasado que en aquel

U N I D A D


U N I D A D


tierra prometida

Texto Focal: Josué 3:7-17; 4:15-24

Trasfondo Bíblico: Josué 3 -4

Enfoque Principal: La confianza en Dios capacita a la gente a vencer barreras que pare-cen insuperables.

Algo en que pensar¿Cómo enfrenta usted aquellas barreras que parecen insupera-bles?

Aplicación personalConsiderar lo que ha aprendido respecto a Dios cuando enfrenta barreras que parecen insuperables.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase para que digan lo que ellos han aprendido con respecto a Dios cuando han enfrentado barreras que parecían insuperables.

momento parecían insuperables pero que hoy han sido cruzadas. Escriba estas cosas en el pizarrón. (Ejemplos podrían incluir la caminata de cuatro minutos sobre la luna, la electricidad, sobreviviendo a una guerra o crisis, etc.)

2. Lea el enfoque principal de la lección de hoy a la clase: “La confianza en Dios capacita a la gente a vencer barreras que parecen insuperables”. Dirija una oración.


3. Comparta con la clase alguna ocasión cuando usted trató de ensamblar algún artículo sin seguir las instruc-ciones. Remarque la dificultad y los errores que ocurrieron durante el proceso. Luego explique a la clase que fue más fácil cuando usted simplemente siguió las instrucciones. Invite a la clase a que hable de una experiencia similar.

4. Antes que la clase comience, escriba el siguiente bosquejo usando una parte de un póster, o de papel de construcción para cada sección:

I. Recibiendo la instrucción de Dios (Josué 3:7-13) II. Respondiendo a la instrucción de Dios (Josué 3:14-17; 4:14-18) III. Recordando la instrucción de Dios (Josué 4:19-24)

Asegúrese de que el salón tenga alguna forma de pegar el póster en la pared.

5. Coloque la primera parte del bosquejo en la pared. Lea Josué 3:7-13 a la clase. Usando los comentarios de la Guía de Estudio, explique los versículos a la clase. Claramente identifique las instrucciones que Dios dio al pueblo y a Josué.

6. Pida a la clase que identifique retos que la iglesia de hoy enfrenta. Escriba esto en el pizarrón.

7. Coloque la segunda parte del bosquejo en la pared. Lea Josué 3:14-17; 4:14-18 a la clase. Usando el comentario de la Guía de Estudio, presente una lección a la clase explicando estos versículos. Enfatice el rol que la fe y la confianza jugaron en la obediencia de los israelitas a las instrucciones de Dios. Pregunte, ¿Qué representaba el arca del pacto para los hebreos? (La presencia de Dios). Explique que es en una relación personal con Jesús y el estudio de la palabra de Dios donde los creyentes de hoy podemos experi-mentar la presencia de Dios. Recuerde a la gente que cuando somos obedientes a Dios, El nos muestra el camino para vencer los obstáculos.

8. Coloque la tercera parte del bosquejo en la pared. Lea Josué 4:19-24 a la clase. Usando el comentario de la Guía de Estudio, explique estos versículos. Lea a la clase la discusión usando las siguientes preguntas:

¿Qué tradiciones o actividades son usadas por las familias para recordar eventos clave? ¿En qué maneras buscamos instruir a futuras generaciones acerca de las verdades espirituales?

¿Qué tan exitosos usted piensa que somos al buscar esa meta?

Aplicación

9. Distribuya a la clase una tarjeta de 3 X 5 pulgadas. Pida a cada miembro de la clase que escriba en un lado de la tarjeta un acontecimiento, crisis, obstáculo, o reto que Dios le ayudó a vencer a través de la fe y la obediencia. Asegúreles que nadie tendrá que leer la tarjeta a la clase.

10. Después de un corto tiempo, pida a la clase que volteen sus tarjetas. Ahora, pida a cada persona que escriba un obstáculo, barrera, crisis, o reto que hayan enfrentado en esta semana. Lea Filipense 4:13. Recuérdeles que así como la confianza en Dios trajo la victoria en el pasado, también la traerá en el futuro. Termine con una oración.

LECCIÓN 3: Cuando llegas a las orillas del agua


GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónHace 7 años aproximadamente el Señor empezó a desafiarnos con una iniciativa maravillosa. Alcanzar a los pueblo que se encuentran localizados en la región denominada “La ventana 10/40 de México” llamada así por las características que identifican a esta parte de tan hermosa república, con las particularidades propias de la real ventana 10/40. Características tales como el rechazo y oposición al evangelio por la población de ese lugar, cuna del catolicismo mexicano más arraigado y la persecución de los hijos de Dios, con lo que la iglesia cristiana en México ha tenido que lidiar durante muchas generaciones, que se extienden por siglos de tradición. Pero Dios estaba llamando a nuestra iglesia a caminar en fe y aceptar la magnitud de tal desafió. Para nuestra iglesia la “Primera Iglesia Bautista de Tyler TX” ciertamente nos parecía que Dios nos estaba confrontando con desafíos tales que a nuestro parecer eran barreras insuperables.

Nuestra iglesia pequeña en número y sin una poderosa fuerza financiera para alcanzar estos pueblos tan necesitados de la gracia de Dios, con el evangelio del Señor Jesucristo, tenia enfrente barreras insuperables. ¿Como marchar con escasos soldados hacia la conquista? ¿Cómo iniciar tan grande empresa con nuestros recursos económicos tan limitados? ¿Cómo avanzar en la conquista sin contar realmente con liderazgo ni sólido, ni abundante? ¿Cómo llegar a impactar estos estados de la república Mexicana? Estas y otras muchas preguntas nos hacíamos. Pero después de una constante lucha de oración en búsqueda de la voluntad divina, al recibir sus instrucciones y tener la convicción de que el Señor estaba llamando a nuestra iglesia para ser usada en este milagro. Se dio el paso fundamental cuando decidimos creer a Dios e iniciamos la marcha uni-dos en la dirección dada por el Señor. Las cosas empezaron a suceder y otras dos iglesias se nos unieron a la visión. Dos parejas de misioneros sostenidos financieramente por nuestra iglesia están en el campo desde hace ya varios años, no se dan abasto para atender las doce misiones establecidas y el sinnúmero de oportuni-dades para iniciar nuevas iglesias. El desarrollo del Centro Regional de Misiones del Bajío en el estado de Guanajuato en la República Mexicana es la cristalización del principio de nuestro sueño. Este edificio ha sido construido mediante la generosidad de ofrendas sacrificiales de obreros y amas de casa miembros de nues-tra iglesia, que han tomado parte en una gran cantidad de viajes misioneros, además de la participación de otras iglesias que en el camino empezaron a compartir la misma visión. Recién se ha hecho la dedicación del edificio donde en conjunto con la Universidad Bautista de las Américas, se estarán preparando a los líderes, pastores y misioneros que continuarán con la obra para llevarla al siguiente nivel mediante la Escuela de Capacitación Transcultural de la Convención Nacional Bautista Mexicana.

La confianza en el Dios todopoderoso, la receptividad espiritual para escuchar con claridad su voz, la dis-posición para recibir sus instrucciones y el valor para marchar creyendo absoluta e incondicionalmente en Él, son las características distintivas de nuestra iglesia que le están capacitando para cumplir con el llamado a esta tarea, que por supuesto aun está inconclusa, pero que continua avanzando para la gloria de Dios.

En esta ocasión estudiaremos un evento en la vida de otro pueblo que también fue desafiado a enfrentar ba-rreras, aunque a su juicio estas parecían insuperables. Contando con la dirección de Dios y el ejercicio de una fe inquebrantable, fue que superaron toda dificultad a pesar de que las consideraban insuperables. Dios con-tinua obrando en la vida de quienes se atreven a creerle a Él, y son las mismas maravillas y milagros que está dispuesto ha hacer en la vida de quienes le creen. ¡Creámosle al Señor Jesucristo!

Recibiendo las instrucciones de Dios (3:7-13)En los versículos anteriores de este capítulo podemos identificar con toda claridad los cuatro discursos de preparación para el cruce del Jordán; 1º. Por los oficiales del pueblo (v.2, 4), 2º. Josué dirigiéndose al pueblo y a los sacerdotes (v.5, 6),3º. El más importante de todos, el Señor hablando con su siervo (v.7–8), 4º. Josué dirigiéndose a toda la nación (v.9–13).

Cada discurso muestra más y más el milagro que está por suceder



El hecho de que Dios decidiera hacer cruzar al pueblo en esta fecha es bastante significativo. De acuerdo con información bíblica el río Jordán era transitable durante las otras épocas del año (Jue. 3:28; 8:4). La razón porque el Señor esperó hasta la época de la primavera cuando la creciente es impresionante debido al deshielo de las cumbres nevadas del monte Hermón, fue con la intención de mostrar en una manera incuestionable la presencia de Dios con su pueblo y la indudable confirmación de contar con el poder del Señor en la tarea asignada, además de confirmar con este acto que su mano estaba sobre Josué, como lo estuvo con su siervo Moisés (v.7)

“El Dios viviente está en medio de vosotros y Él echará de delante de vosotros al cananeo…” (v.10) Josué le comunica al pueblo una gran verdad que les estimularía a moverse en la dirección correcta con gran decisión. “En esto conoceréis” muestra que mediante la experiencia que está por vivir el pueblo al cruzar el río Jordán, se vería motivado a continuar en obediencia las instrucciones de Dios. ¡Que bueno es nuestro Dios! Él sabe que nuestra débil fe necesita ser motivada. Un padre angustiado que clamaba por su hijo dijo: “Creo; ayuda mi incredulidad” (Mr. 9:24).

“Jehová dijo a Josué.” Que hermosas palabras contiene la escritura, ella declara que tenemos un Dios que se nos revela y se da a conocer, Él habla, se comunica con nosotros, sus criaturas, para manifestársenos y darnos a conocer su voluntad. Dios siempre se manifiesta de la misma forma, hablando a nuestros corazones. Le habló a Moisés desde una zarza ardiente, a Jonás desde el vientre de un gran pez, a Elías en un silbo apacible, a David mientras estaba en su cama en las vigilias de la noche, a Isaías en el templo, a Pablo en el camino a Damasco, a Pedro en el terrado de aquella casa, a Juan mientras estaba en la isla de Patmos sufriendo el desti-erro. ¿Cómo fue la manera en que Dios le habló a Josué? ¡La Biblia no lo dice! Pero lo que si sabemos es que Dios le habló. La Biblia lo dice y eso es suficiente para creerlo. Le habla a Josué, para darle una promesa que le fortalecería y entregarle las instrucciones que necesitaba comunicar al pueblo. El versículo 9 dice que esto fue precisamente lo que Josué hizo, comunicárselo al pueblo. Aprendamos a escuchar la voz de Dios, usted la encontrará en su Palabra escrita, la Biblia. La revelación suprema de Dios la encontrará únicamente en el Señor Jesucristo. Dios usa también las circunstancias de la vida para hablarnos y la iglesia juega un papel trascendental en ello. Pablo dice “para… que seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos… y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento” (Ef. 3:18-19)

Aquí es donde empieza el éxito del pueblo hebreo. “Jehová dijo a Josué.” (v.7). Queremos preguntarnos: ¿Es que acaso vale la pena actuar sin la dirección de Dios? ¡Cuan importantes son las instrucciones divinas! Dios habla y se comunica con sus hijos. Por eso el escritor sagrado dice “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo…” (Heb. 1:1-2) “Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos” (1 Ped. 1:19). Bendito sea nuestro Dios que nos ha dejado su palabra santa. “Mis ovejas oyen mi voz… y me siguen.” (Jn. 10:27). Leamos la Biblia, meditemos en sus palabras, vivamos sus enseñanzas. ¡Obedezcamos a nuestro Dios!

Respondiendo a las instrucciones de Dios (3:14-17; 4:14-18)El pueblo respondió en obediencia a Dios al seguir sus instrucciones en fe. Los sacerdotes pasaron por del-ante, siguiéndole después un pueblo de más de dos millones de personas con todas sus pertenencias y gana-dos. Al abrir las aguas del Jordán, Dios manifestó su gran poder y reveló su fidelidad para con su pueblo escogido.

Existen relatos de un historiador árabe, que menciona un suceso similar ocurrido en el río Jordán en el año 1267 d.C. cerca de una ciudad identificada con Adam. La nota histórica dice que el río permaneció seco por unas 15 horas a consecuencia de un bloqueo de tierra provocado por un temblor. Existe también información de un suceso mas reciente ocurrido en 1927 similar al anterior. La veracidad de estos eventos confirma que la narrativa bíblica no es resultado de una religiosidad popular, sino la comprobación de hechos factibles que muestran la acción poderosa de Dios inmiscuido en la historia de la humanidad. “Las aguas que venían de arriba se detuvieron como en un montón bien lejos de la ciudad de Adam” (3:16) ¿Quién es capaz de hacer esto? Solo el Señor en una manifestación de su bendita y soberana providencia, mostrando una vez más su fidelidad.



Los sacerdotes deberían de permanecer firmes hasta que pasara todo el pueblo. Cuanto tiempo debió de haber llevado para que dos millones de personas, incluyendo mujeres y niños con todas sus pertenencias y ganados pasaran. Los sacerdotes permanecieron en sus posiciones obedeciendo a Dios y siguiendo las indicaciones dadas por Josué. ¿Qué es lo que necesitamos para ser testigos de milagros? ¿Cómo es que nuestro Dios con-tinúa obrando para mostrarle a su pueblo que las barreras que nos parecen imposibles de superar no son nada para Él? La respuesta es solo una ¡obediencia incondicional! Es decir, una fe inquebrantable en su Palabra. Si nuestras iglesias desean ver maravillas obrando en nuestros ministerios, no tenemos opción. Debemos responder en fe a las instrucciones de Dios y obrar congruentemente con la fe que profesamos. ¡Acciones que muestren nuestra fe!

Una vez que cruzaron, Jehová engrandeció a Josué como lo había prometido delante de todo el pueblo quien está dispuesto a seguir su liderazgo. Todos los sacerdotes y principales de cada tribu fueron dirigidos por Josué; esta victoria le daría a Josué la confirmación del llamado que Dios hizo para usar su vida. Una vez que los sacerdotes llegaron a la otra rivera del río pisando tierra seca, el cause de este volvió a su curso anterior.

Que gran privilegio le fue concedido a Josué con esta histórica victoria al superar barreras que parecían infranqueables para toda una nación. Salir de Egipto era tan importante como llegar a la meta de entrar a Canaán. No hay orden de Dios dada a sus siervos que pueda ser desestimada. Aquí tenemos otra importante lección. Cuando recibamos instrucciones de Dios, aunque los desafíos se nos presenten con barreras que nos parecen infranqueables solamente obedezcámosle y sigámosle al pie de la letra, de esta manera comprobare-mos que Él es fiel.

Recordando las instrucciones de Dios (4:19-24)En nuestro calendario actual el “día diez del mes primero” es el equivalente al mes de Abril, ese día subió el pueblo del Jordán, esa fue su primera noche en Canaán. El Jordán había quedado atrás y ahora era historia. Historia para recordar, y recordarla con un propósito. Dios había dado instrucciones a Josué para que los doce representantes de las tribus de Israel, tomaran doce piedras de en medio del Jordán, del lugar en donde los sacerdotes habían permanecido parados mientras el pueblo cruzaba el río. Dios le dio las instrucciones al líder de aquella nación para edificar un altar en Gilgal, sitio de su primer campamento.

El primer propósito al edificar un altar era para adorar a Dios. Abraham se destaca en la Biblia como un adorador. A cualquier lugar donde él llegaba y establecía su campamento el record bíblico atestigua diciendo “edifico Abraham allí un altar” (Gn. 12:6,8; 13:4,18; 22:9; 26:25; 33:20; 35:1, 3,7). Como descendientes de Abraham, al igual que su antecesor debían adorar a Dios. Cuan ilustrativo resulta este acontecimiento que escrito en las páginas sagradas a quedado por la eternidad para nuestra instrucción. ¿Cómo cerrar nuestro corazón ante los beneficios recibidos? El salmista expresó diciendo “Bendito el Señor; cada día nos colma de beneficios” (Sal. 68:19). Jamás debemos pasar por desapercibidos los favores de nuestro Dios y hemos de expresar nuestra gratitud a Él en adoración. Adoración individual para satisfacción de nuestra alma, pero tam-bién adoración colectiva entre los miembros de su pueblo. ¿Está usted reuniéndose regularmente con sus her-manos en la fe para adorar a Dios? La Biblia dice; “Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre”. (Hebreos 10:23-25)

El segundo propósito era levantar un altar como monumento recordatorio de los resultados obtenidos al actuar obedientemente a las instrucciones de Dios. Cuando las futuras generaciones les preguntaran “¿qué significan estas piedras?” los padres usarían aquel monumento de la fidelidad de Dios con un elemento pe-dagógico para instruir responsablemente a sus hijos en el camino del Señor y afirmarles cuan importante es que sigamos cuidadosa y obedientemente en fe las instrucciones del Señor, quien está interesado por el bien-estar de nuestras almas.

¿Estamos fielmente haciendo lo que Dios espera que hagamos con nuestros hijos al instruirles y guiarles en el camino del Señor? ¿Estamos aprovechando cada ocasión que se nos presenta en los acontecimientos de nuestro diario vivir para reflexionar con ellos sobre la realidad de su presencia en nuestras vidas, de tal



manera que les ayudemos a fortalecer su fe? Las palabras “porque Jehová vuestro Dios secó las aguas” es una invitación para que dirijamos con nuestros hijos la mirada hacia Él en actitud de reconocimiento por sus bondades: “Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias; El que sacia de bien tu boca…” (Sal. 103:2-5) ¡No nos cansemos de reconocer junto con los nuestros el cuidado, protección y provisión de Dios!

Un tercer propósito que podemos identificar se encuentra en las palabras “para que todos los pueblos de la tierra conozcan…” (v.24). Las doce piedras tomadas del río y que ahora componían aquel altar debían de des-pertar preguntas activas en la mente de sus hijos quienes serian instruidos por sus padres para recordarles que las naciones tenían que conocer quien era Jehová. Las respuestas a las preguntas de las nuevas generaciones debían de traer un reconocimiento de la obra sobrenatural de Dios entre su pueblo (v.23) tales enseñanzas habrían de afectar la vida de todos los pueblos de la tierra. El Dios de Israel no es un Dios exclusivista que estaba interesado en que le conociera solo la nación de Israel, sino que se manifiesta como un Dios interesado en que todos los reinos de la tierra lleguen a conocerle, es un Dios inclusivo. Aquella nación era responsable de compartir aquel testimonio vivo. El altar que edificaron serviría para que el pueblo no olvidara lo que Dios había hecho en su vida. Al igual que Israel en la antigüedad Pablo dice que somos el Israel espiritual (Rom. 9) Pedro afirma la misma verdad cuando dice que somos “nación santa, pueblo adquirido por Dios” y mani-fiesta la voluntad de Dios para nuestra vida “nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable” (1 Ped. 2:9) Con cuanta frecuencia muy pronto olvidamos lo que Dios ha hecho en nuestra vida. Nos ha sacado de la esclavitud en la que nos encon-trábamos, “el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo” (Col. 1:13) Junto, pues con esta nación, hemos sido depositarios de la revelación sobrenatural divina. “Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconcili-ación; que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación. Así que, somos embajadores en nombre de Cristo…” (2 Cor. 5:18-20)

Conclusión: La historia de Egipto, la historia del desierto, la historia del Jordán, nunca se tornan anticuadas. Los libros del Éxodo, Números y Josué, que relatan la vida de los hebreos son tan validos como las historias de nuestras vidas individuales. La gran pregunta para nosotros es ¿cómo vamos a responder cuando llegamos a orillas de las aguas? ¿Tendremos el coraje para responder positivamente e iniciar la marcha aunque nos parezca que por delante solo tenemos barreras infranqueables? Cuando nos da sus instrucciones ¿Seremos sensitivos para escuchar su voz? Cuando nos desafía a marchar hacia lo imposible ¿Nos atreveremos a caminar por fe en la conquista de este mundo perdido para la gloria del Señor Jesucristo? Cuando nos envía a salir al mundo y compartirle la manera milagrosa en que ha actuado en nuestra vida ¿estaremos dispuestos a responder positi-vamente a sus instrucciones para que todos los pueblos de la tierra le conozcan? Que en su gracia nos siga dando fe para creerle. Que en su misericordia continué alimentando nuestras almas para fortalecernos en su esperanza. Que en su verdad encontremos el amor para dar nuestras vidas, aun si fuese necesario… ¡para que todos los pueblos le conozcan! Amén.



U N I D A D


tierra prometida

Texto Focal: Josué 7:1-12, 16-21

Trasfondo Bíblico: Josué 7-8

Enfoque Principal: Actuar sin Dios por confiar en nuestros deseos personales y confiar en nuestras propias habili-dades resultará en fracaso y desas-tre.

Algo en que pensar¿En qué maneras el énfasis moderno de la confianza en uno mismo se contrapone a la confi-anza en Dios?

Aplicación personalDios nos creo y sabe lo que es mejor para nuestras vidas. Cuando ignoramos los planes y deseos de Dios o desobedecemos sus principios y ponemos nuestra confianza en nuestras propias habilidades, experimentaremos la derrota espiritual.

23

COMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoJosué 7—8 ilustran un tema que se encuentra en la teología deu-teronómica, esto es, que la obediencia trae bendición y el pecado trae castigo de parte de Jehová. El pecado afecta a toda la con-gregación (Josué 7:1-5), no solamente al individuo (Josué 7:19-21, 26). La congregación puede desarrollar un sentido de falsa seguridad (7:3-5) que la lleva a una separación de la voluntad de Dios (7:10-15). La culpa de un individuo se extiende hacia toda la comunidad y contamina a la gente que está más cercanamente relacionada con la persona culpable. (7:22-25). Finalmente, la congregación deberá de quitar el pecado (7:25—8:1). Es como un cáncer, no como un acontecimiento aislado.

El capitulo 7 contiene una historia de la violación del herem (guerra santa). La ofensa involucró a un israelita llamado Acán, quien se apropió de varios artículos prohibidos de Jericó—oro, plata, y un manto babilónico (7:21).

La historia de Acán en Jueces 7 también provee una explicación del origen del nombre “Valle de Acor” y por que se formó cierto amontonamiento de piedras en el valle de Acor, no muy lejos de Jericó. El capítulo 8 contiene la conquista actual de Hai.

Enfocándose en el significadoEl pecado afecta a toda la comunidad. El pecado nunca es un acto individual. Los individuos han querido esconder el pecado desde el comienzo de los tiempos. Pero nadie ha tenido éxito. Las sociedades del Oeste se enfocan en la individualidad. ¡Todo se refiere a mí! Sin embargo, usted tiene influencia sobre aquellos que están alrededor de usted: Padres, hijos, parejas; tíos, tías, primos; la comunidad local en su totalidad. Que diferente sería si todos actuáramos como si nuestras obras directamente afectaran a aquellos alrededor de nosotros.

Cuando una comunidad dedicaba (herem) cualquier cosa a Jehová, lo que era dedicado a Jehová pertenecía al Señor y nadie tenía el derecho de robarlo. Por cuanto era dedicado a Dios, entonces era destruido por fuego, el cual causaba que el humo subiera hasta la deidad de Dios. Nadie podía rescatar artículos dedicados a Jehová. Si cualquier persona violaba el “herem” (lo dedicado), entonces esa persona sufriría la suerte que se haría con las cosas dedicadas. Por lo tanto, Israel raras veces invocaba el “herem”.

La gente del antiguo Cercano Oriente algunas veces dedicaba villas enteras a una deidad en tiempos de guerra, esto significaba que los guerreros no podrían tomar el botín de la victoria. Josué había puesto a Jericó bajo el herem, puesto que fueron las primi-

U N I D A D


Lección 4

EL PELIGRO DE ACTUAR SIN DIOS

U N I D A D


tierra prometida

Texto Focal: Josué 7:1-12, 16-21


Enfoque Principal: Actuar sin Dios por confiar en nuestros deseos personales y confiar en nuestras propias habili-dades resultará en fracaso y desas-tre.

Algo en que pensar¿En qué manera el énfasis mod-erno de la confianza en uno mismo se contrapone a la confi-anza en Dios?

Aplicación personalDios nos creo y sabe lo que es mejor para nuestras vidas. Cuando ignoramos los planes y deseos de Dios o desobedecemos sus principios y ponemos nuestra confianza en nuestras propias habilidades, experimentaremos la derrota espiritual.

Meta de enseñanzaGuiar a la clase para que describa que pasa cuando actuamos sin Dios al actuar de acuerdo con nuestros deseos y confiar en nuestras propias habilidades.

cias de la tierra. En la primera batalla en contra de Hai no se menciona el herem. Fue solamente hasta que Israel sufrió una derrota por motivos de la violación del herem en Jericó, que Josué colocó Hai bajo el herem. La gente entró a la segunda batalla completamente dedicado a Jehová.


1. Escriba en el pizarrón la pregunta, ¿Cómo algunas veces nosotros presumimos acerca de Dios o lo toma-mos como algo concedido? Prepárese para dar un pequeño testimonio de alguna ocasión cuando una con-fianza desmedida en sus habilidades le causó una derrota o decepción.

2. Mientras que las personas entran en el salón, pídales que respondan a la pregunta del pizarrón. Escriba sus respuestas en el pizarrón. Luego, comparta su testimonio de confianza desmedida. En seguida, lea el enfoque principal de la lección de hoy: “Actuar sin Dios por confiar en nuestros deseos personales y con-fiar en nuestras propias habilidades resultará en fracaso y desastre”. Dirija una oración.


3. Borre todas las palabras del pizarrón. Escriba las siguientes palabras arriba del pizarrón (que vienen del bosquejo de la Guía de Estudio: “La condición de infidelidad de los israelitas”, “la pregunta solemne de Josué”, “la explicación parcial de Dios”, “la confesión total de Acán”. Esto creará cuatro columnas que se usarán durante la lección. Si no hay un pizarrón disponible, use un póster.

4. Lea o pida a un voluntario que lea Josué 7:1-5. Usando el comentario de la Guía de Estudio y el Comentario Bíblico de la Guía de Enseñanza presente una corta lección sobre estos versículos. Invite a la clase a que comparta formas en las que nosotros como creyentes algunas veces somos infieles al Señor. Mientras ellos comparten, escuche palabras clave que ellos usen y escríbalas bajo la columna, “La condición de la infidelidad de los israelitas”. (Ejemplos pueden ser la falta de confianza, mentir, racionali-zar, desobedecer, egoísmo, etc.).

5. Lea o pida a un voluntario que lea Josué 7:6-9. Usando el comentario de la Guía de Estudio y los Comentarios Bíblicos de esta Guía de Enseñanza. Presente una corta lección acerca de estos versículos. Pida a la clase que comparta ocasiones, eventos, o crisis que ocurren en la vida y que nos causan preguntar sinceramente a Dios, “¿Por qué?”. Mientras ellos comparten, escríbalas en el pizarrón bajo la palabra “La pregunta solemne de Josué”. Lea Salmos 77 como otro ejemplo de la manera en que necesitamos ser hon-estos con Dios cuando estamos confundidos.

6. Lea o pida a un voluntario que lea Josué 7:10-12. Usando los comentarios de la Guía de Estudio y el Comentario Bíblico de esta Guía de Enseñanza, presente una corta lección acerca de estos versículos. Mientras que la lectura es presentada, escriba las razones de la derrota que Dios dio a Josué. (Pecado, vio-lación del pacto, tramaron cosas dedicadas, robaron y mintieron).

7. Lea o pida a un voluntario que lea Josué 7:16-21. Usando los comentarios de la Guía de Estudio y el Comentario Bíblico de esta Guía de Enseñanza, presente una corta lección acerca de estos versículos. Enfatice los pasos que Acán tomó en su camino a la desobediencia a Dios (7:21). Escriba las palabras “vio”, “codició”, “tomó”, y “escondió” bajo la columna con el encabezado, “La confesión total de Acán”. También remarque la esperanza de reconciliación que está disponible e implícita en las palabras “si no destruís” en Josué 7:12.

Aplicación

8. Comparta que cuando nos convertimos en creyentes en Cristo Jesús, entramos en un pacto de gracia con Dios. Pida a cada miembro que reflexione en las cuatro columnas y en las palabras escritas debajo de ellas. Recuérdeles que aunque somos salvos, eso no significa que nunca pecaremos. Sin embargo, cuando pecamos, dañamos nuestro compañerismo con Dios hasta que confesemos y busquemos el perdón. Lea

LECCIÓN 4: El peligro de actuar sin Dios


1 Juan 1:9. Mencione, Gloria a Dios por su fidelidad y por el hecho de que nuestros pecados pueden ser perdonados. Rete a la clase a que no vivan por si mismos en esta semana, porque sin Dios seguramente fa-llaremos. Pida a un voluntario que ore.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónEl 4 de Marzo de 1972 por su gracia y misericordia el Señor Jesucristo me permitió tener un encuentro per-sonal con Él. Llegándole a conocer como mi Señor y Salvador, después de obedecerle en el bautismo, con-tinué siendo discipulado nutriendo mi vida espiritual en la comunión del cuerpo de Cristo. Recuerdo gratas experiencias de intimidad con mi Señor particularmente en aquellos primeros años de estudios de mi carrera profesional como arquitecto cuando mi oración a Dios era pidiéndole la bendición de una oportunidad para servirle, desarrollando un proyecto arquitectónico de algún templo para una iglesia en la ciudad. El tiempo transcurrió en medio de varias circunstancias que sin culpar a nadie, y asumiendo mi absoluta responsabili-dad personal, empezaron a alejarme primeramente de la comunión de la iglesia y lenta y gradualmente de mi comunión con Dios. Con ello mi oración tristemente quedó en el olvido. La linda esposa que Dios me había dado era la única voz que para entonces yo escuchaba, sin prestarle atención, insistentemente diciéndome del peligro al que me estaba exponiendo por caminar alejado de Dios.

Habiendo una vez terminado mis estudios, empecé a involucrarme en responsabilidades propias de mi profe-sión, el éxito financiero estaba tocando a la puerta. Llevando una vida lejos de Dios y ajeno a la comunión de la iglesia, empecé a desarrollar un sentido de autosuficiencia de tal manera que estas bendiciones de Dios las llegue a considerar solamente logros personales obtenidos por mi capacidad. Cada día continuaba cayendo más y más en mi desgracia espiritual, dañando con mis actitudes y conducta a mi esposa y a la hermosa hija que Dios nos había dado.

Cuando yo había olvidado aquellas oraciones de petición a Dios, Él, que no olvida nada, en su momento lo trajo para enderezar mi vida y rescatarme de la perdición. Él uso una experiencia traumatizánte al permitir que tuviera un aparatoso accidente automovilístico. Yo sabía que el Señor estaba tratando conmigo. Dios me concedió la vida. Cuatro meses en la cama y siete más caminando con ayuda de muletas, después de una cirugía para implantarme una placa de acero con ocho tornillos que todavía llevo en mi cuerpo son un recuer-do constante de lo necio que resulta el obrar en sus propias fuerzas, en un sentido de autosuficiencia y sin la bendición de Dios. Cuando me humillé y quebranté mi corazón en su presencia, en su misericordia el Señor una vez más obro en mi vida y me concedió aquella petición que por años había quedado olvidada para mí, aunque no para Él. Me llamó nuevamente a su camino ¡y también al ministerio! Bendito sea mi Señor.

De este pasaje que nos muestra el sentido de autosuficiencia de un pueblo que decidió obrar sin la dirección de Dios y confiar en el poder de sus fuerzas, también aprendemos el peligro que se corre de experimentar la derrota espiritual. Dios nos creo y sabe lo que es mejor para nuestras vidas. No ignoramos sus planes y deseos, sigamos sus principios.

La condición de infidelidad de los Israelitas (7:1-5)La ciudad de Hai se encontraba ubicada al este de Bet-el y el altar que había sido edificado por Abraham (Gn. 12.8) estaba localizado muy cerca a Betavén (Jos. 7.2), al norte de Micmas (Is. 10.28). Cuando los israelitas la atacaron, inmediatamente después del saqueo de Jericó, en un primer momento fueron rechazados, pero después del castigo del pecado de Acán se utilizó una estratagema exitosa. El pueblo de Hai fue muerto, su rey fue ejecutado, y su ciudad quemada y transformada en una pila (Jos. 7.1–8.29). Mas tarde después de la conquista se convirtió en ciudad de Efraín (1 Cr. 7:28), y luego del exilio esta ciudad fue ocupada por los descendientes de Benjamín (Neh. 11:31). Isaías hizo una descripción del avance de los ejércitos asirios hacia Jerusalén pasando por Hai (Is. 10:28, “Ajat”).La localidad actual de Et-Tell (montón, morón) está situada a tres kilómetros al sureste de Bet-el (Tell Beitín) y generalmente se considera como Hai, por razones topográficas, y por la correspondencia entre los signifi-



cados de los nombres antiguos y modernos. Hai es también el nombre de una ciudad en Moab (Jer. 49:3) de ubicación desconocida .

“La ira de Dios se encendió contra Israel” (v.1) ¿Qué fue lo que ocasionó la ira divina en contra del pueblo de Israel? No olvidemos que a toda acción corresponde una reacción. La infidelidad siempre trae sus con-secuencias dolorosas. El pueblo hizo precisamente lo que Josué les dijo que no deberían hacer (6:18). Sin saber la condición espiritual en que el pueblo se encontraba, Josué envió nuevamente una avanzada para inspeccionar el territorio al que entrarían en la siguiente batalla, siempre mostrando que era un líder diligente, presto para hacer lo que sabia que debía de hacer (v. 2). Al recibir el consejo de enviar solo 2000 o 3000 gue-rreros decidió enviar el número mayor, no quería correr riesgos. Sin embargo experimentó que no importa cuanta fuerza militar pudiera tener, si no contaba con la ayuda de Dios todo esfuerzo resultaría en vano. Fue vergonzoso para los escuadrones de Israel tener que salir huyendo, dándole la espalda al ejército enemigo y perdiendo en el campo de batalla a unos 36 soldados. La moral del pueblo estaba en muy mala condición. La Biblia dice que “el corazón del pueblo desfalleció” (v.5).

¿Cómo mostró su infidelidad el pueblo? No obedecieron a su Palabra. Esta fue una terrible experiencia en la vida del pueblo de Dios, especialmente después de haber obtenido aquella contundente victoria sobre Jericó. El escritor sagrado dice; “Jehová estuvo con Josué y su fama se divulgo por toda la tierra” (6:27) Emocionado por su reciente victoria Josué y todo el pueblo fallaron al no obedecer a Dios quien en su palabra santa les había instruido sobre la necesidad de que todos debían de participar unidos en la lucha. “Y os mandé enton-ces, diciendo: Jehová vuestro Dios os ha dado esta tierra por heredad; pero iréis armados todos los valientes delante de vuestros hermanos los hijos de Israel. Solamente vuestras mujeres, vuestros hijos y vuestros gana-dos, quedarán en las ciudades que os he dado” (Dt. 3:18-19) De esta manera el pueblo desobedeció no yendo unido a la batalla. ¿No es verdad que nuestras acciones ya sean positivas o negativas, siempre repercutirán en la vida de otros, para bien o para mal? hemos de reconocer que cada acción nuestra, no es un acto ais-lado. Acán es la representación de muchas personas de esta sociedad en la que vivimos. Cada día luchamos en medio de un espíritu de individualismo donde nos resulta lógico pensar que podemos hacer con nuestras decisiones lo que bien nos parezca sin tomar en cuenta la vida de los demás. De igual manera muchos de los creyentes que aun no han madurado en la vida cristiana actúan pensando que lo que ellos decidan hacer con sus vidas es asunto meramente personal, ignorando la vida de comunidad, dañan el testimonio de la iglesia, que es el cuerpo de Cristo.

“Los hijos de Israel cometieron una prevaricación” (v.1). Acán con sus sentimientos de codicia sucumbió ante la tentación y cometió aquel hurto. Esta declaración bíblica nos enseña una vez más que afectamos con nuestras decisiones a los demás. Una vida libre de codicia siempre será una bendición para todos. En la ley dada a Moisés en el desierto para ser entregada al pueblo, Dios prohíbe categóricamente la codicia “No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo”. (Ex. 20:17) Santiago reprueba de igual manera esta actitud que es una enfermedad espiritual que debe ser erradicada del corazón del ser humano. ¿De dónde vienen las gue-rras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? “Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís” (Stg. 4:1-2).

La pregunta solemne de Josué (7:6-9)Ante los momentos más obscuros por los que está pasando el pueblo de Dios, cuando sus líderes están turba-dos y no alcanzan a entender lo que está sucediendo, en medio del desconcierto y la frustración, nos dan una enseñanza maravillosa que nunca hemos de olvidar, la oración. ¡Dedíquese a orar!

¿Los ancianos de Israel, así como también Josué, realmente se humillaron delante de la presencia de Dios? ¿Cómo podríamos caracterizar su oración? ¿Fue esta de aflicción y depresión? ¿O fue más bien una oración de humillación y confesión?

En estos versículos se identifican tres preguntas que nos ayudan a dar respuesta a estas y otras preguntas:



La primera pregunta: ¿Por qué hiciste pasar a este pueblo… para que nos destruyan? (v.7). La primera pre-gunta de Josué es la típica reacción nuestra cuando nos sucede alguna cosa o circunstancia adversa en nuestra vida ¿Por qué? Las conclusiones apresuradas de Josué hasta aquí, no muestran todavía entender que la razón principal de la experiencia por la cual están pasando tiene su raíz en su desobediencia al no consultar a Dios he ir a la guerra por su propia iniciativa. No ha comprendido hasta este momento que la razón de su fracaso reside en la confianza que tienen en ellos mismos. La confianza del ejército ante la contundente victoria obtenida en la conquista de Jericó, les a guiado a desestimar al enemigo he impulsado a obrar en sus propias fuerzas sin contar con el consejo ni las ordenes de Dios. Josué está turbado y no comprende que Dios no ha fallado a su pacto, sino ellos, el pueblo que ha abandonado al Señor para apoyarse en su propia prudencia. Pero aunque no lo comprende una cosa asoma en medio de la oscuridad. ¡Ellos tienen, aunque sea un poco de fe y por eso oran!

La segunda pregunta: ¡Ay Señor! ¿Qué diré…? (v.8). Josué muestra una gran queja. La preocupación de Josué es por la reputación del pueblo de Jehová de los ejércitos a quien él está guiando y ahora teme por su seguridad, la ve amenazada cuando llegue a oídos de las demás naciones el testimonio de la derrota sufrida por Israel en aquella manera tan vergonzosa. Cuándo usted le ha fallado a Dios por confiar en usted mismo, ¿Le preocupa lo que las demás personas puedan decir? o ¿Le preocupa el testimonio respecto al carácter de Dios que quedará en entredicho? Que Dios nos ayude a discernir lo que verdaderamente es importante ante los ojos de Dios y no los nuestros.

La tercera pregunta: ¿Qué harás tu a tu gran nombre? (v.9). Si el pueblo de Israel era exterminado, entonces Josué tenía una gran preocupación, preocupación legitima por el honor de su Dios. El desprestigio del pueblo de Dios, es desprestigio para Dios mismo, porque su nombre es blasfemado. Cuanta falta hace el que también nosotros tengamos siempre en nuestra mente y en nuestro corazón esta genuina preocupación por mantener el prestigio en alto del nombre de Dios.

Josué en compañía de los dirigentes de la nación expresan una gran preocupación y se muestran desalentados ante la situación que están viviendo por lo que al responder apropiadamente se humillan ante la presencia poderosa de Dios para consultarle lo que su limitado entendimiento no era aun capaz de comprender. Y el Señor en su gracia y misericordia acepta la oración de Josué y los ancianos de Israel y no solo les indica cual es el problema sino que a la vez les da instrucciones de cómo identificar y tratar con el problema/causa de los dolores que ahora está sufriendo el pueblo. No olvidemos que la desobediencia traerá siempre sus conse-cuencias, y ellas son dolorosas. Pidámosle al Señor Jesucristo que nos de un espíritu de humildad para decidir caminar cerca de Él en obediencia.

El Señor Jesucristo dijo: “Porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla, será enalte-cido” (Lc. 14:11). No olvidemos que el elemento indispensable para triunfar es la humildad. Josué se humilló delante de Dios y con sincero arrepentimiento oró a Dios. El Señor le oyó y le respondió guiándole a saber cual era el motivo de su fracaso. Cuando usted se sienta en la misma situación no olvide que tenemos un Dios amoroso que es lento para la ira y grande en misericordia, y por su misericordia le guiará a identificar en donde radica el problema si es que usted se acerca también en una actitud de humillación.

La explicación parcial de Dios (7:10-12)El pecado es la causa de las circunstancias por las que está pasando Josué con toda la nación en aquellos momentos que siente el abandono de Dios. El Señor le indica a Josué la razón de los hechos (v.11), y acepta la humillación de su siervo a quien ha escuchado. Ahora Josué necesita actuar, el pecado necesita ser erradi-cado de en medio del pueblo de Jehová (v.12). Solo así podrán contar con la presencia antes prometida de su Dios (v.12b).

Jamás debemos de olvidar que cuando le hemos fallado al Señor, ya sea por caminar lejos de Él, o simple-mente por no obedecer, como Santiago nos enseña diciendo “al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado” (Stg. 4:17). Es tiempo de volvernos en arrepentimiento, clamar al Señor quien nos mostrará en donde



reside el problema. Dios no ha abandonado a su pueblo, su pueblo le ha abandonado a Él. ¡Es tiempo de rea-firmar el pacto y volver en humillación a nuestro Dios y no apoyarnos en nuestra propia prudencia!

La confesión total de Acán (7:16-21) Acán, miembro de la tribu de Judá respondió diciendo “verdaderamente yo he pecado contra Jehová el Dios de Israel, y así y así he hecho” (v.20). Este pasaje bíblico contiene hermosas enseñanzas respecto a la confe-sión de pecados.

1. Acán confiesa que ha pecado y reconoce que su pecado es contra Dios mismo. Este principio espiritual aun está vigente. El salmista dijo: “Contra ti, contra ti solo he pecado, Y he hecho lo malo delante de tus ojos; Para que seas reconocido justo en tu palabra, Y tenido por puro en tu juicio” (Sal 51:4)

2. Acán confiesa su pecado y lo hace públicamente ante todo el pueblo reconociendo que ha lastimado y ofen-dido también al pueblo.

3. Después de su confesión Acán es estimulado a dar gloria a Dios. “Porque nuestra gloria es esta: el testi-monio de nuestra conciencia, que con sencillez y sinceridad de Dios, no con sabiduría humana, sino con la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo, y mucho más con vosotros”. (2 Cor 1:12).

Aunque la voluntad de Dios es muy clara al respecto, la Biblia dice que debemos buscar la santidad. “Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor” (Heb. 12:14). Cuando una persona ha ofendido a Dios y le confiesa en humildad al Señor su pecado, Dios puede usar ese suceso para traer gloria a su nom-bre.

Conclusión: La derrota del pueblo de Dios en manos del pueblo de Hai, es una ilustración muy gráfica del peligro que corremos al actuar sin Dios. No debemos de obrar sin antes estar seguros que hemos recibido la dirección del Señor mediante sus claras instrucciones, busquemos siempre su sabio consejo. La obediencia a nuestro Señor Jesucristo no es un asunto negociable, la derrota de Israel en manos del ejército del pueblo de Hai señala que la obediencia a Dios es de carácter fundamental. Seamos fieles a nuestro Dios, Él está anhelando no solo nuestra confianza en Él, sino también nuestra obediencia e incuestionable consagración.

El pueblo de Dios experimentó el fracaso al enfrentar al pueblo de Hai. La búsqueda del rostro de Dios en oración, con un corazón contrito y humillado es el principio fundamental de todo creyente si desea encontrar realmente la solución a sus fracasos. Dios se lo revelará, tenga la sensibilidad para escuchar su voz, el valor para obrar y solicitar el perdón de Dios así como también del pueblo a quien se ha ofendido. Hoy es el día para dejar atrás una vida de fracasos y derrotas espirituales y vivir una vida victoriosa en el nombre del Señor Jesús. Amén



29

Lección 5

DIOS DA LA VICTORIACOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoLa narración no es favorable en cuanto a los líderes de Israel. Ellos fueron fácilmente engañados.

El acuerdo israelita con Gabaón refleja la deserción de los indí-genas cananitas de una sobrecarga aristocrática a una gente insurgente, Israel. Josué 9 describe como cuatro ciudades no israelitas (Gabaón, Cafira, Beerot y Quiriat-Jearim), encabezadas por Gabaón, se incorporaron por ellas mismas a las estructura de las tribus de Israel. Ellos entraron como ciudadanos de segunda clase, pero adquirieron defensas de primera clase de parte del ejército de Israel.

El pacto con los gabaonitas trajo a toda la región entre Gabaón y Siquem un control israelita. La deserción de elementos substan-ciales de la población indígena engrandeció a Israel. El acuerdo fue importante porque Jerusalén, la ciudad más grande en el área, formó una alianza para castigar a Gabaón por sus acciones.

La historia de los gabaonitas incluye una explicación del origen de prácticas acerca de la condición de servitud de los gabaoni-tas. Israel preservó la tradición del pacto con los gabaonitas para explicar el uso de esclavos gabaonitas en el santuario en Gilgal y posteriormente en Jerusalén.

Los gabaonitas constituían gente étnicamente distinta de Israel y de los esclavos amorreos mencionados en Josué 10:5. Ellos podrían haber venido de una tierra lejana no mucho antes de la llegada de los israelitas. Esto podría explicar su deseo de hacer un acuerdo con los israelitas, y la oposición de Canaan una población indígena mas establecida. Los gabaonitas aparente-mente controlaban su propio territorio en ese tiempo. Después de la muerte de Saúl, muchos no se consideraban parte de Israel (2 Samuel 21:2). Ellos finalmente perdieron su identidad racial y se asimilaron a Israel durante la reorganización administrativa de los reinos bajo Salomón.

Enfocándose en el significadoLa victoria comienza al hacer las decisiones correctas en la vida. El pueblo de Dios debe buscar la ayuda del Señor antes de hacer decisiones mayores. Todos escuchamos la “voz” de Dios en nuestra propia manera, y la comunicación con el Señor hace ese reconocimiento más fácil.

Sin embargo, hay ocasiones cuando actuamos sin buscar el con-sejo de Dios. En esas ocasiones, el Señor nos ayudará si lo bus-camos a El. Dios trae algo bueno de circunstancias malas cuando aprendemos a confiar en el Señor.

U N I D A D


U N I D A D


tierra prometida

Texto Focal: Josué 9:3-15; 10:6-14, 40-42


Enfoque Principal: Dios da la victoria a sus hijos cuando ellos actúan de buena fe.

Algo en que pensar¿Podemos contar con Dios?

Aplicación personalDescubrir las implicaciones de estos pasajes en cuanto a la vic-toria dada por Dios en nuestras vidas.

Meta de enseñanzaGuiar a la clase para bosquejar estos pasajes acerca de la victoria que Dios da y mencionar su sig-nificado para la vida de hoy.

Estos capítulos también nos enseñan la importancia de guardar nuestro compromiso cuando los tiempos son difíciles. Los empleadores deberán de mantener la fe con sus empleados. La familia deberá de mantenerse junta cuando uno de los miembros experimenta cambios mayores. Las iglesias deberán de mantener sus promesas hechas a sus ministros. La fe en Dios nos ayuda a mantener los difíciles compromisos que hacemos en la vida.


1. Antes que la clase comience, escriba en le pizarrón la pregunta, ¿Qué tan importante es para usted el con-cepto de cumplir con nuestra palabra? También, durante la semana y antes de la clase, localice diferentes ejemplos de cómo el mundo constantemente no guarda su palabra y como eso trae conflicto. Artículos, o encabezados periodísticos y revistas son generalmente una buena fuente. Traiga estos a clase.

2. Mientras que la gente entra al salón, pídales que respondan a un compañero la pregunta que escribió en el pizarrón. También, distribuya los ejemplos del paso 1 a unas cuantas personas en la clase y pídales que estén listos para leer cuando se les indique.


3. Pida a los voluntarios que enlistó a que lean los ejemplos que les dio. Diga a la clase, La lección de hoy incluye una ocasión cuando a los lideres israelitas se les pidió que guardaran su palabra a un grupo de gente, aun cuando esa gente los había intencionalmente engañado. Explique que este es sólo un ejemplo de obediencia. Lea el enfoque principal de la lección de hoy, “Dios da la victoria a sus hijos cuando ellos actúan de buena fe”.

4. Escriba en el pizarrón, “Victoria sobre aquellos que buscaban engañarnos (Josué 9:3-15)”. Pida a la clase que comparta ejemplos cuando una apariencia exterior o una expresión pública resulto ser falsa una vez que la persona la examina más de cerca. Ejemplos podrían incluir un anuncio de un producto en la tele-visión, un anuncio de un precio de venta, un nuevo artículo o tecnología, etc. Después de un corto tiempo de respuestas, presente una breve lección de Josué 9:3-15 usando los comentarios de la Guía de Estudio y “Comentario Bíblico” de esta Guía de Enseñanza.

5. Dirija a la clase en una discusión usando las siguientes preguntas: ¿Qué motivó a los gabaonitas a actuar de la forma que lo hicieron? ¿Justificaban sus preocupaciones

sus motivos? ¿Por qué? ¿Qué es lo que gentilmente nos recuerda Josué 9:14? ¿Cuáles son algunas decisiones comunes que hacemos en nuestras vidas diarias sin buscar la volun-

tad de Dios?

6. Escriba en el pizarrón, “Victoria sobre aquellos que buscaban derrotarnos (Josué 10:6-14, 40-42)”. Resuma a la clase Josué 9:16-27. Enfatice que Josué guardó sus promesas y de todos modos hubo consecuencias para los gabaonitas.

7. Guíe a la clase en una discusión acerca de las preguntas que siguen: ¿Por qué piensa usted que Dios tomó la iniciativa y aseguró a Josué la victoria en Josué 10:8? ¿Piensa usted que Dios usa la creación física hoy para lograr sus propósitos? ¿De que manera la oración juega su parte en la historia? ¿De acuerdo con Josué 10:40-42, quién estaba haciendo la pelea y quién trajo la victoria?

Aplicación

8. Pregunte a la clase, ¿Es más difícil para usted confiar en Dios o seguir a Dios? Recuerde a la clase que debemos de hacer las dos cosas fielmente para que Dios traiga la victoria en nuestras vidas. Rete a la clase

LECCIÓN 5: Dios da la victoria


para que sea fiel en esta semana que viene al pedir a Dios que los guíe a la victoria sobre los retos que ellos podrían estar enfrentando. Pida a la clase que repita después de usted, “confíe y siga”. Termine con una oración.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónEs imposible negar que desde el momento en el cual decidimos seguir a Jesús, nuestra vida ha sido el blanco de ataques del enemigo y de aquellos bajo su autoridad en este mundo. Día con día luchamos por mantener-nos firmes en la fe que proclamamos. Sin embargo, también es imposible negar que El Señor nos ha brindado la salida y la victoria en cada una de las adversidades que hemos enfrentado hasta este momento. Podemos proclamar con toda certeza que ¡Dios es fiel!

La evidencia de esa fidelidad de Dios, se refleja en la oportunidad que usted tiene en este preciso momento de meditar en su palabra. Las luchas que Dios le ha permitido experimentar en el pasado, han sido confecciona-das por el Señor mismo con el propósito de que usted experimente la victoria. ¡Para saborear la victoria hay que experimentar la adversidad!

Estos capítulos del libro de Josué, nos hablan de la victoria que Dios otorgó al pueblo de Israel sobre los Gabaonitas. Nos recuerdan además que nosotros como pueblo suyo podemos contar con Él cuando le necesitamos para vivir victoriosamente. Dios promete darnos la victoria sobre aquellos que podrían estar maquinando engaño e ideando formas de como vencernos.

Victoria sobre aquellos que buscan engañarnos (9:3-15)Mientras la mayoría de los pueblos que vivían en el entorno se encontraban listos para atacar a Israel (Josué 9:1-2), los moradores de Gabaón tomaban pasos drásticos para evitar el conflicto con el pueblo de Dios.

La ciudad de Gabaón a la cual nos referimos, se encontraba localizada cerca de Hai en el territorio que más tarde Josué asignaría a la tribu de Benjamín.

Fingir ser embajadores de lejanas tierras (9:4), fue el primer acto de engaño que los ciudadanos de Gabaón pusieron en marcha en contra de Israel. De acuerdo al pasaje, ellos montaron sobre sus animales de carga exuberantes cantidades de provisión con el propósito de dar la apariencia de un largo y tedioso viaje.

En cuanto a la vestimenta que utilizaron, la escritura dice que ellos cubrieron sus cuerpos con harapos y sus pies con zapatos rotos y remendados (9:5). Su arte en el engaño quedo plenamente demostrado al no olvidar los detalles pequeños. Ellos tomaron para su sustento en su largo viaje, pedazos de pan seco y mohoso (insi-nuando con esto que ese pan se encontraba fresco en el momento de su partida).

¿Qué condujo a este pueblo a recurrir a semejante comportamiento? Todo parece indicar que entre las cosas más importantes que ellos buscaban, era firmar un acuerdo de mutuo beneficio con el pueblo que Josué lide-raba y preservar la vida de su pueblo.

La elaboración detallada de ese plan de los Gabaonitas, respondió al conocimiento que ellos tenían de las estrictas prohibiciones del Dios de Israel para con los suyos. Ellos sabían de antemano que Dios había prohi-bido a su pueblo hacer acuerdos con gente que viviera dentro de los entornos de Canaán.

El interesado deseo de los Gabaonitas en lograr una alianza de tal magnitud (9:6), levantó ligera sospecha entre el pueblo de Israel. Ellos reconocieron a los visitantes como pertenecientes al pueblo Heveo cuyo terri-torio se encontraba dentro de las comarcas de Canaán.

Cualquier clase de trato con ellos significaría una violación al protocolo de la guerra santa. Por lo tanto, la lluvia de preguntas (9:7) a las cuales fueron sometidos tiene sentido.



Dando la mejor de las razones para recibir aceptación, los gabaonitas dijeron ser siervos de Israel (9:8). Su manera de expresarse nos muestra que ellos se comportaron corteses y formales para con el pueblo de quien esperaban recibir un grande beneficio. Parte de las acciones que los gabaonitas tomaron, eran prácticas comunes entre los pueblos de la antigüedad. Se dice que cuando dos naciones llegaban a un acuerdo en común, la nación menos poderosa debía rendir servicio y lealtad a la nación más poderosa; pero a la misma vez, la nación que recibiría el servicio, debía juramentar protección a la más débil.

Considerando a fondo la estrategia de los gabaonitas, ellos deberían haber recibido un gran aplauso y El Oscar por su gran dramatización (9:12-13). Sin mostrar temor ni dificultad alguna, ellos mostraron a los hombres de Israel el pan mohoso, los deteriorados cueros de vino, y su vestimenta rota. Con cierto grado de incredulidad los líderes de Israel escucharon a los mensajeros de Gabaón y vieron la evidencia de sus perte-nencias.

Una vez que la engañosa evidencia fue presentada (9:14), sin consultar a Jehová, Josué estableció un acuerdo con los mensajeros de Gabaón tal y como ellos lo habían planeado.

El término paz que era de uso común entre los pueblos de la antigüedad (9:15), significaba un acuerdo de mutuo beneficio. Bajo la decisión de Josué, los líderes de Israel dieron su palabra; la cual les llevaría a cumplir con sus obligaciones contenidas en dicho tratado.

Finalmente, la escritura nos revela que los gabaonitas no fueron destruidos. Y aunque todo parece indicar que ellos engañaron al pueblo de Dios, en realidad llegaron a ser sirvientes de Israel (9:27).

Debemos enfatizar aquí que aunque los israelitas actuaron equivocadamente al no consultar a Jehová, actua-ron en bondad y fe; y que Dios les dio la victoria sobre aquellos que con artimañas buscaban engañarlos.

Ilustración:George Truett, a pesar de haber nacido en Carolina del Norte, fue considerado por los Bautistas de Texas como uno de sus más finos ciudadanos. En 1889 su familia cambio su domicilio a Whitewright, Texas. Dios uso su iglesia para causar en Truett una fuerte impresión y un profundo llamado al ministerio. A la edad de 30 años llegó a ser pastor de la Primera Iglesia Bautista de Dallas, Texas, en donde sirvió por espacio de 47 años. En 1920 tuvo la oportunidad de entregar un importante mensaje sobre libertad religiosa en el capitolio de los Estados Unidos.

En su septuagésimo aniversario Truett escribiendo a su esposa dijo: “Me gustaría en este día volver a dedicar todo mi ser a Cristo.” Dios concedió a George Truett plena victoria en su vida cristiana y en el ministerio al cual Dios lo había llamado a pesar de la oposición de algunos que buscaron sin duda dañar su influencia y trabajo. Truett mostró suficiente humildad y fidelidad a Dios. Aplicación:Tarde o temprano experimentaremos en nuestra vida la presencia de aquellos que, buscando un beneficio pro-pio, tratarán de sobornarnos y engañarnos de la misma manera en la cual el pueblo de Israel cayó víctima. Y aunque muchas veces lo lograrán, al final sabemos que de todas maneras, debido a que Dios es el experto en transformar las actitudes engañosas del hombre en grande bendición para con sus hijos, obtendremos la vic-toria. Conscientes de esto, podemos actuar con libertad para con aquellos que demanden de nuestras manos ayuda, amor y misericordia.

¿Cuántas veces, llevados por la duda, no permitimos que Dios pueda utilizarnos como un canal de bendición para otros? ¿A cuántos, debido a nuestra sospecha, hemos mandado sin un bocado de pan a la cama, o les hemos abandonado a su suerte en el frió de la noche? No debemos olvidar que Dios tiene el control de todas las cosas. De la misma manera en la cual el promete victoria, también demanda de cada uno de los suyos lle-



gar a ser un fiel representante de su amor y su misericordia.

Victoria sobre aquellos que buscan vencernos (10:6-14, 40-42) Una coalición de los reyes de los amorreos bajo el liderazgo del rey de Jerusalén se preparó para atacar a Gabaón debido a la alianza que estos había pactado con Israel (10:1-5). Recordándole a Josué que ellos eran sus siervos (10:6), los gabaonitas apelaron al convenio que había sido pactado con anterioridad (9:15). Y aunque los israelitas habían sido engañados, sin embargo, cumplieron sus obligaciones que habían juramen-tado. El pueblo de Israel brindó ayuda a los gabaonitas con la plena seguridad que Dios les haría prevalecer en la batalla.

La victoria de Israel sobre la coalición de los amorreos, no se debió a sus ingeniosas estrategias de guerra; tampoco fue debido a lo numeroso de su ejército. Los versículos del 9-14 claramente indican que Dios inter-vino a favor de su pueblo.

Parte de su creación se vio envuelta en este evento histórico milagroso. Esta intervención pudo haber ocurrido al amanecer o al mediodía. La Palabra de Dios contiene evidencia a estas dos posibilidades.

De acuerdo a la narración bíblica, el ejército de Israel recorrió entre veinte y veinticinco millas marchando durante toda la noche desde Gilgal para prestar ayuda a los gabaonitas (10:9). La decisión de Josué de reco-rrer por la noche esa distancia, fue con el propósito de tomar ventaja y sorprender al oponente. Posiblemente su intención era atacar antes que amaneciera.

Una vez envuelto en la batalla, y temiendo en cierta manera no tener el tiempo suficiente para aniquilar al enemigo, bajo inspiración divina y con una fe ejemplar, Josué pidió al sol detenerse en Gabaón y a la luna en el valle de Ajalón (10:12). El dirigió estas palabras a ambos astros en el momento en el cual ambos eran visi-bles en el cielo. Nos podríamos preguntar ¿cómo es esto? Gabaón se localiza relativamente en el este (donde el sol se levanta) y Ajalón se localiza unas 10 millas al oeste de Gabaón (donde la luna se pone).

La palabra detente que Josué dirigió a estos dos astros contiene una variedad de significados como: calla, inactívate, cesa tu función etc. Debido a que la función del sol es brillar, la palabra en este contexto podría haber significado ¡deja de brillar! Si embargo, la parte final del versículo 13 describe al sol como suspen-dido en el cielo; y por consiguiente, brindando a Israel el tiempo necesario para salir victorioso de aquella encarnizada batalla.

Los amorreos se retiraron primero rumbo al norte y luego hacia el sur. Finalmente, decidieron huir en direc-ción al pie de las montañas localizadas en la costa del Mediterráneo (10:10-11). Pero al final, Jehová Dios complicó su retirada bombardeándoles con piedras de granizo; un fenómeno bastante raro en época de verano en Palestina.

En este día el Señor atendió a la voz de un hombre (10:14). El punto importante en esta declaración no es que Dios escucha el consejo del hombre, sino que Dios contesta las oraciones de sus hijos cuando estas son pro-nunciadas con fe y convicción.

¿Por qué Dios respondió tan decisivamente y de esta manera? Podría ser que lo hizo con el propósito de hon-rar a Israel debido al cumplimiento de su pacto con el pueblo de Gabaón. Podría ser que lo hizo también en respuesta a la oración ferviente de Josué de tal forma que otros pudieran oír (10:12; ver también Juan 11:41-42).

La completa destrucción de esta coalición de los amorreos y la muerte de sus líderes (Josué 10:16-28), fue tan solo un ejemplo de las numerosas victorias que el pueblo de Israel obtuvo sobre las ciudades en el área sur de Canaán (10:29-43).

El escritor sagrado concluye la narración de esas victorias en un corto resumen (10:40-42). Este resumen



incluye la designación de varias regiones que fueron conquistadas, la descripción de los límites de frontera y la mención de los líderes de esas áreas.

El escritor sagrado parece decir que todo cananeo fue erradicado de la tierra de Canaán durante esas batallas. Sin embargo, sabemos que esto no fue así. La Biblia declara que los israelitas no lograron conquistar ni tam-poco controlar toda la tierra durante el liderazgo de Josué (Jueces 1:1—2:5). De hecho, el líder de la coalición de los amorreos, fue una notable excepción a esta declaración (Josué 15: 63).

Aplicación:Uno de los principios más importantes de esta porción de la Escritura que deberíamos atesorar como hijos de Dios, es que las victorias no se ganan tan solo en base al esfuerzo humano, sino que el elemento más importante en esas victorias lo conforma la intervención de Dios. Porque no fue la inteligencia de Israel, ni el número de sus ejércitos lo que trajo la victoria, sino la presencia misma de Dios en medio del pueblo. Por lo tanto, no deberíamos anidar en nuestro corazón un sentimiento de independencia para con el Señor, sino por el contrario, reconocer que sin su ayuda no seríamos lo que hoy somos ni hubiésemos tampoco logrado lo que hoy poseemos.

Otro de los principios que no puede pasar desapercibido a nuestra vista, tiene que ver con la oración. Como hemos visto, la actitud con la cual Josué dirigió sus palabras en aquella ocasión y la inmediata respuesta de Dios nos brindan valiosas enseñanzas. Si nuestra actitud de oración contiene los mismos elementos conteni-dos en la oración de Josué (firmeza y confianza), entonces Dios dará oídos a nuestro clamor y nos brindará la salida a nuestras dificultades.

Preguntas de reflexión 1.- ¿Se han confabulado contra usted para hacerle caer y desistir en lo que ha emprendido realizar?

2.- ¿Cómo se ha sentido usted ante esta situación?

3.- ¿Qué tan importante es el concepto de juramento en la cultura de la cual proviene?

4.- ¿Piensa usted que Dios echa mano de su creación para llevar a cabo sus propósitos divinos? Si así es, ¿cómo es esto?

5.- ¿Cuáles son sus pensamientos acerca de la necesidad de interceder unos por otros?



35

Lección 6

DECIDE HOY SERVIR AL SEÑORCOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoJosué 13—22 nos dice la historia de la división de la tierra en regiones por tribu. Aunque Israel no poseyó toda la tierra enlis-tada en estos capítulos hasta después del tiempo de David, el escritor Bíblico del tiempo de Josías incluyó una descripción de varias fronteras de las tribus. Mucha tierra permaneció sin ser conquistada en el tiempo de de la muerte de Josué. (Josué 13:1). Incluido en estos capítulos están también las ciudades de refugio (Josué 20.) y las ciudades de los levitas (Josué 21). Josué 22 con-tiene historias de conflicto con las tribus de más allá del Jordán.

Los capítulo 23 y 24 presentan diálogos de Josué a los líderes de las tribus de Israel. Estos pasajes proveen el trasfondo necesa-rio para entender la renovación ceremonial del pacto discutida en Josué 24—Deuteronomio 11:26-32; 27:1-26; Josué 8:30-35. Muchos creen que una renovación ceremonial del antiguo pacto aconteció en Siquem en el otoño de ese año. Deuteronomio 31:9-13 se refiere a la ceremonia efectuada cada siete años. El enfoque del evento era la lectura de la Tora y el compromiso de la gente a obedecer sus enseñanzas.

El discurso de Siquem recitaba las obras salvadoras de Jehová. La gente debería de escoger su deidad. Josué y su casa (tribu) habían ya escogido a Jehová. La gente lo siguió y de igual manera escogió a Jehová. Josué entonces dirigió a la gente en una promesa de fidelidad a Jehová. La ceremonia concluyó con una lectura de “los estatutos y ordenanzas” (Josué 24:25), y Josué colocó una piedra de conmemoración. Persuasión y amonestación impregnaban el texto. Josué buscó animar a la gente para que hicieran una resolución a ser fieles.

Enfocándose en el significadoSeguir a Dios no es una actividad fácil. El mundo tiene muchas distracciones para el pueblo de Dios. Sus distracciones o dioses puede que no se parezcan a los dioses del Israel antiguo, pero usted enfrenta retos similares hoy con el materialismo. Usted no puede servir a dos dioses, porque el Señor es celoso. Usted necesita tomar muy en serio su devoción hacia Dios.

Así como Israel regresaba a Siquem para renovar el pacto, usted también necesita renovar su pacto con el Señor periódicamente. Regularmente evaluar su compromiso con el Señor. Recuerde, Dios no acepta un compromiso a medias. La gracia no es barata, y aquellos que seguimos al Señor debemos de tomar nuestra cruz. Usted deberá de morir así mismo.

Josué enlista para la gente algunos de los actos poderosos de Jehová cumplidos en su jornada hacia la Tierra Prometida. Deuteronomio 6:4-9 recordó a la gente que no se olvidaran de

U N I D A D


U N I D A D


tierra prometida

Texto Focal: Josué 24:1-3a, 13-25

Trasfondo Bíblico: Josué 24

Enfoque Principal: Somos llamados a comprometer-nos en una forma definitiva y completa a servir a Dios como el Señor de nuestras vidas.

Algo en que pensar¿De qué manera un compromiso de esta magnitud con el Señor cambiaría nuestra vida?

Aplicación personalComprometerme definitivamente a servir a Dios como el Señor de mi vida.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a decidir a com-prometerse definitiva y comple-tamente a servir a Dios como el Señor de sus vidas.

Dios. Cuando los israelitas enfrentaban el desanimo, ellos podían mirar las obras de Jehová. Su lista de ben-diciones debería ciertamente incluir las obras de gracia del Señor en su vida. El reto para todo creyente es no olvidarse. ¿Qué incluiría su lista?

¿Cuándo empezará usted este proceso de evaluación y renovación? Josué 24 nos recuerda que ¡El tiempo de la decisión es hoy! Como líder, usted da un ejemplo a los demás de cómo seguir. Josué proclamó el compro-miso de su familia, y los demás lo siguieron. Alguien deberá de ir adelante. ¿Por qué no usted?


1. Escriba en el pizarrón el enfoque principal de la lección de hoy, “Somos llamados a comprometernos en una forma definitiva y completa a servir a Dios como el Señor de nuestras vidas”.

2. Antes de que la clase comience, enliste a un voluntario para que se prepare para compartir su testimonio de conversión. Invite a esa persona a que comparta su testimonio. Después del testimonio, lea la sección, “algo en que pensar” de la lección de hoy y ore.


3. Presente una breve lección de Josué 24:1-3, 13 usando los comentarios de la Guía de Estudio y “Comentario Bíblico” de esta Guía de Enseñanza. Enfatice la importancia de recordar la actividad de Dios en el pasado. Pida a un miembro de la clase que dirija una oración adorando y agradeciendo a Dios por su fidelidad.

4. Presente una breve lección usando los comentarios de esta Guía de Estudio y “Comentarios Bíblicos de esta Guía de enseñanza relacionada con Josué 24:14-22. Enfatice a la clase el significado de las pala-bras “reverencia”, “servicio”, y “fidelidad” del versículo 14. Pregunte, ¿Por qué usted piensa que Josué respondió en los versículos 19-20 de la manera que lo hizo?

5. Dirija a cada persona en la clase a que localice y lea Santiago 2:26 en sus Biblias. Luego pida que escuchen mientras que usted lee Josué 24:23-25. anímelos a que noten de que maneras Santiago 2:26 se relaciona a estos versículos en Josué. Pida algunas respuestas y luego presente una breve lección usando los comen-tarios de la Guía de Estudio y “Comentario Bíblico” de esta Guía de Enseñanza relacionada con Josué 24:23-25.

Aplicación

6. Distribuya a cada persona en la clase una tarjeta de 3 X 5 pulgadas. Instruya a cada persona a que escriba una cosa sobre la cual necesitan hacer una decisión. Asegúreles que estas tarjetas no serán compartidas. Son par uso persona solamente. Luego instruya a cada persona a que volteen la tarjeta y escriban de una a tres acciones, relacionadas con la decisión que necesita hacer, y que ellos entregarán a Dios para que la cumpla. Lea a la clase Josué 24:25-27 una vez más. Rete a la clase a que permitan a la tarjeta que ellos han hecho que sea un substituto de la “piedra” mencionad en estos versículos. Anímelos a que coloquen la tarjeta en sus Biblias en Santiago 2:26 para que sirva como un recordatorio del compromiso que ellos han hecho hoy. Concluya con una oración.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónNosotros hacemos nuestras mejores decisiones espirituales cuando consideramos con mucho cuidado cada una de las opciones que se nos presentan y las clarificamos a través de alguien en quien confiamos. Solo así, confirmamos que hemos optado por la mejor y más correcta decisión.

LECCIÓN 6: Decide hoy servir al Señor


Aunque día tras día enfrentamos un sin numero de decisiones pequeñas, a lo largo de nuestra vida, sin embargo, un puñado de ellas podría pintar nuestro futuro. En una forma muy particular yo experimente el efecto positivo de algunas de esas decisiones que trascendieron más allá de lo esperado.

En su oportunidad, y a pesar de haber permanecido como un cristiano ordinario por un tiempo considerable, a Dios le plació unirme al grupo de alabanza de la congregación a la cual en ese tiempo pertenecía. Habiendo permanecido por espacio de cinco años sirviendo en ese ministerio, Dios insertó en mi corazón la necesidad de predicar su palabra, no tan solo a través del canto, sino también a través de la palabra hablada (predi-cación). Fue entonces que, una decisión pequeña, dio paso a otra mayor. De esa necesidad incomprensible de predicar su palabra surgió un nuevo ministerio en el cual permanezco, por la gracia de Dios, hasta el día de hoy. No cabe duda que existan decisiones que trascienden positivamente; pero también existen otras que impactan negativamente la vida de aquellos que optan por la decisión equivocada.

En el último capítulo de este libro que lleva su nombre, Josué invitó al pueblo de Israel a considerar la mejor de las decisiones. Dios les había conducido a la conquista de la tierra de Canaán (Josué 1-12). Siendo la tierra de Canaán como un regalo de parte de Dios para Israel, el Señor les había guiado en la distribución de la misma en favor de las tribus existentes. La repartición de esa tierra fue de la siguiente manera: Las tribus al este del río Jordán (Josué 13); las tribus al oeste del río Jordán (Josué 14-19); las seis ciudades de refugio (Josué 20); y las cuarenta y ocho ciudades para la tribu de Leví (Josué 21). En aquella ocasión, los Israelitas escucharon con la debida atención el discurso de despedida de Josué, y se prepararon para tomar posesión de las áreas asignadas por su líder (Josué 22-23). Durante esta fase crítica de transición, Josué reunió al pueblo y les retó a tomar una importante y trascendente decisión.

La decisión considerada (24:1-3 a, 13)Josué convocó a todas las tribus (24:1) y habló a toda la gente (24:2). El escritor sagrado utilizó aquí cuatro términos en su narración, los cuales denotan que todo nivel del liderazgo de la comunidad participó en este importante evento (ancianos, líderes, jueces y oficiales de Israel (24:1). Esta convocación, no fue idea de Josué, sino de Dios; quien inició la invitación de Josué a reunir al pueblo a presentarse delante de Él.

Esta convocación delante de Dios se llevó a cabo en Siquem, una de las más grandes ciudades en las partes altas de Samaria o la parte central de Canaán. Los escritos de Amarna revelan que esta ciudad fue un impor-tante centro cientos de años antes del arribo del pueblo de Israel. Fue la cuna de la creciente adoración al dios Baal (el señor de los pactos) en uno de los más importantes santuarios de aquel tiempo.

Josué sabía la relevante información que Israel necesitaba considerar para la toma de sólidas decisiones en cuanto a su definitiva y exclusiva alianza con Dios. La frase que Josué utilizó al inicio de su discurso, “esto es lo que el Señor, el Dios de Israel dice,” y la cual también es común encontrarla en la proclamación de los profetas, nos hace ver con claridad que Dios comunicaba su propio mensaje y deseo a Israel a través de su siervo Josué; quien a su vez deseaba con todo su corazón que los israelitas pudieran optar por la mejor decisión basados en lo que Dios había hecho con ellos un tiempo atrás.

Un vistazo al pasado (24:2-13) comenzó con Tare, padre de Abraham (24:2). Como resultado de la geografía y la cultura dentro de la cual Tare se movía, este, participó en la adoración a muchos dioses (politeísmo). Dios, entonces, intervino llamando a Abraham a retirarse lejos de su familia y su trasfondo geográfico y cul-tural (Gen 12:1-4). Dios invitó a Abraham a confiar en Él. Si Abraham lograba este deseo de Dios, el Señor le bendeciría con una nueva tierra y una numerosa descendencia. Canaán era la tierra, e Isaac era el hijo a través del cual Dios cumpliría su promesa concerniente a la descendencia prometida (24:3).

La promesa de Dios continuó a través de Jacob (24:4). Esta familia creció dentro de un número de tribus, a quienes mas tarde, Dios libertó de la opresión de los Egipcios (24:5-7). Dios, además, les guió a la tierra prometida a través de las victorias sobre muchos reyes del este del Jordán (24:8-10) y sobre los numerosos habitantes de Canaán (24:11-12). Todo parece indicar que el énfasis de este resumen histórico que el escritor original deseaba otorgar a sus oyentes era: la elección de Dios por Israel, su constante guía, y su incondicio-



nal protección a su pueblo. Con este énfasis, Josué animó a su pueblo a considerar las obras de Dios en sus vidas y a decidir de una vez y por todas quién sería el único objeto de su devoción.

La decisión clarificada (24:14-22)De aquí en delante, somos testigos del brusco cambio en cuanto a tonalidad y modo se refiere en las palabras de Josué dirigidas a su pueblo (24:14). En base al resumen que Josué hizo de los poderosos actos de Dios en medio de Israel, les sugiere ahora tomar una muy seria decisión de fe. Muchos intérpretes del Antiguo Testamento, han detectado en la estructura de este capítulo algunas similitudes con antiguas civilizaciones en cuanto a tratos y relaciones internacionales se refiere. En tales tratos, cuando el grupo débil buscaba la protección formal de un grupo superior a través de un trato, el mas débil debía prometer lealtad a su protec-tor solamente y no a ningún otro. En un sentido eso era lo que Josué demandaba de los Israelitas; una firme declaración de alianza y lealtad al único Dios verdadero.

El versículo 14 contiene algunos términos en hebreo que son prominentes con respecto a las realidades espiri-tuales. Temer a Dios, por ejemplo, era reconocer propiamente su naturaleza y mostrarle el debido respeto y reverencia. Servir denota lo que los esclavos hacían por sus amos. Finalmente, la raíz del significado de la palabra fidelidad se encuentra estrechamente relacionada con los términos: verdad, firmeza y honradez. Como resultado de este análisis del léxico, podemos asegurar que Josué instó a sus oyentes con urgencia, a servir en genuina lealtad a Dios. Esta terminología se encuentra también muy a menudo en el contexto del sacrificio de animales; en donde el adorador debía ofrecer a Dios víctimas perfectas para el perdón se sus faltas.

Si el pueblo de Israel estaba de acuerdo en apartar de sus vidas las prácticas de adoración a dioses extraños, los cuales en tiempo pasado formaron parte de la adoración de sus ancestros, esto sería la señal primordial de su decisión de brindar exclusivo servicio a Jehová. Esto implicaría, por consiguiente, desechar todo ídolo o material que se utilizaba para representar a las deidades a las cuales ellos buscaban complacer. Aunque el Antiguo Testamento no contiene información explícita en la cual se indiquen prácticas de idolatría por parte de Israel cuando este se encontraba en Egipto, sería improbable que esto no ocurriera.

Esta generación enfrentaría la misma tentación de sus ancestros (24:15). Quizás por esta razón, Josué puso delante de los israelitas una decisión que ninguno de los pueblos vecinos tendría jamás que hacer o enfrentar. Los vecinos de Israel nunca hicieron una decisión concerniente a cual dios debían rendir lealtad o excluir de sus prácticas. Pero a diferencia de ellos, sin embargo, las cosas fueron diferentes para Israel. Ellos tenían que elegir (24:15). Dios nunca obligó a su gente a servirle, Josué les ofreció la elección, no un ultimátum. Ellos, al final, debían escoger si se comprometían con Dios a reconocerle como el exclusivo objeto de servicio y adoración.

Como mencionamos con anterioridad, Josué nunca forzó a sus oyentes a hacer la correcta decisión. Tampoco comprometió al pueblo a través de su decisión personal. Pero si les informó acerca de lo que él había deter-minado hacer. Él dijo, “Yo y mi familia serviremos a Jehová.” Los líderes espirituales harían bien en imitar el ejemplo de Josué. Él nos provee el vivo ejemplo en donde la coerción no forma parte de su estilo de lider-azgo.

Después de recordar a Israel con palabras persuasivas las acciones de Dios, el pueblo respondió a las afirma-ciones de Josué. Ellos coincidieron con su líder en cuanto a los actos de gracia que Dios les había concedido en su diario caminar y al darles la tierra prometida (24:17-18). Afirmaron también la elección de Josué en ofrecer lealtad a Dios; y declararon que se le unirían en esta determinación de brindar exclusividad de servi-cio y devoción a Jehová (24:16, 18).

A primera vista la respuesta de Josué parece ser una de las más desconcertantes declaraciones en todo el Antiguo Testamento (24:19-20). En esencia Josué valientemente declaró que ellos no podrían servir a Dios tal y como lo había declarado. Probablemente el líder de Dios no quiso que ellos tomaran una decisión sin el pleno conocimiento de las implicaciones que vendrían con esa decisión. Josué no le permitió a su pueblo



convertirse en recipiente de una gracia barata. En otras palabras, deseaba que entendieran que lo que Dios demandaba de sus vidas con llevaba serias implicaciones como la disciplina y el sacrificio.

Santo (24:19) describe la esencia de la naturaleza de Dios, distinta a la humanidad y a veces destructiva en su poder. Dios rehúsa compartir su pueblo con cualquier otro dios rival existente. De la misma forma en la cual Él ofreció su amor, espera reciprocidad de los suyos. No podemos pasar por alto la fuerte y firme declaración contenida en el versículo veinte. Dios disciplina a aquellos que se alejan de su presencia.

El pueblo declaró abiertamente su decisión (24:21). Y Josué, su líder, les ayudó a clarificar las implicaciones que vendrían de servir a Dios en ese nivel de fidelidad. Josué, además, demandó de ellos un pleno recono-cimiento de que esa decisión le había tomado como resultado de sus propias reflexiones; no como el resultado de una coerción de su parte.

La decisión confirmada (24:23-25)De nuevo, la conversación se torno en una nueva fase. Ahora (24:23) es la misma frase con la cual Josué inició en el versículo 14. El pueblo de Israel había declarado su decisión; su deseo de ofrecer exclusiva devo-ción a Jehová, Dios de Israel. Inmediatamente después de esto, Josué demandó de ellos desechar cualquier clase de ídolo que ellos podrían poseer. (24:14). Sus palabras fueron, “los dioses extraños que están entre vosotros.” (24:23). El pueblo de Israel profesó de nuevo su deseo de servir a Jehová. Ellos obedecerían a Dios llevando a cabo la destrucción de cualquier ídolo que estuviese entre ellos (24:24).

Ahora sabemos de la importancia de esta convocación que Josué, impulsado por el deseo de Dios, llevó a cabo en aquellos días (24:25). La palabra convenio ocurre por vez primera en este capítulo, pero este con-cepto, sin embargo, parece haber dirigido la estructura total del mismo.

Cuando las antiguas naciones procedían a formular sus convenios, ellas lo ratificaban ubicando una copia del mismo en un lugar público. Específicamente los decretos y leyes envolvían la exclusiva alianza que Dios requería (Ex 20:2-3; Deuteronomio 6:4-9). Generalmente ellos representaban todas las provisiones u obliga-ciones que Israel tenia que aceptar como parte del convenio hecho con Jehová en el monte Sinai. La ratifi-cación pública de este convenio en particular, tomo lugar en Siquem (Josué 24:26-27).

Habiendo guiado Josué a Israel a la renovación de su promesa de servir a Dios, la tarea de este líder había lle-gado a su cumplimento. Poco después de esto, a la edad de ciento diez años, Josué murió y fue sepultado en esta misma área (24:29-30).

¿Qué hubiera hecho el pueblo de Israel sin la presencia de este gran líder? ¿Le suena esto familiar? Ellos habían ya experimentado esto con la muerte de Moisés, pero Dios en su fidelidad les había dado a Josué. Sin embargo ahora, Israel debía mostrar de nuevo su fe en Dios y esperar en Él.

Preguntas de reflexión:

1.- Piense en dos o tres de las mayores decisiones que usted ha hecho a lo largo de su vida. ¿Quién clarifica sus pensamientos y le guía hacia la toma de decisiones correctas?

2.- ¿Cuáles podrían ser los puntos de mayor importancia dentro del esquema del “resumen histórico”? ¿De qué manera ha estado Dios trabajando en su vida?

3.- ¿Cuáles son las evidencias contemporáneas de alguien que ha decidido definitivamente comprometerse a servir al Señor Jesucristo?

4.- Piense de nuevo en el record que la palabra de Dios muestra de la vida y ministerio de Josué. ¿Cuáles fueron los factores que contribuyeron para extraer de Josué su deseo de servir a Dios con entereza y una fir-meza incomparable?



UNIDAD 2JUECES: ESPIRAL EN DESCENSO

Tiempos de transición no siempre corren con fluidez y esto nos lo muestra el Libro de Jueces. El libro de Jueces nos relata el tiempo de transición en Israel “después de la muerte de Josué” (Jueces 1:1). Incertidumbre, amenazas externas, y aún caos caracterizó éste tiempo de transición. Josué ya no estaba, ni tampoco Moisés. Las tribus ya no estaban unidas bajo un sólo líder. De cierto, no había unidad alguna, ellos tendían a funcionar en una manera suelta, unidos principalmente por su adoración a Yahweh.

Un factor complicante era que la Tierra Prometida no había sido conquistada completamente. La gente que habitaba la Tierra Prometida no respondió exactamente con brazos abiertos a la llegada de los israelitas. De hecho, la gente de Israel confrontó constantes amenazas de los pueblos alrededores de la Tierra Prometida – incluyendo a los cananeos, los ferezeos, los madianitas, los amalecitas, y los filisteos.

En el libro de Jueces vemos básicamente un ciclo repetido. El ciclo era algo así: (1) la gente pecó; (2) Dios envió el castigo a manos de los invasores foráneos; (3) la gente clamó a Dios por ayuda; (4) Dios levantó un libertador para ayudarles militarmente. El ciclo fue entonces repetido, una y otra vez.

Al igual que el libro de Josué, el libro de Jueces cae dentro de la historia deuteronómica. Jueces – junto con Josué y los otros libros de los profetas antiguos – demuestran que el pecado acarrea castigo y obediencia acarrea bendición. Sin embargo, el ciclo en el libro de Jueces no es parejo sino más bien es como un espiral en descenso.

Imagínese un resorte enroscado. Al terminar el libro de Josué y el principio del libro de Jueces, tal vez la gente estaba en la parte alta del espiral, habiéndose comprometido a Dios bajo el liderazgo de Josué. Tempranamente en el Libro de Jueces, buen liderazgo emergió, siendo visto especialmente en la profetisa Débora al guiar al pueblo a la victoria (vea lección 8).

Gedeón, otro juez mayor, también dio buen liderazgo liberando al pueblo de los madianitas (vea lecciones 9-10). Incidentes cerca de la terminación de la vida de Gedeón lo demuestran siendo no casi el modelo de vir-tud que parece haber sido cuando primero respondió al llamado de Dios.

Abimelec, el siguiente líder, es visto como indigno de ser llamado un líder del pueblo de Dios (vea lección 11). Las cosas iban en dirección errónea.

¿Qué de Sansón, otro juez mayor? Si lee la historia completa de Sansón en Jueces 13-16 (vea lección 12), usted encontrará un relato triste de un potencial malgastado. Sansón principió bien, aún siendo prometido a padres Hebreos piadosos por un ángel del Señor. El resto de la historia de Sansón habla de una figura más grande que la vida, quién fue heróico en ocasiones pero más del tiempo caracterizado por egoísmo y corto de visión que resultó en tragedia. Sansón no podía controlar sus pasiones, pero de vez en cuando, y finalmente, hizo la cosa correcta.

Capítulos 17-21 se apartan un poco del patrón de los capítulos anteriores. Ya no hay jueces – liberadores – en éstos capítulos. En éstos capítulos, el caos del tiempo es aún más pronunciado (vea lección 13). La nación se estaba desbaratando al estar la gente sólo “haciendo lo que estaba recto ante sus propios ojos” (vea Jueces 17:6; 18:1; 19:1; 21:25; vea también Deuteronomio 12:8). Sin ningún Moisés, ni Josué, ni ningún líder nacio-nal o de tribu que valiera la pena, la gente siguió su propio camino, y su camino no era el correcto. ¡Qué trastorno!

¿Qué podemos aprender del libro de Jueces? Junto con el mensaje mayor del libro acerca del espiral de pecado (lección 7); podemos aprender acerca del valor que Dios pone en el liderazgo de la mujer (lección 8); acerca del buscar la voluntad de Dios (lección 9); acerca de confiar en los recursos de Dios, no los nuestros (lección 10); acerca de escoger y ser el tipo correcto de líder (lección 11); acerca de oportunidades malgasta-das (lección 12); y acerca del peligro de “hacer nuestra propia voluntad” (lección 13).

UNIDAD 2: Jueces - Espiral en descenso


41

Lección 7

EL ESPIRAL EN DESCENSOCOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoPor primera vez, la nación de Israel se encontró sin un líder te-rrenal. Ya no había un Moisés o un Josué para que los uniera y dirigiera. Después de la muerte de Josué y la muerte de esa generación, se levantó una generación que no tenía contacto con una evidencia de las obras de Dios y que olvidó sus raíces como nación.

De hecho, nación es un nombre equivocado. Si acaso, Israel existía más como una confederación de tribus unidas por lazos ancestrales comunes, experiencias y fe, que como cualquier clase de acuerdo político. La geografía de la región contribuyó a la fracturada relación. Complicando la situación, fue el hecho de que parte de la “Tierra Prometida” permaneció sin conquistar (Jueces 1:27-35). Estas gentes sin conquistar eran idolatras que ayudaron a dirigir a varias tribus de Israel para adorar a dioses falsos.

El libro de los Jueces describe el espiral en descenso en el que la nación cayó después de la muerte de Josué. Típicamente, el patrón seguido fue este: la gente siguió a falsos dioses; Dios envió una nación para que los oprimiese y castigase; la gente pidió liberación; Dios envió a un libertador, conocido en el libro de los Jueces como un juez; el juez y la gente vencieron a los opresores; y la gente descansó.

Aquellos identificados en el Antiguo Testamento como jueces, fueron un canal por medio del cual Dios intentó trabajar. Para la mente moderna juez es algo confuso. Una representación más exacta sería presentar a estos jueces como líderes o libertadores. El libro claramente muestra que los jueces podrían ser femeninos o masculinos, y también que el liderazgo de los jueces no era necesariamente, aunque muchas veces lo fue, militar. Los jueces estaban muy lejos de la perfección. Como la historia de Gedeón y Sansón lo demuestra.

Enfocándose en el significadoEste pasaje presenta un resumen de la historia del libro de los Jueces. Sería fácil para nosotros leer este pasaje y lanzar piedras a los israelitas de los cuales hablamos aquí. De la misma manera, sería fácil para nosotros lamentar el hecho de que el mundo se está “yendo a los perros”, y que las generaciones jóvenes han perdido el respeto por su herencia como creyentes. Podríamos quejarnos de que otros cristianos están siguiendo el mismo patrón de falta de fidelidad como los israelitas. Podríamos quejarnos acerca de cómo muchas cosas han cambiado y estos cambios han sido para empeorar.

Algunas de estas quejas y lamentos podrían ser verdad. Pero por

U N I D A D


U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Texto Focal: Jueces 2:6-7, 11-19

Trasfondo Bíblico: Jueces 1-2

Enfoque Principal: Cada generación es responsable de vivir en fidelidad hacia Dios.

Algo en que pensar¿Tendrá fe la siguiente gener-ación?

Aplicación personalDelinear el espiral en descenso del tiempo de los jueces e identi-ficar implicaciones para mi vida de fidelidad hacia Dios y animo a futuras generaciones.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a delinear el espiral en descenso del tiempo de los jueces e identificar implicacio-nes para su vida de fidelidad hacia Dios y animar a futuras genera-ciones.

otro lado, ¿Cuántas veces nos hemos enganchado en lo que yo llamo, “vida preservadora de fe”? Buscamos a Dios cuando vamos de bajada por tercera vez. Cuando las cosas van realmente mal empezamos a preguntar-nos a nosotros mismos, ¿Qué he hecho mal? Y pedimos ayuda a Dios. Si somos culpables de esto, entonces también somos culpables de tener una fe similar a la de los israelitas. ¿Podríamos estar de acuerdo que tal vez una de las razones por las cuales las generaciones siguientes han “perdido la fe” es porque han visto repetida-mente a nuestra generación ser hipócrita en sus acciones? ¿Podría ser también que una de las razones porque otras generaciones les falta compromiso a la iglesia y a su misión es porque estas generaciones ven a la igle-sia perpetuándose así misma antes que diseminando el evangelio? ¿Podría ser que algunos de los cambios que ahora vemos pueden ser actualmente para mejorar y que finalmente estos cambios puedan corregir algunos de los errores de nuestra generación? Deberíamos de examinar nuestras propias vidas cuidadosamente para ver si la acusación de una fe superficial u obediencia podría estar en nuestras puertas.


1. Mencione: A las generaciones de los Estados Unidos se les ha dado diferentes distintivos tales como “la generaron silenciosa”, “baby boomers” o “mosaicos”. Pregunte: ¿Qué pasaría si las personas que estu-dian las generaciones llamaran a nuestra generación “infiel”? En otras palabras, ¿Cómo se sentiría usted? ¿Cómo podría ser posible que nuestra generación adquiriera tal nombre?

Guía de Estudio Bíblico 2. Diga: Miremos al grupo “fiel”. Pida a la clase que encuentre Jueces 2:6-7 en sus Biblias. Llame a alguien

para que lea.

3. Mencione: En Jueces, varios grupos fueron catalogados como “infieles”. Hay un ciclo identificable relacio-nado con su infidelidad.

a. En un póster, haga un dibujo del “ciclo del pecado” incluyendo lo siguiente: (1) pecado; (2) disci-plina o castigo; (3) pidiendo ayuda a Dios (llorando); (4) libertador (juez). Guarde la gráfica para usarla en futuras lecciones.

b. Resuma el ciclo con la clase haciendo comentarios que expliquen los aspectos individuales. (1) Comente acerca del pecado de servir a otros dioses. De atención específica a Baal y a Astaroth.

Vea la información en “Comentario Bíblico” y en esta Guía de Enseñanza. (2) Pregunte: ¿Qué formas tenía la disciplina de Dios? ¿Qué formas la disciplina de Dios tiene hoy

día? (3) Escriba cada uno de los siguientes pasajes en tarjetas de 3 X 5: (1) Jueces 3:9, 15 (2) Jueces

4:3; (3) Jueces 6:6-7; Jueces 10:10-15. Distribuya una tarjeta a cuatro miembros de la clase antes de que empiece la lección. Pídales que estén preparados para leer los pasajes en voz alta. Antes de la lectura, pida a todos que busquen evidencias de arrepentimiento en los lamentos de la nación de Israel cuando pidió ayuda a Dios. Pida las lecturas de las escrituras. Al final de las lecturas, pregunte: ¿Qué evidencia de arrepentimiento encontró usted? (Vea Jueces 10:10,15).

(4) Explique el término jueces y describa su papel en el ciclo. (5) Mencione que algunos incluían períodos de paz, en el ciclo, de acuerdo con el libro de Jueces. c. Pida a la clase que encuentre Deuteronomio 4:23-31. Pida a alguien que lea en voz alta. Antes de la

lectura, escriba en el pizarrón (o simplemente pregunte): ¿Cómo describe este pasaje la fidelidad? ¿Cuáles son las consecuencias de la fidelidad? ¿Cuáles son las consecuencias de la infidelidad? Pida la lectura y repita la pregunta, permita un tiempo para discusión.

Aplicación

4. Distribuya una tarjeta con el ciclo del pecado impreso en ella. Pida a cada persona que: a. Marque la posición actual de su vida en el ciclo. b. Voltee la tarjeta y enliste los pasos necesarios en su vida para proveer una fe transformadora a las

futuras generaciones.

LECCIÓN 7: El espiral en descenso


c. Mencione una acción que usted tomará esta semana para pasar una fe transformadora a futuras generaciones.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónMi padre jamás nos dio una oportunidad de escoger asistir o no a la iglesia. El creía que la iglesia era una parte necesaria de nuestra vida. Asistimos el domingo por la mañana, el domingo por la noche, y los miér-coles por la noche. Mi hermano y yo participamos en una gran variedad de actividades para niños y jóvenes respaldadas por nuestra iglesia.

Mi padre creía que deberíamos recibir una educación en nuestra fe. La regla de él era que mi hermano y yo nos lavaríamos los dientes, iríamos a la escuela, haríamos nuestras tareas de casa y escuela cada día, y nos bañaríamos cada día mientras estuviéramos bajo su techo. Cuando saliéramos para estar aparte y pagando nuestras propias deudas, podríamos dejar de lavarnos los dientes, hacer nuestras tareas y bañarnos si quisiéra-mos. Podríamos escoger si ir o no a la iglesia. Sin embargo, mientras él fuese el jefe de la casa y pagara las deudas, nosotros haríamos lo que él dijera.

Usted tal vez no está de acuerdo con las reglas de mi padre, pero su motivo era evidente. Mi padre quería que tuviéramos una educación cristiana sólida. Él intentó que mi hermano y yo recibiéramos un completo enten-dimiento de la fe cristiana y la doctrina Bautista. Esta lección enfatiza la importancia de mantener una fe vibrante, activa y manejable en Cristo Jesús. El texto bíblico ilustra cuan importante es que la generación anterior pase a sus hijos una fe auténtica en Dios. Sin embargo, es importante que nuestros hijos no simplemente adopten nuestras reglas y guías. Si nuestros hijos creen que las ceremonias, rituales y guardar reglas y mandamientos son un substituto para una relación diaria, dinámica y genuina con Cristo, hemos fracasado. Nuestros hijos deben desarrollar su propio sistema de cre-encia, manejable y fiel.

Victoria y derrotaUna lectura rápida de Jueces 1 muestra que algunas de las tribus de Israel estaban dispuestas a cumplir el mandato de Dios de poseer la tierra y despedir sus habitantes, mientras que otras tribus no lo estaban. Este es un resumen del libro bíblico de Josué.

Dios sabía que Israel era débil y podría caer en tentación de las creencias religiosas de los habitantes paganos de Palestina. Dios quería que Israel fuera libre de tales atracciones. Al remover todos los habitantes, Israel podría desarrollarse en la nación santa que Dios intentó para ella.

Al contrario, Israel se dispuso para una solución a medias. Ya que no conquistaron y echaron fuera a todos los paganos, ellos decidieron hacer de algunos de sus habitantes esclavos. Fue el principio del espiral en descenso hacia una desobediencia espiritual.

Jueces 2:1-3 comienza con la aparición del ángel del Señor. El ángel del Señor jamás es un ángel ordinario en las Escrituras. Muchos estudiosos bíblicos creen que éste ángel es Dios mismo. Note en este pasaje, como en otros, el ángel habla en primera persona, como si fuera Dios. (El ángel usa “yo” y “mi.”) Dios le recordó a Israel de su pacto con ellos y del pacto de Israel con Dios. Luego, Dios declaró que él no ayudaría a los israe-litas a echar fuera a la gente pagana de la Tierra Prometida. El no obedecer fue la raíz de sus problemas, y el fracaso de Israel.

El libro de Jueces es la edad obscura de la historia del Antiguo Testamento. La gente continuamente desobe-deció a Dios y olvidó las grandes obras que Dios hizo por ellos.

La muerte de Josué (2:6-7)Hasta la muerte de Josué y los líderes que sirvieron con él, Israel fue generalmente fiel a Dios. Este pasaje



sirve como una transición entre el buen trabajo de Israel bajo Josué y los venideros fracasos de fe en Jueces. El verso 7 cubre el período de algunos cuarenta a cincuenta años – treinta o más años bajo Josué y otros diez a veinte años para que el liderazgo viejo muriera.

Miembros fundadores de una iglesia frecuentemente recuerdan los años de lucha de la joven iglesia. También recuerdan cuántas veces Dios contestó la oración y vino a la ayuda de la joven iglesia en lucha. Al dejar la escena estos miembros fundadores, es imperativo que la siguiente generación capture la misión y visión que Dios les dio a los fundadores. Hay un sabio dicho en Proverbios 29:18 “Sin profecía el pueblo se desen-frena…” Sin una fe sólida y manejable en Dios, la iglesia fallará. Cada generación en la iglesia debe encon-trar la visión y misión de Dios para su tiempo en la historia.

Naturalmente, algunos cambios ocurrirán. Nuevos métodos de compartir las buenas nuevas de Dios están constantemente desarrollándose. Los tiempos cambian, y la iglesia necesita estar alerta a las nuevas opor-tunidades para compartir el evangelio. En el siglo pasado, ministerios de radio, televisión, películas, drama, títeres, coros y evangelismo juveniles, ministerios a solteros y de recreación, viajes misioneros y ministerios a los niños han florecido. Muchos cambios han ocurrido dentro del periodo de 100 años. Todos estos nuevos métodos pidieron un cambio en metodología. Aun sin embargo, el mismo mensaje del evangelio permaneció. La fe en Cristo Jesús jamás cambia. Los métodos sí cambian. Debemos pensar cuidadosamente en cada cam-bio. Una aceptación rápida de un nuevo método es tan peligroso como el rehusar el cambio. El liderazgo del Espíritu de Dios se necesita para decidir la mejor manera de proceder.

El ciclo repetidoLa forma literaria de Jueces usa un ciclo que se repite en casi el resto del libro. Cada rotación tiene cuatro distintas partes: (1) el pueblo peca; (2) Dios envía el castigo en forma de invasores foráneos; (3) el pueblo regresa a Dios por ayuda; (4) el Señor levanta al libertador para ayudar al pueblo. Cada repetición demuestra el espiral en descenso hacia la edad obscura del Antiguo Testamento. Aunque la gente apeló a Dios por ayuda, un arrepentimiento genuino por los israelitas no está claramente indicado, excepto en Jueces 10:10, 15. El lector cuidadoso se da cuenta que los ciclos no son parejos, sino que cada repetición enseña una nueva baja en desobediencia hacia el pacto de Dios.

El nombre bíblico de estos libertadores fue juez. Ninguno fue líder nacional. Sólo Josué y Samuel fueron líderes reconocidos nacionalmente. Cada juez entre Josué y Samuel ofrecieron liberación sólo a algunas pocas tribus localmente. Existe una buena probabilidad que algunas actividades de los jueces eran sobrepues-tas en varias partes de Palestina.

Cuando un juez moría o terminaba su tarea, usualmente dejaba un vacío político y espiritual. Además, los jueces mismos no siempre eran personas de un alto carácter moral o compromiso espiritual profundo. El clima espiritual de este período bíblico era pobre. El libro de Jueces demuestra cuan mal llegaron a ser los asuntos cuando uno ignora los pactos de Dios y se compromete la fe personal. Algunos de los capítulos más tristes de encuentran en Jueces 17-21.

La raíz de los problemas de Israel se halla en 2:10. Con la muerte de Josué y el liderazgo original que guió a la nación hacia la Tierra Prometida, “se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra que él había hecho por Israel.” Este verso necesita poco de comentario, pero está como un consejo apremiante para cada generación. La iglesia moderna necesita acatar su advertencia.

Síndrome de segunda generación (2:11-19)Muchos inmigrantes viniendo a los Estados Unidos tratan de mantener su cultura y herencia. La primera generación, generalmente, pueden lograrlo. La subsecuente generación, por varias razones, pierde el valor de mantener las antiguas maneras. El idioma es reemplazado, se adoptan nuevos días festivos e ideas religiosas. Esto causa gran estrés en la generación antigua.

Podemos fácilmente entender lo que aconteció cuando Josué, con un antiguo liderazgo, murió. La segunda



generación, o no creyeron las historias que escucharon o las ignoraron. Según el verso 10, es más posible que las ignoraron. El punto es, la segunda generación no puso su fe en Yahweh.

Los versículos restantes son vistazo previo del libro de Jueces. Se ve el ciclo repetido en los versos 11-16: (1) verso 11, los israelitas “hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y sirvieron a los baales”; (2) verso 14, en su furor, “los entregó en manos de robadores que los despojaron”; (3) verso 15, “Por dondequiera que salían, la mano de Jehová estaba contra ellos para mal, como Jehová había dicho, y como Jehová se lo había jurado; y tuvieron gran aflicción”; (4) verso 16, “Y Jehová levantó jueces que los librasen de mano de los que los despojaban.”

Al adorar a los dioses de los paganos a su alrededor, los israelitas provocaron la ira de Dios (2:12,14). La ira, el enojo, es una palabra humana para describir una emoción particular. Aparentemente, Dios presenta una emoción similar al enojo humano.

En varias ocasiones vemos a Jesús enojado con los líderes religiosos y con sus discípulos. Algunos ejemplos los encontramos en Mateo 23; 16:23. La Biblia enseña que a Dios le disgusta la continua pecaminosidad de las personas.

En su ira, Dios jamás pierde su temperamento. Siempre usa la ira en una manera restringida. Aún cuando Dios castiga en el presente y en el porvenir, Dios maneja su ira con misericordia y compasión (Jueces 2:18b). El verso 17 dice que la gente aún así no regresó al Señor y a la adoración a Dios, sino sólo cuando Dios los liberó. En lugar de escuchar y aprender el error de sus pecados, los israelitas sencillamente se regresaron a sus caminos de maldad.

Preguntas

1. ¿Qué está haciendo su iglesia para dejar un ejemplo de fe a la siguiente generación?2. ¿Cuál es la diferencia entre simplemente transmitir reglas y ceremonias a la siguiente generación, y ver-

daderamente transmitir una fe genuina? ¿Está su iglesia dándole a su juventud y adultos jóvenes oportuni-dades de liderazgo espiritual?

3. ¿Cuáles señales espirituales acerca de la siguiente generación ve usted? ¿Cuáles le molestan? ¿Qué puede hacer usted para mejorar la situación?

4. ¿Cree usted que Dios está agradado con el compromiso espiritual de su generación hacia Él? ¿Por qué?5. ¿Cuáles son los éxitos de su generación?6. ¿Cuáles son los fracasos espirituales de su generación?

Los JuecesLa palabra hebrea juez no es exactamente el paralelo a nuestra idea moderna de un juez, sino más bien cor-responde a líderes militares carismáticos sobre quienes venía el Espíritu de Dios. Dios también les dio sufici-ente sabiduría para guiar. Dios les dio a algunos de ellos poder y fuerza especial.

Hay trece jueces distintivamente señalados en el libro de Jueces. Ellos son: Otoniel (3:7-11); Aod (3:12-30); Samgar (3:31); Débora (4:1-5:31); Gedeón (6:1-8:35); Abimelec (9:1-57); Tola (10:1-2); Jair (10:3-5); Jefté (10:6-12:7); Visan (12:8-10); Elón (12:11-12); Abdón (12:13-15); y Sansón (13:1-16:31).

Baal y AstarotBaal era la deidad suprema masculina de las naciones de Fenicia y Canaán. En ocasiones en la Escritura, el nombre aparece en plural y probablemente se refiera a las muchas modificaciones o imitaciones de Baal. Baal significa señor y maestro y se refiere a él a menudo en el Antiguo Testamento.

La contraparte de Baal era la deidad femenina Astarot. Ella era la diosa de fertilidad, amor y guerra. La adoración de Astarot se encontró también entre la gente de Mesopotamia. En esa región, su nombre era Istar, significando estrella.


LECCIÓN 7: El espiral en descenso?

Baal y Astarot (Jueces 2:13) formaron una religión alterna a Yahweh. El exceso sexual y el espíritu de guerra caracterizaron esta religión pagana. Los israelitas quienes “no conocían a Jehová ni la obra que Él había hecho por Israel” (2:10) estaban dispuestos a incorporar estas creencias religiosas a la adoración a Yahweh. En lugar de abandonar totalmente a Yahweh, los israelitas sencillamente substituyeron a Yahweh por Baal y adoptaron a Astarot como una nueva adición.



47

Lección 8

DÉBORA – PROFETISA, JUEZ, ESPOSA

COMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoComo repetidamente ocurre a través del libro de Jueces, la nación había caído en un ciclo de pecado después de la muerte del juez Aod (Jueces 3:15-30). Debido al pecado, Dios trajo un opresor para castigarlos. En este caso, el opresor fue Jabín, el rey de Hazor, y su general, Sísara. Hazor estaba en la región norte de Palestina, junto a la frontera de la tribu de Neftalí.

Hazor había sido atacado y destruido durante las campañas anas de Josué, y un Jabín anterior había sido derrotado (vea Josué 11:1). Aparentemente, los cananitas regresaron a Hazor y recons-truyeron la ciudad en un lugar estratégico cerca del lago Hula y en la ruta principal de las caravanas en medio de Egipto y el imperio de Mesopotamia. Este Jabín probablemente descendió de un Jabín anterior, o tal vez Jabín, el rey de Canaán, era un título otorgado por la gente como los romanos daban los títulos de Cesar, emperador de Roma. Podría ser un nombre de una forma dinástica cananita tal como Enrique o Eduardo de Inglaterra.

El hecho de que los cananitas habían adquirido 900 carruajes de acero, les hacía tener definitivamente una ventaja de tecnología militar sobre los israelitas, que no tenían nada. La posesión de estos carruajes le daba Sísara y a su ejército una tremenda ventaja psicológica.

En la antigüedad los carruajes de acero no eran utilizados en las líneas del frente sino que eran usados a campo abierto para per-seguir a los ejércitos en retirada y para masacrarlos en la vulnera-bilidad de la pelea.

Tal ventaja de experiencia mercenaria, de liderazgo y de desbor-dante tecnología indudablemente intimidada a los israelitas. Muy probablemente, la opresión como resultado del pecado se refiere a las tribus del norte tales como Zabulón y Neftalí, aunque esce-narios similares se repetían a través de todo Israel. En esta situa-ción apareció una profetisa, Débora. Débora, sus aliados, Barac y una mujer cercana llamada Jael, vinieron a ser los instrumentos de liberación de las tribus del norte de la opresión cananita.

Enfocándose en el significadoA través de los tiempos del Antiguo Testamento, las mujeres estaban frecuentemente en la parte inferior de la pirámide social. Por ejemplo, Jael podría haber tenido acceso a clavos y martillos para construir tiendas de campaña porque en la vida nómada, las mujeres, no los hombres, se esperaba que construyeran las tien-das de campaña.

Esta historia nos demuestra hoy como Dios puede usar gente de diferente entorno y habilidades para lograr grandes cosas. Las

U N I D A D


U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Texto Focal: Jueces 4:1-17, 21; 5:1-3, 12-13

Trasfondo Bíblico: Jueces 4-5

Enfoque Principal: Dios usa a mujeres tanto como a hombres para lograr los propósitos de Dios.

Algo en que pensar¿Cómo pueden las mujeres servir a Dios?

Aplicación personalConsiderar el significado para hoy del papel de Débora en servir a Dios y traer liberación a Israel.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a considerar el significado para hoy del papel de Débora en servir a Dios y traer liberación a Israel.

mujeres pueden servir a Dios significativamente tanto como los hombres. El género, edad y habilidades no deberían de ser barreras si una persona está verdaderamente comprometida con Dios y desea hacer su volun-tad.


1. Explique que, a través de la historia, las mujeres han tenido roles importantes en el trabajo del reino de Dios. Refiérase a la Guía de Estudio para ver la lista de mujeres que sirvieron en el Nuevo y en el Antiguo Testamento. Diga: Hoy estudiaremos dos mujeres líderes del libro de los Jueces.

2. Enliste a una persona para que lea en voz alta Jueces 4:1-3. Refiérase al “ciclo de pecado” de la lección 7. Pregunte: ¿Dónde usted ve los diferentes “ciclos de pecado” en este pasaje? Explique la importancia del ejército cananita que tenía “novecientos carruajes de acero” (4:3).

3. Invite a una persona que se prepare para leer en voz alta 4:4; 4:8-9; 4:14; 5:7. Pida a la clase que escuche descripciones del papel de Débora en la historia del pueblo de Dios. Pida que lean. Pida a la clase que men-cionen los roles que ellos notaron. Escriba las respuestas en el pizarrón. (Asegúrese de incluir profetisa, juez, líder, esposa, comandante en jefe sobre 10,000 tropas y madre en Israel).

4. Pida a la clase que lea 4:8-9 en silencio. Sugiera implicaciones de la interacción entre Débora y Barac. Pregunte:

¿Fue Débora una elección de segunda mano de Dios para dirigir el ejército en la batalla? ¿Por qué cree usted que Barac no iría a la guerra sin Débora?

5. Pida a las personas que lean 4:9; 4:17-23; 5:24-27. Después de la lectura, pregunte a la clase, ¿Qué sabe-mos acerca de Jael de acuerdo con estos pasajes? Escriba una lista en el pizarrón.

Aplicación

Termine la clase pidiendo a las personas que oren en silencio a Dios para que los dirija en como ellos podrían servir para animar a las mujeres en el ministerio. Luego, dirija, o pida a alguien que haga una oración para que Dios continúe dirigiendo el rol de las mujeres en la iglesia de hoy, y por mujeres jóvenes que están respondiendo sinceramente al llamado de Dios para servir.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónEl lugar de la mujer en llevar a cabo los planes de Dios es un hecho bíblico. Dios, a menudo, usa a la mujer – así como Dios usó a Débora – para lograr sus propósitos.

Después de la muerte de Aod, Israel regresó al ciclo de pecado (Jueces 4:1). Israel, una vez más, se alejó del Señor. Por lo tanto, Dios usó al rey cananita, Jabín de Azor, para afligir a los israelitas (4:2).

Bajo Josué – algunos 100 años más temprano – los israelitas habían quemado la ciudad de Azor y matado también a su rey, cuyo nombre era Jabín (Josué 11:1-11). Aparentemente, otro rey llamado Jabín reinaba sobre Azor. Jabín pudo haber sido un nombre dinástico para los gobernadores de Azor. Azor fue una ciudad localizada a diez millas al norte del Mar de Galilea, y cinco millas al sudoeste del Lago de Hula.

Jabín tenía un brillante, bien armado y equipado ejército cuyo general era Sísara. Sísara bajó de Azor a la parte norte de Israel. Sísara dominó a las tribus israelitas del norte. Él tenía 900 carruajes y una gran infan-tería de soldados (Jueces 4:3,7). Él pasó cerca del Mar de Galilea hacia el Gran Mar (Mar Mediterráneo). Su control eventualmente llegó hasta la parte norte de la tribu de Efraín – la tierra en la cual Débora era juez.

LECCIÓN 8: Débora – Profetisa, Juez, Esposa


Israel vivió bajo el poder de Jabín por veinte años (4:3). Humanamente, Israel estaba en una situación deses-perante. Sin embargo, frente a estos hechos, el problema real de Israel era espiritual – no militar.

Aprendamos una lección de Israel durante este período de los jueces. Muchas de nuestras dificultades y pro-blemas de hoy son espirituales. No se resolverán por pagar más impuestos, una fuerza policíaca más poder-osa, o una corte judicial más eficiente. Muchos de nuestros problemas de hoy en día demuestran una escasez de pureza espiritual y rectitud moral. Estas requieren una solución espiritual y santa.

Dios todavía escucha el clamor de su pueblo. Debemos regresar a Dios por liberación, de la manera como Israel lo hizo. Los líderes jamás pueden lograr en nuestra tierra lo que Dios solamente es capaz de hacer – aún cuando la situación se vea desesperante.

Débora, juez, esposa y profetisa (4:4-10)El texto menciona claramente que Débora era una mujer extraordinaria. Se le dan tres títulos en el verso 4 – profetisa, esposa y juez de Israel. La versión Nueva Versión Internacional (NIV) dice “guiando a Israel.” El texto hebreo, sin embargo, dice, “ella gobernaba a Israel en aquel tiempo” – específicamente en Efraín, al norte de Judá. Aunque Efraín está localizada en el centro de Israel al lado oeste del Río Jordán hasta el gran mar, la influencia y liderazgo de Débora se extendía más allá de sus límites.

Era la esposa de Lapidot, que significa antorchas o rayos. No sabemos nada más acerca del matrimonio o la familia de Débora, pero podemos inferir que era una ama de casa y también respetada como una gran líder. Además, podemos deducir que su esposo no interfirió en su llamado de Dios para guiar a Israel.

La palabra profeta en el Antiguo y Nuevo Testamento se refiere a uno que habla por Dios, en lugar de un pro-nosticador. El pronosticar ciertamente era un atributo de algunos profetas, pero la mayor parte de sus tareas era hablar el mensaje de Dios al pueblo. Vemos a Débora haciendo exactamente esto al darle el mensaje de Dios a Barac, hijo de Abinoam de Cedes de Neftalí. Neftalí está localizada al norte de Manases, que está al norte de Efraín. Neftalí está el lado oeste del Mar de Galilea.

Dios llamó a Barac a movilizar un ejército de 10,000 hombres de Neftalí y Zabulón, que estaba junto a Neftalí. El ejército de Barac debería marchar al Monte de Tabor, que estaba entre el límite sur de las dos tri-bus. El Monte Tabor está a una milla al oeste del límite sur del Mar de Galilea. Esta era la llanura de Jezrael.

En el cántico de victoria de Débora, ella relata la ayuda que ofrecieron las tribus de Efraín, Benjamín e Isacar (5:14-15ª). Sin embargo, Rubén, Galaad, Aser, y Dan no la ayudaron; y Débora se dirigió a esta falla en su cántico (5:15b-17).

Débora tuvo un plan para seducir a Sísara, comandante del ejército de Jabín, hacia el arroyo de Cisón al lado oeste de la llanura de Jezrael. Barac, sin embargo, fue un líder renuente. No fue el primer israelita en dete-nerse ante el llamado de Dios. Moisés, Isaías y Jeremías, también fueron renuentes para aceptar el llamado de Dios por una razón u otra. Sin embargo, así como Dios fue suficiente para estos grandes hombres, Dios sería suficiente para Barac. Muchos hoy en día se horrorizan ante el servicio a Dios porque olvidan que Dios provee el poder para cada tarea a la cual Dios llama a su pueblo. No todos somos llamados a ser profetas o líderes militares; pero cualquiera que sea la tarea, Dios proveerá la fortaleza para llevarla a cabo.

El texto debería haberse movido del verso 7 directamente al verso 10. Sin embargo, la fe de Barac fue débil. Él quería la seguridad de la presencia de Dios con él. Consecuentemente, Barac le preguntó a Débora que fuera con él. Por causa de la renuencia de Barac, Débora le declaró que Dios daría la victoria a una mujer (Débora, ayudada por otra mujer, Jael). En ese tiempo el lugar de la mujer era menos que el del ciudadano de primera clase de Israel. Aún cuando Débora era juez y profetiza en Israel, la mayoría de la gente pensaba que las mujeres eran inadecuadas para ser líderes o conquistadores victoriosos. Los comentarios de Débora ilus-tran la vergüenza de Barac al no confiar completamente en Dios.



Hoy, en el pensamiento de muchos, aceptar a mujeres espiritualmente dotadas no es primordial. Mujeres jóvenes queriendo entrar al ministerio encuentran muchas barreras obstruyendo su camino. Algunos semi-narios y grupos denominacionales restringen el papel de la mujer.

Lottie Moon fue uno de los líderes Bautistas del Sur en misiones más sobresaliente. En 1873 ella fue a China bajo el llamado de Dios. Mientras en la China, Lottie Moon predicó, enseñó y bautizó a creyentes. Cuando la junta de misiones le dijo que dejara de hacer dichas actividades que generalmente eran reservadas para un pastor masculino, ella respondió que la junta debería buscar y enviar a dicho hombre. Sin embargo, hasta ése tiempo, la señorita Moon dijo que seguiría haciendo la obra de Dios. Dudamos que la misma junta que asignó a la señorita Moon lo hiciera hoy y le permitiera hacer el trabajo que tan bien hizo en la China. Lottie Moon laboró a pesar de la desaprobación masculina, pues ella tenía la aprobación de Dios. Al igual que Débora, ella hizo lo que Dios la llamó a hacer.

La batalla con Sísara (4:11-24)Sísara, el comandante del ejército de Jabín, se informó que un ejército de 10,000 bajo Barac se había reunido para encontrarse con él en batalla. Sísara respondió al tomar su ejército y 900 carruajes hacia el arroyo de Cisón. Débora ordenó a Barac a marchar y encontrarse con Sísara.

En el arroyo de Cisón (río) fácilmente uno puede andar en el agua en circunstancias normales. Aún sin embargo, en medio de un chubasco feroz, el arroyo puede desbordarse e inundar el área circunvecina. Débora explicó la actividad de Dios en su cántico (5:21-22), diciendo que “los barrió el torrente de Cisón.” El signifi-cado puede ser que como resultado de la actividad de Dios en traer lluvia esto causó que el arroyo se desbor-dara y las ruedas de los carros de Sísara se estancaran en el lodo y el agua. Las tropas de Barac se movieron entre los carros y fácilmente derrotaron al ejército de Sísara. En 4:15-17, Sísara abandonó su carro y huyó a pie.

Sísara huyó a la tienda de Jael, cuyo esposo era Heber, el ceneo. Heber había hecho amistad con la corte de Jabín, el rey Cananita de Azor. Heber conocía a Sísara, el comandante del ejército de Jabín. Jael vino a encon-trarse con Sísara. Ella lo invitó a entrar en su tienda y descansar. Pensando que Heber y Jael eran sus amigos, Sísara entró a la tienda de Jael. Sísara pidió algo para tomar, ya que estaba sediento y Jael le dio leche.

Sísara le pidió a Jael que mintiera al decirles a los soldados que nadie estaba en su tienda. Entonces, cuando Sísara estaba dormido del cansancio, Jael quietamente tomó una estaca y un mazo y lo clavó por las sienes de su cabeza hasta enterrarse en la tierra. Barac vino a su tienda y ella le enseñó lo que había sucedido con Sísara. El canto de Débora también alaba a Jael por su parte en la derrota del ejército Cananeo (5:24-27).

Dios subyugó a Jabín, el rey Cananita, ese día. Más tarde, al crecer en fuerza Israel, Dios lo destruyó (4:23-24).

El cántico de Débora (5:1-31)El cántico de Débora recuenta y resume la derrota de Sísara. Débora exalta el poder de Dios al proveer una solución en circunstancias difíciles e imposibles.

El papel de Barac es secundario a Débora en el verso 1, puesto que su nombre aparece segundo al de ella. En el Antiguo y Nuevo Testamentos, el orden de los nombres es importante. El nombre del mayor o más impor-tante es siempre primero en el texto.

Débora comienza su canto al darle a Dios el crédito completo y alta alabanza por la parte de Dios en la de-rrota de Sísara (5:3-5). Muy a menudo buscamos la ayuda de Dios, pero fallamos en darle a Dios el crédito por la liberación cuando el problema es resuelto. Débora no hizo tal error. Ella sabía que Dios era la fuente verdadera de la fuerza de Israel.

Débora alabó a las tribus israelitas que vinieron a la ayuda de Barac, y denunció a las que no vinieron. La



denunciación de Rubén indica que la gente aún estaba debatiendo el asunto hasta que la batalla había termi-nado (5:15b-16). Galaad rehusó venir, al igual que Dan y Aser (5:17).

Débora alabó a Jael (5:24-27) y se burló de la madre de Sísara (5:28-30). Débora concluyó por alabar a Dios de nuevo (5:31).

El escritor de Jueces menciona que Israel tuvo paz por cuarenta años (5:31). Si los cuarenta años son literal o simplemente una referencia a una generación, no lo sabemos. Usualmente, una generación, era reconocida por cuarenta años en Israel.

Así, el ciclo de los Jueces es completo. La gente pecó; Dios envió el castigo; la gente clamó a Dios por ayuda; Dios envió liberación.

Preguntas 1. ¿Porqué piensa usted que Israel continuó el ciclo de los Jueces? ¿Somos nosotros curables de un ciclo similar?2. ¿Fue Débora una “segunda alternativa” de Dios para guiar a Su ejército en batalla con Sísara?3. ¿Siente usted que la fe de Barac fue débil?4. ¿Qué papel de liderazgo deberán tener las mujeres en la iglesia local?5. ¿Deberá la licencia, comisión y ordenación estar abierta a las mujeres?6. ¿Pueden las mujeres llamadas por Dios recibir el título de “ministro” en una iglesia local?

Carros HerradosLos carros herrados eran una maravilla militar moderna en el día de Débora. Uno puede compararlo a un tanque de batalla de nuestro día. Los carros herrados cambiaron las maniobras militares considerablemente. Eran hechos de hierro y estirados por uno o dos caballos. En ocasiones llevaban cuchillas en las ruedas para hacerse paso por las líneas enemigas.

Por el otro lado, Israel estaba pobremente equipado. No tenían carros herrados, y la Era de Hierro (1200-1000 a.C.) no llegó a Israel hasta el tiempo de David (alrededor de 1000 a 961 a.C.). Los israelitas no aprendieron el arte de fundir el hierro hasta que muchos de sus vecinos ya lo habían desarrollado. Consecuentemente, los implementos de guerra de los hebreos consistían en espadas de bronce, lanzas y escudos. Sin embargo, el cántico de Débora indica que no había escudo o lanza entre los 40,000 en Israel (Jueces 5:8). Las espadas, lanzas y escudos de bronce no se igualaban a las de hierro – mucho menos al enfrentarse a carros herrados de batalla.

Mujeres como líderes religiososEn cada generación, Dios ha llamado a ambos, hombres y mujeres al servicio profesional de Dios. Tal vez usted ha sido testigo de esto en su propia iglesia. Los colegios y seminarios Bautistas requieren que los estu-diantes ministeriales tengan aprobación de su iglesia madre para recibir becas ministeriales. Por lo general, los blancos de aprobación piden que la iglesia madre del estudiante le de apoyo con oración y estímulo. Esta aprobación debe tomar lugar dentro de una sesión de negocios de la iglesia. La secretaria y el pastor firman tal aprobación.

¿Cómo oraría y estimularía usted a tales estudiantes? ¿Serían sus oraciones y estímulo lo mismo para hom-bres y mujeres?



Cursos por InternetPrograma de Certificación

al Ministerio Hispano

INSTITUTO BÍBLICO BAUTISTA DE SAN ANTONIO, TEXAS

SEMINARIO TEOLÓGICO BAUTISTA DE RICHMOND, VIRGINIA

Los cursos básicos proveen el marco para el programa de estudios del Instituto Bíblico para el Ministerio Cristiano. Los cursos de teología, Biblia, vida espiritual e identidad Bautista, proporcionan a los líderes de las congregaciones el contexto por medio del cual puedan desarrollar diversos ministerios. El costo de cada curso en Español es: $50.00.

CURSOS PRINCIPALES

Bases Bíblicas del MinisterioEste curso consiste en una revisión bíblica que permite a los participantes explorar temas sobre el liderazgo y la práctica del ministerio.

Reflexión Teológica Este curso explora el contexto del ministerio y analiza al estudiante como ministro dentro de ese contexto. El estudiante tomará en cuenta diversos aspectos como la personalidad, los compromisos, la identidad, priori-dades, hábitos de trabajo, y vida espiritual, así como sus capacidades y limitaciones.

Formación Espiritual y el Llamado al MinisterioEste curso esta diseñado para facilitar a los participantes el aprender como el cristiano adquiere su formación, así como guiarlo a examinar diversos enfoques en la preparación de las personas llamadas al liderazgo espiri-tual en la iglesia.

Identidad Bautista Este es un curso diseñado para ayudar a los participantes a comprender el significado de ministrar en una iglesia Bautista. El curso incluye un estudio de los orígenes y desarrollo de los Bautistas, así como un análisis de sus principales énfasis teológicos.

Para mayor información o para matricularse en alguno de estos cursos, por favor llame o escriba a:

Dr. Javier Elizondo

1-800-721-1396

Correo Electrónico: [email protected]


52

53

Lección 9

GEDEÓN – LUCHANDO ANTE LA INCERTIDUMBRECOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoJueces 6 recuenta la historia de uno de los jueces más conocidos, Gedeón. Pero esta historia es diferente de las que precedieron porque mientras el espiral en descenso del pecado de Israel con-tinuó, la respuesta inicial de Dios fue de alguna manera diferente. En esta ocasión cuando Israel empezó a ser oprimido por Median, Dios no respondió inmediatamente. En lugar de eso, Dios envió a un profeta que recordó a la gente acerca de la historia de su sal-vación y los acusó de desobediencia. (Jueces 6:7-10).

El versículo 6 menciona que Israel fue “empobrecido en gran manera” por causa de Median. A través del texto hay indicacio-nes que sugieren que la invasión madianita forzó a los israelitas a esconder sus recursos existentes, a vivir en cuevas o a moverse como nómadas.

En respuesta a sus quejas y a la violación del pacto discutido en el versículo 10, Dios levantó otro libertador, una vez más de un lugar desconocido. Este libertador fue Gedeón. Gedeón parecía que no tenía ninguna de las características que, al menos el pensó, que deberían de existir en un libertador.

Enfocándose en el significadoLa historia de Israel nos recuerda que si no permanecemos obe-dientes a Dios y si seguimos los caminos del mundo, también nosotros enfrentaremos desastre. Algunas veces el desastre puede venir inmediatamente, y algunas veces podríamos no enfrentar las consecuencias de nuestras acciones por muchos años. Sin embargo, el desastre vendrá. El pasaje tamben nos recuerda que Dios no es una deidad pagana a la cual esperamos poder torcer con ofrendas, o manipular con un arrepentimiento superficial. Dios desea nuestra obediencia y arrepentimiento en todo tiempo, no solamente cuando estamos desesperados por la ayuda de Dios.

¿Cómo, entonces, los cristianos contemporáneos podemos estar seguros de que estamos haciendo la voluntad de Dios? Desafortunadamente, por el hecho de que muchos en nuestra sociedad son extremada y fácilmente engañados en relacion con las técnicas de mercadeo, podemos ser increíblemente escépticos cuando se refiere a nuestra fe. Queremos señales. Pero porque tenemos el poder de Jesucristo en nuestras vidas, no necesitamos sacar “un vellón de lana”, sin embargo.

Una de las maneras que podemos determinar la voluntad de Dios es a través del estudio de la palabra de Dios. También, si oramos, muchas veces podemos encontrar las respuestas en la palabra de Dios. Deberíamos también de buscar el consejo de confiables consejeros cristianos. Desafortunadamente, para Gedeón, él no tenía una profetisa como Débora a quien acudir como lo hizo

U N I D A D


U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Texto Focal: Jueces 6:7-18, 21-22, 36-40

Trasfondo Bíblico: Jueces 6

Enfoque Principal: La fidelidad a Dios llama a estar abiertos a recibir la guía de Dios.

Algo en que pensar¿Cómo podemos estar seguros de estar haciendo lo que Dios quiere que hagamos?

Aplicación personalIdentificar maneras en que podemos recibir la guía de Dios para nuestras vidas.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a identificar maneras en que podemos recibir la guía de Dios para nuestras vidas.

Barac. Hay, sin embargo, mujeres y hombres de Dios con quien podemos acudir hoy en día para un sólido consejo cristiano. Gedeón tampoco tenía la guía interior de la presencia del Espíritu Santo. Los que hemos confiado en Cristo como Salvador personal tenemos el Espíritu Santo viviendo dentro de nosotros. El Espíritu puede guiar y ayudarnos a saber cual es la voluntad de Dios. Necesitamos recordar siempre, sin embargo, que Dios nunca nos guiará en contra de las enseñanzas de las Escrituras y de la herencia de la iglesia de Dios.



1. Mencione: Hoy nuestro estudio Bíblico es acerca de una persona que recibió una sorpresa al ser llamado por Dios para delinear nuevas experiencias y trató de asegurarse que las direcciones eran de Dios.

2. Revise la grafica del “ciclo del pecado” con la clase (vea la lección 7). Invite u una persona a que lea Jueces 6”1-6 en voz alta. Remarque los elementos del ciclo encontrados en este pasaje. Enlístelos en el pizarrón.

3. Pida a una persona que lea 6:7-10 en voz alta y a otra que lea 6:11-18 en voz alta. a. Explique la importancia del escondite de Gedeón en el lagar y el dialogo del ángel a Gedeón en el

versículo 12. b. Mencione como las referencias de Dios cambian en los versículos 11. 14, y 20. c. Las Escrituras mencionan que Israel no “escuchó” (a Dios) o no le obedeció. Use lo siguiente para

una discusión. (1) Pregunte: ¿Dónde queda esto en el “ciclo del pecado”? (2) Diga: Piense acerca del tiempo cuando Dios estaba tratando de comunicarse con usted y

usted no escuchó o aún sabiendo desobedeció. ¿Cuál fue el resultado? ¿Ha visto usted esto hacerse en la iglesia? (Recuerde: Usted es parte de la iglesia también).

d. Refiérase a 6:14-17. Pregunte: ¿Por qué cree usted que Dios escogió a Gedeón? (¿Por disponibili-dad, o porque conocía su corazón?).

4. Mencione que Gedeón pidió señales o revelaciones en dos diferentes ocasiones en 6:36-40. a. Describa las dos señales pedidas, señales recibidas y la respuesta de Gedeón a las señales. b. Pida a la clase que vote levantando las manos. Diga: ¿Cuántos de ustedes creen que el interés de

Gedeón en las señales fue algo bueno? Continúe: De los que creen que el interés de Gedeón en las señales fue algo bueno, ¿Por qué creen que fue bueno? Anime a la discusión a través del proceso remarcando los que están en desacuerdo y permitiendo a los proponentes que expliquen sus puntos.

c. Pregunte a la clase: ¿Ha creído usted alguna vez que si ciertas circunstancias ocurren, es una señal para que usted haga o no haga algo, y creyó que las circunstancias eran una señal de Dios para usted? ¿Cómo puede usted estar seguro que esas circunstancias vienen de Dios?

Aplicación

Dirija a la clase a que participe en un momento de silencio y contemplación concerniente a las áreas de sus vidas donde la dirección de Dios es clara y ellos todavía tienen que obedecer esa dirección. Anímelos a com-partir ese compromiso con un amigo confiable de la clase.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónEncontrar y conocer la voluntad de Dios puede ser difícil, pero podemos encontrarla a través de la oración y una búsqueda fiel.

Cada cristiano serio busca la voluntad de Dios para su vida. Sin embargo, encontrar la perfecta voluntad de

LECCIÓN 9: Gedeón – Luchando ante la incertidumbre


Dios no es un proceso fácil, aún con todas las ayudas que Dios nos ha dado. Afortunadamente, tenemos la Biblia y el Espíritu Santo para ayudarnos. En la Escritura encontramos como Dios trató con las personas en tiempos pasados. También, tenemos un cuadro más claro de Dios visto en Su Hijo, Cristo Jesús – la perfecta revelación de sí mismo. Al observar todas las maneras en que Dios reveló su voluntad a los personajes bíbli-cos y las maneras en que Jesús se relacionó con la gente, podemos recoger lo que es la voluntad de Dios para nuestras vidas. Aún así, es un proceso demasiado difícil.

Los personajes bíblicos no tuvieron tanta revelación como la tenemos nosotros. En el periodo de los Jueces, ellos sólo tenían la ley de Moisés – los primeros cinco libros del Antiguo Testamento. Copias de la ley Mosaica no estaban en abundancia. Tales copias hubieran sido demasiado costosas. Además, los ciudadanos comunes no tenían acceso a tales documentos. Uno tenía que depender en historias orales y el ocasional líder religioso para relatar la verdad de la ley de Moisés.

Por estas razones, podemos encontrar algunos métodos de encontrar la voluntad de Dios en la Biblia algo extraños. Tal fue el caso en la historia del llamado de Gedeón para ser el líder de Dios.

Los nómadas madianitas (6:1-6)El ciclo familiar de Jueces principia de nuevo en el verso 1. Israel regresó a la maldad ante los ojos de Dios. Dios envió a “los madianitas, amalecitas, y otras gentes orientales” para saquear la tierra de Israel. La perse-cución duró siete años.

Los madianitas parecen haber sido la amenaza principal hacia Israel. La tierra de los madianitas estaba al sur de Israel en la Península del Sinaí. El área estaba habitada por gente semi-nómada. Sus asaltos en Israel ba-rrieron a través de Benjamín, Judá, y Simeón, desde el Mar Muerto hacia el occidente hasta Gaza en la costa del gran mar.

En un tiempo, los madianitas eran aliados amistosos de Moisés, Moisés había huido de Egipto y llegó a Madián donde fue recibido por Jetro, un sacerdote en Madián quién llegó a ser el suegro de Moisés. Pero cuando Israel pasó por Madian y se establecieron en Palestina, las relaciones se deterioraron. En Números 25:6-18, los madianitas guiaron a los israelitas fuera de Dios; por lo que la política oficial israelita rompió relaciones con ellos.

Los amalecitas llegaron del este a través de Gad y Rubén, localizados en la parte este del Río Jordán. Los amalecitas cruzaron sobre el Jordán hacia Manasés y Efraín.

El texto claramente señala que los madianitas eran los más serios opresores. Se robaban el ganado como tam-bién el grano. Israel comenzó a esconder su cosecha y ganado en las cuevas montañosas y lugares fortificados (Jueces 6:2).

En medio de la pecaminosidad de Israel, Dios aún tenía a los que le eran fieles. Dios envió un profeta para decirle a Israel el porqué los madianitas y otros estaban saqueando todo su ganado y cosecha.

El mensaje del profeta fue sencillo. Dios había entregado a Israel la Tierra Prometida como lo había dicho. Él cumplió su parte del pacto. Dios había prometido ser el Dios y protector de Israel, pero Israel debía refrenarse de seguir otros dioses (Jueces 6:10). Israel había combinado su adoración a Yahweh con la adoración a los dioses de los amorreos.

Los dioses de los amorreos eran los dioses comunes de los cananeos, Baal y Astarot – dioses de fertilidad incluyendo reproducción, sexo y agricultura. Israel fue continuamente infestado con estas deidades a través de su historia.

Dios presentó su causa a Israel a través del profeta anónimo y luego pronunció su más condenatoria declara-ción, “pero no habéis obedecido a mi voz” (6:10). Dios había pasado juicio sobre la actitud de Israel de ser



obediente. Es como si Israel hubiera tornado un oído sordo hacia Dios.

A veces nosotros también somos culpables de rehusar ser obedientes. No ponemos atención a los mandatos de Dios. Buscamos nuestros propios caminos, en lugar de seguir los caminos de Dios. Tanto iglesias como creyentes podemos ser culpables de comprometer nuestra fe con los dioses a nuestro alrededor. Permitimos que la moralidad de la prensa, música, Hollywood o el gobierno influya en nuestro pensar y comportamiento. Algunas cosas están bien de acuerdo a Dios, y otras están mal. A menudo, los mandatos de Dios están en conflicto con nuestra sociedad. En lugar de comprometer, debemos permanecer fieles a las enseñanzas de la palabra de Dios.

El llamado de Gedeón (6:11-18)El nombre Gedeón significa cortador. El haría honor a su nombre al cortar la imagen de Asera (vea 6:25-27).

El ángel del Señor (6:11) no es un ser celestial ordinario. En cada aparición del ángel del Señor en el Antiguo Testamento es obvio del contexto que él es sinónimo con Dios. (Lea el pequeño artículo sobre El ángel del Señor.)

La encina en Ofra era un árbol bien conocido y vivo en el tiempo en que Jueces fue escrito, pero su local-ización está perdida para nosotros hoy. Era propiedad que le pertenecía al padre de Gedeón, Joás el abiezerita. Gedeón estaba sacudiendo el trigo en el lagar para esconderlo de los madianitas.

El ángel recibió a Gedeón con la expresión, “Jehová está contigo, varón esforzado y valiente” (6:12). Tal recibimiento habría de haber espantado a Gedeón. Un varón esforzado y valiente no se esconde generalmente en el lagar para sacudir trigo. La ironía no se perdió en Gedeón. El estaba pasmado. Es lógico suponer que si Dios está con una persona, habrían otros mejores tiempos que el estar escondido de sus enemigos (6:13). Gedeón no estaba faltando el respeto al cuestionar el mensaje del Señor. Sencillamente, él no podía entender como la declaración –“el Señor está contigo”- fuera verdadera.

Además, Gedeón había escuchado de todos los milagros que Dios había efectuado a favor de Israel al sacar-los de Egipto, a través del desierto, y llevarlos a la Tierra Prometida. Sin embargo, para Gedeón parecía que Dios o ya no tenía milagros o había abandonado a Israel.

Muy a menudo, nosotros juzgamos nuestras circunstancias sólo por lo físico. Existe un completo universo de seres celestiales y poder que nosotros casi nunca vemos con nuestros ojos. Aún cristianos están propensos a devaluar la benevolencia de Dios hacia nosotros cuando los tiempos son malos. Es fácil ser cristiano durante el calor del día, mas cuando las nubes de la tormenta vienen, sentimos que Dios nos ha abandonado.

En 6:14, Dios respondió a la pregunta de Gedeón con una respuesta que Gedeón no esperaba. Dios dijo, en efecto, Yo te estoy enviando a ti, Gedeón, para ser el liberador de Israel de la opresión. Dios añadió que Él era el que lo llamaba y enviaba para ser la respuesta a los clamores y oraciones de Israel por ayuda y liber-ación.

La respuesta de Gedeón es típica de muchos siervos de Dios. Como Moisés (Éxodo 3-4), Isaías (Isaías 6:5), Jeremías (Jeremías 1:6), y otros que sintieron no ser capaces para tan gran tarea, Gedeón trató de decirle a Dios que Dios había errado. Jamás ocurrió a Gedeón que Dios ya conocía todas las cosas que Gedeón puso en su lista de razones por las que no debería ser escogido para tal llamado (Jueces 6:15).

Todo lo que Gedeón dijo en 6:15 era cierto. Sin duda, ésta familia era la más débil en Israel. Sin duda, él era el miembro menor de su familia. Sin embargo, Gedeón olvidó que Dios casi siempre escoge a los indignos y les da el poder para tener éxito. El poder no estaba en Gedeón, y jamás lo estaría, para liberar a Israel. Sólo Dios podía derrotar a los madianitas.

Qué tan semejantes somos a Gedeón. Casi siempre pensamos que no somos héroes – que no poseemos lo que



se necesita para ser buenos líderes y, como Gedeón estamos correctos. No lo tenemos. Sin embargo, Dios sí lo tiene. Dios puede hacer maravillas con nosotros, personas de un-sólo-talento, si nos sometiéramos a su voluntad y confiáramos en Él. En el verso 16, Dios lo pone muy claro que no sería Gedeón quién traería a los madianitas abajo; sería Dios.

Gedeón aún no estaba verdaderamente convencido que estaba conversando con el Señor del universo. Entonces, le pidió una señal de que verdaderamente él era el gran Dios que hizo todos los milagros en guiar a Israel en tiempos pasados (6:17).

Gedeón quería ofrecer una ofrenda a Dios y le rogó tuviera complacencia mientras preparaba una comida para el Señor (6:18). Gedeón preparó un cabrito y panes para Dios. Se tomaría tiempo para hacer esto.

El holocausto (6:19-24)Aunque la Escritura está silencia acerca de lo que ocurrió durante la preparación de la comida, seguramente Gedeón pensó acerca del llamado de Dios y la señal que pidió. Al ofrecer la comida a su invitado, el ángel del Señor le dijo a Gedeón que pusiera la comida sobre la peña. Cuando el ángel tocó la comida con la punta de su báculo, la comida se consumió en fuego y el ángel desapareció. Entonces Gedeón supo que verdadera-mente había “visto al ángel de Jehová cara a cara.” (6:22)

Gedeón temió por su vida. Él sabía que una persona imperfecta no podía ver a Dios, cara a cara, y aún vivir. Dios – aunque ya ido – aún habló con Gedeón y le aseguró que no moriría (6:23). Gedeón había recibido su señal. Edificó un altar a Dios, el cual existía al tiempo de escribirse el libro de Jueces.

La destrucción del sitio de adoración pagana (6:25-32)En la misma noche de la visita de Dios, Gedeón recibió otro mensaje de Dios. Gedeón iría a derribar el altar a Baal construido por el padre de Gedeón, y cortar la imagen de Astarot (un símbolo de fertilidad sexual), y usar la madera de la imagen para construir un nuevo altar a Dios en el mismo lugar. En ése altar a Dios, Gedeón sacrificaría un toro como ofrenda.

Gedeón obedeció al Señor bajo la cubierta de las tinieblas. Gedeón tomó a diez de sus siervos para cumplir con la tarea en una noche. (Uno debe maravillarse de que tan profundo ha de haber sido el sueño de la gente para que nadie sonara la alarma). La siguiente mañana, nadie sabía quién había hecho el daño. Finalmente, alguien dijo que había sido Gedeón.

La gente del pueblo pidió por la muerte de Gedeón. Sin embargo, el padre de Gedeón – Joás – vino a la defensa de Gedeón. Joás declaró que Baal debería defenderse a sí mismo si Baal verdaderamente era un dios. Así, la gente se aplacó y le llamaron a Gedeón Jerobaal, significando contienda Baal contra él (6:32).

El deseo de Gedeón por más señales (6:36-40)Gedeón aún no estaba seguro que Dios realmente quería usarlo para liberar a Israel, y por lo tanto pidió otra señal. Dios permitió a Gedeón hacer esta petición adicional. Gedeón le dijo a Dios que él pondría el vellón de lana sobre la era dónde Dios primeramente se encontró con él (6:36-37). Si Dios realmente estaba con Gedeón, entonces el vellón de lana estaría empapado de agua y el área alrededor del vellón estaría completa-mente seca en la mañana. La siguiente mañana el vellón estaba mojado y la tierra seca. Gedeón exprimió el vellón y llenó un tazón de agua. La petición de Gedeón fue honrada.

Sin embargo, el deseo de Gedeón de estar absolutamente seguro de la voluntad de Dios para su vida no estaba satisfecho. Gedeón reconoció que estaba caminando sobre hielo fino y rogó por la paciencia de Dios mientras él hacía otra petición por otra señal. Él puso el vellón sobre la era otra noche. Esta vez, Gedeón quería que el vellón estuviese seco, mientras la tierra a su alrededor estuviese empapada. Dios estuvo de acuerdo y le dio a Gedeón aún una tercera señal maravillosa. Ahora Gedeón estaba convencido.

Muchos cristianos tratan de poner a Dios a través de la misma prueba. Sin embargo, Jesús enseñó todo lo



contrario. Jesús le contestó a Satanás, “Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios” (Mateo 4:7; vea también Deuteronomio 6:16).

Tenemos mucha más revelación de la voluntad de Dios disponible a nosotros que lo que Gedeón tenía, porque tenemos la palabra escrita de Dios en la Biblia y la palabra viva de Dios en Cristo Jesús. Con la Biblia fácilmente disponible a nosotros, necesitamos clamar al Espíritu Santo de Dios para que ilumine la palabra de Dios a nosotros. En estas maneras, podremos encontrar la voluntad de Dios hoy. Ciertamente los amigos cris-tianos y la historia de la iglesia son de ayuda pero no son tan confiables como la actual palabra de Dios.

¿Piensa usted que ha recibido una idea de Dios y que esa idea es la voluntad de Dios? Entonces recuerde que ninguna idea de Dios debe contradecir la palabra revelada de la Biblia y Cristo Jesús.

Preguntas 1. ¿Cuánta dificultad tiene en encontrar la voluntad de Dios para su vida?2. ¿Qué tan seguro está de que está actualmente escuchando de Dios?3. ¿Piensa usted que debemos poner el vellón ante Dios hoy? ¿Por qué?4. ¿Qué tan confiables son otros cristianos en ayudarle a conocer la absoluta, perfecta voluntad que Dios tiene para usted?5. ¿Está usted en la perfecta voluntad de Dios hoy? ¿Por qué responde en la manera que responde?

El ángel del SeñorEl ángel del Señor es muy diferente de ángeles ordinarios. En hebreo y griego, hay una sola palabra para mensajero. En inglés y español la palabra significa embajador, emisario, representante.

Sin embargo, la Biblia lo hace claro que el ángel del Señor es Dios mismo. La persona humana a quién el ángel del Señor le apareció reconoció que era Dios el que hablaba.

Por ejemplo, cuando los tres ángeles aparecieron a Abram para decirle que Sara tendría un niño, él reconoció a uno de ellos como el Señor (Génesis 18:3). Cuando Moisés se encontró con Dios en la zarza ardiente, el ángel del Señor se llamó a sí mismo el Dios de Abram, Isaac, y Jacob (Éxodo 3:2,6).

El ángel del Señor era Dios en apariencia física en el Antiguo Testamento. Algunos le llaman a estas aparicio-nes físicas de Dios en forma humana el pre-encarnado Cristo.

Encontrando la voluntad de Dios hoyLa Biblia es la herramienta número uno para encontrar la voluntad de Dios para la vida de uno hoy. Muchas de nuestras preguntas acerca de como comportarnos o que acción y curso debemos tomar ya han sido expli-cadas a nosotros en la Biblia. La oración por aclaración del Espíritu Santo ayudará a resolver la interpretación de la Escritura. También, el interpretar la Escritura debe ser unida a un método genuino de estudio. Uno debe entender las costumbres, tipo de literatura, y el escenario del cual una Escritura en particular fue escrita.

Aunque amigos piadosos y ministros no deben ser completamente olvidados, uno debe recordar que la final interpretación de un pasaje de la Escritura descansa en la mente de Dios y no en un ser humano. No confíe en libros, sermones, maestros o credos para darle la segura palabra de Dios. La Biblia es nuestra guía en asuntos de fe y práctica.



59

Lección 10

GEDEÓN – DEPENDIENDO EN LOS RECURSOS DE DIOS COMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoComo se vio en las lecciones previas de Jueces 6, Gedeón había recibido su llamado de Dios. Debido a la falta de fe e indecisión de Josué, Dios probó que él estaba con Gedeón reafirmándolo constantemente y dándole señales. Mientras eso pasaba, los madi-anitas y amalequitas una vez más invadían las tierras de Israel.

Es muy probable que los madianitas fueran las primeras personas del desierto en utilizar camellos en las batallas. Estos, inusuales, y para los israelitas, temidos animales dieron a los madianitas y a los amalequitas una movilidad en el desierto que los capacitaba para aparecer repentinamente en las tierras altas de Israel en el momento de la siega.

Como se mencionó en la lección nueve, los ataques en el tiempo de la cosecha devastaron a Israel. A través de esto, Dios castigó a Israel por la falta de fidelidad al pacto. De la misma manera que, Aod en Jueces capítulo 3 y Barac en Jueces 4, llamaron a los israelitas, Gedeón extendió un llamado para que los guerre-ros resistieran a los pillos ruines. Las tribus de Manasés, Aser, Zabulón y Neftalí respondieron enviando 32,000 hombres.

Enfocándose en el significadoAlgunas veces Dios nos lleva hasta lugares en nuestras vidas donde toda confianza en nosotros mismos desaparece y toda cir-cunstancia parece estar en contra para que confiemos y adoremos al Señor en humildad. Obviamente, Gedeón tenía una gran capa-cidad y potencial humano, pero hasta que el pudiera depender de Dios, no le quedaba otra cosa más que simplemente esconder su cosecha.

Dios podría haber derrotado a los madianitas y amalequitas sin usar a Gedeón. En lugar de eso, Dios escogió usar a Gedeón, y al hacerlo así, enseñó a Gedeón, a muchos otros y a nosotros a dejar de controlar emocionalmente aquellas cosas sobre las cuales no tenemos ningún control. ¿Cómo podemos depender completa-mente de Dios y aun concentrarnos ampliamente en las cosas prácticas de la vida? Gedeón pude darnos un ejemplo. Gedeón todavía tenía que llamar a los hombres que le ayudarían. Gedeón todavía tenía que darles cántaros, antorchas y trompetas. Gedeón no solamente tenía 300 hombres para ayudarle en el ataque, sino que también dependía de su siervo, Fura, quien hacía importantes y confiables exploraciones militares antes de la batalla. Después del exitoso ataque, Gedeón pidió refuerzos de las tribus vecinas para continuar la persecución y finalizar la victoria. Así, podemos ver que mientras Gedeón aprendió a confiar en Dios en esta situa-ción, Gedeón también hizo lo que era práctico.

U N I D A D


U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Texto Focal: Jueces 7:2-8, 16-21

Trasfondo Bíblico: Jueces 7

Enfoque Principal: Dios nos llama a depender com-pletamente en él y sus recursos.

Algo en que pensar¿Cómo podemos depender com-pletamente en Dios y al mismo tiempo darle atención adecuada a lo que es práctico?

Aplicación personalExplicar como depender comple-tamente en Dios mientras vivi-mos en un mundo que enfatiza el depender en nosotros mismos y nuestros recursos.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a que explique como depender completamente de Dios mientras vivimos en un mundo que enfatiza el depender en nosotros mismos y nuestros recursos.


Guía de Estudio Bíblico1. Diga: Hoy continuaremos nuestro estudio sobre Gedeón, quien nos ayuda a descubrir más acerca de los

caminos de Dios y confianza en El. Resuma el punto principal de la lección previa de Jueces 6, incluyendo el “ciclo del pecado”.

2. Pida a un miembro de la clase que lea 7:1-8, 12 en voz alta. Pregunte: ¿Qué ideas en estos pasajes parece que no tienen sentido en nuestra ordinaria manera de ver las cosas? (No siempre lo más grande significa lo mejor; reducir el tamaño del ejército cuando ya estaban desproporcionados) Haga notar a la clase que Dios quería que la victoria fuese atribuida solamente a El.

3. Haga un resumen de la historia de 7:9-15. Note que Dios reveló sus propósitos a gente que no era “su elegida”. Pregunte:

a. ¿Qué encuentra en estos pasajes que sirvió como otra señal para Gedeón? b. ¿Cómo afectó esta señal a Gedeón? (lo reforzó, 7:11; el adoró, 7:15; el se hizo más determinado en

su liderazgo, 7:15)

4. Resuma Jueces 7:16-25. Pregunte: ¿Cómo piensa usted que se sentirían los 300 soldados? (Temor, duda; incertidumbre, valor, certidumbre) ¿Qué tan familiares son estos sentimientos para usted de acuerdo con su caminar cristiano?

Aplicación

5. Use estas preguntas para guiar una aplicación y una discusión futura: ¿Cree usted que hay una división entre una fe genuina en Dios y presumir de Dios? Si es así, ¿Cómo

sabemos? ¿Sí la dependencia en Dios no se requiere en nuestras vidas personales, quién recibe la gloria por los

logros? ¿Sí no se requiere una dependencia de Dios en el trabajo o en la iglesia, quién recibe la gloria por los

logros? ¿Cómo sabemos si un trabajo intentado por la iglesia requiere dependencia de Dios?

6. Pida a la clase que reflexione en estas preguntas en silencio: ¿Qué es lo que Dios le está pidiendo que haga que parece tan imposible que solo El lo puede hacer? ¿Qué es lo que Dios le está pidiendo que haga en la iglesia que parece tan imposible que solamente

Dios pude hacer que suceda?

7. Dirija a la clase en una oración, empezando con un momento de silencio para considerar las respuestas que ellos han dado a las preguntas del punto 6. Haga una oración, pidiendo a Dios que El dé dirección y fe para hacer lo que está llamando hacer a cada persona y a la iglesia en su totalidad.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónDios debe recibir el crédito por las victorias en nuestras iglesias y nuestras vidas. Si oramos buscando la ayuda de Dios y la ayuda es dada, debemos darle a Dios la gloria.

Seguramente Pablo se sentía desalentado y desanimado mientras estaba en la prisión, en Jerusalén. Había venido a Jerusalén lleno del deseo de dar testimonio a los judíos; pero en cambio estaba en la prisión, adolo-rido de cuerpo y oprimido de espíritu, por el odio de su propio pueblo.

El Señor lo anima: (1) con su presencia, y (2) con su palabra de consuelo; diciéndole que tenía que ir a Roma

LECCIÓN 10: Gedeón – Dependiendo en los recursos de Dios


a dar testimonio del Señor (Hechos 23:11).

Cuando confrontamos dificultades, oramos y pedimos la ayuda de Dios. Por ejemplo, podemos estar seria-mente enfermos o tenemos a un ser amado quién está muy enfermo y le pedimos ayuda a Dios. Cuando viene el sanamiento, le damos las gracias al personal médico, alabamos las maravillosas drogas, y exaltamos al hos-pital – pero fallamos en reconocer que es Dios quién siempre nos salva.

Preparación para la batalla (7:2-8)En la lección de la semana pasada vimos que Gedeón recibió un definido número de señales de Dios para confirmar el llamado de Dios. Gedeón respondió inmediatamente. No hay duda que él envió un llamado a todos los guerreros a reunirse en la fuente de Harod dónde Gedeón acampaba. Esta es probablemente la fuente grande localizada cerca al pie del Monte Gilboa en el territorio sur de Isacar. Más de 32,000 guerreros respondieron.

El campamento madianita estaba localizado a tres o cuatro millas al norte del ejército de Gedeón, al pié del collado de More. Este collado está a la entrada del Valle de Jezrael. El ejército madianita fue unido por los amalecitas y otros aliados del éste. Sus camellos eran tan numerosos que el escritor bíblico dice, “sus cam-ellos eran innumerables como la arena que está a la ribera del mar en multitud” (Jueces 7:12). Estaban tan gruesos como langostas (Jueces 7:12).

Seguramente, Gedeón pudo haber pensado que 32,000 serían suficientes mas Dios pensó que eran muchos. Dios conoce la naturaleza humana. Si los israelitas hubieran ido contra el enemigo con esa cantidad de hom-bres hubieran tomado el crédito por la victoria. El orgullo es un pecado sutil. La Biblia dice, “Antes del que-brantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu” (Proverbios 16:18).

Dios quería remover cualquier tentación que el ejército de Gedeón pudiera tener cuando la batalla fuera ganada. Dios quería que Israel supiera que Dios había ganado la victoria por Israel, en lugar de la victoria viniendo por el poder de las tropas israelitas. Dada la historia de Israel durante éste periodo de olvidarse de Dios, no es una maravilla que Dios vio el problema potencial de orgullo en Israel (Jueces 6:2).

Por lo tanto, Dios le dijo a Gedeón que el ejército debería ser reducido. Dios ordenó a Gedeón a hablar con sus guerreros. Cualquiera que estuviera temeroso frente a la posibilidad de batalla contra los madianitas debería irse a casa (7:3). Veintidós mil se regresaron, dejando 10,000.

Dios le dijo a Gedeón que el ejército aún era muy numeroso. Otro corte de tropas debería suceder. Dios le dijo a Gedeón que llevara a los hombres a la fuente a tomar agua. Dios le dijo que observara la manera en que los soldados tomaban el agua. Aquellos que lamieran las aguas con su lengua como lame el perro, a aquél pondrás aparte y los regresarás a casa. Aquellos que se doblaran sobre sus rodillas para beber permanecerán. (7:4-6).

Probablemente mucho tiempo ha sido gastado en especular el porqué Dios usó esta prueba. Era la prueba de Dios. No hay explicación bíblica. Al final de la prueba el ejército quedó en 300.

Finalmente, Dios tenía un ejército satisfactorio. Ya que conocemos la terminación de la historia, podemos suponer que cada uno de los 300 que quedaron pensaron era una buena idea atacar a los madianitas con tan pocos. Pero, no era este el caso.

Espiando a los madianitas (7:9-15)Durante la noche, Dios habló a Gedeón, cuyos temores y dudas probablemente estaban regresando. Gedeón tenía sólo 300 hombres. Los madianitas tenían un mar de tropas. Dios sabía que existía algún temor entre los soldados israelitas y en el corazón de Gedeón.

En los versos 10-11, Dios declaró que Gedeón debería acercarse a escondidas al campamento de los madiani-



tas y escuchar la conversación de las tropas enemigas. De esta manera Dios sabía que Gedeón cobraría valor al escuchar la conversación de los soldados madianitas. Ha de haber sido difícil hacerlo. Aún sin embargo, Gedeón confió en Dios. Tomó a su siervo Fura, bajó a las afueras del campamento, y escuchó. Es maravilloso ver la providencia divina de Dios en traer a Gedeón y Fura al punto exacto dónde deberían estar para sobreescuchar una conversación específica.

Dos soldados enemigos hablaban. Uno le decía al otro acerca de un sueño extraño que había tenido. El sueño era acerca de “un pan de cebada que rodaba hasta el campamento de Madián, y llegó a la tienda, y la golpeó de tal manera que cayó, y la trastornó de arriba abajo, y la tienda cayó.”

El otro hombre que escuchaba interpretó el sueño a su compañero. Él exclamó, “Esto no es otra cosa sino la espada de Gedeón hijo de Joás, varón de Israel. Dios ha entregado en sus manos a los madianitas con todo el campamento” (7:14).

Al escuchar este sueño y su interpretación, Gedeón comenzó a alabar a Dios. Gedeón reconoció el liderazgo de Dios y su providencia. Él y Fura regresaron a su campamento tres o cuatro millas de distancia.

Victoria por unos pocos (7:16-21)Al regresar al campamento, Gedeón comenzó inmediatamente a preparar sus tropas para la batalla. Los dividió en tres grupos y les dio trompetas y cántaros vacíos…con teas ardiendo dentro (7:16). Había suficien-tes para todos.

No importa como nos acerquemos a esta idea nueva de batalla, ha de haber sonado extraña a los 300 hom-bres. ¿Dónde estaban las espadas, escudos, los arcos y las flechas? Pues, esto vendría a la batalla cuando Gedeón y sus tropas perseguían al enemigo que huía. Pero por hoy, era una combinación extraña de imple-mentos con los cuales hacer guerra. Sin embargo, los hombres obedecieron a Gedeón.

Luego, Gedeón dio las instrucciones finales. Él advirtió a sus hombres a hacer como él. Cuando él y su escuadrón de 100 hombres tocaran sus trompetas, los otros dos escuadrones harían lo mismo.

Ellos rodearon al campamento madianita. El ataque principió al comienzo de la guardia de la medianoche. (Vea el artículo, La medianoche.)

Gedeón y sus 100 hombres tocaron sus trompetas, quebraron los cántaros, y levantaron sus teas alrededor del campamento. Los otros dos escuadrones hicieron lo mismo. Los 300 hombres gritaron (7:20), ¡Por la espada de Jehová y de Gedeón!

Algunos han sido críticos de la declaración al incluir por Gedeón. Sin embargo, debe ser recordado que los madianitas, amalecitas, y otras gentes del éste habrían estado más familiarizados con Gedeón que con el nom-bre de Dios. Usualmente, guerreros enemigos conocían a los líderes de las fuerzas oponentes por nombre, aún cuando jamás los hayan visto o conocido. Al añadir por Gedeón, no dejó duda alguna en la mente de los enemigos que dormían que ellos estaban siendo físicamente atacados. El ruido de las trompetas, el quebrar los cántaros, y la aparición súbdita de las teas alrededor del área inmediata, transformó al campamento madi-anita en una completa confusión. Tan confusos estaban que comenzaron a atacarse los unos a los otros (7:22).

Los madianitas huyeron por sus vidas y se desparramaron entre unidades más pequeñas. De esta manera las 300 tropas pudieron fácilmente perseguirlos y matarlos a todos. Los israelitas de Neftalí, Aser, Manasés y Efraín fueron llamados para ayudar en la limpieza de las tropas huyentes (7:23-24).

Permanecemos pasmados de cómo Dios usó flaquezas como medio de llevar a cabo sus planes. A través de toda la Escritura, Dios llamó a los menos capaces, los ineptos, y los débiles para ser sus siervos. Esto debe darnos esperanza a todos. La mayoría de nosotros nos sentimos inadecuados para ser el líder escogido de Dios. Sentimos que nuestros recursos son muy pocos. Olvidamos que Dios tiene suficiente recursos y poder



en abundancia para ayudarnos en cualquier tarea que Dios nos llame a hacer. La voluntad de Dios es hecha por el poder de la fuerza de Dios, no la nuestra. Nosotros somos meros instrumentos en la mano del Maestro.

Dios derrotó a una fuerza enorme con sólo 300 hombres, cuernos de carnero, cántaros de barro y teas encen-didas. Él puede hacer lo mismo con la iglesia y recursos más pequeños. Obediencia nos trae victoria a través de la mano de Dios.

Preguntas 1. ¿Porqué piensa usted que creemos que lo grande es mejor en la obra de Dios?2. ¿Cómo asesora usted su habilidad para servir a Dios? ¿Tiene usted muchos talentos y recursos?3. ¿Piensa usted que había alguna duda entre los 300 soldados en el ejército de Gedeón?4. ¿Cuán capaz es su iglesia para hacer la voluntad de Dios? ¿Es usted muy pequeño(a) para emprender una petición grande y verdadera de Dios?

¿Es el Monte Galaad o el Monte Gilboa?La Biblia, versión NIV dice, Monte Galaad en Jueces 7:3. Sin embargo, esto presenta algunos problemas geográficos. Es más probable que sea la localización del Monte Gilboa, pues allí se encuentra la Fuente de Harod. Galaad es un término usado sueltamente en la Biblia y puede significar una región dura, rocallosa. No hay realmente una montaña en Palestina llamada Monte Galaad.

La región llamada Galaad está al este del Río Jordán. Sube del Valle del Jordán a 700 pies bajo el nivel del mar a montañas más de 3,300 pies de altura. El Río de Jaboc fluye a través de ésta completa área del este al oeste.

El área de Galaad no se halla cerca del collado de More (Jueces 7:1), donde los madianitas estaban acampa-dos. Por otro lado, el Monte Gilboa tiene tanto la fuente de Harod y proximidad al campamento madianita. Consecuentemente, concluyo que la palabra Galaad en 7:3 es una referencia a la región dura, rocallosa del área. Las palabras Galaad y Gilboa son similares en hebreo.

Guardia de la medianocheEn Jueces 7:19, el ataque de Gedeón sobre el campamento madianita ocurre al principio de la guardia de medianoche. En este punto en la historia hebrea, la noche estaba dividida en tres periodos de cuatro horas cada uno. La primera guardia usualmente comenzaba alrededor de las seis p.m. Hubiera terminado alrededor de las diez p.m. Al principiar la segunda o guardia intermedia, el ataque principió.

Más tarde, los romanos dividieron la noche en cuatro guardias de tres horas cada una. Estas guardias también principiaban alrededor de las seis p.m. y concluían la noche a las seis a.m.




64

65

Lección 11

ABIMELEC—LIDERAZGO INDIGNOCOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoLa victoria de Gedeón sobre los madianitas llevó a los israelitas a una campaña de guerra que se extendió más allá del Jordán. El esfuerzo extendido llevó al pueblo a una participación más amplia de parte de las tribus de Israel.

Si la historia de Gedeón hubiese terminado después de su mila-grosa victoria sobre los madianitas o aun después del final de la derrota de los reyes de Madián en las regiones más allá del Jordán, Gedeón hubiese permanecido como un héroe relativa-mente indestructible. Con la ayuda de Dios, Gedeón triunfó sobre sus propios temores y timidez y sobre las multitudes invasoras. Desafortunadamente, sin embargo, la historia no termino’ aquí. Cuando Gedeón dirigió a Israel a la victoria sobre Madián, aquellos que participaron en la guerra le pidieron a Gedeón que sirviera como su gobernante. A diferencia de Débora, quien dio el honor y la gloria a Dios por la victoria sobre los cananitas, Gedeón empezó su propia resbalada hacia el espiral en descenso del pecado que vimos a través del libro de los Jueces. El éxito que había experimentado se fue muy rápido para su cabeza. Gedeón también olvidó la maravillosa tolerancia y persistente gracia que Dios le mostró cuando el estuvo lleno de dudas y temor.

Después de quitada la amenaza inmediata de los madianitas y de los aliados amalequitas, Israel experimentó un largo periodo de paz. En lugar de regocijarse en la liberación de Dios, no sola-mente Gedeón falló en reconocer que Dios era la fuente del tri-unfo sino que también los israelitas le dieron a Gedeón el honor que debería haber sido de Dios. Eventualmente, algunos de ellos aún siguieron a un líder que no tenía ninguna de las virtudes de Dios que Gedeón había demostrado.

Enfocándose en el significado Lo indigno del liderazgo de Abimelec finalmente los llevó a un conflicto entre el pueblo de Siquem y el mismo. La rebelión resultó en la destrucción de Siquem y eventualmente la muerte de Abimelec también. El seguir líderes indignos hoy en día nos puede también llevar a la destrucción. En esta sociedad aparente-mente medio-consciente en la que vivimos, es fácil ser engañado por líderes dinámicos que parecen tener todas las respuestas y que tienen rostros atractivos y personalidades carismáticas.

Algunas veces es fácil pensar que los líderes religiosos y políticos no son muy importantes en una iglesia con políticas congregacio-nales y en una sociedad democrática. Sin embargo, necesitamos darnos cuenta que a los líderes faltos de integridad pueden enga-ñar aun a gente con las mejores intenciones.

U N I D A D


U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Texto Focal: Jueces 8:22-23; 8:33—9:15

Trasfondo Bíblico: Jueces 8:22—9:57

Enfoque Principal: Vienen desastres sobre personas que siguen a líderes indignos.

Algo en que pensar¿Cuál es su criterio en cuanto a los líderes que sigue?

Aplicación personalExponer implicaciones para hoy de acuerdo al liderazgo indigno de Abimelec.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a que expongan implicaciones para hoy de acuerdo al liderazgo indigno de Abimelec.

Necesitamos recordar con el fin no justifica los medios. – de hecho, los fines muchas veces dicen mucho acerca de quienes somos y que características forman a nuestros líderes. Un carisma chispeante atrae, pero un buen carácter dura para siempre.

Cuando escojamos a nuestros líderes. Deberemos de enfocarnos en la integridad, fe, convicción, compasión y sinceridad más que en el carisma, apariencia personal, habilidades de oratoria o riqueza. Sin importar en que área, deberemos de buscar líderes que genuinamente desean servir a otros antes que buscar un beneficio per-sonal, poder o prestigio.


1. Haga una gráfica que tenga la palabra Líder en la parte superior. Debajo de este título ponga Bueno en un lado y Malo en el otro lado. Guíe a los miembros de la clase para desarrollen una lista de características, buenas y malas, de los lideres. Asegúrese que los miembros enlisten características personales pero tam-bién la forma en la que los líderes dirigen a la gente.

2. Dirija a los miembros de la clase a discutir como ellos seleccionan a un líder. De detalles de los valores morales e integridad que ellos buscan en un líder. Deje que los miembros discutan como ellos descubren a un verdadero líder. Pregunte como se sentirían si el líder que seleccionaron se hace malo durante el término de su liderazgo.


3. Usando la Guía de Estudio y “Comentario Bíblico” de esta Guía de Enseñanza, haga un resumen de Jueces 8:22=28. Luego pregunte la siguientes preguntas:

¿Por qué Gedeón no quería gobernar a Israel? ¿Qué características hicieron a Gedeón un buen líder? ¿Por qué piensa usted que el efod dirigió a la gente a alejarse de Dios?

4. Enliste a alguien para que lea Jueces 8:33—9:6. Use la Guía de Estudio y “Comentario Bíblico” de esta Guía de Enseñanza para dirigir a los miembros a ver los motivos y las acciones de Abimelec para conver-tirse en un líder. Discuta estas preguntas:

¿Qué derecho pensó Abimelec que él tenía para ser un líder? ¿Qué guió a Abimelec a tomar el control de Israel? ¿Hubo algo que Abimelec hizo para convertirse en el líder?

5. Lea Jueces 9:7-21. Hable acerca del valor de Jotam y la necesidad de una voz valiente hoy en día. Invite a alguien que lea Jueces 9:8-15 en voz alta. Discuta la parábola y explique como se compara a la vida. Pida a los miembros que sugieran aplicaciones de hoy día para la parábola de Jotam.

6. Resuma la información de la Guía de Estudio de esta sección. “El mal liderazgo trae su propia maldición (9:22-57)”. Ayude a los miembros a descubrir que tan lejos el liderazgo nos puede perder durante las presiones del liderazgo. Note que fue una piedra de la mano de una mujer la que destruyó a Abimelec. Refiérase a lo que dijo Pablo en Gálatas 6:7: “No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará”. Pida a los miembros que discutan acerca de las piedras que hoy en día hacen caer a los líderes. Ayúdelos a explorar las ideas de poder, riquezas y orgullo personal en las vidas de los líderes caídos.

Aplicación

7. Use las preguntas 2 y 3 de la Guía de Estudio para ayudar a los miembros a descubrir maneras en las que la gente se pierde de su propósito original. Pida a los miembros que miren en nuestros propios días y tiempos para discutir la necesidad de buenos líderes.

LECCIÓN 11: Abimelec—liderazgo indigno


8. Apunte que ellos son líderes de alguna manera en sus comunidades, trabajo y familias y que un gran lide-razgo empieza con ellos. Diga, Es mi oración que usted guíe en confianza, honestidad, propósito y no por avaricia o motivos egoístas. Termine con una oración pidiendo líderes de Dios en todas las áreas de nuestro mundo.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónUn país de Latinoamérica pasó por un estado de crisis. La deuda nacional se elevó tanto al punto que el gobierno no pudo pagar ni siquiera los intereses de la deuda externa. La inflación estaba empobreciendo a la gente. Los obreros no recibían su salario. Los rebeldes amenazaban los campos. Un candidato tomó el paso hacia delante pretendiendo tener un plan. Según él, no aceptaría ningún compromiso con otros partidos políti-cos. Sin tener que dar detalles de su plan, él urgió al pueblo que votaran por él. Ellos lo hicieron. Él quedó electo.

Al comienzo de su llamado hacia sacrificios para la economía y su avance intenso contra los rebeldes parecía mejorar la situación en el país. Luego la escasez de productos entre las personas comenzó a competir debido a rumores de bienes acumulados en cuentas bancarias privadas. La guerrilla en los campos se tornó brutal; toda persona era tratada como enemigo del estado. Un alboroto se soltó en la ciudad y guerra civil en áreas rurales. Miles de hombres y jóvenes fueron asesinados o desaparecieron. El líder se fugó con su dinero, pero el país que él dejó se quedó enfrentando una recuperación la cual se llevará décadas para lograrlo. ¡Que intenso pre-cio el seguir a líderes indignos!

Los líderes buenos no son perfectos. (Jueces 8:22-28)El retrato de Israel ofrecido en el libro de los Jueces muestra una confederación suelta de doce tribus que cooperaban una con la otra de acuerdo como lo demandara la necesidad. Había muy poca centralización de liderazgo excepto durante tiempos de crisis. Luego un líder o gobernante (normalmente llamado juez) era señalado por el Espíritu de Dios. Éste líder por lo general era un líder militar cuya influencia continuaba aun después que la crisis militar fuera resuelta. La autoridad de guiar al pueblo de Dios, sin embargo, no podía pasarse a los hijos del juez. A propósito, la autoridad del juez para guiar no era algo que el juez podía recla-mar; pues la posición era conferida mediante el Espíritu de Dios.

Gedeón, quien también era conocido por Jerobaal (Jueces 7:1), fue gobernador o juez en Israel. El fue tan popular entre las tribus después de su victoria sobre los madianitas que ellos quisieron hacerle rey. Quizá este fue el intento de asegurarse de un buen líder, pidiendo a Gedeón y a su familia una continuidad de gober-nantes o reyes. Gedeón, sin embargo, rehusó gobernar como rey. Él claramente estableció que únicamente Dios debía gobernar como rey sobre Israel (Jueces 8:23). Gedeón comprobó ser un buen gobernante (juez) no únicamente por su habilidad militar y su muy amplia popularidad, sino que también por su firme teología y su dignidad al rehusar el gobierno. Gedeón demostró ser un buen líder.

Sin embargo, aun los mejores líderes humanos no son perfectos. Inmediatamente después de haber declarado el señorío de Dios sobre Israel, Gedeón se envolvió en una actividad que desvió al pueblo fuera de la ver-dadera adoración de Dios. Él tomó oro de todas las personas (algo que Deuteronomio 17:17 declara ser señal de un rey malo). Luego usó el oro e hizo un efod (Jueces 8:27). Entendemos que un efod era un objeto sacer-dotal el cual era usado para recibir una idea o perspicacia dentro de la voluntad de Dios. Gedeón tomó el efod la cual hizo guardar en su propia ciudad y permitió que todo Israel la tratara en una forma idólatra, y todo Israel se prostituyó tras de ese efod (Jueces 8:27). Al hacer esto, Gedeón también falló en no guardar la adver-tencia de Deuteronomio 17:20 contra el rey exaltándose asimismo sobre otros miembros de la comunidad y poniendo a un lado los mandamientos. Aún cuando Gedeón rehusó ser nombrado rey, él peligrosamente se acercó a actuar a la manera de un rey malo.

Liderazgo malo es el resultado de motivaciones y acciones impropias. (Jueces 8:33—9:6)La idea de majestad (rey) no murió con el rehúso de Gedeón de ser rey; ni siquiera con su propia muerte. Esta



idea continuó teniendo un efecto desastroso sobre las tribus debido a uno de los hijos de Gedeón, Abimelec. El mismo nombre de Abimelec quiere decir Mi padre es rey, y el nombre tiene la llave para comprender lo que es un liderazgo digno o indigno. Si fue Gedeón quien dio este nombre a su hijo, él probablemente intentó que significara, Dios es Rey, de la misma forma que Gedeón lo declaró en Jueces 8:23. El nombre de Abimelec hasta aquí se hubiera sobrentendido que declaraba mi (divino) Padre es Rey. Abimelec al parecer lo entendió en forma más literal, mi padre (Gedeón) es rey. Declarado más correctamente, Abimelec entendió que su nombre significó mi Padre debió haber sido rey, por lo tanto, yo soy rey también. Abimelec deseó poder personal y usó violencia para obtenerlo y mantenerlo.

Después de la muerte de Gedeón, Israel estuvo una vez más en la posición de no tener identificado a un gobernador. Abimelec vio la oportunidad como ventaja personal dentro de ese liderazgo que se necesitaba. Él fue a Siquem, ciudad de su madre, y suplicó a todo el clan apoyo en su demanda al poder. Ciertamente la co-nexión familiar es importante, pero hubo un significado especial con el hecho que decidió ir a Siquem. Siquem fue el sitio donde Josué renovó el pacto con todo Israel (vea Josué 24, lección 6). Tal ceremonia de renovación de pacto pudo haberse observado anualmente. Ser nombrado rey en Siquem, por lo tanto, signifi-caría ser elevado al poder en uno de los lugares más unificadores conocido por las tribus de Israel.

Por muy beneficioso que hubiese parecido Siquem para Abimelec tomar el poder ofreciendo legitimidad como el sitio que representaba todo Israel, Abimelec tuvo motivos más grande al escoger a Siquem como el lugar para declararse rey. Abimelec apeló a la preservación de sí mismo, y exclusividad hacia el pueblo de Siquem, lo cual era muy opuesto en la representación de todo Israel. Él les preguntó: “¿Qué os parece mejor, que os gobiernen los setenta hombres, todos los hijos de Jerobaal, o que os gobierne un solo hombre? Acordaos que yo soy hueso vuestro, y carne vuestra” (Jueces 9:2). Malos líderes se levantan cuando el pueblo toma decisiones basado en miedo o en intereses especiales en ves de aquello que es mejor para todos.

Los temores de la gente en Siquem fueron a base de una premisa falsa, que los setenta hijos de Gedeón esta-ban en línea para gobernar sobre ellos. Ese nunca fue el caso. El padre de ellos jamás fue rey sino juez. De cualquier manera, no había sucesiones. Pueda ser posible que los setenta hijos de Jerobaal hayan comen-zado a dar señas de ejercitar autoridad en la ausencia de su padre. Si este hubiese sido el caso, los nobles de Siquem se hubieran sentido insatisfechos con estos acontecimientos y codicia por poder de ellos mismos, en ves de simplemente ser motivados por un temor falso. De cualquier modo, ellos mostraron su apoyo por Abimelec su hermano (Jueces 9:3) y su oferta de poder mediante contribución monetaria con Abimelec.

Con ese dinero, Abimelec contrató a hombres ociosos y vagabundos (Jueces 9:4). Ellos fueron con él a Ofra y “mataron a sus hermanos los hijos de Jerobaal, setenta varones, sobre una misma piedra” (Jueces 9:5). Abimelec y su pelotón creyeron que sus violentos actos habían asegurado un trono, pero Jotam, el hijo más joven de Jerobaal, sobrevivió, porque se escondió (Jueces 9:6).

Aunque los nobles de Siquem no participaron en la violencia, ellos financiaron aquella violenta y sangrentosa obra. Ellos actuaron rápidamente ante aquella oportunidad que se les presentó. Ellos coronaron a Abimelec como rey de Siquem, y hasta aquí, ellos compartieron la culpabilidad de Abimelec.

La excesiva violencia de Abimelec sobre sus hermanos abre otra posibilidad. El libro de Jueces nos dice que Gedeón tuvo setenta hijos legítimos de sus esposas, y tuvo un hijo con una concubina a la cual no se le per-mitió vivir en el hogar familiar en Ofra. Este hijo ilegítimo, Abimelec, vivió aparte en Siquem (Jueces 8:29-31). Muchas veces líderes malos usan el poder público en su búsqueda de metas personales. Es probable que Abimelec usó el pretexto de sus setenta hermanos como excusa para su venganza personal a lo que el percibía como una vergüenza, reproche y maltrato de ambos, de él y de su madre.

Voces valerosas deben oponerse a liderazgos indignos. (Jueces 9:7-21)Jotam fue el único hijo de Gedeón que sobrevivió al ataque de Abimelec. Él demostró gran fuerza y valentía al aparecerse públicamente para anunciar a Abimelec y ante aquellos que le reconocieron como rey. En ves de irse al exilio después de escuchar en cuanto a la coronación de Abimelec como rey de Siquem, Jotam



escogió primeramente ser escuchado en otro sitio significante asociado con la unidad de todas las doce tribus de Israel, el Monte Gerizim. De acuerdo a Deuteronomio 27:12, Moisés designó el Monte Gerizim como el lugar que simbolizó la bendición del pueblo de Israel. Gerizim fue la montaña de donde las bendiciones de Dios fueron proclamadas.

Desde un lugar prominente sobre la montaña Gerizim, Jotam usó una historia para comunicar su mensaje. Tan pronto como el pueblo escuchó la historia, ellos se sintieron juzgados y bajo maldición, no bendición. Al ungir a Abimelec como rey ellos transformaron la bendición de Israel en maldición.

Como los árboles en la parábola, la gente de Israel había buscado ungir a un rey (Gedeón, como ejemplo). Pero, al igual que los nobles árboles se rehusaron al papel de reyes, de igual manera lo hicieron los líderes más capaces. En la parábola, se le acercaron a la zarza como último recurso. Esta planta era notoria por dos cosas: ofrecía muy escasamente sombra para aliviar el calor del sol, y muy conocida como combustible para el fuego. No obstante, la zarza, al aceptar el papel de rey de los árboles, invitó a otros árboles a demostrar su buena fe mediante la entrada a su sombra y les advirtió que les quemaría si ellos no actuaban en buena fe (9:15). Jotam asignó el papel de la zarza a Abimelec (aunque él se acercó a la gente de Siquem en ves de todo el pueblo de Siquem acercarse a él).

Buena fe es la teología que se discute en todo el pasaje. Jotam captó el uso del término buena fe (lo cual quie-re decir verdad, fidelidad) en la parábola con el fin de comprometer a la gente de Siquem (y a los represen-tantes de todo Israel) en una profunda consideración del significado de sus acciones (9:16). Si al hacer rey a Abimelec el pueblo hubiera verdaderamente mantenido fe con el liderazgo de Gedeón, y lo hubieran honrado, entonces las personas hubieran tenido amplios motivos para regocijarse (9:19). Jotam, sin embargo, demostró que el parentesco de Abimelec no honró a su padre (vea 9:17-18). Por lo tanto Jotam aplicó la maldición de la parábola a la gente y a Abimelec (9:20).

Aunque el narrador usó un término diferente, el narrador ya había dicho a los oyentes que la gente de Siquem (Israel) no había honrado a Gedeón ni a Dios con sus acciones. “Y no se acordaron los hijos de Israel de Jehová su Dios, que los había librado de todos sus enemigos en derredor; ni mostraron lealtad a la casa de Jerobaal, (el cual es Gedeón) por todo el bien que él había hecho a Israel” (Jueces 8:34-35). Lealtad significa el amor incondicional basado en el pacto y la fidelidad hacia Gedeón, las cuales son un paralelo con el recor-datorio a Dios. Todo tiene que ver con vivir en una manera que demuestre consistencia y obediencia a lo que alguien a demostrado en una relación personal.

Demostrar lealtad o fidelidad hacia los líderes del pasado no quiere decir que todas las cosas deben hacerse exactamente como alguien mas lo hizo. Únicamente quiere decir, que los mismos principios pueden ser aplicados, aún si hubiese un llamado a una acción diferente. Coronar a Abimelec como rey no fue algo que armonizó con los principios y guianza clara que Gedeón proveyó para la vida de Israel, él dijo: “No seré señor sobre vosotros, ni mi hijo os señoreará; Jehová señoreará sobre vosotros” (Jueces 8:23). Demostrar leal-tad hacia Gedeón mediante su fidelidad a este principio también hubiera significado recordar a Dios. Israel falló en ambas cuentas. Por lo tanto, la maldición, simbolizada por fuego, seria una fidelidad mutua entre los dos socios. Israel y Abimelec, fueron infieles hacia Gedeón y hacia Dios.

El liderazgo malo trae su propia maldición. (Jueces 9:22-57)La desintegración de la relación entre Abimelec y los líderes de Siquem no fue una real sorpresa para el pueblo de Siquem. Ellos coronaron a Abimelec como rey porque él era su hermano (9:3). Luego ellos vieron por su propia cuenta como Abimelec trató a sus hermanos—los mató (9:5). Debido a la avaricia de los lideres de Siquem, ellos mismos compartieron parte de culpa por la deteriorización de la relación con Abimelec (9:23-24). Sus robos y violencia amenazaron el orden de reglas de Abimelec. La amenaza fue obvia cuando Gaal llegó a Siquem e incitó al pueblo contra Abimelec (9:28-29). No hay duda alguna que el narrador vio toda la continuidad y determinó que detrás de todo lo que acontece, Dios está en control (9:23). El fuego encontrado en el curso del liderazgo malo estaba a punto de arder fuera de control.



Al principio el fuego de Abimelec pareció haber sido una respuesta razonable al fuego de los líderes de Siquem. Zebul, gobernador de Siquem, advirtió a Abimelec en cuanto a la guiada rebelión de Gaal y aún divisó un plan para tratar con ello (Jueces 9:30). Zebul coordinó una emboscada con Abimelec e incitaron a Gaal a salir y pelear como un hombre (9:38).

Abimelec, sin embargo, no estuvo satisfecho con sacar a Gaal y a su familia de Siquem. Su fuego continuo ardiendo cuando atacó a la gente inocente de Siquem al siguiente día, no solamente asesinó a las personas, sino también quemó la ciudad y sembró sal en ella con el fin de hacer su habitación dificultosa (Jueces 9:43-45). Luego desplegó su ira contra los líderes de Siquem, quemando sus torres fortificadas con zarza y matando indiscriminadamente a hombres y mujeres (Jueces 9:49). El fuego ardió fuera de control cuando Abimelec, sin ningún motivo, continúo su destrucción atacando a Tebes, una ciudad que no tenía nada que ver con la rebelión.

Pero cuando Abimelec trató de prenderle fuego a la torre de Tebes tal como lo hizo con la torre de Siquem, una mujer dejó caer un pedazo de una rueda de molino sobre la cabeza de Abimelec, y le rompió el cráneo. A fin de escapar de la vergüenza de morir debido a una mujer, Abimelec ordenó a su escudero que lo matara con su espada.

Aquél que mató a sus hermanos con una piedra (Jueces 9:5) fue herido a muerte por una piedra (9:53). El que no quisiera que se supiera que fue herido por una mujer es otra causa para ser recordado más. ConclusiónLa disposición del pueblo de Israel a seguir líderes indignos en vez del liderazgo de Dios les guió a muchos extremos destructivos. Violencia engendra violencia. El escritor bíblico de Jueces 9:56-57 diseñó una lección en anticipación a lo que Pablo escribiría, “No os engañéis; Dios no puede ser burlado; pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará” (Gálatas 6:7).



71

Lección 12

SANSÓN—POTENCIAL DESPERDICIADOCOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoLas narraciones de Sansón demuestran un giro en el enfoque del libro. La mayoría de la primera parte del libro se centra en jueces que se levantaron en las regiones de las tribus centrales y del norte de Israel. La historia de Sansón, sin embargo, se concentra en la las regiones del sur y del oeste. Sansón era de la tribu de Dan, y esta tribu vivía en la parte extrema norte del territorio de Israel, Sansón, sin embargo, era nativo de la parte sur de esta tribu. Una pequeña sección del territorio de Dan rodeada al este por las ciudades filisteas de Ecrón, Gat y la ciudad cananita sin conquistar de Gezer.

Los filisteos permanecieron como formidables enemigos a través del periodo de los jueces y a través de las monarquías unificadas y divididas de Israel. El último juez, Samuel, y el primer rey, Saúl, pelearon en contra de ellos, El rey David desplazó a los filisteos hacia un lugar mas estrecho durante su reinado, pero los filisteo experimentaron una pequeña resurgencia durante la división de la monarquía. La mayoría de los éxitos de los filis-teos aparentemente se debieron a una mayor tecnología, como la de una mejor técnica de trabajo con el acero y con las armas. El hecho de que los filisteos hayan producido estas armas por ellos mismos o las hayan comparado a través del comercio marítimo se puede debatir. Sin importar su procedencia, sin embargo, sus armas les dieron una decisiva ventaja, especialmente en la guerra contra las tribus de Israel. La ventaja podría haber sido especial-mente notable en el periodo cuando Israel sufrió por un gobierno controlador, flojo e impreciso. Fue en este contexto en el que Sansón se levantó.

Enfocándose en el significado Probablemente nosotros hemos visto a gente de todas clases en la vida literalmente desperdiciar su potencial. Dios todavía puede usar personas que no están totalmente comprometidas en su fe. El todavía puede usarnos a pesar de nuestro pecado. ¿Pero cuánto más puede Dios usar a gente que sirve con un corazón abierto y con una vida de compromiso como Débora? ¿Cuánto más efec-tivo podría haber sido Sansón si no hubiese sido atrapado en el espiral de pecado en el que su nación estuvo atrapada?


1. Escriba la frase, “Potencial desperdiciado”, en un pizarrón o papel donde toda la clase lo pueda ver. Pídales que describan un acontecimiento o la vida de una persona en la que hubo evi-dencia de un potencial desperdiciado. Escríbalos en el pizarrón o en el papel.

2. Pregunte si en algunos de los eventos enlistados de la vida de las personas había oportunidad de una renovación de compro-

U N I D A D


U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Texto Focal: Jueces 13:1-7; 16:18-30

Trasfondo Bíblico: Jueces 13—16

Enfoque Principal: Dios puede usar a personas a pesar de sus equivocadas acciones, sin embargo, sus vidas pudieran sig-nificar mucho más si vivieran en fidelidad hacia Dios.

Algo en que pensar¿Desperdicia usted su potencial dado por Dios?

Aplicación personalEvaluar como pudiera estar des-perdiciando mi potencial e identi-ficar las acciones que debo tomar.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a evaluar como podrirán estar desperdiciando su potencial e identificar las acciones que deben de tomar.

miso. Examine las personas y los eventos para ver alguna oportunidad de reclamar el potencial perdido. Pregunte si la persona tuvo un cambio de corazón por el potencial perdido. Diga, Hoy estamos estudiando a alguien que reclamó algo de su potencial perdido para Dios


3. Haga un resumen de Jueces 13:1-24. Use la información de la Guía de Estudio y “Comentario Bíblico” de esta Guía de Enseñanza. Ponga especial atención en las diferentes maneras en las que Manoa y su esposa vieron el evento. Pregunte a la clase por que ellos piensan que Manoa y su esposa reaccionaron de dife-rente manera.

4. Haga notar las ocasiones en la vida de Sansón en las que el escogió hacer las cosas a su propia manera en lugar de hacerlas de la manera de sus padres o de Dios. (Jueces 14:1—16:3).

5. Enfatice a la clase el rol del liderazgo y dirección de Dios en sus vidas. Haga notar que la dirección de Dios para sus vidas tiene un propósito terrenal, pero también tiene un propósito de acuerdo con el reino de Dios.

6. Guíe a la clase a identificar las oportunidades que Sansón desperdició. Pregunte, ¿Qué piensa usted que Sansón podría haber hecho si el hubiese aprovechado la oportunidad en lugar de desperdiciarla? (Jueces 16:4-22).

7. Pida a alguien que lea Jueces 16:23-31. Hable acerca de la habilidad de Dios de hacer cualquier cosa, en cualquier lugar, en cualquier momento y en cualquier manera que El desee. Ayude a la clase a entender que el secreto de la nueva habilidad de Sansón fue el deseo de honrar y glorificar a Dios con su vida. Note que aun en esta situación, los motivos de Sansón no fueron puros.

Aplicación

8. Dirija a los miembros a recordar las oportunidades desperdiciadas en la vida de Sansón. Pida a los miem-bros que reflexionen en sus vidas y que busquen oportunidades desperdiciadas. Anímelos a buscar una oportunidad de ayudar a los demás a alcanzar su potencial.

9. Concluya con una oración para animar a los miembros a ir más allá de las oportunidades desperdiciadas de sus vidas. Anímelos a aprovechar las oportunidades que Dios nos da cada día para ministrar.

GUÍA DEL ALUMNO

IntroducciónSin tener que mencionar nombres, podemos recordar a líderes de iglesias muy conocidos quienes exhibieron su potencial, sus victorias en varios ministerios o proyectos, y que fueron de gran ayuda para muchas perso-nas, sin embargo, después de un tiempo se vieron envueltos en problemas personales causando como conse-cuencia limitación ministerial. Algunos de estos problemas fueron causados por abuso de alguna sustancia, abuso de finanzas, o alguna expresión de pobre juicio. Muchas de estas personas experimentaron gran pérdida aun en sus ministerios. Algunos han buscado aprender de estas experiencias dolorosas buscando maneras en cómo ministrar a personas.

Somos afortunados al vivir en una era donde los errores de una persona no necesariamente significan que ya no hay lugar para servir. Sin embargo, estas personas pudieran haber sido mucho más fructíferas si tan solo hubieran sido capas de no caer en sus malas decisiones y haber ejercitado plenamente el potencial de su lide-razgo sobre el pueblo de Dios.

LECCIÓN 12: Sansón—potencial desperdiciado


Un comienzo inesperado. (Jueces 13:1-24)El ciclo familiar de vida en Israel entró una vez más en un período de sufrimiento y opresión, debido a que el pueblo constantemente fallaba en vivir de acuerdo a la voluntad de Dios. En esta ocasión los opresores eran los filisteos. Una nueva generación de expectaciones incumplidas (por cuarenta años, Jueces 13:1) dejó a la nación vacía y sola tal como la mujer estéril que menciona el versículo 2 de este capítulo. Sin embargo, Dios es capaz de obrar en esas áreas en las que creemos ser imposible o que nunca cambiarán. En medio de una generación perdida, Dios ya estaba obrando con el fin de traer libertad y proveer una nueva oportunidad a su pueblo para que vivieran de acuerdo a su llamado.

La historia de liberación comienza en una forma inesperada, con el nombre de un cierto hombre llamado Manoa, de la ciudad de Zora, de la tribu de Dan. De inmediato, vemos que algo sorprendente, misterioso y con poder sobrenatural de Dios comienza a revelarse a medida que la historia se desenvuelve, no en Manoa, sino más bien en su mujer, cuyo nombre no es revelado.

Dios demostró gran confianza en esta mujer al darle detalladamente instrucciones para el cuidado de su embarazo y la forma en la que su hijo debía ser criado de acuerdo a las instrucciones bíblicas nazarenas (vea Números 6:1-21). Es interesante, que cuando ella declaró a su marido su experiencia (13:6-7), lo primero que él hizo fue orar para que Dios volviese a enviar al mensajero, con el fin de que les declarase que hacer con el niño que había de nacer (13:8). ¿Será que Manoa tuvo menos confianza en su mujer que la que Dios tuvo? ¿O será que Manoa rogó que personalmente se le incluyera en el plan? En cualquier caso, aunque se le fue declarado el mensaje (vea Jueces 13:8, 12), él no estuvo satisfecho simplemente con recibir la noticia de parte de su mujer.

Dios contesta la petición de Manoa enviando al mensajero una vez más. Veamos que el ángel del Señor repitió el mismo mensaje que dio a la mujer (13:13-14). ¿Habrá pensado Manoa que iba a recibir más infor-mación con el hecho de invitarle a comer (v.15)? Si fue así, ello habría traído desilusión, pues el ángel de Dios enfocó su atención en otros asuntos (13:16). La mejor respuesta de acción de gracias que una persona puede rendir a Dios por las bendiciones que se reciben en la vida es aquella que es expresada mediante la adoración.

Manoa continúa con sus esfuerzos de ganar una medida de control sobre la situación. Él preguntó el nombre de este mensajero (13:17); compare con (Génesis 32:29). En el Antiguo Testamento el nombre expresaba la misma esencia de la persona, tal como el nombre de Jacob (el cual significó suplantador, engaño), Noemí (agradable, dulce) o Mara (amargura). Por lo tanto, el conocer el nombre de alguien armaba a la persona con cierto tipo de conocimiento acerca de esa persona el cual podía ser usado para ventajas personales. Sin embargo, el mensajero del Señor no permitió tal ventaja; él no reveló su nombre es admirable (13:18). Mas bien, lo que aconteció enseguida demuestra que Dios es completamente libre y está mucho más allá de cualquier tipo de control humano. Cuando la ofrenda fue presentada, el mensajero de Dios apareció en la llama, cuando el humo subía del altar hacia el cielo (13:19-23). Fue únicamente entonces cuando Manoa comprendió la magnitud de su experiencia. Él comprendió que ellos habían estado en la presencia misma del Dios verdadero. Manoa, sin embargo, sintió únicamente el peligro de su situación. “Ciertamente morire-mos, porque a Dios hemos visto” dijo él (13:22). Su mujer demostró tener una teología más practica, la cual respondió diciendo: “Si Jehová nos quisiera matar, no aceptaría de nuestras manos el holocausto y la ofrenda, ni nos habría mostrado todas estas cosas, ni ahora nos habría anunciado esto” (13:23).

Las palabras de esta mujer apuntan hacia la bondad de Dios. Todo lo que Dios había hecho en sus vidas apuntó hacia algo más grande que ni ellos y ni siquiera Israel habían esperado: fin de su esterilidad y fin a la opresión. Sansón fue el milagroso fin de una tragedia y el fin de otra promesa. Entre el comienzo y el final de su vida, Sansón fue responsable por las decisiones que tomó limitando su potencial como siervo del Señor.

Vida inconsistente y compromiso dividido. (Jueces 14:1—16:3)Sansón fue criado como nazareno (uno que es separado para Dios) por sus padres a través de toda su niñez y juventud. Como adulto, la fidelidad a las instrucciones que fueron dadas por el mensajero de Dios dependía



de él. La primera narrativa de la vida de Sansón como adulto, revela el conflicto causado por el compromiso dividido de Sansón. Él se enamoró de una mujer filistea y pidió a sus padres que la pidieran como mujer para él. Cuando sus padres pusieron inconvenientes debido a que el pueblo de Israel debía ser un pueblo apartado para agradar a Dios, Sansón insistió con su padre diciendo: “Tómame esta por mujer, porque ella me agrada” (14:3)

El siguiente versículo es un poco difícil de entender. La lectura literal es clara, “Mas su padre y madre no sabían que esto venia de Jehová, porque él buscaba ocasión contra los filisteos” (14:4). La dificultad de esto descansa en aceptar que Dios deseaba que Sansón contrajera matrimonio aún en contra de los deseos de sus padres, y especialmente que Dios fabricara un plan como pretexto para que Sansón peleara contra los filis-teos. Definitivamente que podemos hacer eco a las palabras del escritor que ultimadamente Dios está en con-trol de todas las cosas, y no hay nada que pueda frustrar la voluntad de Dios.

Los acontecimientos del matrimonio de Sansón y asuntos que sucedieron después nos dan evidencias sufici-entes en cuanto a su carácter. Definitivamente que si podía matar a un león con sus propias manos, también tenia la fuerza y el coraje para poner en libertad al pueblo de Dios (14:5-9). Sin embargo, Sansón demostró humildad al no enaltecerse en cuanto a sus eventos de guerra, ni aún con sus padres (14:6). Sansón mostró ser capaz de usar trampas para su propia ganancia al presentar un enigma el cual nadie conocía más que él. También mostró ser susceptible hacia persuasiones de la mujer (14:17). Además, Sansón mostró tener un terrible carácter cuando descendió a Ascalón y mató a treinta hombres de ellos para pagar su cuenta a otros filisteos (14:19); dejando a su esposa que irrevocablemente rechazó (14:20); quemando las tierras de los filis-teos (15:1-5); y vengándose de los filisteos por la forma que trataron con sus propios suegros, haciendo justi-cia por su propia cuenta (15:6-8).

Las acciones de Sansón pusieron en peligro su posición como juez (15:9-13). Sin embargo, Sansón fue leal al pueblo de Israel y no actuó en violencia contra su propio pueblo cuando estuvieron a punto de traicionarlo. Por lo tanto, Dios usó a Sansón para libertar a su pueblo del poder filisteo (cuando menos temporalmente) mediante la fuerza personal que poseía (15:14-17). Pero cuando las guerras cesaban, lo único en lo que Sansón pensaba era en sí mismo. Teniendo gran sed y creyendo morir, Sansón clamó a Dios por agua. Una vez más Sansón no vio la diferencia entre sus deseos y los deseos de Dios de liberar al pueblo (15:18). La fuerza e indulgencia de Sansón una vez más es puesta en manifiesto en los acontecimientos breves que apare-cen en 16:1-3 durante su visita con la mujer prostituta de la ciudad filistea de Gaza.

Desperdiciando grandes oportunidades. (Jueces 16:4-22)Sansón sabía que él y su pueblo estaban en gran conflicto con los filisteos por querer el control sobre la parte central del país y por la libertad sobre los israelitas quienes deseaban vivir de acuerdo a la voluntad de Dios. También sabía que él tenía el toque divino del Espíritu de Dios y que se le había dado una fuerza especial para guiar a israelitas como juez en este conflicto.

El libro de Jueces nos dice que Sansón amó a Dalila, pero no nos dice explícitamente como Dalila se sintió en cuanto a Sansón. Tenemos más o menos una idea de sus sentimientos cuando ella es confrontada por los prín-cipes de los filisteos. Note que Dalila no se resistió ante la propuesta. Es probable que la traición haya tomado lugar debido a su lealtad por su gente, o quizá porque se le prometió recibir mil cien ciclos de plata (16:5) por tal traición. A este paso, esta traición fue peor que la traición anterior por la primera esposa de Sansón, pues esa traición fue motivada por temor y amor por su familia (14:15).

Pudiera haber sido fácil reconocer las señas de otra traición después de la traición del capítulo 14. De cualquier manera ese no fue el caso. Es posible que Sansón se confiara demasiado y no necesariamente por falta de inteligencia. A este paso, Dalila sabía cuales serían las consecuencias que le esperaban a Sansón. Deliberadamente y repetidamente ella buscó como descubrir el secreto de la fuerza de Sansón. Al comienzo, Sansón inventaba una respuesta y luego dependía de su fuerza para escaparse de alguna trampa. Muy seguro que él sabia que Dalila era la causante de tales trampas, aun con todo él continúo con el juego tres veces. ¿Habrá sido esta una idea legítima de Sansón para entrar en combate con los filisteos? ¿Fue a caso una idea



para diversión o juego?

Dalila se volvió más insistente. Con ironía ella dijo: “¿Cómo dices: yo te amo, cuando tu corazón no está con-migo?” (16:15) Y la narrativa agrega que “presionándole ella cada día con sus palabras e importunándole, su alma fue reducida a mortal angustia” (16:16). A este punto, Sansón reveló el secreto desperdiciando la opor-tunidad de ser uno de los jueces más grandes sobre Israel. Dos veces en la narrativa de Sansón se nos dice que él juzgó a Israel por veinte años (15:20; 16:31). Es probable que el repetido anuncio de los años como juez, encontrado únicamente en este caso, tenga como intento poner en manifiesto a los oyentes que pudo haber sido diferente. El potencial de Sansón fue desperdiciado.

Lo último sucedió rápidamente. Dalila le traicionó cortándole el cabello, y Sansón, “no sabía que Jehová ya se había apartado de él” (16:20). Él fue capturado, torturado, y esclavizado. En todos estos eventos hay única-mente una nota de esperanza, el cabello de su cabeza comenzó a crecer (16:22).

Aun en las peores circunstancias, Dios es capaz de obrar. (Jueces 16:23-31)La omnipotencia de Dios quiere decir que su poder es más que una simple declaración y que Dios puede hacer cualquier cosa, en cualquier lugar, a cualquier tiempo, en cualquier forma que Dios desee. Las debili-dades y errores de Sansón no le descalificaron para ser instrumento en las manos de Dios para liberar a Israel. Dios es capaz de usar aun a aquellos que desperdician su potencial al grado que estén dispuestos a permitir que Dios opere a través de ellos.

Los principales de los filisteos se juntaron para ofrecer sacrificio a su dios Dagón. Ellos estaban convencidos que Sansón estaba en la presencia de ellos debido a la voluntad de Dagón. Ellos no concebían la idea que el Dios de Israel podía usar esas circunstancias para obrar su voluntad. Ellos abusaron y se burlaron de su prisionero (por lo tanto, de su Dios). Ellos pasaron por alto que mientras tanto el cabello de Sansón había cre-cido. De igual manera, ignoraron que el enfoque de hacer la voluntad de Dios de liberar al pueblo de Dios de los filisteos había regresado.

Pretendiendo tener necesidad de descansar, Sansón pidió le pusieran contra las columnas sobre las que des-cansaba la casa para apoyarse sobre ellas, Sansón fue llevado al lugar de en medio, donde el edificio fue más vulnerable. Antes de cualquier acción de su parte, Sansón oró (16:28). Sus motivos estuvieron todavía mez-clados, con venganza quizás debido al servicio que tubo que prestar más allá de la cuenta. Cuando menos, su atención fue dirigida hacia Dios. Dios le usó a pesar de su propia muerte con el fin de proveer un sentido de liberación de la opresión de los filisteos. “Y los que mató al morir fueron mucho más que los que había matado durante su vida” (16:30).

ConclusiónSansón fue honrado como héroe. Sin embargo, la nota que dice que él juzgó a Israel por veinte años abre la puerta hacia la pregunta, ¿por cuánto tiempo más hubiera podido servir como juez y qué tanto más pudo haber hecho si hubiera vivido de acuerdo a su verdadero potencial?




76

77

Lección 13

UN PUEBLO DECAE EN PEDAZOSCOMENTARIO BÍBLICO

Entendiendo el contextoEl espiral estable y descendiente hacia el pecado continúa en los capítulos finales del libro de Jueces. La gente constantemente siguió sus deseos egoístas. Algunas veces fueron mal dirigidos a través del pobre ejemplo de jueces como Sansón. Faltándoles un liderazgo valioso, la gente de Israel hizo lo que pensó que era correcto. Los pasajes del bosquejo de esta lección demuestran los resultados de su egoísmo. El resultado principal fue el caos. Cada tribu, y algunas veces cada individuo, buscó lo que más le benefi-ciaba sin considerar los efectos de sus acciones sobre los demás y especialmente sin considerar los mejores intereses de Israel.

Algunos comentaristas identifican los capítulos finales de Jueces como un material suplementario. Ciertamente, los capítulos 17-21 son bastante diferentes del resto del libro. El enfoque princi-pal de estos cinco capítulos finales es demostrar el desastre que vendría sobre Israel debido a la falta de un buen liderazgo y por los bajos niveles de vida de Israel. El frecuente comentario edito-rial que se encuentra en estos capítulos, “no había rey en Israel” (17:6, 18:1; 19:1; 21:25), parece sugerir que la gente culpaba a la falta de un buen y sólido liderazgo por su desarreglo y falta de convicción moral. Por supuesto, cada individuo es responsable por sus acciones y conducta sin importar que características los líderes tengan. Sin embargo, la falta de un fuerte y devoto líder como Moisés o Josué los dirigió hacia una destrucción moral, división de las tribus, caos interno y finalmente a la guerra civil.

Enfocándose en el significado¿Somos culpables de hacer lo que es correcto en nuestros propios ojos? Ciertamente, todo el libro de Jueces da testimonio acerca de los peligrosos resultados si somos culpables de “hacer lo que está bien a nuestros propios ojos” sin considerar las necesidades de los demás o los mandamientos de Dios.

En estos pasajes de la Escritura, podemos observar la culmi-nación del estable espiral descendiente hacia el vicioso ciclo del pecado. Empezando con la desobediencia de la gente al ignorar su pacto con Dios, luego comprometiéndose en prácticas idola-tras, hasta llegar a la terrible aflicción de la guerra civil, la his-toria traza sus consecuencias. Vemos el espiral descendiente aun en el patrón de los jueces, comenzando con una virtuosa juez llamada Débora, y extendiéndose a través de un imperfecto pero todavía obediente juez como Gedeón, y luego continuando hacia un imperfecto y egoísta juez como Sansón. Luego vemos que el ciclo continua hacia un juez que se nombró así mismo como el levita sin nombre de la historia de Micaía y la tribu de Dan, y finalmente hacia un lugar donde no hubo ningún líder importante para tratar con los problemas de la guerra civil.

U N I D A D


U N I D A D

2Jueces:

Espiral en descenso

Texto Focal: Jueces 17:1-6; 18:1; 19:1; 20:1-5; 21:25

Trasfondo Bíblico: Jueces 17—21

Enfoque Principal: Ocurre caos cuando la persona decide seguir sus propios caminos egoístas, simplemente haciendo lo que parecer ser lo bueno ante sus propios ojos.

Algo en que pensar¿Cuál es el peligro de hacer lo que nos parece bien?

Aplicación personalIdentificar formas en las que pudiéramos estar en peligro por simplemente hacer lo que creemos que es correcto ante nuestros pro-pios ojos.

Meta de enseñanzaDirigir a la clase a identificar for-mas en las que pudiéramos estar en peligro por hacer simplemente lo que creemos que es correcto ante nuestros propios ojos.

Algunas veces podríamos ser culpables de relativismo moral. Algunas veces podríamos ser culpables de cometer pecados que parece que no dañan a nadie. Pero una de las lecciones del libro de Jueces es que todo pecado tiene consecuencias. Nuestro propio egoísmo pude dañar a otros aun cuando no vemos los resultados inmediatamente. Necesitamos tener cuidado de escuchar las advertencias de las Escrituras acerca del peligro de hacer “lo que es correcto” en nuestros propios. Necesitamos examinar a nuestros líderes para encontrar aquellos que tienen las características de integridad y fidelidad, y debemos también examinar nuestras vidas para asegurarnos de que no estamos siguiendo nuestros propios caminos egoístas.


1. Pregunte a los miembros si ellos alguna vez han sido parte de un equipo de alguna organización deportiva, un club, u otra organización. Invítelos a compartir el propósito o meta de ese grupo en particular. Pregunte, ¿Tenían ustedes ciertas reglas o guías que seguir como miembros? ¿Cuáles eran los resultados si uno o más miembros del grupo o equipo no seguían las reglas o guías? ¿Cómo afectaba eso a los otros miembros del equipo o grupo?

2. Diga a los miembros de la clase que usted quiere empezar un nuevo club u organización hoy llamada: “El Club Donde Todo se Vale”. No hay reglas, direcciones ni historia. Solamente vamos a hacer lo que quera-mos. Continúe diciendo, que grato sería poder ser libres para hacer lo que queramos. Preguntes si quieren unirse al club. (La mayoría de los miembros probablemente no querrán unirse. Si ellos quieren, pídales que consideren los posibles resultados mientras que estudian esta lección).


3. Use la información de esta Guía de Estudio para discutir Jueces 17:6. 21-25. Ayude a los miembros de la clase a comparar la sociedad en la que los pasajes de la Biblia sucedieron con la sociedad de hoy día. Pregunte si existe la idea prevaleciente en la gente de hoy de hacer lo que es correcto en sus propios ojos, y si es así, cuales son los resultados.

4. Pregunte, ¿si usted fuese a hacer una religión o un dios, que elementos incluiría en sus prácticas? Resuma el caos que Micaía creó al hacer su “propia religión”.

5. Use la información de esta Guía de Estudio en cuanto a Josué 18:1-31 para revelar la continua mezcla de una buena confusión y una decisión cuestionable hecha por la gente de Dan. Apunte que podemos ver los errores ahora, pero algunas veces en el momento del acontecimiento, nos olvidamos de lo que es verdadero y correcto. Pregunte si alguien ha pasado por una situación caótica como esta.

6. Pregunte, ¿Corrige la violencia sobre violencia lo que está equivocado? Dirija a la clase a través de una discusión de la violencia que se encuentra en Jueces 19:1—20:48.

Aplicación

7. Pida a los miembros que piensen en programas o tradiciones que toman el lugar de una verdadera adoración a Dios. Pregunte porque ellos sienten que la gente sigue un programa o tradición antes que a Dios. Mencione que los programas y las tradiciones siempre quedarán cortos de la presencia de Dios en la vida de las personas.

8. Dé a cada miembro un clavo. Explique a la clase que ese es un recordatorio de los fundamentos de nuestra fe en Cristo Jesús. Jesús es el camino, la verdad y la vida (Juan 14:6). Ore para que Dios siempre sea la guía y fundamento de nuestras vidas.

LECCIÓN 13: Un pueblo decae en pedazos


GUÍA DEL ALUMNO

La falta de una autoridad central para determinar lo bueno y lo malo afecta toda una sociedad: hogar, iglesia, comunidad, estado y nación. La falla de Israel no fue por falta humana sino por su falta de reconocimiento que el Señor era el Rey de Israel.

Versos idénticosJueces 17:6 y 21:25 son pasajes idénticos: “En aquellos días no había rey en Israel; cada uno hacia lo que bien le parecía.” Los versículos son como un sobre en el cual todas las historias encajan con esta sección, o son libros entrelazados que mantienen conectadas todas las narrativas juntas bajo un mismo tema. La fuerza de unión en estos temas interpretados para la audiencia fue fortalecida mediante la repetición parcial del tema en otras dos ocasiones (18:1 y 19:1); En aquellos días no había rey en Israel. La repetición únicamente de la primera frase del tema hace más énfasis a la creciente importancia del concepto de un rey en Israel. Cuando el narrador repitió la primera parte de este tema, En aquellos días no había rey en Israel, él esperó que los oyentes trajeran a sus mentes el resto de ese tema, cada quien hacia lo que bien le parecía. Ambos aspectos del tema están bajo consideración, pero hacer que el oyente supla las palabras de un aspecto sería como des-ignarle a escoger cual de los dos es más importante.

Todas las personas hacían lo que les parecía bien ante sus propios ojos y esto es de alguna forma loable. ¡Cuándo menos trataban de hacer lo correcto! El problema completamente está en la subjetividad de hacer lo que es correcto. Muchas veces, lo que es correcto se convierte en confusión con lo que es deseado. La expec-tativa de justicia se extiende a la limitada experiencia de una persona o sabiduría.

Hay algo muy importante para decir cuando se menciona la importancia de tener un rey. Esto hace a la figura central responsable por saber o determinar lo que es correcto. Esto hace que alguien apele por la adminis-tración de justicia. Sin ningún rey, lo que es correcto puede convertirse arbitrario, y toda la sociedad estaría tratando de determinar lo que es correcto, como un espiral que cae de justicia hacia la violencia, de orden hacia el caos.

Todos hacían lo que les parecía correcto ante sus propios ojos porque no había rey. ¿O había rey en Israel? Abimelec experimentó con el reinado pero falló miserablemente. Antes que él, Gedeón rehusó ser nomb-rado rey. Pero Gedeón declaró enfáticamente que había Uno sobre el trono de Israel, “No seré señor sobre vosotros, ni mis hijos os enseñoreará; Jehová enseñoreará sobre vosotros” (Jueces 8:23).

Israel no tenía edicto de un rey humano, pero el pueblo si tenía los diez mandamientos. El tema de que “no había rey en Israel” es más que un factor histórico pues este fue el período antes del reinado de Saúl y David, los primeros dos reyes de Israel. Es más bien una acusación de que cuando el pueblo se olvida de que son de Dios y empiezan hacer lo que les parece correcto ante sus propios ojos, las cosas caen, se derrumban (vea Salmo 93:1-2; 95:3-11; 96:10; 99:1-4).

Religión fabricada en casa. (Jueces 17:1-13)Los primeros aspectos de la vida que fueron afectados cuando todas las personas hicieron lo que les pareció correcto ante sus propios ojos fueron las dos más importantes: el hogar y la iglesia. Un hombre de Efraín, Micaía, robó mil cien ciclos de plata de su propia madre. Cuando él escuchó que su madre pronunció una maldición contra el ladrón, él regresó lo que había tomado, la madre cambió su corazón cuando supo quien había sido la persona que le había robado (Jueces 17:1-3). El miedo fue lo que motivó su determinación en hacer lo que era correcto en este caso. Una vez que la madre supo quien había sido el ladrón, cambió de opi-nión en cuanto al castigo para el ladrón; ¡ella pidió bendiciones sobre él! El derecho a robar, la necesidad de confesar, y el concepto de justicia fueron todos completamente determinados por percepciones de individuos que no proveyeron ningún tipo de fundamento sólido para una sociedad justa.

La acción individualista también puede fracturar la relación con Dios. La mujer sí tuvo un sentido apropiado de gratitud al recobrar sus monedas de plata. Por lo tanto ella consagró todo al Señor, al Dios de Israel, pero



extrañamente ¡“hizo una imagen fundida de metal” (17:3)! Además, la mujer luego dio únicamente 200 de los 1100 al fundidor. Agregando a esta confusión, este ídolo de plata se encontró nuevamente en posesión del hijo. En esta ocasión fue una imagen la que fue puesta en su casa, un efod y terafines, consagrando a uno de sus propios hijos para que fuera su sacerdote. Micaía parecía tener todo bajo control, incluso su práctica de adoración, la cual él podía determinar.

Luego un forastero levita de Belén llegando al monte de Efraín, llegó a casa de Micaía. Micaía vio esto como una oportunidad para mejorar su estatus ante Dios y ante los ojos de la comunidad. Micaía pidió al levita que se quedara a vivir con él en su casa para que fuera su sacerdote personal. La oferta de un salario considerable-mente bueno, casa, comida y gastos, le pareció suficiente al levita para aceptar la oferta de Micaía (17:10). Después de todo, el levita había dejado Belén para encontrar otro lugar (17:8). Quizá nos preguntamos, ¿Dónde está el sentido del llamado en este tipo de arreglos? Las palabras fueron las correctas. Micaía dijo al levita “Quédate en mi casa y serás para mí padre y sacerdote” (17:10). Pero la realidad es que el levita vino a ser como uno de sus hijos (17:11). La motivación de piedad de Micaía fue expuesta por sus propias palabras, “Ahora sé que Jehová me prosperará, porque tengo a un levita por sacerdote” (17:13).

Llamado hacia una congregación grande. (Jueces 18:1-31)El siguiente episodio continuó con la confusión de la mezcla de lo que es bueno con lo arguible tal como lo hizo la tribu de Dan quienes hicieron lo que les pareció ser correcto ante sus propios ojos porque “en aquellos días no había rey en Israel” (18:1). Dan fue una tribu que estaba a punto de fundirse (vea Josué 19:40-48). Aunque la tribu de los Danitas estaba viviendo en Zora y Estaol, ese territorio ya no era de ellos. Ellos envia-ron a cinco hombres de sus familias para explorar un nuevo hogar.

Mientras se encontraban en esta misión, los hombres se encontraron en la región montañosa de Efraín, cerca de la casa de Micaía. Ellos se sorprendieron al escuchar una voz con el acento de Belén. Ellos preguntaron al levita cuál era su historia. Cuando ellos se enteraron que él era sacerdote, ellos inquirieron saber si Dios les daría éxito en su misión. La respuesta fue afirmativa, “Id en paz; delante de Jehová está vuestro camino en que andáis” (Jueces 18:6).

Por consiguiente, los cinco hombres siguieron adelante y llegaron a Lais como el hogar tribal. Las condicio-nes allí eran ideales: “Y vieron que el pueblo que habitaba en ella estaba seguro, ocioso y confiado” (18:7). Aun mejor, la gente de Lais estaban aislados, “Y estaban lejos de los sidonios, y no tenían negocios con nadie” (18:7). Los hombres dieron su reporte a la tribu y les urgieron acción inmediata. De acuerdo a sus ojos, Dios les había entregado aquellas tierras en sus manos (18:10)

La decisión fue tomada y 600 hombres armados de Dan fueron para tomar la tierra. Al proseguir su camino, estos cinco hombres revelaron el contenido de lo que había en casa de Micaía (efod, terafines y una imagen). Los hombres preguntaron cuál era la mejor acción ante sus ojos y luego fueron desviados hasta llegar a la casa de Micaía. Al llegar el levita se encontró con los seiscientos hombres ceñidos con sus armas y parados en la entrada de la puerta. Cuando los cinco hombres entraron al lugar privado de Micaía y tomaron la ima-gen, el efod y el terafin, el levita comenzó a objetar. Pero a él se le hizo una oferta la cual no rehusó. Por lo tanto, tomó posesión del efod, terafin y la imagen, y se fue para servir a una congregación más grande (18:16-20).

Cuando Micaía descubrió su pérdida, el llevó a algunos de sus vecinos para recobrar lo perdido. Finalmente alcanzaron a los danitas. El encuentro fue casi divertido (vea Jueces 18:22-26). Los danitas preguntaron ¿cuál es el problema? Micaías se quejó diciendo ¿problema? Ustedes se han llevado mis dioses, mi sacerdote y me he quedado sin nada, ¿y todavía me preguntan cuál es el problema?

Para esto, Micaía fue advertido que si se quejaba a alta voz, podía perder hasta su propia vida. Viéndose en la situación que se encontraba, él simplemente “dio la vuelta y regresó a su casa” (18:26). Cuando todos hacen lo que es correcto a sus propios ojos, luego el de más ojos a su lado usualmente gana.



El sacerdote estableció un lugar de adoración en Dan donde la imagen de Micaía encontró hogar. Esta historia de mezcla de adoración al Señor y poseer una imagen dio una sombra de evidencia que más luego Dan, junto con Betél, se convertiría en uno de los centros de adoración de Israel donde había una imagen, un becerro de oro (vea 1 Reyes 12:25-30). Hacer lo que parece correcto en sus propios ojos puede traer consecuencias duraderas por generaciones.

Violencia sobre violencia. (19:1—20:48)Recordando nuevamente que no había rey en Israel, el narrador nos guía a considerar la posibilidad del com-pleto caos moral cuando las personas hacen lo que les satisface en la vida. Todo comenzó inocentemente, un pleito amoroso donde la mujer regresa a la casa de su padre. Después de reflexionar, el marido, quien era le-vita, decidió reconciliar sus diferencias. Él decidió hablarle amorosamente (9:3) para que volviera a casa. Las cosas parecieron salir bien. El padre de la joven, salió a recibirlo con gozo, y celebraron por tres días. Quizá debido al verdadero gozo su suegro le detuvo un cuarto día y la mayor parte de un quinto día, o quizá el padre quiso asegurarse que su hija seria feliz. De cualquier manera, el levita finalmente regresó a casa con su mujer, aunque hubiera tenido que comenzar su jornada ya tarde en el día.

Cuando comenzó a caer la noche, ellos se encontraban cerca de Jebús (ciudad de Jerusalén, la cual todavía estaba en manos de los Jebuseos). El criado sugirió que pasaran la noche allí, pero el levita pensó que era peligroso confiar en gente extranjera, que no fueran hijos de Israel, por lo tanto continuaron su camino hasta que llegaron a Gabaa. “Pero no hubo quien los acogiese en casa para pasar la noche” (19:15). Finalmente, un hombre anciano llegó ya tarde del campo. Él al igual que el levita eran originarios del monte de Efraín. Él ofreció hospitalidad a la pareja, a su criado y sus animales.

Luego, una serie de eventos comenzaron a escalar dejando la situación fuera de control. Un grupo de hom-bres perversos rodearon la casa demandando al anciano que sacara a su huésped (19:22) porque lo querían conocer (tener relaciones sexuales con él). Tomando seriamente su responsabilidad como protector y huésped del levita, el hombre anciano imploró a aquel grupo de hombres perversos que no hicieran tal cosa. A cambio de ello, él ofreció a su propia hija y a la esposa de su huésped. Pero aquel grupo de hombres perversos no le escucharon. Luego el texto lee, “por lo que tomando aquel hombre a su concubina, la sacó; y entraron a ella, y abusaron de ella toda la noche hasta la mañana, y la dejaron cuando apuntaba el alba” (19:25). Es claro que, su concubina se refería a la esposa del levita. Lo que no es claro es ¿quien era ese hombre? ¿El hombre anciano, o era a caso el levita mismo?

De cualquier manera, la mujer sufrió de abuso abominable, violación y violencia hasta que murió, con sus manos extendidas en el umbral de la casa. El levita la encontró muerta (19:28), llevó su cuerpo a casa, la cortó en doce pedazos, y envió un pedazo a cada tribu como un llamado por justicia y venganza. La respues-ta fue vigorosa a medida que once tribus se juntaron en Mizpa. Después de escuchar las evidencias, ellos demandaron a la tribu de Benjamín que entregara a los culpables para ser puestos a muerte. Benjamín se rehusó y formó un ejército de 26,000 hombres para enfrentarse con un ejército de 400,000 guerreros de Israel en una guerra civil. En una serie de tres guerras Israel perdió más de 40,000 hombres (20:21, 25) y Benjamín perdió más de 25,000 hombres, más mujeres, niños y animales (20:46, 48).

Una extraña compasión. (Jueces 21)Cuando Israel se congregó en Mizpa, el pueblo juró no permitir a ninguna de sus hijas casarse con hom-bres benjamitas. Cuando la batalla cesó y la tribu de Benjamín fue drásticamente reducida, el resto de Israel sintió la amenaza de perder completamente a una de las tribus para siempre. Ellos sintieron compasión por Benjamín (21:6, 15). También, ellos de alguna manera sabían que Dios no estaba satisfecho con la situación (21:3).

Por lo tanto, ellos elaboraron su propio plan para corregir las cosas. Ellos recordaron que la ciudad de Jabes-galaad no les había ayudado en la guerra contra los benjamitas. Por lo tanto, decidieron que esta ciudad proveyera mujeres para los pocos benjamitas que quedaban. Ellos atacaron la ciudad con doce mil soldados y mataron a todos excepto a cuatrocientas doncellas las cuales encontraron ser idóneas para los benjamitas



(21:9-12).

Siendo que las mujeres no fueron suficientes para los benjamitas, un segundo plan se puso en marcha. Recordando el voto que hicieron de no dar a sus hijas como esposas, ellos inventaron una manera para movi-lizarse alrededor del voto. Ellos dispusieron que los hombres de Benjamín que aún no tenían esposas fueran a Silo “durante la fiesta solemne de Jehová” (21:19) y que arrebataran a una mujer joven para sí del festival mientras danzaban con ellas. Cuando las familias llegaran pidiendo justicia, los líderes de Israel intercederían. Estos hombres no serian acusados, tendrían mujeres, y porque las mujeres fueron arrebatadas, los padres no serian culpables por romper sus votos.

¡Todo funciono muy organizado! Al menos fue como ellos lo vieron. “En estos días no había rey en Israel; cada uno hacia lo que bien le parecia” (21:25).



josué y jueces - amazon simple storage service · el reino del norte había sido destruido en 722...

Documents