ROSA SERRA QUITO | Actualizada el 01/11/2011 12:00

El cura Joseba Segura hizo de mediador entre el gobierno y ETA en 2006. AHORA

En 2006, el cura bilbaíno Joseba Segura marchó a Ecuador, donde trabaja como asesor de Cáritas, con la creencia de que el alto el fuego de ETA, con la que había hecho de mediador, era el fin de la violencia. Sin embargo, el proceso terminó abruptamente con el atentado en el aeropuerto de Barajas del 30 de diciembre de 2006. Cinco años después reflexiona desde Ecuador sobre el último comunicado de ETA. ¿Qué ha impulsado este paso de ETA? Desde 2006, con la ruptura de la tregua, en poco tiempo los

que llegaban a la dirección eran detenidos. Asimismo, los que estaban en contra de cual-quier concesión unilateral y creían en la virtualidad de las armas para forzar a los gobier-nos de España y Francia también han sido detenidos. Por otro lado, este cese es el resulta-do de un largo proceso para convencer a ETA que con la lucha armada no podía conseguir ningún objetivo. La decisión tiene más que ver con los que ahora están en la dirección de ETA. ¿Desde donde se ha cocinado este cese? Han sido unas negociaciones puramente entre ETA y Batasuna. Aquí no ha habido prácti-camente intervención del gobierno, que se mostró escéptico y se ha mantenido al margen. Por otra parte, estoy convencido de que el obispo de San Sebastián ha sido bien informado, que ha asumido alguna responsabilidad y que ha puesto en contacto diferentes agentes. Pero no ha sido un papel oficial de la Iglesia, sino de una persona que a título particular -por los contactos y por el prestigio que tiene- ha seguido trabajando en ello. Esta vez la implicación de personas de la Iglesia ha sido bastante menor que en otras ocasiones. Tres días después de la Declaración de Aiete ETA anuncia el cese. ¿Estaba todo pauta-do? Absolutamente. El hecho de que estas grandes personalidades acudieran a la Conferencia es porque a ellos sí les había dado garantías. ¿Qué debe pasar para que ETA se disuelva? La madre de todas las batallas será la de los presos y la política penitenciaria. La entrega de las armas y el cierre final de la organización es un tema técnico que ETA puede utilizar como una contraprestación por los presos. El problema de la política penitenciaria es la sensibilidad de la Asociación de Víctimas, pero también de un fuerte movimiento de ex-trema derecha que se opone a cualquier concesión. ¿Como debe actuar la izquierda abertzale a partir de ahora? Está anunciando que habrá un documento que reconocerá el daño causado. Será importan-te ver lo que dice el documento y hasta dónde están dispuestos a llegar con este recono-cimiento. Es muy importante que este documento tenga contenido y que se haga con sin-ceridad y verdad.

Joseba Segura: "El papel de la Iglesia ha sido menor" Izquierda abertzale "Está anunciando que habrá un documento que reconocerá el daño causado" Proceso "Han sido unas nego-ciaciones puramente entre ETA y Batasuna. El gobierno se ha mostrado escéptico y se ha mantenido al margen"

Y el nuevo gobierno salido de las urnas el 20 de noviembre, ¿que tendrá que hacer? El nuevo gobierno tendrá muchas presiones para que no haga ninguna concesión a ETA. Es muy importante que se respeten los interlocutores y el actual liderazgo de la banda. Algu-nos sectores se opondrán a la impunidad de los terroristas, pero no quiere decir que se les perdone, sino que se les respete porque cualquier proceso que implique un cierre definiti-vo necesita interlocutores. Si resulta que hay interlocutores que han tomado la decisión del cese definitivo de la lucha armada y desaparecen, entonces qué pasará? ¿Y qué pasa con Otegi? También es importante que los líderes abertzales encarcelados salgan a la calle para nor-malizar la situación política. Mientras haya responsables de la izquierda abertzale cerrados habrá un voto de castigo a la política judicial del gobierno español, ya sea del PP o del PSOE. Esto hará que el 20-N la izquierda abertzale tenga un montón de votos.

P. Joseba Segura Etxezarraga