Los sectores en los que estamos son atractivos.

Estamos más cualificados y tenemos mejores medios que nunca.

Estamos en ámbitos cada vez más complejos y tenemos que

esforzarnos más que nunca.

La innovación debe mantenerse como uno de nuestros focos

estratégicos.

El proyecto familiar común es atractivo.

Nos hemos dotado de medios para gestionar la familia y el

patrimonio común.

La familia es cada vez más compleja y tenemos que esforzarnos

más que nunca.

Para adaptarnos a las nuevas necesidades hay que innovar,

también en la familia.

La necesidad y la solución están ligadas al cliente, sea quien sea.

Debemos ser curiosos, combinar experiencias diversas y abrirnos a todo aquello que nos inspire y enriquezca.

Copiar, adaptar y mejorar a veces es suficiente.

La capacidad para interpretar, adelantarse a la necesidad del cliente y asociar conceptos es una

combinación de inteligencia y sobretodo empatía.

Si no somos capaces de ejecutar la propuesta de valor a tiempoy llevarla a mercado con éxito, no vale nada.

Hay que liderar para contagiar la ilusión, atraer capacidades, generar el ecosistema y gestionar los cambios.

Debe haber un sentido de dirección para orientar los recursos a resultado y poder marcar prioridades.

Es actitud para que brote mas proceso de acompañamiento para que florezca adecuadamente y genere retorno.

La cultura organizativa debe dar oportunidades y aceptar el fallo.

Tenemos que medirnos respecto a benchmarks y mejorar.