imaginarios litorales cucao - 1998

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    1/15

    Universidad de Tarapacais collaborating with JSTOR to digitize, preserve and extend access to Chungara: Revista de

    Antropologa Chilena.

    http://www.jstor.org

    Universidad de arapaca

    PRCTICAS COTIDIANAS E IMAGINARIOS EN SOCIEDADES LITORALES. EL SECTOR DE CUCAO,ISLA GRANDE DE CHILO / DAILY PRACTICES AND IMAGINARIES IN LITORAL SOCIETIES. THESECTOR OF CUCAO, ISLA GRANDE OF CHILOAuthor(s): Francisco Ther RosSource: Chungara: Revista de Antropologa Chilena, Vol. 40, No. 1 (ENERO - JUNIO 2008), pp. 67-

    80Published by: Universidad de TarapacaStable URL: http://www.jstor.org/stable/27802501Accessed: 10-07-2015 02:29 UTC

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    http://www.jstor.org/http://www.jstor.org/action/showPublisher?publisherCode=utarapacahttp://www.jstor.org/stable/27802501http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/stable/27802501http://www.jstor.org/action/showPublisher?publisherCode=utarapacahttp://www.jstor.org/
  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    2/15

    Volumen

    40,

    N?

    1,

    2008.

    P?ginas

    67-80

    Chungara,

    Revista de

    Antropolog?a

    Chilena

    PR?CTICAS

    COTIDIANAS

    E

    IMAGINARIOS

    EN

    SOCIEDADES LITORALES.

    EL

    SECTOR

    DE

    CUCAO,

    ISLAGRANDE DE CHILO?1

    DAILY

    PRACTICES

    AND IMAGINARIES IN LITORAL

    SOCIETIES.

    THE

    SECTOR OF

    CUCAO,

    ISLA

    GRANDE

    OF

    CHILO?

    Francisco Ther

    R?os1

    El

    art?culo da

    cuenta

    acerca

    de las

    pr?cticas

    cotidianas

    en

    una

    sociedad litoral

    espec?fica.

    Se

    toma

    como

    estudio de

    caso

    el sector

    occidental de la Isla

    Grande

    de

    Chilo?

    (Chile),

    considerando

    para

    ello las

    interrelaciones

    entre

    cultura

    y

    ambiente.

    El

    objetivo

    central

    de la

    investigaci?n

    ha

    sido describir

    y

    categorizar

    las

    pr?cticas

    cotidianas de

    tipo

    econ?mico

    que

    ponen

    en

    juego

    los habitantes

    del

    sector

    de Cucao

    en

    Chilo?,

    junto

    a

    los

    usos

    sociales

    del

    tiempo

    asociados

    a

    dichas

    pr?cticas.

    Los

    habitantes de

    este sector

    se

    dedican

    en el

    presente

    a una

    producci?n primaria

    vinculada

    a

    la

    agricultura,

    pesca y

    marisqueo,

    y

    uso

    y

    manejo

    de

    productos

    del

    bosque.

    A

    partir

    de lo

    anterior,

    se

    enuncian modos de vida

    e

    imaginarios

    en una

    sociedad

    en

    transici?n

    a

    la

    modernidad.

    Palabras claves:

    sociedades

    litorales,

    imaginarios

    territoriales,

    pr?cticas

    cotidianas,

    cultura/ambiente,

    Isla de Chilo?.

    This

    case

    study

    addresses

    daily practices

    and

    social

    imaginary

    (set

    of

    values, institutions,

    laws

    and

    symbols

    common

    to

    a

    group)

    in the litoral

    society

    of

    the

    western sector

    of

    the

    Isla

    Grande

    of

    Chilo?

    (Chile).

    Special

    consideration

    is

    given

    to

    the interrelation

    of

    culture and

    environment.

    The

    central

    objective of

    this

    investigation

    is

    to

    describe and

    categorize

    daily

    practices,

    of

    an

    economic

    nature,

    taken

    on

    by

    the

    inhabitants

    of

    the

    sector

    of

    Cucao,

    in

    Chilo?,

    together

    with

    the

    social

    uses

    of

    time

    associated

    with these

    practices.

    The

    inhabitants

    of

    this

    sector

    are

    active in

    primary

    production

    linked

    to

    agriculture,

    fishing,

    and

    crustacean

    extraction,

    and

    the

    use

    and

    management

    of

    the

    forest. Starting

    from

    this,

    the

    modes

    of

    life

    and

    imaginarles

    in

    a

    society

    in

    transition toward

    modernity

    are

    enunciated.

    Key

    words:

    Litoral

    societies,

    social

    imaginary

    territories,

    daily

    practices,

    culture

    versus

    environment,

    Island

    of

    Chilo?.

    El

    archipi?lago

    de Chilo?

    se

    ubica

    entre

    los

    41?45'

    y

    los

    43?39'

    Latitud

    Sur

    y

    los 72?30'

    y

    75?26'

    Longitud

    Oeste,

    a

    tan

    s?lo

    90

    km al

    sur

    de

    la

    ciudad de PuertoMontt

    y

    a

    1.186

    km de la ciudad

    de

    Santiago

    (capital

    de

    Chile)2.

    El

    archipi?lago

    est?

    conformado

    por

    la

    Isla Grande de Chilo?

    (8.394

    km2)

    y

    medio

    centenar

    de

    islas,

    la

    mayor?a

    de

    ellas

    habitadas

    por

    peque?os

    caser?os.

    En

    el lado

    norte,

    la Isla Grande

    se

    separa

    del

    continente

    por

    el canal

    de

    Chacao;

    al

    este

    le

    separan

    los

    golfos

    de Ancud

    y

    Corcovado.

    El

    Censo de

    2002

    cuantifica

    para

    Chilo?

    una

    poblaci?n

    de 154.766

    personas,

    distribuidas

    en

    10

    comunas3.

    La

    gran

    mayor?a

    de la

    poblaci?n

    chilota habita

    preferentemente

    la

    costa

    oriental

    dedic?ndose

    a

    actividades de

    explotaci?n

    de

    recursos

    naturales

    (forestales y marinos).

    Por

    su

    parte,

    la

    regi?n

    occidental de la

    Isla,

    donde

    se

    asienta

    el

    sector

    de

    Cucao,

    "tiene

    el

    privilegio

    de

    conservar a?n todo el esplendor de su naturaleza

    virgen,

    con

    una

    vegetaci?n

    y

    fauna

    abundante"

    (Weisner 2003:75).

    Se

    presume

    que

    los

    chilotes

    son

    descendientes

    de

    una

    mezcla de

    pueblos,

    Chonos,

    Cuneos

    y

    Huilliche,

    a

    los cuales

    se

    ha

    sumado el

    pueblo

    espa?ol.

    En

    la actualidad existen

    17 comunidades

    huilliche

    en

    la Isla de

    Chilo?,

    con

    una

    poblaci?n

    que

    supera

    las cinco mil

    personas.

    A

    su

    vez,

    las comunidades

    ind?genas

    se

    agrupan

    en

    dos

    grandes

    organizacio

    nes:

    el

    Consejo

    de

    Caciques

    de la Isla Grande de

    Chilo?

    (Butahuapi

    Chilhu?)

    y

    la Federaci?n de

    Comunidades

    Ind?genas

    de Chilo?.

    Actualmente

    existen dos

    comunidades

    ind?genas

    en

    el

    sector

    de Cucao

    (Comuna

    de

    Chonchi),

    una

    en

    Chanqu?n,

    compuesta

    por

    57

    familias,

    y

    la

    otra

    en

    Huentem?,

    conformada

    por

    38

    familias,

    existiendo

    entre

    ambas comunidades

    lazos

    consangu?neos.

    Las

    comunidades

    se

    encuentran

    dirigidas

    por

    un

    lonko

    o

    cacique.

    Ambos

    caciques

    somos

    "como

    una yunta, tirando la carreta para el mismo lado",

    Centro

    de Estudios del Desarrollo Local

    y

    Regional,

    Universidad

    de Los

    Lagos.

    Direcci?n

    Postal: Calle

    Lord

    Cochrane

    1225,

    Osorno,

    Chile.

    Fono/fax: 56

    -

    64

    -

    333583.

    [email protected]

    Recibido:

    abril

    2007.

    Aceptado:

    diciembre

    2007.

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    3/15

    68 Francisco

    Ther

    R?os

    se?ala don Roberto

    Panichini,

    Lonko de

    Chanqu?n.

    La

    comunidad

    de Huentem? tiene

    como

    lonko

    a

    don

    Jorge

    Guenum?n4.

    El sectordeCucao, comomuchos otros incones

    del

    archipi?lago

    de

    Chilo?,

    se

    ha mantenido

    bajo

    un

    hist?rico

    aislamiento,

    siendo

    incorporado

    al

    resto

    de

    la

    Isla s?lo

    en

    los ?ltimos decenios.

    Existe

    una

    segunda

    particularidad

    para

    Cucao

    que

    lo convierte

    n

    un

    sector

    de inter?s. asta

    la d?cada de

    1960

    Cucao

    fue

    el ?nico

    lugar

    habitado de

    la

    costa

    occidental

    de

    la Isla.

    Las condiciones

    geogr?ficas

    y

    clim?ticas

    severas,

    como

    fuertes

    mareas

    que

    imposibilitan

    el

    f?cil

    acceso

    de embarcaciones

    de

    todo

    tipo,

    junto

    al dif?cil

    acceso

    por tierray lago, han otorgado al

    emplazamiento

    de

    Cucao

    la

    condici?n

    de

    sector

    apartado.

    Su accesibilidad

    queda

    pr?cticamente

    reducida

    a

    un

    camino de

    35

    km,

    construido

    en

    1981,

    que

    une

    Huillinco

    con

    Cucao5.

    Antes de la

    construcci?n

    del camino

    se

    llegaba

    al

    sector

    o

    por

    aire

    en

    peque?as

    avionetas

    o

    navegando

    por

    el

    lago

    Huillinco.

    En

    1982

    se

    abri?

    en

    Cucao el

    Parque

    Nacional Chilo?

    (43.057

    hect?reas de

    superficie),

    lo

    cual

    ha

    implicado

    un

    incentivo

    para

    el

    turismo

    de

    la

    zona,

    y

    una

    cierta

    apertura

    desde

    que

    se

    cons

    truy?un puente de concreto sobre el R?o Cucao o

    Desaguadero6.

    De

    manera

    que

    este sector

    es un

    ?rea

    geogr?fica

    de

    especiales

    caracter?sticas

    ue

    permite

    conocer en

    vivo los

    juegos

    y

    tensiones existentes

    entre

    tradi

    ci?n

    y

    modernidad. La rica

    biodiversidad

    y

    paisaje

    imbricados

    con

    la

    actividad humana

    ind?gena

    y

    no

    ind?gena,

    unto

    al

    a?n relativo

    aislamiento,

    otorgan

    al

    sector

    relevancia

    antropol?gica.

    En

    este sector

    de

    la Isla Grande de Chilo? los

    pobladores

    han

    venido realizado hist?ricamente

    sus

    actividades

    en

    distintosmicroambientes:

    mar,

    r?o,

    costa

    y

    monte

    (bosque).

    El

    amplio

    y

    diverso

    medio ambiente

    se

    ha llenado de v?nculos

    aprendidos

    y

    creados

    con

    la

    experiencia

    que

    otorgan

    los a?os de

    vida

    en

    un

    lugar

    poco

    a

    poco

    domesticado

    con

    saberes

    y

    conocimientos locales

    e

    ind?genas.

    Este

    proceso

    de domesticaci?n viva

    ha

    influido sobre el

    espacio

    biofisico

    para

    hacer

    emerger

    un

    ethos

    cultural

    con

    marcado

    sesgo

    territorial.

    Verdaderamente,

    en

    este

    lugar

    se

    ha

    ido

    creando

    un

    habitar,

    en

    el sentido

    que

    lo se?ala Leff (2002), lleno de v?nculos: raciona

    lidades,

    ambientes

    y

    tecnolog?as

    se

    entretejen

    con

    las

    memorias

    que

    guardan

    los

    tiempos

    pasados

    y

    los

    imaginarios

    que

    revelan

    el

    presente

    y

    cimientan

    las

    aspiraciones

    del futuro.

    Territorios Vividos:

    Cultura

    y

    Ambiente

    en

    Chilo?

    En su af?n civilizador el serhumano pro

    yecta

    sus

    visiones

    de

    mundo,

    pero

    el

    medio

    -a su

    vez-

    las

    determina dial?cticamente.

    Domesticar,

    dice

    EL

    PRINCMTO,

    consiste

    en

    crear

    v?nculos

    (C?rdenas

    1996:X).

    A

    trav?s el

    tiempo,

    os chilotes han ido

    creando

    diferentes

    modos

    de

    vida

    que

    vinculan, re?nen,

    en

    un

    todo

    complejo

    al

    ambiente

    con

    la cultura.

    Para

    ellos resulta cotidiano transitar

    ntre

    distintosmi

    croambientes de la Isla. Su ecolog?a

    es

    amplia y

    diversa.Dedicado

    en

    el

    sector

    rural

    una

    producci?n

    primaria,

    en

    ?ntima elaci?n

    con

    elmedio

    ambiente,

    el habitante de Chilo? realiza

    actividades

    agr?colas,

    forestales

    y pesqueras.

    Los

    productos

    extra?dos

    del

    mar se

    presentan

    como

    complementarios

    de la

    producci?n

    agr?cola,

    ganadera

    y

    forestal

    (Marino

    1985:49).

    Esta domesticaci?n

    est?

    llena

    de v?nculos

    aprendidos

    y

    creados

    con

    y

    desde la

    experiencia,

    de

    manera

    que

    las distintas relaciones

    que

    mantienen

    los

    chilotes

    con

    el

    ambiente redundan

    en

    pr?cti

    cas que conforman modos de vida tradicionales

    entremezclados

    con

    modos de vida

    en

    transici?n

    a

    la modernidad. La

    cotidianeidad

    del

    territorio

    deviene

    en

    territorios

    ividos,

    m?ltiples

    y

    locales,

    muy

    locales.

    Cada

    uno

    con

    su

    propio tiempo.

    Son

    justamente

    los sistemas

    locales,

    situados

    y

    almismo

    tiempo

    mucho m?s

    amplios

    que

    el

    espacio

    f?sico,

    los

    que

    son

    vividos

    por

    sus

    habitantes

    que

    lo han

    construido. La

    imagen

    de

    los

    territoriosvividos

    deviene

    entonces

    en

    tramas

    de

    comportamientos

    que

    producen intensidad acumulada

    en

    profundidades

    que

    a su

    vez

    remiten

    a

    memorias,

    tradiciones,

    usos

    y

    costumbres.

    Al

    mismo

    tiempo,

    los territorios

    vividos

    se

    extienden sobre el

    espacio

    abarcando

    ?reas

    comunes

    a

    m?s de

    un

    modo de

    vida,

    de

    tal

    suerte

    que

    ?stos

    se

    encuentran/desencuentran

    con

    imaginarios

    territoriales

    de costumbres variadas.

    Aquello queda

    expresado

    en

    la Isla de

    Chilo?.

    Espec?ficamente

    en

    el

    sector

    de

    Cucao,

    los habi

    tantes

    de

    este

    territorio

    on

    profundos

    conocedores

    de las bondades de la

    tierra

    y

    el

    mar,

    organizan

    sus

    quehaceres

    en funci?n a un verdadero

    reloj

    de la

    tierra,

    l

    mar

    y

    el

    clima.

    Se

    entraman

    ah? distintos

    tiempos,

    los

    tiempos

    de

    las

    memorias,

    tradiciones

    y

    pr?cticas

    que

    van

    potenciando

    distintos v?nculos

    con

    lo

    ambiental.

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    4/15

    Pr?cticas cotidianas

    e

    imaginarios

    en

    sociedades

    litorales... 69

    En

    consecuencia,

    las

    pr?cticas

    humanas

    depo

    sitadas

    en/sobre

    los territorios er?n

    entendidas

    en

    este sector

    como

    procesos

    culturales de

    relaci?n,

    imbricaci?n

    y

    recreaci?n de lo

    tradicional

    con

    lo

    moderno.

    En estos

    procesos,

    los

    espacios

    y

    los

    tiempos

    son

    atra?dos

    por

    la

    acci?n

    humana;

    almismo

    tiempo

    las

    actividades

    humanas

    se

    explicitan

    en

    la

    dimensi?n

    temporal:

    el hombre

    es

    un

    atractor

    que

    contiene

    experiencias,

    vivencias,

    convivencias,

    deseos. La

    cultura

    -que

    en

    tanto

    concepto

    hace

    alusi?n

    a

    la

    diversidad-

    es

    construida

    y

    transformada

    permanentemente

    a

    partir

    del sentido

    del

    tiempo,

    de

    las

    pr?cticas

    que

    vinculan lo cultural

    a

    lo

    ambiental,

    de las domesticaciones, del quehacer cotidiano, un

    tanto

    utinario

    -repetitivo-

    como

    tambi?n

    otro tanto

    innovador

    -trasgresor-7.

    Anal?ticamente,

    por

    tanto,

    la

    dimensi?n

    temporal

    en

    el

    estudio de

    las relaciones

    entre

    ultura

    y

    ambiente

    no

    s?lo

    es

    fundamental,

    ino

    que

    es

    justamente

    a

    trav?s de la

    fuerza

    de

    ella

    que

    emerger?

    el

    sentido de

    cada territorio.

    Prescindir

    del

    tiempo,

    por

    tanto,

    quivale

    a

    privarse,

    sin

    raz?n

    fundada,

    de

    la

    posibilidad

    de

    comprender

    la

    vida

    cotidiana,

    de

    rendir

    cuentas

    de

    su

    efectivo desa

    rrollo"

    (Pieretti 1997:200).

    La

    investigaci?n

    sobre

    el

    territorio

    significa

    en

    este

    punto

    ir

    hacia

    aquello

    que

    pasa

    en

    lo

    local,

    que

    le

    pasa

    a

    los habitantes

    de

    un

    territorio

    eterminado,

    y

    que

    al

    pasar,

    crea,

    proyecta,

    imagina,

    haciendo vivir

    -experimentar-

    los

    acontecimientos.

    La caracterizaci?n

    y

    an?lisis de la

    relaci?n

    entre

    cultura

    y

    ambiente deviene

    entonces

    en

    territorio ivido

    desde la

    temporalidad.

    Como

    tal,

    la elucidaci?n

    de las relaciones

    cotidianas

    que

    vinculan la

    cultura

    con

    lo

    ambiental

    en

    Cucao im

    plica

    relacionar

    e

    interpretar

    istintos

    imaginarios

    y

    pr?cticas vivenciales (Lefebvre 1978)8.Del mismo

    modo,

    esto

    implica

    considerar

    la

    apropiaci?n,

    uso

    y

    (re)

    significaci?n

    de lo

    ambiental

    tanto

    a

    nivel

    ma

    terial

    como

    simb?lico,

    as?

    como

    la

    transformaci?n

    de

    dichos

    lugares

    a

    consecuencia

    de las

    marcas

    que

    imponen

    los

    habitantes

    en

    sus

    territorios9.

    El

    Sector

    de

    Cucao:

    V?nculos,

    Domesticaciones

    e

    Imaginarios

    en

    una

    Sociedad

    Litoral

    Varias

    complejidades

    existen

    en

    el

    sector

    de

    Cucao. Una

    de

    estas

    dice relaci?n

    con

    la

    tensi?n

    tradici?n/modernidad

    sus

    variados

    v?nculos

    con

    lo

    ambiental.

    Efectivamente,

    en

    este sector

    de la Isla

    de Chilo? lo

    que

    se

    puede

    entender

    como

    "viejo"

    se

    compenetra

    con

    lo

    nuevo,

    y

    viceversa.

    Se evidencia

    una

    preterizaci?n

    de formas

    mo

    dernas,

    al

    tiempo

    que

    una

    futurizaci?n

    de formas

    tradicionales de relaci?n

    con

    el

    mar

    y

    bordemar.

    De

    esta

    manera,

    reconstruir

    las

    pr?cticas,

    memo

    rias

    e

    imaginarios

    chilotes

    implica

    un

    proceso

    etnogr?fico-anal?tico

    destinado

    a

    develar varios

    de

    los

    v?nculos

    que

    acontecen

    en

    lo cotidiano

    y

    que

    significativamente

    van

    permitiendo

    que,

    en

    y

    por

    el

    cotidiano,

    se

    incorporen,

    de

    manera

    no

    lineal,

    al

    interior/pasado

    hilote,

    todo

    su

    exterior/futuro

    todo

    su

    devenir).

    Los v?nculos

    en

    este

    caso

    se

    refieren

    a

    las

    m?ltiples

    relaciones construidas

    y

    reconstruidas

    entre

    lo

    cultural

    y

    lo

    ambiental.

    V?nculos

    que

    se

    manifiestan en pr?cticas cotidianas que guardan

    memorias

    y

    tradiciones,

    y que

    configuran

    distintos

    imaginarios.

    V?nculos

    y

    domesticaciones

    Entre 1833

    y

    1835

    el

    ingl?s

    Charles Darwin

    realiz?

    una

    estad?a

    por

    casi dos

    a?os

    en

    Chile,

    todo

    como

    parte

    del

    trabajo

    como

    naturalista del

    Beagle.

    Desde

    la

    tercera

    semana

    de noviembre

    de

    1834 hasta

    comienzos de febrero

    de

    1835,

    Darwin

    permaneci?

    en

    la Isla Grande

    de Chilo?

    visitando

    distintos

    lugares,

    quedando

    impresionado

    con

    la

    belleza natural

    que

    encontr?

    en

    el

    mar

    y

    la tierra.

    Sus

    notas

    se

    consideran

    de

    gran

    valor

    cient?fico

    e

    hist?rico

    para

    la

    bot?nica,

    la

    zoolog?a,

    la

    geograf?a

    y

    la

    antropolog?a

    actual.

    El 23 de

    enero

    de 1835

    Charles

    Darwin realiza

    una

    excursi?n

    a

    caballo

    y

    bote desde

    Castro

    a

    Cucao10.

    Durante

    el

    trayecto

    el

    naturalista

    va

    quedando

    maravillado

    con

    las

    bellezas

    naturales

    y

    las

    distintas

    adaptaciones

    al ambiente (domesticaciones, como dec?a EL

    PRINCIPITI

    en

    el relato

    de Renato C?rdenas

    m?s

    arriba

    expuesto).

    En

    Chonchi

    volvemos la

    espalda

    a

    la

    costa

    para

    hundirnos

    en

    las

    tierras;

    seguimos

    senderos

    apenas

    trazados,

    atravesando

    pronto

    magn?ficas

    selvas,

    como

    lindos

    lugares

    cultivados donde

    abundan

    el

    trigo

    y

    las

    patatas

    (papas).

    Este

    pa?s

    boscoso,

    accidentado,

    me

    recuerda

    los

    lugares

    menos

    cultivados

    de

    Inglaterra,

    lo

    cual

    no

    deja

    de

    causarme

    una

    cierta

    emoci?n.

    En

    Villinco

    (Huillinco)11,

    situada

    a

    orillas del

    lago

    Cucao,

    no

    hay

    sino

    algunos

    campos

    de

    cultivo;

    esa

    aldea

    parece

    habitada

    ex

    clusivamente

    por

    indios.

    El

    lago

    tiene

    12

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    5/15

    70

    Francisco

    Ther

    R?os

    millas de

    longitud

    y

    se

    extiende

    de este

    a

    oeste.

    A

    causa

    de

    circunstancias

    locales,

    la

    brisa del

    mar

    sopla

    muy

    regularmente

    durante la jornada y la calma

    completa

    reina durante la noche

    (...)

    El

    camino

    que

    conduce

    a

    Cucao

    es

    tan

    malo

    que

    nos

    deci

    dimos

    a

    embarcarnos

    en una

    piragua

    (...)

    Partimos

    con

    una

    ligera

    brisa

    de

    proa,

    lo

    cual

    nos

    impide

    llegar

    antes

    de

    que

    se

    haga

    de noche

    a

    la

    Capilla

    de Cucao.

    A

    ambos

    lados del

    lago

    la

    selva

    reina

    sin

    interrupci?n

    alguna

    (...)

    El

    distritode Cucao

    es

    el

    ?nico

    punto

    habitado

    de

    toda la

    costa

    occidental

    de

    Chilo?. Contiene

    unas

    treinta

    cuarenta

    familias

    indias,

    esparcidas

    sobre

    cuatro

    o

    cinco

    millas de

    la

    costa.

    Esas familias

    se

    encuentran

    totalmente

    separadas

    del

    resto

    de la

    isla,

    y por

    eso

    efect?an

    poqu?simo

    comercio;

    venden,

    no

    obstante,

    algo

    de

    aceite de

    foca

    (...)

    Al d?a

    siguiente,

    des

    pu?s

    de

    almorzar,

    fuimos

    a

    visitar Punta

    Huantamo

    (Huentem?),

    situada

    algunas

    millas m?s al

    norte.

    El

    camino bordea

    una

    playa

    muy

    ancha,

    en

    la

    cual,

    a

    pesar

    de una larga serie de d?as buenos, almar

    rompe

    con

    furia.Me dicen

    que,

    durante

    una

    gran

    tempestad,

    los

    mugidos

    del

    mar

    se

    oyen

    durante

    la noche

    en

    Castro,

    a

    21

    millas marinas de

    distancia,

    a

    trav?s de

    un

    territorio onta?oso

    y

    lleno

    de

    bosques.

    Tan

    malos

    son

    los

    caminos,

    que

    experimentamos

    no

    pocas

    dificultades

    para

    llegar

    al

    lugar

    que

    quer?amos

    visitar:

    en

    efecto,

    as?

    que

    el

    sendero

    se

    encuentra

    sombreado

    por

    los ?rboles,

    se

    transforma

    n

    un

    verdadero

    pantano.

    Punta Huantamo

    es

    una

    escarpada

    colina

    rocosa,

    recubiertade

    una

    planta

    af?n,

    a

    mi

    parecer,

    a

    la

    bromelia,

    y

    a

    la

    que

    los

    habitantes

    denominan

    chepone

    (chupones)12

    (...)

    Al

    norte

    de

    Punta Huantamo la

    costa

    se

    hace

    m?s

    y

    m?s

    abrupta;

    y

    est? bordeada

    por

    una

    grand?sima

    cantidad

    de arrecifes

    sobre

    los

    cuales el

    mar

    ruge

    de continuo.

    Si fuera

    posible,

    desear?amos

    regresar

    a

    pie

    a

    San Carlos

    siguiendo

    esa

    costa;

    pero losmismos indios nos aseguran que

    el camino

    es

    impracticable. Agregan

    que

    algunas

    veces se

    puede

    ir

    directamente

    de

    Cucao

    a

    San Carlos

    (Ancud)

    a

    trav?s

    de los

    bosques,

    pero

    jam?s

    por

    la

    costa

    (Darwin

    2001:42-46).

    Los cambios ocurridos

    en

    la

    Isla

    en

    m?s de

    un

    siglo

    y

    medio

    no

    han alterado de

    manera

    radical la

    regi?n

    occidental donde

    se

    ubica

    el

    sector

    de

    Cucao.

    A?n existeunpaisaje boscoso yun fuerte iremarino

    matizado

    con

    la

    suave

    brisa del

    lago13:

    el relieve

    es

    monta?oso

    y

    se

    desarrolla desde

    el nivel

    del

    mar

    hasta los

    850

    m

    de

    altura

    (Cordillera

    Piuchu?);

    el

    bosque

    siempreverde

    domina el

    sector

    con

    nobles

    alerces,

    arrayanes,

    avellanos, canelos,

    cipreses,

    coig?es,

    lumas,ma??os,

    notros

    o

    ciruellillos,

    tep?,

    tepuales

    y

    ulmos,

    todos cubiertos

    por

    hel?chos,

    liq?enes

    y musgos;

    una

    serie de r?os desemboca

    en

    el Oc?ano Pac?fico

    (r?os

    Abtao,

    Refugio,

    Lar,

    ?ango, Cole-Cole, Cipresal y Puchanqu?n). En la

    costa

    existen

    vastas

    playas

    azotadas

    por

    grandes

    rompientes, interrumpidas

    s?lo

    por

    el

    cauce

    de

    un

    r?o

    o

    por

    peque?as

    ensenadas

    de

    roquer?os

    (Weisner

    1971);

    el

    mar

    golpea

    fuerte

    en

    la

    costa,

    crea

    dunas

    y

    permite

    algunos desgarros

    como

    el

    marisqueo

    (machas

    y

    lapas, principalmente)

    y

    cochayuyo,

    la

    miner?a

    (mantos

    con

    pepitas

    de

    oro

    en

    Rahue) y

    la

    pesca

    desde la orilla

    (corvina).

    El

    sector

    de

    Cucao

    constituye

    un

    h?bitat

    disper

    so,

    donde

    se

    observan

    tres

    n?cleos habitacionales:

    el poblado ubicado en la parte norte de la bah?a de

    Cucao,

    llamado

    De?al;

    en

    el

    centro,

    entre

    los r?os

    Huelde

    y

    Cucao,

    se

    ubica el caser?o de

    Chanqu?n;

    y

    a

    lo

    largo

    del r?o Cucao

    se

    encuentran

    las viviendas

    de

    Capilla

    Cucao

    (Weisner

    197L128)14.

    Pr?cticas Cotidianas

    de los Habitantes

    Vinculados

    al

    Modo

    de

    Vida m?s

    Tradicional

    Como

    ya

    se

    ha

    mencionado,

    m?ltiples

    son

    las

    actividades que han desarrollado y desarrollan los

    vecinos del

    sector

    de Cucao.

    El

    mar,

    la

    playa

    y

    los

    campos

    circundantes

    eterminan

    un

    tipo

    de econom?a

    mixta:

    se

    trata

    de

    peque?os

    campesinos

    agriculto

    res,

    pero

    tambi?n

    recolectores,

    y

    en

    menor

    medida

    artesanos,

    quienes

    trabajan

    para

    el

    abastecimiento

    de

    su

    unidad dom?stica

    y

    comercializaci?n. Para

    los vecinos del

    sector,

    la

    vida

    es

    dura,

    y

    "se necesita

    resistencia

    para

    vivir

    por

    estos

    lados"15.

    El

    ciclo laboral anual est? relacionado direc

    tamente

    con

    el clima

    y

    las fases

    productivas

    o

    no

    productivas

    de la tierray elmar. Existe una

    especie

    de

    reloj

    de

    la

    tierra,

    n

    calendario laboral del

    mar,

    que

    regula

    las

    pr?cticas

    en

    esta

    sociedad litoral.

    n

    las fases

    no

    productivas

    de la tierra

    e

    realizan acti

    vidades

    de

    deforestaci?n,

    roce,

    quema

    y

    destronque.

    El

    chilote tambi?n

    se

    dedica

    a

    la

    pesca,

    marisqueo

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    6/15

    Pr?cticas cotidianas

    e

    imaginarios

    en

    sociedades litorales...

    71

    y

    recolecci?n de

    algas,

    as?

    como

    a

    la

    cosecha

    de

    algunos productos.

    Es

    durante el

    verano

    cuando

    se

    intensifican las

    labores

    para

    el

    campesino;

    se

    cosechan

    frutas,

    ortalizas

    y

    papas,

    tambi?n

    se

    secan

    al

    sol

    y

    humo

    algunos productos

    del

    mar

    (como

    cochayuyo, congrio,

    machas),

    almacen?ndose

    para

    el

    resto

    del

    a?o

    cuando

    baja

    la

    temperatura

    y

    la

    lluvia

    impone

    un

    ritmode

    trabajo

    distinto. En

    estas

    ?pocas

    algunos

    campesinos

    chilotes

    se

    dedican

    a

    realizar labores

    bajo

    techo,

    como

    la

    construcci?n

    de

    artesan?a

    (cucharas

    de

    madera, tenedores,

    tinajas,

    maceteros,

    ba?les)

    e

    instrumentos usicales

    (rabel)

    con

    madera

    nativa,

    pero

    el

    contacto

    con

    la tierra

    y

    elmar permanece durante todo el a?o a pesar de

    la lluvia

    y

    el fr?o.

    En

    invierno,

    como

    las actividades

    agr?colas

    demandan

    menos

    atenci?n,

    el

    peque?o

    campesino

    tambi?n

    e

    dedica

    a

    las labores

    mineras,

    aprovechando

    al

    mismo

    tiempo

    la

    mayor

    riqueza

    que

    se

    presenta

    en

    los

    mantos

    a

    orillas

    del

    mar.

    La

    extracci?n

    de

    oro se

    realiza sin medios

    mecanizados,

    se

    trata

    m?s

    bien de

    una

    actividad

    complementaria

    y

    desarrollada

    en

    peque?a

    escala16.

    En el

    mar, y

    de

    manera

    permanente

    durante

    todo

    el

    a?o,

    los chilotes tradicionales de Cucao

    encuentran

    una

    fuente

    de alimentos

    posibles

    tambi?n

    de

    comercializar.

    En

    ocasiones dedican

    varias

    temporadas

    a

    pescar (en

    el

    lago

    o

    en

    el

    mar)

    y

    a

    mariscar,

    luego

    regresan

    al

    campo,

    en

    otras

    ocasiones

    combinan,

    seg?n

    el ritmo de

    trabajo,

    ambas actividades.

    Despu?s

    que

    me

    cas?

    (aprox.

    en

    1974),

    me

    dediqu?

    a

    la

    pesca.

    Pesc?bamos

    robalo,

    corvina,

    pejerreyes,

    esas eran las

    especies

    que

    vend?amos

    (...),

    se

    pescaba

    en

    bote,

    o

    desde

    la

    orilla,

    nosotros

    pesc?bamos

    en

    ese

    tiempo

    s?lo

    en

    bote

    (...).

    Lancear17,

    le dec?amos cuando

    coloc?bamos

    cuatro

    redes

    (...),

    se

    pescaba

    de

    noche,

    primero

    tir?bamos las

    redes,

    despu?s

    d?bamos

    vara

    (continuos

    golpes

    con

    los

    remos

    en

    el

    agua),

    y

    levant?bamos. Se sacaba al minuto las

    redes,

    sac?bamos

    como

    doscientos kilos

    en una

    noche,

    en ese

    tiempo

    nos

    pagaban

    a

    $

    15 el kilo.

    Estuve

    trabajando

    ocho

    a?os

    en

    esto,

    d?a

    y

    noche.

    Las actividades de

    pesca

    implican

    esfuerzo

    y

    dedicaci?n. Sin

    un

    plan

    adecuado

    -y

    validado-

    no

    es

    posible

    concretar

    su

    comercializaci?n. Una

    vez

    que

    se

    han obtenidos

    los

    pescados,

    se

    requiere

    la

    concreci?n de

    pasos

    secuenciales

    para

    venderlos.

    ..

    .al

    otro

    d?a

    sal?amos

    temprano

    a

    vender

    a

    Castro

    a un

    proveedor

    de la

    feria,

    siempre

    al

    mismo. Tito Barr?a

    se

    llamaba

    el hombre

    (...),

    la feria estaba

    en

    calle

    O'Higgins,

    ahora

    se

    cambi?

    a

    la calle

    Yumbel. A

    veces

    pas?bamos

    a

    vender

    a

    Chonchi

    al

    detalle

    (...).

    Para

    ir vender

    sal?amos

    por

    Huillinco,

    ah? estaba

    luego

    una

    camioneta

    esper?ndonos

    (...);

    pesc?bamos

    en

    aguas

    dulces,

    o

    sea

    entre

    dulce

    y

    salada,

    porque

    aqu?

    entra el mar cuando sube la marea.

    And?bamos

    siempre

    por

    el

    lago

    Cucao,

    y

    desde

    aqu?

    ?bamos

    a

    Huillinco,

    v?a

    el

    lago

    Huillinco.

    (...)

    Pesc?bamos

    con

    el

    patr?n,

    o

    con

    otra

    persona

    si

    ?l sal?a

    a

    vender,

    por

    lo

    general

    pesc?bamos

    entre

    las

    ocho

    de la

    tarde

    y

    las

    dos de la

    ma?ana.

    (...)

    El

    bote

    ten?a

    como

    siete

    metros

    de

    eslora,

    con

    un

    peque?o

    motor18.

    Otra

    actividad

    importante

    es

    el

    marisqueo

    o

    mariscada.

    En la mariscada

    se

    "sacan"

    (como

    dicen

    los

    chilotes)

    principalmente

    machas;

    "antes

    se

    trabajaba

    as?

    nom?s,

    a

    cuero

    pelao,

    a

    pata,

    en

    ese

    tiempo

    sal?an

    mariscos

    grandes",

    recuerda

    don Aladino

    Nairn. Hace

    unos

    veinticinco

    a?os,

    se

    recuerda

    que

    las machas

    med?an

    entre

    siete

    y

    ocho

    cent?metros,

    "ahora

    no

    alcanza

    a

    cinco

    cent?metros".

    En

    una

    ?poca

    (hace

    poco

    m?s de

    doce

    a?os

    atr?s) no hubo marisco. Antes lamacha no

    era

    comercial,

    pero

    lleg?

    una

    empresa

    del

    norte

    como

    con

    doscientas

    personas y

    se

    perdi?

    la

    macha;

    en ese

    momento

    llegaban

    a

    pagar

    cien

    pesos

    por

    kilo,

    casi

    la

    mayor?a

    de

    la

    gente

    de

    aqu?

    trabaj?

    para

    esa

    empresa.

    Antes

    se

    vend?a

    distinto,

    o se

    vend?a

    fresco

    como

    ahora. Antes

    se

    hac?a

    el

    curanto,

    se

    secaba

    en

    un

    secador de

    junquillo19,

    y

    despu?s

    se

    sal?a

    a

    vender

    seco

    por

    almud

    a

    Chonchi

    y

    Castro

    (...)

    El

    almud

    se

    vend?a

    en ese

    entonces

    a

    quinientos

    pesos,

    hac?a

    como

    cuatro kilos

    secos20.

    Al

    d?a,

    trabajando

    ntre

    mareas

    dos

    adultos,

    entre

    una

    hora

    y

    una

    hora

    y

    media,

    se

    pod?an

    cosechar

    hasta

    dos bolsas

    demachas

    de cien

    kilos

    cada

    una.

    La

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    7/15

    72

    Francisco

    Ther

    R?os

    mayor?a

    de los

    lugare?os

    mariscaban

    pr?cticamente

    durante

    todo

    el

    a?o,

    pudi?ndose

    apreciar

    a

    diario

    cerca

    de

    doscientas

    personas

    mariscando

    en

    la

    costa.

    No llevaba

    tanto

    trabajo,

    era

    m?s

    conve

    niente.

    Antes ten?a

    que

    traer

    el marisco

    a

    caballo

    desde

    la

    playa

    a

    la

    casa,

    deb?a

    buscar

    le?a

    y

    hacer el

    hoyo

    con

    le?a

    y

    piedra

    (...).

    Ahora

    volvi?

    otro

    caballero,

    vienen

    de

    Ancud,

    los

    primeros

    eran

    de

    Pichilemu,

    ellos

    trajeron

    gente

    de

    all?

    y

    vend?an todo

    en

    Santiago.

    El

    buen

    trabajo

    dur?

    como

    dos

    a?os. Le

    pagaban

    a

    uno en

    el

    mismo

    momento,

    o

    si

    uno

    quer?a

    se

    iba

    acumulando,

    y

    lo

    pagaban

    el viernes

    (...)

    Desde

    Punta

    Pirulil hasta

    Chaique ?todo

    esto

    era

    macha 21.

    Dada

    la buena

    paga

    que

    significaba

    lamacha

    (cien

    pesos

    el

    kilo de machas

    con

    concha),

    y

    el

    menor

    trabajo

    aplicado

    para

    conseguir

    la

    comer

    cializaci?n,

    la

    macha

    a

    principios

    de

    la

    d?cada del

    noventa

    sufri?

    una

    sobreexplotaci?n

    que

    hasta

    hoy

    a?n

    no

    se

    puede

    recuperar,

    "vino

    tanta

    gente,

    que

    se

    anduvo acabando". Hoy las cantidades abundantes

    y

    los tradicionales

    tama?os

    ya

    no

    existen22.

    El

    periodo

    primavera-verano

    permite

    que

    los

    habitantes

    -sobre

    todo del

    sector

    de

    Chanqu?n-

    se

    dediquen

    a sacar

    cochayuyo

    (tambi?n

    conocido

    como

    cochaguasca,

    huilte

    o

    ulte).

    El

    cochayuyo

    lo

    sacan

    de la

    costa

    entre

    octubre

    y

    marzo,

    tiempo

    en

    el

    cual

    el

    mar

    est?

    un

    poco

    m?s

    en

    calma

    y

    el sol

    permite

    en

    parte

    capear

    el fr?o

    oleaje

    del Pac?fico.

    Se

    corta el

    pie

    (o

    lembo) que permanece

    adheri

    do

    a

    las

    rocas,

    se

    llevan hasta

    la

    playa

    los varios

    metros

    que

    llega

    a

    alcanzar

    la

    planta,

    ah?

    se

    junta

    y

    se

    enrollan

    provisoriamente,

    para

    luego

    trasladar

    los

    pesados

    bultos

    a

    caballo

    una vez

    terminada

    la

    jornada

    o

    hasta

    un

    d?a

    despu?s.

    Ya

    en

    el

    patio

    de

    la

    casa,

    se

    deja

    orear

    extendido

    sobre

    el

    pasto

    o

    los

    cercos.

    Luego

    de

    una

    semana,

    se

    llevan

    las tiras

    un

    tanto

    secas

    a

    la

    cocina

    a

    fog?n

    o

    bodega

    para

    hacer

    madejas

    o

    unidades

    de

    unos

    30

    cm

    de

    largo,

    dej?ndolas

    secar

    por

    otra

    semana

    m?s

    cerca

    del humo. Como

    promedio

    cada

    familia

    hace al a?o unos cien fardos; cada fardo tiene cien

    unidades

    o

    madejas,

    cada

    madeja

    se

    vende

    a

    130

    pesos.

    La

    venta de

    cochayuyo

    para

    muchos

    de los

    habitantes

    de

    Chanqu?n,

    Huentem?,

    Quiutil

    y

    otros

    peque?os

    caser?os

    constituye

    el

    principal

    sustento

    econ?mico

    familiar.

    El

    cochayuyo

    se consume

    tanto

    crudo

    como

    cocido,

    en

    forma

    de ensaladas

    o

    como

    acompa?a

    miento

    de

    otros

    alimentos.

    Por

    su

    alta concentraci?n

    de yodo, se usa como cataplasma en las paperas.

    En

    cuanto

    al

    bosque,

    son

    muchas

    las actividades

    que

    realizan

    los chilotes

    en

    Cucao

    y

    sus

    alrededores,

    lo

    cual

    se

    fortalece

    dada

    la inexistencia

    de

    jefes

    o

    patrones.

    Cada

    campesino

    es

    due?o de

    su

    tiempo

    y

    todos

    los

    d?as

    sirven

    para

    todas

    las

    tareas;

    "yo

    trabajo

    cualquier

    d?a

    que

    tengo

    tiempo

    y

    dispongo

    para

    hacerlo",

    se?ala

    donMario

    Toledo

    (citado

    en

    Fundaci?n

    Radio

    Estrella

    del Mar

    2001:87).

    S?lo

    existe

    diferencia

    en

    el

    tiempo

    destinado

    a

    las

    faenas

    seg?n

    la estaci?n

    del

    a?o. En

    verano

    se

    trabaja

    hasta

    m?s

    tarde,

    hasta

    que

    el t?rmino

    del

    d?a

    marca

    el

    fin

    de

    la

    jornada.

    B?sicamente,

    el

    monte

    cumple

    con

    tres

    necesidades:

    le?a

    y

    carb?n

    para

    la

    calefacci?n,

    madera

    para

    las

    construcciones

    y

    artesan?as,

    y

    es

    tacones

    para

    cercos;

    cada

    uno

    de

    estos

    productos

    se

    destina

    principalmente

    al

    consumo

    dom?stico,

    parte

    de la

    explotaci?n

    tambi?n

    puede significar

    un

    ingreso

    extraordinario.

    Aprend?

    todo

    eso

    con

    mi

    pap?,

    ?l

    me

    ense??

    a trabajar onbueyes.Era cabro chico.Ten?a

    como

    diez

    a?os,

    yo

    lloraba

    para

    irme

    con

    ?l,

    dejaba

    la escuela

    y

    me

    iba. Sac?bamos

    palos

    bonitos,

    que

    le dec?an

    de

    cipr?s,

    del

    sector

    de

    Quilque,

    ah?

    hab?a

    mucha

    madera,

    palos

    de

    siete

    metros.

    Mi

    pap? trabajaba

    con

    otra

    persona.

    Llevaba

    los

    palos

    en

    un

    bote,

    y

    en

    Huillinco

    entregaba

    lamadera

    (...).

    Llevaba

    como

    cien

    estacas

    de

    cipr?s,

    los

    palos

    m?s

    grandes

    los hac?an

    balsa

    para

    navegar

    en

    el

    lago

    de Cucao

    y

    Huillinco,

    y

    sal?an

    en

    el

    pueblito

    de

    Huillinco23.

    La le?a

    es

    el

    producto

    forestal

    m?s

    directo

    y

    esencial

    para

    la

    subsistencia

    humana,

    se

    utiliza

    tanto

    para

    cocinar

    como

    para

    calefaccionar

    el

    hogar.

    Esta

    se

    consigue

    a

    trav?s de

    recolecci?n

    de

    ramas

    y

    de

    madera

    muerta,

    corta de

    ?rboles

    ("el

    palo

    que

    no

    sirve,

    los

    palos

    que

    tienen

    vuelta").

    Las

    especies

    que

    se

    ocupan

    son

    las m?s

    duras

    y

    resistentes

    como:

    tep?,

    luma,

    canelo,

    ciruelillo,

    array?n y roble seco. Se utiliza como unidad de

    medida

    de la le?a

    el

    metro

    c?bico,

    equivalente

    a

    una

    columna

    de

    un

    metro

    de

    altura

    y

    tresmetros

    de

    largo

    (un

    metro

    c?bico

    =

    tres

    metros

    lineales).

    Un

    ?rbol

    puede

    rendir

    entre

    dos

    y

    cuatro

    metros

    de

    le?a.

    El

    consumo

    de

    le?a

    permanece

    pr?cticamente

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    8/15

    Pr?cticas cotidianas

    e

    imaginarios

    en

    sociedades litorales...

    73

    igual

    durante todo el a?o.

    Una familia

    en

    Cucao

    puede

    llegar

    a

    consumir

    entre

    dos

    y

    tresmetros

    c?bicos

    al

    mes,

    lo

    que

    est?

    en

    correspondencia

    con

    el

    consumo

    anual calculado

    para

    toda la

    Isla

    (24

    toneladas)24.

    Por

    su

    parte,

    el

    carb?n

    se

    elabora utilizan

    do

    tep?,

    luma

    o

    tepa.

    Estas maderas

    son

    muy

    compactas,

    duras

    e

    imputrescibles.

    Entre

    ellas,

    se

    prefiere

    el

    tep?

    por poseer

    un

    alto

    poder

    ca

    lor?fico.

    Antiguamente,

    recuerda

    don

    Roberto

    Panichini,

    el

    carb?n

    se

    hac?a de

    cipr?s.

    El

    oficio

    de la fabricaci?n de carb?n actualmente

    no

    est?

    muy

    difundido25.

    S?lo

    algunos

    vecinos

    del

    lugar

    realizan estas faenas. La elaboraci?n de carb?n

    sigue

    una

    rutina

    muy

    rigurosa.

    Para

    armar

    un

    horno

    de carb?n

    (le?a

    apilada)

    se

    llevan

    a

    cabo varios

    pasos:

    primero

    se

    limpia

    el sitio

    y

    se

    junta

    y

    parte

    le?a,

    orden?ndose la madera

    en

    torno

    a una

    barra

    instalada verticalmente hasta

    conseguir

    la forma de

    cono

    o

    volc?n.

    Luego

    se

    cubre

    la

    le?a

    con

    junquillo

    verde

    y

    una

    capa

    de tierra.

    Se

    retira la barra

    y

    se

    hace

    fuego

    en

    el

    espacio

    que

    queda

    (el

    horno

    se

    enciende desde

    su

    cumbre).

    Se

    tapa

    todo

    muy

    bien

    con ramas. El horno tarda alrededor de nueve d?as

    en

    quemarse.

    En

    todo

    ese

    tiempo

    los

    productores

    de carb?n hacen

    vigilias

    para

    ir

    controlando

    el

    funcionamiento

    del horno. Para

    comprobar

    que

    la

    le?a est? ardiendo lentamente

    se

    abren

    o

    cierran

    orificios

    que

    permiten

    la

    ventilaci?n,

    adem?s

    se

    va

    permanentemente

    apretando

    el horno

    con

    un

    "combo" met?lico

    para

    mantener

    compacto

    el

    volumen

    y

    evitar la

    quema

    de

    la

    le?a.

    Un

    horno

    en

    promedio

    entrega

    entre

    treinta

    o

    cuarenta

    sacos,

    donde

    se

    han

    ocupado

    entre

    seis

    y

    ocho

    metros

    de

    le?a.

    En

    Chanqu?n

    se

    acostumbra

    a

    hacer

    hornos

    grandes,

    utiliz?ndose

    hasta

    15

    m

    de

    le?a

    (Roberto

    Panichini); por

    lo

    general

    en

    estas

    faenas

    participan

    tres

    hombres.

    El

    carb?n

    que

    se

    elabora tiene

    como

    destino

    principal

    el

    autocon

    sumo;

    cuando

    se

    vende,

    cada

    saco

    se

    comercializa

    entre

    dos

    mil

    quinientos

    y

    tres

    mil

    pesos.

    Junto

    con

    el

    carb?n

    y

    la

    le?a,

    la extracci?n

    selectiva de madera tambi?n

    es una

    pr?ctica

    habitual

    con

    el

    bosque.

    Principalmente

    se

    hace

    uso

    en

    estas

    actividades de

    alerce,

    array?n,

    avellano, canelo,

    cipr?s,

    coig?e,

    luma

    ma??o,

    notro,

    tepa,

    tep?

    y

    ulmo. Se

    usa

    la

    pulgada

    como

    unidad

    de medida

    de lamadera. Una

    pulgada

    corresponde

    a una

    tabla

    de

    una

    pulgada

    de

    espesor por

    diez

    pulgadas

    de

    ancho

    y por

    tresmetros

    sesenta

    de

    largo.

    El ma??o bien crecido

    le

    est? dando

    treinta

    cuarenta

    pulgadas.

    Pero tambi?n

    tiene

    un

    m?nimo de acuerdo

    al

    tama?o,

    de ocho

    a

    doce

    pulgadas

    para

    arriba.

    Y

    si

    nosotros

    vamos

    a

    derribar

    un

    ulmo,

    nos

    est? dando ochenta

    a

    cien

    pulgadas

    de madera

    (Fundaci?n

    Radio Estrella

    del

    Mar

    2001:85).

    Otra actividad asociada

    al cotidiano

    de

    esta

    sociedad

    litoral

    es

    tambi?n la

    "limpieza"

    o

    roces

    para

    contar

    con

    praderas

    para

    el

    pastoreo

    de anima

    les

    o

    el cultivo de

    especies.

    El

    roce

    o

    limpieza

    del

    monte anteriormente sehac?a s?lo con hacha y en

    compa??a

    de

    varias

    personas

    se

    cortaba

    y

    limpiaba.

    M?s

    recientemente,

    el

    roce se

    comenz?

    a

    realizar

    con

    hacha

    y

    motosierra,

    requiri?ndose

    para

    el

    trabajo

    de s?lo

    una

    o

    dos

    personas.

    Esta actividad

    se

    realiza

    en

    junio

    de cada

    a?o,

    implicando

    cortar

    los ?rboles

    donde terminan

    las ra?ces

    y

    comienza

    el

    tronco.

    Los

    primeros

    ?rboles

    que

    se

    cortan

    ayudan

    a

    los

    siguientes

    para

    ir

    cayendo. Despu?s

    que

    se

    hizo

    el

    "herido"

    (primer

    ?rbol

    cortado),

    va

    cayendo

    uno

    sobre

    otro.

    El

    campesino

    reconoce

    en

    cada ?rbol

    una

    orientaci?n

    para

    la

    ca?da,

    "cada ?rbol tiene

    su

    as,

    hay

    que

    tirarlo

    a

    favor

    del

    viento".

    Luego

    del

    corte,

    se

    dejan

    secar

    las

    ramas

    y

    palos

    m?s

    delgados

    por

    dos

    meses

    (julio

    y

    agosto);

    durante

    septiembre,

    octubre

    y

    noviembre

    se

    rescatan

    los

    palos

    que

    sirven

    para

    le?a

    y

    carb?n

    y

    con

    el

    apoyo

    de

    bueyes

    se

    trasladan hasta

    la

    casa.

    En

    estos

    meses

    tambi?n

    se

    amontonan

    las

    ramas,

    hojas

    y

    ganchos

    para

    ser

    quemados.

    Para el

    segundo

    a?o,

    y

    una vez

    que

    las ra?ces

    se

    han

    secado,

    se

    lleva

    a

    cabo el proceso de "destronque" (sacar las ra?ces

    de

    los

    ?rboles

    cortados).

    Es

    una

    actividad

    que

    reclama

    de

    esfuerzo

    f?sico:

    una

    ra?z

    se

    saca con

    azad?n,

    se

    cortan

    las ra?ces m?s

    peque?as

    con

    hacha,

    finalmente

    se

    tira

    y

    arranca

    de la tierra

    on

    bueyes.

    De

    esta

    manera,

    en

    una

    sola

    temporada

    no

    se

    alcanza

    a

    hacer todo el

    deschampe,

    se

    requiere

    de

    m?s

    tiempo

    y

    personas

    que

    en

    el

    proceso

    de

    corte.

    Generalmente

    se

    pide

    ayuda

    a

    los

    vecinos,

    y

    se

    ocupan

    yuntas

    de

    bueyes.

    "Un

    terreno,

    si

    usted

    le da todos los

    d?as,

    lo

    puede

    sacar en un

    a?o".

    Con

    esto

    el

    terreno

    queda

    m?s

    o menos

    apto

    para

    la labranza

    o

    pastoreo,

    se

    puede

    destinar

    para

    el

    cultivo

    o

    empastada

    para

    animales. Si

    se

    destina

    el

    terreno

    para

    el

    cultivo,

    antes

    debe realizarse

    el

    "barbecho": "la idea

    es

    ir

    despejando

    y

    sembran

    do". El

    barbecho

    consiste

    en

    dar vuelta

    la

    tierra,

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    9/15

    74

    Francisco

    Ther R?os

    se

    hacen

    melgas

    o

    amelgas

    (surcos

    en

    la

    tierra)

    para

    sembrar

    papas.

    Todo el

    proceso

    de

    roce

    lleva

    as? al

    menos

    dos

    temporadas

    de

    trabajo.

    corte

    de ?rboles

    Primera

    temporada:

    ?

    secado

    y quema

    de

    ramas

    destronque

    Segunda temporada:

    barbecho

    siembra

    Con

    el suelo

    trabajado, posteriormente

    se

    des

    tinan los esfuerzos

    y

    d?as

    a

    la siembra.

    En

    especial

    la siembra

    de

    papa

    (Solanum tuberosum)

    es

    una

    faena tradicional en todo Chilo?. La papa tiene

    una

    larga

    data

    y

    omnipresencia

    en

    la alimentaci?n

    cotidiana de los

    chilotes26,

    y

    forma

    parte

    integral

    de

    la sociabilidad

    y

    riqueza ling??stica

    e los habitantes

    del

    archipi?lago.

    Su siembra

    se

    realiza durante los

    meses

    de

    agosto

    y

    septiembre; antiguamente

    se

    sembraba

    la

    papa

    directamente

    en

    la

    tierra,

    m?todo

    conocido

    como

    "picao",

    haciendo

    un

    hoyo

    con

    el

    gualato27

    se

    colocaban

    una o

    dos

    semillas,

    luego

    se

    tapaba

    la semilla

    con

    tierra

    y

    se

    hac?a la

    melga.

    Se

    apoyaba

    la

    germinaci?n

    de las semillas

    con

    abono

    natural

    hecho de

    paja descompuesta

    con

    fecas de

    oveja.

    Ahora

    se

    siembra

    con

    arado. En el

    surco

    dejado

    por

    la

    m?quina

    se van

    depositando

    una o

    dos

    semillas

    y

    se va

    aplicando

    salitre

    como

    abono.

    En

    una

    hect?rea

    pueden

    sembrarse hasta veinte

    sacos

    de semillas. Cada

    a?o

    se

    cambia de

    lugar

    la

    siembra,

    no se usa

    el mismo

    terreno

    dos

    veces

    seguidas

    para

    elmismo cultivo.La variedad

    que

    m?s

    se

    siembra

    es

    la

    papa

    d?sir?e,

    m?s recientemente

    se

    ha comenzado

    a

    cultivar la variedad cl?vela

    blanca, t?pica del sector de Tey28.La cosecha de

    papa

    se

    realiza durante noviembre

    y

    diciembre de

    cada

    a?o;

    tanto

    en

    la siembra

    como en

    la cosecha

    participa

    todo

    el

    grupo

    familiar.

    Por

    cada

    saco

    de

    semillas

    se

    pueden

    obtener

    en

    el

    sector entre

    10

    y

    15

    sacos

    de

    papas.

    Los

    sacos

    de

    papas

    cosechados

    se

    trasladan

    con una

    yunta

    de

    bueyes

    hasta

    una

    bodega

    contigua

    a

    la

    casa-habitaci?n,

    donde

    se

    almacenan

    para

    su

    consumo29.

    Se

    come

    papa

    casi

    en

    todas las comidas.

    Papa

    en

    la

    cazuela,

    en

    el estofado de

    vacuno

    o

    de robalo.

    Se

    come en

    el almuerzo

    y

    en

    la

    cena,

    o

    se

    hace

    milcao,

    o

    pur?,

    tambi?n

    a veces

    hacemos

    papas

    rellenas

    o

    papas

    fritas30.

    La

    papa

    tambi?n

    se

    aplica

    en

    medicina. Rallada

    y

    cruda

    se

    usa,

    por

    ejemplo,

    en

    quemaduras

    y

    otras

    irritaciones de

    la

    piel.

    En

    una

    mezcla

    con

    harina

    y linaza y en forma de cataplasma ayuda con el

    ardor

    y

    dolor del estado inflamatorio.

    La misma

    cataplasma

    sirve

    para

    los

    dolores de

    espalda,

    cruda

    o

    cocida

    es

    un

    alimento

    que

    ayuda

    a

    los enfermos

    del

    h?gado,

    etc.

    (Contreras 2002:50-51).

    Hoy

    se

    ha comenzado

    a

    experimentar

    la des

    aparici?n paulatina

    de las variedades chilotas

    y

    la

    disminuci?n

    progresiva

    de las

    preparaciones

    culi

    narias de la

    papa,

    todo lo cual

    puede

    ser

    entendido

    como una

    caracter?stica del

    modernismo basado

    en

    la "salarizaci?n masiva de la fuerza de

    trabajo

    chilota"

    (Santana 1998:03).

    V?nculos

    e

    Imaginarios

    La fortaleza

    organizativa

    y

    anal?tica de los ima

    ginarios

    radica

    en su

    referenciadirecta

    a

    losmodos

    de

    vivir,

    percibir

    y ocupar

    los

    espacios

    y

    lugares

    a

    trav?s

    de modos de

    producci?n

    (Fernandes

    da

    Silva

    J?nior

    2001).

    Siguiendo

    a

    Durand,

    Castoriadis

    y

    Bachelard

    (Carretero

    Pas?n

    2004;

    Ther

    2004),

    po

    demos denominar como imaginarios, no a una falsa

    conciencia

    como se

    hablaba desde el

    marxismo,

    sino

    a

    matrices

    ideoafectivas,

    entramadas,

    desde

    las

    que,

    m?s

    que

    explicar

    o

    razonar,

    se

    siente

    el

    mundo,

    se

    le transforma ensancha. Es

    decir,

    a

    trav?sde

    esta

    categor?a

    se

    evidencian los sentidos

    que

    se

    le

    otorgan

    a un

    lugar

    construido,

    cupado

    y

    manejado.

    Con

    esta

    noci?n

    se

    accede

    investigativamente

    l

    universo de

    los

    valores,

    creencias

    y

    aspiraciones depositadas

    en

    pr?cticas

    concretas

    que

    realizan

    los habitantes

    del

    litoral;

    asimismo

    se

    logra

    aclarar las

    estrategias

    que

    ponen

    enjuego

    para

    apropiarse

    material

    y

    sim

    b?licamente del ambiente

    costero,

    e

    insertarse

    en

    ?l

    con

    seguridad

    y

    garant?a

    de

    protecci?n,

    trabajo

    y

    alimentaci?n,

    vida de ocio

    y

    esparcimiento.

    De

    nueva

    cuenta,

    con

    la noci?n de

    imaginario

    es

    posible

    encuadrar

    las

    pr?cticas

    cotidianas

    y

    sus

    distintas

    manifestaciones de

    arraigo,

    apego y

    sentimiento

    de

    pertenencia

    socioterritorial.

    n

    este

    sentido,

    los

    imaginarios

    vienen

    a ser una

    instancia contrarrei

    ficadora,

    que

    hace alusi?n

    a

    c?mo

    se

    reencanta

    la

    existencia a partirde lo cotidiano, reintroduciendo

    los

    sue?os

    y

    aspiraciones

    que

    fueran clausurados

    por

    lamodernidad

    (Carretero

    as?n

    2004).

    Los ima

    ginarios

    se

    encuentran

    asociados

    a

    discursividades

    y

    comportamientos

    cotidianos

    que

    van

    haciendo

    emerger

    en

    estos

    lugares

    distintas

    se?as

    (de

    Certeau

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    10/15

    Pr?cticas cotidianas

    e

    imaginarios

    en

    sociedades

    litorales... 75

    1996)

    sobre lo

    propio,

    lo

    ajeno,

    lo

    compartido,

    lo

    inventado,

    lo

    innovado,

    lo

    negociado,

    lo

    reincorpo

    rado;

    de

    tal

    suerte

    que

    en

    las

    sociedades litorales

    se

    determinan

    distintas

    apropiaciones

    socioculturales

    de lo ambiental.

    Imaginarios,

    pr?cticas

    y

    ambiente

    El

    estudio de las

    significaciones,

    sos

    y

    transfor

    maciones del

    ambiente litoral

    plantea

    la

    necesidad

    de

    categorizar

    e

    interpretar

    as

    pr?cticas

    desplegadas

    sobre

    el

    territorio.

    este

    nivel las

    pr?cticas

    de

    apro

    piaci?n

    socioterritorial

    posibilitan

    elucidar

    marcos

    interpretativospertinentes a los propios v?nculos

    detectados

    en

    el

    sector

    de

    Cucao. En

    este

    sentido,

    Cucao

    constituye

    un

    mundo simb?lico

    en

    el

    cual

    se

    expresa

    la

    construcci?n de

    tiempos

    y

    espacios

    socialmente

    compartidos.

    Existiendo hist?ricamente

    lazos

    consangu?neos

    entre

    las comunidades

    mapuche

    huilliche

    que

    habitan

    en

    Chanqu?n

    y

    Huentem?,

    tambi?n existe

    una

    fluida

    ayuda

    mutua

    expresada

    en

    apoyos

    en

    el

    trabajo,

    la educaci?n

    y

    la

    salud.

    Existe

    garant?a

    de

    interacci?n,

    evidenci?ndose

    v?n

    culos

    mantenidos

    entre

    cultura

    y

    ambiente

    a

    trav?s

    del

    juego

    din?mico de distintos

    imaginarios.

    S?,

    la

    tradici?n

    fundamentalmente

    se

    refiere al

    conjunto

    de

    pautas

    sociales

    mantenidas

    en

    una

    localidad

    por

    transmisi?n

    generacional

    o

    consuetudinaria

    que

    de

    alguna

    manera

    otorga

    sentido

    y

    peculiaridad

    a

    un

    ciertomodo de

    vida;

    la

    modernidad,

    por

    su

    parte,

    se

    produce

    como

    resultado de

    la introducci?n

    de

    pautas

    sociales recientes

    en

    cada

    momento

    hist?rico

    (Alvarez

    1999;

    Quintanilla 1999);

    en

    esta

    sociedad

    litoral

    se reconocen

    entonces

    al

    menos

    tres

    imagina

    rios chilotes, trestiposdeCucao, o tresimaginarios

    en

    virtud

    a

    la relaci?n

    cultura/ambiente.

    Imaginario

    de los

    habitantes vinculados

    al modo

    de vida m?s tradicional

    El

    primer

    imaginario corresponde

    al "chilote

    tradicional",

    el cual

    se

    caracteriza

    fundamentalmente

    por

    vivir

    en

    el

    sector

    de m?s

    dif?cil

    acceso,

    posee

    escaso

    nivel de escolaridad

    y

    es

    conservador.

    Es

    una

    persona arraigada

    en

    lo

    que siempre

    ha

    hecho,

    "lo

    que

    ha

    aguantado

    en

    el

    tiempo,

    lo

    ha

    sido

    porque

    est?

    bien

    hecho". Este

    imaginario,

    por

    lo

    tanto,

    sigue

    relacion?ndose

    con

    el

    ambiente

    de acuerdo

    a

    los

    usos

    de

    costumbre,

    agregando

    muy

    pocas

    alternativas de

    uso.

    Este

    imaginario

    considera

    que

    los

    planes

    de ordenamiento

    (de

    manejo

    forestal,

    o

    de

    pesquer?as,

    por

    ejemplo)

    significar?an

    un

    obst?culo

    a sus

    labores

    cotidianas

    y

    relaci?n

    habitual

    con

    el

    monte

    y

    el

    mar.

    La

    le?a

    que

    se

    saca

    proviene

    de los ?rboles

    ca?dos,

    de

    las

    ramas

    secas,

    de

    los ?rboles

    curvos

    que

    no

    sirven

    para

    una

    buena

    madera;

    tambi?n

    se

    asiste

    de

    manera

    regular

    cada

    bajamarea

    a

    marisquear

    y

    se

    pesca

    con

    red cuando

    la

    necesidad

    lo

    requiere

    y

    la

    mar

    lo

    permite.

    Se

    cortan

    libremente

    varas

    de

    especies

    arb?reas

    para

    hacer

    cercos

    cada

    temporada.

    "Hoy

    estuve

    cortando

    unas

    varas

    por

    all?,

    despu?s

    las

    acarre?

    a

    hombro;

    las

    varas son

    para

    hacer

    cercos

    aqu?

    mismo,

    la

    plata

    no

    le alcanza

    a

    uno

    para

    tanto

    como para estar comprando ramas"31. Se desea

    seguir

    viviendo

    ah?,

    tranquilamente,

    tomando

    mate

    y

    sacando

    del

    mar

    la comida del

    d?a32.

    "Yo

    no

    salgo

    a

    ning?n

    lado,

    m?s

    voy

    a

    la

    playa

    que

    a

    visitar

    a

    mis

    vecinos,

    yo

    al mediod?a

    me

    voy

    a

    la

    playa

    a

    mirar"33,

    comenta

    don Jos? Nairn

    de

    setenta

    a?os.

    Cuando

    es

    necesario

    cortar

    uno o

    varios

    troncos

    para

    madera

    se

    hace

    sin

    pedirle permiso

    a

    nadie;

    lamadera de

    su casa

    don Jos?

    la

    sac? del

    monte:

    "al canelo cuando

    no

    le

    llega

    agua

    es

    lo

    mejor,

    el

    canelo

    con un

    envigado

    de

    coig?e

    es

    lo

    mejor

    que

    puede

    haber

    para

    la

    construcci?n".

    Imaginario

    de

    los

    habitantes

    que

    usue?an

    "

    con

    lomoderno

    El

    segundo

    imaginario

    presente

    en

    el

    sector

    est?

    compuesto

    por

    el chilote

    que

    aun

    cuando

    habiendo nacido

    o

    vivido

    en

    el

    sector

    desde

    muy

    peque?o

    se

    ha ido

    adaptando

    a

    los cambios de

    la

    globalizaci?n

    y

    el desarrollo

    comercial,

    as?

    como

    tambi?n a las ofertasy demandas delmercado. Se

    trata

    de

    un

    imaginario

    funcional

    a

    las

    ofertas

    del

    mercado

    y

    con

    ello

    a

    los cambios.

    Ya

    sea

    a

    trav?s

    de la actividad

    tur?stica34,

    de

    la

    venta

    de

    mano

    de

    trabajo

    en

    las

    pesqueras,

    o

    de la

    venta

    de le?a

    o

    carb?n,

    este

    grupo,

    con un

    arraigo

    en

    la

    tierra,

    el

    mar

    y

    las actividades

    asociadas,

    va

    experimentando

    una

    paulatina

    inserci?n

    en

    elmodo de vida

    urbana;

    pero,

    al mismo

    y

    dadas las condiciones

    de

    aislamiento,

    est?

    alejado

    de

    la vida urbana. Se

    apegan

    al

    servicio

    de telefon?a rural

    (tel?fonofijo y celular), poseen

    luz

    el?ctrica,

    agua

    potable

    en

    la

    mayor

    parte

    del

    sector,

    alumbrado

    p?blico,

    ba?o

    al interior

    de las

    casas.

    Buses rurales. Una

    posta,

    escuela,

    y

    la

    per

    manencia

    de

    una

    patrulla

    de Carabineros

    (polic?a)

    durante

    la

    ?poca

    estival. La imitaci?n del

    modo de

    vida urbano

    no

    es

    completa.

    Donde

    se

    mire

    existe

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    11/15

    76

    Francisco Ther

    R?os

    un

    paisaje

    natural al

    cual,

    seg?n

    este

    imaginario,

    conviene

    explotar

    para

    mejorar

    los

    bajos ingresos.

    De

    manera

    que

    comercializan

    comidas,

    promueven

    excursiones guiadas y ofrecen alojamiento en sus

    casas

    a

    bajo

    costo.

    Principalmente

    el

    bosque

    comienza

    a

    ser

    visto

    como un

    potencial

    recurso

    econ?mico.

    Espec?ficamente,

    se

    estima

    que

    los Planes de

    Manejo

    Forestal

    pueden

    ayudar

    a

    regularizar

    la

    explotaci?n

    y

    comercializaci?n

    de madera. Sin

    embargo,

    se

    reconoce

    que

    la

    falta de

    un

    camino

    pavimentado

    disminuye

    la

    potencialidad

    que

    guarda

    el

    bosque

    catedral.

    Antiguamente,

    mi

    padre

    y

    mi abuelo

    trabajaban

    con

    el alerce

    y

    el

    cipr?s,

    ahora

    no

    los

    dejan explotar.

    Se

    manten?an de

    eso

    nom?s. Se

    hac?an

    tejuelas,

    se

    hac?an

    puertas

    y

    ventanas.

    Se

    dej?

    de

    cortar

    el

    cipr?s,

    eso

    debe

    ser

    m?s

    omenos

    hace

    unos

    veinticinco

    a?os

    atr?s,

    porque

    vinieron las

    autoridades,

    y

    prohibieron

    cortarlo

    (...).

    Con

    el

    cipr?s,

    antiguamente,

    se

    hac?an

    tejuelas,

    tambi?n

    se

    hac?an de

    alerce,

    pero yo

    lo escuch?

    hace como treinta ?os atr?s. Si Ud. saca

    un

    Plan de

    Manejo,

    Ud.

    puede

    cortar,

    s?lo

    roce,

    laurel

    para

    carb?n

    y

    le?a,

    tepu

    que

    es

    para

    le?a. El

    resto

    es como

    para

    aserrar.

    Se

    produce

    harto ac?

    canelo,

    laurel, te??o,

    coig?e,

    y

    ma??o tambi?n

    para

    madera

    (...).

    Aqu?

    nunca

    ha

    venido

    a

    comprar

    nadie,

    ojala

    viniera

    alguien

    para

    sacarle

    alg?n provecho

    a

    los

    campos

    (...).

    Actualmente,

    nosotros

    estamos

    sacando

    un

    Plan de

    Manejo

    para

    construirnos

    una casa.

    Todos tienen

    que

    sacar

    Planes de

    Manejo35.

    Este

    imaginario

    sue?a

    con

    lo

    "moderno",

    con

    el ritmo laboral

    de la

    empresa

    desde

    una

    posici?n

    de asalariado.

    Pese

    a

    ello,

    no

    alcanza

    a

    disociarse

    totalmentede

    sus

    ra?ces,

    por

    lo

    que

    en

    ?l conviven

    los elementos de

    lomoderno

    con

    los

    tradicionales,

    que

    en

    algunos

    casos se

    complementan

    y

    en

    otros

    se

    excluyen.

    Imaginario de los habitantes que relativizan la

    modernidad

    El

    tercer

    imaginario

    presente

    en

    el

    sector

    de

    Cucao

    es

    el conformado

    por personas

    de ra?ces

    ajenas

    a

    Cucao

    que,

    siendo

    por

    lo com?n

    procedentes

    de

    Santiago

    u

    otra

    gran

    ciudad del

    pa?s,

    se

    han ido

    radicado

    en

    el

    lugar

    por

    razones

    generalmente

    de

    trabajo

    o

    de vida. Este

    imaginario

    adopta

    un con

    cepto distinto del ambiente y la cultura del lugar,a

    tal

    punto

    que

    relativiza lamodernidad. No

    se

    trata

    de

    una

    lectura moderna

    de las

    tradiciones,

    sino

    m?s bien del

    retorno

    a

    las tradiciones:

    se

    busca

    confirmar

    manifestaciones tradicionales

    de

    Chilo?,

    revalorizar la

    tierra,

    junto

    a sus

    recursos

    y

    bellezas

    paisaj?sticas.

    De

    alguna

    manera,

    este

    imaginario

    funge

    como una

    imagen proyectiva

    para

    los

    luga

    re?os

    que

    soportan/mantienen

    el

    segundo

    de los

    imaginarios

    descritos. Este

    imaginario,

    imbuido de

    concepciones ecologistas, gusta

    de la

    no

    contami

    naci?n,

    le

    agrada

    vivir

    en

    el

    sector

    principalmente

    por

    ser un

    ambiente rural aislado

    y

    por

    contar

    con

    escasas

    muestras

    de

    modernidad;

    pero

    desde

    su

    espacio

    y

    en su

    espacio,

    el

    grupo que posee

    este

    imaginario

    hace

    gala

    de los elementos

    que

    le

    otor

    gan

    la calidad de vida

    que

    ellos desean. Se

    trata

    de

    personas que

    tienen

    sus casas

    de descanso

    por

    temporada,

    o

    que,

    viviendo

    en

    el

    sector

    la

    mayor

    parte

    del

    a?o,

    se

    dedican

    a

    ofrecer servicios tur?sticos

    desde la

    capital

    del

    pa?s

    a

    chilenos

    y

    extranjeros

    entusiasmados por la belleza del Parque Nacional

    y

    sus

    alrededores.

    Este ?ltimo

    imaginario

    consti

    tuye

    una

    constelaci?n de

    significados

    respecto

    al

    ambiente

    y

    su

    destino:

    se

    cuida,

    pero

    tambi?n

    se

    explota

    "sustentablemente"36.

    Para

    Concluir:

    Memoria

    e

    Imaginarios

    Mucho de lomencionado m?s arriba

    st?

    presente

    en

    lamemoria del habitante de Cucao

    y

    se

    activa

    cotidianamente

    a

    trav?s de distintos

    imaginarios.

    Al escudri?ar

    en

    lamemoria

    vemos

    c?mo

    emergen,

    al

    mismo

    tiempo,

    y

    con

    distintas fuerzas cada

    vez,

    estructuras

    semi?ticas

    tradicionales

    y

    modernas.

    Lo

    que

    nos

    hace considerar

    a

    lamemoria

    como

    un

    verdadero territorio iscursivo

    en

    constante

    proceso

    de reformulaci?n.

    Aunque

    parezca

    fija,

    lamemoria

    no

    lo est?.

    Fluye.

    La memoria de los chilotes

    se

    comporta

    en

    lo

    cotidiano

    como un

    conjunto

    de saberes

    y

    pr?cti

    cas

    que generan

    identidades

    y

    comportamientos.

    La memoria, en este sentido, ejemplifica una

    forma de redefinici?n continua de todos

    aquellos

    valores,

    creencias

    y

    pr?cticas

    cotidianas

    que pre

    servan a

    la

    cultura chilota de la

    degradaci?n

    a

    la

    que

    se

    ver?a condenada si

    ?nicamente

    se

    limitara

    a

    repetir

    tradiciones

    o

    preservar

    rituales

    del

    olvido.

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  • 7/23/2019 Imaginarios Litorales Cucao - 1998

    12/15

    Pr?cticas cotidianas

    e

    imaginarios

    en

    sociedades litorales...

    77

    Los

    imaginarios

    descritos

    dejan

    en

    evidencia

    que

    la

    memoria chilota

    se

    reconfigura

    y

    desterritorializa

    en

    lo cotidiano

    por

    medio

    de distintas

    pr?cticas,

    v?nculos

    y

    domesticaciones.

    Pensar

    en

    lamemoria

    significa

    pensar

    as?

    en

    la

    tensi?n tradici?n/modernidad las

    m?ltiples

    formas

    bajo

    las cuales

    se

    presentan.

    En

    Cucao,

    la tradici?n

    implica

    transmisi?nde

    saberes,

    principalmente

    por

    medio del

    aprendizaje

    directo. Con ella

    se

    logra

    cierta

    seguridad,

    sabi?ndose

    hacer

    las

    cosas

    y

    los

    por

    qu?

    de

    hacerlo de

    un

    modo

    determinado.

    El

    poder

    de la

    tradici?n

    se

    sit?a

    entonces

    en

    la transfor

    maci?n

    y

    domesticaci?n

    del

    litoral,

    convirti?ndolo

    en hogar, lugar de trabajo y crianza de los hijos.

    Complementariamente,

    los

    juegos

    y

    complejidades

    que

    evidencian los

    imaginarios

    descritos evidencian

    no

    s?lo la relaci?n de

    necesidad

    entre

    lo tradicional

    y

    lo

    moderno,

    sino

    que

    tambi?n la relaci?n dial?

    gica

    entre

    ambos. Sin el

    universo de

    significados

    de lo tradicional

    (interior/pasado),

    la

    constelaci?n

    de

    significados

    de lomoderno

    (exterior/futuro)

    o

    es

    posible.

    Todo

    es

    parte

    del

    juego

    incesante

    que

    trae

    el

    tiempo.

    Junto

    a

    la

    tradici?n,

    la

    historia cotidiana

    se

    deposita

    en

    y

    abre la

    posibilidad

    para

    permanecer

    en

    un

    lugar.

    mbas

    otorgan

    identificaci?n

    y

    sentido

    de

    pertenencia.

    Desde el

    punto

    de

    vista

    investigati

    vo,

    surgen

    entonces

    las

    pr?cticas

    cotidianas

    como

    posibilidad

    generosa

    para

    indagar

    fen?menos

    cul

    turales cambiantes

    en

    las

    sociedades

    litorales. Por

    s?

    mismas,

    conllevan

    la

    empresa

    de

    reconformar

    lo

    actual

    y

    presente

    desde

    su

    pasado,

    "todo

    un

    pasado

    viene

    a

    vivir

    por

    el sue?o"

    (Bachelard

    1979).

    M?s

    a?n,

    las

    pr?cticas

    cotidianas

    permiten

    conocer los

    juegos

    de memorias

    e

    imaginaci?n,

    recuerdo

    e

    imaginarios

    (Ther

    2004).

    Las

    pr?cticas

    cotidianas,

    implicando

    tiempo,

    significan

    tanto

    permanencia