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Vetera corpora morbo afflicta Actas del XI Congreso Nacional de Paleopatología Malgosa A, Isidro A, Ibáñez-Gimeno P, Prats-Muñoz G (eds.) (2013) ISBN: 978-84-940187-5-6. p 489-506 HALLAZGO DE UN INDIVIDUO CON OXICEFALIA DECAPITADO Y CON UNA ESTACA EN EL PECHO EN UN ENTIERRO MEDIEVAL DE LA ISLA DE HAILUOTO (FINLANDIA): ¿UNA TUMBA DE VAMPIRO? Núñez M 1 , Paavola K 1 , Garcia-Guixé E 1, 2 1 Department of Archaeology and Anthropology, 90014 Oulu University, Finland 2 Museu d’Arquelogia de Catalunya, 08038 Barcelona, Spain Correspondencia a: [email protected] RESUMEN. Se describe un caso de oxicefalia en un individuo que fue enterrado en la parroquia de Hailuoto (Finlandia) en el siglo XIV. El cráneo muestra la protuberancia cónica típica de oxicefalia y malformación de la parte superior de la cara, y existe la posibilidad de que el fémur derecho tenga una curvatura anormal. Además de esta patología poco común, el individuo había sido decapitado y se encontraba asociado con dos estacas de madera: una atravesando su pecho y otra a unos centímetros del cráneo decapitado. Un estudio de la historia y folclore de la parroquia reveló referencias a ejecuciones por decapitación y tradiciones de revenant locales. Aunque esto se podría usar para la interpretación de que el individuo había recibido un “entierro de vampiro”, el argumento es debilitado por la disparidad entre las dataciones de la tibia del 489

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Vetera corpora morbo afflicta

Actas del XI Congreso Nacional de Paleopatología Malgosa A, Isidro A, Ibáñez-Gimeno P, Prats-Muñoz G (eds.) (2013)

ISBN: 978-84-940187-5-6. p 489-506

HALLAZGO DE UN INDIVIDUO CON OXICEFALIA DECAPITADO Y CON UNA ESTACA EN EL PECHO EN UN ENTIERRO

MEDIEVAL DE LA ISLA DE HAILUOTO (FINLANDIA): ¿UNA TUMBA DE VAMPIRO?

Núñez M1, Paavola K1, Garcia-Guixé E1, 2

1 Department of Archaeology and Anthropology, 90014 Oulu

University, Finland

2 Museu d’Arquelogia de Catalunya, 08038 Barcelona, Spain

Correspondencia a: [email protected]

RESUMEN. Se describe un caso de oxicefalia en un individuo que fue enterrado en la parroquia de Hailuoto (Finlandia) en el siglo XIV. El cráneo muestra la protuberancia cónica típica de oxicefalia y malformación de la parte superior de la cara, y existe la posibilidad de que el fémur derecho tenga una curvatura anormal. Además de esta patología poco común, el individuo había sido decapitado y se encontraba asociado con dos estacas de madera: una atravesando su pecho y otra a unos centímetros del cráneo decapitado. Un estudio de la historia y folclore de la parroquia reveló referencias a ejecuciones por decapitación y tradiciones de revenant locales. Aunque esto se podría usar para la interpretación de que el individuo había recibido un “entierro de vampiro”, el argumento es debilitado por la disparidad entre las dataciones de la tibia del

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individuo (1276-1484 cal AD) y de la estaca atravesando su pecho (1437-1812 cal AD).

PALABRAS CLAVE: Oxicefalia, decapitación, hombre adulto, Finlandia, siglo XIV

ABSTRACT. We describe a case of oxicephaly in an adult male that was buried in the parish of Hailuoto (Finland) in the 14th century. The cranium shows the conical protuberance typical of oxycephaly and deformation of the upper facial region and, possibly, there is an abnormal bowing of the right femur. In addition to this fairly rare pathology, the individual had been decapitated and it was associated with two wooden stakes: one through his chest and the other a few centimeters from his decapitated cranium. A survey of the parish history and folklore revealed references to beheading executions and local revenant traditions. Although these could be used to infer that the individual received a “vampire burial”, the argument is weaken disparity between the radiocarbon dates of the individual’s tibia (1276-1484 cal AD) and the stake through his chest (1437-1812 cal AD).

KEYWORDS: Oxycephaly, decapitation, adult male, Finland, 14th century

INTRODUCCIÓN

Los vampiros son populares. Sólo hay que dar un vistazo a la guía de programas de tele. Leyendas de seres supernaturales que se alimentan de la sangre de los vivos se conocen en sociedades de todos los continentes. Aunque ahora existe la tendencia a situarlas en la Europa oriental, particularmente Rumania, las primeras menciones de estas supersticiones presentan una distribución mucho más amplia. Parece como si hubiéramos olvidado nuestras propias leyendas de revenants; por ejemplo, las anécdotas de Guillelmus Neubrigensis en su Historia rerum anglicarum del siglo XII (Stevenson, 1861), o la definición en el Dictionnaire

philosophique de Voltaire (1764): Ces vampires étaient des morts qui sortaient la nuit de leurs cimetières pour venir sucer le sang des

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vivants, soit à la gorge ou au ventre, après quoi ils allaient se

remettre dans leurs fosses. A pesar de una presencia relativamente importante en arte y ficción durante el siglo XIX, las leyendas modernas de vampiros no llegan a generalizarse hasta después de la publicación de la obra maestra de Bram Stoker, Dracula, en 1897. Stoker basó su novela en antiguas leyendas rumanas; pero sus vívidas descripciones han ejercido una poderosa influencia en nuestras ideas sobre vampiros. Esto se ve claramente en la literatura y el cine del siglo XX, y es en esta conexión que nos referimos al entierro 203 de Hailuoto como “tumba de vampiro”.

Hailuoto (65°N 25°E) es una pequeña isla (202 km²) situada frente la desembocadura del río Oulu, a unos 6 km de tierra firme (Fig. 1).

Figura 1. Hailuoto según un mapa de la década de los 1760, cuando consistía en un grupo de isletas, y hoy (2012) como una sola isla mayor. La situación de la iglesia está señalada con una cruz y la de la supuesta segunda tumba del revenant, Äijänhauta (Ä), en la isleta de Hanhinen con un círculo (según Paulaharju, 1961).

Fue colonizada hacia finales del siglo XI (Hicks, 1988) y al aumentar su población se construyó una pequeña capilla de madera en el siglo XIV. Al principio, la capilla estaba subordinada a la parroquia de Salo

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en la costa vecina, pero en 1587 Hailuoto se convirtió en parroquia independiente. La construcción de otra iglesia rodeando la antigua capilla medieval (Fig. 2) se realizó durante 1610-1620. Entre 1620 y 1968 la iglesia fue objeto de varias modificaciones y adiciones arquitectónicas de poca relevancia a nuestro estudio. Una posible excepción sería la de 1756, cuando se renueva el piso de la iglesia y se clausura cripta, poniendo fin a los entierros dentro de la iglesia. Esto implica que todas las tumbas excavadas dentro de los cimientos de la iglesia son anteriores a 1756 (Paavola, 1988).

Figura 2. Plano de las excavaciones de 1985-1987 dentro de las ruinas de la iglesia de Hailuoto con la sepultura 203 algo aparte a la derecha, y la situación aproximada de la primera capilla basada en la distribución de monedas y entierros medievales (según Paavola, 1988, 1989, 1991,1998).

Cuando fue destruida en el incendio de 1968, la iglesia de Hailuoto era la más antigua de su tipo en Finlandia y había sido objeto de varios estudios (Mathesius, 1743; Nordman, 1965; Pettersson, 1971). Durante 1985-1987, los arqueólogos de la Universidad de Oulu excavaron las ruinas de la iglesia bajo la dirección de Kirsti Paavola en un proyecto financiado por la Academia de Finlandia (Julku, 1988). El presente estudio se basa en los informes de esas excavaciones y varios estudios publicados (Paavola, 1988, 1989, 1991, 1995, 1998; Núñez, 2011).

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(a) Las excavaciones de 1985-1987

La excavación de un área de 155 m2 dentro de la iglesia (Fig. 2) proporcionó más de 400 monedas, 58 acuñadas antes del año 1600 (Paavola, 1988). También se descubrió un total de más de 250 entierros que se habían realizado allí desde el siglo XIV hasta el año 1756 (Paavola, 1988, 1989, 1998). Se puede estimar la situación de la primera pequeña capilla medieval en base de la distribución de las sepulturas medievales (sin ataúd) y las monedas de los siglos XIV y XV (Fig. 2).

Las dataciones de carbono 14 (Tabla 1) concuerdan con la cronología de las monedas y los escasos datos históricos disponibles. Los entierros sin ataúd número 182 y 203 caen dentro de la edad media. El entierro 110 (1447-1634 cal AD), probablemente se hizo antes del comienzo de la construcción de la iglesia parroquial en 1610. Los entierros 232 y 244 son posteriores a la construcción de la iglesia parroquial y deben caer dentro del período de uso de la cripta, o sea 1620-1756.

TABLA 1. Dataciones convencionales (Paavola, 1998) y calibradas (Stuiver y Reimer, 1993; Stuiver et al., 2011) del colágeno de algunos individuos

enterrados en la iglesia de Hailuoto

Tumba BP Cal AD (1σ) Cal AD (2σ)

203 550 ±80 1308-1435 1276-1484

182 540 ±80 1310-1440 1277-1493

110 370 ±100 1447-1634 1394-1683

232 240 ±80 1593-1808* 1470-1888*

244 150 ±100 1667-1952* 1625-1956* * No puede ser posterior a 1756, cuando cesaron los entierros en la cripta.

(b) La sepultura 203

La sepultura 203 se encontraba algo separada de la capilla y de las otras sepulturas medievales (Fig. 2). Además presentaba ciertas características especiales:

Esta sepultura sin ataúd era especial en que el individuo había sido

decapitado y su cabeza colocada cerca del hombro derecho,

mirando hacia el este. . . . Estaba situada fuera de la capilla

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medieval, al nordeste de ésta. Según la tradición, una persona

ejecutada y no arrepentida de sus faltas no podía ser enterrada en

la cripta, únicamente fuera de la iglesia y hacia el norte de ésta

(Paavola, 1988; traducido del finés por M.Núñez).

Tanto el informe (Paavola, 1991) como los planos y fotos de las excavaciones de 1985-1987 indican que la sepultura 203 estaba completa y su estratigrafía intacta (Figs. 2 y 3). Según dicho informe, el cráneo y otros huesos del individuo de la sepultura 203 fueron enviados al Departamento de Odontología de la Universidad de Oulu para su estudio; pero a pesar del cuidadoso empaquetado, el frágil cráneo no sobrevivió el transporte y llegó a su destinación en cientos de astillas. No se intento reconstruirlo entonces, y una minuciosa búsqueda de los fragmentos del cráneo 203 en 2011 no produjo resultados. Éstos fueron aparentemente devueltos a la parroquia con otros restos óseos para su reenterramiento. Eso es lamentable, porque el cráneo 203 presentaba una rara patología y hubiera podido ser reconstruido y estudiado a fondo.

Figura 3. Fotografía de la sepultura 203 in situ con el esqueleto del individuo decapitado y el cráneo cerca de su hombro derecho. Obsérvese que el fémur derecho parece tener una curvatura excesiva. Las flechas señalan las dos estacas de madera, una en el pecho del individuo y la otra a unos centímetros del cráneo decapitado (1987, Archaeology Laboratory, University of Oulu).

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MATERIAL Y MÉTODOS

En la ausencia del material óseo, la única posibilidad que queda es intentar aplicar los métodos antropológicos y paleopatológicos para interpretar el interesante caso del individuo 203 haciendo uso de las fotos y datos disponibles.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

La foto del cráneo 203 in situ (Fig. 4) nos permite determinar el sexo del individuo. Especialmente la morfología de la mandíbula y el frontal sugieren que se trata de un hombre. Sobre la edad sólo podemos decir que es adulto en base de la unión completa de las epífisis de la tibia en la Figura 5.

Figura 4. Fotografía del cráneo 203 in situ. Obsérvese la protuberancia cónica en la región de bregma y la deformación de la región craniofacial (1987, Archaeology Laboratory, University of Oulu).

Utilizando la misma fotografía de la Figura 5, que contiene una regla como escala, también es posible estimar la longitud de la tibia a

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unos 36 cm. Esto corresponde a una estatura de 167-168 cm según las fórmulas desarrolladas para poblaciones finlandesas (Telkkä, 1950; Majanen y Niskanen, 2010). Esta estatura soporta la conclusión de que el individuo 203 es un hombre y concuerda con la estatura media de 168 cm de los soldados del distrito hacia fines del siglo XVIII (Kajanoja, 1971).

Figura 5. Fotografía de la tibia izquierda del individuo 203, tomada antes de enviarse a su datación (Tabla 1, Fig. 7). Obsérvese que las epífisises están completamente fusionadas. La regla usada de escala nos permite estimar la longitud de la tibia a unos 36 cm (1988, Archaeology Laboratory, Oulu University).

Además de haber sido decapitado, el individuo 203 había padecido de craniosinostosis. Esta patología fue clínicamente observada y descrita por Rudolph Virchow en 1851; pero ya había sido mencionada por Galeno en el siglo II y algunos tipos de craneosinostosis pueden verse también en las ilustraciones publicadas por Vesalius en 1543 (Campillo, 2001; Frassanito y Di Rocco, 2011).

Las craniosinostosis son generalmente congénitas y tienen una prevalencia de 3-5 casos por 10000 nacimientos vivos (Cohen, 2005; Oostra et al., 2005; Boulet et al., 2008; Khanna et al., 2011; Kolar, 2011). Son causadas por la fusión prematura de una o más suturas, que produce una deformación de la región craniofacial y puede llegar a interferir con el desarrollo físico y/o intelectual del individuo. Hoy la incidencia de esos síndromes ha disminuido gracias a la intervención quirúrgica para reducir la presión craneal

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interna. Existen varios tipos de craniosinostosis que están específicamente asociadas con las diferentes suturas. La condición observada en el cráneo 203 puede ser clasificada como oxicefalia, un tipo de craniosinostosis no muy común: menos del 15% de todas las craniosinostosis (Laitinen, 1956; Renier et al., 2000; Boulet et al., 2008; Kolar, 2011).

La oxicefalia es el resultado de la fusión prematura de dos o más suturas, generalmente la coronal y la lambdoidea. Esto limita el crecimiento del cerebro, que crea presión intracraneal y se expande hacia las suturas no fusionadas y, en el caso de la oxicefalia, hacia la región de la fontanela anterior (Fig. 5). La presión resultante tiende a retardar el cierre de la fontanela y, si el niño sobrevive, resulta en una protuberancia cónica en bregma (Figs. 4 y 6) (e.g. Ogilvie y Posel, 1927; Weber et al., 2008; Jamjoom et al., 2009).

En tres cráneos con oxicefalia observamos cabezas de forma cónica y evidencia de alta presión intracraneal. La elevación de 1.8-2.1 cm

en la región de bregma en estos cráneos indica alta presión

intracraneal crónica y la formación de tejido óseo nuevo en la región

de la fontanela anterior (Weber et al., 2008).

Como otras formas de craniostosis, la oxicefalia suele estar asociada con cierto grado de displasia facial y, según su severidad, puede llegar a interferir con el desarrollo intelectual y/o físico del individuo (Virchow, 1851; Hutchison, 1910; Renier et al., 1997, 2000; Flores-Sarnat, 2002; Cohen, 2005; Weber et al., 2008; Jamjoom et al., 2009). En un estudio de 40 casos de craniosinostosis, incluyendo oxicefalia, realizado en Finlandia se observó que sólo 11 de los individuos eran completamente normales, mientras que de los 29 restantes por lo menos 9 sufrían de retraso mental y 28 de ellos tenían algún tipo de síndrome o discapacidad física (Laitinen, 1956).

Además de la protuberancia cónica en bregma, el cráneo 203 presenta displasia facial, especialmente en el área del frontal y las órbitas, como si hubieran sido estirados hacia arriba y atrás. Obviamente nada podemos decir de la capacidad mental o física de este individuo. No obstante, la aparente curvatura del fémur derecho en la fotografía de la Figura 3 podría indicar algún tipo de malformación del esqueleto postcraneal.

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Figura 6. Tres casos de oxicefalia: (A) TAC póstumo del cráneo de un niño de 4 años con oxicefalia (Jamjoom et al., 2009). (B) Tomografía del niño en A donde se puede observar como el cerebro se expande hacia la fontanela anterior al crecer (Jamjoom et al., 2009). (C) Radiografía de un niño de 1,5 años cuyos huesos craneales presentan la estructura de "cobre amartillado" típica de alta presión intracraneal (Laitinen, 1956). (D) Cráneo de un individuo adulto con oxicefalia en la colección del Museo Nacional de Patología y Anatomía de Viena (Weber et al., 2008).

Es imposible decir con certeza si la aparente curvatura del fémur se trata de un verdadero defecto o si se debe a una ilusión óptica, a un accidente de excavación o a factores tafonómicos. De todos modos, es interesante notar que la curvatura del fémur ha sido una de las lesiones observadas en asociación con craniosinostosis, incluso oxicefalia: Las manifestaciones cardinales son la asociación de

craniosinostosis, sinostosis radio-humeral y arqueamiento femoral (DeLozier et al., 1980; véanse también Flores-Sarnat, 2002; Oostra et al., 2005; Boyadjiev, 2007; Boulet et al., 2008).

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La malformación del cráneo 203 es muy similar a la documentada en otros casos de oxicefalia ilustrados y descritos en la literatura médica (Fig. 6; Barnes, 1994; Campillo y Subirà, 2004; Weber et al., 2008; Jamjoom et al. 2009). Esto y todo lo mencionado anteriormente sugieren que el individuo de la sepultura 203 sufría de oxicefalia. Además, no podemos descartar que la deformación craniofacial y/o el posible retraso mental causados por la oxicefalia hayan contribuido de alguna manera u otra a la decapitación de este individuo.

¿Era el entierro 203 una tumba de vampiro?

La sepultura 203 es una de las más antiguas de Hailuoto (1308-1435), siendo contemporánea con la capilla medieval. Como las otras sepulturas medievales, carece de ataúd y el individuo fue enterrado en una fosa y no depositado en un ataúd en la cripta como la mayoría de entierros posmedievales. La sepultura 203 presenta además una serie de características que la distinguen de todas las otras sepulturas de Hailuoto: era la única sepultura medieval que se encontraba separada de la capilla y contenía los restos de un individuo decapitado cuyo cráneo presentaba una condición patológica conocida como oxicefalia. Pero todavía hay más. Se observaron también dos estacas de madera: una atravesando el pecho del individuo, la otra sólo a unos centímetros de la protuberancia cónica del cráneo decapitado (Fig. 3). La asociación de decapitación y estacas en un entierro, nos hace inevitablemente recordar el famoso pasaje de Dracula:

Take this stake in your left hand, place the point over the heart, and

the hammer in your right. Then when we begin our prayer . . . strike

in God's name. . . . he struck with all his might. The thing in the

coffin writhed . . . Finally it lay still. The terrible task was over. . . .

Then we cut off the head and filled the mouth with garlic (Stoker, 1897).

Sabemos que Stoker basó su novela en antiguas leyendas rumanas; pero existían supersticiones similares en Finlandia hace 600 años? La búsqueda de posibles paralelos en la historia y folclore local nos llevó a las tradiciones orales, donde hay referencias a decapitaciones y revenants en Hailuoto en el siglo XVIII (Paulaharju, 1961, 1962; Merilä, 2003). Según Merilä (2003), el campo conocido hoy como Ämmankenttä (Campo de la Vieja) debe su nombre a la

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ejecución pública que tuvo lugar allí en el siglo XVIII. Este suceso es también corroborado por los registros parroquiales de Hailuoto:

La viuda Beata Steffander, natural de Oulu, había estado haciendo

estancias en parroquias vecinas en los últimos años. Hasta había

visitado parientes en Tavastia [Finlandia meridional] en 1767. Vino a esta parroquia el último 12 de abril. El 30 de mayo ella asesinó al

niño de Caisa Tryg, por lo que conforme a la justa sentencia, fue

decapitada y su cadáver quemado en la hoguera el 24 de

septiembre de 1768 (http://hiski.genealogia.fi/historia/, traducido del sueco por M. Núñez).

Merilä (2003) menciona además la leyenda del "pobre Antti" (Antti-

parka), quien supuestamente fue también decapitado en Hailuoto. Estaríamos tentados a conectar al individuo 203 con ese "pobre Antti", pero según Merilä su ejecución tuvo lugar en el siglo XVIII. Por otra parte, las tradiciones orales tienden a deteriorarse y cambiar. No se puede descartar que la leyenda del "pobre Antti" tenga raíces mucho más antiguas. Por lo menos los registros parroquiales de 1702 a 1860 no contienen ninguna referencia a otras ejecuciones en Hailuoto excepto la ya mencionada del 1768.

Paulaharju (1961, 1962) describe una serie de cuentos y leyendas que indican que los habitantes de Hailuoto tenían supersticiones de fantasmas y revenants que se extienden por lo menos hasta el siglo XVIII. Una de esas anécdotas se refiere a Äijänkangas (Duna del Viejo), que estaba situada en lo que hace 250 años era la isleta de Hanhinen, hoy unida a la isla principal de Hailuoto (Fig. 1). Él menciona un círculo de piedras conocido como Äijänhauta (Tumba del Viejo) donde se supone que está enterrado el hombre de Luukas, quien por su brujería no podía descansar en tierra

consagrada, y continuamente se desplazaba y molestaba a los vivos.

Por eso su cuerpo fue exhumado y llevado lejos en barca a la isla de

Hanhinen y enterrado allí (Paulaharju, 1961; traducido del finés por M.Núñez). Otra versión dice que un hombre llamado Olli, también de la finca Luukas, había perdido la razón y se había suicidado. El resto es similar a la versión anterior: se le había enterrado en el cementerio, pero como no descansaba en paz se le exhumó y enterró en la isleta de Hanhinen. Es interesante que, aunque con menos detalle y diferente nombre, unos sucesos muy parecidos están anotados en los registros de la parroquia del año 1761:

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El 25/1 tuvo lugar en esta parroquia el terrible suceso de que el

campesino Henr. [Henrik] Pramila se ahorco, por ser un suicidio el

10/3 el Verdugo Ronblad lo enterró lejos en el bosque de la duna de

Hanhinen (http://hiski.genealogia.fi/historia/, traducido del sueco por M.Núñez).

Hemos visto la similitud de la decapitación y la estaca en el pecho con algunas tradiciones del tratamiento funerario de personas consideradas como vampiros. Hemos constatado que unos 300 años después del entierro 203, en Hailuoto existía por lo menos una tradición de revenant local. Indudablemente todo esto se podría utilizar como argumento para soportar la hipótesis de que, quizás por la forma de su cabeza, el individuo 203 había sido identificado como un vampiro y enterrado como tal. Todo parece bien hasta que surge el problema de la antigüedad de las estacas. La datación de carbono 14 obtenida de la estaca que atravesaba el pecho del individuo 203 no coincide con la edad de su tibia (Fig. 7). Hay una diferencia de 250 años entre las dataciones convencionales de la tibia y la estaca. Además las dataciones calibradas presentan una separación de 49 años entre los rangos de 1 sigma (1435 vs. 1484 cal AD) y una coincidencia de sólo 48 años en los rangos de 2 sigmas (1484 vs. 1437 cal AD). En otras palabras, es bastante improbable que la estaca y el entierro del individuo sean contemporáneos, lo que debilita la idea que el individuo 203 de Hailuoto pudiera haber sido enterrado como un vampiro.

Figura 7. Diagrama con los rangos de 2 sigmas de las dataciones de carbono 14 (cal AD) de la tibia del individuo 203 y de la estaca que atravesaba su pecho (Bronk Ramsey, 2001, 2009).

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Las estacas podrían estar relacionadas con la construcción de la iglesia parroquial durante 1610-1620. Por otra parte, tenemos que reconocer que las probabilidades de que una estaca sea clavada al azar precisamente en medio del pecho del individuo en la sepultura 203 son también bastante bajas. Una posibilidad sería que la superstición de revenant hacía que la gente de Hailuoto mantuviera al individuo confinado a su tumba renovando periódicamente la(s) estaca(s) a medida que éstas se iban deteriorando. Esto sería posible si las estacas eran lo suficientemente largas para sobresalir del suelo.

CONCLUSIONES

Aunque la ausencia del cráneo 203 limita las posibilidades de análisis antropológicos y paleopatológicos, podemos deducir lo siguiente de la información proporcionada por las fotografías y documentos relacionados con las excavaciones de 1985-1987 y por la historia y el folclore de la parroquia de Hailuoto:

• La sepultura 203 contenía a un hombre adulto de unos 167-168 cm de estatura que había sido enterrado en Hailuoto probablemente en la segunda mitad del siglo XIV (1308-1435 cal AD).

• El individuo 203 había sido decapitado y se le había enterrado como a un criminal algo apartado de la capilla medieval.

• Dicho individuo padecía de oxicefalia, un tipo bastante raro de craniosinostosis que resulta en una protuberancia cónica en bregma y displasia facial, y que puede afectar el desarrollo intelectual y/o físico.

• Poco se puede decir sobre la capacidad intelectual del individuo 203, pero una posible indicación de trastornos de desarrollo físico podría ser la aparente curvatura anormal de su fémur derecho.

• Es posible que la apariencia extraña causada por la protuberancia cónica en el cráneo del individuo 203 haya contribuido de algún modo a su decapitación.

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• Aunque la combinación de decapitación, estacas y tradiciones de revenants locales podrían utilizarse para identificar a la sepultura 203 como la de una persona considerada como vampiro, la disparidad entre las edades de carbono 14 obtenidas de la tibia del individuo 203 y la estaca atravesando su pecho debilitan ese argumento.

Agradecimientos

Nuestro agradecimiento a Mirette Modarress-Zadeghi por el dibujo de la Figura 6.

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