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M O D U L O 45Hacia la creación de un Estado Soberano
EL ISHUV Y LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
En el verano de 1939, el movimiento sionista y el ishuv judío en Eretz Israelemprendieron la lucha contra la política del Libro Blanco, impuesto por elgobierno británico. Operaban las protestas populares contra la nueva política ylos preparativos y organización de la aliá ilegal, mientras que el Irgún TzvaíLeumí comenzaba a concretar actos de sabotaje contra la presencia británica, yel accionar contra los ataques árabes se multiplicaba.
El ishuv se encontraba nuevamente al borde de la lucha armada. Elprimero de septiembre de 1939 la Wehrmacht invadió Polonia; rápidamenteGran Bretaña le declaró la guerra a la Alemania Nazi.
La posición de la Agencia Judía (Sojnut) unánime frente a la nueva reali-dad fue expresada sin demoras:
“La suerte ya ha sido echada. El gobierno de Su Majestad, hadeclarado la guerra contra la Alemania de Hitler. En esta horafatal el ishuv judío deberá luchar por la defensa de la patria, por lapaz y la seguridad de la nación judía y por la victoria del ImperioBritánico. El Libro Blanco de mayo de 1939 nos ha asestado un durogolpe, pero nos levantaremos con todas nuestras fuerzas para defen -der el derecho del pueblo judío a su tierra; aunque nuestra lucha noesté dirigida contra Inglaterra ni en contra del Imperio Británico laguerra que libra a partir de hoy la Gran Bretaña contra laAlemania Nazi, es nuestra guerra. Toda ayuda que sea posible ofre -cer al ejército británico y al pueblo inglés, será dada con nuestramayor voluntad.
La Dirección de la Agencia Judía
Misrad Hajinuj Vehatarbut, “Lo al magash shel kesef, 1939-1949”
Ben Gurión también expresó la posición del ishuv manifestando:
“Deberemos luchar junto a Inglaterra en esta guerra, como si elLibro Blanco no existiera, y lucharemos contra el Libro Blanco comosi no hubiera guerra”.
Ibídem
Los dirigentes del ishuv proclamaron el reclutamiento de voluntarios alservicio de la patria. En menos de una semana, el número de inscritos había
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superado los 136. 000 hombres y mujeres, casi un tercio de la población judíaen Eretz Israel.
Una gran desilusión generó la respuesta británica al negar a los volunta-rios, enrolarse como una unidad militar judía al servicio del ejército británico.En lugar de escuadrones judíos propusieron crear unidades mixtas, integradaspor judíos y árabes. Estas no serían unidades de combate sino compañías deayuda (excavación), solamente. El enrolamiento debía ser individual.
Los líderes de las institucionesinternacionales presionaron a losingleses para persuadirlos de lanecesidad de permitir a la poblaciónjudía portar armas, como medio dedefensa.
En un encuentro en El Cairoentre Moshé Sharet y el comandantedel alto mando británico, respecto dela posesión de “armas clandestinas”por parte del ishuv, éste comentó: “sihay armas estas están destinadas ala defensa”.
Esta conversación no modificó la política británica respecto del ishuv.
Ley de Distribución de Tierras
En febrero de 1940 se difundieron los reglamentos para “la transferencia detierras en Eretz Israel”, en concordancia con los principios expuestos en el LibroBlanco, tendientes a limitar o impedir la compra de tierras en Eretz Israel porparte de los judíos. La ley fue proclamada a pesar de la oposición a esta políti-ca por parte de Winston Churchill y del Consejo Mandatario de la Liga de lasNaciones, que sostenían que el Libro Blanco contradice las condiciones impues-tas en el mandato sobre Palestina. Los reglamentos dividían a Eretz Israel entres sectores:
a. Zona libre para la compra-venta de tierrasb. Zona de compra de tierras condicionada a la aprobación del comisionado
británicoc. Zona prohibida para la adquisición de tierras por parte de los judíos.
La dirección del ishuv consideró estas medidas como una amenaza a la exis-tencia y desarrollo del Hogar Nacional. Se organizaron protestas masivas en lasprincipales ciudades contra la política británica e incluso algunas pancartasconvocaban a un levantamiento civil. Las protestas continuaron a pesar de ladura represión de la policía británica.
Los diarios locales aparecieron con grandes titulares en negro convocandoa un día de ayuno y oración. En Tel Aviv se organizaron tres movilizacionespopulares simultáneamente, otro tanto sucedió en Haifa. Sesenta heridos y
Mujeres desfilando
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algunos muertos fueron el resultado del enfrentamiento con la policía británicay el ejército británico que acudía en su ayuda.
Un gran debate se desarrolló en las instituciones del ishuv, en relación a lapolítica que debía implementarse respecto de Gran Bretaña.
Según expresó Ben Gurión:
“Debemos oponernos a la política imperante, dado que carece detodo sentido moral. Iniciamos una acción organizada en EEUU pormedio de la prensa, con protestas en medio de esta guerra, a fin degenerar permanentes y grandes disturbios en el país. Preocuparnoso evitar que la causa no apague nuestros pensamientos, expresarnospor todos los medios, dando a conocer la opresión a la que somossometidos los judíos en Eretz Israel. Ahora hay esperanzas para elsionismo, deseamos un sionismo combativo, no un sionismo de pala -bras... No cesaremos con nuestra opresión continua, organizada, queno retrocede frente a la utilización de la fuerza; contra esta política,contra todo ataque nuevo, contra todo nuevo intento de transformaresta tierra en una tierra de exilio para el pueblo judío”.
Ibídem
Gran parte de los participantes en el debate se opusieron a la posturaextremista de Ben Gurión. Moshé Sharet se expuso en contra afirmando:
“Hasta que esto no perjudique a Inglaterra, entonces el daño que nosocasionará será tan grande que no podremos sostenerlo”.
Ibídem
Eliezer Kaplan, agregó:
“Esta nueva política propuesta es el camino más corto, no del éxitosino de la desaparición del emprendimiento judío en nuestra tierra”.
Ibídem
Pinjas Rutenberg sostuvo:
“Este camino es peligroso, pues le tiende la mano al gobierno enemi -go para hacer de nosotros a su antojo... El gobierno (británico)podrá así conducirse de modo tal que no quedará de nosotros rastroni sobrevivientes”.
Ibídem
La opinión de Ben Gurión fue apoyada por la minoría. La decisión tomadapor la dirección de la Sojnut fue que se deben oponer a toda violación de losderechos del ishuv, cuidando los límites aceptables. Ben Gurión presentó su
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renuncia como protesta, pero no fue aceptada. En las organizaciones clandesti-nas, como el Etzel, el debate se endureció cuando se decidió suspender la lucha.Mientras durara la guerra contra el enemigo nazi, deberían colaborar conInglaterra. Un sector del grupo Etzel se desprendió del mismo creando el grupoLeji (Lojamei Jeyrut Israel), combatientes por la liberación de Israel, lideradospor Abraham Stern “Iair”, sostenían que Gran Bretaña es nuestra principalenemiga del ishuv, y contra ella debemos apuntar nuestras armas.
La lucha en dos frentes
A fines de septiembre de 1939, tras la ocupación de Polonia, hubo unpequeño período en Europa donde la tensión pareció detenerse. El ishuv con-sideró entonces como lo expuso David Ben Gurión en febrero de 1940: “Paranosotros el Libro Blanco antecede a todo lo demás”.
El ishuv comenzó a fortalecer su lucha en dos áreas:• Colonización y compra de tierras• La Haapalá, inmigración clandestina.
La política de la ley de tierras tenía un claro objetivo, limitar los asen-tamientos judíos. Contra esta política debía luchar el ishuv. El Keren Kaiemetaprovechó cualquier subterfugio o artificio que pudiera haber en la ley paraadquirir tierras, incluso en zonas prohibidas. El gobierno británico por su parte,trató por todos los medios de impedir este accionar.
Los logros del ishuv en el período de ocho años comprendido entre ladifusión de la reglamentación hasta la creación del Estado de Israel (1948)alcanzaron la compra de 245. 000 dunam. A pesar del logro relativo, el éxito fuegrande debido a que el 12% de los nuevos asentamientos judíos (16 ishuvímnuevos) se encontraban en las zonas prohibidas o limitadas a la compra porparte de lo judíos.
El principal esfuerzo estuvo centrado en la Haapalá. Al comienzo de la gue-rra, la dirigencia judía disentía sobre las ventajas o desventajas que la mismapodía ocasionar en las relaciones diplomáticas con el gobierno británico y suefecto sobre la aliá legal. Pero las limitaciones ligadas a la aliá sumadas a lasituación desesperante de las masas judías en Europa, llevaron a adoptar otrapostura.
La política propuesta por David Ben Gurión sostenía que la llegada de losinmigrantes debía ser defendida con el uso de las armas. Esta postura fuerechazada por los hombres del “Mosad Haaliá”, esta organización dirigida porShaul Abigur líder de la Haganá, funcionaba en coordinación con el exterior conbase en París.
Desde el comienzo de la guerra, la política británica respecto de la inmi-gración se endureció. El primer ministro británico, Ramsay Mac Donald, infor-mó que los inmigrantes ilegales serían detenidos en campos de detención, cercade Atlit. En los mese de octubre de 1939 y marzo de 1940, no se entregaron per-misos de inmigración nuevos. Los británicos habían clausurado los puertos del
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país en el preciso momento en que la hecatombe devoraba a los judíos deEuropa.
El número infinitesimal de inmigrantescuya entrada se permitía de acuerdo con elprograma del Libro Blanco era de milquinientas almas por mes.
La inmigración ilegal se convirtió enuna necesidad inminente. La Haganá com-batía las limitaciones de la inmigraciónhaciendo entrar clandestinamente a travésde la frontera del Líbano o de Siria.
En esas operaciones colaborabanmuchos contrabandistas árabes a quienesles pagaban por cabeza su cargamentohumano. Kfar Guiladi, un Kibutz de la fron-tera del Líbano, era el punto de entrada aEretz Israel. Desde 1934 también trajeroninmigrantes ilegales en barco. Esta tareaera más peligrosa aún, porque involucrabaa un número mucho mayor de personas almismo tiempo, y más costosa ya que obliga-ba a comprar y equipar barcos que losbritánicos confiscaban cuando lograbaninterceptarlos.
El primer barco que llegó a las costas de Eretz Israel fue en 1934, el barcoVelos, que traía a jalutzím de Polonia.
La mayoría de ellos vinieron por mar, a menudo en naves que no reunier-an las condiciones para navegar; algunos ensayaron las rutas terrestres, via-jando a menudo a pie y demorando muchos meses. Los barcos con inmigrantesilegales costeaban Palestina durante semanas enteras, buscando una oportu-nidad de atacar. Temiendo que los deportaran, muchos inmigrantes destruíansus documentos de identificación. Así, los deportados del “Atlantic” fueron envi-ados a la isla Mauricio del Océano Indico. Esas 1600 personas vivieron en lascondiciones más primitivas durante toda la guerra.
La peor de las tragedias fue la del “Struma”. Yate de unas 200 toneladas,llevaba a bordo a 769 judíos, entre ellos niños cuyas edades fluctuaban entre los10 y los 16 años. Con toda esa gente angustiosamente hacinada a bordo, elpequeño barco llegó a Estambul a mediados de diciembre de 1941. Allí empezóla tragedia. La autoridades turcas declararon que no les permitirían a los inmi-grantes quedarse en Turquía, mientras que los ingleses insistían en que no lespermitirían entrar en Palestina. Después de largas negociaciones, Inglaterraconsintió en admitir a los niños en Palestina. Pero los turcos decidieron enviarel barco al Mar Negro. El 24 de febrero, llegó la noticia de que el Struma sehabía hundido, torpedeado probablemente por un submarino nazi. De todos suspasajeros sólo se salvó una.
Sobrevivientes de Buchenwald
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Se hicieron llegar vehementes protestas a Palestina y cundieron por toda laextensión del mundo libre. Inglaterra presentó sus excusas y expresó su pesarpor la suerte de los refugiados. Pero no se tomaron medidas para atenuar lasrestricciones inmigratorias. El ministro de colonias inglés expresó así las con-dolencias de su gobierno:
“El gobierno de Su Majestad confía positivamente en que no volveráa ocurrir una tragedia semejante pero no está a su alcance, entre lospeligros e incertidumbres de la guerra, dar ninguna garantía, nopuede tomar ninguna medida susceptible de debilitar la políticaexistente con respecto a la inmigración legal a Palestina en vista delos problemas más amplios que están en juego”.
Junio 1934- Llega el primer barco veloz con 350 JalutzímAgosto 1934- Llega el primer barco del movimiento revisionista con 117 inmi -grantesAbril 1937- Se intensifica la aliá del movimiento revisionistaEnero 1938- Se reanuda la aliá del movimiento Hejalutz y de la HaganáPrimavera 1939- Se crea el Mosad Aliá Bet1º de septiembre de 1939- Comienza la Segunda Guerra Mundial. La aliá con -tinua. 25 de noviembre de 1940- Hundimiento del barco PatriaDiciembre 1940- Deportación británica a la isla Mauricio en el océano Indico 23 de febrero de 1942- Hundimiento del barco Sturma. En el Mar Negro con768 refugiados. Solo uno se salvó.Verano 1943- Las actividades se reanudan. El centro de operaciones se trasla -da a Estambul. Verano 1945- Comienza la Brijá (huida) de EuropaAgosto 1945- Se reanudan las operaciones marítimas. El Mosad Aliá Bet envió19 barcos con 12. 000 refugiadosAgosto 1946- Los británicos deportan refugiados a Chipre en dos años. Elnúmero asciende a 50. 000Verano 1947- Salida del barco Éxodo a EuropaAgosto-Septiembre 1947- aliá Knaf- Hapalá vía aérea. Se realizaron dos vuelosdesde Irak y uno desde Italia. Llevando 150 refugiados en total. Diciembre 1947- 7500 refugiados son deportados a Chipre. Enero – Abril 1948- A pesar de estar próximo el fin del Mandato Británico. Losrefugiados son deportados a Chipre. 24 de abril de 1948- El último barco de refugiados Najshón capturado por losbritánicos Enero 1949- Los británicos liberan a los últimos deportados de Chipre que lle -gan a Israel.
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El Palmaj – Fuerzas de ChoqueEntre los años 1941-1942 se intensificaron las acciones conjuntas entre
el ishuv y el gobierno británico, debido al recrudecimiento del conflicto en elnorte de Africa (Ver módulo 40 pag. 389).
El general Rommel, a cargo del Africa Korps amenazaba con conquistarEgipto y Eretz Israel.
Al estallar la Segunda Guerra Mundial, en 1939, Egipto rompió relacionesdiplomáticas con Alemania, pero no le declaró la guerra.
Un considerable número de tropas británicas fueron enviadas a Egipto y selibró entre 1940 y 1942. Una intensa campaña contra italianos en Libia, que erauna posesión italiana, y alemanes cuyo principal objetivo era el control delCanal de Suez. Cuando parecía que los alemanes iban a triunfar en el Africa delnorte, los sectores nacionalistas egipcios expresaron su simpatía con Alemania.Los británicos enviaron fuerzas para aplastar el movimiento y lograron sofo-carlo. Simultáneamente en Siria y Líbano la influencia alemana crecía comoconsecuencia de la derrota de Francia, ocupada en junio de 1940, y la transfe-rencia de la administración de los territorios bajo mandato al gobierno colabo-racionista de Vichy.
Fue en este contexto que un sector de la Haganá decidió crear un brazoarmado, el Palmaj –Plugot Majatz- fuerzas de choque. Las funciones del Palmajcontra el enemigo alemán y sus colaboradores se desarrollarían en dos situa-ciones especiales:
a- Acciones no sistemáticasb- Acciones contra el enemigo (sistemáticas) en este caso los opera -tivos se desplegarán en pequeñas unidades independientes bajo lasórdenes operativas centrales. Los objetivos serían pequeñasunidades enemigas de guardias motorizadas o a caballo, unidadesde paracaidistas. El terreno en el que se desarrollan las acciones será la retaguardiaenemiga, sus rutas y comunicaciones, depósitos de armas y muni -ciones, campos de aterrizaje, etc. Las acciones de exposición y sub -versión serán parte importante de este accionar.
(Resoluciones del comando de la Haganá 14 y 15 de mayo de 1941)
Tan pronto como llegaron las resoluciones comenzó el reclutamiento devoluntarios del Palmaj. La mayor proporción de voluntarios provenía de lasmasas trabajadoras y en especial de los jóvenes del movimiento kibutziano.
Los campamentos del Palmaj, se encontraban próximos a los kibutzim, porlo que los voluntarios alternaban su tiempo entre el trabajo en el kibutz y eladiestramiento militar.
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Tojnit Hatzafón- El proyecto del norteAnte el peligro inminente de un avance nazi sobre Eretz Israel, la Haganá
preparó las bases para organizar un proyecto del norte en donde operaban lasfuerzas de Vichy en Siria y Líbano. Así se expresó años más tarde Igal Alón:
“Los lineamientos generales definidos brevemente fueron: Haifa y elgolfo, el Karmel y la cadena de ciudades del Galil en el valle deIzreel se transformaron en la zona de defensa y choque. Ese terrenoamplio, contaba con condiciones topográficas propicias para ladefensa, especialmente contra un ejército formal y disciplinado quese entorpece en una zona montañosa. La concentración de los judíosdel país en esa franja bajo un régimen militar amplio, unido a losgrupos que situados frente a esa línea defensiva podrían frenar orevertir el avance enemigo”.
Extraido de Guilad, libro del Palmaj
Otro testimonio de Itzjak Sadéh decía:
“Pensamos luchar en toda porción de tierra... Nuestra guerra podríaser una expresión entre la autodefensa de Stalingrado y la autode -fensa del Ghetto de Varsovia”.
Los británicos por su parte apoyaron la organización del ishuv para ladefensa proveyendo de armas y entrenadores expertos en sabotaje, patrullaje yfrancotiradores, etc. Fue esta la etapa de mayor actividad conjunta entre elejército británico y el ishuv y sus organizaciones de seguridad. A fines de 1942,el general Montgomery a cargo del octavo regimiento replegó hacia el oeste algeneral Rommel. No obstante la cooperación con los británicos no cesó.
A pesar de la resistencia de los ingleses de alistar voluntarios judíos más de30. 000 jóvenes fueron reclutados en los batallones de infantería, ingeniería,abastecimiento, exploración, aeronáutica, marina, comunicaciones y entre ellas3150 mujeres.
El Plan Biltmore
Con el fin de darle vigencia al ideal sionista de creación de un Estado Judío,y a los efectos de transformarlo en la línea política oficial del movimiento sio-nista, convocaron Jaim Weitzmann y David Ben Gurión a una asamblea espe-cial de la Federación Sionista Norteamericana que se reunió en el HotelBiltmore de Nueva York.
Casi seiscientos representantes participaron de la asamblea, llevada a caboen mayo de 1942.
Las resoluciones adoptadas en esa oportunidad son conocidas como el PlanBiltmore y establecían:
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“El nuevo orden mundial que se impondrá con el triunfo de los alia -dos, sobre la base de la paz, la justicia y la igualdad, no será posiblesi no se resuelve definitivamente el problema judío, y la cuestiónnacional del pueblo judío.a- Abrir las puertas de Eretz Israel a la aliá (inmigración judía).b- Transferir a la Agencia Judía la responsabilidad de la aliá, acre -centando su autoridad para el crecimiento del país, sus institu -ciones y el desarrollo de las vastas tierras aún no habitadas (coloni -zadas).c- Orientar a Eretz Israel como un Commonwelt judío sobre la basede la nueva estructura democrática mundial.
Lo al magash shel kesef. 1939-1949. Editorial Tal
En ese momento las federacionessionistas inglesas canadienses ysudafricanas entre otras, aceptaron elplan: hacia fines de año fue aprobadoen Jerusalem por el comité obrero sio-nista quedando así el proyecto comoplan oficial del movimiento sionista.
Esta decisión fue el primer pasopara el establecimiento de la luchapolítica contra el Libro Blanco.
Esta línea oficial mayoritaria sus-tentó el esfuerzo realizado con laHaapalá y la colonización. No obstanteno todos los sectores del ishuv, apo-yaron esta política.
Como ya hemos visto, en 1940 una rama del Etzel se separó al mando deAbraham Stern, Iair, creando el grupo Leji. Estos sostenían criterios polémicos.Para este sector, Gran Bretaña era considerada la enemiga número uno delpueblo judío. Durante la Guerra este líder “Iair” mantuvo contactos con repre-sentantes de Italia y el Tercer Reich en el Líbano. Estaba dispuesto a celebrarun tratado sobre la base de:
a- Expulsar a los ingleses de Eretz Israel. b- Crear un Estado Judío independiente en Eretz Israel. c- Concentrar a los judíos de Europa en el nuevo estado.
El resultado de los contactos entre las partes fracasó pues no se llegó aningún acuerdo no obstante el grupo Leji fue acusado de colaborar con losfascistas y los nazis, prohibiéndosele toda participación en las instituciones delishuv.
Para solventar los costos organizativos creó la dirigencia del Leji, gruposllamados Hiksim, que asaltaban bancos. Muchos de sus integrantes murieronen enfrentamientos con la policía. Su accionar despertó duras críticas en elishuv.
Asamblea especial de la Federación SionistaNorteamericana en Nueva York. 1942.
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Paralelamente, el grupo Lejiorganizó varias acciones terroristascontra oficiales policiales y la policíasecreta inglesa.
Como resultado de estas accionesfueron también asesinados varios ofi-ciales judíos.
La policía británica emprendióuna fuerte represión contra el grupo,muchos de sus miembros fueronarrestados y muertos a mansalva. Ell í d e r, Iair, fue encontrado por lapolicía británica en su refugio en unacasa ubicada al este de Tel Aviv. Enfebrero de 1942 fue capturado y eje-cutado en el lugar.
Ante la muerte de su líder y ladetención de muchos de sus miem-bros el grupo se desarmó por lomenos durante dos años.
El Irgún Tzvaí Leumí “Etzel”había recibido un duro golpe con laseparación de Iair y sus hombres. Lamuerte de su líder David Raziel enIrak se sumó al descontento.
En líneas generales continuó elEtzel con su política de colaboracióncon los británicos. La división deinformaciones del grupo mantuvovínculos estrechos con el serviciosecreto británico y muchos de sus miembros se enrolaron al ejército.
En mayo de 1942 llegó a Eretz Israel quien fuera el representante del movi-miento Betar en Polonia, Menajem Beguin. Tras su llegada fue electo unán-imemente en 1943 como líder del grupo Etzel.
El ishuv durante la ShoáEn 1942, al finalizar la batalla del Alamein, comenzaron a llegar a Eretz Israel
noticias respecto del genocidio judío en Europa. Ya eran conocidos los asesinatosperpetrados por los Einzatzgruppen pero la implementación de la Solución Final ymás aún el alcance de los sucesos se conocieron recién a fines de 1942.
La Haganá en Eretz Israel y en el mundo comenzó rápidamente a utilizartodos los medios posibles para conseguir el apoyo de los aliados. Pero los planesde exterminio de los nazis habían sido trazados en gran escala, comparadas conellos, las actividades de socorro emprendidas por las organizaciones judías,sobre todo la Agencia Judía, parecían de un alcance muy limitado.
MenajemBeguinPrimer Ministro deIsrael, líder delsionismo – revi -sionista, coman -dante del Etzel. Nació en Polonia,estudió leyes en Varsovia. Fuedetenido por los soviéticos cuandoocuparon Viena. Fue condenado aocho años de prisión y a trabajosforzados, por su actividad sionista.Al crearse el Estado, el Irgún depusolas armas y se incorporó al ejércitode defensa de Israel. Fue fundadordel partido “Jerut”. En 1965 el Jerutformó un bloque parlamentario conel partido liberal. En 1967 fue unode los promotores de la creación deun gobierno de Unión Nacional. Fueministro sin cartera hasta 1970. En1977, el bloque encabezado por el(Likud) triunfó en las elecciones a laKneset. Firmó el Acuerdo de Paz conel presidente de Egipto Anuar Sadatcon quien recibió en 1978 el PremioNobel de la Paz.
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Los aliados permanecieron pasivos ante la suerte de los judíos. Cuando en1943, Estados Unidos estableció un comité para las víctimas de la guerra. Yaera demasiado tarde. Cuando un vocero de la comunidad judía húngara se pre-sentó en El Cairo para negociar con los ingleses alguna forma de rescatar a losjudíos, las autoridades británicas lo encarcelaron.
Antes aún, en febrero de 1941, el nuevo ministro de las Colonias, LordMoyne, le había escrito a Weizmann rechazando su apasionado ruego de que “sele concediera inmediatamente a los judíos rumanos una importante cuota decertificados de inmigración”. “Rumania es considerada un territorio ocupadopor el enemigo –escribió Lord Moyne-. La maquinaria para verificar la buena fede los solicitantes ha desaparecido”.
Weizmann y sus colegas sionistas se mostraron infatigables en sus esfuer-zos por interrumpir el silencio público existente sobre el tema de la hecatombeen Europa.
El 1º de marzo de 1943, subió a una tribuna del Madison Square Garden deNueva York para hacerle llegar al mundo una resonante nota de angustia:
“Dos millones de judíos han sido exterminados ya. El mundo ya nopuede alegar que esos espantosos hechos son desconocidos o no estánconfirmados. En este momento, las expresiones de solidaridad, sintentativas simultáneas de emprender actos de socorro, se conviertenen una vacía burla en los oídos de los moribundos. A las democra -cias se les plantea un claro deber. Que negocien con Alemania porintermedio de países neutrales. Que se destinen lugares de asilo enlos vastos territorios de las Naciones Unidas donde les brinden refu -gio a los que huyen de un asesinato inminente. Que se les abran laspuertas de Palestina a todos los que puedan llegar a las riberas dela patria judía. La comunidad judía de Palestina acogerá con ale -gría y dándole las gracias al Señor a todos los liberados de lasmanos nazis”.
El rescate de los judíos y los esfuerzos para brindarles socorro seemprendieron en varios frentes. En 1939 y 1940, Rusia trasladó a 350.000judíos polacos, a quienes incorporara con la partición de 1939, a la desoladafrontera asiática de Persia. En su mayoría, esos hombres murieron de frío y dehambre. Los sobrevivientes llegaron a pequeñas poblaciones situadas a lo largode la frontera persa, donde se esforzaron en fundar pueblos propios. Vino en susocorro en 1942 un miembro del comité conjunto de Distribución, quien esta-bleció un servicio de ayuda para esos judíos que se morían de hambre.
Después de la guerra, la mayoría de ellos huyeron, a través de Persia o dePolonia y de los campamentos de deportados y se dirigieron a Eretz Israel.
La Brigada JudíaA pesar de las acciones mancomunadas del ishuv con los británicos, la
oposición a la creación de un ejército internacional judío dentro de las filasinglesas persistió.
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Todos los grupos combatientes que habían surgido desde el comienzo de laguerra, se habían incorporado a alguna unidad británica regular. Recién enagosto de 1944 los esfuerzos de la Sojnut tuvieron éxito debido a la intervenciónpersonal de W. Churchill.
En septiembre de 1944 se difundieron oficialmente las disposiciones delForeign Office:
El gobierno de su Majestad decidió responder al pedido de la agenciajudía limitada que participara activamente en las acciones militares.
La Brigada de Infantería estaba integrada por escuadrones judíos delRegimiento Eretz – Israelí. A tal efecto se comenzaba el reclutamiento y eldebido entrenamiento, antes de ser enviados a sus respectivas misivas.
Así despidió David Ben Gurión al primer escuadrón que salió de Haifa:
No abandonan la Patria, sino que la llevan consigo... Una doblemisión ha recaído sobre ustedes: doblegar al enemigo y destruirlopor un lado, pero además deberán llevar la redención al millón omillón y medio de judíos que sobreviven en Europa, transmitirles laesperanza de libertad, el honor nacional y la dignidad humana.
El Brigadier Levi Binamín, judío canadiense y militar profesional, fue nom-brado como jefe de la Brigada. Reunidos en el puerto de Alejandría en Egiptopartieron rumbo a Italia, donde tras recibir tres meses de entrenamiento duroe intenso, fueron enviados al frente del combate.
Tras cumplir con éxito el primer objetivo, la Brigada Judía se abocó alsegundo gran objetivo: la ayuda a los sobrevivientes de la Europa arrasada.
Los paracaidistasCon el comienzo de la Guerra enviados del ishuv actuaron en los países
Balcánicos y en Rumania. Los jóvenes enviados eran miembros del MosadHaaliá que en forma clandestina se ocupaban de actividades de esclarecimien-to y organización y concreción de la aliá.
Al recibir el ishuv las primeras noticias de la Shoá que se llevaba a cabo enEuropa, surgió la idea de enviar un grupo especial con el fin de organizar a lascomunidades judías de los países Balcánicos para la resistencia armada, laautodefensa y el rescate.
Luego de varias postergaciones, los británicos aceptaron en forma parcialla unidad enviada sería más reducida y cumpliría misiones de enlace entre losgrupos de partisanos combatientes contra el nazismo. Los ingleses daban prio-ridad a la guerra contra los nazis y no se interesaron específicamente en salvarjudíos.
Treinta y dos paracaidistas fueron enviados al otro lado de la línea enemi-ga en los Balcanes y en el centro de Europa, entre ellos tres mujeres, una deellas Jana Senesh, fue capturada y ejecutada junto con seis paracaidistas; otros
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cinco cayeron en poder del enemigo, pero lograron sobrevivir, los restantes con-tinuaron con sus misiones dentro de la línea enemiga hasta la liberación.
LA BRIJÁ – LA HUIDA
Tras la liberación de Europa delRégimen Nazi, comenzó un enormemovimiento de pueblos desplazadosque regresaban a sus hogares. Casidiez millones de personas, sometidosa trabajo esclavo y prisioneros deguerra emprendieron el retorno asus lugares de origen. La mayoríasentía que la redención había llega-do, no fue así para los judíos. Los judíos polacos sobrevivientes de los camposde exterminio, o refugiados en la URSS, que regresaban a sus hogares, seencontraban que sus casas habían sido ocupadas por extraños, incluso en algu-nas ciudades de Polonia la hostilidad frente a los sobrevivientes terminó enpogroms y violencia descomunal (ver modulo 40).
Frente a la multiplicación de las manifestaciones antisemitas, sobre la basede los recuerdos de la Shoá, despertó en muchos sobrevivientes la conciencia,que aquellas tierras hostiles no podrían volver a ser sus hogares.
Los partizanos y los sobrevivientes de los combatientes de los ghettos, lig-ados en su mayoría a los movimientos juveniles sionistas, habían llegado a estaconclusión mucho antes. Surgió así en forma casi espontánea, un movimientode emigración masiva. Pero las fronteras de los países estaban cerradas por dis-posición de las potencias aliadas de ocupación (EEUU, Francia, Gran Bretaña,URSS).
La política fijada establecía que toda persona podía regresar a su tierranatal, pero se prohibía el traslado a otros países; las oportunidades de inmi-gración eran escasas, ningún país ni siquiera EEUU, estaba dispuesto a recibirjudíos; miles de ellos se vieron obligados a quedarse en campos de refugiados ode internación y en hogares provisorios. Israel estaba cerrada. Frente a estasituación comenzó el movimiento de la Brijá - la huida.
Miles de sobrevivientes judíos comenzaron a cruzar en forma clandestinalas fronteras que los llevaría a la libertad. El destino elegido entre 1945 – 1947por más de cien mil judíos fue Eretz Israel. Miles de ellos salidos de Rumania,Hungría, Checoslovaquia, Austria, URSS, etc.
Las rutas de escape unían Polonia con Rumania, luego Alemania occiden-tal. Muchos fueron ayudados por expertos que a cambio de dinero estaban dis-puestos a cruzarlos por las fronteras.
La organización de la Brijá estuvo a cargo de Shaúl Avigur, creador delMosad – Haaliá (organización de inmigración clandestina).
En sus derroteros por el Norte de Africa y también por Italia, las unidadesjudías se encontraban con sobrevivientes de comunidades judías que pasaban
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por allí. Los soldados judíos de las Brigadas, emprendieron diferentes roles, yasea crear escuelas precarias donde enseñaban hebreo moderno, instalar centrospara albergar huérfanos, “Hajsharot Noar” centros de entrenamiento para losjóvenes olím, centros recreativos y culturales para jóvenes, sucursales de laHistadrut Haovdim Hatzionit (Confederación Obrera Sionista).
La Brigada se estableció en la aldea Trebisio, situada en un punto triparti-to entre Italia, Austria y Yugoslavia. De allí los hombres de la Brigada sedirigían a todas partes para socorrer a sus hermanos sobrevivientes.
Agitación política o rebelión armada
La concreción de un proyecto políticoEl movimiento sionista comprendió que la política de colaboración con el
gobierno británico, sobre la base del Mandato, implementada a la par de lalucha contra la política del Libro Blanco, había llegado a un callejón sin salida.Era necesario encontrar una nueva estrategia para el sostenimiento y desarro-llo del Hogar Nacional Judío en Eretz Israel. Así lo expresaba David BenGurión:
“Necesitamos una brújula política que oriente nuestros pasos en laprofusa niebla en la que estamos sumergidos (por la guerra). No sabemos como sobrevendrán las cosas, pero necesitamos una luzen el horizonte histórico que nos muestre el camino en situacionescomplejas como las que nos aguardan. Con la guía de esa brújulapolítica nos orientaremos hacia la creación de un Estado Judío enEretz Israel. (Días mas tarde agregó)... La primera Guerra Mundial de 1914-1918,nos trajo la Declaración Balfour, esta vez nos cabe a nosotros llegaral Estado Judío”.
ibídem
La Rebelión
El nombramiento de Menajem Beguin produjo un giro violento en la políti-ca del Etzel respecto del gobierno británico.
Ya en Polonia, era conocida su posición de oponerse a la política británica,que había aprendido de su maestro Zeev Jabotinsky. Con este espíritu condujolos hilos del Etzel.
En enero de 1944, tras organizar una nueva dirigencia en el grupo, difundióel siguiente mensaje:
“ Nos encontramos en el tramo final de la guerra, estamos frente ala gran definición histórica de nuestro destino para las futurasgeneraciones.
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El cese de hostilidades, como se estableció al comienzode la guerra, benefició al gobierno británico. Las autoridades judías no actuaron ni con lealtad,ni con renunciamientos ni con sacrificios. Ellosalcanzaron sus objetivos: la desaparición del sionis -mo oficial. Han pasado cuatro años y todas las espe -ranzas, que latían en nuestros corazones en 1939, sehan perdido sin recuerdo. No hemos logrado un sta -tus internacional, no fue creado un ejército judío, lospuertos de Eretz Israel no fueron abiertos. El gobierno británico, concretó su traición sobre la nación judía yno hay ninguna base moral para su permanencia en Eretz Israel. Hemos arribado a la única conclusión posible: No volveremos adeponer las armas. Entre el pueblo y la juventud judía y la adminis -tración británica en Eretz Israel, que encierra a nuestros hermanosen manos de Hitler, sólo habrá guerra, guerra hasta el fin. ¡Hebreos! La creación de un gobierno judío y la realización de susobjetivos – ese es el único camino para salvar nuestra existencia ynuestro honor. No hay otro camino – Lucharemos - cada judío de laPatria luchará – El Dios de Israel, Dios de los profetas, acudirá ennuestra ayuda. No hay retorno - Liberación o Muerte!!!
Menajen Beguin, Vamajteret, 1-2
Consigna del Trabajo
Reflexiona y responde:a. ¿Cuál es la crítica de Beguin al Mandato Británico?b. ¿Cuáles son las semejanzas y diferencias entre el Plan Biltimore y laProclama de Beguin.
La proclama fue recibida con recelos. Incluso el gobierno británico no le diotrascendencia.
Pero pronto se descubrió que no era una simple advertencia. En los mesessucesivos a la proclama, los hombres del Etzel, no cesaron de realizar ataquesterroristas contra objetivos británicos. Fueron atacadas las oficinas de la aliáoficial, la oficina de impuestos, edificios de espionaje británicos en Iafo,Jerusalem, Haifa. Volaron las estaciones de comunicaciones oficiales enRamala, las oficinas de la policía de Beit Dagan, KalKilia, Haifa y otros.
A pesar de que se cuidaba de no afectar a los civiles, en realidad cayeronvíctimas de ambos lados. El debate en el seno del ishuv se había instalado defi-nitivamente.
Escudo de Israel
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“ La Seasson”
Una gran mayoría en el ishuv se oponía al accionar del Etzel y más aún aldel Leji.
Los dirigentes judíos sabían que no podían jugar a dos puntas: colaborarcon los británicos, enrolándose en sus filas y pidiendo su apoyo político y almismo tiempo declarar una rebelión armada en su contra en Eretz Israel.
Algunos líderes de la Haganá se encontraron en secreto con MenajemBeguin, con la esperanza de convencerlos de que cesara con sus acciones terro-ristas, ya que entendían que éstas perjudicaban al Ishuv. Los líderes sugirieronque existían tratativas con Gran Bretaña respecto de la cuestión de Eretz Israelya que Churchill personalmente había prometido en 1943 a Weizmann, quetras la guerra se creará un Estado Judío. Además los líderes de la Haganá enfa-tizaron su convicción respecto de la unidad nacional y el respeto a la conduccióndemocráticamente elegida por el Ishuv.
Beguin respondió que sólo acataría la autoridad de Ben Gurión y las insti-tuciones del ishuv, bajo la condición que se incentivara la lucha armada contrala presencia británica. Tras el fracaso de la gestión un grave suceso conmovióal ishuv: Lord Moine, el Ministro Británico de asuntos de Medio Oriente, habíasido asesinado.
La política antisionista implementada por Lord Moine, lo convirtió en elblanco del Leji. En noviembre de 1944 al regresar a su hotel en el Cairo, dosmiembros del Leji lo interceptaron y lo mataron
El primer Ministro británico Churchill, de quien Moine era su íntimoamigo, reaccionó duramente frente al hecho y advirtió:
“ Si hay esperanzas alguna para el futuro del Sionismo, es sobre labase que estos actos alevosos cesen definitivamente. ”
También la población del ishuv reaccionó duramente. Las autoridadesemprendieron entonces acciones contra el “Etzel” y el “Leji”. Una lista de varioscientos de miembros de estos grupos fue entregada a la policía británica.Algunos de sus integrantes fueron detenidos por miembros de la Haganá y otrosfueron delatados. Como consecuencia de la “ Seasson”, así se llamó a la acciónde detención, unos 300 miembros del Irgún fueron apresados, frenándose lasacciones terroristas temporalmente hasta el fin de la guerra en 1945.
Fin de la Segunda Guerra Mundial
A pesar del lema “la doble batalla”, en la realidad la lucha contra el LibroBlanco había quedado en segundo plano. El mayor esfuerzo estuvo orientadohacia la guerra y el enemigo nazi, junto a Gran Bretaña y los aliados.
El ishuv y el movimiento sionista, esperaban la recompensa por el esfuer-
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zo realizado: la anulación del Libro Blanco y la Creación del Estado Judío enEretz Israel.
Las promesas habían sido dadas durante los años de la guerra, ahora sólorestaba compartirlas.
Cuando concluyó la guerra, la situación de los judíos, tanto en EretzIsrael como fuera de ella, era desesperanzada, según Jaim Weizmann, quien,en 1945, le escribió a Churchill, poco antes de la derrota de éste en las elec-ciones:
“La situación de los judíos en los países liberados es desesperada. Lasituación política en Palestina se está volviendo insostenible. Y tam -bién lo es mi situación personal como presidente de la AgenciaJudía. Es hora de eliminar el Libro Blanco, de abrir las puertas dePalestina y de proclamar el Estado Judío. ”
La breve respuesta de Churchill del 9 de junio de 1945, que no facilitaba ennada las cosas, hizo más desesperada aún la situación:
“Estimado Sr. Weizmann: He recibido su carta del 22 de mayo, que incluye un
memorándum en nombre de la Agencia Judía para Palestina. Creoque no se podrá examinar definitivamente el asunto hasta que losaliados victoriosos estén sentados definitivamente ante la mesa de laPaz. ”
Weizmann había depositado infinitas esperanzas y esfuerzos en Churchilly Roosevelt. En el verano de 1945, Roosevelt había muerto y Churchill fuedesplazado del poder. Ambos habían tenido indiscutibles facultades paraencauzar la causa judía por el camino del consuelo y la recuperación. Ni el unoni el otro habían usado esas facultades. Cuando desaparecieron del escenarioque dominaran durante seis años, el pueblo judío estaba en el nivel más bajo desus vicisitudes históricas, aturdido por la angustia, omitido, repudiado, sin vis-lumbrar ninguna luz en su camino.
El nuevo gabinete laborista debía estar comprometido a ejecutar un pro-grama prosionista. Su política, tal como la formulara Hugh Dalton apenas unosmeses antes, había declarado valientemente:
“Sin duda, no hay esperanza ni sentido en un Hogar NacionalJudío, a menos que estemos dispuestos a permitir que los judíos, si lodesean, entren a ese diminuto país en tal número que se conviertanen mayoría. Esto podía afirmarse con toda energía antes de la gue -rra. Puede afirmarse irrefutablemente ahora, después de las abomi -nables atrocidades del frío y calculado plan nazi de matar a todoslos judíos de Europa... ”
Esta afirmación proponía luego un cambio voluntario de población:
“ Que se estimule a los árabes a salir mientras los judíos entran. ”
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LA POLÍTICA BRITÁNICA EN MEDIO ORIENTE
Al asumir el nuevo gobierno laborista, tras la derrota de Churchill prontose evidenció que la posición de Gran Bretaña respecto de la cuestión de EretzIsrael, tenía múltiples facetas.
La importancia histórica de la región de Medio Oriente para Gran Bretaña,provenía de ser éste considerado lugar estratégico para las comunicaciones delos terroristas del Imperio con el lejano Oriente, especialmente la India, a estose sumaba el hecho que durante las dos Guerras Mundiales y especialmentedurante la Segunda, fueron descubiertos vastas extensiones de zonas petrole-ras. Gran Bretaña debía pues decidir como conservar su hegemonía en laregión. Estaba claro que no podía seguir gobernando con el mismo estilo impe-rialista antiguo, que el nuevo orden ya no aceptaba.
Sobre esta base, implementó el gobierno británico una política que intenta-ba fortalecer su influencia sobre los líderes del mundo árabe, mediante lacreación de estados árabes independientes pero ligados políticos y comercial-mente a Gran Bretaña.
Como parte de esta política fue creado al final de la guerra una organiza-ción conocida como la “Liga Árabe”; integrada desde su creación por siete esta-dos: Irak, Egipto, Arabia Saudita, Siria, Transjordania, Líbano y Yemen.
NEOCOLONIALISMOEs un término acuñado para explicar el tipo de relaciones económicas instauradasentre los antiguos países colonizados y las grandes potencias industrias especial -mente Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia. Muchos países del Tercer Mundo, alcanzaron la independencia en los años posteri -ores a la Primera y la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo están muy lejos dehaber logrado la plena soberanía económica. La dependencia económica entraña severas restricciones de la soberanía del país querecibe la ayuda de la potencia:Limitaciones en la autonomía de la política económica nacional, dado que los planesde desarrollo, por ejemplo, no siempre tienen en cuenta los intereses del país encuestión sino también los de la potencia dominante. “Reducida a nula participación en las decisiones de la política exterior, generando elfenómeno de la “satelización” declarada o encubierta. • Predominio de las compañías multinacionales o transnacionales, en la explotación
y el comercio de las riquezas naturales de los países subdesarrollados. • Producción supeditada en gran medida a las necesidades de materias primas o
productos alimentarios de los países dominantes:• Monocultivo o monoproducción minera. • Continuo deterioro de los términos del intercambio como consecuencia del aumento
constante de los precios de los productos industriales y la baja o estancamiento delas materias primas.
• Carácter interesado de la ayuda que se concede al Tercer Mundo.
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Por otra parte una vez finalizada la guerra, envió Gran Bretaña un fuerteejército a Siria y Líbano para garantizar la evacuación del ejército francés y lacreación de estados soberanos; así le fue reconocido al Emir Abdallah el títulode Rey, creando en la Transjordania un estado independiente.
Para resolver la cuestión de Eretz Israel, creó el Primer Ministro inglés,Clement Atlee, una comisión de ministros especiales, que debían analizar ysugerir un plan para el país.
Así se describe en algunas de sus propuestas:
El Libro Blanco, exige sacrificios de ambos lados. Los árabesdeberán reconocer el status al medio millón de judíos que ya residenen Eretz Israel. Los judíos deberán conformarse con lo que ya tieneny encontrar otra solución al problema judío de Europa. Los sionis -tas, jamás aceptarán el Libro Blanco oficialmente, muchos de ellosse resignarán a su implementación. Los árabes supuestamente serebelarán, con la ayuda de las naciones árabes a la creación de unEstado Judío en Eretz Israel.
La Asamblea ministerial decidió crear una comisión legislativa para EretzIsrael y comenzar a desarrollar un gobierno independiente, esto implicaba con-tinuar con la política referida a la aliá, la comisión sugirió continuar entregan-do 1500 permisos mensuales a los sobrevivientes de la Shoá.
La intervención norteamericanaHasta la Segunda Guerra Mundial; la intervención de EEUU en los asun-
tos de Medio Oriente fue limitada. La región era considerada zona de influen-cia europea. Pero a medida que la guerra se desarrollaba su participación seincrementó ya sea por razones estratégicas o por los intereses económicos de lasempresas petroleras americanas.
La preocupación del Presidente H. Truman por la situación de los refugia-dos en Europa posiblemente respondería a esta causa. No obstante el enviadoespecial que investigó las condiciones en los centros de refugiados, emitió uninforme aterrador.
Earl G. Harrison, encontró a los judíos sobrevivientes sumados en una som-bra de desesperación:
“Quienes son evacuados ahora, Palestina es definitivamente y enforma suprema, la primera elección posible. Sólo en Palestina seránbienvenidos y hallarán paz y tranquilidad y se les dará una oportu -nidad de vivir y trabajar. ”
La opinión pública americana se alarmó y la comunidad judía de EEUU,exigió una acción inmediata. El presidente Truman, se hizo eco de la petición ypidió al gobierno británico que se admitiera a cien mil personas desplazadas.judíos de Europa en Eretz Israel. Tal era el número de judíos sobrevivientes quese encontraban en los campamentos de refugiados.
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La situación economica de Inglaterra; tras la guerra, la llevó a dependerenormemente del apoyo financiero de EEUU, por esa razón demoró el gobiernolaborista la resolución respecto de Eretz Israel. Finalmente resolvió crear unacomisión mixta angloamericana que debía investigar el tema y ofrecer sobreesta base una propuesta.
El gobierno de Bevin, proclamó que si la comisión sugería una propuestaunánime, el gobierno británico la aceptaría sin dudar. La comisión recorrió,durante meses Europa y los países de Medio Oriente recopilando testimonios ydatos. Durante la visita que realizó en Eretz Israel, el movimiento de rebeliónjudía suspendió su accionar.
Al finalizar el recorrido la comisión se reunió en Suiza, y redactó su pro-puesta, en la que proponía:
1- Eretz Israel no será ni un Estado Judío ni un estado árabe. 2- Anular la ley de distribución de tierras y autorizar inmediata -mente 100.000 permisos de aliá a los sobrevivientes de la Shoá. 3- La autoridad mandataria seguirá gobernando, hasta que las rela -ciones entre las comunidades fueren tal que podrán crear un estadoconfederado judeo-árabe.
Las resoluciones de la comisión no satisfacieron las necesidades de laspartes en conflicto.
Los árabes rechazaron el plan y reclamaron nuevamente la creación de unEstado Palestino en todo el territorio de Eretz Israel.
Las autoridades de la Sojnut exigieron el cumplimiento de la propuestarelativa a la aliá de los desplazados judíos en Europa, como así mismo recla-maron la anulación de la ley de tierras.
El presidente Truman, apoyo la "moción" de la aliá y opinó que el resto delas propuestas exigían un prolongado debate debido a su carácter político. Porsu parte el gobierno británico recibió con frialdad las propuestas y protestó con-tra la postura americana.
En un discurso en el Parlamento Británico, preguntó retóricamente elPremier Inglés, Atlee, si el presidente Truman estaba dispuesto a participar enel rescate de los 100.000 Judíos y además enviar un ejército para reprimir lasublevación árabe que esta inmigración produciría. Finalmente agregó que elgobierno británico cumpliría las resoluciones propuestas por la comisiónangloamericana, sólo bajo la condición que "los ejércitos ilegales" depusieran yentregaran las armas a los gobiernos.
En otra oportunidad agregó el Ministro de Relaciones Británico, Berin: ElGobierno de EE.UU., presiona tanto respecto de la aliá de los 100.000 desplaza-dos judios porque no están interesados en recibirlos ellos en Nueva York.
La negación del Mandato a aceptar las propuestas recrudeció la hostilidaddel movimiento de rebelión armada.
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EN VÍSPERAS DE LA INDEPENDENCIA
El movimiento de rebelión judío - Tnuat Hameri Haivrí
La desmentida británica a sus pioneros, la dilación a crear la comisióninvestigadora, la finalización de la ley de distribucion de tierras, la limitación ala aliá, frente a la desazón de los sobrevivientes de la Shoá en Europa, se conju-garon para convencer al gobierno del ishuv a tomar una resolución definitiva.
En una carta enviada por David Ben Gurion al jefe de la fuerza de laHaganá, Moshé Snéh, se define la política a adoptar:
"No se deben reducir los esfuerzos de la aliá ilegal y de la coloniza -ción. Debemos adoptar una política de sabotaje y represaliá, no elterror individual, pero sí una respuesta por cada muerto por la polí -tica del Libro Blanco. Toda acción de sabotaje deberá tener peso y sentido. Debemos evitarlas víctimas humanas.La reacción deberá ser permanente, audaz y prolongada. No unabatalla final, ni expectativas de triunfo fácil y rápido. Debemostenerle máximo cuidado por nuestra acción constructiva, sin retro -ceder por las pérdidas inevitables.”
La sensación de frustración y la decisión de la conducción judía de imple-mentar la lucha armada, llevó a la unión de los organizaciones clandestinas, laHaganá, el Etzel y Leji, que crearon al principio un frente combativo unificado,contra la política del Libro Blanco. Así surgió el movimiento de rebelión judía,cuyos objetivos políticos fueron:
· Anulación del Libro Blanco. · Creación de un Estado Judío en Eretz Israel. La primera acción del movimiento fue la liberación de los Maapilím, inmi-
grantes ilegales, detenidos en el campo de refugiados de Atlit. En la noche del 9 de octubre de 1945, casi doscientos Maapilim fueron liber-
ados. A pesar de los esfuerzos por evitar las bajas, un guardia inglés murió en eltiroteo.
Las acciones estaban destinadas a advertir a los británicos que no podriáncontrolar al ishuv si éste se oponía.
Frente a la reacción adoptada por el ishuv el mandato británico proclamónuevas reglamentaciones de emergencia según las cuales se impondría prisiónperpetua a toda persona que portara armas o pertrechos. El conflicto se habíaagudizado.
Agravamiento de la lucha armada - El sábado negro
La noche del 17 de junio de 1946 unidades del Palmaj atacaron y volaronlos puentes que unían Eretz Israel con los países vecinos. Además grupos delEtzel y el Leji atacaron edificios y campamentos gubernamentales.
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La dimensión de los sucesosgeneró la reacción británica que sehizo sentir con toda su fuerza. Ladecisión inglesa fue:
• Destruir al Palmaj, la fuerzade choque de la Haganá, res-ponsable de la violencia acon-tecida en los sucesos con lacolaboracion del Etzel y delgrupo Stern (Leji).
• Dejar a la Haganá sin conduc-ción apresando a los dirigentesmás conocidos de la Sojnut, oaquellos sospechados de tenervinculaciones con ella.
• Descubrir toda documentaciónque demuestre el accionar ile-gal de la Sojnut, como asimis-mo la difusión de su organiza-ción.
En la noche del 29 de junio de1946, comenzó el ejército británico lacampaña denominada Brod Said.Revisiones y rastreos secretos, acom-pañados de destrozos fueron llevadosa cabo en veintisiete ieshuvím. Losedificios de la Sojnut en Jerusalem,la casa de la confederación obrera, laHistadrut, la imprenta del Diario"Davar", fueron requisados. En elKibutz Iagún, requisaron los británi-cos los depósitos centrales de armamentos de la Haganá.
El bunker del Palmaj fué descubierto y destruidos documentos impor-tantes. Casi dos mil setecientas personas fuerón detenidas, entre ellas los líde-res políticos mas relevantes del Ishuv. La violencia descomunal del sucesoacuñó el nombre de "Sábado Negro". La organización de la Haganá, decidióreaccionar violentamente.
Ante el temor por las futuras acciones, Jaim Weitzmann, encomendó a unenviado especial que se dirigió a Moshé Snéh, exigiéndole no continuar con lasacciones hasta tanto no se reúna la dirigencia de la Sojnut, de lo contrario, ame-nazó con renunciar a su cargo como presidente de la Histadrut Hatzionit. Snehatormentado renunció a su cargo como jefe de seguridad de la comandanciamilitar de Eretz Israel.
No obstante el Etzel decidió concretar su misión, el blanco era el hotel KingDavid, sede de la secretaría gubernamental del Mandato Británico en EretzIsrael y de las fuerzas de seguridad.
22 de Julio de 1946 - Elataque al King DavidHotel de Jerusalem.Como reacción al "sábado negro" fuevolado un sector del hotel KingDavid de Ierushalaim, sede de lasoficinas centrales del MandatoBritánico. El 2 de Julio de 1946ingresaron miembros del Etzel aledificio, disfrazados de mozossudaneses. Tras llegar al sótano delhotel dejaron bombas de tiempo den -tro de los cántaros de leche, tras locual se retiraron. Dos miembros delEtzel fueron detenidos por oficialesbritánicos, resultando uno de ellosmuerto y el otro oficial herido. A pesar de la advertencia a las auto -ridades del hotel de revisar y sus -pender las actividades, el hotel nofue evacuado, tras lo cual sucedió latragedia. Un ala del hotel, de sietepisos, se derrumbó tras la fuerteexplosión. El resultado fue denumerosos heridos y muertos. Losdías que siguieron a la voladurageneraron desamparo, desconcierto ydisidencias entre los judíos de EretzIsrael.
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La tragedia despertó temibles reacciones tanto en Israel como en el restodel mundo. La dirigencia judía decidió entonces moderar su accionar. LaHaganá volvió a actuar en el campo de la lucha por la colonización y la Haapalájunto con el accionar político. Por su parte, el Etzel y el Leji resolvieron conti-nuar con la lucha armada.
Consigna de trabajo
Reflexiona y respondea- ¿Cuáles fueron las diversas etapas de la política implementada por elmovimiento Sionista y las instituciones del ishuv respecto del gobiernobritánico?b- ¿En qué medida se justifica el hecho de que Inglaterra continuó con lapolítica del Libro Blanco aún después de la guerra? ¿Cómo incidió dichapolítica en el Leji y el llamamiento a la rebelión del Irgún en enero de 1944?
EL ACCIONAR DE LA HAAPALÁ LA ENTRADA ILEGAL A ERETZ ISRAEL DEL 1945 AL 1947
Desde los comienzos del sionismo, la aliá fue la condición para la concrecióndel sueño anhelado. Crear un Estado Judío en Eretz Israel.
Concientes de esto, presionaron los árabes desde un comienzo para frenarla aliá ilegal. Los judíos no sólo lucharon por ella sino que además agregaron ala primera la aliá ilegal, la Haapalá.
Los británicos por su parte trataron de mantener el difícil equilibrio; posi-bilitar la llegada de inmigrantes judíos, de manera que los judíos se calmaran,sin irritar demasiado a los árabes.
La Haapalá se convirtió no sólo en un instrumento de liberación de losjudíos de la diáspora y fortalecimiento del ishuv judío en Eretz Israel, sino tam-bién en un arma política afilada.
La Segunda Guerra Mundial generó, como hemos visto, una interrupciónde la inmigración ilegal de Europa, reduciéndose a una pequeña inmigraciónpor tierra desde los países orientales. Al finalizar la guerra se renovó la luchacon mayor intensidad hasta límites sin precedentes. Así lo expresó MoshéSneh:
“Yo pienso que nosotros necesitamos como elemento central de nues -tra política la aliá ilegal.... ... No tenemos otro incentivo mejor y no podemos renunciar a éste... ... Debemos abocarnos a ingresar Mapilím por todas las formas posi -bles, no sólo por tierra sino también por mar... Este incentivo harácambiar las cosas.”
La responsabilidad de la organización de la Haapalá, la asumió la Haganá,a través del "Mosad Haaliá Bet" (organismo de aliá ilegal) y la organización de
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la Brijá, la Huida que funcionaba en el exterior, con la colaboración del Palmajque operaba en Eretz Israel.
El Palmaj era responsable de organizar la bajada de los inmigrantes en lacosta, asegurando los botes de toda intervención británica posible, ademásdebía distribuir a los recién llegados ocultándolos, cuidando el éxito de lamisión hasta la última etapa. Para solventar la Haapalá se requería denumerosos fondos que eran conseguidos por medio de las campañas especialesque organizaba el Joint.
Italia y Francia eran los centros principales del accionar en Europa. Lasdificultades eran enormes. El gobierno británico presionaba duramente a losgobiernos europeos, para que impidiesen la organización de las acciones deHaapalá en sus territorios.
Un informe de un miembro activo de la aliá describía a fines de 1947 lasituación:
“Toda clase de negociación política, comercial y monetaria llevada acabo entre los gobiernos europeos y Gran Bretaña... termina con lacondición de que los gobiernos luchen contra la Haapalá. Con Grecia los ingleses hacen su voluntad. La presión es enorme. EnItalia la situación es tal que ahora debemos trabajar en forma ile -gal. En Francia la presión es constante. Los países escandinavos, Bélgicay Holanda, están sometidos al yugo inglés y subordinados a él.”
Las dificultades comenzaban en la primera etapa, al tratar de conseguirbarcos. En Italia, por ejemplo, sólo se permitía la compra de barcos a ciu-dadanos italianos.
Una vez adquirido el barco por intermediarios, había que contactarse conlos olím, ocultándose de la mirada de los servicios secretos británicos.
Reclutar operadores del barco. El mando del barco estaba a cargo de loshombres de la Haganá. Luego de hacinar a los olím en los barcos eran conduci-dos hasta la costa de Israel;escabulléndose de los vigíasingleses. Ya en la costa, yaprovechando la oscuridad dela noche, distribuían y oculta-ban a los inmigrantes entre losishuvim judíos.
Gran parte de los barcoseran encontrados, los inmi-grantes descendían de ellos yeran llevados detenidos. Hastajulio de 1946 el centro de deten-ción se encontraba en Atlit, apartir de ese momento fueronconducidos a los campos derefugiados en Chipre.
Barco Éxodo
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"Éxodo"
Entre las odiseas másnotorias del movimientode la Haapalá, se encuen-tra el barco "Éxodo".
Fue adquirido por elMosad en EE. UU., pormedio de un judío norte-americano en noviembrede 1945. La tripulación ensu mayoría eran judiosamericanos. El capitanerá israelí al servicio de laHaganá.
Casi cuatro mil sete-sientas personas, en sumayoría refugiados de guerra de los campamentos de Alemania, integraban lapoblación del barco.
Al conocer el servicio secreto británico, de los preparativos del movimientode la Haapalá, comenzaron las presiones sobre el gobierno italiano, con el fin deimpedir la salida del barco, lo que motivó el traslado del mismo a un puertofrancés.
Aunque allí también, los británicos trataron de abortar la salida de los refu-giados, los organizadores de la Haapalá pudieron realizar el éxodo a pesar delas restricciones.
Para distraer la atención de las patrullas, el barco salió del puerto sinayuda de barcos remolcadores.
La prefectura británica siguió al "Exodo 1947" en su ruta hacia el MarMediterráneo. En alta mar las patrullas británicas detuvieron el buque dis-puestas a interrumpir su rumbo y tratando de abordarlo.
El capitán del barco respondió al capitán británico, explicándole que la tri-pulación de más de cuatro mil quinientas personas incluidas mujeres y niñoseran inmigrantes de pleno derecho que regresaban a su patria, y que de ningúnmodo aceptarían ir a los campamentos de refugiados aunque fueran ingleses.
Los británicos abrieron fuego contra el barco, mientras dos pequeñasembarcaciones trataban de acercársele para abordarla. la tripulación del"Exodo 1947" respondió a los disparos con latas de conservas, papas y utensi-lios.
Utilizando gases la-crimógenos, el barco fue abordado por marinerosbritánicos. Los impactos de bala, habían dañado el barco, y el agua comenzabaa inundarlo.
El 17 de julio de 1947, el "Exodo" entraba al puerto de Haifa. Mientras losrefugiados entonaban en la cubierta del barco el Hatikva, las fuerzas británi-cas trataban de someter a la población del barco, resultando varias personasheridas y tres refugiados muertos.
Refugiados judíos camino a Eretz Israel
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Bevin, ministro de relaciones exteriores británicos, decidió que no era sufi-ciente castigo enviar a los refugiados a Chipre, sino que debían regresar aEuropa. Cientos de refugiados se negaron a descender del barco, otros cuatromil quinientos fueron trasladados a barcos ingleses.
Después de varias semanas de espera, en algunos puertos franceses (queaceptaron reibir a los barcos británicos), llegó la orden de remitir a los desplaza-dos hacia Alemania.
El barco arribó en Hamburgo el 27 de agosto de 1947. la decisión del gobier-no británico de devolver a los sobrevivientes de la Shoá a Alemania despertónumerosas reacciones a nivel mundial. La prensa mundial cubrió los sucesoscon imágenes de los sobrevivientes y la huelga de hambre de más de mil catorcerefugiados. El problema de la Haapalá se había transformado en un problemainternacional que despertaba a la opinión pública en torno al problema de EretzIsrael, pasando a ser un medio de presión política de gran alcance.
En las Naciones Unidas
Mientras existió la Liga de las Naciones, las actividades diplomáticasjudías con respecto a Palestina giraron en torno a su Comisión Permanente deMandato. Pero dentro de la Liga la Comisión de Mandatos era débil y por lotanto no tenía una influencia práctica sobre la política del mandato. El estalli-do de la Segunda Guerra Mundial puso fin a la vida efectiva de la Liga de lasNaciones.
El 2 de abril de 1947, el gobierno británico pidió que el problema dePalestina se incluyera en la agenda de las Naciones Unidas, declarándose nofacultado para proponer ninguna política concreta y dejando asi todo el asuntoen manos de la Asamblea General. Dadas las circunstancias, algunos sionistasacogieron esta decisión con satisfacción y otros con temor.
Durante algún tiempo, con anterioridad a la convocatoria a la sesión espe-cial de la UN, a la opinión pública democrática le había inquietado la perspec-tiva de una discusión del problema palestino en un foro donde no estaba repre-sentado el pueblo judío.
Esta inquietud se les contagió a los funcionarios más importantes de la UN.Cuando se reunió la Asamblea General el 28 de abril, la Agencia Judía paraPalestina, como organismo representativo judío reconocido por el Mandato,pidió que se le permitiera participar en las deliberaciones. En su nota dio aentender claramente que esas deliberaciones eran de gran importancia paraella y que consideraba simplemente justo que se le permitiera participar.Después de esto, otras organizaciones, judías y no judías hicieron pedidos aná-logos.
Con independencia de la Agencia Judía, varios delegados pidieron que seadmitiera a un representante del pueblo judío para una consulta con lasNaciones Unidas.
El delegado polaco, señor Wineiewicz, encaró el problema de la formasiguiente:
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“La dificultad proviene del hecho de que la proposición egipcia yotras sugieren en una forma muy decisiva que se de por terminado elMandato de Palestina, aun antes de que hayamos oído la opinión dela parte más interesada, el pueblo judío, al cual el Mandato enPalestina proveyó de derechos especiales. Por lo tanto, no podemosvotar por la inclusión de ese punto adicional en esta sesión especialde la Asamblea General de las Naciones Unidas. Nos abstendremosde votar, exhortando al propio tiempo a que este Comité resuelva loantes posible la admisión de un cuerpo representativo judío para lasconsultas con esta Asamblea.”
Otra clara expresión del problema fue planteada por el señor Asaf Ali, de laIndia:
“... hoy, y también ayer, estamos representando Hamlet sin elpríncipe de Dinamarca. ¿Dónde está aquí Palestina? ¿Dónde está elpueblo cuyos verdaderos derechos tenemos que examinar? ¿Dóndeestán los grandes representantes del pueblo judío, interesados tam -bién en este problema?”.
El problema no era fácil de solucionar. La Asamblea General nunca habíaadmitido a las organizaciones no gubernamentales en los debates políticos; laspeticiones y los informes de esos cuerpos eran escuchados por una subcomisión.Ahora, a la Asamblea la acusaban de haber cometido una injusticia con laAgencia Judía, que no había tenido la oportunidad de ser escuchada, mientrasque los árabes, por intermedio de sus estados integrantes de la UN, habían par-ticipado activamente en las actuaciones preliminares. Como su sentido deequidad se veía agraviado por esos procedimientos las principales potenciascambiaron entonces de actitud con respecto al problema del acceso no guberna-mental organizado a la Asamblea General.
Después de muchas deliberaciones, una abrumadora mayoría aprobó unaresolución para que se le concediera una audiencia a la Agencia Judía.Inmediatamente, fueron designados los representantes de la Agencia Judíapara la audiencia especial: David Ben Gurión, el doctor Abba Hillel Silver,Moshé Sharett, Jaim Grimberg, la señora Rose Halprim, Nahum Goldmann yel doctor Emanuel Neumann. Se les explicó claramente a esos representantesque sólo debían exponer sus opiniones sobre el tema que debatía entonces laAsamblea Central, esto es, la constitución y preparación de un comité especialpara tratar el problema de Palestina.
Como consecuencia de esas audiencias, la Asamblea General creó el comitéespecial sobre Palestina, el UNSCOP. A pesar de las enérgicas objecionesárabes, el UNSCOP decidió incluir en su investigación un cuidadoso estudio dela situación de las personas desplazadas. En una reunión efectuada antes de sugira, el comité especial discutió a fondo el problema de la cooperación - judeoárabe. Ben Gurión expresó el punto de vista judío:
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“Una asociación judeo-árabe, basada en la igualdad y en la ayudamutua, ayudará a obtener la regeneración de todo Medio Oriente.Los judíos comprendemos y simpatizamos profundamente con elansia de unidad, independencia y progreso del pueblo árabe, y con -fío en que nuestros vecinos árabes comprenderán que los judíos, ensu tierra natal histórica, no pueden, en ningún caso, convertirse enuna minoría subordinada y dependiente como lo son en todos losdemás países de la diáspora. La nación judía, en su propio país,debe convertirse en un Estado libre e independiente, miembro de lasNaciones Unidas. La nación judía anhela cooperar con sus libresvecinos árabes para promover el desarrollo económico, el progresosocial y la auténtica independencia de los países semitas en el MedioOriente. Señor presidente: debo sugerirle seriamente a su comité quela verdadera, justa y duradera solución del problema que se leplantea es un Estado Judío y una alianza judeo-árabe”.
Los representantes de la Agencia Judía exhortaron también al comité espe-cial a que, durante su estancia en Palestina, averiguara las causas verdaderasy fundamentales del desasosiego reinante allí: la injusta y trágica restricción ala inmigración, las injustas y severas restricciones a la radicación judía queimponía el gobierno del Mandato y las discriminatorias leyes raciales.
Los oradores árabes, a su vez, subrayaron sin cesar el grave peligro que leplanteaba la situación de Palestina a la causa de la paz y la seguridad en elCercano Oriente y en otras zonas del mundo. Declararon que, en vista de ellos,no se debía satisfacer el deseo de los judíos de tener un Hogar Nacional.
La postura árabe quedó expresada en dos telegramas enviados al secreta-rio general de la Asamblea General. El primero de ellos fue enviado el 19 deenero de 1948, en el que Alto Mando Árabe informaba que no podrá respondera la invitación de la Comisión sobre Palestina, pues negaba el derecho a laintervención y las decisiones de la ONU.
En el segundo telegrama fechado el 6 de febrero de 1948, se incluyeron lospuntos básicos que expresaban la postura árabe respecto de la división dePalestina en dos estados:
1- Los árabes de Palestina, no reconocerán jamás la validez de larecomendación de partición de las Naciones Unidas. 2- Los árabes de Palestina consideran que todo intento por parte delos judíos, o de otra potencia o grupo de potencias extranjeras decrear un Estado Judío en el territorio árabe es un acto de agresiónque será repelido con la fuerza. 3- No hay razón ni provecho de enviar una comisión (de la UN) aPalestina, siendo que ningún árabe prestará colaboración con dichacomisión. 4- Los esfuerzos de la UN respecto de un proyecto de partición, notendrán éxito. Siendo preferible por el prestigio de las NacionesUnidas no embarcarse en esta aventura. 5- En consideración al prestigio de las Naciones Unidas, deberánhacerse a un lado, para evitar semejante injusticia. 6- Es decisión absoluta de todo el pueblo árabe oponerse a todo
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intento de partición de la tierra. 7- Los árabes de Palestina declaran frente a las Naciones Unidas,Dios y la historia, que ellos jamás responderán o se someterán aninguna potencia que imponga la partición.
Los voceros árabes procuraron enérgicamente destruir las bases legales delalegato judío. Impugnaron la legalidad, así como la validez moral, humana ypolítica del Mandato, que ellos nunca habían reconocido. La Agencia Judíatrató de esbozar la justicia implícita en las pretensiones hebreas a Palestina.Los árabes intentaron refutar esas afirmaciones y restarles valor, más bien quepresentar una justificación independiente de su propia pretensión.
La exposición judía era un alegato legal, basado en la Declaración Balfoury en el Mandato sobre Palestina. El doctor Silver insistió en que esos compro-misos internacionales, emanados de un reconocimiento de derechos históricos yde necesidades actuales, y sobre cuya base el pueblo judío había construido yatanto en Palestina, no podían ser borrados. Tanto el doctor Silver como MoshéSharett afirmaron enfáticamente que la finalidad de la Declaración Balfour ydel Mandato era establecer un Estado Judío.
La mayoría de los gobiernos no expresaron sus simpatías a favor de ningu-na de las partes directamente interesadas en el problema de Palestina.Mientras que existía un grupo que apoyaba sólidamente todas las medidas quebeneficiarían los intereses del Comité Superior Árabe, no existía otro que apo-yara la posición judía. En cuanto se refería al aspecto judío del problema, variosestados sobre todo algunos del grupo eslavo y del sudamericano expresaron susimpatía por los judíos e hicieron notar sus sufrimientos, sobre todo durante laocupación nazi. Algunos, tales como Noruega y Sudáfrica, llegaron más lejos einsistieron en el eslabón existente entre la suerte de los inseguros judíos yPalestina. Polonia, Checoslovaquia, y en forma más calificada, al UniónSoviética y China, expresaron su simpatía y comprensión con respecto a lasaspiraciones nacionales judías. La Unión Soviética abandonó una larga tradi-ción antisionista para aludir a la posibilidad de apoyar a un Estado Judío inde-pendiente.
INTERVENCIÓN DEL DELEGADO DE LA URSS, ANDREI GROMIKO,EN LA SESIÓN PLENARIA DE LA ASAMBLEA GENERALLa Unión Soviética no tiene en Palestina, como es notorio, interesesdirectos, materiales ni de ningún orden. Le concierne el asunto dePalestina en tanto que miembro de la ONU y como gran potenciaque, con otras, asume una responsabilidad especial por el manteni -miento de las paz internacional. Ello predetermina la posición delgobierno de la URSS en el problema palestino. La actitud de la Unión Soviética fue ya expuesta con suficiente
plenitud en la sesión especial de la Asamblea General reunida aprincipios de 1947, y también en el curso de los debates de la pre -sente sesión. Al discutirse en aquella Asamblea General (AG) el futuro de
Palestina, el Gobierno soviético apunto las dos variantes más viablespara la solución del problema. Primera: la formación de un estado
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árabe-hebreo único y democrático con derechos prioritarios para losárabes y los judíos. De resultar impactable esta variante, por mani -festar los unos y los otros que no pueden vivir juntos a causa de larecíproca malquerencia, el Gobierno soviético ha señalado, a travésde su delegación en la Asamblea, la segunda variante: la división dePalestina en dos Estados democráticos soberanos e independientes:árabe uno y judío el otro. La sesión especial de la AG instituyó, como saben, una comisión que
estudió minuciosamente el problema de Palestina con objeto dedarle la solución más aceptable. Al finalizar sus labores este organ -ismo, nosotros constatamos con satisfacción que su propuesta, omejor dicho la de su mayoría, coincidía con una de las variantesofrecidas por la delegación de la URSS en la AG Especial. Me refieroa la división de Palestina en dos estados – árabe y hebreo- democrá -ticos e independientes. (...)
Cuando llegó a Palestina el UNSCOP fue acogido con entusiasmo por elIshuv. Durante su estada, se produjo un acontecimiento dramático que proyec-tó sombras sobre las deliberaciones y nueva luz sobre la tragedia que acompañóel derrumbe del mandato.
“Éxodo 1947”, el más grande de los barcos para refugiados, fue obligado porlas autoridades británicas a volver a Europa después de una enconada lucha enHaifa.
Varios miembros del comité habían estado en Haifa y habían sido testigosdel lamentable espectáculo de los refugiados judíos cuando eran devueltos vio-lentamente por las tropas Inglesas al “Exodo”. De esta forma se dio por termi-nado el Mandato, en realidad los mismos que le dieron nacimiento comoChurchill, Smuts, Weitzmann habían abogado por la muerte del Mandato. Lamayoría sugirió un plan de participación que incluía el Neguev en el EstadoJudío. En la medianoche del 1 de septiembre de 1947, les entregaron a losrepresentantes de la Agencia Judía, Abba Eban y David Horowicz, en el Palaicedes Latinos de Ginebra, el informe que le proponía la partición. Aunque setrataba de una verdadera encrucijada, sólo era potencialmente decisiva. Si elcomité hubiese rechazado el alegato judío, la UN nunca habría adoptado unarecomendación favorable. Ahora que abogaba por concederles el carácter deEstado a los judíos, existía por lo menos una probabilidad que la AsambleaGeneral lo aprobara.
El escenario de los acontecimientos se desplazó ahora a la sede de lasNaciones Unidas, donde se llegó a la lucha política más decisiva que registra lahistoria moderna de los judíos. Todo dependía de la posibilidad de obtener elapoyo de EE. UU. y de Rusia para la propuesta del comité.
A pesar del apoyo de ambos no había mayoría de dos tercios. Se hicierongrandes esfuerzos para persuadir a los delegados no comprometidos y vacilan-tes que se veían sacudidos ahora por la presión árabe. Al envejecido Weitzmannse le podía acreditar dos éxitos: la conservación del Neguev en el plan de la UNde crear un Estado Judío y el reconocimiento de Israel de los EE. UU.Weitzmann se levanto de su lecho de enfermo para sostener una convesacioncon el Presidente Truman, a fin convencerlo que el Neguev Meridional no debía
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ser excluido del EstadoJudío, propósito queparecía existir entonces.Weitzmann reforzaba sualegato con el siguientememorándum:
“Aqaba, que seencuentra en el extremosur del Neguev y el MarRojo, representa la únicasalida del Estado Judío alOcéano Indico, la India elLejano Oriente, Australiay Nueva Zelanda. Para elEstado Judío, esa salidaera una de las rutas másimportantes para las rela-ciones comerciales con esaparte del mundo y paraabsorber a los refugiadosque vengan de Europa. Enese sentido la importanciade Aqaba es mucho mayorque la de un simple peda-zo de tierra sobre el MarRojo...
Aqaba, en manos delos árabes, puede ser unaamenaza permanente enla retaguardia del Estado.Los Estados Arabes tienen una salida al Mar Rojo y el golfo de Aqaba, a travésde Transjordania, Egipto y Arabia Saudita
“Truman se sintió convencido y la lucha por el Neguev concluyó con una vic-toria”. En el desesperado e inolvidable fin de semana del 27-29 de noviembre,la delegación judía se lanzó a una frenética persecución de los votos vacilantes.Cuando la perspectiva de una abstención francesa amenazaba con desorganizarel frente de la Europa occidental, Weitzmann le cablegrafió a León Blum exhor-tando al estadista socialista a un supremo esfuerzo: “¿quiere realmente Franciaestar ausente en un momento que no se borrará jamás de la memoria del hom-bre?” El 29 de noviembre Francia votó a favor de la partición. En muchas otrascapitales los gobiernos lucharon entre su conciencia y su interés, movidos porun espíritu de cabal responsabilidad.
El 29 de noviembre de 1947 la Asamblea General de la ONU, en una sesiónrealizada en Flushing Meadows, aprobó su resolución sobre la partición dePalestina. La decisión triunfó por 33 votos contra 13, con 10 abstenciones, sehabía excedido la mayoría de 2/3 requerida. Esa mayoría incluía a los EE. UU.,la URSS, muchos Estados Europeos, la mayoría de los países
PLAN DE PARTICIÓN DELAS NACIONES UNIDAS
EGIPTO
Límites del mandato británico enPalestina, 1922-1947Territorios propuestos para crearel Estado JudíoTerritorios propuestos para crearel Estado ÁrabeAsentamientos judíos incluidosdentro del Estado ÁrabeJerusalem y suburbios: zona bajocontrol internacional
Sinaí
Mar MediterráneoTRANSJORDANIA
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Latinoamericanos. Inglaterra, por cuya iniciativa se había ocupado la UN delproblema de Palestina, se abstuvo.
La mayoría se había agrupado alrededor de las ideas básicas que inspi-raron una década antes a la comisión Peel.
La alternativa era someter a los judíos de Palestina a la dominación árabeo establecer un marco definido para su desarrollo independiente. La primerasolución implicaría afirmar que los árabes debían ser soberanos dondequieraque estuviesen... y los judíos en ninguna parte. si una minoria judía vivía bajola égida de un gobierno judío, ello no destruiría el concepto mismo de la liber-tad nacional árabe, expresada en siete estados soberanos, que pronto seríantrece. En cambio, la comunidad judía de Palestina se convertiría en minoría, lanacionalidad hebrea se vería repudiada para siempre. La comunidad interna-cional siguió el camino de la injusticia menor. Realzaba su veredicto un sen-timiento de culpa ante el pueblo judío que la UN no había sido capaz de salvarde una espantosa catástrofe. Iban a ingresar en la UN muchas comunidadescuyos atributos de nacionalidad no eran más destacados que los de la comu-nidad judía de Palestina. El ishuv era ya un Estado, sólo le faltaba la denomi-nación de tal. Varios delegados habían hablado con histórica emoción de lanoble actitud que significaría el regreso de Israel a la familia de las naciones.Otrs, confiaban en la fascinación de un claro aporte judío a la sociedad mundialque emergía. La comunidad judía de Palestina pasó de la noche a la mañanadel satus de rebelde a quien no se tenía en cuenta, al de Nación próxima a serun Estado reconocido. El plan de particion era compejo y tortuoso, sus fron-teras, serpentinamente intrincadas. Jerusalem debía ser un enclave interna-cional y el nuevo Estado Judío y los estados árabes debian estar ligados por unaunión economica. Pero el tema central de la resolucion de 1947 era la inno-vación de la sobe-ranía judía. Todo lo demas podía cambiar, pero ese conceptoera ahora un elemento integral de la experiencia internacional.
Plan de particion de las Naciones Unidas
Una ola de alegría recorrió impetuosamente todo el ishuv cuando llegó lanoticia. Se bailó en las calles de Tel Aviv Jerusalem y Haifa. Pero los festejos noduraron mucho. El amanecer trajo los primeros disparos y las primeras vícti-mas. El comité superior árabe una huelga general: una muchedumbre árabecausó incendios y realizó saqueos en Jerusalem y el camino hacia el Estadojudío debía ser largo y lleno de sangre y lágrimas.
Se pensaba que, con la autoridad de las Naciones Unidas el plan se pondríaen práctica sin derramamiento de sangre y de acuerdo con esto se trazaron lasfronteras sin referencia alguna a las consideraciones militares.
El día siguiente señaló el comienzo de la Guerra de Independencia deIsrael, la guerra iniciada por los judios de Palestina para su supervivencia,libertad e independencia política contra los árabes, principalmente de los paí-ses vecinos, entre fines de noviembre de 1947 y julio de 1949.
La guerra se dividiría en dos fases distrintas. La primera se inicio el 30 denoviembre de 1947, un día después que la Asamblea General de las Naciones
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Unidas hubiese adoptado su resolución sobre la partición de Palestina y terminóel 14 de mayo de 1948 cuando las fuerzas británicas se retiraron del país. Lasegunda fase comenzó un día después de la evacuación británica y terminó el 20de julio de 1949 cuando se firmó el último de los acuerdos de armisticio con Siria.
En la primera fase el ishuv y sus fuerzas de defensa organizadas por laHaganá sufrieron el ataque de los árabes palestinos, ayudados principalmentepor voluntarios irregulares de los paises arabes. En la segunda fase, el ejércitode una reciente Israel independiente, oficialmente fundado el 30 de mayo comofuerzas de defensa de Israel, luchó contra tropas regulares de Egipto, Siria,Irak, Transjordania y Líbano, a las que ayudaban destacamentos de volunta-rios de Arabia Saudita, Libia y el Yemen. La primera fase, el inequívoco propósi-to de los árabes era frustrar la resolución de partición de las Naciones Unidase impedir la fundación y consolidación del Estado Judío; en la segunda fase, seproponía la destrucción del Estado y cuando esto resultó imposible, su trun-camiento.
LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA
La primera fase: 30 de noviembre de 1947 - 14 de mayo de 1948
Fuerzas judías Al comienzo de la primera fase, los ataques árabes los efectuaban grupos
mal organizados y dirigidos por representantes de las organizaciones políticasárabes. Sin embargo, a principios de octubre de 1947, la Liga Árabe había dadoinstrucciones a sus Estados miembros para que adiestrasen voluntarios yrecaudaran dinero y armas para los iraníes palestinos. Los primeros ataquesárabes fueron contenidos por las unidades movilizadas y reservas activas de laHaganá, que consistían además de las unidades de servicio y los hombres de losCuarteles Generales en cuatro batallones del "Palmaj" que ascendían enoctubre a dos mil cien hombres y mujeres y mil reservistas; "Jish" (Jeil Sadé"-fuerzas de campo, o infantería) con mil ochocientos hombres en servicio activoy diez mil reservistas y "Jim" (Jeil Mishmar- fuerzas de guarnición), con trein-ta y dos mil miembros registrados y responsable de la defensa pasiva. El "Jish"se organizó principalmente en comandos de zona, denominados igual que laregión (Givati, Golani, Carmeli), que más tarde se convirtieron en brigadas.También estaban los "Gadna", batallones formados por menores de edad,adiestrados para desempeñar funciones auxiliares y que más tarde engrosaríanlas filas del Palmaj y el "Jish".
En vísperas de la guerra, la Haganá poseía en sus arsenales secretos unosquince mil fusiles de varias marcas, una pequeña cantidad de ametralladorasligeras y unas docenas de ametralladoras de calibre mediano, así como grana-das de mano, explosivos y metralletas "Sten", fabricadas en sus talleres clan-destinos. En cuanto se refería a las otras dos organizaciones armadas que oper-
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aron independientemente durante la primera fase, el Irgún Tzvaí Leumí con-taba con unos cinco mil miembros al principio de la guerra, y el "Leji" (LojameiJerut Israel) con aproximadamente mil combatientes.
Fuerzas árabes Por parte árabe, había dos organizaciones paramilitares: la "Futuwa",
apadrinada por los Husseini, y la "Najada", patrocinada por sus oponentes,compuesta principalmente por juventudes urbanas. Además de estas organiza-ciones, estaban los veteranos de los disturbios de los años 1936-1939, dis-puestos y ansiosos por luchar y robar. Existía aún la vieja institución "Faza",un sistema de alarma mediante el cual un jeque podía movilizar a los varonesde su tribu, y un mukhtar podía reunir a los de su poblado durante ciertonúmero de días y para operaciones específicas, tales como la defensa de un pue-blo o el ataque a un convoy, cada hombre con su propio fusil, su símbolo defuerza varonil. Por añadidura, había algunos miles de árabes que servían en laPolicía Palestina y en las fuerzas fronterizas de Transjordania, hombres enquienes se podía confiar para ayudar en el empleo de la violencia contra losjudíos aunque, por el momento, quedara muy limitado su potencial en una par-ticipación directa. Lo mismo podía decirse de cinco compañías de la RegiónÁrabe que servían en Palestina como parte del ejército británico.
Fuerzas británicas Con mucho, el factor militar más poderoso en Palestina al principio de la
guerra eran las tropas británicas: unos cien mil hombres, dotados de carros decombate, artillería y apoyo naval y aéreo. Su disposición y sus objetivos estratégi-cos y políticos, e incluso las simpatías individuales de los comandantes locales,iban a tener una importancia decisiva en las primeras etapas de la guerra.
Rechazo de la ofensiva árabe: 27 de noviembre de 1947- marzo de 1948
Desde el principio, la naturaleza de los ataques árabes estuvo influida porcierta cantidad de factores: la existencia de un número considerable de coloniasjudías en zonas predominantemente árabes, la mezcla de población judeo-árabeen varias ciudades y el control árabe de la mayor parte de la región montañosay principales arterias de comunicación por carretera. El primer ataque tuvolugar el 30 de noviembre de 1947, cuando un autobús judío fue víctima de unaemboscada cerca de Lod.
Al día siguiente el Alto Comité Árabe declaró la huelga general, y el 2 dediciembre, una muchedumbre árabe atacó y destruyó el centro comercial deJerusalem. También se produjeron tiroteos árabes en Haifa y en la fronteraentre Tel Aviv y Iafo. El 10 de diciembre, después de los ataques árabes contravehículos judíos en el Neguev y en la carretera de Jerusalem-Kfar Etzión, laHaganá y las Fuerzas del Irgún Tzvaí Leumí, obligaron a retroceder a concen-traciones de grupos árabes. Durante el mes de diciembre se delimitaron poco apoco las áreas controladas por árabes y judíos, en las ciudades mixtas se eva-
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cuaron los barrios residenciales que había entre judíos y árabes; en la lucha porlas carreteras que fue aumentando en intensidad, los árabes gozaban de granventaja, debido, principalmente, a la actitud de las tropas británicas que enteoría, eran neutrales, y, de hecho, por lo general, pro-árabes. No se evacuaronalgunas colonias judías unas treinta y tres que de acuerdo con la partición ibana ser excluidas del Estado Judío.
No se llevó a cabo la evacuación por razones políticas como morales. Sudefensa y mantenimiento de las comunicaciones supuso un gran esfuerzo parala Haganá. El 10 de enero, una fuerza compuesta por 900 hombres del ejércitoárabe de liberación, y voluntarios mandados por el Sirio Fawsi el Kaukji yentrenados del otro lado de la frontera, atacó Kfar Szold. Los días siguientesquedaron señalados por ataques a colonias judías aisladas en la colina deJerusalem y Hebrón, alta Galilea y el Neguev. Los ataques a las colonias judíascontinuaron, en la mayor parte en las carreteras. Estos ataques tuvieron reper-cusión política en EE. UU., que antes había apoyado la partición y se enfrenta-ba ahora a una directa implicación militar.
La segunda fase: 15 de mayo de 1948 – 20 de julio de 1949Invasión de los ejércitos árabes
El 12 de mayo, se invitó al oficial jefe de operaciones, Yigal Yadín, de la“Haganá”, para que examinará la situación militar ante la administración delPueblo:
No discutiremos el problema de si habrá o no habrá invasión. Hastaahora, hemos proyectado las cosas suponiendo que sí la habrá.Nuestras informaciones indican que es un hecho cierto. Nuestrosplanes para tal invasión son muy sencillos: todas nuestras fuerzas ytodas nuestras armas – todas en absoluto- tendrán que concentrarseen aquellos lugares que probablemente habrán de ser campos debatalla durante la primera fase de la lucha... Las fuerzas regularesde los países vecinos-con su equipo y armamento- nos superan enestos momentos. Sin embargo, la evaluación de las posibilidades nopueden ser simplemente una consideración militar de armas yunidades contra otras enemigas, puesto que carecemos de esasarmas y de esas fuerzas. El problema estriba en determinar en quémedida nuestros hombres podrán superar a las fuerzas en virtud desu espíritu de lucha, de nuestra planificación y de nuestras tácticas.En ciertos casos se ha demostrado que no son ni el número ni lasarmas lo que determina el resultado de una batalla, sino algo masque eso. Sin embargo, y hablando objetivamente, no cabe duda deque el enemigo goza esta vez de una gran superioridad. Nuestraaviación tampoco puede compararse con la suya. Carecemos deFuerzas Aéreas. Aún no hemos recibido los aviones. Es posible quelleguen en el momento decisivo, pero no puedo confiar en eso.Incluso en tal caso, si los países árabes vecinos aumentan susfuerzas aéreas toda comparación será inútil. El número de susaviones nos supera como en un ciento cincuenta por ciento. En estemomento, nuestros aparatos operan en contra de todas las normasque regulan las tácticas aéreas. Ningún otro piloto del mundo, a no
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ser los nuestros, sería capaz de despegar en aparatos como los quetenemos. Los aviones son de modelos anticuados y, además, imperfec -tos. Algunos son aparatos de reconocimiento o de entrenamiento;incluso con estos aviones hemos sufrido pérdidas muy graves y ahoraestamos en inferioridad también en este terreno, hasta e1 punto deque no podremos contar con ellos como factor militar. Resumiendo,yo diría que esta vez las perspectivas se presentan muy problemáti -cas. O - para ser más honesto - diría que su superioridad es conside -rable, si, por supuesto, todas sus fuerzas toman parte en la batalla.
El presidente de la Administración del Pueblo, David Ben Gurión, en sín-tesis, preguntó: “¿Contamos con alguna oportunidad de resistir y rechazar lainvasión?” La respuesta de Yadín fue: “Si lográramos aumentar nuestrasfuerzas armadas movilizando al país entero y al extranjero mediante la inmi -gración; si pudiésemos intensificar nuestra formación e instrucción y mejorar elequipo, parcialmente mediante la fabricación de armamento en el país, pero,sobre todo, trayendo al país lo que hemos comprado fuera, entonces sí podríamosrechazar, sin duda el ataque, e incluso vencer; pero, antes, sin embargo, sufrire -mos serias perdidas, para lo cual debe estar preparado el Yishuv.” Dos días mastarde, los líderes de la Yishuv se reunieron en el Museo de la Ciudad, en TelAviv, para proclamar la fundación del Estado Judío en Palestina. Aquellamisma noche, los ejércitos de cinco Estados árabes comenzaron a invadir elpaís. La invasión, anunciada por un ataque aéreo egipcio sobre Tel Aviv, resis-tió vigorosamente.
Desde el norte, este y sur llegaban los ejércitos del Líbano, Siria, Irak,Transjordania y Egipto. Arabia Saudita envió una unidad que luchaba bajomando egipcio, y, asimismo, el Yemen declaró la guerra a Israel. Sin embar-go, no envió ningún contingente de tropas. Los judíos se hallaban ensituación muy precaria. Las fuerzas invasoras estaban totalmenteequipadas con el armamento normal propio de un ejército regular moderno:artillería, tanques, vehículos blindados y transportes de tropas, además deametralladoras, morteros y grandes cantidades de armas pequeñas. Por otraparte, disponían de municiones, gasolina y petróleo. Egipto, Irak y Siria con-taban con aviación. Como Estados soberanos no tenían dificultad alguna (aligual que las fuerzas de defensa judías en el período pre-estatal) en con-seguir el armamento que necesitaban a través de las vías normales de GranBretaña y otras potencias amigas. Durante los primeros días de la guerra,los judíos no poseían artillería pesada y tanques; muchísimo menos, aviones.Sin embargo, en los días siguientes, recibieron algunos suministros de estasarmas que ayudaron a que las cosas mejorasen. Poco más que armas cortas-y no en suficiente cantidad-, algunas de ellas de fabricación casera, vehícu-los blindados muy primitivos y algunos aviones de entrenamiento, era todocuanto disponía la “Haganá”, las fuerzas de defensa controladas por lasautoridades judías responsables durante el Mandato Británico, fuerzas queevidentemente siempre habían actuado en la clandestinidad. Entonces, yapodía actuar abiertamente como Ejército del Estado soberano de Israel,aunque las formalidades constitucionales que fundaban el nuevo ejército
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sólo se completaron el 28 de mayo con la publicación, por parte del Gobiernoprovisional del decreto de fundación de las Fuerzas de Defensa de Israel(Tzahal).
La batalla de Jerusalem
Jerusalem y su pasillo al Oeste habían sido escenarios de continuas y durasluchas durante las cuatro semanas que terminaron en la tregua de junio. Losisraelíes sufrieron graves pérdidas y algunos retrocesos de carácter muy serio.Podían figurar como tales la pérdida del barrio judío de la Ciudad Vieja y elfallido intento de tomar Latrún, en el extremo occidental del pasillo. Perosalieron de la difícil situación con una Jerusalem occidental intacta y con laposesión de un débil enlace con la costa. Los árabes consiguieron entoncesvarios éxitos militares, pero fracasaron en su principal objetivo: la conquista deJerusalem occidental, cuyos cien mil habitantes judíos se sostenían con unestricto racionamiento de alimentos y cuyas fuerzas disponían de un escasomunicionamiento.
El 28 de mayo, se rindió el distrito judío mientras que los soldados de Israelcontemplaban la escena, sin poder hacer nada desde el cercano Monte Tzión.
En el norte, los sirios penetraron en Israel exactamente al Sur del lagoKineret, y continuaron su avance en la noche del 15 de mayo con una brigadade infantería de choque, un batallón de vehículos blindados, un regimiento deartillería y una compañía de tanques. Frente a estas fuerzas, en e1 Valle delJordán solo había un grupo de kibutzím, cuyos miembros formaban una especiede guarnición de la “ Haganá” y un batallón de la “Haganá” para la acción ofen-siva, procedente de la “Brigada Golani”. El objetivo sirio era tomar el kibutz,cruzar el Jordán y, después, proseguir con un avance relámpago hacia el Oestecruzando territorio, en su mayor parte árabe, de la Baja Galilea hasta Haifa.
La ruta de invasión elegida por el ejército libanés se extendía a través deMalkiya, exactamente al oeste del fortificado puesto de Policía árabe de NebiYusha, en el cerro que dominaba el Valle Huleh. La defensa judía en este sec-tor estaba a cargo de la “Brigada Iftaj” del “ Palmaj”, al mando del comandantePalmaj, quien unos días antes había conquistado importantes puntos árabes deTzfat. En la noche del 14 al 15 de mayo un batallón de “Iftaj” atravesó a pie lasmontañas y se dirigió hacia la frontera libanesa, bordeó el fuerte Nebi Yusha y,sin descansar, se lanzó al ataque contra Malkiya y el cercano Kadesh, portillooriental del Líbano a Israel. Ambos puntos cayeron tras enconada lucha. Pero,al día siguiente, los libaneses iniciaron un decidido contraataque y los hombresdel “Palmaj” se vieron obligados a retirarse y ocupar posiciones entre la fron-tera y Nebi Yusha.
La primera tregua: 11 de junio- 9 de julio
La tregua fue supervisada por el conde Folke Bernadotte, el mediador paraPalestina, nombrado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 21 demayo, en unión de un equipo de observadores de dicho organismo formado por
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oficiales de los Ejércitos de Bélgica, Francia, Suecia y los Estados Unidos. Ibaa durar veintiocho días (la ONU esperaba que durase mucho más) y los obser-vadores asegurarían más tarde que ninguno de ambos bandos obtuviese "ven -tajas militares" durante la tregua mediante la adquisición de más armas o "per -sonal de lucha".
En el décimo día de la tregua, estalló un grave incidente interno judío,cuando Altalena, un buque cargado de armas del Irgún Tzvaí Leumí, que habíazarpado de un puerto francés a principios de junio, trató de descargarlas en lascostas de Israel. El Irgún Tzvaí Leumí se negó a entregar las armas al Gobiernode Israel. Cuando el Irgún Tzvaí Leumí persistió en su negativa de aceptar lascondiciones que imponía el Gobierno, se impidió por la fuerza a que se descar-gara el buque. El barco se incendió cerca de la playa de Tel Aviv, incendio provo-cado por las tropas de Defensa de Israel que, acto seguido, tuvieron que entraren el mar por ambos bandos.
Sin embargo, tanto los ejércitos árabes como los de Israel aprovechaban latregua para mejorar sus posiciones. Las "Fuerzas de Defensa de Israel"sometieron a una instrucción mucho más rígida a sus hombres, entre los quefiguraban colonos ya establecidos, nuevos inmigrantes ("Gahal") y voluntariosde ultramar ("Mahal") que poseían experiencia bélica de la Segunda GuerraMundial; las IDF reagruparon sus fuerzas y se prepararon para la lucha emple-ando las nuevas armas recibidas, armas pesadas y aviones que pilotaban avia-dores nativos, así como algunos llegados del otro lado del Atlántico. Hacia elfinal del período de tregua, se hizo evidente que ésta no se prolongaría. El únicoacuerdo que Bernadotte pudo conseguir de ambos bandos fue la desmilita-rización del área del Monte Scopus, en Jerusalem. La tregua terminó a las seisde la mañana del 9 de julio y, acto seguido, se reanudaron las hostilidades.Duraron diez días, al cabo de los cuales se produjo una segunda tregua.
La segunda tregua
Las violaciones de la segunda tregua que se inició el 18 de julio a las sietede la tarde, comenzaron casi desde el primer día. En la zona de Jerusalem, laLegión Arabe intensificó los bombardeos contra la ciudad nueva, y durante losmeses de julio, agosto, setiembre y octubre, Jerusalem fue blanco de laartillería, de los morteros y de las ametralladoras casi cada noche. (Los ataquescesaron el 30 de noviembre, cuando ambas partes aceptaron un "sincero alto elfuego".) El 12 de agosto, la Legión destruyó los depósitos de bombeo de agua deLatrún, aunque se hallaban bajo el control de la Naciones Unidas, pero Israeltendió rápidamente una tubería a lo largo de la Ruta de Birmania, y pudo asísuministrar agua a Jerusalem. En el norte, el Ejército Arabe de Liberaciónmantuvo encuentros esporádicos y simples intercambios de disparos con lasposiciones judías.
Las negociaciones para firmar el armisticio se iniciaron en la isla de Rodasel 13 de enero de 1949 bajo los auspicios de Ralph Bunche. Al principio, elmediador se reunió por separado con los representantes de cada bando; cuando
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hubo indicios de progreso, ambas partes celebraron reuniones de carácter infor-mal; y, al llegarse a un acuerdo, los representantes se reunieron presididos porBunche para firmarlo.
El armisticio con Egipto se firmó el 24 de febrero y concedió a Israel todo elNeguev hasta el límite del Sinaí, pero la franja de Gaza de alrededor de Aujaal-Hafir (Nizanah). Para asegurar el control real del Negev se enviaron doscolumnas de Infantería a principios de marzo de 1949, en la que se denominó"Operación Uvdah" ("Hecho"). El 10 de marzo, las avanzadillas de las columnasalcanzaron el abandonado puesto de Policía de Umm Rash Rash en el golfo deAkaba, punto que aseguraba a Israel una salida al mar Rojo y restauraba elnombre bíblico de Eilat.
De acuerdo con el convenio firmado con el Líbano el 23 de marzo, en Ras al-Nakura (Rosh ha-Nikrah), se fijó como línea de demarcación la antigua fronterade cuatrocientos cincuenta kilómetros de longitud. Dejaba en poder de los jor-danos la zona densamente poblada de Judea y Samaria (llamada la "RiberaIzquierda" tras su anexión por Transjordania), incluía el Jerusalem Oriental y,luego, se extendía a través del Mar Muerto, por la frontera mandataria dePalestina Occidental hasta el límite del mar Rojo (el golfo de Akaba), a unoscinco kilómetros al oeste del puerto de Akaba. Se convino en que la LegiónArabe reemplazaría a los iraquíes en el área del "Triángulo".
El acuerdo de armisticio firmado con Siria el 20 de julio de 1949, en el edi-ficio de las Aduanas, al este del río Jordán, puso fin a la Guerra deIndependencia de Israel, que había durado veinte meses; había costado seis milmuertos, casi el 1% de toda la población desde que había nacido el Estado. Pero,sin duda alguna, había establecido sólidamente el Estado Judío, como hechoreal, en el mapa del Oriente Medio.
NACE EL ESTADO DE ISRAEL
En Palestina, el último Alto Comisionado se preparaba para la expiracióndel mandato. Se mostraba inexorable en su negativa a permitir que se entre-gara en forma ordenada la autoridad. La política inglesa consistía en evitartodo lo que pudiera interpretarse como una cooperación con la resolución de laUN. Debía existir una no- cooperación con la resolución hasta el último momen-to para el Establecimiento del Estado Judío. Los ferrocarriles dejaron de correr,los correos de funcionar. Se quemaron los archivos oficiales. El activo fuetrasladado a Inglaterra, rematado en pública subasta y entregado a los árabes.Aunque había un superávit considerable, en la Tesorería no quedó un solo cen-tavo para que lo usara un gobierno sucesor.
Los dirigentes judíos planearon cuidadosamente su administración inde-pendiente. Se formaron comités para manejar diversos departamentos admin-istrativos. Se imprimieron estampillas, se acuñó moneda de carácter provision-al y se estableció una protoadministración completa. A comienzos de abril, secreó un Consejo Nacional formado por treinta y siete miembros, compuesto porlos miembros elegidos del movimiento Mundial Sionista residentes en Palestinay ejecutivos del Vaad Leumí y de otros cuerpos públicos. El consejo nombró una
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Administración Nacional, responsable ante sí misma. Autorizó un empréstitointerno; estableció una organización de potencial humano y abastecimientos ylogró un acuerdo entre la Haganá y las organizaciones disidentes para unacooperación total en las operaciones militares.
El 14 de mayo de 1948, el alto comisionado sir Alan Cunnigham, con losúltimos miembros de su personal, abandonó el territorio de Palestina. Desde uncrucero apostado fuera de las aguas territoriales, hizo la señal de que había con-cluido la era del Mandato. Esa era había nacido en una atmósfera de vivaexaltación y caducaba ahora en el caos y en el descrédito. En una breve cere-monia realizada ese día en el Museo de Tel Aviv, a las 4 de la tarde, nació elEstado de Israel. Doscientos cuarenta hombres fueron testigos de una nuevapágina de la historia judía, mientras David Ben Gurion la Proclamación de laIndependencia:
“Eretz-Israel (la Tierra de Israel) fue la cuna del pueblo judío. Allíse modeló su identidad espiritual, religiosa y política. Allí obtuvopor primera vez la nacionalidad, creó va1ores culturales de signifi -cación nacional y universal y le dio al mundo el eterno Libro de losLibros. “Después de haberse visto desterrado por la fuerza de su territorio,el pueblo judío se mantuvo fiel a él durante toda su Dispersión ynunca dejó de orar y de confiar en que volvería a él y en que serestauraría allí su libertad política.“Impulsados por ese apego histórico y tradicional, los judíos seesforzaron en todas las generaciones siguientes en volver a radicarseen su antigua patria. En las décadas recientes, volvieron allí enmasa. Los pioneros, los maapilím (inmigrantes que venían a Israeldesafiando las reglamentaciones restrictivas) y los defensores,hicieron florecer los desiertos, resucitaron el idioma hebreo, constru -yeron aldeas y ciudades y crearon una comunidad próspera, gober -nando su propia economía y su propia cultura, amando la paz perosabiendo defenderse, trayéndoles los beneficios del progreso a todoslos habitantes del país y aspirando a una nacionalidad independi -ente. “En el año 5657 (1897), respondiendo al llamado del padre espiritualdel Estado Judío, Theodor Hertzl, el Primer Congreso Sionista sereunió y proclamó el derecho del pueblo judío al renacimientonacional en su propio país. “Ese derecho fue reconocido en la Declaración Balfour del 2 denoviembre de 1917 y reafirmado en el mandato de la Liga de lasNaciones que, en particular, dio sanciones internacionales a laconexión histórica existente entre el pueblo judío y Eretz-Israel, y alderecho del pueblo judío a reconstruir su Hogar Nacional. “La catástrofe que agobió recientemente al pueblo judío- la masacrede millones de judíos en Europa- fue otra demostración inequívocade la urgente necesidad de solucionar el problema de su falta deterritorio restableciendo en Eretz Israel el Estado Judío, que lesabriría de par en par las puertas de la patria a todos los judíos y leconcedería al pueblo judío el status de miembro con plenos privile -
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gios de la comunidad de las naciones. “Los sobrevivientes de la hecatombe nazi de Europa, así como judíosde otras partes del mundo, siguieron emigrando a Eretz Israel, sinacobardarse ante las dificultades, las restricciones y los peligros ysin cesar en ningún momento de afirmar su derecho a una vida dedignidad, libertad y trabajo honrado en su primera patria nacional. “En la Segunda Guerra Mundial, la comunidad judía de ese paíscontribuyó plenamente a la lucha de los países amantes de la liber -tad y la paz contra las fuerzas de la perversidad nazi y, con la san -gre de sus soldados y su esfuerzo bélico, se ganó el derecho a serreconocida entre los pueblos que fundaron las Naciones Unidas. “El 29 de noviembre de 1947, la Asamblea General de la UN aprobóuna resolución que exhortaba a establecer un Estado Judío en EretzIsrael. La Asamblea General pidió que los habitantes de Eretz Israeltomaran las medidas que fueran necesarias, por su parte, paraaplicar esa resolución. Este reconocimiento por las Naciones Unidasdel derecho del pueblo judío a establecer su Estado es irrevocable. “Ese derecho es el derecho natural del pueblo judío de ser dueño desu propio destino, como todas las naciones, en su propio Estado sobe -rano. “De conformidad con ello, nosotros, los miembros del consejo del pue -blo, representantes de la comunidad judía de Eretz Israel y del movi -miento sionista, estamos reunidos aquí en el día de la terminacióndel mandato británico sobre Eretz Israel. Y, en virtud de nuestroderecho natural e histórico y sobre la base de la resolución de laAsamblea General de las Naciones Unidas, declaramos establecidocon este acto un Estado Judío en Eretz- Israel, que será conocido conel nombre de Estado de Israel. “Nosotros declaramos que, con efecto desde el momento de la termi -nación del Mandato, siendo esta noche la víspera del Sábado, 6to deIyar de 5708 (15 de mayo de 1948), hasta el establecimiento de lasautoridades electas, regulares, del Estado, de conformidad con laConstitución que será adoptada por la Asamblea ConstituyenteElecta no más tarde del 1º de octubre de 1948, el Consejo del Puebloactuará como Consejo de Estado Provisional, y su órgano ejecutivo,la Administración del Pueblo, será el Gobierno Provisional delEstado Judío, que se habrá de llamar “Israel”. “El Estado de Israel estará abierto a la inmigración judía y a laReunión de los exiliados; fomentará el desarrollo del país en benefi -cio de todos los habitantes; se basará en la libertad, la justicia y lapaz, tales como las vieron los profetas de Israel; asegurará una abso -luta igualdad de derechos a todos sus habitantes con prescindenciade religión, raza o sexo; garantizará la libertad de culto, conciencia,idioma, educación y cultura; protegerá los Lugares Santos de todaslas religiones; y será fiel a los principios de la Carta de las NacionesUnidas. “El Estado de Israel está dispuesto a cooperar con los organismos yrepresentantes de las Naciones Unidas para la aplicación de la reso -lución de la Asamblea General del 29 de noviembre de 1947 y dará
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pasos para lograr la unión económica de todo Eretz-Israel. “Exhortamos a las Naciones Unidas a que ayuden al pueblo judío aconstruir su Estado y a que reciban al estado de Israel en la comu -nidad de las naciones. “Exhortamos- en pleno desarrollo de la lucha lanzada contranosotros desde hace meses- a los habitantes árabes del Estado deIsrael a mantener la paz y a participar en la construcción delEstado sobre la base de una plena e igual ciudadanía y a la corres -pondiente representación en todas sus instituciones provisionales ypermanentes. “Tendemos nuestra mano a todos los Estados vecinos y a sus pueblosen una oferta de paz y buena vecindad y los exhortamos a establecervínculos de cooperación y ayuda mutua con el pueblo judío soberanoinstalado en su propio territorio. El Estado de Israel está dispuestoa cumplir con su parte en su esfuerzo en común para el progreso detodo el Medio Oriente. “Exhortamos al pueblo judío de toda la Diáspora a agruparse entorno de los judíos de Eretz Israel en las tareas de la inmigración ya construir y ayudarlos en la gran lucha por la realización delsueño inmemorial: la redención de Israel. “Depositando nuestra confianza en el Todopoderoso, ponemos nues -tras firmas al pie de esta proclamación en esta sesión del ConsejoProvisional del Estado, sobre el suelo de la patria, en la ciudad deTel Aviv, en esta víspera del Sábado, el 5to día de Iyar (14 de mayode 1948).
Daniel Auster David Ben GuriónMordekhai Bentov Golda MyersonItzchak Ben Zvi Nachum NirEliyahu Berligne Zvi SegalFritz Bernstein Rabi Yehuda Leib Rabí Wolf Gold Hacohen FishmanMeir Grabovsky David Zvi PinkasItzchak Gruenbaum Aharon ZislingDr Abraham Granovsky Moshé KolodniEliyahu Dovkin Eliezer KaplanMeir Wilner-Kovner Abraham KatznelsonZerach Wahrhaftig Felix Rosenbluoth Herzl Vardi David RemezRachel Cohen Berl RepeturRabi Kalman Kahana Mordekhai ShattnerSaadia Kobashi Ben Zion SternbergRabi Itzchak Meir Levin Moshé ShapiraMeir David Lowenstain Moshé ShertokZvi Luria
La noticia del reconocimiento por el presidente Truman causó el efecto deun rayo sobre los delegados de la UN en la Asamblea General. Asombró a lospropios representantes norteamericanos. La Unión Soviética fue la potenciaque reconoció en segundo término a Israel. A la mañana siguiente el joven
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Estado de Israel estaba en plena guerra. Mientras los aviones egipcios bom-bardeaban la zona de Tel Aviv, el primer barco de inmigrantes traía a los “ile-gales” detenidos a las costas de un país libre. En el curso de 24 horas, habíacaducado un mandato, se había proclamado y reconocido a un Estado y se habíalanzado una invasión armada. Era el día más lleno de acontecimientos de lahistoria moderna de Israel.
Consigna de trabajo:
Una vez que hayas leído la Declaración de la Independencia del Estado deIsrael:1. Divídelo según su contenido en: Factores históricos (culturales y reli -giosos), jurídicos, humanísticos, políticos (derecho a la autodeterminación)etc. Y en objetivos propuestos. 2. Elije un título para cada parte.
La organización del Estado
Mientras proseguía la lucha esporádica y antes de que se hubieran estableci-do las fronteras de facto del nuevo Estado, se tomaron medidas necesarias paradar al régimen una sólida base de anuencia democrática. El 8 de noviembre del948 se proclamó un toque de queda de 24 horas de duración, y mientras toda lapoblación permanecía en sus hogares, se efectuó un censo. Se halló que lapoblación de las zonas que estaban a la sazón bajo control israelí era de 782.7l3judíos y 69.000 árabes (tras la celebración de los Acuerdos de Armisticio y la read-misión de los árabes separados de sus familias, el número de árabes se elevó aalrededor de 120.000). De éstos, 506.567 tenían derecho de voto. No había tiemposuficiente para dividir al país en distritos electorales, por lo que las elecciones seefectuaron conforme al sistema de representación proporcional en vigencia en losCongresos Sionistas y la Asamblea Elegida de la Kneset Israel. El número de ban-cas se fijó en 120, al igual que el número de miembros de la Kneset Haguedolá, laGran Asamblea establecida después del antiguo retorno de Babilonia.
El 25 de enero se llevaron a cabo las elecciones: casi el 87% de los votantes– 440.000- participó en las mismas, incluyendo 73.000 votos emitidos en urnasespeciales para soldados. Los resultados obtenidos dieron muestras de un con-siderable nivel de continuidad política. El principal partido de la Asamblea fueMapai, con 46 bancas; seguido por el Mapam, el Partido Unido de losTrabajadores con 19; y el Frente Religioso Unido (Mizraji, Hapoel Hamizrají,Agudat Israel y Poalei Agudat Israel) con 16. El Partido Revisionista fue reem-plazado por el movimiento Jerut, fundado por el I. Z. L., que obtuvo 14 bancas.Los diversos partidos de la clase media se coaligaron en dos grupos: losSionistas Generales, con 7 bancas y los Progresistas con 5. Los Comunistas y lalista comunal de los sefaradíes contaron con 4 bancas cada uno. También huboun partido árabe, la Lista Democrática de Nazaret, con 2 bancas; otros votos
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árabes favorecieron a diferentes listas judías, especialmente a Mapai y losComunistas. La Lista de los Luchadores (LEJI); WIZO (Mujeres Sionistas) y laFederación Yemenita obtuvieron 1 banca cada uno.
La primera sesión de la Asamblea se realizó en Jerusalem, como señal dela determinación israelí de que la Ciudad Santa debía ser la capital del EstadoJudío, en las oficinas centrales de la Agencia Judía, que había dirigido la luchapor la existencia del Estado y presidida por Jaim Weitzmann en calidad dePresidente del Consejo Provisional del Estado. El Estado de Israel no posee unaConstitución material, rígida, sino por el contrario tiene una constitución for-mal; es decir un conjunto de leyes fundamentales que regulan el estado de dere-cho y el sistema democrático. Los principios rectores del estado son:
1- La soberanía reside en el pueblo, que expresa su voluntad en la Kneset. 2- La Kneset se conformará por elecciones generales, nacionales, con el voto
directo, igual, secreto y universal. 3- La igualdad completa será garantizada a todo habitante y ciudadano, sin
distinción de raza, nacionalidad, religión, sexo o comunidad. 4- Serán garantizados al ciudadano todos los derechos y libertades (libertad
de conciencia palabra, de expresión, de prensa, etc.)
En 1949 la primera Kneset promulgó la Ley de la Bandera Nacional,fijando los colores: blanca con dos franjas celestes y un símbolo, el MaguénDavid de color celeste y la creación del Escudo Nacional la Menorá de sietebrazos bordeada de dos ramas de olivo y el nombre Israel; además se fijo el díade la Creación del Estado con fecha del 5 del mes de Iar, como fiesta nacional.
Otras leyes establecían el servicio militar obligatorio y la ley dedefensa.
Debido al problema de la seguridad nacional y la preocupación por la defen-sa de la patria y del pueblo se creó en 1949 Tzahal, el ejército de defensa deIsrael. La ley establecía que todo residente permanente del Estado de Israeldeberá servir en las fuerzas regulares del Tzahal y las fuerzas de reserva“miluím”. Todo varón entre la edad de 18 y hasta 29 años, que posea aptitudespara el servicio, deberá enrolarse durante 30 meses. Toda mujer entre los 18 y26 años con excepción de la mujer casada deberá servir durante 24 meses.
Los reservistas deberán servir durante 31 días continuos por año y un díapor mes hasta los 34 y 39 años respectivamente; además el servicio se prolon-gará hasta los 49 anos debiendo prestar por lo menos 14 días de servicio por año.
La seguridad del Estado no sólo se fundamenta en la defensa militar sinoademás en los principios de Construcción de la Patria (binian Hamoledet);Reunificación de las diásporas (kibutz Galuiot) y Colonización (ishuvHashmamá).
Por ello fueron creados dentro de Tzahal las organizaciones Najal, Noarjalutzí Lojem; de jóvenes jalutzím que reciben entrenamiento agrícola y militarprevio al enrolamiento obligatorio; el lema que sintetiza los objetivos del gruposon un ejemplo de su accionar: “Sólo aquel hombre que sabe plantar un árbolpuede cuidar de lo plantado”.
La organización Gadná – Gdudei Noar- jóvenes secundarios entre catorce ydieciocho años hasta el enrolamiento obligatorio, cuyo objetivo es la preparación
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pre- militar, desarrollando valores humanos, amor a la tierra capacitación físicay mental.
La Ley del Retorno
La permanente llegada de refugiados judíos del resto del mundo prove-niente de Europa, Asia y Africa signó los comienzos del nuevo Estado.
La ley del retorno, sintetiza la mejor expresión y sentimiento, que el Estadode Israel es el patrimonio del pueblo judío todo. Inspirado en el versículo delProfeta Irmiahú Cap. XXIX vers. 14, “Seré hallado de vosotros, dice, Adonai,
Y tornaré vuestra cautividad y os juntaré de todas las gentes, y todos loslugares adonde os arrojé, y os haré volver al lugar de donde os hice ser llevados”.
El 20 de Tamuz, Julio de 1950, se promulgo la ley en la Kneset, estable-ciendo, que
“todo judío tiene derecho a establecerse en Israel; con excepción deaquellos que pongan en peligro al pueblo israelí por sus actividades,o por poseer enfermedades o por tener un pasado penal.”
Por extensión de la Ley del retorno, tiene derecho todo judío a ser ciu-dadano del Estado, en forma automática sin trámite alguno, con la sola volun-tad de establecerse en la tierra de Israel; mientras que serán consideradosisraelíes nativos aquellos que nacidos de padre o madre fueran consideradosciudadanos al momento de crearse el Estado de Israel.
Entre otras leyes fundamentales se estableció la ley de EducaciónObligatoria: entre los cinco y los diecisiete años, siendo obligatorio el ingresoal jardín de infantes más ocho años de escuela primaria. La ley determina quetodo empleador que contrate a un joven entre catorce y diecisiete años, deberáobligatoriamente anotarlo en la jurisdicción que le corresponda, dentro de losprimeros 7 días de otorgado el empleo, para que reciba educación general, bajopena de prisión o multa o los dos castigos simultáneos.
La educación es gratuita y estatal. La separación de la educación de los gru-pos políticos diferentes y su unificación bajo una sola dirección nacional se efec-tivizó por ley en el mes de Elul, agosto de 1953. Se fijaron dos orientaciones ala educación: la educación estatal y la educación estatal- religiosa, pudiendo lospadres elegir para sus hijos cualquiera de ellas. La ley reconoce además la exis-tencia de escuelas no oficiales que deberán ajustarse a los programas oficiales.
Entre 1949 y 1951 se produjo el retorno de miles de judíos provenientes dediferentes diásporas. Las más numerosas 395.000 almas provinieron deEuropa, entre ellos solo 360.000 llegados de Europa Oriental; desde Africa lle-garon 251.000 inmigrantes; 211. 000 oriundos de Asia y 11.000 solamente deAmérica del Norte y del Sur. Los olím provenientes de los Estados Árabesfueron la prioridad del nuevo Estado, debido a la amenaza de aniquilación quepesaba sobre ellos tras la Guerra de la Independencia.
Los Estados Arabes sometieron a los judíos residentes en Irak, Yemen, Irán(Persia), Marruecos, Argelia, Egipto a condiciones espantosas, restringiendosus libertades y limitando sus derechos económicos, llegando incluso a cometer
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ataques contra ellos. A tal efecto fueron realizados los operativos de salvataje“Alfombra Mágica”, donde durante 30 meses se realizaron vuelos continuosentre Adén y Lod, trayendo 50. 000 judíos yemenitas. El “Operativo Koresh”,permitió el rescate de 40. 000 judíos de Persia (Irán), llegando en su mayoríapor vía aérea y algunos pocos por mar.
En el año 1952, casi un cuarto de millón de los nuevos inmigrantes residíaen viviendas precarias, cabañas improvisadas y aún en carpas. La obra cons-tructora y la absorción de miles de inmigrantes llegó a su mejor organización,recién en el período comprendido entre 1954 y 1956. Esta aliá organizada “delBarco a la Aldea” llevó a Israel a más de 75. 000 olím, en su mayoría traba-jadores que colonizaron desde el Galil hasta el Neguev.
Retorno a Israel