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Fundació Terra 1994 - 2009 15 años por la Tierra Avinyó, 44 - 08002 Barcelona Tel. (+34) 93 601 16 36 | Fax (+34) 93 601 16 32 [email protected] | www.ecoterra.org www.terra.org Fundación Tierra Fundació Terra

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Fundació Terra 1994 - 2009

15 años por la TierraAvinyó, 44 - 08002 Barcelona

Tel. (+34) 93 601 16 36 | Fax (+34) 93 601 16 [email protected] | www.ecoterra.org www.terra.org

Fundación TierraFundació Terra

Fundació Terra 1994 - 2009. Quince años por la Tierra

Texto: Jordi Miralles

Fotos: Archivo gráfi co Fundación Tierra.

Edición: Fundación Tierra

Barcelona, primavera 2010

Para ver más actividades de Fundación Tierra visitar www.ecoterra.org y las galerías

de fotografías. Para estar al día de las novedades, suscríbete al boletín.

La Fundación Tierra está inscrita en el Ministerio de Cultura del Gobierno de España con el número de Registro 238.

10 visiones10 imágenes

15 añosde un sueño

vivir en armonía con el planeta

Botijos contra el cambio climático (2008)

Los pequeños cambios son poderosos

Marismas de Molins de Rei (1995)

Creamos naturaleza para una ciudad respetuosa con la biodiversidad

A favor de los pequeños cambios

En la primavera de 1994, tres amigos con una dilatada trayec-toria de participación en diversas organizaciones ecologistas decidieron invertir un millón de las antiguas pesetas (6.010 euros) para crear una fundación cultural privada ambiental: la Fundación Tierra.

Nuestros objetivos son, por un lado, aportar ideas y actividades que permitieran a la sociedad ser proactiva reduciendo el con-sumo de recursos energéticos y de materias primas y, por otro, estimular el desarrollo de las energías renovables. En defi nitiva, impulsar un estilo de vida más austero en una sociedad no con-sumista. Aquella inversión inicial y la capacidad de incorporar nuevas voluntades permitieron captar recursos económicos pú-blicos y privados para llevar a cabo los objetivos fundacionales.

La Fundación Tierra, “Fundació Terra” en catalán, se constituyó como una entidad para tiempo indefi nido y, aunque no tiene socios como tales, sí tiene prevista la fi gura de los Amigos de la Fundación. Su sede social está en Barcelona, pero se inscribió en el Protectorado del Ministerio de Cultura, con la voluntad de traspasar territorios. De sus estatutos destaca la sensibilización ambiental por medios telemáticos: un año antes de su fundación había nacido la world wide web, y creímos en su potencial. Actualmente la comuni-cación con las personas interesadas en la actividad de la Fundación se realiza a través de un boletín electrónico.

Defendemos que los pequeños cambios son poderosos, porque la mejor estrategia de conservación del planeta es aquella que proviene de asumir cambios en nuestra propia conducta. Nuestros libros de cabecera: Simplicidad radical, Cradle to cradle, Economía solar global y Autonomía energética. Nuestra energía: la energía solar en todas sus formas.

1994, primer

logo de

Fundación Tierra.

Central solar fotovoltaica en la sede social (1998)

Compensamos el consumo de nuestra energía eléctrica con electricidad

solar límpia

La cooperación como principio vital

Nos convence la simbiogénesis de Lynn Mar-

gulis, o generación por simbiosis, o lo que es lo

mismo: el contacto físico entre dos organismos

vivos distintos para cooperar y acabar dando

un nuevo ser vivo. Porque Gaia es eso: una red

entretejida de toda la vida en sus diferentes for-

mas: células, cuerpos y sociedades. Como decía

E.F. Schumacher, autor de Small is beautiful: un

gramo de práctica vale más que una tonelada

de teoría. La Fundación Tierra ha basado buena

parte de su práctica en la acción simbiótica o

cooperativa con otras entidades.

Para ser útiles a la formación permanente de los

docentes en temas ambientales, establecimos

un acuerdo con l’Associació de Mestres Rosa Sensat,

que edita una prestigiosa revista, Perspectiva Escolar,

para coproducir un suplemento monográfi co de

educación ambiental cuatrimestral, titulado Perspec-tiva Ambiental. Ellos aportaban sus casi cuatro mil asociados y nosotros, llegar a

un público multiplicador. Desde 1995 hasta hoy se han publicado 48 números,

todos ellos con temas que se han avanzado a su tiempo. A partir de 2006 estas

monografías se han editado con papel certifi cado por el Forest Stewardship

Council (FSC), para ello se creó un Grupo de Cadena de Custodia propio que

estuvo vigente entre 2006 y 2009.

La cooperación como estrategia de actuación ha marcado muchas de las acti-

vidades de la Fundación Tierra. En 1998 se diseñó una acción única a favor de

incentivar la recogida selectiva de papel “Fem una muntanya de paper”. Participa-

ron El Periódico, Televisió de Catalunya, Storaenso, el Ayuntamiento de Barcelona

y el Estudio Mariscal. Actuamos de catalizador y cada cual aportó lo que realmen-

te tenía y lo que mejor sabía hacer. El día 28 marzo del citado año, en la Plaza

Catalunya de Barcelona, se recogieron cinco toneladas de papel periódico con

una participación de más de 20.000 ciudadanos.

La ecopapelera diseñada por el

Estudio Mariscal para recoger

papel usado y poderlo reciclar.

Lámpara solar Noctisolar (2000)

Pusimos luz a la esperanza porque más de mil millones de humanos

no tienen luz artifi cial por la noche

Enamorados de la Tierra

El amor es la fuerza más poderosa que poseemos los humanos. Los primeros años de la Fundación Tierra fueron dedicados a la exaltación de la naturaleza. En el año 1995 creamos la laguna de agua dulce más grande cerca de Barcelona, con seis hectáreas de ecosistema marismeño. Se hizo recuperando un antiguo meandro del río Llobregat, en el municipio de Mo-lins de Rei. Todo lo que aprendimos sobre restauración de riberas fl uviales lo trasladamos a un manual único en aquel momento. Este espacio natural ha tenido que luchar para sobrevivir a dos grandes obras: una autovía primero y al trazado del AVE a continuación. Sin embargo, hoy tiene incluso mayor superfi cie y alberga más de 34 especies de aves.

También tuvimos un contrato de opción de compra de 3.000 hectáreas del valle pirenaico más silvestre: la vall d’Àrreu. Ninguna institución quiso apoyar su ad-quisición por sólo 90 millones de las antiguas pesetas, una verdadera ganga. Hoy está parcialmente en manos de los especuladores del esquí. También, hace casi tres lustros, planteamos la reintroducción del halcón en Barcelona. Nos dijeron que era inaudito. Años más tarde se iniciaba el proyecto con éxito por parte de otra entidad. También planteamos la recuperación del único espacio natural situado dentro de Barcelona, el Sot de la Fuixarda en la montaña de Montjuïc. Pero siempre nos dieron largas desde el Ayuntamiento de Barcelona. Hoy sigue desvencijado como en aquel entonces.

La idea original de la protección de la naturaleza dio paso una nueva forma de amor: conseguir un cambio de hábitos en nuestro estilo de vida. Mientras, se crearon otras fundaciones cercanas dedicadas exclusivamente a la protección de la naturaleza. En 1998, con la inauguración de nuestra nueva sede, adecuada con criterios de rehabilitación ecológica impensables en la época, nos lanzamos a un nuevo ideal para proteger la Tierra que todavía sigue vigente: alimentar la sim-

plicidad vital desde nuestros corazones. Porque la Tierra es el único planeta que

tenemos para enamorarnos.

Proyecto para la recuperación de la

Fuixarda, elaborado en 1997.

terra
Subrayado

Cocina Solar Parabólica (2002)

Imaginando la barbacoa del siglo XXI

Internet en el corazón: de Terra.es a Terra.org

Cuando se creó Fundación Tierra en abril de 1994, había en España no más de cien entidades conectadas a Internet. Uno de los objetivos de la entidad era la difu-sión ambiental por medios telemáticos. La Fundación Tierra registró el dominio www.terra.es para su uso como espacio web medioambiental a mediados de 1995, dado que www.terra.org estaba ocupado por una empresa de náutica americana. En aquel momento no había normativa de registro para dominios .es. Todos los dominios creados antes del 1 de agosto de 1996 pasaron a denominar-se dominios históricos.

Durante el verano de 1999, una empresa registradora de dominios solicitó la cesión de www.terra.es. Se llegó a un acuerdo con la misma el 24 de setiembre. La empresa registradora cedía el dominio www.terra.org, de su propiedad, y además aportaba fondos para la actividad ambiental de la Fundación Tierra. El 30 de septiembre 1999, Terra Networks se presentaba en sociedad con terra.es.

Un año más tarde, determinados contenidos del portal terra.es fueron denuncia-dos y señalaron como responsable a la Fundación Tierra, por ser ésta la titular del dominio. Para resolver estos equívocos, en noviembre de 2000 se fi rmaba que cada entidad asumía la titularidad del dominio en cesión hasta entonces. Fruto de este nuevo pacto, se mantenía el link a terra.org en la página de Terra Networ-ks y ésta, además, asumía el patrocinio de diferentes actividades medioambien-tales de Fundación Tierra entre el 2001 y 2002. El 16 de julio de 2005, tras más de seis años de polémica, Terra Networks se fundió en el seno de Telefónica.

Actualmente, Terra.org es uno de los portales de ecología más vistos en España, con más de 1.5 millones de visitas anuales.

Página de inicio de la web de Fundación

Tierra en el dominio www.terra.es en 1996.

Y logotipo adoptado por el nuevo portal

Terra.org de Fundación Tierra en 2001.

Rotor y Duopower (2004)

Algún día todas las bicicletas se equiparán con un sistema de pedaleo

sin punto muerto como es el Rotor y con sillines ergonómicos y

saludables como los Duopower

Sin bici no hay paraíso

La Fundación Tierra nació en bicicleta. Dos de los tres fundadores llegaron al notario en bici, pues éste era su vehículo desde hacía años. La bicicleta es la máquina más efi ciente jamás inventada. El ciclista es tres o cuatro veces más rápido que el peatón y gasta un total de cinco veces menos calorías por kilómetro que éste. Con la bicicleta, como afi rmaba Ivan Illich, el hombre supera el rendimiento posible de cualquier máquina o animal evolucionado. La bicicleta ha estado presente en muchos aspectos de la vida de la Fundación Tierra. En nuestra sede hay aparcamiento para doce bicicletas. En la entidad hay tres bicicletas plegables para necesidades de sus colaboradores. Hemos impulsado proyectos para promocionar la salud en el uso de la bicicleta como sistema de transporte. Promovimos el sistema de pedaleo sin punto muerto desarrollado por la empresa española Rotor Componentes Tecnológicos y el sillín ergonómi-co también de diseño local, Duopower, entre otras tecnologías, para la campaña Pon salud a la bicicleta.

Hemos adquirido varios triciclos para el transporte de niños y de mercancías, para demostrar sus bondades. Un de los objetivos mostrar las posibilidades para llevar a los niños y niñas al colegio en bici. Impulsamos el proyecto Liliana, junto con la tienda Espaibici, para demostrar las bondades del tándem tecnológico Hase Pino para las personas con discapacidades. No somos una entidad ciclista, pero la bici corre por nuestras venas.

Un mundo sostenible pasa por invertir en la bicicleta, especialmente en las ciu-dades, con todas sus posibilidades. Ser propietario de una bici nos hace cons-cientes de nuestros propios límites y esto resulta esencial para una sociedad necesitada de decrecimiento. No hay paraíso sin bici y, por este motivo, seguire-mos apostando por las aplicaciones de la bici en soluciones de movilidad. Nues-tro último proyecto es impulsar el desarrollo de una bici plegable compacta. Y es que hay que predicar con el ejemplo.

NO OIL (2005)

Un grito permanente para recordar que debemos

abandonar nuestra adicción a los combustibles fósiles

Enchufados al Sol

No hay Tierra sin Sol. El aprovechamiento de la energía solar por parte de la humanidad, aun-que es antiguo, hace poco más de 50 años que se aplica como tecnología industrial. Hace diez años que la Fundación Tierra se enchufó al Sol. Conectamos a la red eléctrica de nuestra sede la primera instalación solar fotovoltaica doméstica. Con esta instalación llevamos ahorrados cerca 10.000 kg de CO

2. No vendemos la electricidad,

sino que se autoconsume, pues creemos que ser autoproductores de energía verde no debe burocratizarse. Hemos ahorrado más de 25.000 kWh nucleares y fósiles.

Pero reclamar el derecho a la democracia energética nos costó un contencioso administrativo y cuando los tribunales alegaron nuestra razón pero indicaron que era un problema del legislador, iniciamos una huelga solar. Con la aprobación del Protocolo de Kyoto, en febrero de 2005, decidimos volver a enchufarnos para au-toconsumirla. Defendemos que la energía fotovoltaica es una herramienta clave para la sostenibilidad. La ciudadanía tiene derecho a sus kilowatios verdes.

Para promover la participación ciudadana en las renovables, inventamos el concep-to de la central solar fotovoltaica popular, la Ola Solar. En Barcelona, en el Mercat del Carmel, 140 personas aportaron 300.000 € en cantidades inferiores a 3.000 €. La iniciativa levantó mucho interés e iniciamos otra en abril de 2008, en la Universidad Autónoma de Madrid que empezó a funcionar en 2010.

Pero llegó el 30 de septiembre de 2008 y el Gobierno aprobó el RD 1578, que debería haberse titulado “Prohibida la fotovoltaica por Decreto”. La Ola Solar de Madrid, con cien personas, cayó así en las garras de la burocracia energética. Se precisaron 18 meses para su puesta en marcha (se conectó a fi nales de ene-ro2010). Por eso hemos radicalizado la lucha por el derecho a enchufarnos al Sol, con la acción de la Guerrilla Solar. Necesitamos más ciudadanos que se apunten a la campaña, adquiriendo el Kit Fotónico GS120 a favor de la democracia energéti-ca. Hace diez años ya reclamábamos este derecho y hoy seguimos siendo activis-tas solares. No queremos un futuro radioactivo.

Refl ector Scheffl er (2006)

Acogemos el mayor refl ector solar para demostraciones

culinarias del Sur de Europa

Generando ideas

Pensar y actuar en consecuencia exige información con-trastada y bien estructurada. En 1995 se creó la colección de libros Documentos Tercer Milenio para abordar temá-ticas pioneras en el ámbito ambiental que estimulasen nuevos comportamientos en públicos multiplicadores. El 2005 publicamos Simplicidad radical para promover la austeridad y el decrecimiento económico. Aportamos soluciones para vivir con menos, 5 años antes de la crisis económica.

Durante el Día Europeo Sin Coches del año 2000 se presentó en Barcelona un prototipo de “Solinera” o estación de recarga de vehículos eléctricos en las ciudades para fomentar los vehículos de emisión cero. Aquel día, la Solinera consiguió generar los kilovatios para el funcionamiento de 3 vehículos. En 2009, el gobierno municipal barcelonés anunció que instalarían puntos de recarga. Nos avanzamos, pues, 9 años.

En 1999, preocupados por los más de mil millones de personas sin electricidad para iluminarse de noche, promovimos el desarrollo de una lámpara solar portátil. El producto resultante fue la lámpara solar llamada Noctisolar, de la que se fabricaron 220 unidades. Se distribuyeron en proyectos de cooperación, pero el proyecto no se consolidó, por falta de mercado. Hoy se venden a bajo coste en grandes centros co-merciales, aunque algunas no sean de muy buena calidad. Nos avanzamos 10 años.

En 1995, antes de la ley de envases, nos lanzamos a promover la recogida selectiva de los envases de cartón de bebidas. La jauría ecologista del país nos atacó argumen-tando que al animar a reciclar, incitábamos la utilización de envases de un sólo uso. Se arruinó una incipiente I+D para reciclar este tipo de envase. En 1998 rehabilitamos nuestra sede forrándola (en lugar de madera o placas de yeso laminado) con un tabique de tetrabriks reciclados. En 2010, una empresa papelera cerca de Barcelona consigue ya la separación y aprovechamiento total de todos los componentes de los cartones de bebidas. Un lamentable retraso de 15 años imperdonable.

No hemos tenido toda la suerte necesaria para consolidar determinados proyectos, pero seguimos con ilusión trabajando a favor de los pequeños cambios.

Vermicompostador (2007)

La naturaleza funciona en ciclos y la fertilidad es una de las claves

para garantizar nuestros alimentos. Unos intrépidos gusanos nos

ayudan a esta labor en el vermicompostador.

Ecología práctica en acción

Son cada vez más las personas conscientes de que nuestro estilo de vida no es sostenible y que hay que pasar a la acción: la autonomía energética (especialmente, la energía fotovol-taica), la cocina solar, la movilidad en bicicleta y la horticultura urbana, son nuestras principales herramientas prácticas.

Para la autonomía energética se ha impulsa-do el 1r electrodoméstico de producción de electricidad verde, el kit fotónico GS120 de la Guerrilla Solar. Por esta iniciativa, Fundación Tierra fue distinguida con el Premio Eurosolar 2009, en su edición española y europea.

La promoción del procesado de alimentos con el sol se inició en el 2002 con el apoyo incondicional a la cocina solar parabólica. Con este símbolo se organizaron cinco ediciones del llamado Encuentro Solar y en el año 2006 coorganizamos una Conferencia Internacional sobre el tema. En 2008 contribuimos a la creación de la microempresa alSol , dedicada a la fabricación de solardomésticos.

La horticultura urbana se inicia en 2001 en Fundación Tierra con la publicación del manual práctico El rebost de la ciutat. Se apoyó en 2002 el lanzamiento de la bandeja de cultivo horturbà y en 2007 se creó el primer vermicompostador de producción local con material reciclado de España, en colaboración con la empresa Zicla. En entidades sociales impulsamos el cultivo de alimentos en terraza, cocinándolos con energía solar, y compostando los restos orgánicos para devolverlos, en forma de fertilidad, al huerto.

Para promover la bicicleta impulsamos la exposición interactiva: iBici, soluciones de transporte, que presenta las diferentes tipologías de bici para uso urbano y transporte de mercancías.

La innovación a favor de la vida simple ha sido una constante a lo largo de estos tres

lustros de actividad. En 2005 se inició el primer programa de ecoauditorias domésticas, para enseñar a los moradores cómo ahorrar energía, agua y reducir los residuos. Para visualizar el gasto energético doméstico, se promovió la instalación de contadores in-teligentes que permiten observar de manera instantánea y en tiempo real, el consumo eléctrico de la vivienda.

Instalación de un smart meter en el

proyecto “Mide y reduce la electricidad

contra el cambio climático” de 2008.

Acción participativa (2007)

Capitalismo popular para luchar contra el cambio climático

con energías renovables

Una verdad cómoda

Frenar el calentamiento global es uno de los prin-cipales retos a los que actualmente se enfrenta la civilización humana, como reconocen los expertos. Para reducir las emisiones, primero hay que calcu-larlas, cambiar hábitos y, fi nalmente, compensarlas.

En marzo de 1998 publicamos una monografía sobre cambio climático. En ella se escribió: “Desco-nocemos si podemos provocar un cambio climático global, pero hay evidencias sufi cientes para ser cau-telosos y detener las causas que lo inducen”. España superaba en un 50 % su compromiso de reducción de emisiones. En 2005 ya lanzamos una campaña para visualizar la importancia del uso de la bicicleta en la reducción de emisiones y en la mejora de la calidad del aire en las ciudades con la bicimatrícula simbólica del NO OIL.

A fi nales de 2009, la concentración de dióxido de carbono a la atmósfera se acerca a las 390 ppm, muy por encima de las 350 ppm de 1987, cifra que los científi cos opinan que es la de seguridad. La verdad cómoda es seguir como ahora, con-sumiendo petróleo hasta morir. Desde 2006, Fundación Tierra promueve doce gestos ciudadanos que nos permiten ahorrar hasta un 10 % de las emisiones cotidianas, en la campaña Yo soy la solución.

Cada vez son más las personas convencidas de que más allá de lo que hagan nuestros gobernantes, tenemos que tomar cartas en el asunto por el bien de nuestros hijos/as. Con esta convicción, hemos puesto nuevas herramientas a disposición del público. A fi nales de 2008 conseguimos editar un libro que recogía las intervenciones de los expertos que aparecen en el documental La hora 11 de Leonardo DiCaprio, por ser altamente inspiradoras. La edición de Fundación Tierra es única en el mundo con este formato de libro+DVD. Durante 2009 se realizó el tour Acción en la penúltima hora para la presentación de este fi lm por diferentes universidades españolas y centros de divulgación de la ciencia.

Tenemos que revelarnos a esta verdad cómoda de, simplemente, seguir hablando por los codos sobre cambio climático y no adoptar un estilo de vida más austero y simple.

Kit Fotónico GS120 (2008)

Toda vivienda tiene el derecho de ser autoproductora

de su energía eléctrica de forma limpia

Reinventar el presente

Reinventar signifi ca, sobre todo, dar un nuevo sentido. Reinventar signifi ca también implicar a la ciudadanía en la resolución de los problemas. Reinventar signifi ca convertir nuestra fuerza intelectual y emocional en pura energía para ser activos. Reinventar es sinónimo de innovar con compromiso ético, porque estamos enamorados de la Tierra. Necesitamos reinventar porque, al fi n y al cabo, el futuro no es un sueño, sino una esperanza para los que vienen detrás nuestro o, mejor, para aquéllos que nosotros siempre pondría-mos por delante nuestro porque los estimamos.

Necesitamos un cambio fundamental en nuestra manera de pensar, a pesar de estar atrapados en el deseo consumista. La gran verdad incómoda no es el cambio climático, sino que no queremos reconocer que hay límites para nuestro comportamiento como civilización. Hay límites para nuestra capacidad de consumir alimentos, bienes y hasta información. Hay límites para nuestra capacidad de ser felices, porque esta felicidad no es un surtidor de placer infi nito, sino saber que formamos parte de un colectivo que nos ama. Mientras continuemos creyendo que somos algo separado de la naturaleza, la crisis ecológica seguirá creciendo. La actual crisis ecológica es una señal de que precisamos una transfor-mación profunda de nuestros valores y de nuestro imaginario, una transforma-ción de nuestra forma de comprender el mundo y de entender nuestro lugar el mundo.

No podemos pensar que somos ecologistas simplemente porque reciclamos, compramos alimentos ecológicos y aparatos efi cientes, si después vamos de vacaciones a destinos exóticos para los que son necesarios hacer miles de kilóme-tros volando (un avión genera por km y pasajero unas diez veces mas gases con efecto invernadero que un tren).

La verdadera libertad consiste en dedicar nuestro tiempo en mejorar nuestro entorno social y ecológico. La sufi ciencia, pero, no llegará por el hecho de contraponer la renuncia, a favor del planeta, al placer de tener la casa más

Fundación Tierra recibió el

Eurosolar Award 2009 por la

campaña Guerrilla Solar:

enchúfate al Sol

La hora 11 (2009)

¿Seremos capaces de asumir que hay que cambiar

antes de que sea tarde?

grande, el coche más potente y el móvil mas avanzado. Conseguir una sociedad sostenible exige resituar nuestra civilización, no como algo ajeno y en contra de la naturaleza, sino todo lo contrario. Algunos pueblos indígenas se han guiado por el llamado criterio de la séptima generación: en otras palabras, tener presente las repercusiones de nuestros actos hasta la séptima generación que nos seguirá. Y es que hablar de sostenibilidad no es discutir sobre nuestros actos en el presente, sino sobre las consecuencias que tendrán en el futuro cercano. De ahí que necesitemos promover una nueva cultura de acercamiento a la naturaleza y aprender de la misma.

La tarea divulgativa y educativa de Fundación Tierra tiene sus raíces en esta necesidad de inspirar un cambio cultural basado en el respeto por la naturaleza que, por cierto, ha sido esencialmente el principal denominador común de muchas de las civilizaciones pasadas. Porque la cultura de depredación a sangre y fuego, apenas tiene siglo y medio, y es producto de una cultura animada por el poder de los combustibles fósiles. Adictos al petróleo como somos, hemos perdido toda sensibilidad para progresar de forma armónica con nuestro entorno. Por este motivo, hay que seguir trabajando, para que veamos la naturaleza no como algo inerte para usar y tirar sino como un bien que se nos ha legado para que seamos sólo sus usufructuarios y no sus explotadores. Por el momento debemos continuar en este reto y desde 2009, disponemos de un catálogo de servicios y actividades para seguir trabajando en la consecución de este reto.

Bicicleta tándem para personas con

discapacidad visual del proyecto Liliana.

www.ecoterra.org