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Anne GivaudanEn colaboración con el doctor Antoine Achram

Formas-pensamientoDescubrir y comprender sus

sobre nuestra vida

Traducción: ATGCubierta: Amritagraphic

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FORMAS-PENSAMIENTO

1a edición: julio de 2014 - ISBN: 978-88-97951-03-2

Título original: Formes-pensées I, Formes-pensées II.© 1996 by Editions S.O.I.S., Plazac, France© 2013 by Anne Givaudan, Plazac, France© 2012 by BlossomingBooks™/Edizioni Amrita srl, Torino - Italia.(Reservados todos los derechos para la presente edición)BlossomingBooks es una marca registrada de:Edizioni Amrita srlCorso Stati Uniti, 4110129 Torino - Italiawww.blossomingbooks.com

Imagen de cubierta: Lisa A/Shutterstock.comIlustraciones del doctor Darío Ayala

Impreso en Italia.

Reservados todos los derechos. Ninguna parte de esta publica-ción, incluido el diseño de la cubierta, puede ser reproducida, almacenada, transmitida o utilizada en manera alguna ni por ningún medio, ya sea eléctrico, químico, mecánico, óptico, de grabación o electrográfico, sin el previo consentimiento por escrito del editor.


A Antoine Achram, mi compañero en todos los campos de mi vida, que por su humor y su amor ha sabido esclarecer con una

mirada nueva las diversas etapas de este libro.A todos aquellos que están dispuestos a transformar en sí

mismos la sombra en luz.A todos los enamorados de la vida…

A todos aquellos que aceptan interpretar el papel de su vida lo mejor de sus posibilidades.

A los que saben que no hay ni ganadores ni perdedores, ni victimas ni verdugos.

A los que quieren vivir y no sobrevivir.A todos aquellos que no comprenden por qué la vida es tan

difícil.A todos aquellos que tienen el valor de mirar sus heridas sin

apartar la mirada.


Difundir este libro en Internet en cual-quier formato a través de su página web atenta contra los derechos de los autores del libro, derechos que aún permiten a los escri-tores vivir de su obra, y perjudica igual-mente el trabajo de editores, traductores y demás profesionales del mundo del libro, tanto en papel como en formato digital.


PRÓLOGO

Hace años que vemos y ayudamos a personas afecta-das en su alma o en su cuerpo por formas-pensamiento molestas y destructivas.

Estas personas no tienen otra particularidad que la de enfrentarse a inquietudes cotidianas y hechos repetitivos que entorpecen su camino hacia delante. Son como cada uno de nosotros y podemos en cada momento identificar-nos con ellas.

Al cabo de los años, los contactos y enseñanzas adqui-ridos en los planos físicos o sutiles, hemos llegado a esta evidencia: una forma-pensamiento de la que compren-demos el funcionamiento, la creación y los movimientos tiene muchos menos poder sobre nosotros.

Cuando nos damos cuenta de que no somos nuestras formas-pensamiento y que, sin embargo, tal como padres, contribuimos a su creación, los viejos caen enseguida.

Cuando comprendemos que no podemos renegar de nuestras creaciones sino más bien mirarlas, comprender-las y dejarlas marchar, un inmenso soplo de aire fresco y una libertad nueva pueden entonces habitar en nosotros.

Comprender y transmutar estas formas-pensamiento que nos ahogan y atraen hacia nosotros los aconteci-mientos de nuestra vida, es una etapa indispensable en el camino de la transmutación de las formas-pensamiento.

Este paso hacia una libertad nueva y total no puede hacerse sin nuestra ayuda, pero en nuestra época es esen-cial pasar a una etapa diferente de nuestra vida. Todos


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somos capaces de lograr lo que se propone en la primera parte de esta obra:• “desidentificarnos” de nuestras formas-pensamiento,• comprenderlas,• mirarlas,• y al fin, transmutarlas.

La segunda parte de esta obra estará aún más orienta-da hacia ejercicios y prácticas meditativas, pero no será de utilidad sin la comprensión en su esencia y la puesta en práctica de la primera.

Os deseamos una lectura activa y sabemos desde ya que el simple hecho de leer lo que está escrito en este libro hará su cometido y permitirá el comienzo de la trans-formación de las formas-pensamiento que llevamos con nosotros.

Anne Givaudan y Antoine Achram


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INTRODUCCIÓN

La verdad última, el motor de todo avance es comprender que nada puede estar fuera de nosotros, puesto que todo está en

nosotros, hasta la bóveda estrellada que contemplamos cada noche.Anne Givaudan y Daniel Meurois, Viaje a Shambhala1

Como terapeuta de los planos sutiles y físicos, me he preguntado a menudo cómo haceros más tangible y más concretas estas formas más o menos densas que giran alrededor de cada uno de nosotros y se enganchan a las diversas partes de nuestra anatomía.

Estas formas geométricas a las que yo llamo “formas-pensamiento” siempre me han parecido estar en el origen de todos los obstáculos físicos o psíquicos que nos estor-ban y traban nuestro avance.

Comprenderlas para poder transmutarlas es, hoy para mí, una de las condiciones esenciales para nuestro bien-estar profundo y el elemento indispensable en la limpieza de memorias inútiles que seguimos llevando en brazos hasta el agotamiento de nuestras fuerzas más vivas.

Saber que nuestra manera de pensar influencia nuestro estado de salud es ya una evidencia, por lo que no será el tema de esta obra.

La forma-pensamiento no es un simple pensamiento y es aquí donde reside toda la diferencia. En tomar concien-cia, conocer mejor la formación, el funcionamiento y la

1 Anne Givaudan y Daniel Meurois, Viaje a Shambhala, Editorial Luciér-naga, Barcelona 2000.


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acción de estos equipajes que transportamos con nosotros de un periodo de nuestra vida a otro, e incluso a veces, de una vida a otra, nos ofrece el bien más precioso: la liber-tad de ser lo que somos desde siempre… Seres de luz que experimentan la vida de manera única y múltiple a la vez.

Esta búsqueda no es lo que se suele llamar “psicológi-ca”. No emplearé un vocabulario que no conozco y en el cual no estoy formada.

La base de esta obra es la que siempre ha sido mi idea desde 1971: la técnica del viaje astral y de la visión de los planos sutiles. Es, como por cada una de mis experien-cias, la que me ha permitido penetrar en el corazón de las formas-pensamiento y ofreceros hoy el resultado de esta aventura fuera de lo común.

Deseo que cada uno de vosotros coja lo que le sea nece-sario para reencontrar una autonomía y una libertad de ser de las que a menudo carecemos, pero que sin las cuales nos resulta difícil proyectar un futuro sereno y luminoso.

Las prácticas que se proponen son simples y se dirigen a todos aquellos que han dejado de luchar y que saben, en lo más hondo de sí mismos, que sólo el poder del amor es capaz de disolver lo que nos obstaculiza.

Aquí, mi objetivo no es el de cambiar lo que sea, es más bien hacer una llamada hacia aquello que va más allá del cambio, más allá de la voluntad, más allá del deseo, más allá de toda personalidad encarnada y que el amor sólo puede lograr: la transmutación

Es la que permitirá de conseguir la curación. Es ade-más ella la que sólo por su presencia, nos une de nuevo con todos los planos de nuestro ser, pero también con los innumerables planos del universo y de las dimensiones que contiene.


PRIMERA PARTE

¿Qué son las Formas-pensamiento?


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CAPÍTULO 1Murmullo

¡Un congreso en los Trópicos! ¡Qué idea más bonita! Avión, diferencia horaria, sudor y vegetación densa, por fin ya estamos allí… Tengo que hablar de Le Peuple Animal (“El Pueblo animal”) en el decorado mágico de un jardín tropical. La noche cae rápidamente y entonces hay un sorprendente concierto, toda una orquesta de pequeñas ranas que resuena y se amplifica. Hago una pequeña parada cerca de una pajarera donde pájaros multicolores se activan un poco más en su prisión dorada antes de que la noche traiga la paz y sueños de horizontes ilimitados a estos pequeños parlanchines.

Mi pausa se prolonga, dentro de unos minutos seré yo quien hable y medito sobre el tema de la conferencia, mien-tras dentro de mí una vocecita, como un soplo, me murmura:

«Nosotros también estamos sometidos a la acción de nuestras formas-pensamiento, la Tierra misma recibe su influencia… busca… busca…».

Estas últimas palabras son casi inaudibles y no consigo captar la continuación, ¿pero hay una continuación?… y, ¿quién me habla así?

Miro con atención alrededor de mí. ¡Nadie! Los pájaros de la pajarera parecen dormidos y sólo un mirlo, no muy lejos de aquí, posado sobre una rama, mira en mi direc-ción, la cabeza ladeada.

Es la hora de mi intervención y debo dejar mis pregun-tas para más tarde. Ocupada con diversas actividades,


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olvido durante algunos días este extraño episodio cuando un inesperado acontecimiento lo reaviva en mi memoria.

De pie en la terraza de la casa de unos amigos, cuando el sol emite sus últimos rayos de luz, estamos un pequeño grupo de personas conversando de esto y aquello, cuando un perro amarillo de mirada triste atrae mi atención. Está ahí detrás de la verja del jardincito y mira intensamente hacia nosotros. El ruido de la conversación, el sonido de las voces, me llega amortiguado, lejano. No estoy del todo ahí y en el espacio de un instante, percibo alrededor del perrito amarillo formas que giran, masas grises y tristes que están pegadas a lo largo de su columna vertebral. No consigo penetrar esas masas viscosas que, como tabiques de caucho, me proyectan hacia atrás. Todas ellas resuenan con una misma letanía triste, y me transmiten una escena fugaz: la de un grupo de perros idénticos al que tengo jus-to delante de mí. Están amontonados en jaulas, esperando, y el terror puede leerse en sus miradas. Una habitación con mesas blancas y frías, un cadáver de perro… todo huele a laboratorio de experimentación.

Es esto lo que esta pegado al perrito que nos mira. Ha captado el egregor de miedo y de sufrimiento de los perros de su raza que utilizan esos laboratorios.

El animal rechaza por ahora toda comunicación, tiene miedo de los hombres. Cualquier intervención sólo con-seguiría asustarlo aún más, por lo que decido no insistir, además nos llaman de la casa para cenar.

Mi pregunta se hace cada vez más apremiante… Cómo lograr que sean conscientes esas formas-pensamiento que afectan cualquier forma de vida autónoma. En mi interior sé, con certeza, que lo que se hace visible pierde su fuer-za y lo que se conoce se hace enseguida más permeable, menos hostil por ser más comprensible.

Enseguida se lo comunico a mi compañero, que sien-do también terapeuta, sabe el desagrado que provocan estas extrañas formas que giran alrededor de nosotros, tanto en el plano físico como en todos los otros planos de nuestra existencia.


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En la búsqueda de lo que podría ayudarme en este come-tido recuerdo la voz de uno de nuestros maestros esenios:

«Toda criatura es el arquitecto de sus templos presentes y futuros y lo fue de los del pasado».

A nosotros nos corresponde, por lo tanto, el decidir lo que realmente queremos. ¿Qué queremos hacer con nues-tra vida? ¿Un regalo de luz o una ilusión de regalo?


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CAPÍTULO 2 Nacimiento de una forma-pensamiento

Si no puedes quererte a ti mismo, no puedes querer a otra persona. Muchas personas cometen el error de buscar el amor de

su propio ser a través del amor del otro.Neale Donald Walsch, Conversaciones con Dios2 –

11 de junio

Está de moda, en numerosas obras, hablar de formas-pensamiento, de chakras y de sintonía, sin a su vez definir exactamente qué significan esas palabras. Me parece lógi-co que tengáis ganas de saber lo que se va a tratar en las páginas y los capítulos siguientes.

Les propongo, a tal efecto, un sencillo recordatorio de algunas nociones elementales relativas a los planos sutiles:• Los principales centros energéticos, llamados también

chakras, están presentes en los cruces de varios nadis.• Los nadis (de la palabra sánscrita nad, que significa

“circular”) están considerados como el equivalente, en un plano sutil, de nuestras venas, puesto que es a tra-vés de ellos por donde circula la información que va de un chakra a otro. Los nadis transportan también el prana, portador de toda vida.

2 Neale Donald Walsch, Conversaciones con Dios, Editorial Debolsillo, Barcelona 2003.


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• El prana está formado por pequeñas partículas visibles que suministran a las células la esencia misma de la vida.

• Chakra es una palabra sánscrita que significa torbellino. Estos centros influyen directamente en el buen fun-cionamiento de los órganos, la actividad hormonal, la circulación de la sangre, por la absorción de la energía que rodea a cada uno de nosotros. Sirven a su vez de emisor, de receptor, de transformador y de filtro, a las informaciones que nos traspasan por todos los planos, desde los más sutiles a los más físicos.

¿Cómo se crea una forma-pensamiento en los planos sutiles antes de tomar forma en el plano físico?

Para que una forma-pensamiento tome vida, es nece-sario que dos centros energéticos intervengan en su construcción.

Uno de ello es inmutable: se trata del chakra frontal. Este chakra posee la habilidad de crear imágenes, de represen-tar objetos abstractos y de darle forma a las palabras.

Es el centro de la energía creadora por excelencia y de la materialización, en los planos sutiles, de nuestros pen-samientos. Si está sano, sus creaciones serán claras y sin distorsiones; si no lo está, las imágenes serán confusas, incluso desestabilizadoras.

El otro centro que actúa en la creación de las formas-pen-samiento depende de cuál sea el origen de dicha creación.

Me explico: según la imagen, el concepto o la com-prensión de un acontecimiento, pueden entrar en acción diferentes centros energéticos. Si se trata de una emoción intensa, se activará el tercer chakra. Si se pone en funcio-namiento el plano mental, el quinto plexo desplegará toda su energía. Y, si un problema atañe a la supervivencia del ser o a las pulsiones más animales, la segunda rueda ayu-dará a la creación de la forma-pensamiento.

Algunos lectores pensarán, y con razón, que no he mencionado un plexo esencial en mi enumeración. Es completamente cierto. El chakra del corazón está por ahora fuera de este proceso automático, por la sencilla razón de que


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