NO SOMOS ACCIDENTE

El 20 de Febrero del 2006 nació mi sobrina María Fernanda Villavicencio. Su

nacimiento me enseño que en este mundo no somos un accidente y que cada ser nació

con un propósito en la vida, cosas que nos parecen inaceptables y complicadas a la

final darán una sonrisa y alegría a nuestra existencia.

Seis meses atrás me enteraría junto a mis familiares de la sorpresiva noticia

del embarazo de mi hermana, situación que causo decepción en el hogar por ser mi

hermana Annellys ejemplo en todos los sentidos, la situación se tornaba tensa hasta el

punto en que mi padre le quito el habla a Annellys. Mi madre en principio se molestó

pero como siempre mostro su comprensión y templanza. Me hacía recordar cuando

estaba en la escuela y me citaron el representante por haberme montado detrás de un

camión que circulaba por la calle, ella me corrigió de manera comprensiva y amorosa.

Hubo asombro en la familia con la noticia de Annellys siendo ejemplo en casa

por su inteligencia y responsabilidad e incluso cursando estudios a nivel superior en

una de las universidades más reconocidas del país. La realidad con el embarazo de mi

hermana en primera instancia me mantuve imparcial en cuanto a esto. Conmigo

estaba el temor de que la familia se fracturara por este hecho. Mi padre por ser un

hombre que concibió su familia por el modelo legal y por ser creyente y practicante

del Evangelio, su visión para la familia tenía que ser el Matrimonio antes de tener un

hijo, porque de lo contrario este iría contra sus principios y la manera de organizar la

familia. Mi hermana (aunque la situación era complicada y adversa al cumplimiento y

logro de sus metas) no perdió la esperanza y no se dejó derrumbar, continuo sus

estudios de educación superior en la Universidad Pedagógica Experimental

Libertador Rafael Alberto Escobar Lara de Maracay. En este tiempo era mi vida

enmarcada con grandes expectativas, uno de mis deseos era ser mecánico o algo que

tuviera relacionado con artefactos eléctricos. Desde muy pequeño me llamaba la

atención reparar y desarmar cosas que tuvieran tornillos o cables, jugando a la del

mecánico que quería ser. Tuve una infancia muy agradable como todo niño que tiene

una familia y sus padres que velan por el bienestar de sus hijos, aunque en ocasiones

padecíamos necesidad como en el tiempo en que mi padre sufre un accidente en el

lugar donde labora, quedándose dormido con el arma que utilizaba para el resguardo

del sitio, escapándose un disparo el cual impacto en su mano izquierda y le causó una

herida fuerte, perdió mucha sangre y tuvo que ser hospitalizado de emergencia en el

Hospital Central de Maracay. Fueron meses duros y en la familia no teníamos los

recursos para pagar las operaciones a las que tendría que someterse mi padre, pero

hay cosas del destino que pasan y nos causan asombro y alegrías a nuestras vidas. En

el momento más crítico de mi familia un hermano de mi papa corrió con la suerte de

ganarse un Kino que para el momento el premio mayor era 300 Millones de

Bolívares. Fue como una luz al final de un túnel oscuro y feo. Logrando la familia

pagar la clínica y las respectivas operaciones que tendrían que hacerle a mi padre.

Luego fui creciendo cursando primaria e ingresando al bachillerato logrando

obtener mi título de bachiller de la Republica. Para ese momento tenía 17 años de

edad, lleno de expectativas de lo que era la vida en ese tiempo, en ese tiempo quería

estudiar en una institución donde ofrecieran la carrera de mecánica, al cabo de unos

meses inicie un propedéutico en el Tecnológico de la Victoria con la finalidad de ser

aceptado para cursar estudios y graduarme en el área de Técnico Superior Mención

Mecánica Industrial. Todo marcha de buena manera logrando en algunos meses la

aceptación para ingresar en esa casa de estudios donde iba a aprender lo que me

apasionaba y quería ejercer. Luego transcurría el tiempo siendo mi hermana como

inspiración para lograr mis metas y propósitos, mostrándole a los que me rodeaban

que se puede perseguir una meta logrando su cumplimiento. Después de varios meses

de curso intensivo logro entrar al Tecnológico de la Victoria donde tuve experiencias

muy agradables con compañeros de estudios y profesores que eran de motivación

para seguir adelante. Transcurrido el tiempo tuve desánimos a causa de dejar unas

materias que requerían dedicación y esmero. En ese momento el tecnológico estaba

sufriendo un periodo de transición pasando de Instituto Tecnológico a Universidad

Politécnica para graduar a Ingenieros y Licenciados. Fue una etapa donde el

desánimo aumento en mi vida, por la causa de haber dejado materias; como proyecto

de investigación que era esencial para la carrera, tuve que regresar al primer semestre

por la transición del Tecnológico a Universidad y por haber reprobado materias.

Aunque el desánimo estaba presente continuaba con el deseo de seguir estudiando y

graduarme de Mecánico Industrial. Paso un año aproximadamente donde decido dejar

la carrera y la institución. En esa época me dedique al trabajo de artesanías que se

desarrollaba en mi pueblo natal, como la carpintería de lo cual yo era ayudante y

lijador de los dueños de la carpintería.

Pasado los años cansado del trabajo y la rutina de todos los días comienzo a

meditar, comprendiendo de que ese lugar donde me encontraba laborando no era nada

provechoso para cumplir un meta futura. Me retiro del trabajo para tener tiempo de

encontrar oportunidades de estudios a nivel superior. Aparte de la mecánica que era

lo que más me llamaba la atención, desde mi infancia estaba identificado con la

música, otra cosa que me gustaba desde la primaria era todo lo relacionado con la

naturaleza. Comienzo a buscar opciones de estudios en estas áreas; Música y

Geografía. En ese momento le comente a mi hermana Annellys que quería estudiar

alguna de esas dos carreras donde ella me sugiere que presente la prueba interna en la

universidad donde se graduó en el año 2009, donde aprecian cursar las dos

especialidades; Música y Geografía. En el año 2011 logro preinscribirme para poder

presentar la prueba interna de la universidad. Seleccione como primera opción

música, en segundo lugar Geografía, como por cosa del destino presento la prueba

interna no percatándome que en la especialidad de música se requerían dos pruebas,

una vocacional y la otra en el área de conocimiento integral, que era lo contrario a

geografía donde se presentaba solo la de conocimiento. Presente la prueba y solo

quedaba esperar la aceptación para ingresar a la universidad. Meses más tarde recibo

la noticia donde se me notificaba que logre ser aceptado en la segunda opción de la

selección de las carreras. En principio no me agrado por lo que estaba un poco más

atraído por la música.

Hoy en día me siento honrado con la vida, estoy ejerciendo la carrera de

Geografía con la cual he aprendido muchas cosas que han llenado mi alma y espíritu

recordándome una vez más que en esta vida no somos un accidente, que nacimos con

un propósito, dando esperanza a aquel que lo necesite. En esta carrera he tropezado

con bellas personas que son mis compañeros y profesores que me motivan a seguir

adelante con una visión clara de la vida, amante de sueños que se lograron.

En esta carrera de la vida hay que sobreponerse a las decepciones y problemas

que se nos presentan, como mi hermana Annelly que logro superar la adversidad

aunque la situación era contraria. Los tiempos difíciles que se presentan en nuestra

vida no son para declinar o morir. En nuestras manos está la decisión de surgir y

levantarnos; como el Lirio se considera una semilla muy pequeña que crece e

inclusive en el desierto donde no hay agua, esta diminuta semilla puede durar según

cálculos hasta 5 años sin recibir agua y no llueve, pero con solo la más mínima

presencia de agua ella renace logrando ser vista en su máximo esplendor.

Republica Bolivariana De Venezuela

Universidad Pedagógica Experimental Libertador

Maracay Estado Aragua

Sección: 301

Desarrollo De Los Procesos Cognitivos Y Adjetivos

NARRATIVA

Profesor:

María Teresa Betancourt

Bachiller:

Ferrer Ricardo

C.I.: 19.417.680