expolio y reposiciÓn de los bienes culturales durante la guerra de la independencia espaÑola ii

EXPOLIO Y RESTITUCIÓN DE LOS BIENES CULTURALES DE LA CORONA ESPAÑOLA DURANTE LA INVASIÓN NAPOLEÓNICA.

EL CASO DEL DUQUE DE WELLINGTON

POLÍTICA INTERNACIONAL DE LA UNESCO REFERENTE A LA PROTECCIÓN Y RESTITUCIÓN DEL PATRIMONIO ARTÍSTICO EN CASO DE CONFLICTO

ARMADO

MUSEOLOGÍA

Guerras Napoleonicas y Patrimonio Español. UNESCO y conflictos armados

ÍNDICE

1. La Guerra de la Independencia Española (1808-1814)

1.1. Antecedentes e inicio

1.2. Consecuencias

2. destrucción, expolio y devolución del patrimonio artístico dentro del contexto de la Guerra de Independencia Española

2.1. Las consecuencias directas de la batalla

2.2. El interés económico y lucrativo por parte de invasores y aliados

2.3. El desinterés mostrado por España en recuperar el patrimonio sustraído y expoliado

tras la Guerra de la Independencia

3. Política internacional de la UNESCO referente a la protección y restitución del patrimonio

artístico en caso de conflicto armado

4. Bibliografía

5. Tabla I

1. LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA ESPAÑOLA (1808-1814)

MUSEOLOGÍA

Página 2/18


1.1. Antecedentes e inicio

Cuando Carlos III dicta la conocida como Instrucción reservada de Carlos III en 1787,

que puede considerarse como su testamento, recoje en el documento las directrices políticas que

pretendía que gobernaran en España y mediante el cual se deduce un país poderoso, en fase de

transición a la modernidad fruto de la gestión de la ilustración.

Esta situación de esplendor se transforma en decadencia y pobreza en el corto periodo

que va de 1787 a 1808 debido a varios factores que se pueden englobar en dos categorías:

nacionales e internacionales.

Dentro de los factores nacionales, se puede afirmar que Carlos IV no fue precisamente

uno de los reyes más brillantes de nuestra historia. La actitud de su esposa María Luisa tampoco

contribuyó de forma positiva a un mejor gobierno de la nación. Finalmente, el hijo de ambos,

Fernando VII tras el ascenso de su padre al trono tenía como afición conspirar contra él. Otro

factor decisivo, dentro del ámbito nacional, fue el que los ilustrados españoles, aunque

alcanzaron grandes logros de modernidad, no consiguieron culminar la transición de un Estado

obsoleto a un Estado eficaz y moderno como lo eran sus principales rivales, el Estado inglés y el

francés.

En el ámbito internacional, se produjo un hecho que cambió el signo político de la

época. Estalla la Revolución francesa y España comienza una época de enfrentamientos y

alianzas con su vecino del norte que la llevarían a dejar de ser una potencia mundial para ser

relegada a un segundo orden en la política internacional.

Merece una especial atención la figura de Godoy, verdadero gestor del poder. Con gran

ascendencia sobre los monarcas impone su criterio haciendo y deshaciendo a su antojo. La

Francia revolucionaria nos declaró la guerra, no olvidemos que en España regía una monarquía

católica y ligada por estrechos lazos a la depuesta monarquía francesa. No nos fue muy bien en

esta guerra que se desarrolló desde 1793 a 1795, fecha esta última en la que se firmó la paz de

Basilea; un mal comienzo. De enemigos de los revolucionarios franceses pasamos a amigos el

año siguiente. 1796 es la fecha en la que se firma el primer tratado de San Ildefonso por el que

recuperamos el status de aliados de los franceses y colocamos como enemigos a los ingleses.

Comienzan una serie de derrotas y España se ve obligada a firmar la paz con los británicos.

Godoy cae del gobierno, pero sólo hasta 1800 fecha en que Napoleón ya es dueño de Francia y

convence a Carlos IV para que lo restituya en el poder.

Una pieza clave en este mosaico político-militar es Portugal. Napoleón necesita que

rompa su alianza con los ingleses y cierre sus puertos a la flota británica para conseguir un

MUSEOLOGÍA

Página 3/18


bloqueo efectivo sobre Inglaterra que la obligue a capitular. España, en coalición con Francia

derrota a Portugal en la conocida como guerra de las naranjas (1801). Una victoria sobre

nuestros hermanos peninsulares que pocas ventajas supuso para nuestra patria.

Napoleón se proclama emperador en 1804 e intenta aniquilar el poderío naval británico

con la certeza que es el la clave de bóveda del poder inglés. Llega el desastre definitivo para

España. La derrota de Trafalgar (1805) supone la puntilla para el imperio español. España se

queda sin flota y sin sus mejores almirantes. Inglaterra será la dueña definitiva de los mares. A

partir de ahora nuestras colonias en ultramar no tendrán la protección de la flota.

El siguiente paso hacia nuestro suicidio como gran potencia se produce con la firma del

tratado de Fontainebleau (1807) que permite el paso de tropas francesas hacia territorio

portugués con la finalidad de invadir este país y cerrar definitivamente sus puertos a la flota

inglesa. En la práctica las tropas napoleónicas invaden España. El mariscal Murat al mando de

las tropas invasoras se convierte en el árbitro de la política española. Godoy no sabe qué carta

jugar y la nobleza provoca el motín de Aranjuez donde el pueblo asalta su casa. Carlos IV le

cesa de todos sus cargos. Al día siguiente el monarca abdica en su hijo Fernando quien tenía

como pasatiempo crear dificultades a su padre.

El 24 de marzo de 1808 Fernando VII entra como rey en Madrid. Ya apuntaba maneras

y no se percató de la trampa que le tendió Napoleón invitándole a que se reuniera con él en

Bayona, donde le obligó a abdicar de nuevo en su padre quien también había acudido engañado

a la cita del emperador, y a este a favor del hermano de Napoleón, José Bonaparte, apodado por

los españoles como Pepe Botella, debido a su afición a la bebida. Toda esta maniobra, Napoleón

intenta “maquillarla” a través de la conocida como Constitución de Bayona, autoproclamándose

salvador de España.

Con las tropas francesas ocupando ahora el suelo español y el poder traspasado a José

Bonaparte, se evidencia la invasión francesa mostrando el pueblo su descontento con el

levantamiento del 2 de Mayo de 1808 en Madrid y que la represión napoleónica reprime

duramente, creándose a partir de este momento un sentido de solidaridad un unidad popular

contra la invasión francesa, iniciándose la Guerra de la Independencia que dura hasta 1814.

MUSEOLOGÍA

Página 4/18


Los fusilamientos del 2 de Mayo. En este cuadro Goya representa la represión francesa tras la sublevación popular

de Madrid en esa fecha.

1.2. Consecuencias

A consecuencia de la Guerra de la Independencia y como en toda guerra ocurre, las pérdidas

para el país ocupado fueron altísimas en todos los aspectos.

Se produjeron pérdidas demográficas contabilizadas en un 10 % de la población. La destrucción

de infraestructuras y sus consecuentes pérdidas económicas fueron masivas y los daños morales

y psicológicos causados a la población serian irreparables. Pero de todas las pérdidas originadas

con esta guerra, las que aquí pretendemos exponer son las provocadas en el Patrimonio

Artístico, con el que este conflicto se ceba especialmente, debido a la gran riqueza patrimonial

del país.

2. DESTRUCCIÓN, EXPOLIO Y DEVOLUCIÓN DEL PATRIMONIO ARTÍSTICO

DENTRO DEL CONTEXTO DE LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA

ESPAÑOLA

Como ya se ha dicho, las pérdidas provocadas en el patrimonio artístico español durante la

guerra fueron de gran importancia, tanto en el patrimonio mueble como inmueble y

documental. Las causas que provocan estas pérdidas son:

Las consecuencias directas de la batalla.

El interés económico y lucrativo por parte de invasores y aliados.

El desinterés mostrado por España en recuperar el patrimonio sustraído y expoliado tras

la Guerra de la Independencia.

2.1. Las consecuencias directas de la batalla.

MUSEOLOGÍA

Página 5/18


Aquí, la peor parte se la llevo el patrimonio mueble, ya que aparte de los daños que provoca

la artillería en edificaciones con disparos de cañones, explosiones, etc., las tropas utilizaban

como cuartel todo edificio amplio susceptible de ser ocupado, es decir, iglesias, catedrales,

monasterios, palacios, etc., con los consecuencias que esto acarrea.

Por otra parte, el querer reforzar las antiguas murallas de algunas ciudades, hizo que se

reutilizase piedra de edificaciones del lugar, obteniendo asi el material de manera fácil y rápida.

Finalmente, es sabida la costumbre de Napoleón en no pagar a sus tropas, con la finalidad

estratégica de tener soldados ávidos de victoria, ya que a pesar de no pagar, permitía el saqueo y

pillaje de sus soldados a las ciudades derrotadas para su manutención, lo cual provocaba

perdidas, destrozos y violencia de toda índole.

2.2. El interés económico y lucrativo por parte de invasores y aliados

Invasores: Generales y marchantes

Primero cabe aquí decir que ya durante el siglo XVIII, el expolio y evasión de patrimonio se

venía produciendo en España por parte de marchantes españoles y extranjeros, debido al

empobrecimiento económico progresivo de la nación provocado principalmente por la

reducción en la llegada de oro de América y la importante pérdida de poder en el ámbito militar

y europeo de España, con la consecuente pérdida de influencia, unido todo esto a la no

existencia de catálogos del patrimonio como medios de control y vigilancia de estos. Muchos de

estos marchantes aprovechaban la ocasión para comerciar con el patrimonio, para lo cual se

sirvieron de diversas publicaciones que eran guías con las mejores y más valiosas obras del

patrimonio español. Estas guías las emplearían también los mandos militares y marchantes

franceses a la hora de la búsqueda y selección de obras para enajenar, eso sí, a gran escala y de

manera sistemática.

Con la Guerra ya comenzada, el expolio llegó de manos de generales franceses y el

elenco de marchantes de arte que les acompañaban, quienes aprovechando el desorden político

y social además de su poder, se dedicaron a robar las mejores obras que encontraban a su paso.

Uno de estos mandos militares más destacado, por su ímpetu acumulando cuadros fue el

Mariscal Soult, quien hoy es recordado como uno de los mayores orgullos militares de Francia,

donde se glorifica su memoria y que en realidad su mayor dedicación fue la de acumular obra

con la que aumentar su colección gracias al saqueo y sustracción ilegal de patrimonio.

Gran parte de este saqueo lo realizó en Sevilla en nombre del rey José I con el pretexto

de fundar un Museo Nacional en Madrid. Esta lamentable actuación se realizó en una ciudad

MUSEOLOGÍA

Página 6/18


como Sevilla, que no fue tomada a la fuerza, ya que capituló y, por tanto, habría de ser

respetada íntegramente. Esto no fue respetado por Soult y actuó como un depredador de las

mejores pinturas que había en la ciudad, llegando a almacenar en el Alcázar mil obras

procedentes de los edificios religiosos. Pero lo más grave es que se apropió para sí mismo,

ilegalmente, de las más selectas pinturas que eran de su gusto o que eran de gran valor, según el

criterio de las guías antes citadas, y las trasladó posteriormente a París, para exhibirlas

ostentosamente en su domicilio.

Soult fue un hombre codicioso que hizo una gran fortuna, utilizando las obras de arte

como respaldo estético de la gran categoría social que había alcanzado. Algunas de estas obras

sustraídas por el general finalmente volvieron al Museo del Prado, como la Inmaculada

Concepción de los Venerables, de Murillo, que había robado en la iglesia del hospital de dicho

nombre en Sevilla y que se subastó en 1852 a la muerte del mariscal, y la adquirió el Musée du

Louvre por 615 300 francos, la cifra más alta que hasta entonces se había pagado por una

pintura. Finalmente, en 1940 el gobierno francés acordó con el español un trueque de obras de

arte en el que se incluyó esta pintura.

Inmaculada de los Venerables. Murillo. Recuperada para el Museo de Prado en 1941

Otras de las obras sustraídas por el general Soult, quien mostraba predilección por los cuadros de grandes maestros de la escuela española (los cuales estaban mas valorizados), son los siguientes:

- El alma de Felipe II sube al cielo, hoy en Williamstown (Massachusetts).

MUSEOLOGÍA

Página 7/18


- La cocina de los ángeles, en el Louvre (Paris).

- Fray Junípero y el pobre, en el Louvre (Paris).

- La huida a Egipto, hoy en Génova.

- La Resurrección, recuperado en 1.814 para la Real Academia de San Fernando.

- El Nacimiento de la Virgen, hoy en el Louvre.

- Triunfo de la Inmaculada, hoy en el Louvre.

- San Pedro arrepentido, hoy en Newick.

- El Niño Jesús repartiendo pan a los peregrinos, en Budapest.

- San Pedro libertado por un ángel, en el Hermitage de San Petersburgo.

- La curación del paralítico, en la National Gallery de Londres.

- La vuelta del hijo pródigo, en Washington.

- Abraham y los tres ángeles, en Ottawa.

Arriba: La cocina de los ángelesAbajo: La vuelta del hijo prodigo

MUSEOLOGÍA

Página 8/18


Invasores: José Bonaparte y el robo institucional

Si el botín de los generales causó estragos, la rapiña oficial no le fue a la zaga. El 20 de

diciembre de 1809 se publicó el Real decreto fundacional del Museo de Madrid, que fue una

simple excusa para expropiar y recopilar un gran número de pinturas. Inicialmente se argumentó

que el museo josefino tenía como misión salvarlas estas obras del saqueo, pero posteriormente

se convirtió en un proyecto para ser enviadas finalmente al Louvre en Francia. Napoleón quería

potenciar los fondos del museo con las principales obras de aquellos países que invadió.

Se formaron comisiones regionales de requisa dirigidas por Frederic Quilliet con el fin

de localizar las obras más importantes guardadas en monasterios exclaustrados, edificios

públicos y palacios reales. Para ello utilizaron como guía el Diccionario histórico de las Bellas

Artes en España de Ceán Bermúdez, publicado en 1800. El número de cuadros requisados en

Madrid sobrepasó el millar y medio y fueron acumulados en malas condiciones en los

conventos del Rosario y de San Francisco. En el Alcázar de Sevilla se reunieron un millar de

toda Andalucía. El deterioro por humedades y mal almacenamiento en estos depósitos y los

robos que sufrieron por el mismo Quilliet y su camarilla (Maignien, Napoli y el marchante

inglés G. A. Wallis) fue tan flagrante que fue denunciado en 1810 y el comisario fue apartado

de su puesto. Finalmente sólo 300 de ellos, no los mejores, fueron enviados a París junto con El

Tesoro del Delfín en mayo de 1813. Bien es cierto que estos cuadros y objetos serían devueltos

a partir de 1815, cumpliendo con lo acordado en el Congreso de Viena. Del resto, algunos se

esfumaron como los centenares sacados de San Lorenzo de El Escorial de los que sólo se

recuperaron una veintena, y otros componen la base de nuestro Museo del Prado actual.

2.3. El desinterés mostrado por España en recuperar el patrimonio sustraído y

expoliado tras la Guerra de la Independencia.

El caso del Duque de Wellington

Muchas de las mejores pinturas que se exhiben en la Apsley House de Hyde Park

Corner, la que fuera residencia londinense de Arthur Wellesley, más conocido como duque de

Wellington, pertenecieron en su día a la colección real española. La triunfal campaña militar de

Wellington contra las fuerzas napoleónicas durante la Guerra de la Independencia le valió el

título de «Libertador de España», y en dos ocasiones fue recompensado con regalos de cuadros.

La primera vez fue el 15 de agosto de 1812, tras la victoria de Wellington en la batalla de

Salamanca y su entrada triunfal en Madrid, cuando la regencia española agradeció sus servicios

con doce pinturas del palacio real de La Granja de San Ildefonso. Las pinturas elegidas por

Wellington en aquel momento fueron enviadas a Londres en tres cajas y son las siguientes:

MUSEOLOGÍA

Página 9/18


Caja Nº 1

- Paisaje con San Felipe Apóstol bautizando un etíope en el medio del rio , de Juan Francisco Bolonia.

- Hércules y Antaeus, transformado en un toro blanco, de Domingo Zampiene.

- San Juan Bautista, de Murillo.

Caja Nº 2

- San Juan Bautista. A la manera de los primeros cuadros de Raphael.

- Nuestra Señora sedente con Cristo en pie y San José con libro en la mano , de Annibal Carracci.

- Cabeza de mujer, de “Huido”.

- San Antonio de Padua, de Murillo.

Caja Nº 3

- Nuestro Señor Jesucristo portando la cruz y Santa Verónica, de Sisto Badalocchio.

- Santa Inés, (¿).

- Negress con un reloj dorado en su mano, (¿).

- Cabeza de San José, de Guido Reni (Nº CAT. 146).

- Cabeza de una monja, de Andrea del Sarto (Nº CAT. 77)

De izq. a der.: Nuestro Señor Jesucristo portando la cruz y Santa Verónica, Sisto Badalocchio. Cabeza de San José, Guido Reni (Nº CAT. 146). Cabeza de una monja, Andrea del Sarto (Nº CAT. 77)

MUSEOLOGÍA

Página 10/18


Pero los cuadros más importantes saldrían de lo que vino a ser conocido como «el

equipaje del rey José», por una notable sucesión de acontecimientos que componen una curiosa

historia de codicia castigada y caballerosidad premiada. En el verano de 1813, José Bonaparte,

instalado en el trono de España en 1808 por su hermano Napoleón, huía ante el rápido avance

del ejército de Wellington por el norte de la Península. El 21 de junio las fuerzas francesas

sufrieron una derrota aplastante en la batalla de Vitoria. Después de la batalla, los soldados de

Wellington encontraron el coche de José entre el abundante material y bagaje capturado. El

propio José había logrado escapar protegido por la caballería francesa, pero en su coche se -

encontraron no solo documentos de estado, algunas cartas de amor y un orinal de plata, sino

también más de doscientas pinturas sobre lienzo, desclavadas de sus bastidores y enrolladas,

junto con dibujos y grabados. Todo ello lo envió Wellington a Inglaterra para ponerlo a salvo

bajo la custodia de su hermano lord Maryborough. Los cuadros fueron al punto examinados por

William Seguier, conservador de la pinacoteca real y más tarde de la National Gallery, quien

diligentemente catalogó los principales en una lista de ciento sesenta y cinco. Pronto se dio

cuenta, con sorpresa, de que José Bonaparte había sustraído muchas de aquellas pinturas de la

colección real española y pretendía llevárselas a Francia. Informado el duque de Wellington, -

ordenó devolver las pinturas sin dilación al recién repuesto rey de España Fernando VII. El 16

de marzo de 1814 pidió por carta a su hermano sir Henry Wellesley, entonces representante

británico en España, que comunicase a Fernando VII el paradero de las obras y su deseo de

devolverlas a España. Pero no recibió respuesta, y en septiembre de 1816 volvió a suscitar la

cuestión en una carta al conde de Fernán Núñez, representante español en Inglaterra. A ésta

respondió Fernán Núñez: «Adjunto os transmito la respuesta oficial que he recibido de la Corte,

y de la cual deduzco que Su Majestad, conmovido por vuestra delicadeza, no desea privaros de

lo que ha llegado a vuestra posesión por cauces tan justos como honorables». Resultado de ese

generoso gesto es que una selección de magníficos cuadros que pertenecieron a la colección real

española puedan verse aún hoy en el Wellington Museum de la Apsley House londinense. Son

en total ochenta y tres pinturas del equipaje del rey José, de las cuales se puede rastrear el origen

de cincuenta y siete gracias a los inventarios reales. Entre ellas se encuentran la Última Cena, de

Juan de Flandes, que perteneció a Isabel la Católica; una Sagrada Familia, de Giulio Romano,

antaño atribuida a Rafael; Orfeo hechizando a los animales, de Padovanino, y Oración en el

huerto, de Correggio. Otras obras maestras son la minuciosa Judith y Holofernes, de Elsheimer,

y el imponente Aguador de Sevilla, de Velázquez.

La lista completa de pinturas incautadas a José Bonaparte por Wellington, enviadas a

Londres y catalogadas por Seguier, son listadas en la tabla I, al final del texto.

MUSEOLOGÍA

Página 11/18


Aguador de Sevilla, de Velázquez. La ultima Cena, de Juan de Flandes y que perteneció a Isabel la Católica

Izq.: Orfeo hechizando a los animales, de Padovanino. Der.: Oración en el huerto, de Correggio.

Izq.: Judith y Holofernes, de Elsheimer. Der.: Nuestra Señora sedente con Cristo en pie y San José con libro en la mano, Annibal Carracci.

MUSEOLOGÍA

Página 12/18


El congresos de Viena

De la siguiente manera narra el Marqués de Villaurreta, el poco interés mostrado por

España al reclamar el patrimonio expoliado, tras el Congreso de Viena de 1816, por el cual se

obligaba a Francia a devolver los bienes:

“El embajador Pedro Gómez Labrador fue el designado por el gobierno de Madrid, quien, en 1815, recibió instrucciones para reclamar toda la documentación y objetos artísticos sacados de España por el gobierno intruso, haciendo ésta de forma vergonzosa, olvidando muchos despojos, accediendo a recibir el valor de los cuadros y no éstos, en tono blandengue y desinteresado1”

3. POLÍTICA INTERNACIONAL DE LA UNESCO REFERENTE A LA PROTECCIÓN Y RESTITUCIÓN DEL PATRIMONIO ARTÍSTICO EN CASO DE CONFLICTO ARMADO

El patrimonio cultural refleja la vida de la comunidad, su historia e identidad. El

preservarlo ayuda a reconstruir comunidades desmembradas, restablecer su identidad, crear un

vínculo con su pasado y crear un vínculo entre pasado, presente y futuro.

La Convención para la Protección de los Bienes Culturales en caso de Conflicto Armado,

aprobada en La Haya en 1954 después de la destrucción masiva del patrimonio cultural durante

la Segunda Guerra Mundial, es el primer tratado internacional de alcance mundial centrado

exclusivamente en la protección del patrimonio cultural en caso de conflicto armado.

Esta protección engloba tanto bienes muebles como inmuebles mediante la aplicación de

las medidas expuestas a continuacion:

Adopción de medidas de salvaguardia en tiempo de paz, como la preparación de

inventarios, la planificación de medidas de emergencia para la protección contra incendios

o el derrumbamiento de estructuras, la preparación del traslado de bienes culturales

muebles o el suministro de una protección adecuada in situ de esos bienes, y la designación

de autoridades competentes que se responsabilicen de la salvaguardia de los bienes

culturales.

Respeto de los bienes culturales situados en sus respectivos territorios así como en el

territorio de otros Estados, absteniéndose de utilizar esos bienes, sus sistemas de protección

y sus proximidades inmediatas para fines que pudieran exponer dichos bienes a destrucción

1 MARQUES DE VILLAURRETA: “España en el Congreso de Viena, según la correspondencia oficial de don Pedro Gómez

Labrador”

MUSEOLOGÍA

Página 13/18


o deterioro en caso de conflicto armado, y absteniéndose de cualquier acto de hostilidad

respecto a ellos.

Estudio de la posibilidad de registrar un número restringido de refugios, centros

monumentales y otros bienes culturales inmuebles de importancia muy grande en el

Registro internacional de los bienes culturales bajo protección especial.

Estudio de la posibilidad de marcar determinados edificios y monumentos importantes con

el emblema distintivo de la Convención.

Establecimiento de unidades especiales de las fuerzas armadas encargadas de la protección

de los bienes culturales.

Sanciones por violación de la Convención.

Amplia promoción de la Convención ante el público en general y grupos destinatarios

como los profesionales del patrimonio cultural, los militares o los organismos encargados

de la aplicación de la ley.

Este primer tratado se editó en 1999 dando lugar a un segundo protocolo dividido en 9

capítulos:

Capítulo 1 – Introducción

Capítulo 2 - Disposiciones generales relativas a la protección

Capítulo 3 - Protección reforzada

Capítulo 4 - Responsabilidad penal y jurisdicción

Capítulo 5 - Protección de B.B.C.C. en los conflictos armados de carácter no internacional

Capítulo 6 - Cuestiones institucionales

Capítulo 7 - Difusión de la información y asistencia internacional

Capítulo 8 - Aplicación del presente Protocolo

Capítulo 9 - Cláusulas finales

4. BIBLIOGRAFÍA

MUSEOLOGÍA

Página 14/18


GARCIA, A/PEREIRA, A; La Guerra de la Independencia. Antecedentes de la Guerra de la Independencia. Art. La crónica de Leon.

FERNÁNDEZ PARDO, F; Dispersión y destrucción del patrimonio artistico español.Vol. I (1808-1814) Guerra de la Independencia, 2007.

GÓMEZ-IMAZ; Inventario de cuadros sustraídos por el gobierno intruso en Sevilla, Sevilla, 1896.

KAUFFMANN, C. M /SUSAN. J/ WIESEMAN, M. E.; Catalogue of paingting in the Wellington Museum, Apsley House. Ed. English Heritage and Holberton publishing, London, 2009.

5. TABLA I

MUSEOLOGÍA

Página 15/18


Catalogo de las principales pinturas encontradas en el” equipaje” de José Bonaparte,

realizado por Mr Seguier , después de haberlas enviado Wellington a Londres en 1813.

Titulo Artista Nº del catalogo de 1901

Nº en este catalogo

1.Portrait of a Lady Tiziano 72 -2.Christ in the Garden Coreggio 38 323.VirginandChild Jul.Romano 88 1454.VirginandChild Titian Leo.daVinci(Schoolof) 73 -5.BattlePiece Vandermeulen 219 -6.BattlePiece Vandermeulen7.TheBall Watteau 82 -8.DeadGame Fyt 217 -9.FemaleHead Murillo 110 -10.Mountebanks Vandermeulen 112 -11.Farriers Wouwermans(Schoolof) 128 -12.Madonna Sasso Ferrata 151 -13.… Titian'sBrother 66 -14.DeadChrist Unknown 213 -15.Landscape Unknown …16.InfantChristandSaint Unknown 27 --17.Landscape Teniers 81 17918.Christ Unknown 114 -19.St.Peter Spagnoletto 93 -20.Portrait Velasquez 53 -21.CardPlayers G.Hondthorst 131 18422.WaterSeller M.A.Caravaggio 59 5923.BattlePiece Bourgognone 28 18324.Battle Piece Bourgognone 98 -25.Dressing a Wound Teniers 147 -26.A Female Saint Spanish Painter 111 -27.St.John in the Wilderness Spagnoletto 115 15028.Portrait of Innocent X Velasquez 47 18729.LimeKiln Teniers 36 17330.Landscape Artois 45 -31.Landscape Moucheron 4 -32.SketchofthePlague Nic.Poussin 3 -33.Interior:Gaming Teniers 223 -34.Smoking Teniers 237 -35.Landscape Elsheimer … -36.Landscape Vanderneer 22 11637.Portrait Maas 161 -38.Landscape Vander Heyde 183 -39.St.Francis Murillo 68 11240.Cattle Van-Bergent 208 -41.Storm Verne 21 19142.Landscape PaulBril,-A.Caracci 97 -43.Adoration SebastianConca … -44.ManTyinghisShoe Teniers 107 -45.EmbarkationofSt.Paul ClaudeLorraine 87 -46.Landscape ClaudeLorraine 89 -47.SoldiersatCards Hondt 122 7148.Landscape Teniers 79 17849.PlayingatBowls Teniers 32 17150.LandscapeandFigures An.Caricci 102 -51.Landscape Vanderneer 51

MUSEOLOGÍA

Página 16/18


52.HaltofanArmy Wouwermans 37 19754.Hawking Wouwermans 86 199

55.BattlePiece Paracel… -

56.BattlePiece Uncertain…

-

57.VirginandChild SassoFerrata 83 161

58.PortraitofMurillo Murillo 106-

59.OldMan'sHead Spagnoletto 91 149

60.PortraitofTh.Zucchero Th.Zucchero 117 118

61.Reaping Teniers 63 176

62.St.CatherineClaudCoel 30 29

63.Orpheus Titian 35 121

64.HolyFamily Mengs 49 105

65.VenusandAdonis Domenichino 80 27

66.Danae Titian 256 -

67.IsmaelandHagar LucaGiordano 135 55

68.PortraitofaLady Titian 92 180

69.JacobStealingtheBlessing Murillo 253 113

70.Magdalen Mengs 121-

71.ConcertFlemishPainter Uncertain 94-

72.HolyFamily CarlettoCagliari 25 -

73.Annunciation MichelAngelo 85 189

74.TheMiraculousDraught Rafaelle 124

75.VirginandChild Guido 216-

76.Portrait Murillo 116-

77.TheArts OldFranksandBreughel 1 -

78.IgnatiusLoyola Mengs… -

79.Landscape Zuccarelli 202-

80.HerculesandLion Rubens(Schooloo 75 157

81.Landscape Gysels 207 62

82.BattlePiece Salv.Rosa 48 153

83.DianaandActeon Uncertain 235 -

MUSEOLOGÍA

Página 17/18


84.PanandSyrinx Uncertain 255 -

85.Conflagration Vernet 130-

86.HolyFamily Leo.DaVinci 95 101

87.VirginandChild Leo.DaVinci 84 100

88.TheScourging Velasquez 123-

89.OurSaviourontheMount CarloOloradaFlamenco 61-

90.AdamandEve Uncertain 125 3

91.DianaHunting Kerinx 96 -

92.Child Coreggio 169-

93.TakingdownfromtheCross Lud.Caracei 192-

94.Crucifixion Polemberg 78 142

95.St.John Mengs 129-

96.Landscape Breughel 64-

97.PlayingatCards Uncertain 232-

98.AnnunciationAncientMaster 238 30

99.RuinsandFigures SpanishPainter 133 -

100.MadonnaandFlowers M.Fioro 144-

101.JudithandHolofernes Elsheimer 67 45

102.TakingdownfromtheCross AlonzodiArco 126 - .103.Magdalen Painter'snamenotlegible 180

-

104.LastSupper AlbertDurer 65 81

105.SeaPiece Peters 7-

106.HolyFamily Rubens 39 156

107.AHead SpanishPainter 6-

108.Landscape Uncertain… -

109.Landscape PaulPotter 23 82

110.Landscape Painter'snamenotlegible 140-

111.BoyswithBirds'Nest Vanderneer 40 117

112.Smoking Teniers 14-

113.VirginandChild Uncertain.100 100 78

MUSEOLOGÍA

Página 18/18

expolio y reposiciÓn de los bienes culturales durante la guerra de la independencia espaÑola ii

Documents