epÍgrafes selectividad · ... sino más bien, un crítico de la misma. en ... de estudio de la...

24
EPÍGRAFES SELECTIVIDAD Física y metafísica: las causas. El ser y sus significados. La sustancia. Acto y potencia. El alma y el conocimiento. Ética y política. 1. ARISTÓTELES: VIDA Y OBRA (Estagira, 384-322) La vida de Aristóteles se encuadra en un período de desgaste en el que se produjeron profundos cambios políticos. A lo largo del siglo IV a. C., las polis griegas sufrieron una pérdida de poder político y un debilitamiento económico debido, entre otras causas, a las guerras ocurridas en el siglo anterior y a los continuos enfrentamientos entre las ciudades griegas (Atenas, Esparta, Tebas, Corinto...) que siguieron a la Guerra del Peloponeso. Este proceso de decadencia culminó a finales del siglo IV a. C, cuando Alejandro Magno (356-323 a. C.), rey de Macedonia, unificó bajo su mando toda Grecia. Poste- riormente llevó a cabo la empresa que su padre no pudo comenzar: invadir el Imperio persa y extender su influencia hasta la India. Con Alejandro, Grecia constituyó por primera vez una unidad política y, además, la cultura y la civilización griegas se extendieron por un extenso territorio. La pérdida de su antigua hegemonía política y militar afectó negativamente a la vida cultural de Atenas. Es de notar la ausencia en este período de creadores de renombre. Aun así, Atenas seguía viviendo de la grandeza alcanzada en el siglo anterior y continuaba PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Upload: vohanh

Post on 29-Sep-2018

218 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

EPÍGRAFES SELECTIVIDAD

Física y metafísica: las causas. El ser y sus significados. La sustancia. Acto y potencia. El alma y el conocimiento. Ética y política.

1. ARISTÓTELES: VIDA Y OBRA (Estagira, 384-322) La vida de Aristóteles se encuadra en un período de desgaste en el que se produjeron profundos cambios políticos. A lo largo del siglo IV a. C., las polis griegas sufrieron una pérdida de poder político y un debilitamiento económico debido, entre otras causas, a las guerras ocurridas en el siglo anterior y a los continuos enfrentamientos entre las ciudades griegas (Atenas, Esparta, Tebas, Corinto...) que siguieron a la Guerra del Peloponeso. Este proceso de decadencia culminó a finales del siglo IV a. C, cuando Alejandro Magno (356-323 a. C.), rey de Macedonia, unificó bajo su mando toda Grecia. Poste-riormente llevó a cabo la empresa que su padre no pudo comenzar: invadir el Imperio persa y extender su influencia hasta la India. Con Alejandro, Grecia constituyó por primera vez una unidad política y, además, la cultura y la civilización griegas se extendieron por un extenso territorio.

La pérdida de su antigua hegemonía política y militar afectó negativamente a la vida cultural de Atenas. Es de notar la ausencia en este período de creadores de renombre. Aun así, Atenas seguía viviendo de la grandeza alcanzada en el siglo anterior y continuaba

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

2

siendo el centro artístico, científico y filosófico. Aristóteles nació en el año 384 antes de Cristo en Estagira (Macedonia). Su padre era el médico oficial de la corte del rey Amintas II. Tras la muerte de sus padres, en el año 367 a. C. se trasladó a Atenas donde entró en contacto con la Academia de Platón, y en la cual permaneció durante veinte años (primero como alumno y después como profesor). En el año 343 a. C. fue llamado por Filipo II (rey de Macedonia e hijo de Amintas II) para que se hiciese cargo de la educación de su hijo Alejandro, más tarde llamado El Magno. Fue su preceptor durante dos años y trató de inculcar en el joven su propia concepción de la superioridad de los griegos y la necesidad de controlar y dominar a los pueblos bárbaros (pueblos de civilización no-griega). Al igual que su maestro Platón, Aristóteles también fundó una escuela filosófica. Esta escuela era denominada Liceo por estar situada cerca de un santuario dedicado a Apolo Licio, concretamente en un gimnasio que incluía un pórtico de columnas o peripatos (por esta razón a la escuela también se la llamaba Perípatos y a sus alumnos y maestros peripatéticos), y que se mantuvo abierta hasta el siglo VI después de Cristo, aunque con poco éxito. A la muerte de Alejandro Magno, acaecida en el año 323 a. C., resurgieron los sentimientos antimacedonios y Aristóteles se refugió en Calcis, en la isla de Eubea, donde murió en el año 322 a. C.

Aristóteles escribió una multitud de obras. Las primeras que escribió (durante su estancia en la Academia) tenían forma de diálogo y la influencia platónica es manifiesta. Sus títulos recuerdan a los diálogos del maestro: El Banquete, Eudemo, etc. Estas obras se han perdido (solamente quedan algunos fragmentos) y estaban destinadas a un público amplio (por eso se llaman obras exotéricas o escritos de divulgación). Las obras que sí se

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

3

conservan son aquellas que Aristóteles escribió para las necesidades de su enseñanza en el Liceo y muestran su pensamiento original. Estas obras son algo así como los apuntes utilizados en las clases. Se trata de obras no destinadas a la publicación sino a ser escuchadas por los alumnos. A estas obras se las conoce con la expresión obras esotéricas pues estaban destinadas al uso interno del Liceo. Entre estas obras se encuentra el Organon (conjunto de libros o tratados de lógica); Metafísica; Física; Ética a Nicómaco; Política; varias obras de biología centradas en los animales, y una obra titulada Poética. Aristóteles fue el discípulo más sobresaliente de Platón pero no fue un fiel seguidor de su filosofía, sino más bien, un crítico de la misma. En efecto, si bien es cierto que entre las filosofías de Platón y Aristóteles hay algunas coincidencias, como tendremos ocasión de ver, en lo esencial son divergentes. En la filosofía de Aristóteles pierde fuelle el componente místico y religioso, pierden importancia las matemáticas y toma relevancia el estudio de la physis.

De las divergencias intelectuales entre Platón y Aristóteles se percató el pintor renacentista Rafael, quien en un cuadro titulado La Escuela de Atenas pintó a los grandes filósofos de la Antigüedad haciendo especial hincapié en Platón y Aristóteles, a quienes retrató debajo del arco central que preside el cuadro con sus manos apuntando en direcciones opuestas. Platón aparece retratado con su mano apuntando hacia arriba, mientras que Aristóteles lo hace con la mano hacia abajo. Con ello quiso expresar el pintor italiano que, aunque ambos tratan de responder a cuestiones muy parecidas, las explicaciones y teorías filosóficas ofrecidas por maestro y discípulo son muy distintas

Con la pérdida de la independencia política de las polis griegas ganarán peso las ideas cosmopolitas, según las cuales el individuo es ciudadano del mundo, y no meramente de una polis que agota su horizonte personal y social. Como consecuencia de esta situación los filósofos del período helenístico se van a esforzar en ofrecer un ideal de vida, un ideal ético, el ideal del sabio, que sirva de orientación y de referencia en esos tiempos de tanto cambio e incertidumbre. Algunas de las escuelas más relevantes de este periodo que ejercerán su influencia hasta los primeros siglos de nuestra era son las siguientes:

• El escepticismo (Pirrón): proponen la epoje (suspensión del juicio.) • Escuela epicúrea (Epicuro, Lucrecio): proponen la búsqueda calculada del placer.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

4

• Escuela estoica:(Crisipo, Séneca): proponen la búsqueda de la virtud y la

resignación. • Los cínicos (Diógenes): búsqueda de la libertad. • El eclecticismo: aúnan ideas de distintas escuelas.

A la muerte de Aristóteles, Teofrasto asume la dirección del Liceo, pero posteriormente se produjo una rápida decadencia del mismo, por lo que no ejerció ninguna influencia en su época. Además, al morir Teofrasto legó a Neleo de Scepsi la biblioteca que contenía todas las obras no publicadas de Aristóteles. Éstas pasaron por distintas vicisitudes hasta que Andrónico de Rodas, en la segunda mitad del siglo I a. de C., realizó una edición sistemática de las mismas.

Durante la Edad Media, muchas de las obras de los grandes filósofos antiguos eran desconocidas en Europa (por ejemplo, de Platón, solamente se conocía el diálogo Timeo; de Aristóteles, las obras de lógica). No obstante, gracias a la expansión de los árabes, que sí conservaban estas obras pues habían conquistado los territorios donde se encontraban los grandes centros culturales, sobre todo Alejandría, ciudad que poseía en la antigüedad la más grande biblioteca que se hubiese conocido hasta entonces, muchas de estas obras comenzaron a conocerse y divulgarse en Occidente. En esta labor de divulgación del saber antiguo y árabe desempeñó un papel fundamental la Península Ibérica, en la cual surgieron importantes centros de traducción. Resultado de esta labor de traducción fue la divulgación de la filosofía antigua, sobre todo la aristotélica, a partir del siglo XII. 2. LA CONCEPCIÓN ARISTOTÉLICA DE LA REALIDAD: FÍSICA Y METAFÍSICA.

Ø El ser y sus significados

En la realidad podemos observar muchas cosas, cualidades, relaciones... ¿Qué tienen en común todas ellas? La respuesta correcta es que “son”, y esta característica la comparten los seres humanos y los animales, los animales y las plantas, las plantas y los seres inertes, las cualidades y las relaciones. Este será el objeto de estudio de la metafísica: el estudio del ser en cuanto ser y sus propiedades. La primera constatación que podemos hacer es que el ser se dice de muchas maneras. Decimos que Pedro es, que el gato es, que la flor es, pero también que es un color, un sabor o un olor, que es tu amigo…, y sin embargo son formas de ser muy distintas. Aristóteles afirma que la forma principal de ser es la de las sustancias, aquellas realidades que tienen existencia propia (los objetos), y es secundaria la de los accidentes, aquellas formas de ser que necesitan de las sustancias para existir: cualidad (rojo, picante), cantidad (alto, flaco), relación (amigo), lugar (en España), tiempo (1984)….

SER

Sustancias Accidentes

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

5

Ø La realidad se compone de sustancias estructuradas en materia + forma

Todas las sustancias, a excepción de lo que Aristóteles llama Motor Inmóvil, están compuestas de una materia (hyle) y de una forma (morphé.) Así pues, materia y forma son los dos elementos que intervienen en la composición de cualquier sustancia. Es a esto a lo que se suele denominar hilemorfismo o concepción hilemórfica de la realidad.

• La materia (hyle) es un principio de individuación; es decir, es la materia la que hace el individuo frente a la forma que, como veremos, hace la especie o clase. Dicho de otra manera, las sustancias o cosas físicas son individuales porque en su composición interviene una cantidad de materia concreta.

• La forma (morphé) es aquello que determina a la materia en el sentido de que hace

que tenga determinadas cualidades o características, haciendo posible, de esta manera, que las sustancias sean clasificadas y agrupadas en clases, grupos o especies.

La forma o esencia de la que habla Aristóteles es equivalente a lo que eran las Ideas en la filosofía platónica (recordemos que a veces también se usa la expresión Formas para referirse a las Ideas). Ahora bien, a diferencia de las Ideas platónicas, la forma sustancial no existe en un mundo separado e independiente de las cosas físicas sino que existe en las cosas mismas. Por ejemplo, mientras que para Platón la Idea-Humanidad existe en un mundo separado del mundo del que forman parte los seres humanos concretos, para Aristóteles la forma sustancial Humanidad existe pero como algo inscrito en cada uno de los seres humanos. En esto consiste básicamente la crítica que Aristóteles hace a la Teoría de las Ideas de Platón: hablar de Ideas o esencias que existen separada e independientemente de los objetos es hacer metáforas poéticas.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

6

Ø Análisis y explicación del cambio que experimentan las sustancias: acto y

potencia. A excepción del Motor Inmóvil (del cual hablaremos más adelante), todas las sustancias individuales que hay en la realidad experimentan algún tipo de cambio, movimiento o modificación: el agua se convierte en algo sólido al congelarse, las semillas se transforman en plantas, el huevo se convierte en un pollito, las montañas sufren modificaciones gracias el efecto de la erosión, los planetas se desplazan siguiendo la trayectoria de su órbita... Aristóteles hace un análisis preciso del cambio o movimiento que experimentan las sustancias. Este análisis incluye una definición del cambio, una tipología o clasificación del cambio, y un análisis de las causas del cambio.

a) Definición aristotélica de cambio: los cambios o modificaciones que experimentan las sustancias se producen gracias a que tienen una composición material; es decir, el cambio se produce por la modificación que experimenta la materia al añadírsele una nueva forma. Así, por ejemplo, el cambio que experimenta un trozo de madera que se convierte en cenizas al prenderle fuego se debe a que la materia con la forma madera adquiere una nueva forma: la forma ceniza. Por tanto, de existir seres sin materia, es decir, inmateriales, tales seres no cambiarían y, por ello, no pertenecerían al mundo físico (como veremos, existe un ser inmaterial: el Motor Inmóvil). Aristóteles define el cambio o movimiento como el paso o tránsito de la potencia al acto. La potencia es la posibilidad que tiene la materia de una sustancia de recibir una forma. Ejemplos: el huevo es una gallina en potencia ya que la materia de la sustancia huevo puede recibir la forma gallina si se dan unas condiciones adecuadas de incubación; un embrión es un ser humano en potencia pues, si no se interrumpe su proceso de desarrollo en el vientre materno, puede cambiar y convertirse en un ser humano. El acto es la forma actual que tiene una sustancia en un momento determinado. Ejemplos: un huevo es un huevo en acto y una tortilla en potencia; un embrión es un embrión en acto y un ser humano en potencia. En definitiva, cada sustancia, en un momento concreto, posee unas características y unas propiedades (una forma actual), que constituyen su ser en acto; pero esa misma sustancia, en ese mismo momento, también posee unas posibilidades que puede desarrollar (una forma posible) y que constituyen su ser en potencia. De esta manera, queda claro que el cambio o movimiento es el paso de la potencia al acto, del poder ser algo a serlo. El cambio se produce al convertirse en realidad lo que estaba en cada sustancia como posibilidad. Cuando lo que estaba en potencia pasa a ser en acto, cesa el cambio. b) Tipos de cambio: Aristóteles marca una distinción entre dos tipos de cambio: el cambio sustancial, y el cambio accidental. • Cambio sustancial (generación y corrupción): es el paso de una sustancia a otra de distinta especie; la forma sustancial que tiene la sustancia se pierde (corrupción) y es sustituida por otra forma sustancial distinta (generación). Ejemplos: cuando un animal

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

7

muere, deja de ser animal y pasa a ser un cadáver. • Cambio accidental: la sustancia experimenta alguna modificación en algunos aspectos no esenciales, en sus accidentes: cualidad, cantidad, lugar, (cambio cualitativo, cuantitativo y local), pero sigue siendo la misma sustancia. Ejemplos: un tomate pasa de ser verde a ser rojo; una persona toma el sol y pasa de tener un tono pálido a estar moreno; un árbol que crece, una persona que engorda o que adelgaza, el cabello de la cabeza que nos crece, el desplazamiento del balón en un partido de fútbol; el movimiento de los astros, son otros tantos ejemplos de cambios accidentales.

c) Las causas del cambio: Aristóteles no se conforma con definir el cambio como un paso de la potencia al acto y con hacer una clasificación de los diferentes tipos de cambio sino que trata también de explicar por qué se produce el cambio, es decir, trata de analizar las causas del mismo, convirtiéndose, de esta manera, en el primer filósofo que mediante una teoría de la causalidad intenta explicar todos los procesos y cambios a que están sometidas las sustancias. Según Aristóteles, las causas que es necesario especificar para explicar adecuadamente cualquier proceso de cambio de una sustancia son cuatro:

• Causa material: la materia recibe la nueva forma y en ese sentido es una causa que interviene en el proceso del cambio. Por ejemplo, si queremos explicar el proceso de cambio por el cual un trozo de bronce se convierte en una estatua, el bronce es la causa material.

• Causa formal: es la nueva forma que adquiere la materia de una sustancia después del proceso de cambio. En nuestro ejemplo, la causa formal es la forma que el escultor tiene en su mente y que le sirve de boceto para esculpir el bronce.

• Causa eficiente: es el agente que pone en marcha el proceso del cambio, es decir, el iniciador del cambio. En nuestro ejemplo, el escultor es la causa eficiente; hace falta un agente externo –el escultor- que transforme al mármol en una estatua porque el mármol por sí solo no lo puede hacer.

• Causa final: es el fin, el para qué, el propósito u objetivo que se consigue con el cambio. En el ejemplo anterior, la causa final por la que el escultor hace la estatua es adornar la plaza.

En el ámbito de las sustancias artificiales (aquellas sustancias que han sido creadas por el hombre) la causa final es el propósito u objetivo que persigue el agente o causa eficiente que las produce. Por ejemplo, la causa final de la vasija es lo que el alfarero ha pretendido con su fabricación: guardar aceite. En el ámbito de las sustancias naturales (por ejemplo, un embrión que se transforma en un ser humano o un huevo que, tras un proceso de incubación, se convierte en un polluelo), la causa final del cambio viene determinada por la naturaleza (forma esencial) de la sustancia. El fin o finalidad de los cambios que experimentan las sustancias naturales es la actualización de todas sus cualidades y capacidades potenciales, la realización de

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

8

todas las características o capacidades asociadas a la naturaleza o forma esencial de cada sustancia. Conseguida esta actualización, la sustancia alcanza su plenitud y perfección, es decir, su autorrealización. Es a esto a lo que Aristóteles denomina concepción teleológica (de “telos”: “fin”) de la Naturaleza.

d) La causa primera

El Primer Motor Inmóvil de Aristóteles y el efecto dominó

Lo mismo que ocurre en el efecto dominó (unas piezas mueven a otras pero el movimiento inicial lo produce el toque de una mano), en el universo todos los seres que se mueven son movidos por otro ser, excepto el primer motor que es inmóvil. Más adelante veremos como el filósofo medieval Tomás de Aquino identifica a Dios con el Primer Motor Inmóvil del que habla Aristóteles. Más concretamente, veremos, al estudiar las vías para demostrar la existencia de Dios, cómo la primera de las cinco vías concluye en la existencia de un Primer Motor Inmóvil como causa primera de todos los cambios y movimientos que existen en la Naturaleza, y en su identificación con Dios.

Para Aristóteles el Universo es una gran esfera en cuyo centro permanece estática la Tierra. Dentro del universo hay dos grandes zonas o planos: la zona terrestre o sublunar, y la zona celeste o supralunar. Esta división tuvo una gran influencia en los siglos posteriores. De hecho, hasta el siglo XVII la concepción del Universo vigente en la cultura occidental fue, básicamente, la que nos transmitió Aristóteles. En los confines del Universo existe un Ser inmaterial e inmóvil (en el sentido de que no experimenta ningún tipo de cambio) que actúa como motor del Universo. En cuanto que se trata de un Ser inmóvil e inmaterial no pertenece al universo físico pues todas las cosas físicas son materiales y experimentan cambios o modificaciones. Aristóteles se ve obligado a defender la existencia de tal Ser por la necesidad de buscar una causa de todo cambio existente en las zonas supralunar y sublunar. Es el pensamiento que se piensa a sí mismo.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

9

3. LA CONCEPCIÓN ARISTOTÉLICA DEL HOMBRE Y SU TEORÍA DEL CONOCIMIENTO

Según Aristóteles, el hombre es una sustancia natural, y como tal, siguiendo su concepción hilemórfica de la realidad, está compuesta de materia y forma. La materia es el cuerpo; la forma es el alma que actúa como motor vital del cuerpo y como fundamento de todas las actividades humanas.

El ser humano es el ser vivo con la dotación anímica o alma más compleja. Ello explica que el ser humano tenga capacidades o pueda realizar actividades que ningún otro ser vivo pueda ejecutar. Aristóteles analiza esta complejidad anímica del ser humano y la explica señalando que en el hombre encontramos tres almas, cada una de ellas relacionada con una serie de capacidades y actividades. • Alma vegetativa. Comprende las actividades biológicas más básicas, como la nutrición, el

crecimiento y la reproducción. Está presente también en las plantas y en los animales. • Alma sensitiva. Comprende la actividad del conocimiento sensible (la percepción de la

realidad por los sentidos), actividad que permite conocer el entorno; la actividad apetitiva (los deseos), y la actividad locomotriz. Está presente también en los animales pero no en las plantas (las plantas ni conocen, ni desean ni se mueven).

• Alma intelectiva o racional. Comprende la actividad pensante que posibilita una

comprensión y explicación de la realidad y el comportamiento libre. Solamente está presente en el ser humano.

Según Aristóteles, a diferencia de lo que afirmaba su maestro Platón, el alma es mortal: no puede concebirse, según Aristóteles, una existencia inmaterial del alma, es decir, separada del cuerpo, pues supone ir en contra de su concepción hilemórfica de la realidad, según la cual la forma ha de ir necesariamente unida a una materia. Aunque También dice que hay una función del alma que es algo “separado, inmortal y eterno”, afirmación que ha sido y sigue siendo un quebradero de cabeza para los intérpretes.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

10

En estrecha relación con su concepción del alma está su teoría del conocimiento. La concepción aristotélica del conocimiento se caracteriza por lo siguiente: por la distinción entre dos tipos o formas de conocimiento: conocimiento sensible y conocimiento racional; por la admisión de que el conocimiento racional es superior al conocimiento sensible (aunque éste sea necesario e imprescindible), y que consiste en conocer lo universal y necesario; y por el enfoque empirista del conocimiento. Esta última característica de la concepción del conocimiento es lo que separa a Aristóteles de su querido maestro, y lo que le hace ser predecesor de una importante corriente o tendencia filosófica llamada "Empirismo", que alcanzará su gran expresión en los siglos XVII y XVIII con filósofos como Locke, Berkeley y Hume. Fases o etapas del proceso cognoscitivo • Primer paso: punto de partida del proceso cognoscitivo. Los sentidos, los cinco sentidos clásicos, los que, según la canción "perdemos cuando nos enamoramos", captan las distintas cualidades de los objetos particulares.

• Segundo paso: las distintas cualidades, formas, sabores, colores, etc., son unificadas por un sexto sentido llamado sensorio común. Este sexto sentido coordina la percepción de las distintas cualidades de los objetos, las sensaciones, y permite obtener una imagen singular, particular, concreta, y se conserva en lo que Aristóteles llama la imaginación. La facultad de recordarla se llama memoria.

• Tercer paso: sobre esa imagen particular actúa el intelecto, entendimiento o mente. El intelecto nos permite distinguir lo que es "esencial" de lo que es "accidental", a través del proceso de abstracción que consiste en separar lo común o universal de lo particular e individual; con ello desaparece de la imagen la particularidad, la singularidad, y queda lo universal, lo general (lo que se repite en las imágenes de objetos de la misma especie o clase). Así, se forma el concepto. 4. LA ÉTICA ARISTOTÉLICA: LA FELICIDAD Y LA VIRTUD

La ética de Aristóteles es un detallado análisis de cómo debe vivir el ser humano para vivir bien y alcanzar la felicidad. Este análisis aparece en una obra titulada Ética a Nicómaco. Ø La felicidad (eudaimonia) como bien supremo de la vida humana

Según Aristóteles, toda actividad humana tiende hacia algún fin, constituyendo dicho fin su bien (telos). Así, por ejemplo, el fin de la actividad de un zapatero es hacer y arreglar zapatos, y el fin de la actividad profesional del médico es restablecer la salud del enfermo. Pues bien, según Aristóteles, el fin u objetivo natural de la existencia humana en cuanto tal, es vivir bien y alcanzar la felicidad (eudaimonía). De hecho, la felicidad es el bien supremo, el mayor bien al que puede aspirar un individuo a lo largo de su vida. Ahora bien, el problema radica en la dificultad de determinar qué se entiende por felicidad, pues no todos los hombres se ponen de acuerdo en torno a qué es la felicidad. Para unos es el placer; para otros la posesión de riquezas; para otros el disfrutar de la fama y la gloria. Según Aristóteles, la felicidad humana consiste en dedicarse a aquella actividad

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

11

que le es más propia y natural al hombre: la actividad intelectual y racional (dedicación a la ciencia, a la filosofía, a la discusión racional acerca de lo que es mejor para la polis, a la contemplación, etc.) y, además, vivir siguiendo las pautas normativas que marca y establece la razón (cuanto más racionales seamos en nuestras decisiones vitales, más felices seremos.) Es decir, vivir como hombre es vivir racionalmente. La felicidad no radica en el placer porque éste no es una actividad sino el resultado de una actividad. Como mucho será un añadido a la actividad que andamos buscando. No radica en los honores porque éstos parecen depender más de los que los conceden que de los que los reciben. Además aquello que nos hace dignos de los honores ha de ser más valioso que éstos. Por último no radica en las riquezas porque éstas no se quieren por si mismas sino por lo que ayudan a conseguir. El logro de la felicidad, según Aristóteles, exige la posesión de ciertos bienes corporales (la salud) y ciertos bienes materiales (recursos económicos necesarios para disfrutar de una vida ociosa dedicada a la actividad intelectual), pero exige, muy especialmente, la posesión de ciertas disposiciones y cualidades a las que Aristóteles denomina virtudes. Ø Concepto aristotélico de virtud

Como hemos dicho anteriormente, en la Grecia homérica la virtud se identificaba con cualidades como fuerza, valentía, coraje, astucia, etc. Eran las cualidades valoradas por los aristócratas y se consideraba que eran heredadas, aunque luego había que demostrar que se poseían. Los sofistas defendieron que las virtudes eran enseñables e hicieron hincapié en aquellas cualidades que permitían triunfar en la polis: dominio del lenguaje, de la lógica, capacidad de persuasión, etc. Sócrates y Platón, en cambio, identificaron la virtud con la sabiduría, con la capacidad para conocer el bien (el que conoce el bien obra bien). Aristóteles considerará que la virtud es enseñable, que es necesario para obrar correctamente diferenciar el bien del mal, pero que además hay que tener voluntad y fuerza para hacerlo. Aristóteles considera que las virtudes son aquellas cualidades que nos permiten alcanzar nuestro fin, nuestra perfección (areté: excelencia, lo mejor). En este sentido, también podemos hablar de las virtudes de un cuchillo (cortar bien), o de una cama (ser cómoda y saludable). En el caso del hombre las virtudes serán aquellas cualidades, disposiciones o hábitos que le van a permitir alcanzar su último fin, es decir, la felicidad. ¿Cuáles son las virtudes que el hombre en cuanto ser humano tiene que desarrollar para alcanzar una vida buena y feliz? Aristóteles establece una distinción entre dos tipos de virtudes: virtudes intelectuales y virtudes éticas. a) Virtudes intelectuales: son aquellas virtudes que, adquiridas por el ser humano en un proceso de educación y enseñanza, permiten que el alma racional (razón o intelecto) desarrolle la actividad cognoscitiva intelectual que le es propia. Nosotros nos vamos a centrar en la prudencia y la sabiduría.

• En relación con las acciones humanas la virtud intelectual es la prudencia, la cual puede

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

12

ser definida como aquella virtud por la cual el alma racional del ser humano conoce cuál es la mejor conducta del hombre, es decir, cómo debe actuar si quiere en su vida lo mejor. Es decir, es el conocimiento que nos enseña cómo nos debemos comportar y cuáles son los medios más adecuados para el logro de la felicidad. Así, por ejemplo, el hombre que tiene prudencia sabe que si quiere vivir muchos años debe abandonar ciertos hábitos perjudiciales para su salud, como el fumar, o que si quiere llevarse bien con los vecinos no debe molestarlos poniendo alta la música a las cuatro de la madrugada.

• Sin embargo la virtud intelectual por excelencia es la sabiduría y es ésta la que nos

aporta la mayor felicidad porque es una actividad autárquica (todos podemos filosofar), podemos ejercerla durante mucho tiempo (no es una actividad efímera), es la culminación de nuestra capacidad racional y además es la actividad que más nos asemeja a los dioses.

b) Virtudes morales o éticas: son aquellas virtudes que entrenan la voluntad del ser humano para que éste decida actuar conforme a los dictados de la prudencia. En efecto, no basta con deliberar con prudencia y concluir acertadamente que tal acción o tal otra es la mejor, sino que también hay que tener la fuerza para actuar en consecuencia. Las virtudes morales son hábitos firmes y estables que son adquiridos por el individuo como consecuencia del ejercicio o repetición de ciertos actos. Así, por ejemplo, nos hacemos justos practicando la justicia, generosos realizando acciones generosas, valientes realizando actos de valentía. Estas virtudes éticas o morales consisten en elegir, siempre en relación a uno mismo, el término medio entre dos extremos (uno por exceso y otro por defecto) que, por ser extremos, son vicios que hay que evitar.

Vicio (por defecto) Virtud (término medio) Vicio (por exceso)

Insensibilidad Templanza Desenfreno

Cobardía Valentía Temeridad

Desvergüenza Modestia Vanidad

Aspereza Amabilidad Adulación

Tacañería Generosidad Prodigalidad 5. TEORÍA POLÍTICA DE ARISTÓTELES

Aristóteles investigó numerosas cuestiones relacionadas con la política: analizó numerosas Constituciones de la época, estudió el derecho de los “bárbaros”, los distintos tipos de gobiernos existentes y las causas de su inestabilidad, elaboró las características de un

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

13

Estado ideal (moderado tamaño, territorio reducido, fácil de defender. Además analizó con amplitud cuestiones relacionadas con la eugenesia, el control de natalidad, la educación de los jóvenes…). De su obra Política nos interesa destacar tres cosas: • La concepción del hombre como animal social y político

• El análisis de los diferentes tipos de comunidad, prestando especial interés a la polis

como único marco social en el que el hombre puede desarrollarse plenamente como ser humano.

• La clasificación de las diferentes formas de gobierno.

Ø La concepción del hombre como animal social y político

Siguiendo a su maestro Platón, Aristóteles sostiene que el hombre es un animal social por naturaleza cuya vida solamente es posible si se desenvuelve en el marco de la comunidad. La expresión por naturaleza significa precisamente esto: que en la naturaleza humana está incluido el que la vida del hombre transcurra en el seno de la comunidad. Al margen de la comunidad y de la vida en sociedad sólo viven las bestias, los animales (aunque el propio Aristóteles reconoce que algunos animales, como las abejas, también son animales sociales) y los dioses. Aristóteles se opone a los sofistas que consideran que tanto el hecho de vivir en sociedad como las leyes e instituciones existentes, no son naturales, sino que son convencionales, surgen del mutuo acuerdo entre los hombres por los beneficios que les reporta. También se opone a la posición defendida por los cínicos (Diógenes de Sínope) que con el fin de destacar la individualidad e independencia del ser humano muestran su rechazo a las convenciones, normas y costumbres sociales, que nos limitan, coartan, prohíben, desautorizan, obligan y, en definitiva, suponen un obstáculo para nuestra “vida natural”. Los argumentos o pruebas que da Aristóteles para justificar su afirmación de que el hombre

LA SOCIABILIDAD HUMANA

EL SER HUMANO ES SOCIABLE

POR NATURALEZA: Platón, Aristóteles, Aquino… POR CONVENCIÓN: sofistas, Hobbes, Locke…

EL SER HUMANO NO ES SOCIABLE Cínicos

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

14

es un animal social por naturaleza son dos:

• La no autosuficiencia del individuo para la satisfacción de sus múltiples necesidades. Este argumento o prueba lo hereda de Platón y consiste en afirmar que el individuo se une de manera natural y espontánea a otros individuos para satisfacer sus múltiples necesidades. Sin los demás el ser humano no puede sobrevivir ni vivir felizmente.

• La posesión de la facultad del lenguaje. Es cierto que, además del hombre, hay

otros bichos sociales que viven en comunidad, por ejemplo las abejas. Pero hay algo que distingue a la sociabilidad humana de la sociabilidad animal. Eso que las distingue es el tipo de comunicación que puede existir entre los individuos y el tipo de lenguaje que poseen para esas funciones comunicativas. Los animales se comunican para expresar sus sensaciones de placer y de dolor, y por eso sólo disponen de voz. Pero el hombre dispone de la palabra, de lo que propiamente podemos llamar lenguaje (logos), con el cual puede comunicarse con los otros acerca de lo bueno y de lo malo, de lo justo y de lo injusto, y crear normas y leyes que concreten los acuerdos de los hombres. La posesión de esta facultad del lenguaje demuestra que el hombre es un ser social por naturaleza. Todo lo que existe, dice Aristóteles, cumple alguna función o fin (la naturaleza no ha hecho nada en vano), y si el hombre nace con la facultad del lenguaje es para que la desarrolle, y ello sólo es posible en el marco de una vida en comunidad.

Ø Análisis aristotélico de los diferentes tipos de comunidad

El hombre es un ser social por naturaleza cuya vida transcurre en relación con otros seres humanos formando sociedades o comunidades. Aristóteles habla de tres tipos de comunidad: la casa o familia, la aldea, y la polis o ciudad.

• La familia, casa o comunidad doméstica. Está compuesta por individuos de distinta edad, sexo y condición: el marido, la esposa, los hijos y los esclavos. Uno es el individuo rector, cuya función consiste en dirigir a la familia al cumplimiento de su fin: la satisfacción de las necesidades cotidianas y elementales de los miembros de la familia (alimento, vivienda, educación de los hijos...) Este individuo rector es el padre, varón casado, ciudadano libre; el resto de individuos son los individuos regidos (esposa, niños y esclavos) cuya función consiste en obedecer las órdenes del individuo rector. La relación de mando y obediencia entre individuo rector e individuos regidos es una relación natural (no convencional, no establecida por acuerdo) ya que por naturaleza el varón debe mandar mientras que la mujer, los hijos y los esclavos, deben obedecer.

Todos los hombres que difieren de sus semejantes, tanto como el alma difiere del cuerpo y el hombre se distingue de la fiera, son esclavos por naturaleza y lo que más les conviene es someterse a la autoridad de alguien... Es esclavo por naturaleza aquel que pertenece en potencia a alguien y sólo participa de la razón en lo que respecta a la sensibilidad inmediata, sin poseerla estrictamente, mientras que los demás animales ni siquiera poseen el grado de razón que corresponde a la sensibilidad, sino que se limitan a obedecer sus pasiones. Y su modo de empleo difiere muy poco, porque tanto unos como otros, los esclavos y los animales domésticos, se utilizan para los servicios necesarios al cuerpo.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

15

• La aldea. Es un conjunto de comunidades domésticas o familias. El fin, finalidad o

meta de la formación de la aldea es la satisfacción de necesidades mediatas o no cotidianas. Aristóteles no aclara cuáles son estas necesidades no cotidianas pero cabe pensar que entre ellas se encuentra la necesidad del intercambio de aquellos productos que la familia individual no puede proporcionar.

• La polis, ciudad o comunidad civil. Es una asociación o conjunto de familias y

aldeas. Por encima de la polis no hay otro tipo de comunidad pues la polis es autosuficiente, se basta a sí misma porque logra satisfacer todas las necesidades que tiene el ser humano. Aristóteles seguía prisionero de la creencia general de que la polis es la forma ideal de organización social, a pesar de que su discípulo Alejandro estaba creando un gran Imperio donde griegos y bárbaros conviviesen juntos (a lo largo de los siglos iría surgiendo y consolidándose el Estado, una forma de organización social a medio camino entre la ciudad-estado y el Imperio).

La ciudad, además de posibilitar una vida en común que garantiza la protección y seguridad de los ciudadanos así como el intercambio económico, es una comunidad de ciudadanos unidos por la amistad que hace posible que estos ciudadanos vivan bien y sean buenos y justos. - Que los ciudadanos “vivan bien” significa que puedan dedicarse a aquellas

actividades en las que se sienten autorrealizados y felices. - Que los ciudadanos sean “buenos ciudadanos” significa que sean “virtuosos”. - Que los ciudadanos sean “justos” significa que respeten las leyes vigentes y que sus

conductas estén en conformidad con lo que establecen y ordenan (justicia como legalidad), y que se traten unos a otros como iguales (justicia como igualdad). Aunque la justicia como igualdad la podemos entender de diferentes formas:

Justicia conmutativa: es la que regula las relaciones entre las personas privadas y en estas relaciones lo justo es que las personas sean consideradas como absolutamente iguales y que se tienda a una igualdad absoluta. Por ejemplo, una persona que compra un objeto que vale “x” dinero, debe pagar lo justo, es decir, ni más ni menos de lo que vale.

Justicia distributiva: hace referencia a la distribución de bienes sociales, como los privilegios, prestigio, retribuciones monetarias, poder, etc. En este caso debe regir el principio de igualdad proporcional, según el cual debe recibir más, el que más se lo merezca (que como veremos más adelante será el varón respecto a la mujer o los esclavos, y también las personas “mejor preparadas” frente a las mediocres).

El cimiento sobre el que se fundamenta la convivencia política dentro de la ciudad es

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

16

la amistad. Aristóteles entiende por “amistad” los lazos afectivos recíprocos de quienes tienen conciencia de formar una comunidad, sea ésta del tipo que sea. En este sentido cabe hablar de “amistad” en el cariño existente entre padres e hijos, entre hermanos, entre camaradas, entre miembros de cualquier asociación y, finalmente, entre conciudadanos. La amistad que actúa como cimiento y fundamento de la convivencia política es la amistad civil o política. Este tipo de amistad es fundamental para la convivencia política ya que desempeña el papel de vínculo que mantiene cohesionada y unida a la ciudad, y su manifestación es la concordia. Así, en una ciudad hay concordia cuando “los ciudadanos están de acuerdo sobre las cosas que les convienen y llevan a la práctica las cosas que acuerdan en común”.

Entre las tres formas de comunidad hay una relación similar a la relación que puede existir entre un todo y sus partes. De la misma manera que la parte sólo tiene sentido dentro del todo del que es un fragmento, así, dentro de la polis o comunidad política es como tienen sentido las otras dos comunidades. Así, por ejemplo, una mano tiene como finalidad el coger cosas, pero esta finalidad sólo tiene sentido si la mano forma parte de un todo, el cuerpo. Por tanto, se puede decir que en la mano es intrínseco el pertenecer a un cuerpo pues sólo unida a él tiene sentido su fin, coger cosas. Por tanto, puede decirse asimismo que el todo es anterior a las partes pues las partes encuentran su sentido en su relación con el todo. Por tanto, para la comunidad doméstica es intrínseco el formar parte de una aldea, y para la aldea, el formar parte de una polis. Incluso, se puede decir, y así lo hace Aristóteles, que la polis es anterior al individuo pues éste no se basta por sí mismo y necesita de la polis para alcanzar su fin último. Ahora bien, esta anterioridad no es temporal sino metafísica pues cronológicamente primero es el individuo, luego la familia, luego la aldea y finalmente la polis. Para que se entienda mejor: cronológicamente, históricamente, primero es el feto, y después el niño, el adolescente, el hombre maduro, el anciano; ahora bien, si el feto evoluciona y se transforma con el paso del tiempo en un anciano es porque, de alguna manera, el "ser anciano" estaba ya inscrito en el feto como su "fin"; por eso, el "ser anciano" era anterior (no cronológicamente, históricamente, sino ontológicamente) incluso al propio feto. Por último, Aristóteles señala que la polis es una institución natural, ya que si el hombre es sociable por naturaleza y la sociabilidad se desarrolla de forma natural en la familia y la aldea, al ser la polis el fin de las anteriores también es una institución natural, pues la naturaleza es el fin.

Ø Clasificación aristotélica de las diferentes formas de gobierno de una polis

Aristóteles considera que en una polis, para que se pueda garantizar el bien común y la felicidad de los ciudadanos, es preciso que haya una determinada forma de gobierno o régimen político (no concibe una sociedad anárquica, sin autoridad) que está establecido en su Constitución: la ciudad es su Constitución. Ahora bien, surge la pregunta acerca de cuál de todas las formas de gobierno existentes resulta la más adecuada.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

17

Número de personas que participan en el gobierno Interés perseguido por el/los gobernantes

Un solo ciudadano

Una minoría Una mayoría

Bien común de la polis (forma de gobierno recta)

Monarquía

Aristocracia

República

Bien particular del/ de los gobernantes (forma de gobierno desviada)

Tiranía

Oligarquía (los ricos)

Democracia (los pobres)

Aristóteles, al igual que Platón, hizo una clasificación o tipología de las diferentes formas de gobierno. Ahora bien, al clasificar Aristóteles las formas de gobierno, no las enumera de mejor a peor como hacía Platón sino que lo hace siguiendo dos criterios:

• El número de ciudadanos que participan en el gobierno de la polis (un solo ciudadano, una minoría de ciudadanos o la mayoría de los ciudadanos.)

• El interés o fin perseguido por quienes participan en el gobierno. Si el interés

perseguido es el bien común o general de la polis la forma de gobierno es recta y justa. Si, en cambio, quienes participan en el gobierno persiguen el interés o bien particular de quien ejerce el gobierno, la forma de gobierno es una desviación, es decir, una forma de gobierno injusta.

Ahora bien, ¿cuál es, en opinión de Aristóteles la mejor forma de gobierno? La respuesta a esta pregunta guarda una estrecha relación con la teoría ética aristotélica: de la misma manera que la felicidad individual exige la posesión de una serie de virtudes éticas o morales consistentes en elegir el término medio entre dos extremos (véase ética aristotélica), para conseguir la felicidad social o justicia para la polis es necesario que la forma de gobierno sea aquella en la que el gobierno lo controla y dirige la clase media formada por aquellos que ni son ricos ni son pobres sino que se encuentran en el punto intermedio entre la riqueza y la pobreza. Los regímenes políticos extremos, como la oligarquía (gobierno de los más ricos) y la democracia (gobierno de los más pobres), en cuanto que representan posiciones extremas, deben ser evitados ya que dan lugar a rebeliones, enemistades y conflictos sociales que ponen en peligro la estabilidad de la ciudad. Aunque para Aristóteles tanto la monarquía, como la aristocracia y la república son formas buenas de gobierno (dependiendo del tipo de polis), el ideal sería una mezcla de las dos últimas, una República aristocrática, es decir, una forma de gobierno controlada por la mayoría de la población (frente al elitismo de Platón), pero gobernada por los mejores.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

18

Por esta razón, según Aristóteles, hay que tratar de impulsar que en la ciudad la clase media sea la más numerosa ya que la clase media está libre de los defectos morales que afectan a los más ricos (ambición) y a los más pobres (envidia). Los ricos son soberbios y tienden a sentirse superiores, suelen ser caprichosos y difíciles de educar, no les gusta aceptar órdenes y tienden a gobernar de una manera despótica similar a como gobiernan los dictadores. Por otro lado, los pobres se vuelven malvados y mezquinos, son envidiosos y ambiciosos, obedecen como esclavos y no saben mandar. No obstante, Aristóteles reconoce que en la historia de Grecia no ha existido nunca un gobierno de la clase media y lo que sí han abundado son formas de gobierno oligárquicas y democráticas. En este sentido, la forma de gobierno que defiende Aristóteles es una forma de gobierno inédita y novedosa, pero que sería la mejor y más conveniente si lo que se pretende es garantizar la igualdad y estabilidad social de la ciudad.

6. OTRAS REFLEXIONES

Ø Acerca de la mujer

“El esclavo se halla enteramente desprovisto de toda facultad de raciocinio, en tanto que las mujeres libres la tienen apenas en muy escaso grado” “ En efecto, el macho es por naturaleza más apto para la dirección que la hembra, siempre que no se establezca una situación antinatural; del mismo modo como el más viejo y maduro es más apto para la dirección que el más joven e inmaduro. La superioridad del varón frente a la hembra mantiene siempre este carácter. La potestad sobre los hijos es regia. Porque el que los ha engendrado ejerce su mando por su afecto y su mayor edad; eso es precisamente lo específico del poder real”.

Ø Relación del ser humano con el resto de especies

“Las plantas existen para los animales y las bestias brutas para el hombre, los animales domésticos para su utilización y alimento; los salvajes (al menos la mayor parte), para alimento y otras necesidades de la vida, tales como el vestido y diversas herramientas.

Por tanto, si la naturaleza no hace nada sin motivo ni en vano, es innegablemente cierto que ha creado todos los animales para beneficio del hombre”.

7. RELACIÓN DE ARISTÓTELES CON OTROS FILÓSOFOS SOFISTAS. Aristóteles no comparte el convencionalismo social y jurídico de los sofistas. Según él, el hombre es un ser social por naturaleza que alcanza su plenitud como ser humano en la ciudad. Por tanto, la vida en sociedad, especialmente la vida en la ciudad, no es el producto artificial de ningún acuerdo o pacto entre los individuos, sino algo natural y espontáneo que surge para que el hombre logre vivir bien. Además, las leyes civiles y políticas no deben ser consideradas como el resultado de un pacto o acuerdo social sino como preceptos que pertenecen al orden natural y que hacen posible que el ciudadano alcance esa vida buena. También se opone a las teorías de los cínicos.

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

19

PLATÓN: de los filósofos incluidos en el temario oficial es con Aristóteles con quien Platón se puede relacionar más estrechamente. Entre ellos hay semejanzas pero también notables diferencias.

a) En primer lugar, Aristóteles es un crítico de la teoría platónica de las Ideas. Según Aristóteles no existen dos mundos o niveles de realidad sino solamente uno: el mundo de los objetos o cosas (a las que él llama sustancias) compuestas de materia y forma. Ahora bien, lo que Platón llama Idea es equivalente a lo que Aristóteles llama forma esencial, pero para Aristóteles la forma esencial no existe separadamente de las cosas en un mundo aparte sino en las cosas mismas.

b) En segundo lugar, en relación con la concepción del ser humano, aunque ambos

consideran que el ser humano es un cuerpo y un alma, Platón acentúa su posición dualista y su concepción negativa del cuerpo (lo que significa que el cuerpo y el alma son realidades independientes, lo que explica, entre otras cosas, la inmortalidad del alma), mientras que Aristóteles hace hincapié en la íntima unión entre cuerpo y alma, desterrando la demonización del cuerpo.

c) En tercer lugar, en la temática de tipo moral y ético coinciden en señalar que la

felicidad a nivel privado (a nivel individual) radica en la adquisición de una serie de virtudes (cuatro virtudes en Platón; virtudes intelectuales y morales en Aristóteles) y en destacar la importancia de que la razón marque la dirección por la que ha de transcurrir la vida del individuo. Sin embargo Aristóteles rechaza el intelectualismo moral defendido por Sócrates y Platón.

d) En cuarto lugar, y en lo referente a la temática social y política, Platón y Aristóteles

coinciden en señalar que el hombre es un ser que, por naturaleza, vive en sociedad junto a otros hombres dado que el hombre como individuo es incapaz por sí mismo de satisfacer sus múltiples necesidades. También es preciso decir que aunque ambos hacen una clasificación de las diferentes formas de gobierno o régimen político y que muestran un especial interés por señalar cuál de todas es la mejor para garantizar la justicia social en la polis, discrepan en el momento de establecer cuál es la mejor: Platón habla de una especie de aristocracia filosófica en la que son los filósofos los que ejercen el gobierno; Aristóteles, en cambio, habla del gobierno de la clase media como la mejor forma de gobierno.

TOMÁS DE AQUINO: Tomás de Aquino representa el intento de aristotelizar el cristianismo y, en este sentido, es un defensor claro de Aristóteles. De hecho, muchas veces se quiere presentar a Tomás de Aquino como a un Aristóteles cristianizado. Fue tal el empeño de Tomás de Aquino por utilizar la filosofía aristotélica para fundamentar racionalmente la doctrina cristiano-católica que se sirvió de la terminología de Aristóteles (acto, potencia, teleología, causa eficiente, Primer Motor, etc.) en repetidas ocasiones, especialmente para demostrar la existencia de Dios. De Aristóteles hereda Tomás de Aquino su explicación del cambio (en términos de potencia

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

20

y acto); el hilemorfismo de las sustancias (materia y forma); la distinción entre forma sustancial y formas accidentales; la teoría de las cuatro causas del cambio (material, formal, eficiente y final); la teoría del Primer Motor Inmóvil como causa primera de todo cambio (y al que Tomás de Aquino identifica con Dios); la consideración del alma como principio formal del ser humano; la felicidad como fin último de la vida del hombre, etc. También hay que señalar que la posición de Tomás de Aquino acerca del problema de los universales (la postura del realismo moderado) es herencia de la filosofía aristotélica.

DAVID HUME y los filósofos empiristas: Hume es un filósofo inglés del siglo XVIII que pertenece a una corriente filosófica de la Modernidad denominada Empirismo cuyas características principales son dos: a) la base y origen del conocimiento humano se encuentra en la información proporcionada por los sentidos; b) no existen ideas innatas en la mente humana. Aunque el Empirismo es una corriente filosófica de los siglos XVII y XVIII sus dos características principales tienen sus antecedentes en el enfoque aristotélico del conocimiento. Filósofos del Contrato Social: Hobbes, Locke y Rousseau (siglos XVII y XVIII): mientras que para Aristóteles la vida en sociedad es algo natural pues el hombre es por naturaleza un animal social, para Hobbes y Locke (XVII) y para Rousseau (XVIII) es algo artificial que surge de un contrato entre los hombres, mediante el cual abandonaron el estado de naturaleza (estado en el que el hombre es libre y no está presionado por ninguna ley ni por institución social) para vivir en un régimen de sociedad civil dotado de leyes e instituciones sociales que regulen la convivencia entre los hombres y que garanticen su seguridad. KANT: Aristóteles afirmó que los procesos naturales (transformarse de embrión a feto) tienen lugar teleológicamente. Esto significa que dichos procesos responden a un fin o finalidad: el desarrollo de todas las capacidades que definen a una determinada sustancia. Imitando este planteamiento teleológico de Aristóteles, Kant afirma que la Historia de la Humanidad se rige por un plan natural que no es otro que el pleno desarrollo de las capacidades específicas con que la Naturaleza ha dotado al ser humano: la racionalidad y la libertad moral. El pleno desarrollo de estas capacidades hará posible, según Kant, la llegada y advenimiento de una sociedad en la que el hombre viva pacíficamente con sus semejantes. Kant también coincide con Aristóteles en señalar que el hombre es un ser sociable por naturaleza. Pero Kant va más allá de Aristóteles al sostener que, al mismo tiempo que es sociable, es insociable, es decir, entra en conflicto con sus semejantes (el hombre es insociablemente sociable). Esta doble condición humana –el ser sociable e insociable- es el mecanismo que hace evolucionar a las sociedades humanas. ORTEGA Y GASSET: cuando Ortega y Gasset hace una exposición de las diferentes concepciones filosóficas (realismo de los antiguos e idealismo de los modernos) incluye a Aristóteles dentro de los realistas antiguos. Ortega considera que los realistas antiguos, entre ellos Aristóteles, están equivocados al aceptar como dato radical a partir del cual elaborar una concepción del Universo la existencia independiente de las cosas respecto al

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

21

sujeto ya que ese dato radical debe ser la vida, entendida ésta como coexistencia del sujeto con las cosas.

8. VALORACIÓN

A pesar de las diferencias existentes entre Platón y Aristóteles, existen muchas semejanzas que a veces se han dejado de lado. Ya Diógenes Laercio escribió en la antigüedad que “Aristóteles fue el más genuino de los discípulos de Platón”. Sin embargo, es cierto que Aristóteles abandonó el elemento místico y religioso, tan apreciable en los escritos de su maestro. Además, si Platón se interesó por las ciencias matemáticas y, en general, no manifestó ningún interés por los fenómenos empíricos, Aristóteles, por su parte, mostró un interés muy vivo por casi todas las ciencias empíricas y le apasionó la recogida y clasificación de datos empíricos sin más, y en cambio no manifestó un especial interés por las matemáticas. La metafísica aristotélica (su teoría hilemórfica, su teoría de la potencia y el acto, de las cuatro causas, el motor inmóvil...) ejercerá una gran influencia en el medievo y en la época moderna (K. Popper ha señalado que dicha metafísica peca de introducir una gran cantidad de términos y de definiciones que han dificultado la comprensión científica de la realidad). Algo parecido ocurrirá con sus teorías físicas y sobre todo cosmológicas. Éstas últimas, con las concreciones realizadas por Ptolomeo, se mantuvieron vigentes hasta que Copérnico elaboró una teoría heliocéntrica del universo. La antropología aristotélica inició una nueva forma de ver las relaciones entre cuerpo y alma, en la que ambas entidades no se encuentran enfrentadas radicalmente (el cuerpo no es la cárcel del alma), sino que se complementan y representan las dos caras de la misma moneda, el hombre. Sin embargo, su concepción de tres tipos de almas no tendrá éxito, ya que se impondrá la concepción de que el alma es exclusiva del ser humano, rechazando la existencia de almas vegetales y animales. La ética aristotélica se convertirá en una teoría clásica a la hora de analizar la vida moral del ser humano, destacando los siguientes aspectos: el fin último del ser humano es la felicidad, ésta se alcanza a través de la virtud, la cual consiste en un término medio. A pesar de lo cual se ha criticado su excesivo intelectualismo, al considerar que la felicidad suprema radica en el conocimiento teórico, en la contemplación, en la sabiduría. Quizá estaba reflejando un modelo de felicidad que estaba al alcance de la clase privilegiada de los “ciudadanos” atenienses. Popper dirá en su obra Búsqueda sin término lo siguiente: “… me he sentido inmensamente feliz hallando nuevos problemas, luchando con ellos y realizando algún progreso. Esta es, o así pienso yo, la mejor clase de vida. Me parece infinitamente mejor que la vida de mera contemplación (por no decir nada de la auto-contemplación divina), que recomienda Aristóteles como la más excelsa. Es una vida plena de inquietud, pero altamente independiente”. Por lo que respecta a la política siguió prisionero de su época, al pensar que el referente social del ser humano es la polis (ciudad – estado), y no tener en cuenta otras realidades más amplias que estaban surgiendo en su época, como podía ser el imperio de Alejandro Magno, y que habían llevado a otros pensadores a defender una posición cosmopolita del ser humano. Siguió prisionero al considerar que había una diferencia insalvable entre griegos y bárbaros (posición a la que se había contrapuesto Alejandro), y que por naturaleza unos hombres nacían esclavos y otros libres (ya en su época surgieron distintas voces que defendieron la igualdad esencial de todos los seres humanos.) Sin embargo, tuvo buen olfato político al considerar que una buena forma de gobierno (realista) era la

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

22

república, apoyada en la clase media y gobernada por los mejores. 11. TEXTOS ARISTÓTELES. POLÍTICA, LIBRO, I, III Y LIBRO IV Los textos que hay que comentar de Aristóteles pertenecen a una obra titulada Política. Se trata de una extensa obra dividida en ocho libros. Presenta bastantes semejanzas con La República de Platón: el hablar de las distintas formas de gobierno, el estudio de las causas de su inestabilidad, la insistencia en el problema de la educación de los jóvenes. Es una de las últimas obras de Aristóteles (su composición se calcula entre el 330 y el 323 antes de Cristo.) Los textos de esta obra que hay que analizar son el capítulo 1 del libro I, y los capítulos 7, 8 y 9 del Libro III titulado Teoría del ciudadano y regímenes políticos y el capítulo 11 del Libro IV titulado Los diversos tipos de regímenes políticos. ü Política, Libro I, cap.1

En este capítulo Aristóteles expone la sociabilidad natural del ser humano, utilizando sobre todo el argumento de la posesión de lenguaje. Además describe los grupos humanos en los que se desarrolla su vida social y cuáles son sus fines: la familia, la aldea y la polis. Por último, se detiene en el análisis de la polis y destaca como es un grupo natural, ya que es el fin de los dos anteriores, es anterior a los mismos y es la más perfecta porque es autosuficiente y persigue el fin más elevado, la felicidad del hombre.

ü Política, Libro III, Capítulo 7 y 8

Aristóteles hace una clasificación de los regímenes políticos, atendiendo al interés perseguido por quien gobierna y atendiendo al número de ciudadanos que participan en el gobierno. Aristóteles distingue entre formas rectas y formas desviadas. Las formas rectas atienden al interés o bien común de la ciudad (monarquía, aristocracia y república); las formas desviadas responden al interés particular de quien controla el gobierno (tiranía, oligarquía y democracia.) En este capítulo, Aristóteles analiza con cierta profundidad dos formas de gobiernos desviadas: la oligarquía y la democracia. Afirma que son desviaciones porque el interés perseguido no es el interés común de la ciudad sino el interés particular de quien ejerce el gobierno. En el caso de la oligarquía, se trata del interés particular de los más ricos; en el caso de la democracia, del interés particular de los más pobres. En efecto, Aristóteles sostiene que la diferencia fundamental entre la oligarquía y la democracia radica en el grado de riqueza de quienes controlan el gobierno: en la oligarquía son los más ricos y en la democracia son los más pobres. Y señala, además, que en la oligarquía el gobierno es de unos pocos porque en una polis los ricos son una minoría, mientras que en la democracia es el gobierno de los muchos ya que la mayoría de ciudadanos son pobres. ü Política, Libro III, Capítulo 9

En este capítulo Aristóteles hace una aguda reflexión sobre el fin para el que se constituye una polis, ciudad o comunidad política. Aristóteles sostiene que una comunidad política no es sólo una comunidad de territorio, es decir, una comunidad de hombres que comparten un territorio común y que se unen, a modo de una alianza militar, para buscar protección y defenderse de los ataques de alguien. Tampoco es una comunidad de hombres que se constituye y forma para realizar intercambios y transacciones comerciales (es decir, una alianza comercial.) Según Aristóteles, una ciudad es, además de una comunidad de territorio que garantiza la seguridad y los intercambios

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

23

comerciales de sus ciudadanos, una comunidad de ciudadanos unidos por la amistad que persigue como fin y objetivo fundamental el logro de una vida perfecta y autosuficiente para sus ciudadanos. Esto se consigue cuando los ciudadanos logran tener una vida feliz. En este sentido, el fin de la ciudad es la felicidad de los ciudadanos y, además, hacer de éstos unos buenos ciudadanos, es decir, unos ciudadanos virtuosos. En este sentido, la ciudad tiene que tener como régimen político una forma de gobierno que estimule en los ciudadanos el logro de la virtud. ü Política, Libro IV, Capítulo 11

En este capítulo, Aristóteles intenta responder a dos preguntas: ¿en qué consiste el mejor tipo de vida para los hombres? Y ¿cuál es el mejor régimen político para la ciudad? A la primera pregunta responde Aristóteles diciendo que la vida feliz y virtuosa –la vida mejor- consiste en la búsqueda del término medio. Pero esta respuesta sirve también para responder a la segunda pregunta. Según Aristóteles, dado que en todas las ciudades se dan, teniendo en cuenta el grado o nivel de riqueza de sus ciudadanos, tres tipos de ciudadanos (los muy ricos, los muy pobres, y los intermedios entre unos y otros, es decir, la clase media) y dado que lo mejor y lo más virtuoso, bueno y bello radica en el término medio, cabe suponer que el mejor régimen político sería aquel controlado y ejercido por la clase media. Los regímenes políticos como la oligarquía (gobierno de los más ricos) y la democracia (gobierno de los más pobres), en cuanto que representan posiciones políticas extremas, deben ser evitadas porque generan sediciones, enemistades y conflictos sociales que ponen en peligro la estabilidad de la ciudad y que degeneran con más facilidad en tiranías. Por eso, según Aristóteles, de lo que se trata es de impulsar que en la ciudad la clase media sea la más numerosa ya que la clase media está libre de los defectos morales que afectan a los más ricos (ambición) y a los más pobres (envidia), y es la que menos rehúye los cargos y también la que menos los ambiciona. Una prueba que da para justificar su afirmación que la mejor forma de gobierno es la controlada por la clase media es que los mejores y más famosos legisladores griegos (Solón, Licurgo, Carondas) se consideraban a sí mismos como ciudadanos pertenecientes a la clase media. No obstante, Aristóteles reconoce que en la Historia de Grecia no ha existido nunca un gobierno de la clase media mientras que sí han abundado formas de gobierno oligárquicas y democráticas. En este sentido, la forma de gobierno que defiende Aristóteles es una forma de gobierno inédita y novedosa pero que sería la mejor y la más conveniente si lo que se pretende no es sólo garantizar la estabilidad social de la polis sino también hacer de sus ciudadanos unos buenos ciudadanos.

TEXTOS SELECTIVIDAD

Texto Selectividad Junio 2005 Es evidente que ha de preocuparse por la virtud la que de verdad se llama ciudad y no sólo de palabra. Pues, en otro caso, la comunidad se convierte en una alianza militar que sólo se diferencia espacialmente de aquellas alianzas con pueblos distintos, y la ley en un pacto que, como decía el sofista Licofrón, es garante de los derechos mutuos, pero incapaz de hacer buenos y justos a los ciudadanos. Aristóteles, Política, Libro III, Capítulo 9 (final del párrafo 3)

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

24

PREGUNTAS SELECTIVIDAD

● La ética de Aristóteles: felicidad y virtud (Selectividad, Junio 2004) ● El fin de la ciudad y los regímenes políticos en Aristóteles (Selectividad, Junio 2005) ● ¿Cómo entendió Aristóteles la vida humana y qué relación tiene su concepción con la ética y la política? (Selectividad, Septiembre 2007) • Los regímenes políticos y la noción de “vida buena” en la Política de Aristóteles (Selectividad, septiembre 2008)

Texto Selectividad Junio 2004 Por tanto, es evidente que la ciudad no es una comunidad de territorio para no perjudicarse a sí mismos y por el intercambio. Esto tiene que existir, si es que va a haber ciudad; pero no porque se dé todo ello hay ya una ciudad sino que es la comunidad para bien vivir de casas y familias, en orden a una vida perfecta y autosuficiente. Ahora bien, esto no existirá si no habitan el mismo y único territorio y contraen matrimonios entre sí. Por eso surgieron en las ciudades relaciones familiares, fratrías [entre los antiguos griegos, subdivisión de una tribu que tenía fiestas y ritos religiosos propios] fiestas y diversiones para vivir en común. Y tal cosa es fruto de la amistad. Pues la decisión de vivir en común es amistad. Aristóteles, Política, Libro III, Capítulo 9 (Párrafo 6)

PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com