entre el manicomio y el cementerio (2014)
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segundo libro del escritor villamercedino Gerhardo van Junker, editado por Rorschach en 2014.TRANSCRIPT
Ilustración de Tapa: “Mani-Mente-Rio”, deGerhardo van Junker.Diseño y Edición por: Gerardo Hidalgo.Dirección y Correción por: Darío Oliva.Para Editorial Rorschach, de G. Hidalgo (VillaMercedes, San Luis).
Primera edición: Agosto 2014
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Prólogo
Al abrir los ojos y gritos de este libro, piensoen variaciones, en mareas mentales, en elvértigo de la telaraña del lenguaje que losostiene, en la anábasis de la paloma sobre eltétrico lienzo de la mañana fría, brumosa, con laarboleda deshojada, raquítica, y el ulular delviento entre los resquicios de las ventanas,tocando como teclas las tejas flojas de los techosde las casas; y en la catábasis del cuervo de Poey su truculencia, al igual que en su cuentística,como en el caso de El Gato Negro y El entierroprematuro, que amenazan como incógnitas elpesaroso ser que se debate en los bordes de suexistencia, a medida que el laberinto de la dudahorada sus desfallecientes deseos, lo asfixia eirremediablemente lo lleva a un fin que loclausura.
Las lecturas me retrotraen al gótico de hálitooscuro y pies de barro entre lápidas y cruces decementerio, a la locura desenfrenada de una
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realidad otra que iguala la náusea de la pesadillay la suplanta, con parquedad de escenas ypinceladas claras en los diálogos de caracol quela sustentan; y al mundo del fantástico donde sevampiriza la sed parasitaria de una sociedadconsumista en el plano más abyecto y degradado(como símbolo que imbrica y supera el meroplano literario).
La noche es el telón de fondo que conviene,porque en la noche habitan irreprensiblesnuestros dolores zombis de hombres torturados.
Sólo los fragmentos de las canciones de rocksublimizan deseos incontrolados.
La vida es relato, y en los de este libro laleemos como si fuera una película encontinuado.
Darío OlivaVilla Mercedes, San Luis, Argentina.
1 2 de Agosto de 2014
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“Las canciones en mi cabeza
suenan de otra forma.”
Professor van Junker
Para Valquiria, Verónica,y Lautaro Porras.
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Uno
-No me preguntés qué hice entonces, /cuando la noche me protegía.
-¿Qué hiciste?-Te dije que no me preguntés.-¿Qué le hiciste?-La maté, ¿a quién le importa? Está bajo
tierra y no puede gritarme más.-¿Qué sucedería si te dijera que puedo traerla
de nuevo?-Callate idiota, no podés hacerlo. –Levanta
las manos y tapa sus oídos.-Marcus, piltrafita, ¿no querés saludar a tu
mamá? –pone voz de ancianita.
El otro se le avienta al cuello y los guardiasse interponen. Lo llevan al cuadrado, sin visitas,sin privilegios, solo él con la figura de su madresangrando por el cuello y la barriga.
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CEMENTERIODos
Cerebro de mono, tripa de sapo, / rabo derata, esencia de lapo, la brujita canta la receta.Recorta las partes y las va pegando en la telablanca.
-Terminé –dice, aliviada. La luna, baña elpatio de tenue resplandor.
La bruja arroja fósforos encendidos al cuadroque empieza a arder. Cuando la llama alcanza sumayor tamaño, una silueta emerge.
-Mi príncipe de fuego, ámame. –La silueta laabraza incinerándola.
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Tres
But you are colder than no other, más que unvampiro inclusive. Ambos sabemos que lapequeña bruja de fuego te apagó. ¿Por qué nogritás? Yo sé que querés hacerlo. ¡Gritá, mierda!¡Te estoy metiendo un cuchillo en el pulmón!
-Mirá el de la 409; está picando la pared conuna rama.
-Andá y correlo. –Dice Sigmund mientrasojea la lista de pacientes que restan visitar- Esaes la pared de la morgue, no vaya a ser quedespués se le ocurra meterse.
-Ahora mismo, Profesor.
Pero estás más frío que otro.
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CEMENTERIOCuatro
Wir laufen alle nur im Kreis/ Und niemandvon uns stirbt vor seiner Zeit Ninguno en tierrasagrada puede morir antes de tiempo. Solo élpuede lograrlo, –dice el cura en secreto deconfesión al alterado peregrino que ha llegadoante él.
-Yo sí, Padre, se lo digo… me estánbuscando. Los engendros de la noche me estánbuscando. Exorcíceme, Padre, hágalo, por favor.
-Está bien, volvé por la tarde.
En el crepúsculo, el peregrino entra en laiglesia y se sienta frente a la cruz. El cura reza ytira agua bendita. El monaguillo que lo asistetiene orden de llamar al manicomio si algo salemal.
El peregrino suda mares y grita como un
Todos corremos en círculos / Y ninguno de
nosotros muere antes de tiempo…
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loco. Su cara se sobresalta y señala a la cruz:-¡El mestizo! ¡El mestizo!El párroco, incrédulo, voltea y se cae de culo.
El mestizo, divinidad rebelde, niega con lacabeza y dice:
-Ése no tiene nada, sólo está chapita.Agita sus alas y emprende vuelo,
desapareciendo al mismo tiempo que elmonaguillo llama al manicomio para que selleven al cura, al peregrino y a él.
Nadie queda cuerdo después de conocer almestizo.
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CEMENTERIOCinco
The evening of the moon, / Dreams are madewinding through my head. Son como extrañascriaturas visibles sólo a la luz de la luna. Susrostros son manchas que no puedo analizar.Están ahí, observan el aire que exhalo. Los ojosde la noche.
Quiero dibujarlas: que un trazo grueso, otrofino y una curva la representen, así puedomostrárselas al hombre de anteojos; pero no meatrevo. Sé que pueden matarme por eso y…
En la mañana… se van disminuyendo hastadormir bajo el polvo.
Al caer la noche, los sueños torturan mi cabeza.
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seis
Escribime una carta desde el infiernohermano, cuéntame cómo es conocer al diablo.Me pregunto si habrás llevado la expresión desorpresa, la misma que tenías cuando dejaste degolpearme en cuanto viste el revólver que saquéde la almohada. Bang, Bang, escribe hermano,escribe.
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CEMENTERIOsiete
Cuando no estoy contigo domestico lashoras, les enseño trucos: girar, hablar, hacer elmuerto.
¡Oh Sigmund! Llamame a tu despacho denuevo, quiero enseñarte mis horas, que veas quégrande están y cuánto han crecido. ¿Vas a tocarmis horas Sigmund Andrade? ¿Vas a hacerlo?
Llamame, te amo.Siempre tuya,
Eleonora.
Dobla la hoja y se la da a la enfermera conesperanza de que llegue al Profesor. Ella no sabeque va a parar a la colección de papeles delconserje del manicomio.
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ocho
The killer awoke before dawn. Solo en mediodel desierto. Sentía frío en la mano. Se palpócon los dedos el brazo amputado. La mano noestaba, sin embargo la sentía y sentía el frío quequemaba.
Llora como un niño-puerco. Era la manobuena.
Toma la pistola y gatilla. La bala atraviesa lacabeza y despierta sobre el suelo de lahabitación.
La mano está en la cámara de la morgue.
El asesino despertó antes del amanecer.
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CEMENTERIOnueve
-Meet me in the graveyard/ We'll walkamongst the dead –ella toma mi mano ycaminamos. Pasamos por el gran pasillo dondedescansan los más antiguos, doblamos en elcallejón de los nichos.
-Aquí está mi bisabuelo –digo.-Allá la mía –señala por encima a la
izquierda.Piso con cuidado la sección de cruces. Ella se
detiene:-Aquí termina el paseo, tengo que volver.Parpadeo y desaparece. A mis pies leo con
escasa luz: Eleonora.
Acompáñame al cementerio/ Caminaremos entre los muertos
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diez
En la penumbra, el patio aúlla/ extrañosruidos soplan las cosas. Los espíritus bailanalrededor del perro muerto. El perro muere deun piedrazo en la cabeza. Ladra al extraño. Saltaal patio y la silueta lo mira. Noche, luna, viento:ambiente de terror.
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CEMENTERIOonce
Una noche la encontré, yo vagaba solitariopor debajo del abismo. El auto destrozado enmedio del sendero y el aroma putrefacto delsilencio me obligaron a acercarme.
Allí estaba.Su rostro mantenía la belleza de las estatuas y
la palidez de un día gris antes de la lluvia. No sésu nombre pero si el color de sus ojos.
Esos ojos color tierra tenían algo hipnótico;me apresaron.
Rompí el vidrio de la puerta, me arrastrécomo un gusano hasta ella y la abracé. Me quedémirando sus ojos tierra hasta que llegó la policía.
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doce
I'm gonna use you and abuse you. I'm gonnaknow what's inside. Repetía una y otra vez elorangután-enfermero cuando pasaba por supuerta.
Mucho tiempo no me queda.La habitación era tranquila. Tenía una
ventana hacia el cementerio y allí veía cosas. Lascosas vendrán por mí.
El Caído, como una especie de gárgola, lovigilaba desde el cementerio a través de laventana. Últimamente las cosas están másalborotadas que de costumbre. Lo que me lleva apensar que él es el motivo.
Yo voy a usarte y abusarte. Yo voy a saber qué
tienes adentro.
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CEMENTERIOtrece
Hay tantas puertas dentro de nuestras mentes-anota en su diario el Profesor SigmundAndrade-, algunas que ni siquiera llegamos aabrir. Pero creo que he encontrado a un chicoque puede cambiar el rumbo, se llama Leckibory creo que puede abrirlas. Tengo la esperanza, elserá el primero de la siguiente generación. Esirritante a veces.
Ahora tengo sesión con él. Anotaré lasconclusiones en cuanto termine.
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catorce
Sos la serpiente que me quiere envenenar/ elescorpión que me traiciona una vez más,grafitea en el mausoleo. Es de noche y elguardia de seguridad aparece. Ambos corren porentre las tumbas; el vándalo tropieza, cae y segolpea la cabeza.
El guardia lo despierta en su oficinita. Eljoven solo pronuncia ¡Grrr…! Y se le tiraencima desgarrando el cuello primero y el restodel cuerpo después.
Luego camina cojeando con una pierna y conla otra arrastrándola por el cementerio. ¡Grrr…!¡Grrr…! ¡Grrr…! Encuentra un hueco en latierra y se duerme.
En la mañana no entiende qué hace ahí, nipor qué está manchado de sangre.
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CEMENTERIOquince
Living fast and dying Young like a endlesspoetry. Digo en todas las entrevistas que mehacen. El otro día vinieron del diario El difunto apreguntarme cómo me iba. No está mal, pero lacama podría ser más dura. No veo la hora desalir. Quiero volver a los escenarios y hacer eltruco de la guitarra de nuevo.
En la revisión de su estado mental, su pedidode alta fue rechazado. Alguien anotó en lasobservaciones:
Aún cree que atravesar a su compañero conel mástil de la guitarra está bien.
Vivir rápido y morir joven como una poesía sin fin.
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dieciséis
Point me to the sky above/ i can get there onmy own/ walk me to the graveyard/ dig up herbones. Palada tras palada cabo en la tumba deEleonora, mi amada Eleonora. Mi reloj cardiacose acelera: suena la chicharra de peligro.
La señora de la noche vigila mi trabajo.Golpeo el cajón con la punta, me esfuerzo porlevantarlo. Eleonora, mi dulce Eleonora. Abro elcajón, la señora de la noche asiente. Me acuestosobre ella; mi reloj deja de marcar.
(La muerte) me señala arriba en el cielo/ puedo
llegar por mi cuenta/ acompañame al cementerio/ a
desenterrar sus huesos.
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CEMENTERIODiecisiete
Y el frío de tu corazón te devolverá el dolor,profesaba el párroco frente al chico vestido denegro. Él insiste en que está endemoniado, tiraagua bendita y canta, reza alrededor del chico,pero no consigue nada.
Pasan las horas y el chico vestido de negro secansa: penetra el alma del cura, lo paraliza yremata con un soplido que lo congela.
Admira su obra de arte, suspira contento yarroja una biblia que rompe el hielo y al cura.
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Dieciocho
My name is Lucifer, please take my hand;vamos, tomala, Nathan. Sé que querés hacerlo.Te llevaré a conocer los siete círculos delinfierno de Dante, los torrentes amarillos, elinframundo. Verás cómo es en realidad. Todo loque soñaste por fin podrás verlo. No tengásmiedo.
Nathan tuerce la cabeza y desciende laescalera. En el fondo no ve más que mentiras:no hay llamas, ni azufre, ni gritos, ni tortura.Sólo un asiento bajo un halo de luz en medio delo negro. Ese es el infierno, una eternidadsentada. Sin imaginación. Sin vida.
Mi nombre es Lucifer, por favor toma mi
mano.
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CEMENTERIODiecinueve
Dale las llaves a ese ser extraño. / Abre laspuertas, al fin de su martirio. Le dictaba la vozen su cabeza.
Mantiene su martirio, cierra las puertas. /Esconde las llaves en el cementerio. Replicó laotra.
Finalmente se marcha y deja al monstruoencerrado en la vieja torre de agua de la CalleAngosta.
Por las noches se escuchan golpes y gritosclaustrofóbicos.
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Veinte
Una mujer atrás de un vidrio empañado.Grita sobre un peñasco. El auto se balanceasobre el abismo.
Afuera el frío; adentro el gas del caño deescape aprisiona y desvanece el oxígeno. Grita,grita y grita. Se tortura; ya no lo soporta yencara al fondo.
Explosión.
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CEMENTERIOVeintiuno
Cuando caen las sombras de la oscuridad/ lamañana parece nunca llegar. ¿Por qué mierda nopuede haber luz todo el tiempo? ¿Por quémierda anochece? Ellos me van a comer denoche, yo lo sé, sí, lo sé. Ellos lo dicen todo eltiempo. ¡Engendros, malditos engendros! ¡aaah!¡gr…! ¡Ay! ¡Ayuda!
Los enfermeros entran como cada día de lasemana y adormecen al enfermo con fobia a lanoche.
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Veintidós
The world is a vampire, sent to drain. Esanoche dormía plácidamente cuando en lahabitación sintió frío. Encendió la luz y al ladode la cama de su hermano menor, parado ahí sinmás, una figura negra esperaba.
Se cruzan miradas: una tiene ira y la otranada.
El mundo espera a que el chico se mueva,exclame o haga algo, pero él se voltea, apaga laluz y se tapa. Luego escucha un grito desgarra-dor.
El mundo es un vampiro / enviado a drenar.
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CEMENTERIOVeintitrés
I had everything, opportunities for eternity/And I could belong to the night, escuché entretruenos. Los refucilos blanquean sus facciones,y sus ojos claros brillan. El viento arrastra suscabellos en infinitas direcciones. Eleonora.
Despierto por la tormenta. Los barrotes en laventana me recuerdan que estoy en la habitación201 del hospital psiquiátrico y Eleonora estámuerta.
Yo tenía todo, oportunidades para la eternidad/
y ahora podría permanecer en la noche.
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Veinticuatro
Bebé mi locura –escribió el maestro delterror.
El lector bebió la novela en días y fue loúltimo. Ahora está internado en el hospitalpsiquiátrico de Renacentía.
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Veinticinco
Another story of the Bitter Pills of Fate.Camino por la oscuridad magistral de la locura.La temida locura, la insana. Pasillos maliluminados, un laberinto de enfermos torturadosy maldecidos. Soy el militante de ambos lados, elgeneral de generales, el caído en (des)gracia, elhereje que rechazó lo divino. Soy Edelmann, ElCaído.
Deambula por los pasillos con una manosobre la otra y sobre la espalda. Tiene miradadespótica. Su andar inunda de aire egomaníaco.
Los enfermeros hacen gestos repulsivos alpasar a su lado. Es el único que no se baña. Lascicatrices de su cara impactan y repelen a losinternos.
Cuando vuelve a su habitación, se recuesta ysus facciones duras se blandifican y es en esepreciso momento que su mirada despótica semarcha y sólo quedan las lágrimas de un hombrelastimado.
Otra historia de las Píldoras Amargas del Destino.
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Veintiséis
-Love you so much it makes me sick –cantóKurt.
La chica agitaba la cabeza. Él le clava losojos durante dos minutos. Ella lo nota y le arrojauna botella de gaseosa. Dentro le enviaba suamor.
Él bebe.Esa noche muchas botellas con amor volaron
al escenario.
Te amo tanto que me haces enfermar.
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CEMENTERIOVeintisiete
…Empecé haciendo carreras/ por atajos yveredas muy estrechas para mí, corría tras delos perros, ladraba a los gatos. La calle era mivida hasta que me atraparon. Anhelo descargarmi excitación, extraño la adrenalina, los huesos,robar comida…
Habitacion 201. Marcos Klimowichs.
-¿Qué tiene ése? –pregunta el nuevoenfermero.
-Ése se cree animal.
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Veintiocho
And if you can stay then I´ll show you the way, /To return from the ashes you call.
Mostrame entonces, dijo el profesor Sigmund.El paciente abrió su mano derecha y se la mos-
tró. Cuando la atención del Profesor se diri-gió a lapalma, el Leckibor manoteó una pluma de la mesay se la clavó. La sangre hipnotizó a Sigmund.
Una película de sangre corrió por las paredesdel cuarto. Luego el color se corroe y marchitahasta apagarse. Habitación negra.
Partículas minúsculas de luz en el foco espar-cen el gris en el techo. El techo es ceniza y las ce-nizas caen pequeñas como los primeros copos deuna nevada.
Una mano abofetea a Sigmund y lo abstrae. Laenfermera desconcertada habla, pero un idio-madesconocido.
Otra inyecta anestésico al leckibor y lo lleva avendarlo.
Y si puedes quedarte entonces te mostraré la
manera / De volver a las cenizas que te trajeron.
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CEMENTERIOVeintinueve
Con cráneos y huesos/ hago escaleras deesto/ del pozo en las tinieblas, río de los sueñosrotos. Cada ilusión que pierdes es mi alimento.Las lágrimas, (tus lágrimas), bebo, asimilo.Camino por las noches en busca de laspesadillas de los durmientes/inocentes. Soy eldevorador.
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Treinta
Fue una noche de abril cuando yo salté esavalla. Quiero verte una vez más, una sola vezmás, Eleonora. No tengo mucho tiempo, ellossaben dónde buscarme. Cuando me encuentrenserá tarde: habré pintado de rojo tu lapida.
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El profesor Sigmund me mandó a llamar a sudespacho.
El orangután/enfermero empuja mi silla deruedas excesivamente lento; tanto, que podríahaber visto las hojas caer si, en aquel pasillo,hubiera tenido conexión al exterior.
Abre la puerta con la frialdad característicade las personas que detestan su trabajo, el tratoconsiderado entre personas y un estilo de vidaque les impide completar sueños frustrados.
La luz del día me enceguece y tardo en ade-cuarme. El orangután/enfermero me da el impul-so necesario para detenerme ante el escritorio.
–Buen día, estimado Leckibor. Hoy vamos aprobar un método distinto. La mente, la tuya enparticular, es un misterio para mí, por eso quieroproponerte el juego de las manchas deRorschach. Es sencillo: vos mirás las tarjetas ydecís lo primero que se te ocurra. ¿Querés? Aver… Empecemos por ésta…
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CEMENTERIODos
Me muestra la primera.¿Una mariposa? No sé… pero parece…–Realidad.Lo que provoca la inevitable pregunta:– ¿Por qué realidad si acá no hay nada
concreto?–Leves líneas, que interpreto como sendas
que llevan a la nada. Un centro oscuro como lostiempos en que estamos inmersos; ¿será por esoque veo realidad ahí, estimado Profesor?
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Tres
Sigmund lleva tantos años tratandopacientes, que mantiene la calma y toma notadel balbuceo áspero, afónico de mi voz. Luegosaca la siguiente imagen.
Parece un perro, un perro callejero; callepadre; el libre albedrío me obliga a pronunciar
–Padre.Rememoro en un cuarto interior mi escape de
él y la vida en la intemperie junto con los perros(infaltables compañeros).
–No recuerdo su cara –continué–, noaparece. Debe estar tapada por kilos de polvo enalguna pila de olvido. Se esfumó. Pero…sigue… su voz profunda y demoledora. Susgritos agobiándome.
>>La ambición de que fuera su copia fide-digna: macho, conservador, decadente y alcohó-lico. Todo fue en vano, no logró que yo, sudescendiente bastardo, asimilara sus enseñanzas.
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CEMENTERIOCuatro
Por fortuna, Sigmund me detiene antes deexplotar y decorar con mis sesos su derruidaoficina.
Cambia de tarjeta.La imagen ya no era del clásico blanco y
negro, sino que se agregaron el celeste y el rosa.
Un roble, un ave y la…–Torre de ajedrez.>>Aprendí a jugarlo en una noche con el rey
de los descalzos. Yo quedé fascinado y perplejopor las direcciones de su movimiento y marcharelegante.
>>La torre me condujo por el brillantecamino de la lucidez mental y provocó lainesperada derrota del rey…
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Cinco
– ¡Suficiente! –grita y levanta el tubo delteléfono– Reynoso, vení a buscar al paciente yencerralo en su cuarto.
El orangután-enfermero me lleva de nuevo ala cárcel sin vida blanca y me abandona delantede los ventanales de mi cuarto.
Cuando observo a través del vidrio hacia elcementerio, surge la imagen más espeluznante:
Yo parado, dando el pésame en mi propioentierro.
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CEMENTERIOCanciones citadas
Uno – Veneno. El Último Ke Zierre. Veneno(2002).
Dos – Dónde está el porvenir? Eskorbuto.Eskizofrenia (1985).
Tres – Scream. The Vines. Winning Days(2004).
Cuatro – Vida Desesperada. Die Toten Hosen.La hermanda – en el principio fue el ruido (2009).
Cinco – Spiders. System Of A Down. SystemOfA Down (1998).
Seis – De Madriz al infierno. Kaos Urbano. DeMadriz al infierno (2008).
Siete – Puta. Extremoduro. Yo, minoríaabsoluta (2002).
Ocho – The end. The Doors. The doors (1967).Nueve – Garden of serenity. The Ramones.
Halfway to sanity (1987).Diez – Alivio. Attaque 77. Un Día Perfecto
(1997).Once – Lados. Loquero. El qué no se consuela
es por qué no quiere (1991 ).
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Doce – Sweet Dreams (Are made of this).Marilyn Manson. Smells Like Children (1995).
Trece – Siempre en vanidad. DeRomanticistas Shaolin’s. A dónde vas eh!?(2000).
Catorce – Vos vas más allá. Flemita.Underpunk (1997).
Quince – Thunder Kiss ’65. White Zombie.La Sexorcismo: Devil Music Vol. 1 (1 992)
Dieciséis – Dig Up Her Bones. The Misfits.American Psycho (1997).
Diecisiete – Será muy tarde. Daltónicos.Demo (2003).
Dieciocho – N.I.B. Black Sabbath. BlackSabbath (1970).
Diecinueve – Dale las llaves. Expulsados.Cuarto para espectros (2004).
Veinte – Mejor no hablar de ciertas cosas.Sumo. Corpiños en la madrugada (1983).
Veintiuno – No te dejare. Flema. El excesoy/o abuso de drogas y alcohol puede ser
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CEMENTERIOperjudicial para la salud… Cuidate, nadie lo
hará por vos (1995).Veintidós – Bullet with butterflies wings. The
Smashing Pumpkins. Mellon Collie and theinfinite Sadness (1995).
Veintitrés – Make me wanna die. The PrettyReckless. Light me up (2010).
Veinticuatro – E.O.Y. El Otro Yo. Los hijosdel alien (1996).
Veinticinco – Dead memories. Slipknot. Allhope is gone (2008).
Veintiséis – Aneurysm. Nirvana. Incesticide(1992).
Veintisiete – Como el viento de poniente.Marea. Besos de perro (2002).
Veintiocho – Mama. My Chemical Romance.The Black Parade (2007).
Veintinueve – Ascenso. Jauría. Jauría (2010).Treinta – Me escape del manicomio.
F.A.N.T.A! Vacaciones en Marte (2003).
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CEMENTERIOGracias A:
NP, Bianca Guzmán y Sebastián De ZaldúaLeveque por acompañarme en el sendero de lasletras y la amistad.
Mi Maestro, Darío Oliva, por tenermepaciencia, por las valiosas palabras del prólogo yprincipalmente por alentarme.
Mi Hermano, Lautaro Porras, por estarsiempre presente y ser compañero en las perrasnoches en las que escribí esta obra.
Verónica y Valquiria, por mantener lastinieblas lejos de mi locura.
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GERHARDOVAN JUNKER
Es el pseudónimo de Gerardo MiguelHidalgo. Nació (y vive) en Villa Mercedes (SanLuis), el 25 de Noviembre de 1991 . Aprendió atocar la guitarra a los catorce años y escribedesde entonces. Primer Premio de Narrativa,Concurso Literario en Homenaje a MarioBenedetti. Jurado: Grupo Literario Arcadia.Cuento premiado: "Suicidio al fin de la noche"(2009). Seleccionado finalista concurso Palabrassin fronteras, Bruma Ediciones. Cuento premia-do: "Las manchas de Rorschach" (2013). Partici-pó en diversas antologías tanto con su produc-ción poética, como narrativa (incluidos prólo-gos).
Miembro del Grupo Literario Arcadia desdeagosto del 2009 (tesorero 2013-2015). Fundadordel proyecto Editorial Rorschach.
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CEMENTERIOContacto
Correo: [email protected]:
https://www.facebook.com/GerhardovanJunkerTwitter: https://twitter.com/TheProfessor_G
Libros Publicados:
* Feria de Sensaciones, Microrrelatos(Editorial Rorschach, Villa Mercedes, 2013).
* Sobre el Croto y el Campana, Libro-Objeto(Editorial Rorschach, Villa Mercedes, 2013).
* Entre el manicomio y el cementerio,Micro/Novela (Editorial Rorschach, VillaMercedes, 2014).
Colección EditorialEmergente
01 Antología [Dos ramas de un árbol] Narrativay Poesía, 2013 •02 Gerhardo van Junker [Feria de sensaciones]Micro-ficciones, 2013 •03 Sebastián De Zaldúa Leveque [El paso de losFuria] Cuentos, 2013 •04 Darío Oliva [Eco-grafía] Poesías, 2013 •05 Gerhardo van Junker [Sobre el croto y elcampana] Micro-ficciones, 2013 •06 Silvina Avalle [Veinte poemas para gatos]Poesías, 2014 •07 Antología de Haiku [Jardín de Instantes]Poesías, 2014 •08 Darío Oliva [Cronopías (Viaje a la Isla deCortázar] Poesías, 2014 •09 Gerhardo van Junker [Entre el manicomio yel cementerio] Micro/Novela, 2014 •10 N. P. [Sugestión] Cuentos, 2014 •11 Antología [Los Cuatro Umbrales de la Noche]Cuentos, 2014 •