EL CONSUELO DE LA BENDITA ESPERANZA DEL CRISTIANO

(1 Ts. 4:13-18)

INTRODUCCIÓN:Los creyentes a quienes se escriben estas palabras, esperaban ansiosamente el regreso de Cristo Jesús. Tan seguros se sentían con respecto a su pronto regreso que no consideraban siquiera la posibilidad de que alguno de ellos muriese antes de que ello ocurriera.

En consecuencia, frente a la muerte inesperada de algunos de ellos, sufrieron una aflicción sorpresiva. Sus mentes se llenaron de dudas con respecto al estado de estos creyentes fallecidos prematuramente. ¿Qué sucedería con los creyentes que morían? ¿Habían sido relegados a una posición inferior? ¿Se llevarían una desilusión en la venida de Cristo por su iglesia? ¿Sería su resurrección postergada posiblemente hasta la segunda venida de Cristo al fin de la tribulación o, peor aún, hasta después del glorioso reinado de Cristo en el milenio?

A fin de evitar que este vacío en su conocimiento fuera llenado por especulaciones extravagantes o herejías aún más extraviadas, Pablo procedió a perfeccionar esta falta de fe escribiéndoles que la bendita esperanza del regreso de Cristo Jesús debe causar en los creyentes consuelo y tranquilidad.

Entonces, El consuelo de la bendita esperanza del regreso de Cristo, produce:

1. Seguridad para quienes se entristecen a causa de la ignorancia (4.13)

2. La revelación directa del Señor asegura que los cristianos que han dormido no tendrán un lugar inferior. (4.15).

3. La resurrección de los cuerpos de los cristianos muertos constituyen la prioridad en el programa divino.

4. El arrebatamiento de los cristianos resucitados y de los creyentes vivos en el aire confirma la esperanza del creyente (4.17ª)

5. La reunión con el Señor, produce esperanza (4.17b)

6. La realidad de la bendita esperanza del cristiano es una fuente infalible de mutua seguridad y consuelo. (4.18).

CONCLUSIÓN:¿Cuál es su esperanza? ¿En qué promesas puede usted descansar con seguridad? ¿Qué puede dar aliento y consuelo en momentos tan difíciles de la partida de un ser querido?Todos los que han dormido en Cristo, aguardan la gloriosa esperanza de la resurrección de entre los muertos. Si duermen hoy, tienen esperanza de en cualquier momento, a la voz de mando del Señor, cuando suene la final trompeta de Dios, despertar de su sueño, resucitando de entre los muertos para vivir para siempre con el Señor.

Esta esperanza es ciertísima para quienes han decidido estar en Cristo, es decir, para quienes le reciben con arrepentimiento y fe y viven vidas que lo glorifican aquí en la tierra. ¿Es esta su realidad? ¿Es esta su seguridad?

Quienes desean ver nuevamente a nuestra hermana, deben decidir por Cristo, que es el único que garantiza hacerlos encontrar en su reino de gloria.

El día del Señor vendrá en cualquier momento, y no se nos olvide que hay vida después de la muerte.

Y Jesús es la resurrección y la vida.

No hay esperanza para los que mueren sin Cristo, pero ninguna condenación hay para los que mueren en Cristo ROMANOS 8:1

La Muerte es lo que conocemos como lo más extremo y terminal en la vida del hombre. Sin embargo la palabra de Dios nos asegura que podemos tener vida aun después de la muerte física. Todo a través de Jesucristo el hijo de Dios.