Download - Nuevas tecnologías en el diseño de jardines
nuevas tecnologíasen el diseño de jardines
PAUL COOPER
página 1 detalle de un jardín en el Festival Internacional de jardines
de Chaumont-sur-Loire (Francia).
página 2 jardín deVidrio, diseñado por Robin Winogrond
página 5 jardín del Viaje deVitalidad, diseñado por Bonita Bulaitis
Título original:The New Tech Garden
Traducción:
David N. M. George
Revisión técnica de la edición en lengua española:
Sergio Abellán SanfélixTécnico agrícolaPaisajista
Coordinación de la edición en lengua española:
Cristina Rodríguez Fischer
Primera edición en lengua española 2007
© 2007 Naturart, S.A. Editado por BlumeAv. Mare de Déu de Lorda, 2008034 BarcelonaTel. 93 205 40 00 Fax 93 205 14 41E-mail: [email protected]© 2001 © Octopus Publishing Group Ltd
I.S.B.N.(10): 84-8076-663-8I.S.B.N.(13): 978-84-8076-663-0
Impreso en China
Todos los derechos reservados.Queda prohibida la reproducción total oparcial de esta obra, sea por medios mecánicoso electrónicos, sin la debida autorización porescrito del editor.
CONSULTE EL CATÁLOGO DE PUBLICACIONES ON-LINE,INTERNET: HTTP://WWW.BLUME.NET
CONTENIDO
¿POR QUE LAS NUEVAS TECNICAS? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6
RESPUESTAS RADICALES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
SOLUCIONES DE ALTA TECNOLOGIA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 54
EL JARDIN CINETICO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 80
AMPLIACIONES ARQUITECTONICAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 106
GRATIFICACION INSTANTANEA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 138
EL JARDIN BLANDO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 156
EL JARDIN DE PAUL COOPER . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 184
DIRECTORIO DE MATERIALES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 189
INDICE . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 190
AGRADECIMIENTOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 192
20 r E S P U E S T A S r A D I C A L E S
RESPUESTAS RADICALES
decorativos. El uso de rocas que excluye cualquier planta no es algo del
pasado ni exclusivo de Japón. Muy recientemente, en Revolver Creek,
Sudáfrica, rocas ya presentes en el lugar y de distintos tamaños fueron
pintadas con imágenes y diseños coloridos para crear lo que su
«diseñador» llama un «jardín de cantos rodados». En Europa y Estados
Unidos, un jardín que careciera de plantas sería considerado por muchas
personas como una contradicción de los términos.
Lo que resulta todavía más controvertido es el hecho de que algunos
de los diseñadores actuales se muestran satisfechos sustituyendo plantas
«El shock de lo nuevo» fue una frase acuñada por el crítico artístico
australiano Robert Hughes para describir las obras de arte que han retado
nuestros valores y sensibilidades estéticas. Puede sorprender bastante
descubrir que los cuadros de Monet y de los impresionistas fueron
considerados un ultraje cuando se crearon, a finales del siglo XIX. Uno de los
primeros y principales shocks del siglo XX fue el provocado por el artista
dadaísta Marcel Duchamp. En 1913 revolucionó el mundo del arte cuando
presentó una rueda de bicicleta, a la que había dado la vuelta, como una
escultura «confeccionada». Su acción echó por tierra, en un instante, los
mitos asociados con la definición de arte y lo redujeron, simplemente, a
«una idea». Este acto aparentemente negativo sirvió, paradójicamente, para
dar lugar a un enfoque más inventivo y menos inhibido del arte y el diseño
de los que disfrutamos en la actualidad. En su mayor parte, el jardín ha
estado exento de esta controversia y no se ha visto afectado por estas ideas
liberadoras. Esto se debió, hasta hace pocos años, a que la mayoría de los
creadores de jardines eran especialistas muy aficionados a las plantas que
no eran conscientes de las ideas radicales o de la influencia del diseño
o que se resistía a todo ello.
Los últimos creadores que han contribuido al diseño de jardines tienen
orígenes mucho más variados. Algunos proceden de disciplinas muy
distintas del arte y del diseño, mientras que otros vienen de escuelas
de arquitectura paisajista más atrevidas (entre ellos Topher Delaney, que
recibió su formación en la influyente Escuela Californiana de Diseño de
Jardines). Otros son simples personas independientes, algunos de ellos sin
unos conocimientos formales. Lo que tienen en común es su deseo de
cuestionar nuestras preconcepciones del jardín. Hacen hincapié en el arte
del jardín, o en el jardín como arte. Se preguntan: ¿Qué es un jardín?
¿Para qué sirve? ¿Cómo y de qué debería hacerse? Incluso se han atrevido
a cuestionar por qué debería un jardín tener plantas.
En Japón, un jardín puede consistir en grava rastrillada y piedras
colocadas en lugares precisos, como en Ryoan-ji, al norte de Kioto. En este
país, el jardín puede estar formado en cinco grupos de piedras dispuestos
cuidadosamente y con musgo en su base, sobre una extensión de grava
rastrillada: un diseño que podría interpretarse como unas islas en un mar
calmado y picos de conciencia que emergen de la mente inconsciente.
Este jardín y otros similares se han creado para su contemplación, y
como tales son cuasi religiosos y no están pensados para ser simplemente
izquierda Rueda de bicicleta,
creada por el artista de origen
francés Marcel Duchamp en 1913.
Esta escultura «confeccionada»,
que consiste únicamente en dos
objetos encontrados, provocó un
enfoque más amplio de la escultura
y el arte y el diseño en general,
lo que todavía es evidente
en la actualidad.
21r E S P U E S T A S r A D I C A L E S
reales por artificiales, aunque esta idea tampoco supone algo nuevo.
En los primeros jardines islámicos de Bagdad estaban de moda los árboles
artificiales. Estaban hechos de oro y plata, solían ser colocados en medio
de grandes estanques, y tenían piedras preciosas a modo de fruta. En la
China del siglo VII, en el gran parque del emperador Yangdi, de la dinastía
Sui, los árboles desnudos eran engalanados en invierno con flores de seda.
Incluso en verano, la floración de los lotos era incrementada con flores
artificiales.
Es fácil considerar tales ideas como frívolas, pero al ser contempladas
con una mentalidad abierta, pueden ayudarnos a estar menos ciegos con
respecto a nuestra visión de lo que constituye un jardín. Pueden, en
concreto, hacer que discriminemos menos respecto a la forma en que
usamos las plantas. Con demasiada frecuencia, la falta de restricciones
a la hora de escoger las plantas, junto con la tendencia a colocar plantas
por colocarlas, ha dado lugar a jardines que son, simplemente, una mera
inferior Andy Goldsworthy ha
trabajado en estrecho contacto con
el entorno durante años. Las obras
efímeras del artista, que usa hojas
caídas o hielo, quedan plasmadas
sólo en las fotografías. Esta
instalación, hecha de piedra, es
más permanente. Muestra que
un método de construcción
generalmente asociado con muros
de piedra seca puede usarse para
crear un paisaje escultural.
superior La tierra virgen
de Revolver Creek, en Sudáfrica,
fue transformada en un paisaje
colorido mediante diseños pintados
en las piedras, que ya formaban
parte del terreno. Este agreste lugar
se ha convertido en un jardín
mediante el más sencillo de los
métodos: la toma de elementos
naturales.
82 e L j A R D I N c I N E T I C O
EL JARDIN CINETICO
pocos años más tarde, László Moholy-Nagy llevó un paso más adelante
el arte cinético con su Modulador de la Luz-Espacio, una construcción
motorizada de 2 m de altura de acero cromado perforado, malla de
alambre y vidrio. Cuando se ponía en movimiento en una habitación a
oscuras y se proyectaba luz sobre sus variadas superficies y en movimiento,
la luz que reflejaba producía sombras constantemente cambiantes
sobre las paredes. Pero, probablemente, el exponente más conocido
del arte cinético es Alexander Calder, cuyos «móviles» aprovechan sólo
las corrientes naturales de aire para crear un entretenido ballet aéreo
de forma y color. El movimiento pictórico equivalente al arte cinético fue
Uno de los principales cambios que se dio en el arte occidental a principios
del siglo XX fue el rechazo a la imitación de la naturaleza. En un cambio de
dirección iniciado por los cubistas y refinado por los constructivistas, la
pintura y la escultura adoptaron la abstracción. El movimiento había sido,
anteriormente, representado en pintura, arcilla o piedra, pero en lo que se
ha llamado arte cinético, se convirtió en algo real y en una forma de
expresión artística. En 1920, Naum Gabo hizo la que, probablemente, fue
la primera escultura cinética. Haciendo vibrar, mediante la electricidad,
un cable de forma que pareciera convertirse en un cono, combinó el
movimiento y la ilusión para crear una forma escultural temporal. Unos
superior La fuente Órgano de la
Villa d’Este, cerca de Roma, recibió
su nombre debido a su original
capacidad de producir sonidos
como los de los tonos de un órgano
y los propios de una trompeta.
Finalizado en 1575, el jardín, con
sus autómatas accionados
mediante agua y sus fuentes, fue
uno de los primeros jardines
cinéticos.
83e L j A R D I N c I N E T I C O
el op (de óptico) art, en el cual los pintores animaban la superficie de sus
lienzos con trucos ópticos inquietantes. Los dibujos ópticos ondulados,
principalmente blancos y negros, creados por la artista británica Bridget
Riley incluso contribuyeron, en la década de 1960, a la adopción del estilo
op por parte de la cultura popular.
A diferencia de un lienzo pintado o una talla en piedra, un jardín nunca
permanece quieto, gracias a la naturaleza; pero, durante siglos, los
creadores de jardines se han aventurado a añadir más movimiento para
entretener o, simplemente, por los efectos visuales. Puede que fueran los
primeros artistas cinéticos, y los artefactos que solían usar con más
frecuencia era la fuente u otros elementos de agua. En tiempos de los
romanos, los avances en la ingeniería hidráulica dieron lugar al desarrollo
de ambiciosas fuentes, y hay descripciones de las fuentes esculpidas, de
los chorros que echaban y de las llamativas construcciones de Pompeya.
Con el renacimiento de la casa de campo clásica a finales del siglo XV,
la fuente fue el vehículo creativo ideal para los escultores de la época,
izquierda Este anuncio de la
década de 1960 de un tejido
sintético nuevo refleja la
importancia del op art en el
diseño. El estilo del dibujo
pretendía sugerir movimiento
mediante la ilusión óptica. Bridget
Riley, la artista más conocida de
este estilo, se basaba en el uso
de franjas blancas y negras,
y su estilo se ve reflejado aquí.
inferior El dibujo ondulado y repetitivo de esta tela, diseñada por Barbara
Brown en 1960, se adelantó varios años al op art pero, sin embargo, sugiere
intensamente el movimiento característico de este estilo. Esta ilusión se ve
reforzada por las muchas franjas de color que constituyen formas onduladas
y que están dispuestas en un orden tonal que progresa
de los tonos oscuros a los claros.
In recent years a new generation of garden designers has realized
the potential of modern materials and technologies in creating
innovative and individualistic gardens to suit contemporary
lifestyles. Now award-winning ‘iconoclast garden artist’ Paul
Cooper brings together the work of the best international ‘new
tech’ designers, while exploring the inventiveness of their designs.
Los diseños de jardines más experimentales de los últimos
años, incluidos ejemplos en los que aparecen hielo seco,
máquinas de humo, esculturas que se mueven con el viento,
rocas pintadas, cajas enormes que emiten luz y espejos.
Explora el potencial creativo de la nueva tecnología y de los
materiales artificiales, como el metal, el plástico, el vidrio,
la goma y la tela, además de elementos naturales como
el agua y el viento, y de objetos encontrados.
Incluye un directorio de materiales cuyo uso resulta adecuado
en los jardines de nueva tecnología.
��������
��������
��������
En los últimos años, una nueva generación de pai-
sajistas se ha dado cuenta del potencial de los nue-
vos materiales y tecnologías para crear jardines que
se adapten a los estilos de vida modernos.
Paul Cooper, galardonado «artista iconoclasta
de los jardines», recopila el trabajo de los mejores
diseñadores internacionales.
ISBN(10)84-8076-663-8ISBN(13)978-84-8076-663-0
,!7II4I0-hgggda!