La costa corresponde al terreno de ancho variable que se extiende desde la línea
de costa, tierra dentro hasta el primer cambio importante en los rasgos
morfológicos del terreno (Codignotto, 1987). Por su parte, MINAMB (2012), define
las costas como la franja del territorio continental que se extiende a lo largo del
límite con el mar. Estos espacios constituyen uno de los ambientes más móviles e
inestables de la tierra, a consecuencia de la dinámica propia del océano que
interactúa con las tierras emergidas y cuya energía favorece el cambio continuo en
la morfología, generando con ello distintos tipos de costas.
En Venezuela, las costas tienen una extensión de 6.068 kilómetros lineales
distribuidos en 14 estados, 91 municipios y 270 parroquias (RBV – MINAMB,
2012).
Las costas representan ambientes mixtos donde agentes geomorfológicos
externos actúan y dan origen a una serie de procesos sedimentarios marinos y
continentales que coexisten en la franja de transición entre el mar y tierra firme. La
interacción gradual de estos procesos resulta en un conjunto de ecosistemas y
elementos geomorfológicos, los cuales constituyen además, el espacio de dominio
público. La clasificación descrita en esta sección incluye conceptos de elementos
geomorfológicos que complementan a aquellos establecidos en el Decreto con
Fuerza de Ley de Zonas Costeras del año 2001 (Figura 1), los cuales han sido
señalados en el esquema de clasificación de costas de Venezuela. La Figura 6
presenta a detalle todos los conceptos de los ecosistemas y elementos
geomorfológicos de acuerdo a lo señalado en el Decreto con Fuerza de Ley de
Zonas Costeras (2001), con base en el Glosario de Términos para la Gestión y
Planificación Ambiental y Territorial (MINAMB, 2012). En este sentido, identificar
de manera práctica los ecosistemas y elementos geomorfológicos que forman
parte del sistema costero permite facilitar la delimitación del área de dominio
público de las zonas costeras.
Figura 1. Concepto de los elementos geomorfológicos que complementan a aquellos establecidos en el
Decreto con Fuerza de Ley de Zonas Costeras (2001).Fuente: Elaboración Propia
La clasificación de la costa de Venezuela presentada en este documento busca
ofrecer una primera aproximación del análisis de la forma, procesos y dinámica
costera, de utilidad para la delimitación del dominio público. Además, busca cubrir
tres objetivos fundamentales:
1.
2.
Conocer los factores naturales que modelan las costas.
Identificar los tipos y la dinámica de las costas de Venezuela, con base en los factores naturales que intervienen en su evolución.
Conocer la génesis y la dinámica de las geoformas costeras.3.
Con los resultados obtenidos, se espera contar con un sistema de clasificación
completo, que brinde una mayor capacidad analítica y de integración de
resultados, tomando en cuenta los alcances y limitaciones derivados de la escala
de representación, pero acorde con el nivel de información disponible, que cubra
la creciente necesidad del conocimiento de las costas, útil para la delimitación de
las áreas de dominio público de las zonas costeras y, en general, para la
ordenación y gestión integrada de estos espacios.
La forma que presentan las costas es el resultado de la interacción de distinto tipo
de factores naturales. Todos esos factores pueden ser reunidos en tres grupos
principales (Carter y Woodroffe, 1994):
Factores geológicos y geomorfológicos: dentro de los cuales se
incluyen factores asociados a la naturaleza y estructura de los sedimentos,
los procesos geomorfológicos activos e inactivos que han influido en la
evolución del paisaje y las características tectónicas del área.
1.
Factores oceánicos: referente al oleaje, corrientes y las mareas como
agentes de transporte de sedimentos. Estos factores pueden actuar juntos
o por separado en la costa, y condicionan la energía e intensidad con la
que una costa será modificada en el tiempo.
2.
Factores climáticos: abarca factores que van desde la variación espacial
de los elementos del clima como son la temperatura y humedad, hasta la
modificación en el tiempo de factores que condicionarán la evolución de
una costa como son las variaciones de los factores oceánicos, así como la
presencia ó ausencia de un sistema fluvial desembocando en la misma.
Adicionalmente, existen otros factores responsables del cambio morfológico
en las costas. Primero el factor tiempo, vinculado con el concepto de evolución
3.
de un paisaje. Segundo, el factor humano, el cual actúa como promotor de
cambios de los procesos naturales dominantes y consecuentemente de la
configuración de la costa, especialmente en áreas altamente intervenidas.
Existen varias clasificaciones que consideran la costa con diversos criterios y
objetivos. Para la clasificación de la línea de costa de Venezuela se decidió
emplear una clasificación existente, con base en referencias bibliográficas, para
garantizar que el trabajo desarrollado pueda ser comparado con otros a nivel
internacional. De igual manera, se buscó una clasificación práctica a fin de facilitar
el desarrollo de actividades de gestión y que fuese manejable para todos los
actores con intereses en las zonas costeras, ya que el valor de una clasificación
está no solo en la precisión de la misma sino en la rapidez con que se pueda
caracterizar. Con base en lo anterior, se llevó a cabo una revisión bibliográfica de
cinco clasificaciones reconocidas a nivel internacional:
Jhonson, 1919: desarrolló una clasificación genérica de las costas a partir de
observar el efecto del ascenso y descenso del nivel del mar, resultando en una
costa sumergida y emergida. Esta clasificación se ajusta más a costas propias de
otras latitudes donde la tectónica y la isostasia juegan un papel importante, como
costas de fiordos o costas volcánicas.
Shepard 1948: desarrolló una clasificación más descriptiva, en la que definió
costas primarias: aquellas cuya configuración está influenciada por factores
geológicos, originadas por la acumulación subaérea de depósitos terrestres; y
costas secundarias: aquellas cuya configuración esta influenciada por factores u
organismos marinos, asociadas a la acumulación de sedimentos, erosión o
constituidas por organismos.
Valentin 1952: desarrolló un esquema de clasificación basado en tectónica,
determinando costas que han sufrido avance o retroceso según el perfil de la
plataforma marina adyacente. Esta clasificación demanda un conocimiento
extenso de las características geológicas de la costa a clasificar, lo cual limita su
operatividad.
Inman y Nordstramm 1971: presentan una clasificación evolutiva que caracteriza
las costas a partir del patrón tectónico que le dio origen y condicionó su
modificación en el tiempo. Esta es una clasificación de alcance regional y no
aporta mucho a la caracterización de detalle en sectores costeros con extensión
limitada.
Davies y Hayes 1984: basan su caracterización en el análisis del rango de
mareas y el componente energético promedio de las olas que actúan en la costa.
La amplitud de las mareas en Venezuela no permite utilizar esta clasificación,
además de constituir también una caracterización de alcance regional.
Para efectos del presente documento, una adaptación a la clasificación de
Shepard, 1948 es la empleada para realizar la clasificación de la costa de
Venezuela. Esta clasificación se presenta en tres grandes bloques y a tres
escalas diferentes.
Primeramente, según el grado de exposición relativa de la costa con
respecto al mar abierto. De este modo se identifica la costa más vulnerable o
expuesta a la acción directa de la energía física a través del oleaje lo que permite
determinar líneas de costa sujetas a inestabilidad, modificación continua por
erosión o acumulación y cambios estacionales.
Luego, se define la clasificación de la costa según su génesis,
abarcando el
ambiente dominante. Aquí, las costas se clasifican en: primarias, aquellas
formadas por la acumulación de sedimentos por aportes fluviales; y secundarias,
aquellas formadas por la dinámica costera asociada a procesos erosivos o de
ganancia de sedimentos, como costas abruptas con acantilados, plataformas de
abrasión o costas rocosas, el depósito de sedimentos por la acción del oleaje,
transporte sedimentario por corrientes paralelas o transversales a la costa, o
construidas por organismos, como por ejemplo los manglares o arrecifes de coral.
Finalmente, y a una escala menor, se define la clasificación de las costas
según el tipo de material presente en ellas (Figura 2). Fueron
considerados seis
tipos de material, de mayor (costas rocosas) a menor diámetro del sedimento (costas fangosas).
Este esquema de clasificación (Figura 3) permite comparar las tres escalas de
trabajo, ya que cada característica puede ser representada a diferentes escalas y
de esta manera complementar su descripción, con miras al desarrollo de
estrategias de manejo sustentable de los elementos constituyentes del sistema
costero.
Figura 2. Clasificación de las costas según el tamaño del material presente en las playas
Fuente: Elaboración Propia
Figura 3. Esquema para la clasificación de la costa en VenezuelaFuente: Elaboración propia, con base en Shepard (1948)
DOMINIO PÚBLICO
En Venezuela, el dominio público comprende todo el espacio acuático adyacente a
las zonas costeras y la franja terrestre comprendida desde la línea de más alta marea
hasta una distancia no menor de ochenta metros (80m), medidos perpendicularmente
desde la proyección vertical de esa línea, hacia tierra (Figura 5).
Variable
Figura 5. Límites de la Zona CosteraFuente: RBV - MINAMB, 2012
El espacio de dominio público posee una naturaleza muy dinámica, debido
principalmente al avance y retroceso de la línea de costa. Una de las dificultades en
el manejo de esta área consiste en la pérdida de propiedades por el retroceso de la
línea de costa o erosión y por la falta de límites legales para este espacio. En este
último punto, el principal problema lo constituye la base métrica establecida en la
Ley. Las zonas costeras varían en gran medida dependiendo de su geomorfología,
características sociales e intervenciones humanas, y por ello no es aplicable la
definición de una franja homogénea de dominio público a lo largo de toda la costa de
Venezuela.
Usos inapropiados, ocupaciones y ciertas acciones o actividades se encuentran
restringidas o prohibidas en la zona de dominio público según los Artículos 19 y 20
del Decreto con Fuerza de Ley de Zonas Costeras (2001). La zona de dominio
público debe ser preservada exclusivamente para el resguardo y protección
ambiental. Sin embargo, en los primeros 80 metros de playa (según lo establecido en
el Decreto con Fuerza de Ley de Zonas Costeras, 2001), se encuentra una intensa
ocupación del territorio en su mayoría de manera ilegal, tomando en cuenta los
procesos de construcción permitidos o no.
Considerando el avance y retroceso de la línea de costa, los límites de la franja de
dominio público (hacia tierra y hacia e mar) están expuestos a cambios y pueden
sufrir incrementos o reducciones. Es por ello que una de las mayores dificultades en
la gestión de estas áreas es la pérdida de propiedades a consecuencia del retroceso
de la línea de costa.
La construcción de complejos turísticos y residenciales en la costa ha alterado
negativamente los procesos naturales ordinarios que mantienen y dan estabilidad a
la zona costera. Muchas de estas edificaciones se construyeron asumiendo que el
litoral costero es un terreno estable y permanente, cuando cada segmento de playa o
costa es único, y responde de diversas maneras a las mareas, olas, corrientes y el
viento, entre otros factores que rigen su formación. Estas fuerzas hacen que el litoral
se encuentre en un proceso de cambio constante, extendiéndose o reduciéndose,
transformando así su topografía y posición. En su libro “La gestión integrada de
playas y dunas: experiencias en Latinoamérica y Europa”, Rodríguez - Perea et al.,
2012, señalan que los espacios litorales son espacios públicos y de bajo coste, que
constituyen referentes importantes en el proceso productivo a escala local, regional y
nacional. Resulta entonces paradójico que siendo las playas tan provechosas y
complejas, tan valoradas y solicitadas, su gestión está basada en un concepto
estrictamente económico, mecánico y estático del espacio, que ignora el dinamismo y
la fragilidad, entendiéndolas únicamente como espacios con una gran potencia de
recaudación económica a los que se presta atención especialmente en temporada
alta.
Con el propósito de contrarrestar impactos negativos en la costa, normalmente
asociados a la pérdida de arena en la playa, se han desarrollado numerosas obras
de protección costera como rompeolas, espigones y escolleras para proteger de
forma temporal la infraestructura afectada por la erosión resultante. Sin embargo,
estas obras requieren de mantenimiento constante, el cual resulta costoso, y en la
mayoría de los casos terminan siendo atendidas mediante la inversión de fondos
públicos. Además, estas medidas han empeorado los problemas de erosión en
segmentos de playa al alterar aún más los patrones naturales de corrientes y oleaje,
de acumulación y erosión de arena en los lugares donde han sido establecidas. Las
consecuencias negativas de este patrón de desarrollo se potencian al considerar
amenazas meteorológicas o geológicas de mayor envergadura.
En este contexto, es primordial garantizar (1) la protección del dominio público como
un espacio natural con altos valores ambientales y socioculturales e indispensables
para enfrentar la vulnerabilidad frente al incremento del nivel del mar, eventos
naturales extremos y la acción del oleaje; y (2) la recuperación de espacios públicos,
especialmente aquellos con fines recreativos y los asociados a las instalaciones y
equipamientos públicos destinados al servicio directo de los usuarios de la costa,
garantizando el libre acceso, tránsito y uso público de la costa.
CONCEPTOS GEOMORFOLÓGICOS
Los ecosistemas y elementos geomorfológicos que constituyen el espacio de dominio
público no se encuentran definidos en la legislación vigente. Por ello, y con la
finalidad de garantizar la protección del espacio de dominio público, se presentan en
la Figura 6 los conceptos correspondientes de acuerdo a lo señalado en el Decreto
con Fuerza de Ley de Zonas Costeras, con base en lo establecidos en el Glosario de
Términos para la Gestión y Planificación Ambiental y Territorial (MINAMB, 2012).
Conceptos adicionales se presentan en la Figura 1.
Figura 6. Ecosistemas y elementos geomorfológicos que integran el espacio de dominio público
Fuente: Elaboración Propia
OTROS CONCEPTOS
Existen además una serie de elementos artificiales que constituyen alternativas de
protección ante la pérdida de arena, consecuencia del transporte sedimentario en la
costa, los muelles, espigones, escolleras y rompeolas (Figura 7).
Figura 7. Otros elementos que integran el espacio de dominio públicoFuente: Dirección Técnica de las Zonas Costeras
Resulta imprescindible identificar estas obras de protección costera, ya que por
formar parte del sistema costero y de su equilibrio morofodinámico, constituyen
elementos a incorporar dentro del espacio de dominio público.