CEIP SANTA ANA
“Día del libro”
23 de abril de 2020
Estimadas familias:
Como bien sabéis cada 23 de abril en el CEIP Santa Ana celebramos
el Día del Libro con distintas actividades y este año hemos querido haceros
llegar nuestro “Libro de las emociones compartidas”.
En este encierro provocado por el estado de alarma y la interrupción
de las clases presenciales, nuestros niños se han convertido en pequeños
héroes que acatan la situación de la mejor manera posible, pasando por
diferentes estados que van desde la incomprensión, la frustración, el enfado,
el miedo, la alegría, la esperanza…
En este documento hemos recopilado una muestra representativa de
lo que nuestros alumnos están viviendo en estos momentos, de las distintas
emociones que sienten día a día y de la necesidad de expresarlo y entender
que todos los sentimientos son válidos y forman parte de cada persona.
Los adultos tenemos un papel muy importante en todo esto. La
prioridad ahora, más allá de contenidos curriculares, cuadernos, tareas…,
debe ser conseguir que los más pequeños no sufran, que cuando recuerden
esta situación hagan énfasis en lo que disfrutaron de sus familias gracias al
confinamiento, que aprendieron a jugar de nuevo y se reinventaron con
canciones, retos, y bailes.
Ánimo a todos. Emocionémonos con cada logro, con cada gesto, con
cada descubrimiento. Ojalá ese reencuentro que todos ansiamos se produzca
pronto.
SIN SALIR DE CASA POR UN VIRUS.
26 de abril de 2020.
Todo empezó cuando en el colegio nos contaron que había un virus
llamado Coronavirus, lo que nunca pensé que por este virus no
podríamos salir de casa durante tanto tiempo.
Al principio nos dijeron que iban a ser quince días sin ir al colegio, pero
luego fueron otros quince días más y así todo el tiempo.
Uno de estos días mi padre me dijo que el presidente del gobierno
permitiría salir a partir del próximo domingo y me puse muy muy contento.
Me he dado cuenta que echo de menos
a todos mis amigos, a mis abuelos, a mis
tíos y tambien que estar en casa
siempre es muy aburrido.
A pesar de todo he estado feliz con mi
hermano y mis padres aunque a veces
un poco solo sin mis amigos.
Un día por la noche me puse triste y
me puse a llorar porque pensaba que esto nunca iba a terminar y no podría
ver a toda la gente que quiero, pero papa y mama me explicarón que
pronto todo terminará y será igual que antes.
Daniel Montero Esteban. 3ºB.
MI VIDA EN LA CUARENTENA
Estos días he sentido muchas emociones diferentes, como tristeza de no poder salir a
la calle, no poder ver a mis amigos y a mi familia. Estar delante del ordenador ha sido
raro, me costó acostumbrarme pero ahora lo sé hacer todo y manejarlo bien, me
encanta hacer mis deberes así, aunque también echo de menos el cole, estar en clase
con mis amigos, los profesores, el recreo..... A veces me aburro mucho, aunque busco
cosas que hacer, hago manualidades cuando tengo tiempo y me lo paso genial,
también juego mucho y me encanta.
He empezado estos días a leerme un libro. El libro que me estoy leyendo va de las
antiguas olimpiadas de Grecia y me está gustando mucho.
También tengo alegría, porque puedo estar más tiempo con mis padres, comentarles
las cosas y jugar con ellos que antes tenía menos tiempo de compartir cosas con ellos.
He aprendido muchas cosas nuevas con el ordenador. También hablo con mis amigos
por vídeo llamada y lo paso genial, antes no lo hacía, mientras hablamos hacemos
manualidades nos comentamos como vamos con la manualidad y todo eso. Y así
compartimos todo lo que hacemos. Hay días que estamos casi dos horas.......
Así que la verdad es que durante la cuarentena hay un montón de emociones distintas,
unas buenas y otras no tanto. Sobre todo para mí lo más importante es no poder
abrazar y dar besos a la familia, abuelos, primos, tíos, los hecho mucho de menos. Y
claro salir a la calle, al parque, ir a mis actividades, como el atletismo.....
Espero que todo esto pase pronto y volvamos todos a encontrarnos y poder jugar y
vivir tranquilos
.
EL LIBRO DE LAS EMOCIONES
Cuando oía a mis padres hablar del COVID-19, si podríamos
ir de vacaciones en Semana Santa, si íbamos a estar
confinados…me parecía que todo eso no nos iba a tocar vivirlo.
Veía en la televisión las noticias que hablaban de China, y seguía
pensando; ”con lo lejos que esta China”.
Pero llegó Marzo y el miedo empezó no solo en las
televisiones, también nos llegó al colegio y hoy ya han pasado más
de 40 días, días duros, muy largos, días en casa…Los primeros
días me parecían unas vacaciones especiales, estaba en casa todo
el día con mis padres, hacía la tarea del cole y además podía
disfrutar de mi casa, pasar más tiempo con mis padres, ver
películas con ellos, hacer bizcochos y torrijas. Pero cuando los días
iban pasando esas “vacaciones” ya eran demasiado largas. Veo a
mis abuelos por videollamada y me gustaría abrazarlos, hablo con
mis amigos por la play o por el móvil y recuerdo los días del cole,
los recreos, mis extraescolares, los viernes cuando quedamos por
las tardes… y me entra mucha pena, quiero verlos, quiero estar con
ellos, vivir los momentos que a un niño de 11años le toca vivir,
porque cuando estamos con nuestras rutinas nos parecen muy
pesadas, pero ahora se valoran tanto esos momentos.
El estar en casa no esta tan mal, pienso que si todos nos lo
tomásemos en serio, todo esto terminaría antes y podríamos volver
a nuestro cole, a los trabajos, a ver a nuestras familias, en fin,
volver a nuestra vida que ahora echamos tanto de menos.
Sé que todo esto pasará y se nos quedará en un recuerdo que
con el tiempo seguro que no nos parece tan malo, y además nos
hará valorar mucho más todas las cosas del día a día y a ser más
responsables.
Tengo mil preguntas pero las respuestas estoy convencido
que no las sabe nadie aún.
¿Cuándo volveremos a la normalidad?
¿Va a ser todo igual que antes?
¿Podremos graduarnos todos juntos?
¿Cuándo podremos volver a quedar?
Este último año de colegio para mí era muy especial. Por una
parte tengo muchas ganas de terminar y empezar una nueva etapa,
hacerme más mayor, pero por otro lado me da mucha pena
despedirme del colegio, de mis profesores y de algunos
compañeros que irán a otros institutos. Por eso me da mucha rabia
que es año, precisamente este año, no podamos compartir más
momentos, disfrutar de nuestros 11 años todos juntos, compartir y
aprender con nuestros profesores para que el próximo año
podamos ir más preparados a nuestro instituto y sobre todo
graduarnos. Poder hacer la fiesta de graduación y despedirnos del
colegio y de nuestros profesores.
Pero sé que esto va a pasar pronto y que de alguna forma
podremos despedirnos, podremos prepararnos y, sobre todo,
recordar que mi último año de colegio fue aquel año raro en el que
todos estábamos en casa.
Adrián Avilés Fernández
6º Primaria
EL LIBRO DE LAS EMOCIONES COMPARTIDAS
Durante esta cuarentena hemos expresado más frecuentemente
emociones que no solíamos expresar los días normales. Por ejemplo yo he
sentido lo que es estar encerrado sin poder salir de una zona y he podido
llegar a sentir lo que los animales de los zoos, los que tenemos de mascota
metidos en jaulas, los animales acuáticos que están en una pecera para que
los veamos, y muchos animales más que están encerrados en una zona
limitada, y no están ahí un mes o dos, algunos toda la vida sin poder salir
de esa zona; y eso es una de las cosas de las que solo me he dado cuenta
estando en su lugar, es decir, encerrados sin poder salir y privándonos de la
libertad.
Pero esta cuarentena también me ha hecho conocer más a mis
vecinos, a la gente que me rodea, y he aprendido cosas de ellos que no
sabía, y seguro que ellos han aprendido cosas de mí que tampoco sabían.
Esta cuarentena me ha hecho conocerles un poquito más; con ellos he
expresado emociones como la felicidad, porque con ellos, en uno de estos
días tan aburridos he jugado al bingo, todos los días nos volvíamos a ver a
las ocho a aplaudir a los médicos que están ayudando a acabar con el
Covid-19; mis padres después de comer salían a la terraza a tomarse un
café con los vecinos. También he pasado más tiempo con mi familia, hemos
jugado a muchos juegos de mesa y todos los días mi padre y yo saliamos a
jugar al jardín de mi casa con las raquetas. No solo yo he empezado a hacer
cosas que hace mucho que no hacia, sino que mi padre ha vuelto a construir
lo que antes era su pequeño hobby: hacer casas con corcho para el belén.
Esta vez ha empezado haciendo el arco del triunfo de los romanos y le he
ayudado a pintarlo. Y tampoco han faltado las video llamadas rutinarias a
los amigos y demás familiares y que también me lo he pasado muy bien.
Estas son cosas que he estado sintiendo y disfrutando durante la
cuarentena.
Carla San Segundo Medrano
6º de primaria