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DOMINGO DEL BAUTISMO DEL SEÑOR Ciclo A 1. LECTURA DEL TEXTO: Mt 3,13-17 (Se pide la luz del Espíritu Santo. Cada uno lee en su Sagrada Escritura) Espíritu Santo, eres el Alma de mi alma. Te adoro humildemente. Ilumíname, fortifícame, guíame, consuélame. Y en cuanto corresponde al plan del eterno Padre Dios revélame tus deseos. Dame a conocer lo que el Amor eterno desea en mí. Dame a conocer lo que debo realizar. Dame a conocer lo que debo sufrir. Dame a conocer lo que, silencioso, con modestia y en oración, debo aceptar, cargar y soportar. Sí, Espíritu Santo, dame a conocer tu voluntad y la voluntad del Padre. Pues toda mi vida no quiere ser otra cosa que un continuado perpetuo Sí a los deseos y al querer del eterno Padre Dios. Amén. (P. José Kentenich) (Cada uno lee en su Sagrada Escritura) En aquel tiempo, Jesús llegó de Galilea al río Jordán y le pidió a Juan que lo bautizara. Pero Juan se resistía, diciendo: “Yo soy quien debe ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a que yo te bautice?” Jesús le respondió: “Haz ahora lo que te digo, porque es necesario que así cumplamos todo lo que Dios quiere”. Entonces Juan accedió a bautizarlo. Al salir Jesús del agua, una vez bautizado, se le abrieron los cielos y vio al Espíritu de Dios, que descendía sobre él en

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DOMINGO DEL BAUTISMO DEL SEOR

DOMINGO DEL BAUTISMO DEL SEOR

Ciclo A

1. LECTURA DEL TEXTO: Mt 3,13-17

(Se pide la luz del Espritu Santo. Cada uno lee en su Sagrada Escritura)Espritu Santo,

eres el Alma de mi alma.

Te adoro humildemente.

Ilumname, fortifcame,

guame, consulame.

Y en cuanto corresponde al plan del eterno Padre Dios

revlame tus deseos.

Dame a conocer

lo que el Amor eterno desea en m.

Dame a conocer lo que debo realizar.

Dame a conocer lo que debo sufrir.

Dame a conocer lo que, silencioso,con modestia y en oracin,

debo aceptar, cargar y soportar.

S, Espritu Santo, dame a conocer tu voluntad

y la voluntad del Padre.

Pues toda mi vida

no quiere ser otra cosa

que un continuado perpetuo S

a los deseos y al querer

del eterno Padre Dios. Amn.(P. Jos Kentenich)

(Cada uno lee en su Sagrada Escritura)En aquel tiempo, Jess lleg de Galilea al ro Jordn y le pidi a Juan que lo bautizara. Pero Juan se resista, diciendo: Yo soy quien debe ser bautizado por ti, y t vienes a que yo te bautice? Jess le respondi: Haz ahora lo que te digo, porque es necesario que as cumplamos todo lo que Dios quiere. Entonces Juan accedi a bautizarlo. Al salir Jess del agua, una vez bautizado, se le abrieron los cielos y vio al Espritu de Dios, que descenda sobre l en forma de paloma y se oy una voz que deca desde el cielo: ste es mi hijo muy amado, en quien tengo mis complacencias.

Palabra del Seor.

Repasar el texto ledo(Se pregunta a los participantes y responden leyendo los versculos en su Biblia)Adnde lleg Jess, de dnde vena y para qu? v.13

Por qu Juan el Bautista no quera bautizarlo? v.14

Qu le dijo Jess para hacer que lo bautizara? v.15

Qu signos se presentaron cuando Jess sali del agua? v.16

Qu dijo la voz que se escuch desde el cielo? v.17

Explicacin del textoSan Mateo al igual que los otros evangelistas nos presenta el pasaje del bautismo de Jess, pero a diferencia de los otros evangelios en el v. 14 quiere explicar por qu Jess se somete a un rito de arrepentimiento y confesin de los pecados si l no era pecador.

Conviene cumplir as toda justicia v.15; con su bautismo, Jess satisface la justicia salvfica de Dios que preside el plan de la salvacin, l mismo era justo obrando as. Tena que identificarse con los pecadores (cf. 2 Cor 5,21), as preparaba el bautismo futuro de los cristianos ponindose como modelo.

Vio al Espritu de Dios que bajaba como una paloma v.16 El Espritu que aleteaba sobre las aguas de la primera creacin (Gn 1,2) aparece aqu anunciando una nueva creacin. Por un lado unge a Jess para su misin mesinica (Hech10,38 ); santifica el agua y prepara el bautismo cristiano (Hech 1,5). La paloma en el Antiguo Testamento representa un smbolo del amor.

Se oy una voz que sala de los cielos v.17; Esta visin interpretativa designa ante todo a Jess como el verdadero Siervo de Dios anunciado por Isaas. El trmino Hijo sustituye al de Siervo, subraya el carcter mesinico y propiamente filial de su relacin con el Padre. No es el Mesas regio, conquistador, sino el Siervo que proclama y sufre.

2. MEDITACIN DEL TEXTO(Cada participante puede compartir su reflexin personal)En el evangelio de san Mateo el bautismo de Jess es el momento cumbre de su manifestacin como Hijo de Dios. El pasaje se compone de dos partes: el dilogo entre Juan y Jess (3, 14-15), y la manifestacin de Jess como Hijo de Dios (3,16-17).

Jess lleg de Galilea al ro Jordn y le pidi a Juan que lo bautizara. All acuden todos aquellos que han escuchado la llamada del Bautista y se han arrepentido de sus pecados, quienes estn dispuestos a convertirse y caminar por los caminos de Dios. Reciben el bao de la purificacin confesando sus propios pecados. El ro Jordn es el umbral de la tierra prometida, todos dejan all sus pecados, es como un ro de impureza que separa de la tierra prometida. Este relato revela el misterio ms profundo de Dios: la Trinidad, Padre, Hijo y Espritu Santo.

Juan el Bautista se resista a bautizar a Jess, Yo soy quien debe ser bautizado por ti. Juan reconoce la superioridad de Jess, no quiere bautizarlo, desea ms bien, ser bautizado con el agua y el fuego del Espritu que trae Jess. Nosotros no necesitamos ser bautizados por Jess, sino en Jess que se bautiza con nosotros, Jess el hombre justo, se sumerge en el agua y muere con nosotros. Ya no estamos solos, desde nuestro bautismo estamos con l, que nos am y se entreg por nosotros (Ga 2,20).

Jess aclara a Juan que su bautismo es necesario para que se cumpla el designio salvador de Dios. Para que se cumpla toda justicia, Expresa su adhesin al proyecto del Padre, que lo conducir hasta la entrega constante de la propia vida, as lo desea Dios aunque para los hombres sea incomprensible. Por justicia entendemos lo que significaba para la gente juda piadosa del tiempo de san Mateo, el cumplimiento de la voluntad de Dios. Esta obediencia de Jess a la voluntad del Padre pone de manifiesto su condicin de Hijo, pues en aquella cultura la obediencia era lo que defina entre un hijo y su padre. El unignito, que conoce la voluntad del Padre, viene al Jordn para comunicarla a todos y llegar a ser el primognito de numerosos hermanos.

Entonces Juan accedi a bautizarlo. Nos recuerda lo que dijo san Agustn: Quien te cre sin ti, no puede salvarte sin ti. Se requiere el permiso y colaboracin del hombre. Porque l es la libertad, no puede dejar de respetar la libertad de cada hombre que lo hace semejante a l.

Al salir Jess del agua, una vez bautizado, se le abrieron los cielos descendi sobre l Espritu de Dios en forma de paloma. La paloma sobre el Jordn recuerda al Espritu de Dios que aleteaba sobre las aguas y sac al cosmos del caos (Gn 1,2): el bautismo del Hijo en nuestro abismo es un nuevo acto creador. Recuerda tambin el final de diluvio (Gn 8,11s): el bautismo de Jess es una creacin nueva que trae la paz definitiva, una vida ms all y encima de todo mal, que ya no ser destruida. La paloma es tambin la esposa del Cantar de los Cantares, el pueblo que responde al amor de su Seor (Ct 2,14.16).

La identidad de Jess queda de manifiesto en el bautismo. El Espritu que actu en su nacimiento y le acompaa durante toda su vida hace de l una nueva creacin. La voz celeste declara que es el Hijo de Dios, pero l encarnar la figura del hijo obediente, no la de un Mesas triunfalista. En este relato Mateo subraya tres aspectos: el bautismo en el Jordn recuerda el paso del mar Rojo, mostrando as que Jess, como verdadero Hijo de Abrahn, recorre un nuevo xodo. El dilogo con el Bautista, que reconoce humildemente su condicin de precursor, recuerda que Jess es el Mesas, hijo de David. Finalmente la voz del cielo confirma que es el Hijo de Dios.

Jess en el bautismo se revela como Hijo de Dios, y en nuestro bautismo nos ha hecho hermanos suyos, revela que Dios es su Padre y quiere ser nuestro Padre. La Iglesia es la comunidad de los hijos que, al ser bautizada en Jess, tiene su mismo Espritu de amor hacia el Padre y los hermanos.

Vivamos como bautizados, Hijos de Dios y hermanos en Jesucristo, muertos al pecado y vivos por la gracia de Dios, seamos creaturas nuevas que cumplen la voluntad de Dios todos los das de nuestra vida guiados por la luz del Espritu Santo.

3. COMPROMISO PERSONAL Y COMUNITARIO(Cada participante puede proponer compromisos personales y comunitarios)

Reconocer la grandeza de ser hijos de Dios por el sacramento del bautismo.

Agradecer a Dios el don de nuestros padres y padrinos que nos llevaron a recibir el sacramento del bautismo.

En un momento de oracin agradecer a Jess su humildad al recibir el bautismo, y pedir un espritu de humilde servicio para todos los hermanos.

Vivir como hombres nuevos, hijos de Dios purificados por el bautismo y renovados por el sacramento de la reconciliacin que nos sumerge en la muerte y resurreccin de Jesucristo.

Dar testimonio con nuestras buenas obras de la grandeza de ser bautizados, siendo libres y no esclavos del pecado.

Orar por el sacerdote que nos comunic la gracia del sacramento del bautismo.

Celebrar el da de nuestro bautismo participando el la santa misa.

4. ORACIN(Se puede hacer una oracin donde participe quien guste en voz alta y den gracias a Dios por la Palabra escuchada o recitar alguna oracin ya formulada)Por que el bautismo hoy empieza

y l lo quiere inaugurar,

hoy se ha venido a lavar

el Autor de la limpieza.

Aunque es santo y redentor,

nos da ejemplo singular:

se quiere hoy purificar

como cualquier pecador.

Aunque l mismo es la Hermosura

y no hay hermosura par,

hoy quiere al agua bajar

y hermosear nuestra basura.

Nadie lo hubiera pensado:

vino el pecado a quitar,

y se hace ahora pasar

por pecador y pecado.

Gracias, Bondad y Belleza,

pues te quisiste humillar

y no te pes lavar

tu santidad y pureza. Amn.