Discurso del Acto de Graduacion de 1964.

PATRIA L. CARIDE DE POUSA

Excelentisimo Senor Presidente de la RepUblica

Senores Ministros de Estado

Honorables Miembros del Cuerpo Diplomatic°

Senor Rector de la Universidad

Senor Decano General

Senores Deconos de Facultod

Senores Profesores

Companeros Graduandos

Senoras y Senores:

Nos congregomos ante la hermoso reolidad de ma meta alcanzada;

to esperanza que oyer fuero suerio ha concretodo, fecunda, en un titufo

universitorio y en una conciencia social que nos permitiro la recto corn-

prension de inquietudes y problemos nocionales.

Resulta, pues, muy justo y placentero, volver la miroda hocia la

tore° de aquellos profesores, cuya capacidad orientadora robusteciera la

Ilamo de superacion, y dor las gracias, tambien, a la familia universitaria

que en una u otra forma nos acogrera generosamente.

Ningiln acto puede ser mr5s propiclo porque la Universidad sigue y

scguira siendo el vigilante octivo de nuestro pensamiento nacionalista,

per° expresor algunas reflexiones en tomb o la misian que nuestro Cosa

de Estudios debe llenar dentro del medio social.

El Drama de la Edueacien:

El fenameno educotivo esto condicionado pot diversas circunstancias

histaricas, sociales, economicos y politicos. La educaciOn actual vive el.

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n-ismo drama que la civilizecion, es decir, el hombre incopacitado pare dor respuesta a los continuos retos que planteon los cambios de la epee°.

La Universidod no puede ni debe sustraerse del medio ambiente que le circunda. La Universidad debe ser, basicamente, fuente generodora

de hombres responsables de sus actos como individuos y come miembros de la colectividod. Tot come expresara Octavio Mendez Pereira, "Maestro de la Juventud Ponamena": "No puede hoy ninguna Universidad volverle Jo espaldo presuntuoso y aristocratic° a la angustio del mundo que lo rodeo, cuando son ellas las mos ilamadas o orrojor luz sabre to noche de las conciencias, a echarse a los colles pare oir a los que sufren, a estudiar sus moles y tratar de resolverlos. . ."

La Universidad solo puede cumplir la funcion creadora, que le es propia, si encauza sus afones hocio la realidad tangible de nuestro cul-ture y proyecta, sabre ella, su fuerza renovadoro de ideoles pore que la vide nacional deje de set vivero de oligarquicts incleseables que solo pretenden debilitor nuestra unidad social.

Cosi tres decenios hon tronscurrido desde que anhelos entusiastos fructificaron en la fundacion de la Universidad de Panama pare escrutor, desde aqui, el porvenir incierto de lo joven repUblica. Nuestra generacion es depositaria de ese legado que se folio entre egoismos absorbentes que tendion a desvirtuor su autentice mision. Y lo que aquellos construyeron con penurias y sacrificios debernos ofianzarlo con voces de entusiasmo, desterrando, a lo vez, con sever° revision y critic°, esa inversion de va-lores que aniquilo lo vitolidad e integracion de la comunidad universitoria en funcien de culture.

El Sentido Moral de la Responsabifidad:

Es importante serial°, que el "sentido moral" broto y se aliento bajo

el imperativo de un patron cultural. En lo Universidad elle se traduce en uno doble vertiente de formacien profesional y formacien de corocter. La voluntod individual es lo fuerza rectoro de la superacion. Pero si este °tribute fundamental de todo estudionte responsable no se comple-menta con una orientacion odecuado que, desafortunadomente, se des-virtu° en la rutina gris de conferencias incoloros, hobro tempo propjet° pane anulor la solidaridad y comprension que debe existir entre atumnos y profesores•

Concept* Moderno de Universidad:

lnyestigacion, profesion y educacion se cuinon en elocuente simbiosis :paro darnos una sintesis del concept° moderno de Universidod.

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En las naciones pequerios —coma lo nuestra— estos tres polabros

deben odquirir una beligerancia que trosciende toda interpretociAti idealist° y teorizante; porque solo, de esta manero, podremos responder, cabolmente,

o una sociedod que f Inca su futuro en to Universidad, es decir, en una culture integral que sea capaz tante de ormonizar los diferentes Areas del

conocimiento coma de ofianzar la conciencio colectivo. Esto misma for-

rnocidn exigire del individuo to utilizacian odecuada de su propio idioma, el desenvolvimiento groduol de uno sensibilidad que vibre ante los polpi-tociones de la expresien estetica; en fin, que el hombre comprenda que et mundo de hay —de una complejidad evidente-- este regido tambien por la Ciencio, que en cierto sentido, influye sobre tales los monifestaciones del humeri° vivir.

Una Universidod es un centre de tralxijo, de estudio y de investi-gocien, en el entendimiento de que trobajo, estudio e investigacion deben afincerse en la reolidad concrete de las necesidodes del pals. Akin los mas sencillos inquietudes universitarios, que propugnon par reformas fun-darnentales en todos los 6rdenes de la yid° academic°, deben surgir coma consecuencia del estudio serio, comparativo si se quiere, de to que ban

hecho y siguen hacienda centros de mos largo tradition ocodhmice, que nuestra Casa de Estudios.

Esta tarea, troscendentol par clerto, debe ester en manes de los etc-mentos .universitarios —profesores y estudiontes— de mayor copocidod, quienes empujados par reconfortontes deseas de superacion, emprendan una reformo integral de planes y de programes de estudios, de practices y procedimientos administrativos y docentes. Una reformo que respond° al sentir colectivo, que, en consecuencia, ho de encontrar couce libre troves de formes conscientes de occion en el seno de lo cornunidoci uni-versitaria.

La Politico Universiteria:

La Universidod —centro de inquietudes-- no puede ser Insensible a: los polpitaciones de lo vido politico. Pero, si bien es cierto que la politico —rectamente entendida— es elemento vital deny° de la Universidad,

menos cierto que elle no debe ir en detrirnento de los estudios aca-demicos. Debe existir uno confluenclo de ambos elementos, de monerck

tal, que no se deforme el sentido de lo uno y de to otro.

Hoy que reforzar el sentido outentico de la politico en la universidad. Nuestro Case de Estudios confronta uno situacien paradejica: en vez de ser elle lo que troscienda y sirvo de ejemplo politico a la ciudadonia, re-sult° que es la politica criollo, corrompida y deformado to que tiende penetrar en aquatic. Se precise, pues, uno tomo de conciencio que ponga.

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fin a estos pr6cticas que lesionan sensiblernente, el prestigio de la Univer-

sided. Politico si; pero politico de oltura debe ser la nueva consign° de

la comunlded universitoria.

La Universidad y lot Pro')temps Nasionales:

Para nosotros, que tenemos que ver el mundo desde uno perspectives

diferente y conforme o nuestro generacion, el desenloce de lot acenteci-

mientos de enero no constituye otro cosa que la agudizacien de un con-

flicto ton viejo come la Rep6blica. El hecho de que una naciOn extranjero

ocupe —no solo en virtud de tratados indecorosos, sine por la fuerzo,

un importante sector de nuestro territorio ho constituido y seguira cons-

tituyendo motive de discordia y tension permenentes. Los Estados Unidos

de Norteamerica, fundamentondose en anacronicas teorias juridicas pre-

tenden montener sobre los pueblos de Amhrica un tutelaje ignominioso que obstaculiza el desorrolto de las potenciolidodes econOrnicas, politicos y

sociales de istos.

AgueIlas folocias con que olgunos panamerlos pretenden justificar lo

incidencio de los norteomericonos en la economic nocionol, solo pueden

ser producto de un sentimiento de inferioridod patriOtica. Hocerse eco de semejantes ofirmociones es tanto come consideramos incopeces y ester

dispuestos a seguir Hewn& sobre nuestros espoldas el peso de las humi-

liaciones y la deshonro.

El lenguoje de nuestros martires es claro. En torno e etc voz firrne

e indignodo, en torno a esa voz ot5n sangronte y viril, el pals debe y tiene

que trozar sus futures metes. Caer en la conciliacion entreguista, ocudir

a procedimientos deshanrosos, dor la espalda o tont° songre derramado

con el objeto de obtener migajos, volver ci hablor de "operociones de

°misted" y de "olianzas pore el progreso" a estas alturas, es tonto como

c‘locar la traicion en un pedestal glorioso y arrojor nuestre bandero a las fouces de la indignidad.

La historic hizo un reto a nuestro pueblo. . La actitud patriOtico del

Excelentisirno sesior Presidente de to RepUblico, don Roberto Francisco Chian,

no necesito mayores comentarios. La denuncia de agresien, el rompimiento

de relociones y el montener la rupture haste que los Esteelos Unidos se

comprometen a negocier Un nuevo trotado es la respuesta categoric° a

ese reto. En esta posicien debemos mantenernos sin desmayos: un nuevo

tratado que elimine la clausula "o perpetuidod"; que gorontice la neutro-

lided y to neutrolizocien del Canal; que restituyo la soberania efective de

Panama sabre la Zone del Canal en el orden administrative y juridico; en

fin, que not permita disfruter de una Petrie verdoderomente libre y so-

berano, y dueria de su propio destine.

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Sabernos de ontemano que este positi6n, de mantenerla nuestro pais, tiner6 un mundo de represalias. Gran Bretoflo , Franck], Espafta y otros

poises, han sentido el retiro de la "oyuda" norteamericano, en los OW-rnos meses, en virtud de algunas discrepancies sabre politico exterior.

Quir no se espera, pues, quo hogan con un pots pequerto, desormodo,

dependiente y de escaso desarrollo industrial? Nosotros no nos Ilamomos engarlos. Nosotros esperamos que lo hagon todo. Pero, los pueblos de

Africa son el gran ejemplo. AlIt eston los pueblos de Asia y del Cercano Oriente donclo la gran batalla par su liberation. Tomblin a ellos se les trate de sitior par hombre. Sin embargo, no cloudican. Se mantienen firmes, erguidos, en pie de lucha. Esos pueblos no ignoron que el futuro les pertenece par completo. Y nosotros sabernos que el futuro es de ellos.

Panama pertenece a la misma categoric' de los poises que luchan pot su independencia y liberation national y de igual manero que los pueblos de Africa, Asia y el Cercano Oriente, tiene que erguirse con dignidad y dor la gran batalla par su futuro. Panama debe, al mismo tiempo que se plantea a recuperation de la soberania en la Zona del Canal, volver la mirada hack: nuestros recursos an virgenes; industrializar el pais, duo-

/roller al maxim° lo agriculture, buster nuevos mercados y comercior sin discriminociones de ninguna indole. En la misma medida en que logramos

desarrollar nuestras fuentes de riqueza y esfablezcarnos lazos cornerciales con todos los pueblos que esten dispuestos a hacerlo, estaremos entrondo en una etopa de independencia que nos pondra a la alturo de los tiempos que corren. Nunca podra haber education bien entendido si no se fo-mentan los fuentes de producciOn y se crea el habit° del trabajo. Si nuestro pas no liege a poseer una economic solid° —fomented° con cri-terio national-- la Universidad va a ester imposibilitada pore cumplir su comet ido.

Lo Universidad de Panama no puede vivir al margen de estos ocon-

tecimientos. El popel que le corresponde jugor, en esto etopo decisive pore el pals, es de fundamental Importoncio. Tiene quo poner todos sus recursos al servIcio de la cause notional. Tient que erguirse en funcion de nocionolidacl agredido. Toreo nada foci], sl tomarnos en consideration, que esos recursos, de que hoblomos, se mantienen potencialmente virgenes

y virtualmente anquilosados.

Los estudiontes del pals hon side los profetas de esto bora. Desde 1943, cuondo se fund6 la gloriosa Federation de Estudiontes de Panarn6, el rnovimiento estudiantil panomerio ha librado batollos heroicas y planteodo rnedidas practices pore clever le capacidad de la enserianza en sus distintos niveles. Est° lucho de los estudiantes siempre estuvo encaminado a en-contrar medidas pore contrarrestar los efectos de la penetracion imperia-list° en nuestros sisternas de ensenanzo.

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Esta lucha, destinado a of ianzar los volores de nuestra nacionalidad,

ha cobrodo verdodero vigor en el transcurso de los tiltirras °nos. El pro-

promo de Reforma Universitoria es la stntesis, al nivel de lo ensefianza superior, de los mos taros anhelos de nuestro patrio.

La Reforma Universitaria se reduce —en terminas generales--- a to

democratization de la erisefianza y al ojuste de los prograrnas de educe-cion a los necesidades del pals. zQue queremos decir cuanclo hablamos de dernocratizar la ensetianza? Simplemente, hated° accesible a todos los

estudiantes con deseos de superacidn profesional; eliminor borreras eca-nomicas; creor sistemas de betas; ensonchar a ciudocl universitaria; crear residencies estudiontiles; desarrollar un amplio programa de extension uni-

versitaria. QuO queremos expresar cuando hablarnos de cluster los pro-gromas de education a las necesidades del pals? Queremos ofirmar que

frente a los aprerniantes demandas del desenvolvirniento economic°, la Universidod debe propiciar estudios de orden tecnito con el objeto de pre-parer un elemento topaz de hater frente al desenvolvimiento industrial y economic° de nuestro pueblo.

El desarrollo de los acontecimientos actuates ha hecho evidente la necesided de la Reform° Universitaria. El pope' que lo Universidad debe

desempeflor en esta bore critic° pore el pais, es de sumo importancia. Debe ceser, de una vez y pore siempre, la incomprension hacia los plan-teamientos reivindicativos de una juventud, le sufilcentemente madura, pore der lucas, y chanter, en la proctico, las ingentes tareas relacionadas con nuestro desarrollo cultural y la defense de lo potrio.

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