DEPORTIVO PEREIRA Y SU HISTORIA

MICHELLE ZAPATA AGUDELO“ADMINISTRACIÓN COMERCIAL”

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CIUDAD DE PEREIRA

Pereira es una ciudad y municipio de la República de Colombia, capital del departamento de Risaralda. Es la ciudad más poblada de la región del Eje cafetero, cuenta con más de 500.000 habitantes y conforma el Área Metropolitana de Centro Occidente, junto con los municipios de Dosquebradas y La Virginia. Está ubicada en la región centro-occidente del país, en el valle del río Otún en la Cordillera Central de los Andes colombianos

HISTORIA DEL DEPORTIVO

Los primeros toques en la historia del Deportivo Pereira fueron protagonizados por el conductor de taxi Alfonso Suárez; Rogerio Díaz, dedicado a la sastrería; Olidén Ángel, zapatero de vocación, y el contador Roberto Durán, quienes gambeteaban y corrían junto a un empresario de vinos, un policía, dos comerciantes y dos obreros de Vidriocol, entre otros.

Así nació el Deportivo Pereira, un histórico del balompié nacional que hoy está al borde del abismo y en medio del ventarrón: Corpereira, su razón social (o persona jurídica), está a punto de ser liquidada luego de la orden de la Superintendencia de Sociedades.

Sus años

1951 1952

1953 1954

1955 1949

1950

2001

2003 2010

2012

201 2013

BARRAS BRAVAS DEL DEPORTIVO PEREIRA

Estas personas son un grupo grande de jóvenes y niños que asisten al estadio cada ves que el Deportivo Pereira juega y si este pierde o gana ellos forman peleas y estragos con las barras del equipo contrario o afectando a las demás personas que se encuentren allí. Estas barras no miden las consecuencias de sus actos y llegan hasta el punto de no importarles y darles igual si matan, hieren o perjudican a quienes no les esta causando mal y poniendo en mala reputación a la ciudad.

CONCLUSIONES

Esta bien que cada uno apoye al equipo que mas le guste pero no es necesario llegar al extremo de causar tanta violencia.

Si la educación se fijara en cada uno de estos temas los jóvenes entenderían la importancia de no ser tan ignorantes.

Hay que entender que la camisa o el color que uno lleve puesto no define el valor que tiene la vida de cada persona ni tampoco la nuestra.

Se debe ser tolerante, inculcar la paz y practicarla compartir con el prójimo sin que importe de que equipo sea.