delincuencia

11
1 DELINCUENCIA 1. Introducción Sin lugar a dudas, la delincuencia es un fenómeno muy representativo desde el siglo pasado, ya que es uno de los problemas criminológicos que crece cada día más, no solo en nuestro país, sino también en el mundo entero; es una de las acciones socialmente negativas que va a lo contrario fijado por la ley y a las buenas costumbres creadas y aceptadas por la sociedad. La delincuencia es un fenómeno social que pone en riesgo la seguridad pública de la sociedad, así mismo va contra las buenas costumbres ya establecidas por la sociedad. La delincuencia es un fenómeno de ámbito mundial, pues se extiende desde los rincones más alejados de la ciudad industrializada hasta los suburbios de las grandes ciudades, desde las familias ricas o acomodadas hasta las más pobres, es un problema que se da en todas las capas sociales y en cualquier rincón de nuestra civilización. 2. Antecedentes históricos A pesar de no tener ninguna duda sobre la existencia de un derecho penal precolombino, como por ejemplo el de los pueblos Aztecas, Mayas, Incas o de Mesoamérica, desconocemos si existía alguna regulación especial, o particular para niños o jóvenes que cometieran algún "delito". Lo mismo que se desconocen las regulaciones de esta situación en el llamado derecho colonial americano. El inicio legislativo de la "cuestión criminal" surge en el período republicano, luego de la independencia de las colonias europeas. Aunque a finales del siglo XIX la mayoría de los países latinoamericanos tenían una vasta codificación, especialmente en Constituciones Políticas y Códigos Penales, la regulación de la criminalidad juvenil no era objeto de atención particular. Es a principios de este siglo en que se ubica la preocupación por la infancia en 105 países de nuestra región. Esto es el resultado, por un lado, de la internacionalización

Upload: julio-solano

Post on 10-Jul-2015

91 views

Category:

Documents


1 download

TRANSCRIPT

Page 1: Delincuencia

1

DELINCUENCIA

1. Introducción

Sin lugar a dudas, la delincuencia es un fenómeno muy representativo desde el siglo

pasado, ya que es uno de los problemas criminológicos que crece cada día más, no

solo en nuestro país, sino también en el mundo entero; es una de las acciones

socialmente negativas que va a lo contrario fijado por la ley y a las buenas costumbres

creadas y aceptadas por la sociedad.

La delincuencia es un fenómeno social que pone en riesgo la seguridad pública de la

sociedad, así mismo va contra las buenas costumbres ya establecidas por la sociedad.

La delincuencia es un fenómeno de ámbito mundial, pues se extiende desde los

rincones más alejados de la ciudad industrializada hasta los suburbios de las grandes

ciudades, desde las familias ricas o acomodadas hasta las más pobres, es un problema

que se da en todas las capas sociales y en cualquier rincón de nuestra civilización.

2. Antecedentes históricos

A pesar de no tener ninguna duda sobre la existencia de un derecho penal

precolombino, como por ejemplo el de los pueblos Aztecas, Mayas, Incas o de

Mesoamérica, desconocemos si existía alguna regulación especial, o particular para

niños o jóvenes que cometieran algún "delito". Lo mismo que se desconocen las

regulaciones de esta situación en el llamado derecho colonial americano. El inicio

legislativo de la "cuestión criminal" surge en el período republicano, luego de la

independencia de las colonias europeas. Aunque a finales del siglo XIX la mayoría de

los países latinoamericanos tenían una vasta codificación, especialmente en

Constituciones Políticas y Códigos Penales, la regulación de la criminalidad juvenil no

era objeto de atención particular.

Es a principios de este siglo en que se ubica la preocupación por la infancia en 105

países de nuestra región. Esto es el resultado, por un lado, de la internacionalización

Page 2: Delincuencia

de las ideas que se inician en el Siglo XX, primeramente con la Escuela Positiva y

luego con la Escuela de la Defensa Social, y por el otro lado, es el resultado de la

imitación latinoamericana de las preocupaciones europeas y de los Estados Unidos de

América por la infancia, lo cual se vio reflejado en varios congresos internacionales

sobre el tema de la infancia.

La primera legislación específica que se conoce fue la argentina, promulgada en 1919.

Pero fue en décadas posteriores en donde se promulgaron la mayoría de las primeras

legislaciones, por ejemplo Colombia en 1920, Brasil en 1921, Uruguay en 1934 y

Venezuela en 1939. Durante este período y hasta los años 60, podemos afirmar que el

derecho penal de menores se desarrolló intensamente, en su ámbito penal,

fundamentado en las doctrinas positivistas-antropológicas.

En la década de los 60, con excepción de Panamá que promulgó su primer ley

específica en 1951 y República Dominicana en 1954, se presenta un auge del derecho

penal de menores en el ámbito legislativo, con la promulgación y reformas de leyes

especiales, por ejemplo, en los siguientes países: Perú en 1962, Costa Rica en 1963,

Chile en 1967, Colombia en 1968, Guatemala en 1969 y Honduras también en 1969.

En la década de los 70, se promulgan las siguientes legislaciones: México en 1973,

Nicaragua en 1973, El Salvador en 1973, Bolivia en 1975, Venezuela en 1975,

Ecuador en 1975 y Cuba en 1979. En todo este período, se caracteriza el derecho penal

de menores con una ideología defensista de la sociedad, basada en las concepciones de

peligrosidad y las teorías de las subculturas criminales.

Las concepciones ideológicas del positivismo y de la Escuela de Defensa Social,

fueron incorporadas en todas las legislaciones y sin duda influyeron en la codificación

penal. Pero en donde estas ideas encontraron su máxima expresión, fue en el derecho

penal de menores. Postulado básico fue sacar al menor delincuente del derecho penal

común, con ello alteraron todo el sistema de garantías reconocido generalmente para

adultos. Convirtieron el derecho penal de menores en un derecho penal de autor,

sustituyendo el principio fundamental de culpabilidad, por el de peligrosidad. Esto

llevó a establecer reglas especiales en el derecho penal de menores, tanto en el ámbito

sustantivo como formal, como por ejemplo, la conducta predelictiva, la situación

irregular y la sentencia indeterminada. Principios que han servido, y aún hoy se

Page 3: Delincuencia

encuentran vigentes en varias legislaciones latinoamericanas, para negar derechos

humanos a los menores infractores, como la presunción de inocencia, el principio de

culpabilidad, el derecho de defensa, etc.

Un hito en el desarrollo histórico del derecho de menores lo marcó la promulgación de

la Convención General de los Derechos del Niño en 1989. Luego de la entrada en

vigencia de esta convención, se ha iniciado en los años 90 un proceso de reforma y

ajuste legislativo en varios países de la región, específicamente en Colombia, Brasil,

Ecuador, Bolivia, Perú, México y Costa Rica.

3. Definición

La delincuencia se refiere a un conjunto de actos en contra de la ley, tipificados por la

ley y merecedores de castigo por la sociedad, en diferentes grados. Se podría definir

también como una conducta por parte de una o varias personas que no coinciden con

las requeridas en una sociedad determinada, que atentas contra las leyes de dicha

sociedad. Debido a ello, la delincuencia puede diferir según el código penal de cada

país. Generalmente, se considera delincuente a quien comete un delito en reiteradas

ocasiones, llegando a ser considerado también, como un antisocial, recalcando el

hecho que este tipo de acciones atentan contra el normal funcionamiento de nuestra

sociedad, poniendo en peligros de diferente naturaleza a sus miembros.

4. Tipos de delincuencia

Dependiendo del número de personas que lo cometa y ejecute, de los procedimientos

que siga, de los recursos que utilice y de los objetivos que persiga, podrá haber,

esencialmente, dos tipos de delincuencia:

a. Delincuencia menor, y

b. Delincuencia organizada.

a) Características y ámbito de acción de la delincuencia menor

Page 4: Delincuencia

La delincuencia menor es la cometida por un individuo, y cuando mucho, por dos, y

que tiene por objetivo la comisión de un delito que podría ser ir desde una falta

menor hasta una grave y calificada, pero que no trascienden su escala y

proporciones, es decir, no son cometidos por bandas, no hay una gran planeación en

los hechos delictivos, o no se pretende operar permanentemente a gran escala. Esa

es la delincuencia callejera, la más ordinaria:

I. Asalto a transeúntes.

II. Carterismo.

III. Violación.

IV. Robo de bienes y artículos menores.

V. Robo a casas habitación.

VI. Robo de vehículos.

VII. Vandalismo.

VIII. Grafitis y pinta de muros y monumentos.

Ahora bien, éstos y otros delitos pueden ser cometidos en grandes proporciones y

por muchos individuos, con lo cual ya se convierte en una delincuencia organizada,

tanto de nivel intermedio como mayor. Cuando se convierten en tales, se ha dado en

decir que se convierten en la "industria del robo", "la industria del secuestro", la

"industria del robo de vehículos", etc. Por supuesto, la delincuencia menor tiene las

siguientes características, en términos generales:

1.

Una precisión técnico-manual elevada y precisa para cometer el ilícito con

rapidez, astucia y disimulo, y

El uso de la fuerza con apoyo en ventajas físicas, e incluso, en el empleo

de armas.

2. El asaltante puede apelar o no a dos recursos para lograr sus objetivos:

3. Normalmente existen compradores de bienes robados, que son quienes los

adquieren de conformidad con tarifas ya existentes en el mercado negro,

mismas que son fijadas por la oferta y la demanda así como por la situación del

entorno local, nacional e internacional.

4. Regularmente, los delincuentes operan con apoyo de una red de corrupción

entre autoridades intermedias (jueces calificadores, agentes del ministerio

público del fuero común) y corporaciones de seguridad pública desde sus

Page 5: Delincuencia

mandos y efectivos elementales hasta –cuando mucho– sus mandos medios

(agentes de policía, jefes de sector, etc.).

b) Características y ámbito de acción de la delincuencia organizada

El crimen organizado se puede definir como "la delincuencia colectiva que

instrumentaliza racionalmente la violencia institucional de la vida privada y

pública, al servicio de ganancias empresariales con rapidez. Necesariamente

vincula jerarquías de la burocracia política y judicial mediante la corrupción y la

impunidad". A continuación se describen en forma de lista junto con otras

características observadas en otro análisis sobre el tema:

1. "Opera bajo una disciplina y códigos de comportamiento mafioso;

2. Actúa con la finalidad de obtener, en la forma de prácticas sociales

recurrentes –enraizadas en la estructura del trabajo, a nivel local, nacional e

internacional– ganancias rápidas sin inversión previa de capital, de origen

ilegítimo e ilegal, mediante la apropiación de objetos de uso privado" y de

propiedad ajena.

3. En otras ocasiones, recurriendo a las mismas prácticas, se comercializa con

bienes, productos y servicios de origen ilegítimo e ilegal, con poca o ninguna

inversión de capital.

4. La delincuencia organizada actúa de manera impune en la clandestinidad,

protegida –y a veces también dirigida y operada– por autoridades corruptas,

delincuentes de alto nivel, especialización y jerarquía, y posee capacidad para

utilizar la fuerza en aras de lograr sus objetivos.

5. Con respecto a los bienes, productos y servicios ofertados por la delincuencia

organizada, una vez que estos se ponen en circulación, "quedan definidos sus

precios por las condiciones del mercado regional o mundial" –denominado,

coloquialmente, mercado negro–, "siendo el mercado, escenario de esta

criminalidad organizada".

Por otra parte que como resultado del histórico esfuerzo de la humanidad por su

supervivencia surgió el capitalismo, el cual presenta una doble dimensión dialéctica

en sus formas de acumulación de capital que no necesariamente se implican desde

Page 6: Delincuencia

el punto de vista de las relaciones jurídicas, aunque sí desde el punto de vista

económico, a saber:

I. La acumulación de capital basada en el ahorro y el trabajo personal, de origen

legítimo y legal, y

II. La acumulación de capital basado en actividades que dotadas de legalidad

(falsa), son ilegítimamente obtenidas para los efectos jurídicos de sus

métodos de generación y concentración de riqueza históricamente empleados:

formas de crimen organizado.

Sin embargo, al constituir una actividad (o actividades) ilegales, aun cuando

pudieran parecer licitas, caen de facto en el campo del derecho penal y, por ende,

merecen especial estudio y análisis, a efecto de detectar, controlar, contrarrestar,

disminuir y erradicar la acción y efectos de ésta o éstas, así como a los individuos y

grupos que las llevan a cabo.

5. Consecuencias para la sociedad

En el caso de la delincuencia Juvenil, una vez que el delincuente juvenil alcanza la

madurez es probable que continúe mostrando comportamientos de desadaptación y

que aumente su riesgo de ser procesado a través del sistema de justicia penal como

delincuente adulto. Debido al pequeño porcentaje de delincuentes adultos y juveniles

habituales que contribuyen en alto porcentaje a los delitos violentos (es decir,

asesinato y asalto con agravantes) el sistema de justicia penal debe supervisar esa

pequeña población de criminales profesionales en un esfuerzo para prevenir la

proliferación de delincuentes violentos serios.

Si los trastornos mentales tales como el trastorno de conducta no se diagnostican y no

se tratan el delincuente juvenil tiene el potencial creciente de desarrollar un trastorno

antisocial de la personalidad y continuar más adelante su vida como un criminal

profesional. La mayoría de delincuentes violentos exhibe rasgos del trastorno

antisocial de la personalidad y los muestran antes de los 15 años. El trastorno

antisocial de la personalidad es un diagnóstico común para un asesino en serie. Los

autores Álvarez y Bachman encontraron que una similitud entre los asesinos en serie

eran sus anteriores convicciones criminales. En este caso el trastorno de conducta se

Page 7: Delincuencia

puede convertir en un elemento probable para el asesino en serie si no se diagnostica y

se trata antes de que se convierta completamente en la edad adulta en un trastorno

antisocial de la personalidad.

El trastorno de conducta y el trastorno antisocial de la personalidad se categorizan

como trastornos de personalidad y según lo explicado arriba en trastornos mentales.

Algunas de las características comunes incluyen el incumplimiento constante de

normas sociales, el comportamiento agresivo hacia la gente, y una desvinculación de

la emoción de la empatía. Estos rasgos son también comunes entre los asesinos en

serie y si los comportamientos de desadaptación no se tratan tienen el potencial de

crear a una persona que fantasea con matar a varias víctimas y después satisfacer su

impulsividad cuando ya no son capaces de reprimirse.

6. La intervención del estado en la seguridad ciudadana

a) El nuevo rol del estado local.

"La pobreza y la falta de oportunidades de trabajo se han convertido en factor de

permanente presan sobre el medio ambiente. La ampliación innecesaria de la

frontera agrícola, debido a la inadecuada distribución de la propiedad territorial, ha

aumentado alarmantemente el proceso de deforestación y desertificación; el manejo

inadecuado de recursos naturales como la tierra y las fuentes de agua, han ido

erosionando los suelos y agotándolas fuentes hídricas, provocando el aumento en

los costos de producción agropecuaria y encareciendo el suministro de agua

potable."Por su parte, la industrialización contaminante, principalmente en los

países más ricos (con el consiguiente aumento del parque automotor), han

incrementado la emisión de gases, los cuales han ido destruyendo la capa de ozono

del planeta, provocando serios desajustes en el comportamiento del clima, lo que a

su vez ha provocado el aumento de desastres naturales, altamente costosos en

términos económicos y sociales.

La respuesta a la relación entre pobreza y medio ambiente pasa, de acuerdo a este

enfoque, por la combinatoria de las capacidades y los recursos con que cuentan los

individuos y los grupos para procurarse sus medios de vida y progresar, teniendo a

las instituciones como los mecanismos básicos a través de los cuales las

Page 8: Delincuencia

capacidades y los recursos se actualizan en tanto derechos: "Así, las personas

cuentan con sus capacidades individuales y con el acceso a los recursos, naturales y

creados, como medios para vivir y progresar, a través de diferentes instituciones

que les dan derechos a hacer valer sus capacidades o a utilizar los recursos"

Al respecto señalan Jordi Borja y Manuel Castells: "La dificultad para los

gobiernos locales es sin embargo, por un lado, su dependencia administrativa y su

escasa capacidad de recursos económicos; por otro lado, el riesgo de derivar hacia

el localismo político y el tribalismo cultural si la defensa de la identidad se

convierte en fundamentalismo. La reconstrucción de un estado flexible y dinámico,

articulado entre sus diferentes niveles, parece la única posibilidad histórica de

superar las tendencias disolventes de la sociedad de la información inscritas en la

dicotomía entre los flujos de poder y el particularismo de la experiencia, al

introducir una nueva perspectiva en la gestión de las ciudades".

b) La promoción económica local:

Surge como una respuesta a la transformación productiva y tecnológica de

comienzos de los años 80 y particularmente como salida frente a la intensidad del

ajuste que incrementa notablemente el desempleo. Ante la imposibilidad de influir

en las políticas nacionales, condicionadas por los flujos mundiales de poder, los

estados locales, luego de aproximadamente una década de inacción y actitudes solo

reactivas, comienzan, en la década de los 90, a implementar estrategias de cambio

dirigidas por un lado a implementar nuevos modelos de desarrollo económico local

y por otro lado a asociarse y conectarse para aumentar así su información y su

potencial protagonismo en la economía de flujos y redes.

El esquema planteado requiere de los directivos locales la asunción de nuevos roles:

Ser estrategas, lo que implica realizar un análisis de la situación local y

tener una visión sobre el futuro que permita el diseño de políticas acordes a

los objetivos estratégicos planteados. Esta actividad es la que tiende a

abrirse, en un abanico innumerable de posibilidades, a través de la

descentralización y la participación ciudadana.

También se requiere el liderazgo y el consenso necesario para impulsar la

estrategia de cambio.

Page 9: Delincuencia

Por último, se requiere que los gobernantes sean embajadores de la

localidad que representan, ello incluye las acciones de buena relación con

otros municipios, con el gobierno regional, con el estado nacional y con

organismos internacionales y también la capacidad para impulsar acciones

de marketing local.

c) La participación ciudadana en la gestión municipal.

Font y Gomá señalan que desde los años setenta hasta hoy se refleja en la práctica

algún tipo de crisis de confianza ciudadana en el funcionamiento tradicional de las

instituciones de la democracia representativa. Por una parte se expresan tendencias

hacia la apatía política y el individualismo privatista conectadas con algunas

tendencias sociales de fondo: debilitamiento de identidades, desprecio por lo

público, decepciones por actos de corrupción, desconcierto ante la caída de

referentes políticos, despreocupación una vez conseguidas unas condiciones de vida

dignas, etc. Por otra parte empiezan a expresarse nuevas demandas participativas

enraizadas en una ciudadanía mucho más formada, con elevadas capacidades

críticas y altamente reflexivas.

Demandas que no entran en contradicción con la democracia representativa pero

tampoco encuentran fácil acomodo en ella. Asi la mayoría de los autores coinciden

en la formación de nuevos instrumentos de acción colectiva que se distinguen

notoriamente de la estructura tradicional de los partidos políticos, donde el ejemplo

más claro son las ONGs (Organizaciones no gubernamentales), con el condimento

de ser organizaciones que tienen mayor facilidad de adaptación al intangible y

fluctuante mundo de los flujos de poder y la informatización. También, señalan

Font y Gomá, el engarce de estas articulaciones y valores de nuevo tipo con el

proceso político no se realiza por la vía electoral sino por medio de la generación de

espacios participativos en los procesos de definición de problemas, de

conformación de agendas, de diseño de políticas, de toma de decisiones y de

gestión de servicios. Espacios que, por una cuestión básica de escala y proximidad,

han tenido sus primeras configuraciones en la esfera política local.

Page 10: Delincuencia

7. La delincuencia actual en el Perú.

En la actualidad nos encontramos en un ambiente repleto de delincuencia, siendo Lima

uno de las ciudades más peligrosas de América. Asombra que el estado no haya

podido encontrar una solución a este tipo de problemas, y por el contrario se haya ido

expandiendo, ya sea desde un robo a mano armada a asesinatos múltiples por una gran

suma de dinero. Es vergonzoso saber que los políticos no hacen nada importante para

evitar estos tipos de situaciones, claro que no en su mayoría, pero, sólo nos cabe

recalcar que si no encontramos una solución podríamos llegar a encontrarnos en una

sociedad desconfiada, despreocupada por el prójimo y totalmente descarecida de

valores.

En estos días en los que la delincuencia es frecuente y el incremento de robos a

empresas y personas es cosa de todos los días, se necesita una nueva opción en

seguridad perimetral y personal. La delincuencia en el Perú se ha vuelto un tema

cotidiano en la actualidad. El gobierno peruano no a tomado verdaderamente cartas en

el asunto, ya que día a día nosotros los peruanos vivimos angustiados y desconfiando

de los demás. Mientras el gobierno planifique un “buen plan de estrategia “ para

erradicar la delincuencia en el Perú , nosotros los pobladores debemos tomar medida

preventivas y estar con los ojos bien abiertos. Sobre todo en lugares donde estos

delincuentes ejercen su “profesión” con mucha habilidad. ¿Qué es lo que les motiva a

estas personas a ejercer la delincuencia?. La pregunta es clara y sencilla, ya que la

gran mayoría de estas personas carecen de una buena condición económica. Y el que

no tenga una buena condición económica es consecuencia de que no han tenido una

buena calidad de vida. Mientras que otros lo hacen por el simple hecho de ganar

dinero fácilmente, en este grupo se encuentran personas con un nivel socioeconómico

mediano pero que son excesivamente ambiciosos y que nos les gusta el trabajo

honrado.

De acuerdo a las encuestas realizadas en los últimos años, en el2010 el sondeo

arrojaba que el 51% de los peruanos consideraba la corrupción como el mayor mal del

país y el 41% le daba a la delincuencia ese lugar; hoy vemos que el 61% de los

encuestados han situado la inseguridad ciudadana a la cabeza de la lista de problemas

del Perú. En la lista siguen la corrupción (47%), el desempleo (31%), la drogadicción

Page 11: Delincuencia

(39%) y la pobreza (27%). Estas cifras podrían tener su explicación en el crecimiento

del accionar delictivo y en la inacción o ineficiencia de las autoridades encargadas de

combatir el crimen.

Fuente: Ipsos Apoyo.