Eldelmodernismo

orgulloPatrimonio del ferrocarrilEstación de Valencia Nord

EN EL MES DE AGOSTO DE 1917 ENTRABA ENFUNCIONAMIENTO LA ESTACIÓN TÉRMINO DEVALENCIA QUE HA LLEGADO HASTA NUESTROSDÍAS Y QUE ESTÁ CONSIDERADA COMO UNA OBRAMAESTRA DEL MODERNISMO ARQUITECTÓNICO.UN SIGLO DESPUÉS DE LA COLOCACIÓN DE SUPRIMERA PIEDRA, SE PREPARA PARA TENER COMOCOMPAÑERA A LA ESTACIÓN DE ALTA VELOCIDAD.

por M. G. Blázquez

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Cultura ferroviaria

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ACIERTO DE DEMETRIO RIBESNo fue fácil arrancar el levanta-miento del edificio que iba a susti-tuir a la primera estación central va-lenciana, construida a mediados delsiglo XIX en estilo neoclásico. Des-de que se aprobó su creación, seacumularon varios proyectos y elque finalmente se ejecutó se trans-formó en varias ocasiones. La aline-ación con el cercano edificio delAyuntamiento y la proximidad de lamonumental plaza de toros contri-buyeron a que el resultado fuera uncomplejo relativamente estrecho ymuy profundo. Aunque se contem-plaron diferentes soluciones, la queacabó plasmándose fue el típico di-seño en U de las estaciones término:

con edificios frontal y laterales, parasalidas y llegadas de viajeros y ser-vicios auxiliares, y un espacio cen-tral de acogida para las seis vías ysus respectivos andenes.

La obra de la estación del Norte sellevó a cabo con todas las ideas arqui-tectónicas que logró plasmar Deme-trio Ribes, un experimentado y, sinembargo, joven arquitecto que traba-jó para la misma compañía ferrovia-ria en el entorno de la estación dePríncipe Pío de Madrid, en los edifi-cios auxiliares gemelos situados en elPaseo del Rey y en la antigua cocherasemicircular para locomotoras de lamisma estación, como le adjudica In-maculada Aguilar en su libro Historia

a estación de Valencia siem-pre tuvo, sobre las demás,un aliciente especial para losviajeros. Pocos lugares tie-

nen la facultad de abrir las puertas dela ciudad al visitante de una maneratan sorprendente como aquí. La mo-da de convertir los edificios en el pro-pio emblema de la empresa a la quepertenecen o en transformarlos en laestampa más característica del pro-greso de una ciudad no es algo de laarquitectura de hoy. Hace cien años,muchas compañías mostraban supropia esencia en las fachadas de sussedes, consiguiendo que la arquitec-tura del edificio hablara por sí mis-ma. La estación del Norte (Nord envalenciano, también conocida comoValencia Término) se pensó para quefuera una de las construcciones mássignificativas de una ciudad en plenatransformación urbanística y queplanificaba sus ensanches más alládel corsé de sus antiguas murallas.

Con un inmueble sorprendente y lle-no de detalles tan hermosos comocontradictorios, en Valencia, la Com-pañía de Caminos de Hierro del Nor-te, propietaria de la línea del ferroca-rril, dejó un símbolo que compitiódesde el principio en atractivo con lamonumentalidad de sus edificios re-ligiosos, como la Catedral y su torredel Miguelete (Micalet), o civiles, co-mo La Lonja de la Seda o de los Mer-caderes -obra maestra del gótico ci-vil valenciano- o el Mercado Central,que se construyó en la misma épocaque la estación.

El proyecto de este edificio dejabaatrás definitivamente el conceptomeramente industrial de las estacio-nes de tren; se convertía en un ico-no de identidad ciudadana y conse-guía una dualidad visible entre losedificios para los viajeros y la granbóveda que daría cobijo a los ande-nes. De hecho, ambas partes estánperfectamente diferenciadas y se le-vantaron de manera independiente.

L

Los muros de la estaciónestán repletos de relievespolicromados. Llama laatención, sobre todo, lasucesión de racimos denaranjas

de las estaciones: arquitectura ferro-viaria en Valencia.

ESTACIÓN MODERNISTAEl modernismo era una corrienterenovadora o rupturista que estabaimpregnando muchas de las crea-ciones artísticas del momento. Laarquitectura no permanecía ajena yun ejemplo incuestionable es la es-tación valenciana. El diseño de la fa-chada principal marca una horizon-talidad que se rompe con las trestorres que sobresalen en altura. Co-mo en todo el edificio, aquí se mez-clan los sentimientos que quisotransmitir Ribes con los que se ha-cía una verdadera fusión de elemen-tos artísticos que contrastaban en-

tre sí. Las líneas del historicismo yclasicismo tradicionales se mezcla-ban con las aportaciones de la iden-tidad más local, en la que no faltanlas representaciones folclóricas olas alusiones a la economía de laépoca, centrada especialmente en lahuerta y en los frutales, sobre todonaranjos.

Siguiendo las ideas de los movi-mientos Art &Crafts que tanto influ-yeron en la arquitectura, todo el in-mueble está repleto de elementosdecorativos donde los artesanos lo-graron una calidad extraordinaria,recuperando así su posición en lasBellas Artes. Todos estos detallesdecorativos repartidos por fachada,vestíbulo, cafetería o salón para pa-

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sajeros de primera, convertían eledificio en una página literaria. Dealguna manera, las barandillas, lasvidrieras, los globos luminaria, losrelojes, las taquillas, los picaportes,los artesonados, la escalera, la verja,la azulejería o hasta los remates al-menados de la fachada de la esta-ción estaban salpicados de poesía.

EXPECTACIÓN POR LA BÓVEDALa construcción de la gran bóvedaque cubre el área de los andenes dela estación de Valencia supuso unasorpresa, no exenta de polémica,para los valencianos. La utilizacióndel hierro rompía con el empleo demateriales considerados más no-bles, como la piedra de las fachadas.

: La estación de Valencia esPatrimonio Histórico Artísticodesde el año 1983. Se alejaron asílos peligros de transformación odemolición, amenazas de los años70 del siglo pasado. Sufrió dete-rioros importantes durante losbombardeos de la Guerra Civil ylas riadas de 1957.

PATRIMONIO

: Entre los remates almena-dos de la fachada, en el centro deledificio, resalta la bola del mundo,sobre la que descansa un águila,símbolo de la velocidad. Un detalle imperecedero que pare-cía presentir la llegada de la altavelocidad a la capital del Turia.

ANUNCIO DE ALTA VELOCIDAD

CURIOSIDADES

Cultura ferroviaria

La creativa y ricaproducción ceramistade la región no fueajena al éxito. Losazulejos alegóricosde la cafetería sonobra del ceramistaGregorio MuñozDueñas

Pero la grandiosidad de una bóvedaque nada tenía que envidiar a las delas grandes estaciones de tren euro-peas acabó conformando incluso alos más críticos.

Las ideas del ingeniero EnriqueGrasset y del arquitecto DemetrioRibes quedaron patentes en esta cu-bierta que pesa 700 toneladas y que

se armó en diferentes fases, segúnllegaban las piezas desde la fábri-

ca de Madrid. Una innova-dora grúa sobre un

puente móvil se uti-lizó para colocar ensu lugar los 12 ar-cos elípticos sobrelos que descansa

la cubierta,

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fabricados en hierro roblonado yasentados en tierra por medio de pi-lastras independientes de la fábricade los edificios laterales y frontal.

La ventilación del espacio central dela estación –de 45 m de luz y 22 dealtura– mejoró la experiencia deotras estaciones, sometidas a las al-tas temperaturas un buen númerode meses. Un gran lucernario so-breelevado se abre a lo largo de to-da la estructura, permitiendo la eva-cuación de humos. Además, unasucesión de ventanales practicablesen la parte alta de los edificios late-rales -accionables eléctricamente-aportaban una ventilación cruzadaque ayudaba a regular la tempera-tura y humedad del interior. ●

: Si la estación de Valencia ha cumplido cien años sin apenas cambios desde que seempezó a levantar, tiene otros cien años por delante con las nuevas estructuras arquitectóni-cas que se le adosarán con la Estación Central que acogerá la alta velocidad. La nueva esta-ción, con proyecto del arquitecto César Portela, se levantará al final de los andenes actuales.La vieja estación no transformará su estructura, aunque desaparecerán las vías bajo subóveda y el interior será el gran vestíbulo de entrada a los nuevos tiempos. Parte de laverja renacentista desaparecida para dotar de paso al cerramiento perimetral serárepuesta en el lavado de cara inevitable para hacer una sola estación vanguardista condos edificios separados por un siglo de antigüedad, pero el más antiguo no perderá suimportancia en la historia de la ciudad porque ya nació moderno.

LA ESTACIÓN DEL FUTURO