Erase una vez un día de Navidad.

Papá Noel entró en una casa con la intención de dejar los regalos a la niña que vivía en ella ¡Cuál fue su sorpresa al descubrir a otro Papa Noel dentro de la casa haciendo lo mismo ¡ Los dos Papa Noel se pusieron a discutir y con el alboroto despertaron a la niña que bajó de su habitación a ver qué pasaba .

Al principio se asustó mucho y los Papá Noel todavía más al

verse descubiertos, pero enseguida la niña reaccionó y les

preguntó qué les ocurría y por qué discutían .Ellos no se ponían de

acuerdo cuál de los dos debía repartir los regalos a los niños esa

noche tan especial. La niña estuvo un rato pensando y al final les

propuso una solución. Como la noche era muy corta y los niños

que esperaban regalos eran muchos, les sugirió que se repartieran

el trabajo. De esta forma ellos estarían más descansados y ningún

niño se quedaría sin sus regalos. Así se hace desde esa noche pero

esto es un gran secreto y no se lo podéis contar a nadie, porque

Papa Noel solo hay uno ¿o no?

Alba

UNA LECCIÓN NAVIDEÑA

Érase una vez un niño huérfano que quería poner el árbol de Navidad, pero no tenía casa para ponerle ni árbol para decorarle ni bolas para colocarlas. De repente, pensó ir al bosque y talar un árbol para utilizarlo, pero, ¿cómo talarlo sin herramientas? Se le ocurre llamar a un leñador. Con sus ojos pálidos avista un señor con un hacha y decide ir corriendo hacia él. El niño le dijo que si le talaba un árbol él le daba un jamón de 7 Kg. El señor, encantado por su propuesta, se dirigió con cara de pocos amigos hacia el árbol, pero cuando ya estaba a punto de cortarle por la mitad, el niño exclamó que mejor le dejase a él el hacha y él lo talaba. Puesto que se lo propuso, lo hizo. Hubo un pequeño fallo. Se le cayó encima. El niño tras unos meses en el hospital, va donde el señor y, le dice que ha aprendido una lección: Las cosas de mayores déjaselas a los mayores.

Alejandro

Un día en Navidad Papa Noel se encontró a su

gemelo Adrián y le dio un abrazo de alegría

caminando por el hielo que había en la Antártida.

Empezaron a hablar de trabajo y su gemelo le dijo

que había dejado de repartir regalos. Entonces Papá

Noel le expulsó de la Antártida. Entonces Adrián se

quiso vengar y construyó un robot para matar a

Papá Noel. Adrián fue a la Antártida, intentó atacar

a Papá Noel, pero Papá Noel mandó atacar a sus

renos que le hicieron bueno.

Andrés

Una vez en el bosque ocurrió una

tragedia: un leñador muy pobre se quedó

sin nada, excepto su hacha. Justo en

Navidad el leñador, más triste que nunca,

se puso enfermo. Se fue a la ciudad a

vender madera que había cortado. El

leñador se dio por vencido y quería ahorcarse.

Entonces vio a una niña abandonada y decidió

cuidarla. Pero como no tenía nada de dinero, todo lo

que hacía, lo construía con la madera y las

herramientas que creó.

Resultó que la niña tenía una gran fortuna que le

habían dejado sus padres.

El leñador reparó su

casa, se casó y su hija y

su esposa pudieron salir

adelante.

Daniel P

Érase una vez en África, en el año 2050. Se

preguntaban sus habitantes por qué su continente era

tan pobre.

Un niño que se llamaba Pedro dijo a un amigo suyo:

- A mí me gustaría poder ir al colegio y conseguir no ir a

la guerra.

Entonces su amigo se

rio y dijo:

- Eso solo nos pasaría

si hubiese un milagro.

Pero él seguía pensando

lo mismo, y se portó

bien. Y vio que no pasaba

nada, hasta que un día, en

paquetes de regalo llegó

un montón de dinero.

Lo habían enviado los

países ricos a todas las

casas.

Desde entonces, poco a

poco, fueron un

continente feliz para

siempre.

Daniel SR

La lección navideña

Había una vez una familia pobre que vivía en

la calle y que sobrevivían de los restos de la

basura. Un día la niña, pidiendo limosna en

la calle, la dieron un gran árbol de navidad

con un cubo pequeño de colores, el señor la

guiñó el ojo y desapareció en un polvo

dorado, la niña quedó sorprendida.

Ella se llamaba Sindy, era rubia y con pecas.

El árbol de navidad que le dio el señor tenía

un cubo de colores, lo giró y puso una cara

entera de rojo. Después de días y días, le

faltaba una sola cara, la blanca, la costaba

mucho. Cuando acabó, un día después

apareció aquel señor, dio una vuelta y de

repente ella y sus padres tenían los bolsillos a

reventar de dinero y estaban perfectamente

vestidos y peinados. De repente el mayordomo

chascó los dedos y apareció un pavo en la

mesa. Pasaron los años y cada vez eran más

egoístas; entonces Papá Noel les castigó en la

calle otra vez y aprendieron la lección de no

ser avariciosos.

Deva

Érase una vez una familia rica que se hacían llamar los

González.

Un día la hija de los González que se llamaba Elena fue a comprar

regalos para Navidad. En el supermercado se encontró con un

anciano que decía: ``Jou, Jou, Jou.´´

Elena le preguntó que cómo podía reír así.

- Magia, solo es magia – reía el anciano.

- ¡Pero si la magia no existe! –Decía Elena– ¡Esto es una broma

seguro!

- No lo entiendes, -dijo el anciano – soy Papá Noel.

- Yo no creo en Papá Noel, -aseguró Elena– tú eres un anciano

con barba.

-No, soy Papá Noel, en serio.

- Bueno si tú lo dices… –dijo Elena– pero, ¿cómo pueden volar

tus renos?

- Magia, solo eso –afirmó el anciano.

- Me tengo que ir a casa. Encantada de haberte conocido.

Elena

Navidad con un solo espíritu:

Erase una vez una niña llamada Sheila, la niña tenía 12 años y

no se portaba muy bien con su familia, así que la misma noche de

Navidad apareció un espíritu diciendo:

- Soy el espíritu de las

Navidades pasadas.

-¿De verdad -dijo la niña-

no me das miedo.

- Si de verdad no te doy

miedo, sígueme –dijo el

espíritu.

- ¿Tengo que hacerlo? -

preguntó Sheila

-Sí, sígueme y verás lo que les hiciste a tu familia las Navidades

pasadas. -dijo el espíritu.

-Ya estamos aquí-dijo el espíritu.

La niña contempló su comportamiento anterior.

- ¿Tanto daño les hice? –volvió a preguntar la niña.

- ¿Tú que crees? –dijo el espíritu- te devolveré a tu año y cuando

despiertes, nada habrá sucedido.

FIN…

Jana

Érase una vez, hace muchos años, en la antigüedad vivía en un orfanato una niña que se llamaba Sasha. Un día iba por el bosque para coger fruta y se encontró a ¡Papá Noel! en el suelo y le preguntó qué le había pasado. Papá Noel se lo contó todo: -Me estaba preparando para salir cuando el Sr. Rocolindo me tiró al suelo y se llevó a los renos. Sasha quiso ayudar Santa a recuperar a sus renos, así que se pusieron en marcha. Ya por la noche Sasha se sentó en una roca y se abrió una puerta secreta. Entraron y se encontraron a los renos, pero se cerró la puerta secreta y no sabían qué hacer, así que buscaron una salida, pero encontraron al Sr. Rocolindo (el señor del orfanato.) Se cayeron en una trampa, pero salieron. Sasha encontró la llave de la puerta de los renos y la abertura de la salida. Salieron y Santa llevó a Sasha al orfanato. Pero después, unos señores querían adoptar a Sasha y la adoptaron. Ese fue el regalo de Papá Noel. Lydia.

Papa Noel Sasha

.

¡HUELGA EN NAVIDAD!

Mara

Querido papá Noel:

Somos los reyes Melchor, Gaspar y Baltasar.

Te escribimos para contarte un problema que tenemos.

A los camellos no les gusta ir a lugares en donde hace frío, están

acostumbrados a temperaturas más altas, así que se han puesto en huelga.

Sabemos que a tus renos no les gusta ir a lugares donde hace calor, dado que

son del polo Norte. Queremos proponerte una solución: Nosotros repartiremos

los regalos del hemisferio sur de la tierra, donde es verano y tú los del

hemisferio norte, donde es invierno.

Responde pronto.

Un abrazo, Gaspar

Melchor

Baltasar

Queridos Reyes Magos: He leído vuestra carta y creo que la vuestra es una idea genial. Es verdad que a mis renos no les gusta ir a sitios donde hace calor. Siempre me ponen excusas y se ponen perezosos. Podemos poner en práctica vuestra idea estas navidades y comentar los resultados en las vacaciones de julio. Hasta entonces buena suerte y feliz navidad. Un abrazo. Papá Noel Papá Noel

Papá Noel se va de excursión Papá Noel un día decidió irse de excursión. Justo en

Navidad. Fue a esquiar, a escalar y después a tomar el té. Se

estaba divirtiendo tanto, que se olvidó de los niños y de los

regalos. Sus socios, que eran los Reyes y los Elfos, tuvieron que

hacer el trabajo. Papá Noel con una sonrisa enorme en la cara

gritó:

¡¡Hou hou hou!!

Uno de los renos, el más pequeño, fue a avisar a sus socios.

Tenían que buscarlo.

Un Elfo, el más grande fue con

él.

Como no lo encontraban

juntos, decidieron separarse.

Ninguno lo encontró.

Mientras tanto Papá Noel se

dio cuenta de que no había

repartido todos los regalos.

Buscó a todos sus renos, pero

ya era tarde.

¡¡¡ LOS NIÑOS SE HABIAN QUEDADO SIN REGALOS!!! .

Al día siguiente Papá Noel dejó sus regalos bajo el árbol de

Navidad.

María

Érase una vez un niño que no creía en

Papá Noel. Papá Noel estaba muy preocupado,

no sabía cómo devolverle la ilusión a aquel

niño. Papá Noel tenía un hermano gemelo,

solo que era un villano, pero él no lo sabía. Se

llamaba Javier y su trabajo consistía en

arruinar la Navidad y lo consiguió. El día de la

cabalgata de Reyes un niño vio a los dos Papás Noel y le

pareció súper extraño. Entonces decidió averiguar qué pasó.

Papá Noel se fue a vivir al polo Norte

y su hermano al polo Sur. El niño descubrió

su secreto y fue a contarlo pero nadie le

creyó. Un día, los dos Papás Noel se

encontraron y se hicieron amigos. Al final el

hermano de Papá Noel dejó de ser un

villano y gracias a la magia de la Navidad

todo el mundo volvió a creer en la Navidad

y todo volvió a ser como antes.

Marina A.

Érase una vez una niña llamada Andrea, era

rica, tenía de todo. Un día se fue a la calle y se

encontró a una niña que no sabía ni su

nombre. La llevó a su mansión, la dio comida,

bebida y un criado.

Al día siguiente era Nochevieja y entonces

dijo la niña:

- A mí no me gustan las uvas

Y dijo Andrea:

- Pues si no te gustan las uvas comeremos

lacasitos.

Pero la niña tenía una enfermedad muy grave,

era bajita y cuando llegó el 8 de enero la niña

se murió y todos se pusieron tristes.

Marina D

Érase una vez, en la Navidad del 2034 dos perros tuvieron

15 cachorros y 14 cachorras, un total de 29 hijos. El padre se

llamaba Nel y la madre Luna. Los dueños tenían pensado

celebrar la Navidad, aunque con tantos perros no se podía vivir,

pero el hijo de los dueños dijo que

él quería celebrarlo con los perros,

y tanto insistió que lo consiguió.

¡¡¡¡Navidad canina!!!! Chilló el hijo.

En Nochebuena había 31 platos con

jamón y carne. En Nochevieja doce

uvas para cada perro. El 6 de enero

hubo regalos por todas partes. El

último día de invierno los cachorros

no estaban en casa. Los dueños les habían vendido. Los padres

caninos se pasaron una semana llorando.

Mario

NAVIDAD A VELOCIDAD PUNTA

Era casi Navidad y los Reyes Magos no tenían

ni un solo juguete, tuvieron que fabricar juguetes a

toda velocidad y una vez terminados se tuvieron que

separar y eso que ellos nunca se separaban.

Al terminar volvieron a casa y vieron que no era su

día. Tuvieron que hacer la misma operación, pero al

revés. (Recoger todos los juguetes).

Al haber terminado decidieron contratar a alguien

para que no les volviera a pasar eso.

Miguel Ángel

Un día, en el lejano Oriente, los

tres Reyes Magos fueron

sorprendidos por una buena

noticia: habían tenido un hermano

cada uno. A los niños les gustaba disfrazarse de

sus hermanos y se lo pasaban muy bien.

Cuando crecieron, ayudaban a sus hermanos a

repartir los regalos. Ese día a un camello le dio un

infarto y estos sufrieron mucho estrés, llamaron a

los hermanos, a sus padres…, y nadie les cogió el

teléfono, excepto Papá Noel.

Vino en su trineo a recoger el

camello. Cuando los hermanos

murieron de viejos, ellos,

orgullosos, ocuparon su puesto.

Olga

¿Dónde Está Papá

NOEL?

ERASE QUE SE ERA EN LOS MÁS INFINITOS CUENTOS,

UN NIÑO ESTABA EN ÉPOCA NAVIDEÑA ESPERANDO A PAPÁ NOEL , PERO NO

SABÍA POR QUÉ NO VENÍA . HABLÓ CON SUS PADRES PREGUNTÁNDOLES SI

ESTE AÑO NO RECIBIRÍA LOS REGALOS. LO H ABÍA DESEADO TANTO. ..

-“¡IGUAL ES QUE ESTE AÑO NO HAY NAVIDAD!”

EL NIÑO SE FUE MUY TRISTE A SU HAABITACIÓN PENSANDO QUÉ TENDRÍA

ESTE AÑO DE DIFERENTE CON LAS DEMÁS NAVIDADES.

PENSÓ SI A LO MEJOR ESTARÍA PAPA NOEL ENFERMO,

O SI SE LE HUBIESE ESTROPEADO EL TRINEO, O A LO MEJOR ES QUE ESTABA MUY CANSADO…

EL NIÑO ESTABA TAN TRISTE QUE SE QUEDÓ DORMIDO ENCIMA DE SU

ALFOMBRA AL LADO DE SU CAMA.

A LA MAÑANA SIGUIENTE, CUANDO SE DESPERTÓ, SE LLEVÓ UNA GRAN

ALEGRÍA POR QUE ESTABA SU CAMA LLENA DE REGALOS Y JUNTO A SU

ALMOHADA UNA NOTA QUE DECÍIA:

HAY QUE CREER EN LA NAVIDAD.

FELIZ NAVIDAD

PABLO p

EL DIA DE NAVIDAD Erase una vez un niño ansioso porque llegaba la

Navidad, o sea, que no paraba de preguntar:

-¿Falta poco?

Así todo el rato. Mientras el Grinch, que estaba en una

cueva, le oyó y dijo:

-Si el niño quiere Navidad, yo se la estropearé.

Y así fue, el niño se quedo destrozado, entonces vino

un Rey Mago que le contó:

-Si quieres navidad solo lo tienes que pedirlo.

Entonces el niño dijo:

-Quiero y deseo que

vuelva la Navidad

Y se cumplió.

El Grinch quería

atrapar al Rey Mago

para que no se

cumpliera su sueño,

pero no lo consiguió.

El Grinch estaba

pensando:

-¿Si siendo malo no

consigo nada, entonces si soy bueno ganaré algo?

¡Claro! Seré bueno.

Y se convirtió en bueno.

Pablo S

HABIA UNA VEZ UN PERRO QUE VIVIA EN LA CALLE Y NO

TENIA FAMILIA.

TAMPOCO TENIA NOMBRE, PERO EL PERRO QUERÍA TENER

UN NOMBRE.

UNA SEÑORA LE VEÍA, Y TODOS LOS DIAS LE ECHABA COMIDA.

PASARON UNAS SEMANAS, FALTABA MUY POCO PARA NAVIDAD, Y

EL PERRO SEGUIA POR ALLI.

LA SEÑORA PENSÓ:

- “ESTE PERRO DEBE ESTAR ABANDONADO”.

Y DECIDIÓ PREGUNTARLE A OTRA SEÑORA:

-¿SABES DE QUIÉN ES ESTE PERRO

- SÍ

- ¿DE QUIÉN?

- ES QUE ESTE PERRO ESTÁ ABANDONADO.

- “EL PERRO A MÍ ME HUBIERA GUSTADO TENERLO, PERO EN MI

BLOQUE NO SE

PUEDEN TENER

ANIMALES, ¡AH! , YA SÉ

QUÉ VOY HACER CON

EL PERRO, ME LO VOY

A QUEDAR”.

LA SEÑORA LE PUSO DE

NOMBRE LEO Y YA NUNCA

MÁS EL PERRO VIVIÓ EN

LA CALLE. .

Rubén

¿PAPA NOEL EXISTE O NO?

Erase un niño que creía en Papa Noel, pero sus amigos

no. El niño se lo preguntó a sus padres:

Mamá, ¿Papá Noel

existe?

No lo sé

Se lo preguntó a su padre y

le contestó lo mismo.

Llegó la noche, el niño

jugaba con su grúa. Cuando era la hora de dormir, sintió

unos golpes en el tejado, fue a mirar, se encontró con Papá

Noel y el niño dijo:

- ¡¡Papa Noel existe!!

fin

Sergio O

Érase una vez, en Nepal, un hombre que no tenía nada y otro

hombre que era rico.

Un día el hombre pobre fue a pedir comida al hombre rico y el

hombre rico le dijo que se buscara un trabajo, y el pobre se buscó

un trabajo.

A la mañana siguiente el pobre consiguió un trabajo de jardinero,

pero no lo hacía bien, así que le despidieron.

Después de una semana llegó la Navidad y Papá Noel le trajo

al hombre un boleto de lotería.

A la mañana siguiente al pobre le tocó la lotería y ganó tres

millones de euros y el

hombre rico, que había

gastado muchísimo

dinero en apuestas,

perdió gran parte de su

fortuna, y aprendió una

lección.

Sergio P.

Hoy Caperucita ha decidido irse al Polo Norte para

conocer a Papá Noel. Cogió el “Expreso” al puerto y de allí

al Polo.

Cuando llegó al Polo fue a la

casa de Papá Noel, entró y vio un

montón de juguetes y Elfos, pero

Papá Noel no estaba, y se fue a

otra sala. Ahí solo estaba una

mujer muy vieja y con trenzas: era

sin duda Mamá Noel y Caperucita

dijo:

-Perdón, -la viejita se fijó en ella- no

quería molestar, pero… ¿Sabe usted dónde está Papá

Noel?

-Sí, está en el trastero. Se va por fuera -le indicó Mamá

Noel.

Por fin Caperucita encontró a Papá Noel

y le contó su problema con el lobo y

Papá Noel la dio una campana y dijo:

-Úsala si el lobo te molesta y acudiré a

ayudarte.

-Vale, si me molesta te llamaré.

Sira