cuentos de hÁbitos para niÑos y niÑas....había una vez un enorme elefante llamado flipy, al que...

18
COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos. Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS.

Upload: others

Post on 05-Apr-2020

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

CUENTOS DE HÁBITOS PARA

NIÑOS Y NIÑAS.

Page 2: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

NEO NO LE GUSTA HACER EJERCICIOS

Había una vez un pequeño ratoncito llamado Neo, al que le gustaba

pasar todo el día acostado en su cama, mirando televisión o jugando

con su computador.

Eran las vacaciones de verano y Neo tenía un mes libre del colegio,

así que no salía de su pieza ni para comer. Un día su mamá le tocó la

puerta de su dormitorio y le dijo a Neo que se vistiera para que la

acompañara a comprar víveres en el supermercado, Neo quería ir,

pero no se podía mover de la cama, había engordado mucho, estaba

muy pesado. En eso se le apareció el papá y le dijo: Neo por no

hacer ejercicios has engordado y se ha atrofiado tus músculos, si

quieres recuperarte debes ejercitarte.

Neo se asombró y el papá continúo: si prometes dejar de ser

perezoso y hacer ejercicios te prometo que te puedo ayudar. Neo

pensó hacer ejercicios a cambio de poder moverse e ir a donde

quiera, cuando quiera me parece muy bien.

Entonces le contestó al papá con un ¡SI ¡ y el padre lo ayudó. Al

sentirse ágil y con menos peso sonrió le dio las gracias a papá ratón

y continuo haciendo ejercicios todo los

días, después de todo podía hacer

ejercicios mirando sus programas favoritos

de televisión, decidió ese mismo día

activarse. Ahora Neo goza de buena salud

y todas las tardes se ejercita un poco.

Page 3: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

FLIPI NO LE GUSTA ABRIGARSE

Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba

jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se

encontraba con su vecina y juntos jugaban toda la tarde.

El invierno estaba llegando y empezaba a hacer frio sin embargo

Flipy igual salía a divertirse pero a diferencia de su vecina no se

abrigaba.

Un día Flipy estaba jugando y empezó a caer la nieve, sin darle

importancia Flipy siguió jugando. Al día siguiente se despertó muy

enfermo, estornudaba sin parar, en eso apareció la abuelita y le

dijo: Flipy por no colocarte tu polerón pescaste un resfriado sin

embargo si prometes abrigarte cada vez que salgas a jugar,

prometo darte un remedio para sanar pronto.

Flipy pensó no me gusta abrigarme pero si eso evita que me

enferme prometo hacerlo de ahora en adelante, entonces contesto

a la abuelita con un sí y se tomó el remedio. Al sentirse mejor Flipy

sonrió le dio las gracias a la

abuelita y prometió colocarse

chaqueta, guantes y gorro cada vez

que hiciera frio.

Ese mismo día se abrigo y salió a

jugar con su amiguita y los dos se

divirtieron mucho bajo la nieve.

Page 4: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

SILVESTRE NO SE CEPILLA LOS DIENTES

Había una vez un gatito llamado Silvestre al que le gustaba comer

de todo, comía sopa, pollo, arroz, puré, pescado y siempre

terminaba con un dulce de postre: caramelos, chupetes, tortas,

chicle, chocolate o cualquier dulce que pasara frente de su boca.

Contaba con cuatro hermosos y afilados dientes, los que Silvestre

luego de comer no se cepillaba.

Al pasar algunos días Silvestre dejo de comer porque le dolía

mucho la boca, veía los platos pero nada, el dolor era tan grande que

no lo dejaba comer incluso su postre favorito lo miraba he intento

darle un mordisco pero no pudo le dolía mucho la boca.

En eso se le apareció el hada de los dientes y le dijo: Silvestre tu

boca ha sido invadida por los gérmenes y he venido a ayudarte,

haber Silvestre abre la boca, cuando abrió la boca tenía todo

lleno de gérmenes de toda clase y un fuerte olor, entonces el hada

dijo a Silvestre: para ahuyentar los invasores necesitamos cepillo

dental, limpiador de lengua y pasta dental.

Entonces Silvestre con todos los

implementos comenzó a limpiarse y

cepillarse, ya no había gérmenes en su

boca. Bueno Silvestre, ya has aprendido,

que debes lavarte los dientes después de

cada comida, si no te lavas volverán a

invadirte los gérmenes y no podrás comer

tu postre favorito, Silvestre aprendió la

lección.

Page 5: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

QUIERO CARAMELOS

Bea y Luis eran dos hermanos que disfrutaban mucho jugando

juntos. Todos los viernes sus papás podían coincidir en casa y

decidían llevar a los niños a jugar al parque. Se iban los cuatro a la

calle, los hermanos con sus bicis y sus balones para jugar con el

resto de los niños.

Cuando el sol se iba del cielo, los papás iban a otra zona del barrio

donde había una terraza, mientras los papás se tomaban un

refresco los niños jugaban con el resto de los niños del vecindario.

Aquí era cuando empezaban los conflictos.

Cada vez que Luis miraba la pastelería no se podía controlar.

Miraba con deseo las tartas de dulces que tenían presentadas.

Deseaba con ganas comer dulces, las que tenían forma de plátano

eran sus favoritas. A Bea también le gustaban los caramelos, pero

entendía que ya habían comido y que sus padres, como todos los

viernes, no les darían dinero para caramelos o les daría dinero para

unas pocas y debían repartirlas entre los dos.

Luis era muy insistente y no solía escuchar a Bea, se acercaba a la

mesa donde estaban sentados sus padres y les decía:

-Papá, ¡quiero caramelos! Es viernes. Ya hice todos los deberes.

-A ver cariño, ya comiste chocolate en casa. Si hay chocolate no hay

caramelos. Es mucho dulce.

-¡Noooooo! -gritaba Luis con frustración-. No es justo. Bea dilo tú,

¡Queremos caramelos!

Ante la negativa de los padres Luis lanzaba su balón lo más alto que

su corta edad le permitía.

Page 6: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

-No entiendo por qué no puedo comer dulces como los demás.

Al final los dos hermanos siguieron jugando y al poco tiempo se

fueron del parque.

Al viernes siguiente volvió a suceder lo mismo. Luis insistió a sus

padres para tener unos cuantos caramelos. Esta vez mamá le dijo:

-Hoy no has comido chocolate. Te voy a dar unas monedas y

compras algo para los dos

-Bea entró en el kiosco con Luis y compraron sus caramelos. Pero

para Luis no fue suficiente. Volvió a la mesa y siguió pidiendo porque

le parecía poco.

-Luis se acabó. No hay más caramelos. El azúcar no es bueno para

los dientes y tampoco para el estómago. Además, luego no cenas.

Luis se fue llorando y un niño se acercó y le dijo:

-Toma Luis, no quiero mis dulces -le tendió una bolsa con caramelos

y otra con chicles.

Luis las tomo y antes de que Bea llegara a su lado se puso a

comerlas. Cuando acabó siguió jugando tranquilamente.

Cuando llegó la noche, algo le pasó, con un dolor terrible se

despertó en la cama. Luis se levantó llorando y llamó a sus padres.

Cuando indicó donde estaba su dolor señaló un

diente.

-Luis, este dolor es porque hay un diente malito

por no cuidarlo y comer azúcar. Tenemos que ir

al dentista.

Cuando el dentista cuidó su diente y ya no tuvo

dolores Luis entendía que no podía comer muchos

caramelos cuando quisiera.

Page 7: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

EL LADRÓN DE COLIFLORES

En el comedor del colegio de Pablo comían 300 niños a diario. Los

menús eran muy variados. Todos los días había algo de verdura. Al

vapor, asada, a la parrilla, guisada…. De todas las formas, siempre

divertidas y saludables. A Pablo le encantaba la coliflor. Era

extraño, porque normalmente los niños la detestaban. A él le

gustaba de todas las maneras: gratinada, con aceite de oliva, con

pimentón o en ensalada.

Cada mes, el primer día de clase, cada niño recibía un papel con el

menú del mes entero. Era algo muy útil para que sus padres se

pudiesen organizar en casa. Por ejemplo, si un día comían merluza en

el colegio, por la noche cenaban lentejas y, si comían pasta, por la

noche tomaban sopa.

Todos los meses había como mínimo dos días de coliflor en el

comedor del colegio. Un día, de repente y sin explicación, la coliflor

desapareció del menú de la escuela. Después se esfumó también de

las tiendas del pueblo y de los restaurantes. Al día siguiente, en la

portada del periódico local, Pablo leyó el siguiente titular en letras

enormes:

Desabastecimiento generalizado de coliflores en la provincia. Los

investigadores tratan de encontrar una explicación a tan extraño

suceso.

La cuestión es que todas las coliflores de la provincia habían

desaparecido de los huertos y los invernaderos. También las

Page 8: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

semillas de los viveros, así que no se podían volver a plantar de

nuevo. La investigación tardó solo un par de semanas en dar sus

frutos.

Resulta que un chico del pueblo, que de niño odiaba profundamente

la coliflor, se había encargado de hacerlas desaparecer. En la

comisaría explicó que de pequeño le obligaban a comerla y que por

las noches tenía pesadillas con coliflores gigantes y con enormes

dientes. Decía que le daba tanto asco esa verdura que no quería que

nadie pasase por lo mismo, que ningún niño tuviese que comerla a la

fuerza.

Al final, reconoció que se había equivocado, que lo inteligente era

dejar a la gente decidir si comer o no coliflor. Como conservaba

todas las semillas en casa, las devolvió y pronto las plantaciones de

la comarca tuvieron coliflores de nuevo.

Pablo pudo volver a disfrutar de su

verdura favorita y de todos sus

beneficios para crecer sano y fuerte.

Page 9: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

EL LAGARTO PÉREZ

El Lagarto Pérez se buscaba una y mil formas de engañar a su mamá

para no lavarse los dientes ningún día.

Inventaba todo tipo de engaño como decir que le había entrado un

horrible dolor de estómago después de comer, que había quedado

con los compañeros del colegio para hacer un trabajo en grupo y

llegaba tarde… incluso se metía en el baño y dejaba correr el grifo

de agua un rato para que pareciera que se estaba lavando los

dientes, si estaba tomando el sol y veía asomarse a su mamá con el

cepillo de dientes, se escondía rápidamente entre las rocas o en

algún arbusto.

Pero su mamá que tenía mucho olfato para estas cosas y sabía que

su hijo no se lavaba los dientes a diario porque su pasta dental le

duraba meses y meses y nunca se acababa.

Al lagarto le gustaba mucho comer galletas con insectos y

caramelos de mosquito. Su pasión eran las arañas bañadas en

chocolate y los caracoles con miel. Como su mamá sabía que el

azúcar era muy malo para los dientes y le daba manzanas para

almorzar en el colegio, pero Pérez con sutileza se las olvidaba

siempre en casa.

- Pérez, tienes que lavarte los dientes – le decía su mamá tras la

comida.

- Lo siento mami, pero no puedo perder un minuto porque tengo que

estudiar para el examen de mañana. ¿O es que no quieres que saque

buenas notas? - le decía poniendo carita de bueno.

- Pérez, hay que lavarse los dientes después de cada comida y más

aún si has comido azúcar – insistía su mamá.

Page 10: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

- Pero mami si ya me lavé los dientes ayer... – respondía con una

mentira Pérez.

El lagarto Pérez era astuto para crear mentiras tratando de

engañar a su mamá y a sus amigos, pero más maña tendría su mamá

para conseguir que por fin se lavara los dientes a diario. Como sabía

que a su hijo le gustaban los dulces, compró pasta dental con sabor

a fresa y olor a chocolate, en vez del tradicional de menta. Y como

le apasionaba la música, consiguió un moderno cepillo de dientes que

emitía sonidos.

- ¡bieeeen! ¡Que buen cepillo de dientes mami! ¡Y qué pasta más rica!

¡Sabe a fresa!

- Me alegro de que te guste, Pérez, pero ahora ya sabes lo que

tendrás que hacer. Tienes que lavarte los dientes.

Así la mamá de Pérez consiguió que se cepillara los dientes durante

dos minutos tres veces al día. Sobre todo antes de acostarse. Y que

siempre llevara en su mochila un cepillo y un tubo pequeño de pasta

junto con un vasito. Con el tiempo también comenzó a usar enjuague

bucal y hasta hilo dental y visitó de forma periódica al dentista.

Pérez logró tener unos dientes relucientes, y un día le dijo a su

mamá:

- Mami siento haberte mentido y

haberte dicho que me lavaba los

dientes cuando no lo hacía… no

volveré a hacerlo jamás.

Page 11: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

EL REY QUE SOLO COMÍA PASTEL DE CHOCOLATE

Había una vez un reino gobernado por un rey al que le encantaba el

pastel de chocolate. Tanto le gustaba que lo comía a todas horas.

Incluso había ordenado a los cocineros que utilizaran el pastel de

chocolate como ingrediente para todos los platos.

Los cocineros reales hacían sopa de pastel de chocolate, croquetas

de pastel de chocolate, sushi con pastel de chocolate, salsa de

pastel de chocolate para acompañar la pasta, el pescado y la carne.

Pero un día, el rey se puso muy enfermo. Ante el temor de ser

castigado si le recetaba otra cosa, el médico le recetó jarabe de

pastel de chocolate. Pero el rey no mejoró, sino que se puso peor.

En ese momento coincidió que pasaba por allí una vieja hechicera

conocida en el mundo entero por haber sanado a otros reyes. Como

los médicos reales no encontraban remedio para curar al rey,

fueron a buscar a la mujer.

La hechicera visitó al rey. Cuando entró en su dormitorio se

encontró a un hombre inmensamente gordo y pálido que devoraba

con muchas ganas un enorme pastel de chocolate.

- ¿Cuál es su opinión señora? - preguntó el médico a la hechicera.

- Tranquilo, esto tiene remedio -dijo la hechicera-. Iré a la cocina a

preparar una poción mágica.

Tras comprobar que en la cocina no había nada de lo que necesitaba,

envió a un mensajero a comprar los ingredientes.

Cuando la hechicera entró en el dormitorio del rey con la poción

mágica en la mano, todo el mundo se puso a temblar. Aquello no

tenía el color del pastel de chocolate y eso no iba a gustar nada al

rey.

Page 12: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

- ¡Esto no lleva pastel de chocolate! -dijo el rey, muy enfadado.

- Tómalo, señor. Cuando lo termines puedes tomar un poco de pastel

de chocolate-dijo la hechicera.

- ¡Mmm! ¡Qué maravilla! -dijo el rey-. ¿Puedo tomar un poco más?

- Por supuesto. -dijo la hechicera mientras llenaba el plato del rey.

- Toma esta poción todos los días para comer y para cenar- dijo la

hechicera-. Volveré en un tiempo para ver cómo estas.

Cuando la hechicera regresó, el rey estaba mucho mejor. Ya se

había levantado de la cama y había perdido un poco de peso.

- Dime, ¿qué tenía la poción que me has dado, buena hechicera? -

preguntó el rey.

- A decir verdad, no era más que una simple sopa de pollo, señor -

respondió la hechicera-. Espero que de ahora en adelante comas

algo más que pastel de chocolate. Puedes tomarlo si quieres, pero

con moderación si no quieres volver a caer enfermo. Les dejaré más

recetas a tus cocineros.

- ¿Recetas? Quieres decir más pociones, ¿no? -preguntó el rey.

La hechicera se río, y dijo: si eso.

Desde entonces, el rey siempre tomaba alguna de las exquisitas

pociones mágicas de la hechicera. La

poción de sopa de verduras le gustaba

casi tanto como la poción de sopa de

pollo. Aunque la que verdaderamente le

volvía loco es la poción de zumo de

naranja que se tomaba por las mañanas.

El pastel de chocolate no salió de la

Page 13: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

dieta del rey, pero pasó a tomar solo un poquito de vez en cuando

como postre.

LA POCIÓN DE LA MALA VIDA

Hace muchos, muchos años, todas las personas estaban fuertes y

sanas. Hacían comidas muy variadas, y les encantaban la fruta, las

verduras y el pescado; diariamente hacían ejercicio y disfrutaban

de lo lindo saltando y jugando. La tierra era el lugar más sano que

se podía imaginar, y se notaba en la vida de la gente y de los niños,

que estaban llenas de alegría y buen humor. Todo aquello enfadaba

terriblemente a las brujas negras, quienes sólo pensaban en hacer

el mal y fastidiar a todo el mundo.

La peor de todas las brujas, la malvada Caramala, tuvo la más

terrible de las ideas: entre todas unirían sus poderes para inventar

una poción que quitase las ganas de vivir tan alegremente. Todas las

brujas se juntaron en el bosque de los pantanos y colaboraron para

hacer aquel maligno hechizo. Y era tan poderoso y necesitaban

tanta energía para hacerlo, que cuando una de las brujas se

equivocó en una sola palabra, hubo una explosión tan grande que

hizo desaparecer el bosque entero.

La explosión convirtió a todas aquellas malignas brujas en seres tan

pequeñitos y minúsculos como un microbio, dejándolas atrapadas en

el líquido verde de un pequeño frasco de cristal que quedó perdido

entre los pantanos. Allí estuvieron encerradas durante cientos de

años, hasta que un niño encontró el frasco con la poción, y creyendo

que se trataba de un refresco, se la bebió entera. Las

microscópicas y malvadas brujas aprovecharon la ocasión y aunque

Page 14: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

eran tan pequeñas que no podían hacer ningún daño, pronto

aprendieron a cambiar los gustos del niño para perjudicarle. En

pocos días, sus pellizquitos en la lengua y la boca consiguieron que el

niño ya no quisiera comer las ricas verduras, la fruta o el pescado; y

que sólo sintiera ganas de comer helados, pizzas, hamburguesas y

golosinas. Y los mordisquitos en todo el cuerpo consiguieron que

dejara de parecerle divertidísimo correr y jugar con los amigos por

el campo y sólo sintiera que todas aquellas cosas le cansaban, así

que prefería quedarse en casa sentado o tumbado.

Así su vida se fue haciendo más aburrida, comenzó a sentirse

enfermo, y poco después ya no tenía ilusión por nada; ¡la maligna

poción había funcionado! Y lo peor de todo, las brujas aprendieron a

saltar de una persona a otra, como los virus, y consiguieron que el

malvado efecto de la poción se convirtiera en la más contagiosa de

las enfermedades, la de la mala vida.

Tuvo que pasar algún tiempo para que el doctor Sanis Saludakis,

ayudado de su microscopio, descubriera las brujitas que causaban

la enfermedad. No hubo vacuna ni jarabe que pudiera acabar con

ellas, pero el buen doctor descubrió que las brujitas no soportaban

la alegría y el buen humor, y que precisamente la mejor cura era

esforzarse en tener una vida muy sana, alegre y feliz. En una

persona sana, las brujas aprovechaban

cualquier estornudo para huir a toda velocidad.

Desde entonces, sus mejores recetas no eran

pastillas ni inyecciones, sino un poquitín de

esfuerzo para comer verduras, frutas y

pescados, y para hacer un poco de ejercicio. Y

Page 15: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

cuantos pasaban por su consulta y le hacían caso, terminaban

curándose totalmente de la enfermedad de la mala vida.

EL ESTORNUDO SANO

¡A quién se le ocurre estornudar delante de un libro de magia!

¡Todas las letras volando! - gruñó mamá troll.- Ahora que estábamos

a puntito de encontrar el hechizo para volvernos guapos… - se

lamentó papá troll.- ¿Qué tal han caído las letras? - preguntó

Trolita - ¿Se puede leer el libro, han quedado desordenadas?-

Hummm, a ver, que vea… ¡peor!, no sirve para nada, se ha convertido

en un libro de recetas… ¡Grrrrr! ¡Pero qué mala suerte! - rugió papá

troll tirando el libro por la ventana.Era normal que estuvieran

enfadados. La familia troll había vivido una gran aventura para

conseguir aquel libro mágico. Era su única opción para dejar de

asustar a todos con su horrible aspecto. Pero un libro mágico es

algo muy delicado, y papá troll era tan bruto…Estropeado el libro,

tuvieron que aceptar su aspecto y seguir con su vida. Pero como no

tenían más libros, la pequeña Trolita decidió quedárselo y preparar

algunas de sus recetas.- ¡Puajjj! No nos gusta esto. A partir de

ahora te comes tú sola los platos de ese libro - gruñeron papá y

mamá troll. Tiempo después pasó por allí un valiente caballero de

brillante armadura. Al ver a Trolita junto a sus padres, gritó:- ¡No

temas, princesa! ¡Yo los libraré de esos horribles trolls! Por

supuesto, fue el caballero el que no se libró de un buen porrazo.

Estaba aún tendido en el suelo cuando Trolita vió el reflejo de la

armadura. En su casa habían roto todos los espejos hacía tiempo,

Page 16: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

así que sentía curiosidad. Se acercó para mirarse, y no pudo creer

lo que vio ¡Parecía una niña normal! Se miró varias veces y sí, tenía

que ser ella, pero

¿cómo había dejado

de ser un troll?

El misterio no duró

mucho. Pronto

descubrieron que

ninguno era un troll,

pero que comían tan

pocas frutas y

verduras que no

veían bien, ni se

curaban sus heridas,

ni nada de nada… ¡por

eso tenían tan mala

pinta! Y claro, en

cuanto Trolita había

empezado a comer

las recetas de aquel

libro de verduras, se

había quedado estupenda.- Hubiéramos preferido la magia, pero

dejar de parecer trolls comiendo tus recetas tampoco nos costará

tanto -terminaron diciendo los papás de Trolita.

Claro que no les costó; enseguida se acostumbraron y les gustaban

muchísimo. Y cuando se hubieron aprendido todas las recetas,

Page 17: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

buscaron algún niño anti verduras para regalarle el libro y evitar

que acabara teniendo pinta de troll.

TOMY NO QUIERE ESTUDIAR

Había una vez un alegre niño llamado Tomy, al que le encantaba

jugar con todos los juguetes que tenía en su pieza. Sacaba todos

sus juguetes y materiales de entretención y se divertía mucho

incluso usaba sus materiales del colegio solo para jugar dejando

todo en el suelo hasta que se cansaba y se quedaba dormido en

medio de todo sus juguetes.

En la tarde despertó bruscamente y recordó que tenía que hacer la

tarea del colegio, pero su dormitorio estaba tan desordenado que

no encontró sus materiales del colegio y no pudo seguir jugando

pensando en que no podría llevar la tarea al colegio y se puso muy

triste.

En eso apareció su mamá y le dijo: Tomy por estar jugando y dejar

todo desordenado no hiciste la tarea y no encuentras tus

materiales, vamos juntos a guardar cada cosa en su lugar y te

aseguro que encontraras todas tus cosas del colegio.

Tomy pensó mmm…si guardo todos

mis juguetes aparecerán mis

materiales del colegio y hare mi

tarea. Al terminar de guardar sus

juguetes encontró sus materiales

le dio las gracias a su mamá,

Page 18: CUENTOS DE HÁBITOS PARA NIÑOS Y NIÑAS....Había una vez un enorme elefante llamado Flipy, al que le gustaba jugar en el frente de su casa, generalmente cuando salía se encontraba

COLEGIO LUTERANO TRANSICIÓN I Verónica Arancibia- Macarena Lagos.

Objetivo: Excelencia Personal y Calidad Aprendizajes. Misión: Educar en y para la VIDA. Visión: Vivir de acuerdo al Modelo de JESÚS

comenzó hacer su tarea y prometió hacer la tarea antes de jugar y

ordenar cada vez que sacara sus juguetes porque después de todo

no era tan difícil ser ordenado.