cuento de cuentos - quevedo

7/27/2019 Cuento de Cuentos - Quevedo

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Francisco de Quevedo


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Francisco de Quevedo

Cuento de cuentos.

donde se leen juntas

las vulgaridades rsticas, que anduran en nuestra habla,

barridas de la conversacin.

A Don Alonso Messa de Leyva.La habla que llamamos castell

romance, tiene por dueos todasnaciones, los rabes, los hebreos,


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griegos. Los romanos naturalizarona victoria tantas voces en nuedioma, que le sucede lo que a la c

del pobre, que son tantos los remienque su principio se equivoca con ellEn el origen della han habl

algunos linajudos de vocablos, desentierran los huesos a las voces; ms entretenida, que demostradadicen, que averiguan lo que inventan

Tambin se ha hecho tesoro deengua espaola, donde el papel es que la razn; obra grande, y de erudidesaliada.

Ninguno ha escrito gramticahablamos la costumbre, no la vercon solecismos, el alma decimossupuesto que el alma bueno, no se p


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decir; el que es artculo masculino, hser la, y pronunciar la alma.

No quiero nada, peca en lo dedos negaciones, y debe decirse: Qunada.

Bien considerable es entremetimiento desta palabra, meque se anda enfadando las clusulapasendose por las voces, eternamricamente, gloriosamente, altame

santamente, y esta porfa sin fin. necedad tan repetida de togualmente, cosa, que algn lector se

quiera excusar de no haberla dicMalhablado llaman al que habla habindole de llamar, mal hablador.

Mire lo que le digo, decimos topor igame; pues no se parecen los


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las orejas. Aqueste, por este; agpor ahora: son infinitas las voces, pudiendo escoger, usamos lo peor. cosa como ver a un graduado, con barbas, que textos, decir enfurecVoto a Dios, que se lo dije de pe a Qu es pe a pa, licenciado? Y penmendarlo, dice, que se est erre aodo el da. Qu ser, no dar a uno

sed de agua, que tan frecuente se oy

as quejas de los amigos, y de criados? Y hacer bailar el agua delaes a propsito?

Encarece uno su verdad, y dice:e dije dos por tres. Y decir dos por

quin negar, que no es decir una por otra? Haba de decir: Yo le dijepor dos.


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Pues uno, que encareciendodiligencia, dice, que vino en santiamn!, deben de tener santiamenes gran paso. Y los que encarecer su prudencia, dicen, quescogieron a moco de candil? Mqu juicio tendr un moco de capara escoger!

Un enojado, que dice a otro, qurae sobre el ojo, es, con perd

lamarle nalgas. Que para decir quatiende, lo propio era traer los sobre l. Y el blasn tan presumidoener sangre en el ojo, ms den

almorranas, que honra. Y piedoblado, si lo juzgan los pujos; hacartas, y callen barbas, sin haber qhaya odo decir a las barbas, esta b


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es ma, aun cuando las caldean, yrapan; qu de hombres se hamojigatos, y nadie sabe qu son egatos moji!Verse, y desearse, no pas

arciso. Poner pies en pared, no sde nada, y yo lo he probado, vinden trabajos, como oa decir: no hay poner pies en pared!, y slo sirverepar, o dar de cogote. Andar la b

sobre el hombro, quien lo tuviere buen consejo, lo pruebe, y andar hcorderito de Agnus Dei. Diome remoquete, es ddiva de catarro.

Llevar la soga arrastrando, dque es la mayor desdicha. Yo he llevarrastrando sogas, y hallo que es que la soga, lleve arrastrando al hom


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Para decir, que uno es muy malo, dique ni teme, ni debe, puede ser mnecedad? Pues slo es bueno el queme, ni debe? Haban de decir: queme, ni paga. Y esto pregntenselo

mercaderes, y a todos los que fanme lo harn creer cuantos aran, y caConsidere vuesa merced, qu letra

o telogos, busc, sino gaanes! Vmerced ha visto algn bazo cagado?

o no s por dnde entran a proveersun bazo. Hay cosa tan mortal como Ms han muerto de zas, que de enfermedad. No se cuenta pendenque no digan: y llega, y zas, pistacay luego.

No es el mundo tan grande coris. Todo est en un tris. Y no hay


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rises. Estaban en un tris. Estuvo todciudad en un tris. Todo el reino esten un tris. Y espantaranse de quFnix sea una, siendo el tris siempre?

Y aquellos majaderos msique se van cantando las tres namadre, que no cantarn las dos, siqueman, ni la cuarta?

Considere vuesa merced el b

alle destas voces, que se nos hareacias en la lengua, y no las podeescupir: Zurriburri, a cada triquraque barraque, zis, zas, zipizap

barrisco, irse a chitos, chichota, cononce de oveja, trochemoche, y cochervite.

Es decir, que no tien


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desvergenza para deslizarse en historia, y entremeterse en un Sermestn ya tan halladas, que pocas pluas desdean.Y para ver a cul mendiguez

reducida la lengua Espaola: consivuesa merced que si Dios, por su infmisericordia no nos hubiera dado edos voces; ahora bien, nadie se pudr, ni se despidiera de una conversac

Todos dicen: Ahora bien, ya es hAhora bien, ya es tarde. Ahora bienvuesas mercedes querrn cenar. Y hombre, que por no acordarse delladetiene, hasta que enfada, y mata; opando con su ahora bien, se va.

Yo, por no andar rascando enguaje todo el da, he que


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espulgarle de una vez en esta jorndonde yo slo no tengo que hacer. Yeste cuento he sacado a la vergeodo el asco de nuestra conversacque si no tuviere donaire, ni merec

alabanza no carece de estimacinrabajo, en recoger tan extra

desatinos. Ahora va este papel hacieugar a obra ms de veras, en que trani s si tan docto como desvergonz

que ni sabemos deletrear nuecartilla, ni razonar con la pluma.anto vuesa merced, que hace bu

acogida a mis borrones, se diviertenga larga vida, con buena salud.

Monzn 17 de Marzo de 1626.Don Francisco de Quev

Villegas


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cuento de cuentos

Ello se ha de contar; y si se hacontar, no hay sino sus manos a la oDigo pues, que en Sigenza habahombre muy cabal, y machucho, dizque se deca Menchaca, de muy bcepa. Estaba casado con una mujeesta mujer era mujer de punto, y grave que otro tanto: Llmese comlamare. Tenan dos hijos, que co

digo, gran pintiparados; y no le quitpizca al padre. El uno dellos era la

del diablo; el otro, un chisgarabcada da andaban al morro, por qutall esas pajas. El menor era vivo, cuna cendra, y amigo de haracamundanas, y baladrn. El padr


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senta a par de muerte, mas l, ni esas, ni por esotras. El mayor hombre de pelo en pecho, y echabbofe por una mozuela, como un pinoro, delicada, ve me no me tenalharaquienta. Era viuda, y su marcomo digo de mi cuento, muri; y dise tuvo barruntos, que ella le haba dcon la del martes. Estuvo en un trisuceder una de todos los diablos

padre, que era marrajo, lloraba hihilo, e iba, y vena en estas, y esotraY un da, entre otros, que le

ugar la murria, le dijo su parecer da pa; y seco, y sin llover, mandle se metiese en un convento. Al proella le cerro de campia; y allestuvieron herre que herre muchos


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hasta que el padre, que ya estatufado, la dijo; que por tantoscuantos, que haba de hacer, y acontever, veamos si han de ser tijeretas; ustos y en verenjustos, dio con elluna recoleccin. Era la Pupilera mde chapa, y no amiga de carambolas,Licenciado persona de tomo, y lomomoza que vio esto, viene, y toma, y hace?; y sin ms, ni ms, como quie

quiere la cosa; escribe a su galn, quandaba con mosca, dicindole, que era agua de cerrajas, y que ella hpuesto pies en pared; y que quisieseno quisiese , se ira con l al cabomundo cantando las tres nades maque atase el bien su dedo, y se riesoda la zalagarda, y traque barraqu


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s Seor.Pues el diablo del mozuelo,

estaba ms enamorado, que otro tanestaban sobre las afufas; como seseor del argamandijo, no haca ma trochemoche escribirla billetes, y billetes, y ella leer, que leers, a to

a locas. Pues como digo, yendo dviniendo das, la Pupilera, que tpulgas, solt la tarabilla, y la

rasamente, que ella era mujer de saen el ojo, y que con ella no hchncharras mncharras, que anduvcon pie de plomo, y la barba sobrhombro, porque de manos a boca hun hecho que fuese sonado. La mozque era sacudida, casi, casi estuvo envedijarse con ella, y levantar


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cantera de todos los diablos. Ellaresolvi en decirle, que para qu antos arremuescos, y dingolondan

siendo todo un papasal; y sepa, questoy el agua hasta aqu. Haca graextremos, diciendo, que bien entendzangamanga. La Pupilera lo quiso ma barato, negando a pie juntillas cuella haba dicho. El otro hermanillo,se vena al husmo, se hizo mequetre

faraute del negocio, y por apaciguaempez a darlas ripio a la mansabiendas.

La Pupilera se haca calorando, de ver el murmullo, yabaola, que haban metido en su c

El hermanillo, por desmentir espaempez a traer la mano sobre el cerr


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en estas, y esotras cata que hacediablo; htelo el padre, sin ms, ni atolondrndose todos, y en volanlegaron a las inmediatas. Dijronsenombres de las fiestas, si ha de salir

ha de salir. Yo saldr, dijo la viuzurriando como un rayo; mas para Aqu fue ello, que como la mala mno las tena todas consigo, empezartalear, y dizque dijo: Qu ha

haber? Miren quien se mete en docYo la aseguro, que ha cado la viuen el mes del obispo. Tanto monta, a mozuela; y replica la Pupilera, no

el alba. El hermanillo, viendo andaban al morro, voto a tal, y a cque todo lo haba de llevar a barriQue es a barrisco, en mis barbas?,


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el padre: y casi lleg a punto crudLicenciado, cuando andaba el zipizMetilos en paz, mas a cada triqandaban a ma sobre tuya. Y viendpelotero, llevsela el padre a su cporque no se metiese en dibujos. Ylegando tris tras a la puerta, el vena barruntos de que un hermano d

mozuela, que no la quitaba pinta, y tmuy malas maas, enguizgaba

negocio, no quiso abrir. Esto fuediablo, que empez a decir (y ahorno acaba) que no haba de dejar r

ni velloso ni piante, ni mamante, yos haba de traer al retortero a todo

salga si es hombre. El pobre Padrehaca sino chitn, como entendabusilis. La hija, que oli el post


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henda un cabello en el aire, escurrbola, temiendo, que el padre la meneel zarzo; qu hace?, sino vase a chEl picarn, por no hacer borrumbada, dijo: Arda Bayona!, y esourronazos no con miquis, y acogies

calla callando. Iba la hija saltabardales, sin decir oxte, ni moxtebusca del bribn, corriendo a putpostre, con la lengua de un palmo.

Desto los vecinos tomaban el ccon las manos, y se desgaifabanandaban unos en pos de ozahirindose. No nos hable consonantes, dijo uno, que al cabcabo, ha de venir a la melena.

Deca ella, no dijera ms patetahe de hacer mi gusto, y esotro es cos


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morenos, y no quiera cuentos serranos. Y de una hasta ciento, qudescalzaban de risa de ver al vhecho de hieles; y a ella, que se ibcencerros tapados, con un zurribrefunfuando.

El Licenciado, que pens quemorda en un confite, y que eran carne, con mucha sorna se vino msobre mano, hecho gatica de J

Ramos, diciendo entre si: Yo la haral por cual, que muerda en el ajopadre que le vio venir lo de mi suege traa entre dientes, empieza a

voces y alaridos, y alza Dios tu ira; ydiestro, y a siniestro le puso del lasindosele de los andularios, quepedan desengarrafarle, segn ten


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hincha con l.El Licenciado daba los gritos.,

os pona en el Cielo, mas no se doen las pajas. All fue ella, quecompaero, viendo, que andabanpescuezo, le dio un pan como unueces, sin irle, ni venirle. A la tabse entr un vecino con sus onceoveja, muy sobre faltado, y de hoz, coz se meti donde no le llama

Quiso embestir, mas el bribn phaldas en cinta. Dijo el pobrete: yohombre de pro, y conmigo no hay leYo, pajas!, dijo el bribn, y asentlanto. El pobre no chist, ni misti

volvise dado a perros, y jurando, e haba de dar su recado; y sobre

hubo la mayor turbamulta del mundo


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Mas viendo la mozuela, quebribn la daba en el chiste, estuvacurrucada, por excusar dimes, y dir

El picarn andaba listo, como ugadera, de ceca en meengolondrinado, dndose tantas ancho, como en largo, que le pohender con una ua.

Esto ha de dar un crujido, dijhermanillo, que estaba de manga

padre pensaba, que tena el oro, moro, y estbase en sus trece, dicieque si le hacan, haban de ir rocmanzanas, con todos los diablos, y de la oseta.

La viuda, y el que nos vendigalgo, digo, el bien hadado del novidieron sendos remoquetes, acerca


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casamiento, que se estaba en jerga.Era el bellaco socarrn, y ma

hablado, y dijo, que no le cagasenbayo, que no era barro casarse, y quno se haba de casar a medio mogatemas de llegar; y zascandil, a osadas,o entiendo todo.

Salt el Licenciado, y djgentil chirrichote!; danle una m

como mil relumbres, hija de sus pa

ms rubia que las candelas, que no o que fe tiene, echa de cera, quviene de molde, y hacese de penPara que es tanto lilao? Sino a cegarritas, djese de recancanillacsese, pues le viene muy ancha.

Atolondrado el novio, as cooy decir, que le vendra muy an


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dijo: Tras que me venga muy ancho ao, djenme, que lo meter todo

venta de la zarza, y volvermos nueces al cantaro.Psose el bribn ms colorado unas brasas, y dijo : Que llevado bien, haran dl cera, y pabilo, y qudira todo lo que deseaba saber, faltar chichota.

El bergantn le dijo dos por t

que menta; y sino lo ha vuesa mepor enojo, se tornaron a envedijaandaban al pelo.

El Licenciado, que vio barahnda, echolo a doce: El hermacasc la molleta al cuado. Toandaban hechos una pella, y al estric

Pues ve aqu vuesa merced,


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sino es por la viuda, el Licenciado pel pato, con todo su apatusco. El ecde vicio, y ella le cantaba la sodiciendo: Que ms quera andarse flor del berro, y que me se yo.

En esto estaban, a toca, no tcuando a la zacapela, que traa la gbahna, vino un alguacil en santiamn, y un escribano en volanraspahilando, y dijeron: Que de atr

raan sobre ojo, y que no dejaranembocar la moza en la crcel, por tos haberes del mundo, que bastab

mueca.El Licenciado replic, que no

haba de hacer todo cochite hervMirbale de hito en hito el hermanEl escribano estaba con el ojo tan la


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o estoy de gorja, dijo el padre, nimamo el dedo.

Empez el maridillo a ecverbos; alguacil en mi casa? Y en ba, y vena. Yo traigo un mandamian gordo, que no vengo a humopajas, dijo el Escribano.

Mandamiento?, dijo el Licencio me lo harn en creyentes cua

aran, y cavan; y sobre esto se bati

cobre lindamente.Dijo el alguacil: Yo no doy brazo a torcer. Replic el hijo: Ni yodejo agraviar en el blanco de la uesta casa no es como quiera, y mrema cara. Que quera? Llevarse

bbilis bbilis mi hacienda? Antesdejar hacer trizas; y advierta, que


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somos todos unos, y me matar; conpadre en dos paletas, y me har aic

Arda Bayona!, dijo el Alguaque estoy ya hasta el gollete, y he dhacer mi oficio. El Escribano estabmampuesto, diciendo: Que no le untel casco, que les pegara a mantinicon la de rengo.

El hermano se fue rabo enpiernas; el maridillo echando chisp

odos se quedaron en jolito. Entoncmoza habl al Alguacil muy sobre ple aconsej, que no se anduv

regodeando; y que se acordase de lmarras, y que era todo fruslera, y quhaba de tener ms as, que asado, oda era gente honrada, escogida a m

de candil, y personas de chapa.


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Alguacil gritaba, como un descosviendo que la mozuela le haba dentre ceja, y ceja con la de marraom la hincha con ella. El Escribdeca, que no se la haba de cubrir p

La madre, y el padre, que se estabms, y mejor, dijeron: Esto va de rno hay sino hacer de las tripas cora

ojo al badil girando, no me hagan,echar por esos trigos; y a toda ley,

de tuyo.No ha de mediarse esto?, dijLicenciado, viendo la escarapEmpezaron todos a encogerse hombros, y a decir, que se cruja cicosa; y que aunque no importababledo, bastaba el runrn y el qu dY que si no se estorbaba, era fuerza


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el Alguacil llevase una tunda de cocl no dijo, esta boca es ma

ieso, que tieso. Ah me las den todeca el bribn que en manos estpandero, etc. No lo dijo a sordos, ququem de orlo el Escribano, y le Para m no son menester tantas arenque s dnde me aprieta el zapato. Yque apunt la Seora, lo tengo al cdel trenzado; pero las razoncitas yo

guardar, como oro en pao. Alegropajarilla al Alguacil, y dijo: Yo meter en pretina, o podr poco. Yohar, dijo el Escribano, que me bailel agua delante, y los dejar en el de la camisa, que no ha de ser tchncharras mncharras, y bastarisca. Oy el padre lo que tratab


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dijo: Oxte puto, mas a m no se me dardite, que ni temo, ni debo, y al chabr dello con dello.

No daremos un corte en eDijo el Licenciado) cuando sabiendas, el mozuelo, muy remilgadcariacontecido, dijo: Que estaba edos aguas, y dos dedos de irse pormundo adelante, en justos, y creyentes, que estaba cansado de t

os atabales a cuestas. Quin fuistque tal dijiste? No es creble la cdel padre, pues llegndose a l le asuna tabalada. l no chist. ni mBergante! (deca el viejo) tngote c

cuerpo de Rey, comiendo mil gollodndote conejo por barba, y perdcomo tierra, y vino como ag


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repapilado, y hecho un trompo, vestias mil maravillas, la casa como

colmena, y tanto lilao? Mrame cara, que el casamiento se ha de hde haldas, o de mangas. Quitoscuentos, y no andis en tanto, cuanto, que se me va subiendo el humas narices, y conmigo no tenderis u

es, no es.Entre stas, y estotras entrose

claro en claro una fregona, concanastillo, que se vena a los ojounos bizcochos, que saben que rabiao me coma las manos tras el

Anduvimos a la arrebatia, y no fuvistos, ni odos. Traa un billete dPupilera para el Licenciado; disel dijo: Hablen cartas, y callen bar


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aqu est quien no me dejar mentir;papel deca, ni ms, ni menos. SLicenciado, ese belitre, que se hacuutem deste negocio, tiene muy mmaas, y no le alcanza la sal al aguodo es carantoas. Yo quedo la m

amarga del mundo, y echada por pues, que l, y su mujer me estn roye

os zancajos, y le advierto, que scalla, le ha de costar la torta un pa

que entiendo poco de filis, que noponga conmigo a t por t; y me cque estoy muy amostazada, de ver quhaga zorrocloco, y nos venda bulas. se guarde del diablo, que ahora es ortas, y pan pintado, y que todo es

es andarse por las ramas; y que porrmino, no hay hacer carrera conm


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que le ver la boca a la pared, y ndar una sed de agua. Levantoseremusgo, que hasta all poda llegadaban todos diente con diente, y tiritde or tales cosas.

El mozo se cisc, ms ellaestaba repantigada, a lo de mi suecomo si fuera el padre) con mu

aquel. Jur que le haba de dejarporreta, si no se casaba; y sobre

porfiaron, hasta tente bonete. El deca, que l haba hecho cala, y catnegocio, y que le haban de soar. por qu, y por qu no, teniendo cojijos, haban de obligarla a queapeldase, que se ira con el alma endientes, y los llenara de bote en boto que eran todos; y aadi, que y


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viejo estaba calamocano.Calamocano dijiste? Fue un d

uicio, y sucediera muy mal; si noechara en chacota.La mujercilla, que ya tena asodel negocio, ms engolondrinada otro tanto, empez a hacer espavientdijo: Que todo era as al pie de la lmas que no haba de ser todo echderrueca, supuesto que no haban

poder dar con ellos al traste, aunquepersiguiesen a banderas desplegadaque ms vala, que por bien se llevsu buen porqu, y se dejasen de cueEl Alguacil deca que les haba de pras con ras la casa al menorhablando de talanquera, con muchome s yo. El Escribano deca:


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callar ahora, mas yo les dar caperuza: Cada uno mire por el vidijo el Licenciado) pues ha de ir a

moler; y no echen de vicio, que poheder el negocio, ms ana que piensEl Alguacil, que vio que

Licenciado era de los del asa, y odos los dems era gente del gorduzg, que el irse, le vena a pedi

boca. Quitose el sombrero, y ni paul

maula, sino viene, y vase. El padre,vio el mal recado, fuese tras l, dacosetadas por malos de sus pecadoesto dio una estampida terrible. Ahas den todas, deca la viuda. Replic

marido: A m no se me da un ardite,con andar pie con bola, me reirodos.


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El Bribn, que vio que esto ibacapa cada, y que iban de romana, yel mozuelo traa la soga arrastrandque la muchacha no era amiga recancamusas, y que tena garabdjola: Aqu no hay sino sus, y alcasar, que estas son habas contadas.

La Viuda, por una parte no questar a diente; por otra, viendo qumozo se mora por sus pedazos, es

hecha de sal, y muy donosa, diciendaquella boca, que daba grima: maridillo cant de plano, mientraLicenciado contemplaba en musaraas: mas no se le qued corta, ni mal echada; y como tomnegocio a pechos, dijo: A m se quedaba en el tintero lo mejor. Y


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mucha pausa se fue al padre, y le Acabemos con este mazacote, que nomenester tantas zarracateras, ni aemplando gaitas. Csese, que todobailaremos el agua delante, y no se

en dibujos.l, que vio que andaba ya de c

cada, dijo: Una por una, yo me camas luego roer el lazo, y otras patochadas. Casose, y aunque la bod

hizo a somormujo, todos se repapilaEl padre le dio una linda tragantonael dote: encajole todos cuancachivaches tena en casa; y siquejaba, deca: Que hablaba ad Efe

que no se gobernase por su caletre,se quedara in pribus, que eramanaco. Y aunque call enton


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despus lloraba los quiries; y propde hablarle papo a papo, porque otrano se le subiese a las barbas. Con ecosas le meti las cabras en el corrcalla callando hizo su negocio, yhermanillo le escuchaba, hecho bausn. Estaba en cuclillas, detrs dpuerta, la recin casada, oyendomuchacho, con la oreja tan larga, y econ un tropel de los diablos. l, po

que poda suceder, vena hecho un rLa mujercilla estaba de veinticalfileres, y le dijo: Para qu se metgorra.

Dejnse de filateras, que una una, ya estn casados (dijo Licenciado) y si hablamos ms, echar el gato a las barbas,


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volveremos las nueces al cntaro.L i b e r t a dme fecit, dijo

hermanillo; y con esto se fueron tola deshilada, con muy grandes cosin respetar el coramvobis del pque daba gracias a Dios de ver acatan grande carambola.

Fin del Cuento de Cuentos

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