cuaresma juvenil 09 _temario

8/8/2019 CUARESMA JUVENIL 09 _TEMARIO

1/11

CATEQUESIS CUARESMALES Adaptados parajvenes

RUMBO A UNA CONVERSION PASTORAL

CODIPAJComisin Diocesana de Pastoral de Adolescentes y Jvenes Of. Tel. 412-37-84 ext. 11 email:

[email protected]

CUARE

SMAJUVENIL

UN PUEBLO DE DIOS EN MARCHA


2/11

TEMA 1: LLAMADOS A RENACER

Objetivo: Darnos cuenta de que, en medio de la densa oscuridad que provoca el pecado y lamaldad del hombre, la juventud desde la Iglesia est llamada a ser un faro de luz en nuestropueblo, como profetas de esperanza.

Oracin inicial:Seor Jess, sin ti no hay camino, ni verdad, ni vida ni futuro. En esta hora de sombras yde dudas, confiamos en tu luz. Nos abandonamos a tus manos poderosas. Mustranos tu favor y tencompasin de nosotros.

Ambientacin:Al inicio de la reunin, se enciende un Cirio y se coloca visiblemente sobre una mesa. Si acasose contara con un violn, se coloca junto al cirio encendido.

Introduccin:El violn desafinadoSe cuenta que con un viejo violn, un pobre hombre se ganaba la vida. Iba de pueblo en pueblo,tocando su instrumento y la gente se reuna a su alrededor. Al final de su presentacin pasaba entrelos presentes un viejo sombrero con la esperanza de que algn da se llenara con el dinero que ledaban.

Cierto da comenz a tocar como acostumbraba, se reuni la gente, y sali lo de siempre: unos ruidos ms o

menos armoniosos, pero no impresionaban mucho. No daba para ms ni el violn ni el violinista. Pasaba por allun famoso compositor y virtuoso del violn. Se acerc tambin al grupo y al final le dejaron entre sus manos elviejo violn. Con una mirada valor las posibilidades, lo afin, lo prepar... y toc una pieza asombrosamentebella. El mismo dueo estaba perplejo y lleno de asombro. Iba de un lado para otro diciendo: "Es mi violn...!, esmi violn...!, es mi violn...!".

Hermanos y hermanas, es evidente que nuestro mundo est enfermo. Muy enfermo y muy necesitado decuracin. Los sntomas que nos aquejan son muchos y muy graves:

Hay poderosos agentes de la sociedad, que promocionan el sistema de valores de acuerdo a sus interesesparticulares (negocios, dominio, poder, narcotrfico...). Han montado una industria sofisticada para generarestereotipos juveniles (experiencias, modas, formas de expresin, conductas, diversiones, espacios propios,valoraciones, lenguaje), que constituyen su oferta de realizacin de la personalidad; y disponen, adems, denumerosos mecanismos de transmisin, atrayentes y persuasivos. Los medios de comunicacin social y lasnuevas tecnologas constituyen uno de los instrumentos principales de transmisin de este horizonte de valoresy antivalores. Por eso, la juventud es una poblacin altamente vulnerable, sea cual fuere su condicin social.

La meloda de la vida se ha convertido en un ruido estridente y macabro. Quienes deberan pulsar el violn conmaestra para el bienestar del pueblo, han cambiado su instrumento por el dinero y el poder, y no conocen otrameloda que la de la ambicin, el cinismo y la arrogancia.

El viejo violn tiene que volver a las manos del Seor. La vida tiene qu recuperar su belleza, la fe su frescura, lafamilia su unidad, la meloda de la justicia y la paz han de volver a escucharse en medio del pueblo.

Y desde la Iglesia proclamar que el Dios de la vida ama a los jvenes y quiere para los jvenes un futurodistinto, sin frustraciones ni marginaciones, donde la vida plena sea fruto accesible para todos (SD 118), y

siente la obligacin de llevar adelante una accin que responda a las necesidades de maduracin afectiva y a lanecesidad de acompaar a los adolescentes y jvenes en todo el proceso de maduracin humana y crecimientode la fe (SD 115): Son ustedes los que mejor pueden ayudar en su propia experiencia, a descubrir y desentraarlas realidades personales que los esclavizan y los mecanismos de dominacin que los acosan; a presentar nuevoshorizontes y experiencias que les permitan ver la vida con nuevos ojos, a dar testimonio con su ejemplo, con supalabra y su compromiso, de la presencia liberadora de Jesucristo en la historia de cada hombre y en el mundoen que vivimos.

Nosotros, cada uno de nosotros, somos el violn. Volver a las manos del Seor es el propsito de esta Cuaresma.Dejarnos afinar por l, dejarnos tocar por l, dejar que la meloda de la Resurreccin inunde a todo el Pueblo deDios para que sea instrumento de luz, de esperanza y de vida para nuestro mundo.


3/11

Escuchemos la Palabra de Dios: Marcos 10,46-52: Curacin del ciego Bartimeo.

Reflexionemos:1. Ahora dividimos el grupo en equipos, y a cada equipo le entregamos una

de las frases del texto ledo.2. Y despus de leer el anexo al texto contesta la pregunta que aparece al

inicio despus de la frase.

Estaba sentado al margen del camino: Cules son las cegueras mas notables de la juventud elda de hoy? (aquellas cosas, problemas o personas que no queremos ver como realmente son)Nuestra Iglesia, concretamente nuestra Iglesia diocesana presente en poco ms de 80 parroquias, no estexenta de las enfermedades que aquejan a nuestro tiempo. Ella, como el ciego del Evangelio, tambin tiene suscegueras, su insuficiencia, sus postraciones. Esto hace que est al margen de la vida del pueblo y que no vea niatienda a sus clamores y necesidades.

Muchas veces hemos analizado sus enfermedades: una iglesia retrada sobre s misma, algunos feligreses muypreparados frente a la ignorancia religiosa de la mayora, algunos muy comprometidos con la fe frente a lanegligencia y apata de los muchos, prcticas religiosas centradas en las devociones y la recepcin desacramentos pero con dbiles lazos comunitarios, poco sentido fraterno y escasa solidaridad con los pobres.Todo esto nos hace ver como una iglesia fuera del camino, al margen de la vida.

_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _

Arrojando el manto se levant, dio un brinco y vino al encuentro de Jess Qu acciones deconversin necesitan los jvenes el da de hoy frente al mundo?Esta Cuaresma es una oportunidad de renacer. Nuestra Iglesia cada uno de los bautizados y todos en conjunto est llamada a arrojar el manto y levantarse de la rutina, de las mentalidades caducas, de la apata y elconformismo. Dar un brinco y situarse frente a Cristo significa atreverse a cambiar, renovarse por dentro y porfuera: abrir los brazos a todos, ir al encuentro de los alejados, abrazar la causa de los pobres y de los que sufren,escuchar en vez de juzgar, dialogar en vez de condenar, servir en vez de imponer cargas pesadas, contrarrestar lafuerza del mal mediante la prctica del bien, situarse al lado de los crucificados.

Y lo sigui por el camino Cmo deberan de ser y para qu las reuniones de los jvenes en laIglesia segn Cristo?

Qu fue Jess para el ciego de Jeric? En el pozo oscuro de su ceguera, fue luz para sus ojos; en el laberinto desu soledad, fue esperanza de vida; en el abandono y fastidio de quienes lo rodeaban, fue presencia amorosa. UnaIglesia que pretenda llamarse discpula y seguidora de su Maestro ser aquella que sea Luz para un pueblo quevive en la oscuridad, aquella que sea Esperanza para los arrojados fuera del camino, aquella que sea Presenciade amor para quienes el mundo considera desechables.

Tal vez en este momento nuestra Iglesia, y nuestros grupos juveniles y movimientos estn muy lejos de cumpliresta misin. Tal vez nos d la sensacin que no da para ms ni el violn ni los violinistas que la tocamos tantorpemente. Pero el da en que, despojados de toda pretensin y orgullo, nos atrevamos a tocar el violn denuestra Iglesia con las manos y el corazn de Cristo, ese da gritaremos: Es mi Iglesia! Es mi Iglesia! Es miIglesia la que as toca!

Nuestro compromiso:

Elaborar un volante de invitacin a los jvenes de mi barrio, para unirse a las siguientes actividades incluyendosemana santa.

Oracin final:Se enciende una vela: cada quin la toma y repite en voz alta:

Seor Jess, esta es la llama de mi feGua: Que no la apague la mediocridadQue no la apague el desanimoQue no la apague mi egosmoQue no la apague mi deseo de placer.Que no me conforme con estar iluminado yoQue no me conforme si el grupo tiene de tu luzQue no deje de trabajar hasta que los que hoy no estn, estn contigo. Amn.

Canto: Enciendo una vela.


4/11

TEMA 2: UNA IGLESIA CON JOVENES QUE EVANGELIZA N(El Tipo de Accin)

Objetivo: Mirar la misin de Jess, para comprender cada vez mejor en quconsiste una verdadera evangelizacin que integre la fe y la vida.

Ambientacin:Poner en un lugar visible algunos peridicos.

Oracin inicial:Padre bueno, te pedimos que nos ayudes esta tarde a escuchar tu voz. Que descubramos en Jess, tu hijo, cmovivir la misin de evangelizar nuestro mundo. Enva tu Espritu sobre nosotros, para que abra nuestros ojos,nuestros odos y nuestro corazn. Amn.

Introduccin: Qu vemos aqu delante de nosotros?

Qu tipo de noticias hemos visto, ledo o escuchado estos das? Qu dicen acerca de la juventud?

En este tiempo, con el desempleo que aumenta da con da, sabemos que habr ms oferta de trabajos baratos,

salarios injustamente bajos y mucha ms explotacin en beneficio de algunos grandes empresarios. Haypersonas que han multiplicado sus ingresos millonarios a la sombra de un sistema que mantiene al 60% de lapoblacin en la pobreza y a un 25% en la miseria. Hay tambin un clima de inseguridad, impunidad ycorrupcin y en gran numero los agentes de estas situaciones usan a los jvenes como conejillos de indias.

No importa si medimos la pobreza de acuerdo con el ingreso de las personas o si nos fijamos ms bien en si lasfamilias pueden cubrir sus necesidades de vivienda, nutricin, salud y educacin podemos ver que en nuestropas la pobreza es profunda y dolorosa. Ms de la mitad de los mexicanos la sufren da con da.

Cmo nos sentimos frente a estas noticias?

Y Dios, nuestro Seor, qu sentir? Qu pensamos que nos dira a cada uno si comentara connosotros estas situaciones?

En tiempos de Jess la realidad no era muy diferente. Aunque el mundo parece totalmente distinto, la pobreza y

la injusticia sigue estando presente. A este mundo fue enviado el Hijo de Dios. En esta realidad, Jess descubricul era su misin. Vamos a escuchar lo que nos dice el Evangelio.

Escuchemos la Palabra de Dios: Leer Lucas 4, 16-20La lectura que escuchamos expresa algo as como el programa de Jess. Es la sntesis de su misin, de aquelloque decidi hacer como respuesta a la llamada de Dios su Padre. Recuerdan algn ejemplo de cmo y con

quines lo hizo? ( ayudar con algunos ejemplos: la curacin del ciego, del leproso, de la mujerencorvada, la multiplicacin de los panes)

Cuando Jess cura a las personas, no se fija solamente en su alma, sino en toda su situacin de enfermedad,pobreza, exclusin, pecado Cuando alimenta a la multitud, no siente compasin slo de su ignorancia oabandono, sino tambin del hambre real y concreta que sienten. Jess mira a toda la persona, por dentro y porfuera. Invita a quienes encuentra a cambiar de vida, pero adems les cambia la vida: perdona, cura, incluye,

comparte. Y todo eso es Buena Noticia. Todo eso es evangelizar.

Reflexionemos:Como cristianos, decimos que queremos seguira Jess. Eso significa hacer hoy lo que l hara: evangelizar, esdecir, hacer que nuestro mundo, nuestra familia, nuestra vida, sea un poco ms parecida a lo que Dios quiere.Evangelizar es como ir prendiendo lucecitas en los rincones oscuros de nuestro corazn, de nuestra realidad

Por eso decimos que la misin de la Iglesia es hacia fuera, hacia el mundo. Nos toca ir poniendo luz dondehace falta. Ir poniendo cario, salud, honestidad, verdad, compasin, en este mundo que lo necesita tanto. Nopodemos pasar tanto tiempo encerrados en nuestros grupos y movimientos, para evangelizar solo a unospoquitos de vez en cuando.

Es decir, el objetivo de la evangelizacin es el Reino de Dios. Evangelizar es anunciar que Dios est en medio denosotros, en la escuela, en la prepa, en la universidad, en la maquiladora, en el jale. Es continuar la misin de

Jess de trabajar para que todos tengan vida en plenitud. Por eso la evangelizacin abarca muchas cosas:compartir la palabra de Dios, la catequesis, mejorar las relaciones entre vecinos, vivir sin rivalidades, respetarnuestras diferencias, ayudar a los dems en sus necesidades ms urgentes, participar en acciones de solidaridadpor la justicia y la paz, defender el cumplimiento de nuestros derechos Todo eso es evangelizar porque todoeso hizo Jess.


5/11

Y este camino de seguimiento empieza en nuestro bautismo, pero ese es apenas el inicio. Ustedes creen que unnio, slo por ser bautizado, ya acta como lo hara Jess? Y nosotros? Por esto decimos que nuestro bautismoes el inicio de un camino de fe que dura toda la vida, porque necesita que poco a poco cambie nuestro corazn ytambin que cambie nuestra sociedad.

Nuestro compromiso:La misin de Jess se puede resumir en cuatro verbos: perdonar, curar, incluir, compartir. Vamos a dialogarun poco sobre cmo podemos seguir a Jess haciendo esas mismas acciones:

Despus de unos minutos, cada grupo comparte sus conclusiones.

Celebramos yOracin final:Hacemos silencio. Como signo, vamos a poner 5 fotos de jvenes haciendo cosas que no reflejan a Cristo. Secolocan en el centro. y los que quieran, pueden pasar toman una cajita de medicina (vaca) o curitas, frasco dejarabe etc y hacen su oracin como en el ejemplo: Seor coloco esta caja de medicina, sobre estos jvenesdelincuentes (foto), para que cures las heridas que los ha llevado a sentirse solos, poca cosa, o rechazados,porque ninguno de nosotros hemos sabido ser para ellos buenas noticias.Despus de cada oracin se repite: Te lo pedimos Seor.Padre nuestro.Canto: Danos un corazn.

TEMA 3: VIVIENDO EN COMUNIDAD(Los destinatarios)

Objetivo: Caer en la cuenta de que los destinatarios del anuncio del Evangelio somos los y las Adolescentes y Jvenes, viviendo encomunidad

Grupo 1:

Poner ejemplos decmoperdonar, curar,

incluir y compartirenLA FAMILIA.

Grupo 2:

Poner ejemplos decmoperdonar, curar,incluir y compartiren

NUESTRA COLONIA

Grupo 3:

Poner ejemplos de

cmoperdonar, curar,incluir y compartirennuestra IGLESIA.

Grupo 4:

Poner ejemplos de

cmoperdonar, curar,incluir y compartir

entre la adolescenciay juventud.


6/11

Ambientacin:Un letrero que diga: La multitud de los creyentes no tena sino un solo corazn y una solaalma, y sobre una mesa, pan para compartir.

Oracin inicial:Decir comunidad es decir camino compartido, manos que se unen para hacer la marcha ms liviana, miradasque se buscan para buscar, unidas, la mirada de Aquel que por nosotros dio la vida.Es compartir, la vida entrelazada, es reunir bajo las mismas esperanzas las diferencias, que as, no nosseparan.Decir comunidad es hablar de proyecto comn, sueos compartidos, camino acompaado.Es pensar en el otro y en lo mejor para el otro y pensar, juntos, en lo mejor de nosotros para todos los otros.Decir comunidad es darse fuerzas entre todos. Es alentarse con la palmada al hombro, es corregirse sin miedoa los enojos. Es animarse a crecer juntos poco a poco.Decir comunidad es hablar de apertura y entrega, aprender a brindarse, generosos.Decir comunidad es comn-unidad de criterios verdaderos, de opciones valientes, de desafos audaces.Aqu estamos Seor, unidos y en camino para hacer crecer tu Reino donde pidas. Amn.

Introduccin: (se hacen los mismos equipos con los que se trabaj el da de ayer) Qu recordamos del tema anterior?

Qu entendemos por comunidad?

Creemos que para seguir a Jesucristo es necesario vivir en comunidad, o bastar con que yo sola(o)le rece a Dios?

Si observamos nuestra sociedad, nos daremos cuenta de que est organizada de tal manera, que la vida digna esposible slo para unos cuantos.

Vivimos en una sociedad individualista, que ve por el bien de unos cuantos, que no nosensea a vivir unidos, y por el contrario, nos impulsa a buscar nuestro propio provecho.Desafortunadamente, nuestra manera de entender la religin tambin nos ha llevado a teneractitudes egostas y a pensar que basta con no tener problemas con nadie para sentirme bien,

y a creer incluso que la verdad de nuestra fe es para algunos privilegiados, los que acuden, losque participan, los cercanos. De tal modo, que en nuestra Iglesia reproducimos estasdesigualdades, destinando la riqueza de la Buena Nueva a un porcentaje muy bajo deadolescentes y jvenes que acuden a la misa dominical y a nuestros grupos juveniles, dejandofuera a la gran mayora de la adolescencia y juventud.

Escuchemos la Palabra de Dios:Leer Hechos 2, 42-47Trabajamos estas preguntas con los mismos equipos:

Qu hacan en comn los primeros cristianos?

Por qu creemos que vivan de esa manera?

Qu nos impide a nosotros vivir en comunidad?

Reflexionemos:Ayer reflexionamos sobre lo que significa Evangelizar, y aprendimos que es ir poniendo luz donde hace falta, esanunciar que Dios est en medio de nosotros, es continuar la misin de Jess.Hoy nos toca reflexionar sobre los destinatarios de la Evangelizacin. A quines hemos de llevar la luz deCristo?.

La Iglesia est llamada a Evangelizar a todos, no slo a unos cuantos. Los destinatarios son todos los bautizados y las bautizadas, y todos los hombres y mujeres de buena voluntad. Porque la salvacin no es un hechoindividual, sino personal y comunitario, ya que el bautismo nos hace miembros de una comunidad que nosacoge y nos ayuda a madurar en la fe.

El libro de los Hechos de los Apstoles nos proporciona los primeros testimonios de la vida comunitaria, y constituyen tambin el horizonte hacia elcual camina una comunidad cristiana. A su manera, y de acuerdo a las circunstancias histricas que le toca vivir, cada comunidad deber vivir estos


7/11

rasgos de la prctica cristiana para ser fiel al mensaje de Jess. Por este motivo este texto representa tanto lo que intentaba vivir la primeracomunidad, como lo que toda comunidad que siga a Jesucristo debe vivir.

La comunidad es fruto de la evangelizacin. La nueva vida trada por Jesucristo no se puede vivir sin los dems.Tiene que ser compartida con otros hermanos en la fe. Por esta razn, la comunidad no es algo que se puedaescoger o que se pueda dejar.El ser cristiano a mi manera, no existe, ya que la nica forma de ser cristiano es a la manera de Jess,formando su cuerpo, dependiendo unos de otros en la misma misin.

La experiencia de ser Iglesia se vive en la dicesis y en nuestra parroquia formada por familias cristianas. Sinembargo, es absolutamente necesaria la pequea comunidad con otros hermanos, para caminar movidos yanimados por el nico Espritu de Cristo resucitado.

La comunidad es un ambiente donde se manifiesta la fe, la esperanza y el amor, expresadosincluso en la solidaridad y ayuda mutua, como lo hacan las primeras comunidades. Noconsiste necesariamente en vivir juntos, pero si en vivir unidos como hijos de Dios, quetienen un mismo objetivo y una misma fe. No est integrada por personas santas y perfectas,sino por personas que se saben limitadas y pecadoras, pero que estn dedicadas a crecer

juntas y a dar testimonio

Todos los creyentes vivan unidos y tenan todo en comn, no unos cuantos.Todos acudan al templo con perseverancia y con un mismo espritu, no unos pocos.Todos partan el pan por las casas y tomaban el alimento con alegra y sencillez de corazn.Los primeros cristianos nos dieron el ejemplo. Si no nos atrevemos a dar el paso de formar

verdaderas comunidades donde exista la unidad y el amor, jams experimentaremos la vidaen abundancia trada por Jess.

Nuestro compromiso: Se parece nuestra vida a la de los primeros cristianos, En qu se parece, y en qu no se parece?

Qu estamos dispuestos a hacer para generar comunidad y hacer llegar el mensaje de la Buenanueva a los y las adolescentes y jvenes que se quedan o dejamos al margen de esta Buena noticia en

los sectores de nuestra parroquia?

Oracin final: Cada uno toma un pedazo de pan y lo comparte con quien tiene a su lado, mientras ledice:Que todos seamos uno, viviendo en comunidad.

Rezamos todos juntos:Dios, Creador nuestro que nos amas, aydanos a experimentar tu presencia encomunidad, y a dar testimonio a todos de tu amor.Jess, Seor y Hermano nuestro, aydanos a estar atentos a la realidad en que vivimos.Espritu consolador, anima a nuestras comunidades y aydanos en el proceso de dilogo, reconciliacin ycomunin. Santa Mara de Guadalupe, intercede por nosotros. Amn.

Canto: Iglesia peregrina.

TEMA 4: UNA IGLESIA DE LOS Y LAS JOVENES(Las Estructuras)

Objetivo: Avanzar en un camino de conversin que nos lleve a construir juntos una Iglesia sencilla, fraterna,comunitaria y participativa, en la que cada uno aporte desde sus capacidades y miremos nuestro actuar en laIglesia siempre como un SERVICIO.


8/11

Ambientacin:Poner en el centro diferentes objetos que indican servicios o que nos ayudan para estudiar ytrabajar.Por ejemplo:

- Un libro- Una (Lap top echa con cartulina)- Un lpiz- Una mochila- Herramientas- etc.

Oracin inicial: Seor, estamos aqu reunidos en tu nombre. Te pedimos que sepamos escuchar tu Palabra,para dejarnos cambiar por ella. Acompanos en este camino de conversin para esperar la Pascua.Amn.

Introduccin:Qu vemos aqu enfrente? Para qu sirve cada uno de estos objetos? Cul de todos es ms importante?(Dejar que den diferentes opiniones. Al final, ver que cada uno es importante, porque se necesita para algo)En nuestro mundo, quines son las personas importantes? Cuando hablamos de que alguien tiene unpuesto importante, a qu nos referimos? Y cuando una persona est buscando uno de esos puestos, por qulo hace normalmente?Esto que pasa en la sociedad, pasa tambin en nuestra Iglesia? De qu forma?

Escuchemos la Palabra de Dios:Jess se dio cuenta de que entre sus discpulos, la lucha por el poder era una tentacin que los iba a acompaarsiempre. Por eso les dijo esto:

Leer Mateo 20, 20-28. Por qu fue la discusin entre los discpulos?

Con quin los compara Jess?

Reflexionemos: (se hacen equipos para la reflexin)

Jess mira la realidad de su tiempo, no muy distinta a la nuestra. Se da cuenta de cmo funcionan los gobiernos,las personas poderosas. Cmo el poder se usa muchas veces en beneficio propio. Y pide que en su comunidad dediscpulos no seamos as.

Por grupos, pensar:

Despus de unos minutos, compartimos nuestras conclusiones.

Jess no est en contra de la autoridad, pero deja muy claro que la autoridad es un servicio. Que el verdaderopoder est en servir y ayudar a los dems. En ese sentido, todos tenemos algo de poder, porque todos podemoshacer algo por nuestra comunidad, familia, ciudad, Iglesia.

La autoridad de coordinar, organizar, conducir, es tambin un servicio. Sirve para facilitar la participacin detodos en el bien comn y en la evangelizacin. Pero si se entiende mal, puede llevar a abusos, o impedir laparticipacin de los dems.

Nuestro compromiso:

Qu puede ayudarnos a que cada uno de los que estamos aqu aporte lo que puede y sabe en elmodelo de Iglesia que queremos formar para los y las jvenes?

Qu puede estorbarnos?

Grupo 1:

En LA FAMILIA, Qu servicios prestan los

diferentes miembros de la familia?Por qu es importante la autoridad? De qu

manera sirve a la familia?Qu pasa cuando se entiende mal la autoridad?

Grupo 2:

En nuestra COMUNIDAD PARROQUIA,

Qu servicios prestan los diferentesmiembros? Para qu es importante la

autoridad? De qu manera sirve a lacomunidad?

Qu pasa cuando se entiende mal laautoridad?


9/11

Oracin final:

NOS SITUAMOS ANTE NUESTRAS MANOSLector:Cuentan que el creador, una maana llam a su lado a varios de los serescreados. Les dijo: para que puedan multiplicar mi generosidad, quiero regalarlesmis propias manos para que sean las suyas. Qu les gustara tener en ellas?

Qu haran con ellas?Y algunas criaturas llegaron ante el creador:La montaa le dijo: Quiero extender mis espacios de altura para que corran ros

de agua, cual manos de vida y de verdor.El rbol aadi: Quiero extender mi altura, haciendo que mis manos ofrezcan

frutos, alimento gratuito.Finalmente dijo la persona: Quiero salir hacia afuera para, con las manos,

buscar a mi hermano y hermana para abrazarle..:

Lector: Invita a los participantes a mirarse las manos y les dice:Las manos son nuestro espacio de relacin con el mundo:

Espacio de contacto, para palpar, acariciar, confortarEspacio de trabajo, de creatividad, de produccin, de la relacin en equipo y de

amistadEspacio para preparar comida, nutrir, alimentarEspacio de libertad o de violenciaEspacio de plegaria o de ensimismamiento

Las manos son expresin de nuestro calor de felicidad, o de nuestro fuego desoledad:Manos que saludanManos que aplauden y felicitan lo bueno de los demsManos que corren para perdonarManos que se abren para darseManos que quedan en el anonimato para nuestros regalosO, manos que se esconden y se avergenzanO manos que miden y guardan el error de los demsManos que odian, pegan, azotan, hieren, matan

Y tu y yo, qu hacemos con nuestras manos? Son manos abiertas, generosas,perdonadoras, compasivas? Son manos que acarician, reconocen, agradecen,sanan, abrazan , nutren, dan?

(Silencio y reflexin)

Canto:

TEMA 5: TODOS Y TODAS ESTAMOS INVITADOS A LA MISINESPERANZA JOVEN(Los Sujetos)


10/11

Objetivo: Reconocer que como bautizados y bautizadas todos y todas estamos llamados aseguir a Jess y somos responsables de la misin evangelizadora de la Iglesia, dentro delmundo.

Ambientacin: En una mesita colocada en el centro, se pone un globo terrqueo o un dibujo que represente elmundo, un plato con sal, una veladora o vela encendida y una vasija con agua.

Oracin inicial:Nos colocamos alrededor de los signos mientras el coordinador o coordinadora invita a losparticipantes a expresar qu les sugieren los signos.

Terminar con el canto: Bautzame, Seor con tu Espritu

Introduccin:Escuchemos esta parbola: La caa de bambEn un campo cercano a la ciudad haba una caa de bamb que se distingua entre los dems rboles y arbustospor su altura y atractivo verdor. Ella se senta orgullosa de su belleza y elegancia y haca alarde de ello. Un dafue a visitarla el hortelano del lugar, el cual le dijo: Buenos das mi querida caa de bamb, siempre paso poraqu y he observado tu belleza y esplendor, realmente eres muy hermosa. Oh, muchas gracias, seorhortelano, exclam la caa de bamb. Luego el hortelano le dijo: Necesito de ti para una misin muyimportante. A tus rdenes, dime en qu puedo servirte. A lo mejor vas a filmar una pelcula en este hermoso

paisaje y yo ser la estrella principal, expres vanidosa mientras se balanceaba con el viento. El Hortelano ledijo: No mi querida, para realizar la misin necesito cortarte. Oh no! Qu miedo! No quiero terminar as,no quiero esa misin. Porqu no vas con otra planta?. Escucha mi querida caa de bamb, de ti depende elfuturo de tus hermanas hortalizas que estn en mi huerta. Se estn muriendo de sed y el manantial est muylejos, por lo que he pensado que t podras servir de canal para traer el agua hasta ellas. Ninguna otra puedehacerlo, t eres la indicada.Despus de un momento de silencio la caa exclam: Est bien, har lo que me pides. Me sacrificar por mis

hermanas hortalizas. As sucedi. Unos meses despus las hortalizas crecieron, recuperaron vida y verdor.Esta vez la cosecha fue muy abundante y la caa de bamb senta una alegra muy profunda. Empezaba aencontrar la razn de su vida.

A qu nos invita esta reflexin?

Escuchemos la Palabra de Dios:Mateo 5, 13-16: SAL Y LUZ

Cada uno repite la frase del Evangelio que le llam la atencin.Profundicemos en el mensaje del texto:

De qu nos habla esta lectura?

Para qu sirve la sal? Para qu sirve la luz?

Qu menaje quiere Jess transmitirnos con esta parbola?

Reflexionemos:Nuestra Iglesia nos motiva y conduce nuevamente a una tarea diocesana. Y no es un desafo menor pues se tratade anunciar con mayor fuerza, con ms ardor la buena noticia que es Jess para todos los y las adolescentes y lajuventud, por medio de esta iniciativa de la Misin Esperanza Joven.Hoy se nos insta a mirar nuestra realidad y actuar, para que iluminados por el Espritu Santo podamosdescubrir los espacios que necesitan nuestra evangelizacin.Hoy, desde la voz de nuestros obispos, somos llamados a ser protagonistas de este gran desafo. Aun sonmuchos los jvenes y adolescentes que no han recibido el don de la fe y que quieren encontrar el sentido de susvidas. Es ah donde el Seor nos enva al igual que a sus discpulos a anunciar quien es l y la alegra queproduce conocerlo.Los adolescentes y jvenes estamos llamados a aceptar esta invitacin, a renovarnos y salir a las calles, conJess como estandarte y con la felicidad del cristiano que se sabe amado por Dios. El testimonio ferviente deSan Pablo nos gua a ser dignos discpulos misioneros del Seor.

Nuestro compromiso:En la sociedad actual hay realidades muy urgentes que atender: nios y nias sin hogar, jvenes desorientados yen el camino de los vicios, sin oportunidades de estudios, ni empleo, mujeres maltratadas, ancianos y ancianasabandonados, personas enfermas sin atenciones adecuadas de salud, cinturones de miseria en la periferia denuestras ciudades, comunidades rurales olvidadas, desintegracin de las familias, sistema carcelario injusto,entre otras muchas situaciones que adquieren rostros muy concretos en cada comunidad.


11/11

An nos queda mucho por hacer, el trabajo es abundante y los obreros pocos, por eso es necesario que toda lajuventud nos pongamos en actitud permanente de Misin siendo una Esperanza para nuestra Iglesia Diocesana,donde los jvenes sepamos responder a las necesidades reales que tenemos.

Oracin final:Renovacin del compromiso bautismal

Introduccin:Por medio del bautismo nos comprometemos como hijas e hijos de Dios a ser sacerdotes, profetas y reyes. Esdecir, nos comprometemos a hacer de nuestra vida una ofrenda agradable a Dios. A anunciar la buena noticiadel Evangelio con todo nuestro ser, principalmente con nuestro testimonio de vida, y nos comprometemostambin a construir el Reino de Dios, del cual somos herederos. Esta es una tarea que no puede esperar. Hayque empezar aqu y ahora. Por eso en este momento vamos a renovar nuestro compromiso bautismal.

(Los participantes se colocan en crculo y cada uno pronuncia el nombre de la persona que est a su derechamientras le hace algn gesto con el agua. Puede ser una cruz en la frente, mojarle las manos, dejar caer aguaen su cabeza, etc., mientras le dice:T tienes una misin que cumplir en la Iglesia y en el mundo.La otra persona responde:Amn

Despus un participante toma en sus manos la veladora encendida mientras dicen en voz alta:Seor,quiero poner mis cualidades y toda mi vida al servicio de tu Reino.Despus pasa la veladora a la persona que est a su derecha y este repite la frase, y as sucesivamente hastaque la luz llegue a todos y todas.)

Envo: Una persona con uno de sus brazos extendidos sobre los presentes en seal de envo, lee el siguientetexto: Marcos 16, 15 -18"Vayan por todo el mundo y anuncien la Buena Nueva a toda la creacin. 16 El que crea y se bautice se

salvar, el que se niegue a creer se condenar. 17 Estas seales acompaarn a los que crean: en mi Nombreecharn demonios y hablarn nuevas lenguas; 18 tomarn con sus manos serpientes y, si beben algnveneno, no les har dao; impondrn las manos sobre los enfermos y quedarn sanos."

Luego otra persona lee los versculos siguientes:19 Despus de hablarles, el Seor Jess fue llevado al cielo y se sent a la derecha de Dios. 20 Los discpulos,por su parte, salieron a predicar en todos los lugares. El Seor actuaba con ellos y confirmaba el mensaje con

los milagros que lo acompaaban. Palabra de Dios.Un momento breve de silencio. Terminar con el Padrenuestro.

Canto: A edificar la Iglesia

cuaresma juvenil 09 _temario

Documents