coyuntura sudamericana - columna libertaria joaquín penina

Upload: pabloabufom

Post on 14-Apr-2018

228 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    1/14

    Visin sobre la Coyuntura Sudamericana: Estadosreguladores del modelo extractivista y garantes

    de la gobernabilidad de un continente pobre

    Introduccin y marco terico

    A la hora de analizar en profundidad el sistema de dominio y laforma en la que el mismo se desarrolla en nuestra regin, susparticularidades en la coyuntura actual y sus implicancias en eldevenir de la lucha de clases, podramos abordar dicho anlisisdesde mltiples esferas y diferentes ejes. En esta aproximacinque ofrecemos hemos optado por hacer un recorte con el fin de

    poner nfasis en ejes que consideramos significativos para laactualidad y que entendemos tienen implicancia en nuestramilitancia cotidiana. De tal manera, vamos a detenernos aprofundizar en la dinmica de las relaciones entre la esferapoltico-jurdica del sistema de dominio en la regin y la esferaeconmica. A los fines de explicar el lugar desde donde nosparamos para realizar este anlisis vamos a sealar brevemente acontinuacin el marco terico utilizado.Como lo hemos manifestado en documentos anteriores,entendemos a este sistema de dominacin capitalista como uno

    que opera en diferentes niveles y travs de distintos mecanismosde dominio en todas las esferas de la vida social, y como tal, no esnico e inmodificable, sino que es una construccin histrica. Eneste sentido, entendemos a la sociedad en su conjunto constituidapor las diversas dimensiones del poder conformadas en lasdiferentes esferas, influyentes y dependientes unas de otras. Noanalizamos, por ende, a la misma como determinadaexclusivamente por las relaciones de dominacin econmicas. Eneste sentido, el sistema de dominacin actual, en realidad no essimple reflejo de las relaciones de la esfera econmica sino que,

    se constituye en una interdependencia de las esferas poltica,econmica, ideolgica, cultural, etc. Las relaciones de poder seencuentran presentes en todas las relaciones sociales, impregnanla sociedad de forma capilar. 1A partir de esto, intentaremos enfatizar, como ya advertimos,sobre la comunidad de intereses y la relacin existente entre el

    1Declaracin de Principios" -. http://columnalibertaria.blogspot.com.ar/

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    2/14

    proyecto de institucionalidad de los llamados GobiernosPopulares o de Socialismo de Siglo XXI y la matriz extractivo-exportadora nuevamente en auge en toda la regin sudamericanavisibilizada a travs del plan Iniciativa para la Integracin de laInfraestructura Regional Suramericana (IIRSA).

    De Clases Dominantes y Proyectos Estatistas

    A ms de una dcada de iniciado el siglo XXI las ficciones deEstados Socialistas o Gobiernos Populares deberan indicaralgo ms peligroso que una simple desafortunada conjugacin depalabras antagnicas. Durante el transcurso del siglo XX, en los yaconocidos procesos de revolucin social que han concluido con latoma del poder poltico por parte de una vanguardia iluminada,se ha evidenciado cmo la iniciativa y el protagonismo de un

    pueblo2

    organizado fueron frenados y hasta oprimidos por lasnuevas burocracias dirigentes. En este sentido, se ha llegado avivenciar el destino que tuvo el intento de abolicin de losprivilegios y la bsqueda de una sociedad sin clases por parte delas clases oprimidas de dichos pases: las lites burocrticas de lospartidos comunistas erigidos en direccin de las revoluciones sepreocuparon por mantener vivo al Estado, recrear al capitalismoen aquellos pases y restaurar inevitablemente privilegios para unanueva clase dominante todo en nombre del socialismo. Antes,durante y despus de estos procesos gran parte de la teora

    marxista y nacionalista se ocup de justificar tericamente talproceso.Casualmente en Latinoamrica desde hace ms de diez aos -luegode una gran crisis terica que sufri la izquierda estatista despusde la cada de la URSS- se vuelve a justificar la posibilidad detransformacin social desde arriba hacia abajo, es decir desde y atravs del Estado como direccin y aparato regulador.Intentamos plantear aqu algunos puntos nodales para entender larealidad de Sudamrica y el desarrollo que se dio la clasedominante local a la hora de establecer una nueva estrategia para

    la regin en el marco del sistema de dominacin actual. En estesentido, es imprescindible que detectemos qu proceso demovilizacin y resistencia se estaba dando tras una dcada depolticas neoliberales en todo el continente; qu respuesta sebusc desde la clase dominante para frenar nuevos alzamientospopulares e intentar dar un salvataje a la institucionalidad y la

    2Pueblo entendido como conglomerado de clases oprimidas.

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    3/14

    gobernabilidad muchas veces desde una apariencia progresistacon retricas patriticas-; y finalmente qu relacin guarda estafuncionalidad con la garanta de desarrollo de la economa de laregin dependiente en la divisin internacional del trabajoteniendo como parmetro el intento de aplicacin irrestricta del

    Plan IIRSA, introducido por las potencias mundiales y proyectos detipo imperialistas.Por ltimo, es importante que puntualicemos la estrategia deresistencia que se estn dando las clases populares al avance delos de arriba, pensando as en las perspectivas de lucha haciaadelante que nos ofrece la experiencia rebelde de nuestra clase.

    El papel de los Estados Latinoamericanos: los progresistas o losno tanto

    A fines del siglo XX pudimos vivenciar el estrepitoso fracaso de losproyectos estatistas de implantacin del socialismo -de arribahacia abajo- en Rusia, China, Vietnam, Cuba, Corea del Norte y laEuropa del Este entre otros, deviniendo stos en elestablecimiento de nuevas clases dominantes, nuevas burocracias,reconociendo al capitalismo como nico sistema viable y aportandoal fracaso de diversos procesos revolucionarios que se intentabandar en los aos 60 y 70 en nuestra regin. La izquierda estatistaen una crisis sin precedentes se llam a silencio durante unadcada. Es ah cuando las clases dominantes arremetieron con

    polticas de corte neoliberal, anulando muchas de las conquistaspopulares conseguidas con la lucha a lo largo del siglo XX yrevocando derechos sociales que haban sido arrancados desdeabajo. Latinoamrica no slo no fue la excepcin a la speraaplicacin de estas polticas sino que de alguna forma fue modelopara el resto del mundo.Privatizaciones en las telecomunicaciones, la energa y eltransporte, ajustes y recortes en los sistemas de salud y educacinpblica, desempleo y subocupacin, y un predominio del capitalfinanciero fueron el comn denominador en la nueva realidad

    latinoamericana. Sin embargo, el descontento de las clasesoprimidas no se hizo esperar. Hechos como el levantamiento delEjrcito Zapatista de Liberacin Nacional (EZLN) en Mxicomarcaron los albores de la respuesta organizada de la resistenciacontinental a lo que era una nueva sangra a los puebloslatinoamericanos. Levantamientos populares como los delCaracazo (1989), las guerras del agua y el gas en Bolivia (2000,2003, 2005), los levantamientos de los pueblos originarios en

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    4/14

    Ecuador y Chile, las puebladas y piquetes que tuvieron comocorolario al argentinazo (1996-2001), la lucha campesina de los SinTierras brasileos, entre otras fueron algunas de las expresionesorganizadas de los sectores populares excluidos y expulsados poreste sistema de dominacin capitalista, que a esta altura,

    prescinda perfectamente de gran parte de la poblacin delcontinente. No obstante, y a diferencia de la vieja prctica de laizquierda, estos eventos y procesos organizativos contendran unmayor desarrollo de autonoma popular y una convocatoria desectores de abajo no enmarcados en el tradicional planteoeconomicista de la izquierda clsica. Pueblos originarios,campesinos(as) sin tierra, piqueteros(as) desocupados(as), entreotros, a travs de la prctica de la accin directa protagonizaronla re-composicin de las organizaciones de las clases oprimidas.Algunas caractersticas novedosas para el momento, como el

    rechazo a la representatividad institucional y la bsqueda demayor democracia directa en manos de las propias organizacionespopulares, iban resaltando la nueva estrategia clasista.Es as, como en gran parte del continente comenz a impactar unproceso de deslegitimacin de las instituciones estatales, unaprofundizacin de la crisis de gobernabilidad (recordemos lasnumerosas renuncias de presidentes en los casos de Argentina,Bolivia, Ecuador y Per), una descomposicin de la democraciarepresentativa y del bipartidismo y un agotamiento de laaplicacin de las recetas econmicas de ajuste y privatizaciones.

    A excepcin de Chile y Colombia, como los ms representativos enel cono sur en donde prevaleci sin titubeos la posicin demantener esas polticas de ajustes y sostener el control socialprincipalmente a travs de la represin y la militarizacin, algunossectores de la clase dominante latinoamericana iniciaron unabsqueda de renovar estrategias de control y regulacin socialacorde a los tiempos que estaban viniendo. En tal sentido, losEstados Sudamericanos no podan seguir implementando recetas deajuste y aplicar al mismo tiempo la poltica del garrote. Es ahdonde el Estado debi convertirse en un actor poltico de

    relevancia para tales intereses, instalando una nuevarepresentacin poltica para neutralizar el antagonismo de clasesvisibilizado a fines del siglo XX y primeros aos del XXI.Por un lado, se buscaba poner tope a la seguidilla de alzamientospopulares que estimulaban la capacidad de participacin real de lamayora de la poblacin. En este sentido, deba asegurarse ladominacin a travs de la recuperacin de la legitimidadinstitucional perdida, y evitar as retornar a la utilizacin de la

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    5/14

    fuerza como en tiempos de las dictaduras del cono sur. Una formade hacerlo era la de canalizar superficialmente las demandaspopulares que dieron origen a las resistencias lase disminuir unpoco los ajustes y la privatizacin- combinada con una retricanacionalista e izquierdista al mismo tiempo.

    Por otro lado, exista la necesidad de consolidar a la regin en sulugar dentro de la divisin del trabajo global como proveedor dematerias primas, recursos minerales y energticos sin demasiadossobresaltos. Dichos recursos requeran ser destinados a sutransformacin en los centros industriales de los pasesdesarrollados, para dar respuesta a la creciente demanda deconsumo desenfrenado e irracional de los pases ms ricos.A travs de una batera de polticas pblicas y un rotundo cambiode imagen y discurso de lo que anteceda, los Estadoslatinoamericanos representados en el Socialismo del Siglo XXI

    eufemismo con el que se intenta enmarcar un modelo decapitalismo humano contrapuesto al capitalismo salvaje-asumieron esta nueva etapa de gobernabilidad en el continente. Secomenz a utilizar una retrica nacionalista, izquierdista yantiimperialista, evocando viejos prceres de la independencialatinoamericana como Bolvar, San Martn, Eloy Alfaro y el mismoArtigas, para lograr resignificar y reinsertar la figura del caudillocomo referencia de gobernabilidad. En tal sentido, se enarbolaronprocesos declamativos como la Revolucin Ciudadana,Revolucin Bolivariana, Estado Plurinacional o Proyecto

    Nacional y Popular, entre otros. En consonancia, se continudesde arriba con una nfima redistribucin de ingresos a travs depolticas focalizadas muchas veces disfrazadas de polticassociales universales- que respondan nada menos que a viejasrecetas del Banco Mundial para frenar el descontento de sectoresexcluidos en Amrica Latina y que operaban a su vez comoherramientas de control social. De esta forma el Estado en cadapas comenz a promover la desarticulacin y fragmentacin demuchas de las organizaciones populares que estaban en resistenciadesde haca aos y de las cuales algunos dirigentes estaban

    esperando nuevamente una posibilidad de colarse en un proyectoestatista, relegando, de esa manera, el inters real de las basesorganizadas.En esta nueva secuencia de modelos de gobernabilidad estataltodos los estados del cono sur adhirieron a un nucleamiento de losmismos denominado Unin de Naciones Suramericanas (UNASUR),constituyendo el correlato poltico-jurdico del sistema de dominioregional. En esta instancia se logr la convivencia plena y

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    6/14

    armoniosa de los llamados gobiernos de izquierda quienes slo enel discurso estaban cuestionando al neoliberalismo-, y los otrosmodelos conservadores como los pases adherentes al TLC (Tratadode Libre Comercio) que siguieron aplicando abiertamente dichaspolticas. La finalidad ltima de este conglomerado de Estados fue

    siempre el mantenimiento del status quo y una eventualneutralizacin de enfrentamiento de clases en la regin.De ms esta decir que los resultados expresados, luego de unadcada, no reflejan progreso en direccin a una transformacinsocial en la regin: en la mayora de los pases no se ha tocadosiquiera la matriz de la estructura econmica y productiva (laconcentracin del latifundio es cada vez mayor; los monopolioseconmicos se han mantenido o renovado), de manera insoslayableimportantes sectores de la clase dominante favorecidos hanfinanciado las polticas pblicas; en ningn caso se ha otorgado a

    los pueblos originarios derecho definitivo al territorio ni ha cesadola represin y discriminacin a los mismos de parte de las litesgobernantes (a pesar de que numerosos gobiernos del cono sur hanhecho bandera de la concesin de derechos e inclusin a dichascomunidades); los altos ndices de pobreza, indigencia ydesempleo no se han modificado a pesar del maquillaje brindadopor la continuidad de las polticas focalizadas y manipulacin de lainformacin estadstica; salvo Brasil una potencia econmicaemergente con una burguesa industrial frrea- en ningn otro passe ha dado un proceso de reindustrializacin; el nmero de bases

    militares norteamericanas ha aumentado exponencialmente, ascomo tambin la militarizacin de las barriadas perifricas y unacreciente criminalizacin de la pobreza; aument el nivel depermisividad a las concesiones a las trasnacionales, el aumento enel endeudamiento con los organismos de crdito internacional hangenerado mayor dependencia hacia los mismos, el cumplimientode los mandatos de potencias como China y Estados Unidos sigueninclumes. Pero entre los aspectos ms delicados de la situacinpoltica, social y econmica se encuentra el nivel de sujecin ydependencia de la regin. La misma se encuentra comprometida

    en un proyecto de rapia capitalista de especulacin de alcancescatastrficos, donde el territorio y sus recursos otroraconsiderados improductivos- son el elemento de disputa.Basndonos en nuestro marco analtico indicado brevemente alprincipio, es imprescindible volver a observar que no vemos unadeterminacin exclusiva de las relaciones de dominacineconmicas en los proyectos polticos instaurados en la regin niviceversa. Al contrario, podemos inferir que dentro de la clase

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    7/14

    dominante existen diferentes proyectos en pugna o encoordinacin. En este caso los llamados Gobiernos del Socialismodel Siglo XXI, o los Gobiernos Populares o de izquierdarepresentan un proyecto poltico en s mismo de un sector de laclase dominante que poco o nada intenta confrontar con el proceso

    extractivista que vienen llevando grupos econmicos poderosos enla regin y del mundo. Contrariamente, parece existir unintercambio de favores que quizs, por un lado, les habilita a losgobiernos denominados populares un modo de financiacin de lapoltica pblica y, por el otro, les permite a los capitalestrasnacionales la estabilidad necesaria en la regin y bajos costospara la explotacin y exportacin de los recursos locales.

    Funcin de la economa regional: Plan IIRSA y extractivismo

    Todas estas seales de continuidad de un capitalismo depredador el nico que existe- son sntoma de un proceso que se vienellevando a cabo en Latinoamrica desde hace ya ms de unadcada. La funcin del Estado latinoamericano (sea conservador oprogresista) ya no es meramente la de ajustar y privatizar sinoque su rol fundamental en esta nueva etapa del neoliberalismo esla de flexibilizar las condiciones de explotacin desmedida de lossuelos y la extraccin y expoliacin lasciva de cuanto recursoenergtico y mineral exista en Latinoamrica, obviamentegarantizando los bajos costos y la eficiencia en el traslado.

    Sin embargo, la regulacin estatal para tales fines no poda estavez dar movimientos bruscos y retornar un clima de conflictividadsocial a priori. Como hemos indicado en documentos anteriores,podemos caracterizar al Estado en estos tiempos como generadorde un consenso necesario en la sociedad y creador de condicionestales para que sus intereses (y los de su clase) aparezcan como losintereses de todos. En este sentido, levantando las banderas de laSoberana Nacional, la incomprobable- Reindustrializacin y elDesarrollismo, y la Soberana Energtica, los Estados delllamado Socialismo del Siglo XXI se propusieron meterse de lleno a

    este juego mundial determinado y dirigido por proyectosimperialistas. Ese rol requiri la intervencin estatal paragarantizar -cueste lo que cueste- la explotacin y exportacin debienes primarios a gran escala solicitados por el mercadointernacional. Hidrocarburos como el gas y el petrleo, metales yminerales como el cobre, el oro y la plata y productos alimenticioscomo el maz, la soja y el trigo, adems de biocombustibles, sonalgunos de los recursos y productos que evidencian una

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    8/14

    reorientacin de las economas de la regin hacia las actividadesprimarias. En Sudamrica estos impulsos de reordenamiento de lasactividades de la regin, en funcin de cubrir las demandas de laeconoma global, responden en gran parte al proyecto denominadoIIRSA presentado por primera vez en una cumbre de presidentes en

    el ao 2000. Este megaproyecto continental de implementacinsilenciosa con su smil Plan Puebla Panam en Caribe y AmricaCentral-, es dirigido por el gobierno estadounidense y cuenta entresus socios a Paul Wolfowitz (Banco Mundial), Donald Rumsfeld(secretario de Defensa de EEUU), David Rockefeller, Henry A.Kissinger, Alan Greenspan (Banco de la Reserva Federal de EEUU),Rodrigo Rato (director del FMI), George Soros, el clan Rothschild yel magnate de la Microsoft Bill Gates, entre otros.El IIRSA, promovido desde sus orgenes por el BancoInteramericano de Desarrollo (BID) y coordinado por la Corporacin

    Andina de Fomento (CAF) y el Fondo Financiero para el Desarrollodel Cuenca de Plata (FONPLATA), fomenta y organiza la inversinen infraestructura y logstica para interconectar la regin alcomercio internacional que llevan adelante las grandestransnacionales. La implementacin principal del proyectorequiere el desarrollo de una infraestructura tal para transporteterrestre, areo y fluvial; oleoductos, gasoductos, puertosmartimos y fluviales, tendidos elctricos y de fibra ptica,centrales hidroelctricas, megaminera, soja y transgnicos. Noobstante, el proyecto tiene diferentes etapas de implementacin

    para las diferentes regiones y sobre todo teniendo en cuenta elrecurso a explotar.Como ya sealbamos ms arriba los Estados latinoamericanosvendieron este proceso en marcha como una ventana hacia eldesarrollo del continente, es decir una oportunidad nicaaprovechada por los distintos gobiernos con el nico fin de laintegracin de la regin y el desarrollo industrial y productivo de lamisma. En la etapa actual la promesa de mayor mano de obra araz de la demanda de la construccin de infraestructura hafuncionado como golpe de efecto. La sociloga Maristela Svampa

    seala, por el contrario, que por cada milln de dlaresinvertido, se crean apenas entre 0,5 y 2 empleos directos3 Eneste sentido, otros estudios indican que a medida que vayafinalizando el IIRSA en toda la regin habr una disminucinsignificativa del empleo con derivaciones negativas en la economaregional y las sociedades locales.

    3Extractivismo en Amrica Latina. El Consenso de los Commodities. Le Monde Diplomatique 9/7/2013.

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    9/14

    En consonancia con lo que venimos resaltando acerca de losalcances del impacto del extractivismo llevado a cabo en la regin,estn empezando a aflorar un sinfn de consecuencias sociales-medioambientales negativas del proceso: desmonte y destruccinde zonas ricas en biodiversidad para promover monocultivos de

    soja o plantaciones de pinos para celulosa, agotamiento aceleradode los recursos no renovables como son el gas, el petrleo y losminerales -aumentando a la larga el costo de vida de la poblacinlocal-, migracin forzosa de la poblacin rural hacia centrosurbanos, entre otros.Los mtodos utilizados para el saqueo continental merecen unprrafo aparte. La fracturacin hidrulica o fracking, utilizadospara hacer salir el petrleo a grandes profundidades no slo utilizamiles de litros de agua mezclados con qumicos y arena sino quedeja el lastre de altas cantidades de plomo y metano en la poca

    agua que queda por utilizar en la zona afectada.Numerosos grupos cientficos y ambientalistas advierten ademssobre la explotacin minera a cielo abierto. La misma afectagrandes proporciones de superficie terrestre abriendo un crter para extraer una pequea cantidad de mineral- utilizandoimportantes proporciones de cianuro dejando el agua del lugarenvenenada, generando inevitablemente el colapso de laagricultura local (perdida de cosecha y animales muertos) y porende como mencionamos anteriormente un xodo obligado de lapoblacin local.

    Cabe aqu mencionar tambin el impacto de la instalacin de lasrepresas hidroelctricas (destruccin del ecosistema y nuevamente- desplazamiento forzoso de la poblacin) o el modeloagrcola de produccin (semillas transgnica, fumigaciones areasmasivas, siembra directa, cancer y enfermedades respiratorias)dependiente de la multinacional Monsanto.Desafortunadamente dentro de la gravedad del saqueotrasnacional contamos con la sistemtica violacin a los derechoshumanos en la regin: desde la irrupcin a territorios de lospueblos originarios y campesinos hasta la persecucin,

    criminalizacin y muerte de la resistencia al avasallamiento sobrela tierra, los recursos y la sociedad en su conjunto.

    Resistencia Latinoamericana frente al saqueo y farsa desocialismo de los de arribaPodemos observar hasta aqu cmo el sistema capitalista haoperado en esta regin durante la ltima dcada mediante eldespliegue de relaciones de dominacin econmico-productivas y

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    10/14

    poltico-jurdico-ideolgicas en torno a la continuidad del modeloneoliberal y su instancia extractivista. El trabajo cumplido hasta elmomento por los Estados de la UNASUR durante la actualaplicacin del IIRSA ha permitido resguardar con creces losintereses de la clase dominante. Sin embargo, este despliegue ha

    generado nuevas resistencias y por ende- conflictividad social porparte de las clases oprimidas de Amrica Latina y una luchaabierta por el territorio, expresada en la movilizacin organizadade la poblacin directamente afectada por el saqueo y lasconsecuencias del mismo. Aqu brevemente vamos a mencionaralgunos actores en este proceso de resistencia como lo sonasambleas ambientalistas de Argentina (Esquel, Gualeguaych,Famatina, Tinogasta, entre otras), los campesinos/as sin tierraparaguayos y brasileros que enfrentan el latifundio sojero, lospueblos originarios del TIPNIS (Territorio Indgena Parque Nacional

    Isiboro Scure) boliviano, los del Parque Yasun-ITT ecuatoriano,los de la reserva Vaca Muerta argentina, los de la Patagonia o losde la Amazona sudamericana, y podramos mencionar muchosms. Prrafo aparte merecen algunos procesos de resistenciaantisistmica que se vinieron dando en algunos lugares en paraleloy que, particularmente, no han tenido quizs relacin directa conel proceso extractivista, pero s con el avance de los Estadoslatinoamericanos frente a las clases populares, como lo son lasluchas de los estudiantes y pueblos originarios chilenos, as comotambin las movilizaciones populares por la gratuidad del

    transporte pblico y contra la caresta de la vida en Brasil, todascon gran trascendencia mundial.Con respecto al modelo extractivista, numerosas puebladas hanllegado a frenar parcialmente algunos tramos del Plan IIRSA yboicotear el avance de las obras. Pero esta resistencia al desguacegener inmediatamente una respuesta represiva por parte de losEstados latinoamericanos, aquellos denominados de izquierda ytambin de los conservadores. En este sentido, el aspecto militar-policial en las relaciones de dominacin y el control social requeraestar resuelto en los albores de un nuevo siglo. En Chile, Colombia

    y Paraguay hoy Estados de corte conservador- el asunto se varesolviendo como de costumbre, con represin explcita y miles depresos polticos, procesados y asesinados. En los Estadosprogresistas a los efectos tales de solapar un conflicto de clasese intereses, la persecucin a los nuevos agitadores contra elmodelo extractivista y la ficcin de la Patria Grande, debi traeraparejada acusaciones polticas e ideolgicas a los mismos.Durante la ltima Cumbre de Jefes de Estado del ALBA a fines del

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    11/14

    pasado Julio-, los mandatarios acusan a la resistenciaantiextractivista de extremistas, conspiradores,desestabilizadores, golpistas, pro-imperialistas yasalariados de la CIA. El relato de los gobiernos acerca de estetipo de resistencias concluye habitualmente en que la posicin de

    las organizaciones rebeldes le hacen el juego a la derecha.Bajo esas acusaciones los Estados del cono sur vienen perpetrandopersecuciones, procesamientos y asesinatos a miembros deorganizaciones populares. Los pueblos originarios en Bolivia quedefienden el TIPNIS peridicamente son reprimidos por la policadel Gobierno de Evo Morales y tienen centenares de procesados ydetenidos por dicha causa.En Venezuela durante el gobierno de Chvez, adems de ladetencin y extradicin a Colombia de una decena de luchadoresde ese pas cuando Maduro era Ministro de Relaciones Exteriores,

    se produjo el asesinato del cacique yukpa Sabino Romero, uno delos tantos referentes indgenas enfrentados a los terratenientesganaderos. La responsabilidad del gobierno en el asesinato quedal descubierto en investigaciones posteriores. En Ecuador, dondeCorrea es presidente, desde hace ya tiempo se arman causas bajola figura de sabotaje y terrorismo, estando ya procesadas ms de200 personas, en su mayora militantes contra la megaminera. EnBrasil en el marco de los desalojos y la represin contra loscampesinos sin tierra, el Gobierno asesina a Eltom Brum da Silva,militante del MST. Recientemente se llev a cabo, no slo la

    represin a las ltimas movilizaciones masivasantigubernamentales, sino que adems se le sum la persecucinpoltica y hostigamiento a organizaciones anarquistas yantisistmicas (sospechadas de haber impulsado las protestas). EnPer hubieron ms de una treintena de originarios asesinados en laregin de Bagua (Amazona peruana) durante el gobierno de AlanGarca, y desde el 2011 -cuando asume Ollanta Humala- seprodujeron al menos 25 asesinatos durante la resistencia alproyecto Conga en Cajamarca.4 En Argentina donde elKirchnerismo maneja mayoritariamente un modelo de represin

    tercerizada5

    - podemos mencionar la violencia contra los

    4El Proyecto Conga/Yanacocha es un intento de explotacin de oro a cargo de la minera Yanacocha,

    cuyo principal accionista es la estadounidense Newmont. El mismo esta previsto en la provincia de

    Cajamarca y tiene como principales afectados a las zonas mas pobres de esa provincia, que no solo no

    ver los rditos econmicos del mineral extrado sino que el agua de la regin llegar a desaparecer casipor completo, quedando los ltimos reservorios completamente contaminados.5

    Aqu es necesario indicar cmo el proyecto Kirchnerista en su dcada en le poder ha venido delegando

    la mayora de las intervenciones represivas a aliados del mismo gobierno para no pagar un costo poltico:

    patotas de la UOCRA en Chubut arremeten contra asambleas ambientalistas, patotas de la Unin

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    12/14

    ambientalistas de Famatina, Tinogasta y recientemente a losoriginarios mapuches que rechazan el fracking en Vaca Muerta(Neuqun), los asesinatos selectivos de dos campesinos sin tierraen Santiago del Estero y de mas de 10 originarios Qom de Formosay Chaco comunidades que resisten hace aos el avance del

    latifundio y el modelo sojero-. Vale agregar la situacin enUruguay de un gobierno que no slo garantiz la impunidad de ladictadura, sino que recientemente avanz en la infiltracin policialde las manifestaciones por derechos humanos y la detencin ilegalde 12 manifestantes.

    Balance y perspectiva libertaria

    En funcin de poder pasar en limpio el proceso que se dio en laltima dcada en nuestro continente solo podemos agregar breves

    conclusiones del mismo. Por un lado, sectores de la clasedominante resolvieron temporalmente el problema de lainestabilidad institucional de la regin provocado por las recetasde ajuste neoliberales de la dcada de los 90. La clase dominantelogr reconstruir la representacin -mtica en nuestro continente-del Estado interventor y regulador y de un proyecto de izquierdanacional que evadiera cualquier antagonismo de clase heredado dela dcada anterior. A su vez, comenz a delinear y facilitar unproceso de mejoramiento infraestructural para que lastrasnacionales y los Estados ms poderosos terminaran de llevarse

    los recursos que quedan en un continente plagado debiodiversidad.En otro orden, qued al descubierto la poltica de derechoshumanos de los gobiernos de izquierda (los de derecha ya habantomado posicin hace rato), donde el negocio y la razn de Estadovalen ms que la salud y el bienestar de toda la sociedad. Unsinnmero de organizaciones sociales sucumbieron o fuerondivididas ante la propuesta de construccin desde arriba y pordentro del Estado. La clase dominante de la regin apost comoera de prever a la inclusin de la regin dentro del capitalismo

    Ferroviaria asesinan a Mariano Ferreyra por un conflicto con mercerizados, la Polica de Catamarca y La

    Rioja tambin reprime asambleas ambientalistas, la Polica de Chaco, Formosa y Neuqun avanza contraPueblos Originarios, la Polica de Ro Negro reprime y asesina durante puebladas en Bariloche y

    encarcela a piqueteros de la misma localidad.

    En estos ltimos meses candidatos electorales de la derecha le empezaron a disputar el voto, por lo que elgobierno decidi salir a jugar esa ficha ponindose al frente de la represin a travs del envo de

    centenares de gendarmes al conurbano bonaerense, miles de policas a las calles de las provincias aliadas,

    proyectos para bajar la edad de imputabilidad, y ascensos de conocidos represores al sistema carcelario y

    el Ejrcito inclusive.

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    13/14

    mundial en un proyecto de ganancia y especulacin a corto plazo.Los grandes perjudicados fueron los pueblos de la regin, que novacilaron en salir a dar las primeras batallas contra el modelo desaqueo y dominacin. La defensa de los recursos y de la vidafrente a los proyectos imperialistas, no slo no es impulsada por

    los autodenominados antiimperialistas sino que han sido lospueblos originarios, campesinos, vecinos, asambleistas, piqueterosy estudiantes quienes han puesto el cuerpo frente a tantaimpunidad en tan poco tiempo. Si algo esta quedando nuevamenteclaro (a pesar del olvido del fracaso de los proyectos estatistas dela izquierda) es que los proyectos emancipatorios de la sociedad nopueden ni deben depender del Estado si realmente quieren seremancipatorios. En Latinoamrica nuevamente la coyuntura nosest invitando a pensar la importancia de la autonoma en lasorganizaciones populares y la independencia de clase a la hora de

    llevar a cabo la lucha revolucionaria. Esta claro que no es lo mismoorganizarse en tiempos de un gobierno abiertamente represorcomo el chileno o el colombiano o una dictadura- que un gobiernoque se adjudica la defensa de los derechos humanos y larepresentacin de un proyecto socialista. Esos perodosdeterminados por la institucionalidad progresista son especialespara potenciar y desarrollar organizaciones de base. En tiempos deajuste y represin seguro se hace siempre ms difcil y peligroso.Sin embargo, la posibilidad de ocupar lugares, grietas o trincherasen las instituciones es siempre una trampa que ofrece el mismo

    sistema de dominacin. En un continente donde la figura delcaudillo viene para intervenir en la historia en momentosexcepcionales cuando la institucin del sistema de dominio est enpeligro, la administracin de la sociedad por parte del pueblo y elprotagonismo colectivo de los de abajo en esa bsqueda aparecensiempre como una alternativa seria de transformacin social. Laconstruccin paulatina de un pueblo fuerte y un poder autogestivoes el camino que elegimos los y las de abajo en esta ambiguacoyuntura latinoamericana.

    FUENTES"Sobre la Declaracin de Guayaquil: ALBA y extractivismo" - JosJavier Franco publicado el 2/6/2013 en LaGuarura.net

  • 7/27/2019 Coyuntura Sudamericana - Columna Libertaria Joaqun Penina

    14/14

    "IIRSA: Integracin de A. Latina para mercados y privatizaciones" -Fernando Arellano Ortiz publicado el 3/8/2006 en ALAI, AmricaLatina en Movimiento"UNASUR y la IIRSA reunidos en Brasil para fortalecer el saqueo alos pueblos" - LaGuarura.net 25/4/2011

    "IIRSA: Plan de infraestructura o saqueo organizado?" - MauroRestifo publicado el 19/3/2013 en SURsuelo"La Iniciativa para la Integracin de la Infraestructura Regional enSudamrica (Iirsa) Neoliberalismo de Izquierda, la Nueva Era delCapital" - Coordinadora por la Autodeterminacin de los Pueblospublicado el 30/5/2011 en patriainsurgente.nuevaradio.com"Anarquismo y extractivismo" - Uzctegui Rafael publicado el18/11/2011 en El LibertarioLos de Abajo viviremos en Crisis mientras exista el Estado y elcapitalismo Documento anarquista de anlisis y coyuntura

    Columna Libertaria Joaqun Penina - Argentina, Marzo 2012"Proyecto IIRSA ,El mega proyecto para el saqueo en Amrica delSur" - Cooperacin en red EuroAmericana para el DesarrolloSostenibleExtractivismo en Amrica Latina. El Consenso de los Commodities"- Maristella Svampa publicado en Le Monde Diplomatique9/7/2013.Declaracin de Principios FACA-Columnas" - publicado enhttp://columnalibertaria.blogspot.com.ar/