contenido - la jornada de oriente · la permacultura: el arte de curar la tierra sandra esther...

16

Upload: others

Post on 13-Aug-2020

0 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina
Page 2: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

Paisaje, dice el Diccionario de la RealAcademia de la Lengua Española, es la“extensión de terreno que se ve desdeun sitio”. Para quienes vivimos en ciuda-des, es la vista que tenemos a nuestradisposición, cotidiana en el asfalto, lasparadas de camión, los tendederos, losanuncios espectaculares, las tiendas, lasluces, los coches.

La experiencia del paisaje urbano nose agota en la mirada; tampoco somossólo espectadores del mismo. Somos losartífices de nuestro entorno, hemos sidoconstructores de espacios que nos hala-gan o nos ahogan, disfrutamos o pade-cemos de trazas y servicios sobre los queno decidimos, y sin embargo, con nues-tro granito de arena abonamos a subuen o mal estado.

Las ciudades, con sus problemas y vir-tudes, son más que la suma de sus par-tes, son más que el agregado de accio-nes de cada individuo. En cada ciudad,en cada asentamiento humano, se notala huella de decisiones tomadas a múlti-ples niveles; distintos actores han soña-do y ejecutado proyectos distintos, aveces hasta contradictorios; distintospoderes han definido su cara estética,sus valores de belleza y fealdad; gruposde habitantes, entre tanto, se acomo-dan en barrios alrededor de oficios o dela promesa de un patrimonio, una casi-ta, una escuela, un hospital.

Se libran batallas sordas en las ciu-dades. Se corre tras el camión, se pe-lea contra la mugre y el ruido, se toreanautos. El paisaje urbano, que parece-ría garantizar la permanencia me-diante el cemento y el ladrillo, es sinembargo cambiante. Hemos dado anuestros espacios urbanos la capaci-dad de albergar relaciones en distin-tos niveles. El lujo y la pobreza convi-ven con tensión, porque el gruesomaquillaje de modernidad aplicado alas megalópolis se descascara para quese cuele por sus grietas la otra ciudad,que se niega a ser prescindible.

En un primer abordaje hacia el tema,matria ofrece este número, para abrirboca.

ContenidoOPINIÓNCaminar la ciudad de PueblaManuel de Santiago Hernández

ANÁLISISEl espacio urbano: lo socialVerónica Rosas

Paisaje urbano y actores socialesVarinia López Vargas

ANÁLISIS Imagen urbana y contaminación visualMartín Hernández Alcántara

ANÁLISISÁreas verdes urbanasMónica Olvera Nava

DIVULGACIÓNEl gorrión común, un villano disfrazado de un alma buenaAna Lucía Castillo Meza y Juan Héctor García-Chávez

OPINIÓN Notas corporales de paisajeIván Ruiz

3

4

6

7

8

9

10

11

13

14

16

22 matria no. 6 • julio de 2007

P r e s e n t a c i ó n

Fotografías de portada e interiores: Ángela Arziniaga y Everardo Rivera, excepto 8, 11, 15 y 16

DIRECTORIO

Matria es un suplemento mensual de

La Jornada de Oriente

Directora General: Carmen Lira Saade

Director: Aurelio Fernández Fuentes

Consejo editorial: Roberto Cabrales ,

Manuel de Santiago, Laura Domínguez,

Julio Glockner, David Jiménez,

Alejandro López, Varinia López Vargas,

Alejandra Meza, Mónica Olvera,

Susana Rappo

Dirección editorial: Alejandra López García

Diseño original: Yara Almoina

Diseño y formación: Leticia Rojas

Para colaboraciones o comentarios:

[email protected]

Dirección postal: Manuel Lobato 2109, Col.

Bella Vista. Puebla, Puebla. CP 72530

Tels: (222) 243 48 21, 237 85 49 F: 2 37 83 00

AÑO I· No. 06· JULIO 2007

DIVULGACIÓN Ciudad verde como ejercicio utópico. Caso PueblaJuan Carlos Rivera Arenas y Julio Marcelo Ramírez Flores

ANÁLISISLa eduación y el medio ambiente en la escuelaMirta Figueroa Fernández y Verónica Rosas

DIVULGACIÓN La permacultura: el arte de curar la TierraSandra Esther Barillas Arriaga

TESTIMONIOLa matria lejosLa migración, vivida por los niñosValentina Glockner Fagetti

A PIEFlor del Bosque:la aventura por descubrir

Page 3: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

Es un lugar común decir que las ciudades se hacencaminando. No obstante, la afirmación es muy

cierta porque la perspectiva del peatón es muy dis-tinta a la del automovilista o a la del pasajero. Claroque tiene que haber la intención manifiesta deapreciar la ciudad y recorrerla con ese propósito, yasea el caso de un propio o de un ajeno. El CentroHistórico tendría que ser el punto de partida del

periplo si consideramos lanecesidad de estableceruna cronología histórica y

hacer una búsquedadel sentido profundode la ciudad, sobre to-do para el caso de las

ciudades latinoame-ricanas producto delvasto programa fun-dacional desarrolla-do durante la do-minación españolaque partió siemprede un esquema tra-dicional, práctico y

matizado con ciertas ideas renacentistas vitrubianas(firmitas, utilitas venustas… firme, útil, hermoso),algo desdibujadas por las circunstancias propias dela conquista y de la colonización.

En este esquema, el“centro” es el punto fun-damental del proyectoconstructivo urbano yresponde a un razo-namiento político eideológico muy de-finido y necesa-rio para los do-minadores. Peroemprendamosya nuestro reco-rrido desde el“Zócalo” o pla-za de armas,dos denomina-ciones del mismoespacio, arquitec-tónica y funcional,respectivamente.

Si miramos a nuestro alrededor en un giro com-pleto de 360 grados encontraremos un formidablemarco arquitectónico formado por las construccionesrepresentativas del poder durante la etapa colonial deMéxico; la Catedral, símbolo del monopolio ideoló-

gico que ejerció la iglesia ca-tólica vinculada en forma

directa con el poder civil através del regio patrona-

to, en este caso repre-sentado arquitectó-

nicamente por lacasa consistorial

hoy Palacio Muni-cipal y los portalesque representaronmaterialmente el

matria no. 6 • julio de 2007 ·OPINIÓN· 33

Por Manuel de Santiago Hernández*

Caminar la ciudad de Puebla

poder económico ya que fueron en su origen el al-bergue de los comerciantes y lugar importante parala vida productiva de la sociedad.

En la propia plancha del Zócalo encontramos en ellugar central la fuente de San Miguel que en el mo-mento en que fue instalada funcionó ya más comoelemento de ornato que como recurso regular parael abastecimiento de agua, función completamentedistinta a la de las demás fuentes de los barrios dePuebla que eran los lugares en donde se proveían deagua los vecinos para su uso diario.

Sin embargo, esta visión planteada en los párrafosprecedentes es sólo un recurso de interpretación his-tórica tan necesario para una valoración patrimonialdel conjunto monumental poblano declarado Patri-monio Cultural de la Humanidad, pero no nos expli-ca las miradas contemporáneas acerca de la inserciónen nuestra vida actual de ese Centro Histórico, ni delreconocimiento y valoración sociales de las genera-ciones que coexisten hoy en Puebla acerca de este

espacio, nodal para unos y poco importante paraotros. Porque la admiración que nos causan las edifi-caciones antiguas no es razón suficiente para incor-porar este Centro Histórico a nuestra idea actual de laciudad que explique los nuevos usos, asuntos, movi-mientos, tránsito, oficios, profesiones, giros comercia-les, necesidades y preferencias de una sociedad enconstante cambio.

¿Es la necesidad de control de este sitio para pre-servarlo lo que justificaría sus usos sociales? ¿Quién síy quién no debe usar el centro? ¿Son los vendedoresambulantes una lacra urbana? ¿Son los políticos y losintegrantes de las “fuerzas vivas” los únicos usuarioslegítimos de este lugar? ¿Las manifestaciones públi-cas de algunos grupos sociales pueden ser expresadasen el Centro Histórico? ¿Es compatible con la vidaciudadana y su eventual aprovechamiento como setcinematográfico?

Las preguntas son del todo pertinentes en una so-ciedad que se precia de democrática, pues además de

los valores históricos, artísticos y funcionales el CentroHistórico, éste posee un valor simbólico que contribu-ye a la identidad cultural de los habitantes de toda laciudad, en mayor o en menor medida. La definición desu uso debe ser múltiple, clara y consistente con los in-tereses de la sociedad en su conjunto, así como con losdiversos actores sociales que transitan por él y lo viven,ya sea en la existencia doméstica como en la laboralo en la de las actividades ciudadanas de todo tipo.

Globeros, vendedores ambulantes, burócratas detoda laya, fritangueras, estudiantes, beatas, monjas,campesinos emigrados, ancianos, boleros, franeleros,policías, turistas multicolores, gestores, meretrices,funcionarios, músicos callejeros, negociantes; transe-úntes temporales o frecuentes se mueven o se esta-cionan temporalmente en un centro que finalmenteestá vivo y que, insisto, debe ser caminado para apro-piarse de él… aunque sea nomás tantito.

*Director de la Biblioteca José María Lafragua, BUAP

m

Page 4: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

44 matria no. 6 • julio de 2007·ANÁLISIS·

El paisaje urbano está determinado por esas for-mas en que un territorio se ha ido transforman-

do a lo largo de la historia por la acción ejercida pordiferentes actores sociales con intereses políticos,económicos, ideológicos y culturales diversos quemuchas veces son contrapuestos.

Una ciudad, un asentamiento, tiene tatuadas ensus calles, en sus casas, en sus colonias, en sus diver-sos espacios, su historia, los tiempos de bonanza ode crisis, las tecnologías edificatorias, las de extrac-ción de agua y desechos de las inmundicias huma-nas; las formas de vida, ideologías o sistemas de cre-encias de los diversos actores que han dejado suhuella y la siguen dejando con el paso de los días.

Las urbes, cuando son vividas con intensidad porsus pobladores, se van modificando continuamenteen la búsqueda de la satisfacción de sus necesidadesbásicas o debido a la acción ejercida por grupos oagentes inmobiliarios que buscan mediante la espe-culación del suelo una ganancia económica al mis-mo tiempo que ofertan predios o viviendas ya cons-truidas por doquier y al por mayor sin que en la mayo-ría de los casos se provea, por parte de los particula-res, de los espacios necesarios y suficientes para equi-pamiento, infraestructura o servicios, como si esofuera ajeno a ellos, y su tarea fuera construir sólo“máquinas para vivir” que generan importantes ga-nancias económicas aún a costa de los ecosistemas.

En una ciudad como Puebla los desastres dejanhuella en la memoria de sus habitantes que perdie-ron sus moradas total o parcialmente debido a unafuerte inundación, un desgajamiento de cerro, algu-

na explosión de una industria o un fuerte viento.La imagen urbana de un municipio como Puebla

es heterogénea; coexisten los asentamientos semi-urbanos, urbanos, colonias populares, con sectoresde alta plusvalía como complejos comerciales, frac-cionamientos residenciales o lugares con varias ins-tituciones educativas. En algunas zonas ya se obser-van torres de vivienda de lujo que emergen tratan-do de alcanzar el cielo dando la bienvenida a nue-vas formas de ocupación vertical ante la inminenteescasez de suelo susceptible de ser urbanizado. Elpaisaje urbano nuevamente se está modificando demanera importante, incluso se puede observar encolonias pertenecientes a la llamada primera mo-dernidad urbano-arquitectónica de las décadas delos 40 y 50 que las edificaciones de uno o dos nive-les de altura van desapareciendo para ser sustituidaspor altas torres de acero y concreto.

Por Varinia López Vargas*

Paisaje urbano y actores sociales

Historia física de la cuidad

La ciudad tal como la conocemos hoy, pequeña ogrande (y hasta las zonas metropolitanas) se fue

formando poco a poco a través de la historia.En la Grecia Antigua, la polis se consideraba el

centro de vida económica, social y política, lo quepermitía a los ciudadanos convivir en un solo lugary suplir ciertas necesidades culturales. A su vez, du-rante el Imperio Romano gracias a la preocupaciónque se tenía por el ciudadano se comienzan a desa-rrollar los servicios públicos como el alcantarillado,baños, etcétera, y otras construcciones sociales yeconómicas como mercados, basílicas y templos.

En la Edad Media las ciudades muralla, ademásde ser los centros religiosos y espirituales, se con-vierten en un refugio para los habitantes contra lainseguridad bélica y persecuciones. Además es enesta época cuando se comienza a ver a la ciudad ensu cualidad artística por lo que se construyen espa-cios públicos para la población.

Posteriormente en el Renacimiento el patio dearmas se vuelve a convertir en el centro de vida eco-nómica, social y política. Al mismo tiempo el con-

texto político y económico permite que el espaciourbano empiece a crecer fuera de las murallas.

Después de la Segunda Guerra Mundial, con ladestrucción de los centros de las ciudades, la gentecomienza a irse a las periferias y comienza el pro-blema de la vivienda con lugares insalubres y caren-cia de servicios básicos.

A principios del siglo XX el Movimiento Modernointrodujo la idea de funcionalidad además de estéticay en la segunda mitad del mismo siglo comienzan losfenómenos de expansión metropolitana, el creci-miento centrífugo de las ciudades y la segregación.

Actualmente el 75 por ciento de la población enLatinoamérica vive en ciudades, y es un cifra quetiende a crecer debido a diversos fenómenos comola migración y los problemas económicos y socialesque sufre la región. Además la distribución de la po-blación se presenta por un lado, con una gran con-centración en grandes ciudades (zonas metropoli-tanas) y por el otro, una gran dispersión en peque-ñas ciudades y comunidades.

Los principales problemas urbanos que enfren-tan hoy en día los países de América Latina son prin-cipalmente la segregación y polarización, la cohabi-

tación de población pobre con población de gran-des recursos económicos, la violencia e inseguridad,el desempleo y la marginación.

La ciudad como espacio socialUna visión más amplia de la ciudad incluye con-

cebirla como un espacio social, simbólico, colectivo ypúblico. Platón decía que la polis (o ciudad) se for-ma por la incapacidad del individuo para bastarse así mismo. El hombre (a diferencia de los animales)ocupa los espacios y los acondiciona, los vuelve habi-tables, convierte un lugar físico en un espacio social,en un entorno. Este hecho implica desde el indivi-duo nombrar, clasificar, apropiarse, representarse ytambién procesos sociales como la identidad, la per-tenencia, la memoria social. Por eso, la comprensiónde un espacio urbano no puede sólo concebirse co-mo un espacio físico, sino visualizarlo y pensarlo co-mo el entorno donde se desarrolla la vida cotidianade las personas y que a su vez, concreta las relacio-nes sociales.

También las relaciones sociales influyen en la formade apropiación y condicionamiento de los espaciosurbanos; los cafés, por ejemplo, definidos como

Por Verónica Rosas*

EL ESPACIO URBANO: LO SOCIAL

Asentamientos semiurbanos,

urbanos, colonias

populares, coexisten con

sectores de alta plusvalía

como complejos comerciales,

fraccionamientos

residenciales o torres de

vivienda de lujo que

emergen tratando de

alcanzar el cielo

Page 5: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

un lugar para el encuentro y la charla, son diseñadosy condicionados (distribución de muebles, música,iluminación) con el fin del encuentro, como las igle-sias son un espacio para la calma y el rezo. Esto es,el entorno es un antecedente al comportamiento,pero lo más interesante es que ofrece oportunida-des de acción futura.

La ciudad es un espacio vivo, dinámico, que exigeuna multivisión. Actualmente se está volteando aver desde diversas ciencias (sociología, antropolo-gía, psicología ambiental, diseño urbano y arquitec-tura) el espacio urbano como aquél donde se desa-rrollan un conjunto de fenómenos sí físicos, perotambién sociales. Investigadores sociales de Francia,Brasil, España y México estudian la relación que exis-te entre el espacio físico-social y fenómenos socialescomo la violencia y la inseguridad, los desastres am-bientales, metropolización, vecindad, la segrega-ción, la migración, desigualdad, etcétera. En la déca-da de los 90 en Nueva York la Gran Manzana era unlugar lleno de drogas, delincuencia y prostitución; elgobierno comenzó a ganar terreno instalando tien-das para la familia como Disney y otras más, lo queterminó por correr a los antiguos visitantes de estazona (aunque más que solucionar el problema lotrasladó a otro lugar).

Las ciudades contemporáneas presentan ademásuna pérdida del espacio público como centro de en-cuentro, intercambio y esparcimiento. Los espacios

urbanos son el lugar por excelencia para ejercitar laciudadanía, porque la ciudad es definida como unespacio público, espacio de interacción, donde semezclan valores, identidades, argumentaciones,comportamientos y emociones; por eso los espaciosurbanos deben facilitar la convivencia entre los ciu-dadanos basada en la diversidad y la justicia social,contribuir al contacto y mejorar la calidad de vida1.

Sin embargo, además de ver procesos sociales yeconómicos, debemos incluir al sujeto y sus relacio-nes con el entorno y con otros sujetos, su perspecti-va y su percepción, su opinión, la comunicación, lasrepresentaciones; porque él es el que hace la vidacotidiana, las relaciones que se entretejen en unespacio urbano (colonia, vecindad, escuela, fraccio-namiento, vivienda, pueblo, ciudad, etcétera.) Unlugar es definido físicamente por las relaciones quese desarrollan en él, por las estructuras sociales, porlas ideologías, la convivencia, pero también por laforma en que el individuo se mueve, usa y se sienteen un entorno determinado.

En nuestra ciudad, un trabajo interesante lo estárealizando el Centro Universitario de Prevención deDesastres Regionales de la BUAP con el Ordena-miento Ecológico y Territorial de la ciudad de Pue-bla en la que a través de talleres se está tomando encuenta lo que los habitantes de esta ciudad tienenque decir respecto al ordenamiento. Otro trabajointeresante lo realizaron Bodil Andrade y Benjamín

Ortiz (2002) en San Pedro Cholula trabajando con lasemiótica (sentido y significación) como base y cons-truyendo junto con los habitantes la gestión ciuda-dana para un medio ambiente sustentable en estemunicipio.

Para lograr que el espacio urbano sea cada vezmás un espacio público de encuentro e identidad, departicipación e inclusión, el gobierno, los urbanistas,los arquitectos, los científicos sociales y los ciudada-nos necesitamos voltear a los procesos sociales como laidentidad, la historia de la ciudad, las representacio-nes sociales, el imaginario social y la memoria colec-tiva, entre otros. Pero también ante los problemasactuales que enfrentan las ciudades y en concreto laZona Metropolitana de Puebla-Tlaxcala es necesarioorganizar prácticas y utilizar recursos que apuestenpor una mejor calidad de vida de los habitantes.

*Psicóloga social.

matria no. 6 • julio de 2007 ·ANÁLISIS· 55

La ciudad ha sido definida

tradicionalmente por sus

características físicas

(edificios, calles, grandes

avenidas, vías de comuni-

cación). Sin embargo, un

espacio urbano es también

un espacio social, cultural,

económico y político que

amerita un enfoque social

1 Este artículo trata sobre el contexto urbano, lo cual noexcluye que el ejercicio de la ciudadanía, la lucha por justiciasocial y la calidad de vida no se desarrollen también en contex-tos rurales.

Dependiendo del origen de las comunidades ocolonias el paisaje urbano se ha ido configurandoconforme se va expandiendo un asentamiento en suproceso de consolidación. De manera que en unaciudad como Puebla, la aparición de periferias suce-sivas está acompañada de acciones edificatorias quevan convirtiendo un paisaje natural en uno antropi-zado en donde predominan concreto, asfalto, tabi-ques y block. No son pocos los asentamientos quesurgieron alejados de la ciudad cuya única condiciónpara su ubicación fue la existencia de un camino,brecha o vereda que les permitiera comunicarse conel resto de la urbe.

En muchos de los asentamientos de origen irre-gular, como si brotaran de un salero van aparecien-do muros y techos que después se convertirán enviviendas en medio de tierra seca, pastos, zonas ar-boladas o lodosas por las que a nivel de piso o entrozos largos de madera simulando postes, se tien-den marañas de cables de luz. En los patios o tras-patios conviven los niños con pollos, gallinas, o cer-dos que terminarán su existencia cuando el asenta-

miento deje de parecer una zona semiurbana, seconvierta en una colonia popular en la que los veci-nos recién llegados se quejen por las moscas y elhedor de los animales de los que allí ya vivían.

En los primeros tiempos nadie se ocupa de dejaráreas verdes o recreativas, porque los campos o te-rrenos de los alrededores constituyen sus canchas defutbol, campos de béisbol o lugares de solaz y espar-cimiento, hasta que un día, el propio proceso de ex-pansión y ocupación les enseña, sin importar la apro-piación social ejercida por años en esos predios, quetambién ya tienen dueño; éste no vacilará en haceruna unidad habitacional cerrada de interés social apro-vechando la existencia de redes de infraestructurapara servicio que tantos años de esfuerzo y nego-ciaciones les costaron a los moradores del lugar.

El único espacio que no puede faltar es el desti-nado al culto religioso, ese predio sí lo escogen, cui-dan, respetan y mantienen todo el tiempo, desde elprimer momento en que sólo era una cruz debajode una techumbre de lámina, lona u otro materialperecedero, hasta convertirse en un recinto techado

a veces a imagen y semejanza de la basílica de Gua-dalupe que los protege de las inclemencias del tiem-po. Esa edificación será por siempre uno de los hitosmás importantes y queridos del lugar donde se con-gregarán para rendirle culto al santo patrono cadaaño con una memorable fiesta en la que cooperangustosos casi todos los miembros de la comunidad;ahí también se alfabetizan o aprenden artes culina-rias, de costura o otras actividades relacionadas conlos usos y costumbres de los lugareños.

Asentamientos con diversos tipos de trazas sevan uniendo unos con otros sin que tampoco se ha-yan previsto vialidades o caminos que permitan unacontinuidad vial; todo esto, aunado a las condicio-nes del terreno, provoca una desintegración territo-rial importante, dificultando la dotación de infres-tructura y servicios.

En fin, el paisaje urbano es diverso y en él se pue-de leer el imaginario de quienes participaron y par-ticipan en su conformación.

*Doctora en Urbanismo por la Universidad de Valladolid, España.

m

m

Page 6: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

66 matria no. 6 • julio de 2007·ANÁLISIS·

Imagen urbana y contaminación visual

La imagen urbana de una ciudad o un asenta-miento puede provocarnos distintos estados de

ánimo. Por ejemplo en una calle, dependiendo deltipo de edificaciones, sus colores, materiales, com-posición y proporción entre vanos y macizos, la con-tinuidad o discontinuidad entre la líneas horizonta-les que visualmente se forman entre cornisas,barandales, alturas de las ventanas, de las propiasedificaciones, la disposición de una fachada en rela-ción con otra conformando perfiles urbanos diver-sos, mandan al inconsciente de los transeúntes sen-saciones agradables o desagradables que se vanmagnificando si existen además elementos quecontribuyen a configurar una imagen urbana de-gradada, como lo son los materiales y el estado deconservación de guarniciones, banquetas, aceras,múltiples cables y postes de luz, teléfono o de otrosservicios.

En ciudades como la Angelópolis, con muy pocatradición en el diseño y cuidado de la imagen urba-na, se permite la colocación a diestra y siniestra demobiliario urbano diverso en formas, materiales ycolores, como por ejemplo casetas telefónicas, bu-zones enormes, paraderos de autobuses sobre ban-quetas muy angostas dando lo mismo si se trata desectores con altos flujos vehiculares y/o peatonales,ocasionando que los de a pie tengan que bajarsede la banqueta para poder circular.

En el caso de los expendios de periódicos y revis-tas, éstos sin ninguna consideración invaden partede la banqueta en las esquinas, ya sea con exhibi-dores o con el propio producto en el piso, y ni sediga de los quioscos, fallida evocación de la épocaporfiriana, que por su gran tamaño ocupan uno delas carriles de circulación vehicular, a tal grado queen algunos sectores les han tenido que poner pro-tecciones metálicas, por si un conductor despistado oalcoholizado no se percata a tiempo de su presencia.

Los botes de basura son otros elementos queademás de estorbosos por su ubicación o mal dise-ño en algunos sectores constituyen un foco de in-fección, la basura frecuentemente se desparrama y suestado de conservación es bastante deplorable; sesuman así al deterioro visual e invitan a los vecinos aque los utilicen como lugar para acumular sus dese-chos en vez de esperar a que pase el camión corres-pondiente. En las unidades habitacionales multifa-miliares la situación es verdaderamente lamentableya que los contenedores están atiborrados y rodea-dos de bolsas mal cerradas, rotas por perros o roe-dores que cotidianamente buscan su alimento.

Es muy común observar que en horas de máximademanda vehicular los camiones de basura vacían

Por Martín Hernández Alcántara

estos contenedores obstruyendo el paso incluso enavenidas con importantes flujos vehiculares, sin con-tar el hedor que van dejando a su paso como unaespecie de aromatizante urbano.

La iluminación, dependiendo de la intensidad ygrado en que las luces de una calle están dispuestas,también contribuyen a determinar una imagen ur-bana que invita al relax después de un arduo día o,en cambio, provocan inseguridad por la ausencia deluminarias, o dejan una sensación estresante queimpide un buen descanso durante la noche.

Al no estar regulado el tipo o tamaño de publici-dad que puede utilizarse en las edificaciones, com-pañías refresqueras, panaderas, de refacciones o decualquier producto pintan con colores y letreros alusi-vos a sus marcas las fachadas, de manera que pode-mos encontrar un rojo coca cola junto a un amarillobardhal, o un verde, azul, rosa en una especie de com-petencia visual que se agrava con la presencia de lasmarquesinas iluminadas en la que lo mismo puedeestar una chica semidesnuda, que un tierno gansitomarinela que pide que lo recuerden.

A las toneladas de basura y ausencia de vegeta-ción adecuada en las calles hay que sumarle los múl-tiples espectaculares aéreos de algún complejo gas-tronómico que se puede ubicar cerca de los rostrostotalmente palacio, del pirata del caribe Jack Spa-rrow, el Hombre Araña, de la casa o casas de tussueños o los pendones itinerantes de distintos tiposanunciando bailarinas exóticas o de ballet, o cual-quier clase de evento en los postes; súmese la pro-paganda adosada con caras de luchadores, cantan-tes de rock, pop, trovadores o corridos que va con-formando una gama colorida difícil de digerir.

Por si este cóctel visual no fuera suficientementeestresante, caras sonrientes con dientes lustrosossaltan a la vista, aparecen en todas partes a veces

como entes fantasmagóricos, de todos tamaños ycolores en los techos, ventanas, bardas, marquesi-nas, postes, pendones, espectaculares e inclusive ennuestro coche: se trata de la propaganda electoral,una forma que intimida una y otra vez en época deelecciones, y aunque se supone que su presenciaestá regulada, hay quienes nunca cumplen con reti-rarla o borrarla y los candidatos se pasan años son-riendo desde bardas y postes como una especie derecordatorio de que estuvieron en ese lugar hacien-do campaña; los que ganaron, los dejan como untrofeo o porque el nuevo cargo les distrae de qui-tarlos, y los que perdieron, porque todos los recur-sos se agotaron un día antes de la elección.

¿Qué necesidad de gastar tanto dinero en papely plástico que además de contribuir al deterioro dela imagen urbana, alteran el ánimo de los poblado-res, va a dar a los rellenos de basura, a cuerpos deagua o barrancas sin que muchos de estos materia-les se puedan reciclar por la cantidad de tintas y sol-ventes utilizados para resistir las inclemencias deltiempo, tarden muchos años en degradarse y tapenlas coladeras en épocas de lluvia?

Algunos de los pendones son retirados por po-bladores de asentamientos irregulares en confor-mación para ser usados como los primeros resguar-dos en techos y muros de las moradas, mientras setiene dinero para otra cosa mejor.

¿No sería mejor que esos recursos los utilicen loscandidatos y los partidos para promocionarse conacciones y obras que al mismo tiempo mejoren laimagen urbana de algún sector de la ciudad? Elimpacto sería mucho mayor.

No cabe duda que falta imaginación y pocasganas de contribuir a la formación de una verda-dera cultura de respeto por el otro y por el medioambiente.m

Page 7: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

matria no. 6 • julio de 2007 ·ANÁLISIS· 7

El contacto con la naturaleza es una de las inquie-tudes del hombre moderno. Las prisas y la con-

taminación de la gran ciudad nos hacen apreciar ca-da vez más la belleza de los entornos naturales, hoycada vez más ausentes en las grandes urbes.

El manejo y conservación de las “áreas verdes” eshoy por hoy una de las prioridades para todos losque vivimos en zonas urbanas, por ello es que en losPlanes y Programas de Desarrollo Urbano que se rea-lizan en nuestro país se atiende con mayor énfasis lasituación ambiental dentro y fuera de las ciudades.

El concepto de “verdes” en México se remonta ala segunda mitad del siglo XIX cuando los procesosde crecimiento y desarrollo urbano generaron pro-yectos de renovación basados en la higiene públicatanto referente a la infraestructura de drenaje ycomunicaciones como a la existencia de grandesparques públicos que contrastaban con la traza anti-gua de las ciudades como por ejemplo en la épocanovohispana. Ante el crecimiento poblacional yterritorial que manifestaban algunas ciudades delpaís, se consideró necesario dotarlas de espacios ver-des en plazas, parques, jardines, camellones y ban-quetas, sobre todo por dos razones fundamentalesrelacionadas con la sanidad tanto social como física,y es que en la actualidad siguen siendo precisamen-te estos espacios abiertos los que desempeñan todoun agregado de funciones esenciales en el bienestary la calidad de vida de los que habitamos los centrosurbanos. Desde el punto de vista social, las áreasverdes pueden generar impactos positivos quebeneficien directamente a los habitantes ya que estosespacios sirven para el esparcimiento, la recreación yla cultura; desde el aspecto ambiental, las áreas ver-des urbanas fungen como elementos que impactandirectamente sobre el medio ambiente urbano,pues contribuyen de manera importante a la regu-lación del clima urbano; ayudan a conservar el agua,ya que las áreas verdes son casi los únicos espaciosdentro de la mancha urbana a través de los cualespenetra agua en el subsuelo beneficiando la recar-ga de acuíferos; contribuyen a controlar la contami-nación del aire; liberan oxígeno a la atmósfera yabsorben bióxido de carbono; los árboles y arbustosdiluyen la mezcla de contaminantes y filtran gases através de los poros por los que respiran sus hojas.Influyen, pues, positivamente en el clima de la ciu-

dad. La presencia de vegetación bloquea la radia-ción solar, reduce la velocidad del viento y disminu-ye la evaporación del suelo. Todo ello ayuda a dis-minuir los cambios bruscos de temperatura, mante-niéndola más baja que la del aire circundante du-rante el día y evitando que disminuya abruptamen-te durante la noche. La ausencia de vegetación enalgunas zonas de la ciudad puede determinar unaumento de temperatura de hasta más de diez gra-dos centígrados durante el mediodía. La vegetaciónamortigua el ruido. Las agrupaciones de árboles deespeso follaje contribuyen a la disminución del rui-do emitido por los vehículos, industrias o por las dis-tintas actividades humanas, incrementan la repro-ducción de la flora y fauna, pero sobre todo permi-te generar un equilibrio ambiental en suelo, agua yaire, elementos fundamentales para los entornosurbanos1.

La situación ambiental y sobre todo la conserva-ción de las áreas verdes existentes, así como la pro-puesta de nuevos espacios abiertos en zonas urba-nas, se está resolviendo desde distintos instrumen-tos legales como son los Planes, Programas o Esque-mas de Ordenación Territorial, con un claro interéspor la sustentabilidad, preocupación originada pri-mordialmente por la expansión de la mancha urba-na, el cambio de uso del suelo, la pérdida de sueloagrícola o como un elemento regulador para losnuevos asentamientos. Hoy más que nunca, nuestroterritorio se ha venido enfrentando con el gravísimoproblema que es la especulación inmobiliaria. En elcaso específico del municipio de Puebla, la cantidady calidad de las áreas verdes con las que cuenta esmuy pobre e insuficiente y se ha venido deterioran-do precisamente por todo lo que origina el creci-miento urbano. De acuerdo con los datos de la Or-ganización de las Naciones Unidas (ONU), el áreaverde recomendada por habitante es de 16 m², laOrganización Mundial de la Salud (OMS) recomien-da 9 m² de áreas verdes públicas por habitante y undiseño de ciudad que incorpore una red de espaciosverdes accesibles a 15 minutos a pie desde las vivien-das. Según información reportada por el ProgramaMunicipal de Desarrollo Urbano Sustentable dePuebla (PMDUSP), únicamente se cuenta con un me-tro cuadrado de área verde por habitante en el mu-nicipio, y se cuenta aproximadamente con 160.97 hade áreas verdes, pero como ahí mismo describen,para que la población se vea beneficiada y se gene-ren impactos positivos a través de los recursos y ser-

vicios ambientales se requiere un total de mil 312.87ha de dichas áreas; es decir, que se tiene un déficitde mil 151 ha, tomando en cuenta solamente lo querecomienda la OMS y el total de habitantes con losque contaba el municipio en el 2005, que era de unmillón 458 mil 752 habitantes (INEGI). Desafortuna-damente, las áreas verdes que más se han protegi-do son las de la parte central del municipio: el zóca-lo, el Paseo Bravo, el Parque Juárez, el Parque Eco-lógico y otras de menores dimensiones localizadasprincipalmente en la zona de monumentos, pero nohabía hasta la fecha una preocupación por conser-var estos espacios en las zonas periféricas de la ciu-dad y del municipio en general. Ahora se pretendeproteger, recuperar y restaurar esas áreas naturalesque todavía hay en el municipio a través de un ins-trumento legal como es el PMDUSP del Ayunta-miento y sustentado con estudios realizados tantopor especialistas, académicos y demás personas preo-cupadas no sólo por la conservación de la riqueza ypatrimonio natural, sino por el futuro del territorioy el proyecto de ciudad que se quiere a través delPrograma de Ordenamiento Territorial IntegralSustentable del municipio de Puebla elaborado porla Universidad Autónoma de Puebla.

Es necesario alertar acerca de la urgente necesi-dad por invertir en más áreas verdes para disminuirproblemas tan perjudiciales para la calidad de vidaen el municipio. La buena planeación urbana puedereducir estos efectos, ya que los asentamientos bienplaneados y los densamente poblados pueden redu-cir la necesidad de cambio en el uso de la tierra, yofrecer oportunidades de ahorro de energía. Si lasciudades están bajo una administración adecuada,con la suficiente atención puesta en el desarrollosocial y el medio ambiente, se pueden evitar los pro-blemas generados como consecuencia de una urba-nización rápida. Un primer paso para avanzar enesta dirección sería que los gobiernos de cada admi-nistración incorporen expresamente un componen-te urbano-ambiental en sus políticas y programas dedesarrollo que integren acciones preventivas y nocorrectivas en el territorio y su medio ambientenatural.*Arquitecta, investigadora del Centro Universitariopara la Prevención de Desastres Regionales, BUAP.

m

1 Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento

Territorial del D.F., PAOT, 2000

Áreas verdes urbanas

Por Mónica Olvera Nava*

Page 8: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

88 matria no. 6 • julio de 2007·DIVULGACIÓN·

Prácticamente en todas las ciudades hay faunaque habita en ellas y que realizan gran parte de

sus actividades entre las calles, los parques, los edifi-cios y los patios de las casas e incluso dentro de ellas.Generalmente a estos animales los clasificamoscomo malos y buenos. Dentro de los primeros estánlas ratas, esos seres misteriosos que se mueven ahurtadillas, primordialmente de noche, entre los rin-cones de cualquier estructura, devorando y destru-yendo todo a su paso y dejando una estela demicrobios nocivos para nuestra salud. Por otro ladoestán los animales que consideramos buenos, entrelos que destacan las aves, ya que generalmente losvemos de día, brincando y volando entre los árbo-les, surcando el cielo a gran velocidad, deleitándo-nos con su canto, comiendo las frutas de los árbolesy los insectos que extraen de la superficie de la tie-rra o de entre el follaje de las plantas y atendiendoa sus crías, ya sea en los nidos o fuera de ellos. Sinembrago, ¿nos hemos puesto a pensar si realmenteesta clasificación es correcta?, ¿podría ser que, des-pués de pensar un poco, los villanos, como las cuca-rachas, sigan siendo villanos, pero los buenos, comolos pajaritos, posiblemente no lo son tanto? En estaocasión dedicaremos estas líneas a hablar del go-rrión común, también conocido por gorrión casero,doméstico, europeo, inglés, chillón o nixtamalero ytratar de reflexionar en torno a las consecuencias desu presencia dentro de las ciudades.

El nombre científico de esta ave es Passer domes-ticus, originaria de Europa, al igual que las ratas yuna de las dos especies de cucarachas con las quecompartimos nuestras viviendas. A estos gorrioneslos trajeron los primeros colonizadores anglosajonesen el siglo XIX, posiblemente con el fin de que sunuevo lugar de residencia se pareciera un poco a latierra en la que nacieron. En poco tiempo estas avesse adaptaron a su nuevo entorno y rápidamente sedistribuyeron por toda América. Actualmente pode-mos verlos pululando por todas partes, práctica-mente en cualquier ciudad de nuestro país, salvoraras excepciones, como es el caso de la ciudad deCuetzalan en el estado de Puebla, Xalapa y Coate-pec, ambos en el estado de Veracruz, por citar algu-nas. Las hembras y los machos son distintos; las pri-meras tienen el plumaje con tonos de gris, café y lasalas salpicadas de blanco y su pico es grisáceo; losmachos tienen una mancha obscura en el rostro ygarganta, las plumas de las alas y la parte superiorde la cabeza son café rojizo y son un poco más cor-pulentos que las hembras. Son tan comunes que nonos causan ninguna admiración cuando se posan enlos cables de luz o de teléfono, encima de los murosde los edificios y casas, en el suelo de las calles y en

las banquetas, sobre todo donde hayalimento. También es posibleobservarlos “discutiendo”entre ellos en la época decalor y lluvias (realmen-te lo que están ha-ciendo es desarro-llar toda la activi-dad que tiene quever con la repro-ducción). Los ni-dos de estas avesse encuentran encualquier lugar al-to y alejado delugares en los quelos depredadores nopuedan alcanzarlos, ta-les como postes de luz,rendijas y cavidades de losmuros y en árboles con follajedenso. Presentan una longevidad de másde diez años de vida. Colocan de cinco a siete hue-vos con manchas café. Durante la anidación ambosprogenitores atienden a las crías hasta el momentoen que éstas son independientes. Se alimentan desemillas de especies cultivadas como de las nativas.Son depredadores de insectos, tanto larvas comoadultos entre las que se encuentran las mariposas.Durante la primavera y el otoño también se alimen-tan de flores de especies locales. Igualmente tienenla costumbre de alimentarse de los desperdicios decomida que producimos.

Es necesario preguntarse cuáles podrían ser lascausas de su éxito y, más importante aún, qué efec-to ha tenido la presencia del gorrión común en laspoblaciones de aves nativas, es decir, aquéllas que seencuentran en nuestro país de manera natural. Larespuesta a la primera pregunta es, en primer lugar,y como mencionamos anteriormente, la gran varie-dad de alimentos que consume y, en segundo, enque los sitios donde construye sus nidos se encuen-tran precisamente en las ciudades. Apoya lo ante-rior el hecho de que a los gorriones comunes no losencontramos en el campo, ni siquiera en las zonasde cultivo, donde los desperdicios de alimento sonmenos frecuentes y los sitios de anidación caracte-rísticos de las ciudades son inexistentes, además que enlas zonas rurales hay depredadores más efectivos.

En un estudio realizado en el noreste de EstadosUnidos, Karen Cooper y colaboradores recopilarondatos sobre la abundancia del gorrión común y elgorrión mexicano (Carpodacus mexicanus), la cual esuna especie nativa que es común verla también en

las ciudades. Estos autores encontraronevidencia de que el gorrión común

ha desplazado a poblacionesde gorrión mexicano de

esta porción de nuestrovecino del norte, lo cual

convierte al gorrióncomún en un villano.Se encontró que ensitios en los cualessólo las poblacionesdel gorrión comúneran disminuidas porenfermedades, el go-

rrión mexicano incre-mentaba su abundan-

cia. Con base en lo ante-rior suponemos que en la

ciudad de Puebla y en otrasciudades de México este gorrión

“ajeno” afecta al gorrión mexicano,así como a otras especies nativas entre las

que se encuentran las tórtolas (Columbina inca yColumbina passerina), pues sabemos que el gorrióncomún es una especie muy agresiva, interfiriendodirecta o directamente con otras. Al mismo tiempo,se tiene conocimiento de que es potencialmenteportadora de enfermedades y actúa como reservo-rio de algunas otras, lo que debido a sus hábitosgregarios de socialización, incrementa el riesgo entransmisión de enfermedades. Asimismo, es necesa-rio conocer si el hábito de anidar en estructuras talescomo postes de luz y teléfono o en los muros de losedificios tiene efecto en el adecuado funcionamien-to de las líneas telefónicas y eléctricas o si causandeterioro o ineficiencia, ya que es común ver nidosincluso en las lámparas del alumbrado público.

El gorrión común no es la única especie de aveintroducida por el hombre, comparten esta catego-ría la paloma (Columba libia) y la garza garrapatera(Bubulcus ibis). Además, en las ciudades contamoscon especies nativas muy abundantes, como el tor-do (Molotrus aenus) y el zanate (Quiscalus mexica-nus), a quienes abordaremos en otra ocasión.

Con esto no pretendemos ser alarmistas ni catas-trofistas, queremos ofrecer una imagen un poco másapegada a la realidad y que seamos concientes de quelas especies con las que compartimos nuestro espaciono son ni totalmente buenas ni totalmente malas.Además, desde el punto de vista puramente cientí-fico, son extraordinarios ejemplos de la forma en laque las especies se adaptan a un entorno nuevo.

*Catedráticos de la Escuela de Biología de la BUAP.

Por Ana Lucía Castillo Meza y Juan Héctor García-Chávez*

El gorrión común,un villano disfrazado de un alma buena

A despecho de su aspecto inofensivo, el gorrión, nuestro vecino, tiene hábitos de

vida y reproducción que pueden no ser tan inocuos como pensamos

m

Page 9: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

matria no. 6 • julio de 2007 ·OPINIÓN· 9

I. Paisaje urbano

Es difícil calcular hasta qué punto el paisaje urba-no existe por sí mismo como resultado del dise-

ño arquitectónico de una urbe o es más bien el efec-to sensible de una construcción de la mirada delpeatón o del visitante / habitante de una ciudad. Deentrada, la noción de paisaje urbano ya plantea unatransformación que hace referencia al objeto decontemplación. En la tradición pictórica, la pinturade paisaje dio forma a un género que enfatizó losestados de ánimo del artista a través de escenasbucólicas o abiertamente espirituales, como en lapintura de Caspar David Friedrich. Cuando se hablade paisaje, frecuente pero no exclusivamente, éstese asocia con experiencias de percepción de exten-siones de terreno con cualidades artísticas; cualida-des que, rescatadas por la mirada de un observadorsensible, casi siempre se encuentran fuera de laurbe, por donde la modernidad aún no ha transfor-mado a la tierra en asfalto. Pero me atrevería a afir-mar que ha sido la sensibilidad moderna, aquéllaque afectó a grandes humanistas a finales del XIX yprincipios del siglo XX, la que hizo posible una trans-formación radical en la valoración del paisaje: la ciu-dad como espectáculo, la industrialización como pa-decimiento y como fuente de reflexión, el afán deracionalidad como esperanza de progreso, entreotros tópicos modernistas, fueron los detonantespara que hoy en día la metrópoli, la megalópolis, laciudad industrial, desbordada, inhabitable, incohe-rente, desolada pero esperanzadora a su vez, seavista como el paisaje artístico por excelencia: la jun-gla de asfalto, la ciudad imposible, no deja de pro-vocar el interés de escritores, historiadores, fotógra-fos, cineastas, arquitectos... y habitantes mismos. Ladenominación paisaje urbano señala, pues, estatransformación hacia una nueva sensibilidad endonde la urbe se ha transformado en objeto de con-templación estética. Sobre la ciudad, desde la ciu-dad, en la ciudad, los artistas modernos forjaron lautopía del progreso; bajo las mismas coordenadas,los artistas contemporáneos han registrado el rever-so de esta utopía a través de una singular cartogra-fía urbana: la serie Spiral city (2002), de la artista bri-tánica Melanie Smith, se dedica a registrar fotográ-ficamente la ciudad de México a través de vistasaéreas que revelan excepcionales formas geométri-cas; por otro lado, en su serie Recados póstumos(2006), Teresa Margolles interviene marquesinas decines abandonados en ciudades como Guadalajara yPuebla con reproducciones textuales, pero descon-textualizadas, de “narcomensajes”. Dos estrategiasdistintas para mostrar, en términos de representa-ción artística contemporánea (una en perspectivaaérea, otra a ras de suelo), la complejidad semánti-ca de un paisaje urbano.

II. Cuerpo y paisaje

Después de este breve repaso, si volvemos a pre-guntar por la condición de existencia del paisaje

urbano, tal vez sea afortunado establecer que tantocomo resultado de un diseño arquitectónico comodel efecto sensible que produce una mirada, el pai-saje urbano responde a una percepción del cuerpo. Lamegalópolis, que crece desproporcionadamente ha-cia lo alto y hacia lo ancho, produce una sensaciónde hastío, de soledad, pero también de inaprensibi-lidad; una ciudad pequeña, en cambio, se organiza(por lo menos en las llamadas “ciudades colonia-les”), de acuerdo con un arquetipo español que sebasa en un trazado perpendicular de las calles y enun centro en donde se sitúan las autoridades localesy religiosas (el zócalo o la plaza de armas). En el pri-mer caso, lo inaprensible es una ciudad que se nosva de las manos y que escapa a nuestras coordena-das corporales: de ahí que esta experiencia se califi-que como “monstruosa”, pues lo distintivo del mons-truo es la deformación y desproporción tanto de losrasgos faciales como de las extremidades del cuer-po. En el segundo caso, por el contrario, el paisajeurbano, por más intervención industrial o tecnoló-gica que contenga, conserva la cualidad de poderser aprehendido a través de un cuerpo que recorrelas calles y que capta con su mirada los edificios, las

avenidas, los puentes y que, incluso, siendo éstos demayor tamaño, siempre ofrecen certeza al peatón oal mirón de que se camina por una ciudad en dondesu cuerpo se encuentra cómodo y donde el cansan-cio proviene de la caminata en sí y no del efecto deavanzar hacia ninguna parte o de dar vueltas sobreun mismo eje, como puede ocurrir, por ejemplo, encualquier punto de partida del Distrito Federal. Yo,como provinciano que soy, hago de mis visitas aotras ciudades un ejercicio tanto de representaciónde caminatas como de comparación con mi propiaciudad. Recuerdo y me sonrojo de cómo una muyquerida maestra y amiga estaba sorprendida de miimpresión de París después de mi primer viaje aEuropa: le dije, y lo sigo pensando: “París es como el

DF, es una ciudad como cualquier metrópoli”. Esto,dicho desde mi ingenuidad como viajero pero desdemi experiencia como habitante temporal del DF pordos años, contiene otro enunciado que en su mo-mento no pude decir y que lo enuncio ahora: enParís me sentí expulsado, como en el propio DF; micuerpo no daba de más; me sentí ajeno y marginaly este efecto no se debió a mi insuficiencia con elidioma francés. Por ejemplo, desde mi llegada aBologna, en Italia (donde tampoco hablaba italia-no), digamos que mi cuerpo dio de sí: caminé, cami-né, caminé y mi cuerpo era tan familiar al espacio, alpaisaje, a los edificios, a la gente, todo me parecíaestar “a la mano”: mi cuerpo, pues, estaba familia-rizado a pesar de la extrañeza de pisar un suelo dis-tinto y de vacilar constantemente en la efectividadde mis actos de comunicación. La imagen que tengode Italia es familiar, pues la postal que quedó gra-bada en mí (su paisaje urbano) es la imagen de mipropio cuerpo observado e incorporado en la urbe.Si bien mi amiga se escandalizó por mi imagen deParís (como se escandalizará cualquier amante delas letras, del arte y de la cultura francófona), por lomenos tengo el consuelo de que un director de cine

dio testimonio de este efecto de rechazo que pro-duce la capital francesa: se trata de la ópera primade Sébastien Lifshitz, discípulo ni más ni menos quede Claire Denis, titulada Del lado salvaje (Wild side,Francia, Bélgica, Reino Unido, 2004). Viendo estapelícula (estudiando el punto de vista de la cámaracinematográfica en relación con los personajes) sepodrá constatar que el paisaje urbano constituye unefecto del cuerpo que, en acomodo o en desaco-modo, en familiaridad o en extrañeza, pone enescena la sensibilidad de aquél que habita, peroespecialmente, de aquél que contempla cuidadosa yreflexivamente a la ciudad.

* Investigador del Programa de Semiótica yEstudios de la Significación, BUAP.

Por Iván Ruiz*

Para Georgina Gamboa

Notas corporales de paisaje

m

Page 10: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

1100 matria no. 6 • julio de 2007·DIVULGACIÓN·

El modelo de ciudad capitalista vigente consisteen centralizar la producción, los servicios y las

instituciones del Estado, con el objetivo de facilitarla accesibilidad, distribución y consumo de mercan-cías, lo que da como resultado grandes aglomera-ciones urbanas. De tal manera que se ha inducidouna construcción de ciudad donde impera el estilode vida consumista por parte de los habitantes, sinimportar la degradación del medio ambiente y losrequerimientos de grandes cantidades de energíaque conducen a una insustentabilidad del desarro-llo equilibrado entre el hombre y su propio entorno.

Los resultados de esta forma de hacer ciudad sonvisibles; por un lado, las soluciones convencionalespropias del crecimiento de la ciudad, como los via-ductos, distribuidores viales, puentes viales, crucerosinteligentes, nuevas avenidas, ampliaciones de lasvialidades, nuevas concesiones de rutas de transpor-te público, etcétera. Por otro lado, la alteración delos ciclos naturales; la pérdida de flora y fauna; lacontaminación de suelo, aire y agua, que en con-junto deterioran la calidad de vida de la población.Factores a tomar en cuenta para un nuevo plantea-miento de ciudad, en busca del bienestar general dela población, en el que se involucre el desarrollosocial-humano, económico y ecológico.

Con estas premisas surge la idea de la “Ciudadverde”, que debe ser el resultado de integrar lasactividades humanas con los recursos que propor-ciona la naturaleza de una forma ordenada y respe-tuosa. Proyecto integral en el cual las característicasde nuestro entorno natural pueden representar unanueva forma de hacer ciudad. Cabe mencionar queeste ejercicio de ciudad utópica fue realizado sinestricto apego a los intereses políticos, económicos einstitucionales existentes, ya que representan unarestricción a nuevas formas de pensamiento dehacer ciudad.

La propuestaCon base en lo anterior, la propuesta de “Ciudad

verde” para Puebla consta de seis objetivos princi-pales que dan pie al diseño de ésta. Por un lado, lautilización de los derechos de vía, para:

1. Aprovechar el movimiento del agua que per-mitirá generar energía hidráulica para los asenta-mientos humanos cercanos a las riberas de éstos,con el objetivo de bajar los costos del servicio deenergía eléctrica y fomentar actividades productivassustentables.

2. La creación de plantas potabilizadoras sobrelas márgenes de los ríos Atoyac y Alseseca, que fun-cionarían por medio de la energía hidráulica produ-cida por estos mismos escurrimientos.

3. En las corrientes secundarias se instalaríandepuradores de aguas residuales por medio de sis-temas vegetales1, con el objetivo de que la comuni-dad aproveche el agua con proyectos productivosantes de llegar a las corrientes principales (Atoyac yAlseseca), también contribuyendo a la limpieza deestos ríos.

4. La creación de “vialidades verdes” utilizando yrecuperando los derechos de vía de los escurrimien-tos de aguas superficiales, canales artificiales, víasférreas, (menos las líneas de conducción que pue-den presentar un peligro para el usuario), etcétera.Además de que la energía hidráulica serviría parailuminar de noche estas vialidades verdes.

5. En las intersecciones entre las “vialidades ver-des” se emplazarían los denominados “nodos ver-des”, que son espacios abiertos dedicados a la con-vivencia social, a través de actividades sustentables(reciclaje, educación ambiental, viveros).

Por el otro, se propone la utilización de los vien-tos dominantes para generar energía eólica pormedio de:

6. El aprovechamiento del efecto valle montañapropiciado por el valle de la ciudad de Puebla (2 mil150 msnm) y el volcán La Malinche (4 mil 491msnm), ya que durante el horario nocturno descien-den los vientos del cono volcánico en dirección alvalle de la ciudad.

7. El aprovechamiento del efecto venturi, que esel aumento de la velocidad del viento encauzado

por la topografía del lugar; en la ciudad de Pueblase observa que se origina con las faldas de LaMalinche y la Sierra de Amozoc.

Con estas siete acciones principales la “ciudadverde” brindaría a sus habitantes los siguientesbeneficios:

—La creación de avenidas peatonales o paracualquier transporte limpio (bici, patines, tranvías),que agilizara la movilidad interna de la ciudad.

—La creación de bordes o linderos para generaráreas de prevención ante posibles asentamientosirregulares, que pudieran estar en peligro anteinundación.

—Mejora en la calidad del aire y un microclimamás confortable, así como disminuir los focos deinfección. Además de que se genera un hábitat másadecuado para la recuperación de flora y fauna.

—Un desarrollo económico para la comunidad, através de actividades remunerables que se podránrealizar en las “vialidades verdes” y “nodos verdes”,como son huertos, hortalizas y sembradíos de plan-tas medicinales.

—Tender a una cultura de respeto hacia nuestroentorno natural.

El diseño de “ciudad verde” deja entrever lasposibilidades que existen de modelos de desarrolloen los que se puede lograr un pleno equilibrio entrelos enfoques básicos del bienestar humano, el eco-lógico, social y económico.

*Diseñadores Urbanos Ambientales, BUAP.m

Por Juan Carlos Rivera Arenas y Julio Marcelo Ramírez Flores*

Ciudad verdecomo ejercicio utópico

# #

#

#

#

#

#

#

# #

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

##

#

#

#

##

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

##

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#

#S

#S

#S

#S

#S

#S

#S#S

#S#S

#S

#S

#S

#S

#S

#S

#S

#S

#S

#S#S#S #S

#S

#S#S

#S#S

#S

HEROICA PUEBLA DE ZARAGOZA

SACRAMONTE

SANTO TOMAS CHAUTLA (IXCOBENTA)

SANTA MARIA XONACATEPEC

Mancha urbana

CALLE: Primer ordenCALLE: Segundo ordenCALLE: Tercer ordenVÍA FÉRREA: Desviadero, Vía sencillaVÍA FÉRREA: Otros, Vía sencilla, PúblicoVÍA FÉRREA: Patio ferroviario

Vias de transporte

Hidrología superficialCurvas de nivel

# LocalidadesPresaLimite municipalVialidades verdesCinturon eólico

Nodos verdes#S

Simbología

1 Izembart, Helen. Waterscapes. Editorial G. G.Barcelona 2003.2 Balderas Romero, Gabriel. El clima de la ciudad dePuebla, CONACYT. Departamento de InvestigacionesUrbanísticas. UAP.3 Ibídem.

En la imagen, bosquejo red de “vialidades verdes” como vías alternas de movilidad interna de la Ciudad de Puebla,“nodos verdes” comolugares de convivencia social, y cinturones de generadores de energía eólica

Page 11: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

matria no. 6 • julio de 2007 ·ANÁLISIS· 11

FICHASFlora: El toloachematria no. 6 · julio de 2007

Un homenaje más a un gran ser humano, cuyo trabajo no quedaráinconcluso si quienes lo conocimos lo difundimos: a Roberto Cabrales

Cabrales-Vargas, R. 1991. Demografía e Historia Natural de Datura stramonium L. en elPedregal de San Angel con algunas implicaciones evolutivas. Tesis de Licenciatura, UNAM. 6

“Datura stramonium, mejor conocida en nuestro país por elnombre vulgar de toloache, es una hierba anual, robusta, decrecimiento indeterminado, que sólo se reproduce por medio desemillas y pertenece a la familia Solanaceae. Tiene la raíz tupi-da, superficial, muy ramificada; los tallos macizos, huecos, erec-tos, hasta de 200 cm de altura… cuyo color varía de verde apúrpura; las hojas tardías son alternas simples y pecioladas; lospeciolos miden más de 12 cm de longitud; la lámina mide de 5a 25 cm de ancho, su forma varia de oval a elíptica, aguda…borde lobulado… verde obscura en el haz; las hojas suelen serfuertemente olorosas. Las flores son solitarias, se encuentransobre pedúnculos cortos que se localizan en las horquillas deltallo ramificado; el cáliz es tubular, de 3 a 5 cm de longitud con5 dientes desiguales; la corola es tubular o de forma de trom-peta, borde pentadentado, de 5 a 10 cm de longitud, de colorblanco o púrpura; tiene 5 estambres iguales insertados en labase de la corola, tiene el estigma bilobulado. La cápsula (ofruto) es ovoide, erecta, de 3 a 7 cm de longitud y 2 a 5 cm deancho… se encuentra densamente cubierta por espinas más omenos iguales hasta de 15 mm, aunque en raras ocasiones, sonlisas. Las semillas son de color café oscuro a negras, son planas,

reniformes (en forma de riñón), de superficie irregular; miden de3 a 4 mm de longitud por 2 a 3 mm de ancho”.

La importancia económica del toloache puede dividirse entres grandes aspectos: 1) Es una maleza que causa pérdidaseconómicas en cultivos de papa, jitomate, tabaco y soya, puescompite con ellas por diversos recursos, además de que lasplantas de toloache dificultan la cosecha, además el toloacheresulta un hospedero alternativo para muchas enfermedades yplagas de los cultivos que invade. 2) El toloache posee alcaloi-des derivados del tropano que son venenosos para los sereshumanos y animales domésticos. La ingestión de cualquierparte de la planta puede provocar náusea y dilatación de laspupilas y en casos severos, la muerte. Por otra parte, las propie-dades medicinales de estos alcaloides han sido aprovechadaspor la medicina tradicional y moderna. Como también tienenpropiedades alucinógenas, algunos grupos indígenas de Amé-rica siguen usando el toloache, hasta la fecha, en ritos religio-sos cuyo origen es muy antiguo; y 3) En el presente siglo se hautilizado en investigaciones científicas dentro de los campos degenética, fisiología vegetal y fitopatología, que han aportadovaliosos descubrimientos.

Reino: VegetalDivisión: Anthophyta (plantas con flor)

Familia: SolanaceaeNombre científico: Datura stramonium

Los problemas ambientales tienen diversas causasy, al mismo tiempo, diferentes ámbitos de ac-

ción, que van desde lo más global: los países, las ciu-dades, las poblaciones; hasta los pequeños espacioscotidianos: la escuela, los hogares, los espacios pú-blicos, las industrias.

Desde la educación, el tema del medio ambientepuede ser abordado en tres sentidos: desde la edu-cación formal, que es el ámbito escolar; desde laeducación no formal, que es el proceso de enseñan-za-aprendizaje que se da fuera de la escuela; y des-de la educación informal, que se refiere a lo que noestá estructurado o escolarizado pero que tambiénnos forma en la vida cotidiana.

En este número se abordará la educación am-

biental formal porque creemos que es uno de losespacios más importantes donde se debe trabajarpara solucionar los problemas ambientales.

Educación ambiental formal Se han hecho muchos intentos por definir el tér-

mino “educación ambiental” y, específicamente,por definir los lineamientos para su puesta en prác-tica en el contexto escolar. A medida que se desa-rrollan nuevas visiones sobre el medio ambiente ynuevas propuestas teórico-metodológicas en lapráctica educativa, el constructo educación ambien-tal va modificándose también.

Desde los años setentas, organismos internacio-nales, han impulsado programas y propuestas deeducación ambiental formal, es decir, dentro de los

contextos escolares. Sin embargo, en América Latinay el Caribe la educación ambiental dentro de lasescuelas se desarrolló recién a partir de los 80 a pe-sar de que los problemas ambientales en nuestrocontinente no son nuevos.

El concepto de educación ambiental desde elámbito escolar engloba distintos enfoques, meto-dologías y prácticas pedagógicas. Los diversos enfo-ques están basados en diferentes paradigmas de larelación hombre-naturaleza. Por un lado, tenemosal enfoque que ha primado durante muchos años,que es el de vincular la educación ambiental con laenseñanza de las ciencias, donde se trabaja más ladimensión físico-natural del medio sin hacer énfasisen la relación con el ser humano; su interés es quelos sujetos conozcan los fenómenos naturales

Por Mirta Figueroa Fernández y Verónica Rosas*

La educación y el medioambiente

en la escuela

Page 12: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

1122 matria no. 6 • julio de 2007·ANÁLISIS·

QUALITUMmatria no. 6 · julio de 2007

QUANTUM

En 2008, más de la mitad de loshabitantes del planeta ya seencontrarán en alguna ciudad,es decir, alrededor de 3 mil 300millones.

Cada semana se suman 1.2millones de nuevos “urbanos”.

El total de individuos quevive en localidades urbanaspasará de 2 mil 840 millones, en2000, a 4 mil 900 millones en2030. Las regiones en desarrollorepresentarán 93 por ciento deeste aumento, y sólo Asia y Áfri-ca más de 80 por ciento.

Informe Estado de la población mundial 2007.Fondo dePoblación de Naciones Unidas (UNFPA). Nota de LaJornada, 27 de junio de 2007.

Las condiciones de pobreza y hacinamiento, así como el deterioro del medioambiente que existen en las ciudades del orbe, en particular de América Latina, esapenas la punta del iceberg del problema que enfrentará el mundo en los próximos30 años con el incremento —de casi el doble— en el número de habitantes que vivi-rán en las zonas urbanas, advierte el informe Estado de la población mundial 2007.

En el documento se afirma que la inevitable urbanización representa una ame-naza para el desarrollo sustentable del mundo, principalmente porque la llamada“segunda ola” de la transición demográfica ocurrirá en menos de la mitad del tiem-po que ocupó el crecimiento de la población de las ciudades en el siglo XX.

Los habitantes de América Latina y el Caribe experimentaron una transición pre-coz y rápida, al grado de que 77 por ciento de su territorio se definía como urbanoen 2005, y un porcentaje de su población, superior al de Europa, vivía en ciudadesde más de 20 mil habitantes.

Por el contrario, indica, más de la mitad del crecimiento urbano tendrá lugar enlocalidades de menos de 500 mil habitantes, lo que favorece la planificación, peroexige mayores recursos económicos, técnicos y humanos. En tanto, para el año 2015las grandes ciudades no serán más de 10 por ciento del total.

y sus causas desde el punto de vista físico, sinconsiderar en su dimensión el factor antropogénico.

Otro enfoque es el de la conservación, que rela-ciona más los problemas ambientales con lo ecoló-gico y se preocupa por el cuidado los recursos queexisten, además, en este enfoque comienzan a in-cluirse algunas miradas desde otras áreas de la cien-cia, como las sociales y las humanas. Desde esta pers-pectiva, el interés es enseñar a los educandos a cui-dar y conservar los recursos naturales existentes; sinembargo, muchas veces desde esta perspectiva sepone mucho interés en la conservación de los recur-sos excluyendo las necesidades humanas del pano-rama.

Existe también el enfoque crítico, que plantea eldesarrollo de las capacidades críticas; desde estaperspectiva lo importante es formar sujetos con unavisión social y política diferente para actuar con ma-yor conciencia ante el entorno y frente al embatedel mercado. La educación crítica para el medioambiente tiene como finalidad trabajar con maes-tros, estudiantes y comunidad acerca de cómo habi-tar el planeta pensando en el medio ambiente y elser humano, pero sin caer en los intereses económi-cos como guía principal de nuestras acciones.

Se habla también de la educación para el desa-rrollo sustentable o para el futuro sustentable, don-de se incorpora la complejidad de factores que seimbrican en la relación de los sujetos con su entor-no y plantea que lo importante es lograr cambios enel estilo de vida, valores y compromisos que permi-tan una actitud más favorable con el entorno; impli-ca tomar en cuenta los múltiples factores que inter-vienen en la situación ambiental, integrándose paraformar ciudadanos que participen en la búsquedade soluciones a los problemas medioambientales

pensando en mejorar la calidad de vida de las gene-raciones actuales y asegurar la de las generacionesfuturas.

La puesta en práctica de cualquiera de los enfo-ques anteriores debería tomar en cuenta el contex-to. Hay coincidencia entre los expertos en que laeducación ambiental dentro de las escuelas no haincidido de manera clara sobre el actuar de las per-sonas en su vida cotidiana, es decir, no ha cumplidocon sus objetivos. Uno de los planteamientos quecontribuyen a la explicación de esta deficiencia esque no existe una claridad de los problemas am-bientales locales sobre los que el estudiante podríaincidir directamente.

En América Latina, Brasil, Colombia y Costa Ricason los países con un trabajo más desarrollado encuanto a educación ambiental tanto en el ámbitoescolar como fuera de éste.

En México se incluyó el tema en los libros detexto gratuitos dentro de las asignaturas de CienciasNaturales y Geografía, primando en los contenidosel enfoque físico-natural, reducido a las ciencias“exactas” y no incluyendo conceptos de otras disci-plinas que permitan un conocimiento más ampliosobre el ambiente y la relación de las prácticas coti-dianas de los alumnos con el deterioro ambiental; esdecir, no se incluye la dimensión social de los pro-blemas ambientales.

Por otra parte, en nuestro país, en términos ge-nerales, no existe una preparación ni una sensibili-zación que permita a maestros y directivos conver-tirse en expertos y transmitir los valores relaciona-dos con el cuidado del medio ambiente. Los docen-tes se convierten en repetidores de información queno ha sido asimilada incluso por ellos. La educaciónambiental no puede ser trabajada como una mate-

ria con contenidos y planes específicos, sino comoun tema transversal del currículo, como una dimen-sión de la educación, como una manera de actuar yno como una lista de conceptos y definiciones.

Es claro además que no hay una coordinaciónentre la comunidad, los padres de familia, directoresy maestros para realizar una práctica educativa encontexto, que pueda traducirse en prácticas socialesreales en situaciones cotidianas. Esto impide teneruna mirada integral, de la problemática ambiental ydificulta el desarrollo de actitudes benéficas para elambiente.

Si bien es cierto que el desarrollo en el campo deeducación ambiental está en camino y en nuestropaís comienza a consolidarse, aún falta mucho porhacer, específicamente dentro del ámbito escolar. Laidea central que debería primar en cualquier enfo-que que se asuma para abordar la educación am-biental es la de tender puentes entre el currículum,la escuela y la comunidad, enfoques en contexto,que promuevan prácticas adecuadas a las múltiplesrealidades sociales y ambientales de los distintosespacios educativos.

En la búsqueda de una sociedad sustentable, laeducación es un elemento clave. El papel de la edu-cación ambiental formal por un lado, es el de ayu-dar a cambiar las prácticas, y los hábitos, formar oreafirmar los valores y la forma de relacionarnos conel ambiente, y por otro, tomar en cuenta las nuevasprácticas pedagógicas con los nuevos enfoques parala educación, el desarrollo de metodologías, planes,programas y capacitación en el tema ambientalpara las comunidades escolares es urgente en nues-tro país.

* Psicólogas sociales, Centro Universitario de Participación Social, BUAP

m

La educación ambiental debe ser un tema transversal del currículo,

una dimensión acerca del actuar, y no una lista de conceptos

Page 13: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

·DIVULGACIÓN· 1133julio de 2007 no. 6 • matria

Los revolucionarios que no tienen huerto,que dependen del mismo sistema que atacan,

y que producen palabras y balas, y no comida ni abrigo,

son inútiles…Bill Mollison

Cuidar la Tierra, cuidar a la gente, compartir losrecursos y capacidades: esto es la base ética de

la permacultura. ¿Qué es? Siguiendo su etimologíasignifica cultura permanente, aunque algunas perso-nas restringen su significado a agricultura perma-

nente. Hay algo de correcto en esto último, pues sinla producción constante de los frutos de la tierra, lavida humana y su cultura es imposible. Sin embargo,la permacultura es mucho más.

Desde un punto de vista conceptual se puededefinir a la permacultura como el diseño concientey el mantenimiento de sistemas agrícolas producti-vos que tienen la diversidad, estabilidad y resisten-cia de un ecosistema natural. Es la integración armo-niosa del medio ambiente, gente y animales quepermite proveer su alimento, energía, abrigo y tam-bién, principios éticos y espirituales, de una manerasustentable. Así, no hay que confundir la permacul-tura con tecnologías alternativas y técnicas agrope-cuarias desarticuladas.

La permacultura produce una ecología cultivadacapaz de generar más alimentos para la gente y ani-males que la propia naturaleza a su ritmo (sin el fac-tor humano). Así como la ingeniería genética ha lle-gado a crear nuevas formas de vida manipulandolas estructuras y elementos más íntimos de la mate-ria viva, a su vez la permacultura ha llegado a pro-ducir vida abundante. Todo esto desde la perspecti-va de la educación popular, metodologías participa-tivas, el sentido comunitario y la reverencia y respe-to a la vida. El australiano Bill Mollison es la figuraclave en el surgimiento del diseño permacultural.

Si bien en sus inicios la permacultura apuntóhacia el autoabastecimiento de la familia y de lacomunidad —aunque la autosuficiencia no tienerazón si la gente no tiene acceso a la tierra, a lainformación y a los recursos económicos—, poste-riormente la permacultura se dirige también comoestrategia legal y financiera para el acceso a la tierra

—autofinanciamiento regional, estructuras de ne-gocios, intercambios de servicios y productos, siste-mas económicos alternativos no basados en el sistemamonetario internacional. De esta manera, la perma-cultura está tomando un rostro profundamente cre-ativo y revolucionario. Lo anterior queda más clarocon la triple dimensión de la ética permacultural:

Con este artículo pretendemos invitar a la refle-xión acerca del modo de llevar nuestra vida cotidia-na actual, de saber y conocer que existen nuevosenfoques de reconciliación con la naturaleza. Eneste sentido acercamos a la permacultura como laopción creativa que la sociedad actual no mira nicontempla, abrirnos a una vida sencilla, que des-pierte el interés y el gusto por participar con los pro-cesos de la naturaleza, como parte todos de un gransistema.

*Ingeniera en Agrohidráulica, investigadora del Centro Universitario para la

Prevención de Desastres Regionales, BUAP.

m

Por Sandra Esther Barillas Arriaga*

elartedecurarlaTierra

Cuidar la Tierra:

animales, plantas, tierra,

agua y aire.

Cuidar la gente:

alimento, abrigo,

educación, empleo,

contacto humano.

Compartir los

excedentes:

dinero, tiempo,

información y energía.

La clave es reconocer

el valor

intrínseco de cada cosa

viviente: cooperación,

no competición

Bill Mollison nació en Stanley, Tasmania(1928). Fue panadero, trabajador forestal, ase-rrador, trampero, naturalista y pescador detiburones. En medio de ambientes silvestres ydifíciles, cazó y pescó para vivir. Desde 1954trabajó como biólogo realizando estudioscientíficos en lugares remotos de Australia. En1960 fue el curador del museo de Tasmania.En 1966 regresó a estudiar, ganándose la vidacomo pastor de ganado, guardián de cafeterí-as y profesor de niñas. Se graduó en biogeo-grafía y fue como maestro en la Universidadde Tasmania (1968).

Mollison se convirtió en un crítico radicalde los sistemas industriales y políticos que esta-ban destruyendo, material y socialmente, to-das las partes del mundo. En 1974, en conjun-to con su alumno David Holmgren (su tesis dedoctorado fue clave), desarrollaron una es-tructura para un sistema de agricultura y deestilo de vida sostenibles, para lo cual Bill acu-ñó la palabra permacultura. Esto culminó en

1978 con la publicación del libro Permacultura Iy un año después, Permacultura II. Muchos es-pecialistas y académicos se sintieron ultrajadospor la combinación permacultural de agricul-tura, silvicultura, manejo de animales y asen-tamientos humanos.

A partir de 1979, Bill Mollison dejó la aca-demia y se ha dedicado a construir sistemasbiológicos sostenibles. Formó el Instituto dePermacultura Tagari, en Tyalgum, Australia. En1991 ya había más de cuatro mil personas gra-duadas, avaladas por el instituto. Actualmentehay más de 140 centros diseminados en 50 paí-ses (bajo el principio de no centralización), con20 mil personas entrenadas.

En 1981, Mollison recibió el Premio NobelAlternativo por parte del parlamento sueco; elreconocimiento del gobierno de Holanda; dela Sociedad Schumacher de Gran Bretaña y, en1991, la Academia de Ciencias de Rusia le otor-gó la medalla Vavilov (por vez primera a unextranjero).

Bibliografía Madrigal Miranda Juan Manuel. Política ecológica, desarro-

llo comunitario y permacultura. Publicaciones UNAM. 1992.Mollison, Bill y R. Mia Slay. Introducción a la permacultura.

Publicaciones Tagari. Australia, 1994.

Page 14: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

“Es que los papás sí son contentos, porque sonfelices… porque se van, pero las mamás están

tristes”, me decía una tarde de hace dos añosCatarino, que en ese entonces tenía apenas sieteaños. El día en que los conocí a él y a su hermanoBernardino, me contaron que su papá se acababade ir hacía unos cuantos días a Estados Unidos, y quepor eso se habían mudado a casa de Eusebia. Sumamá, embarazada de cinco meses y con dos niñosde tres y un año de edad, no podía cuidarlos y hacertodo el trabajo de la casa ella sola.

Más tarde, luego de haber platicado largo rato,Bernardino, que iba y venía con rostro nervioso ycargando a Augusto, el más pequeño, en sus brazos,se acercó a mí y con una expresión muy seria en elrostro me preguntó: “¿Maestra, qué le podemosdar a mi mamá?, es que ya no come, está enferma”.“¿Y de qué está enferma?” “De tristeza”, me dijo él.Los ojitos de Catarino, que estaba sentado en el pisojugando junto a mí, se apagaron de pronto mien-tras se volvían hacia el rostro de su hermano mayor.A ambos se nos había borrado la sonrisa del rostro.

No hay manera de que una pueda estar prepa-rada para oír algo así de boca de un niño de 11 añosque en unos pocos días ha tenido que madurar losuficiente como para convertirse en el hombre de lacasa, para trabajar en la fresa como el resto de lospadres y cuidar de sus tres hermanitos menores y sumadre embarazada que, abrumada por la tristezade ver partir a su esposo y por la incertidumbre y lapeligrosidad del viaje, siente que ha perdido lasfuerzas y se abandona en una especie de letargo delágrimas silenciosas. “Abrácenla mucho, ayúdenla,díganle que la quieren. Ésa es la mejor medicina”,fue lo único que se me ocurrió decirle a Bernardino.Él me miró y asintió mientras continuaba arrullandoa Augusto en sus brazos, pero no parecía estar muyconvencido.

“No, mi mamá no está aquí, se fue a EstadosUnidos y mi papá también. Primero se fue mi papáy mi hermana Rosalina. Luego se fue mi mamá, peroya no me acuerdo hace cuándo. Yo no vi cuándo sefue mi hermana, porque yo estoy durmiendo. Y haymuchos otros que también se fueron. Ella dice quesí está contenta porque ya está bien grande. Allá vaa crecer bien rápido. Está trabajando, creo que en lafábrica de pollos. Y mi papá está trabajando del díay de noche. Mi hermana nomás de noche y también

mi mamá. Yo tengo mucho pariente que está allá,pero mucho que se murió, se lo mataron allá enNueva York. Mi tío se lo mataron con un cuchillo. Ycuando yo estoy chiquita mi papá ya está en EU y mimamá también, mi hermano se quedó bien chiqui-to y mi mamá ya otra vez se fue. Por eso cuandollegó mi papá yo no sabía quién es y yo nada másconocía a mi mamá y yo pensaba quién será eseseñor, nosotros ni lo conocíamos”.

Florentina, 12 años

“Al presidente de Estados Unidos yo le diría queno nos traten mal porque nosotros cuando vienenacá no les hacemos así. Yo le diría que se siente malque tu papá se tenga que ir y que esté lejos, que loextrañas y que también a él le cuesta trabajo traba-jar y también trabaja de noche y a veces tiene ham-bre. La migración por un lado es bueno porque éltrabaja y nos manda dinero, y el malo es que loextrañamos mucho”.

Jorge, 13 años

“Yo ya fui a Estados Unidos. Es muy bonito. Estáigual que acá, pero hay mucho árboles ahí. Mi papáfue a trabajar en carnicería, donde venden pollos,pues. Tenía que cocinarlos y venderlos. Yo tenía seisaños, ya casi no me acuerdo.

Sí me gustó un poquito, me gustaba cómo era ellugar y los ciudades. Había mucha gente y cuando

me subía en las grandes casas (edificios) como queme daban ganas de desmayarme. Estuvimos comoun año, un año y medio, pero no jui a la escuela. Nome quisieron recibir porque era muy chiquito.Luego yo no entendía nada, nomás estaba con mipapá porque mi papá sabía nomás poquito inglés,pero mi mamá no. Mi mamá no trabajaba, nomás sequedaba conmigo. Y yo no tenía amigos ahí. Niuno. Por eso ya no me gustaría ir, porque a veces mesiento muy solo.

Una vez sí nos agarraron y luego nos volvimos air. Nos querían llevar por el desierto, pero dicen queera muy peligroso, que nos vamos a morir. Es queahí está muy cerquitas, pero ahí sí te puede sucederalgo, como tener mucho sed. ¡Y si te ven en el día tedisparan! Porque dicen que no somos como ellos.No quieren que váyamos allá, quién sabe por qué”.

Paulino, 12 años

“Luego mi papá habla desde allá, dice: ¿Cómoestán?… No sé, habla muchas cosas, que si estamosbien en la escuela… Si estudias bien te comprocosas, me dice. Y mi hermana la que está allá estábien flaquita, se llama Marta. Trabaja en limpiar losdiscos. A veces, si no tienen trabajo, van con mi tíoa buscar trabajos, pero orita ya está trabajando depollos, y mi papá también. Dice que sí están conten-tos. Es como un selva donde viven, hay árbol seco.Se llama Alabama, creo. A veces yo me pongo a llo-rar. Es que como él está triste allá, nosotros tambiénnos da tristeza. Dice mi papá que va a venir, va a lle-gar, pero no sé cuándo. Cuando habla dice que leeche yo gana, que voy a estudiar, que trabajamosmucho, pero yo mi corazón está triste”.

Eusebia, 10 años.*Antropóloga.

1144 matria no. 6 • julio de 2007·TESTIMONIO·

— ¿Qué les gustaría decirlesa sus papás que están allá?

— ¡Muchas cosas!— Que los queremos mucho.

— Que los extrañamos.— Que se acuerden de nosotros.

(Conversación con niños de 2º de primaria,Oacalco: 22 de junio de 2005)

— ¿Y qué te dijo tu papá ahora que se fue al Norte, Rufino?— Que me portara yo bien, que no (me)enfermara, que no jugaba, que mejorvoy a estar con mi mamá, voy a estudiar.— ¿Y tú qué le dijiste a él?— Le dije que bien que se sienta, que no tome, que trabaje.(Rufino, nueve años)

Por Valentina Glockner Fagetti*

ameyale@

yahoo.com.m

x

m

Page 15: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

matria no. 6 • julio de 2007 15

SSuusstteennttaabbiilliiddaadd yy vviiddaa ssiillvveessttrree

El proyecto de conservación del venado colablanca inicia en 1996 con la donación de dosmachos y cuatro hembras con lo que con estepie de cría se han reproducido 32 ejemplares,cantidad con la que se cuenta actualmente. Elárea de venados está conformada por 4 hectá-reas.

La UMA-AVES es una unidad de manejo,aprovechamiento y conservación sustentable dela vida silvestre, caracterizada por la reproduc-ción controlada y confinada de especies silves-tres. Esta UMA tiene como objetivos la conser-vación, reproducción, investigación, recreación,educación ambiental y apoyo a la comunidad.

Actualmente esta UMA-AVES cuenta con lassiguientes especies:

Codorniz común (Colinus virginianus), perdiz(Alectoris chukar), faisán de collar (Phaisianuscolchicus), faisán dorado (Chrysolophus pictus),faisán plateado (Lophura nycthemera), faisánlady (chrysolophus amherstiae).

TTuurriissmmoo ddee nnaattuurraalleezzaa

El ecoturismo es una actividad alternativaque abre nuevas posibilidades de conocer luga-res y realizar actividades diferentes. Comprendediversas actividades que se realizan fuera de loordinario, pues no puede considerarse igual alturismo tradicional, ya que prevalece el respetoal entorno natural, la flora, la fauna y los habi-tantes locales. Así, el objetivo del área de turis-mo ecológico de Flor del Bosque es saber y dis-frutar de la naturaleza, mediante actividadesque proporcionan bienestar y salud, en tanto seprotege al ambiente.

Se puede disfrutar de la combinación delpaisaje natural con el desafío a la naturalezacon un toque de adrenalina para vencer losmiedos como el vértigo y la capacidad de retar-se a sí mismo en una zona de 15 juegos extre-mos que combinan la destreza, el trabajo enequipo y la valentía en suertes como el muro derapel y de escalada, la tirolesa y pasos aéreosque llevan nombres alusivos a la fauna que ha-bita en la reserva del Flor del Bosque.

Para un contacto más relajado se cuenta conmodernas cabañas ecológicas ubicadas en laparte alta de la zona boscosa. En esta área semuestran varios elementos ecológicos, agronó-micos y ganaderos; ecológicos tales como reco-lección de agua de lluvia, calentamiento deagua con un mecanismo solar y estufa rural;agronómicos como cultivo de hortalizas (rába-no, zanahoria, tomate, jitomate, entre otras) acampo abierto y en un micro invernadero. Enganadería se tiene ganado caprino en corralescon la finalidad de integrar una granja tipo

familiar que sea autosustentable. Flor del Bosque guarda para cada visitante

una sorpresa llena de experiencias excitantes yreconfortantes; permite reencontrarnos connuestro sentido humano, cercano a la biodiver-sidad a la naturaleza al medio natural al cualpertenecemos y que en la actualidad hemosolvidado por los avatares de la vida moderna,por lo que si uno quiere reencontrarse con suparte esencial bien vale la pena visitar el ParqueEstatal Flor del Bosque.

El Parque Estatal Flor del Bosque se localiza aloriente de la ciudad de Puebla, a unos 10 km de dis-tancia, en el municipio de Amozoc. Se puede llegarpor la carretera federal no. 150 Puebla-Tehuacán, ala altura del km 10.5 y tomando una desviación de 2km. Abierto de 8 a 16 horas, todos los días. Entrada:10 pesos, lunes, gratuita.

la aventura por descubrir

Flor del Bosque:

m

Viene de la 1166

Page 16: Contenido - La Jornada de Oriente · La permacultura: el arte de curar la Tierra Sandra Esther Barillas Arriaga TESTIMONIO La matria lejos La migración, vivida por los niños Valentina

El sonido de las aves, la cautelosa huída delvenado cola blanca, un clima cálidobajo el cobijo de los árboles de encino

son el marco que ofrece el Parque EstatalFlor del Bosque en 664 hectáreas y diver-sas áreas en donde los visitantes puedenencontrar esparcimiento y pensar que eltiempo se detiene, al menos por unmomento, gracias al contacto directocon la naturaleza.

Flor del Bosque fue denominadoParque Ecológico Recreativo en 1985para contar con un espacio de disfrute yuna reserva boscosa. Actualmente bajo elcuidado y administración de la Secretaríadel Medio Ambiente y Recursos Naturales, sumisión es vincular la educación ambiental conla protección al medio ambiente a la par de la pro-tección y preservación de aves y mamíferos en peligrode extinción a través de Unidades de Manejo y Aprove-chamiento de la Vida Silvestre (UMA).

Por ello, a lo largo de estos años los esfuerzos y acciones para conser-var la misión original del Parque rindieron frutos al iniciarse un progra-ma de remozamiento y rehabilitación de las instalaciones en pos de con-vertirlo en un modelo integral de educación ambiental, ecoturismo yaventura siempre respetando y preponderando el valor de los recursosnaturales y la vida silvestre que en él habitan.

GGooccee ppaarraa llooss sseennttiiddooss

Cada área proporciona un goce a los sentidos y un espacio perfecto;permite al visitante ingresar a un mundo distinto en donde se crea unlazo de pertenencia con el medio natural para reflexionar sobre la impor-tancia de cuidar y conservar cada ave, árbol, mamífero, la tierra, el agua,la vida.

El aviario es una experiencia colorida ya que cuenta con 36 especies

de aves. Algunas son representativas en estetipo de bosque y las demás son exóticas, es

decir, que tienen otra ubicación geográficay que fueron introducidas a nuestro paíscomo parte del comercio de aves de orna-to y compañía entre ellas son las cebri-tas o diamantes (Taeniopygia guttata),la perdiz (Alectoris chukar), el pavo real(Pavo cristatus), los agapornis (Agapor-nis rosicollis) y las ninfas (Nymphicushollandicus) Halcones (Caracara (Poly-borus plancus), Harris (Parabuteo uni-

cintus) y Cola Roja (Buteo jamaicensis),búhos (Rayado (Strix sp.) y Real (Bubo vir-

ginianus) y las lechuzas (Tyto alba)Algunas especies están amenazadas, bajo

protección especial y en peligro de extincióncomo el tucán (Ramphastos sulfuratus), halcones

y los Psitácidos (loros y pericos).

EEll áárreeaa ddee mmaammííffeerrooss

Especies como el mono araña (Ateles geoffroyi), la martucha (Potosflavus) y el jaguarundí (Herpailurus yagouaroundi) se encuentran en elparque y actualmente están catalogadas de acuerdo a la NOM-059 comoespecies amenazadas o en peligro de extinción. Esto debido al crecimien-to urbano, comercio ilegal y tráfico de las mismas. Actualmente en laUMA se encuentran 11 especies de mamíferos.

Los objetivos generales que se tienen planteados son la conservación,la investigación, la educación ambiental entre otros. Con este proyecto sepretende concientizar y fomentar la cultura por conocer y proteger lafauna silvestre que habita en nuestro estado.

Se han logrado reproducir con éxito especies de mamíferos como es elcaso del venado cola blanca (Odocoileus virginianus), mapache (Procyonlotor) pecarí de collar (Pecari tajacu), algunas aves como cebritas y palo-mas de collar.

· dónde ir· cuánto gastar· cómo llegar· qué hacer· y cómo pasarla bien

a·pieguía de viaje

Enclavado en una reserva natural de 664

hectáreas, el Parque Estatal Flor del

Bosque se perfila como un modelo integral

de educación ambiental, ecoturismo y

aventuraFlor del Bosque:la aventura por descubrir