conservaciÓn y curadurÍa de materiales Óseos humanos procedentes del sitio barrio basualdo...
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CONSERVACIÓN Y CURADURÍA DE MATERIALES ÓSEOS HUMANOS
PROCEDENTES DEL SITIO BARRIO BASUALDO FAMILIA PRIMÓN
(CORONDA, DEPARTAMENTO SAN JERÓNIMO, PROVINCIA DE
SANTA FE)
Ivarz, Darío 1-2; Deluca, Santiago1-2; Llacza, Emilce 1-2
1 Departamento de Arqueología, Escuela de Antropología, Facultad de Humanidades y
Artes, UNR.2 Grupo de Investigaciones Arqueológicas del Nordeste, GIAN.
Resumen
En el presente trabajo se desarrollan las técnicas de conservación empleadas para
el acondicionamiento de los restos óseos humanos del sitio Barrio Basualdo Familia
Primón (FP de ahora en adelante), ubicado en la cuenca inferior del río Coronda,
Departamento de San Jerónimo, Provincia de Santa Fe, Argentina. Los elementos óseos
humanos recuperados en el sitio se caracterizaron por un mal estado de preservación,
presentándose inconvenientes que debían ser superados a la hora de realizar la limpieza
y el acondicionamiento de los materiales para su posterior análisis en laboratorio. En
este trabajo se exponen las decisiones metodológicas llevadas a cabo para el
tratamiento del material óseo recuperado, del cual se excluyó el análisis de las piezas
dentales. Las técnicas aplicadas y desarrolladas estuvieron orientadas a la preservación
tanto de las superficies como de la integridad anatómica de los elementos, para
posibilitar la realización de futuras investigaciones.
Palabras claves: restos óseos humanos - preservación y conservación - Cuenca
inferior río Coronda.
Abstract
In the present paper, the techniques employed for the conditioning of the human
bone remains from Barrio Basualdo Familia Primon site (from now on, FP) will be
mentioned. The site is located in the lower basin of Coronda river, San Jerónimo
department, Santa Fe, Argentina. The human bone elements recovered from the site can
be characterized with a very por level of preservation. Due to this situation, different
problems emerged while cleanup tasks and conditioning of the materials were taken on.
The methodological decisions taken on for treating of the osteological materials
recovered, from which dental pieces are excluded will be presented next. Techniques
implicated and developed were oriented in the preservation of bone surfaces as well as
the anatomic integrity of items, in order to permit future investigations.
Keywords: human bone remains – preservation and conservation – lower
Coronda river basin
Introducción
La conservación de los elementos arqueológicos, entendida como el medio para
garantizar la integridad, durabilidad y accesibilidad del patrimonio cultural, permite
minimizar el impacto que el ambiente y las intervenciones humanas provocan sobre los
ítems arqueológicos (Porto Tenreiro 2000).
Debido a que la arqueología basa sus inferencias a partir del registro material, la
aplicación de medidas de conservación a los materiales recuperados permite la
recolección de información de los mismos en el presente, al igual que para
investigaciones futuras (Peretti y Baxevanis 2004). En relación con lo anterior, es
necesario destacar que no todos los materiales son tratados del mismo modo. Durante el
contacto con la matriz sedimentaria en la que están contenidos, y más aún luego de su
extracción, son afectados de forma diferencial por diversos factores (luz, humedad,
agentes químicos, entre otros) que comprometen la integridad de los mismos, en mayor
o menor medida, de acuerdo a su naturaleza específica (Mengoni Goñalons 1988).
A los fines de garantizar la preservación de los materiales, es necesario tener en
cuenta medidas de conservación desde el momento en que se planifica una excavación.
Por tal motivo, es necesario hacer una distinción entre las intervenciones realizadas in
situ, destinadas a disminuir el impacto ambiental que sufren los restos al ser extraídos,
durante su estudio y durante su embalaje y transporte; y las actividades de laboratorio,
que permiten el estudio de la naturaleza de los materiales, su estado de conservación y
el tratamiento a realizar (Porto Tenreiro 2000). En este sentido, las intervenciones in
situ son de suma importancia debido a que los materiales logran a lo largo del tiempo
un estado de equilibrio con el espacio circundante, el cual es alterado en el momento de
la extracción, desencadenando la aceleración de procesos de deterioro sobre los
materiales (Peretti y Baxevanis 2004).
En el caso específico del sitio Barrio Basualdo Familia Primón (FP), los
materiales fueron recuperados en el marco de una intervención arqueológica de rescate
en la localidad de Coronda, provincia de Santa Fe. Las medidas in situ de conservación
preventiva fueron tomadas teniendo en cuenta las constricciones de tiempo y recursos a
las que estuvo sujeto el equipo que trabajó en el sitio en el año 2002 (Feuillet et al.
2007). Las mismas consistieron en la extracción de los materiales y su embalaje en
contenedores de resguardo, conformados a partir de la matriz sedimentaria que contenía
los restos esqueletales. Siendo que la muestra presentaba un alto grado de friabilidad,
las decisiones metodológicas consideradas posibilitaron el traslado y posterior análisis
en laboratorio, resguardando la integridad del material óseo.
|Cabe mencionar que uno de los objetivos principales de las actividades llevadas a
cabo tanto in situ como en laboratorio estuvieron enfocadas a conservar las estructuras
físicas de los elementos diagnósticos, útiles para la determinación de sexo y estimación
de edad al momento de muerte de los individuos presentes, sensu Buikstra y Ubelaker
(1994); Brooks y Suchey (1990).
A continuación se presentan las tareas realizadas in situ y en laboratorio y las
medidas de conservación a las que se sometieron los restos óseos humanos, con el fin
de preservar la integridad de los mismos. Las decisiones tomadas estuvieron orientadas
a disminuir su degradación física, que propiciaba la pérdida de información potencial
contenida en los elementos rescatados.
El sitio Barrio Basualdo Familia Primón (FP)
Los trabajos realizados en FP se encuentran en el marco del proyecto
arqueológico denominado “El Registro Arqueológico del Uso del Espacio en la Cuenca
Inferior del Río Salado (Margen Oeste)” dirigido por la Dra. Feuillet Terzaghi. El sitio
fue datado en 370 ± 30 años AP (UGAMS # 02471 radiocarbon 13C Corrected Age
YBP ± 1s) a partir del colágeno proveniente de elementos dentales (Feuillet Terzaghi
2008).
FP se ubica en un albardón costero cuyo suelo se encuentra desarrollado sobre
matrices aluviales y relieves ondulados situado geográficamente dentro de lo que se
denomina Serie Coronda (CDA) Subgrupo: Hapludalf psaméntico Tapto Argico. Los
materiales arqueológicos se encuentran contenidos dentro de una matriz sedimentaria
arenosa homogénea denominada duna arenosa de la zona de Coronda. Esta matriz se
vincula a los derrames secuenciales del río Paraná y no posee diferenciación de
horizontes ni estratos, predominando en ella suelos con mal drenaje, alta sodicidad y
salinidad (INTA 1991; Feuillet Terzaghi et al. 2007; Feuillet Terzaghi 2008).
Los hallazgos se produjeron en una vivienda de la localidad de Coronda cuando
se realizaban tareas de remodelación, donde a partir de la localización de elementos
óseos humano, y luego de evaluar la situación de riesgo de los materiales, se decidió
intervenir en el lugar para la recuperación de los restos.
Se llevaron a cabo dos excavaciones arqueológicas sistemáticas con el objeto de
evaluar el potencial arqueológico, establecer la extensión real del sitio en superficie y
profundidad, como así también determinar las características del sitio y recuperar los
materiales que se encontraban afectados inmediatamente por la realización de la obra
(Feuillet Terzaghi et al. 2007). Los materiales recuperados fueron óseos humano y
faunístico, líticos y cerámicos. Para este sitio se pudieron detectar siete enterratorios
primarios, dos enterratorios secundarios y cuatro cráneos aislados, a partir de los cuales
se estableció un número mínimo de individuos (MNI) de 15.
Factores de alteración del sitio FP
Los materiales que aquí se analizan se vieron afectados por factores tanto
naturales como culturales (Schiffer 1987), que pudieron haberlos perturbado a partir de
su depositación primaria. Los factores naturales podrían catalogarse como los productos
de la bioturbación, faunaturbación y la acción diagenética. En cuanto a los culturales, se
puede mencionar las intervenciones resultantes del accionar humano llevadas a cabo en
el pasado o en el presente. Estos procesos pueden actuar de manera individual o
simultánea, produciendo diversos efectos en el conjunto analizado. Los mismos pueden
dividirse en cuatro categorías básicas: desarticulación (disociación de los elementos
esqueletales), dispersión (incremento o reducción de la distancia entre las partes
esqueletales), fosilización (alteración química del hueso) y modificaciones mecánicas
(alteración de la estructura del hueso por factores físicos) (Lyman 1994).
En el caso de FP, las
alteraciones más significativas
fueron: construcciones y
pozos de basura actuales,
derrumbe de muros sobre el
sitio, plantaciones de árboles
frutales que fueron removidos
y acción intensa de raíces, las
cuales habrían modificado la
distribución tanto a nivel
vertical como horizontal de
los materiales en la matriz sedimentaria (Feuillet Terzaghi 2008, Sartori 2008). Dicha
matriz presentó un valor de pH neutro que podría haber incidido en la degradación de
los materiales, ya que propicia la estabilidad de una gran biomasa de microorganismos
(Costantini 2005). Además, esta matriz sedimentaria presenta arena en una alta
proporción que produce una mayor permeabilidad influyendo sobre los niveles relativos
de humedad, y por ende, en la preservación diferencial de los materiales (Davis 1989).
Metodología
Medidas de conservación in situ
La metodología utilizada para la conservación del material arqueológico constó de
diversas etapas. La primera de ellas fue tomar medidas para la extracción de los
materiales in situ. En este sentido, en el momento de la excavación, los elementos óseos
humanos que se hallaron tanto en enterratorios primarios como secundarios se retiraron
rodeados con parte de la matriz sedimentaria que los contenía. La extracción de los
materiales con sedimento adherido (y en la mayoría de los casos utilizando al mismo
como soporte para darle estabilidad a los paquetes) se realizó teniendo en cuenta el
plazo estipulado con los propietarios de la vivienda para realizar las tareas de rescate
(Feuillet Terzaghi et al. 2007). Para ello, se procedió a enyesar la base del bloque
extraído y se cubrieron los elementos óseos expuestos con papel de aluminio, sobre el
cual se colocó una capa de estopa. Se tuvo especial cuidado en evitar el contacto con
Floraturbación en FP. Intenso accionar radicular sobre la zona de trabajo.
los huesos, resguardándolos de posibles contaminaciones. Por último, se procedió a
recubrir todo con papel burbuja y films. De este modo, quedaron conformados
contenedores de resguardo, los cuales posibilitaron el traslado de los materiales sin
riesgo de ruptura ni contaminación.
Medidas de conservación en laboratorio
Una vez que los restos se hallaban en el laboratorio, se elaboró un protocolo
interno donde se fijaron las pautas de trabajo para la preservación y consolidación de
los ítems de acuerdo con el tipo de análisis proyectado para el conjunto recuperado. El
mismo consistió en: limpieza de los materiales, evaluación del estado de los mismos,
tareas de consolidación, remontado y embalaje. Además, se realizó un registro
fotográfico y documental de todo el proceso.
La limpieza de los materiales fue realizada de forma minuciosa, tratando de no
ejercer presión sobre los mismos, con el fin de evitar una mayor fragmentación.
Se procedió a la
remoción de la cubierta
protectora del material
mediante cortes transversales
en el contenedor de
resguardo. De esta manera,
se retiraron todas las capas
de estopa, aluminio, arpillera
y yeso, de acuerdo a como
fueron embaladas,
cortándolas con cúter o tijera, según fue necesario.
A medida que se avanzó en la labor, se decidió extraer el sedimento adherido al
material óseo aplicando acetona por goteo. Este procedimiento permite la humectación
del sedimento, facilitando su remoción, ya que el mismo se encontraba sumamente
compacto, y su extracción en seco comprometería la integridad física de los elementos
óseos. La aplicación de acetona provee maleabilidad a la matriz sedimentaria adherida a
los restos esqueletales, y disminuye considerablemente el deterioro de los elementos. Al
mismo tiempo, el uso de esta sustancia acelera y asegura que el hueso pierda humedad
rápidamente por evaporación del agua (Peretti y Baxevanis 2004).
Trabajos de remoción de los Contenedores de Resguardo (CR)
Las zonas en donde se encontraban piezas dentales fueron excluidas de este
tratamiento ya que dicho procedimiento contaminaría este tipo de material. Es
necesario mencionar que estos elementos fueron los únicos portadores de colágeno
suficiente para poder realizar análisis radiocarbónicos, entre otros.
Todo el sedimento que cubría los elementos óseos se fue retirando con la ayuda
de estecas de madera y pinceles de cerda suave, debido a la fragilidad de los restos
esqueletales. El sedimento removido fue sometido al tratamiento de flotación (con
malla de 0.002 m.), en función de recuperar la mayor cantidad de material posible, que
aporten datos a la investigación.
Consolidación de elementos óseos
En función del grado de fragmentación y friabilidad de los elementos óseos, se
implementaron medidas para la consolidación y preservación de los mismos, debido a
la dificultad que presentaban al momento de su manipulación. Para realizar una
conservación preventiva que proporcione estabilidad a los materiales, se considera
óptima la utilización de
consolidantes que sean
fácilmente removibles y no
alteren la composición
química de los mismos. Esto
implica realizar una mínima
intervención que permita la
visualización de las
estructuras óseas, para la
futura identificación de
elementos y obtención de
información (Buikstra y
Ubelaker 1994).Si bien Peretti y Baxevanis (2004) plantean la consolidación con
Resina de Acetato de Polivinilo, polímero seguro y reversible, en este caso se realizó
con Paraloid B-72, ya que la primera no se encontraba disponible en el mercado. El
Paraloid B-72 es un compuesto que no cumple con el criterio básico de reversibilidad,
alterando la composición orgánica de los materiales.
Trabajos de consolidación en laboratorio mediante la aplicación de Paraloid B-72
Aquellos elementos óseos diagnósticos que permitiesen obtener información
acerca del sexo, talla y edad fueron tratados en función de preservar su fisonomía en
detrimento de sus cualidades químicas, por medio de la aplicación de Paraloid B-72.
Por otra parte, aquellos elementos con concentraciones de colágeno importantes para
llevar a cabo análisis químicos, como son datación y análisis de isótopos estables,
fueron manejados de manera tal que se preservasen sus características físico-químicas
(Porto Tenreiro 2000; Peretti y Baxevanis 2004). Por tal motivo y como se mencionó
anteriormente, se tomó como criterio resguardar de la consolidación a las piezas
dentarias y fémures que, debido a sus características constitutivas, son factibles de
someter a un análisis más exhaustivo.
Para llevar adelante la consolidación de los elementos, se diluyó Paraloid B-72 en
acetona al 2 % (este compuesto fue aplicado por goteo utilizando jeringas). En aquellos
casos en que el elemento presentaba un grado de alta friabilidad, el mismo fue
sumergido en esta solución para preservar su integridad física.
Remontaje de elementos óseos e identificación de estructuras
El proceso de remontado se realizó en aquellos elementos que se fragmentaron
durante la limpieza. El compuesto utilizado fue nuevamente Paraloid B-72 al 5 % y en
algunos casos al 10% (Feuillet Terzaghi 2008), esta se realizó teniendo en cuenta las
concentraciones propuestas por Peretti y Baxevanis (2004) en relación a la aplicación
del acetato de polivinilo.
Si bien las medidas de consolidación y remontaje permitieron la manipulación de
los materiales, también prolongaron el tiempo de trabajo, ya que una vez aplicado el
Paraloid debía esperarse a que el mismo se seque para poder continuar nuevamente.
Además, se realizó una ficha en donde se explicitaron los datos de procedencia de
los materiales, la forma anatómica identificada (en los casos que fue posible),
tratamiento realizado y observaciones.
Las tareas realizadas posibilitaron una primera aproximación a la identificación
anatómica de los materiales. A tal fin, se plantearon tres categorías de acuerdo al grado
de certeza en el reconocimiento de estructuras óseas, sin tener en cuenta la lateralidad:
determinados; probables, para aquellos elementos en el que su determinación era
dudosa al no encontrarse ciertas estructuras diagnósticas; e indeterminados, para
aquellos elementos que debido a la alta fragmentación o corrosión que presentaban no
fue posible identificar a qué pieza ósea correspondía.
Luego de la consolidación y remontaje, los materiales fueron embalados en cajas
libre de ácidos y lignina, las cuales se guardaron en depósitos acondicionados para
protegerlos de la luz, de los cambios de temperatura y humedad.
Todo el proceso fue fotografiado con el fin de contar con un registro visual de los
materiales, el que se volvió a repetir conforme se fue avanzando en las tareas. El
registro fotográfico tiene dos objetivos fundamentales: la creación de un banco de
imágenes que pueda ser utilizado como referencia en las técnicas llevadas a cabo y una
forma última de resguardo de información en el caso que algún elemento óseo resulte
alterado en el proceso de limpieza.
Resultados y observaciones
En relación con el estado de los materiales, es necesario mencionar que los
factores de alteración del sitio produjeron cambios sobre los mismos. La salinización
propia de la matriz sedimentaria en la cual se encontraban contenidos los restos
esqueletales produjo la pérdida
de una gran parte de su contenido
orgánico. Asimismo, las primeras
muestras remitidas para datación,
resultaron negativas por el bajo
contenido de colágeno de los
materiales (Figgini com. pers. en
Feuillet Terzaghi 2008) lo que
demuestran la incidencia de
procesos diagenéticos sobre los
huesos.
Los procesos de floraturbación afectaron la muestra tanto por la acción física de
las raíces como por la humedad y los cambios en la microbiota que éstas producen,
provocando que muchos de los elementos óseos no se encontrasen en posición
anatómica, debido a los procesos postdepositacionales intervinientes en el sitio
(Schiffer 1987). En el interior de algunos elementos recuperados se observó la acción
Procesos de floraturbación en FP. Nótese el accionar radicular a través de un hueso largo.
directa de raíces, las que se introdujeron en los mismos extendiéndose y creciendo
dentro de las diáfisis de algunos huesos largos, provocando su fractura y astillamiento.
En líneas generales, se observaron alteraciones mecánicas y físico-químicas:
desarticulación, fracturas, fisuras, grietas, descamación, desintegración (principalmente
de tejido esponjoso), resecación, manchas oscuras (posiblemente de óxido de
manganeso), improntas de raíces. Por consiguiente, la preservación de los elementos
óseos humanos es mala, presentándose las superficies de los mismos extremadamente
friables.
Hasta el momento, del 100% de la muestra, se ha podido determinar
anatómicamente un 58% de los materiales, un 18% corresponde a la categoría
probables y el resto es indeterminado. Para esta tarea se trabajó con una muestra
comparativa y el apoyo bibliográfico de White y Folkens (2000).
Consideraciones finales
Se consideró a fines explicativos, dividir los procesos de trabajo de la
investigación arqueológica con colecciones óseas en 3 etapas:
1) La primera etapa refiere al trabajo campo y a las decisiones metodológicas
que se realizan para poder recuperar el material para su traslado al laboratorio.
2) La segunda está abocada a las tareas de curaduría y limpieza de material,
además de la remisión de muestras para estudios posteriores.
3) La tercera es el análisis del material y su interpretación que luego deberá ser
publicado y difundido.
Las tres etapas son fundamentales para un adecuado desarrollo de la investigación
arqueológica. Ninguna debe reconocerse como más importante que las otras ya que se
encuentran estrechamente vinculadas y de ellas dependen las conclusiones resultantes
en trabajos posteriores.
Las características edafológicas, climáticas, geográficas y productivas de esta área
de estudio produjeron efectos particulares sobre los conjuntos arqueológicos. Los
mismos se presentaron como obstáculos en el momento de realizar el rescate
arqueológico como así también en la continuidad de la integridad de los materiales
recuperados. Ante estas situaciones resulta de suma importancia considerar a cada una
de las instancias descriptas de forma integral e interconectada.
Por tal motivo, la intención de este trabajo fue dar a conocer las decisiones
metodológicas que se implementaron para la preservación de material osteológico
humano que, sin el tratamiento llevado adelante, no hubiese sido factible de analizar.
Las tareas de conservación que implican la utilización de materiales no
producidos en el país se enfrentan a un condicionante a la hora de elegir los productos a
utilizar, teniendo en cuenta la disponibilidad y costos de los mismos. Si bien el
consolidante utilizado no es el óptimo, fue la única alternativa viable para poder
obtener datos de los materiales que, en su conjunto, puedan aproximarnos a una
interpretación del registro arqueológico de este sitio.
Las decisiones tomadas en las tareas realizadas se basaron en la pauta de
conservar la integridad de las estructuras, aun siendo éste un proceso irreversible. Aún
así, el Paraloid impidió el resquebrajamiento de los materiales, los tornó manipulables,
y detuvo el proceso de degradación. De otra forma, el trabajo de análisis de los ítems
óseos no hubiese sido posible, sin mencionar los análisis futuros a los que la muestra
podrá ser sometida.
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