comentario sobre méxico barbaro
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Universidad Autónoma de Zacatecas.
Francisco García Salinas.UNIDAD ACADEMICA PREPARATORIA
PROGRAMA I
Bachillerato Químico-Biológicas
Sociedad Mexicana IIProfesor, Oliverio Sarmiento Pacheco.
“México Bárbaro”
Sofía Denisse Medina Hernández 6°H
México Bárbaro, John Kenneth Turner.
Comentario:
México un país sin libertad política, sin libertad de expresión, un país sin humanidad, ¿Sin humanidad? Sí, sin humanidad. Venta de esclavos al por mayor en plena luz del día, sin pudor alguno, sin temor de un ser supremo, sin reglas, sin
amor.
Un país con una gran diversidad de recursos naturales, desde el principio de los tiempos debió de postularse como potencia mundial, cómo el gran país que es,
simplemente se dejó en manos de unos cuantos, problema que ha existido desde siempre, todo debido a un conformismo extremo en la sociedad, esto al preferir
que extranjeros trabajen las tierras que por derecho les corresponden.
1908, periodo del porfiriato, la figura militar impuesta de sobre manera en todo el territorio nacional, oro verde en la industria, el bien posicionado todo lo gana, el
nacido en cuna humilde no hay poder humano que lo pueda sacar de ahí, tendrías suerte de conseguir un buen amo, uno que no te dejará tomar un vaso de agua si
estabas agonizando.
Comparar un asunto político, económico y social con algo tan burdo como el amor solo suena posible desde el modo humanitario, ¿Cómo el hombre ha sido capaz de manejar de manera tal a sus semejantes para tratarlo como objeto y no como
persona? ¿Cómo el hombre es capaz de exterminar pueblos completos que le han formado las bases para trabajar la tierra del que él ahora está haciendo uso
indebido y exagerado? ¿De qué privilegios o dones goza, aquel que disfruta con el sufrimiento de un hermano? Es hermano todo aquel semejante y no solo por
sangre.
México 1908, México 2015, hasta la fecha en el progreso de la sociedad no existen muchos cambios, tan solo que ahora ya no se les conoce como esclavos
sino como obreros, ya no tiene igual poder la ejerción de violencia hacía una persona, ahora el poder es más psicológico pero de igual magnitud, ya no es
henequén, pero sigue siendo oro verde. Se vive en una sociedad donde el poder militar toma el control una vez más, pero ya no son aquellos cadetes que daban la vida por su patria, incluso antes no lo eran, aunque siguen teniendo una formación
organizada ahora, narcotraficantes se llaman.
En el mundo de explotación y maltratos en el que se ve sumergido México, desde el punto de vista de un local, pero haciéndolo ver con potencial por parte de sus
gobernantes, las aspiraciones de un esclavo no crecen se quedan en la hacienda.
Las aspiraciones de poder de un hacendado crecen cada día más, el ego y falta percepción sobre lo que está bien y lo que no, hace que las cosas las hagan sin
pensar, son egoístas siendo el caso de Díaz.
Un pueblo entre más ignorante mejor obedece, mejor trabaja, no tiene inconvenientes y volvemos a la fase del conformismo, al no esperar nada al no
creer en nada no le queda más que hacer lo que aparentemente le correspondía por el simple hecho de haber nacido pobre.
Al esclavo jamás se le pagaba, se tenía una deuda interminable con su amo la cual pagaba con el arduo trabajo en las tierras.
El rico sin el pobre no sería rico ya que su incapacidad de desarrollar capacidades aptas para los arduos trabajos que realiza el pobre lo hacen depender de este
para enriquecerse, el pobre por si solo podría bien crecer y tener amplias expectativas hacía lo que quiere para él y su familia, pero la incapacidad del pobre para pensar por sí mismo y depender siempre de la voluntad del rico hace que el
pobre quede más pobre y el rico aún más rico.
Si existiera el perfecto equilibrio entre capacidad de pensamiento y capacidad de acción, la sociedad mexicana daría un giro distinto y el México actual sería
completamente diferente, en el sentido de que no solo los nombres cambiarían sino que habría una reestructuración de los poderes, y el pueblo levantaría de su zona de confort, haciendo las cosas que verdaderamente le corresponden y no solo lo que dicta el poder, cambiando así la percepción del mundo hacía México
volviéndolo un país de primer mundo y no solo “subdesarrollado”.