ci^^la^ (1) - ministerio de agricultura,pesca y alimentación · las latas llegaron saliéndose,...

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Ci^^la^ (1) El númoro d© hect^reas denunciadas y comproba- das par el Ingeniaro que suscrib© en la anterior cam- paña, por contener germen de langosta, asc©ndió en esta provincia á 329 hectáreas, t^das en el término municipal de Valverde (isla del Hi©rro); esta super- 8cie fué toda roturada por los propietarios de los te- rrenos, y aquellos que pertenecían al dominio público por la Junta municipal, empleando la prestación per- sonal, Para efectuar la roturación de los terrenos infesta- dos se formuló el presupuosto de los gastos para la extinción del insecto, resultando un déficit de 2.528,18 posetas, á pesar de haberse formado gravando la ri- queza con el máximum que la ley determina, no pu- diéndose cubrir este dé^icit por no existir pueblos li- mítrofes. Se recurrió á la Diputación provincial para que, de acuerdo con lo dispuesto en el art. 20 de la ley de 10 de Enero de 1879, con los fondos de cala- midados públicas, d por medio de un crédito extraor- (1) Ingeniero, D. Francisco Menéndez.

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Ci^^la^ (1)

El númoro d© hect^reas denunciadas y comproba-

das par el Ingeniaro que suscrib© en la anterior cam-

paña, por contener germen de langosta, asc©ndió en

esta provincia á 329 hectáreas, t^das en el término

municipal de Valverde (isla del Hi©rro); esta super-

8cie fué toda roturada por los propietarios de los te-

rrenos, y aquellos que pertenecían al dominio público

por la Junta municipal, empleando la prestación per-

sonal,

Para efectuar la roturación de los terrenos infesta-

dos se formuló el presupuosto de los gastos para la

extinción del insecto, resultando un déficit de 2.528,18

posetas, á pesar de haberse formado gravando la ri-

queza con el máximum que la ley determina, no pu-

diéndose cubrir este dé^icit por no existir pueblos li-

mítrofes. Se recurrió á la Diputación provincial para

que, de acuerdo con lo dispuesto en el art. 20 de la

ley de 10 de Enero de 1879, con los fondos de cala-

midados públicas, d por medio de un crédito extraor-

(1) Ingeniero, D. Francisco Menéndez.

- 113 -

dinario supl©torio, at©ndiese á complet^ir lo necesa-

rio para cubrir el dé/icit que result^iba, y dich^t Cor-

poración acordó librar para esto objeto 500 pesetas,

quo figuran en su presupuosto para calamidades pti-

blicas, sin que haya podido conseguirse, á pesar de

las gestiones practicadas, que se llovase á cabo lo

acordado.

Afortunadamente se salvó el conRicto que parecSa

prosentarse, roturando sus dueños los terrenos infes-

tados de propiedad particular y los de dominio pú-

blico por la Junta municipal, empleando la presta-

ción personal. Las labores de roturación no se termi-

naron cuando la ley dispono, por falta de yuntas y

las frecuentes lluvias en aquella época, quedando ul-

timada esta operación á mediados del mes de Fe-

brero.

En la primera d©cena de Marzo empezó á nacer el

insecto en el pago de San Andrés en cantidades in-

significantes, que fué completament© destruído, con-

tinuando extinguiéndose en su totalidad toda la pla-

ga que aparecicS hasta la mitad del mes de Abril.

Desd© esta f©cha hasta el 15 de Mayo so presentó eri

cantidades enormes, y como el mal tiempo impidió

efectuar una campaña tan activa como fuera de de-

sear, no pudo ser extinguida como esp©rábamos to-

talmente la plaga en este año, aunque se ha conse-

guido que no hiciera daño alguno en las cosechas.

En el mes de Agosto prdximo pasado se comprobó

por el Ingeniero que suscribe la egistencia ®n la isla

del Hierro de 154 hectár©as infestadas de langosta,

cuya roturación dió principio en algunos puntos eñs

q^tc el e.-stado de hun^c•d^id do los terre^ios lo permi-

tía en 1^l primera quinecua de AnoSto.

i.os recursos qu© el Istado ha surniniatrndo á osta

provincia p;^ra l,^i estiución de langosta en el presen-

te añc^ han sido: 287 cajas de langosticida Gomar, de

las cuales llegaron á esta provincia 265, por haberse

tenido yue dar d© baja 22, quo quedaron completa-

mente vacSas por lo débiles y viojos que oran los on-

vases para r©sistir los muchísimos trasbordos que

tien©n quc^ sufrir hasta llegar á su dostino. Casi todas

las latas llegaron saliéndose, muc,has de ollas cou

grandes mermas, habiéndos© perdido en algunas l^i

mitad y más del líquido que contenían.

De las 265 cajas de langosticida Gomar recibidas

se han emp]©ado 224, quedando por lo tanto uu so-

brante de 41 cajas p^lra la próxima campaña, que se

encuentra^i depositadas en un local de Valverde.EI procedimiento ©mpleado para la extinción d©1

canuto ha sido, como antes se indica, la roturación do

los terrenos en que se eur,ontraba depositado, y para

destruir el insecto se ha empleado el langosticida, los

corrales de fuego y las zanjas, siendo el resultado de

éstos bastante más deficiente que ©1 del insecticida,qu© ha dado buen resultado, mezclado con 4 ó 5 vo-lúmenes de agua.

El au^ilío prastado por el pueblo de Valverdo h^l

sido la prestación personal on mayor proporción qu©

la que Ia ley dotormina.

El resultado de la eampaña del presente año pue-

de considerarse como satisfaetorio, aunque no tanto

como hubiera sido de desear, pues confi5.bamos es-

- 115 -

tinguir completamente la plaga, no habiendo conse-

guido esto por la gran cantidad do insecto que avivó

dur<<nte la última mitad del mes de Abril y la prime-

ra de Ni^tyo é impedir ©1 mal ti©mpo ufectuar una

campaña tan activa como ^^ra necesario.

Para terminar de una vez con la plaga de la lan-

gosta en esta provincia os indispensable que se des-

tine un Ayudante á este Servicio Agronómico, pues

encontrándose sólo el que suscribe es imposible vigi-

lar y dirigir los trabajos quo se efectúen, como no sea

desatendiendo on absoluto todos los demás sorvicios.

Hay que toner en cuenta que esta provincia está for-

mada por siete trozos de terrenos separados unos de

otros por el Océano, que las comunicacionas son di-

fíciles y qu© la langosta se eneuentra en una de las

íslas más apartadas de la capital. Al mes hay cuatro

correos al Hierro, y on dos de los viajes (los de loa

días 12 y 2?) se tarda en llegar desde esta capital á

Valverde sesenta horas: di©z horas más de lo que se

emplea en ir de aquí á Cádiz, y hay que tardar irre

misiblem©nte catorce ó quinee días en regresar á Te-

nerife, quedando interrumpido durante este tiompo

todo el sorvicio restante encomendado á esta oficina,

por no haber ni telégrafo ni otros medios d© comuni-

cación.

Además, no es suficieute estar ocho ó nueve dfas en

el Hiorro para cumplir nuestra misión en este servi-

vicio; es preciso para extinguir completamente la

plaga que un individuo del Servicio Agroqómico per-

manezca allí desde que empieza la avivación del in-

secto hasta que termine la campaña de primavera, y

-116-

p^ira esto ©s necesarío, por lo m©nos, un Ayudante.

Es indispensablo también contar con insecticida

suflci©nte á prineipio de ^Zarzo, época en que comien-

za Ia avivacidn d© la pla;a. Do este elemento creemos

nec©sarias 2^0 cajas de insecticida por las dificulta-

des que so presentan para ©1 embarque de gasolina.

Es de ©sperar que en el año próximo, llegando

oportunamento el insecticida y contando con un Ayu-

dante que pueda dirigir y vigilar los trabajos de ex-

tinción, se puoda ©xterminar completamente la plaga

de langosta en esta provincia.

Ciudad Real ^l'^

PROCEDIMIENTOS EMPLEADOS PARA LA EXTINCIÓN

DEL CANUTO

Las proporciones verdaderan^ente alarmantes ©n

que la plaga de la langosta efoctu6la aovacidn duran-

te el estío del pasado año iiispiraron desde luego se-

rios temores en esta provincia. Sin ombargo, el inte-

rés y acierto con que la mayor parte de los pueblos

invadidos organizaron los trabajos de extincidn, á los

que imprimieron , gran ac,tividad, convoneidoa de ía

indudable eficacia de las campañas do otoño é invier-

no, ha hecho que la avivación, aunqu© muy conside-

rable en algunos términos municipales, no lo haya

sido tanto como era de presumir.

Las labores que se dierou en el otoño último pro-

dujeron, como en años anteriores, egcolentos re-

aultados.

Tambidn fueron muy satisfactol•ios los obtenidos

con las d© invierno.

Asimismo han prestado innegables 'beneficios los

(1) Ing©nicro, D. Francisco Rivas Gómez

- 118 -

escarificadores facilitados por el Estado y los ldqui-

ridos por las Corporaciones y particulares.

Aunque no con tan buen ésito, s© ha emploado

igualm©nte el arado común.

En aquellos pueblos en que existen piaras de c©r-

dos, se han utilizado, con los inmejorables resultadoa

de siempro, en la destrucción del germen de la asola-

dora plaga, consiguiéndose sólo por este medio el sa-

neamiento de considerables ext©nsionos d© t©rreno,

donde el empleo d© esc,aríficadores y del arado se

hacía punto menos que imposible.

En las tierras que por su consistencia y grado de

humedad eran factibles las labores Con ©searificador,

durante los m©ses d© Agosto, Soptiembre y Octubro,

aquéllas han sido por todo ©xtrpmo beneficiosas, tan-

to por la cantidad de áermon inutilizado, cuanto por

el mucho tiompo que con las mismas quedó expuesto

á la acción de los agentes atmosféricos y de las aves

é insectos quo le persigu©n.

Prueba de ello ha sido la insignificante avivación

de mosquito habida la prímavera última on los focos

asi tratados, á pesar de ser algunos de ellos de ver-

dadera intensidad.

Los escarificadores, no sólo en la ópoca citada, sino

también durante ol invi©rno, han prestado egcelentes

servicios E;n la estinción de la pl aga, hasta el estremo

de que en aquellos sitios en donde las operacionos de

sanoamiento se practicaron en buenas condicionea

con tan titiles aparatos, ó sea á poca profundidad y

con labor yunta, ha disminuSdo el infesto un 50 y

hasta un 60 por 100.

- 119 -

También con el arado común, cuando se lo prepara

conv©nientem©nte, y sólo se profundiza de 4 á 5 cen-

tím©tros, se consiguen provechosos ef©ctos, destru-

yendo de un 30 á un ?0 por 100, sogún las condicio-

nes del terr©no y el esmero con que se pracbican las

labores.

Este procedimiento, a más d© las ventajas s©ñala-

das, tiene la no menos apreciable de que la langosta,

al llegar a la época del desove, no le efectúa en terre-

nos laboreados, ó si le hace es en pequeña cantidad•

Algunos pueblos tienen mucha fe en la cogida ^

mano del canuto, en la cual han invertido grandes

cantidades d© sus presupueátos. Pero este sistema

tiene el grave inconveniente de su excesivo coste, re-

sultando que cn términos municipales que cont©ngan

extensiones de alguna consideración plagadas del

expresado canutoi no puede realizarso el saneamien-

to, aunque los pueblos inviertan todos los recursos

de que dispongan ©n la mencionada operación.

De entre los diferentes procedimientos empleados

para extinguir la plaga durante la campaña de invier-

no, ninguno tan eficaz y económico como la introduc-

ción del ganado d© corda en los predios infestados•

Una vez más se han comprobado los excelentes re-

sultados que por este medio se obtienen, hasta el

punto de que, en aquellos sitios en que penotra el re-

ferido ganado, no aviva mosqttito alguno, ó sólo lo

hace en pequeña cantidad, aunqu© se trate de focos

de mucha intensidad. ^

Poro lo que má^ avalora ©1 procedimi©nto quo nos

ocupa es su insignificante coste, que en algunos casos

- ^20 --es uulo, no faltaudo otros en qu© on vez de gastos se

obtienen productos, por el mxyor valor quo al des-

arrollarsc alcaru^r el ganado, y así se explica que mu-

chos ganaderos presten sus piar;is á las Juntas Ioca-

les, sin exigir de ellas estipendio alguuo.

Como agentes naturalos de d©strucción del cauuto

pueden mencionarse algunas especies de aves, tales

como los gr•ajos, tordos de diferentes vari©dad©s y

otros pájaros, do los cuales se hau visto grandes ban-

dadas eu diferentes sitios infestados, que romovian el

terr•eno para alimentarse con los huevecillos do la

langosta.

PAOCF.DLI7IENTOS SEGLJIDOS EN EL ESTADO DE MOSQIIITO

En primer tprmino, la gasolina ha dado los buenos

resultados d© siempre, aplicada sobro las manchas y

cordon©s de insoctos, que destruye completamente

con suma rapidez.

El zotal aplicado mezclado con agua, en la propor-

ción da 15 por 100, sobro las manchaa ó cordones de

insectos que no han pasado de la primera quincena

de su oxistoncia, los destruye con satisfactorios re-

sultados y con notable oconomía, dadas las escasas

cantidados de zotal necesarias para la mezcla.

Para combatir la plaga en los estados do mosca y

saltón, también se emplea con éxito el líquido quo

nos ocupa, si bien entonces os necesario que la moz-

cla se haga del 30 a140 por• 100.

Asimismo, el zotal es un auxiliar poderoso de las

- 121 -

vallas de zinc, pues destruye rápidamonte los insec-

tos quc van cayendo en las zanjas, sin porjudicar las

planchas qne las circundan, lo cual no ocurre con la

gasolina que, al inflamarse, puedo fundir aquóllas á

inutilizarlas.

EI zotal no ofrece riesgo alguno para los encarga-

dos de su aplicación, circunstancia que le hace igual-

mente recomendabl©, pues sabido es que con otros

ins©cticidas, los obreros que los emplean se hallan

espuestos á sufrir quemaduras, producidas, bien por

la combustión de aquallos productos, bien por estar

fabricados con sustancias corrosivas.

Por todo lo ©spuesto, es conveniente el uso del zo-

tal en la ©gtinción de la langosta, muy particular-

mente en la primera odad del insecto, al cual destru-

ye con rapidez y econoinía.

Las vallas do zinc han surtido admirables efectos y

so han goneralizado mucho. debido á los innegables

servicios que se vió prestaron en auteriores campa-

ñas y que en la última han superado á toda ponde-

raeión, siendo inealculablos las enormes cantidades

de langosta destruída por este medio, sobre todo en

los términos municipales de ValdepeCias, Infantes,

Villamanrique, Vill^tnueva de la Fuente, La Solana y

otros, eon los que por tr<itarse do jurisdieeionesmuy

invadidas se han acumulado en ellos bastantes kiló-

m©tros dc^ ch^tpa de zinc, facilitado por el Estado y

por la Diputación provincial, sin contar, con el ad-

quirido por los particulares y Juntas locales, algu-

nas do las cuales han heeho pedidos de importancia.

- 122 -

EFECTOS PRC)DCCIDOS POrt FL TF,^POItAL

I,rs I.I.uvins

Aparte d© lo mucho que so ha h©cho con los distin-

tos ins©cticidas y con las trochas, es indudabl© que

©1 prolongado temporal d© lluvias y bajas tempera-

turas han influído de un modo ©ficaz sobre la plaga,

determínando en ©lla un desarrollo anormal, como lo

pruoba el hocho observado ycomprobado cn muchos

de los puntos invadidos de que en un mismo bando ó

jabardo so ©ncontraron ins©etoa de diferentes tama-

ños, aunque se hallaban en igual período ó fase de su

egistencia.

Á esto ha obedecido sin duda el que la langosta

haya recorrido durante la última campaña menores^

diatancias quo en las anteriores y que su voracidad

haya sido también menor^

En los distintos estados del insecto se ha notado la

muerte de buena cantidad de él, eobro todo dosde

fines do Abril, en que se inició el temporal de lluvias

y fríos.

En la época d© la fecundación y desove se han vis-

to individuos acoplados, muertos, así como h©mbras

que al ir ^. depositar en la tiorra el germen que ha-

bía de porpetuar la especie perecieron antes de efec•

tuar tan transcendental función.

Así ha ocurrido, por ejemplo, en el Valle d© la Al-

cudia, en donde á p©sar de las manchas que allí que-

daron y que hacfan presumir una infeccidn de cier-

ta importancia, no se ha encontrado un solo canuto,

- 123 -

no obstante los minuciosos y detenidos reconoci-

mieutos que se han practic^ldo últimamente

Esta circ,un5tancia ha d© influir mucho en las ci-

fras definitivas do las sup©rficies comprobadas, ha-

ciendo variar aquéllas en algunos casos y siendo en

otros tan escasa la intensidad, que la plaga no puedQ

inspirar serios temores en esta provincia, sobro todo

si so practican con esmero é interés los trabajos de

saneamiento durante el otoño é invierno próximos.

De oste modo ©s seguro qu© la avivación sería insig-

nificanto en 12 primavera y fécilmente se extinguiría

el poco insecto que durante ella naciera.

A pesar de que la plaga no roviste importancia,

egiste, no obstante, cierta al^rrma entre los agricul-

tores, especialmente entr© los do los pueblos limítro-

fes á la r©gión extrem©ña, que temen ver invadid^^s^

sus campos por la langosta que en su día pueda in -

ternarse procedente de la indicada región.

Para evitar que tales temores lleguen á confirmar-

se serfa muy conveniente que se acumulase ©n los

principales focos allí existentes la mayor suma posi-

ble de elementos de defensa.

^órdoba. (1^

A1 finalizar ©1 mes de Agosto del año 1902 se ha-

bía denunciado por las Juntas municipales d© ©x-

tinción de doce térmiuos municipales una extensión

de 14.776 hectáress como invadidas por el germen de

langosta. En los m©ses de Septiembre, Octubre y No-

viembre fueron denunciadas 5.623 hectáreas por las

Juntas resp^^ctivas de seis términos municipales, sion-

do, por tanto, el total de las hectáreas denuncia-

das 20.399.

La Junta inunicipal do Conquista no denunció ex-

tensión ninguna como_invadida, habi©ndo, sin embar-

go, aparocido el mosquito en su término con regular

int©nsidad al principio de la primavera. Ln cambio,

en los términos de Blázquez, Carpio y Pri©go, en que

había algunas extensiones acotadas eomo invadidas

por ©1 germen, no se encontró ninguno en la com-

probación.

Todas las Juntas de extinción, excopto las de Al-

caracejos, Priego, Torrecampo y Conquista, remitie-

(1) Ingenioro, D. Alberto Castiñeyra.

- 125 ---

ron los pr©supuestos qu© dispone ©1 art. 16 de la ]ey

d© langosta, cuyos presupuestos fueron desp^lchados

en tiempo oportuno por la Junta provincial y de-

vuelto á los respectivos Ayuntamientos para su rea-

lización.

D© las 3untas que no han cumplido este precepto

legal, las de Alearacejos, Priego y Torrecampo han

fundamentado su incumplimiento en la ©scasa im-

portaneia de la invasión, como en efeeto ha sido con-

firmada en la comprobación hecha por el personal

t8enieo, y la de Conquista no formó el r©ferido pre-

supuesto por considerar á su término limpio de la

invasión.

Durante los m©ses de Agosto y S©ptiembre, la com-

probación de los terrenos denunciadoa como infesta-

dos por ol germen de la langosta se llevó á cabo con

mucha lentitud, debido al ©scaso p©rsonal facultativo

con que se contaba en dicha época y al entorpeci-

miento producido, como todos los años, por la defi-

ciencia de los acotamientos. En los meses restantes,

hasta el 31 de Diciembre, fecha en que cesó todo el

personal auxiliar temporero, la comprobación se

ofectud con más actividad, aunque siempre tropezan-

do con las dificultades anotadas, aum©ntadas con las

frecuentes lluvias propias de dicha época.

Cumpliendo órdenes superiores, en cuanto se reei-

bió en esta provincia el material de escarificadores,

se c^istribuyeron entre los pueblos más castigados por

la plaga y se ordenó al personal do peritos tempare-

ros que se encargara pr©fer©ntemente de la direcr

ción y enseñanza del manejo de estos aparatos en 2os

- 126 -

puoblos á 5u cargo. l.u todos los l^,untos dondo se

ofectub ^^1 cnsityo, lo^ re^sult^ldos fueron buenos, so-

bre todo en los terrc+nos Ilanos, on donde, d^uido la

proíundidad convenientc á las rcjas, corta todo el ea-

nuto puesto á su alcance; eu los terrenos accidenta-

dos y en los labrados á surco los resultados fueron

más deficientes y hubo necesidad de dar dos ó tres

labores cruzadas para producir el efecto deseado; cn

los sitios pedregasos, tanto los c^scarificadores como

los arados dieron r©sultados casi nulos.

A pesar do los buenos efectos producidos por los

escarificadores en la dcstrucción del canuto ©n los

terrenos quo se oncontraban en eondiciones apropia-

das para su ompleo, s61o se hizo uso dc ello^ como

ensayo en la mayoría de los te'rminos municipales,

pues habiondo sido roturad^t por c,uenta de los pro-

piotarios casi tada la oxtensión en que se efectuó

.aquella operación, no quisioron ©mplear más que el

arado con obj©to de aprovechar las labores par^i la

siembra; solamento ©n Dos Torres, Fuente, Tojar y

Villanueva de Córdoba se emplearou los escarifiea-

dores por cueut^l d© las Juntas muuicipales de estin-

ción, ]abrvido citensiones de poca importancia.

Los ese^^rificadores d,^n buen resultado en los te-

rrenos en que su superficie no está abonada por la-

bores de arado anteriores; pero la mayoría de los

propietarios sc opon©n á su ©mpleo porquo la labor

que efectúan dichos aparatos perjudica á los pastos y

no pueden aprovecharse para la siembra.

_ El ©mpleo del ga^iado de cerda, tanto en los terre-

nos previamento labrados como en los sin labrar, ha

- 127 -

dado, como sicmpre, muy buon result^do, siendo el

procedimi©nto d© destrucción del canuto m^IS ecouó-

mico, pero que, natttralmente, no es aplicablc más

que on los ^^untos doude abunda dicho ganado.

La recogida á mano del canuto se ha hecho este año

en tan escasa cantidad que no mer©ce mencionarse.

Como sobrante do la campaña última anterior,

egistían en los diferentes depósitos de esta provincia

al comenzar la de l^rimavera del corriente año las

siguientes esistencias de insecticidas:

DEPóSITO DE CóRDOBA

Gasolina ........................ 50 cajas.

DEPÓSITO DE ESPIEL

Gasolina. .............. 177 cajas.....Insocticida Guerra.......... 3.500 litros.

lle estas e^ist©ncias solamente la gasolina pudo

ser aprovechada, pues el insecticida Guerra habSa

perdido todas las cualidades quo como tal substancia

debe reunir, y por tanto lo consideramos como baja

para las ulteriores campañas.

De modo que el material do egtinción de que se ha

•dispuesto en cada depósito ha sido el siguiente:

DEPdSITOS^i890I1nA,

Cóapn9de

zínc.

hfetros.Ca.jas.

Córdoba ..................... 323 ^ 500

Espiel .......... .. ......... 1.177 1.OOd

valsequillo .................. 1.357 500

1.000

2.000

1.000

2.000 4.0002.857

- 128 -

C^da imo de estos dep^SSitos ha facilitacío mat©riald© c.Ytinci6n ©n la form^ siguionte:

DF.PÓSITO DE C6RDOBA

ChapaeT^'RbIII^OS MI'1ICIYALE3 Gasolina. Zota1. de

zino.A DONDE SE HAN ADJUDICADO

CáJae. Litros. bletrps.

Pr10g0 ........................ 2b ^ » n

Fuente Tojar ................. 25 I > »

Montoro ... .................. 150 ' 250 800

200 ! 2á0 800

DEPÓSITO DE F.BPIEL

TF`.RMINOS MUNICIPALES

Á DONDB S& HAN ADJIIDICADO

Gaeolina.

C.ajae.

'Lotal._

Litros.

Chap4yde ziac.

hfetros.

Pedroche .................. ... 175 100 300

Viso ......... .. ..... ... .... I 50 » »

Gnijo .......................... 150 100 300

Santa Enfemia ..... ........ . 60 » N

Pozoblanco ........ ...... ... 175 » >

Dos Torres ..... . . ........... b0 i00 300

Ariora ................ ...... 50 » »

Villanueva de Córdoba ..... . 275 100 300

Conquista ........ ............ 25 » y

Tori^ecampo ........... ....... 125 100 300

1.125 b00 1.500

- 1^9 -

DEPÓSITO DE VALSE(^UILLO

T$Rb1INOS MUNICIPALESóasolina. Zotal. Chapse

de zine.

Á DONDE 9E HAN ADJUDICADO Ca j ¢s. Litros. ^lletros.

Belalcázar ...................... 150 n

Fuente ObPjuna . . . . . . . . . . . . . . . 65 ^ a

Blázquez .. ......... ....... .. 2b > D

8anta Eufemia ................. 150 100 300

Vieo.......... ... . . ......... 150 » a

Torrecalnpo . ........ .... .... 50 ^ »

Conquista ........... ....... .. 50 » »

Pedroche ........... ... .. 50 sI

•. . ...

690 100 300I

Como so ve por los ariteriores datos, del depósito

de Valsequillo se ha remitido Inaterial de ogtincibn

á los términos municípales do Santa Eufemia, Viso,

Torrecampo, Conquista y Pedroche, que por su si-

tuación dobieran surtirse egclusivamente del depó-

sito de Espiel.

La cantidad de insectieidas sobrantes en los dife-

rentes depósitos es la siguiento:

DEAÚ8ITOSI

I Gasolina.

Cajne.

Zotal.

Litroe.

Córdoba. ........ ....... ......... 123 250

Eepiel.... . .. ... ......... .... 52 500

Valaequillo . . .. . . . . . . . . . . . . . . . 667 400

842 1.150

9

--- 130 -

El sobrant© del depósito do Vals©quillo es d©bi-

do, como se llova dicho, á qu© s© almac©nó en él ma-

yor cantid<^d d© insecticid^is que el necesario para

atender á los pueblos invadido3 de la zona que le co-

rrespondía, y el de los de Espiel y Córdoba obedece

á que han dejado de retirar algunas Juntas munici-

pales el material que se les adjudicó.

De los 2.800 metros de chapa de zine recogidoa por

las Juntas municipales que s© indican, sólo han sido

dovueltos á los depósitos 1.400, eorrespondientes á los

pueblos de Monto ro, Guij o y Santa Eufemia, habien-

do dado orden á los poritos para r©clamar á las Jun-

tas municipales de 1'©droche, Dos Torres, Torrecam-

po y Villanu©va do Córdoba la devolución de los que

retiraron.

La egtensión que aprogimadamente han ocupado

las manchas del mosquito de la langosta ha sido d©

6.255 hect^reas, de las cuales se han combatido con

buitrones y corrales de fuego 430, can gasolina 1.497,

con las trochas metálicas y zotal 100, y además se

han rocogido á mano ,1.716 arrobas de mosquito en

la forma siguiente:

r

- 131 -

SUPERFICIE CUMH.aTID,1tIf6N3101de lae

T$RMIN03

YII1tICIP^LE3

manchae. Con Ibnitronee {Iy corrales

Congaeol'tna.

Con trochasy gotal.

Rccogidaá mano.

HectBrcae.do fuego. --

HecGíreae.HectArese. Hect&reae. Arrobae.

Añora...... 90 li 44 r sBelalcázar.. 320 8 12? ^ 120Conquista . 100 i! 54 1 .Dos Torres.. 500 65 51 7 vFuenteTojar 80 15 22 3 »Guijo.... .. 310 40 150 19 1.346Hinojosa.. . 60 35 » , ,Montoro . . . 800 s 199 19 »Pozoblanco 50 5 • 40 s ^Pedroch<+. . 600 75 86 13 Z50Sta. Eufemia 1.893 78 326 18 sTorrecampo. 300 45 65 6 sPillaaacva Cirdoba. 962 35 234 15 •viso....... 200 7 99 » .

1 6.265 I I 430 l 1.497 I 100 1.716

Fn los términos municipales de AlcaracejosyFuen-

te Obejuna, donde se comprobarun 30 y 123 hectá-

reas respectivamente, avivó la langosta en escasa

cantidad, muy diseminada, habiendo prescindido,

por tanto, de combatirla por lo difícil y costoso de la

op©ración.

Las 65 cajas de gasolina que se enviaron á Fuente

Obejuna sirvieron para combatir la langosta en el

término de Hornachuelos, donde aparecieron algu-

nas manchas en fincas colindantes con el término de

Fuente Obejuna y más próximo al de ^oste puebla

que al de aqu^l.

Del estudio comparativo efectuado de los diversos

procedimientos empleados para destruir la langosta

- 132 --

en los estados de mosquito y saltón, resulta que en

las primaras ed^tdes del insecto, cuando a ŭn tíene

poco movi^niento, la gasolina da muy buen rosulta-

do, y que cuando pasa al estado dc mcsca y saltón y

comi©nza su marchadevastadora formando cordones,

entonces las trochas metálicas, no siendo el terreno

muy accidentado y pedragoso y colocando aquéllas

en buenas condicionos, dan resultados más positívos

y aconómicos quo ningún otro procedimi©nto. En

osta provincia se han colocado las trochas abri©ndo

previamente on el terrcno y en la dirección conve-

niente un surco con el arado, en cuyo fondo se colo-

ca la plancha do zinc aterrando ©1 pie da ésta con la

tierra levantada por el arado y abriando los fosos ó

zanjas necesarios, según la longitud de la trocha.

Para precipitar la muerte del insecto rounido en las

zanjas se ha ensayado eon buenos resultados el em-

pleo del zotal, que, omulsionado con agua en la pro-

porción del 10 al 20 por 100, consiguió destruir en

pocos minutos las grandes masas do langosta reuni-

da en los fosos, avitándose do esta manera ol escapo

de mucha do ella por la junta de algunas planchas

mal re^unidas.

Ii^especto al insecticida zotal, tongo el honor do ma-

nifestar quo según mis propias observaciones y los

datos ramitidos por los Peritos comisionados para la

c ampaña contra 1a langosta en osta provincia, el in-

dicado insectieida empleado al 10 por 100 sobre e-1

mosquito y al 20 sobre el saltón da un r©sultado com-

parable con los mejores insecticidas de los empleados

en fr:o que hasta ahora se han ensayado, teniendo

-133-

sobre ellos la ventaja de mezclarse perfectamente con

el agua que se lo adiciona para au aplicación.

Est© insecticida usado en combinación con las va-

llas de zinc es muy recomendable por los inconve-

nientes do aplicar la gasolina á causa de fundir la

chapa.

Los daños causados por la plaga de la ]angosta

en las dehesas y tierras de sembradío de esta pro-

vincia han sido ©n este año menores que en el ante-

rior, á pesar de que ©1 insecto se introdujo más

pronto ©n los sembrados buscando el alimento que

por la escasez de pastos no ^encontraba en las de-

hesas dondo naciera; pero debido á que la e^ten-

sión invadida por la langosta ha sido en el corriente

año menor que el prógimo pasado, y también y muy

principalment© á que de las provincias limítrofes no

ha habido invasión d© importancia de la langosta en

estado voladora, como sucedió en la referida campa-

ña, ha sido causa, como se lleva dicho, de que los da-

ños hayan sido de menor importancia; habiéndose re-

ducido éste á seiscientas sesenta y dos hectáreas sem-

bradas de trigo, mil ciento ochenta y dos de cebada,

cuatrocientas ochenta y siete de avena, ciento veinti-

séis de garbanzos y aetecientas ocho de pastos, valo-

rados todos los daños en ciento cuarenta y tres mil

quinientas setenta y tres pesetas, distribuídas entre

los términos perjudicados en la siguiente forma:

-, I34 .--,

DAÑ08 CAII9AD09 I'OR LA LANGOSTA

TN`.8:1í1Y09

YUNICIPALE9

Sem-bradtode

trigo.-

Hecta.

fiem-bradinde

cobada,

Hecta.

S©m-Lradfode

avens.

Hecta.

^ Sem-hr:Id(ode gar-banzos.

Hecta.

Naetos.

-Hecta.

valordo

loe dañoe.

-

Peeetaa.

Llñora........... 15 22 , 5 43 6.348

Belalcázar......... 18 2 19 N r. 1.986

Conquista.... ... 14 8 » 2 45 2.058

Dos Torres........ 20 32 4 8 60 4.440

Guijo ............. 152 267 152 5 ^ 28.372

biontoro. ........ 40 60 » 15 300 10.500

Podrocho.......... 4 25 6 3 60 2.900

Pozoblanco....... 6 8 5 2 2b 2.110

3anta Euiemia.... 319 576 213 80 » 64.129

Torrecampo...... 29 114 56 » » 10.676

Villanueva de Cbr- I

doba.. ......... 15 16 » Í 6 176 4.555

Viso.. ....... .. 30 5`L 32 j' » n 5.500

662 1 182 487 ^ 126 708 143.573

^ Como h©mos dicho repetídas v©ces, somos de opi-

nión de quo la causa príncipal que impide la comple-

ta destruccíón d© la laligosta es lo mal quo se cumpie

por las Juntas municipalés de egtinción y por los pra

píetarios ínteresados todo lo concernient© á la cam-

paña de otoño é invierno, unas veces por la apatfa

con que miran la campaña mientras que la langosta

no ha llcgado al poríodo de devastación, otras por-

- 135 -

que se impone el caciquismo y no hay medio d© con-

seguir que se roturen doterminadas dehesas por no

convenirles á ciertos propietarios, ó bien porque con

aquella medida se cause un verdadero perjuicio ŭ losganaderos, sin que puedan ser r©munerados por no

permitirlo la estrechez de los presupuestos, y también

porque hay muchos torrenos en los que la langosta

deposita su germen con preforeñcia y que por sus

condiciones no es posible someterlos á ninguna clase

de roturación.

Creemos podían en parte subsanarse estas di8cul-

tades dictando disposicionos encaminadas á que fue-.

ran egpropiados temporalmente los terrenos infesta-

dos por el germen de la lazlgosta y que sus propieta-

rios se negasen á roturarlos después de haberlos re-

querido para ello, y s© repartiesen en lotes para la

siembra ©ntr© los vecinos que lo solicitasen, pagando

por ellos un canon prudencial en la forma que pre-

ceptúa el art. 22 do la ley vigente de la langoats para

los terrenos de propiedad del Estado y dc^ los Ayun-

tamientos, y que el importe de ©st© canon se aplicara

á remunerar al propietario de los perjuicios que se le

causen con la pérdida de pastos. En cuanto á los te-

rrenos que por sus condiciones no pudieran ser re-

partidos para la siembra, serfan escarificados por

cuenta de las Juntas municipales de egtincidn y re-

munerando la pérdida de los pastos, bien por estas

mismaa Juntas d por el Estado, siendo justipreciados

los dañus por el personal técnico.

La campaña de primavera, aunque considerada

como menos ineficaz que la de otoño, suele dar en la

- 136 -

práctica mejor resultado que la de éste, pu©s aquélla

se efect^fa con verdadera actividad por todos los

interesados, mientras que la de otoño, como lleva-

moe dic,ho, se hace de una manera muy deficiente.

La última campaña de primavera ha sido muy efi-

caz en esia provincia, y á últimos de Julio habia casi

por oompieto desaparecido la langosta. A e^te reaul-

tado ha contribuído no s61o la activa campaña que

contra ella se ha hecho, sino también debido á que

por causas desconocidas en todo el mes de Junio ha

muerto gran cantidad de dicho inaecto antes de lle-

gar á perfecto estado de deaarrollo.

^:itii,@^SCa. ^il

$UFERFICIE INFE$TA EN ESTA CAMPAÑA

De los 26 pueblos que ©n la anterior campaña es-

tuvieron infestos d© la plaga de langosta sólo en ocho

llegó á depositar aquélla sus gérm©nes, siendo la su-

perficie denunciada por las Juntas municipales 397

hectáreas, y la comprobada por el personal facultati-

vo en la campaña de otoño 298 hectáreas. Posterior-

mente las egploraciones llevadas á cabo por el per-

sonal técnico en los puebloa de la zona invadida en

el anterior año y en sus colindantea dieron por re-

sultado la egistencia de 13 hectáreas más infestas en

el término de Casasimarro y, por último, en el de

Alarcón se participó la aparición do varias manchas

de insecto avivado hacia el fin de la campaña.

PERSONAL AUXII.IAR TEMPORERO QUE HA PRE$TADO

BERVICIO

Han prestado servioio en la provineia como Au^i-liares temporeros del Servicio Agronómico dos Peri-

(1) Ingeniero, D. Juan Manuel Priego y Jaramillo.

-138-

tos agrícolas on los mesos de Enero, Frbrero y Mar-

za y cuatro en los de Abril, Mayo y Junio.

Cosantos tres do éstos en 30 del último mes, conti-

núa en su puesto actualmonte uno solo do dichos Pe-

ritos.

RECIIRS03 FACILITAD08 POR EL ESTAbO

Y sU DISTRIRi1CIÓN

Por el Estado se han remitido ^ la provincia 200

cajas de gasolina, qu© por la estación de Socuéllamos

fueron recogidas y trasladadas al depósito de El Pe-

dernoso.Como sobrantes del año anterior e^istían 160 cajas

en el depósito de El Provencio y 336 en el de 2'aran-

cón, en el cual se recogió el residuo de las entregas

hechas en el año anterior al pueblo de Villamayor

de Santiago, una vez que en ©ste pueblo no se apro-

ció infesto alguno.S© han consumido en la última campaña 54 cajas,

cuya distribución fu^ la siguiente:

Saelices .... ............ ... .... 10Pedroñeras ......... ... . . .. 20$elmonto .. ..................... 11Mota del Cuervo. ...... . ...... 10Monreal .. . ..................... S

TOTAL...... ...... S4

Como de la gasolina almacenada en Tarancón dis-

puso'la Dirección general para la provincia de Ciu-

dad Real, á la que se remitió en 8 de Junio, que3an

en la aetualidad las existencias integras de El 1'ro-^

vencio y 146 cajas del de Ped©rnoso.

- 139 -

- PROCEDIMIENTOS EMLEAD09 PARA La EXTINC16N

EN LOS DIVERSOS ESTADOS Y EFECTUS OBTEN^DOS

• En la campaña de invierno se han empleado para

la destrucción del germen de la plaga las roturacio-

nes y laboreo con varias vueltas con el arado co-

mún, y en alguna extensión de la super8cie infesta

dé El Pedernoso la éscariflcación eon el escariflcador

Coleman. La poéa inténsidad de la avivación obaer=

vada no hacfa práctico el emp^eo do otros proced7-

tnientos. ^

El resultado ha sido completo, y en las 229 hectd-

'réas así tratadas no se ha observado avivación. ^stá

sé ha presentado, en cambio, en las 70 hectáreas no

saneadas, en algunos otros terrenos no denunciadós

y especialmente en las lindes de herédades y ribazoa

de camí^os que no fueron escarificados á brazo como

se provino en una circulár de 1.° d© Abril.

En la campaña d© primavera se han usado la esen-

cia de cok (de propiedad de los pueblos) y la gasoli-

na, siendo aquélla tan eficaz como ésta en los esta-

d6s de mosquito y mosca y mucho menor en el de

$altón.

AUXILIO$ SUMINISTRAD09 POR LOS PUEBLOS

- Lós pueblos infestos han contribuído á las campa-

í^as dé eztincióri suministrando en la de inviérno las

yúntas necesarias para el saneamiento de terrenos, y

^n la de primaverá lós jornales de obrero y las egis-

- 140 -

tencias do esencia de cok y gasolina, adquiridos de

sus fondos que como sobrantes del año antorior po-

sefan.

OB$ERVACIONES SOBRE LAS CAMPAÑAS REALIZADAB Y

3EODIFICACIONEB CONVENIENTLS PARA EL MEJOR f:XI-

TO DE LAS FIITLTRAB.

De la activa campaña que en el pasado año pudo

realizar el Sorvicio Agronómieo provincial, auxiliado

por las Juntas municipales, que en la gran intensidad

de la plaga qu© Ias provincias limftrofes nos enviaron

veían una inmediata y pavoroaa amenaza para sus

cosechas, se obtuvo tan lisonjoro resultado que de 26

términos infestos sólo en ocho quedaron restos de

alguna importancia para reproducir aquélla.

La extensián infestada descendió de 5.75^ hectá-

reas comprobadas en el otoño de 1901 á 298, y en ella

la intensidad se notd muy disminuída.

Como los restos que realizaron la aovación corres-

pondían á las últimas avivaciones y los gérmenes se

depositaron ya en pleno otoño, la aparicion del mos-

quito, que aún contribuyó á retardar la baja tempe-

ratura de esta nrimavera, no se observó hasta 8nes

de Mayo y primoros de Junio; desarrollándose con

este retraso un optimismo tal en los pueblos y Jun-

tas municipales que ha perjudicado notablemente el

éai^o de la campaña, que se empr,Bndió eon tibieza,

^e pr+o^iguió con dudas en su eficacia por lo disem.i-

nada que apareefa y hubo que interrumpirlapronto

p0^ ia esease^c de brazoa, absorbídos por la recole^-

- 141 -

ción, y por el t©mor de ocasionar incendios en los

sembrados, ya secos.

Si en todos los pueblos se hubieran atendido las

indicaciones que en la circular é inspeccionea del

Servicio Agronómico se hicieron oportunament©, y

con especialidad la roza de linderos y ribazos como

complemento d© la campaña de invierno, tal vez la

provincia se hubiera visto libre de la plaga en esta

campaña, pues de dichos sitios ha procedido en su

mayoría la avivación.

Es también sensible que ésta se haya obs©rvado en

pueblos como Alarcón que no denunciaron terreno

infesto alguno á su tiempo, originando con ello el re-

traso de un año para su saneamiento de invierno,

que la exporiencia ha demostrado ser el más eficaz.

Á pesar d© estos contratiempos se ha conseguido

reducir la zona invadida de los ocho términos que

abarcaba, según los roconocimientos del pasado oto-

ño, á cuatro, y para su total desaparición en tanto no

se repitan las invasiones de otras provincias sólo será

menoster que las Juntas locales se dispongan á cum-

plir con toda exactitud las leyos vigentea y las ins-

trucciones que les dicte ese alto Centro direetivo y el

personal facultativo dependiente del mismo.

Para garantizar ese cumplimi©nto seguimos enten-

diendo necesarias las medidas indicadas en el último

de los extremos desarrollados en la Mémoria de la

campaña anterior.

Grrat3,ada (1'

Los pueblos do esta provinci^i invadidos por la

plaga se divid©n en dos grupos.

Correspond©n al primoro los infestos á partir del

segundo semestre de 1902, siendo Albondón, Cogo-

]los Vega, Giiéjar-Sierra, Guadix, Gor, Baza, Zújar

y Freila.

A1 segundo grupo los que apareció la plaga el

año actual, y son Gorafe y Dehesas de Guadix.

De los ocho del prim©r grupo, las jurisdicciones

de Froila y Zújar, sobre todo, es donde la plaga

abarcó mayor extonsión superficial é intensidad,

y en cuanto á loe otros seis pueblos de este grupo, se

ha estinguido, afortunadamonte, el destructor insecto,

©n unos debido á las labores de invierno, y en otros

á las tormentas acaecidas en los primeros días de

Agosto (1902), arrastrando los torrenos dondo debió

aovar y á las aves de corral; ya emigrando sin dejar

gérmenes en ©1 terreno, ya por haber caído manchas

(1) Ingeniero, D. José Marín y Mogollón.

- 143 -

que se marcharon sin aovar, es lo ciorto que-las juris-

diccionos de los seis pueblos indicados pueden darse

hasta el día por limpias.

FREILA

La egtensidn de terreno infesto en la j urisdicción

de este pueblo era 34 hectáreas de labor, espartizar

ó atochar, monte bajo, en los sitios Cortijos de Bar-

ches Alto y Bajo, Cortijo de Negretín, propiedad de

D. Narciso Her©dia y Heredia, D. Enrique y D. Ri-

cardo Peláez.

En la campaña de invierno se calcula recogidos

unos 2.875 ki(os de canuto entre la Junta local y los

particularos, saneándose unas 18 hectáreas, y en la

campaña de primavera se destruy©ron de langosta

en sus diferentes estados unos 3.450 kilos en 10 hec-

táreas, empleando gasolina, corrales de fuego, bui-

trones ^ zanjas.

Se remitieron 10 cajas de gasolina.

Hasta el día puede darse por limpia la jurisdic_

ción, egistiendo en lo futuro el peligro de ser reinva-

dida, por lindar con Zújar y pueblos infostos en la

provincia de Jaén.

ZÚJAR

La egtensión del terreno infesto y sospechoso, al

presente, puode calcularse en 220 hectáreas de t©rre-

no de labor, llano, entrellano, espartizar ó atochar,

- 144 -

monte bajo, pedregoso y quebrado, predominando

sobre todo el atochar.

Ll terreno laborablo se siembra de ceroales y legu-

minosas, si bien la mayor parte es discontinuo por

estar intercalado entre los espartizar©s ó atochar.

La langosta recogida en sus diferentes estados

por la Junta local es 9.535 kilos, y por los particula-

res 10.582 kilos que hacen un total de 20.117 kilos.

Se remitieron á esto pueblo 50 cajas d© gasolina,

que se han invortido.

Para la extinción d©1 insecto, á fln de ©conomizar

gasolina cuanta s© pudiera, s© han empleado corrales

de fuego, buitrones y zanjas.

Los daños causados por la plaga en la primavera

en los sembrados de trigo y cebada se calcula en 40

hect^reas, y de ospartizar b atochar unas 30 hec-

táreas.

Observaciones:

En tiempo oportuno se inter©só varias veces ol Al-

calde de 7.új ar rotirara otras 25 caj as de gasolina del

depósito central de Granada; pero dejó de haeerlo,

'alegando lo caro del transport© de las 50 primeras

cajas, por haber hecho el arrastre en carretas, re-

sultando, según notieias, á 2 pesotas los 11 kilos 500

gramos.

Si hubiera utilizado el ferrocarril de Albolote á

Guadix, como se le indicó, los transportes habrf an

sido más baratos y podría haberse llevado las 25 ca-

jas mencionadas, y es posible que la plaga estaría re-

ducida á menor extenaión.

Dobido á los trabajos llevados á cabo, la plaga ha

- 145 ---

quedad.^ tan díseminada en los terrenos dichos, en el

estado que cra rnuy difícil combatir en los meses de

Julio y primeros de Agosto, no pudiendo, por lo tan-

to, afirmarse ha desaparecido ni tamhoco que deja de

existir.

Lo que sí es un peligro inminente en lo futuro,

como va indicado, para las jurisdicciones do Froila,

Zújar y Dehesas de Guadix, que d© los puoblos limS-

trofes de la provincia de Jaén, como los de Pozo-Al-

cón, Quesada, Pollatos y Cazorla, de donde pareco

han venido las inv^tsiones, vuelva de nuevo la rein-

vasión.

GORAFE

La extensión de terreno infesto en la jurisdicción

d© este pueblo, unas 8 h©ctáreas do labor, monte

bajo, espartizar ó atochar, en los sitios de Campoma-

nes, Rambla del Alentado, Chim©neas, propiedad por

indiviso de los Sres. D. Emilio Niartínez Du©ñas, don

Ramón Serrano, D. José Ruiz y D. Rafael Peñuela.

La plaga fué extinguida por la gasolina, corrales

de fuego, buitrones y zanjas.

En la primavera destruyá el maligno insecto los

sembrados como unas seís hoctáreas y dos hectáreas

de atochar, contribuyendo también cl fuego. Se re-

mitieron 10 eajas de gasolina.

DEHESAS DE GUADI^

La jurisdicción d© este pueblo fué invadida en la

primavera de este año, infestando la plaga unas 25IO

- 146 -

hectároas do torrono laborable, atochar, monte bajo

y podregoso en los sitios ftambla-Carrilla, Mojón de

las Salinas, Cañada de la Virv©n yMajada d© lasOvo-

jas, propiedad de los Sres. Córdoba hermanos.

So egtinguió por m©dio de corralos de fuego, bui-

trones y zanjas, pudiendo hasta ©1 día darse por

limpia.