chejfec, sergio - modo linterna

8/12/2019 Chejfec, Sergio - Modo Linterna

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Modo linterna


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Sergio Chejfec

MODO LINTERNA

Editorial Entropa

Buenos Aires


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Chejfec, Sergio

Modo linterna - 1 ed.

Buenos Aires: Entropa, !1".

p.# !$ 1" c%.

&SB': ()*-(*)-1)+*-11-!

1. 'arratia Argentina. Cuentos. &. tulo Editorial Entropa

Cspedes "*!! /C0 1)2

Buenos Aires, Argentina

info3editorialentropia.co%.ar

444.editorialentropia.co%.ar

editorial-entropia.5logspot.co%

6ise7o: Entropa

8otos de tapa: Sergio Chejfec

9 Sergio Chejfec, !1"

9 Editorial Entropa, !1"

&SB': ()*-(*)-1)+*-11-!

echo el dep;sito o de !1".

ueda prohi5ida la reproducci;n parcial o total de esta o5ra.

eserados todos los derechos.


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ndice

Decino inisi5le

6onaldson 0ar

Fos enfer%os

Gna isita al ce%enterio

'oelista docu%ental

El testigo

El seguidor de la niee

6eshacerse en la historia

acia la ciudad elctrica


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Vecino invisile

Entonces llegu a Caracas co%o si fuera la pri%era e>, pero sa5iendo , s;lo es posi5le cuando se regresa.

ecuerdo ha5er sentido


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condiciones de ofrecer su ersi;n u opini;n acerca de los hechos. 0ens


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en las 5ajadas, cuando por %otios desconocidos perdan el control conde%asiada frecuencia.

El Hnico sitio del departa%ento donde el ruido no llega5a era el 5a7o,aun


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co%o supongo


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L

Fa co%adre de Baroni ia en apa-apa desde %uchos a7os atr@s.

Al entrar =o a la casa = %ostrar sorpresa frente a la e$u5erancia egetal

del fondo, %e dijo


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Sin darle i%portancia al asunto %ur%ur un saludo = su5 al ascensor.0ero en el tra=ecto al piso 1" co%enc a %irar hacia el piso. El papelera una 5olsita de estra>a, de esas o depapel de estra>a


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0or esas cosas de la precisi;n enunciatia olanos, la calle del %ercado a5ierto se lla%a 0ri%era ransersal deFos uices. Fa calle siguiente es la Segunda, etc. A eces encontra5a enla 0ri%era ransersal a uno de los ecinos, el isi5le del da, en lacola de algHn puesto esperando ser atendido, = entonces ca%5i@5a%os unas

pala5ras so5re cual del%is%o ecino %ientras le conta5a al otro


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Fo i%agin %@s all@ de la puerta, literal%ente atraesado por el 5ulliciodel tr@nsito Idel


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Buso = sent el fro de las piedras incrustadas enel concreto. Casi toca5a dos de las copas de jugo, cuala5a el otro pulgar so5re lacdula, en especial so5re la superficie de la foto co%o si 5aja la nu%eraci;n /ochenta = dos %illones, etc.2, a eces enorden = a eces no.

Fos p@jaros seguan o=ndose, l;gica%ente ta%5in el arrullo de las aguasescondidas = el ru%or de ese %undo egetal = aut;no%o. 0ero no e$agero sidigo


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= espor@dicas. Fa escena parece 5astante densa en tr%inos dra%@ticos,por lo %enos con%oedora.

a= so5re la %esa tres copas


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Donaldson !ar"

6edicado a 8ederico Monjeau

Fa pri%era e>


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de ese pesado unierso un ele%ento de 5elle>a, casi %etafsico. Es la5elle>a de la des%esura, de la o5cecaci;n = de la falta de inspiraci;n#del si%ulacro de felicidad, del confort construido e insatisfecho a lae>.

Me ha pasado


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Esto sorprendi; a %uchos escritores latinoa%ericanos = europeos, era unapujan>a a. 0ero eso de alguna%anera =a est@ hecho, o =a est@ orientado en una direcci;n en aparienciaineita5le, = por lo tanto lo a 5ajo otro %odo. Son construcciones de lo ca%pestre, del aireli5re, de la ida acu@tica o del %undo del pasado.

Se%ejante unifor%idad, diga%os, ciili>atoria produjo ta%5in unaelocuente reacci;n ir;nica, e%parentada de algHn %odo con la e$perienciade on= S%ith. Es cuando por la %is%a poca o5ert S%ithson descu5re, odefine, lugares de frecuentaci;n esttica en su condado natal de 0assaic,ta%5in en 'uea erse=. En el ;%ni5us desde 'uea Qor ha enido le=endoel suple%ento de arte de un peri;dico, en parte dedicado a un gra5adopaisajista del siglo X&X cu=a esta%pa le resulta 5astante i%precisa.S%ithson llega a un puente so5re el ro 0assaic. Al costado est@na%pliando la carretera, pero es s@5ado, no ha= actiidad = las %@a hacia el norte = otra hacia el sur. 0ero S%ithson perci5eese trance %ec@nico en clae a5stracta, incluso astron;%ica: le parece el%oi%iento i%perfecto, li%itado, de un peri%ido %undo fsico. Fa cr;nicade S%ithson %uestra la la5or entr;pica co%o la e%presa hu%anacaracterstica.

A la e>, %@s all@ del i%pacto


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El rictus no ha5ita en el deterioro, sera f@cil descu5rirlo all. Elrictus se for%a en el ca%uflaje, en el esfuer>o, en la i%posici;n = en elsi%ulacro. 0ara llegar en tren a ighland 0ar, de5e uno 5ajarse en 'e4Bruns4ic, la legendaria ciudad del co%ercio fluial. Es la lnea deferrocarril a


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so5re todo %odifica su fisono%a en su accidentado curso. Es la calledonde i el di@n psi


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la pri%era cuadra despus del puente, 5astante larga, todos los s@5adospor la %a7ana se efectHa una protesta anti5lica. Fos actiistas %uestrancarteles = pancartas, = ponen contra los %uros grandes telas negras conlos no%5res de los %uertos en la inasi;n a &ra. El grupo pacifista espoco nu%eroso = %u= persistente# en cual


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cansados = ensi%is%ados, solos, de a dos o de a tres, de regresosegura%ente a sus casas en 'e4 Bruns4ic. A eces %e ha tocado estarlejos de ighland 0ar, por la ) o por la 1 /


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a= %uchas for%as de llegar a este par


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0ara


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Era el consultorio de una tarotista, Mada% Marie, un di%inuto localdiidido por una cortina de terciopelo color 5ord;, con dos sillas de%adera para la espera. En apariencia, la situaci;n actual de As5ur= 0arse de5e a la de5acle del %unicipio,


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e reserado para el final la Hnica circunstancia nocturna


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Los enfer#os

Cierta %a7ana reci5e una carta. Fe preguntan si, dado


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Adierte pri%ero el


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una se7al. Se pregunta cu@nto ha5r@ de pasar hasta


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Al da siguiente se leanta antes


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8rente a la entrada principal encuentra una larga fila de ta$is# = %@sall@, del otro lado de la cal>ada para a%5ulancias, se ordenan dos o trescarritos de co%ida. Se le ocurre co%prar el desa=uno para el enfer%o# =no descarta la idea por insensata sino por


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En este punto la asalta un re%ordi%iento difuso, pero


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'o sa5e desde cu@ndo lo sa5e, acaso desde sie%pre co%o todo el %undo,,naturale>a hu%ana = ani%al al %is%o tie%po cuando esta5an unidas.Entonces aan>a una 5uena cantidad de %etros con los ojos cerrados = enese lapso, antes de darse contra alguien = a5rirlos, alcan>a a sentir


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ca%as est@n casi juntas 5ajo una entana, = luego ha= dos o hasta trescasi pegadas antes de la pr;$i%a. Ptra cosa so5re las ca%as = lasentanas: podra asegurar


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casi por aca5arse# = en segundo plano pueden erse o5jetos religiosos,ta%5in pe


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li5re. Era erano, haca unos cuarenta grados = la gente ca%ina5adespacio. Apenas adirti; el guardia


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Sin poder e$plicar el %otio, siente una curiosa a7oran>a de esa sala =de ese hospital, aun


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$na visita al ce#enterio

Gn do%ingo de pri%aera ha= tres argentinos en 0ars. Ca%inan por lascalles acas co%o si tuieran toda la %a7ana a disposici;n. 0iensan ensus fa%ilias, en la gente


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desarrollan a lo largo del tie%po. En esta ocasi;n han aproechado loscafs durante los interalos, las ca%inatas de un edificio a otro, lasesperas en los pasillos = so5re todo los traslados hacia las alejadassedes del Eento: todo es oportuno para ali%entar la conniencia, = porlo tanto nada apro$i%ada%ente serio o definitio puede %encionarse sinriesgo de interru%pir esa a%istad %undana = a la e> arraigada.

En cada reencuentro reto%an co%o %ni%o un te%a proeniente del Hlti%o# =a%5os tienen la sensaci;n de


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Colita so5re el techo de un auto, por eje%plo, o junto a una idrierafa%osa o lla%atia por algHn %otio. 6espus se aleja hasta ciertadistancia = to%a la foto. Colita es de color 5lanco, tiene di5ujado uncuello negro = redondo de fantasa, si%ilar al de las ca%isetas de%arineros, = dos cintas angostas del %is%o color a la altura de las%u7ecas. El ensa=ista pedir@ %@s tarde al te;logo = al narrador


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El %Hsico no tiene opini;n# pro5a5le%ente para l ta%poco se trate dehu%or. El %Hsico tiene una idea a5stracta de lo c;%ico# no se trata desituaciones en contraste o anti-cli%@ticas, ta%poco de irona dosificadao de la presencia de paradojas, sino de desli>a%ientos. Cada eento puedetener su desarrollo c;%ico, s;lo


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foto al %o>o. Colita # dijo oncillos. En

esa poca los 5ancos tenan %ostradores altos e infran para estar %@s fresco =, en pala5ras del %Hsico, rerse delpH5lico del 5anco co%o si acaso fuera otro tipo de pH5lico, del ar el chiste, el te;logo piensaen la pe


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'ingHn detalle del reloj lo to%ara despreenido, incluso alguna e> hadescifrado las pe


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= al ensa=ista


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lo to%a5a por sorpresa, = de5ido a su desconcierto prefiri; decir


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%ni%o de dos li5ros, en cual


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ensa=ista pone co%o Hnica condici;n no sentarse# ella se re con %@sganas = dice U0or supuesto, por supuestoV. El te;logo,


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un ce%enterio no pertenece a un pas sino a su ciudad. Entonces enu%er;las ciudades, = dijo


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0refiere resu%ir sus %otios diciendo


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so%etido. Entonces se lan>a a un ejercicio de o5seraci;n perifrica, ala espera de


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lugar, el narrador dedica unos instantes a la conte%placi;n solitaria. Seagacha = siente confir%adas sus intuiciones delante del nicho. &gnora lo


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Novelista doc%#ental

6edicado a 6i;%edes Cordero = Ednodio uintero Gn hotel rodeado de%onta7as. En uno de los jardines, el %@s discreto, dos guaca%a=asgigantes ocupan una gran pajarera. El jardn est@ %edio oculto 5ajo laalta egetaci;n, lo protege del sol a las aes. Cuandoca%ino por las cercanas asisto al co%ien>o repentino de las oces Iestopuede ocurrir a cual.

El isitante ocasional supone, aHn confundido por la sorpresa de losgritos = pro5a5le%ente e%5argado por la soledad del jardn,


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peligro = la tranados en noelas. Esta restricci;n hace ca especial en su tipo. Fos autores


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descri5ir de ese %odo. Aun


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acia el frente ha= una galera techada, lugar de tertulia, con sillonesde %adera = %esas 5ajas, o lugar de paso hacia la recepci;n del hotel# =hacia atr@s, eleada un tanto, el jardn tiene otra galera a para co%er, donde se reparten %esas cuadradas = redondas conunas sillas aso%5rosa%ente c;%odas en las de pasar todoel da = %@s aHn, pora, una lu> a %edias

a co%edor donde el pri%er da cu%plo el de5er social dedesa=unar con el pri%er colega a la ista, os.

En una %esa %@s cercana a la entrada desa=unar@ el principal initado, el

espa7ol Enria a la %is%ahora = sin co%pa7a.

Pcupa su %esa e$tendiendo una serilleta so5re el respaldo de la silla =de in%ediato se dirige al 5uffet desplegado con sus %ar%itas hu%eantes,de donde retorna con el plato lleno del guiso del da, en general carne opollo, = arias arepas. Gn %o>o le llea caf, agua = jugo# es unaa5ierta e$cepci;n al riguroso autosericio del desa=uno, a de desli>a%ientos. Se despla>an dandopasos cortos hacia el costado, con cautela pero a cierta elocidad: enpocos segundos se han alejado.

ago el intento dos eces %@s: rodeo la jaula = %e apro$i%o a sus cuerposhesitantes, llenos de in


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lo %iro fijo, auno. Al escuchar%e a5re5astante los ojos co%o si pusiera en alerta todos sus sentidos. Fe se7aloel lugar donde ien las guaca%a=as, = se aso%a tratando de distinguir lapajarera entre los ar5ustos. Cosa curiosa, pese a ha5er podidoescucharlas infinidad de eces, reacciona co%o si no supiera nada deellas. 'o es precisa%ente un deseo de ha5lar con los ani%ales, sino la

creencia de a la recepci;n del hotel para pedir elticet del desa=uno. A eces de5o esperar un poco, escucho las oces delas e%pleadas en un cuarto ane$o, pro5a5le%ente seguras de


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durante das enteros. Gna de esas noches %@s te%prano, antes de la sesi;npresidencial, o5sero i%@genes de distur5ios ocurridos en el centro de laciudad, co%o protesta por la %uerte de tres personas en %edio de asaltos.'unca tengo te%as de conersaci;n, por lo tanto no desaproecho esto enun corrillo de noelistas, en el hall del hotel. Darios de ellos esperanun auto5Hs


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cajeros para sacar dinero, =


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A esta hora te%prana la terra>a co%edor per%anece a-ca. Fas fuenteshu%eantes de co%ida est@n re5osantes = desde la %esa se diisan loscolores su5idos de las carnes, la %ancha oscura de las legu%5resguisadas, el 5lanco de las arepas, el o$idado del tocino = el a%arillo delos hueos re-ueltos. En un %o%ento aparece Dila-Matas, presenciasolitaria co%o todos los das. 6espliega la ha5itual serilleta = la

tiende so5re el respaldo de la silla. Me pregunto si ser@ una costu%5refa%iliar, o algo de uso e$tendido en su propio pas. P a lo %ejor setrata de un ardid particular, ad Eli>ondo. Sin e%5argo no pode%os disi%ular superado el traspi %e inade el aso%5ro. 'o puedo creer Eli>ondo est en el hotel, un lugar tan indistinto = tan parecido acientos de lugares en los confines de los Andes ene>olanos. Q sine%5argo es as, confir%a.

Fo ha isto = a a %oer todas sus influencias para conersar con l. Gnae> ad%itido lo i%posi5le, a % todo %e parece l;gico. Encuentro natural de llear adelante el te%a de

conersaci;n, pero la erdad es


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Se trata de un co%patriota ilustre, co%ento ante el noelista. El Hnicoentre todas las le=endas argentinas ; por ocupar la ci%asino a co%edor se a po5lando de noelistas =crticos. P5sero desde %i lugar las for%as de saludo. Co%o pr@ctica%ente

a%anece%os en la terra>a cada %a7ana, nos senti%os con derecho a noperder detalle. Me lla%an la atenci;n las pal%adas en los ho%5ros =5ra>os, o tan solo un lee apret;n %ientras se sonre. Es un contacto%Hltiple . Me digo


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dentro del congreso de noelistas. &gnoro el %otio de o a otro en el pecho, o derecho con el ndicedesplegado. 0reisi5le%ente, se %e ocurre ar %i lecturaalrededor de este chiste2. El ideo o la secuencia de la e$pulsi;nerdadera co%ien>a 5astante antes, durante el desarrollo del juego. Co%ola agresi;n de idane se produce a %uchos %etros de donde est@ la pelota,el jue> no ha podido erla. Matera>>i est@ cado = los italianosrecla%an. engo la i%presi;n de ondo noentiende nada, aun


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Eli>ondo aca5a siendo la presencia 5orrosa ul =con pantalones cortos, todas las %a7anas desa=una junto con otros dosho%5res, ta%5in con ropa deportia, antes de salir sigilosa%ente delhotel. asta co, supongo


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to%arse la ca5e>a con las %anos, %i c@%ara junto a su ca5ello. 0or entrelos ar5ustos se aso%an los noelistas


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i%pacienta. 0ara distraerlo le digo


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El testigo

6edicado a ?raciela Montaldo

El protagonista inicial de esta historia es ulio Cort@>ar. Est@ pasandouna te%porada en Buenos Aires. 6os a7os antes residi; en Bolar, desdedonde, en una carta, dijo ar est desterrado en Chiilco=,dese%5arcar@ ?o%5ro4ic> sin entusias%o. Seis a7os antes descendi;, deotro 5arco, el %e$icano 'oo. a%5in pode%os i%aginarlo, por


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sino el de otro, =a espesa, de5ido a lapresencia de la %onta7a erde


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con otra persona, le inspira un sentido de coniencia ur5ana = a la e>do-%stica, de contigTidad, %@s 5ien de ecindad, de i%aginar


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Esa lu> apagada con %anchas de opacidad le recuerda por contraste laatala=a donde ie, = aso%5rosa%ente ningHn pensa%iento o conclusi;n sedesprende de eso. 0lanea resoler algunas cuestiones pr@cticas = isitarapenas pueda la Bi5lioteca 'acional. 0or ello, al llegar a destino lopri%ero


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para ellas una e$tensi;n de la atala=a donde i-e Sa%ich, = losi%pro5a5les colectios


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6as %@s tarde, Sa%ich =a est@ pr@ctica%ente instalado en su sitio deBuenos Aires, co%o si no fuera un recin llegado.

0or lo tanto se siente en condiciones de iniciar las consultas en laBi5lioteca. a tenido tie%po de recorrer los lugares %@s %anifiestos dela ciudad, por lo %enos los %@s %anifiestos para l. Fa aenida

Corrientes = la >ona del centro, la calle Ale%, el 5arrio de Congreso =el de San Crist;5al# Dilla Crespo = 0ara. Ante la ciudad tena i%@genes %u=precisas del pasado, recuerdos igentes, referidos a alguien a5a sin e%5argo con la propia duraci;n de esos recuerdos,producindose un efecto de diergencia. Era as


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0or entonces Sa%ich esta5a dejando la infancia, la a5ue-la le ha5aordenado


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Esa suerte de cone$iones ideales entre puntos separados de la ciudad,co%o si se tratara de regueros flotantes tan so-lo ciertos para


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Bi5lioteca

Ahora est@ a punto de llegar a la sede de 0la>a 8rancia. Es posi5lei%aginar sus i%presiones. Mientras se acerca e la 5i5lioteca %aci>a =dura co%o un 5Hner. Siente


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la 5i5lioteca. En los ficheros no encuentra el %aterial


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Sa%ich:


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colonia de acaciones, con casas


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Fa letra B es %@s prolfica. Busca a Enri, os Bianco, Adolfo Bio= Casares = l;gica%entea Borges. En 1(", Banchs ie en el 5arrio de Colegiales / 6elgado *"2.Bajo el no%5re Barletta aparece una %ujer /A%elia P. de Barletta2 ISa%ich, en su af@n de descu5rir coincidencias, pretende V en Cente-nera 11.Siguiendo, ha= un os Bianco en 0a=sandH (*# pero dado


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escritor por las her%anas Pca%po. /Silina ieen el 1+! de 0osadas, =a desde entonces per%anente, = Dictoria selocali>a duradera%ente en la fa%osa casa de ufino de Eli>alde *( en ela7o ", = *)

en el a7o "*# %antiene el %is%o nH%ero de telfono: )1 0aler%o "+)1. QSa%ich se pregunta por este ca%5io de pocos %etros, en la %is%a cuadra,si no encu5rir@ algo i%portante, o al contrario, si no significar@ algo%enor.2 M@s tarde, u5ica a Mara osa Plier en ?uido 11, no lejos desu a%iga Silina, = encuentra a 'icol@s Pliari iiendo en pleno Pnce:Dalentn ?;%e> +1!. Sa%ich piensa @le> u7;n.

6esenlace

Fa historia da ahora otro salto, aun


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puntos cercanos o to%a colectios cuando son lejanos. Si uno lo e,piensa en alguien a5sor5ido por una actiidad 5urocr@tica, o por lo %enosuna actiidad hacia la ar= se dirige a 'aarro "*, ieja casa del recordado Foren>o Stanchina.asta donde Sa%ich alcan>; a er, es el escritor %@s pr;$i%o, unas nueecuadras si aproecha la diagonal de la Aenida San Martn. Entiende


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El seg%idor de la nieve

6edicado a Arturo Carrera

Su pri%er gran contacto con la niee se produjo hace arios a7os, cuandoresidi; en uno de los innu%era5les su5ur5ios de iiendas rodeadas depe


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tan radicales de silencio, tan Hnicas = ador%ecedoras. 6esde cual


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a5sor5e los ruidos, introduce, co%o efecto secundario, una te%poralidadespecial. Fos das se igualan, los %atices ca%5iantes de las distintashoras tienden a parecerse por


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e%5argo ese %is%o poder


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%is%o, la intuici;n de a es


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espesor = encuentra en ello una prue5a de


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tesis so5re algunos episodios particulares. El seguidor se ilusiona condescu5rir a sus pares. 6urante las estaciones c@lidas, = por ende sinneadas, tiene oportunidad de o5serar con %@s atenci;n la conducta deecinos = conocidos. uiere encontrar alguna personalidad afn a la su=a,ca, olcada en particular a algo %edio indefini5le. Sedetiene en los distrados = en los preocupados, incluso en


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El seguidor se dar@ uelta sie%pre cla de reali>aci;n= desencanto cuando perci5a


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de niee es el defecto o la ausencia, nunca la irtud, a tras de lascuales el %undo se interroga acerca de sus diferencias. El seguidorsostiene a, o eentualidad,de a%nesias prolongadas.

Fas enso7aciones de tipo gre%ial o %undano suelen ter%inar con escenasco%o las precedentes. El seguidor las deja co%o si hu5iera sido rescatadode una pelcula a ni se repite. Cierra los ojos por unos%o%entos = despus uele a a5rirlos lo %@s despacio os = piernas,cerr@ndolos = a5rindolos. El resultado es una huella profunda con for%ade silueta hu%ana a la


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'o puede estar seguro, pero la niee le 5rinda la oportunidad deislu%5rar una ida


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Deshacerse en la historia

Motio

Co%o tiene de%asiados a7os so5re las espaldas, el ho%5re digna = una soledad tran


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0uede proponerse alguna noela de Pnetti, tantas de ellas 5astanteparecidas = a pri%era ista interca%5ia5les.

JAlguien es capa> de creer


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8ierro leanta la guitarra = se prepara para tocar, e$tiende los 5ra>osco%o si los elongara = se inclina so5re ella para escuchar %ejor. Enrealidad lo hace por una suerte de conenci;n teatral a la


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En la sala ha=


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0ero de pronto se produce un ca%5io de te%a en la %ente de 8ierro, undeso en las aprensiones, algo parecido a un sosiego a.Esto repercute en su parodia de %Hsica, por


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tiene indicios claros para referirlos a cada uno de los nueospersonajes. Cuando la incertidu%5re alcan>a la %@$i%a intensidad, hastael punto de resultar difcil%ente tolera5le para la %a=ora, la fa%iliadel gaucho e%pie>a a %oerse. Madre = ni7os ca%inan despacio hacia loscostados, co%o si se tratara de una dan>a irreconoci5le de tan si%ple:ella = el hijo %enor hacia la derecha, aun


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uno supone


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los representaran: el rinc;n de trastos, la reja de hierro = la ca%a dehospital. 8ierro continHa te%plando la guitarra, en apariencia ajeno a lasala.

Al rato e%os aparecer tres ho%5res. El pri%ero es un indio %ontado aca5allo, con una lan>a en la %ano derecha. Est@ se%idesnudo, tiene

%anchas en la piel a = sepone a la derecha del ho%5re.

6espus entra ca%inando un negro. Est@ estido de un %odo elegante = a lae> e$cntrico, aun


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pH5lico no iniciado podr@ entender


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%ejor sus %anos, en especial la i>


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As, la pasiidad de 8ierro si%5oli>a un senti%iento, %@s 5ien unaresera de afectos = padeceres.

Spti%a escena. Mo%entos despus el cuerpo del a%igo ha desaparecido, =e%os en su lugar a una %ujer sosteniendo un ni7o


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8ierro conclu=e, = =a antes de dejar la sala siente una indefinidanostalgia, tanto hacia los hechos del pasado co%o hacia la ida


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&acia la ci%dad el'ctrica

E%pie>o por el final. Es s@5ado por la noche. Fa hora del regresotaciturno, tal co%o ciertas iejas historias descri5en el cansancio delos personajes despus de un largo da. Bragi = =o he%os su5ido al trensu5terr@neo de 'uea Qor, ru%5o al norte de la isla. Arrastra%os lafatiga neriosa de ha5ernos ocupado de actiidades inHtiles durante horasinter%ina5les, = en unas cuantas paradas ha5re%os de despedirnos,pro5a5le%ente por largo tie%po.

En el tren se respira un a%5iente de s@5ado, de esparci%iento ajustado aun corto nH%ero de horas. Diajan personas ona de los teatros. a%5in ha=parejas o fa%ilias de turistas,


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Era casi una con%oci;n fsica, @s a5soluta%ente acHstica# co%o si %ea as. Fa erdad es


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aiso puede ser una entana a ficciones i%preistas, con esas figuras%arcadas por el paradig%a tnico = la %irada social. Gno se sienteatrado por las caras. Fos rostros en los carteles del su5terr@neo sonas de interpelaci;n racial, %@s notorios


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Fa consigna era reunirse en erse= Cit= para iajar desde all aScranton, en 0ensilania. Qo de5a ir en su5te hasta una estaci;n cercanaa la ona Cero, = luego to%ar la lnea su5ur5ana


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Ca%in en direcci;n a la orilla# %@s na conencional unopareca e$ponerse a una in%ersi;n de densidades aria5les# las gotasenan desde todas direcciones, co%o ocurre en los ductos gigantes de loslaaderos de autos. 'ada %@s antes, s;lo una lluia ol@til = enlo


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0ero en lugar de eso %e puse a ha5lar con %i nueo co%pa7ero. 6e lalluia, por supuesto, te%a o5ligado. Q en segundo lugar de la ista haciala isla, acerca de lo cual, pe-se a %i entusias%o, no se %ostr;i%presionado. Manhattan le pareca inisi5le. El ho%5re se lla%a5aArind, ia en 'uea erse= = proena de la &ndia. ena una o> un

tanto aguda, o chillona, = se e$presa5a con una conicci;n


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est@5a%os. En las cercanas de Edison se han instalado desde los a7os *!una gran cantidad de hindHes# = aun


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la i%agen de un rostro %irando fijo hacia la c@%ara, =o por %i parte%ira5a hacia Manhattan, cla de los ru%ores del iento, pienso, = de la pasiidadde las aguas 5ajo la lluia.

Fa ne5lina se cerna so5re el ro co%o un elo por todas alcan>a5a aenrarecer los nieles inferiores de la isla, conirtiendo las 5ajasalturas en %asas confundidas entre celajes = a5an adistinguirse, pero


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peripecias de un poeta islands


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e%5argo la posici;n relatia de las criaturas de la caraana, diga%os, se%antena. u lejos de otras = tan fatigadas sensaciones de carretera...,por eje%plo cuando se ha5la de de-orar el ca%ino = cosas parecidas.Floa s;lo de a ratos, pero de todos %odos recuerdo %u= 5ien


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a%5in record, aun


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tratara de una sola cosa, un lugar = su le%a, una naturale>a = supro%esa:

UScranton. he Electric Cit=V.

Fa poca rutilante de Scranton a desde %ediados del siglo X&X, cuando

co%ien>an a e$plotarse las %inas de antracita, hasta pasado el pri%ertercio del siglo XX, cuando el car5;n deja de usarse en ru5rosi%portantes, por eje%plo, la calefacci;n. Gno puede encontrar %uchashuellas del pasado %inero, = @s el Museo de la Antracita sea el Hnicoele%ento conce5ido para 5rindar testi%onio. 0ero en la %edida en = la a%nesia /incluso uno aeces est@ inclinado a pensar


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enterar%e de su %uerte, supe ta%5in


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el otro 5olsillo, o suelta %ientras hace un ade%@n cual


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Esos disensos cru>ados descoloca5an a los ado, = estos eran cantante cuando lo denosta5an co%opropagandista li5ertario o cosas peores.

Chet sigui; ha5lando, sin e%5argo Melanie =a pareca no escuchar,a5sor5ida por lo


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SegHn Chet, fue un episodio reelador poro er hasta


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S;lo algunas se%anas despus le %encion el episodio a Melanie,


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Nota del editor

Dersiones preias de siete relatos de Modo linterna han aparecido segHnla siguiente descripci;n: U6onaldson 0arV en Mara Sonia Cristoff /ed.2:

&dea cr;nica, Beatri> Diter5o Editora, !!+# UFos enfer%osV en 'athalieBou>aglo = aier ?uerrero /eds.2: E$cesos del cuerpo, Eterna Cadencia,Buenos Aires, !!(# UEl testigoV en DDAA: Buenos Aires. Fa ciudad co%o unplano, Fa 5estia eona, Buenos Aires, !11# Uacia la ciudadelctricaV, en Ediciones el 5roche, Fa 0lata, !1.

Se pu5lican en esta edici;n por pri%era e> los relatos UGna isita alce%enterioV = UDecino inisi5leV.

chejfec, sergio - modo linterna

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