cartilla didáctica: la cultura en el aula
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Suath Benítez Villadiego
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Practica Pedagógica II
Cartilla Didáctica
La cultura en el aula: Rescate de la memoria histórica y cultural de la comunidad
Zenú en el Municipio de Momil.
Principio de la Cartilla Didáctica de estudios Etnoeducativos en comunidades culturalmente
diferenciadas
Para grados de
primaria
tercero, cuarto
y quinto
Conocimiento y difusión de saberes,
practicas, valores, mitos y leyendas
construidos ancestralmente por a
comunidades indígenas que favorezcan
su identidad y la interculturalidad en el
marco de la diversidad étnica y cultural
del país.
Reconocimiento de los aportes a la
historia y a la cultura colombiana,
realizados por las comunidades
indígenas.
Objetivos
Identificar el origen de la población indígena Zenú
Conocer el origen de las comunidades propias y su historia
Identificar los valores más importantes de la cultura Zenú
Conocer los aportes que la cultura Zenú ha hecho a la nación
Contenidos para transversalizar
Importancia de la etnoeducación como procesos de formación para las comunidades étnicas
La etnoeducación en la escuela
Historia de la cultura Zenú
Tradición oral: Mitos y Leyendas
La cultura Zenú en Colombia
Valores culturales de la cultura Zenú: Creencias y Costumbres
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Practica Pedagógica II
Contenido pág.
Presentación 4
Justificación 5
Propósito 6
Fundamentación de la estrategia 6
Enfoque pedagógico de la propuesta 8
Ciclo y curso 9
Tema 9
Diagnostico 10
Material de Trabajo Cartilla Didáctica: La cultura en el Aula 12
Componentes pedagógicos 12
Propósito educativo 12
Contexto 12
Papel del estudiante 13
Papel del docente 13
Unidades didácticas
Unidad 1: Construyendo el marco teórico de la etnoeducación en la escuela 14
Capítulo 1: Importancia de la Etnoeducación como proceso de formación para las
comunidades étnicas 14
Introducción a la etnoeducación en las asignaturas 14
Capítulo 2: La etnoeducación en la escuela 16
Concepción de educación etnoeducativa 16
Capítulo 3: Historia de la cultura Zenú 17
Ubicación geográfica 17
Historia 17
Evaluación unidad 1 19
Desarrollo de competencias 20
Unidad 2: Realidad Social de la Cultura Zenú 21
Capítulo 4: tradición oral: Mitos y Leyendas 21
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Practica Pedagógica II
La leyenda del caimán de oro 21
La leyenda de las Mohanas 21
Leyenda del duendecillo mohán 21
El fantasma de juan Lara 22
El negro chirino 22
La leyenda del mohán 23
El muerto alegre 24
Gritón 24
El duende 25
Leyenda de la Llorona 25
Los animes 25
Capítulo 5: La Cultura Zenú en Colombia 26
Visibilización e inclusión 26
Capítulo 6: Valores culturales de la cultura Zenú: Creencias y Costumbres 28
Imaginarios de la cultura Zenú 28
Evaluación de la unidad 2 30
Por un país al alcance de los niños 31
BIBLIOGRAFIA 39
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Presentación
La Etnoeducación debemos entenderla como la educación en los valores de la
etnicidad nacional, teniendo en cuenta que nuestra identidad cultural es el
sincretismo o mestizaje de tres grandes raíces: la africanidad, la indigenidad y la
hispanidad.
Ni el Ministerio de Educación ni los docentes deben confundir el concepto de
etnoeducación con la atención educativa para los grupos étnicos. Una comunidad
educativa es etnoeducadora si su Proyecto Educativo Institucional es
etnoeducativo, asume en todos sus componentes e implementa la etnoeducación
afrocolombiana, indígena o mestiza, independiente de la ubicación en cualquier
localidad del territorio nacional.
Hay muchas comunidades educativas ubicadas en poblaciones mestizas que son
etnoeducadoras asumiendo la etnoeducación en sus estrategias pedagógicas,
mientras hay muchas comunidades educativas ubicadas en territorios de las
comunidades indígenas que son ajenas e indiferentes a la etnoeducación,
manteniendo en sus PEI el discurso educativo excluyente de la diversidad cultural
y la interculturalidad.
Atendiendo a lo anterior esta propuesta etnoeducativa se presenta como una
herramienta para fortalecer los conceptos de cultura desde contextos inmediatos y
propiciar la participación de los estudiantes en la construcción de un concepto a
partir de las realidades sociales locales.
La cartilla permite tanto a estudiantes como docentes acercarse a la realidad
social desde una pedagogía intercultural fundamentada en los valores propios de la
comunidad.
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Justificación
El colegio mixto Santo Domingo Savio y el Programa de Educación Permanente de
la UNAD desde este proyecto buscan integrar aquella diversidad cultural existente
en nuestra comunidad, otro propósito importante es darle a conocer a nuestros
estudiantes y padres de familia nuestras tradiciones para que estos colaboren en la
conservación de esta pluralidad Étnica y cultural.
La necesidad más grande de nuestra institución educativa y de la comunidad en
general, es el rescate de todas aquellas tradiciones que se han quedado perdidas a
través de los años y por el encuentro con otras, que se han desarraigado a lo largo
de Colombia.
La Institución Educativa y la UNAD con su filosofía institucional se convierten en
mecanismos propios de socialización y creación de procesos, en un foro de
negociación y construcción de sentido, de vida, y de un espacio de sistematización,
construcción, formalización, ampliación, valoración, recuperación y producción de
conocimientos y saberes. Es decir que en este proceso las personas que egresen
de esta institución deben interactuar con otras personas sin olvidar que tienen una
mezcla de diversidad cultural.
Se pretende con este proyecto que el colegio mito Santo Domingo Savio, asista
Impasiblemente este proceso de penetración de la cultura, considerando que los
retos pedagógicos de la etnoeducación no se limiten solo al sistema escolar sino
que sea autónomo en el rescate y la conservación de las mismas.
La etnoeducación es intercultural. Debe partir del conocimiento, análisis, valoración
y afirmación de la identidad Étnica propia, y proyectarse hacia el abordaje de
conocimientos y tecnologías producidos por otros grupos humanos, desde la
perspectiva de articulación cultural comunitaria.
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Practica Pedagógica II
Propósito
Esta estrategia se fundamenta en el rescate de los valores culturales y los
conocimientos propios de la comunidad. Por esto, se quiere trabajar desde los
escenarios educativos a sabiendas que estos aportan en el desarrollo de la
personalidad del estudiante las bases y principios necesarios para entender las
dinámicas sociales que conforman y tejen el tejido social. Este material está
dirigido a estudiantes de primaria pensando que en esta etapa escolar es necesario
trabajar el tema de la cultura como pilar para la pervivencia de la misma y la
conformación de nuevos patrones sociales que permitan a las nuevas generaciones
fortalecer el interés en cuanto a sus orígenes, ancestros, costumbres, no solo para
la contribución en la formación de un nuevo ciudadano sino también para el rescate
de la identidad cultural propia.
Fundamentación de la estrategia
El propósito del currículo escolar más que fundamentar el proceso es una guía de
cómo se puede trabajar desde los diferentes contextos y esta idea sustenta la
necesidad de crear un currículo contextualizado; es decir, que tenga en cuenta las
necesidades de los estudiantes y de la comunidad en que se gesta el proceso. El
procesos educativo en la actualidad anda tras estos derroteros, ya no solo se trata
de una educación bancaria donde el estudiante tenía una actitud pasiva, se trata de
que el estudiante sea un agente activo, una persona crítica frente a la realidad
social local. La práctica educativa enfocada en el estudiante es determinante en
tanto el estudiante pueda reconocer sus habilidades así como sus debilidades u lo
que puede hacer o no para fortalecer dichas falencias. Es por esto que esta
estrategia se enmarca dentro del modelo de aprendizaje significativo, aprender
haciendo, aprender a través de la experiencia.
Para David Ausubel el aprendizaje significado es el proceso cognitivo que resulta
de la interacción entre la información que entra en el estudiante y la que este
posee, esta confrontación es productora de un nuevo conocimiento modificado.
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Practica Pedagógica II
Teniendo en cuenta las características de este modelo la estrategia que se quiere
llevar a cabo permitirá al estudiante de primaria contrarrestar información sobre la
cultura y el mundo que lo rodea; es decir, se trata que el aprendiente comprenda y
asimile los componentes sociales que le dan forma a la estructura social
establecida.
Ahora bien, para que se pueda establecer o más bien fortalecer el aprendizaje de
los estudiantes desde la teoría de Ausubel es necesario tener en cuenta algunas
consideraciones. Para mencionar se debe tener en cuenta que el conocimiento
debe estar relacionado con la realidad del estudiante y el estudiante debe estar
predispuesto a aprender significativamente. Para un mayor entendimiento se
requiere que haya una relación directa entre el sujeto que se aprende y el objeto
aprendido.
Entonces cabe preguntar ¿cómo se puede enseñar cultura a estudiantes de
primaria? Cuando se supone que esta es aprendida de manera intencional; es decir,
la cultura no tiene una cátedra para su aprendizaje sino que se gesta a través de
las relaciones y las interacciones sociales. Pero la verdad lo que se quiere es
fortalecerla desde las representaciones y subjetividades sociales propias. No se
trata de hacer cultura lo que se busca es transformarla y sacar provecho de la
misma desde los recursos pedagógicos.
Así pues, la propuesta desde al aprendizaje significativo pretende potenciar los
conocimientos de los estudiantes en cuanto a la cultura y la historia local,
colocando de lado las dinámicas sociales, la forma de organización social, los roles
sociales, etc. Trabajar la cultura desde el escenario educativo significa dar
importancia que merece al contexto de los significados y símbolos sociales.
Permitir que el estudiante mediante su juicio pueda identificar la forma como pueda
aportar al concepto de cultura e historia local o más bien que se apropie de los
espacios sociales existentes.
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Practica Pedagógica II
Enfoque pedagógico de la propuesta
Trabajar la cultura en la escuela es una metodología que requiere la participación
activa de los agentes que están de alguna manera involucrados en esta. Además, la
escuela es el primer escenario inmediato donde los procesos de interrelación y
comunicación soportan la cultura de la comunidad. La propuesta que se presenta a
manera de cartilla didáctica pretende hacer un acercamiento teórico-práctico de
los conceptos que parametrizan la cultura local y aportar a la construcción de un
marco teórico y referencial de los procesos culturales que se entretejen dentro de
las dinámicas sociales propias.
Como soporte metodológico se estima trabajar desde el enfoque pedagógico
diferencial que desde sus conceptualizaciones permite en el campo pedagógico,
pasar de la concepción de un alumno estándar (el “buen alumno” dócil, legible,
precoz, rápido en la comprensión de la tarea, ávido, activo) a un alumno “diverso”,
que debe construir su saber a partir de sus propias características. Esto supone,
caracterizar las capacidades de los estudiantes pero desde las colectividades; es
decir, fortalecer la educación intercultural pero desde las individualidades.
Se debe tener presente que la pedagogía diferencial está sustentada en la
estandarización del estudiante desde las capacidades cognitiva-conductuales y
psicosociales. Sin embargo desde esta propuesta se quiere fortalecer la diversidad
cultural desde las potencialidades particulares de los educandos, esto es, sacar a
relucir lo mejor de cada aprendiz para aportar al proceso de enseñanza
aprendizaje. En otras palabras trabajar desde la diferenciación como aporte a la
diversidad.
Ahora bien, el interrogante esta es ¿de qué manera se puede articular una
propuesta cultural desde la diferenciación como soporte del proceso de enseñanza
aprendizaje del modelo de aprendizaje significativo? La propuesta de la cartilla
didáctica: la cultura en el aula pretende desde su aplicación que el estudiante sea
capaz de producir su propio conocimiento a partir de la experiencia y esta está
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Practica Pedagógica II
sustentada en las variaciones sociales de las relaciones interculturales, en el
encuentro de culturas dentro del contexto escolar. Se trata de identificarse
culturalmente a partir de la diversidad presente en la escuela, es encontrar un
lugar dentro de la escuela.
Ciclo y el curso
La propuesta de la cartilla didáctica está elaborada específicamente para
estudiantes de primaria. Sin embargo se puede adaptar a otros contextos
educativos teniendo en cuenta la fundamentación curricular y las necesidades
educativas de los estudiantes. Es una propuesta activa que dentro del programa de
Educación Permanente de la UNAD está dirigida a los estudiantes de los cursos de
ciencias sociales.
Tema
Nuestros hijos e hijas pasan largos años de su vida en un contexto de socialización
escolar. Y la escuela puede significar proyectos vitales distintos. He aquí un lugar
donde empezar a imaginar una sociedad intercultural. Para este propósito, podemos
destacar tres de las propuestas de la educación intercultural:
Organizar experiencias de socialización basadas en valores de igualdad,
reciprocidad, cooperación, integración.
Aprovechar la diversidad cultural como instrumento de aprendizaje social.
Dotar (y dotarnos) de destrezas de análisis, valoración y crítica de la
cultura.
La escuela que puede ambicionar estos objetivos es la que intenta educar en
valores de diversidad y solidaridad. Y la práctica cotidiana, regular, sistemática y
contextualizada de estos valores sólo se puede hacer en un espacio donde haya
diversidad. No se puede nadar sin agua: no se puede educar en la diversidad sin
diversidad.
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Practica Pedagógica II
Construir una sociedad intercultural nos puede ayudar a reformular el debate sobre
la desigualdad. Hay muchas otras razones para defender un proyecto de escuela
pública. Esta sería una más: para educar en una sociedad intercultural (y éste
parece ya no sólo un eslogan sino una necesidad urgente) sólo hay un proyecto
educativo posible, educar en un contexto plural, sin segregación, sin exclusión; un
proyecto de cohesión e integración social. Y visto así, el proyecto de construir una
sociedad intercultural no es sino una nueva versión de la lucha por una sociedad
igualitaria.
Diagnóstico
Colombia es un país multiétnico y pluricultural, ya que desde sus inicios fue
poblado por personas de diferentes etnias, con principios culturales provienen de
otros lugares muy lejanos a nuestra tierra.
La Etnoeducación como dimensión constituye una estrategia valida y viable hacia la
consolidación de una educación que respeta las necesidades, intereses y
aspiraciones de los grupos Étnicos del país, en el marco de la multiculturalita y
multilingüismo como base para fortalecer y desarrollar la identidad cultural
particular y nacional.
Hoy en día ha crecido la diversidad cultural en nuestras instituciones educativas
pues encontrarnos niños que vienen de otras culturas, pues en Colombia las
regiones están conformadas por múltiples culturas. Lo que nos lleva a la
implementación de la etnoeducación como cátedra en los planes de asignaturas de
todas las instituciones educativas, lo importante es que no olvidemos que debemos
brindar una formación en el respeto por las diferencias y es desde ahí cuando se
lograría vivenciar los verdaderos derechos humanos.
La multiculturalidad y la pluriculturalidad solo en el siglo pasado empezaron a
surgir cuando los pueblos y las comunidades comenzaron a mostrarse a las demás
sociedad.
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Practica Pedagógica II
Desde hace mucho tiempo se ha considerado que reconocer y visibilizando la
diversidad cultural como una riqueza formativa para las jóvenes y futuras
generaciones podría ser el comienzo de la convivencia pacífica que se ha buscado
a través de los años.
Este proyecto es de vital importancia, porque nuestras instituciones están
integradas con una diversidad cultural y desde allí podemos construir la
democracia con las perspectivas del conocimiento y reconocimiento de las demás
culturas existentes, sin perder la singularidad de la cultura propia.
La idea que prevalece al elaborar este proyecto es la guía de un proceso de
construcción colectiva y participativa, que es deudor de múltiples y diversos
aportes telúricos y metodológicos para la comunidad educativa en general; es decir
que todos los agentes del colegio y la UNAD logremos el respeto por las
diferencias, pues la filosofía de esta institución se proyecta a la formación
empresarial teniendo en cuenta que en una empresa los principales al personal que
lo integra.
La etnoeducación tiene que cumplir una misión crucial en la lucha contra estos
obstáculos históricos con secuelas políticas y sicológicas, para la interculturalidad,
sea una realidad y se pueda redefinir las relaciones entre ella, pues nuestras
culturas se superponen las grandes ideas que pueden aparecer, y aparecen de
hecho, en las distintas culturas, porque estas tienen raíces comunes, se alimentan
de unas experiencias semejantes a la existencia humana y numerosas ocasiones en
el transcurso de la historia se han nutrido de otras.
En este sentido se puede afirmar entonces que interculturalidad tiene fundamentos
lógicos e históricos y que en el colegio y la UNAD donde se debe trabajar por el
rescate, la conservación y el respeto por las mismas culturas.
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Practica Pedagógica II
En la Constitución Política Nacional, al concepto de etnoeducación es considerado
dentro de los principios y derechos fundamentales de los individuos y de la
sociedad.
En el colegio Santo Domingo Savio y la UNAD contamos con una diversidad
cultural, ya que encontramos que la comunidad educativa esta· conformada por una
variedad de culturas y no solo eso el municipio esta integrados por personas que
llegan de otras regiones entonces lo que se busca es rescatar y conservar una a
una estas culturas promoviendo el respeto por sus integrantes y estas.
Material de Trabajo Cartilla Didáctica: La cultura en el Aula
Componentes pedagógicos
Propósito educativo
La promoción de la cultura en los contextos educativos permite en primer lugar
valorar la importancia de esta en la formación conductual de los estudiantes y
posibilita espacios de debate en cuanto a la influencia dentro de la esfera educativa
y social. Desde esta perspectiva la cartilla didáctica tiene como propósito llevar la
cultura a los escenarios pedagógicos con el objeto de crear un marco teórico y
referencial que permita a las nuevas generaciones reconocer a la cultura como uno
de los pilares de formación en educación y un campo de aplicación de
conocimiento. Más aun, teniendo en cuenta que la sociedad en que vivimos está
marcada por la herencia, los valores culturales y las representaciones
socioculturales.
Contexto en que se desarrolla
La flexibilidad y dimensión pedagógica de la propuesta didáctica es una virtud para
la apropiación de los escenarios propios de los estudiantes. Así, se quiere trabajar
desde un proceso que permita la asimilación social y la adaptación a una
metodología cercana a las necesidades de los estudiantes. Como punto de partida
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Practica Pedagógica II
el contexto desde el cual se pretende trabajar está caracterizado por las
mediaciones tecnológicas y pedagógicas; es decir, que el medio de aplicación
depende en gran parte de la ubicación geográfica de los estudiantes. Para nuestro
caso y teniendo en cuenta la población beneficiada se puede aplicar a plataformas
virtuales y tradicionales pero bajo un modelo educativo que permita la aprehensión
de los contenidos desde la experiencia sociales de los educandos.
Por lo tanto esta propuesta se presenta para los estudiantes de 3° de primaria con
la observación de que en esta etapa escolar la asimilación de contenidos sociales
presenta mayor facilidad si se aplican las metodologías y contenidos adecuados.
Papel del estudiante
Según Ausubel dentro de la metodología del modelo de aprendizaje significativo el
rol del estudiante es determinante dentro del proceso. En primer lugar porque debe
tener una actitud activa y una aptitud abierta a la hora de recibir el conocimiento,
esto le permitirá ser propositivo y co-constructivo de conocimiento. También, se
debe tener en cuenta que la aplicación de la propuesta requiere la colaboración de
ellos para que sea significativa; es decir, que los conceptos trabajados le permitan
tener una visión crítica y constructivista de la realidad.
Papel del docente
A partir del propósito de la propuesta el docente debe ser un orientador del
proceso. Debe trabajar para guiar al estudiante en el encuentro con el
conocimiento y brindarle las herramientas necesarias para que este pueda realizar
el proceso de asimilación sin caer en la nemotécnica y la memorización de los
conceptos. Se trata de que el educando a partir de la orientación docente pueda ser
constructor de su propio conocimiento a partir de las experiencias sociales
realizadas en el diario vivir.
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Practica Pedagógica II
Unidad 1: Construyendo el marco teórico de la etnoeducación en la escuela
Objetivo de la unidad
Construir desde la realidad local un país que nos permita reconocer, valorar
y respetar las diferencias locales, y entendernos como una patria
maravillosamente diversa, imaginativa y pluralista.
Propósito de la unidad
Que el estudiante pueda reconocer la importancia de la Cátedra
Etnoeducativa dentro del proceso de formación de conciencia colectiva para
construir desde la cotidianidad sentidos de pertenencia.
Capítulo 1: Importancia de la etnoeducación como proceso de formación para las
comunidades étnicas
Introducción a la etnoeducación en las asignaturas
Todos los educadores, en especial los Etnoeducadores, debemos comprometernos
con el impulso del movimiento pedagógico etnoeducativo que implemente la
etnoeducación desde cada institución y con todo tipo de iniciativas, como un
proyecto educativo nacional, tanto en las Comunidades Negras como en el conjunto
de las instituciones educativas del país.
Los educadores tenemos que provocar una dinámica y reflexiva reforma curricular
con la introducción de la etnoeducación en los Proyectos Educativos Institucionales
y en cada asignatura escolar. El éxito de este proceso depende de un eficiente
programa de autoformación de los educadores y las comunidades sobre los
conceptos, procedimientos y metodologías para la comprensión de la
etnoeducación.
Los docentes debemos iniciar el movimiento pedagógico promoviendo las
siguientes actividades:
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Practica Pedagógica II
Convocando la realización de talleres sobre la etnoeducación, con talleristas
calificados y reconocidos, que nos permitan aclarar, conocer, reflexionar y
arrancar con los compromisos y tareas del proceso etnoeducativo.
Integrando la etnoeducación como propósito y objetivo fundamental en todos
los aspectos del Proyecto Educativo Institucional.
Organizando grupos de trabajo o microcentros que se responsabilicen de
estudiar, investigar e introducir la etnoeducación en cada asignatura,
planteándonos con nuestro trabajo responder a dos preguntas básicas:
¿Qué papel debemos asumir los docentes en la incorporación y desarrollo de la
etnoeducación en el plan de estudios de la institución?
¿Qué realidades y aspectos, qué aportes y valores, qué protagonismo y
protagonistas de la etnoeducación debemos introducir en cada área de estudio?
¿Qué proyectos especiales que enaltezcan la etnicidad debe contener el PEI?
La comunidad educativa debe dedicar especial atención a la reforma de los
currículos de las Ciencias Sociales, por ser los ejes fundamentales para la
integración de la etnoeducación.
Gestionar proyectos e iniciativas ante las Secretarías de Educación, las
divisiones de formación docente, organizaciones no gubernamentales y otras
instituciones acerca de lo siguiente:
Talleres de capacitación sobre Fundamentación y Metodología de la Enseñanza de
la Histona y la Realidad indígena colombiana.
Propuestas de investigación cultural y diseño curricular para la integración de la
etnoeducación en los PEI y en las asignaturas del plan de estudios.
Propuestas de diseño y producción de textos, libros y ayudas didácticas con la
visión metodológica etnoeducativa.
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Practica Pedagógica II
Propuestas de creación de herbarios con plantas tradicionales, organización de
museos escolares, creación de bibliotecas, casas de la cultura y grupos folclóricos.
Capítulo 2: La etnoeducación en la escuela
Concepción de educación etnoeducativa
La etnoeducación surge en el marco de las aspiraciones de obtener para los niños,
jóvenes y adultos interesados en procesos de instrucción, una educación de calidad
que diera respuesta a las necesidades de pertinencia social y pertinencia cultural.
La pertinencia social debe conllevar a que el afrocolombiano realice mejor
aprovechamiento de los recursos de su entorno en concordancia con sus opciones
de etnodesarrollo. La pertinencia cultural debe expresarse en el desarrollo
curricular, en el conocimiento de su historia, su cultura, reconocimiento, valoración
y consolidación de su identidad étnica.
Esto implica que la etnoeducación en estas comunidades, no se reduce a un
proceso escolarizado únicamente, sino que advierte procesos desescolarizados -
en escenarios familiares, comunitarios, de la nación e inclusive en los
internacionales -, que teniendo en cuenta la multiculturalidad y la cosmovisión
propia, contribuyen a la construcción de una mentalidad colectiva, así como de
imaginarios. La etnoeducación en este sentido, está ligada a la construcción de
identidad étnico-cultural, de acuerdo con su historia, tradiciones, costumbres,
situaciones de actualidad y visión de futuro.
En los aspectos pedagógicos y curriculares, está regida por cuatro principios
básicos como son: principio de identidad, que promueve la cohesión interna del
grupo; principio de autonomía, que direcciona la opción de etnodesarrollo como
alternativa y opción de vida; principio de diversidad cultural, que tiene como uno
de sus propósitos dinamizar el diálogo multicultural, el reconocimiento del otro y
valoración de la diversidad étnico cultural; y principio de solidaridad, que propicia
el respeto por los derechos humanos y el conjunto de valores que le han permitido
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Practica Pedagógica II
a la diáspora africana en América, resistir los embates de la exclusión y
discriminación.
Las comunidades en su empeño de concretar sus políticas organizativas, adelantan
experiencias tanto de etnoeducación, que hoy tienen presencia en diferentes
puntos de la geografía nacional. Desde el fomento de esta propuesta y la política
educativa de la UNAD se busca facilitar y promover la multiplicación de estas
experiencias y que se pueda lograr afectar la totalidad del sistema educativo, tanto
con los procesos de etnoeducación en las zonas que compete.
Estas situaciones son las que ameritan una política de TERRITORIALIZACIÓN de la
etnoeducación. Esta política debe comprometer a todas las autoridades educativas
del País, estableciendo la obligatoriedad de la inversión, tanto por parte de la
Nación, como por las entidades territoriales para promover la cualificación de los
docentes, implementación de experiencias y proyectos de investigación; así como,
socialización, inversión en material didáctico, promoción de publicaciones y
realización de foros que posibiliten la discusión, debate e intercambio de visiones y
experiencias en diferentes niveles.
Capítulo 3: Historia de la cultura Zenú
Ubicación geográfica
El pueblo indígena Zenú se localiza en los resguardos de San Andrés de Sotavento
en departamento de Córdoba y El Volao en Urabá. Además en varios asentamientos
pequeños en Sucre, Antioquia, y Chocó. El pueblo Zenú se encuentra concentrado
en el departamento de Córdoba, especialmente en el Resguardo de San Andrés de
Sotavento, bajo la cabecera municipal de Tolú Viejo.
Historia
El pueblo Zenú en tiempos prehispánicos habitaba en su territorio ancestral el cual
era paso obligado para los diferentes pueblos indígenas que se trasladaban hacia el
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Practica Pedagógica II
sur o el norte. Los Zenú habitaban 103 asentamientos distribuidos en las provincias
de Fincenú, Pancenú y Zenufana. Las prácticas culturales giraban en torno a un
intercambio comercial y económico fluido entre los asentamientos, y la dinámica de
cada provincia en torno a la producción de alimentos, tejidos y elementos de
orfebrería. El patrón cultural de intercambio no superaba las expectativas de
subsistencia. La antigua organización del pueblo Zenú alcanzó un nivel altamente
estructurado, cada provincia centralizaba su poder bajo la figura del cacique, que
podía ser hombre o mujer, que les permitió adelantar obras hidráulicas, que se
evidencian en la construcción de sistemas de canales de riego.
En el siglo XV el contacto con los hispanos y otras poblaciones no indígenas se
produjeron cambios considerables en la cultura Zenú, como la pérdida de capacidad
organizativa tradicional que fueron desestructuradas al implementar instituciones
como la de la encomienda. En este sentido, entrado el siglo XVIII, emergieron
centros urbanos en áreas que ancestralmente habían pertenecido al pueblo Zenú.
Por otra parte, en el siglo XIX las órdenes religiosas actuaron más fuertemente en
contra de los usos y costumbres indígenas. A su vez, este fenómeno aceleró el
establecimiento de las haciendas ganaderas y la continua explotación de recursos
naturales con fines de adecuación del medio para la explotación económica.
Desde las últimas dos décadas el pueblo Zenú ha generado un proceso organizativo
y reivindicativo, que ha potenciado la organización sociopolítica interna centrada
especialmente en la capacidad administrativa y representativa del pueblo. Bajo esta
orientación los cabildos menores en regiones como Sucre, Antioquia y Córdoba
conforman el Cabildo Mayor del Resguardo de San Andrés de Sotavento, ente
vinculante de la etnia con estamentos del gobierno. En gran medida, gracias a la
persistencia cultural, en la actualidad el pueblo Zenú cuenta con sistemas
económicos tradicionales de subsistencia los cuales lucha por pervivir en un
contexto de violencia política que los afecta de múltiples formas.
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Practica Pedagógica II
Evaluación de la unidad 1
Es hora de familiarizarnos con algunos conceptos estudiados en esta unidad. En la
siguiente sopa de letras encontremos palabras que tengan una relación con la
cultura local:
T R A D I C I O N A B M P Z J U Q Y I K D H W C B N U W Q A Z D
S X N O I C A C I N U M O C E L
Ñ Y E T R W Z G K H Ñ A Z E F T
B I L E E T D I V E R S I D A D
A Z M I E R U L Ñ E Q S X F T O I L Z O P S E T J P Y H G E Q X
L U U O T U O P K L Ñ W X R G H
E R A T Y A I C N E R E F I D T
N O L E T R A L T E D G Q A S K
Ñ L P P E D X C V T Y J J K O P
S T H S U C O S T U M B R E S w R A A E A H U B K C U Z F Q A S
O E S R Q T U I O P S A D E T F
L T I P Ñ S Y U E A I S T O H N
S O C I E D A D S A C M V Z O P
F M L P Q T Y I U S A C X L V Q Tradición
Sociedad
Comunicación
Costumbres
Diversidad
Bailes
Respeto
Diferencia
Música
Arte
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Practica Pedagógica II
Desarrollo de competencias
Rellena el siguiente crucigrama relacionado con las lecturas de la unidad 1
1. Nombre del resguardo indígena donde se localiza la cultura Zenú
2. Una de las tres provincias de la cultura Zenú
3. Lugar del departamento de Antioquia donde se asentó la cultura Zenú.
4. Figura social donde reside el poder dentro de la organización política de los
resguardos
5. Conjunto de hábitos de una comunidad cultural
6. Expresión artística y cultural de los zenues que se expresa a través del
movimiento del cuerpo
7. Proceso de interacción social que usa el lenguaje escrito y oral
4
2
1
5
3
7
6
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Practica Pedagógica II
Unidad 2: Realidad Social de la Cultura Zenú
Capítulo 4: Tradición oral: Mitos y Leyendas
Identidad Cultural Zenú: Mitos y Leyendas
La Leyenda del Caimán de Oro
Dado que LA BABILLA O CAIMÁN FUCUS era junto con la hicotea los animales
principales de esa cultura anfibia, pues los encontraban en todas partes y
constituyeron, la base de su alimentación animal, 1. (Dolmatoff) 2. cultura anfibia
hombre hicotea (Fals Borda) aparece la leyenda del Caimán, este según los
antiguos describía con su contorno esquemático las poblaciones zenues. En efecto
Betancí estaba señalada en la Cola del Animal, su pata trasera derecha en Ciénaga
de Oro, la Izquierda en San José de caita-Orika, (hoy Lorica- Momil) su mano
delantera izquierda en Sincelejo, Palmitos Sucre y su mano delantera derecho en
Chinú -Sampués, Sahagún- agregamos a esta leyenda, algo que le falta para ser
completa, la garganta, cabeza del animal que apuntan hasta la desembocadura del
MAGDALENA en terrenos del bajo Bolívar hasta el canal del dique, en línea recta
con sus afiladas colmillos.
El resto de la leyenda, de que el caimán se encontraba debajo de la Iglesia de San
Andrés, no tiene nada de verosímil, puesto que la Iglesia para esa fecha no estaba
construida, y una leyenda auténticamente indígena, nada tiene que ver con una
institución representativa de la cultura religiosa Europea.
Leyenda de las Mohanas
Según la leyenda, las Mohanas eran princesas zenues que en visiones extrañas,
surgiendo de las aguas, aparecen a orillas de los estancos, arroyos, ríos y
quebradas, algunas llaman al varón para hacer el amor una sola vez.
En el municipio de San Marcos, cuentan los ancianos de una Mohana de senos
hermosos que a la hora del medio día peinaba su mata de cabellos larguísimos y
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Practica Pedagógica II
verdosos bajo la sombra de unos caimanes en la poza encantada de la Litika -
Orillas del pueblo-, donde las mujeres iban a lavar o quienes iban a bañarse a esa
hora la veían.
Estas princesas aparecían en otras regiones del San Jorge y de las sabanas de
Sucre, como en el arroyo de Corozal
Duendecillo mohán
Es un indiecito duende que caracolea a las personas al pie del odio y cuando están
dormidas les corta el sueño hasta el fastidio; algunos dicen que es un niño porque
han visto sus huellas en las orillas de los caños del río San Jorge, y porque al pie
de la cama de quienes molesta, le han regado ceniza para que deje pintada las
huellas de sus piecitos.
La única forma de retirarlo de su molestadera y fregadera, es mandarlo a buscar
agua al mar en un catabre; pues él trata de traerla, pero el agua se le pierde antes
de llegar y regresa nuevamente a buscarla, hasta no traerla nunca.
El fantasma de Juan Lara
Es un espíritu burlón que aparece de vereda en vereda y de pueblo en pueblo,
enamorado de alguna muchacha a quien asedia hasta enloquecerla. Si no es
correspondido, empieza a hacerle la guerra lanzando piedras en los techos con
risotadas que se oyen en el aire, las cuales no se sabe de dónde vienen; se cree
que en vida debió ser un hombre libidinoso, que por algún pecado sexual pudo ser
condenado a vagar libre de enamorarse, pero con la desdicha de no ser
correspondido y de no poseer pretendientes.
Cuentan que en Caimito asedió a una bella mujer casada, a quien tiraba regalos y
piedras preciosas, pero al ser rechazado y repudiado pasó a odiarla, a tal punto que
cada hijo que la señora iba teniendo no se lo dejaba criar.
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Practica Pedagógica II
En la vereda de Platero, muy cerca de Caimito y de San Marcos, se dedicó a una
niña de rubios cabellos, a quien puso al borde de la locura y pudo salvarse del caso
porque sus padres la llevaron a San Marcos para que el cura la exorcizara, tras lo
cual fue retirado el espíritu.
Juan Lara también hizo aparición cerca de San Marcos en la vereda de San Felipe.
Allí se enamoró de una muchacha de cabellos rubios y ojos verdes, también le
tiraba flores, piedras preciosas y regalos. La muchacha, al no ceder a sus deseos,
empezó arañándole el rostro y luego todo el cuerpo, con pellizcos y chupones, por
último hasta provocó el incendio de su casa. La muchacha y su familia tuvieron que
irse a vivir a Santa Inés.
El Negro Chirino
Su origen proviene desde la fundación de San Marcos. Dicha fundación, primero
como hato o hacienda de ganado con el sugestivo nombre “Hato Mayor de San
Marcos del Carete”, correspondió indudablemente al capitán don Juan de Zabaleta
en los últimos años del siglo XVIII, pues, sabido es que el 14 de septiembre de
1706, fueron inventariadas las tierras con sus ganados vacunos y caballerías y con
sus esclavos debido a la muerte del capitán. Chirino, como negro cimarrón, adquirió
mucha fama, después de su muerte se fue reencarnando con el mismo apodado en
individuos especiales, bravos, apuestos, osados y hasta toreros, como el último,
cuyo nombre de pila era Manuel Guerra Pinto. Una de sus hazañas fue en la época
de la violencia, al liberar 409 personas que iban a ser quemadas vivas. El 12 de
abril de 1997 desapareció, asesinado vilmente a palos en un fandango en el
corregimiento de Cuenca – San Marcos.
Tal vez por envidiosos, porque en dichas fiestas había hecho faenas doblegando
toros por los cuernos. Después por estas razones se habla todavía con respeto y
admiración del Negro Chirino. Todos los moradores del San Jorge están a la
expectativa de conocer el nuevo Chirino.
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Leyenda del Mohán
Trasladándose a la época de la colonización, se denomina Mohán a los sacerdotes
indígenas cuyo nombre utilizaron los campesinos para denominar a este ser
fantástico y mítico de los campos y orillas de los ríos.
Según la tradición oral, es un mito antropomorfo, masculino, universal, con figura
de indio viejo, musgoso, demoniaco, travieso, brujo, andariego y enamorado; le
gusta el tabaco y la sal, enredar a los pescadores y jugar con sus atarrayas,
embrujándolos con una melodía de encanto y misterio que los transporta a un
mundo fantástico, utilizando como alternativa para volver a la realidad tabaco y sal.
El Muerto Alegre
Otro rito funerario en Córdoba tiene por nombre "Muerto alegre". Se inicia con una
rara petición que hace el enfermo ya en estado agónico. Pide que lo entierren
muerto alegre. El hijo mayor se encarga de cumplir esta solicitud. Va a la
carpintería y ordena que le confeccionen un cajón especial. La madera usada en la
construcción de la caja mortuoria debe ser curada. Las tablas de los laterales
deben ser de distinto grosor para que al ser golpeadas emitan sonidos diferentes.
Llegado el momento del entierro el difunto es introducido en la caja aprisionando
su cuerpo desde los hombros hasta los pies mediante trapos o cuñas de balso.
Solamente la cabeza del cadáver quedará libre de obstáculo para que en el
bamboleo, golpee los laterales de la caja.
Cumplido lo anterior los cargadores del muerto inician la marcha hacia el
cementerio. Sus pasos serán irregulares, como cojeando, ya de un lado, ya del
otro, para que la cabeza del muerto, en forma sincopado, tamborilee alegremente
en los laterales del cajón. El público que ve pasar el entierro y oye estos golpes,
exclama: ¡Ahí va un muerto alegre!
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Gritón
Se dice que es hijo de una india que, expulsada de su tribu, fue sorprendida y
poseída en medio de la selva por el demonio. De esta unión nació El Gritón, un ser
mitad humano y mitad demonio.
Su terrorífico grito arranca los árboles de raíz, hace temblar la tierra, desborda los
arroyos y atemoriza a los seres que lo oyen. Persigue a los hombres que osan
cruzar la selva a media noche.
El duende
Es un espíritu que vive en las casas abandonadas o en las encrucijadas de los
caminos boscosos. En los lugares donde hay niños sin bautizar, se le oye cantar
debajo de las camas. Persigue y engaña con objetos brillantes a los niños
llevándoselos a intrincados rastrojos donde les chupa la sangre.
Se dice que solamente los futuros padrinos pueden rescatarlo o alejar al duende
con el bautizo.
Leyenda de La llorona
Es un espíritu en pena que busca a su hijo. Se afirma que fue una mujer que perdió
su único hijo y enloqueció. En su dolor culpó a Dios por su pena y fue maldita por
los viejos del pueblo. Nunca dejó de llorar y después de muerta su espíritu sale por
las noches y lanza su llanto quejumbroso eternamente.
Los animes
Son animalitos de color oscuro, que tienen la boca roja y los ojos centellantes. Se
guardan en un cacho de buey, que es muy resistente, ya que los animes padecen
de un hambre voraz y todo lo roen. El hombre que tenga los animes es un buen
trabajador en todos los campos. Se dice que para alimentar a los animes se les da
saliva y dos veces al año hay que llevarlos a una hacienda para que devoren reces,
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lo cual se hace a escondidas. Si los animes no son alimentados se comerán al
dueño.
Capítulo 5: La cultura Zenú en Colombia
Visibilización en Inclusión
La organización interna en el pueblo Zenú se caracteriza por mantener los patrones
culturales ancestrales. Este sistema se fundamenta en organizarse por
asentamientos dentro del resguardo y cada una de estas unidades tiene un Cabildo
Menor. A su vez, la unión de los diferentes cabildos conforma el denominado
Cabildo Mayor Zenú. Este cabildo mayor orienta los intereses colectivos del
pueblo, ejerce control y congrega a las comunidades. Bajo esta lógica se evidencia
una organización interna similar a la existente antiguamente, en cuanto el pueblo
mantiene dividido su territorio bajo una figura de cacicazgos, que hoy se
denominan cabildos menores.
La organización interna del pueblo Zenú es la base para la incidencia y
visibilización hacia fuera. En este sentido, el sistema tradicional del pueblo
constituye los mecanismos de participación en los escenarios regionales y
nacionales. Como consecuencia, actividades como las asambleas, reuniones,
encuentros culturales, mingas y trabajos comunitarios propios del pueblo se
convierten en dichos escenarios. Así mismo, el ejercicio aplicativo de la justicia
configura un aspecto relevante del pueblo frente al resto de sociedad.
Los Zenú han estrechado lazos con otras organizaciones nacionales de carácter
étnico y social. En este sentido, la Autoridad Nacional de Gobierno Indígena (ONIC)
ha venido acompañando a este pueblo en las diferentes iniciativas internas.
Además, el grupo Zenú es integrante de confederaciones de tipo étnico que
funcionan en la región caribe.
El pueblo Zenú, al igual que los demás pueblos indígenas del país, ha tenido
experiencias con organizaciones internacionales y gobiernos en su trayectoria
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Practica Pedagógica II
organizativa. En este sentido el pueblo Zenú se ha articulado a programas sociales
de organizaciones internacionales, como la Organización de las Naciones Unidas
"ONU" o la Cruz Roja Internacional.
El pueblo Zenú considera a la sociedad externa como complemento social del
grupo. De la misma forma, interactúa en diferentes direcciones y con diferentes
grupos externos, que inciden en las acciones políticas, económicas y culturales.
Es claro que la relación comunitaria del pueblo indígena Zenú mantiene un vínculo
fuerte con sus vecinos inmediatos como lo son los campesinos y la sociedad
costeña, principalmente. En este sentido, los indígenas Zenú sostienen relaciones
con estas personas, sobre todo alrededor de temas como el intercambio comercial
y laboral.
Debido a la ubicación de sus resguardos y la situación precaria que afronta la
población Zenú, resulta fácil asociarse a dinámicas laborales externas, a través del
trabajo informal o jornaleo en fincas cercanas. El sistema de intercambio comercial
establecido ha acelerado el fenómeno de desarraigo cultural, debido al contacto
directo y continuo con la sociedad costeña y demás agentes vecinos.
El pueblo indígena Zenú no cuenta en su totalidad con programas de educación
propia. Bajo esta perspectiva la educación que se imparte dentro del territorio
Zenú es la educación escolarizada convencional. No obstante, el Cabildo Mayor
Zenú, en calidad de representante legal del pueblo, aúna esfuerzos con el fin de
construir un programa de educación propio acorde a sus expectativas e intereses.
Las apuestas inmediatas que se evidencian en la agenda programática del pueblo
Zenú están relacionadas con la recuperación de territorio, y esta, a su vez, asocia
otras iniciativas sentidas por las comunidades como los son el control y cohesión
social acorde a los principios tradicionales; el establecimiento de cultivos propios;
el ejercicio tradicional de caza y pesca; la ejecución de proyectos auto sostenibles
que garanticen la inserción de las personas en las labores típicas, para así mejorar
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las condiciones alimenticias; la consolidación del establecimiento de cultivos sanos
para el mejoramiento de las condiciones de vida; y por último, la creación y
articulación de programas especiales para mujeres y su ejercicio artesanal. Otra
apuesta es la adecuación de la infraestructura para la obtención del agua potable,
problemática que acompaña la cotidianidad de la mayoría de los asentamientos. Así
mismo, se están planteando la puesta en marcha de programas de salud y
educación que contemplen las necesidades básicas diferenciales del pueblo.
Capítulo 6: Valores culturales de la cultura Zenú: Creencias y Costumbres
Imaginarios de la cultura Zenú
El pueblo indígena Zenú perdió su lengua, es monolingüe, habla el castellano. En el
legado ancestral se evidencia en el fuerte apego a su contexto territorial,
especialmente los lugares sagrados y encantados. La presencia católica/ cristiana
en los procesos históricos produjo una mezcla sincrética, la cual se expresa en
varias festividades, en las que los hombres se disfrazan de mujeres y otras
expresiones distintivas. Entre sus creencias está la fe por el Dios cristiano y un
panteón de santos, (San Simón del Blanco, San Simón de Ayuda y San Simón de
Juego) a los cuales se les brinda tributo y se les hacen ofrendas para obtener
buenas y abundantes cosechas.
Las distintas enfermedades se tratan desde la visión médica tradicional. El
conocimiento médico se obtiene de los abuelos y es trasmitido de generación en
generación. En este sentido, es usual tratar todo tipo de enfermedades como
males, dolores y brujerías, a través del conocimiento amplio sobre el origen del
malestar que aqueja a la persona. El pueblo Zenú considera médicos tradicionales a
rezanderos, parteras, homeópatas, sobanderos, curiosos y otros que actúan como
especialistas en cada quebranto. Bajo esta perspectiva los curiosos se dedican a
sacar maleficios a través de rezos y conjuros, las parteras al cuidado de las
mujeres a dar a luz. Los homeópatas a curar enfermedades relacionadas con la
sangre, hígado y otros. Los diagnósticos se fundamentan en muestras de orina u
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Practica Pedagógica II
otro indicador posible. Este sistema de tratamiento generalmente se acompaña de
agentes medicinales como plantas apropiadas, tomadas del medio natural.
El sistema médico tradicional del pueblo Zenú se fundamenta en las plantas, con las
que preparan brebajes en partos, y para ahuyentar los malos espíritus. Es usual el
uso medicinal del tabaco, la hierbabuena, el orégano, la yerbasanta, el toronjil, el
ajonjolí, y el mataratón. La mayoría de las plantas generalmente sembradas cerca
de las viviendas, algunas se consiguen en los bosques cercanos o en la orilla de los
arroyos. El poder curativo de las plantas es acompañado de rezos y conjuros.
En la tradición de las fábulas, los mitos, las leyendas y cuentos, que configuran el
sistema de creencias ancestrales y religiosas asociadas a los "chimpines" de los
arroyos (duendes), mohanes y encantos.
La dieta alimenticia del pueblo indígena Zenú se basa en el consumo de
carbohidratos y vitaminas principalmente. Es común el consumo del maíz, plátano,
ñame, ahuyama, yuca, batata, guineo. Además se consume pescado, carne de res,
cerdo y gallina. Por último, es usual el consumo de productos lácteos derivados de
la leche como son el suero, el queso, la mantequilla y otros.
La música Zenú se ha transformado, ya no imita sonidos del medio ambiente, de
animales y fenómenos naturales; en la actualidad se producen ritmos de fandango y
cumbias.
El vestuario en el pueblo Zenú está asociado, básicamente, tanto con la variación
climática como con las condiciones de trabajo. En este sentido anteriormente se
podía ver que los hombres usaban parumas, franelas y sombrero vueltiao. A su
vez, las mujeres usaban faldas largas, blusas y babuchas de pana. Esta
indumentaria se relaciona más con una perspectiva ancestral. Sin embargo, todos
los Zenú han modificado sustancialmente su vestuario, adoptando formas de vestir
del colono mestizo.
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Practica Pedagógica II
En consecuencia, las formas de vestir hoy en día para los hombres consiste en
pantalones, camisa, y sombrero vueltiao, y para las mujeres, en faldas de colores
vivos y blusas escotadas.
Sin duda las artesanías Zenú constituyen un aspecto relevante dentro del sistema
social interno y la sociedad colombiana. Uno de los símbolos de la etnia, el
sombrero vueltiao, los canastos y accesorios a base de bejucos, iraca, enea y
junco.
Evaluación de la unidad 2
Actividad 1
A partir de la lectura del capítulo 4 del material didáctico, subraya las palabras las
cuales desconozcas, escríbelas en tu cuaderno y luego busca su significado en el
diccionario.
Actividad 2
Pregunta a personas de tu comunidad, que palabras han sufrido variaciones
dialectales de acuerdo al lenguaje cotidiano (ejemplo: Mira con aguaita), escríbelas
en tu cuaderno y realiza oraciones con ellas.
Actividad 3
A partir de las lecturas estudiadas en esta unidad, con la ayuda de tus padres
inventa una historia (sea mito o leyenda) a partir de una anécdota social.
Desarrollo de competencias
Pide a tus padres o a los ancianos de tu comunidad que te cuenten: cuento o
una narración de los abuelos. Cópialo, apréndetelo y socialízalo con tus
compañeros y docentes.
Con la ayuda de tus padres y profesores realiza un sociodrama a partir de
unos de los relatos del capítulo 4 del material didáctico.
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Practica Pedagógica II
Pregunta a ancianos de tu comunidad sobre los bebedizos y conjuros que se
hacían en tiempos pasados. Pídele la receta de algunos y para que servían.
POR UN PAIS AL ALCANCE DE LOS NIÑOS
Gabriel García Márquez
Los primeros españoles que vinieron al Nuevo Mundo vivían aturdidos por el canto
de los pájaros, se mareaban con la pureza de los olores y agotaron en pocos años
una especie exquisita de perros mudos que los indígenas criaban para comer.
Muchos de ellos, y otros que llegarían después, eran criminales rasos en libertad
condicional, que no tenían más razones para quedarse. Menos razones tendrían
muy pronto los nativos para querer que se quedaran.
Cristóbal Colón, respaldado por una carta de los reyes de España para el
emperador de China, había descubierto aquel paraíso por un error geográfico que
cambió el rumbo de la historia. La víspera de su llegada, antes de oír el vuelo de
las primeras aves en la oscuridad del océano, había percibido en el viento una
fragancia de flores de la tierra que le pareció la cosa más dulce del mundo. En su
diario de abordo describió que los nativos los recibieron en la playa como sus
madres los parieron, que eran hermosos y de buena índole, y tan cándidos de
natura, que cambiaban cuanto tenían por collares y sonajas de latón.
Pero su corazón perdió los estribos cuando descubrió que sus narigueras eran de
oro, al igual que las pulseras, los collares, los aretes y las tobilleras: que tenían
campanas de oro para jugar, y que algunos ocultaban sus vergüenzas con una
cápsula de oro. Fue aquel esplendor ornamental, y no sus valores humanos, lo que
condenó a los nativos a ser protagonistas del nuevo Génesis que empezaba aquel
día. Muchos de ellos murieron sin saber dónde estaban. Cinco siglos después, los
descendientes de ambos no acabamos de saber quiénes somos.
Era un mundo más descubierto de lo que se creyó entonces. Los Incas, con diez
millones de habitantes, tenían un estado legendario bien constituido, con ciudades
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Practica Pedagógica II
monumentales en las cumbres andinas para tocar al dios solar. Tenían sistemas
magistrales de cuenta y razón, y archivos de memorias de uso popular, que
sorprendieron a los matemáticos de Europa, y un círculo laborioso de las artes
públicas, cuya obra magna fue el jardín del palacio imperial, con árboles y animales
de oro y plata en tamaño natural. Los Aztecas y los Mayas habían plasmado su
conciencia histórica en pirámides sagradas entre volcanes acezantes, y tenían
emperadores clarividentes y artesanos sabios que desconocían el uso industrial de
la rueda, pero la utilizaban en los juguetes de los niños.
En la esquina de los dos grandes océanos, se extendían cuarenta mil leguas
cuadradas que Colón entrevió apenas en su cuarto viaje, y que hoy lleva su
nombre: Colombia.
La habitaban desde hacía unos doce mil años varias comunidades dispersas de
lenguas diferentes y culturas distintas, y con sus identidades propias bien
definidas.
No tenían una Nación de estado, ni unidad política entre ellas, pero habían
descubierto el prodigio político de vivir como iguales en las diferencias.
Tenían sistemas antiguos de ciencias y educación, y una rica cosmología vinculada
a sus obras de orfebres geniales y alfareros inspirados. Su madurez creativa se
había propuesto incorporar el arte a la vida cotidiana - que tal vez sea el destino
superior de las artes - y lo consiguieron con aciertos memorables, tanto en los
utensilios domésticos como en el modo de ser. El oro y las piedras preciosas no
tenían para ellos un valor de cambio sino un poder cosmológico y artístico, pero los
españoles los vieron con los ojos de Occidente: oro y piedras preciosas de sobra
para dejar sin oficio a los alquimistas y empedrar los caminos del cielo con
doblones de a cuatro. Esa fue la razón y la fuerza de la Conquista y la Colonia, y el
origen real de lo que somos.
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Practica Pedagógica II
Tuvo que transcurrir un siglo para que los españoles conformaran el estado
colonial, con un solo nombre, una sola lengua y un solo dios. Sus límites y su
división política de doce provincias eran semejantes a los de hoy. Esto dio por
primera vez la noción de un país centralista y burocratizado, y creó la ilusión para
una sociedad que era un modelo oscurantista de discriminación racial y violencia
larvada, bajo el manto del Santo Oficio. Los tres o cuatro millones de indios que
encontraron los españoles estaban reducidos a un millón por la crueldad de los
conquistadores y las enfermedades desconocidas que trajeron consigo. Pero el
mestizaje era ya una fuerza demográfica incontenible, y los esclavos africanos,
traídos por la fuerza para los trabajos bárbaros de minas y haciendas, habían
aportado una tercera dignidad al caldo criollo, con nuevos rituales de imaginación y
nostalgia, y otros dioses remotos, pero las leyes de Indias habían impuesto
patrones milimétricos de segregación según el grado de sangre blanca dentro de
cada raza: mestizos de distinciones varias, negros, esclavos, negros libertos,
mulatos de distintas escalas. Llegaron a distinguirse hasta dieciocho grados de
mestizos, y los mismos blancos españoles segregaron a sus propios hijos como
blancos criollos.
Los mestizos estaban descalificados para ciertos cargos de mando y gobierno y
otros oficios públicos, o para ingresar en colegios y seminarios. Los Negros
carecían de todo, inclusive de un alma; no tenían derecho a entrar en el cielo ni en
el infierno, y su sangre se consideraba impura hasta que fuera decantada por
cuatro generaciones de blancos.
Semejantes leyes no pudieron aplicarse con demasiado rigor por la dificultad de
distinguir las intrincadas fronteras de las razas, y por la misma dinámica social del
mestizaje, pero de todos modos aumentaron las tensiones y la violencia raciales.
Hasta hace pocos años no se aceptaban todavía en los colegios de Colombia a los
hijos de uniones libres. Los Negros, iguales en la ley, padecen todavía de muchas
discriminaciones, además de las propias de la pobreza.
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Practica Pedagógica II
La generación de la Independencia perdió la primera oportunidad de liquidar esa
herencia abominable. Aquella pléyade de jóvenes románticos inspirados en las
luces de la revolución francesa, instauró una república moderna de buenas
intenciones, pero no logró eliminar los residuos de la Colonia. Ellos mismos no
estuvieron a salvo de sus hados maléficos. Simón Bolívar, a los 35 años, había dado
la orden de ejecutar ochocientos prisioneros españoles, inclusive a los enfermos
de un hospital. Francisco de Paula Santander, a los 28, hizo fusilar a los
prisioneros de la batalla de Boyacá, inclusive a su comandante. Algunos de los
buenos propósitos de la república propiciaron de soslayo nuevas tensiones sociales
de pobres y ricos, obreros y artesanos y otros grupos marginales. La ferocidad de
las guerras civiles del siglo XIX no fue ajena a esas desigualdades, como no lo
fueron las numerosas conmociones políticas y civiles que han dejado un rastro de
sangre a lo largo de nuestra historia.
Dos dones naturales nos han ayudado a sortear ese sino funesto, a suplir los
vacíos de nuestra condición cultural y social, y a buscar a tientas nuestra identidad.
Uno es el don de la creatividad, expresión superior de la inteligencia humana. El
otro es una arrasadora determinación de ascenso personal. Ambos, ayudados por
una astucia casi sobrenatural, y tan útil para el bien como para el mal, fueron un
recurso providencial de los indígenas contra los españoles desde el día mismo del
desembarco. Para quitárselos de encima, mandaron a Colón de isla en isla, siempre
a la isla siguiente, en busca de un rey vestido de oro que no había existido nunca.
A los conquistadores convencidos por las novelas de caballería los engatusaron
con descripciones de ciudades fantásticas construidas en oro puro. A todos los
deslumbraron con la fábula de El Dorado mítico que una vez al año se sumergía en
su laguna sagrada con el cuerpo empolvado de oro. Tres obras maestras de una
epopeya nacional, utilizadas por los indígenas como un instrumento para sobrevivir.
Tal vez de esos talentos precolombinos nos viene también una plasticidad
extraordinaria para asimilarnos con rapidez a cualquier medio y aprender sin dolor
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Practica Pedagógica II
los oficios más disímiles: fakires en la India, camelleros en el Sahara o maestros de
inglés en Nueva York.
Del lado hispánico, en cambio, tal vez nos venga el ser emigrantes congénitos con
espíritu de aventura que no elude los riesgos. Todo lo contrario: los buscamos. De
unos cinco millones de colombianos que viven en el exterior, la inmensa mayoría
se fue a buscar fortuna sin más recursos que la temeridad, y hoy están en todas
partes, por las buenas o por las malas razones, haciendo lo mejor o lo peor, pero
nunca inadvertidos. La cualidad con que se les distingue en e] folklore del mundo
entero es que ningún colombiano se deja morir de hambre. Sin embargo, la virtud
que más se les nota es que nunca fueron tan colombianos como al sentirse lejos de
Colombia.
Así es. Han asimilado las costumbres y las lenguas de otros como las propias, pero
nunca han podido sacudirse del corazón las cenizas de la nostalgia. Y no pierden
ocasión de expresarlo con toda clase de actos patrióticos para exaltar lo que
añoran de la tierra distante, inclusive sus defectos. En las ciudades menos
pensadas de cualquier país puede encontrarse a la vuelta de una esquina la
reproducción en vivo de una calle cualquiera de Colombia: las casas de colores
intensos, la fonda con el nombre de la ciudad amada. el salón de cine en español. la
escuela 20 de Julio junto a la cantina 7 De Agosto con sus chorros de músicas
enloquecidas, la plaza de árboles polvorientos todavía con las guirnaldas de papel
del último viernes fragoroso.
La paradoja es que estos conquistadores nostálgicos, como sus antepasados,
nacieron en un país de puertas cerradas. Los libertadores trataron de abrirlas a los
nuevos vientos de Inglaterra y Francia, a las doctrinas jurídicas y éticas de
Bentham, a la educación de Lancaster, al aprendizaje cte las lenguas, a la
popularización de las ciencias y las artes, para horrar los vicios de una España más
papista que el papa y todavía escaldada por el acoso financiero de los judíos y por
ochocientos años de ocupación islámica. Los radicales del siglo XIX. Y más tarde la
Suath Benítez Villadiego
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Practica Pedagógica II
Generación del Centenario, volvieron a proponérselo con políticas de inmigraciones
masivas para enriquecer la cultura del mestizaje. pero unas y otras se frustraron
por un temor casi teológico de los demonios exteriores. Aún hoy está lejos de
imaginar cuánto dependernos del vacío mundo que ignoramos.
Somos conscientes de nuestros males, pero nos hemos desgastado luchando contra
los síntomas mientras las causas se eternizan. Nos han escrito y oficializado una
versión complaciente de la historia. Hecha más para esconder que para clarificar,
en la cual se perpetúan vicios originales. Se ganan batallas que nunca se dieron y
se sacralizan glorias que nunca merecimos. Pues nos complacemos en el ensueño
de que la historia no se parezca a la Colombia en que vivimos. Si no que Colombia
termine por parecerse a su historia escrita.
Por lo mismo, nuestra educación conformista y represiva parece concebida para
que los niños se adapten por la fuerza a un país que no fue pensado para ellos. en
lugar de poner el país al alcance de ellos para que lo transformen y engrandezcan.
Semejante despropósito restringe la creatividad y la intuición congénitas. y
contraría la imaginación. la clarividencia precoz y la sabiduría del corazón, hasta
que los niños olviden lo que sin duda saben de nacimiento: que la realidad no
termina donde dicen los textos, que su concepción del mundo es más acorde con la
naturaleza que la de los adultos, y que la vida sería más larga y feliz si cada quien
pudiera trabajar en lo que le gusta, y sólo en eso.
Esta encrucijada de destinos ha forjado una patria densa e indescifrable donde lo
inverosímil es la única medida de la realidad. Nuestra insignia es la desmesura. En
todo: en lo bueno y en lo malo, en el amor ¡en el odio, en el júbilo de un triunfo y
en la amargura de una derrota. Destruimos a los ídolos con la misma pasión con
que los creamos. Somos intuitivos, autodidactas espontáneos y rápidos y
trabajadores encarnizados, pero nos enloquece la sola idea del dinero fácil.
Tenemos en el mismo corazón la misma cantidad de rencor político y de olvido
histórico. Un éxito resonante o una derrota deportiva pueden costarnos tantos
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Practica Pedagógica II
muertos como un desastre aéreo. Por la misma causa somos una sociedad
sentimental en la que prima el gesto sobre la reflexión, el ímpetu sobre la razón, el
calor humano sobre la desconfianza. Tenemos un amor casi irracional por la vida,
pero nos matamos unos a otros por las ansias de vivir. Al autor de los crímenes
más terribles lo pierde una debilidad sentimental. De otro modo: al colombiano sin
corazón lo pierde el corazón.
Pues somos dos países a la vez: uno de papel y otro en la realidad. Aunque somos
precursores de las ciencias en América, seguimos viendo a los científicos en su
estado medieval de brujos herméticos, cuando ya quedan muy pocas cosas en la
vida diaria que no sean un milagro de la ciencia. En cada uno de nosotros
cohabitan, de la manera más arbitraria, la justicia y la impunidad; somos fanáticos
del legalismo, pero llevamos bien despierto en el alma un leguleyo de mano
maestra para burlar las leyes sin violarlas, o para violarlas sin castigo. Amamos a
los perros, tapizamos de rosas el mundo, morimos de amor por la patria, pero
ignoramos la desaparición de seis especies animales cada hora del día y de la
noche por la devastación criminal de los bosques tropicales, y nosotros mismos
hemos destruido sin remedio uno de los grandes ríos del planeta. Nos indigna la
mala imagen del país en el exterior, pero no nos atrevemos a admitir que la
realidad es peor. Somos capaces de los actos más nobles y de los más abyectos,
de poemas sublimes y asesinatos dementes, de funerales jubilosos y parrandas
mortales. No porque unos seamos buenos y otros malos, sino porque todos
participamos de ambos extremos. Llegado el caso - y Dios nos libre - todos somos
capaces de todo.
Tal vez un reflexión más profunda nos permitiría establecer hasta qué punto este
modo de ser nos viene de que seguimos siendo en esencia la misma sociedad
excluyente, formalista y ensimismada de la Colonia. Tal vez una más serena nos
permitiría descubrir que nuestra violencia histórica es la dinámica sobrante de
nuestra guerra eterna contra la adversidad; tal vez estemos pervertidos por un
sistema que nos incita a vivir como ricos mientras el cuarenta por ciento de la
Suath Benítez Villadiego
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Practica Pedagógica II
población malvive en la miseria, y nos ha fomentado una noción instantánea y
resbaladiza de la felicidad; queremos siempre un poco más de lo que ya tenemos,
más y más de lo que parecía imposible, mucho más de lo que cabe dentro de la ley,
y lo conseguimos como sea: aún contra la ley. Conscientes de que ningún gobierno
será capaz de complacer esta ansiedad, hemos terminado por ser incrédulos,
abstencionistas e ingobernables, y de un individualismo solitario por el que cada
uno de nosotros piensa que sólo depende de sí mismo. Razones de sobra para
seguir preguntándonos quiénes somos, y cuál es la cara con que queremos ser
reconocidos en el tercer milenio.
La Misión de Ciencia, Educación y Desarrollo no ha pretendido una respuesta, pero
ha querido diseñar una carta de navegación que tal vez ayude a encontrarla.
Creemos que las condiciones están dadas como nunca para el cambio social, y que
la educación será su órgano maestro. Una educación desde la cuna hasta la tumba,
inconforme y reflexiva, que nos inspire un nuevo modo de pensar y nos incite a
descubrir quiénes somos en una sociedad que se quiera más a sí misma. Que
aproveche al máximo nuestra creatividad inagotable y conciba una ética - y tal vez
una estética - para nuestro afán desaforado y legítimo de superación personal. Que
integre las ciencias y las artes a la canasta familiar, de acuerdo con los designios
de un gran poeta de nuestro tiempo que pidió no seguir amándolas por separado
como a dos hermanas enemigas. Que canalice hacia la vida la inmensa energía
creadora que durante siglos hemos despilfarrado en la depredación y la violencia, y
nos abra al fin la segunda oportunidad sobre la tierra que no tuvo la estirpe
desgraciada del coronel Aureliano Buendía. Por el país próspero y justo que
soñamos: al alcance de los niños.
Suath Benítez Villadiego
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Practica Pedagógica II
BIBLIOGRAFIA
Paternina Cruz, José Dolores. Curiosidades historicas del Municipio de San
Andrés de Sotavento. Editores Proactivos, Barranquilla, 2002.
Berdugo Palma, Libardo. Tuchin, herencia Zenú. Activa Editores Ltda.
Barranquilla, 2009.
Madera Paternina, Álvaro. San Andrés de Sotavento, un pueblo Zenú.
Mendoza Romero, Wilfrido. Papa abuelo cantaba.
Tradición oral comunitaria