caja cantabria el poblado cántabro de argüeso...caja cantabria ha cedido el edificio que ocupaba...

4 Noticias de Caja Cantabria

6 Ángel de la Hoz:“La fuerza del retrato está en los ojos”

10 Soñanes, mirando al futuro

N.º 105 - OCTUBRE-DICIEMBRE 2001

Edita: Caja Cantabria

Realiza: Comunicación y Relaciones PúblicasPlaza de Velarde, 339001 Santander. Teléf. 942 204 541

Imprime: Gráficas Calima, S. A.D. Legal: SA-535-1993

Presidente:Carlos Saiz Martínez

Directora:Victoria Olloqui García de Salazar

Diseño:Armando Arconada

Colaboran en este número:Armando Arconada, Pilar Chato, Jesús de Castro,Francisco Vázquez Quevedo, Ángel Ocejo,Santiago Rego, Jesús Urrea, Ana Conde, EvelyneUgaglia, Francisco Revuelta Hatuey, EnriqueBolado y Benito Madariaga.

Fotografías:Pedro Palazuelos, José Miguel del Campo,Manuel Álvarez, Jesús de Castro, Roberto Ruiz,Celedonio y archivos.

Esta revista no se hace responsable ni está de acuerdonecesariamente con las opiniones de sus colaboradores ocon las respuestas de las personas entrevistadas.

21 Eugenio Gutiérrez, médico real

26 El poblado cántabro de Argüeso

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38 Pinturas delMuseo de Escultura

46 Las artes del metal

33 Delgados pero no perfectos: un nuevocentro para Trastornos de la Conducta Alimentaria

Etiqueta ecológica

, Octubre-Diciembre, 2001—3

4— , Octubre-Diciembre, 2001

Caja Cantabria ha cedido el edificio que ocupaba la antigua guardería “Príncipe Felipe” para la creación, en Santander, de un hos-pital de día para el tratamiento de los trastornos de la conducta alimentaria.

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Cantabria, mediante un concierto con el Hospital Padre Menni, gestiona las tareasasistenciales; y un equipo de profesionales –entre los que se encuentran psiquiatras, psicólogos y médicos endocrinos– se ocupade los pacientes del centro, que funciona como ambulatorio hasta la 1 del mediodía.

El proyecto va dirigido a aquellas personas que, padeciendo algún tipo de trastorno alimentario, presentan una estabilidad médi-ca y emocional adecuada, y no necesitan hospitalización completa.

Logros deportivos de los equipos de la CajaEl equipo de golf de Caja Cantabria consiguió tres primeros

premios en el XII Torneo Intercajas celebrado el pasado mes deseptiembre en Córdoba, y obtuvo el tercer puesto en la clasifica-ción por equipos. Leoncio Campa se clasificó en primera posiciónen individual primera categoría, y en scratch. Campa, acompaña-do de José Antonio Trugeda, consiguió también el triunfo en la cla-sificación por parejas.

A su vez, los dos equipos femeninos de padel de Caja Cantabriaobtuvieron el primero y el tercer puesto de su categoría en el III Cam-peonato de esta especialidad, celebrado el pasado mes de septiem-bre en Santander. El equipo masculino se clasificó en tercer lugar.

También el equipo de fútbol sala de la Caja tuvo una meritoriaactuación en el XV Campeonato Intercajas de esta modalidaddeportiva, que se celebró el pasado mes de octubre en Cuenca.

• Los equipos de golf, de padel femenino, y de fútbol sala de Caja Cantabria.

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Inaugurado un hospital de díapara trastornos de la conducta alimentaria

• Representantes deCaja Cantabriay del nuevo centroen el acto deinauguración.

Caja Cantabria cerrará esteejercicio de un modo satis-factorio, tanto en la evolu-ción de las cifras de nego-cio como en el fortaleci-

miento de la entidad y en la obten-ción de un resultado razonable, tal ycomo aseguró el director general dela entidad, Javier Eraso Maeso, enla Asamblea General Extraordinariacelebrada el pasado 15 de diciem-bre, en el Centro Cultural.

Las cifras de negocio de la enti-dad reflejan 100.000 millones depesetas de incremento, frente a50.000 millones de pesetas en 2000,y la previsión de cierre sitúa el resul-tado antes de impuestos del ejercicio2001 en una cifra cercana a los 5.100millones de pesetas, ligeramentesuperior a la obtenida en el año 2000.

Destaca el incremento del mar-gen típico de negocio, fruto de ladiferencia entre el producto de lasinversiones crediticias y el coste delos recursos ajenos, con un incre-mento de un 13 por ciento respectoal ejercicio anterior.

En cuanto a las masas patrimo-niales, los recursos de clientes sesituarán en torno a los 478.000millones de pesetas, lo que suponeun aumento de un 9 por ciento conrespecto al ejercicio 2000.

Dentro de los recursos fuera delbalance de la entidad, el patrimonio

de los fondos de inversión propioscrecerá alrededor de un 60 por cien-to respecto al año anterior, y el con-junto de fondos de pensiones lohará en un 18 por ciento. Así, el totalde los recursos gestionados netosse situará en torno a los 510.000millones de pesetas, con un incre-mento sobre la cifra del año anteriorde un 11 por ciento.

A su vez, las inversiones crediti-cias alcanzarán los 394.000 millo-nes de pesetas, lo que supone unaumento interanual de un 14 porciento. De cara al reforzamiento dela solvencia, en el presente año seha mantenido el esfuerzo realizadoen el ejercicio anterior, dirigido fun-damentalmente hacia dos vertien-tes: aumento de coberturas e incre-mento del nivel de solvencia.

Por lo que respecta al riesgo decrédito, cabe destacar el nivel desaneamiento conseguido en el pre-sente ejercicio, plasmado en unaumento de 33 puntos en el índicede cobertura del riesgo dudoso, quealcanza un porcentaje del 140 porciento. Asimismo, el índice de moro-sidad se situará en un 2 por ciento,lo que supone una reducción de 40puntos básicos sobre el dato dediciembre de 2000.

En cuanto a la solvencia de laentidad, la cifra de reservas aumen-tará un 8 por ciento, y los recursos

propios computables se situarán entorno a los 43.000 millones de pese-tas. Esta cifra resulta superior en un33 por ciento a la de diciembre de2000. Ello se traduce en un coefi-ciente de solvencia de un 10 porciento, 200 puntos básicos por enci-ma del límite exigido legalmente.

DIRECTRICES Y PREVISIONESPARA 2002

En la Asamblea se expusierontambién las líneas generales delPlan de Actuación de la entidadpara el ejercicio 2002, que se ba-san, entre otras cosas, en mantenerel liderazgo financiero en la comuni-dad autónoma; procurar el conoci-miento y la relación más profundacon los clientes; y potenciar las ofer-tas comerciales a través de todoslos canales de distribución.

Los resultados antes de impues-tos para el año 2002 se han fijado enun nivel similar al que se prevé obte-ner en 2001, como consecuencia delplan de prejubilaciones, que tendráun coste estimado de 4.200 millonesde pesetas.

A lo largo de este año se de-sarrollarán, además, varios proyectos

tecnológicos, estratégicos para laentidad, y está previsto realizar unnúmero importante de campañascomerciales, que abarquen tanto losproductos de activo, como los depasivo, servicios y banca electrónica.

Como conclusión, se puededestacar que la línea de gestiónpara el próximo ejercicio profundiza-rá, fundamentalmente, en el incre-mento del negocio productivo; el for-talecimiento de los recursos pro-pios; y la mejora sustancial de losíndices de solvencia y de eficiencia.

Durante el mismo acto se informóigualmente sobre las previsiones deliquidación del presupuesto de 2001de la Obra Social, así como de laslíneas generales del correspondientea 2002. La Caja invirtió el pasado añoen torno a los 1.750 millones depesetas en el fomento de la cultura yel bienestar de los cántabros, y hapuesto en marcha importantes inicia-tivas culturales y asistenciales.

La Asamblea dedicó tambiénuno de los capítulos del orden del díaa la emisión de pagarés, bonos, obli-gaciones, participaciones preferen-tes, deuda subordinada y cédulashipotecarias. ■

Las cifrasde negocio se hanincrementado en100.000 millones,

frente a los50.000

del pasado año

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5.100 MILLONES debeneficio en 2001


ARMANDO ARCONADAFotos: PEDRO PALAZUELOS

Su nombre es Ángel. Sin embargo, ha hechoun pacto con el diablo. No hay otra explicación paraesa vitalidad al filo de los 80 años, tan palpable encada apretón de manos.

– ¿A cambio de qué vendió su alma?– El diablo, que es buen negociante, no daría

tres cuartos por mi alma.

LAS PAREDES HABLANLos objetos que trepan por las paredes del últi-

mo estudio habitado por Ángel de la Hoz, en SanMartín, dicen mucho de este caballero pulcro yordenado, genuino representante de algunas delas artes que hacen la vida más confortable. Nohablamos sólo de la fotografía y de la pintura, tam-bién de esa calidad/calidez que definía en otrotiempo a la raza humana. Gavillas de recuerdoscorporeizados en la primera cámara, marca Uni-vex, regalo de su padre a los 9 años, al igual quela primera caja de pinturas: “que utilicé muchísimotiempo, hasta que prescindí de los tubos de colory empecé a fabricarme mis propios colores”.

– Ha sido durante 45 años el cronista gráficode varias generaciones de poetas, pintores, cera-mistas y escultores. Da la impresión de que la foto-grafía le ligó más a la tierra, le dio seguridad….

– Para mí la fotografía ha sido una esposa fiely la pintura una amante maravillosa, pero mi amorinalcanzable es la poesía.

No queda ya piedra sobre piedra de la casa delos abuelos en Solares, donde ahora se detiene lamirada para descubrirle, impúber, leyendo “El Qui-jote”. “Me recuerdo siempre leyendo o dibujando”,dice, y el efluvio de aquellos días, “llenos de sol yde juegos”, le trae la figura egregia de su madre–gran lectora, actriz aficionada y protectora deRicardo Bernardo– que tanto le animó por la sen-da del arte.

No perdura nada de aquél bulle-bulle de casi-no y balneario, pero hay ojos que nos siguenmirando cuando ya se han ido, fundiendo pasado

ÁNGEL

La fuerza del retratoestá en los ojos

DE LA HOZ


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y presente, como se unen en sus monotipos elpapel y la plancha de cobre, zinc o cristal al pasarel rodillo. La luz de aquellos días resbala sobre lamemoria y trae cojeando a Pancho Cossío, sor-prendido en este instante en su estudio de CalvoSotelo, aprendiendo la técnica de Ángel, que a suvez se deja influir por la contención del color, lasveladuras y la estructura espacial de las compo-siciones.

– ¿Qué hay que hacer, maestro, para teneramigos en la derecha y en la izquierda?

– Saber escogerlos, porque en todas parteshay buena gente.

Acumulando capas concéntricas de todosellos, como esos árboles quetanto gusta fotografiar para lue-go incorporarlos a sus cuadros,este pintor-fotógrafo, o vicever-sa, exponía en aquella vitrina delportal retratos de jóvenes casa-deras junto a otros de artistasplásticos y literatos: RicardoGullón, Ángel Ferrant, Carla Pri-na, Cristino Mallo, Julio Maruri,Miguel Vázquez, José Hierro,Antonio Quirós, Raba, Medina,Sansegundo, Antoni Tapies,Gerardo Diego… Asiduo detodas las tertulias del siglo, afir-ma que conocerles era una ven-taja a la hora de retratarlos. Lomalo, arguye, era cuando entra-ba en el estudio un desconocido.“Mi interés entonces era alargarla sesión, hablar con él, ganarsu confianza, hasta que llegabael momento y, entonces, dispa-rar –clic, clic– una y otra vez”.

LAS CÁMARAS VENNos escrutan los objetivos

de algunas cámaras supervi-vientes: la que le regaló su tío alos 20 años cuando, tras un añode formación en Bilbao, decidióabrazar profesionalmente lafotografía; la inglesa Ravenau,de siglo y medio de antigüedad;y otra cámara de estudio, laArca Swiss. Pero las más usa-das de todas fueron las portables: la Mamiyareflex 6x7, la Ikonta y la Super Ikonta. A un pasoduerme aquél proyector, juguete de su madre yréplica del cinematógrafo de Lumière, con pelícu-las del siglo XIX coloreadas.

– ¿Pero el secreto nunca está en la cámara,verdad?

– No. La cámara es sólo el pincel adecuadoque eliges, si bien puede llegar a ser tan buenaamiga, que llegas a abusar de ella. Cuando hetenido que prescindir de alguna es terrible, comosi se te muere un animal de compañía; por esocasi siempre las regalo a alguien querido.

– ¿Qué hace poderosa a una imagen?

– Aparte de una realización consecuente conlo que se quiere expresar, lo que marca la fuerzaes muchas veces un pequeño detalle; otras, unadeterminada luz. En el caso del retrato, los ojos.

Ya no tiene los dedos amarillos de revelar.Jubilado desde hace dos años –cuando cerró suestudio de Juan de la Cosa con una doble expo-sición de retratos en el Palacete, y otra de índolegeneral en el Centro Cultural Caja Cantabria–,Ángel de la Hoz todavía sale a veces raudo delestudio para perseguir la luz espectral que entrapor la bahía.

Si la vida del fotógrafo se resumiera –que no–en el álbum que ahora recorre con parsimonia,

veríamos emerger del submarinohundido de la memoria imágenescomo peces de colores: uno delos primeros fluorescentes quese vieron en Santander, diseña-do por él mismo para su estudioalquilado de Calvo Sotelo; elanónimo, más divertido que ame-nazante, que presuntamente leenvió el profesor de dibujo CoboBarquera, harto de contemplar,en la vitrina del vestíbulo dedicho estudio, la efigie de Pan-cho Cossío (“que es muy feo”); oel retrato de éste último con uncentollo en brazos… Así hastacompletar un corpus fotográficoque, en ocasiones, remite alcómic (sus aventuras del CapitánCalabrote en la revista calasan-cia), al cine (Ana Mariscal,Audrey Hepburn, Fred Astai-re…), a la danza (Nureyev, Mar-got Fontayne…), a los libros (eldedicado a Pancho Cossío, y “Ellibro de Santillana”, de LafuenteFerrari), y a tantos lugares dondeeste hombre se encuentra comoen su casa.

Este mismo estudio de lacalle León Felipe donde nosencontramos, o el anterior tallerde Reina Victoria, han sidoescenarios en el último cuartode siglo de batallas incruentasque alcanzan su punto de fusión

en los collages que yuxtaponen a su pintura abs-tracta los objetos y realidades fotográficas fuerade contexto. En este último apartado se inscribenlas experiencias que “el decano de los fotógrafosde vanguardia”, como le define su amigo y bió-grafo Manuel Arce, tuvo con el grupo Cagiga, asícomo la exposición “Signos” en el Museo Munici-pal de Bellas Artes (1982); y la interpretación de“Los Animales”, de José Luis Hidalgo, a través deonce serigrafías.

“LA PINTURA ES ESTO”Tiene una calle en Solares que lleva su nom-

bre; un apellido, Baldor, que le entronca con las


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tierras del norte; y una colección de pinceles, espá-tulas y gubias, regalos de colegas, incluido el por-tacarboncillos de Ricardo Bernardo. Ha vivido,vive, vigorosamente, con una rara integridad.Sabedor de que la realidad se inventa cada día, harecorrido como pintor un largo trecho de la manode las vanguardias artísticas, que en Santanderinauguró Mathias Goeritz en el “Saloncillo Alerta”,y Carla Prina en “Proel”.

“Un día llegó Pancho (Cossío) y me dijo: ‘Lapintura es esto’. Y nos abrió los ojos. Me enseñóa ver el cuadro a través de la pintura”. La fraseevoca un tiempo detenido: “porque aquí, en ple-na posguerra, no habíamos pasado de Solana”.Esa posguerra que truncó sucarrera de Derecho y llevó a lacárcel a su amigo comunistaMiguel Vázquez, con quien com-partió su primer estudio enCanalejas: “Cada uno puedepensar como quiera, lo quepasa es que entonces no sepodía ni pensar”.

La actividad de pintor sesolapa con la de fotógrafo. Unafoto enmarcada en la que puedeverse a Ángel con dos de suscinco hijos pintando del natural,ilustra bien su búsqueda trans-gresora: el pintor está inmersoen el paisaje pero lo que al finalrevela el lienzo es un solitariocardo.

– Yo me pongo delante dellienzo y lo desvirgo, quiero decir:lo mancho; y partiendo de esamancha y de las sensacionesque me van produciendo lossucesivos colores, formas ymaterias que se van superpo-niendo, es como construyo elcuadro. Gestualmente.

– Picasso decía: “Yo no bus-co, encuentro”.

– No sé para él, porquePicasso copió muchísimo, peropara mí es fundamental no ante-poner la lógica cerebral a lossentimientos.

– Están de moda los plagios,no sólo en pintura. Creo que tiene usted una boni-ta historia de falsificación…

– ¡Ah!… te refieres a este cuadro (señala enel álbum de fotos); me lo compró un anticuarioque vivía junto al cine Coliseum. Pasados losaños lo encontré en una exposición colectiva enuna sala de Santander, firmado por un pintorandaluz de principios de siglo. “Este cuadro esmío”, le dije al propietario. “No, es mío, porquelo he comprado en Madrid”, me respondió. “Sí,pero la autoría es mía”, le repliqué, “además ten-go el negativo que lo prueba”. Cuando se loenseñé, dijo aludiendo al vendedor: “¡Qué sinver-güenza!”

LIGERO DE EQUIPAJEEl diamante de trabajo que le regaló Eduardo

Sanz va recortando el perfil aristocrático de Ángelde la Hoz hasta hacerle reconocible en los primerosdibujos, acuarelas, guaches, monotipos y óleosfechados en los años 30. Corta el cristal del pasa-do donde se refleja su admiración por Rembrandt,El Greco y Goya, y estampa en el azogue su pasofugaz por el impresionismo, y su abrazo más dura-dero al expresionismo.

Sin embargo, no expuso hasta los 38 años. Entan sólo un lustro (1956-1961) exhibe su obra,cada vez más “pintura-pintura”, en tres muestrasindividuales y siete colectivas, pero abre de nue-

vo un silencio expositivo quedura hasta 1977 y coincide consu consagración como profesio-nal de la fotografía. La llegadade la democracia le abre a nue-vos conceptos estéticos. Si enlos 80 inaugura una etapa total-mente abstracta en dos direccio-nes –una más colorista y la otramás matérica–, en sus últimaspinturas huye de toda retóricaornamental, cada vez más ligerode equipaje, como los hijos de lamar. Paradigma de este tiempoconvulso es un temple de 1997,titulado “La señal” y expuestorecientemente en la galería Cer-vantes, en el que el público haquerido reconocer, como unapesadilla premonitoria, el ataquea las Torres Gemelas.

Apenas hay exposición, tertu-lia o conferencia que escape a suatención, mientras sigue roturan-do su vida con la savia nueva dela curiosidad. Ahora preparaaguafuertes con Eloy Velázquez,la vista puesta en Madrid: “por-que hace mil años que no expon-go fuera de Santander”.

– Ángel, los sueños incumpli-dos...

– Yo no soy quejica, cuandomiras alrededor y ves –porquehay quien mira y no ve– cómoestá el mundo, das gracias a la

vida. ¿Conformista? Quizás lo sea. Hay tanta gen-te que lleva una vida desastrada… Soy tan imbécilque me dan pena hasta algunos ricos.

– Sólo tienen dinero.– Claro. Hay gente que es más rica, más alta,

más guapa, que tienen de todo y triunfan en lavida, pero yo he preferido siempre ser feliz.

– Nunca abandonó Santander, ¿por qué?– Por eso mismo. Siendo pintor la única mane-

ra de hacerte un hueco y vivir del arte era irse aMadrid, como todos los demás. Pero yo no ambi-cionaba grandes triunfos, elegí vivir en un sitioagradable, donde me encuentro bien junto a lapersona que quiero. ■


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• Con el portacarboncillosde Ricardo Bernardo.

SOÑANES


PILAR CHATO. Fotos: MANUEL ÁLVAREZ

EL PALACIO DE SOÑANES, UNO DE LOS MEJORES EJEMPLOS DELBARROCO CIVIL DE CANTABRIA, SE ENCARA AL FUTURO DESDE SUNUEVO DESTINO COMO HOTEL DE CUATRO ESTRELLAS. LA INICIATIVAPRIVADA HA RESCATADO ESTA JOYA DEL PATRIMONIO REGIONAL,AFRONTANDO LA RIGUROSA REHABILITACIÓN. EN SOÑANES CONVI-VEN HOY SUS FACHADAS PROFUSAMENTE DECORADAS, Y LA MAGNÍ-FICA ESCALERA CENTRAL, JUNTO A UNA NUEVA DECORACIÓN Y ES-TRUCTURA INTERIOR MÁS ADECUADA A SUS ACTUALES USOS.

Mirando al futuro• A la izquierda, fachada sur del palacio. Sobre estas líneas,

balcón central en la fachada este.

• Una solemne escalera preside el edificio.

El rehabilitado palacio de Villacarriedo vu

• Vista nocturna de la fachadaeste, orientada al exterior, comoera habitual en el barrocourbano. A la derecha, uno de loscomedores, que alberga laprimitiva chimenea del palacio.

uelve a la vida convertido en hotel de lujo

Iniciaba el siglo XVIII su andadura cuando la an-tigua torre de los Díaz de Arce, ubicada en la ca-pital del valle de Carriedo, abordó su transforma-ción para convertirse en un palacio, el de Soña-nes, una de las construcciones barrocas de ca-

rácter civil más interesantes y suntuosas de Canta-bria. El paso de los años, y de los siglos, ha conver-tido a este edificio, de autor incierto, en testigo y pro-tagonista de los cambios del mundo, de las nuevasdemandas, y del instinto de supervivencia.Hoy ha dejado atrás sus tiempos señoria-les, de hidalgos y nobles, para convertirseen un moderno hotel de lujo con todo elsabor del tiempo. Ahora, la vieja mansiónbarroca asienta los cimientos de su futuroprecisamente en su utilidad: un negocioprivado diseñado para ofrecer a los clien-tes los placeres de su enclave y de su gas-tronomía.

• LOS ORÍGENES

El Palacio de Soñanes, situado en Vi-llacarriedo, en la carretera local que enla-za Iruz y Vega de Pas, se construyó entre los años1718 y 1722. La inscripción bajo el alero de una desus fachadas –“Esta obra haze el señor/ AntonioDíaz de Arce caballero del orden de Santiago,Axente general de la magestad católica en la corte/año de 1720”– no deja lugar a dudas sobre quienfue su promotor; pero el autor de su diseño se des-conoce, y la paternidad del palacio se vincula, úni-camente como hipótesis, con la escuela barrocasalmantina, y concretamente con el cantero cánta-bro Francisco de la Riva Ladrón de Guevara.

Juan Antonio Díaz de Arce, primer morador delpalacio, fue intendente general del reino de Aragón,agente general durante la Guerra de Sucesión,consejero del rey Felipe V, y caballero de Santiago.Hijo del capitán Domingo Díaz de Arce y Miera, na-ció en la misma Torre de los Arce que dio origen alpalacio. Díaz de Arce sirvió como embajador en Ná-poles y Roma, lo que motivó que durante años sepensara que Soñanes procedía de un encargo per-

sonal del caballero al arquitecto italiano CossimoFontanelli, al que conoció durante su carrera en es-te país. Sin embargo, estudios recientes vinculan suestilo con la escuela barroca salmantina ya que, noen vano, en Soñanes se mezclan formas de muy di-versos orígenes, con claras referencias platerescasy de Churriguera.

Arquitectónicamente, el Palacio de Soñanes secomponía de una planta cuadrada –que encierra

en su centro la antigua torre–, con unamonumental escalera –uno de sus máspreciados tesoros–, y tres pisos de altura.Las fachadas, que permanecen como ensus inicios, están decoradas con unagran riqueza ornamental, con abundanciade pilastras y columnas exentas corintias,fustes estriados, salomónicos y abalaus-trados; frisos adornados con hojarascas oacanaladuras, frontones enteros o parti-dos sostenidos por columnillas retorci-das, gárgolas y pináculos… Esta profu-sión de decoración esculpida, que ocupalas fachadas sur y este –una de ellasorientada al exterior, a la calle, como era

habitual en el barroco urbano– ha convertido a So-ñanes en una joya del patrimonio de Cantabria, de-clarada Bien de Interés Cultural, con la categoríade monumento, en el año 1981.

El Palacio de Soñanes estaba formado por re-cios muros y grandes estancias con un nexo común:la soberbia escalera central. De los muros colgaron,durante décadas, los retratos de sus moradores,grandes lienzos que vestían las paredes, junto aotras obras de arte, ricas cómodas, interminablesmesas, tapices e inmensas alfombras. A paño con eledificio se encuentra la portalada, que se añadióaños después de la construcción del palacio, y queda acceso a un jardín o corralada –que aún hoy semantiene– albergando algunos árboles singularescatalogados en sus 4.500 metros cuadrados.

En la fachada este, Soñanes muestra una desus piezas heráldicas más destacadas: un escudotimbrado con corona sostenida por amores y dosleones enfrentados, y con armas de los Díaz de Ar-


• Acceso a la escalera principal. • Sala de estar, en el ala este del edificio. • Detalle de una de las “suites”.

• La antigua escalera decaracol, obra de expertoscanteros, mantiene suutilidad en la nuevaestructura interna.

ce y Pérez del Camino.Y es que los descendientesde esta familia han sido los moradores del palaciodurante décadas. Entre sus habitantes destacóFernando Fernández de Velasco y Pérez de Soña-nes, erudito y bibliófilo, que impulsó la espléndidabiblioteca de los Díaz de Arce y Velasco, convir-tiéndola en foco de la cultura literaria de finales delsiglo XIX. En ella trabajó con frecuencia MarcelinoMenéndez Pelayo; y entre sus fondos tenía espe-cial importancia la colección de libros relacionadoscon las Indias y con temas americanos antiguos.Descendientes de Fernández de Velasco habitaronel palacio hasta unos años antes de su venta.

• LA RESTAURACIÓN

El paso del tiempo, su falta de uso y las incle-mencias meteorológicas fueron implacables conSoñanes. Cuando en 1998 un grupo de empresa-rios adquirió el edificio, éste llevaba unos 16 añosprácticamente deshabitado, u ocupado sólo espo-rádicamente. No en vano el principal objetivo desus nuevos propietarios, muchos de ellos cánta-bros que emigraron a Hispanoamérica hace déca-das, era precisamente ése: “salvar” el palacio de supueblo para el futuro.

Su transformación en hotel ha supuesto un mi-nucioso trabajo de restauración y rehabilitación, enel que se ha invertido algo más de mil millones depesetas. La documentación existente sobre el edi-ficio ha permitido intervenir en él sin alterar, en lamedida de lo posible, su aspecto primigenio. El pa-lacio fue adquirido vacío de contenido, a excepciónde una chimenea y de la gran escalera.También seconserva una escalera de caracol confeccionadaen piedra por expertos canteros.

Los trabajos de restauración de la piedra se hancentrado en las dos fachadas barrocas y en la es-calera principal, elementos emblemáticos de la ar-quitectura del edificio, para lo que se han utilizadomodernas técnicas, salvaguardando al máximo loselementos y formas originales. Además, se han re-cuperado las dos fachadas de estilo montañés, delas que se puede disfrutar desde el jardín.

La metodología utilizada para abordar los tra-bajos de rehabilitación ha seguido unos pasos ri-gurosos, comenzando por un exhaustivo estudiodel edificio, y examinando detenidamente su esta-do de conservación y las causas que han llevadoa su deterioro. La precaria situación en la que seencontraba el palacio obligó a realizar actuacionesmuy diversas y complejas. Un primer paso fue lalimpieza –realizada en profundidad pero sin dañarla pátina original–, retirando las especies vegeta-les implantadas, las eflorescencias salinas y todosaquellos organismos que son perjudiciales para lapiedra. Posteriormente, se procedió a la consolida-ción de los elementos decorativos degradados, y ala reintegración de aquellos que se habían perdi-do, pero que eran necesarios para una correctalectura del conjunto.


• Distintos encuadres de lamonumental escalera,rematada por unespectacular mural -obradel pintor cántabroRoberto Orallo-, querecubre el interior de lacúpula.

También se realizaron labores de consolida-ción en la propia estructura del edificio, eliminandogrietas y fisuras, mientras que los elemen-tos pétreos que por su degradación consti-tuían una amenaza a la integridad de la es-tructura, se sustituyeron por piezas nuevas,estilísticamente iguales a las retiradas. Sereconstruyeron, además, aquellos volúme-nes derruidos, sin los cuales no es posibleapreciar la estructura original. Para esa re-construcción se emplearon materiales origi-nales; o se aplicó a los nuevos una pátinaartificial para entonarlos con el conjunto.Gracias a ello, el ojo profano no puede per-cibir las diferencias entre lo nuevo y lo viejo.Finalmente, para lograr la estabilidad de losmateriales, se los sometió a tratamiento, demodo que también se asegura su buena conser-vación en el futuro.

Las obras de restauración concluyeron pocoantes del pasado verano, bajo la coordinación deRafael Calleja, y con la intervención de los arqui-tectos Jaime Páez y Mariano Martitegui, y del apa-rejador Juan Ignacio Cobo.

El establecimiento, comentan sus gestores,apuesta ahora por la calidad, por recuperar el en-

canto de este edificio para un alojamiento de carác-ter rural, donde la gastronomía desempeña un papel

importante. Hasta ahora Soñanes representa-ba el señorío, la tradición, un pequeño ejem-plo de la historia regional, cuyas puertas es-taban cerradas al mundo. Hoy el palacio-hotelcontinúa teniendo un acceso restringido, peroreserva para sus clientes, que proceden es-pecialmente del mundo de la empresa, algu-nos secretos de la vieja mansión, y todas lasnovedades aportadas por la reforma.

Acorde con su nuevo destino, las grandesestancias y espaciosos salones se han con-vertido en treinta habitaciones, un área de re-cepción, un restaurante y varios salones. Es-tancias todas ellas que se ordenan en torno ala escalera original, que preside solemne to-

do el edificio. La decoración, con muchas piezas deanticuario, se integra con cuadros modernos y, entrelas sorpresas que depara su renovada imagen, des-taca un espectacular mural que recubre el interiorde la cúpula, obra del pintor cántabro Roberto Ora-llo, representando una alegoría de la tierra, el agua,el fuego y el aire. Cuatro elementos básicos de lacreación para un viejo palacio que vuelve a la vidaactiva sin renunciar a su pasado. ■


• Vista, desde el jardín, deuna de las fachadas deestilo montañés delpalacio; y, escudo de losDíaz de Arce y Pérez delCamino, en la fachadaeste.

En Cantabria existen oficialmente más de 70 operadores deproductos de alimentación obtenidos con técnicas naturales

etiqueta ecológicaTexto y fotos: JESÚS DE CASTRO

Todos nos consideramos, en teoría, ecologistas, o mejor, respetuosos con el medioambiente, pero hallaríamos casi tantos matices como personas a la hora de aplicaresa intención a nuestra conducta. Si hubiera que buscar el máximo punto de coin-cidencia, sería el de “consumidor ecológico”, porque todos pertenecemos al pri-mer rango de esa categoría, y preferimos, en principio, un alimento que llega anuestra mesa siguiendo el curso que marca la naturaleza, frente a otro similar cuyoproceso de producción o elaboración ha sido “ayudado” por algún tipo de sustan-cia química, o de síntesis. Las últimas crisis alimentarias han disparado el interéspor los alimentos ecológicos, cuyos productores han de comprometerse además amantener el equilibrio natural en su zona de actividad. En Cantabria son ya más de70 los operadores dedicados a esta tarea, que despunta como alternativa de futu-ro para el sector agrícola y ganadero. Según datos del Ministerio de Medio Ambien-te, en el año 2000 se destinaron a la agricultura ecológica en la región un total de1.409 hectáreas.


Respetar los ciclos y las incidencias de lanaturaleza (riadas, sequías, heladas…)supone aceptar que primará la calidad,pero también que la cantidad nunca serácomparable a la de los procesos de tipo

industrial. Hoy por hoy, esta condición tiene sucorrespondiente reflejo en los precios de venta alconsumidor, más elevados en el primer caso.

Para unificar criterios y tratar de impedir frau-des en los sistemas de producción, la Unión Euro-pea estableció una serie de normas en su Regla-mento 2092/91, ampliado en años posteriores(1935/95 y 1804/99). Estas normas hacen referen-cia, entre otras cosas, a un “método específico deproducción ecológica”, detallado para cada tipo deplantación o crianza de animales; establecen unaserie de controles; e implantan la “etiqueta ecológi-ca” para que los consumidores puedan identificar,inequívocamente, los productos elaborados conesta práctica.

En principio, Cantabria reúne condiciones muyfavorables para elaborar alimentos y criar ganadoecológico, pero las normas son inexorables: espreciso un periodo de dos años de conversión–tras haberlo solicitado previamente, y superartodas las inspecciones– para poder adherir la eti-queta que otorga el Consejo Regulador de la Agri-cultura Ecológica (CRAE) a un producto.

SI EL SUELO ENFERMA TODOS ENFERMAMOSEn algunos casos, como el de Mar Montes, pio-

nera en el cultivo de kiwis en Cantabria, este perio-do de conversión ha tenido más incidencia en lostrámites burocráticos –“he tenido que cumplimen-tar una montaña de impresos”, comenta– que en elmanejo de la plantación, que apenas ha variado.“Comenzamos hace 18 años con los kiwis, y siem-pre los hemos cultivado con prácticas ecológicas–afirma-, aunque no siguiendo un manual o regla-mento específico. La naturaleza reacciona cuandotratamos de forzarla con sustancias dañinas, comolo hacen nuestras defensas ante los virus, y nopodemos actuar como si estuviéramos al margende la cadena. Si el suelo enferma, también lo hacela planta, y el animal que la ingiere, y el humanoque lo consume…”

Con una hectárea de plantación, enclavada enuna resguardada colina de Hoz de Anero, y salpi-cada por los innumerables puntos ocres de los fru-tos entre las amplias hojas, Mar acaba de finalizarsu particular maratón burocrático, y dispone ya delas etiquetas para identificar la primera partida dekiwis ecológicos de Cantabria. Serán cerca de1.000 kilogramos, que irá recolectando, auxiliadaesporádicamente por sus hijos, en función de lademanda, y que se distribuirán en herboristerías yestablecimientos dietéticos, con la posibilidad deque una parte sea directamente adquirida por unaempresa elaboradora de mermeladas ecológicas.

La normativa es muy restrictiva con determina-dos productos, como los preparados químicos desíntesis o los organismos modificados genética-mente, pero sí permite otras actuaciones. En elcaso de esta plantación de kiwis, se podrá mejorar

Mar Montes muestra los kiwis producidos en su plantación.

Gallo pedrés, y gallinas de la misma raza.


el ph (acidez) del suelo mediante un preparado abase de polvo de roca.

AUTOABASTECIMIENTO, ¿POR QUÉ NO?No lejos de Hoz de Anero, en Solórzano, se

encuentra el Molino de la Cruz, antigua construccióndel siglo XVIII que, históricamente, supuso el pri-mer aprovechamiento hidráulico del río Campiazo.En la actualidad lo regenta Enrique Moreno, quienha rehabilitado la vivienda, el edificio del molino yla finca que los rodea con tanto acierto que ya seha convertido en una atracción turística de la zona.

Sin embargo, Enrique no se dedica a la hoste-lería, sino a la agricultura y avicultura ecológicas.La recuperación de la finca y los edificios puedeconsiderarse como el proyecto de su vida, espe-cialmente cuando muestra las fotografías del totalabandono que padecían las instalaciones dosdécadas atrás. Su familia se hizo entonces conellas porque nadie las quería, ya que las crecidasdel Campiazo las anegaban inexorablemente cadaaño. Con sus conocimientos de albañilería, oficioque desempeñó hasta la pasada primavera, y susestudios de veterinaria, que abandonó en el quintocurso, ha puesto en marcha la cría de pollos de laraza autóctona “pedresa de Santander”, según loscánones de la agricultura ecológica. “Ser granjeroy tener animales era mi mayor ilusión; así que sólopretendo seguir haciendo lo que me gusta, obte-niendo el equivalente a un pequeño sueldo. Tengohuerto, aves, conejos y, de cuando en cuando, has-ta truchas en el río, de modo que no gasto muchoen alimentación. Casi todo lo que preciso para vivirlo tengo aquí”, afirma.

Enrique ha mejorado la raza montañesa cru-zándola con la británica Plymouth Rock, de mayorcapacidad cárnica. Esta raza parece combinar biencon la resistencia y adaptabilidad pedresa, y ade-más presenta dimorfismo sexual (moño blanco enlos machos), cualidad que hace innecesaria lalegendaria figura del sexador de pollos.

La huerta –donde tiene puerros, pimientos,acelgas, berenjenas, lechugas, pepinillos, repollosy habas– sigue las mismas pautas naturales. “Pre-tendo conseguir también algo de cereal, y un maízautóctono que procede de Fuente las Varas. Miproyecto tiene como próximo reto importante lareparación del molino, que tiene un eje roto, y supuesta en funcionamiento, para ofertar tambiénmolienda ecológica”, comenta.

En esta granja, sin rebeliones, la convivencianatural parece ser la consigna. El abono natural esproporcionado por una yegua de monta propiedadde Enrique, junto con la cabra que mantiene atadade un largo cordel, para que disponga de terrenosin causar estragos entre los pollos. “La cabra es,además, mi desbrozadora natural”, precisa.

La crianza en semilibertad previene, además,muchos problemas sanitarios derivados del hacina-miento. Si a pesar de todo un animal o un lote caenenfermos, se deben aislar del resto y tratar veteri-nariamente, utilizando con preferencia productosfitoterapéuticos (extractos, esencias de plantas…),homeopáticos y oligoelementos, en lugar de anti-Enrique Moreno recolecta las hortalizas en su huerto.

Pollos agrupados a la entrada de su cobertizo.

Aspecto de los kiwis en la planta.


bióticos o medicamentos de síntesis química. Si elveterinario considera imprescindible utilizar estosúltimos, deberá registrarse detalladamente el trata-miento, identificar al animal o lote tratado, comuni-carlo al CRAE y, cuando menos, doblar el tiempode espera legal para comercializarlo como alimen-to ecológico. En el caso de los pedreses del Molinode la Cruz, por el momento, ademásde fuertes están sanos, y mantienenuna tasa de mortalidad bajísima, 4sobre 136 (apenas un 3%), y poraplastamiento o frío, ninguno porenfermedad (la tasa normal de mor-talidad en avicultura convencionaloscila en torno al 20%).

COMO SIEMPRE, PERO MÁSECOLÓGICO

La ganadería, de leche y de car-ne, se perfila como un sector muyprometedor para la producción cán-tabra de alimentos ecológicos. Lacabaña regional, sobre todo en lascomarcas interiores, ha sido tradicio-nalmente de ganadería extensiva, loque conecta, en gran parte, con el reglamentocomunitario, que requiere para el manejo de gana-do bovino el “acceso de los animales a zonas deejercicio o a espacios al aire libre cubiertos de hier-ba… y dichos espacios deben ser, en principio,objeto de un adecuado programa de rotación”. Elpárrafo parece describir el trasiego habitual delganado, tudanco y de otras razas, por nuestrosmontes y valles interiores. Es una parte del camino

que tenemos recorrida “por naturaleza”, pero ya essabido que la etiqueta ecológica exige ademásotros requisitos.

Al frente de la ganadería La Sierra, en Tezanos,están Eva Mazorra y Gumersindo García, Sindo,un matrimonio que cree desde hace tiempo en elfuturo de la producción ecológica frente al declive

de la ganadería convencional enCantabria. Producen leche certifica-da por el CRAE desde junio del año2000 (tienen 48 vacas de leche yrecogen unos 700 litros diarios, quecomercializa una empresa de pro-ductos lácteos), y han iniciado ya laproducción de terneros para carnecon idéntica denominación. Preten-den sacrificar un total de 20 durante2001. Mientras atienden las faenasde la granja, Eva y Sindo nos mues-tran orgullosos su nuevo proyecto, laproducción de los que serán los pri-meros yogures ecológicos de Canta-bria, y unos de los contados enEspaña con la etiqueta CRAE. Tie-nen ya preparada la maquinaria en

una pequeña nave de fabricación, que han cons-truido en el mismo recinto, y esperan las últimasinspecciones para comenzar a elaborar los prime-ros yogures.

Volviendo a la carne ecológica, su producciónes controlada por el CRAE, como el resto de ali-mentos, pero presenta ciertas particularidades,como un etiquetado especial y una serie de meca-nismos de control orientados a garantizar la traza-

En España existe un CRAE central, dependiente del Ministerio de Agri-cultura, para regular esta actividad según el reglamento europeo. A su vez,cada comunidad autónoma forma su propio CRAE, con diversas opciones. Elde Cantabria es por el momento provisional, tutelado por la Oficina de Cali-dad Alimentaria (ODECA) de la Consejería de Ganadería, pero en breve sepondrá en marcha el proceso electoral para los cargos que integrarán esteorganismo en el futuro como entidad autónoma, con representación de pro-ductores, elaboradores, consumidores, Administración y organizacionesagrarias. Su constitución está prevista para el próximo verano.

Para ser productor ecológico hay que solicitarlo en el CRAE, y esperaruna visita de inspección a la granja o terreno destinado a esta labor. Poste-riormente, se producirá un dictamen del comité de calificación, que decidesobre el estado de cada expediente. Cerca de 80 productores, operadores ytransformadores han salvado ya todos los trámites y se acogen a las deno-minaciones del CRAE. La demanda supera lo que son capaces de produciractualmente. También tienen ya presencia en las principales citas del sector,como en la pasada feria Biocultura (Madrid), o en Biofach, que se celebraráel próximo mes de febrero en Alemania, y donde los productos ecológicoscuentan con una gran cuota de mercado. Para ser consumidor ecológico bas-ta con adquirir los alimentos con la etiqueta del CRAE, y saber que provie-nen de la producción más natural e inofensiva que nuestra sociedad es capazde realizar hoy en día.

UN POTENCIAL EN DESARROLLO

Ternero con crotales de identificación.

bilidad de cada pieza que se consume, la historiade ese filete desde el nacimiento del animal hastaque llega al plato. Esas garantías incluyen unperiodo de adaptación de dos años para laconversión de la ganadería al sistema eco-lógico, y una serie de medidas adicionalespara el transporte y sacrificio de las reses.

La alimentación del ganado se componede pasto, silo verde, mezcla de piensosnaturales, y alfalfa. La zona total de pastoes de unas 19 hectáreas, repartidas envarias fincas, lo cual permite un pastoreobastante extensivo, teniendo en cuenta elnúmero de animales. En el prado más llanoy resguardado, limitado por un arroyo y pro-tegido por una peña boscosa, pastan losterneros, que pasan allí casi todo su tiempodedicados a mamar de las ubres maternasy solazarse por el verde. Cuando tienen casiun año y se acerca el momento de sacrifi-carlos, complementan su dieta con granosde cereales y leguminosas.

En el traslado del animal al matadero, yen el propio centro de sacrificio, se adoptan medi-das para evitar las prácticas sistemáticas que pro-ducen estrés o sufrimiento a la res. Para ello, que-

da alojada en un box exclusivo, sin mezclarse conel ganado convencional, y se realiza el sacrificio ensolitario, a primera hora, y con las instalaciones

limpias y desinfectadas. Más tarde, en lacámara de refrigeración, se cuida de que lacanal no pueda mezclarse con las conven-cionales, y lo mismo durante el despiece,aplicando ya los sellos de seguridad.

Actualmente, el único establecimientodedicado a la venta exclusiva de carne eco-lógica es propiedad del operador RafaelBezanilla, está ubicado en Santander yatendido por Emilio García, si bien este tipode carne puede también ser expedido enuna carnicería convencional. En todo caso,el consumidor de este producto tiene a lavista, junto a la pieza de la que adquiere supedido, un documento en el que consta: elnúmero CRAE de identificación de despie-ce, de crotal del animal, de operador CRAE,de ganadero, lugar de procedencia, raza yfecha de nacimiento de la res, peso en vivoy en canal, y procedencia de los progenito-

res. El sobreprecio al público viene a ser de unas500 pesetas por kilo, en comparación con la carnesin etiqueta CRAE. ■


Gumersindo García hace acopio de pienso ecológico. Nave para la fabricación de yogur ecológico.

El primer establecimiento de Cantabria dedicado, exclusivamente, acomercializar carne ecológica.

Operadores de productosecológicos en Cantabria

Datos a noviembre de 2001

Vacuno . . . . . . . . . . . . . . . . 28Horticultura . . . . . . . . . . . . . 13Apicultura . . . . . . . . . . . . . . 3Avicultura . . . . . . . . . . . . . . 3Huevos . . . . . . . . . . . . . . . . 3Kiwis . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1Arándanos . . . . . . . . . . . . . . 1Fresa y frambuesa . . . . . . . 1Pan . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1Leche . . . . . . . . . . . . . . . . . 1En trámite . . . . . . . . . . . . . . 19

Total . . . . . . . . . . . . . . . . . . 74

Fuente: CRAE

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• La finca de SanDiego, actual Casade Cultura deCabezón de la Sal.

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Eugenio Gutiérrez González, conde de San Die-go, nació en Santander el 15 de julio de 1851,en la calle de la Compañía, la que, al transcu-rrir los años, recibiría su nombre, para desa-parecer, más tarde, en el incendio de la ciu-

dad. Se crió desde muy pequeño en Puente SanMiguel, con su abuela, ya que era huérfano de padre,y su madre se volvió a casar.

De niño, en Villapresente, conoció al célebre ciru-jano Diego de Argumosa (1792-1865), ya entoncesjubilado y reconocido como “restaurador de la cirugíaespañola del XIX”, personalidad a la que Gutiérrezadmiró a lo largo de su vida, a pesar de que su con-tacto con él fue breve, pues falleció al cumplir Euge-nio los 14 años.

Gutiérrez estudio bachiller en el Colegio de losEscolapios de Villacarriedo. En 1873, al cumplir losveintidós años, consiguió la licenciatura en Medicinapor la Universidad de Valladolid.

Su primer trabajo lo obtuvo en el Valle de Valdáli-ga, en el pequeño pueblo de Lamadrid, donde ejercióentre los años 1874 y 1878. Interesado en conseguirla especialidad de Obstetricia y Ginecología, se fue aParís, en 1879, donde se formó en una clínica de par-tos con el doctor Depaul y su agregado Charpentier.Años después amplió su formación con la visita a laMaternidad de Viena, dentro del Hospital General, diri-gida por el profesor Breisky, y Gustav y Carlos Braun.

En 1880 regresa a Lamadrid, y al ser requeridossus servicios para atender a un niño enfermo en unade las colonias de verano en San Vicente de la Bar-quera, conoció a Francisco Giner de los Ríos, funda-dor de la Institución Libre de Enseñanza, el cual lepresentaría mas tarde, en Madrid, al eminente ciru-jano gaditano Federico Rubio y Gali (1827-1902).Rubio, de regreso de Inglaterra y Estados Unidoscomo representante de la República, estaba desa-rrollando la creación de un Instituto de TerapéuticaOperatoria, que se ubicó inicialmente en dos salasde enfermos del Hospital de la Princesa, en Madrid.Años después, en 1894, se situó en un magníficoedificio construido en Moncloa, donde permanecióhasta su destrucción, en la contienda de 1936. Des-de aquel encuentro, la trayectoria profesional deGutiérrez irá siempre unida al Instituto Rubio.

DOCTOR Y ACADÉMICOEn diciembre de 1880 Gutiérrez se incorpora al

Instituto Rubio, donde se responsabiliza de montar elServicio de Histología y Anatomía Patológica, y,simultáneamente, el de Ginecología. Su vocacióndocente le lleva a desarrollar un Primer Curso de His-tología en 1881, conjuntamente con López García,con quien coincidió en París. Dispusieron a tal fin delMuseo Antropológico, fundado por el doctor Velasco.Los estudios necrópsicos “a mano descubierta” apunto estuvieron de costarle un brazo por la fuerteinfección que padeció en una mano.

Ese mismo año de su regreso a Madrid obtiene eltítulo de doctor, y solicita su incorporación a la jovenSociedad de Ginecología Española, fundada en lacapital de España en 1874, y presidida por FranciscoAlonso Rubio. La sociedad agrupaba en aquellasfechas a los más conocidos obstetras del momento.


• Alfonso XIII en la finca de San Diego, acompañado de la familia Gutiérrez (a su dere-cha), y de autoridades.

• Homenaje popular al doctor Gutiérrez (señalado en la foto con un círculo), con moti-vo de la concesión de su título nobiliario (1907).

FRANCISCO VÁZQUEZ DE QUEVEDO*El pasado 15 de julio se cumplieron 150 años del naci-miento de Eugenio Gutiérrez González, médico insigne dePuente San Miguel y Cabezón de la Sal. Nombrado condede San Diego por sus servicios a la Casa Real, el doctorGutiérrez está considerado como pionero de la Ginecolo-gía y Puericultura en España.

El 13 de Mayo de 1894, tras catorce años de ejercicio profesio-nal como jefe de Obstetricia y Ginecología en el Instituto Rubio,ingresa en la Real Academia Nacional de Medicina.

Veintisiete años después de ser titular de ginecología del Ins-tituto Rubio, y con una gran clientela particular, el doctor Gutiérrezes considerado una eminencia en su especialidad, y reconocidopor muchos como maestro. Ello le vale el ser distinguido, en 1905,con la condecoración de Isabel la Católica y la Gran Cruz deAlfonso XII.

Ese verano, cuando se reúnen personalidades y amigos enSantander para homenajearle, recuerda en su discurso la gran figu-ra del cirujano nacido en Villapresente, el eminente Diego de Argu-mosa, e impulsa la idea de levantar una escultura en su memoria,iniciando una cuestación entre los presentes. Esa escultura, obrade José Quintana, se instala, en 1910, en Puente San Miguel, don-de aún hoy perdura.

MÉDICO DE LA CASA REALEn 1906, con motivo del alumbramiento de la reina Victoria, el

doctor Gutiérrez fue llamado a Palacio, y cuando éste le indica alrey Alfonso XIII que el parto no está aún a termino, y que, llegadoel momento, ya volverá para echar una mano, el Rey le contesta:“¡Mas bien echará usted las dos, puesto que desde este momentole nombro médico de la Casa Real!”. El feliz nacimiento del quesería Príncipe de Asturias, y de los otros Infantes, le valió para queel Rey le concediera el título de conde. Eugenio Gutiérrez escogióel nombre de San Diego, que era como se denominaba la finca deverano, procedente de la familia de su mujer, en Cabezón de la Sal.

Pero en la práctica obstétrica en Palacio no todo fue agua derosas. El doctor Gutiérrez también asistió a la infanta María Tere-sa, hermana del Rey, y esposa de Carlos de BorbónDos Sicilias. Madre ya de cuatro hijos, falleciódespués de un parto normal, a causa deuna hemorragia súbita, en pre-sencia de los miembrosde la CasaReal.

LA FAMILIAEugenio Gutiérrez con-

trajo matrimonio con Olimpia BalbásCámara, natural de Cabezón de la Sal, con

quien tuvo cuatro hijos: Eugenio, Olimpia, Leopoldoy Juan Antonio.

Su primogénito, Eugenio Gutiérrez Balbás, segundo conde deSan Diego, estudió Medicina, se formó en Ginecología en Dresdey Berlín, y continuó las tareas médicas y docentes de su padre enel Instituto Rubio, hasta la contienda de 1936, en que es destruidopor los bombardeos. En la posguerra fue nombrado director dedicho instituto, con la pretensión de reconstruirlo, lo cual no fueposible, aunque sí nació, en su lugar, la Clínica de la Concepción.

Tuvo Gutiérrez Balbás una distinguida clientela, entre la quedestaca María Luisa de Orleáns, segunda esposa de Carlos deBorbón Dos Sicilias, asiduos veraneantes en Cantabria. Anecdóti-camente, cabe señalar que uno de sus hijos nació, un verano, en elpalacio del marqués de Benemejís de Santillana del Mar, hoy pro-piedad de Caja Cantabria.

El segundo conde de San Diego se casó con María TeresaGómez Acebo, con quien tuvo siete hijos, de los cuales viven, alredactar estas líneas, una hija, carmelita descalza, y Eugenio, elhijo menor.

Olimpia, a su vez, tuvo dos hijas. Leopoldo fue abogado, y JuanAntonio, el hijo menor, médico. Ninguno de los dos tuvieron des-cendencia.

EL VERANEO EN CANTABRIAEntre las aficiones personales del primer con-

de figura la música. Dominó la técnica delpiano, y era fiel asistente a losconciertos del TeatroReal de Madrid ode la

Filarmóni-ca, inclinación que

inculcó a sus hijos. Igualmente,sentía pasión por el arte y la poesía.

Dicen que Eugenio Gutiérrez contaba los díasque le faltaban para iniciar el veraneo y desplazarse a

Cabezón con toda la familia, tal era el amor que tenía a su tierra.En el corazón de Cabezón de la Sal, en la finca de San Diego,

propiedad de su mujer, mandó edificar un palacete de tres alturas,estilo modernista, donde pasaba con los suyos largos períodosestivales. Gutiérrez construyó, además, un segundo palacete cer-cano al principal, de características arquitectónicas similares, y res-tauró dos edificaciones antiguas, y la capilla. En 1957, una vezfallecido el segundo conde de San Diego, la familia GutiérrezGómez Acebo donó esta finca al pueblo de Cabezón de la Sal, quelo convirtió en Casa de Cultura.

Niños de

Cabezón de la

Sal ante

la finca de

San Diego

(hacia 1907).

El conde de

San Diego en

su despacho.


Vistiendo el

uniforme de

gala, en mayo de

1894, con motivo

de su ingreso en

la Real Academia

Nacional de

Medicina.

Durante los veraneos regios, era frecuente que los miembros dela Casa Real se desplazasen por la provincia. Solían acudir a la casadel conde de San Diego, y a las de los marqueses de Comillas y deValdecilla, entre otras. Los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia,acompañados de los príncipes Raniero, Felipe y Genaro, del duquede Santo Mouro, y del conde de Grove, así como los infantes Carlos,María Luisa, e Isabel, fueron algunos de los visitantes ilustres de lafinca, a la que también acudieron, en distintas ocasiones, el cardenalCos, oriundo de Cabezón, el nuncio Ragmesi, políticos y escritoresde la época.

RECONOCIMIENTO SOCIALEl doctor Gutiérrez fue miembro

del Real Consejo de Sanidady del Comité Interna-cional del Cáncer,

y presidente del

Congreso Internacionalde Ginecología. El 14 de julio de

1914 fue designado por la Academiarepresentante en el Senado, cargo que no llegó a

ejercer porque falleció trece días más tarde. Unos añosantes, el 30 de mayo de 1907, el Ayuntamiento de Cabezón de la

Sal le había nombrado “Hijo Adoptivo”.En esta localidad cántabra se produjo, precisamente, su falle-

cimiento, el 27 de julio de 1914, a causa de una hemorragia cere-bral. Contaba el doctor Gutiérrez 63 años de edad, y la muerte lesorprendió cuando pasaba unos días de descanso en su finca deSan Diego.

El entierro fue multitudinario, y acudieron representantes decorporaciones médicas, de la Real Academia y de la Casa Real.Los numerosos comentarios que se vertieron resaltaban su per-sonalidad humanística, volcada en la tarea médica. De él dijoDoyen, gran figura de la cirugía parisina de su época: “Los espa-ñoles tienen dos cirujanos eminentes: Gutiérrez y Ortiz de laTorre”. Ortiz de la Torre, oriundo de Cantabria, suturó con éxito,por primera vez en nuestro país, el corazón herido de un niño.

Pero el doctor Gutiérrez, a pesar de los títulos y del reconoci-miento obtenido en la Corte y en los círculos sociales y científicos,era, ante todo, un médico. Tenía siempre su casa abierta a lo quede él se demandase, y estaba dispuesto a salir, sin dudarlo, enfun-dado en su impermeable y con el maletín en la mano, cuando erarequerido para un parto difícil, incluso en noches infernales. Una

anécdota significativa recuerda que, al terminar el verano ycerrar sus instalaciones, una colonia infantil madrile-ña, instalada en San Vicente de la Barquera,tenía un niño enfermo al que seaconsejaba no movilizar, porlo que el doctorGutiérrez sehizo

cargo delmismo hasta su

curación.En recuerdo de la memoria de

Eugenio Gutiérrez se levantó un monu-mento en los jardines del Instituto Rubio, en Mon-

cloa. Costeado por suscripción entre amigos, clientes einstituciones, y realizado por Miguel Blay, se inauguró el 16 deoctubre de 1917. Esta escultura fue destruida durante la contiendanacional de 1936.

SU APORTACIÓN CIENTÍFICALas aportaciones científicas del doctor Gutiérrez están recogi-

das en más de 300 trabajos. Fue considerado un magnífico y hábilcirujano, de trato amable para sus enfermos.

En algunos trabajos muestra su preocupación social por eldesarrollo de la Puericultura y de las Casas de Maternidad e insti-tuciones como La Gota de Leche, proponiendo una legislaciónsobre las embarazadas, para las que solicita vacaciones pagadasdurante los meses anteriores y posteriores al parto.

La vida profesional de Gutiérrez se desarrolló en la época his-tórica del positivismo (1851-1914), momento en el que la ginecolo-gía cobra un gran auge, independientemente de la obstetricia pro-piamente dicha. Son años en los que esta especialidad quirúrgicase hace antiséptica y aséptica, lo cual, conjuntamente con el per-feccionamiento de la anestesia, prepara el advenimiento de la grancirugía de la época actual, que culmina con los trasplantes de lasúltimas décadas del siglo XX.

Durante los 34 años que el doctor Gutiérrez estuvo a cargo delServicio de Ginecología del Instituto Rubio tuvo oportunidad deinfluir muy positivamente al desarrollo de esta especialidad, tantoen el aspecto quirúrgico, por su condición de hábil cirujano, comoen el doctrinal, aportando conocimientos a esta materia. ■

*Francisco Vázquez de Quevedo es académico correspondiente de laReal Academia Nacional de Medicina.(Las fotos en blanco y negro del reportaje pertenecen al archivo del autor).

Monumento

al doctor

Gutiérrez en

los jardines

del Instituto

Rubio, en

Moncloa,

destruido

durante la

contienda de

1936.

Cortejo

fúnebrede

Eugenio

Gutiérrez.



El poblado cántabro de Argüeso recrea la vida c

ÁNGEL OCEJO HERRERO*. Fotos: MANUEL ÁLVAREZ

EN EL CORAZÓN DE LA ANTIGUA CANTABRIA, EN LALOCALIDAD DE ARGÜESO, A TAN SÓLO 9 KILÓME-TROS DE REINOSA, PUEDE VISITARSE LA RECREA-CIÓN DE UN POBLADO DE LOS ANTIGUOS CÁNTA-BROS. AL CRUZAR SU PUERTA AMURALLADA, TRAS-PASANDO EL TIEMPO, UN PASEO ENTRE LAS CASAS,YUNA VISITA AL INTERIOR DE LAS MISMAS, NOS ACER-CA A LA HISTORIA Y A LA VIDA COTIDIANA DE LOSCÁNTABROS DE HACE MÁS DE DOS MIL AÑOS.

cotidiana de los antiguos habitantes de la región

1-CABAÑA DE LOS BARAONESsiglo VII a.C.

2-CABAÑA DE MONTE BERNORIOsiglo IV-III a.C.

3- CABAÑA DE CELADA MARLANTES

siglo II-I a.C.

4-CABAÑA DE MONTE CILDÁsiglo I a.C.

5-CABAÑA DE LA ULAÑAsiglo I a.C.


• Dibujo orientativo, expuesto a la entrada del poblado.

YE

YO


El poblado cántabro de Argüeso es un museovivo al aire libre, en donde –tal como puedeverse en iniciativas semejantes emprendi-das por arqueólogos e historiadores enotros países de Europa– se han reconstrui-

do varias viviendas empleando las mismas técni-cas constructivas e iguales materiales que los utili-zados en aquella época, según conocemos a tra-vés de la arqueología.

Para quien llega a la comarca de Campoo, elpoblado queda ligado al circuito de visitas que en-lazan Fontibre, el castillo de Argüeso, el yacimien-to romano de Julióbriga, y otros lugares de interésde esta comarca del sur de Cantabria. Es necesa-rio dejar los vehículos en el pueblo de Argüeso, yrecorrer a pie los 1.400 metros que lo separan delpoblado.

Una vez en él, y visitando varias casas am-bientadas en diferentes épocas, observamos có-mo era la distribución interior de las viviendas; có-mo se utilizaban los hogares y los telares para ha-cer ropa; la forma de las vasijas de cocina y el al-macenamiento de víveres; el sistema para molerel cereal en rústicos molinos de piedra; o las téc-nicas de construcción de techumbres con mate-rias vegetales. Se propone, en definitiva, un acer-

camiento a la historia de los cántabros y del mun-do bárbaro de otras zonas de Europa, enun recorrido por los siete siglos anteriores a nues-tra era.

Sin duda, los antiguos cántabros constituían,en el norte de la Hispania protohistórica, una po-tencia militar. Este hecho ya se deja sentir en lascitas clásicas que les mencionan, con anterioridada su épica resistencia a la invasión de Cantabria,iniciada el año 26 a.C. por las tropas del empera-dor Augusto. Esas citas se multiplicaron con laposterior presencia romana en sus tierras, perolas nuevas informaciones, centradas en aspectosbélicos, geográficos o etnográficos, no aportanmucho sobre su vida cotidiana. Para saber mássobre ellos hay que recurrir a las investigacionesarqueológicas.

POBLADOS FORTIFICADOSAl menos una parte de los antiguos cántabros

vivía en poblados fortificados que se situaban so-bre lugares prominentes. Estos emplazamientosen altura, que fueron ocupando el territorio du-rante el último milenio antes de Cristo y que, deuna manera general, denominamos castros, sonreconocibles en el paisaje porque aún permane-

• Las casas eran sólidas y costosas de realizar, y se construían, fundamental-mente, con madera y barro.

• Interior de una de las viviendas.


cen los derrumbes de las murallas de piedra, lostaludes y los fosos que protegían de peligros ex-ternos a sus habitantes, junto a sus enseres yanimales.

Las dimensiones de estos poblados están de-terminadas, generalmente, por el en-clave escogido para su construcción, yexisten desde emplazamientos de me-nos de una hectárea –que pudieran co-rresponder a los pequeños poblados deun grupo familiar, tal vez de menos deuna docena de casas y, quizá, con me-nos de cien habitantes-, hasta extensosenclaves de diez, veinte y más hectá-reas, con grandes obras defensivas,que corresponderían a centros comar-cales importantes, con agrupacioneshumanas mayores, y que debieron for-marse en los siglos más próximos a lasguerras con Roma.

Para acceder al interior de un castrola muralla se interrumpe en uno o máspuntos, coincidiendo con rampas y recodos, entra-das en embudo, o por un lado próximo a un cantil,todo lo cual hace más defendible el recinto ante unposible ataque.

Ejemplos de estos poblados, verdaderas forta-lezas de la época, los tenemos en yacimientos ar-queológicos de la antigua Cantabria, como el cas-tro de Monte Bernorio, en el norte de Palencia; elenorme castro de La Ulaña, cerca de Peña Maya,

en el norte de Burgos; o el castro deCastil Negro, con varias líneas de mu-ralla, en Peña Cabarga, frente a la ciu-dad de Santander.

LAS CASAS DE LOS CASTROSEn el interior de estos recintos amu-

rallados, sobre aterrazamientos del te-rreno o en lugares propicios por natura-leza, se edificaban las viviendas. A tra-vés de diversas exploraciones y excava-ciones llevadas a cabo en el territoriohabitado por los cántabros, se ha com-probado la existencia de casas de diver-sos tamaños, tanto de plantas circularescomo cuadrangulares. El primer tipo pa-rece el más antiguo, pues se constata su

presencia en diferentes momentos dentro de la pri-mera mitad del último milenio antes de Cristo. Es-tas viviendas de planta circular siguen vigentes almenos hasta los inicios de la presencia romana en

• La techumbre estabacompuesta por materiasvegetales.


la zona pero, a partir de una época incierta, quepudo corresponder al siglo IV-III a.C., se incorporael modelo de vivienda de planta cuadrada o rec-tangular.

En cuanto a la técnica constructiva de ambasmodalidades, los hallazgos de huellas de maderos,y numerosos fragmentos de barro endurecido conmarcas de haber recubierto estacas, tablas y en-trelazados de varas, prueban la existencia de ca-sas con paredes formadas por postes y setos devaras de avellano o sauce, enlucidos interior y ex-teriormente con barro mezclado con paja.

Esta es la técnica de construcción tradicional ala que, entre otros, ya se refirió el arquitecto roma-no Vitrubio, quien cita en la Galia, Hispania, Lusi-tania y Aquitania, casas edificadas con maderasverticales, ramas entretejidas cubiertas de barro, ytechumbres compuestas con materias vegetales.Puede parecer extraño que, a diferencia de las pé-treas murallas castreñas, las casas se construyanfundamentalmente con madera y barro, pero ha detenerse en cuenta que el empleo de estos mate-riales ha estado muy difundido en lugares bosco-sos de toda la Europa templada desde hace mile-nios. Esta técnica constructiva continuó durante laEdad Media en muchas partes de Europa –incluso

se constata en el mundo vikingo-, y ha perduradoen Cantabria y en muchas zonas de España hastanuestros días. Igualmente, las techumbres de paja,carrizos, escobas brezos y otras materias vege-tales han perdurado en diferentes lugares de lageografía europea.

En el interior de estas viviendas, sólidas y cos-tosas de realizar, la investigación arqueológica per-mite reconstruir un área de cocina en tor-no al fuego del hogar, con sus vasijas, el llar y losmolinos de piedra para el cereal; un área de des-pensa, con grandes recipientes que almacenabancereales, agua, frutos, etcétera; un área de taller,donde se tejía la lana, o se trabajaban los metales;y, finalmente, una zona destinada a dormitorio.

LAS OCUPACIONES COTIDIANASLos numerosos restos de animales domésticos

(vacas, cabras, ovejas, caballos y cerdos) encon-trados en las excavaciones de ciertos castros, odescubiertos por las rejas de los arados modernosen otros casos, evocan actividades pastoriles. Unpequeño campano hallado en la excavación delcastro de Celada Marlantes, en la comarca deCampoo, trae incluso ecos de un sonido familiarque, ya entonces, llenaría el aire.

• La construcción de las viviendas se vio dificultada por la adversa climatología del emplazamiento elegido.

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Por otra parte, el hallazgo de rejas de arado,formadas en hierro, y hoces del mismo metal, indi-can la existencia de trabajos agrícolas de siembray recolección de cereales. Al mismo tiempo, la pre-sencia de azadas muestra también una agriculturade pequeños huertos.

Los descubrimientos de tijeras deesquilar la lana, pesas de telar paratensar los hilos, y la propia improntade un tejido de lana sobre el suelo debarro de la cueva de Ojo Guareña, enel norte burgalés, dejada por un jovenque, hacia el siglo V a.C., perecióperdido en ella, son algunas pruebasque ayudan a conocer la composi-ción de la indumentaria de estas gen-tes de las montañas, mucho antes dela llegada de los romanos.

Hallazgos de aperos de labran-za, hachas para la madera, clavos,cuchillos, puñales, cadenas, puntasde lanza –todo en hierro-, y adornosde bronce, remiten a trabajos de mi-nería, y de fundición y forja de meta-les. Los mismos puñales y sus vai-nas artísticamente adornadas; los metálicos yadornados broches de cinturón, y las preciosas fí-bulas para sujetar los vestidos, hablan del trabajode artesanos del metal. A su vez, las tumbas queencierran ajuares de guerreros, con restos de lan-zas, escudos y puñales, nos informan de la exis-tencia de militares. Todo ello, en fin, da cuenta deuna sociedad compleja, formada por pastores,agricultores, mineros, ceramistas, artesanos delmetal y temibles guerreros.

DIFICULTADES Y APOYOS Una vez comprobada la existencia de datos ar-

queológicos y etnográficos suficientes para iniciar elproyecto de recreación de un poblado, comenzó labúsqueda de un lugar idóneo para establecerlo, asícomo la localización de las materias primas nece-

sarias. También hubo que conseguirfinanciación para cubrir la mayor par-te de los gastos que se generasenpor la compra y transporte de mate-riales, la adquisición de herramientas,el pago de trabajos de cantería, cerá-mica y madera; y para atender unalarga lista de necesidades, entre lasque figuraba el alojamiento y manu-tención de los voluntarios que, de for-ma rotativa, intervendrían en la cons-trucción de una idea que iba a nece-sitar varios años de trabajo.

Fue preciso confeccionar un de-tallado plan, con muchos textos, di-bujos y medidas de todo el conjunto,explicando las características de lasmurallas, el portón de entrada, las vi-viendas y los cobertizos, así como la

ambientación interior y exterior de las viviendas.El proyecto comprendía varios aspectos, com-

plementarios entre sí. El primero de ellos se cen-traba en la investigación, ya que la tarea de recre-ar un poblado exige una reflexión previa sobrecuál es el grado de conocimientos que se poseensobre la arquitectura de la época, las herramien-tas empleadas, los medios de transporte de losmateriales, los sistemas de sujeción de los ele-mentos constructivos, etcétera, todo lo cual cons-


• La nieve, tan frecuente en los inviernos campurrianos, añade realismo a la recreación de las du-ras condiciones de vida de los primitivos habitantes de Cantabria.

• La existencia de lanzas, escudos y puñalesdemuestra que en los poblados también ha-bitaban guerreros.

• Algunos poblados seedificaban sobre lugaresprominentes, protegidospor murallas de piedra,como la que se hareproducido en el deArgüeso.

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tituye un centro de investigación experi-mental sobre el pasado.

El segundo de los aspectos hace re-ferencia a la divulgación. El poblado esun museo vivo, donde se puede contem-plar el pasado en tres dimensiones, ha-ciéndolo más accesible y comprensibleal gran público.

Por último, aspectos como el turismoy la ecología también se ven implicadosen el proyecto, ya que la iniciativa preten-de mostrar un nuevo modelo de atracciónturística, relacionado con la valoración delmedio rural, la historia y la naturaleza, enel contexto de la España Verde.

La asociación cultural Cantabria An-cestral, con una vertiente dirigida a la ju-ventud, y sin ánimo de lucro, dio respaldoa las exigencias de este propósito. Pron-to se obtuvieron ayudas de personas yentidades que mostraron su apoyo al po-blado. Numerosos representantes delmundo de la arqueología, la historia, lageografía y la antropología; empresas,partidos políticos y Ayuntamientos –como los deEnmedio y Campoo de Suso-; la Junta de Monte Hi-jedo, asociaciones vecinales y organizaciones inte-resadas por la vida armónica con la naturaleza,

grupos ecologistas, personalidades delmundo del arte, de la enseñanza, de losmedios de comunicación, y vecinos delentorno, colaboraron con entusiasmo enel arranque de la idea.

De vital importancia fueron las ayu-das económicas recibidas del ProgramaLeader II de Campoo, Consejería deCultura del Gobierno de Cantabria, Ca-ja Cantabria y Parlamento regional que,gestionadas por la asociación CantabriaAncestral, y con el esfuerzo de losmiembros de la misma, han hecho reali-dad el poblado.

Apoyos y esfuerzos al servicio deuna iniciativa que tiene como objetivosdar a conocer, de manera comprensibley didáctica, las raíces históricas más an-tiguas de Cantabria; crear un clima quepropicie las investigaciones sobre losantiguos cántabros; mostrar un ejemplode turismo alternativo en el medio rural;y potenciar, cultural y económicamente,la comarca de Campoo. ■

*Historiador del proyecto, y presidente de la asocia-ción Cantabria Ancestral durante la construcción delpoblado cántabro.


• Utensilios de la época, enel interior de una de lascasas.

• Los poblados de laderaeran una forma muypopular de asentamiento.


El llamado “culto ala delgadez” ha oca-sionado, principal-mente en las dos últi-mas décadas, un es-pectacular aumento delas consultas médicasprovocadas por los tras-tornos de la conducta ali-mentaria (TCA). La anore-xia y la bulimia se han con-vertido, en la franja de edadentre los 16 y los 40 años, endos patologías muy frecuen-tes, a las que hay que dar unacontundente respuesta. Graciasa la colaboración de Caja Can-tabria, la región cuenta, desde elpasado mes de septiembre, conun moderno Hospital de Día paraTrastornos de la Conducta Alimenta-ria, capaz de prestar una asistenciaintegral y coordinada a parte de los6.000 enfermos de anorexia y bulimia quese calcula existen en Cantabria.

pero no perfectos

�El equipo médico ante el Hospital de Díapara Trastornos de la ConductaAlimentaria. De izquierda a derecha, lospsiquiatras Ismael Lastra y Ana Gómez, yla psicóloga Marián Bedia.

SANTIAGO REGOFotos: ROBERTO RUIZ

delgados

En la sociedad del nuevo siglo no hancambiado los cánones de belleza dela anterior centuria. Los más jóvenesrechazan todo aquello que no sea un

cuerpo delgado y perfecto. Una obsesióncuya frecuencia ha aumentado en los últi-mos años, y que ha dado origen a dostipos de patologías complejas, que requie-ren, en los casos más graves, un abordajeterapéutico intensivo y multidisciplinar porparte de personal sanitario especializado.

Ante este negro panorama estaba cla-ro que los trastornos de la conducta ali-mentaria (TCA) necesitaban, tal y comovenían solicitando años atrás los colecti-vos de familiares de enfermos, un disposi-tivo asistencial de hospitalización parcialpara el tratamiento de pacientes que pre-sentan este tipo de enfermedades, habi-tualmente tratadas en Cantabria por el

Servicio de Psiquiatría del Hospital Uni-versitario Marqués de Valdecilla. El primerhospital de la comunidad continúa contan-do con camas para el internamiento tradi-cional –las veinticuatro horas del día– delos casos más agudos, aunque no conta-ba con instalaciones para los enfermosmenos graves, a quienes no convieneseparar de su medio escolar o familiar.

El nuevo hospital de día, abierto a fina-les del pasado mes de setiembre en laantigua guardería de Caja Cantabria –enel número 1 de la calle Luis Vicente Velas-co, del santanderino barrio de Cazoña– esun ejemplo de colaboración entre institu-ciones públicas y privadas. La Caja hacedido una instalación que cumplió enépocas aún recientes otra importantelabor social; y la Consejería de Sanidad,mediante un concierto con el Centro Hos-

pitalario Padre Menni –especializado ensalud mental-, se encargará de las tareasasistenciales. Además, el Insalud se com-promete, a través del Hospital Valdecilla, arealizar las pruebas diagnósticas, y alinternamiento en el pabellón de Psiquia-tría de los pacientes más graves.

UN PASO INTERMEDIOLas tras instituciones promotoras del

proyecto, pretenden paliar, de esta manera,el problema de enfermos y familiares, yponer fin al peregrinaje de los pacientes deanorexia y bulimia, que hasta ahora teníanque desplazarse de un centro a otro pararecibir tratamiento. Los especialistas ensalud mental recuerdan que cuando se pro-ducía el colapso de pacientes en Valdecilla,los enfermos eran desviados a centrossanitarios de otras provincias cercanas.


�Un edificio cedido por Caja Cantabria, en el número 1 de la calle Luis Vicente de Velasco, de Cazoña, alberga el nuevo hospital de día.


Ahora mismo la situación ha cambia-do de manera radical. Al hospital de díaque opera en Sierrallana, en Torrelavega,hay que unir este de Santander, que fun-ciona de nueve de la mañana a nueve dela noche. Hasta la una del mediodía tra-baja como centro ambulatorio –ya haymás de veinte pacientes en consultasexternas–, y de las 13,00 a las 21,00horas como hospital de día. De lunes aviernes, la instalación cedida por CajaCantabria cumple con todos los requisi-tos para poder atender la demanda de laregión. La Caja, además, tiene la inten-ción de apoyar los programas de divulga-ción del nuevo centro, así como las acti-vidades de docencia e investigación.

El psiquiatra Ismael Lastra, directormédico de Padre Menni y responsable deeste centro de TCA, aclara que un progra-

ma de hospitalización de estas caracterís-ticas está dirigido a personas “con trastor-nos cuya evolución en tratamientos ambu-latorios previos no ha sido la adecuada,pero que presenta una estabilidad médicay emocional que no requiere la hospitali-zación completa”.

Este programa, prosigue el experto,es un paso intermedio entre la hospitali-zación tradicional y el tratamiento ambu-latorio, dado que el internamiento de día–desde la una del mediodía a las nuevede la noche– permite en estos pacientesun nivel mayor de supervisión y estructu-ra en sus patrones alimentarios, y unamayor intensidad en las terapias que seaplican. “El acudir solamente un númerodeterminado de horas al día permite ala persona afectada el mantenimientoparcial de su actividad laboral o escolar,

y de su ambiente socio-familiar”, explicaLastra.

Los objetivos del programa son, tal ycomo refiere Ana Gómez, psiquiatra deeste nuevo centro, la recuperación de pau-tas y hábitos alimentarios normales; favo-recer la adquisición de actitudes positivashacia la alimentación y autoimagen perso-nal; ofrecer estrategias y herramientaspara el mantenimiento de estas actitudes;y prevenir nuevas recaídas. Objetivos,todos ellos, de enorme importancia, por-que, a la luz de las estadísticas referidasal territorio nacional, en Cantabria puedehaber unas 2.000 personas enfermas deanorexia y unas 4.000 de bulimia.

CONTROLAR LAS COMIDASLas cifras asustan, y hay que tomar-

las con prudencia, dice Ana Gómez, a

DOS RAZONES DE PESOLa Real Academia define la

anorexia como “falta anormal deganas de comer”. Por el contra-rio, bulimia se asimila a “hambrecanina”. Dos patologías, apa-rentemente contrapuestas, paraun mismo problema: la obsesiónpor el peso.

La anorexia es un trastornoalimentario que se traduce enun empeño por mantener unpeso por debajo del normalpara la edad y estatura delpaciente. Para ello realiza die-tas, rechaza determinados ali-mentos, y derrocha energía.

Son personas que tienen páni-co a aumentar de talla, y distor-sionan la imagen de su cuerpo,percibiéndose obesos. Ade-más, suelen perder el interéspor las relaciones sociales, ycerca del 25% de los pacientescon anorexia padecen fobias.

Se trata de la tercera enfer-medad más frecuente entre losadolescentes españoles. Lapersona anoréxica pierde hastaun 35% de su peso corporal acausa de esa distorsión de supropia imagen, que le haceluchar contra unos supuestos

kilos de más. El riesgo demuerte aumenta significativa-mente cuando el peso descien-de por debajo del 60% del con-siderado normal; y aunque lasmujeres jóvenes –chicas deentre 14 y 18 años de edad–siguen siendo el colectivo másafectado, los varones, las muje-res maduras, e incluso losmenores de 12 años, comien-zan a sumarse a la lista de víc-timas de esta afección.

La bulimia, por su parte, esun trastorno caracterizado porepisodios frecuentes en los que

el paciente consume grandescantidades de alimentos, e inten-ta evitar la asimilación de los atra-cones mediante el vómito provo-cado, los laxantes y el ayuno.

Su incidencia es cuatroveces mayor que la anorexia, ylos síntomas pueden ser muysutiles, pues las mujeres coneste trastorno lo sufren en secre-to. Los especialistas afirman queentre el 50 y el 60% de los casosllegan a curarse, mientras que enel resto la enfermedad se hacecrónica, y requieren de constan-tes cuidados médicos.

�El centro cuenta con despachos para terapias individuales y con-sultas externas.

�La cocina, donde se preparan las tres comidas diarias que los pa-cientes realizan en el hospital.


pesar de que, según los estudios realiza-dos, entre un uno y un dos por ciento delas mujeres de 16 a 40 años –el picomáximo está entre los 15 y los 25 años–padece anorexia, mientras que la bulimiala sufre un cinco por ciento de la pobla-ción femenina. De ahí el control quesobre las comidas ejercen los especialis-tas, dado que los pacientes comen,meriendan y cenan en el hospital de día.

Un detalle de este control: las cadenasde las cisternas son exteriores a los baños–están situadas en los pasillos y a la vistadel personal médico y de enfermería–, afin de vigilar el vómito de la comida en losenfermos con bulimia.

Las características de estos pacien-tes requieren un entorno más cercanoque un gran hospital, apunta Jesús Artal,psiquiatra y director general de Ordena-

ción y Asistencia Sanitaria. De ahí que laConsejería, con la ayuda del Insalud yde Caja Cantabria, decidiera poner enmarcha un centro estructurado comohospital de día, de carácter multidiscipli-nar, y planteado con una infraestructurapensada para dar cabida a unas relacio-nes estrechas entre médico, paciente yfamilia.

“La práctica clínica ha demostrado quees más positiva la hospitalización de día,pues permite tratar a los pacientes desdeun amplio enfoque interdisciplinar –médi-co-biológico, psicológico, social y preventi-vo-; implica de forma más directa a losfamiliares, respetando la vida autónomadel paciente; y se apoya en las actividadesen grupo. Otra ventaja de la hospitaliza-ción parcial es la economía de costes”,precisa Jesús Artal.

Ismael Lastra, a su vez, comenta que aeste hospital de día sólo se accederámediante un informe de derivación realiza-do por los profesionales de los distintosequipos dedicados a la salud mental enCantabria. Una vez en el centro de Cazo-ña, la evaluación multidisciplinar delpaciente y de su interacción con el entornoes un aspecto prioritario en este programa.“Se realiza una primera evaluación delpaciente, destinada a diseñar su plan indi-vidualizado de tratamiento; y otras evalua-ciones continuadas, cuyo fin es el de valo-rar la progresión, respuesta y eficacia deltratamiento. También se evalúan detallada-mente las dimensiones familiares, socialesy laborales para detectar posibles áreasque necesiten intervenciones más especí-ficas”, afirma el responsable médico delCentro Hospitalario Padre Menni.

�El control de las comidas esesencial para la recuperación deestos enfermos.


APOYO A LAS FAMILIASCon este nuevo centro, Caja Canta-

bria, el Gobierno cántabro y el CentroHospitalario Padre Menni, han demostra-do su sensibilidad ante un problema quepreocupa a la sociedad en su conjunto, yhan respondido, al mismo tiempo, a unavieja demanda de pacientes y familiares,que reclamaban un seguimiento más indi-vidualizado y mayores estructuras de apo-yo entre el hospital y el hogar. “Este hos-pital de día supone un modelo de atenciónmás cercano, no sólo a los pacientes, sinotambién a sus familias, ya que el trata-miento de estas patologías requiere unaestrecha colaboración del entorno familiar.Además de la asistencia a los enfermos,prestamos ayuda y formación al clan fami-liar, que puede llegar a desestructurarsede no recibir el apoyo preciso para hacer

frente al problema”, indica Marián Bedia,psicóloga del moderno centro públicoabierto en Cazoña.

El equipo de especialistas desarrollaráun programa de atención y tratamiento algrupo familiar, que evaluará el entorno delenfermo con el objeto de dar soporte emo-cional a los familiares, mejorar su gradode información y de disponibilidad, fomen-tar su participación activa, e identificar loscasos de disfunción familiar grave querequieran una intervención especial.

Los responsables sanitarios de PadreMenni han diseñado no sólo una estrictaasistencia médica del paciente, junto a unprograma de rehabilitación nutricional ytratamiento de la comorbilidad asociada,sino intervenciones en el ámbito psicológi-co a través de la psicoterapia individual,psicoterapia grupal y psicoeducación.

Otras actividades asistenciales del progra-ma son los grupos de ejercicio supervisa-do –el centro cuenta con un gimnasio-,grupos de expresión artística, grupos derelajación, grupos de padres, actividadesde ocio y ocupacionales, y apoyo psicope-dagógico.

Dotado de un equipo de unas docepersonas, compuesto por psiquiatras, psi-cólogos, endocrinos y personal de enfer-mería especializado, el centro cuenta condespachos para terapias individuales,actividades psicoterapéuticas de grupo,ejercicios físicos, módulos de trabajo conla imagen corporal y masaje terapéutico,sala de estar con televisión, comedor,cocina y servicios. En suma, toda la infra-estructura necesaria para hacer frente auna de las “modas” más tristemente perni-ciosas de nuestro tiempo. ■

�En la sala de relajación sedesarrollan algunas de lasactividades asistenciales delprograma.

Alguien podría sorprenderse al descubrir que un museo, dedicado monográficamente a laconservación de escultura, posee tan importante colección pictórica, tanto en número como en calidad.Pero lo cierto es que la exhibición, en el Centro Cultural Caja Cantabria, de una selección de esa pinaco-teca ha brindado al museo vallisoletano la oportunidad de mostrar la riqueza de esa colección, situada enun puesto destacado dentro de los fondos pictóricos públicos del país. La muestra, expuesta en la Cajadesde el pasado 13 de diciembre hasta el 31 de enero, se compone de 34 obras de los siglos XV al XVIII,algunas de las cuales se exhiben al público por primera vez. Caja Cantabria, a través de un convenio sus-crito con el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, ha patrocinado la restauración de alguna de esaspinturas, contribuyendo así a la conservación y difusión de un valioso patrimonio cultural.

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Pinturas del Mus

El Centro Cultural CajaCantabria muestra unaselección de los fondos

pictóricos del MuseoNacional de Escultura

de Valladolid.

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JESÚS URREA*Fotos: Archivo MUSEO NACIONAL

DE ESCULTURA

La colección del Museo Nacional de Escultura deValladolid posee unas cotas de calidad muy altas,tanto en pintura tardomedieval como en pinturaespañola de los siglos XVI y XVII, así como de laescuela flamenca de este último siglo.

A la escuela hispano-flamenca castellana pertene-cen las soberbias tablas que representan a “San Atana-sio” y “San Luis de Tolosa”, que corresponden a la per-sonalidad agrupada bajo el nombre de Maestro de SanIldefonso, cuya pintura se conserva en el Louvre. Sus fi-guras monumentales, como grandes ídolos sagrados,están concebidas con una elegancia que casi logra ha-cer olvidar la dureza metálica de su apurado dibujo.

De este mismo anónimo maestro se encuentran otrastablas de santos emparejados: “San Pedro y San Pablo”,“Santiago y San Andrés”; mientras que al ahora denomi-nado Maestro de Santa Ana del Museo Nacional de Es-cultura corresponderán las de “Santa Ana Triple” y “SanAntonio de Padua”. Al conocido como Maestro de la co-lección Pacully, estrechamente vinculado con Memling ycon Fernando Gallego, pertenecen las pequeñas tablasde “San Leandro” y “San Isidoro”, fechadas hacia 1500.El conjunto que se ha conservado intacto es el pequeñoretablo procedente del monasterio jerónimo de La Mejo-rada, en Olmedo, realizado por Jorge Inglés hacia 1470,seguramente por encargo de Alonso de Fonseca, conescenas de la vida de San Jerónimo, en las que no es-tán ausentes ni lo anecdótico ni los convencionalismoscompositivos góticos.

Entre los fondos museísticos de pintura del Rena-cimiento se guardan, además de las tablas de Alonso

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Berruguete que habitualmente se hallan integradas en laarquitectura del antiguo retablo de San Benito el Real, deValladolid, unas cuantas tablas del vallisoletano AntonioVázquez, así como cuatro pinturas del denominado Maes-tro de San Antonio.

Espléndida es la “Anunciación”, firmada por el ma-nierista Gregorio Martínez, que la pintó en 1597 para lacapilla funeraria que el banquero Fabio Nelli de Espino-sa se construyó en el convento de San Agustín; y un ad-mirable y bellísimo “Calvario” del flamenco Antonio Moro,pintor del monarca Felipe II, que procede de un conven-to de Medina del Campo.

OBRAS BARROCASLa época barroca posee más amplia representa-

ción, y cuenta con obras de muy diversas escuelas, in-

cluida la local, con alguna de sus más característicascomposiciones. Del florentino Vicente Carducho, de for-mación aún manierista, que residió en Valladolid con laCorte, es la importante composición, por su atrevido es-corzo y colorido, de “San Diego remontando al cielo”,firmada en 1611. La obra procede –junto con la “Estig-matización de San Francisco”, la “Anunciación” y otrosdos lienzos de tema similar pintados por su hermanomayor, Bartolomé– del desaparecido convento francis-cano de San Diego. Recientemente se han montado ensus retablos originales.

De los pintores cortesanos Pantoja de la Cruz y Bar-tolomé González, ambos vallisoletanos, posee el museoexcelentes originales, entre ellos una “Huida a Egipto”muy bien compuesta y plenamente naturalista, firmadapor el segundo, y depositada por el Museo del Prado. La


marcada influencia jordanesca del cuadro de los “Des-posorios de la Virgen”, firmado por el cordobés AntonioPalomino en 1695, sirve para demostrar la gran calidadde la pintura en la Corte de Carlos II.

El flamenco Juan de Roelas pintó en 1616 la “Ale-goría de la Inmaculada Concepción”, para conmemorarla solemne procesión que se celebró en la capital an-daluza en 1615, en homenaje y defensa del dogma in-maculadista. Por Francisco de Zurbarán está firmado elimpresionante e hiperrealista paño de la Verónica conla impresión de la faz de Cristo. De los discípulos gra-nadinos de Alonso Cano, Juan de Sevilla y Pedro Ata-nasio Bocanegra, son la deliciosa “Sagrada Familia”, enla que el Niño parece explicar a sus padres la necesi-dad de su Pasión, y una serie con historias de la vidade la Virgen.

Está previsto reconstruir en el museo la disposiciónoriginal del conjunto pictórico procedente del conventode monjas recoletas de la Concepción de Fuensaldaña(Valladolid), lugar para el que fue regalado por AlonsoPérez de Vivero, conde de Fuensaldaña. Estos impresio-nantes lienzos de la “Estigmatización de San Francisco”,“San Antonio de Padua ascendido al cielo” y la “Asunciónde la Virgen”, encargados entre 1652 y 1654 al pintor fla-menco Willeboirts Bosschaert, discípulo de Van Dyck,constituyen magníficos ejemplos de la alta calidad al-canzada por la escuela de Rubens, al tiempo que ilustranadmirablemente la aparatosidad retórica y refinada de lasensibilidad barroca flamenca.

A la misma escuela pertenece una importante serie depinturas sobre cobre que copian, a través de conocidosgrabados de Bolswert, Wosterman, Pontius, etcétera,

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las naturalezas muertas, de las que existe amplio reper-torio en su cuadro “Encuentro de Santo Domingo y SanFrancisco en el refectorio”.

Al portugués Bartolomé de Cárdenas, pintor del du-que de Lerma y de la ciudad, corresponde la “Disputa deSanto Domingo con los albigenses”, obra en la que de-mostró sus cualidades de buen retratista. Asimismo, delos pintores que trabajaron en la ciudad durante la se-gunda mitad de aquel siglo pueden recordarse los lien-zos de Andrés Amaya (1704) con estrechas conexionescon el mundo madrileño, del que existen igualmenteejemplos muy representativos.

El siglo XVIII pictórico español apenas tiene obrasimportantes en el museo, si se exceptúa un increíble “Bo-

composiciones originales de Rubens, pintadas algunascon un estilo muy afín a los de Van Herp o Willemsen.

ARTISTAS VALLISOLETANOSDe los dos artistas vallisoletanos más destacados de

la primera mitad del siglo XVII son los grandes cuadrosde la “Porciúncula” y el “Milagro del refectorio”. El prime-ro corresponde a Diego Valentín Díaz (1586-1660), dequien se conserva también su mejor cuadro represen-tando la “Sagrada Familia”, para el que se ayudó de ungrabado, como hicieron otros muchos pintores. El segun-do es original de Felipe Gil de Mena (1603-1673). Preci-samente este último pintor estudió en Madrid con el bo-degonista Van der Hamen, de quien tomaría el gusto por


degón” de Luis Meléndez, y dos lienzos religiosos –”Jesús con lasamaritana” y “Jesús con la Magdalena”- que pueden adscribirseal pintor de Corte Antonio González Velázquez. Por último, la co-lección del museo se cierra con varias obras de la segunda mitaddel siglo XIX, originales de José Casado del Alisal –una de ellasel fastuoso y alegórico retrato de la reina Isabel II con su hijo Al-fonso- , o dos vistas de la ciudad de Sevilla, seguramente de Ma-nuel Barrón, así como una divertida historia del Quijote, originalde Miguel Jadraque, artistas con los que se asoma tímidamente ala pintura de comienzos del siglo XX. ■

*Jesús Urrea es el director del Museo Nacional de Escultura de Va-lladolid.

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ANA CONDE

dalla de bronce del mundialcelebrado el pasado año enFrancia. El bicampeón recibióel título de Hijo Predilecto deTorrelavega.

■ El ministro de Fomen-to, Francisco Álvarez Cas-cos, inauguró el tramo de laautovía del Cantábrico en-tre Lamadrid y Unquera.Con 16 kilómetros de longi-tud, el nuevo tramo evita elpaso por San Vicente de laBarquera y los enormes atas-cos que frecuentemente seproducían en dicha travesía.La inversión realizada ha

OCTUBRE

■ Medio millar de perso-nas participaron en lasegunda edición de la Rutadel Emperador Carlos V,que se desarrolló en dos jor-nadas entre la localidad cán-tabra de Laredo y la castella-na de Medina de Pomar. Lainiciativa surgió el pasadoaño, como conmemoracióndel quinto centenario del últi-mo viaje del Monarca haciasu retiro en el monasterio deYuste.

■ La draga Sospan, debandera panameña, querealizaba trabajos de mante-nimiento en la bahía de San-tander, quedó accidental-mente varada en la playa deLas Quebrantas, en Somo.El buque pudo ser reflotadoun día después por un remol-cador.

■ El torrelaveguenseOscar Freire se proclamó,por segunda vez, Campeóndel Mundo de ciclismo defondo en carretera, consi-guiendo la medalla de oro enla prueba disputada en Lis-boa. Este gran éxito se sumaa la anterior medalla de oroobtenida en 1999 en la mis-ma especialidad, y a la me-

ascendido a 15.588 millonesde pesetas.

■ El piloto cántabro Je-sús Puras ganó el Rally deCórcega, logrando su primertriunfo en una prueba puntua-ble para el campeonato mun-dial. Días después, Puras seproclamó campeón de Espa-ña de rallies de tierra, el únicotítulo nacional que faltaba ensu palmarés.

■ El presidente regional,José Joaquín Martínez Sie-so, y el consejero de Cultu-ra, José Antonio Cagigas,inauguraron la Filmoteca de

Cantabria, con la que se harecuperado un espacio cultu-ral histórico, como era el anti-guo cine Bonifaz.

■ Santander despidió elmes con 32,2 grados centí-grados, la máxima tempera-tura registrada en España.El fuerte calor llevó a muchosciudadanos a darse un bañoen las playas, que presenta-ron un aspecto veraniego.

NOVIEMBRE

■ El escritor santanderi-no Alejandro Gándara ganóla XIX edición del PremioHerralde –prestigioso galar-dón de las letras españolasdotado con dos millones depesetas– con el libro “Últimasnoticias de nuestro mundo”,una novela de espías protago-nizada por antiguos agentesde la Alemania del Este.

■ El cántabro PabloSolar se proclamó campeónde España en el II Nacionalde Surf disputado en Llanes(Asturias). La medalla de pla-ta fue para el también cánta-bro Dani García. Ambos repi-tieron las posiciones obte-nidas en las edición del pasa-do año.

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La draga Sospan quedó varada en la playa de Las Quebrantas. Oscar Freire, bicampeón del Mun-do de ciclismo.

El piloto cántabro Jesús Puras ganó el Rally de Córcega.


■ El ministro de la Presi-dencia, Juan José Lucas,fue investido orujero mayoren la tradicional Fiesta delOrujo celebrada en Potes.Numeroso público se dio citaen la capital lebaniega parapresenciar los actos progra-mados.

■ La Casa de Cantabriaen Madrid cumplió veinteaños de existencia y lo cele-bró con diversos actos, a losque asistieron destacadaspersonalidades, entre las quese encontraban el presidentede Cantabria, José JoaquínMartínez Sieso, el presidentedel Parlamento regional,Rafael de la Sierra, y el alcal-de de Madrid, José MaríaÁlvarez del Manzano.

■ Rafael Moneo fue elarquitecto seleccionadopor el Gobierno regionalpara construir la futurasede administrativa dePuertochico. La decisión setomó después de una consul-ta popular sobre los cincoproyectos presentados.

DICIEMBRE

■ El Consejo de Minis-tros aprobó 3.040 millones

de pesetas para construir elfuturo Archivo HistóricoProvincial y la BibliotecaPública Central de Santan-der. El proyecto contemplala rehabilitación del cente-nario edificio que fue depósitode Tabacalera, situado en lacalle Marqués de la Her-mida. El plazo de ejecución delas obras será de tres años.

■ El Ayuntamiento deÁvila concedió el título deHijo Adoptivo al poeta JoséHierro, en reconocimiento asus méritos y su gran vincula-ción a la ciudad castella-na. Durante los últimos años,Hierro ha formado parte deljurado del premio de las letrasTeresa de Ávila, y hace sólounos meses expuso en lacapital abulense una muestrade sus dibujos y pinturas.

■ Miles de cántabrosaccedieron por primera veza la nueva moneda europea.El día 15, bancos y cajas deahorros comenzaron a distri-buir entre los particulares eleuromonedero, una bolsitaque contiene 43 monedascomunitarias, por un valor de12,02 euros. Durante esamañana, las oficinas de CajaCantabria entregaron 30.000euromonederos.

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Las autoridades regionales inauguraron la Filmoteca de Cantabria.

Las playas santanderinas presentaban a finales de octubre un aspectoveraniego.

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El proyecto de Moneo fue el seleccionado para la construcción de la futurasede administrativa del Gobierno regional.


EL PALACIO CAJA CANTABRIA, EN SANTILLANA DEL MAR, ACOGE

UNA MUESTRA SOBRE LA VERTIENTE ARTÍSTICA DE LA METALURGIA

EVELYNE UGAGLIA*Fotos: PEDRO PALAZUELOS y archivos de la exposición

Unas mil obras, pertenecientes a los fondos delMuseo Saint-Raymond de Toulouse, y creadas enel curso de un largo período de la historia delhombre, que va desde los inicios de la utilizacióndel metal (en el III milenio a.C. en Occidente) has-ta el Imperio Romano, han permanecido expues-tas, entre noviembre y enero, en el Palacio deCaja Cantabria, de Santillana del Mar. La mues-tra, estructurada por épocas, ha ofrecido a los vi-sitantes la posibilidad de admirar la voluntad y lacapacidad de aquellas antiguas sociedades paradominar nuevas técnicas, haciendo de la meta-lurgia –a partir de un sorprendente equilibrio fun-cional y formal de los objetos– un auténtico arte.

• Reverso de espejoetrusco en bronce(finales del siglo IVa.C.). Arriba, a laderecha, hacha debronce (1600-1350 a.C.).

La omnipresencia del metal en nuestro entor-no nos hace olvidar que no siempre ha sidoasí. El descubrimiento de los metales –el oroy el cobre en primer lugar-, y el estableci-

miento de las tecnologías necesarias para sus me-talurgias, son acontecimientos fundamentales dela historia de la humanidad. Este hecho permitió nosólo sustituir las materias tradicionales y perece-deras por otras más resistentes y eficaces, sinoque, además, facilitó una acumulación perdurablede bienes que engendró focos de poder, y fuentesde conflictos, trastornando para siempre los refe-rentes económicos y sociales preexistentes.

LA EDAD DE BRONCECuando, hacia el año 2300 a.C. en Europa, se

realiza la aleación del estaño y el cobre por fusión(a unos 1.100º), nace un nuevo metal: el bronce, acuyo nombre los historiadores han asociado lasculturas que contribuyó a generar.

Mucho más resistente que el cobre, el bronceera doblemente apreciado, por la dificultad de reu-nir sus componentes. Si los yacimientos de cobreestaban bastante bien repartidos por el continenteeuropeo, y podían proveer el abastecimiento nece-sario, el estaño –mucho más raro– procedía sobretodo de Cornualles y de Bretaña.

El utillaje fue el primer beneficiario de estasinnovaciones técnicas, pero la expresión creativamás osada halló en él un producto ideal que se pu-so al servicio de la belleza: la joyería acababa denacer. Era necesario defender estas nuevas rique-zas y, por esa razón, la fabricación de armas expe-rimentó un nuevo empuje, y el bronce se convirtió,naturalmente, en su material favorito.

Herramientas y armas.– El hacha es el mar-cador cronológico por excelencia de la Edad deBronce. Las diferencias morfológicas permiten indi-vidualizar diferentes tipos: armoricano, medocano,alpino, lenguadociano, etcétera. El descubrimientoen el Lenguadoc occidental de varios de estos ti-pos, demuestra que la circulación de productosacabados era tan importante como la de las mate-rias primas.

Mientras aparecen otras nuevas herramientas(martillos, azuelas, cuchillos), el hacha de ojo rec-tangular –de origen armonicano– toma, en los in-tercambios, un verdadero valor monetario, atesti-guado por los numerosos depósitos hallados enBretaña y en Normandía, un valor que perduróhasta la Primera Edad del Hierro.

En la colección del Museo Saint-Raymond sólohay armas ofensivas. Los puñales correspondena los tres períodos de la Edad del Bronce. Las es-padas y las puntas de lanza son, sobre todo, pro-ducciones del Bronce Final. Depositadas en latumba de los príncipes, o dentro de las sepulturasde la aristocracia comerciante, las armas estáncargadas con un valor emblemático del poder.

Joyas y ornamentos.– La excepcional co-lección del Museo Saint-Raymond, reunida por Ed-ward Barry, atestigua la voluntad constante de laspoblaciones de la Edad del Bronce de enaltecer labelleza de las mujeres. El metal que se prestaba

mejor, con un precio menor, era el bronce. Su co-lor áureo –actualmente escondido bajo la pátinadel tiempo-, y su ductilidad lo convertían en el ma-terial ideal.

Si, al comienzo del período, las tobilleras y losbrazaletes tienen formas simples y poco variadas,a partir del siglo XV a.C. se diversifican y se con-vierten en el soporte de una rica y variada decora-ción geométrica, perfectamente estructurada y fi-namente grabada, subrayada –en el Bronce Final–con líneas de puntos. En el tobillo se colocan doso tres piezas a la vez, aparejadas y superpuestasen función del tamaño de la pantorrilla. Las debíanllevar desde la adolescencia, a tenor de la estre-chez de la abertura de las piezas que forman lamaravillosa serie de Cimiez. Se producen también,en gran número, collares, anillos, aretes y colgan-tes, al igual que diversos accesorios de los vesti-dos: cinturones de perlas tubulares, botones de or-namentación o agujas para sujetar las telas.

Al final del segundo milenio, paralelamente, losartesanos del bronce inventaron la fíbula, el ante-pasado de nuestra aguja imperdible, en la cual elarco sería el elemento decorativo y creativo. Las fí-bulas de Vienne y de Sainte-Colombe (Isère) sonsoberbios ejemplos de esta nueva pieza.

El depósito: ¿ocultación o ritual?– Los nu-merosos descubrimientos de lotes de piezas halla-dos en plena naturaleza, fuera de cualquier con-texto arqueológico, hacen pensar en cuál debía serla intencionalidad de estos depósitos.

El bronce, de bastante difícil obtención peroelemento esencial de los intercambios, se habíaconvertido en un material precioso, fácilmentetransportable, transformable hasta el infinito, y re-sistente. Era natural, pues, atesorarlo. Esos escon-drijos pueden contener un solo tipo de objetos, ovarios, y su cantidad es muy variable, llegandohasta miles de piezas nuevas o usadas, e inclusomuy usadas o rotas. Los depósitos aparecen en-tonces como reservas de existencias acumuladas,en períodos turbulentos, por un comerciante, unartesano o quizá –incluso– un grupo social.

También es posible que otras preocupacionesrituales o cultuales –como señalar un límite territo-rial o efectuar ofrendas a divinidades del agua o delos pantanos– provocaran esas prácticas. En el de-pósito de Arnave (Ariège-Francia), descubierto ba-jo una roca en 1894, los objetos de bronce se mez-claban con hachas pulidas, cerámica y huesos. Es-tos últimos han desaparecido y, por esa razón, esdifícil averiguar si se trataba de un depósito o deuna sepultura.

LAS CULTURAS DE LA EDAD DEL HIERROEn el transcurso del Bronce Final, los descala-

bros ocasionados en el Oriente Medio por los Pue-blos del Mar invirtieron el panorama económico.Esos pueblos, ricos en minerales ferríferos, desa-rrollaron la explotación de este metal –consideradoprecioso– y, de esta manera, introdujeron en elmercado productos de hierro mucho más resisten-tes. Esa coyuntura, asociada a la escasez del es-taño, y a la importancia de los yacimientos ferrífe-


Puntas de lanza.

Agujas y alfileres de vestimen-ta (Bronce Medio y Final).

Aros de tobillo superpuestos,en bronce, pertenecientes a laserie de Cimiez, en Niza (1350-800 a.C.).

Barca solar (colgante en bron-ce grabado). 1350-800 a.C.

ros en Europa, llevó a los metalúrgicos –hasta en-tonces maestros en el trabajo delbronce– a adaptarse al nuevo metal.

La llegada del hierro no represen-ta tan solo una simple innovación téc-nica. En efecto, su omnipresencia enel subsuelo y el dominio de su ex-plotación impulsaron la auto-nomía de unos pueblos, cu-yo desarrollo ya no de-pendía sobre todo de lascorrientes comerciales; y,paralelamente, impulsaron a otros –como losetruscos– a un primer plano. El hecho de que cos-tase menos que el bronce facilitaba una difusiónmás amplia y más democrática de los productos,sobre todo de las armas y herramientas.

Mientras tanto, el bronce –más maleable– per-manecía como material noble, siempre utilizadopara las joyas, los ornamentos o, también, para lasdecoraciones. En la Primera Edad del Hierro elbronce fue atesorado en escondrijos, mientras queen el Lenguadoc los depósitos llamados launacia-

nos (de Launac, Aude) –con una intencionalidadque continúa siendo misteriosa– reúnen útiles o jo-yas de la época anterior, como el depósito de Arzen Uchentein (Ariège-Francia).

En el transcurso del primer milenio, el hierro seconvirtió en la materia prima más utilizada, inclusopara fabricar joyas y ornamentos, pero su estado

de conservación sólo ha permi-tido salvar el hallazgo cuan-do ha sido restaurado rápi-damente, una práctica poco frecuente en el siglo XIX.De hecho, son raras las pie-zas que han llegado hastanosotros. Además, su as-

pecto provocó el despreciode los coleccionistas, mucho

más atraídos por las pátinas delbronce.

En la cultura de Hallstatt, las for-mas de los brazaletes y tobilleras continúan las dela época precedente. Los primeros tienen tenden-cia a cerrarse, y las segundas a ser huecas y, por


• Objetos de adorno del depósito de Arz, en Uchentein (Ariège-Fran-cia). Primera Edad del Hierro.

• Detalle de un puñal de ante-nas, en hierro, con empuña-dura de bronce. Primera Edaddel Hierro.

• Brazalete. Finales de laPrimera Edad del Hierro.

4700-3000 a.C.• Se colonizan las zonas altas de

Cantabria.3000-2200 a.C.• Desarrollo de una sociedad

campesina, basada en la ganadería.• Menhires de Sejos.2200-1200 a.C.• Plena Edad del Bronce.• Nace una estructura social

jerarquizada.• Desarrollo de la metalurgia.• Espadas de Cueva Llusa de Ogarrio.

1800-700 a.C.• Intercambios comerciales a larga

distancia.• Caldero de Cabárceno.700-18 a.C.• Guerras Cántabras.• Cantabria es conquistada por Roma.18 a.C. - 476 d.C.• Aparición del urbanismo.• Iuliobriga, Portus Victoriae,

Flaviobriga.

Referencias Cronológicas

• Pieza etrusca de freno de caballo,en forma de équido estilizado.Bronce.Siglo VIII a.C.

tanto, más ligeras. Se utiliza un estilo decorativoprácticamente idéntico. A partir del siglo IV a.C.,los collares consisten en una especie de tallo lleno,acabado en un engrosamiento en el cual las mol-duraciones varían hasta el infinito. Incisiones –conformas, grosores y orientación diversas– cubren aveces los vástagos. Con la llegada de los celtas,sobre todo, se produjo una mutación del estilo or-namental, mucho más rico y más flexible. El mun-do vegetal hace su aparición, con meandros y conhojas estilizadas, y muy pronto se mezclan con lasfiguraciones. Relieves o nudosidades animan lastobilleras.

Las fíbulas tienen formas múltiples y, por tanto,revelan las modas y las culturas que las produje-ron. Las de la Primera Edad del Hierro manifiestanuna imaginación mucho más fértil que las siguien-tes.

LOS ETRUSCOS Y EL METALLos etruscos poseían la escritura y tenían su

propio alfabeto, hecho que los distingue de los pro-tagonistas de las culturas protohistóricas. El hom-

bre estaba en el centro de sus preocupaciones es-pirituales, y los temas religiosos ocupaban un lugarpreeminente en la vida. A pesar de tener un grandominio en la fabricación de la terracota, los etrus-cos preferían el metal para las representaciones fi-guradas de los dioses, héroes y otros símbolos desus creencias. En la época arcaica, las figuritas delbóvido y del guerrero a menudo van asociadas adiversos depósitos votivos. Uno sustituye la ofren-da real, y el segundo simboliza el donante en supapel social de defensor de la comunidad.

A finales del siglo VI y comienzos del V a.C., lasimplificación de la estructura del cuerpo y su es-quematización extrema caracterizan muchas delas producciones. Turán –la Afrodita etrusca-, cu-bierta con el tutulus, es emblemática de este esti-lo. Eso también es válido para Herclé, el Hérculesetrusco, que empuña la maza y lleva la piel delleón –muy estilizada– colgando del brazo.

La religión etrusca estaba basada en una re-velación, fundamento de la Etrusca disciplina,consignada en libros. Los libri haruspicini –librosde la haruspicina, ciencia adivinatoria a partir del


• Sala dedicada a los etruscos.

• Fíbula en bronce, de arcoserpentiforme y doble resorte.Vienne (Isère-Francia).Siglo X a.C.

examen del hígado de lasvíctimas animales sacrifi-cadas– son los más im-portantes. El grabado delespejo etrusco de la co-lección da testimonio deello.

LOS ROMANOSY EL METAL

La fuerza de los ro-manos no se basaba tan-to en la hegemonía esta-blecida sobre Italia, Gre-cia y otros territorios dela Europa Occidental co-mo en su capacidad deintegración de las civili-zaciones conquistadas.Los etruscos, los grie-gos, los iberos y los ga-los habían desarrolladolas técnicas de extracción yde tratamiento de mineralesexplotados hasta entonces, y tení-an perfectamente afinados los diversosprocedimientos de fabricación de objetos enmetal. A pesar de todo, sin ser un pueblo me-talúrgico, los romanos generalizaron innova-ciones técnicas que perduraron hasta la épo-ca moderna.

Además de la puesta a punto de nuevossistemas de aprovechamiento de los filonespara aumentar su rentabilidad, su acción sedirigió a la eliminación de las aguas subte-rráneas que limitaban la explotación de losyacimientos. Así, generalizaron las excava-ciones de galerías de evacuación, y tuvie-ron el talento de adaptar a las técnicas mi-neras los mecanismos helenísticos conce-bidos para el riego: la rueda hidráulica y eltornillo de Arquímedes, utilizado por losgalos desde el siglo V a.C. en las minasde oro de Limoges (Occitania). Con laextracción del agua desde una gran pro-fundidad (hasta más de 200 metros dela superficie) podían acceder a los es-tratos mineralizados.

La utilización sistemática del aceropara las herramientas, el armamento yla carretería hacían necesaria la aper-tura de nuevas minas, en particularen Hispania y en la Galia: el yaci-miento de Les Martys, en el Aude, esun buen ejemplo.

El bronce era el metal predilectopara confeccionar una gran canti-dad de utensilios en todas lasáreas, como muestra muy bien es-ta colección. Si los griegos habíandesarrollado la estatuaria debronce, los romanos le dieron unempuje sin precedentes. Con todo,no se han conservado demasiadas

obras de gran formato pero, en cambio, sí que hanllegado hasta nosotros pequeñas estatuas, votivasu ornamentales, distribuidas por todo el imperio, delas cuales el Museo Saint-Raymond conserva bas-tantes ejemplares.

El bronce: material de lo cotidiano.– Lagran variedad de objetos o pequeñas herra-

mientas especializadas de los primeros si-glos de nuestra era que han llegado hastanosotros, demuestran claramente la omni-presencia del metal en el mundo romano.Las colecciones del Museo Saint-Ray-mond permiten documentar muchos ám-bitos de actividad: la medicina, ilustrada

por los instrumentos que servían pa-ra la fabricación de medicamen-

tos-; el comercio, donde to-dos, desde el vendedor

de semillas hastael joyero, utili-

zaban un

mode-lo propio

de balan-za; la escritu-

ra, con estiletes,utilizados para escribir en las tabli-llas de cera, y sellos, para marcarla propiedad, etcétera. Los utensi-lios domésticos se hallan igual-mente representados: agujas ydedales de coser, vajillas, lámpa-ras de aceite que reflejan los sis-temas de iluminación… El inte-rés de los coleccionistas se am-plió también hacia las llaves,tan típicas de las preocupacio-nes de los romanos. Este obje-to, a priori banal, parece quetenía un valor simbólico –ex-presaba el poder de los dio-ses-, y social: el día de la bo-

da el marido confiaba a suesposa el juego de llaves

de la vivienda (este ges-to solemne la convertíaen dueña de la casa).

Objetos como lasespátulas, las agujas

• Figura etrusca de broncerepresentando a Herclé.Siglos VI-V a.C.


• Remate de grifo, enbronce y plata, decoradocon un cisne alisándoselas plumas (Alto Imperio).

• Aplique con forma de diosa, en broncemoldeado y dorado. Siglo I d.C.

• Llave de broncede la épocaromana.

• Objetos parael aseo en plata moldeada,descubiertos en elanfiteatro romano de Rodez(Aveyron-Francia).

• Imagen de Turan en broncelaminado y grabado.Finales del sigloVI-principios del V a.C.

• “Signum pantheum”,amuleto romano para atraerla fortuna y la felicidad.Siglo I d. C.

para el cabello, las pinzas de depilaro los estrígilos, tienen relación con eltocador y revelan la importancia dela higiene entre los romanos, que sepasaban varias horas al día en lastermas. El accesorio más importantepara el vestido es la fíbula, de la cualEdward Barry supo reunir una serie im-presionante. A partir de esta colecciónpodemos juzgar las modas y el refina-miento del atavío de los romanos.

Bronces figurados.– En los últimos si-glos de la Edad del Bronce aparece latécnica de la cera perdida, que permitíarealizar en bronce casi todo, desde lapieza más sencilla a la más complicada.Como los griegos y los etruscos, los ro-manos fabricaron también en este mate-rial un gran número de pequeñas figuras yde estatuas, representando personajes o ani-males.

El vasto panteón de los romanos se basa-ba en el de los griegos. Por esta razón, en unprimer momento, las efigies de los diosesse inspiraban en modelos helenos. Con eltiempo, sin embargo, se fueron diferen-ciando de los originales. Estas figurillas

eran exvotos para los templos, o estatuillaspara los lararios familiares, donde los dio-ses del Olimpo se acercaban a los ante-pasados divinizados.

Ampliamente difundidas por todo el Im-perio, algunas parecen corresponder a unaproducción en serie, casi industrial, que con-tradice la técnica de la cera perdida. Enefecto, ésta implicaba romper el molde des-pués del vaciado. Los talleres eran múltiples,y dispersos, y muchos broncistas indepen-

dientes circulaban de ciudad en ciudad.Los pequeños personajes, al igual que los

animales, adornaban también los objetos de lavida cotidiana. Ornamentaban a menudo los po-

mos, mangos o tiradores (de muebles, llaves,cortaplumas), las asas de los recipientes o las pa-tas de la mesa o de la cama. Las figuraciones de

animales han podido tener, a veces,una connotación religiosa, pero és-

ta es muy difícil de percibir hoyen día. ■

*Evelyne Ugaglia es la comisa-ria de la muestra “Las artes delmetal”.


• Colección de llaves y elementos de cerraduras de la época romana. • Cabeza de candelabro, con figura de pantera. Época romana.

• Esclavo nubio sentado sobre una madriguera de la queasoma un conejo. Bronce de la época romana.


ESCENAS CÁNTABRAS:APUNTES DEL NATURALHermilio Alcalde del RíoEdita: “Cantabria Tradicional”, con lacolaboración del Gobierno de Can-tabria, Ayuntamiento de Torrelavegay Caja Cantabria.447 páginas. Ilustrado

Casi tres cuartos de siglo tieneeste libro, ahora reeditado dentro dela colección “Cuentos y Cuentistasde Cantabria”, que narra abundan-tes tradiciones de la región, con unvocabulario de términos usado des-de antaño, y unas bellas ilustracio-

nes de Andy. El trabajo de Alcaldedel Río, introducido en esta ediciónpor Mauro Muriedas, presenta esce-nas cántabras populares, nuestrahabla peculiar y bella, situacionescuriosas y jocosas, cómo transcurríala vida terrena en tiempos lejanosdentro de la actual región norteña,las canciones de los romeros, laboda de Gorio con Ción a orillas delrío Nansa, o la celebración de LaMaya a orillas del Besaya.

El libro contiene, además, otrasescenas cántabras populares,como la comida especial en día deboda, las romerías de los pueblos,

las partidas de bolos, la recogidade las castañas, la celebración dela Virgen de la Luz, o las frías jor-nadas de cellisca. Todo ello relata-do y dibujado con mano maestra, através de una literatura entretejidade versos, giros propios, tradicionesantiguas ya prácticamente desapa-recidas, y no escasa sorna. Ensuma, el retrato fiel de ese ambien-te del campo montañés, hoy supe-rado para bien. Un clásico de la lite-ratura cántabra, que deja un regus-to agridulce al lector tras habersesumergido con ganas en esta mag-nífica pieza del ayer.

DEL TIEMPO Y EL RETORNO.Poesía reunida, 1967-2000Javier ElorrietaEditorial Límite, con el patrociniode Caja Cantabria. Colección deLibros La Ortiga.291 páginas

Este poemario de Elorrieta con-tiene política, artes plásticas, acrós-ticos a tres mujeres, cancioncillas,la fugacidad de una belleza femeni-

na más adivinada que vista en eseviaje en tren, las palabras y losecos, los jirones biográficos delautor... El amor es una constante,que reúne otros libros anteriores,ahora agavillados en un volumenque repasa 33 años de intensadedicación lírica de un autor queposee voz propia en el panoramaliterario español desde hace tiem-po, en donde es reconocido comoun excelente creador.

En este volumen el lector ten-drá ocasión de saborear esos ver-sos llenos de vida, que navegan enlos distintos avatares existencialesde Elorrieta -caso del periodismo yla política-, el valor de la amistad ola forja de esperanzas. Una buenamanera de acercarse a un género,siempre minoritario, aquí estrelladode frescura, pensamiento y comu-nicabilidad.

LAS CUEVAS DEL VALLEDE VILLAESCUSAMariano Luis Serna, ÁngelesValle y Fernando ObregónEdita: Asociación para la Defensadel Patrimonio de Villaescusa.256 páginas. Ilustrado

El detenido estudio del mediofísico, además del geológico ehidrográfico, está permitiendoconocer la correcta ubicación delas cavidades naturales y laimportancia de los hallazgos que

contienen, así como la formacióny evolución de muchas cuevas.Gracias a ello vamos sabiendocada vez más sobre la rica histo-ria de las cuevas del términomunicipal de Villaescusa, en don-de los investigadores han encon-trado hermosísimas formacionesnaturales, galerías sorprendentes,asombrosos ríos subterráneos,restos de vida humana y valiosomaterial arqueológico.

Pero el trabajo, prologado porBenito Madariaga, también refle-

ja el lado amargo del patrimoniocultural en forma de actos vandá-licos, furtivismo y conductas lesi-vas para el legado histórico yartístico. Es una obra, que dudacabe, relevante, que llega a nues-tras manos en una preciosa edi-ción, enriquecida con ilustracio-nes a todo color, y que se com-plementa con un inventario sobrecada una de las 107 cavidadesque conforman el rico patrimoniosubterráneo de este municipiocántabro.

FRANCISCO REVUELTA HATUEY

ALFONSO I EL CÁNTABROIsidro Rodríguez CastanedoEdición del autor, con la colabora-ción de Caja Cantabria.191 páginas

De un tiempo a esta parte laintrahistoria de Cantabria cada vezes más conocida y estudiada desdemuy diversas perspectivas científi-cas, un extremo muy positivo paradivulgar entre la población todo

cuanto aconteció siglos atrás. Porello damos la bienvenida a este libroque, de manera novelada, pretendeacercarnos a aquel Alfonso I, señordel territorio cántabro que matrimo-nió con Ermesinda, hija de Pelayo.Con alguna que otra licencia históri-ca, se nos va ofreciendo tan intere-sante relato: la invasión musulmana,Don Pelayo, la Reconquista, losenfrentamientos y las cabalgadas, lapenetración religiosa en aquellas

tierras, y la relación entre Alfonso yErmesinda. Sin olvidar, claro, otrosaspectos relacionados con la mar,los paisajes rurales, la mezcla de lalengua romana y la cántabra, lascacerías del jabalí, o el papel deAlfonso como maestro en el uso dela espada.

En definitiva, un buen intentonovelado de aproximar, al no exper-to, la historia interna de la Canta-bria del siglo VIII.


BENITO MADARIAGA

OCTUBRE

– Leopoldo Frégoli actúa en el teatrode la ciudad interpretando los cua-dros “El relámpago y “El dorado”, enlos que realizaba transformacionesque eran recibidas por el público congrandes aplausos. Frégoli llegó arepresentar en el escenario hasta adiez personajes.– Toma posesión de su cargo el nue-vo alcalde, Joaquín Presmanes.– Los tripulantes de la lancha “So-corro” prestan auxilio a sus compa-ñeros de la “Modesta”, que naufragóa la altura de Cabo Mayor.– El alcalde visita el edificio habilita-do para albergar a chicos abandona-dos en las calles.– La compañía ostrícola de Santan-der pone a la venta su mercancía. Seanuncian servicios a domicilio.– Se edita el tomo VII de las “Pacoti-llas”, composiciones humorísticas deJosé Estrañi.– Llegan a Santander numerososmuchachos procedentes de Asturias,

y del resto de la provincia, paraembarcarse como emigrantes, condestino a América, en el vapor “Alfon-so XII”.– El día 15 se inauguran, en la calleRuamayor, las instalaciones delMonte de Piedad de Alfonso XIII yCaja de Ahorros de Santander, quepasan a funcionar como sucursal dela oficina de la calle Pedrueca.– La cuadrilla del diestro Mazantinise embarca para México con el jovenDarío de Díez Limiñana, novillero de21 años, natural de Santander.

NOVIEMBRE

– Huelga de fogoneros y paleros delvapor “Alfonso XIII”, que tambiénsecundan los de la compañía Trasa-tlántica, en reivindicación de susderechos laborables.– Mitin público, organizado por lacomisión electoral y agrupaciónsocialista, en el Centro Obrero de lacalle de las Ánimas número 12.

– Entra accidentado en el puerto el bu-que “Pilar”, de 393 toneladas y 13 tri-pulantes. Los desperfectos del barco,que embarrancó, lo dejaron inutilizado,y obligaron a su posterior subasta.– Se anuncia la circulación de bille-tes falsos del Banco de España, de50 pesetas, emisión de 1899 con elbusto de Quevedo. El periódico deEstrañi comentaba: “¿De Queve-do?… pues ya sé quién es el falsifi-cador: ¡el conde-duque de Olivares!”.

DICIEMBRE

– El doctor José Cano Quintanillarecibe el encargo de buscar en laprovincia un ama de cría para el nue-vo infante. La elegida fue OctaviaFernández, del pueblo de Saro.– La Guardia Civil vigila la velocidadde los automóviles, para evitar queexceda de 29 kilómetros por hora, enlos particulares, y 28 en los de servi-cio público. Este límite debía reducir-se en las travesías de los pueblos.

– Se instaura la Fiesta del Árbol entoda la provincia.– Anuncian la inauguración, en San-tander, de la sociedad cooperativa deconsumo “La Conveniente”.– Debido al temporal naufraga elvapor “Universal”, en el que perecie-ron tres tripulantes.– Gracias a una orden del alcalde,los reclusos de la cárcel dispusieronen los dormitorios de jergones paralos duros camastros.– Reunión del gobernador civil conel comandante de Marina, el ingenie-ro jefe de Obras Públicas, y los natu-ralistas José Escalante y AugustoGonzález de Linares, para debatir elproblema suscitado por los sedimen-tos de minerales en la bahía.– Es capturado Andrés Cobo Bar-quín, alias El Maruyo, tratante pasie-go fugitivo, que mató en 1898 a sucompañero Norberto Gómez, aliasSecadía.– El Monte de Piedad abre otra su-cursal en la calle de los Remedios,de Santander. ■

Autobús de Villacarriedo a Santander. Cooperativa “La Conveniente”.

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Los automóviles de servicio público no puedencircular a más de 28 kilómetros por hora

• Se inaugura “La Conveniente”


ENRIQUE BOLADOFoto: CELEDONIO

Desde que, hace casi 25 años,el Aula de Cultura de CajaCantabria pusiera en marchasu programación estable, el

cine ha ocupado un lugar esencialentre sus actividades. En la década delos ochenta, los ciclos monográficosque durante una semana se celebra-ban en el cine Kostka, y más tarde enel Centro Cultural de la Caja, se con-virtieron en un acontecimiento para losaficionados.

Por su variedad y calidad, esosciclos han supuesto todo un hito en lahistoria de la exhibición cinematográfi-ca de la región. Directores, actores,movimientos…, fueron protagonistasde estas series temáticas. Así, pode-mos recordar las dedicadas a la obracompleta de Eisenstein, John Ford,Gary Cooper, la Fox, el expresionismoalemán, el cine de vanguardia de losaños 20, Griffith, el cine negro o el deaventuras.

El cine en Caja Cantabria iniciaahora una nueva época. En primerlugar se ha reformado la sala de pro-yección del Centro Cultural, para dotar-la de los más modernos adelantos téc-nicos. La instalación de una pantallanueva, de un equipo de sonido Dolby, yde un nuevo proyector, son algunas delas mejoras incorporadas. De estamanera se consigue que la calidad delas proyecciones sea perfecta y, al ade-lantarse la pantalla, se ha reducido ladistancia con los espectadores.

Como consecuencia de estasnovedades Caja Cantabria ha poten-ciado su programación de cine. Elobjetivo es cubrir el hueco que puedaexistir en este campo, de acuerdo conla política cultural de la Caja que con-siste en satisfacer demandas pocoatendidas por otros programas; y,además, procurar la participación delespectador, a través del debate. Paraello, la proyección de los filmes estáprecedida por una presentación, yseguida de un coloquio, de tal formaque se aclaren los diferentes aspec-tos de forma y fondo que constituyenuna película.

El Cine-Estudio de la Caja se inicióen octubre de 2001, y está estructuradoen cuatro secciones: “Escrito sobrecine”, “Abierto en documental”, “Dirigidopor” y “Producción Española”. En losdos primeros meses se ofrecieron pelí-culas como “Visionarios”, “M. El vampi-ro de Düsseldorf”, “La espalda del mun-

do”, “Bilbao”, o “Extranjeros de sí mis-mos”, que fueron presentadas pordirectores como Luis García Berlanga,Pablo Llorca o Javier Corcuera, y críti-cos como Juan Cobos, Eduardo Torres-Dulce o Miguel Juan Payan.

Para el futuro, y tras la apertura deuna Filmoteca pública en la región,que cubrirá campos hasta ahora pocoatendidos por los circuitos comercia-les, la Caja ha optado nuevamente poracoger otras opciones más diferencia-das, especializándose en el documen-tal, ya que los responsables de la pro-gramación de Caja Cantabria opinanque es el momento de aprovechar elauge de este género.

Como consecuencia de la deman-da del público y de las ayudas de lastelevisiones, el documental está vivien-do en estos momentos una época dora-da. Prueba de ello son los premiosobtenidos recientemente por varias pro-ducciones y el éxito de taquilla conse-guido en cines comerciales; así como la

apertura, por primera vez en España,de dos salas especializadas –una enMadrid y otra en Barcelona– dedicadasen exclusiva a este género.

Además, dentro de ese cambio derumbo, e inscrito en el convenio que laCaja ha firmado con el Círculo deBellas Artes, se realizarán tambiénotras actividades cinematográficas. Delmismo modo, los responsables cultura-les de Caja Cantabria anuncian sudeseo de volcarse con el cine infantil,para lo cual van a diseñar un modeloespecífico de programación.

Igualmente, y con el propósito deinsistir en los aspectos didácticos delcine, se ofrecerá, durante el primer tri-mestre de 2002, un Taller de Cine que,con el título “¿Qué es una película?”, ydirigido por Paulino Viota, acercará alos jóvenes al proceso creativo cine-matográfico, mostrando cómo desdeuna idea inicial se desarrollan todoslos aspectos, teóricos y prácticos, deuna producción. ■

Luis García Berlanga ante el Centro Cultu-ral Caja Cantabria, donde intervino enun coloquio del ciclo Cine-Estudio progra-mado por la entidad de ahorro.la Caja

con el cine

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Caja Cantabria ha asumido elreto que representa la transi-ción al euro con el compromi-so y la responsabilidad que

supone su condición de entidadfinanciera líder de la región. Tanto enlos inicios como en las sucesivas eta-pas de todo el complejo proceso, laCaja ha acompañado a sus clientes,procurando crear un clima de con-fianza, seguridad y apoyo.

Para ello, la entidad ha puesto enmarcha, desde 1997, en que se creóel Equipo Coordinador del Euro,una serie de iniciativas, con el fin deproporcionar a todos los sectores dela sociedad cántabra una completainformación y asesoramiento sobre elcambio monetario.

El proceso le ha supuesto a CajaCantabria un gasto de unos 850millones de pesetas, invertidos enadaptación tecnológica, formación ycomunicación. Pero, por una vez, laCaja ha preferido no mirar los costes,y volcarse en prestar un eficaz servicioa sus clientes, más que en optimizarsus índices de eficiencia.

La entidad, en colaboración conAyuntamientos, cámaras de comer-cio, centros educativos, asociacionesy colectivos profesionales ha impartido más de 200 charlas-con-ferencia, a las que han asistido unas 15.000 personas.

La Caja ha visitado también más de un centenar de centroseducativos, donde los alumnos han tenido acceso al material de

la entidad, que se compone de colec-ciones de fichas, pósters, reglas,separadores, chuletarios de conver-sión, trípticos, carpetas, boletines...,y una gran diversidad de impresosinformativos.

Dentro de su campaña de divulga-ción, la Caja ha repartido entre sus clien-tes 250.000 tarjetas conversoras,75.000 euroconversores y 5.000 calcu-ladoras; y ha editado, además, abun-dante material gráfico para ilustrar sulabor.

El plan de comunicación ha incluidouna serie de publicaciones específi-cas, de las que se han distribuidomás de un millón de ejemplares. “Eleuro y el comercio” y “El euro y laspymes” son algunos de los títulos deesas guías, editadas por Caja Canta-bria para facilitar a los comerciantes y alas pequeñas y medianas empresas elproceso de adaptación a la moneda úni-ca europea.

Informes; fichas coleccionablesde información básica para las familias;boletines periódicos; carteles y folle-tos con los nuevos billetes y monedas;publicaciones sobre normas deseguridad para los usuarios; vídeos;un servicio telefónico de euroconsul-

tas; una página web; y la asistencia de un equipo de expertospara prestar asesoramiento especializado a los clientes que loprecisen, son algunas de las acciones que la Caja ha puesto enmarcha para contribuir a un cambio progresivo y no traumático.

Los directores de Administración y Medios, Negocio, Desarrollo Comercial y Marketing de Caja Cantabria en la presentación de las últimas estrategiaspara la transición al euro.

La Caja

Uno de los rincones de euroconsultas instalados en las oficinas.

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Fotos: JOSÉ MIGUEL DEL CAMPO

y el €uro

“La Revista de Cantabria”, publicación editada trimestral-mente por la entidad, también dedicó su “Rincón de Economía”a la moneda europea, y sirvió de soporte para la entrega de mate-rial divulgativo.

Pero, sobre todo, la relación directa y personal con losclientes, a través de las 144 oficinas de la red, ha sido funda-mental en todas las fases. En esta última etapa, la Caja ha refor-zado su apoyo a todo el proceso de cambio instalando en las ofi-cinas puestos de información personalizada, eurorincones y

euroventanillas. Además, ha implantado el Servicio de Aten-ción Euro 60 Plus, dirigido a los clientes que tengan domiciliadasu pensión en la entidad.

La apertura de oficinas el 15 de diciembre para facilitar laadquisición de euromonederos, y el día 1 de enero, para obtenerlos primeros billetes; y la rápida adaptación de la red de cajerosautomáticos a la nueva moneda, son otras de las medidasimpulsadas por la Caja para apoyar a las autoridades monetariasy a sus clientes.

Parte del material sobre el euro distribuido por la Caja.

La asistencia a las charlas organizadas por la entidad ha sido muy numerosa.

caja cantabria el poblado cántabro de argüeso...caja cantabria ha cedido el edificio que ocupaba...

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