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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173.

BOLETÍN DEL ARCHIVO

TOMO XI ENERO-JUNIO 2009 Nº 31

ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA


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BOLETÍN DEL ARCHIVO ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA

Depósito Legalpp 87-0310

ISSN 1316-9173

Portada Lema latino de la portada: Virtus semina fortunae geminat cum tempore.Traducción: la virtud hace germinar con el tiempo, las semillas de la fortuna.

El fotograbado de la portada del Boletín ilustra la primera página impresa de la obrade Agustín Barbosa, Summa apostolicarum decisionum (Suma de decisiones apos-tólicas), en su primera edición publicada en Lyon en 1645, que se conserva en laBiblioteca del AAM, cota X KJA 2002, B 37su, 1645.

Barbosa, Agustín (1590-1649): Prelado y jurisconsulto portugués, obispo de Ugento,en el reino de Nápoles. Sus obras más sobresalientes fueron en el campo del derechoy se publicaron completas en Lyon, en 16 tomos a partir de 1712.

DiseñoAna Hilda Duque

Raquel E. Morales S.

DiagramaciónRaquel E. Morales S.

Arte finalUnidad de Informática del Archivo Arquidiocesano de Mérida

DirecciónArchivo Arquidiocesano de Mérida. Palacio Arzobispal. Av. 4 . Esq. Calle 23.Apartado 26. Mérida 5101-A. Teléfonos (0274) 2524307-2525786. Fax: 2521238.Mérida-Venezuela. Correo electrónico: [email protected] / [email protected]: www.arquidiocesisdemerida.org.ve

IndizaciónREVENCYT (Revistas Venezolanas de Ciencia y Tecnología), código RVB005.CLASE (Citas Latinoamericanas en Ciencias Sociales y Humanidades). MéxicoLATINDEX México. Código 15600. Aceptada en el acervo REDALYC (Red deRevistas Científicas de América Latina y el Caribe).

IMPRESO EN VENEZUELA/PRINTED IN VENEZUELAARCHIVO ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA-AAM

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AUTORIDADES DE LA ARQUIDIÓCESIS DE MÉRIDA

Arzobispo Metropolitano de MéridaExcmo. Mons. Baltazar Enrique Porras Cardozo

Obispo AuxiliarExcmo. Mons. Luis Alfonso Márquez Molina

Vicario GeneralIlmo. Mons. Alfredo Torres Rondón

Canciller-SecretariaHna. Faustina Hernando

Rector del Seminario San Buenaventura de MéridaPbro. Lic. Alexander Rivera Vielma

BOLETÍN DEL ARCHIVO ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA.

Directora-EditoraAna Hilda Duque

Personal Administrativo del ArchivoRaquel E. Morales SotoLourdes Rangel AltuveMayelis Moreno Castillo

Personal Administrativo del MuseoJhonny Barrios BarriosZulay Villasmil Vielma

ENTES FINANCIEROS

Arquidiócesis de MéridaFundación Archivo Arquidiocesano Padre Luis Eduardo CardonaFundación Museo Arquidiocesano de Mérida


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EDITOR/FUNDADORMons. Baltazar E. Porras Cardozo

DIRECTORA/EDITORAAna Hilda Duque

COMITÉ EDITORIALMons. Baltazar E. Porras Cardozo

Ana Hilda Duque

COMITÉ DE ARBITRAJEMons. Baltazar E. Porras Cardozo

Pontificia Comisión de Bienes Culturales de la Iglesia. Roma-ItaliaMons. Pedro Rubio Merino

Canónigo Archivero de la Catedral de Sevilla-EspañaPbro. Dr. Manuel Nieto Cumplido

Archivero de la Diócesis de Córdoba-EspañaLaureano Rodríguez Liáñez

Universidad de Sevilla-EspañaAna Hilda Duque

Archivo Arquidiocesano de Mérida-VenezuelaCatalina Torres Díaz

Escuela de Letras. Universidad de Los Andes. Mérida-VenezuelaNiria Suárez

Escuela de Educación. Universidad de Los Andes. Mérida-VenezuelaOneiver Arturo Araque

Dirección de Auntos Profesorales. Universidad de Los Andes. Mérida-Venezuela

TRADUCCIÓN DE RESÚMENES AL INGLÉSBlanca Calvet Águila

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SUMARIO

EL ARCHIVO

Proyectos de Investigación

Organización, inventario y catalogación de la Sección 56 Seminariosdel Archivo Arquidiocesano de Mérida-AAM.............................

Informes

Estadística de Investigadores del Archivo Arquidiocesano deMérida-AAM. 2002-2008.

Raquel Morales Soto................................................................

INVENTARIOS, GUÍAS, ÍNDICES,CATÁLOGOS, RESÚMENES

Lista de sacerdotes que regentaron la Parroquia Inmaculada Con-cepción de Mucurubá 1698-1990.

Elizabeth Zambrano..............................................................

DOCUMENTOS

Informe sobre el Hospital San Rafael de Santa Ana de Coro (1676-1787). Transcripción y comentario.

1787, febrero 10. Mérida / 1787, octubre 4. Coro.Informe solicitado por Fray Juan Ramos de Lora, Obispo de laDiócesis de Mérida de Maracaibo al Pbro. Br. Juan FranciscoVarela, Vicario Foráneo Juez Eclesiástico de Coro sobre loshospitales existentes en esta Vicaría. Solicita información sobrelas rentas, estado de su estructura, número de camas y enfermosque se atienden, así como las formalidades, fundamentos y personasque intervinieron en su erección.

AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; 24 ff.

Silvia Andrades Grassi..........................................................

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TRABAJOS, ARTÍCULOS

Hospitales coloniales de la Diócesis de Mérida: El Hospital SanRafael de Santa Ana de Coro en los documentos del ArchivoArquidiocesano de Mérida-AAM.

María Elena Puentes y Rosalina Mendoza.............................

La mirada compleja a la igualdad: un ensayo sobre las metodologíasde la igualdad en el derecho contemporáneo.

Román Rodríguez Salón.........................................................

EL MUSEOProyectos de Investigación

Guía didáctica del Museo Arquidiocesano de Mérida -MAMSG-.Sagrarios.................................................................................

INVENTARIOS, GUÍAS, ÍNDICES,

CATÁLOGOS, RESÚMENES

Ingreso de piezas a la colección del Museo Arquidiocesano deMérida, enero-junio 2009............................................................

DOCUMENTOS

1909, agosto 10. Mérida.

Pastoral de Mons. Antonio Ramón Silva Obispo de la Diócesis deMérida, sobre el perfil del Museo, el Decreto de creación, laformación del libro sobre el Patriotismo del clero de la Diócesis deMérida y contribuciones económicas y de objetos para el Museo.(Manuscrito original).

AAM. Sección 45 B Libros Varios. Libro Curia Museo (1909 -932), pp. 3-8..............................................................................

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Historia, oro y barroco: Iglesia de Nuestra Señora del Rosario deCasigua, estado Falcón.

Blanca de Lima.......................................................................

Homilía en los 50 años del Instituto de Geografía de la Universidadde Los Andes-ULA.

Excmo. Mons. Baltazar E. Porras Cardozo...............................

EXPOSICIONESCuraduría-Museografía de la exposición Instituto de Geografía yConservación de Recursos Naturales. 50 años de Historia.

Rebeca Pérez Arriaga y Ana Hilda Duque.................................

CRÓNICAS, EVENTOS, NOTICIASNota de prensa. Exposición Instituto de Geografía y Conservaciónde los Recursos Naturales. 50 años de historia. MuseoArquidiocesano de Mérida, marzo-junio 2009.

Rebeca Pérez Arriaga.............................................................

Presentación del libro Cuentas de una Devoción. Manuscritode la Cofradía de Nuestra Señora de la Consolación de Táriba1788-1803. Autora: Ana Hilda Duque. Seccional de Jubilados dela Universidad de Los Andes, 14 de mayo de 2009.

Marlene Bauste......................................................................

Bautizo del libro Mérida en sus 450 años. Autores: Mons. Dr.Baltazar Enrique Porras Cardozo y Dr. José Manuel QuinteroStrauss. Salón Rojo del Edificio del Rectorado de la Universidadde Los Andes, 19 de mayo de 2009.

Mayelis Moreno Castillo..........................................................

NORMAS PARA LOS/AS AUTORES/AS...............................

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SUMMARY

THE ARCHIVES

Research ProjectsOrganization, inventory and cataloguing of Section 56 Seminar atthe Archdiocesan Archives of Mérida-AAM.............................

Reports

Statistics of Researchers of the Archdiocesan Archives of Mérida-AAM. 2002-2008.

Raquel Morales Soto................................................................

INVENTORIES, GUIDES, INDICES,CATALOGUES, SUMMARIES

A list of the Priests who governed Mucurubá’s ImmaculateConception Parish 1698-1990.

Elizabeth Zambrano..............................................................

DOCUMENTS

Report concerning the Hospital at San Rafael de Santa Ana deCoro (1676-1787). Transcription and commentary.

1787, february 10. Mérida / 1787, fctober 4. Coro.

Report requested by Fray Juan Ramos de Lora, Bishop at theMérida of Maracaibo Parish, from Father Br. Juan FranciscoVarela, Foreign Vicar and Ecclesiastic Judge of Coro, concerningthe hospitals within the Vicarage. The report requests informationon rents, status of the structures, number of beds and patients, aswell the requisites, basis and persons involved in its construction.

AAM. Section 38 Hospitals. Box 1, doc. 38-005; 24 ff.

Silvia Andrades Grassi..........................................................

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PAPERS, ARTICLES

Colonial hospitals within the Diocese of Mérida: The Santa Ana(San Rafael) de Coro. Hospital as contained in the documents atthe Archdiocesan Archives in Mérida-AAM.

María Elena Puentes y Rosalina Mendoza.............................

A complex look at equality: an essay on the methodologies ofequality in contemporary law.

Román Rodríguez Salón.........................................................

THE MUSEUM

Research Projects

Didactic guide of the Archdiocesan Museum of Mérida -MAMSG-Sacraria.................................................................................

INVENTORIES, GUIDES, INDICES,CATALOGUES, SUMMARIES

Entrance of pieces to the collection at the Archdiocesan Museumof Mérida, january-june 2009.....................................................

DOCUMENTS

1909, August 10. Mérida.

Official communication from Mons. Antonio Ramón Silva, Bishopof the Diocese of Mérida, to his flock, concerning the profile ofthe Museum, the Decree for its creation, the book on the Patriotismof the clergy at the Diocese of Mérida, as well as financialcontributions and the donation of pieces for the Museum. (OriginalManuscript).

AAM. Section 45 B Various Books. Museum Curia (1909-932),pp. 3-8.......................................................................................

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PAPERS, ARTICLES

History, gold and the Baroque: the Church of our Lady of theRosary at Casigua, Falcon state.

Blanca de Lima.......................................................................

Homily to commemorate the 50th Anniversary of the Institute ofGeography at the Universidad de Los Andes-ULA.

Excmo. Mons. Baltazar E. Porras Cardozo...............................

EXHIBITS

50 years of History of the Institute of Geography and Conservationof Natural Resources.

Rebeca Pérez Arriaga y Ana Hilda Duque.................................

CHRONICALS, EVENTS, NEWSPress note. Exhibit of the Institute of Geography andConservation of Natural Resources. 50 years of history.Archdiocesan Museum of Mérida, march-june 2009.

Rebeca Pérez Arriaga.............................................................

Presentation of the book Accounts of a Devotion. Manuscriptof the Brotherhood of our Lady of Consolation in Táriba 1788-1802. Author: Ana Hilda Duque. Office of Retired Professors,may 14, 2009.

Marlene Bauste......................................................................

Presentation of the Book Mérida in its 450 years. Authors: Mons.Dr. Baltazar Enrique Porras Cardozo y Dr. José Manuel QuinteroStrauss. Red Room, Headmaster’s Building at the Universidad deLos Andes, May 19, 2011.

Mayelis Moreno Castillo..........................................................

NORMS FOR AUTHORS........................................................

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Organización, inventario y catalogación de la Sección 56... pp. 13-18

EL ARCHIVO


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PROYECTOS DE INVESTIGACIÓN

ORGANIZACIÓN, INVENTARIO Y CATALOGACIÓN DE LASECCIÓN 56 SEMINARIOS DEL AAM

1. Institución responsable

Fundación Archivo Arquidiocesano Padre Luis Eduardo Cardona -AAM-

1.1. Dirección: Palacio Arzobispal. Av. 4 Bolívar, esquina calle 23, frente ala Plaza Bolívar. Apdo. 26. Mérida–Venezuela 5101-A

1.2. Teléfonos: 00-58-274-2524307 / 2525786

1.3. Fax: 00-58-274-2521238

1.4. Correo electrónico: [email protected]

1.5. Portal de la Arquidiócesis: www.arquidiocesisdemerida.org.ve linkArchivo Arquidiocesano

2. Responsable(s) institucional(es)

2.1. Excmo. Mons. Baltazar Enrique Porras Cardozo

Arzobispo Metropolitano de Mérida y Presidente de la Fundación ArchivoArquidiocesano Padre Luis Eduardo Cardona.

2.2. Prof. Ana Hilda Duque

Directora de la Fundación Archivo Arquidiocesano Padre Luis EduardoCardona.

3. Título del proyecto

Organización, inventario y catalogación de la Sección 56 Seminarios delArchivo Arquidiocesano de Mérida-AAM.


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4. Línea de Investigación

Archivística e Historia Eclesiástica

5. Justificación

5.1. El Archivo Arquidiocesano de Mérida-AAM, es un servicio arqui-diocesano del Arzobispado de Mérida-Venezuela, creado por Decreto delObispo Antonio Ramón Silva García, el 11 de junio de 1905, debido a lanecesidad de concentrar en un solo sitio toda la documentación existentetanto de las parroquias como de la curia, incluso desde antes de la fundaciónde la Diócesis (1778). Se nutre constantemente, según las disposicioneseclesiásticas respectivas, de las diferentes dependencias de la Arquidiócesisde Mérida y de donaciones. Está adscrito a la Pontificia Comisión de BienesCulturales de la Iglesia, al Departamento de Bienes Culturales de la Confe-rencia Episcopal Venezolana y pertenece a la Asociación Venezolana deArchiveros Eclesiásticos (ASOVAE).

5.2. Es una Institución sin fines de lucro, que se rige por su propio reglamen-to, elaborado según las normas generales sobre la materia emanadas de laautoridad eclesiástica competente (Santa Sede, Conferencia Episcopal yObispo Diocesano). Está abierto a los usuarios (investigadores, estudiantes,tesistas, pasantes, becarios y público en general), de acuerdo a las normasque lo rigen. Por razones elementales de conservación del patrimonio, no sepermite la investigación sobre ninguna de las secciones que no estén inven-tariadas.

5.3. El Archivo Arquidiocesano de Mérida está integrado por dos grandesunidades: el Archivo Histórico (organizado en secciones y series y el Ar-chivo Corriente o de Gestión (organizado en siete departamentos a saber:Administración, Extensión, Informática, Investigaciones, Paleografía, Publi-caciones y Servicio al Público), ambos se organizan atendiendo el criterio deprocedencia.

5.4. El proceso de organización del Archivo Histórico comienza desde elmismo momento de su creación. Mons. Silva se ocupó de recopilar informa-ción existente sobre la historia de la Diócesis desde 1777 hasta 1820 aproxi-madamente, trabajo que dio como resultado la publicación de seis tomostitulados Documentos para la historia de la Diócesis de Mérida. Ade-

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más organizó la correspondencia por él recibida durante su administraciónepiscopal.

En junio de 1968 el Excmo. Mons. Domingo Roa Pérez, AdministradorArquidiocesano concedió licencia al Reverendo Padre Luis Eduardo Cardo-na Meyer para encargarse del Archivo, labor que cumplió hasta septiembrede 1971. El trabajo realizado consistió en la organización documental a losfines de realizar una primera clasificación y ordenación de su contenido,quedando el Archivo clasificado en 48 secciones ubicadas en aproximada-mente 554 cajas de cartón diseñadas y fabricadas por el Padre CardonaMeyer.

En 1973 por disposición del entonces, Arzobispo Metropolitano Mons. Án-gel Pérez Cisneros, se encarga del Archivo el Pbro. Miguel Prieto Arce,quien estuvo en el cargo hasta diciembre de 1979. Durante su gestión con-tinuó el trabajo realizado por el Padre Cardona Meyer e inició la elaboraciónde los índices de los libros parroquiales, específicamente los de bautismos,hasta los primeros años del siglo XX.

A partir de 1982, el Archivo es dirigido por el Prof. Antonio Cortés Pérez,con la colaboración de la Prof. Ana Hilda Duque, en calidad de Subdirectora,quien se encargó de organizar, clasificar y ordenar la Sección 29 Estadísti-cas y Padrones, elaborando el inventario correspondiente. El 24 de julio de1983, a instancias del Excmo. Sr. Arzobispo Metropolitano de Mérida Mons.Miguel Antonio Salas Salas, la Prof. Duque, fundó el Departamento deInvestigaciones del AAM, en el marco de los actos programados por laArquidiócesis de Mérida, con motivo del Bicentenario del Natalicio del Li-bertador Simón Bolívar (1783-1983).

Desde 1987 y hasta 1990 el Archivo estuvo bajo la dirección de Mons.Baltazar E. Porras Cardozo, Obispo Auxiliar y actual Arzobispo de laArquidiócesis. Durante su gestión se dio inicio a la publicación del Boletíndel Archivo Arquidiocesano de Mérida, órgano divulgativo de la Institu-ción, la elaboración y difusión de textos sobre archivos eclesiásticos, biblio-tecas e historia eclesiástica merideña, y la promoción de cursos, charlas,talleres y seminarios. En 1989 el Archivo comienza un proceso deinformatización a través de la elaboración de las Bases de Datos de algunassecciones. Este trabajo fue llevado a cabo por el profesor universitario Eduar-do Osorio, asiduo colaborador de la Institución, la coordinación de la Direc-ción y de la Prof. Ana Hilda Duque, quien aportó los conocimientos necesa-


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rios para la formulación del trabajo. La adquisición de equipos de computa-ción y la reorganización del Archivo, permitió que la Institución se insertaraen el mundo de la automatización. Los resultados han sido la producción deinstrumentos de descripción archivística con miras a prestar un mejor ser-vicio al usuario y la conservación de la documentación.

Con relación al proceso de reorganización del fondo del Archivo, se conti-nuaron los trabajos de inventario de las secciones. En 1990 se adquiere elarchivo rodante (archimóvil), para la guarda y custodia de los documentoscelosamente cuidados por la Institución.

5.5. Desde el 30 de diciembre de 1991 hasta nuestros días la Prof. AnaHilda Duque, lleva la dirección del Archivo. A través de su gerencia se hanadquirido nuevos equipos de computación y mobiliario, y se ha llevado acabo el acondicionamiento del espacio físico de la Institución. Se crearon lassecciones: Planos y Mapas, Afiches y Traslados, por ingresos de nuevosmateriales documentales, y se microfilmaron las secciones 26 Dispensas eImpedimentos Matrimoniales, 29 Estadísticas y Padrones y 45A LibrosParroquiales. En 1998 la Prof. Duque crea el Fondo Editorial del AAM con2 colecciones: Pueblos y Parroquias de Los Andes y Fuentes para laHistoria Eclesiástica de Venezuela; y en el 2000 la serie Estudios, en lascuales se da cabida a la publicación de trabajos de investigación que reali-cen con fondo documental de la Institución y otros que por su contenidoameriten formar parte de nuestro acervo editorial.

5.6. El fondo documental tiene aproximadamente 264 metros lineales dedocumentación. Su contenido corresponde a diversas tipologías documenta-les tales como: libros de registros parroquiales de bautismos, matrimonios,confirmaciones y defunciones, así como de gobierno, cofradías, fábrica, cuen-tas, crónicas de las diferentes parroquias de la Arquidiócesis e institucioneseclesiásticas como el Cabildo Catedralicio, Seminario, Conventos, entre otras.Actas, acuerdos, afiches, auténticas, autos, bulas, capellanías, cartas, cen-sos, certificaciones, circulares, decretos, diplomas, dispensas, disposiciones,fotografías, expedientes, informes, instrucciones, inventarios, mandatos,mortuorias, nombramientos, notificaciones, oficios, padrones, partidas debautismos, entierros, matrimonios y confirmaciones, pastorales, peticiones,placas, planos, poderes, reales cédulas, reales órdenes, reales disposiciones,reclamos, resoluciones y testamentos. El documento más antiguo hasta aho-ra localizado data de principios del siglo XVII. Pertenece a la Sección 43Judiciales, está fechado en Mérida el 19 de febrero de 1611 y se refiere a

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una acusación interpuesta por Damiana Noble, vecina de Mérida y viuda dePedro Márquez, ante el Teniente Corregidor de Justicia Mayor de MéridaDiego de Luna, contra el soldado Fulano Marsuelo, por rendición insatisfac-toria de cuentas sobre ganado.

5.7. En cuanto a la organización del fondo documental, el Archivo ha reali-zado y asesorado varios trabajos sobre algunas secciones entre los que sepueden mencionar: Catálogo de los libros parroquiales de San Antoniode Chiguará (1694-1975), de Oneiver Arturo Araque; Sociedades yObras Pías de la Diócesis de Mérida (1711- 1829), de Gloria Carrero yNorma Guerrero; Catálogo de los libros de la Parroquia InmaculadaConcepción de Mucurubá (1685-1990), de Elizabeth Zambrano; Catá-logo de la Sección 26 Dispensas e Impedimentos matrimoniales (1745-1799), de José Gregorio García y José Teófilo Neira; Catálogo de loslibros de la Parroquia Santísima Trinidad de Pueblo Llano, realizadopor la Dirección del Archivo en convenio con la Academia Nacional de laHistoria; Estadísticas y Padrones de la Diócesis de Mérida (2 tomos) yCatálogo de los libros de la Parroquia El Sagrario, ambos de Ana HildaDuque; Inventario de la Sección 43 Judiciales, de Teresa Albornoz deLópez; y finalmente, Inventario y catálogo de la Sección 54 Religiosos,de Gloria Caldera de Osorio.

Debido a la necesidad de avanzar en las tareas de conservación y preserva-ción del patrimonio documental y con el objeto de crear un fondo económi-co, el 11 de junio de 1996 se constituye la Fundación Archivo ArquidiocesanoPadre Luis Eduardo Cardona entre sus objetivos contempla: ... compilar,conservar, transcribir, reproducir, difundir y fomentar la investigación detodo material documental, bibliográfico que contengan información his-tórica, sea o no referido a la historia de la Iglesia Católica; sobre cultura,de importancia científica o el que estuviere relacionado con estos aspec-tos...

Con respecto a la Sección 56 Seminarios, su organización, es decir, elproceso de ordenación, clasificación y catalogación permitirá poner al servi-cio del público información sobre la historia del Seminario ArquidiocesanoSan Buenaventura de Mérida y los inicios de la Universidad de Los Andes,además de dar a conocer la importancia del Seminario en la configuracióndel comportamiento de la sociedad merideña y su contribución en la forma-ción educativa.


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6. Estado actual del problema

6.1. La Sección 56 Seminarios, constituye dentro del fondo documental delAAM, un importante acervo por la circunstancia de reposar en ella, docu-mentos relativos al inicio y trayectoria tanto del Seminario Arquidiocesanode Mérida como de la Universidad de Los Andes, instituciones educativasque remontan sus antecedentes a la creación por Fray Juan Ramos de Lora,Primer Obispo de la Diócesis de Mérida, de la Casa de Estudios parajóvenes inclinados al estado eclesiástico, el 29 de marzo de 1785. Ade-más, la Sección cuenta con algunos documentos sobre casas de estudio deotras zonas del país.

6.2. Ante el estado en que se encuentra la Sección 56 Seminarios, se haceimpostergable su organización, clasificación y catalogación, dada la impor-tancia que el estudio de sus documentos tiene para los usuarios dedicados ala investigación de las instituciones eclesiásticas en el ámbito educativo, asícomo el conocer, la génesis y trayectoria del Seminario San Buenaventurade Mérida, en el marco del cual se erige la Universidad de Los Andes, y lospormenores de otras casas de estudio eclesiásticas del país.

7. Metodología

Procederemos, en primer lugar, a la organización (clasificación y ordena-ción) de los documentos de la Sección 56 Seminarios.

Cumplida esta etapa, iniciaremos el proceso de inventario y catalogación delos documentos, siguiendo los lineamientos de la Norma InternacionalGeneral de Descripción Archivística-ISAD (G), del Consejo Internacionalde Archivos.

Paralelamente, comenzaremos el diseño de la base de datos en la cual seincluirán los campos necesarios, producto del análisis documental, a los fi-nes de vaciar la información y automatizarla.

Una vez realizado el proceso, realizaremos las correcciones pertinentes quepermitirán la diagramación del trabajo final.

Con la publicación de este instrumento de descripción archivística ofrecere-mos a los usuarios (investigadores, pasantes, tesistas, estudiantes y públicoen general), la oportunidad de conocer el contenido de la sección y facilitarla investigación.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Raquel Morales Soto. Estadística de Investigadores del Archivo... pp. 19-32

INFORMES

ESTADÍSTICA DE INVESTIGADORES DELARCHIVO ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA-AAM. 2002-2008

Raquel Morales Soto*

El Archivo Arquidiocesano de Mérida a través de su Departamento de In-formática y haciendo uso de la información recopilada en la base de datospara el Registro de Investigadores, da a conocer la estadística de investi-gadores del período 2002-2008.

Esta estadística es el resultado del procesamiento de la información de losdiferentes campos que conforman la base de datos para el Registro deInvestigadores, y la misma está reflejada en cuadros. El primero de ellosmuestra un resumen de investigadores 2002-2008, el segundo y tercero es-tán relacionados con la profesión u oficio de los investigadores y finalmentese muestra un listado con las investigaciones que se realizaron en el periodoseñalado.

* Secretaria del Departamento de Infor-mática del Archivo Arquidiocesano de Mérida-AAM.Correo electrónico: [email protected] / [email protected]


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Año Cantidad Sexo Investigadores Profesionales

Estudiantes F M Regulares Nuevo

ingreso

2002 81 39 42 37 44 38 43 2003 68 28 40 19 49 37 31 2004 42 19 23 20 22 30 12 2005 51 16 35 23 28 38 13 2006 48 29 19 19 29 28 20 2007 8 3 5 4 4 4 4 2008 27 16 11 7 20 12 15 Total 325 150 175 129 196 187 138

Resumen de Investigadores 2002-2008

Investigadores Profesionales. Regulares y de nuevo ingreso 2002-2008

Profesión Cantidad Investigadores Regulares Nuevo ingreso

Historiadores 28 14 14 Licenciado en Letras – Historia del Arte 8 5 3 Arquitectos 16 12 4 Abogados 13 7 6 Médicos 9 3 6 Economistas 5 2 3 Educadores/docentes 36 11 25 Diplomático 1 1 0 Religiosas/os 5 4 1 Sacerdotes 12 6 6 Archivista 1 1 0 Periodistas 3 2 1 Diseñador Gráfico 1 1 0 Geógrafos 6 6 0 Antropólogos 3 2 1 Musicólogos 6 4 2 Museólogo 1 1 0 Ingenieros 5 0 5 Contadores 4 2 2 Teólogo 1 0 1 Comunicadores Sociales 2 0 2 Politólogo 1 0 1 Biólogo 1 0 1 TSU Agrotécnia 1 0 1 TSU Administración 1 0 1 TSU Relaciones Industriales 2 1 1 TSU Informática 1 0 1 Cronistas 10 4 6 Comisario 1 0 1 Peritos 2 0 2 Comerciante 1 0 1 Total 187 89 98

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Estudiantes Investigadores. Regulares y de nuevo ingreso 2002-2008

Acercamiento histórico a San Jacinto de la ciudad de Mérida.

Actas del Cabildo Eclesiástico (1817-1827).

Análisis iconográfico e iconológico de las imágenes de la Parroquia SanJuan Bautista de Milla.

Antecedentes de la Diócesis de San Cristóbal.

Antecedentes históricos de la devoción popular al Santo Niño de la Cuchillade Zea, del Estado Mérida.

Aproximación histórica y estética al Cementerio de El Espejo.

Apuntes genealógicos de la familia Gil Chipía.

Archivo Histórico de Tovar.

Temas investigados en el Archivo Arquidiocesano de Méridadurante el período 2002-2008

Estudiantes (Carrera que cursan) Cantidad Investigadores Regulares Nuevo ingreso

Historia 47 25 22 Letras – Historia del Arte 34 5 29 Arquitectura 13 1 12 Derecho 5 0 5 Educación 5 0 5 Geografía 2 0 2 Ingeniería 1 0 1 Ciencias Políticas 2 1 1 Medicina 3 0 3 Diseño Gráfico 1 0 1 Etnología 3 0 3 Contaduría 1 0 1 Administración 1 0 1 Turismo 1 0 1 Filosofía 1 0 1 Literatura 1 0 1 Desarrollo Cultural 1 0 1 Seminarista 8 4 4 Bachillerato 8 4 4 Total 138 40 98

Estudiantes Investigadores


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Archivos de la Parroquia Nuestra Señora de la Candelaria de Mesa Bolívar.

Arqueo bibliohemerográfico de textos en Latín y Griego.

Arquitectura de Manuel Mujica Millán.

Arquitectura de Manuel Mujica Millán: El Seminario de Mérida.

Arquitectura religiosa. Monasterios, seminarios y templos.

Artículos sobre petróleo. 1930-1940, publicados en el Diario El Vigilante.

Aspectos biográficos y educativos de varios prelados de Trujillo en el sigloXX.

Atlas de la Diócesis de Mérida de finales del siglo XIX.

Autoridades eclesiásticas y civiles, los primeros pobladores, tenencia de latierra, problemas limítrofes, corrientes migratorias en Campo Elías.

Bases filosófico-teológicas de la Constitución de Mérida de 1811.

Biografía de la familia Valeri.

Biografía de Mons. Humberto Paparoni Bottaro.

Biografía del sacerdote Dr. Miguel Lorenzo Gil Chipía (1852-1910).

Búsqueda de datos históricos sobre la región de Perijá.

Búsqueda de documentos relacionados con el arte colonial.

Cabildo Catedralicio de Caracas.

Cabildos indígenas / Etapa colonial.

Capilla de las Siervas del Santísimo Sacramento.

Capilla de San Benito.

Caracteres estéticos formales de la obra de José Lorenzo de Alvarado.

Cementerio El Espejo.

Clásicos grecolatinos leídos en Venezuela y su influencia en el pensamientoindependentista.

Cofradía de la Consolación de Táriba y recolección de información primariasobre San Benito, en la localidad de Pueblo Llano.

Conocimientos de las actividades científicas, docentes y espirituales del Padre

2 3


Emidio Prata.

Construcción del Colegio San José de Mérida.

Consulta de documentos referentes a la pieza de colección del MuseoArquidiocesano de Mérida, perteneciente a Marcos León Mariño, La San-tísima Trinidad.

Convento Santa Clara de Mérida.

Conventos de Mérida: agustinos, franciscanos y dominicos.

Cristo de Aranza.

Culto hacia los santos, siglos XVIII y XIX.

Datación de sismos en la zona de Lagunillas. Período: 1840-1850.

Datos biográficos de Mons. Humberto Corredor Tancredi.

Datos biográficos del Presbítero Pablo Antonio Morales.

Datos del contexto histórico de la Iglesia San Juan Bautista de Milla.

Datos históricos sobre la fundación del Seminario de Mérida.

Datos históricos sobre Michelena.

Datos referentes a la Madre Georgina Febres Cordero, los sacerdotesEvaristo Ramírez, Clemente Mejía y Mons. Antonio Ramón Silva.

Datos sobre el Pbro. Noguera Adonai, y la familia Newman.

Datos sobre Mons. Silva. Iglesia siglos XVIII-XIX. Historia Colonial.

Datos sobre Pedro María de La Riva y de La Solías.

Desastres naturales que afectaron a Mérida en el pasado.

Documentación sobre elevación a parroquia eclesiástica Cristo de Aranza(hoy San Francisco de Maracaibo).

Documento de propiedad de la finca Sabanas de Ayacucho, que fueron deAntonio Febres Cordero.

Documentos históricos y Arquitectura de la Iglesia Matriz San Buenaventu-ra de Ejido.

Documentos históricos y arquitectura de la Iglesia San Juan Bautista deMilla.


2 4

Documentos musicales del Archivo Arquidiocesano de Mérida.

Documentos sobre la historia de la Universidad de los Andes.

Documentos sobre música religiosa.

Don Pedro Juan Arellano y el gobierno parroquial en Mérida.

Edición, transcripción y estudio diplomático de las actas de visita pastoral deMons. Silva.

El Archivo Arquidiocesano de Mérida.

El Cabildo Catedral de Mérida (1778-1800).

El Cabildo Catedral de Mérida. Fuentes para su estudio.

El Cardenal Quintero.

El Cementerio de El Espejo. Documento histórico-cultural de la ciudad deMérida.

El Convento Santa Clara.

El Convento Santa Clara y las monjas Clarisas.

El Curato de Motatán (1801).

El derecho natural según las concepciones de Santo Tomás de Aquino y SanAgustín.

El espacio geohistórico del Valle de Venegara, en la jurisdicción de la Parro-quia Miguel Antonio Salas, del Municipio Mons. Jáuregui, La Grita.

El Maestro Juan de Dios Moreno.

El Palacio Arzobispal de Mérida.

El Papa Gregorio XVI y la reorganización de la Iglesia en Hispanoamérica(1831-1846).

El Pbro. Casimiro Mora y Mons. José de Jesús Carrero.

El proceso de poblamiento de una ciudad: Rubio.

El Táchira documentos para su historia.

Elaboración del Atlas de la Diócesis de Mérida (finales de Siglo XIX).

Elaboración del catálogo musical del Archivo Arquidiocesano de Mérida.

2 5


Elevación a Arquidiócesis de la Diócesis de Mérida 1923.

La Universidad de Los Andes en el período Colonial.

Estimación del coeficiente de consanguinidad del Estado Mérida.

Estudio de parentesco entre los habitantes de Pueblo Llano: genealogía de lafamilia Santiago.

Estudio geocultural de la ciudad de Tovar, Estado Mérida.

Estudio iconográfico de la obra el Regreso de Egipto de José LorenzoAlvarado.

Estudio sobre la liturgia y los elementos usados en ella.

Estudios estéticos sobre patrimonio urbanístico. El Cementerio El Espejo.

Evolución política-territorial de la Parroquia San Juan Bautista de Milla deMérida.

Formación y desarrollo de la Audiencia Eclesiástica en Venezuela. SiglosXVII-XVIII.

Francisco de Miranda.

Fundación de la Iglesia de San José de Torondoy.

Fundación de la Parroquia Santiago Apóstol de Lagunillas.

Fundación y evolución histórica de Chiguará.

Genealogía de Barinas.

Genealogía de Giuseppi Carnevali Albani.

Genealogía de la Familia Valero.

Genealogía de las familias: La Riva, Solis, Troconis, Del Pino.

Genealogía de los Valero de Mérida (Manuel Valero de Arismendi y PedroValero y Rivas).

Genealogía del apellido Verdi.

Genealogía familiar.

Genealogía familiar. Parroquia San José de Palmira y El Vigía.

Genealogía sobre el apellido Newman.


2 6

Genealogía sobre los apellidos de los Pueblos del Sur.

Genealogías Barinesas.

Geohistoria de la Diócesis de Mérida. Siglo XIX - inicios del XX. Sección 22Curatos. / Investigación geo-cultural sobre territorio y fiestas patronalescampesinas.

Gregorio Rivera. Biografía, testamento y capellanía.

Historia Antigua y Medieval: Influencia del mundo antiguo y medieval enAmérica.

Historia de la carretera Trasandina.

Historia de la Filosofía en Mérida.

Historia de la fundación de la Villa de Perijá.

Historia de la Iglesia: fuentes para su estudio.

Historia de la Iglesia y la Real Audiencia de Caracas.

Historia de la Medicina en el Estado Mérida. Fundación del Hospital LosAndes.

Historia de la Parroquia San Isidro Labrador de Barrancas, Estado Barinas.

Historia de la pre-Independencia.

Historia de las familias venezolanas antes de 1800.

Historia de las imágenes de santos de la Iglesia San Miguel de El Llano.

Historia del Ambulatorio de Belén, antiguo Hospital San Lázaro.

Historia del Corazón de María, escultura ubicada en la Catedral de Mérida.

Historia del Estado Táchira.

Historia del Municipio Bolívar.

Historia del Periodismo en Tovar. Datos sobe el Pbro. Adolfo López.

Historia del Teatro en Mérida en el Siglo XX.

Historia Eclesiástica de Bailadores y Tovar. Construcción de los templosparroquiales.

Historia eclesiástica merideña.

2 7


Historia Genealógica.

Historia Regional y Eclesiástica.

Historia sobre los 444 años de la fundación de Mérida.

Historia sobre Maracaibo Siglo XVII.

Historia y leyendas de la ciudad de Mérida.

Iconografía de los Santos Patronos del Estado Mérida.

Iconografía de Santos en las diferentes iglesias del Estado Mérida.

Iconografía Mariana de la Iglesia San Juan Bautista de Milla.

Iconografía Mariana en la Catedral de Mérida.

Iconografía Mariana en la Iglesia Nuestra Señora de El Espejo.

Iconografía Mariana y de santos de la Iglesia San Miguel de El Llano.

Iconografía de santos en diferentes iglesias del Estado Mérida.

Iglesia de Nuestra Señora de El Carmen. Historia y arquitectura.

Iglesia de El Llano San Miguel Arcángel.

Iglesia Nuestra Señora de la Candelaria de Bailadores. Historia y Arquitec-tura.

Iglesia Nuestra Señora del Carmen de Mérida.

Iglesia Nuestra Señora de Belén de Mérida.

Iglesia Nuestra Señora del Espejo. Historia y arquitectura.

Iglesia San Antonio de Padua de Chiguará: Historia y arquitectura.

Iglesia San Antonio de Padua de Tabay.

Iglesia Santa Lucía de Mucuchíes: Historia y arquitectura.

Iglesias del casco central de la Ciudad de Mérida. Pintura, escultura e histo-ria.

Imagen gráfica del Archivo Arquidiocesano de Mérida.

Información general sobre el Padre Elías Valera.

Información sobre la Hermana Georgina Febres Cordero.


2 8

Información sobre Cementerios.

Instrucción pública en Maracaibo (1830-1850).

Inventario de la Sección 2 Administración.

Inventario de la Sección 45A Libros Parroquiales.

Inventario de la Sección 54 Religiosos.

Inventario de los bienes de los Jesuitas.

Inventario general de la Sección 22 Curatos.

Investigación histórica de sismos en Venezuela.

Investigación histórica en desastres naturales.

Investigación sobre personajes: Mons. Antonio Ramón Silva, Miguel A. Mejía,Pbro. Evaristo Ramírez, Nuncio Pietropaoli y Mons. Rincón González

Investigaciones históricas referentes al Municipio Arzobispo Chacón.Canaguá.

Jesuitas alemanes en el Nuevo Reino de Granada.

La Cofradía Nuestra Señora de la Consolación de Táriba.

La familia Ximeno de Bohórquez en el siglo XVII.

La Hermandad de San Pedro.

La Iglesia de San Antonio de Tabay.

La Iglesia Nuestra Señora de Belén. Origen de un templo de Mérida y elsignificado del portal en la arquitectura religiosa venezolana.

La Iglesia y los conventos en Trujillo.

La música en los archivos diocesanos.

La Pasión de Cristo.

La Sección 17 Cementerios del Archivo Arquidiocesano de Mérida.

Francisco de Miranda y el Obispo Hernández Milanés. Decretos y ÓrdenesSuperiores (1803-1827).

La Sociedad del Carmen.

La Universidad de Los Andes durante el gobierno de los hermanos Monagas.

2 9


La visualidad regional venezolana como un elemento del quehacer culturalnacional.

Las mujeres durante la Independencia de Venezuela.

Las pinturas del Cardenal Quintero en el Paraninfo del Rectorado de laUniversidad de Los Andes.

Lectura iconográfica y simbólica de los vitrales de la Catedral de Mérida.

Lenguas indígenas del Estado Mérida.

Libro de Decretos y Órdenes de los Ilustrísimos Obispos Santiago HernándezMilanés y Rafael Lasso de la Vega.

Libros de Fábrica y Convenios en la Iglesia de La Azulita.

Libros Parroquiales.

Libro de Gobierno Nuestra Señora de Belén.

Límites y evolución de las parroquias del Sur del Lago de Maracaibo.

Los hospitales coloniales, una aproximación al tema.

Los Nevados: entre la memoria y la historia.

Los tribunales eclesiásticos durante el siglo XVIII.

Madre Georgina Febres Cordero. Mons. Silva. Deán Clemente Mejía. Pbro.Sixto Ramírez.

Marcos León Mariño

Matrícula del Seminario San Buenaventura de Mérida. Libro de observa-ción y calificaciones.

Matrimonio y familia en la Provincia de Maracaibo (1830-1900).

Monografía sobre el Municipio Cardenal Quintero.

Mons. Juan Maximiliano Escalante Zambrano. Biografía.

Monseñor Antonio Ramón Silva y los inicios del Museo Diocesano de Mérida.

Mucuchachí: Andanzas entre el ayer y el hoy.

Música. Actividad musical en el Estado Mérida.

Música eclesiástica durante el siglo XVII y XVIII.


3 0

Orden Hospitalaria San Juan de Dios.

Organización, clasificación y ordenación de la Sección 44 Libertad y Sol-tería.

Origen de la Diócesis de El Vigía-San Carlos del Zulia.

Orígenes de Obispos. Diócesis de Barinas.

Palacio Arzobispal de Mérida. Intención Institucional (1785-1933).

Datos de fechas y nombres sobre el Cristo Negro de Gibraltar y fundacio-nes de templos del Municipio Sucre Estado Zulia.

Parentesco y cotidianidad en la aldea La Cañada de Las González del Esta-do Mérida: un acercamiento a la Etnohistoria regional.

Parroquia El Sagrario.

Parroquia Nuestra Señora de Altagracia de Maracaibo.

Parroquias Nuestra Señora del Rosario de Las Piedras, Santo Domingo yPueblo Llano.

Partición de bienes en el sector Los Cerritos - Barinas.

Personajes tachirenses siglo XIX y XX.

Pinturas de templos de la Arquidiócesis de Mérida.

Poblamiento indígena de San Miguel Arcángel de Jají.

Preservación de edificaciones históricas: Catedral de Mérida y la Capilla delCarmen.

Problemas limítrofes entre Mérida y Zulia.

Proceso de poblamiento de una ciudad de frontera: Rubio.

Propiedad de los terrenos de la Capilla Nuestra Señora de Coromoto, Lomade los Ángeles, Mérida.

Proyecto Arte en Mérida.

Proyecto la Catedral durante el período de Mons. Santiago HernándezMilanés (1801-1812).

Proyecto restauración artesanado Iglesia de San Francisco de Coro.

Proyecto ruinas de la Iglesia de San Pedro de Gibraltar.

3 1


Proyecto sobre la Historia de la Facultad de Medicina.

Pueblos del Estado Mérida: historia, costumbres, geografía.

Rastreo y arqueo de fuentes documentales relativas a pintura, escultura yarquitectura colonial.

Catálogo de la Sección Música del Archivo Arquidiocesano de Mérida.

Recreación del ambiente del artesanado en la fábrica de la Catedral deMérida en los años de Manuel Mujica Millán.

Relaciones Iglesia-Estado, en el gobierno de Cipriano Castro.

Relatos históricos de eventos catastróficos de La Mesa de los Indios.

Reliquia de San Clemente, de la Catedral de Mérida.

Restauración y reconversión de la Casa Hogar San Juan de Dios de Mérida.

Revisión documental sobre la región coriana durante el proceso de indepen-dencia.

Sacerdotes en Timotes desde la época de la Colonia hasta 1936.

Sacerdotes de Piñango Municipio Miranda Estado Mérida.

Santos de la Catedral de Mérida.

Seminario San Buenaventura de Mérida (1953-2003).

Sismología histórica de Venezuela.

Orden de las Clarisas durante los siglos XVII y XVIII en la Ciudad deMérida.

Sur del Lago de Maracaibo, específicamente el Municipio Ramos de Lora.

Sección 26. Dispensas e Impedimentos al Matrimonio.

Sección 38 Hospitales del Archivo Arquidiocesano de Mérida.

Sección 45 B Libros Varios. Libro de actas del Cabildo Eclesiástico.

Sección 45 B Libros Varios. Serie Cabildo Eclesiástico. Libro de Actas(1817-1827).

Sección 45B. Libros Varios. Serie Cabildo Eclesiástico. Libro de Actas(1847-1869).


3 2









Sección 59. Templos y Capillas.

Sección 60 Testamentos.

Tribunales siglos XVI-XVIII creencias, usos y costumbres indígenas y la jus-ticia eclesiástica.

Vida Cotidiana. Objetos del hogar.

Vida de la Madre María Georgina Febres Cordero Troconis. Historia de laCongregación Hermanas Dominicas de Santa Rosa de Lima.

Vida y obra del Músico Juan de Dios Moreno.

Violencia contra la mujer (1786-1810).

3 3

Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Elizabeth Zambrano. Lista de sacerdotes que regentaron la... pp. 35-38



3 4

3 5


LISTA DE SACERDOTES QUE REGENTARON LA PARROQUIAINMACULADA CONCEPCIÓN DE MUCURUBÁ 1698-1990

Elizabeth Zambrano*

* Licenciada en Historia, por la Universidad de los Andes. Fue tesista en el AAM, adscrita alDepartamento de Investigaciones.

Inicio Finalización Identidad Cargo

14-12-1698 11-12-1702 Pbro. Pedro Baraona Cura Doctrinero

15-12-1703 Fray. Juan Antonio de Garagarza Cura Doctrinero

09-12-1704 10-12-1708 Fray Nicolás de Escamilla Teniente de Cura

08-08-1709 15-12-1717 Fray Juan Antonio de Garagarza Cura Doctrinero

12-12-1718 09-12-1720 Fray Agustín de Pereira Cura Doctrinero

09-12-1721 09-12-1728 Fray Francisco Suescún Teniente de Cura

09-12-1729 03-01-1738 Fray José Henrique de Vargas Cura Doctrinero

09-12-1738 Fray Agustín Manuel de Erasso Cura Doctrinero

09-12-1739 09-12-1743 Fray José Henrique de Villamizar Cura Doctrinero

09-12-1745 09-12-1745 Fray Andrés del Rincón Cura Doctrinero

03-01-1747 03-01-1747 Fray José Henrique de Villamizar Cura Doctrinero

04-12-1747 10-12-1755 Fray Agustín Manuel de Erasso Cura Doctrinero

18-12-1757 Fray Gaspar de Navarrete Cura Doctrinero

09-12-1758 10-12-1773 Fray Agustín Manuel de Erasso Cura Doctrinero

16-01-1785 23-12-1787 Fray José Ignacio del Rincón Cura Doctrinero

16-09-1788 19-07-1789 Pbro. Br. Joseph Martín Durán Cura Interino

28-08-1789 18-12-1793 Pbro. Juan de la Rosa Mercado y

Briceño

Cura Interino

05-04-1793 10-08-1794 Pbro. Francisco José de Molina Cura Interino


3 6

29-08-1794 12-12-1794 Pbro. Juan Antonio Guillén Cura Interino 16-01-1795 02-02-1795 Pbro. Juan Antonio Viloria P. del domicilio por

comisión del cura

14-06-1795 19-01-1796 Pbro. Juan Antonio Guillén Cura Interino 13-03-1796 19-06-1796 Pbro. Rafael Yutis Cura Interino

30-08-1796 23-05-1797 Pbro. Juan Antonio Guillén Cura Interino

20-06-1797 11-11-1798 Pbro. José Victoriano Moreno Cura Interino

06-12-1798 17-05-1800 Pbro. Juan de Dios Ruíz Valero Cura Interino 14-06-1800 01-11-1800 Pbro. José Eusebio Pineda Cura Interino

(Propio de Mucuchíes)

01-12-1800 10-05-1802 Pbro. Enrique Manzaneda y Salas Cura Propio

21-06-1802 24-08-1803 Pbro. Juan de la Rosa Mercado Briceño

Cura Interino (Propio de Tabay)

20-09-1803 25-06-1808 Pbro. Agustín A. de Izarra y Maldonado

Cura Interino

21-07-1808 29-12-1808 Pbro. Bernardo de Salas Interino (Destinado por el Obispo)

16-02-1809 15-07-1809 Pbro. José Enrique de Alizo Maldonado

Cura Propio

16-07-1809 20-10-1809 Pbro. José Rafael Ovando Cura Interino

22-10-1809 11-02-1810 Pbro. Juan de la Plaza Mercado Briceño

Cura Interino

12-02-1810 29-01-1819 Pbro. José Rafael Ovando Cura Rector

10-02-1819 28-09-1819 Pbro. Lorenzo Pereyra Cura Interino

29-09-1819 03-11-1820 Pbro. Andrés María Romano Cura Encargado

04-11-1820 27-12-1821 Pbro. Lorenzo Pereyra Cura Interino 23-03-1822 10-12-1822 Pbro. Juan Antonio Subiago Cura Interino

11-12-1822 05-04-1827 Pbro. José Lorenzo Pereyra Cura Rector

06-04-1827 02-06-1829 Pbro. José de Jesús Pino Cura Interino

03-06-1829 03-10-1831 Pbro. Victoriano Jaimes Cura Interino 04-10-1831 10-02-1832 Pbro. José de Jesús Pino Cura Interino

11-02-1832 11-09-1844 Pbro. José de Jesús Villegas Cura Rector 12-09-1844 21-03-1845 Pbro. José María Vásquez Encargado (por

enfermedad del propietario)

22-03-1845 15-12-1846 Pbro. José de Jesús Villegas Cura Párroco

16-02-1846 04-06-1846 Pbro. José María Vásquez Cura Interino

05-06-1846 24-12-1861 Pbro. José de Jesús Villegas Cura Rector 25-12-1861 23-08-1863 Pbro. Pedro Pérez Moreno Cura Interino

24-08-1863 30-11-1863 Pbro. Pedro Pérez Moreno Cura Excusador

3 7


01-12-1863 08-10-1869 Pbro. José de Jesús Villegas Cura Rector 09-10-1869 03-04-1875 Pbro. Manuel de J. Dávila Cura Coadjutor 04-04-1875 18-07-1875 Pbro. José Asunción León Cura Interino 19-07-1875 17-05-1877 Pbro. Rafael Zerpa Cura Propio 16-05-1877 02-10-1879 Pbro. Jesús Manuel Jáuregui Cura Encargado 05-06-1879 13-06-1880 Pbro. Buenaventura Albornoz Cura Interino 15-06-1880 31-08-1880 Pbro. Jesús Manuel Jáuregui Cura Encargado 01-09-1880 09-07-1881 Pbro. Manuel de J. Dávila Cura Encargado 20-07-1881 30-02-1884 Pbro. Rafael Zerpa Cura de esta

parroquia 04-02-1884 12-11-1885 Pbro. Manuel de J. Dávila Cura Encargado 13-11-1885 12-02-1888 Pbro. José Antonio León Cura de ella 13-02-1888 22-09-1888 Pbro. Jesús Manuel Jáuregui Cura Encargado 28-09-1888 29-12-1888 Pbro. José Asunción León Cura Encargado 07-01-1889 15-05-1889 Pbro. Rafael Antonio Gonzalo Cura Encargado

(accidentalmente) 17-05-1889 17-07-1889 Pbro. Hugo Zambelli Cura Encargado

(accidentalmente) 28-07-1889 10-11-1889 Pbro. Fabriciano Albornoz Cura Encargado 13-11-1889 21-11-1889 Pbro. Juan Ramón Chaparro Cura Encargado

(accidentalmente) 26-11-1889 15-07-1890 Pbro. José Nicolás González Cura Interino 17-07-1890 12-08-1890 Pbro. José Nicolás González Cura Autorizado 15-08-1890 16-01-1892 Pbro. José Asención León Cura Encargado 28-01-1892 26-04-1893 Pbro. Manuel de J. Dávila Cura Interino 02-05-1893 20-10-1895 Pbro. Florencio A. Paredes Cura Interino 14-11-1895 24-12-1899 Pbro. José de los Santos Viloria Cura Encargado 25-12-1899 03-11-1900 Pbro. Pedro Francisco Ramírez Cura Encargado

(accidentalmente) 06-11-1900 08-11-1900 Pbro. José de los Santos Viloria Cura Encargado 09-11-1900 30-01-1901 Pbro. Pedro Francisco Ramírez Cura Encargado 02-02-1901 20-01-1901 Pbro. José de los Santos Viloria Cura Interino 24-01-1902 20-05-1905 Pbro. Nieves de J. Rojas Cura Interino 22-05-1905 24-03-1907 Pbro. Antonio María Picón Cura Párroco 28-03-1907 24-04-1908 Pbro. José Elías Silva Cura Encargado 01-09-1908 27-09-1908 Pbro. José Trinidad Colmenares Canónigo

Mercedario de la Catedral de Mérida

11-10-1908 02-05-1915 Pbro. Francisco Picón Cura Encargado 19-05-1915 25-12-1915 Pbro. Juan A. Artigas Cura Párroco 31-12-1915 02-06-1917 Pbro. Julio Moreno Cura Párroco 30-06-1917 22-09-1918 Pbro. Luis Alberto Niño Cura Encargado

(Propio de Tabay) 28-10-1918 17-04-1922 Pbro. Juan de Jesús Rosales Cura Interino 23-11-1927 Pbro. Julio Moreno Cura Encargado 02-09-1933 Pbro. Francisco José Verde Cura Párroco


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Fuente: AAM. Sección 45A Libros Parroquiales. Parroquia Inmaculada Concepción de

Mucurubá.

17-04-1935 17-05-1936 Pbro. Pedro J. Suárez Cura Encargado 03-08-1936 03-08-1941 Pbro. Ángel Sánchez Cura Encargado 23-06-1942 29-09-1943 Pbro. Isaac León Cura Encargado 04-04-1944 Pbro. Luciano Márquez Cura Encargado 31-03-1946 Pbro. Jesús Manuel Cura Encargado 20-01-1949 27-05-1949 Pbro. Trino Araujo Cura de Tabay y

Visitador de esta parroquia

10-06-1954 13-04-1957 Pbro. Héctor Monsalve Cura de Tabay y visitador de esta parroquia

31-03-1963 21-09-1969 Pbro. Jesús Pérez Cura Encargado 21-09-1963 Pbro. Eleuterio Ruiz Párroco Residente 22-11-1981 14-10-1984 Pbro. José H. Valero Cura Párroco 08-12-1985 1990 Pbro. Emiliano Zambrano Cura Párroco

Muestra de libros parroquiales dela Parroquia Inmaculada Concep-ción de Mucurubá.AAM. Banco de Imágenes

3 9

Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Silvia Andrades Grassi. Informe sobre el Hospital San Rafael de... pp. 41-74

DOCUMENTOS


4 0

* Nota del Editor:

Desde la edición del primer número del Boletín del AAM en diciembre de 1987, hemos publicadodocumentos con el fin de dar a conocer el fondo de este valioso Archivo, el primero creado enel occidente del país y pionero en la organización y difusión de su contenido. A partir del número12, año 1993, se incluyó la Sección Documentos en este órgano oficial.

Esta iniciativa se formalizó en 1996 al constituirse la «Fundación Archivo Arquidiocesano deMérida Padre Luis Eduardo Cardona». El Acta de Creación de este instrumento jurídico contemplaen el numeral tercero el compromiso de ...transcribir, reproducir, difundir y fomentar lainvestigación de todo material documental [...] que contenga información histórica, sea o noreferido a la historia de la Iglesia Católica.

A partir del Boletín Nº 31, enero-junio 2009, los documentos que aquí se transcriben con surespectivo comentario, se incluyen como soporte de las investigaciones publicadas en la SecciónTrabajos, Artículos de cada número.

4 1


INFORME SOBRE EL HOSPITAL SAN RAFAEL DE SANTA ANA DE CORO(1676-1787).

TRANSCRIPCIÓN Y COMENTARIO

Silvia Andrades Grassi*

La Iglesia Católica ha jugado desde el siglo XVI, un importante rol en lacreación y expansión de diversas instituciones en el continente americano.Tal es el caso de los espacios dedicados a la atención de los enfermos,creados con el cuidado y celo de religiosos y religiosas, en un todo de acuer-do a los preceptos trazados en Europa siglos antes del encuentro con elNuevo Mundo.

Los hospitales fueron materia de los concilios desde la época medieval, puesen el año 816 ya se contemplaba que los Obispos debían fundar hospiciospara atender tantos pobres enfermos, como les permitieran las rentas de laIglesia1. Este antecedente representa la postura de la institución eclesiásticaen los siglos subsiguientes; de hecho, numerosas órdenes religiosas han de-dicado desde sus inicios, esfuerzos para la fundación y manejo de centros desalud, donde se ofrece a los enfermos, además de cuidados físicos, atenciónespiritual.

El documento que presentamos a continuación se encuentra inmerso enesta realidad, pues es el resultado de la gestión del primer Obispo de laDiócesis de Mérida, Fray Juan Ramos de Lora2, quien al tomar posesión de

* Estudiante de la Maestría en Historia, Teoría y Crítica de Arquitectura, Universidad de los Andes,Mérida–Venezuela. Correo electrónico: [email protected]

1 Estas disposiciones forman parte del Concilio de Aix la Chapelle, celebrado en el siglo IX. En:Carlos Richard. Los Sacrosantos Concilios: generales y particulares. Madrid: Don AntonioEspinosa, 1793; p. 319.

2 Designado primer portador de la Mitra merideña por el Rey Carlos III. Responsable de la creacióndel Colegio Seminario San Buenaventura, cuna de la Universidad de los Andes.


4 2

su cargo, ordenó a disposición solicitando la información inherente a loshospitales presentes en las vicarías comprendidas en el vasto terreno bajosu mando.

Se trata de un informe detallado del Hospital San Rafael, ubicado en laciudad Santa Ana de Coro, compilado en 1787 por Don Juan FranciscoVarela, Vicario Foráneo Juez Eclesiástico3, con la colaboración de Francis-co Sánchez, Notario de la Curia Eclesiástica4, en el cual se contemplandiversos tipos documentales que abordaremos oportunamente para un me-jor conocimiento de este importante expediente.

La solicitud emitida por el Obispo de Mérida fue dirigida a los VicariosForáneos, quienes representaban la autoridad eclesiástica en cada una delas cabeceras de las poblaciones pertenecientes a la Diócesis. En la misivase requería información de las rentas, bienes materiales, capacidad de aten-ción y basamentos o constituciones bajo los cuales fueron fundados cadauno de los hospitales existentes en las Vvicarías.

El cargo de Vicario Foráneo de Coro era ocupado para el momento por DonJuan Francisco Varela, quien dio inicio a la diligencia en abril de 1787 con unmandato dirigido a Don Miguel Araujo, Mayordomo del Hospital San Ra-fael, donde ordenaba comparecer por ante el Tribunal Eclesiástico con loslibros y demás recaudos para dar cumplimiento a lo mandado por el Obispo.Cuatro meses después, en agosto del mismo año, compareció el Mayordo-mo, quien era el encargado de velar por los bienes materiales de la institu-ción, además de numerosos aspectos inherentes al funcionamiento del mis-mo, con dos libros contentivos de las Constituciones y Cuentas del hospital.En ese acto se realizó una constancia del material entregado por el Mayor-domo y se decretó que los datos requeridos por el Obispo de Mérida, seríanextraídos de los mencionados libros.

De la información obtenida del primer libro, es preciso mencionar el docu-mento por medio del cual Fray Antonio de Acuña, Obispo de Caracas yVenezuela, mandó construir el hospital de esa Vicaría en el año de 1676,anexándole las Constituciones bajo las que se regiría la institución; éstas

3 Representante de la autoridad del Obispo en un territorio definido, fuera de la capital de laDiócesis.

4 Era el encargado de tomar nota y llevar los escritos oficiales en los tribunales eclesiásticos.

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contemplan desde las responsabilidades del personal, hasta el manejo de losbienes y enseres. Asimismo, y fechado dos años después, se encuentra unauto mediante el cual el Obispo Acuña incorpora la Iglesia de San NicolásObispo al hospital que mandó a edificar.

A continuación se encuentran los documentos resultantes de la Visita Pasto-ral realizada por Don Mariano Martí, Obispo de Caracas y Venezuela, en1773. Se trata de tres Autos de Visita donde se refleja la diligencia y el celocon que la Iglesia Católica velaba por este tipo de instituciones. A través delos dos primeros, el Prelado hace algunas modificaciones y añadiduras a lasConstituciones realizadas por su predecesor. Asimismo, mandó por mediode escritos oficiales a reedificar la capilla aledaña al hospital por encontrar-se arruinada, y a destinar tres libros para llevar adecuadamente el funciona-miento de la institución: uno para asentar estas provisiones, los inventariosde bienes y visitas; otro para registrar el ingreso y egreso de los enfermos; yel último donde el Mayordomo llevaría las cuentas de las rentas. El tercerescrito contiene el inventario de bienes y registro de cuentas del hospital, loscuales fueron levantados por órdenes del Prelado en la misma visita. Eneste último documento, hemos hallado un dato particular que no podemosdejar de mencionar.

Como es sabido, los inventarios son registros en los que se cuantifican ydescriben los bienes materiales pertenecientes a un determinado organismoo institución. Sin embargo, en el inventario que hemos mencionado anterior-mente, se encuentra registrado como parte de los bienes ...un mulato es-clavo de dicho hospital, de edad de cincuenta años, llamado Francis-co Joseph5. Este interesante dato nos muestra la visión de la época respec-to a la situación del personal que laboraba al servicio de este tipo de institu-ciones.

Es importante acotar que algunos de estos escritos, constituidos por copiasde los originales asentados en los libros, se encuentran sin orden cronológicoaparente, pues, tal como verá el lector y por razones que desconocemos,algunos de los documentos fueron compilados con las fechas invertidas.

5 AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; f. 17r.


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Luego de los documentos extraídos de los libros, éstos fueron devueltos alencargado de su resguardo Don Miguel Araujo, Mayordomo del hospital.

El informe concluye entre otras solicitudes de cuentas realizadas al Mayor-domo, con los testimonios de dos médicos que prestaron sus servicios en laatención de los pacientes del hospital. En las declaraciones informan el esta-do precario de las instalaciones y suministros de la institución, además delnivel de miseria y pobreza que azota a la población y que conlleva a padecerentre otras enfermedades, el gálico (sífilis).

Concluimos pues este breve recorrido por un expediente que devela datosvaliosos para el conocimiento y estudio de nuestra historia, invitando al lec-tor a elaborar su propia interpretación, el abanico de información que alber-gan estos tesoros impregnados de tiempos pasados.

Fuentes documentales y bibliográficas

Documentales

Archivo Arquidiocesano de Mérida. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc.38-005; 24 ff.

Bibliográficas

PORRAS CARDOZO, Baltazar Enrique. El ciclo vital de Fray Juan Ramosde Lora. Mérida (Venezuela): Universidad de los Andes. Ediciones delRectorado, 1992; 173 pp.

RICHARD, Carlos. Los Sacrosantos Concilios: generales y particulares.Madrid: Don Antonio Espinosa, 1793; 372 pp.

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1787, febrero 10. Mérida / 1787, octubre 4. Coro.

Informe solicitado por Fray Juan Ramos de Lora, Obispo de la Diócesis de Méridade Maracaibo al Pbro. Br. Juan Francisco Varela, Vicario Foráneo Juez Eclesiásticode Coro sobre los hospitales existentes en esta Vicaría. Solicita información sobrelas rentas, estado de su estructura, número de camas y enfermos que se atienden,así como las formalidades, fundamentos y personas que intervinieron en su erec-ción. El expediente incluye las constituciones del Hospital San Rafael de Coro,fechadas el 19 de agosto de 1678, y tres autos de visita del año 1773.

AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; 24 ff.6

//1r [roto]A Hospitales en la Diócesis/

[Dilig]encias seguidas a continuación del [orden] /3 [de su Señoría]Ylustrísima, en orden al Hospital de esta ciu-/ [dad] de Coro: 1787. /

Ynformez circunstanciadoz del /6 estado en que éstos marchan en los po-/cos lugarez en que existen estos establecimientos / de beneficencia en estaDiócesis de /9 Mérida en la actual época de 1787. /

//2r (Cruz)

[Roto] [die]z de febrero de 1787

[Nue]stros Vicarios Foráneos de esta Diócesi [sic] en relación ju-/3 [r]adanos informarán con la posible brevedad, quántos hos-/ pitales hay erigidosen la comprehensión de su Vicaría. A qu-/ ánto ascienden sus annualesrentas, espesificando por razón /6 de que fundos, capellanías, obras-pías, uotros quales quiera / proventos. Si gozan del noveno y medio de diezmosasig-/ nado por Reales Leyes, y quánto ha importado; regulando és-/9 tos, yaquéllas por los cinco años pasados desde ochenta y / dos, hasta ochenta yseis, inclusive pero con separación de añoz. / De qué departamento, distrito

6 Nota del Transcriptor: El tipo de transcripción utilizada es la Literal modificada, definidacomo aquella en la que se respeta con el máximo rigor la ortografía original del documento,con algunas salvedades: se actualizan los criterios de acentuación, puntuación y uso de mayúsculasy minúsculas, de acuerdo a las normas ortográficas y de redacción actuales. Asimismo, sedesarrollan las abreviaturas utilizando letra cursiva. La doble barra diagonal indica la ubicacióndel documento en el folio o página según sea el caso. La barra diagonal simple indica el cambiode línea o renglón en el documento original, acompañada cada tres renglones, de un numeralseñalando su ubicación exacta en el folio o página.

Las cuentas registradas en este documento se transcribieron en formato de tabla para unadecuado entendimiento del lector.


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o parroquias se deduce. Qu-/12 ánto distan los hospitales que estén dentro desu Vicaría, / de los más inmediatos de otras de la Diócesi. Qué núme-/ ro decamas hay establecidas en ellos, o quántos enfermos /15 mantiene: y si éstosno llegan a aquél número, en qué consis-/ te esta falla; o por qué razón se haaumentado. Y con qué / formalidades, o fundamentos y por qué personas sehizo /18 la primera erección. /

Y si al presente no lo huviese, desde qué tiempo, / y en qué ha estado estacarencia. En qué Reales caxas, o perso-/21 nas hase [sic] estado depositan-do el noveno y medio de diezmos, (si-/ empre expresando las parroquias, opartidos de que se deduce) / [y] lo mismo los réditos o bienes que goze, y enqué se //2v invierten, si hay alguna fábrica material de casas, u a[lgunos] /terrenos; y en qué situación, utilidad o capacidad se hallan.

/3 Si es mucho el número de los pobres enfermos del [Vica]-/ riato, quégénero de miserias y trabajos pasan en [quáles tra]-/ tamientos. Qué pro-porciones tienen para su curación, con todo [lo] /6 demás que sea condu-cente a tomar el conocimiento necesario / los particulares mencionados. /

Para cumplimiento de esta orden, que se dirijará [sic] a /9 nuestros Vicarios,podrán éstos tomar informes, hacer el es-/ crutinio de papeles o documentosque sea necesario, ver las ca-/ sas y lugares de los hospitales, y tomar quentassimples /12 a los que se digan mayordomos, e imponerse de lo más que /convenga a darnos la más puntual y exacta relación sin / pérdida de tiempopor tener que comunicarla nos a Su Merced /15 que estrechamente nos lo haencargado. Para la maior fir-/ meza de lo que se expusiere, cuidará el res-pectivo Vicario / de citar los documentos e informes de donde huviese havido/18 la noticia que exprese.

(Al margen) M /

El Obispo de Mérida de Maracaibo (rúbrica)

/21 Ante mí / Mateo José Mas y Rubí (rúbrica) / Secretario /

/24 Visto el superior decr[eto] y para efecto de [roto] el //3r más exacto cum-plimiento, con la claridad y especificación / que s[roto]nde Su Merced elSeñor Vicario dijo: que devía de /3 m[a]ndar y mandó se le haga saver aDon Miguel de Araujo, / Mayordomo del único hospital que hay en estaciudad, / y su jurisdicción comparezca en este tribunal con los li-/6 bros yrecaudos necesarios para que absuelva los parti-/ culares que se contienen

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en el superior mandato, y que / se haga todo con la brebedad más posibleque le encarga, /9 reservando Su Merced el dar las más providencias quecom-/ bengan a hacer efectivo el Informe exacto que se pide. /

Así lo decretó, y firmó el Señor Bachiller Don Juan /12 Francisco Varela,Vicario Foráneo Juez Eclesiástico, en Coro / a veinte y cinco de abril de milsetecientos ochen-/ ta y siete años, de que doy feé.

/15 Bachiller Don Juan Francisco Varela (rúbrica) /

Ante mí / Francisco Sánchez /18 Notario Público (rúbrica) /

En el mismo día yo el Notario en virtud de lo man-/ dado en el auto antece-dente, pasé a las casas de la morada /21 del Señor Procurador General, yMayordomo Interino / [de]l Hospital de Sa[n] Rafael, Don Miguel Araujo //3v a quien haviéndoselo hecho saber dijo: Que se le dar[á] / a Su Merced lanoticia por extenso, y narratiba que se /3 pide esto respondió y firmó de quedoy fe. /

Miguel Araujo (rúbrica) /

[Francisco] Sánchez (rúbrica) /6 Notario /

En diez y seis de agosto de mil setecientos ochenta / y siete años, compare-ció ante Su Merced Don Miguel /9 Araujo, quien exivió un libro grande viejode / cuentas, y otro que hizo para la Visita que hizo el / Ylustrísimo SeñorObispo Don Mariano Martí donde se halla /12 el auto de ella; y que no paranen su poder otros do-/ cumentos por no havérsele entregado: Que infiere /que el Imbentario por donde se le entregó estará /15 en el archivo del escri-bano Don Joseph de la Peña, o que / se remitirían a la Capitanía General decuia orden / recivió la Administración del Hospital, y por /18 ser así verdad, lofirmó con Su Merced, de que doy fee. /

Bachiller Don Varela (rúbrica) Miguel Araujo (rúbrica) /

Ante mí /21 Francisco Sánchez (rúbrica) / Notario Público /

El presente Notario sacará testimonio en forma /24 provante de las Constitu-ciones de la fundación de / este hospital que se [ha]llan en el libro [gra]nde//4r de cuentas antiguas y los demás autos que en él se halla-/ ren, y concier-nan al Informe que se pide, y los autos de la /3 Visita que hizo el YlustrísimoSeñor Doctor Don Mariano Martí / y co[r]ren en el otro libro de los dos queha exivido el Ma-/ yordomo, y fecho debuélbanse. Decretólo el Señor Vica-


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rio Foráneo /6 Juez Eclesiástico Bachiller Don Juan Francisco Varela, quienlo firmó / en esta Ciudad de Coro a diez y seis de agosto de mil / setecientosochenta y siete años de que doy fee.

/9 Bachiller Don Juan Francisco Varela (rúbrica) /

Ante mí / Francisco Sánchez (rúbrica) /12 Notario Público. /

(Al margen) Auto

En dos días del mes de agosto de mil seiscientos y / setenta y ocho años, elYlustrísimo y Reverendíssimo /15 Señor Maestro Don Fray Antonio González/ de Acuña, Obispo de este Obispado de Venezuela y / Caracas del Consejode Su Magestad dijo: Que por /18 quanto en la Visita que Su SeñoríaYlustríssima / ha hecho en esta dicha ciudad, se ha hallado que / la Yglesiade Señor San Nicolás Obispo, no se /21 ha servido con la decencia devida, nitener / casullas, ni los demás ornamentos necesarios para / que en ella secelebre el santo sacrificio de la /24 misa, sin embargo de ser protector deesta ciudad / y que en las necesidades se recurre a la protec-/ ción delGlorioso Santo, para que se le dé /27 el [cu]lto combeniente c[on] todo asseo,y que en //4v su yglesia se celebre el culto divino y que la gen-/ te que vive ensus alrededores, tenga donde recurrir /3 a pedir a Dios Nuestro Señor mise-ricordia, no p[u]diendo / por sí sustentarse con las rentas tenuas con que / sehalla: Haviendo consultado y comunicado esta /6 materia con personas celo-sas del servicio de Dios / Nuestro Señor, en aquel mejor modo, vía y formaque / ha lugar de derecho y Su Señoría Ylustrísima con su au-/9 toridadordinaria puede: unía y unió, e incorpo-/ rava, e incorporó, la dicha Yglesiade [sic] Señor San / Nicolás Obispo, con el hospital que para la cura-/12 ciónde los enfermos ha mandado edificar, conti-/ guo a la dicha hermita, e yglesia,haciendo las / rentas de uno y otro, unas, e incorporadas: y man-/15 dava ymandó al Maiordomo que al presente es, y en / adelante fuere del dichohospital, lo sea junta-/ mente de la dicha hermita, y el Capellán que /18 elhospital tuviere la sirva con el estipen-/ dio que en las constituciones se leseñalare; / y declarava y declaró por persona legítima /21 para cobrar, yadministrar los bienes de la / dicha hermita al Maiordomo que por tiem-/ pofuere del dicho hospital: Y a la dicha her-/24 mita nombrava y nombró porcapilla, en-/ tierro y sepoltura [sic] de la hospitalidad en la / forma que SuSeñoría Ylustrísima lo dispusiere en //5r las constituciones: y assí se guarde,cumpla y exe-/ cute perpetuamente. Y por este su auto así lo pro-/3 veyó,mandó y firmó. Fray Antonio Obispo de Cara-/ cas. Ante mí. Don JosephMelero, Notario y / Escrivano.

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/6 (Al margen) Consti-/ tuciones

Nos el Maestro Don Fray Antonio González de / Acuña, por la gracia deDios y de la Santa Sede Apos-/ tólica, Obispo de este Obispado de Venezue-la y Caracas /9 del Consejo de Su Majestad, etc. Por quanto en la / visita quehemos hecho en esta ciudad de Santa Ana / de Coro, hemos reconocido lafalta que hay de curaci-/12 ón, para los pobres a quienes principalmentedeve-/ mos procurar todo socorro maiormente en la estre-/ ma necesidad;haviendo el enemigo en el ataque que /15 hizo a esta ciudad muchos años ha,quemado la / casa e yglesia del hospital, he mandado se edifi-/ que con todaslas oficinas necesarias continuo a /18 la hermita de San Nicolás Obispo, ycon su misma / invocación: y estando su fábrica en ser, y havi-/ endo dejadocorriente sus rentas para que se acu-/21 da a la cura de los enfermos contoda caridad / y cuidado, mandamos que perpetuamente en / fuerza de Visi-ta en dicho hospital, se guarden /24 las Constituciones siguientes:

(Al margen) 1ª

Primeramente / tenga un Capellán que todos los días diga missa / en dichaHermita de San Nicolás que cuyde de /27 [el] asseo y tenga guardadas susllaves, que //5v consuele a los enfermos espiritualmente advirtiendo / alMaiordomo de las necesidades corporales que cada uno /3 tiene, y que de lafalta que huviere dé aviso al Vicario / y Juez Eclesiástico para que se reme-die. Que procur[e] que en / el hospital se guarde grande silencio. Que losenfermos /6 no juren, ni tengan conversaciones profanas; que u[nos] / yotros no se den mal exemplo, ni ocasiones de contiendas. / Que en la saladonde se curan, no entren mugeres, y si /9 huviere de entrar alguna casadaa ver a su marido, / alguna madre a su hijo, o hija a su madre, sea de día / ya puertas haviertas; que en la hermita antes del /12 toque de las Ave Marías,se rece un tercio de rosario / a Nuestra Señora en voz alta, habriendo lasrexas que caen / al hospital para que los enfermos tengan este con-/15 sueloespiritual; como también quando diga misa / para que desde sus camas laoygan; y es de su cuidado / la limpieza y asseo del hospital y todo aquelloque /18 conduce a la salud espiritual, y corporal de los do-/ lientes: y el nom-bramiento del dicho Capellán per-/ tenece al Prelado y en caso de vacantenombrar el interin pertenece al /21 Vicario Juez Eclesiástico y para su con-grua / substentación, se le señala quarenta pesos de a ocho / reales en cadaun año, de los quales cada seis meses /24 se le den veinte, yendo al gasto poriguales partes: / la hermita de los bienes que tiene, y el hospital / de lossuyos; declarando, como declaramos que si /27 el dicho Capellán no acude a


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la obligación que / tiene, o pareciere al dicho Vicario que pueda ha-//6r verotro que acuda con mas perfección, lo podrá suspen-/ der del dicho oficio ydar cuenta al Prelado para que con /3 noticia de las razones que tiene, man-de lo que jusgare / comb[e]niente: porque es nuestra intención que en dichoofi-/ cio ninguna persona tenga propiedad, sino que sea ofi-/6 c[ium] movileadnuptum.

(Al margen) 2-

Item: Mandamos que haia / un Mayordomo de toda fidelidad y caridad alqual / pertenece cobrar, como persona legítima la rentas y /9 bienes delhospital, y de la dicha Hermita de San Nico-/ lás, que desde aora unimos eincorporamos en él; cuio / nombramiento pertenece al Prelado, y el Interin /12 al Vicario Juez Eclesiástico y dicho Maiordomo ha de dar / fianzas quandoentre en el oficio de estar a derecho y / dar cuenta con pago de la adminis-tración de dicho /15 hospital y hermita.

(Al margen) 3

Item: Ordenamos y man-/ damos que el dicho Mayordomo, merque unanegra / de edad de quarenta años para que sirva en la co-/18 cina del dichohospital, y curación de los enfermos: / y un negro para que cargue agua ysirva en qu-/ anto se ofreciere y mandare: y una y otra compra /21 sea conconsulta y aprovación del Vicario Juez / Eclesiástico: y si alguno de dichosesclavos mos-/ trare no tener las costumbres combenientes /24 para estar enla casa de Dios por servientes [sic] con / consulta y aprovación de el dichoVicario se ben-/ dan y compren otros que sirvan en su lugar.

(Al margen) 4

/27 Item Mandamos que se hagan cuatro camas / [co]n colchones, sábanas,sobre camas, almoadas //6v duplicadas, todo en cada cama, porque n[o] seuse ama-/ cas, y se tenga gran cuidado en mudar ropa, en que /3 siempreesté limpia y aseada, en que los c[o]lchones / se renueven, considerandoque en cada pobre e[stá] repre-/ sentado Christo Nuestro Redemptor.

(Al margen) 5

Ytem: Ordenamos /6 que se tengan veinte y cuatro camisas para que [roto]/ van a los pobres y que las que trajeren quando lleguen / al hospital se lelaven y guarden con su ropa, para que /9 quando salgan de él, vayan tratadoscon todo agasajo. /

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(Al margen) 6

Ytem: Mandamos se tenga comprado lienzo blanco para / hacer mortajas alos que murieren en dicho hospital /12 y no tuvieren de que poderla comprar.

(Al margen) 7

Ytem: Ordenamos y mandamos se compren todos los ynstrumentos de cozi-/ na, vasos, ventozas, lancetas, navajas, paylas, librillos, /15 y demás cosasconcernientes a la buena curación y asi / mismo que el hospital tenga provissiónde gallinas y de / pollos y que se provea de todo el maíz que fuere necesario,/18 assí para el sustento de los enfermos, como para el de / los esclavos:entendiendo que en la casa de Dios, nada / ha de faltar para sus pobres, y enlas impaciencias /21 que esperimentaren, los toleren con todo amor y cari-/dad.

(Al margen) 8

Ytem: Siempre que haya médico en la / ciudad le pagarán salario, y asimis-mo al barbero /24 para que acudan con toda prontitud, y se tenga compra-/da una caja de medicinas, y se envíe a Caracas y a / otra qualquier parte porlas que regularmente son /27 necesarias, con consulta de médico: de lasquales, y de todo quanto el hospital tubiere para su servencia, / nada se dé nipreste, pena de excomunión maior. /

/30 (Al margen) 9

Ytem: Mandamos se prov[ea] de candeleros, de a[roto] //7r rrazas, de platosde peltre, de manteles pequeños, / de servilletas; y el Mayordomo en lascompras de todo /3 comunique al Vicario Juez Eclesiástico que con su fir-ma, y a-/ provación, todo se ha de pasar en cuenta.

(Al margen) 10

Ytem: Manda-/ [mos] que el hospital al toque de las Ave Marías, se cierre /6 y que a él no entren personas a combersaciones, sino solo / aquellas quefueren necesarias para alguna curación, / y el Capellán tenga gran cuidadoen la execución de /9 esta Constitución.

(Al margen) 11

Ytem: Declaramos que en / el hospital, se han de curar todas las personasblan-/ cas que tuvieren necesidad, y todos los libres, y los /12 yndios que noson encomendados. Y si los encomenderos / pidieren, curen a los de sus


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encomiendas, o los amos / a algunos de sus esclavos, se haga con todacaridad /15 a costa de los encomenderos, y de los amos, teniendo para / ellossala aparte y cuenta y razón de lo que gasta-/ ren.

(Al margen) 12

Ytem: Para que estas personas que entra-/18 ren sean examinadas en sunecesidad, y que la ha-/ cienda del hospital se gaste en los que verdaderamen-/21 te son pobres, mandamos que ninguno sea admi-/ tido sin papel y licenciafirmado del Vicario Ju-/ ez Eclesiástico, y en [sic] siendo despedido, yacombale-/24 ciente, se ajuste con el dicho Vicario el gasto que / huvierehecho extraordinario, y con este ajuste, / y no de otra manera, se pase encuenta; y el día /27 que fuere recivido en el hospital, el Capellán le [con]fiesey consuele espiritualmente dándole a conocer //7v que quieta el alma, y puestaen gracia d[e] Dios está / en perfecta disposición para recivir la del cuerpo./

/3 (Al margen) 13

Ytem: Ordenamos y mandamos que en la dicha Hermi-/ ta de San Nicolás,se ponga sagrario decente [do]nde / con toda reverencia se conserven cua-tro formas con-/6 sagradas para que de allí, el Capellán saque el Beato[Padre] / y por la puerta misma que de el hospital sale a la / hermita, conmuceta, estola, sobre pelix con luces y /9 en toque de campana lo lleve a losenfermos, y lo mismo ha-/ ga con la santa extrema unción, que tenga con-servada / en lugar decente, y para que siempre haia lámpara /12 encendidadelante del Santíssimo Sacramento. Da-/ mos licencia para que por las ca-lles los días jueves, y / domingo, y en su hermita todos los días que se dijere/15 misa, y se juntare el pueblo, se pida limosna y ésta entre en mano delCapellán para que provea / la lámpara, teniendo libro de gasto y recivo, y si/18 las limosnas no bastaren, supla el Mayordomo / de las rentas del hospitaly hermita, y si sobrare / sea del cargo del Capellán cuidar de la cera para /21 decir misa, del vino y ostias, y de la cera para re-/ zar el rosario, y faltandopara todo lo sobre-/ dicho lo provea el Mayordomo.

(Al margen) 14

Ytem: Decla-/24 ramos que los curas de esta Santa Yglesia Pa-/ rroquial loson del dicho hospital, y a ellos pertene-/ ce, como a principales, la adminis-tración de los /27 Santos Sacramentos, y el sepultar los que murie-/ ren, yque el Capellán en lo que obrare, obra com[roto] //8r su Teniente en cuia

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consideración, si muriere al-/ guna persona en el dicho hospital y dejare conqué pa-/3 gar los [d]erechos de cruz y curas, se les pague según el / arancely si no tuviere, se entierre de limosna en la / [he]rmita del dicho hospital, y elque tubiere, aunque se /6 entierre en la hermita, pague el derecho del quartotramo / para el gasto de cera y lámpara de la dicha hermita. /

(Al margen) 15

Ytem: Declaramos que si huviere alguna muger nece-/9 sitada de curación,se cure en dicho hospital en quarto / aparte: y mandamos que lo haia tam-bién para los com-/ balecientes, queriendo que no salgan del hospital hasta /12 que estén perfectamente sanos.

(Al margen) 16

Ytem: Ordenamos / y mandamos que el Vicario Juez Eclesiástico en cadaun año / ajuste las cuentas del hospital y de la hermita al Maior-/15 domoreservando la final al Prelado, o sus visitadores, / a quien haviéndolas toma-do de cuenta del estado en que / se halla la hacienda, con apercevimientoque faltando /18 a hacerlo se le hará cargo, y también las ajuste al Cape-/llán de las limosnas que en su poder huvieren entrado y / mandamos al dichoVicario, a los curas y Capellán que /21 son y por tiempo fueren, y cada unoen particular en vir-/ tud de santa ovediencia y pena de excomunión que de/ las omissiones y falta que huviere en el servicio de dicha /24 hospitalidad,siempre que las haia, dé noticia al Pre-/ lado para que las remedie.

Ytem: Porque el principal / fin de la hospitalidad es la caridad, y la devemosusar /27 con las almas de nuestras ovejas, mandamos al Vicario / [Ju]ezEclesiástico, a los curas propietarios, y al Capellán //8v de dicho hospital quecontinuadamente visit[e]n los enfer-/ mos, les hagan exortaciones y pláticasespirituales, /3 les lean libros de devoción, los confiesen, les as[is]tan en la /ora de la muerte encomendándoles el alma, tocándo [roto] cam-/ pana a lasagonías, haciendo la señal de la santa extr[e]ma /6 unción, les canten misaquando mueran esperando la [palabra] / de Dios que lo promete, diciendoque lo que se hace por el menor de sus pobres, se hace por su Di-/ vinaMagestad. Y el Vicario Juez Eclesiástico pro tempore que /9 con la autori-dad del Prelado es el Juez de la dicha hospita-/ lidad y a quien pertenece elgobierno de ella, procure por to-/ dos los medios el alivio, los socorros, laslimosnas de los /12 pobres, haciendo memoria de que representando la perso-/ na del Obispo, ha de dar cuenta en el Tribunal de Dios de las / más levesomisiones que tubiere. Dadas en esta ciudad de /15 Santa Ana de Coro, a


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diez y nueve días del mes de agosto / de mil seiscientos y setenta y ochoaños. Fray Antonio / Obispo de Caracas. En el mismo día mes y año, SuSeño-/18 ría Reverendísima en fuerza de visita añadió a estas constitu-/ciones las siguientes:

Ytem: Ordenamos y mandamos / que el día del glorioso San Nicolás y el díaoctavo se cele-/21 bren, como siempre se ha hecho con vísperas, tercia, mi-/ sa mayor y procesión, y que por cada uno de los dichos / días, se pague alos curas, como hasta aquí se ha hecho /24 seis pesos de a ocho reales y lacera, olores y lo demás se pida de / limosna al pueblo que está devajo de laprotección del / santo, y todo lo que faltare se dé y pague de las rentas de la/27 hermita y de la hospitalidad.

Ytem: Asimismo man-/ damos que para cubrir la yglesia y hacerle su sachris-//9r tía se pida limosna y todo lo que faltare se pague de los / mismos efecttos,fechas ut supra. Fray Antonio Obispo /3 de Cara[ca]s. Por mandado delObispo Mi Señor: Don Joseph Melero, Secretario. /

Conc[uer]da con las diligencias originales de su contenido que se hallan /6

en el l[i]bro mayor viejo de cuentas, que comienzan del folio 17 buelto /hasta el 20: cuio libro comienza por un auto para tomar cuentas / al Mayor-domo del hospital, su fecha en esta ciudad de Coro en tres/9 días del mes deagosto de mil seiscientos setenta y seis, por el Señor / Licenciado Don JuanAgustín de Palma, Comisario del Santo Oficio / en propiedad de la ciudad deValencia, Chantre de la Yglesia Catedral /12 de Caracas, Vicario Juez Ecle-siástico y Visitador General de este Obispado de / Venezuela por elYlustrísimo Señor Maestro Don Fray Antonio González de / Acuña, Obispoque fue de dicho Obispado, a que me refiero y en cum-/15 plimiento del autoantecedente lo debuelbo al Mayordomo. Co-/ ro y agostto veinte y dos demil setecientos ochenta y siete años. / Emmiendo, debuelbo, vale. /18 Entesttimonio de verdad: /

Francisco Sánchez (rúbrica) / Notario Público /21 de Oficio /

(Al margen) Auto / de visita / del Señor / Martí.

En la ciudad de Santa Ana de Coro, a veinte y cuatro [tachado] / de diciem-bre de mil setecientos setenta y tres años /24 El Ylustrísimo Señor DoctorDon Mariano Martí, Dignísimo / Obispo de esta Diócesis del Consejo de SuMagestad //9v haviendo visitado el Hospital Real de esta dicha / ciudad, yreconocido su fábrica material, ornamentos, /3 vasos sagrados, enfermería,

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y todas las demá[s] cosas / que le pertenecen en virtud de particularcom[i]sión / y encargo de Su Magestad (que Dios guarde) en consecu-/6

encia de ello, y con atención a las Reales Cédulas de d[iez] / y ocho dediciembre de setecientos sesenta y ocho, y / de catorce del mismo mes delde sesenta y nueve, rela-/9 tivas a otras anteriores y a la Ley Real con quecon-/ cuerdan, y teniendo presente lo prevenido por las Sy-/ nodales de esteObispado y el ymbentario fecho en la /12 presente Visita, y resulta de lascuentas dadas por el / actual ynterino Mayordomo y todo lo más que verse/ y considerarse, convino. Su Señoría Ylustrísima dijo: que para /15 quedicho hospital sea administrado con la devida / exactitud conforme a laspiadosas Reales intencio-/ nes, devía de mandar, como mandava y mandó, /18 se observe y guarde lo siguiente: Que con la / mayor brevedad posible sereedifique la capilla / aruynada [sic], con materiales fuertes y durables para/21 que los pobres puedan oyr misa los domingos, y / días de fiesta y que elCapellán nunca omita decir-/ la en ella en los citados días, encargándola aotro /24 sacerdote quando tenga impedimento legítimo. / Que respecto a quepor indecentes e inútiles se han / mandado consumir algunos ornamentos, seha-/27 gan tres nuevos, estto es, traer casullas con todos / sus adminículos delos colores que más se necesi-/ ten a disposición del Capellán y que sean deda-//10r masco para su maior duración. Y que también se ha-/ gan dos albas,dos juegos de corporales con su altaris [sic], /3 purifica[ci]ones y un superhumeral precediendo la re-/ dificación de dicha capilla. Que el capellán ten-ga si-/ [em]pre proveída la ampolleta del Santo Óleo para ad-/6 ministrarlo asu tiempo a los enfermos, y que ocurra / por el necesario a los curas de estaparroquial [sic]; que ayu-/ de a bien morir a los moribundos, y los consueley aliente /9 espiritualmente. Que sin embargo de que hasta / la presente atítulo de erección, sólo se han mantenido / ocho camas para otros tantosenfermos, siempre que /12 estando todas ocupadas, ocurriere otro, se recivay a-/ sista como a los demás, y se extienda esta admissión / hasta aquelnúmero que pueda sufrir la anual renta /15 de dicho hospital con que serádistribuida conforme a su / piadoso Real destino. Que al tercero día de haver/ entrado los enfermos en dicho hospital, o antes si hu-/18 viere urgencia,hayan confesádose y recivido la sa-/ grada comunión si fueren capaces,ocurriendo el / Capellán a la parroquia en el ynterín que pueda co-/21 locarseel Santísimo Sacramento de el Altar en la / mencionada capilla y que así,dicho Capellán como / el Mayordomo, visiten diariamente a los enfermos /24

para su cumplida asistencia espiritual, y corpo-/ ral, y si al tiempo de moriralguno declarare te-/ ner algunos bienes, y dispusiere de ellos, deverá ser


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só-/27 lo de aquellos que sobraren pagados los costos que causó / a dichohospital en su curación y asistencia. //10v Que se haga en libros de docientasfoxas donde a su prin-/ cipio se ponga copia auténtica de esttas providencias/3 y del ymbentario y Visita para que siempre conste / el govierno y estadode dicho hospital; y dos de cie-/ nto y cincuenta foxas, el uno para sentar lasentradas /6 y salidas o muertes de los enfermos con fecha d[e] / día, mes yaño; y el otro para que se lleve la cuenta / de lo que entra en poder de dichoMaiordomo de sus /9 rentas y bienes de que se hará cargo por ramos /ceparados, y también con fecha de día, mes, y año; / y observará lo mismoen los gastos, continuando /12 su cuenta en el libro que ha manifestado. Que/ se cierren las puertas de dicho hospital a el toque / de la Ave María, a elanochecer y no se consienta /15 que los hombres entren al quarto dondehuviere / mugeres, y éstas donde huviere hombres; y se / tenga particularcuydado del aceo y limpieza /18 de la enfermería, aposentos y oficinas dedicho / hospital, haciéndolas barrer dos veces en cada / semana o más fre-cuentemente según la urgen-/21 cia. Que se compren y tengan custodiados /con el correspondiente aceo y distinción devida, / las medicinas de botica, ysimples más usuales /24 y precisos en estas partes para la curación de los /enfermos, y se concierte el médico de la maior / satisfacción brindándoleposada en dicho hos-/27 pital a que podrá destinar el quarto del Ma-/ yordomo,respecto a que jamás se ocupa porque //11r todos tienen casa propia y lo quedevía gastar en al-/ quileres de ottra casa, puede servir de aiuda a su sa-/3

lario, c[o]ntarse con aquel con que se combinieren. / Que saoliciten [sic] ycompren dos esclavos útiles, varón y / hembra que sean casados para elservicio de dicho hospi-/6 t[a]l, que cuiden los enfermos, sirvan a la cozina,trai-/ gan agua, y lo demás que fuere preciso, los quales estarán / sujetos alMayordomo y éste deverá cuidar que vivan /9 areglados [sic] y conforme asu piadoso y santo destino; y / los contribuirá con las devidas subsistenciasllevan-/ do por ramo ceparado este gastto. Que en atención a que /12 paraestas providencias es indispensable un gastto / mui crecido, y en las RealesCaxas Matrices de la / Ciudad de Caracas hay porción de pesos deposita-dos /15 pertenecientes a las rentas y bienes de este dicho / hospital, y elactual Mayordomo precediendo la / correspondiente fianza, ocurra a pedir-los al Señor /18 Governador y Capitán General de esta Provincia / con tes-timonio de esta providencia, y que en lo / succesivo, sin intervención y man-dato de Su /21 Señoría Ylustrísima no se extraiga dinero alguno / pertene-ciente a dicho hospital: pues como bienes / suyos deve mantenerse todo elque produjeren /24 sus rentas en poder del Mayordomo para dis-/ tribuirlo

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conforme a su destino. Todo lo qual / mandó Su Señoría Ylustrísima seobserve, guarde y /27 execute puntualíssimamente sin yr //11v ni venir encosa alguna de su contenido; y así lo prove-/ yó, mandó y firmó de que doyfee. Mariano Obispo /3 de Caracas. Ante mí: Joseph Joaquín de Soto Secre-ta-/ rio y Nottario de Visita. Concuerda con el auto ori-/ ginal de su conteni-do a que me remitto, y en virtud de /6 lo que en él se manda, hice sacar,correjí y concerté e[s]-/ ta copia y lo firmé en Coro a veinte y cinco dediciembre / de mil setecientos setenta y tres años.

(Al margen) Otro / auto

En la ciudad /9 de Santa Ana de Coro, a veinte y dos de diciembre / de milsetecientos setenta y tres años, el Ylustrí-/ simo Señor Docttor Don MarianoMartí Dignísimo /12 Obispo de esta Diócesis del Consejo de Su Magestad, /haviendo visto estos autos obrados sobre el / ajuste y liquidación de lascuentas que por es-/15 pecial comissión y encargo de Su Magestad / queDios guarde (se han tomado de Don Miguel / Araujo de la administración deel Real Hos-/18 pittal de esta dicha ciudad que ha esttado a su / cargo comoMayordomo Ynterino desde / primero de maio del año de setenta y uno /21

hasta treinta de abril del que rige, cuya / liquidación se ha hecho sin interven-ción / y asistencia del Señor Vice Patrono Regio /24 por no haver concurridoDon Mazí Carrera / Teniente Justicia Mayor de esta referida //12r ciudad,aunque para este efecto fue citado, como co-/ misionado del SeñorGovernador y Capitán General /3 de esta provincia, según consta en estosautos: y no de-/ viendo suspender el curso de la Santa Visita que desea /[Su] Señoría Ylustríssima se concluya con la mayor bre-/6 vedad posible, nimenos dejar pendientes dichas / cuentas por ser uno de los negocios reco-mendados de / ella, determinó mandarlas liquidar, y ajustar según /9 los do-cumentos producidos, los que vistos por Su Señoría / Ylustrísima y teniendopresente su mérito y la mencio-/ nada liquidación con todo lo más que versey con-/12 siderarse convino, dijo: que havía, y hubo las / expresadas cuentaspor buenas, fieles, y legales / y declarava y declaró que el cargo que co-rresponde /15 a dichos dos años de su administración, no deve / ser en los unmil nuevecientos [sic] treinta y tres / pesos, cuatro y medio reales que su-man las dos /18 relaciones de su ingreso, sino en dos mil cuatroci-/ entosnoventa y un pesos y siete reales por agre-/ garle, como le agrega, quinien-tos cincuenta y /21 ocho pesos, dos y medio reales que según la razón /tomada en estos autos dejó de cobrar de varios / inquilinos censuatarios dedicho hospital /24 sobre que no produce documento alguno; y aun-/ que di-


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chos réditos no cobrados importan seteci-//12v entos ocho pesos, dos y me-dio reales, se han excluido de es-/ ta agregación sesenta pesos de los he-rederos de Doña Ana /3 de la Colina; quarenta pesos de los del Doctor DonFernando / de la Madriz, y cincuenta pesos de los de Don Leonidas Bor-/jes, porque todos estos bienes están en concurso de a[c]re-/6 hedores pen-diente en el fuero Real según Su Señoría Ylustrísim[a] / está bien ynformadoy con esta exclución quedan los / expresados quinientos cincuenta y ochopesos dos y /9 medio reales que se agregan a dicho cargo; y que / el descar-go no deve ser conforme se suma en / las dos relaciones, ni como lo estimael glosador /12 sino en la cantidad de dos mil ciento septenta pesos / tres ymedio reales que importan los gastos de di-/ chas dos relaciones, sin contarla encomienda, ni el /15 alcance de la primera que incluye por data en la /segunda; porque haviendo satisfecho suficientemente / a las obligacionesque puso dicho Glosador; en quanto /18 a las ropas y esteras, le pasa SuSeñoría Ylustrisíma / todas sus partidas, a los precios que expresa por /menor en su manual, bien informado de ser /21 los regulares a que se bendenen estas partes, / y porque los gasttos hechos en la formación del li-/ bro yen el concertado para la asistencia a los /24 enfermos son legítimos, respectoa que dicho / libro lo destinó para llevar la cuenta de lo que //13r se gastta abeneficio del referido hospital y que havi-/ endo mantenido en todo estetiempo, porción de enfer-/3 mos según parece del quaderno de entradas ysalidas / fue razonable dicho concierto, pues con un criado solo que / [roto]dicho hospital, no podría asistirlos con la exac-/6 titud correspondiente, me-diante lo qual deduciendo / los dichos dos mil ciento septenta pesos, y tresreales y me-/ dio [tachado] que suma dicho descargo, de los dos mil cuatro-/9 cientos noventa y un pesos y siete reales que importa el car-/ go, dejan afavor de dicho hospital trescientos veinte / y un pesos tres y medio reales, delos quales revaja nobenta /12 y nueve pesos, cinco reales, trece maravediz, ytres quintos / que importa la justa encomienda del cuatro por ciento / perte-neciente a dicho Mayordomo por el motivo por /15 el motivo [sic] de que sele ha hecho cargo y queda por último / alcance contra dicho Mayordomo lacantidad de dos-/ cientos veinte y un pesos, seis reales, tres maravediz /18 ydos quintos que Su Señoría Ylustrísima declaró por / legítimo, y mandó sehaga cargo de ellos por pri-/ mera partida para las quentas subcecuentes.Con /21 lo que aprobava y aprovó dichas cuentas en la maior / forma que porderecho lugar haya, y en ellas interpo-/ nía, e interpuso su autoridad y decre-to judicial, /24 para su maior validación, y mandó / que dicho Mayordomocontinúe las diligencias sobre la / conclución de los concursos pendientes en

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que es //13v acreedor dicho hospital hasta verificar solu[t]os y asegu-/ radoscon fincas y fianzas bastantes los principales de los /3 censos y satisfechoscumplidamente sus réditos y que / pida se aseguren de nuevo con la integri-dad que se requie-/ re, todos aquellos principales de censos cuyas escritu[ra]s/6 pasan de diez años y aquellos cuyos principales, o f[i]a-/ dores han finado,o se aseguran por sola obligación / llana, no omitiendo en su razón quantasdiligencias /9 judiciales y extra judiciales fueren necesarias / hasta su efecto,y que en lo succesivo no dé ni con-/ sienta se den, ni traspasen dichoscapitales sin for-/12 mal escritura, con fincas libres y valiosas en el / quartotanto y con fianzas de avono conocido pues / por haverse hecho algunas sinesta devida formali-/15 dad y atención se hallan algunos capitales litigio-/ sosy a riezgo de perderse por lo que Su Señoría Ylustrísima reserva el / dere-cho de dicho Real hospital contra los mayor-/18 domos que han hecho ypermitido dichos traspasos / y apercive al actual y a quantos en lo succesivo/ exercieren el oficio de tales que serán responsa-/21 bles a todas las pérdi-das que por ellos resultare, / como también a todos los réditos que por sunegli-/ gencia se hicieren incobrables; y para la tasaci-/24 ón de estos autosmandó se lleven a Don Pedro Ro-/ dríguez, Notario de esta Vicaría a quienla / comete, y que de ella se ponga razón en el libro //14r mayor de dichohospital, con testimonio de este auto / por el qual a[...] Su Señoría Ylustrísimalo proveyó, mandó y firmó /3 por ante mí el Notario de Visita de que doy fee.Ma-/ riano Obispo de Caracas. Ante mí José Joaquín de / S[ot]o, Secretarioy Nottario de Visita. Concuerda /6 con el auto original de su contenido a queme remito / y en virtud de lo mandado hice sacar, corregí y concer-/ té estacopia en Coro a veinte y cinco de diciembre de /9 mil setecientos setenta ytres años. En testimonio de / verdad. Joseph Joaquín de Sotto Secretario, yNota-/ rio de Visita.

(Al margen) Otro:

En la ciudad de Coro a veinte y /12 cuatro de julio de mil setecientos setentay tres / el Ylustrísimo Señor Doctor Don Mariano Martí, por / la gracia deDios y de la Santa Sede Apostólica, O-/15 bispo de Caracas y Venezuela delConsejo de Su Majestad, etc. / Hallándose entendiendo en su Santa Pasto-ral Vi-/ sita y deliverado desde luego hacer la del hos-/18 pital Real de ella,vajo el título de San Rafael / destinado para curación de enfermos pobres,pro-/ cediendo en la ejecución, y práctica de ella por par-/21 ticular comissióny encargo con que se halla / de Su Magestad (que Dios guarde) para visitarlos hospi-/ tales de su Real Patronato, tomar quentas /24 a sus mayordomos


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y administradores y en eje-//14v cutar lo demás en virtud de dicha comissión,y en-/ cargo que consta de la Real Cédula expedida para /3 estas yndias, sufecha en Madrid a diez y ocho de / diciembre de mil setecientos sesenta yocho, com-/ prensiva de otra de treinta y uno de diciembre [d]e /6 mil seis-cientos noventa y cinco, y de lo declarado / por otra posterior de catorce dediciembre de mil se-/ tecientos sesenta y nuebe, expedida particularmente /9 y de la Ley Real con que concuerda: Pasó al mencio-/ nado hospital enque recivieron a Su Señoría Ylustrísima / el Capellán de el Bachiller DonJuan Francisco Varela y /12 su Mayordomo Administrador Don Miguel de /Araujo, conduciéndose a la capilla, reconoció su/ fábrica material arruinada;visitó la sa-/15 cristía, vasos sagrados, ornamentos y demás ala-/ jas del cultodivino; reconoció la enfermería en / que halló ocho camas y en la actualidad,cinco en-/18 fermos, tres hombres y dos mugeres, para cuia / asistencia, ydemás oficios de servidumbre hay / destinados un hombre y una mugercosteados /21 por el mencionado hospital; informándose como / se informó aSu Señoría Ylustrísima por los dichos Capellán / y Mayordomo no haver enél botica, médico /24 ni sangrador destinado, y éste último se busca / quandoocurre necesidad, y finalmente //15r visitó y reconoció Su Señoría Ylustrísimalas demás oficinas / y fábrica material de dicho hospital y utencilios /3 de suuso, mandando como mandó que de todos y / sus rentas se hiciese ymbentarioformal que / procede como se sigue: Primeramente la capi-/6 lla de dichohospital vajo el mismo título de / San Rafael, cuyas paredes arruynadas son/ por la parte de dentro y fuera de ladrillo, y mez-/9 clote, y el centro deadoves sin techumbre / alguna a exepción de la capillita que sirve / depresviterio que es toda de ladrillo, con un /12 viejo techo de teja sobre alfalderíay tabla. / La longitud de dicha capilla principal es de diez y / siete varas,poco más, y seis de latitud sin in-/15 cluir el presviterio, que es de siete varasde / largo desde la ínfima grada y del mismo ancho / que la capilla, la qualtiene por la parte de avajo /18 el cañón seguido una pieza del propio ancho /y ocho varas poco más de largo en que ocurren / a oyr misa los enfermoscombalecientes, y /21 gente de servicio y se halla dividida de la / capilla conarco toral, y en medio una reja / grande de balaustre, haciendo esta fábrica//15v con el zaguán, o entrada principal del hospital / frente a la calle real enmitad de una quadra. /3 Ytem: al lado del presviterio por la parte interior / delhospital una sacristía de cinco varas de largo / y tres de ancho fabricada deadoves. Alajas y /6 ornamentos. Ytem: un cálix con su patena de pla-/ tadorado. Ytem: un par de vinageras con su platillo / también de plata. Ytem:un coponcito para óleos. Ytem: /9 una Piedra de Ara, y un crucifixo para

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ayudar / a bien morir. Ytem: un misalito con su atril y / un manual. Ytem: /una casulla de raso enjoyado /12 con su estola, manípulo, volza y velo de cáliz/ decente. Ytem: otra casulla de dos caras verde y / morado con solo estolay manípulo. Ytem: otra ca-/15 sulla de perciana con zenefa blanca maltrata-da. / Ytem: una [sic] alba de bretaña basta. Ytem: una sobre / pelliz deBretaña nueva con encajes. Ytem: una /18 cajeta de madera para guardarhostias. Ytem: / unas tablas de sacras maltratadas. Ytem: un / cajoncito demadera con ocho purificadores. Ytem: /21 una estola negra para entierrosvieja. Ytem: / una efigie de Christo Crucificado de escultura de / media varade alto. Ytem: siete quadros dife [sic] //16r de diferentes efigies bien trata-dos. Ytem: un petate / de altar maltratado. Ytem: una campanilla ma-/3 nual.Ytem: ottra dicha grande. Ytem: en la sacristía / una al[a]cena compuestade balaustres. Ytem: una / mesa para revesttirse los sacerdotes de cajón, enque /6 se guardan los ornamentos. Ytem: dos candeleros / de peltre. Ytem:una reja de confesonario con su silla. / Ytem: la fábrica material del referidohospital de pa-/9 redes de adoves y techumbre de teja claustrada de / corre-dores, saguán y ocho aposentos, cozina y un trán-/ cito que sale al solar; yde los dichos ocho aposentos, /12 los cuatro son para los enfermos no conta-giosos, otro / para los éticos, otro para el Capellán y los dos restan-/ tes paralos sirvientes y guardar los utencilios /15 y en el pattio un aljive construido deladrillo, con / su bóbeda, suelo de argamaza y ladrillo de cin-/ co varas ymedia de hondo, y cuatro varas de ancho. /18 Ytem: en los aposentos de losenfermos ocho catres con / el de éticos; ocho colchones, dos de lana, y losseis / de paja; catorce sávanas de roan y dos de coleta, /21 seis almoadas detrivan y otra [sic] llenas de lana; una man-/ ta nueva de lana, seis etteras[sic] nuevas para las ca-/ mas, ocho camisas nuevas de listtado, dos cami-sones /24 de Ron para mugeres, dos dichos de coletta para hombres; //16v

una caja de madera en que se guarda la ropa de los en-/ fermos, un bufetegrande de cedro; tres mesas pe-/3 queñas de madera de cardón viejas; cincosillas gran-/ des, y cuatro silletas con respaldos de suela y asi-/ entos bientratadas; un escaparate pequeño con /6 dos cajoncittos de madera de cardóncon serradura / y llave. Ytem: ocho banquetas, una batea de ce-/ dro, unlibrillo de losa, unas andas de madera /9 nuevas para enterrar los difuntos,una geringa de bronce, un baso de christal, siete cucharas de / madera, tresvasos de taparo y coco viejos, una ba-/12 rra de fierro usada, una pala, unaazada y una / hacha viejas, un almires de bronce con su mano, / dos pizonesde madera útiles, un budare de fierro /15 nuevo, un asador de fierro, uncántaro chocolatero / de cobre nuevo y otro viejo con su molinillo de / made-


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ra, una piedra de moler maís buena, ocho /18 platos de porcelana buenos,ocho cucharas de esta-/ ño y de madera, una tina de losa de Veracruz /grande, tres tazas de losa fina para tomar cal-/21 dos, dos baldes de maderacon arcos de fierro / otros dos dichos medianos también con arcos / de fierropara sacar agua del aljive. Ytem: /24 porción de maderaje en que se incluyenunas / puertas, y también tejas y ladrillo, fragmentos //17r de la cayda de lacapilla y algunos clavos rotos. / Ytem: un mulato esclavo de dicho hospitalde edad de /3 cincuenta años, llamado Francisco Joseph. Ytem: una / rejagrande de madera. No se imbentarían por / in[ú]tiles un mantel, y un paño demanos de roan, /6 doce servilletas, y otro paño de manos de coleta, once /cortinas de cama y una de puerta, una estoza, siete / platos de barro, dosbasos de lo mismo, y una palia de /9 Bretaña, y un frontal de razo.

Escrituras / y libros pertenecientes a dicho hospital. /

(Al margen) 500 Primeramente una escritura de quinientos pesos /12 de principal, contra Don Juan de Acosta, otorgada a cua-/ tro de septiembre de mil setecientos quarenta y tres (te-/ níalos Don Francisco Rodríguez Olivares) ante Don Agustín /15 Lagares, Escrivano.

(Al margen) 300 Ytem: otra dicha de trescientos / pesos de principal contra el mismo Don Juan de Acosta, / otorgada a quince de septiembre de mil setecientos /18 quarenta y cuatro ante Don Francisco Chirinos, / Alcalde Ordinario; y son los que tenía Pedro Joseph / Miquilena.

(Al margen) 500 Ytem: otra dicha de quinientos pesos /21 de principal contra Don Ysidro Navarro, otorgada a / veinte y cuatro de septiembre de mil setecientos / cincuenta y cinco ante Don Joseph Bernardo /24 de Peña, Escrivano; y son los que tenía Doña Juana Mari-/ na de la Colina.

(Al margen) 300 Ytem: otra dicha de trescientos pesos / de principal contra Pablo Fernández, otorgada a diez /27 y nueve de agostto de mil setecientos quarenta /

(Al margen inferior) 1600

//17v (Al margen superior) 1600 y tres ante dicho Lagares; y son los que tenía el Maestre /3

de Campo, Don Pedro de la Colina. (Al margen) 300 Ytem: otra dicha de / trescientos pesos de principal contra

Juan del Prado / Aular, otorgada a diez de junio de mil setecien-/6 tos sesenta y nueve ante Don Gerónimo Davalillo, / Escrivano; y son los que tenía Mateo Gutiérrez. /

9

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(Al margen) 540 Ytem: otra dicha de quinientos y cuarenta pesos de prin-/9 cipal contra Don Joseph de Thellería, otorgada / a veinte de noviembre de mil setecientos sesenta / y nueve ante dicho Don Joseph Benardo Peña, y son /12 los que tenía el Maestro Don Cristóval Chirino.

(Al margen) 320 Ytem: otra dicha de trescientos y veinte pesos de principal / contra Marcos Damián de Peña, otorgada a ocho /15 de noviembre de mil setecientos treinta y dos / ante dicho Escrivano Lagares; y acumulada / a ella una obligación de Don Juan de Medina fecha /18 en veinte y uno de julio del año de cincuenta y dos / por la que es obligada a su reconocimiento Doña Ma-/ ría Francisca de Medina, heredera de dicho Don Juan.

(Al margen) 300 /21 Ytem otra dicha contra Tomás Santiago de la Cruz de trescientos pesos de principal otorgada a veinte de / septiembre del de [sic] cincuenta y uno ante dicho Escrivano /24 Peña, los mismos que tenía Gabriela de la Cruz / y que al presente deve reconocer Don Rafael Obertto. /

(Al margen) 700 Ytem: otra dicha de setecientos pesos de principal contra /30 (Al margen inferior) 3760

//18r (Al margen superior) 3760 Don Pedro Damián Sánchez, otorgada a veinte de di-/3

ciembre de mil setecientos sesenta y nueve ante / dicho Escrivano Peña; y son los que tenía Don Die-/go Sánchez.

(Al margen) 400 Ytem: Otra dicha de cuatrocientos pesos /6 de principal contra el Licenciado Don Juan Gaspar de / la Peña Naveda, otorgada a trece de diciembre / de mil setecientos y veinte ante dicho Escrivano /9 Lagares; y son los que tenía Don Juan Ferrera Barreto. /

(Al margen) 60 Ytem: otra dicha de sesenta pesos de principal contra Juan / Mateo Olivera, otorgada a diez de abril de mil /12 setecientos sesenta y nueve ante dicho Escriva-/ no Don Gerónimo Davalillos, y son los que tenía / Ygnacio Joseph Olivera.

(Al margen) 300 Ytem: otra dicha de trescien-/15 tos pesos de principal contra Francisco Prudencio Marín, / otorgada a uno de agosto de mil setecientos seten-/ ta y uno ante dicho Escrivano Davalillos; y son /18 los que tenía Nicolás Tolentino Laguna. /


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(Al margen) 200 Ytem: otra dicha de doscientos pesos de principal contra Don / Juan Joseph Campuzano, otorgada a ocho de mar-/21 zo de mil setecientos sesenta y nueve ante dicho / Escrivano Don Joseph Bernardo Peña, y son los que tenía / el Nottario Don Pedro Giran difunto.

(Al margen) 200 Ytem: otra dicha /24 de doscientos pesos de principal contra Joseph de Mora / otorgada a veinte y tres de mayo de mil setecien-/ tos cincuenta y dos ante dicho Escrivano Peña, y son /

/27 (Al margen inferior) 4920

//18v (Al margen superior) 4920 los que tenía Don Juan Bautistta Oberto; y los deve reco-/3

nocer Petrona Morillo. (Al margen) 200 Ytem: ottra de doscientos pesos / de principal contra Don

Andrés Manuel de Goribar-/ goytía, otorgada a veinte y ocho de noviembre de mil /6 setecientos sesenta y siete ante dicho Escrivano Pe-/ ña, y son los que tenía Don Andrés de Goribargoytía. /

(Al margen) 300 Ytem: otra dicha de trescientos pesos de principal contra Don /9 Andrés Davalillos, otorgada a diez de diciembre de diciembre de / mil setecientos sesenta y siete ante el mismo Da-/ valillos como Escrivano; y son los que tenía Don Juan Estevan /12 de Olazaval.

(Al margen) 100 Ytem: otra dicha de cien pesos de principal / contra Joseph Colina, otorgada a diez de mayo de / mil setecientos setenta y uno ante dicho Escrivano /15 Peña; y son los que tenía Gracia Montero.

(Al margen) 250 Ytem: / otra dicha de doscientos y cincuenta pesos de principal / contra Pablo Fernández, otorgada a veinte y ocho de /18 mayo de mil setecientos quarenta y nueve ante / dicho Escrivano Peña.

(Al margen) 400 Ytem: ottra dicha de cuatrocientos / pesos de principal contra Don Francisco Garcés otorgada en /21 veinte y uno de junio de mil setecientos cincuentta / y uno ante Don Martín Davalillos Escrivano; y son los que / tenía Doña María Ana del Barco.

(Al margen) 310 Ytem: ottra dicha /24 de trescientos y diez pesos a principal contra el Capitán Juan / Ygnacio Ruydano difunto, otorgada en veinte y tres /

/27 (Al margen inferior) 6480

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//19r (Al margen superior) 6480 de mayo de mil setecientos sesenta ante Don Andrés Da-/3

valillos Escrivano; y son los que tenía Don Miguel Tremón / y los deve reconocer su madre Juana de la Cruz como he-/ redera.

(Al margen) 200 Ytem: otra dicha de doscientos pesos de principal contra /6 Francisca de Nava, ottorgada en uno de junio de mil seteci-/ entos cincuenta y seis ante dicho Escrivano Peña; y son los / que tenía Pedro Francisco de la Cruz.

(Al margen) 260 Ytem: otra dicha de dosci-/9 entos y sesenta pesos de principal contra Pablo Fernández, / otorgada a veinte y cuatro de diciembre de mil setecien-/ tos cincuenta ante dicho Escrivano Peña, y son los que /12 tenía el Capitán Don Sebastián de Granadillo.

(Al margen) 400 Ytem: / otra dicha de cuatrocientos pesos de principal contra Don Ma-/ nuel Ruiz Gámez, otorgada a treinta de junio de mil /15 setecientos sesenta ante dicho Escrivano Don Andrés Da-/ valillos; y son los que tenía Don Pedro Joseph Martínez y / los deven reconocer nuevamente los herederos /18 de Don Féliz Borxes difunto como su fiador.

(Al margen) 200 Ytem: otra / de doscientos pesos de principal contra Doña Ana Eufemia de Pi-/ ña otorgada a diez y siete de abril de mil setecientos /21 quarenta y nueve, ante el citado Don Joseph Bernardos [sic] / Peña Escrivano los quales deve reconocer Don Antonio Guillén, / en quien existen al presente.

(Al margen) 3140 Ytem: otra dicha de tres /24 mil ciento y cuarenta pesos de principal contra los herede-/ ros de Don Luis de Casttro que lo son Doña Gerónima

(Al margen inferior) 10680 //19v (Al margen superior) 10680

Doña María Josefa, Doña Juana María y Doña Micaela, /3 otorgada en tres de febrero de mil setecientos sesenta / y nueve ante dicho Escrivano Peña, y junto con ella / tres escrituras otorgadas por el dicho Don Luis de Casttro /6 la una en treinta de abril de mil setecientos veinte y / tres por ante Don Pedro Peroso, Alcalde Ordinario, de dos / mil y quinientos pesos; otra de trescientos y noventa pesos /9 en quince de mayo de mil setecientos veinte y seis / ante Don Fernando Bracho, Alcalde Ordinario, de los / quales sólo son del cargo de dichos herederos, los nobenta /12 pesos por haver redimido los trescientos en Juan / Francisco Leáñez. Y la ottra de quinientos y cincuenta / otorgada en trece de febrero del año de cincuenta y uno /15 ante dicho Escrivano Peña; y los principales de estas / escrituras son los mismos reconocidos por las mis-/ mas sus herederas.

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p(Al margen) 300 Ytem: ottra dicha de trescientos pesos /18 de principal contra

Juan Francisco Leáñez, ottorgada / a beinte y siete de noviembre de mil setecientos / sesenta y siete ante dicho Escrivano Peña, los mis-/21 mos de la redención que se dicen en la partida antecedente. /

(Al margen) 1000 Ytem: otra de mil pesos de principal contra Don Juan Bautista / Oberto otorgada en veinte y siete de noviembre de /24 sesenta y cinco ante dicho Escrivano Peña. /

(Al margen) 500 Ytem: otra dicha de quinientos pesos de principal contra Juan /


//20r (Al margen superior) 12480 Mateo Gómez otorgada a seis de febrero de sesenta por /3

ante Don Andrés Davalilloe Esscrivano, los mismos que tenía / Don Juan Saldivia.

(Al margen) 1100 Ytem: otra dicha de mil y cien pesos de principal / contra Don Pedro Bravo, otorgada a catorce de mayo de quaren-/6 ta y nueve ante dicho Escrivano Peña, los mismos que tenía / Don Francisco Riveros, y oy deve reconocer Don Pedro Yánes. /

(Al margen) 350 Ytem: otra dicha de trescientos y cincuenta pesos de principal, /9 contra Gaspar de los Reyes, otorgada en diez y nueve de dici-/ embre del año de treinta y tres ante dicho Escrivano Lagarez, / y son los mismos que tenía Don Pedro Sangronis, y oy deve re-/12 conocer Don Anttonio Guillén.

(Al margen) 225 Ytem: ottra dicha de doscientos / y veinte y cinco pesos de principal conttra Doña María de las / Nieves Trasmonti, otorgada a trece de maio de quaren-/15 ta y nueve ante dicho Escrivano Peña, los mismos que / tenía Don Miguel Trasmonti.

(Al margen) 300 Ytem: otra de trescientos / pesos de principal contra Juan Matteo Gómez, otorgada /18 ante dicho Escrivano Peña, y oy son del cargo de Don / Pedro Joseph Martínez.

(Al margen) 100 Ytem: ottra dicha de cien pesos / de principal contra Don Juan Pedro Bravo, otorgada [tachado] /21 [tachado] en veinte y seis de octubre de setenta / y dos ante Don Joseph Miguel Beristain, Co-/ rregidor de Pecaya; los mismos que tenía Doña Ma-/24 ría Ana Bravo.

(Al margen) 200 Ytem: una obligación de doscientos / pesos de principal contra Juan Pedro Chirinos, ottorgada / en diez y seis de junio de sesenta y dos ante di-/


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//20v (Al margen superior) 14755 cho Peña. Ytem: otra dicha contra Don Ysidro Navarro /3 de doscientos

pesos de principal, fecha en veinte y uno de junio / de sesentta y tres: los quales con cincuenta más / tenía Juan Matteo Gómez.

(Al margen) 250 Ytem: otra dicha de dosci-/6 entos y cincuenta pesos conttra el mismo Juan Mateo Gó-/ mez, la cual sólo existe conttra él en los cincuenta Para / la redención de los doscienttos de la antecedente partida; /9 y son los mismos que tenía Don Francisco Verois.

(Al margen) 600 Ytem: otra dicha / de seiscientos pesos de principal contra Doña Ana de la Coli-/ na, con dos escrituras, la una de dos de abril del /12 año de cincuenta y ocho del principal de trescientos pesos, / y otra de igual cantidad ottorgada en catorce de abril / del año de cincuenta y cinco y estos últimos los te-/15 nía Domingo Simón Sánchez.

(Al margen) 300 Ytem: dio por razón / el Mayordomo que Don Lorenzo Hernández es obli-/ gado a trescientos pesos de principal que paga su rédito /18 y no tiene escritura ni obligación. Así mismo / dio por razón que están en concurso de acrehe-/ dores los principales siguientes:

(Al margen) 200 Doscientos pesos /21 de principal contra Doña Josefa Peroso, cuya escritura / con fecha de diez y ocho de mayo, está presentada. /

(Al margen) 350 Trescientos y cincuenta contra la misma Doña /24 Josefa, cuya escritura de diez y ocho de julio está / presentada.

(Al margen) 400 Cuatrocientos pesos contra el Doctor / Don Fernando de la Madriz, los que considera


//21r (Al margen superior) 16855 perdidos. (Al margen) 400 Cuatrocientos pesos contra los bienes de /3 Don Juan Cueto,

su plazo en catorce de octtubre. / (Al margen) 500 Quinientos pesos contra Don Leandro Borjes.


6 8

(Al margen) 500 Ytem: un / libro antiguo de constituciones, y cuentas de dicho /6 hospital con doscientas setenta y dos foxas, las de ci-/ entto setenta y ocho escritas. Ytem: ottro dicho nuevo / manual de gastos diarios de dicho hospital con tres /9 cientas sesenta y siete fojas con lo qual, y por no ha-/ ver otros bienes y alajas que imbentariar, se / concluyó este auto y Visita; y mandó Su Señoría Ylustrísima /12 en su consequencia, dar por consumida, la casulla / de perciana con cenefa blanca, y la alva de Bretaña / bastta, y que se ponga cerradura y llave al cajón /15 de ornamentos, y que de estta diligencia, e ym-/ bentario se ponga testimonio en un libro de / dicho hospital, encargando como encargó /18 a los mencionados Capellán, Mayordomo, y sirvien-/ tes la aplicación de su celo y caridad en la conti-/ nua asistencia espiritual y corporal de los en-/21 fermos, y lo firmó con el expresado Maiordo-/ mo, quien se obligó al cuidado, aceo, y con-/ servación de dichos bienes, y a la responsabi-/24 lidad de ellos siempre que se le pida de que / doy fee. Mariano Obispo de Caracas. Mi-/ guel de Araujo. Ante mí: Joseph Joaquín


//21v de Soto, Secretario y Notario de Visita. Concuerda / con el auto original de su contenido a que me remitto, y /3 en virtud de lo que en él se manda hice sacar, corre-/ gí, y concerté esta copia en Coro y veinte y nueve / de enero de mil setecientos setenta y cuatro años. /6 En testimonio de verdad, Joseph Joaquín de Sotto Secre-/ tario y Notario de Visita. /

Concuerda con el testimonio de los autos de visita del Ylustrísimo SeñorDoctor Don Ma-/9 riano Martí, Dignísimo Obispo de Caracas, que se hallanen un libro nue-/ vo de los dos que entregó el Mayordomo del hospital, ycorren desde el folio 1º / de él, hasta el 13. Y en cumplimiento de lo mandadosaqué éste; corregí /12 y concerté. Coro, agosto veinte y siete de mil sete-cientos ochenta y siete años. /

En testimonio de verdad. /

Francisco Sánchez (rúbrica) /15 Notario Público /

De oficio (rúbrica)

Yo el ynfrascripto confieso haver recivido del Notario de /18 la Curia Ecle-siástica, Francisco Sánchez, los dos libros de que hice exi-/ vición en laVicaría, el uno grande y viejo donde constan las / constituciones y cuentas

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antiguas que dieron los mayordo-/21 mos que fueron del santo hospital queoy es de mi cargo; y / el otro menor, donde estén los autos de la Visita quehizo de / dicho hospital el Ylustrísimo Señor Doctor Don Mariano MartíDig-/24 nísimo Obispo de Caracas, el año de setenta y tres; y en res-/ guardode dicho Notario doy éste en esta ciudad de Coro a / siete de septiembre demil setecientos y ochenta y siete años.

/27 Miguel Araujo (rúbrica) /

En la ciudad de Coro a siete días del mes de septiembre //22r de mil setecien-tos ochentta y siete años. El Señor Bachiller / Don Juan Francisco Varela,Vicario Foráneo Juez Eclesiástico de ella y su /3 jurisdicción dijo: Que ins-tando la brevedad para dar la in-/ dividual razón que se ha pedido por suSeñoría Ylustrísima por orden / de Su Magesttad que Dios guarde, delestado presente del hospi-/6 tal de esta ciudad, sus rentas y gastos, devía demandar co-/ mo por éste mandó, se le haga saver a su Mayordomo ecóno-/ mo, cumpla con el auto de veinte y cinco de abril, dando razón /9 individualde las rentas censuales y decimales, que se pide de los / cinco años, conta-dos desde ochenta y dos hasta ochenta y seis, / ambos inclusive; y unacuenta formal sucinta de los gastos /12 que en dicho tiempo han ocurrido,con la ceparación de años; todo / como en el Superior Decreto se expresa,y por éste assí Su Merced / lo decretó, mandó y firmó de que doy fee.

/15 Bachiller Juan Francisco Varela (rúbrica)

Ante mí. /


En el mismo día pasé a las casas de la morada de Don Miguel / Araujo aquien hice saver el auto antecedente qui-/21 en en su inteligencia dijo: Y eneste estado me expresó que / el día de mañana o lunes respondería. Doyfee. /

Sánchez (rúbrica) /24 Notario /

En la ciudad de Coro, a veinte y seis de septiembre de mil setecientos ochen-/ ta y siete años, el Señor Vicario Juez Eclesiástico dijo: Que acavándose /27 de recibir carta del Secrettario de Cámara de nuestro Ylustrísimo y Real/ Señor Obispo Diocesano, con fecha de primero del que corre, en que //22v

insta sobre que se le remita la relación del hospital pedida en / diez de febre-ro del presente año, por precisar su remisión con /3 prontitud a Su Magestadque Dios guarde: Hagásele saver a su Mayordo-/ mo cumpla con los autos


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antecedentes en el día de mañana /6 y de no exprese [sic] los motivos quetenga para resistir lo mandado, / para en este caso hacer constar al Superior,que la omissión / que se advierte no ha estado de parte del Tribunal. Eigualmente /9 se citarán los médicos y cirujanos que hay en esta ciudad, quehan / asistido a dicho hospital, y tienen conocimiento del temperamento / deesta jurisdicción para que expresen sobre el contenido del terce-/12 ro párra-fo del Orden Superior. Y por éste assí Su Merced lo decretó, / mandó yfirmó de que doy fee. /

Bachiller Don Juan Francisco Varela (rúbrica)

/15 Ante mí. /

Francisco Sánchez (rúbrica) / Notario Público

/18 En el mismo día pasé a las casas de la morada del Señor / ProcuradorGeneral Don Miguel Araujo, Administrador del hospi-/ tal, a quien hicesaver el anterior auto y en su /21 inteligencia dijo: Que mediante a no tenerorden de Su Señoría Ylustrísima / ni del Señor Capitán General, Vice Pa-trono Regio a / quien corresponde como de antemano lo hizo el Señor /24

Governador Don Joseph Carlos de Agüero, quando la / visita del SeñorMartí: No puede dar la cuenta / que se le pide. Esto respondió y firmó de quedoy fee.

/27 Miguel Araujo (rúbrica) /

Sánchez (rúbrica) / Notario /

En veinte y siete del mismo mes y año, compareció en este Tribunal Don //23r Manuel de Estrada, vecino de esta ciudad y médico cirujano en ella, aquien / se le hizo presente el párrafo tercero del Superior Orden de SuSeñoría Ylustrísima /3 e impuesto de él, dijo: que según la práctica que tienede esta dicha ciudad, / y de la mayor parte de su jurisdicción, ha advertidoque más de la mitad de sus / gentes son pobres y cargados de enfermeda-des: que por la esperiencia que tie-/6 ne en once años que hace que se ocupaen su exercicio, ha visto con gran do-/ lor las miserias y travajos que losinfelices padecen, pues carecen de todos auxi-/ lios, siendo en la ciudadcortíssimas las limosnas que se les ministran, y és-/9 tas de dévil substento.Que por lo común las enfermedades que padecen son / calenturas malignas,y gálico; y que contrayéndose a los pobres que se refugian / en el hospital,con la misma esperiencia en dos ocasiones, que obligado de los /12 justiciasde esta ciudad, les asistió como médico y cirujano, se vio obligado / a dejar laasistencia por la falta de ésta a los enfermos, desaceo, fal-/ ta de alimentosy de medicinas, y que hasta esta fecha, no ha llegado /15 a su noticia les haya

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venido alivio alguno; y si save se mantienen sus / enfermos en las mismasindigencias. Y lo firmó con Su Merced, de que doy fee. / Testado: asistencia,No vale. Entre Renglones: esta, vale.

/18 Bachiller Don Juan Francisco Varela (rúbrica). Manuel de Estrada(rúbrica) /

Ante mí. /


En veinte y ocho del mismo mes y año, compareció ante Su Merced, / elSeñor Vicario Don Estevan Belin, médico y cirujano de esta ciudad, /24 yactual del hospital de esta ciudad, a quien se le puso presente el párra-/ fotercero del Superior Orden de Su Señoría Ylustrísima, e impuesto de su-/contenido dijo: que hace treinta años que está avecindado en esta /27 ciudad,y tiene conocimiento de su jurisdicción, y que según su leal / saver y enten-der, ha reconocido que lo más que adolecen todos sus / havitantes, es decalenturas malignas y gálico. Que las indigen-/30 cias son patentemente co-nocidas por las miserias en que lavoran / todos los de la jurisdición, siendorespecto de ella muy pocos los que //23v tienen suficiencia para el sustento,y curación en caso / necesario. Que contrayéndose a los pobres que serefugian en /3 el hospital, tiene declarado en el asunto en diligencias que se/ han practicado ante los Señores Tenientes Justicias Mayores / por recla-mos que ha hecho el presente Señor Vicario, por /6 la falta de medicamen-tos, sustento y asistencia; por cuyo / motivo, estando a cargo del exponenteel hospital desde el año / de setenta y tres, en vista de las faltas que en él haadverti-/9 do, lo ha abandonado por dos ocasiones, dándole vergüenza, / nole notara el público falta en el cumplimiento de su / obligación, lo que esdecidia de su Mayordomo. Y los Justicias /12 de esta ciudad han obligado alexponente a que buelba / a él, prometiéndole pondrán remedio mandando alMa-/ yordomo que asista, como corresponde a los enfermos, y que /15 pon-dría botica en el hospital, lo que no se ha verifi-/ cado hasta el día de oy,estando los enfermos indecible-/ mente mal asistidos. Que lo que ha dichoes lo que save /18 según el informe que se le pide; y firmó con Su Merced deque doy fee. /

Bachiller Don Juan Francisco Varela (rúbrica) /

Estevan /21 Belin (rúbrica) /

Ante mí. /

Francisco Sánchez /24 Notario Público (rúbrica) /


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En atención a que el Mayordomo del hospital se deniega al cum-/ plimientode la manifestación de cuentas que por un quinquenio /27 se le ha pedidoconforme al tenor del superior orden de Su Señoría Ylustrísima / conside-rando que el proceder a recombenciones judiciales en el asunto / traher porconsiguientes las resultas de que este Tribunal no al-/30 canzará el intento, ysin duda sufrirá el desayre de ver ilusoria //24r qualquiera providencia suya,para evitar esto y que con más autori-/ dad se pueda proceder, remítase elexpediente, sin esta relación para que /3 impuesto el Superior Tribunal de SuSeñoría Ylustrísima, de la omissión / y resistencia del Mayordomo, resuelvalo que tuviere por conforme. / Mas deseando informar con la individualidadque se pide, en consideraci-/6 ón que en poder del Doctor Don Pedro Chirinopuede haver algunos docu-/ mentos relativos a ello por haver sido su defunto[sic] padre, maestro Don / Francisco Dávalos y Chirino antecedente Ma-yordomo del actual ynte-/9 rino, se le hará presente el Orden Superior paraque exprese lo que le cons-/ tare, principalmente sobre la cantidad de pesosque se remitió a la / ciudad de Caracas por orden del Señor Don Joseph deSolano, Governador /12 y Capitán General que lo era entonces de estta Pro-vincia, y el montuo [sic] / a que ascienden los censos, por estar Su Mercedentendido, según se ha / informado que en el ymbentario que se hizo en lavisita del Ylustrísi-/15 mo Señor Docttor Don Mariano Martí, y corre enestas diligencias, / faltan algunos ramos. Y por lo respectivo a la razón quese pide del noveno / y medio de diezmos, expóngase por lo que ha entrado ala fábrica de /18 estta yglesia, en atención a ser de igual cantidad. Proveyóloel Señor / Vicario Foráneo Juez Eclesiástico de esta Ciudad de Coro, y sujurisdicción; qui-/ en lo firmó a primero de octubre de mil setecientos ochen-ta y siete /21 años de que doy fee. /


Ante mí.

/24 Francisco Sánchez (rúbrica) / Notario Público /

En cuatro de octubre, yo el Notario pasé a las casas de la morada del /27

Doctor Don Pedro Chirino, a quien hice presente el Orden Superior y autoan-/ tecedente, y en su inteligencia dijo: Que de los recursos que hay en su /poder en calidad de recivos, constan haverse entregado al Teniente /30 Jus-ticia Mayor, Don Pedro Phelipe de Lamas, en seis de febrero de mil //24v

setecientos y setenta años, la cantidad de siete mil setenta y / cuatro pesos,cuatro reales del dinero sobrante del hospital, por decreto /3 del SeñorGovernador y Capitán General, Don Joseph de Solano y Bote / de cuya

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orden está entendido, pasaron a Caracas su conductor Don / Joseph deLeón, vecino de esta ciudad. Que el montuo [sic] a que ascien-/6 den loscensos es el de diez y nueve mil pesos, cuyos principales antes / y al tiempode la entrega, se pidió huvieren de asegurarse y en efec-/ to assí se determi-nó, y cree que hasta esta fecha en que han /9 corrido catorce años, no se haverificado por la miseria de sus ynqui-/ linoz y pobresa del lugar. Esto res-pondió, y firmó de que doy fee. / Texttado: después de la, no vale. Entrerenglones: al tiempo de la, vale.

/12 Doctor Don Pedro Chirino (rúbrica) /

Francisco Sánchez/ Notario Público (rúbrica)

/15 En el mismo día, haviéndome puesto presente el Señor Vicario el manu-/ al donde asienta las partidas del ingreso, como administración de la fábri-ca de / la yglesia, se halla que han entrado las partidas siguientes:

(Al margen) 368,5 1/2

Tresci-/18 entos sesenta y ocho pesos, cinco y medio reales del año de ochenta y dos. /

302,2 Trescientos dos pesos y dos reales del año de ochenta y tres. /

305 Trescientos y cinco pesos del año de ochenta y cuatro. /

/21 338,7 Trescientos treinta y ocho pesos y siete reales el año de ochenta y cinco. /

417,6 1/2 Cuatrocientos diez y siete pesos, seis reales y medio del año de ochenta y seis. / Cuya razón está fiel y legal a las partidas de la fábrica de dicha yglesia.

/24 Francisco Sánchez (rúbrica) / Notario Público /

En la ciudad de Coro en cuatro de octubre de mil setecientos ochenta /27 ysiete años. El Señor Bachiller Don Juan Francisco Varela, Vicario ForáneoJuez / Eclesiástico, etc. Dijo: Que haviéndose ebaluado en el modo másposible el in-/ forme pedido del estado del único hospital que hay en estajurisdicción, /30 el que pide atención a que se reforme el cuydado y asisten-cia de los / enfermos, y que la fábrica material se reedifique por estar su //25r

capilla enteramente arruynada, y lo demás muy deteriorado y / todas laspiezas infestadas; para que se determine lo más conforme, devía /3 de man-dar Su Merced como por éste mandó; se dirijan estas diligencias / sin pérdi-da de tiempo, como se previene en dicho superior orden a / Nuestro


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Ylustrísimo y Reverendísimo Señor Obispo Diocesano, quedando de todotestimo-/6 nio. Y por este assí Su Merced lo decretó, mandó y firmó de quedoy fee.


Ante mí.

/9 Francisco Sánchez / Notario Público (rúbrica).

AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; f. 23r.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. María Puentes y Rosalina Mendoza. Hospitales coloniales de la... pp. 77-91



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HOSPITALES COLONIALES DE LA DIÓCESIS DE MÉRIDA:EL HOSPITAL SAN RAFAEL DE SANTA ANA DE CORO EN LOS

DOCUMENTOS DEL ARCHIVO ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA-AAM*

María Elena Puentes**

Rosalina Mendoza**

Resumen

La Historia de las sociedades coloniales de ciudades venezolanas, aún estápor darse a conocer. Por esto la investigación apoyada en fuentes documen-tales históricas es una herramienta valiosa, pues devela datos fieles de lasrealidades vividas en tiempos pasados. En este artículo, se abordan docu-mentos puntuales en los que se refleja el origen del Hospital de Santa Anade Coro, del cual se tienen noticias desde 1552 y cuya denominación pasaríaposteriormente a la advocación de a San Rafael; se desglosan los aspectosfundamentales de la gestión cotidiana de esta institución, tales como la dota-ción de personal, la normativa de funcionamiento, los bienes muebles einmuebles, y sus rentas.

Palabras clave: Hospitales, período colonial, Diócesis de Mérida, Coro.

* Trabajo financiado por el AAM, Proyecto Hospitales Coloniales. Recibido en febrero de 2009,aprobado y arbitrado para su publicación en mayo de 2009.

** Licenciadas en Historia, por la Universidad de los Andes. Fueron tesistas en el AAM, adscritasal Departamento de Investigaciones.


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Abstract

The History of colonial societies in Venezuelan cities is still to be known.This is why research supported by historical documents and sources is aninvaluable tool, since it reveals true information on the realities lived in thepast. This article is based on specific documents which reflect the origins ofthe Hospital at Santa Ana de Coro, news of which were first known in 1552and whose name later would be allocated to the San Rafael advocacy; fun-damental elements of daily life are spelled out, such as personnel, operatingnorms, furniture, buildings, rents.

Key words: hospitals, colonial period, Diocesis of Mérida, Coro.

COLONIAL HOSPITALS WITHIN THE DIOCESE OF MÉRIDA:THE SAN RAFAEL OF SANTA ANA OF CORO HOSPITAL AS CONTAINED INTHE DOCUMENTS AT THE ARCHDIOCESAN ARCHIVES IN MÉRIDA-AAM.

El Archivo Arquidiocesano de Mérida1, en su afán por difundir el contenidode la documentación que alberga, ha sido propulsor de la realización detrabajos de investigación, con el fin de dar a conocer la historia de los pue-blos que conformaron la extensa Diócesis de Mérida de Maracaibo.

La información contenida en la Sección 38 Hospitales2, abarca temas quevan desde la fundación de estos centros de salud hasta su funcionamientocotidiano, por ello encontramos tipologías documentales diversas: cartas,peticiones, solicitudes, reconocimiento de censos, hipotecas, expedientes,informes, nombramientos, notificaciones, autos, visitas y constituciones, en-tre otros. Igualmente se registra información referida a los lugares o territo-

1 En adelante, AAM.

2 Esta Sección, conformada por 67 documentos que datan desde 1667 hasta 1914 se encontrabaen proceso de inventario y catalogación al momento de la realización de la presenteinvestigación, actividad a la cual se incorporaron las autoras.

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rios donde estaban emplazados los hospitales de Coro, Trujillo, Maracaibo yMérida; así como también datos sobre las rentas asignadas a los hospitalesde Barinas, Gibraltar, Perijá y San Cristóbal. En el presente artículo, se haráun recorrido histórico del Hospital San Rafael de Santa Ana de Coro a tra-vés de la documentación del AAM. Asimismo, fue necesaria la consultabibliohemerográfica para complementar algunos datos de la investigación.

Este centro de salud símbolo de la época colonial, fue fundado a mediadosdel siglo XVI. En 1534 los procuradores de Coro en Madrid, piden a la Cortecualquier tipo de ayuda para el Hospital de la Provincia de Venezuela. Comorespuesta ...el Emperador Carlos V expide el 9 de enero de 1535 RealCédula a través de la cual [...] hace merced al Ospital de la Provinciade Benezuela de la escovilla y rrevales de oro3.

En Real Cédula de 1552, se destinan trescientos pesos para el sostenimientodel hospital de dicha ciudad. En 1595 fue derribado a raíz de una invasiónpirata. En 1623 Fray Gonzalo de Angulo4, Obispo de la Diócesis de Caracasy Venezuela, realizó visita pastoral a la ciudad de Coro. El Fraile encontróuna pequeña sala destinada a la atención de los enfermos, contigua a laErmita o Iglesia de San Clemente5. Ante tal situación, erigió el hospital bajola advocación de Santa Ana y lo agregó a la Catedral de Coro. Más tarde,probablemente en la primera mitad del siglo XVIII, su denominación pasó ala de Señor San Rafael. Fray Antonio González de Acuña6, Obispo de laDiócesis de Caracas y Venezuela, durante la visita pastoral a la ciudad deCoro en 1678, elaboró 16 Constituciones para la adecuada administracióndel hospital, de las cuales hablaremos a lo largo del texto.

3 Alberto Silva Álvarez. “Hospitales”. En: Fundación Polar. Diccionario de Historia de Venezuela.Caracas: Editorial Ex Libris, 1998. Tomo II; p. 494.

4 Décimo Obispo de Caracas y Venezuela. Destaca su labor en la fundación de aulas de Gramáticay Moral. Fue nombrado por el Papa Paulo V en Bula del 20 de noviembre de 1617. Muere enCaracas el 17 de mayo de 1633. Nicolás E. Navarro. Anales Eclesiásticos Venezolanos (2ªedición). Caracas: Tipografía Americana, 1951; pp. 98-99.

5 Ricardo Archila. Historia de la Medicina en Venezuela. Mérida (Venezuela): Talleres GráficosUniversitarios, 1966; pp. 99-100.

6 Décimo cuarto Obispo de Caracas y Venezuela. Se le atribuye el mérito de ser el postulador enRoma para la beatificación y canonización de Santa Rosa. También es el responsable de laintroducción del agua potable en la ciudad de Caracas. Fue nombrado Obispo en Real Cédula de22 de enero de 1672. Fallece en la ciudad de Trujillo el 22 de febrero de 1682. Nicolás E.Navarro. Ob. Cit., pp. 139-145.


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1. Personal

En las constituciones de Fray Antonio González de Acuña, y posteriormente,en la visita del Obispo Mariano Martí7 el 24 de diciembre de 1773, se esta-blece el personal que debía tener el hospital para los fines de lograr un buenfuncionamiento, a saber:

1.1. Capellán8

Tenía entre sus obligaciones: celebrar misa en la ermita adjunta al hospital,custodiar las llaves, cuidar del aseo de los lugares destinados al culto, brin-dar atención espiritual a los enfermos, estar pendiente de proveer la ampo-lleta de los Santos Óleos, ayudar a bien morir a los enfermos, confesar y darla comunión al convaleciente al tercer día de su ingreso o antes si fuesenecesario, comprar la cera, las hostias y el vino para la celebracióneucarística. También debía estar pendiente de que se guardase silencio; asi-mismo cuidaba que los enfermos no jurasen, no tuviesen conversacionessacrílegas y que no discutiesen entre ellos. El nombramiento del Capellánestaba a cargo del Prelado, pero en su ausencia, era el Vicario Generalquien tenía tal potestad9.

El Capellán recibía como salario ...quarenta pesos de a ocho/ reales encada un año, de los quales cada seis meses/ se le den veinte...10. Igual-mente, debía llevar un libro de ingreso y egreso de enfermos, en el cual teníaque registrar los bienes del enfermo había ingresado al centro de salud,debido a que el hospital cobraba el costo de su recuperación, siempre y

7 Vigésimo cuarto Obispo de Caracas. Célebre Prelado por su labor pastoral en favor tanto de ladisciplina eclesiástica, como de los registros estadísticos a lo largo y ancho de la Diócesis. Fuenombrado en Real Cédula de 9 de octubre de 1769. Muere el 20 de febrero de 1792. Nicolás E.Navarro. Ob. Cit., pp. 171-174.

8 Persona encargada de cuidar y atender la capilla a su cargo, decir misa y recolectar las limosnaspara la manutención de la misma. Diccionario de Ciencias Eclesiásticas. Barcelona (España):Librería de Subirana Hermanos, 1886. Tomo 2; p. 535.

9 AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; ff. 5r, 7v y 10r. Se incluye la transcripcióncompleta en el apartado Documentos del presente Boletín.

10 Ibídem., f. 5v. Un peso equivalía a 8 reales. Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana. Barcelona (España): Hijos de J. Espasa, 1925. Tomo 49; p. 1000.

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cuando el convaleciente tuviese con que cubrir su estadía; si no poseía bie-nes, el hospital lo atendía como muestra de caridad cristiana11.

Además de las obligaciones antes mencionadas, el Capellán o el cura pro-pietario, según fuese el caso, debía brindar a los enfermos momentos deoración y compañía. Al respecto se les ordenaba que ...visiten a los enfer-/ mos, les hagan exortaciones y pláticas espirituales, / les lean libros dedevoción, [...] les asistan en la / ora de la muerte encomendándoles elalma, tocándoles cam-/ pana a las agonías, haciendo la señal de lasanta extrema-/ unción, les canten misa quando mueran esperando[lapalabra] / de Dios que lo promete diciendo que lo que se hace por elmenor de sus pobres se hace, / por su Divina Magestad...12.

1.2. Mayordomo13

El Mayordomo debía ser fiel y caritativo. Entre sus obligaciones estaban:cobrar las rentas, tanto del hospital como de la ermita, así como velar por lalimpieza de la edificación14.

En las disposiciones emanadas en la visita hecha al hospital por el ObispoMariano Martí, se solicita que ... en atención a que estas providencias esindispensable un gasto / muy crecido, y en las reales caxas matrices dela / Ciudad de Caracas hay porción de pesos depositados / pertene-cientes a las rentas, y bienes de este dicho / hospital y el actual mayor-domo precediendo la / correspondiente fianza, ocurra a pedirlos alSeñor / Governador y Capitán General de esta Provincia / con testimo-nio de esta providencia, y que en lo / succesivo, sin intervención ymandato de Su Señoría Ylustrísima, no se extraiga dinero alguno / per-teneciente a dicho hospital...15.

11 AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; f. 6v.

12 Ibídem., f. 8v.

13 Persona encargada de cuidar y atender la capilla a su cargo, decir misa y recolectar las limosnaspara la manutención de la misma. Diccionario de Ciencias Eclesiásticas. Barcelona (España):Librería de Subirana Hermanos, 1886. Tomo 2; p. 535.

14 AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005, f. 6r.

15 Ibídem., f. 11r.


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El nombramiento del Mayordomo estaba a cargo del Prelado. En ausenciade este último, era el Vicario Juez Eclesiático, el encargado de asignar a lapersona que ocuparía el cargo ... y dicho maiordomo ha de dar / fianzasquando entre en el oficio de estar a derecho y / dar cuenta con pago dela administración de dicho / hospital y Hermita16.

1.3. Esclavos

Fray Antonio González de Acuña, ordenó en sus Constituciones que el Ma-yordomo ...merque una negra de edad de quarenta años para que sirvaen la co-/cina del dicho hospital, y curación de los enfermos: / y unnegro para que cargue agua y sirva en qu-/ anto se ofreciere ymandare...17. Esta compra debía realizarse previa consulta y autorizacióndel Vicario Juez Eclesiástico. Los esclavos debían tener las costumbres ade-cuadas para ser sirvientes en la casa de Dios; si tuviesen malas mañas ytratos, debían venderse y comprar otros de mejor condición18.

El Obispo Martí recomendó que los esclavos que se comprasen para servi-cio del hospital, fuesen preferiblemente casados, para que así cuidasen me-jor a los enfermos y sirviesen con mayor satisfacción. Además indicó quelos sirvientes ...estarán / sujetos al mayordomo y éste deverá cuidar quevivan / arreglados y conforme a su piadoso y santo destino y / loscontribuirá con las devidas subsistencias llevan-/ do por ramo ceparadoeste gasto19.

1.4. Médico

Fray Antonio González de Acuña, indica en sus Constituciones que cuandohubiese médico en la ciudad, se le solicitase sus buenos oficios, cancelándo-le el salario respectivo. El médico era la persona indicada para señalar losremedios que se debían comprar, debiéndose mantener en el hospital una

16 Ibídem., f. 6r.

17 Ídem.

18 Ídem.


8 3


caja de medicamentos, los cuales debían buscarse en Caracas o en otroslugares. No se podía prestar ni regalar las medicinas bajo la pena de exco-munión20.

El Obispo Mariano Martí solicitaba que se ...concierte el médico de lamaior satisfacción brindándole posada en dicho hos-/ pital a que po-drá destinar el quarto del mayor-/ domo, respecto a que jamás se ocu-pe porque todos tienen casa propia y lo que devía gastar en al-/ quileresde otra casa, puede servir de aiuda a su sa-/ lario, contarse con aquelcon que se combinieren21.

2. Planta física

En la visita del 24 de julio de 1773, el Obispo Mariano Martí, evidenció elestado en que se encontraba el Hospital de San Rafael de Coro. En losdocumentos consultados se describe la planta física del recinto de asisten-cia. Dada su importancia y la minuciosidad de la descripción transcribimosel fragmento del Auto de Visita en el que están registrados estos datos.

...la ca-/ pilla de dicho hospital bajo el título de San Rafael, cuyasparedes arruynadas son / por la parte de dentro y fuera de ladrillo, ymez-/ clote y el centro de adoves sin techumbre / alguna, a exepción dela capillita que sirve / de presviterio que es toda de ladrillo, con un /viejo techo de teja sobre alfadería y tabla. / La longitud de dicha capi-lla principal es de diez y siete varas, poco más y seis de latitud sinincluir el presviterio, que es de siete varas de / largo desde la ínfimagrada y del mismo ancho / que la capilla, la qual tiene parte de avajo/ el cañón seguido una pieza del propio ancho / y ocho varas poco másde largo en que ocurren a oyr misa los enfermos combalecientes, y /gente de servicio y se halla dividida de la capilla con arco floral, y enmedio una reja / grande de balaustre haciendo esta fábrica con elzaguán, o entrada principal del hospital / frente a la calle real en mitad

20 Ibídem., f. 6v.

21 Ibídem., ff. 10v–11r.


8 4

de una quadra, al lado del presviterio por la parte interior / del hospi-tal una sacristía de cinco varas de largo / y tres de ancho fabricada deadoves. La fabrica material del referido hospital de paredes de adovey techumbre de teja claustrada de / corredores, saguán y ocho aposen-tos, cozina y un tráncito que sale al solar y de los dichos ocho aposen-tos, cuatro son para los enfermos no contagiosos, otro para los éticoz,otro para el capellán y los dos restan-/ tes para los sirvientes y guardarlos utencilios / y en el patio alfive construido de ladrillo, con su bóbeda,suelo de argamaza y ladrillo de cinco varas y medio de hondo, y cuatrovaras de ancho22.

3. Mobiliario

El hospital contaba con cuatro camas para el momento de la visita de FrayAntonio González de Acuña. Ordenó se hiciesen cuatro más, para así cubrirlas necesidades de atención que se pudiesen presentar. Para la visita delObispo Mariano Martí había ocho camas, lo que supone que las indicacionesdadas por González de Acuña fueron cumplidas23. El hospital, además, po-seía ocho colchones (2 de lana y 2 de paja), ocho catres, un bufete grandede cedro, una caja de madera para guardar la ropa de los enfermos, tresmesas pequeñas, cinco sillas grandes, cuatro silletas con respaldo de cuero,un escaparate pequeño con dos gavetas, ocho banquetas y una batea decedro24.

4. Lencería y enseres

En las Constituciones de Fray González de Acuña, se ordenó comprar col-chones, sábanas, almohadas, sobrecamas por duplicado, evitándose así eluso de la hamaca. Además expresó que ...se tenga gran cuidado en mu-dar la ropa, en que / siempre esté limpia y aseada, en que los colchones

22 Ibídem., ff. 15-16. Una vara equivalía a 0,835 metros. Enciclopedia Universal... Ob. Cit.Tomo 66; p. 1483.


24 Ibídem., f. 16.

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/ se renueven...25. Asimismo ordenó que se adquiriesen veinticuatro cami-sas para cubrir las necesidades de los enfermos y lienzo blanco para lasmortajas26.

El Obispo Mariano Martí encontró que el hospital contaba con catorce sá-banas, dos sábanas de coleta, seis almohadas, una manta, seis esteras paracubrir las camas, ocho camisas nuevas, dos camisones para mujeres, doscamisones para hombres de coleta27.

En cuanto a los enseres, el hospital estaba dotado con ...una geringa debronce, un baso de christal, siete cucharas de / madera, tres vasos detaparo y coco viejos, una ba-/ rra de fierro usada, una pala, una aza-da, y una ha-/ cha viejas, un almires de bronce con su mano, / dospinzones de madera útiles, un budare de fierro / nuevo, un asador defierro, un cántaro, chocolatero / de cobre nuevo y otro viejo con sumolinillo de / madera, una piedra de moler maís buena, ocho platos deporcelana buenos, ocho cucharas de esta-/ ño y de madera, una tinade losa de veracruz, / grande, tres tasas de losa fina para tomar cal-dos, dos baldes de madera con arcos de fierro / otros dos dichos me-dianos de madera con arcos de fierro para sacar agua28.

5. Normas generales de funcionamiento

Tanto en las Constituciones de Fray González de Acuña como en los Autosde Visita del Obispo Martí, se registran normas generales sobre el funciona-miento del hospital. Estas pautas van desde la admisión de los enfermos,hasta el comportamiento que debían tener los visitantes.

Entre los aspectos más importantes contenidos en esta normativa, se debíanadmitir todas las personas blancas que lo requiriesen, así como la poblaciónlibre y los indios que no estuviesen encomendados. Para el caso de los indiosencomendados o los esclavos, se les debía proveer la atención siempre y

25 Ibídem., f. 6v.

26 Ídem.


28 Ibídem., f. 16v.


8 6

cuando los encomenderos o amos se hiciesen cargo de los gastos queocasionare la atención29.

Las personas que requiriesen atención debían ser ...examinadas en su ne-cesidad, y que la hacienda del hospital se gaste en los queverdaderamen-/ te son pobres, [...] ninguno sea admiti-/ do sin papel ylicencia firmado del Vicario Ju-/ ez Eclesiástico...30. Las mujeres quenecesitasen ser atendidas, debían ser recluidas en cuartos aparte, al igualque los convalecientes ...que no salgan del hospital hasta que estén per-fectamente sanos31.

El horario de consulta en el hospital era desde la mañana hasta el toque delAve María32. Sólo se permitía el acceso a personas que fuesen importantesen el proceso de curación de los enfermos, y se prohibía el paso a personasque solo fuesen a conversar33.

Igualmente se ordenaba que ...en la sala donde se curan, no entren mu-jeres, y si huviere de entrar alguna casada a ver a su marido, algunamadre a su hijo o hija a su madre, sea de día y a puertas haviertas...34.

El Vicario Juez Eclesiástico estaba en la obligación de visitar el hospitalcada año. En estas visitas debía revisar las cuentas llevadas por el Mayor-domo, el inventario de los bienes del hospital y todo lo que fuese necesariopara el buen funcionamiento del mismo35. Su visita permitía tener al díatodas las cuentas para cuando el Obispo decidiese o pudiese visitar las ins-talaciones.

El archivo del hospital debía estar conformado por los libros de cuentas yprovidencias, inventarios, visitas, ingreso y egreso de enfermos, control de

29 Ibídem., f. 6v.

30 Ídem.

31 Ibídem., f. 7v.

32 Ídem.

33 Ibídem., f. 7r.

34 Ibídem., f. 5v.

35 Ibídem., f. 8r.

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bienes a cargo del Mayordomo, manual de gastos diarios y cualquier otroque permitiese llevar control administrativo organizado36.

También indicaron los sacerdotes que el hospital debía tener ...provissiónde gallinas y de / pollos, y que se provea de todo el maíz que fuerenecesario, / así para el sustento de los enfermos, como para el de / losesclavos: entendiendo que en la casa de Dios, nada / ha de faltar parasus pobres, y en las impaciencias que esperimentaren los toleren contodo amor y cari-/ dad37.

A partir de 1778, con la erección de la Diócesis de Mérida de Maracaibo38,Coro deja de pertenecer a la Diócesis de Caracas y Venezuela y queda bajola jurisdicción de la nueva Mitra, bajo las órdenes de Fray Juan Ramos deLora.

6. Rentas

Los ingresos del Hospital San Rafael de Coro fueron por concepto de lahijuela de diezmos de toda la jurisdicción de la Vicaría, así como de otrosfundos y por las erecciones de obras pías. El siguiente cuadro resume elaporte que recibió el hospital de acuerdo a los conceptos antes menciona-dos:

36 Ibídem., f. 10v. Lamentablemente estos libros no se encuentran en el fondo documental delAAM.

37 Ibídem., f. 6v.

38 La Diócesis de Mérida de Maracaibo, fue erigida el 17 de febrero de 1778 por el Papa Pío VII,a través de Bula Magnitudo Divinae Bonitatis. Baltazar Enrique Porras Cardozo. El ciclo vitalde Fray Juan Ramos de Lora. Mérida (Venezuela): Universidad de los Andes. Ediciones delRectorado, 1992; p. 56. El Rey nombró, según el Patronato Regio, a Fray Juan Ramos de Loracomo su primer Obispo. La Diócesis de Mérida de Maracaibo comprenderá …los pueblos deMaracaibo, Gibraltar, La Grita, Mérida, Barinas, Pedraza, Perijá, San Cristóbal y SanJayme, agregándosele las ciudades de Trujillo y Coro de la Provincia de Venezuela, y elpueblo de Pamplona y Parroquia de San José, perteneciente a Santa Fe. Antonio RamónSilva (Recopilador). Documentos para la historia de la Diócesis de Mérida. Mérida (Venezuela):Imprenta Diocesana. Tomo I, 1908; p. 18. Véase también: Pedro Rubio Merino. La erecciónde los obispados de Mérida y Guayana. Mérida (Venezuela): Arquidiócesis de Mérida, 1992;pp. 36-38. (Colección El Archivo, 1).


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Ingresos del Hospital San Rafael de Coro. 1782-1786

Años Pesos Reales

1782 368 5 1/2

1783 302 2

1784 305 -

1785 338 7

1786 457 6 1/2

Fuente: AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 2, doc. 38-010; f. 1v.

El 10 de febrero de 1787, Fray Juan Ramos de Lora solicitó al Vicario Gene-ral de Coro, Pbro. Juan Francisco Varela, toda la información referente a ...quánto hos-/ pitales hay erigidos en la comprehensión de su Vicaría,[...] de qué departamento, distrito o parroquias se deduce, qu-/ ántodistan los hospitales que estén dentro de su vicaría, / de los más inme-diatos de otra de la Diócesi, qué núme-/ ro de camas hay establecidasen ellos, o quántos enfermos / mantiene y si éstos no llegan a aquelnúmero, en que consis-/ te esta falla [...] si es mucho el número de lospobres enfermos del vicariato, qué género de miserias y trabajos pa-san en quales tratamientos. Qué proporciones tienen para su cura-ción, con todo lo / demás que sea conducente a tomar el conocimientonecesario / los particulares mencionados39.

Para dar respuesta a la solicitud del Obispo, el Vicario emitió un auto invi-tando a los médicos residentes en la jurisdicción de Coro, a que se presenta-ran por ante el Tribunal Eclesiástico a brindar testimonio sobre el asunto. El27 de septiembre de 1787 acudió por ante el Tribunal, Don Manuel de Estrada,médico cirujano residente de la ciudad de Coro, quien manifestó que la ma-yor parte de los habitantes de esta jurisdicción eran pobres y con muchasenfermedades. También expresó que sus once años de experiencia le ha-bían permitido ver las incomodidades y carencias que padecen los enfermospor la falta de auxilios y limosnas que percibe el hospital, poco suministro de

39 AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; f. 2.

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alimentos y medicinas, ...que por lo común las enfermedades que pade-cen son / calenturas malignas, y gálicos...40.

Al día siguiente, se presentó al Tribunal Don Esteban Belín, médico del Hos-pital San Rafael de Coro, quien también hizo énfasis en la incidencia comúnen estos territorios de las calenturas malignas y el gálico. Con respecto a laatención que se brindaba a los enfermos, indicó que era precaria, pues lacarencia de materiales, alimentos, enseres y botica, hacía dificil la labor decalmar las necesidades de los enfermos. Expresó que abandonó su cargo endos ocasiones por no tener las herramientas necesarias para trabajar, perolas insistencias del Vicario y las promesas de dotar el hospital, así como lamotivación por ayudar a los enfermos, decidió regresar, pero al momento dela declaración, expresó no haber visto aún los resultados41.

Conclusión

La Iglesia como ente evangelizador y constructor de la sociedad, se encargóde difundir en América las leyes y normas comprendidas fundamentalmenteen el Sacrosanto y Ecuménico Concilio de Trento (1545-1563); y a medidaque se establecieron las instituciones eclesiásticas en América, se fue con-formando un basamento legal de acuerdo a las necesidades propias de laregión, tal es el caso del Sínodo de Santiago de León de Caracas de 1687.

A partir del establecimiento de los españoles en tierras americanas,específicamente en los territorios de lo que más tarde sería Venezuela, laIglesia fungió como principal responsable del buen funcionamiento de lasinstituciones hospitalarias. Las diferentes constituciones elaboradas por losobispos de la Diócesis de Caracas y Venezuela para la administración yejercicio de los hospitales, nos permite verificar que para la época de estu-dio, ya se concebía la idea de un centro de salud dotado apropiadamente,para brindar los cuidados por los feligreses, en un ambiente digno. Se mues-

40 Ibídem., f. 23r. Gálico es una ...enfermedad virulenta, específica, transmisible por la uniónsexual, por simple contacto ó por herencia. Sinónimo de sífilis. Enciclopedia Universal... Ob.Cit. Tomo 56; p. 3.



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tra además la concepción de la asistencia integral del enfermo, en cuanto ala atención espiritual y su comodidad a la hora de permanecer en las instala-ciones del mismo.

Fuentes documentales y bibliohemerográficas

Documentales

Archivo Arquidiocesano de Mérida. Sección 38 Hospitales.

Caja 1, doc. 38-005; 24 ff; doc. 38-010; 8 ff.

Bibliohemerográficas

ARCHILA, Ricardo. Historia de la Medicina en Venezuela. Mérida (Ve-nezuela): Universidad de los Andes. Talleres Gráficos Universitarios, 1966;409 pp.

AVENDAÑO CERRADA, Elizabeth y Marisela Rodríguez Cerrada. Los impe-dimentos al matrimonio en la Diócesis de Mérida 1802-1812. Mérida(Venezuela): Universidad de los Andes. Facultad de Humanidades y Educa-ción. Escuela de Historia, 2000; 298 pp. (Memoria de Grado).

DICCIONARIO DE CIENCIAS ECLESIÁSTICAS. Barcelona (España): Libreríade Subirana Hermanos, 1886. Tomo 2.

ENCICLOPEDIA UNIVERSAL ILUSTRADA EUROPEO-AMERICANA. Barcelo-na (España): Hijos de J. Espasa, 1925. Tomos 49, 56 y 66.

NAVARRO, Nicolás E. Anales eclesiásticos venezolanos (2ª edición). Ca-racas: Tipografía Americana, 1951; 579 pp.

PORRAS CARDOZO, Baltazar Enrique. “El Archivo Arquidiocesano deMérida”. En: Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Mérida(Venezuela): Arquidiócesis de Mérida. ISSN 1316-9173. Tomo I, Nº 1, julio-diciembre 1987; pp. 27-30.

_____________________________. El ciclo vital de Fray Juan Ra-mos de Lora. Mérida (Venezuela): Universidad de los Andes. Ediciones delRectorado, 1992; 173 pp.

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RUBIO MERINO, Pedro. La erección de los obispados de Mérida yGuayana. Mérida (Venezuela): Arquidiócesis de Mérida, 1992; 198 pp.(Colección El Archivo, 1).

SILVA ÁLVAREZ, Alberto. “Hospitales”. En: FUNDACIÓN POLAR. Dic-cionario de Historia de Venezuela. Caracas: Editorial Ex Libris, 1998.Tomo II.

SILVA, Antonio Ramón (Recopilador). Documentos para la historia dela Diócesis de Mérida. Mérida (Venezuela): Imprenta Diocesana. Tomo I,1908; 384 pp.

AAM. Sección 38 Hospitales. Caja 1, doc. 38-005; f. 8r

Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Román Rodríguez Salón. La mirada compleja a la igualdad... pp. 92-112

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* Nota de los editores: Artículo recibido en mayo de 2009 y aprobado para su publicación en juniodel mismo año.

** Profesor Titular de la Escuela de Ciencias Políticas de la Universidad de Los Andes, Mérida-Venezuela. Correo electrónico: [email protected]

LA MIRADA COMPLEJA A LA IGUALDAD: UN ENSAYO SOBRE LASMETODOLOGÍAS DE LA IGUALDAD EN EL DERECHO CONTEMPORÁNEO*

Román Rodríguez Salón**

Resumen

El siguiente discurso científico describe algunos de los retos epistemológicosy de práctica institucional que, ante la complejidad propia de los sistemas desociedad contemporáneos, plantea el tratamiento del Derecho y de la Políti-ca (teóricos y prácticos) a los derechos a la Igualdad. Siendo la Constituciónel marco normativo del cual parten los fundamentos del tratamientoinstitucional, se analiza dicho marco como una fórmula de revisión de losfundamentos del derecho fundamental a la Igualdad. Y en tal revisión, lacomplejidad del contrato social y la posibilidad de inclusión de reglas para el‘contrato social’ que jueguen un papel principal en la aprehensión y com-prensión de la relación transparencia/intransparencia actual.

Palabras clave: Igualdad, Estado Social de Derecho, Complejidad, Contra-to social.

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A COMPLEX LOOK AT EQUALITY: AN ESSAY ON THE METHODOLOGIESOF EQUALITY IN CONTEMPORARY LAW

Abstract

The following scientific discourse describes some of the challenges ofepistemology and institutional practices that, in view of the complexity ofcontemporary societal systems, raise the issue of Law and Policies (boththeoretical and practical) towards the right of Equality. Since the Constitutionis the framework from which the basis of institutional treatment emerges,said framework is reviewed as a formula to revise the foundations of thefundamental right to Equality. In such revision, the complexity of the socialcontract and the possibility of including rules for the “social contract” thatplay a major role in the conception and comprehension of the currentrelationship transparency/obscurity.

Key words: Equality, Social State of Law, Complexity, Social Contract.

1. Metodologías de la igualdad en el Derecho Contemporáneo

Ciertamente, la lapidaria frase de Luigi Ferrajoli ha llegado a un punto deinflexión para la contemporánea ciencia del Derecho: El reto que hoy sederiva para la razón jurídica de las múltiples formas que adopta lacrisis del derecho en acto no es más difícil que el afrontado, hace aho-ra dos siglos, por la ilustración jurídica, cuando emprendió la obra decodificación bajo la enseña del principio de legalidad1.

Este punto de inflexión se deriva, principalmente de las dificultades que su-pone e implica la cocificación del derecho en términos de la racionalidad

1 Luigi Ferrajoli. Derechos y Garantías. La Ley del más débil. Madrid: Trotta. 1999, p. 18.


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jurídica que impulsa en el presente las prácticas de vinculación normativa dela Política (ejecutiva y legislativa) y de las decisiones jurisdiccionales, lascuales, en este ámbito, configuran el contenido material de los derechosfundamentales en su versión de instrumentos normativos constitutivos degarantías de la democracia2 en el Estado Constitucional. Desde esta pers-pectiva, dichas dificultades pueden sintetizarse en tres elementos principa-les:

a) el no-cumplimiento de las metas jurídicas de la modernidad en relación ala construcción de un orden jurídico justo;

b) el caos interno del Derecho en términos de contradicción de principiosjurídicos que se refleja en la hiper-inflación legislativa y en la pérdida delsentido del ordenamiento jurídico;

c) la incapacidad del derecho para observar las nuevas complejidadesintransparentes de la Política, cuestión que ha impedido delimitarlas y diri-girlas hacia la tutela efectiva en términos de garantías a los derechos funda-mentales, obstaculizándose así el blindaje necesario a la democracia con elconjunto de garantías, que han de proporcionar sustancialidad democráticaa todas y cada una de las decisiones del Estado Constitucional.

Al parecer, el Estado social y democrático de derecho no cuenta con unDerecho propio, aunque sí cuenta con una ciencia jurídica capaz de edificar,en el plano de la discusión científica, su arquitectura; y en el plano de larevisión decisoria (jurisdiccional), su ingeniería. Mientras la ciencia internadel Derecho, es decir, las escuelas epistemológicas (paradigmáticas) delDerecho no discutan el contenido de los principios del Derecho, para dise-ñar un Ordenamiento jurídico propio de las obligaciones, restricciones y re-tos del Estado social y democrático de Derecho, el propio Derecho en sufacticidad se alejará progresivamente de sus grandes metas de cohesión

2 Partimos aquí de la premisa, con G. Frege, que se puede afirmar que la definición de un términodebe indicar la condición no sólo necesaria sino también suficiente en presencia de la cualaquél es predicable de un argumento dado. Desde esta perspectiva la democracia formal o,mejor, la dimensión formal de la democracia como poder fundado sobre la voluntad popular,es una condición necesaria pero nunca suficiente para hablar de las condiciones en presenciade las cuales un sistema político puede considerarse como democrático y, todavía más, comouna democracia constitucional.

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social al modo de (o como) un mecanismo de auto-diferenciación que seabre paso en la medida y contra la medida de las necesidades y de lascomplejidades alcanzadas por los sistemas de sociedad contemporáneos, desus fundamentos científicos y, peor aún, de sus principios de constitución yrealización: sucede aquí de modo similar a lo indicado en otro contexto (peroaplicable al nuestro) por P. Bourdieu respecto de los ‘barqueros’ que seencargan de repetir un mito científico de origen imperial y formular en tér-minos alienados las cuestiones ...de las relaciones entre pobreza, inmi-gración y segregación en su país3.

Así, si es cierto que la deshistorización que resulta casi de manerainevitable de la migración de las ideas a través de las fronteras nacio-nales es uno de los factores de desrealización y de falsa universaliza-ción […] entonces sólo una verdadera historia de la génesis de lasideas sobre el mundo social, asociada a un análisis de los mecanismossociales de la circulación internacional de dichas ideas, podría con-ducir a los estudiosos, tanto en este campo como en otros, a un dominioperfeccionado de los instrumentos con los cuales argumentan sin pre-ocuparse previamente de argumentar a propósito de ellos4. Para afron-tar los retos que hoy se derivan para la razón jurídica, corresponde, pues, alos análisis de la ciencia del derecho trascender aquellos lugares comunes,nociones o tesis con las cuales se argumenta habitualmente pero sobre lascuales no se argumenta en lo más mínimo, conformando así una especie decredo existencial de la razón jurídica que, por sus limitaciones y perspectivade abordar la crisis del derecho, no puede recoger la complejidad inherenteal mismo en la sociedad actual.

En la evolución de los sistemas de sociedad modernos, el Estado social ydemocrático de Derecho representa una imbricación de requerimientos devalidez que han sido desplazados por la facticidad de los problemas no dige-ridos por los mecanismos de decisión/selección de los sistemas institucionalesdel Derecho y de la Política. En este punto, no le falta razón a Edgar Morinal seguir a G. Bachelard y, al efecto, afirmar que ...lo simple no existe sólolo simplificado. La ciencia construye su objeto extrayéndolo de su am-

3 Pierre Bourdieu. Las Argucias de la Razón Imperialista. Barcelona (España): Paidós. 2001,p.39.

4 Ibídem., p. 54. (Subrayado por el autor).


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biente complejo para ponerlo en situaciones experimentales no com-plejas…5, porque la ciencia del Derecho, en un estadio aún no adaptado a lacomplejidad de la sociedad actual, supone como fundamento de su razónpráctica (en el sentido kantiano de los fundamentos de su funcionalidad es-tructural objetivante que ofrece transparencia a la complejidad de la socie-dad) que existe posibilidad de simplificar los problemas de desigualdad pro-funda en países de capitalismo avanzado y de capitalismo tardío, racionali-zarlos y colocarles soluciones fácticas a través de decisiones institucionalestambién simples, en las cuales la reivindicación de estatus, en términos deconsecuencia de la distribución de recursos financieros y normativos, repre-senta la instrumentalidad suficiente para lograr las metas de mediar entrelas contingencias del poder y la acumulación de la complejidad que penetrala estructura de las sociedades actuales y las exigencias de Igualdad y dederechos fundamentales a la Igualdad de los ciudadanos.

Desde los principios de la preocupación por el cambio de paradigmas delEstado de Derecho (desde el Estado Liberal), la ciencia jurídica ha preten-dido dar un nuevo formato a la Constitución y al Ordenamiento jurídico, y apesar de que ha fallado en sus intentos genéticos, los avances en materia deofrecer especificidad al cuerpo y al contenido de la meta de la Igualdad delas sociedades modernas podría calificarse como sin precedentes. En elpresente temporal, las Constituciones se entienden como la forma deracionalización de las discusiones internas de la voluntad general, como lahiper-racionalización del estatus y el sentido cultural de un sistema de socie-dad, en que convergen tanto las competencias de valoraciones y voluntadescomo los principios históricos que permiten a un sistema de sociedad esta-blecerse un entorno que no contraríe, y hasta sea acorde, con sus procesosde decisión-selección.

Por tal motivo, con razón Jürgen Habermas expresa que la Constitución[ese ambicioso modelo normativo que no puede dejar de experimentar, comode hecho experimenta, incumplimiento y violaciones en sus desarrollos sedefina como un proyecto vinculante y su grado de realización depende, enúltima instancia del tratamiento dado a las garantías de los derechos funda-mentales], otorga vigencia precisamente a aquellos derechos que los

5 Edgar Morín. Introducción al Pensamiento Complejo. Barcelona (España): Gedisa. 2008, p. 35.

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ciudadanos deben concederse recíprocamente si quieren regular demodo legítimo su vida en común con los medios del derecho positivo6.

Sin embargo, la paradoja del orden y la contradicción de la caoticidad de loque podría considerarse como voluntad general (y sus abusos), que elconstitucionalismo de Benjamín Constant estructura en términos de la legiti-mación de un tránsito entre un orden constitucional derruido y un nuevoorden constitucional parece, en el presente y alejado aún de los requerimien-tos del Estado social y democrático de Derecho, estar justificado por lasoportunidades futuras que en torno a las garantías y a la materialización del‘orden de contenidos de los derechos fundamentales’ ofrece un ‘nuevo or-den constitucional’, porque, la Constitución representa la oportunidad histó-rica, siendo ...también la expresión de una forma de vida particular yno sólo el reflejo especular del contenido universal de los derechosfundamentales7, de ...ponerse de acuerdo sobre los aspectos relevantesbajo los cuales lo igual ha de tratarse de forma igual y lo desigual deforma desigual8. Y ello legitima (no sólo en el nivel constitucional que condescaro ha cedido a las presiones de nuevas fórmulas político-democráticasde acción institucional, sino también en el nivel de las leyes orgánicas y delresto de normas del Ordenamiento) la aparición de lo que Luigi Ferrajolidefine como hiper-inflación legislativa.

La desviación de las consecuencias de la legitimación extremadamente fácildel cambio de la Política legislativa (incluso de la Política Constitucional), sederiva de una especie de daltonismo de la propia Ciencia del Derecho: en elpresente se han materializado buena parte de las ambiciones delconstitucionalismo de finales del siglo XIX y de principios del siglo XX, entanto, la razón jurídica actual tiene las ventajas de los progresos delconstitucionalismo del siglo pasado, que le permiten configurar y cons-truir hoy el derecho –bastante más que el Estado liberal- como un sis-tema artificial [y por tanto contractual] de garantías constitucionalmen-te preordenado a la tutela de los derechos fundamentales9; al menos

6 Jürgen Habermas. La Inclusión del Otro. Ensayos de teoría política. Barcelona (España):Paidós. 1999, p. 189.

7 Ibídem., p. 205.

8 Ibídem., p. 194.

9 Luigi Ferrajoli. Ob. Cit., p. 19.


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esas ambiciones han ofrecido racionalidad y razonabilidad ...al problemacentral de nuestra civilización [entendido] bajo la forma siguiente: elmovimiento hacia la igualdad de los hombres, la supresión de las dis-tinciones de estatus personal, es inevitable; las sociedades occidenta-les van irreversiblemente hacia la igualdad…10, ello porque, en el pre-sente temporal ...los derechos fundamentales constituyen la base de lamoderna igualdad, que es precisamente una igualdad en ‘droits’, encuanto hacen visibles dos características estructurales que los dife-rencian de todos los demás derechos [...] sobre todo su universalidad,es decir, el hecho de que corresponden a todos y en la misma medida[...] en segundo lugar, su naturaleza de indisponibles e inalienables,tanto activa como pasiva, que los sustrae al mercado y a la decisiónpolítica [sin control efectivo y sustancial del Derecho] limitando la esferade lo decidible de uno y otra, vinculándola a su tutela y satisfacción11.

El aprovechamiento legítimo dentro del paradigma del Estado social de De-recho de los progresos del constitucionalismo liberal del siglo XIX, es propiode su filosofía de trascendencia en tanto tal Estado debe recomponer, apro-vechando en paralelo sus ventajas, las fórmulas de garantía de los derechosciudadanos del Estado Liberal de Derecho, dirigiéndolos a satisfacer lasdemandas de cerrar la brecha entre reconocimiento de derechos en el Esta-do y la materialización en la sociedad civil estructurada en términos de mer-cado de tales contenidos de derechos. Así, junto a la igualdad en droits,surge una nueva filosofía (jurídica y política) que intenta hacer frente a lasconsecuencias de la complejidad de las contingencias y ambivalencias pro-venientes de los modelos modernos de distribución del poder y las rentas delas sociedades contemporáneas: ...una filosofía política que funda el Es-tado sobre los derechos fundamentales de los ciudadanos y que preci-samente del reconocimiento y de la efectiva protección (¡no basta elreconocimiento!) de estos derechos extrae su legitimidad y también lacapacidad de renovarse sin recurrir a la violencia subversiva12.

10 Raymond Aron. Introducción a la Filosofía Política. Barcelona: Paidós, 1999. p. 41.


12 Norberto Bobbio. Prólogo a Ferrajoli, Luigi: Derecho y Razón. Teoría del garantismo penal.Madrid: Trotta. 2001, p. 16.

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2. Algunos dilemas de la razón jurídica y política ante la complejidadde las garantías de los derechos a la igualdad

De nuevo se plantea el dilema de la ciencia jurídica actual: la complejidadinherente a los sistemas de sociedad contemporáneos ya no obliga a la razónjurídica a establecer los parámetros de validez del Ordenamiento jurídico ydel orden de los derechos fundamentales; hoy tal Ordenamiento y tal Ordenpertenecen a las fórmulas de transparencia de la razón institucional del Es-tado (que lo funda y lo legitima) y sus garantías, pese a las diferencias decontenidos a garantizar, son siempre preferibles a la caoticidad de un siste-ma jurídico que desplace y margine el asunto de las garantías a los conteni-dos de derechos en un régimen democrático.

Esa complejidad obliga a cerrar la brecha que se ha abierto en torno a lahiper-inflación legislativa, y la simplificación de la legitimidad del Ordenprocedimental del cambio normativo interno del Estado; entre la validez delos derechos fundamentales y la dialéctica de la transformación de lanormatividad de contenidos específicos de derechos reconocidos por el Es-tado en derechos materiales accesibles a los ciudadanos, en los propios tér-minos de la realización de la igualdad en droits.

Esto nos lleva a una discusión de principios (y de principio): el problema dela razón jurídica frente a la complejidad de la sociedad, es que el contenidoque esa razón jurídica ha proporcionado a los Ordenamiento jurídicos y a losproyectos constitucionales que lo integran, si bien reconoce la ...conexióninterna entre el Estado de Derecho y la democracia [en que] el sistemade los derechos no es ciego frente a las desiguales condiciones socia-les de vida13, no se transforma en una conversión del reconocimiento enfacticidad, esto es, se respeta el método de la dialéctica entre igualdad jurí-dica e igualdad fáctica, en el que ...competencias iguales conceden liber-tades de acción que pueden ser usadas de manera diferente y por esono fomentan la igualdad fáctica de las situaciones vitales o posicionesde poder14, y con tal respeto se truncan las posibilidades de lograr el trata-miento igual a los iguales y desigual a los desiguales, en tanto se proporciona

13 Jürgen Habermas. La Inclusión del Otro. Ensayos de teoría política. Barcelona (España):Paidós. 1999, p. 194.

14 Ibídem., p. 195.


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a la coerción estructural de la sociedad civil estructurada en términos demercado, una inmensa capacidad de ofrecer exclusivamente las alternati-vas materiales, o ‘aspectos relevantes’ reales, en que las decisiones de losciudadanos pueden ser libres de desarrollar esas iguales libertades; conver-giendo en la tesis de que sólo y exclusivamente la autonomía privada esparte y fundamento, materialidad y valor, de las iguales libertades y de lasiguales acciones libres para el goce y disfrute de los derechos fundamenta-les. De este modo, aparte de parcelar el problema de la igualdad en compar-timientos estancos, y como ya dijimos con Pierre Bourdeau, se argumentacon los argumentos pero no se argumenta sobre los argumentos y funda-mentos en que la igualdad aparece anclada y, hasta petrificada.

Pero en la complejidad propia de los sistemas de sociedad contemporáneos,la exclusividad de la autonomía privada parece desvirtuar los fundamentosde validez de los derechos fundamentales, esto por dos razones específicas:en primer lugar, la autonomía privada no puede enfrentarse, por no conteneren sí misma elementos suficientes de manejo de contingencias y crisis, a lascondiciones de vida desiguales de la sociedad civil y del mercado; en segun-do lugar, la libertad del desarrollo de específicos proyectos de vida individua-les en base al disfrute de los derechos fundamentales (con contenidos espe-cíficos), lo que implica autonomía para el despliegue de potencialidades ycapacidades personales (condiciones de desigualdad genéticas y genéricas),y sólo puede ser reconocida y garantizada si y sólo sí los destinatarios delderecho [...] pueden adquirir autonomía [...] en la medida en que ellosmismos puedan comprenderse como autores de las leyes a las que es-tán sometidos como sujetos jurídicos privados15, y siendo así, esos ...su-jetos jurídicos privados no podrán siquiera gozar de iguales liberta-des subjetivas [ni de las ventajas fácticas de la igualdad en droits] si ellosmismos en el ejercicio conjunto de su autonomía ciudadana no logranver con claridad los intereses y los criterios justificados [del derecho yde la política]16.

15 Ibídem. p.194.

16 Idem.

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Dos consecuencias directas de las condiciones antes descritas y de lamarginalización de su manejo científico, se codifican como el binomio delorden de los derechos en la sociedad contemporánea: la primera, la exclusi-vidad de la aceptación de las solicitudes realizadas por las luchas históricascuyo fin se nuclea alrededor de reivindicaciones materiales (y reconoci-miento en el Estado de Derecho); siempre y cuando dichas luchas entendi-das como ...reformismo social [entran] en acción en la forma de unalucha por la universalización de los derechos civiles mediante los pro-cedimientos propios del Estado de Derecho17; tienen como resultado laconexión entre la ambivalencia y la contingencia propia de una hiper-infla-ción legislativa con el reconocimiento y materialización de los contenidos dederechos fundamentales exigidos. La segunda, es la exclusividad de enten-der el orden de los derechos como un orden cuantificable de bienes y servi-cios a distribuir, con su inherente premisa de que las desiguales condicio-nes sociales de vida de la sociedad capitalista deben ser compensadaspor medio de una distribución más justa de los bienes colectivos18, loque cercena toda posibilidad de crear un contenido de derecho, más allá delos contenidos de regulación interna del carácter inamovible de las fórmulasde tratamiento institucional de los derechos fundamentales, y una fórmulade cuantificación y cualificación del valor y el contenido de los derechosfundamentales más allá de su caracterización de bienes colectivos distri-buibles.

Una meso-consecuencia (consecuencia interna central) surge de estas dosconsecuencias: la permeabilización de las garantías de los derechos funda-mentales, específicamente de las líneas maestras de materialización de ga-rantías destinadas a crear condiciones de desarrollo material de contenidosde derechos para el disfrute individual y/o colectivo de los ciudadanos, porlas consecuencias de la hiper-inflación legislativa contemporánea, interna yestrechamente conexionada con el daltonismo jurídico, que se refleja en lapromoción de una tipología unívoca de tratamiento institucional de los dere-chos fundamentales y estructurada en términos de mera distributividad debienes colectivos.

17 Ibídem., p. 190.

18 Idem.


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En tal sentido, la razón jurídica, al no centrarse en ...una relación entrecomplejidad y transparencia; se podría decir también [...] una relaciónentre complejidad transparente e intransparente19, intenta simplificar ladialéctica entre igualdad (y otros contenidos de derechos fundamentales:libertad, justicia e integridad ética) jurídica e igualdad fáctica, sin atender alos problemas principales que subyacen en el propio interior de losOrdenamientos jurídicos de las sociedades occidentales y sin atender a laproducción acelerada de verdaderas desigualdades de estatus, de poder yde acceso a recursos y posiciones vitales, en vista de las racionales defi-ciencias en los modelos de desigualdad de distribución de los recursos mate-riales y normativos de la sociedad capitalista, convirtiendo a la igualdad fácticaen una igualdad que depende (más no se desarrolla a través) de la distribu-ción de recursos financieros y normativos por parte del Estado social. Peroesto es un utillaje que ya no da cuenta de la realidad, porque a pesar de lascontradicciones entre la inmensa cantidad de recursos distribuidos (eficien-te e ineficientemente) por el Estado, se ha producido sin freno hasta ahora,la aceleración de las contradicciones por desigualdad de estatus y de accesoy el incremento exponencial de la propia aparición de nuevas desigualdades,correspondientes a las nuevas complejidades de la sociedad contemporá-nea.

Si ello es así, entonces qué sentido científico podría justificar el manteni-miento de un contenido específico y exclusivista de fórmulas distributivistasde tratamiento institucional (y de garantías) de los derechos fundamentalessi (no mejorando las condiciones de igualdad de estatus, desatendiendo a lasdesigualdades genéricas y genéticas de personalidad y de talento, y no fre-nando y no manejando la aparición de nuevas desigualdades debido al incre-mento), tales fórmulas han demostrado que no poseen capacidadepistemológica ni instrumental para ‘hacer frente’ a la complejidad de losderechos fundamentales y a la complejidad del contexto sociológico en quese desarrollan los contenidos específicos de derechos fundamentales en tantoque la sociedad civil estructurada en términos de libre mercado. La respues-ta pareciere ser que ...aún somos ciegos al problema de [nuestra propia]complejidad20.

19 Niklas Luhmann. Sistemas sociales. Lineamientos para una teoría general. Barcelona:Anthropos, 1998, p. 8.

20 Edgar Morín. Ob. Cit., p. 34.

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A partir de los mecanismos de la razón jurídica para mantener el estatusinterno del Derecho de la sociedad (Luhmann), se manifiesta la intrans-parencia de los fundamentos de los procesos normativos, administrativos yjurisdiccionales destinados a materializar tanto los contenidos de los dere-chos contratados políticamente como a materializar sus garantías, a partirde la ...doble sujeción del derecho al derecho que afecta a ambas di-mensiones de todo fenómeno normativo: la vigencia y la validez, laforma y la sustancia, los signos y los significados, la legitimación for-mal y la legitimación sustancial o, si se quiere, la racionalidad formaly la racionalidad material…21.

Pero no es una intransparencia de fundamentos, porque los principios de lademocracia institucional y de las garantías constitucionales están dados afavor de la formación de un ordenamiento jurídico propio del Estado social ydemocrático de Derecho. Es una intransparencia en la instrumentalizacióndel derecho, de la política y de la decisión jurisdiccional para transformar labrecha abierta entre igualdad jurídica e igualdad fáctica en igualdad en droits,es decir, para transformar el reconocimiento en garantía y la garantía enplena realización de proyectos de vida conforme al uso/goce de los dere-chos fundamentales, cuestión que no excluye, en modo alguno, problemasde desigualdad de estatus.

La permanencia y la excesiva capacidad de permealidad de la intransparenciade instrumentos de materialización, realización, sustantivización y garantía/realización; se transforma en un problema que afecta a la democracia y alpropio paradigma del Estado social y democrático de Derecho, porque, prin-cipalmente, la esfera pública democrática contemporánea exige la transpa-rencia, y la posibilidad de discusión tanto de los fundamentos de validez,como de los instrumentos jurisdiccionales (motivación), administrativos(accountability) y legislativos (representación) destinados a convertir el re-conocimiento en garantía y ésta en materialidad y disponibilidad del Ordende los derechos.

El teleologismo subyacente a los fines ilustrados de realización de ciertoscontenidos occidentales de derechos del hombre se confronta así con la



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incapacidad e inefectividad del núcleo distributivista, que excluye toda otrafórmula de tratamiento institucional de los derechos fundamentales y con laintransparencia de los mecanismos dirigidos por la razón jurídica para ofre-cer un cambio de paradigma del Derecho que se corresponda con los reque-rimientos del Ordenamiento jurídico del Estado social y democrático deDerecho. Así, lejos se encuentra la ciencia jurídica actual, especialmente lateoría del Derecho, de desarrollar ...una teoría policéntrica y por consi-guiente policontextual, en un mundo y una sociedad concebidosacéntricamente22.

3. Luces sobre la intransparencia de la complejidad actual

Echar luz interdisciplinaria sobre el problema de la intransparencia de losfundamentos de aquellos instrumentos destinados a materializar contenidosy garantías de derechos fundamentales, que los ciudadanos han contratadoen respetarse entre sí, nos lleva a una hipótesis inicial: en la medida en que elestatus interno de la ciencia jurídica no se desplace de las fórmulas distributivasde tratamiento institucional de derechos y no emplace la discusión de losintereses y los criterios justificados que fundan dichos instrumentos comocontenidos vitales de la esfera pública democrática, aunque se verá amena-zado constantemente por hacer transparente su situación de admitir menosposibilidades de resolver problemas que las requeridas para su conserva-ción, seguirá su curso conservador del estatus organizacional de la sociedaden tanto no de-construya su tradicional disciplinariedad aparte (de apartaday, hasta aislada) y reconstruya con conocimientos inter y trans disciplinariosnuevas categorías de ingeniería y arquitectura jurídica. Y en este punto,servir a la conservación implica que si bien sean defendidos e impulsadosintereses racionales, la razonabilidad pertinente de dichos intereses siempreserá acusada de ausente.

Muy contra, el Derecho y sus instrumentalidades contemporáneas debenseguir el camino trazado por sus fundamentos de validez, es decir, debenaprovechar los conjuntos de elementos cognoscitivos producidos en elconstitucionalismo, en la sociología, la economía, la política y la teoría social

22 Niklas Luhmann. Ob. Cit., p. 11.

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en general para ofrecer mecanismos de legitimación propios, porque en elpresente el problema principal es ...no la fundamentación de normas yopiniones [...] sino el hecho de que los sistemas complejos de acción seencuentran en un mundo contingente, bajo el imperio de la selectivi-dad [...] el intento de asociar lo que tradicionalmente la humanidadoccidental pretende bajo el título de la ‘razón’ con un concepto desujeto [...] llevaría [...] a menospreciar de manera sistemática el pro-blema de la complejidad del mundo: ‘el sujeto debe concebirse antetodo como selectividad contingente [o como resultado de una materializa-da selectividad contingente] [...] [Así] los problemas de poder y distribu-ción, que se plantean desde el punto de vista de la estructura de clasesde una sociedad, se han vuelto obsoletos; trasuntan una perspectivaeuropea tradicional, encubridora de los problemas genuinos23.

En tal sentido, el problema ya no es la mera vigencia y existencia de unconjunto de normas y de un orden de derechos, pues en el presente temporalel problema es, sin duda, la capacidad de convertir el ordenamiento jurídicoen un instrumento de cohesión social e integración social, por un lado, y porotro, la posibilidad de hacer del orden de los derechos un orden fáctico real,allende la mera distributividad del Estado social.

El problema se agrava en la medida en que las fórmulas distributivistas, laconfusión generada por la hiperinflación legislativa y la intransparencia delos fundamentos de la instrumentalidad de garantías del orden de los dere-chos, restringen las capacidades de los sujetos de derechos para aprovecharlas condiciones benéficas y las ventajas directas de los campos de alternati-va para las decisiones individuales y colectivas de los ciudadanos, en tantoque, existe la posibilidad de que la meso-consecuencia esbozada en líneasanteriores se aparezca en forma de ...dilema cuando las regulaciones delEstado social, que desde el punto de vista de la igualdad jurídica tie-nen por fin asegurar una igualdad fáctica de circunstancias vitales yde posiciones de poder, sólo pueden conseguir esa meta en condicio-nes o con medios que a la vez ‘restringen’ sensiblemente a los presun-tos beneficiarios los espacios que esas regulaciones pretenden asegu-

23 Jürgen Habermas. Problemas de legitimación en el capitalismo tardío. Buenos Aires: Amorrortu,1995. pp. 155-156.


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rar para una configuración de la propia existencia en términos deautonomía privada24.

Es en esta meso-consecuencia en que la intransparencia juega un papeltrascendente que obliga a una revolución interna del paradigma de la cienciajurídica contemporánea: la fórmula epistemológica de su solución exige laprofundización del análisis de las consecuencias normativas y fácticas delproblema de la difícil materialidad del Orden de los derechos, en tanto lamera distributividad funciona contrariamente al principio de reciprocidad delos derechos fundamentales porque en la medida en que se aseguran condi-ciones de igualdad fáctica, empiezan a des-asegurarse o a desplazarse con-diciones de selección y decisión destinadas al ejercicio de los propios dere-chos fundamentales, y en estos términos se hace imposible desde la estruc-tura normativa del reconocimiento y la garantía el goce/disfrute paralelo dela autonomía pública y de la autonomía privada de los ciudadanos.

El Derecho y la teoría jurídica se enfrentan a un reto trascendente: si bien elDerecho representa un mecanismo de cohesión e integración social mate-rializado en términos de su coerción estructural (capacidad vinculativa delDerecho), de su validez y de su legitimidad, el Derecho también debe ser unsistema instrumental de organización interna de la sociedad; es decir, que enparalelo a su instrumentalización como mecanismo de estructuración socialel Derecho ha de comportarse como informador de las desigualdades ycomo arquitectura normativa e ingeniería organizacional de las esferas so-ciológicas en las cuales los derechos fundamentales son llamados a desarro-llarse o, al menos, tienen alguna oportunidad real de desarrollo.

4. Derechos fundamentales, igualdad y complejidad

La igualdad en droits como la señala Luigi Ferrajoli es, sin duda, ...la igual-dad en la aplicación del derecho, es decir, la igualdad de los ciudada-nos ante la ley, pero es también sinónimo de un principio de más alcan-ce, a saber, del principio de la igualdad jurídico-material según el

24 Jürgen Habermas. Facticidad y validez. Sobre el derecho y el Estado democrático de Derechoen términos de teoría del discurso. Madrid: Trotta, 2000. p. 499.

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cual lo igual en todos los aspectos relevantes ha de ser tratado enforma igual y lo desigual en forma desigual25 pero, a diferencia de laactual convergencia teórica que funda el análisis y los desarrollos normati-vos del derecho en las metodologías de los aspectos relevantes a ser discu-tidos como premisa en ante la arquitectura constitucional que dispone loslímites de la ingeniería legislativa, el derecho y la teoría del derecho; han dediseñar un nuevo punto de convergencia de contenido distinto del de lasmetodologías de los aspectos relevantes, y esto es sólo una de las tantastareas que ha de emprender: el problema de la igualdad ex ante contrato, esdecir, determinar las condiciones de desigualdad de la sociedad contempo-ránea, en los aspectos vitales del desarrollo del orden de los derechos funda-mentales.

Esto porque, si bien la apertura de una esfera pública democrática dispuestaa transformar el orden constitucional representa una condición por excelen-cia, para discutir los ‘aspectos relevantes’ a partir de los cuales se determi-narán las condiciones de lo igual y de lo desigual y sus fórmulas de trata-miento institucional (e inter-ciudadano); también es cierto que en el conteni-do fáctico del estatus de aquellos que intervienen en la discusión y en laarquitectónica de principios e instrumentalizaciones del Derecho se presen-tan igualdades y desigualdades reales que, a falta (como ocurrió en el casode la Constitución de 1999 en Venezuela) de restricciones (morales, éticas,políticas, de principio, jurídicas) que disciplinen y delimiten el impacto dedichas igualdades y desigualdades ‘iniciales’, se pueda prever que las cláu-sulas finales de la arquitectura constitucional reproducirá las no disciplina-das igualdades y desigualdades fácticas, que no necesariamente podríanestar exentas de sesgos y parcialidades a favor de unos y en perjuicio deotros, reconstruyendo en el Derecho y a partir del Derecho, las condicionescoercitivas y vinculativas sobre las cuales se perpetúan las condiciones ‘ini-ciales’ de desigualdad y de un tipo específico de igualdad, desplazando en lafacticidad (no en la validez), a las propias metodologías de los aspectosrelevantes al introducirlas en las condiciones iniciales que deben protegerse,por impulsar el propio proceso de discusión de la nueva arquitectónica cons-titucional.

25 Ibídem., p. 497.


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Cuestión parecida sucede al iusnaturalismo de principios de la modernidad:siendo un tipo específico de derecho de libertad y propiedad amenazadopero existente, el contrato social habrá de establecer una arquitectura posi-tiva para su defensa; en el caso de las sociedades contemporáneas, siendolas desigualdades y las igualdades específicas iniciales amenazadas peroexistentes, el contrato social habrá de establecer una arquitectura constitu-cional a partir de la cual subsumir los aspectos relevantes, que por cierto noson discutidos ni siquiera solapadamente, del tratamiento desigual a los des-iguales y del tratamiento igual a los iguales. De esta manera, el contratosocial constitucional mantiene ciertas diferencias de estatus y delimita, sindiscusión de aspectos relevantes como por ejemplo las causas primigeniasde las desigualdades de condiciones vitales y de poder y estatus, la ingenie-ría del Derecho al diseño de la instrumentalidad de cohesión e integraciónsocial, como aspecto de conservación del orden interno de la sociedad capi-talista, cuyos principios fundamentales representan de suyo la causa princi-pal de las desigualdades en términos de sus fórmulas de organización de lainfraestructura sociológica de la sociedad como fórmulas de mercado.

Tal ingeniería interna y delimitada del Derecho no sólo subsume los ‘aspec-tos relevantes’ que deben ser discutidos para el tratamiento de las igualda-des y las desigualdades, sino además generaliza las reglas de tratamiento,convirtiendo al principio de igualdad en droits en un principio de equipara-ción pero no en un principio de determinación de las diferencias, esto es, laigualdad en droits, siendo un principio general que establece la inalienabilidadde los derechos y la universalidad del orden de los derechos, tiene un doblecarácter instrumental que complementa su carácter de fundador de las ga-rantías institucionales del Estado: su capacidad de establecer en las decisio-nes y en las motivaciones de las decisiones los propios aspectos relevantes,sustanciales, a partir de los cuales se traza una línea, en términos de lodecidible y de la vinculación de eso que es decidible a la tutela y satisfaccióndel orden de los derechos, entre las igualdades y las diferencias y entre lascausas genéticas de las diferencias y las causas genéricas de las igualdades,creando condiciones, al menos de validez, para configurar las diferenciasobservando aquellas que pueden -o no- ser aceptables por el ordenamientoinstitucional y jurídico y aquellas que deben ser, por su carácter problemáti-co como el caso de las desigualdades en las posiciones vitales y de acceso arecursos vitales, objetivadas como de ‘atención y garantía’ primarias.

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De esta manera, la instrumentalización del Derecho no convertiría enintransparente a los aspectos relevantes al no ocultarlos bajo la facticidadde las condiciones que impulsan y del estatus inicial de los que promueven laapertura de la esfera pública democrática en busca de nuevas especificidadesde la arquitectura constitucional. Al contrario, en una sociedad con el nivelde complejidad que posee la actual, donde los recursos son cada vez másescasos y menos efectivos en cuanto a las funciones de equiparación y deigualación de estatus (inicial y final) de los ciudadanos; (cuestión que au-menta la dificultad de los retos de un derecho que se niega a mirar más alládel núcleo distributivista del tratamiento institucional de los derechos funda-mentales). Dejar de petrificar los aspectos relevantes que fundan la validezy la legitimidad de lo ‘igual y de las diferencias’ y convertirlos en el funda-mento dinámico de las motivaciones de las decisiones, todas y cada una, delorden institucional del Estado social de Derecho, si bien es un reto complejo,representa la apertura de una discusión constante y, a su vez, delimitada(pues tal discusión obedece a las delimitaciones propias de las institucionesy de los afectados de las decisiones de instituciones específicas del Estado)de los aspectos relevantes y, de suyo, una discusión constante de las causaso fuentes de las desigualdades y de la apreciación de las diferencias, lo queconvierte al derecho en una instrumentalidad de ingeniería organizacional enque es la organización la que debe transformarse para comportarse comouna esfera de despliegue del orden de los derechos y no el orden de losderechos el que deba transformarse para observar qué posibilidad existepara algún desarrollo sumario, dentro de las esferas y organizaciones de lasociedad civil estructurada en términos de mercado.

Lo importante de esta discusión es que se colocan los aspectos relevantes ysus metodologías en una relación de complejidad transparente y complejidadintransparente. La primera ajustada al espíritu de iguales libertades subjeti-vas en cuanto a la determinación o a la discusión de los contenidos de deter-minación de las normas por los ciudadanos que, poseedores de esas igualeslibertades subjetivas, han convenido en obedecer (cerrando la brecha entreautonomía privada y autonomía pública) y la segunda, ajustada a la limita-ción de las discusiones jurídicas y políticas sobre los aspectos relevantes,bajo la fachada de la garantía de las condiciones que impulsaron la especifi-cidad de la arquitectura constitucional, sacrosanta, a partir de la cual seechan a andar los ordenamientos jurídico e institucional del Estado social y


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democrático de Derecho, con lo que se ejerce el Poder de simplificar enexceso las diferencias hasta convertir a su configuración, que es base deltratamiento desigual a los desiguales, en un elemento marginal del Ordena-miento jurídico.

5. Conclusiones

En fin, a título de conclusión preliminar, interesa resaltar que ante ladecostrucción interna del Derecho por su ineficiencia en la aprehensión ycomprensión de la complejidad del orden actual de los derechos, la recons-trucción (como correlato complejo contrario a la decostrucción interna) delDerecho como Ingeniería organizacional y como arquitectura transparentedepende, al menos en instancia epistemológica preliminar, de la posibilidad(y capacidad real) de incursionar en campos científicos intransparentes a laciencia jurídica actual, esto es, de incursionar en campos de inter y transdisciplinariedad que le permita desplazar su daltonismo objetivante de lasdesiguales condiciones de vida y mirar más allá del núcleo distributivo de losderechos, convirtiéndose en un Derecho transformador de la sociedad, noconservador sino dinámico, en vista de que su funcionalidad conservadora(que es sólo una parte del Ser del Derecho) ha asumido la totalidad de sucapacidad sistémica de operatividad, excluyendo la posibilidad de que elDerecho sea incluido en los flujos de comunicación sistémicos por no obe-decer las reglas específicas de selección-decisión propios de la comunica-ción sistémica en sociedades concebidas acéntricamente.

Se suscribe, pues, con E. Morín, la relevancia de la cuestión metódica paraabordar los retos del derecho en la sociedad actual, que ya apuntábamoscon L. Ferrajoli al inicio, porque sólo un derecho que haga uso de todas suscapacidades y potencialidades epistemológicas (y no sólo de uno de susaspectos funcionales) podría dar cuenta de la realidad explicándola comopremisa fundamental y para transformarla al tiempo de prescribirla dentrodel conjunto de valoraciones aceptadas por su validez y legitimidad. No obs-tante, muy contra a E. Morín, y siguiendo a N. Luhmann, que el derecho

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fundamente su existencia, validez y legitimidad sólo y exclusivamente en sumero aspecto funcional conservador, no es resultado de haber llegado a unaetapa compleja diferenciada de otra etapa simple de la sociedad, lo que, si seaceptara este planteamiento, implicaría convertir al derecho en un derechomás complejo o en otra disciplina que encargándose de las funciones pro-pias de este no se denomine derecho: la complejidad no la constituye elmétodo, sólo la recoge para explicarla.

La complejidad de hogaño no es ni más o menos compleja que aquella quecontextualizaba el nacimiento del derecho moderno, sólo es diferente: si elderecho tuvo capacidad para enfrentar aquella complejidad de antaño bus-cando dentro de sí (dentro de sus fundamentos) herramientas epistemológicasque dieran transparencia a los retos de aquellos sistemas de sociedad, co-rrespondería a la ciencia jurídica actual una dinámica de similar altura ycomplejidad, sólo que adaptada a las diferencias propias de nuestra comple-jidad; lo que debe comenzar por encontrar el fuste torcido de su epistemolo-gía, a partir del cual sólo un aspecto de su funcionalidad conservadora mo-nopolizó la totalidad de sus funciones de selección/decisión científica.

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MORIN, Edgard. Introducción al Pensamiento Complejo. Barcelona (Es-paña): Gedisa, 2008. 176 pp.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Guía didáctica del Museo Arquidiocesano de Mérida... pp. 115-118

EL MUSEO


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PROYECTOS DE INVESTIGACIÓN

GUÍA DIDÁCTICA DELMUSEO ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA-MAMSG-

SAGRARIOS

1. Institución Responsable

Fundación Museo Arquidiocesano de Mérida Mons. Antonio Ramón SilvaGarcía-MAMSG-

1.1 Dirección: Avenida 4 Bolívar entre calles 22 y 23. Frente a la PlazaBolívar. Apdo. 26. Mérida-Venezuela.

1.2 Teléfonos: 00-58-274-2524307/2525786. Fax: 00-58-274-2521238

1.3 Correo electrónico: [email protected]

1.4 Página web: www.arquidiocesisdemerida.org.ve

2. Responsable

Prof. Ana Hilda Duque. Directora del Museo Arquidiocesano de MéridaMons. Antonio Ramón Silva García–MAMSG.

3. Título

Guía Didáctica del Museo Arquidiocesano de Mérida. MAMSG. Sagrarios.

4. Palabras clave

Custodia, eucaristía, templo, simbología cristiana.


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5. Línea de Investigación

Objetos de culto religioso cristiano.

6. Resumen del proyecto

En el año 2001 se inauguró la Guía Didáctica del Museo Arquidiocesano deMérida presentándose como una ...herramienta divulgativa dedicada adesarrollar los tópicos más importantes de cada una de nuestras expo-siciones. En este sentido, nuestra intención es continuar con la presentaciónal público de dicha herramienta con el objetivo de promover la investigaciónde nuestra colección y ofrecer conocimientos más amplios de la misma.

El tópico seleccionado para la Guía Didáctica son los seis sagrarios de lacolección, piezas que contienen un alto valor simbólico en el oficio litúrgicopues, se usan para resguardar las formas eucarísticas. Aquí, se pretenderealizar un recorrido histórico de los sagrarios que nos permita aproximar-nos al estilo o época al que cada uno pertenece, reforzado, a su vez, con unrastreo documental de cada pieza en particular. Lo anterior servirá de ejeconductor para realizar un análisis de sus valores estéticos y simbólicos quepermitan un acercamiento sensible a dichas piezas.

Asimismo, con la intención de complementar y ampliar el estudio de nues-tras piezas se pretende visitar algunas iglesias de la ciudad de Mérida con elfin de ubicar la permanencia de estas piezas, sus estilos, cambios en el tiem-po, que a su vez nos permita conocer un poco del patrimonio eclesiástico deMérida.

7. Planteamiento del problema

El Museo Arquidiocesano de Mérida - MAMSG, creado por Mons. AntonioRamón Silva García según Carta Pastoral del 09 de agosto de 1909 e inau-gurado el 05 de julio de 1911, con motivo del Centenario de la Independenciade Venezuela, es una institución cultural sin fines de lucro dependiente de laArquidiócesis de Mérida y adscrita al Departamento de Bienes Culturalesde la Conferencia Episcopal Venezolana.

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La colección inicial organizada por Mons. Antonio Ramón Silva García cuentacon una gran variedad de piezas pertenecientes a las áreas de arqueología,mineralogía, zoología, botánica, historia civil e historia religiosa. Actualmen-te el Museo tiene aproximadamente mil quinientas piezas referentes al cultoreligioso católico, tales como mobiliario, ornamentos y objetos sacros, dentrode los que destacan, especialmente por su antigüedad, las campanas AveMaría del 909 y la Campana San Pedro del 912, las cuales fueron traslada-das en 1919 desde la Parroquia Jajó, Estado Trujillo y están consideradasrespectivamente la segunda y tercera, más antigua que se conservan en elmundo.

Por el interés antropológico y estético de las piezas resaltan aquellas rela-cionadas con nuestro pasado prehispánico, íntimamente asociadas con loscultos indígenas. Entre ellas cabe mencionar los trípodes, incensarios yfigulinas de cerámica, y en especial, la momia de un hombre indígena deunos 19 o 24 años de edad, encontrada en un abrigo rocoso cercano a laaldea La Ovejera, situada a escasos kilómetros de Pueblo Nuevo del Sur.

Por su valor artístico, destacan además las pinturas que conforman unainteresante pinacoteca colonial. Obras como La visión del Beato AlonsoRodríguez, pintura anónima del siglo XVII relacionada con el taller bogotanode Gaspar de Figueroa; o Virgen del Carmen, atribuida al pintor neogranadinoGregorio Vázquez de Arce y Ceballos, también del siglo XVII, dan testimoniode la importancia artística e historiográfica de la colección.

En la última década del siglo XX, gracias a la iniciativa de Mons. BaltazarEnrique Porras Cardozo y de la Prof. Ana Hilda Duque, Presidente y Direc-tora respectivamente de la Fundación Museo Arquidiocesano de Mérida,se incorporó a la colección una variada muestra de Arte Popular procedentede la zona andina del país.

Desde 1995 el Museo Arquidiocesano ocupa los espacios de la AntiguaCapilla El Sagrario. Hoy una de sus salas se encuentra dedicada a manteneruna exposición con una selección de piezas que son claro testimonio de laheterogeneidad de nuestra colección, donde lo civil, artístico y sagrado sereúnen siendo reflejo cultual, histórico y cultural del hombre.

En el año 2001 se inició la realización de la Guía Didáctica del Museo Arqui-diocesano de Mérida, presentándose como una ...herramienta divulgativa


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dedicada a desarrollar los tópicos más importantes de cada una denuestras exposiciones1.

La presencia de esta herramienta divulgativa permite a la institución afian-zar su perfil dentro del campo de la investigación, pues la realización detextos como éste, son el producto de un cuidadoso trabajo investigativo queproporciona al público visitante y a estudiantes, información importante so-bre cada una de las piezas que conforman la colección del Museo.

La Guía Didáctica se ha enfocado hacia los seis (6) sagrarios de la colección,piezas que contienen un alto valor simbólico en el oficio litúrgico pues, seusan para resguardar las formas eucarísticas. Aquí, se pretende realizar unrecorrido histórico de los sagrarios que nos permita aproximarnos al estilo oépoca al que cada uno pertenece, reforzado, a su vez, con un rastreodocumental de cada pieza en particular. Lo anterior servirá de eje conductorpara realizar un análisis de sus valores estéticos y simbólicos que permitanun acercamiento sensible a dichas piezas.

8. Metodología y Plan de Actividades

Primera fase

1. Rastreo documental y bibliohemerográfico.

2. Observación directa de las piezas.

Segunda fase

1. Selección del material recopilado.

2. Descripción de las piezas y redacción de la guía didáctica.

3. Registro fotográfico de las piezas.

Tercera fase

1. Diseño y diagramación.

2. Impresión en casa editorial.

1 Carolina Rodríguez y María Alejandra Ochoa. Guía didáctica del Museo Arquidiocesano de MéridaMAMSG. Campanas y Campanarios. Mérida (Venezuela): Fundación Museo Arquidiocesano deMérida. 2001, Nº 1, p 6.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Ingreso de piezas a la colección del Museo Arquidiocesano... pp. 121-122



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MAMSG

Nº 001/2009

INGRESO DE PIEZAS A LA COLECCIÓN DELMUSEO ARQUIDIOCESANO DE MÉRIDA

Hemos recibido de: Obispo Norteamericano

En calidad de Donación

Lo siguiente:

Un cuadro Nazareno. Elaborado en óleo sobre tela y madera, sin marco.

Sobre un fondo de tonalidad azul claro resalta la figura centrada de un hom-bre en posición vertical sobre un pedestal enmarcado por flores y espigas,con vestiduras de tonalidades azul oscuro y degradaciones del morado. So-bre su cabeza lleva una corona de espinas, tiene barba y el cabello mediana-mente largo. Sus manos están juntas, de palma una contra otra. Sus piesestán calzados. Detrás de la figura sobresale en posición diagonal una ima-gen en forma de cruz de color marrón. Bajo este registro se encuentrancircundando la imagen figuras de niños con vestimenta colorida, adornadasus cabezas con plumas.

Estado de conservación: Bueno

Medidas: 60 x 30 cm.

Nº asignado dentro de la colección: 2300 - PMérida, 13 de marzo de 2009.

Entrega: Recibe:Mons. Baltazar E. Porras C. Licda.Yamileth VarelaArzobispo Metropolitano de Mérida Unidad Registro e InventarioFirmado y Rubricado Firmado y RubricadoC.I. Nº 826.599 C.I. Nº 14.588.499

Vto. Bo.Prof. Ana Hilda DuqueDirectora del MuseoC.I. N° 3.622.842


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NazarenoÓleo sobre tela y madera60 x 30 cm.

Colección MAMSG. N° 2300 - P

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Pastoral de Mons. Antonio Ramón Silva Obispo de la Diócesis... pp. 125-128

DOCUMENTOS


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Decreto de Creación del Museo Diocesano de Mérida. AAM. Sección 45B LibrosVarios. Libro Curia- Museo 1909-1932, pp. 3-8 (Col. AAM. Sección 30 Fotografías.Serie Museo).

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1909, agosto 10. Mérida.

Pastoral de Mons. Antonio Ramón Silva Obispo de la Diócesis de Mérida, sobre elperfil del Museo, el Decreto de creación, la formación del libro sobre el Patriotismodel clero de la Diócesis de Mérida y contribuciones económicas y de objetos para elMuseo (Manuscrito original).

AAM. Sección 45B Libros Varios. Libro Curia Museo (1909 - 932), pp. 3-8.

//p.3 (Detrás del texto, dibujo de dos banderas con astas cruzadas: Ve-nezuela y Vaticano, realizadas a color).

Decreto de Creación / del /3 Museo Diocesano / de / Mérida.

/6 Nos, Doctor / Antonio Ramón Silva, / por la gracia de Dios y de la /9 SantaSede Apostólica / Obispo de Mérida. /

Al muy Venerable Cabildo /12 y demás Clero y Fieles de Nuestra Diócesis. /

Salud en el Señor. /

El amor a la Patria es un sentimiento grabado /15 por el dedo de Dios en elcorazón del hombre; es una espe-/ cie de culto que arraigado en lo másprofundo de nuestro / ser tiende constantemente a manifestarse, convirtién-dose /18 en obras. Por lo mismo, mientras más fuero es el senti-/ mientoreligioso, más perfecto es el patriotismo, ocupando / en el corazón y en lavoluntad del hombre, el primer /21 lugar después de Dios; de tal manera queante las aras / de la Patria se ofrendan los afectos de la familia, los //p.4

bienes y la propia sangre. /

Pero ¿qué es la Patria? ¿Es el /3 pedazo de tierra que nos recibió al nacer?Puede / ser eso; pero es mucho más. Es ese pedazo de tier-/ ra, no conside-rado aisladamente, sino poblado de /6 tradiciones. Es el pedazo de tierradonde nacieron / nuestros padres, donde están los sepulcros de nuestros /antepasados; donde algunos de nuestros conciudada-/9 nos merecieron nom-bres ilustres; donde otros practica-/ ron virtudes (ilustres) heroicas, las másveces ignoradas / del mundo, pero guardadas cuidadosamente, como en /12

precioso relicario, en la memoria de los deudos y de / unos cortos amigos,que las exhiben en las veladas / del hogar ante la tierna generación que se vafor-/15 mando. Es el pedazo de tierra donde está la i-/ glesia a la que fuimos


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cuando niños, para apren-/ der a rezar; donde está la escuela a la que fui-/18

mos para aprender a leer; donde está el santuario / de las leyes al quefuimos más tarde para hacer / valer nuestros derechos. Es el pedazo detierra, con-/21 fidente de nuestros pesares y de nuestras alegrías, de / nues-tros proyectos realizados y de nuestras ilusiones / desvanecidas.

/24 Todo eso entra en la idea de la / Patria; pero debe haber algo más: senecesita que / ese pedazo de tierra sea independiente; que se gobier-/27 nepor leyes propias; que tenga puesto entre las / Naciones de la tierra, tratán-dolas como a sus igua-/ les, aunque éstas sean más extensas, pobladas y po-/30 derosas; que la enseña que ostenta los atributos de / su soberanía tremolesobre el Capitolio donde se / congregan sus Padres Conscriptos, que el par-che /33 y el clarín puedan dar, llegado el caso, la voz / de alarma, apoyada porel estampido del cañón. /

Esto sí que es la Patria, donde la //p.5 libertad, la igualdad y la fraternidad bienentendi-/ das reúnen en estrecho abrazo, como una sola fami-/3 lia a todosaquellos que la reconocen por Madre. /

Ahora bien, las virtudes cívi-/ cas son como todo lo que es bueno, un don deDios; /6 y por tanto, lejos de perder su fuerza ante el / sentimiento religioso,reciben de éste su perfección. /

¿Qué tiene, pues, de extraño que en las filas del /9 Clero se encontraraneximios patriotas que contribu-/ yeron en grande escala a nuestra emanci-pación po-/ lítica, a nuestra independencia nacional?

/12 Con legítimo orgullo podemos / recordar que el clero de la Diócesis deMérida se / distinguió de un modo particular por su patriotis-/15 mo, sin faltara sus deberes de orden religioso; ya / ilustrando al pueblo en sus deberes yderechos civiles; / ya tomando asiento entre los representantes de los /18

pueblos, y decretando la emancipación de Venezuela, / en el memorableCongreso cuyo centenario nos pre-/ paramos a celebrar; ya disipando consus luces /21 los últimos escrúpulos que el Obispo tenía para / jurar la Inde-pendencia; ya ocupando altos / puestos en el Gobierno y hasta en el PoderEje-/24 cutivo de las Provincias; ya contribuyendo con su / dinero y con todaclase de servicio personal; y gra-/ tuito para el afianzamiento de la Indepen-dencia: /27 exponiéndose con todo eso a las iras del Gobierno espa-/ ñol elque más de una vez les hizo pagar bien caro / en sus bienes y en sus perso-nas y familia, el /30 delito de querer ser independientes y libres. /

De esta brillante constelación / de sacerdotes patriotas de la Diócesis de

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Mérida, no-/33 tables por su virtud y por su ciencia, fueron / escogidos mástarde algunos para Arzobispos de / Caracas, para Obispos de Mérida yGuayana y //p.6 para canónigos que formaron los Senados de / estos en lasmismas Diócesis.

/3 Teniendo todo esto en cuenta / creemos de nuestro deber que la Diócesisde Mé-/ rida, en la celebración del primer Centenario /6 de Nuestra Indepen-dencia, que se hará el / 5 de julio de 1911, ofrende a la Patria testimo-/ niosimperecederos del patriotismo del Clero de este /9 Obispado. /

Por tanto disponemos: /

Primero: que se reúnan en un libro /12 todos los documentos y todas lastradiciones fidedignas / que de algún modo den testimonio de la participa-/ción del Clero de la Diócesis de Mérida en la /15 obra de la Independencia, ydel patriotismo / del mismo Clero en cualquiera otra de sus ma-/ nifestaciones.

/18 Segundo: que se cree un / Museo Diocesano en un departamento / de laCuria Eclesiástica que se fabricará al /21 efecto, en el cual, junto con losobjetos nacio-/ nales o extrangeros que corresponden a estableci-/ mientosde esa índole, se conserven más cuida-/24 dosamente todos los objetos, quese puedan conse-/ guir, que de algún modo se relacionen con la / Indepen-dencia, o que pertenecieron a los héroes /27 seglares y eclesiásticos de aquellaépoca. /

Tercero: que, como para llevar / a cabo estas disposiciones sólo contamoscon las /30 contribuciones de nuestros queridos diocesanos y par-/ ticularmentede los eclesiásticos, autorizamos a / nuestro Secretario de Cámara para quese diri-/33 ja por circular a todos los Curas, acompa-/ ñándoles la presentePastoral y un elenco de / los objetos que se desean para el Museo //p.7

Diocesano, y los excite a recoger las contribu-/ ciones de los fieles.

3 Esperamos que todo el Vene-/ rable Clero de la Diócesis y muy particular-/ mente el Muy Venerable Cabildo Diocesano /6 secundarán nuestros propó-sitos. /

Estas nuestras letras se leerán / en Nuestra Santa Iglesia Catedral y en /9

todas las parroquiales el primer día festivo / después de recibidas y se inser-tarán en el Bo-/ letín Diocesano.

/12 Dadas en Nuestro Palacio Epis-/ copal de Mérida, a diez de agosto de mil/ novecientos nueve.


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(Sello húmedo con su respectivo escudo) Antonius Raymundus Silva Deiet AP.S.G. Episcopus Emeritensis.

/15 Antonio Ramón, / Obispo de Mérida (rúbrica) /

Por mandato del Ilustrísimo Señor Obispo.

/18 Doctor Evaristo Ramírez C. (rúbrica) / Secretario

//p.8 Nota /

El Decreto que precede fue cumplido al pie /3 de la letra; se fabricó unhermoso salón para el Museo; / se organizaron en él muchos objetos, entrelos cuales los / más notables eran tres “Campanas” antiquísimas, una /6

“Corneta” que sonó en la Batalla de Ayacucho, otros / objetos históricos, deépoca de la Independencia, tra-/ bajos ejecutados en piedra y en barro porlos aborí-/9 genes, y algunos otros, todos obtenidos en la Diócesis. / El 5 deJulio de 1911, Centenario de la Declaración so-/ lemne de la Independencia,se bendijo e inauguró el /12 Museo, aunque no pudo estar presente el Ilustrí-simo / Señor Obispo a ese acto, por haber sido llamado por el / GobiernoNacional, para que en unión de los otros Señores Obispos, /15 solemnizaralas fiestas Centenarias en la Capital de la / República. El Museo ha seguidoenriqueciéndose / con objetos importantes por su rareza, antigüedad o histo-/18 ria, entre los que ocupa un lugar distinguido un “Canapé” / que pertenecióal Ilustrísimo Señor Doctor Buenaventura Arias, / Obispo de Jericó in Part.Infid. y Vicario Apostólico de /21 Mérida. En este mueble se han sentadoonce Prela-/ dos (Arzobispos y Obispos), según consta de las placas / decobre fijadas en él por el Doctor Don Tulio Fe-/24 bres Cordero quién ofren-dó esta notable reliquia al Mu-/ seo. /

Muchas personas notables han visitado /27 el Museo, pero hasta ahora no sehabía / pensado en destinar un Libro para obtener la / firma de los visitantes.El presente subsana-/30 rá aquel olvido; y, cuando el visitante sea / un Ilustrí-simo Señor Obispo, se le invitará a sentarse en el Canapé, y de esto setomará /33 razón en un acta especial conforme al si-/ guiente Ceremonial.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Blanca de Lima. Historia, oro y barroco: Iglesia de... pp. 131-165



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HISTORIA, ORO Y BARROCO:IGLESIA DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO DE CASIGUA,

ESTADO FALCÓN*

Blanca De Lima**

Resumen

Casigua, población del Municipio Autónomo Mauroa (estado Falcón), fue unpoblado de importancia en la región occidental del Coro colonial, cuyo es-plendor se asoció mayormente al contrabando de ganado. Como productode esa bonanza quedó para el presente un pequeño templo en planta de cruz,con dos capillas, cinco altares y 17 imágenes coloniales, casi todas proce-dentes del intenso comercio que la zona mantuvo con la Nueva España. Eltemplo de Nuestra Señora del Rosario de Casigua fue declarado Monumen-to Nacional de la República de Venezuela en 1960, debido a ser un inmuebledel periodo colonial y poseer una de las colecciones de esculturas colonialesen madera policromada y estofada más completas y en mejor estado deconservación del país, con piezas que conservan sus policromías originales.En este trabajo se aborda el decurso del templo a partir de la vida económi-ca y social del poblado, y se hace un primer diagnóstico de parte de lacolección de esculturas, visualizando la unidad histórica entre bien mueble einmueble. La investigación se soportó en el arqueo de fuentes primariasdirectas y primarias impresas. Se revisaron además fuentes secundariasque permitieron contextualizar el periodo colonial venezolano y la produc-ción artística en madera policromada de la Nueva España. El trabajo develael proceso de surgimiento, esplendor y crisis del templo entre los siglos XVIIIy XIX, en relación al carácter de la zona como enclave económico y el

* Nota de los editores: Artículo recibido en noviembre de 2008 y aprobado para su publicación enfebrero de 2009.

** Docente Titular e Investigadora de la Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda,Coro, estado Falcón, Venezuela. Correo electrónico: [email protected]


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proceso de mestizaje que generó conflictos intergrupales entre el grupo deblancos avecindados en la localidad y los pardos en ascenso social y econó-mico. Las imágenes presentan patologías asociadas a pérdidas de soporte,base de preparación, capa pictórica y hojillado de oro, conservando, contodo, un buen estado general.

Palabras clave: arte religioso, patrimonio, Casicure, Coro, contrabando, es-clavos.

HISTORY, GOLD AND BAROQUEOUR LADY OF THE ROSARY CHURCH IN CASIGUA, FALCÓN STATE

Abstract

Casigua, a town of the Mauroa Autonomous Municipality in Falcón, was animportant village in Coro’s western region during colonial times, when itssplendor was mainly associated with cattle smuggling. As a byproduct ofthat prosperity, we have today a small cross shaped temple in its base withtwo chapels, five altars and 17 colonial images, almost all coming from theintense trade the zone maintained with the New Spain. The Casigua templeof Our Lady of the Rosary was declared National Monument of the Republicof Venezuela in 1960, as a colonial building kept in the best conditionsthroughout the country and for having one of the most complete colonialcollections of multi chromatic wooden and quilted sculptures, with pieceskeeping their original colors. In this paper we deal with the temple’s lifespan from the village’s economic and social viewpoint, regarding the historicalunity between the personal and real property. The research is backed by aninventory of direct primary and press primary sources. The revision ofsecondary sources allowed the contextualization of the Venezuelan colonialperiod and the artistic multi chromatic wooden production of the New Spain.This work uncovers the process of rise, splendor and crisis of the templebetween the XVIII and XIX centuries, in relation to the character of thezone as an economic enclave and the process of mixed races which generatedinter-group conflicts between white settlers and the mixed races which were

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ascending socially and economically. The images show pathologies associatedwith the loss of support, preparation base, pictoric layers and gold leaflets.Nevertheless, they are well preserved and in good general conditions.

Key words: religious art, patrimony, Casicure, Coro, smuggling, slaves.

Introducción

Enclavada en la hoy conocida como llanura de Casicure, Casigua, poblacióndel Municipio Autónomo Mauroa (estado Falcón), posee uno de los templosmás ricos en historia del Coro colonial. Poblado de importancia durante elsiglo XVIII, en su decurso vio la construcción y esplendor de un pequeñotemplo en planta de cruz, con dos capillas, cinco altares y 17 imágenes colo-niales de los siglos XVII y XVIII. Casi todas, procedentes del intenso comer-cio que la zona mantuvo con la Nueva España, hablan por sí mismas delpeso económico que llegó a tener Casigua, y del poder que alcanzó el grupode blancos que en él radicaron, poder que no podía dejar de expresarse en laesfera de lo religioso. Casigua posee una interesante arquitectura de tierraque dado su carácter fronterizo combina influencias marabinas y corianas1.

El templo de Nuestra Señora del Rosario de Casigua fue declarado Monu-mento Nacional de la República de Venezuela en Gaceta Oficial Nº 26.320del 2 de agosto de 1960. Ello debido a que posee, entre otros valores, una delas colecciones de esculturas coloniales más completas y en mejor estadode conservación de Falcón y Venezuela, con piezas de gran significaciónque conservan sus policromías originales sin haber sufrido casi alteracionespor intervención del hombre. En medio de los avatares de más de tres siglosde existencia, ha llegado hasta el presente con un grado de conservación ensus bienes muebles que destaca entre el saqueo y pérdidas generalizadasque han sufrido los templos venezolanos. Una comunidad sensibilizada ha-cia su patrimonio ha logrado impedir la desaparición ilícita o el traslado inde-

1 Marnie Soto y Roberto Stiuv. Proyecto de consolidación y adaptación a nuevo uso del balcónBolívar de Casigua, Estado Falcón.


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bido de este conjunto artístico que, hasta el presente, carece de cualquierestudio diagnóstico o proyecto de consolidación.

Partiendo de una visión integral de la vida del templo, que permita compren-derlo no como una obra artística aislada junto a sus bienes muebles, sinocomo un edificio vivo, marcado por los procesos sociales, económicos ypolíticos que vivió la región de Casicure y su cantón Casigua; este trabajo sedivide en dos capítulos: el primero recorre el proceso de formación de lapequeña iglesia y su feligresía, enmarcados en el desarrollo mismo de Casiguacomo poblado, la región de Casicure y la jurisdicción de Coro. Se recreanescenarios que explican el declive de Casigua y su templo, visualizando losaspectos sociales que, en la rígida estructura colonial, contribuyeron a gene-rar divisiones al interior de los grupos con fortaleza económica. El segundodescribe la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario de Casigua y sus imáge-nes barrocas.

1. Un pueblo y su templo: élites, sociedad y economía en Casigua

1.1 Los orígenes del templo

El documento más antiguo encontrado sobre la iglesia de Casigua se retrotraeal año de 1714, cuando el Alguacil del Santo Oficio de la Inquisición MiguelClemente Salón2, residente en Casigua, hizo testamento. En él declaraba laayuda que había dado para la fábrica de la iglesia de Casigua, en los siguien-tes términos:

Declaro que para la fábrica de la iglesia de Nta. Señora del Rosariode Casigua y ayuda del demás costo de ornamentos he dado quincepesos de limosna al Cap. Antonio de Vera en plata, con dos reales queme pidió para pesar en Coro, con más doce reales para el despacho deCaracas y nueve cargas de palma, y ayudé con dos bestias a arrastrarla madera de la fábrica y dos almudes demás que di para que comie-ran los peones de la fábrica, y ahora es mi voluntad se hagan dichos

2 Miguel Clemente Salón llegó a América en 1667, procedente de San Lúcar de Barrameda.AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 3, doc. s.n. Testamentaria del Alguacil delSanto Oficio, Miguel Clemente Salón (1714), f. 2.

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manteles de ruán para el altar mayor para que sirvan de remuda quedoy la limosna, y se pague de mis bienes3.

Las cargas de palma mencionadas permiten inferir un modesto techo pajizoen esa iglesia, lo cual hace factible el visualizar una típica construcción de laépoca, cuando no se había impuesto en la jurisdicción de Coro el uso de lostechos entejados, todavía una excepción constructiva entre los pudientes delámbito urbano. La orden de hacer mantelería de ruán para el altar mayorhabla de una construcción todavía por culminar, cuando menos en sus deta-lles ornamentales.

A tono con su estatus de benefactor de la fábrica, Miguel Clemente Salónfue enterrado en la iglesia de Casigua4. Tal actividad en torno a la iglesia,con la presencia de cura capellán, que lo era para 1714 el Lic. don AndrésAlonso Perozo de Cervantes, indican que para comienzos del siglo XVIII lareligiosidad tenía una clara manifestación ritual y pública entre los morado-res del área de Casigua, abanderada por los residentes blancos. Incluía unaelite lo suficientemente estructurada como para tener autoridadesinquisitoriales -extensiones del tribunal establecido en Cartagena en 1610 ycon jurisdicción sobre Venezuela-, y lo suficientemente adinerada como paraalentar y llevar a cabo la construcción del modesto templo. Por otra parte, laproximidad calendárica permite remitirse al siglo XVII y ubicar su segundamitad como tiempo de maduración de las condiciones que permitieron avan-zar sobre la fábrica del templo en los albores del siglo XVIII; templo queseguramente ya existía, con mayor modestia, tal vez como capilla u oratorio,en el siglo XVII, como lo permite deducir el hecho de la presencia de uncura capellán en el sitio de Casigua5.

3 Ibídem., f. 1.

4 Ibídem., f. 9.

5 En la Colonia, generalmente se llamaba cura al presbítero, sea diocesano o del clero regular,que ejercía su oficio en un curato o parroquia. El capellán era asistente de una iglesia auxiliaro anexa a un curato, que por alguna situación especial necesitaba un tratamiento especial, o eraauxiliar del cura doctrinero o encargado directamente, pero no tenía nombramiento en esteúltimo caso. En Venezuela hubo muchas capellanías en las haciendas con numerosos esclavoso en los pueblos de indios. Para el caso de Casigua debe entenderse, entonces, que era unaiglesia anexa a un curato.


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Así, las fuentes primarias permiten rectificar la apreciación del obispo MarianoMartí, quien en su visita del año 1774 y a partir del libro parroquial másantiguo que encontró, infirió que el pueblo tenía unos 50 años de fundado, locual retrotrae a 17246. La presencia de un cura capellán, obra de construc-ción y de entierros al interior del templo para 1714, evidencia que ya en lasegunda década del siglo XVIII existía una iglesia en forma, la cual segura-mente fue precedida por alguna construcción de menor rango eclesiásticoque evolucionó hacia templo en la medida que avanzó el número y la forta-leza económica de los blancos que decidieron establecerse en Casigua. Eraéste un lugar de poblamiento altamente disperso, concentrados sus morado-res en hatos, parajes y retiros donde es probable hayan emergido oratoriosque terminaron por ser insuficientes como expresión de culto y de poderíodel grupo social de blancos que hacía vida en la zona, y que terminaron porconstruir y confluir para efectos de sus expresiones rituales religiosas, acomienzos del siglo XVIII, en la iglesia ubicada en el denominado sitio deCasigua7.

La fortaleza del Cantón Casigua8 y su revertir en el ámbito de la ritualidadreligiosa se evidencia para estos años en las peticiones de entierros a efec-tuarse al interior del templo, como es el caso de Juan Romero en época tantemprana como 1714, y Sebastián Manuel de Piña, en 17209. Pero no sóloen la parroquia Casigua, sino también en las otras que constituían el cantón,se daba el mismo proceso. Así, tenemos que en Coroquide, el año de 1713,Juan Salvador Altamirano pidió ser sepultado en la Iglesia de Nuestra Seño-ra De la Limpia Concepción de Capatárida10; y en Borojó, en 1714, Isabel

6 Lino Gómez Canedo (Compilador). Mariano Martí. Documentos relativos a su visita pastoralde la Diócesis de Caracas. 1771-1784. Caracas: Biblioteca de la Academia Nacional de laHistoria, 1969. Volumen I, p. 119. (Fuentes para la Historia Colonial de Venezuela, 95).

7 Su alta dispersión poblacional es característica más que probada en todas las relaciones del sigloXVIII que la mencionan, desde Joseph Luis de Cisneros hasta el Obispo Martí. En cuanto aoratorios o capillas, no hay registro de ellos en fuentes primarias, salvo la mención de PedroFelipe de Llamas en 1768 de un oratorio próximo a Casigua, en el sitio de Curaridal. AngelAltolaguirre y Duvale (Comp.). Relaciones geográficas de la Gobernación de Venezuela(1767-1768), p. 196.

8 En la época colonial Casigua era cantón de la Provincia de Coro, junto a Coro, Paraguaná, SanLuis, Cumarebo y Costarriba. La provincia contaba con 36 parroquias y 26 grandes vecindarios.Las parroquias del cantón Casigua eran: Casigua, San Félix, Borojó, Dabajuro, Capatárida yZazárida. Léase: Salvador De Lima. Geografía del Estado Falcón, pp. 6 y 20.

9 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 3. Testamentaria de Juan Romero (1714), f. 1.Caja 7. Testamentaria de Sebastián Manuel de Piña Bustamante (1720), f. 1v.

10 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 3. Testamentaria de Juan Salvador Altamirano(1713).

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de Olivares pidió ser sepultada en la iglesia de Nuestra Señora de las Mer-cedes de Borojó, al pie de la pila del agua bendita, y de su peculio hizo pagardos tabernáculos: uno para San Francisco y otro para la Virgen del Rosario,ambos en la iglesia de Borojó11. Estos entierros al interior de los templosserán la constante a lo largo del siglo XVIII, tanto en Coro como en aquellospoblados de la jurisdicción donde el acondicionamiento del recinto eclesial lohizo posible12.

A lo largo del siglo XVIII se verán estas solicitudes de entierros en el templode Casigua, siendo mencionados en forma progresiva sus altares e imáge-nes, y pudiéndose advertir que la iglesia se mantuvo en constante obra, talvez no en cuanto a construcción, mas sí en reparaciones puntuales, man-tenimiento y mejoras. Así, en 1731 el Cap. Félix Fortun –valenciano de Játiva-pidió ser enterrado con hábito franciscano: ...en la iglesia de Nuestra Se-ñora del Rosario en el pueblo de Casigua, en la sepultura donde fuesepultado el reverendo Padre fray Francisco Jerica13; en 1733 JuanÁlvarez de Tapia –canario- pidió ser enterrado en segundo tramo, dejandodisposiciones bien para imponer una capellanía en la iglesia de Casigua olegar dinero que: ...se aplique a la fábrica que actual se hace o hiciereen dicha iglesia de Casigua, a la que finalmente le correspondieron 22pesos14; en 1736, el testamento de Nicolás de Nava asentó su deseo de sersepultado en la iglesia de Nuestra Señora del Rosario de Casigua, en tercertramo, amortajado en sábana blanca15. Ya en la segunda mitad, son ejemploslos testamentos de Francisco Joseph de Matos (1758), del canario DiegoPadrón (1760) y de María Ana Mollejas de Reldires (1768), viuda, residente

11 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 4. Testamentaria de Diego Meléndez de Aguiar(1715), ff. 7v-8v.

12 Numerosos testamentos dejan expresada esta disposición. Destacamos para la región de Casicure,la solicitud en 1732 de don Lucas Pereira, hermano del cura doctrinero de Dabajuro, quienpidió su entierro en Capatárida; en 1733 Juan de Piña Bustamante lo pidió en la iglesia deCasigua; AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 13. Testamentaria de Lucas Pereira(1732), f. 3-3v; Juan de Piña (1733), f. 1v.

13 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 12. Testamentaria de Félix Fortun. (1731), f.1v. Este hallazgo es de gran importancia en materia de bienes muebles, ya que en el temploexiste un lienzo firmado por Jerica, lo cual permite asociarlo al presbítero mencionado en eltestamento y datar el cuadro en la primera mitad del siglo XVIII.

14 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 13. Testamentaria de Juan Álvarez de Tapia.(1733), ff. 1-1v y 17.

15 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 15. Testamentaria de Nicolás de Nava (1736),f. 1v.


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en Casigua; quienes pidieron ser enterrados en la iglesia de Casigua, a lospies del altar de las Ánimas, con mortaja blanca aquellos y hábito de SanFrancisco ésta, respectivamente16.

En su decurso dieciochesco, el pequeño templo con planta en forma de cruz,torre-campanario y cementerio anexo, vio la erección de dos capillas y cin-co altares, ornados con 12 tallas de madera policromada y dorada (laInmaculada, Santa Rita de Casia, Santa Ana, Nuestra Señora de Belén,Virgen del Rosario, Virgen del Carmen, San Cayetano, San José, San Nico-lás de Bari, San Francisco, San Antonio y San Joaquín), y cinco figurasprocesionales (la Dolorosa, el Nazareno, Jesús en la Columna, Humildad yPaciencia, Cristo Yacente), casi todas procedentes del intenso comercio quehubo con la Nueva España y que se explica más adelante. Las tallas midenentre 60 y 80 cm. de altura (Anexos).

1.2 La elite de Casicure

La familia Salón pertenecía a la elite del ámbito eclesial de la jurisdicción deCoro. Desde España ya había precedentes de cargos eclesiásticos entre susmiembros, ya que un hermano de Miguel Salón, llamado Francisco, fue pres-bítero en San Lúcar de Barrameda. Miguel Salón casó con María Calderade Quiñónez, cuyo hermano, el Lic. Juan Caldera, fue Cura y Vicario de laciudad de Coro y murió en 1696. Un hijo de Miguel Salón, llamado JuanEsteban, y dos sobrinos, fueron enviados a hacer estudios al convento jesui-ta de San Bartolomé, en Santa Fe de Bogotá; y cuando menos su hijo segraduó de Maestro, retornó y fue ordenado sacerdote en Caracas para elaño de 1700. Para el momento de la muerte de Miguel Salón su hijo eraSacristán Mayor de la parroquial de Coro17. El poder eclesiástico iba apare-jado al poder económico. Miguel Salón hizo un buen matrimonio, de lo cuales indicativa la interesante dote de más de 2 mil pesos que aportó MaríaCaldera de Quiñones. Miguel Salón declaró en sus testamentos bienes en

16 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 30. Testamentaria de Joseph Francisco deMatos (1758), f. 1v; caja 32. Testamentaria de Diego Padrón (1760), f. 7; Sección InstrumentosPúblicos (SIP). T. XXXV, ff. 36-39v.

17 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 3. Testamentaria del alguacil del Santo OficioMiguel Clemente Salón (1714), f. 1.

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ganado vacuno por más de 400 cabezas, sin contar otros ganados, cuatrositios de hato, la mitad de una composición y un cuarto de solar en Coro,además de varios esclavos.

A lo largo del siglo, la familia Salón demostró a través de las testamentariasel arraigo que tenía con Casigua y su templo. Algunos de sus miembrosdejaron disposiciones que favorecieron la fábrica de la iglesia. En 1732 InésMaría Salón -hija de Miguel Salón- fue enterrada en primer tramo, dejandouna limosna de 25 pesos para la fábrica de la iglesia de Casigua18; elpresbítero Juan Esteban Salón –hermano de Inés María e hijo de MiguelSalón- dejó dispuesto en su testamento de 1734 que en caso de morir enCasigua fuera enterrado en su iglesia, a la que designó una limosna de 25pesos para su fábrica19.

Este tipo de bonanza económica se gestó durante el siglo XVII y se vioreflejado en la fábrica de la iglesia. Bonanza que no estuvo exenta del expo-lio de tierras a los indígenas, sobre las cuales se cimentó la industria ganade-ra extensiva que caracterizó al occidente de Coro y que para comienzos delXVIII estaban en gran parte en manos de los hispanos asentados en la zonade Casicure. Las fuentes primarias permiten ver, a través de las operacio-nes de tierras, el trasvase que se dio de esta riqueza de los pobladoresautóctonos a los europeos. Un ejemplo es la venta que hicieron en 1708 elCap. don Pablo Noguera y Lugo y su esposa doña Francisca Quintero Prín-cipe, haciendo propietario al Cap. don Pedro Perozo de Cervantes, vecinode Maracaibo y residente en Coro, la mitad de las sabanas de Buraure ymitad del Cercado, en la Provincia de Casicure20.

Algunos otros apellidos que se involucrarán con el ejercicio del poder políti-co, económico, social y religioso en Casigua a lo largo del XVIII y XIXserán Nava y Ávila, Piña de Bustamante, Ferrer, Oberto y Febres Cordero.De ellos emergerán en lo esencial figuras públicas como alcaldes, presbíte-ros, militares y hacendados; todos relacionados con la economía ganadera yel manejo de esclavos para servicio doméstico y el trabajo de sus propieda-des.

18 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 13. Testamentaria de Inés María Salón (1732),ff. 1 y 2.

19 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 13. Testamentaria de Juan Esteban Salón (1734),ff. 16v-17.

20 AHEF-UNEFM, Sección Instrumentos Públicos. T. II, ff. 50-51.


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Casigua, pueblo de blancos, mestizos diversos y esclavos, era punto de in-tersección de las provincias de Venezuela y Maracaibo; pero además, entrela jurisdicción de Coro y la provincia de Maracaibo, por tanto, influenciadopor ambas. Sus habitantes supieron capitalizar en su beneficio las bondadesde su doble carácter fronterizo, su ámbito costero y su estratégico posicio-namiento en la red de caminos que enlazaban a Coro con Maracaibo, alestar ubicada sobre el Camino Real entre ambas ciudades, siendo la últimaavanzada poblacional de importancia en la ruta Coro-Maracaibo. Los blan-cos de Casigua cimentaron su avance económico y social en negocios quetenían que ver tanto con Coro como con Maracaibo, sin excluir el contra-bando en sus cercanas costas. Una economía de hato basada en la cría dediversos ganados, la comercialización de los mismos y sus derivados, y laexplotación de una mano de obra esclava que procedía tanto de Maracaibocomo de Coro fue el pilar de su evolución.

1.3 Contexto de la región coriana en los siglos XVII y XVIII

1.3.1 Economía

El siglo XVII fue particularmente duro para la jurisdicción coriana. En térmi-nos políticos se concreta su debacle y pase a una posición secundaria, altrasladarse a Caracas en 1637 las sillas capitales del superior gobierno y elobispado21. Ello resultó en la pérdida de un estatus que conllevaba privile-gios económicos y políticos. En términos de economía es un siglo difícil porla deprimida situación del comercio con España y la estructuración de losnexos comerciales con la Nueva España, hacia donde se dirigía el grueso dela producción de cacao, mientras España se orientaba más hacia las pieles yel tabaco, productos de mucha menor cotización y producción. El siglo XVIIvio la formación de un mercado para el cacao venezolano en la NuevaEspaña, cuya balanza comercial llegó a superar ampliamente la española. Elcomercio venezolano durante el siglo XVII fue esencialmente novo hispano,y así se entró en el siglo XVIII, con una España que sólo hasta la llegada dela Guipuzcoana logró levantar cabeza en la Provincia de Venezuela22.

21 Don Joseph Solano, Capitán General de la Provincia de Coro, en Angel Altolaguirre y Duvale.Ob. Cit., p. 187.

22 Eduardo Arcila Farías. Comercio entre Venezuela y México en los siglos XVII y XVIII. Cap. 2.

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La jurisdicción de Coro no fue productora importante para la economía delcacao del siglo XVII. Su producción -concentrada en el oriente de la juris-dicción, sobre todo hacia las zonas húmedas de los ríos Güeque y Ricoa- notuvo relevancia. El auge del cacao en Coro fue muy breve, con haciendasque se formaron en las primeras décadas del siglo XVIII, –de lo que dejótestimonio el informe de Olavarriaga en 1720-, ya que entraron en crisis porrecurrentes sequías y se habían perdido para 177323. El avance de Coro,entonces, se dio sobre otros productos y otras relaciones, las más de lasveces ajenas a los proyectos, deseos y controles de la corona española. Elcontrabando se estableció desde muy temprano como una característicaestructural de la economía de la jurisdicción, y un problema para la coronaespañola. El mismo informe de Olavarriaga -antes mencionado- dejó asen-tados los peligros del contrabando para la corona española y la corrupciónde las autoridades que debían combatirlo; y esto, años antes de que Holandaasumiera el control de Aruba y Curazao: ... estos Ministros han permitidoocultamente la salida de los frutos de la tierra a los extranjeros, y laentrada de sus mercancías, haciendo ellos mismos este dañoso comer-cio24.

Casigua, como toda la jurisdicción de Coro, cimentó su avance económicoesencialmente en esta actividad, que se afianza desde 1634, al establecerselos holandeses en Curazao y reorientar la región sus intereses en función dela activa colonia holandesa, que tanto demandaba productos de tierra firmecomo la abastecía de todo aquello que no llegaba desde la metrópoli. A lolargo de la costa de la jurisdicción hubo puntos clave para el contrabando: aloriente, Tucacas, que veía salir productos como tabaco, cacao, leña y otros;al centro el eje Sauca-La Vela-Paraguaná; y al extremo occidental Casigua,con una interesante cría de ganado mayor y menor y excelente posiciónfronteriza. Si bien Casigua no tuvo con respecto a Curazao y Aruba la estra-tégica ubicación de la Península de Paraguaná o el Puerto de La Vela, que-

23 AGN-Sección Gobernación y Capitanía General (SGYCG), Vol. 13, f. 53. Citado en: EduardoArcila Farías, Ob. Cit., p. 50. Un ejemplo de este desplome quedó plasmado en el testamentode don Juan de la Colina Peredo (1759). En él hacía constar la pérdida de las haciendascacaoteras de Taricaca y San Vicente, aquella con 4 y ésta con 7 mil árboles de cacao. AHF-UNEFM, Sección Instrumentos Públicos. T. XXIX (1759-1761), f. 101-118v.

24 Pedro José de Olavarriaga, Instrucción general y particular del estado presente de la Provinciade Venezuela en los años de 1720 y 1721, pp. 14-15.


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daba con todo en el circuito de actividades del contrabando holandés, queirradiaba no sólo a la jurisdicción coriana y a Maracaibo, sino a la NuevaGranada. Su posición fronteriza le permitió canalizar el contrabando de im-portación y exportación tanto hacia Maracaibo como hacia el occidente deCoro y, por los caminos del sur, hasta los valles de Carora y Barquisimeto.De hecho, la salida natural de Carora hacia el mar eran Coro y su puerto,puntos de contratos y donde confluían ganados, sal, carne salada, cordoba-nes y otros productos.

Pero además de los puntos oficiales de control de comercio, las ampliascostas corianas, carentes de vigilancia adecuada, tenían sinnúmero de puer-tos y puntos de ingreso y egreso de las mercancías que daban vida a lajurisdicción. En 1731 expuso Joseph Gaspar de Salas, con respecto a esteproblema, que los pobladores de la jurisdicción no sólo utilizaban el Puertode La Vela, ... sino de otros muchos que hay a Sotavento de él, hastallegar a los términos de dicha ciudad de Maracaibo, en que hay exten-sión de cerca de cincuenta leguas, como ha referido, muchos Puertossin Guardia ni Gente que habite en ellos25.

Unos 30 años después, en 1764, Joseph Luis de Cisneros expuso paraCasicure, -el cual formaba parte Casigua-, lo que fue la realidad de todos lospueblos del occidente coriano durante el XVIII: ... se van encontrandomuchos puertos, calas y fondeaderos hasta salir de los términos deesta provincia, y entrar a la de Maracaibo; en todo ellos hacen el tratoclandestino los holandeses con gran seguridad, porque los corsariostemen mucho esta navegación, y de ordinario encuentran los extranje-ros mulas, ganado mayor y menor, tabaco, cueros y mucho palo debrasil...26.

La palabra clave para Casigua es el contrabando de exportación, y el pro-ducto preferido debe haber sido el ganado, especialmente el mular, que ad-quirió gran fuerza hacia las colonias holandesas y a partir de ellas hacia elarco caribeño, y no pudo ser controlado por los dispositivos de circulación yfiscales que la corona implementó. El plano costero, apto para esta cría,

25 AGN-Sección Diversos T. XX, f. 111v-112. En: Ramón Aizpurua. “Coro y Curazao en el sigloXVIII”, p. 232.

26 Joseph Luis de Cisneros. Descripción exacta de la Provincia de Venezuela, pp. 167-168.

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manejó cifras muy altas de cabezas de ganado mular, y esto incluyó a Casiguay su entorno. Para 1720 Olavarriaga informó del sacrificio anual en la juris-dicción coriana de 4.000 reses, además de 1.000 mulas y 2.000 pieles anua-les vendidos a los holandeses, comercio del que participaba Casigua27.

En cuanto al comercio de esclavos, desde comienzos del siglo XVII, pese ahaber prohibición de desembarcar negros en las costas de Coro, los arriboscon negros de mala entrada, llegados en balandras inglesas u holandesas,alimentaron el comercio local; y la introducción clandestina fue una reali-dad.

Durante el siglo XVIII Casigua prosiguió su avance y en la segunda mitadllegó el declive, ello pese a formar parte del circuito de Maracaibo, que enese lapso tuvo su mayor volumen de comercio con la Nueva España: Esetráfico, [del cacao] sin embargo, fue en aumento, aunque lentamente, yen el último cuarto del siglo alcanzó cifras más elevadas, creciendo enla medida en que disminuía el de Caracas, al que parcialmente sustitu-yó en aquellos mercados, (...) se hizo particularmente intenso hacia laúltima década del siglo XVIII...28.

Maracaibo era la salida más conveniente para cacaos de diversas proce-dencias: ... el cacao al que se daba la denominación de Maracaibo noera totalmente cosechado en esa provincia, sino que una gran parte deél provenía de regiones vecinas pertenecientes a la provincia de Cara-cas y al Nuevo Reino de Granada, pero cuya salida más inmediata erala de aquel puerto (...) el cacao se recogía en cantidades importantesen Mérida, La Grita, San Cristóbal, Cúcuta, Barinas y otros lugares,que lo remitían a Maracaibo...29.

En términos estadísticos, a medida que avanzó el siglo XVIII el volumen decacao Maracaibo fue en aumento, alcanzando sus cifras más elevadas en elúltimo cuarto del siglo. La unidad de los cacaos de Caracas y Maracaibollegó a ser tan poderosa que sólo entre 1728 y 1739 los buques mercantes

27 Pedro José de Olavarriaga, Ob. Cit., p. 90.

28 Eduardo Arcila Farías, Ob. Cit., pp. 79-80.

29 Ibídem., p. 78.


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procedentes de Maracaibo y Caracas, enviaron el 72.9% de los barcosmercantes que llegaron a Veracruz desde toda América30.

La crisis de Casigua fue severa, sin embargo, los grupos sociales favoreci-dos continuaron expresando su poder, como se detecta en ciertos censossuscritos por moradores del extremo occidental, Casigua incluido, con diver-sos templos. Es el caso en 1788 de Rafael Oberto, vecino de Casigua, por260 pesos al 5% anual, pertenecientes a la iglesia de Casigua y a la cofradíade Nuestra Señora del Rosario del mismo Casigua. Hipotecó para ello sucasa en el pueblo de Casigua, de 16 varas de largo, de bahareque techadade palmiche, cuarto y cocina en el patio de 13 varas de largo y correspon-diente ancho; un hato en Seque, ganado mayor, ganado cabrío, mulas y dosesclavos nombrados Bartolo y Bernardo, de unos 30 años de edad ambos31.En 1789 de los esposos Josef del Cristo Farías y Bárbara María Ferrer, deCuraridal (Casigua), con bienes y fiadores suficientes para obtener un prés-tamo a interés de mil pesos pertenecientes al Santo Hospital de Coro32. Yen 1793 Luis Francisco de Matos33, abogado de la Real Audiencia de la islaEspañola y Nuevo Reino de Granada, Teniente Justicia Mayor y Cabo Prin-cipal de Guerra de Casigua, recibiendo un censo de mil pesos pertenecien-tes a las capellanías de D. Manuel de Talavera, en Coro34.

1.3.2 Sociedad

Si el siglo XVII fue el de consolidación del poder endogámico del grupo deblancos en la jurisdicción coriana, el siglo XVIII fue un siglo de mestizaje. Elavance de este siglo vio el ascenso de los mulatos y pardos, que bien porobtención de libertades e intensos esfuerzos personales lograban posicionarsey fisurar la rígida estructura social, o bien -sobre todo para las mujeres-, porvía de enlaces matrimoniales procedían a elevar su estatus social.

30 Eduardo Arcila Farías, Ob. Cit., p. 62.

31 AHEF-UNEFM, Sección Instrumentos Públicos. T. XLII, f. 462v-465v.

32 AHEF-UNEFM, Sección Instrumentos Públicos. T. XLIII, f. 58-64v.

33 Este personaje se vio implicado, años después, en acusaciones por corrupción de menores ymalos manejos como mayordomo de la iglesia de Casigua, que se detallan más adelante en estetrabajo. AGN-SGYCG, TOMO XXX (1784), f. 236-238v.

34 AHEF-UNEFM, Sección Instrumentos Públicos. T. XLIV, f. 408-418.

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Este avance del mestizaje se advierte con mayor fuerza, –a nivel documen-tal- durante la segunda mitad del siglo XVIII; muestra de ello es que para1795 la jurisdicción contaba con 27.261 habitantes, divididos en 4.000 blan-cos criollos y peninsulares, 12.000 pardos y negros libres, 8.000 indígenas y3.261 esclavos negros35.

Las fricciones entre el grupo de blancos y lo que se llamaba el mulataje, sehacían patentes a la altura de la Real Audiencia, en reclamos de los blancospor las actitudes asumidas por las mulatas –respaldadas por sus maridos-,en clara violación de prerrogativas que la élite coriana consideraba de suexclusivo derecho. En 1768 se registra el caso de varias mantuanas de Corosolicitando ...el cumplimiento de una Real Providencia que se despachópor la Real Audiencia a favor de las otorgantes, impidiendo a las mulatasusen puntas en los mantos ni abanicos, por ser en esta ciudad costumbreel no usarlos las mujeres que no son de las principales36. Un componentede esta osadía fue una decisión de la Real Audiencia a favor de MaríaFrancisca de la Peña y sus hijas, permitiéndoles usar puntas en los mantossin ser blancas, lo que causó una reacción en cascada por parte de zambas,mulatas libertas y sus descendientes. La pugna no sólo no cesó, sino quetomó acento, ya que pocos años después las mulatas pasaron de las puntasde los mantos y los abanicos al seno de la misma iglesia, tomando medidas elteniente de gobernador y justicia mayor de Coro, Manuel de Carrera, apoyadoen un dictamen emitido por el abogado Pedro Chirino. Carrera ordenó el 10de octubre de 1774 que en lo sucesivo ninguna mulata introdujera a lasiglesias alfombras ni esteras, por contravenir las leyes del reino. La autoridadesperaba que la medida ...obre los efectos de pacificación y tranquilidada que se dirige37. Pero el mestizaje era un proceso consustancial a laeconomía y sociedad colonial. Blancos, negras y mulatas generaban unanueva realidad poblacional que iba acompañada de exigencias de estatus, enla medida que éstas, apoyadas por sus parejas, ascendían –quisiéranlo o nolos blancos de la élite- en la pirámide social.

35 Federico Brito Figueroa, La estructura económica de Venezuela colonial, pp. 329-330.

36 AHEF-UNEFM, Sección Instrumentos Públicos. T. XXXV (1768-1770), f. 87.

37 AGN-Sección Diversos. T. XLV (1774), ff. 198-198v.


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A la realidad de uniones interétnicas que daban cara a la sociedad seagregaban los propios conflictos al interior del grupo de blancos de la élitede la jurisdicción, donde las denuncias de concubinato y mal vivir, -yareseñadas con amplitud por el Obispo Martí en su visita pastoral de 1773-, ylos disensos matrimoniales se hicieron cada vez más usuales. Sirvan comoejemplo los casos del adulterio del Alcalde Juan Antonio Zárraga, denunciadopor su esposa María de la Concepción Colina en 1784; en 1786, el litigio porlas propiedades de Cristóbal de Nandes, supuesto hijo espúreo del Pbro. donCristóbal Chirino y su prima doña María Rosa Pérez de Medina, damamantuana de Coro; el disenso matrimonial de Rosa Garcés y Pedro Rua,introducido en 1793 por el hermano de ella y soportado en la diferenciasocial entre su hermana y un blanco pobre; y por último, la presunción deadúltera que en 1795 hizo recaer don Francisco Manzano sobre su ya difuntaesposa doña María Teresa Talavera, en el caso de disenso en la boda de suhija María Francisca, a quien desconoció como tal.

Casigua no escapó a estas circunstancias y temores; y la hipótesis que ma-neja este estudio es que un componente de la crisis del templo fueron lasfricciones y enfrentamientos entre la élite de blancos y los pardos que, enforma progresiva, se colocaron en posiciones de poder en esa área. Para1767 Casigua era calificado oficialmente como pueblo de gente blanca, par-da y morena, superando los pardos en número a los blancos (575/522); conla particularidad de tener los pardos mucho más niños que los blancos, lo quecon seguridad debe haber repercutido en un incremento acelerado de sunúmero hacia fines del siglo38. Para apoyar este aserto de un clima de con-flicto se utilizan diversos documentos de finales del siglo XVIII; el primero,la denuncia de blancos de la élite de Casigua en 1784, pidiendo la remociónde don Ignacio Piña como Justicia Mayor, soportada en que les agredía y enlas consecuencias que podía tener su jefatura. El texto habla por sí solo: nosiendo de poca consideración el desconsuelo que tenemos, en que si seofrece intentar el juicio de resistencia en algún matrimonio desigualque se pretenda, sea él por razón del empleo que teniente, juez priva-tivo según lo tiene declarado la Real Audiencia; y que no podemosesperar cosa favorable de él, como que su objeto es ajar la genteblanca39. Este temor por el sesgo que Piña podía a dar a los casos de

38 Altolaguirre, Ob. Cit., pp. 195-196.39 AGN-Sección Gobernación y Capitanía General. T. XXX (1784), ff. 201-201v. El énfasis es

nuestro.

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disenso, habla bien de la condición mestiza de este personaje o de su calidadde blanco comprometido con intereses de pardos o mulatos, y es demostra-tivo de que, progresivamente, los nuevos grupos sociales se ubicaban enpuestos de poder40.

El recelo de los blancos no era gratuito; temían que Piña no aplicara arajatabla la Pragmática Sanción sobre Matrimonios Desiguales, de 1778;único muro de contención ante los matrimonios desiguales que ya se veíancon frecuencia desde antes de ese año, abundando los de blancos peninsu-lares con mulatas41.

Pero más revelador es el censo de hombres útiles para el manejo de lasarmas, hecho en Casigua en 1784. Desglosado por grupos étnicos, sorpren-de encontrar que el apellido Salón -blancos principales a comienzos del si-glo- no figura entre los blancos, sino entre los pardos, acompañado de ape-llidos como Añez, del Barrio, Mármol, Méndez, Mollejas y Nava. Los apelli-dos blancos son en lo esencial Cabrera, Delgado, Febres Cordero, Ferrer,Matos, Oberto, Piña y Padrón. Esto no exceptúa que un mismo apellidofigurara en ambas listas.

Los escándalos tampoco faltaron en Casigua, alcanzando a la misma iglesia,cuyo Mayordomo -el abogado don Luis Francisco de Matos-, fue denuncia-do en 1784 por dos huérfanas pardas, acusado ante el Gobernador y CapitánGeneral de la jurisdicción de Coro de libertinaje y corrupción de menores enunión a sus parientes y allegados, emergiendo apellidos de la élite blancacomo Oberto, González, Febres Cordero, Farías y Padrón42.

40 Doce años después, en 1796, una situación similar se presentó; pero en esta ocasión losvecinos de Casigua fueron más lejos, destituyendo al Teniente Justicia Mayor Don JuanEsteban Gil Taboada. Se conminó a presentarse personalmente ante la Real Audiencia a donBenito María Faustino, don Rafael, don Bautista y don Francisco Oberto, implicados en elhecho; y en 1797 se designó un nuevo Teniente Justicia Mayor para Casigua, cargo que recayóen el Dr. D. Andrés María Manzano, ajeno a la jurisdicción por decisión de las autoridades. Esprobable que esta decisión se tomara ante las recurrentes tensiones que por la designación dela máxima autoridad local se generaban entre los grupos de poder de Casigua y Curaridal, yentre pardos y blancos. AGN-Sección Gobernación y Capitanía General. T. LXII (1797), ff.215-215v; AGN-Sección Gobernación y Capitanía General. Tomo y folio sin identificación,materia: Tenientazgos.

41 Luis Felipe Pellicer, “El amor y el interés. Matrimonio y familia en Venezuela en el sigloXVIII”. En: Dora Dávila (Comp.). Historia, género y familia en Iberoamérica (Siglos XVI alXX), p. 141.

42 AGN-Sección Gobernación y Capitanía General. T. XXX (1784), ff. 236-238v.


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Dos años después se encuentra la demanda de creación de un nuevo curato,desmembrado de Casigua, llamado San Nicolás de Curaridal. Un curatopequeño, de 753 feligreses, impulsada su creación por vecinos de Curaridaltales como Joaquín Francisco de Febres Cordero, José Félix de Febres Cor-dero, José del Cristo Farías, Pablo Antonio Padrón, José Enrique Farías yPablo Bernardo Padrón43. El argumento formal alegado para crearlo era laseparación de Casigua y Curaridal por el río Matícora, cuya crecida enépoca de aguas dejaba a los feligreses de Curaridal sin servicios religiosos.De hecho, en la demarcación del nuevo curato dos de sus linderos eran el ríoMatícora44.

Cierra este circuito de eventos la queja del mismo don Francisco de Matosen el año 1795, posicionado como Teniente Justicia Mayor de Casigua –elmismo cargo que detentara Ignacio Piña en 1784-, referida a los fraudesque cometían los que aspiraban a matrimonios desiguales, contraviniendo laPragmática Sanción, y mencionando un caso sucedido en la misma Casigua45.

El XVIII fue, entonces, un siglo de rápido apardamiento del grupo de blan-cos, lo que llevó a cambios sociales y fricciones internas que desembocaronal extremo en la escisión de la parroquia de Casigua, con lo cual debenhaber mermado los ingresos de la iglesia y ello repercutido en el manteni-miento de su infraestructura y bienes muebles. Puede imaginarse incluso unescenario progresivo del cual la escisión de Curaridal sólo fue un eventocimero; escenario que sería el de tensiones entre los feligreses del templo deCasigua, blancos y pardos en su mayoría, ambos con intereses creados entorno a la ritualidad, ambos con derechos adquiridos por sus ascendientesporque ayudaron a la fábrica de la iglesia, a la elevación de altares, donaronfiguras y ornamentos, crearon capellanías, entre otros gestos; lo cual a suvez generó derechos en torno a sitios de entierro, ubicación en el templopara efectos del culto, etc. La pugnacidad debe haber repercutido, muchoantes de la solicitud de creación del nuevo curato, sobre el apoyo que eltemplo recibía y que permitía su mantenimiento y el de su presbítero. Ante

43 AGN-Sección Negocios Eclesiásticos. T. XX (1786-1787), ff. 173-187v.

44 AGN-Sección Negocios Eclesiásticos. T. XX (1786-1787), ff. 173-187v. Seguramente estecurato tuvo como soporte el oratorio mencionado en 1767 por Pedro Felipe de Llamas,ubicado en Curaridal. Angel Altolaguirre, Ob. Cit., p. 196.

45 Luis Felipe Pellicer en Dávila, Dora. Ob. Cit., p. 139.

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las autoridades eclesiásticas, todo ello quedó oculto -que no ignorado- trasargumentos como el de la barrera geográfica representada por el río Matícora;pero más, mucho más que el río y la época de lluvia separaba a los poblado-res de Casigua y San Nicolás de Curaridal.

El destino de este curato fue incierto. Durante el siglo XIX ninguna visitapastoral menciona a San Nicolás de Curaridal, pero sí a San Félix de Curaidalen unión de Quisiro. Éste con una pequeña iglesia de teja y sin sacristía, ySan Félix con una iglesia de techo pajizo y sin sacristía46. En la pugna deblancos y pardos todo indica que, finalmente, el impulso de los secesionistasno dio mayores frutos.

1.4 La crisis del templo en la segunda mitad del siglo XVIII

El vigor del comercio entre Maracaibo y Veracruz, que alcanzó los iniciosdel siglo XIX, no se reflejó a cabalidad en el área de Casigua, quien -inexpli-cablemente todavía- para el último cuarto del siglo XVIII se mostraba endecadencia, lo que quedó expresada en tres documentos que se han ubica-do.

En 1771 el ya mencionado don Luis Francisco de Matos, -como Albacea delPbro. Joseph Norberto de Piña, quien fuera sacerdote de Casigua y admi-nistrador de las rentas de la fábrica de Casigua y del hato de ganado mayor,menor y bestias, que se formó a devoción del vecindario de Casigua-, de-nunció:

Como los vecinos de Casigua han sido siempre los que han fomentadoaquella fábrica, y de su cargo el mantenerla decente, tal que el Illmo.Sr. Balberde, dignísimo Obispo que fue de esta diócesis, hallándoseaquella iglesia (por negligencia del cura) deteriorada, indecente y sinornamentos suficientes, mandó se notificase al vecindario que dentrode un corto tiempo pusiesen decente la iglesia, y de no hacerlo se cla-vasen sus puertas, tocase sesatio a Divinis y diese cuenta al vice Patro-no Real que por parte de su señoría Illma. No se requería más, porestar dado el orden; clama el vecindario todo por la conservación y

46 Archivo Arquidiocesano de Mérida-AAM. Sección 62 Visitas Pastorales. Caja 14, doc., s/n.


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aumento de los bienes de su iglesia (cuya fábrica amenaza ruina) ypor el meno costo que sea posible en la causa mortuoria de dichocura, por lo que luego inmediatamente que falleció el enunciado cura,di a V. Merced cuenta pidiendo como lo reitero, y suplicó el comisiona-rio de aquel vecindario, que como vecino con muy poco salario haráel inventario, tirando sólo los derechos de los días que necesitare enesta ocupación y no más, los que serán muy cortos porque ya yo tendrébuen cuidado de avisarle que tenga la hacienda recogida47.

Tres años después (1774) fue la visita pastoral del Obispo Mariano Martí, yla situación no se había corregido:

Sus paredes son de barro y paja a modo de tapia; están desplomadas,y apuntaladas por dentro y por fuera con varios palos. La techumbreestá rendida, y con este motivo las dos tercias partes del cañón estáncubiertas de palma. Lo restante, y la capilla mayor de teja, pero todoinútil. Su largo con el presbiterio es de treinta y cuatro varas poco más,y siete y media de ancho. La sacristía está colateral al presbiterio, ycubierta de teja. Tiene siete varas de largo y once y media de ancho. Elcementerio y altozano están también enteramente arruinados48.

La acotación del Obispo Martí sobre el techo rendido y parcialmente cubier-to de palma, y el resto entejado pero inútil apoya el aserto de que a lo largodel siglo el templo estuvo en obras mayores o menores, ya que si en lasegunda década se le detecta como una modesta construcción de techopajizo, ya en su crisis dieciochesca se le menciona entejado, signo de que suarquitectura había avanzado hacia una mayor solidez en cuanto a materialesy mayor jerarquía en términos sociales.

Por último, en 1784 el mismo don Luis Francisco de Matos fue acusado demalos manejos en su papel de Mayordomo de la iglesia de Casigua. Lashermanas doña Joaquina y doña María Eulalia Mármol denunciaron ante elGobernador y Capitán General que Matos llevaba el templo a la ruina, ha-biendo quedado con el cargo sin presentar fianza y teniendo un caudal quese hizo ...a costa del sudor de nuestros parientes y de su cura Br. Don

47 AHEF-UNEFM, Sección Instrumentos Públicos, T. XXXVI, ff. 289-290.

48 Lino Gómez Canedo (Compilador). Mariano Martí. Documentos relativos a su visita pastoralde la Diócesis de Caracas. 1771-1784. Vol. 3. Compendio, p. 124.

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Josef Norberto de Piña, difunto, como es público y notorio en estepueblo. Agregaban a esto que Matos: …como mayordomo de esta iglesiaquiere dar por mérito la ha fabricado; así ha salido, que la hubierahecho de plata, y no que está toda averiada, nueva y sin caudal, por-que en pleitos y solicitud de empleos y demás gastos superfluos, y dan-do los censos a los suyos, de público se dice los más están perdidos49.

Por último, denunciaron como aliados o relacionados con Matos los siguien-tes apellidos: Oberto, González, Febres Cordero, Farías y Padrón. Lo intere-sante de esta denuncia es que deja ver cómo la situación del templo –tantoen su infraestructura como en sus finanzas- era lo suficientemente frágilcomo para dar pie a acusaciones que, viniendo de personajes de menorrango social -menores, huérfanas, mujeres y probablemente pardas- llega-ron hasta la más alta instancia judicial de la jurisdicción.

Sobre la base del anterior desarrollo, debe jugarse con varias hipótesis paraexplicar la debacle de Casigua durante el siglo XVIII:

1. Repercusiones de problemas en la jurisdicción de Coro, tal vez algunacrisis económica.

2. Abatimiento del contrabando de mulas u otros productos que salían porCasigua. Tal vez relacionadas con cambios en las relaciones España-Holan-da.

3. Problemas climáticos, recuérdese la sequía que destruyó las plantacionesde cacao.

4. Fricciones y enfrentamientos entre blancos y pardos, ocasionadas por elprogresivo mestizaje y la colocación de los nuevos grupos sociales en posi-ciones de poder.

49 AGN-Sección Gobernación y Capitanía General. T. XXX (1784), ff. 236-238v. El énfasis esnuestro.


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1.5 El XIX: un siglo de profundo deterioro

Con la llegada de la Guerra de Independencia el deterioro del Cantón Casiguase acentuó. Las visitas pastorales son una fuente de alto valor porque enellas quedaron plasmados tanto los cambios en la población como la des-trucción de la infraestructura eclesiástica. Techos, paredes, puertas y ven-tanas dañadas, documentación perdida, saqueo y robo de los objetos de cul-to.

Para 1819 Casigua contaba con 1.880 habitantes, según reportó el ObispoLasso de la Vega. Esta cifra por sí sola nada indica, pero el declive deCasigua se advierte al compararla con otros poblados del occidente de lajurisdicción que en siglos anteriores tenían mucho menos peso demográficoe importancia económica. Así, Capatárida la superaba, contando con 2.072habitantes, San Félix de Curaridal y Quisiro reunían 1.600, y Dabajuro tenía1.53050. Como Vicaría, Casigua contaba para 1824 con el siguiente clero:

Vicario y cura de Casigua. José Vicente Naveda

Capatárida. Gregorio Salón

Dabajuro. Antonio Ramírez

Borojó. Francisco Quiñones

San Félix. Lorenzo Cardoso51.

1824 fue un año difícil no sólo por la guerra, sino también por problemasclimáticos asociados a veranos intensos y escasez de agua. El obispo novisitó Borojó por informársele que el pueblo estaba desierto por falta deagua; pasó entonces a Seque, donde le informaron del robo de algunos orna-mentos y alhajas. En Casigua visitó el sagrario, la iglesia, pila bautismal,ornamentos y alhajas, procesión de difuntos, confirmaciones, revisó las cuen-tas de fábrica y nombró mayordomos. Se le informó que San Félix y Quisirotambién estaban despoblados por falta de agua. Tras breve estancia en Quisiropasó a los puertos de Altagracia. Culminada la visita envió carta el 21 deenero de 1825 al vicepresidente de la República de Colombia, informandosobre lo encontrado y la crítica situación de Coro52.

50 AAM. Sección 62 Visitas Pastorales. Caja 9, doc., s/n.

51 AAM. Sección 29 Estadísticas y Padrones. Caja 23, doc. 415.


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Para 1838, superada la conflagración independentista, el Obispo José Vi-cente de Unda realizó su primera visita pastoral ingresando a la jurisdiccióncoriana por el occidente, recorriendo en esta sección a San Félix, Casigua,Seque, Borojó, Dabajuro, Capatárida, Zazárida, Urumaco y Mitare. Para elcaso de la Vicaría de Casigua, era cura interino de la parroquia de Casiguael Pbro. Francisco Huerta53. Como un eco de su esplendor del XVIII, elobispo escribió a su paso por Casigua, el 10 de julio: Casigua. Tiene famosaiglesia con sacristía, custodia, prendas de la Inmaculada, entre ellasuna corona de oro hermosa, sagrario dorado. En la torre hay un des-plomo. Es la mejor población de estas y las que siguen54.

La expresión famosa iglesia remite en forma directa a los bienes mueblescontenidos en el templo. Era llamativo el pequeño templo, con sus altaresdorados y sus imágenes enjoyadas, irradiando aún en la memoria del colec-tivo como centro de ritualidad en toda el área de Casicure y en la costanororiental del lago de Maracaibo. Es preciso acotar que, pese a haber cul-minado la guerra y estabilizada la República, la destrucción seguía haciendomella en la infraestructura de las iglesias. Casigua carecía de sacerdote y elobispo encontró algunas irregularidades que habían mermado el inventariode sus bienes muebles, ya que prohibió expresamente que ...se enajenasemueble o alhaja alguna de la iglesia sin previa licencia de S. S. I. Contodo, el templo luchaba por mantener su infraestructura, pero otros, comoBorojó, en palabras del propio Obispo, amenazaban ruina55.

Pero la inestabilidad heredada de la etapa independentista, la crisis Estado-Iglesia, el despoblamiento, y el empobrecimiento del aparato eclesial, quecarecía de los ingresos coloniales, se conjugaron para que el panorama deltemplo de Casigua hacia 1842 fuera, en lo esencial, de destrucción. Así loreportó el 30 de diciembre de 1842 el obispo Juan Hilario Bosset, en unextenso relato:

Luego hizo la visita de altares, sacristía, ornamentos, vasos sagrados yfábrica material del templo, y como notase que el bautisterio no estabacolocado en su lugar sino en la sacristía, por causa de la ruina que

53 AAM. Sección 29 Estadísticas y Padrones. Caja 23, doc. 419.


55 Idem.


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amenazaba la torre, que las dos capillas que forman los brazos de lacruz latina en que está figurado el templo se hallaban como desecha-das, y haciendo de pieza de depósito de varios trastos, que las sillasdel Presbiterio se encontraban absolutamente deterioradas, lo mismoque la de un confesionario, que la capa blanca única que sirva paralas funciones que reclaman este color estaba muy desaseada, y algu-nos ornamentos sin remendarse, y que necesitan composición; y final-mente, que toda la iglesia exige una pronta reparación; hace el Ve.Cura las ordenaciones y prevenciones siguientes, para que les de sumás puntual cumplimiento. Primera: que se excite la piedad de los fie-les para que ayuden a los fondos de fábrica a la reedificación delenunciado templo. Segunda: que se forme una pieza por separado fuerade la iglesia para guardar la tumba, candeleros, muebles del Monu-mento, andas y demás, prohibiéndose absolutamente haya en el pavi-mento de la iglesia otros objetos que los que sirven inmediata y actual-mente al culto. Que se arreglen los altares de las dos capillas enuncia-das. Tercera: que se pongan en el presbiterio otras sillas decentes yaseadas, y que se componga la del confesionario. (...) y habiendo ex-hortado por medio de un discurso a toda la concurrencia a que seprestasen a contribuir voluntariamente para la reparación del temploy la torre, que amenazan ruina, todos ofrecieron cooperar a tan santofin, en términos que resultaron ciento cincuenta pesos ofrecidos porlos presentes en calidad de por ahora, y se espera que los no concu-rrentes también lo verificarán a su vez y cuando sean excitados por laJunta particular que quedó establecida para percibir las recaudacio-nes y correr con los trabajos y fábrica de la dicha reparación. S. S. I.Ha prohibido expresamente que en las capillas colaterales y en el pa-vimento de la iglesia se coloquen otros trastos u objetos que inmedia-tamente no sirvan al culto; y para obviar este inconveniente, ademásde lo que ha prevenido personalmente, tuvo a bien encargar a dosseñoras del aseo y ornato de las sobrecitadas capillas56.

El culto se mantuvo por sobre todo, ya que para 1844 había cura propietarioen la parroquia de Casigua, que lo era Luis Vergerandi, manteniéndose allípara el año siguiente, siendo además cura interino San Félix, Quisiro, Seque

56 Idem.

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y Borojó; lo que era resultado de la escasez de sacerdotes en el país y elabandono a que estaban sometidas las zonas rurales. Ello retrata la crisisque vivía la iglesia católica venezolana. Vergerandi se mantuvo en Casiguacuando menos hasta 184657.

2. Barroco y Oro: Iglesia de Nuestra Señora del Rosario de Casigua(Falcón)

2.1 La arquitectura de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario deCasigua (Falcón)

La planta arquitectónica del templo de Casigua es en forma de cruz, con unasola nave, sacristía en la parte posterior del presbiterio y dos capillas latera-les que forman los brazos de la planta de cruz. Presenta en su fachadaprincipal, del lado izquierdo, una torre de tres cuerpos con campanario queocupa los cuerpos segundo y tercero. Puede ser considerada como un pe-queño templo barroco novohispano implantado en el semi-desierto coriano,ya que a su interior, altares e imágenes dorados y policromados hablan tantode los intensos contactos que tuvo el occidente de Venezuela con los puertosmexicanos, como de la expresión de los anónimos artistas locales que,influenciados por la Nueva España, diseñaron y ejecutaron los retablos.

Su fachada ha sufrido modificaciones. Un dibujo del año 1883 la presentacon un único acceso, enmarcado por medias columnas panzudas, al estilo dela Casa de las Ventanas de Hierro (Coro). En la actualidad tiene un segundoacceso que conduce a una capilla que sirve de bautisterio58. El portal fuemodificado, desapareciendo las medias columnas panzudas. Alrededor deltemplo se construyó -en fecha no determinada del siglo XX- una mediabarda con remates en herrería, sin relación estilística con su arquitectura.Lo menos intervenido es la torre campanario, que conserva sus formas ori-ginales.

57 AAM. Sección 29 Estadísticas y Padrones. Caja 23, docs. 420, 421 y 422.

58 Graziano Gasparini. Templos Coloniales de Venezuela, p. 149.


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De sus altares, hasta el momento la revisión en fuentes primarias ha permi-tido detectar dos: el más antiguo, presidido por Santa Rita, donde en sutestamento pidió ser enterrado de 9 de marzo de 1738 don José Gabriel deNava y Dávila59; el segundo es el de las Ánimas, que figura en el testamentode Joseph Francisco de Matos (1758)60. En cuanto a imágenes, la únicamención explícita ubicada hasta ahora en fuentes primarias se encuentra enel testamento de Felipa González (1760), quien dejó como legado una mulatitanombrada María Rosa, de 17 meses: … de la que hago gracia y donacióna la Santísima imagen de Nuestra Señora la virgen María del Rosariode esta Santa Iglesia de Casigua, la que es mi voluntad se mantenga enel servicio y cuidado de dicha iglesia, con la circunstancia que enningún tiempo, ni por ninguna persona, sea enajenada, ni dichamulatita ni sus descendientes, sino que permanezcan siempre en el ser-vicio de dicha Santa Iglesia61.

2.2 Imágenes del templo de Casigua: barroco y oro

Las imágenes del templo de Nuestra Señora del Rosario de Casigua son deprocedencia novohispana. Debido a sus caracteres estilísticos y aspectosformales, además del intenso comercio que durante el siglo XVIII se dioentre el occidente de lo que hoy es Venezuela y la Nueva España, es conclu-yente que estas imágenes provienen de México, aunque no se descarta tam-poco la procedencia guatemalteca, que en ese siglo también formaba partedel virreinato de la Nueva España.

La pequeña iglesia es expresión del esfuerzo de los blancos y pardosavecindados en la zona de Casigua por hacer ostensible su grandeza sociala través de una iconodulia que enuncia las advocaciones locales, siemprebajo la norma tridentina. Buscando manifestarse en el plano religioso, elavance económico de los blancos del occidente de la jurisdicción coriana sepatentó en la imagen de culto de importación, una imagen barroca de vesti-

59 AHEF-UNEFM. Sección Testamentarias. Caja 15. Testamentaria de don José Gabriel de Navay Dávila (1738), f. 1v.

60 AHEF-UNEFM, Sección Testamentarias. Caja 30. Testamentaria de Joseph Francisco deMatos (1758), f.1v.

61 AHEF-UNEFM, Sección Testamentarias. Caja 32. Testamentaria de Felipa González (1760),f. 1v. El énfasis es nuestro.

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dura majestuosa sumergida en el oro y la plata de sus pliegues y accesorios.No hubo un gran templo en Casigua, en términos de escala arquitectónica.Ciertamente, el agrupamiento de blancos y sus descendientes, aunque enbonanza económica, no daba para más. Pero sí dio para implantar en susuelo el mayor conjunto novohispano de imágenes cultuales que haya llega-do al siglo XXI en Venezuela, expresión del optimismo de una iglesia que,habiendo superado el trance de la contrarreforma, asumió en el siglo XVIIIel tono optimista y triunfal de una iglesia consolidada.

Son piezas indubitablemente barrocas en función de dos aspectos: la idea decuerpo que emanan y el predominio del oro. El cuerpo barroco, normado porel Concilio de Trento, quedó sujeto al ocultamiento. Centro del pecado, lasformas corpóreas no debían ser motivo de estímulo para una carne débil. Laindumentaria constreñía el cuerpo en la vida social, pero en la vida artísticase estableció un intenso diálogo que volcó sobre el atuendo -intensamenteondulante- el desplazamiento de que era objeto el cuerpo: Aquí, el vestidono era sólo una segunda piel sino que se convertía en sustituto de ella.(…) El cuerpo barroco albergaba una intensa vitalidad que se mani-festaba con vehemencia a través de una epidermis bordada62. En cuan-to al oro, que en los países de esfera no católica ya había adquirido un valoresencialmente económico, en la España barroca y sus colonias tuvo aún, demanera acendrada, un valor religioso que se expresó en el arte eclesial:Sevilla, capital del Atlántico, fue así el ojo de un ciclón artístico lite-ralmente espectacular, fuertemente inspirado en el arte escenográfico:la talla de los retablos de madera dorada y la imaginería de la escuelaandaluza63. En su extensión colonial, la Nueva España hizo del arte del oroescultórico algo propio, con un sello personal, donde se conjugaron los saberespre-hispánico e hispánico.

En cuanto a aspectos técnicos, sus colores se corresponden con los utiliza-dos durante el siglo XVIII en la producción artística novohispana: bermellón,azul, ocre, tonos de rojo, negro y blanco; excepcionalmente verde y car-mín64. Los diseños de los estofados son fitomórficos, en base a flores yhojas entrelazadas y -en menor medida- geométricos (san Nicolás de Bari).

62 Alfonso Alfaro. “Óyeme con los ojos. Elogio del cuerpo entrevisto”. En: Corpus Aureum.Escultura Religiosa, p. 8.

63 Ibídem, p. 35.

64 María del Consuelo Maquívar. El Imaginero Novohispano y su Obra, p. 99.


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La vestimenta a dos vistas (mantos, capas) presenta policromía y dorado enambas caras. Uso de cenefa en bordes de mantos y túnicas. Un estudio máspuntual se precisa para establecer una caracterización detallada de las imá-genes, que haga posible concluir en su procedencia. En este estudio se iden-tificarían las maderas y se haría la comparación de los diseños, las encarna-ciones, intensidad de los colores, uso del corlado, de pinceladas sobre elestofado, del encolado en pliegues de mantos y túnicas, de materiales com-plementarios (cabello, cristal, marfil), entre otros aspectos de la policromía,el estofado y materiales constitutivos de las obras.

2.2.1 Descripción formal básica de imágenes del templo de Casigua

2.2.1.1 Virgen del Carmen

Talla de madera dorada y estofada. Niño; vestiduras encoladas y estofadas.Peana en madera dorada con decoraciones en yeso. Imagen pedestre, bra-zos abiertos y en su brazo izquierdo carga al Niño. Viste hábito carmelitanodecorado con motivos fitomórficos en hojilla de oro. El hábito termina enmovimientos ondulantes que dejan ver ambos pies, que van calzados. Mantodecorado con motivos fitomórficos en hojilla de oro tanto en su anversocomo en su reverso. Los objetos exentos han desaparecido (corona,escapularios). La peana tiene tres caras talladas y la posterior sin tallar.Presenta cuatro niveles trabajados en cóncavos y convexos, y un quintonivel, en su parte superior, de forma ovalada, donde reposa la virgen. Estosniveles se angostan a medida que la peana avanza hacia su parte superior.En el nivel inferior se observan cuatro patas que soportan la peana.

Medidas de la imagen: alto: 62,5 cm. Ancho: 23 cm. Profundidad: 22 cm.

Medidas del Niño: alto: 18,5 cm. Ancho: 15,5 cm. Profundidad: 5 cm.

Medidas de la peana: alto: 20 cm. Ancho: 35 cm. Profundidad: 28 cm.

Diagnóstico organoléptico: la Virgen presenta pérdidas de soporte (de-dos) en ambas manos, fisuras en la parte posterior del manto y perforacio-nes. El Niño presenta faltantes de soporte (dedos) en ambas manos y en elpie izquierdo, pérdida de capa pictórica en la nariz.

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2.2.1.2 Virgen Inmaculada

Talla de madera dorada y estofada. Virgenpedestre, mirada baja y rostro ligeramenteinclinado hacia su derecha, cabello castaño ylargo hasta los hombros, brazos doblados alfrente y manos unidas en gesto de oración.Viste túnica y manto policromados y doradoscon motivos fitomórficos. El manto tiene fuer-tes movimientos ondulantes hacia su izquier-da, cubriendo parte del frente de la túnica, ysu reverso es en tonos de rojo y dorado. So-bresalen entre los bordes de la túnica las pun-tas de los zapatos. Descansa sobre una me-dia luna con las puntas hacia arriba a cuyospies está la serpiente con movimientoenvolventes y dos querubines. La peana esrectangular, con bordes tallados y esquinasrecortadas, envueltas en motivos vegetales.

Medidas de la imagen: alto: 41,5 cm. Ancho:65 cm. Profundidad: 21 cm.

Medidas de la peana: alto: 9,5 cm. Ancho: 31cm. Profundidad: 28 cm.

Diagnóstico organoléptico: la virgen presenta pérdidas de base de prepa-ración en la frente y del hojillado del manto. El querubín izquierdo presentapérdida de un ojo. La luna presenta desprendimiento de soporte en su ladoderecho, con repinte.

2.2.1.3 Nuestra Señora de Belén

Talla de madera dorada y estofada. Ojos de vidrio. Imagen pedestre, laVirgen detiene al Niño con ambos brazos, en forma de abrazo, dirigiéndolohacia sus mejillas. La Virgen lleva manto con fuertes movimientos ondulan-tes que cubre su cabeza y envuelve al Niño de la cintura hacia abajo. Latúnica llega hasta sus pies, dejando ver los zapatos. El movimiento de la

Foto: Arturo Benchimol


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imagen es ligeramente curvo hacia su derecha, con lapierna derecha ligeramente flexionada. Manto y túni-ca están decorados con motivos fitomórficos en dora-do. La peana es rectangular, con ligeros cortes y enlas esquinas adornos vegetales que se alargan haciaabajo para formar las patas.

Medidas de la imagen: alto: 73 cm. Ancho: 30 cm.Profundidad: 21 cm.

Medidas de la peana: alto: 11 cm. Ancho: 33 cm. Pro-fundidad: 24 cm.

Diagnóstico organoléptico: la Virgen presenta pér-dida generalizada de policromía y pérdida del hojilladodel manto. Pérdida de base de preparación en el man-to, con presencia de lagunas. Desprendimiento del ojoizquierdo y del Niño.

2.2.1.4 Santa Rita

Talla de madera dorada y estofada. Imagen de SantaRita de Casia, pedestre, aureola dorada, rostro deaflicción y estigma en la frente. Sus brazos dobladosal frente, en su mano izquierda un crucifijo, en la de-recha una calavera. Viste hábito con mantopolicromado y dorado con motivos fitomórficos, y veloblanco que cubre su cabeza y cuello. Pierna derechalevemente inclinada. Sobresalen de los bordes delhábito las puntas de los zapatos. Peana a dos niveles,rectangular con las puntas recortadas.

Medidas de la imagen: alto: 88 cm. Ancho: 41 cm.Profundidad: 22 cm.

Medidas de la peana: alto: 10 cm. Ancho: 37 cm.Profundidad: 26 cm.

Diagnóstico organoléptico: la imagen presenta pérdida de soporte en am-bas manos (dedos), así como del ojo izquierdo. Una fisura abarca todo elrostro. Hay desprendimiento de base de preparación en la mano derecha.

Foto: A. Benchimol

Foto: A. Benchimol

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2.2.1.5 San Nicolás de Bari

Talla de madera dorada y estofada. Ima-gen de San Nicolás de Bari ubicado al cen-tro, a su izquierda un mayordomo y a laderecha tres niños en un cubo de made-ra. San Nicolás pedestre, barbado, su bra-zo izquierdo doblado deteniendo un libro,su brazo derecho doblado hacia arriba ymano en actitud de bendición. Viste hábi-to obispal con decoraciones geométricasen dorado. La túnica llega al suelo, sa-liendo de ella las puntas de los zapatos.Reposa sobre una base ovalada que a suvez descansa sobre la peana. A su izquier-da un mayordomo, pedestre, vestido a lausanza francesa del siglo XVIII, con ca-saca hasta la rodilla, de mangas largas yamplias en sus bordes. Brazos ligeramen-te doblados, pierna derecha ligeramente doblada, en actitud de caminar.Descansa sobre una pequeña base ovalada. A su derecha tres niños desnu-dos, sus brazos en diversos movimientos, parados al interior de un cubo demadera que se encuentra parcialmente fuera del borde de la peana. Peanaen forma ovalada con decoración de motivos vegetales en las esquinas, quese prolonga hacia abajo para formas las patas de la peana.

Medidas de la imagen: alto: 73 cm. Ancho: 34 cm. Profundidad: 22,5 cm.

Medidas del mayordomo: alto: 29,7 cm. Ancho: 12 cm. Profundidad: 7,5 cm.

Diagnóstico organoléptico: la imagen de San Nicolás presenta desprendi-mientos de base de preparación en ambos pies, y una fisura que atraviesa laespalda. El mayordomo presenta pérdida de ambos antebrazos, fisura en elpie izquierdo y desprendimiento de base de preparación en el pie derecho.Los niños: el primero de derecha a izquierda presenta pérdida de soporte enambas manos (dedos). El del centro presenta pérdida de soporte en la manoderecha (dedos). El niño a la izquierda presenta pérdida de soporte en lamano derecha (dedos).

Foto: A. Benchimol


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2.2.1.6 San Cayetano

Talla de madera, de vestir, con alas exentas que se colocan con un mecanis-mo a modo de bisagras. Imagen de San Cayetano, pedestre, brazos dobla-dos hacia el frente, en su mano izquierda una calavera. Viste casaca y pan-talón corto en tono de rojo, medias blancas a las rodillas y zapatos negroscon hebillas. Presenta una expresión y postura rígidas. La imagen no secorresponde con la iconografía de San Cayetano, quien carece de alas, fueun sacerdote y en su iconografía viste como tal, con faja o cordón negro enla cintura. Atributos: bordón de doble cruz, libro, niño Jesús en brazos, azu-cena, a veces ángeles o un corazón alado, símbolo de sus éxtasis65. Sinembargo, en la memoria popular esta imagen está identificada como SanCayetano.

Medidas de la imagen: alto: 84 cm. Ancho: 31 cm. Profundidad: 23 cm.


Diagnóstico organoléptico: presenta pérdidas de capa pictórica y base depreparación en distintas partes. Lesiones en el punto de inserción de lasalas.

2.2.1.7 San Antonio

Talla de madera dorada y estofada. Imagen pedestre de San Antonio, tonsu-rado, rostro inexpresivo, lleva al Niño en su brazo izquierdo, sentado a suvez sobre un libro. Viste hábito con manto y capucha que llega al piso y dejaver sus pies calzados con sandalias, cíngulo a la cintura. Pierna derechalevemente flexionada.

Medidas de la imagen: alto: 84 cm. Ancho: 36 cm. Profundidad: 23 cm.


Diagnóstico organoléptico: la imagen presenta desprendimiento de sopor-te en ambas manos y el pie izquierdo. Pérdida de hojillado en el manto. Elquerubín izquierdo presenta pérdida de un ojo. Hay repintes en manos ypies.

2.2.1.8 San Francisco de Asís

Talla de madera dorada y estofada. Imagen pedestre de san Francisco, ton-

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surado y barbado. Mira un crucifijo que lle-va entre sus manos. Brazos doblados dete-niendo el crucifijo. Viste hábito franciscanodecorado con motivos fito-mórficos en hoji-lla de oro, manto con capucha colocada so-bre la cabeza. Los bordes del hábito lleganhasta el tobillo, dejando ver por completo lospies descalzos. Cíngulo a la cintura. Des-cansa sobre una peana policromada y dora-da, muy decorada en sus bordes y con sietesalientes a su alrededor a modo de asas, condecoración en base a curvas encontradas.

Medidas de la imagen: alto: 82,5 cm. Ancho:31 cm. Profundidad: 26,5 cm.

Medidas de la peana: alto: 22 cm. Ancho: 32cm. Profundidad: 18 cm.

Diagnóstico organoléptico: la imagen pre-senta desprendimientos de soporte en lamano derecha (dedos) y repinte total en ros-tro, manos y pies.

Fuentes documentales y bibliohemerográficas

Documentales

Archivo Arquidiocesano de Mérida-AAM- (Mérida-Venezuela)

Sección 29 Estadísticas y Padrones. Caja 23.

Sección 62 Visitas Pastorales. Caja 9, Caja 12 y Caja 14.

Archivo General de la Nación -AGN-

Sección Diversos. Tomo XLV (1774).

Sección Gobernación y Capitanía General. Tomo XXX (1784). Tomo

Foto: A. Benchimol


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LXII (1797).

Sección Negocios Eclesiásticos. Tomo XX (1786-1787).

Tomo sin identificar. Materia: Tenientazgos.

Archivo Histórico del Estado Falcón-Universidad Nacional ExperimentalFrancisco de Miranda (AHEF-UNEFM).

Sección Instrumentos Públicos. Tomo II (1708-1710), Tomo XXIX (1759-1761), Tomo XXXV (1768-1770), Tomo XXXVI (1770-1772), Tomo XLII(1786-1788), Tomo XLIII (1789-1791), Tomo XLIV (1792).

Sección Testamentarias. Caja 3, Caja 4, Caja 12, Caja 13, Caja 15, Caja 30,Caja 32.

Bibliohemerográficas

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Mons. Baltazar Porras. Homilía en los 50 años del Instituto de... pp. 166-170

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HOMILÍA EN LOS 50 AÑOS DEL INSTITUTO DE GEOGRAFÍA DE LAUNIVERSIDAD DE LOS ANDES*

Mons. Baltazar Enrique Porras Cardozo**

Resumen

* Nota de los editores. Artículo recibido en marzo de 2009 y aceptado para su publicación enabril del mismo año.

** Arzobispo Metropolitano de Mérida. Correo electrónico: [email protected]

Palabras clave: Geografía, aniversario, Universidad de Los Andes.

Cincuenta años en la vida de una institución, son pocos. Numerosas esferasdel conocimiento estaban ausentes de nuestras universidades todavía a me-diados del siglo pasado. Le geografía era una de ellas. Si algún libro sepresta para la oración desde la geografía, es la Biblia. La descripción de loslugares en los que sucedieron los acontecimientos del Antiguo y el NuevoTestamento, tienen a Palestina como centro.

El ser humano sin espacio y sin tiempo se desubica, se vuelve autista, pierdeel rumbo y vive a la deriva. Necesitamos preservar y construir espaciospara el disfrute de la vida, para consolidar la amistad, para la distensión queensancha el corazón. Renovar la calidad de vida es tarea ineludible para quela violencia no nos coma y el odio no corroa lo mejor que tenemos los huma-nos, la capacidad de esperanza que sólo la logra el amor y los afectos.

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Nos congrega en esta mañana cuaresmal el cincuentenario de la creacióndel Instituto de Geografía de la Universidad de los Andes. Nada mejor quecomenzar esta jornada con una oración de acción de gracias al Altísimo porexistir. El antiguo pueblo judío dejó plasmado en los libros del Antiguo Testa-mento el precepto siguiente: después de cada siete semanas de años, -sietepor siete, cuarenta y nueve-, se debe celebrar un jubileo. La razón primera,agradecer el camino recorrido. En segundo lugar, evaluar y redimir. Es de-cir, corregir errores, sanar heridas para tomar nuevo aliento en la continua-ción del camino de la vida.

Cincuenta años en la vida de una institución, son pocos. Las institucionesestán llamadas a la continuidad y consolidación de los objetivos que le dieronrazón de ser. Numerosas esferas del conocimiento estaban ausentes de nues-tras universidades todavía a mediados del siglo pasado. Le geografía erauna de ellas. Por eso, nuestra mirada se dirige en estos momentos a aquelloshombres que concretaron el nacimiento del Instituto de Geografía. Al Rec-tor perenne, Pedro Rincón Gutiérrez, abierto a todo lo nuevo y útil. A suspinceladas de maestro de primera, se debe el rostro actual de nuestra AlmaMater merideña. Una oración por su eterno descanso.

HOMILY TO COMMEMORATE THE 50TH ANNIVERSARY OF THEINSTITUTE OF GEOGRAPHY AT THE UNIVERSIDAD DE LOS ANDES

Abstract

50 years in the life of an institution are very few. Numerous areas ofknowledge were absent from our universities in mid nineteen century.Geography was one of them. If there is a book that lends itself to prayerfrom geography, is the Bible. The description of the places where events inthe Old and New Testaments took place, has the Palestine as their center.Humans without space and time become autistic, lose their path and driftaimlessly. We need to preserve and build spaces for the enjoyment of life, tostrengthen friendship, to widen the heart. To renew the quality of life is anunavoidable task so that violence does not destroy us and hate does notcorrode the best characteristic that humans have, the capacity for hope thatis only achieved through love and affection.

Key words: Geography, anniversary, Universidad de Los Andes.


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Qué bueno que está entre nosotros, uno de los pioneros, el Dr. Antonio LuisCárdenas. Promotor y fautor de los inicios del Instituto; sus conocimientos yaportes a la geografía y a la educación en todas sus ramas, se pierden devista. Su presencia es un acicate para la entrega permanente en la búsquedade nuevos y mejores derroteros para el bien de la juventud venezolana. A éldedicamos el salmo de este día: al que sigue buen camino, le haré ver lasalvación de Dios.

En el marco de esta celebración, permítanme esta disgresión. Si algún librose presta para la oración desde la geografía, es la Biblia. La descripción delos lugares en los que sucedieron los acontecimientos del Antiguo y el Nue-vo Testamento, tienen a Palestina como centro. Si se exceptúan los librossapienciales, no existe ningún libro de la Biblia que no mencione con mayoro menor extensión, la geografía y topografía de los santos lugares. Los deta-lles geográficos se hacen más abundantes después de los destierros que escuando se plasman la mayor parte de los escritos bíblicos.

La lista etnográfica que se da en capítulo X del Génesis es la contribuciónmás importante a la antigua geografía del medio oriente. El tránsito del pue-blo elegido de Egipto hasta las orillas del Jordán, narra con lujo de detalles elentorno de la Península sinaítica y las inmediaciones del Mar Muerto. Losevangelios describen muchos lugares de Judea, Galilea y de la configuraciónde la ciudad santa por excelencia, Jerusalén. Y el Libro de los Hechos de losApóstoles nos abre al conocimiento del Mediterráneo oriental.

Pero donde el entorno se hace plegaria y poesía es en los salmos. La fatigo-sa subida a Jerusalén del peregrino sediento, la majestuosidad de las puertasde la ciudad y la contemplación radiante del templo, centro de todos losafanes, hace exclamar al salmista: Del Señor es la tierra y cuanto lallena, el mundo y todos sus habitantes, porque él la fundó sobre losmares, él la asentó sobre los ríos. ¿Quién puede subir al monte delSeñor? ¿Quién puede estar en el recinto sacro? El de manos inocentesy corazón puro, que no suspira por los ídolos ni jura en falso (Salmo24, 1-4).

El ser humano sin espacio y sin tiempo se desubica, se vuelve autista, pierdeel rumbo y vive a la deriva. Más aún, el hombre postmoderno, en una socie-dad de cambios acelerados y vertiginosos, de avances prodigiosos gracias ala ciencia y las tecnologías, genera una nueva, distinta percepción del espa-

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cio. No existen antípodas porque todo es cercano, a la mano. Pero tiene latentación de destruir el habitat, pensando que tiene recursos para superarcualquier deficiencia. El globo terráqueo resulta insuficiente para las ansiasde conocimiento y dominio; cada día son menos los secretos que tiene elmundo sideral. Todo ello constituye un reto para las ciencias y también parala geografía.

Se me antoja que no se debe cultivar la disciplina geográfica exclusivamentecomo una ciencia humana, hay que asumirla como un camino de espirituali-dad. Necesitamos preservar y construir espacios para el disfrute de la vida,para consolidar la amistad, para la distensión que ensancha el corazón, paraque las futuras generaciones tengan vergeles y no eriales. Era, quizá, laintuición de los pioneros cuando hablaban del ambiente y los recursos reno-vables. Renovar la calidad de vida es tarea ineludible para que la violenciano nos coma y el odio no corroa lo mejor que tenemos los humanos, lacapacidad de esperanza que sólo la logra el amor y los afectos.

A eso nos invita esta celebración jubilar y esta Eucaristía en particular. Unaoración por los que nos dejaron. Son piedras angulares en la construccióndel edificio del Instituto de Geografía. Musitemos en el murmullo del cora-zón un canto de alabanza y esperanza para que quienes están actualmenteal frente del Instituto, a todo el personal que allí labora, a los estudiantes quecursan diversos niveles, sean personas con una visión integral del bien, de labelleza del pluriforme entorno en el que vivimos para que seamos construc-tores de una sociedad de paz y concordia. Que María Santísima Inmaculada,Patrona de Mérida, nos guíe a todos en estos propósitos. Amén.


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Fachada del Instituto de geografía de la Universidad de los Andes. Tomada del Catálogo deExposición 50 Años de historia del Instituto de Geografía y Conservación de los recursosnaturales. Marzo, 2009.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Rebeca Pérez y Ana Hilda Duque. Curaduría-Museografía de... pp. 173-194

EXPOSICIONES


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CURADURIA-MUSEOGRAFIA DE LA EXPOSICIÓNINSTITUTO DE GEOGRAFÍA Y CONSERVACIÓN DE LOS

RECURSOS NATURALES. 50 AÑOS DE HISTORIA10 de marzo al 30 de junio de 2009

Rebeca Pérez Arriaga*Ana Hilda Duque**

Proyecto Instituto de Geografía y Conservación de los Recursos Na-turales. 50 años de historia

La exposición Instituto de Geografía y Conservación de los RecursosNaturales. 50 años de historia se presentó en los espacios del MuseoArquidiocesano de Mérida con motivo de celebrase los 50 años de la funda-ción de la primera Institución Universitaria dedicada a la investigaciónGeográfica de Venezuela. Momento especial cuando se conmemoraron, tam-bién, los 150 años de la muerte tanto del padre de la geografía modernaAlejandro Von Humboldt como de Agustín Codazzi.

A través de esta muestra expositiva se expresó parte de la historia de laInstitución, lo cual permitió al espectador hacerse una idea de una Geografíaque ha ido caminando al ritmo de los tiempos, de las corrientes del pensa-miento de la ciencia geográfica y del acontecer de las sociedades. Ello que-dó expresado en un recorrido museográfico estructurado en tres aspectostemáticos: objetos-instrumentos y cartografía, registro histórico de la Revis-ta Geográfica Venezolana, registro fotográfico acerca de la historia dla elInstituto de Geografía y el personal que le da vida, y patrimonio culturalinstitucional. Todos ellos conectados con la labor de la investigación geográ-fica que se ha venido efectuado en el Instituto de Geografía a través delequipo humano que habita y recorre cada día sus espacios para hacer insti-tución universitaria y quienes laboran en los departamentos de cartografía ySistema de Información Geogràfica, sala de dibujo, mapoteca, biblioteca,laboratorio de suelos, laboratorio de geología y geomorfología, postgrado,oficina de Publicaciones a través de su órgano de difusión la Revista Geo-gráfica Venezolana.

* Profesora de la Escuela de Geografía de la Universidad de Los Andes e Investigadora del AAM.

** Directora del Archivo y Museo Arquidiocesano de Mérida, Profesora Titular Jubilada de laUniversidad de Los Andes. Correo electrónico: [email protected]


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Guión Museológico

La exposición tiene como eje temático la historia y los cambios de la escuelade pensamiento geográfico merideño, expresados en 50 años de investiga-ción geográfica en el Instituto de Geografía y Conservación de los RecursosNaturales de la Universidad de Los Andes.

El guión de la exposición se estructuró a partir de:

1. Los objetos-instrumentos y cartografía utilizada en la investigacióngeográfica como herramienta instrumental para la investigación y enseñan-za permiten contrastar las antiguas y las modernas tecnologías como una delas muestras de los avances de la geografía en el tiempo, ante los cuales elInstituto de Geografía ha sabido tomar el pulso y entrar en el camino de lamodernidad de las ciencias. Se presentan en la muestra algunas de las he-rramientas para la realización de trabajo campo y la elaboración de lacartografía; equipos para procesamiento de información y cartografía utili-zados para la investigación geográfica.

A través de la selección de los objetos geográficos usados como herramien-ta instrumental para la investigación y enseñanza geográfica se pueden apre-ciar los avances de la geografía.

2. Registro histórico de la Revista Geográfica Venezolana como expre-sión de la conformación y crecimiento de la escuela de pensamiento geográ-fico venezolano y de las transiciones de enfoques geográficos en la investi-gación, propias de toda epistemología de las ciencias. Los cambios en laestética y estructura de esta publicación periódica también son indicadoresde las respuestas a los tiempos modernos, ciencia y arte siempre han habita-do en el quehacer y pensar humano. Es parte del registro del principal órga-no de divulgación del quehacer geográfico en el país.

3. Registro fotográfico de la instalación sede del Instituto de Geografía y elpersonal que labora en él; también se muestran los rasgos característicos dela estructura arquitectónica imbricada en un bosque así como la incorpora-ción de obras de arte dentro y en los alrededores del Instituto. El registrofotográfico acerca de la historia del Instituto de Geografía y el personalque labora y le da vida. En primer lugar reúne el Instituto de Geografía laparticularidad de poseer una estructura arquitectónica imbricada en un en-torno natural excepcional que ha logrado mantenerse y enriquecerse como

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patrimonio cultural de la Universidad de Los Andes, y la presencia de una delas Bibliotecas de Geografía más importantes de América Latina. Por otraparte, y no menos importante ha sido el lograr mantener el recuerdo vivo desus fundadores y primeros maestros, y de los profesores, obreros y emplea-dos que durante estos 50 años han seguido sus pasos con una mirada abiertaa los cambios de las ciencias y las culturas.

Mediante estos tres aspectos se logra establecer la lectura representativaacerca de la historia del Instituto de Geografía en 50 años, lo cual muestra elrecorrido desde corrientes de pensamiento geográfico propias de mitad delsiglo XX, con fuertes influencias iniciales de la Escuela Regional francesa,hacia nuevos tiempos y paradigmas en la investigación de las ciencias geo-gráficas.

Fichas técnicas

Serie Objetos. Laboratorio de Geomorfología

Instrumento: Balanza, manual con aguja o péndulo con pesa.

Descripción: fue la primera balanza en este laboratorio; desde sus inicios sepuso en funcionamiento. Aunque actualmente contamos con las electróni-cas y digitales para la realización de los respectivos análisis aún se hace usode ella.

Colección: Laboratorio de Geomorfología, Instituto de Geografía. Universi-dad de Los Andes.

Instrumento: Frasco con muestra de arena.

Descripción: Muestra de arena procedente de los Médanos de Coro. Mues-tras recolectadas por los estudiantes de la Escuela de Geografía durante lasprácticas de campo de la cátedra de Geología.


Instrumento: Cortes Geológicos.

Descripción: Representación de estructuras geológicas en el subsuelo y delos diferentes tipos de relieve, realizados en moldes en yeso.



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Instrumento: Roca sedimentaria: Lutita.

Descripción: Lutita con abundantes improntas de bivalvos, mineralizada conlimonita (óxido de hierro hidratado). Roca sedimentaria con textura clásticade granos finísimos (<1/256 mm) con laminación apenas visible. Fisil. Colorpardo rojizo debido al contenido de óxidos de hierro. Con huellas fósiles(Improntas). Típicas de depósitos lagunares lacustres-marinos. FormaciónColón? Localidad: Entre las González y Lagunillas. Edo. Mérida.


Instrumento: Utensilios para realizar análisis.

Descripción: 1 embudo de vidrio, un removedor de vidrio; 2 cubetas de alu-minio; 1 matraz de vidrio 500 ml. y 1 mortero de porcelana con su triturador.


Instrumento: Papelería utilizada para resultados de análisis.

Descripción: Planillas y papelería utilizada para transcripción de datos, re-sultados, de análisis y recepción de muestras al laboratorio. Cuaderno deregistro y procesamiento de muestras.


Instrumento: Estereoscopio.

Descripción: Estereoscopio de espejos, color gris, con ganchillos adaptadoresy botones de graduación. Marca SOKKIA.


Instrumento: Máquina sumadora manual.

Descripción: máquina sumadora manual de color gris claro, marca FACIT.Se encuentra fuera de uso, obviamente por contar en la actualidad con tec-nologías de punta; pero con un mantenimiento adecuado puede funcionar.


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Instrumento: Roca sedimentaria: Caliza con ostreas.

Descripción: roca sedimentaria organógena, formada por la acumulaciónde restos fósiles de organismos marinos. Textura variable que depende dela abundancia y distribución de fósiles. Color variable. Formación: La Puya.


Instrumento: Tamices Nº 19-20- 21,27-28.

Descripción: Tamices de metal de cobre utilizados para realizar análisisgranulométricos de suelo.


Serie Objetos. Sala Técnica de Dibujo

Instrumento: Rotulador (Araña).

Descripción: instrumento de acero y plástico, elaborada por la casa fabri-cante Leroy k & e. Se utiliza para la elaboración de letra en tinta.

Colección: Instituto de Geografía – Universidad de Los Andes. Sala de Car-tografía.

Instrumentos: Tiralíneas, compás, compás bomba, medidor de distancias yescalas.

Descripción: instrumentos de acero, elaborados por la Casa Fabricante Hope.Se utilizan para la elaboración de dibujos, gráficos, mapas, entre otros.


Instrumento: Limpiador de superficies de láminas Descripción: elaboradopor la casa fabricante Leroy k&e. Utilizado para la limpieza de la superficiede una lámina donde se elaborara un dibujo.


Instrumento: Compás Thornton.

Descripción: instrumento de acero, elaborado por la Casa Fabricante Leroy


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k&e. Se utiliza para la elaboración de circunferencias en tinta o a lápiz.


Instrumento: Plantillas para rotular.

Descripción: instrumento de plástico, elaborada por la Casa Fabricante Leroyk&e. Se utiliza para la elaboración de letras, símbolos y números en tinta yen diferentes tamaños.


Instrumento: Plumillas.

Descripción: instrumento de madera y acero, elaborada por la Casa Fabri-cante Staedtler y Hunt pen. Se usa para la elaboración de dibujos en tinta.


Instrumento: Graphos.

Descripción: instrumento de acero y plástico, elaborado por la Casa Fabri-cante Pelikan. Utilizado para la elaboración de dibujos en tinta con líneas devarios grosores.


Instrumento: Plantillas para dibujo.

Descripción: instrumento de plástico, elaborado por distintas Casas Fabri-cantes. Se utiliza para la elaboración de símbolos para la toponimia en carto-grafía.


Instrumento: Trazador flexible para líneas curvas.

Descripción: instrumento de plástico, elaborada por la Casa Fabricante Leroyk&e.


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Instrumento: Juego de plumillas.

Descripción: instrumento de acero y plástico, elaborado por la Casa Fabri-cante Staedtler. Se usa para la elaboración de dibujos en tinta en diferentesgrosores.


Instrumento: Frascos de tinta.

Descripción: elaborado por la Casa Fabricante Faber Castell.


Instrumento: Distanciómetro Rangenmatio MK5.

Descripción: hecho en USA por Ranging Rochester N.Y.

Colección: Escuela de Geografía – Universidad de Los Andes. Sala de Di-bujo.

Instrumento: Stereoscope Model CB-1 2 and 4 power.

Descripción: elaborado por Abrams Instrument Corp.


Instrumento: Curvímetro.


Serie Objetos. Cartografía-Mapoteca

Material: Relación entre los depósitos de origen cuaternario y el uso de latierra en la Cuenca Alta y Media del río Motatán.

Año: 1992

Escala: 1:100.000

Descripción: mapa base, elaborado en el Laboratorio ULABSIG del Institu-to de Geografía por María Magdalena Parra y Yolibey Sánchez.



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Material: Relación entre los depósitos de origen cuaternario y el uso de latierra en la Cuenca Alta y Media del río Motatán.

Año: 1992

Escala: 1:100.000

Descripción: mapa geológico, elaborado en el Laboratorio ULABSIG delInstituto de Geografía por María Magdalena Parra y Yolibey Sánchez.


Material: Cuenca alta y media del río Motatán.

Año: 2002

Escala: 1:100.000

Descripción: elaborado en el Laboratorio de SIG por María Magdalena Pa-rra.


Material: Mapa geomorfológico de Mérida de J. Tricart.

Año: 1966

Escala: 1:25.000


Material: Mapa Topográfico de Timotes.

Año: 1889

Escala: 1:10.000


Material: Mapa Zonificación Turístico Recreacional.

Año: 1985

Escala: 1:100.000

Descripción: elaborado por los Alumnos de la cátedra Seminario de Estu-dios Regionales de la Escuela de Geografía.


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Material: Fotografías aéreas de la cuenca del Motatán.


Material: Fotografías aéreas a color. Estado falcón.


Instrumento: Mesa de Dibujo.

Colección: Instituto de Geografía- Universidad de Los Andes. Sala de Car-tografía.

Instrumento: Globo terráqueo.

Colección: Instituto de Geografía- Universidad de Los Andes. Sala de Car-tografía.

Material: 6 mapas regionales del mundo.

Colección: Sala de Cartografía Escuela de Geografía. Universidad de LosAndes.

Serie Objetos. Hidroclimatología

Instrumento: Boletín Climatológico Nro. 2 del año 1974.

Descripción: publicado por el Instituto de Geografía y Conservación de losRecursos. El Boletín datos hidrometeorológicos obtenido por las siete esta-ciones del Instituto de Geografía y Conservación de los Recursos y unaestación perteneciente al Instituto de Investigaciones Agropecuarias de laUniversidad de Los Andes.


Instrumento: Boletín Mensual Climatológico e Hidrológico.

Descripción: primer número publicado por la Comisión de Estudios para laElectrificación del Caroní. Contiene información climatológica e hidrológica,tiene una frecuencia mensual.



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Instrumento: Termohidrógrafo.

Descripción: instrumento utilizado para medir la humedad relativa y la tem-peratura del aire, cuyas variaciones se registran en una banda semanal.


Instrumento: Heliofanógrafo. Campbell-Stoke.

Descripción: instrumento destinado a medir la cantidad de horas del sol dia-rios (insolación) que hay en un lugar determinado. Se puede conocer eltiempo total (en horas y décimas) durante el cual hubo sol brillante en cadadía.


Instrumento: Microbarógrafo.

Descripción: instrumento utilizado para medir la presión atmosférica en unlugar de la superficie terrestre. Las variaciones de presión se registran enuna banda semanal.

Colección: Instituto de Geografía – Universidad de Los Andes. Sala deCartografía.

Serie Objetos. Biblioteca Luis Fernando Chaves

Objeto: Mueble exhibidor.

Descripción: Vitrima de madera, con vidrio, utilizada para exhibir materialbibliográfico.

Colección: Biblioteca de Geografía - Instituto de Geografía - Universidad deLos Andes.

Objeto: Libro Atlas Físico y Político de la República de Venezuela

Autor: Agustín Codazzi.

Año:

Descripción: Atlas Empastado en Cartón

Colección: Biblioteca de Geografía- Instituto de Geografía -Universidad deLos Andes.

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Objeto: Libro Cartografía Antigua de Guayana.

Editado: Electrónica Del Caroní, C.A. (Edelca).

Año: 2000

Descripción: Atlas Empastado en Cartón.


Titulo: Libro The Nathional Geographic Magazine. Vol. XLIX

Editor: Gilber Grosvenor.

Año: 1926.

Descripción: Revista Empastada en Cartón.

Colección: Biblioteca de Geografía- Instituto de Geografía - Universidad deLos Andes.

Objeto: Libro Geographie Universelle: La Terre et les Hommes.

Autor: Reclus, Elisée.

Año:

Descripción: Libro Empastado en Cartón


Objeto: Libro Curso Completo de Geografía Universal.

Autor: Bustamante F., Corona.

Año:

Descripción: Libro Empastado en Cartón.


Objeto: Libro Introductio In Universam Geographiam

Autor: Cluver, Philippi.

Año:

Descripción: Libro Empastado en Cartón.



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Serie Objetos. Instituto de Geografía

Objeto: Brújula.

Descripción: instrumento de metal con cubierta de vidrio. Se utilizaba porlos profesores y estudiantes en las salidas y prácticas de campo e investiga-ciones.

Colección: Dirección del Instituto de Geografía – Universidad de Los An-des.

Serie Objetos. Laboratorio de Suelos

Objeto: serie de fotografías del Laboratorio.

Colección: Laboratorio de Suelos del Instituto de Geografía y Conservaciónde los Recursos Naturales.

Objeto: Atomic absorption spectrophotometer perkin-elmer 303.

Año/fecha: diciembre 1968

Descripción: aparato de absorción atómica marca perkin-elmer 303 para laslecturas de las bases cambiables como: calcio, magnesio, sodio y potasio.


Objeto: Atomic absorption spectrophotometer perkin-elmer 603.

Año/fecha: diciembre 1976

Descripción: el espectrofotómetro de absorción atómica (aa) es un perkinelmer, modelo 603. Es un aparato que sirve para determinar el análisiscuantitativo que permite determinar el contenido de cationes cambiablespresente en una muestra de suelo.


Objeto: Estufa heraeus.

Descripción: es utilizado para secar las distintas muestras de suelos y mues-tras foliares.


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Objeto: Agitador de rueda.

Descripción: es utilizado para agitar las distintas muestras del laboratorio y asu vez para separar las partículas de arcillas.


Objeto: Perfil del Suelo.

Descripción: caracterización de un Perfil de Suelo.


Objeto: Pipeta De Robinson Gallenkamp Electrical Specialites.

Descripción: aparato utilizado para la determinacion de arcillas.


Serie Objetos. Oficina de Publicaciones

Instrumento: Engrapadora Skpeblock 17.

Colección: Publicaciones del Instituto de Geografía- Universidad de LosAndes.

Instrumento: Máquina de escribir marca Olivetti.


Instrumento: Mesa Auxiliar.


Instrumento: Cuaderno Nº 58. Crisis de la Geografía y Geografía de la Cri-sis.


Instrumento: Hojas multigrafiadas originales del Cuaderno Nº 58. Crisis dela Geografía y Geografía de la Crisis.


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Colección: Publicaciones del Instituto de Geografía- Universidad de LosAndes

Serie Objetos. Revista Geográfica Venezolana

Ejemplares del período 1959 a 1972

Volumen 1, Nº 1, año 1959

Volumen VIII, Nº 19, año 1967

Volumen XI, nº 24-25, año 1970

Volumen XIII, Nº 28-29, año 1972.

Ejemplares del período 1985 a 1972

Volumen XXVI, Nº 1, año 1985

Volumen VIII, Nº 19, año 1967

Volumen XI, nº 24-25, año 1970

Volumen XIII, Nº 28-29, año 1972.

Repertorio fotográfico

Constó de:

(a) 45 fotografías digitalizadas a alta resolución tomadas de los archivosfotográficos del Instituto de Geografía y de los archivos personales de losProfesores Carlos Amaya y Cleicer Calderón.

(b) 59 fotografías tomadas por el fotógrado Amilciar Gualdrón: 21 fotogra-fías de las instalaciones y alrededores del Instituto de Geografía; 26 fotó-grafas de objetos y 12 fotografías del personal que labora en el Laboratoriode Suelos y Mapoteca del Instituto de Geografía.

Del archivo fotográfico digitalizado y las fotografías tomadas en el 2009 seseleccionaron 22 fotografías: seis (6) fotos de los fundadores del Instituto deGeografía, tres (3) fotos de aniversarios y congresos; seis (6) fotos de laedificación, y siete (7) fotos de salidas de campos, profesores y alumnos.

Del archivo fotográfico de Amilciar Gualdrón, se seleccionaron fotografíaspara el diseño del catálogo.

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Textos del catálogo

Presentación

Rebeca Pérez Arriaga

Curadora

La exposición Instituto de Geografía y Conservación de los RecursosNaturales: 50 años de historia se presenta en los espacios del MuseoArquidiocesano de Mérida, con motivo de celebrase los 50 años de la funda-ción de la primera institución universitaria dedicada a la investigación geo-gráfica de Venezuela. Momento especial cuando se conmemoran, también,los 150 años de la muerte tanto del padre de la geografía moderna AlejandroVon Humboldt como de Agustín Codazzi.

A través de esta muestra expositiva se expresa parte de la historia de laInstitución, lo cual permite al espectador hacerse una idea de una Geografíaque ha ido caminando al ritmo de los tiempos, de las corrientes del pensa-miento de la ciencia geográfica y del acontecer de las sociedades.

Queda expresado en un recorrido museográfico estructurado en tres as-pectos temáticos: objetos-instrumentos y cartografía, registro histórico dela Revista Geográfica Venezolana, registro fotográfico acerca de la histo-ria del Instituto de Geografía y el personal que le da vida, y patrimonio cultu-ral institucional. Todos conectados con la labor de la investigación geográfi-ca que se ha venido efectuado en el Instituto de Geografía a través delequipo humano que habita y recorre cada día sus espacios para hacer insti-tución universitaria y quienes laboran en los departamentos de cartografía ySistema de Información Geográfica, sala de dibujo, mapoteca, biblioteca,laboratorio de suelos, laboratorio de geología y geomorfología, postgrado,oficina de Publicaciones a través de su órgano de difusión la Revista Geo-gráfica Venezolana.

Durante 50 años un grupo de investigadores, obreros, técnicos y empleadoshan transitado bajo el faro luminoso de la primera idea visionaria de un hom-bre que ha sabido estar más allá de su tiempo, el Profesor Antonio LuisCárdenas, que junto al apoyo de otro hombre de luces, el Rector PedroRincón Gutiérrez, dio lugar a la institución geográfica de hoy.


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Antonio Luis Cárdenas Colmenter. Maestro y geógrafo

Luisa Elena Molina R.

Instituto de Geografía y Conservación de Recursos Naturales

Muchos son los hombres y mujeres que en el mundo de hoy pueden incluirseentre los ilustres por sus contribuciones a la ciencia, la cultura, las artes o ala búsqueda de respuestas a las muchas preguntas a las que se enfrentan lassociedades y los individuos. Aunque el Profesor Antonio Luís CárdenasColménter cuenta con méritos eminentes para hallarse entre ellos, escojomás bien la alternativa de presentarlo ante ustedes aludiendo a dos de losmayores atributos que, durante los largos años en que he tenido el privilegiode conocerle, he percibido como signos inquebrantables de su condiciónhumana. Pienso que el Profesor. Cárdenas puede ser definido, entre otrosatributos, como un hombre distinguido por su trabajo creador y por su condi-ción de maestro.

En cuanto a su trabajo creador, podemos evocar que, muy temprano en suvida e influido por aquellos que lo formaron, especialmente por el maestroPablo Vila, el Profesor Antonio Luís Cárdenas se prendó de la Geografía ycomenzó a cavilar acerca de la necesidad de ofrecer a esta ciencia, nuevoscampos propicios para su crecimiento y consolidación en Venezuela. Así,con tan sólo 28 años impulsó, en 1959, la fundación del Instituto de Geogra-fía y Conservación de Recursos Naturales en la Universidad de los Andes.En este lugar, sus ideas hallaron eco y soporte por parte de unas autoridadesacadémicas encabezadas por el Dr. Pedro Rincón Gutiérrez, las cuales seempeñaban, al mismo tiempo, en promover el crecimiento y la moderniza-ción de la Universidad emeritense, en el marco de la naciente democracia.En el mismo acto fundador, el Profesor Cárdenas y quienes entonces leacompañaban dieron origen a la Revista Geográfica Venezolana. Para elProfesor Cárdenas y sus colaboradores era claro, ya para entonces, que nopodía haber investigación durable sin la base de una institución permanente;y que los resultados de las investigaciones debían ser sometidos al conoci-miento y a la crítica de los pares académicos del país y del mundo para serrefrendados, aceptados o negados, mediante un órgano de publicación cien-tífica. Una biblioteca adecuadamente provista era el otro eslabón funda-mental para acometer la tarea y, así, surgió la nuestra.

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Para completar sus conceptos, el Profesor Cárdenas estaba convencidoque una institución de investigación era el asiento más pertinente para pro-piciar la formación universitaria de geógrafos que dieran continuidad a labúsqueda científica y que estuviesen capacitados para participar, entre otrastareas, en el diagnóstico, la planificación y el manejo de un espacio geográ-fico en constante transformación. Por esta causa, apenas un poco más tar-de, en 1960, promovió la creación de la Escuela de Geografía.

De sus muchos andares, el Profesor Cárdenas nos ha legado un ejemplohermoso de lo edificante que es soñar, actuar eficazmente y mantener losideales vivos en el espacio y el tiempo. Pero nos dio algo más, algo quequizás ha sido su mayor regocijo; el Profesor Cárdenas ha sido maestro demuchos, entre quienes tuve la fortuna de hallarme, siendo uno sus meritosser un observador atento no sólo a los resultados del conocimiento, sino a lacondición humana integral de quienes fuimos sus alumnos.

Algunos de sus rasgos como educador han quedado indelebles en mi memo-ria y puedo afirmar que su disciplina y puntualidad, su rigor en la exigencia,su mesura al explicar, su invitación a que exploráramos el conocimiento porla vía de la lógica, de la exposición argumentada y de la crítica, se uníanindefectiblemente a un insondable y contagioso amor por la Geografía. Todoello sólo podía desembocar en una aceptación, temprana o tardía, de queestábamos frente a alguien que enseñaba con su ejemplo, ante un maestro.Porque la enseñanza y el aprendizaje han sido y son para él una fuente deinagotable alegría. El Profesor Cárdenas, mi querido maestro, se formó paraello.

Cada vez que veo al Profesor Cárdenas me enseña algo nuevo. Cuandodice: pienso que cuando los alumnos están por debajo de sus profeso-res la ciencia retrocede, cuando los igualan, la ciencia se estanca ysólo cuando los superan, la ciencia avanza, podemos comprender entoda su magnitud por qué, para quienes lo tuvimos como maestro, es unhonor haber sido discípulos del Profesor Cárdenas, un hombre a quien porsu trabajo creador, su recto actuar, su noble corazón y su buena voluntad, nosólo admiramos y respetamos sino, sobre todo, queremos, con un afectoinsondable e imperecedero.


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Historia

Rebeca Pérez Arriaga

Curadora

El registro fotográfico trata acerca de la historia del Instituto de Geografíay el personal que labora y le da vida. En primer lugar reúne el Instituto deGeografía la particularidad de poseer una estructura arquitectónica imbricadaen un entorno natural excepcional que ha logrado mantenerse y enriquecer-se como patrimonio cultural de la Universidad de Los Andes, y la presenciade una de las Bibliotecas de Geografía más importantes de América Latina.Por otra parte, y no menor ha sido, mantener el recuerdo vivo de sus funda-dores y primeros maestros, de los profesores, obreros y empleados que du-rante estos 50 años han seguido sus pasos con una mirada abierta a loscambios de las ciencias y las culturas.

Los objetos-instrumentos y cartografía utilizada en la investigación geo-gráfica como herramienta instrumental para la investigación y enseñanzapermiten contrastar las antiguas y las modernas tecnologías como una de lasmuestras de los avances de la geografía en el tiempo, ante los cuales elInstituto de Geografía ha sabido tomar el pulso y entrar en el camino de lamodernidad de las ciencias.

Registro histórico de la Revista Geográfica Venezolana como expresiónde la conformación y crecimiento de la escuela de pensamiento geográficovenezolano y de las transiciones de enfoques geográficos en la investiga-ción, propias de toda epistemología de las ciencias. Los cambios en la esté-tica y estructura de esta publicación periódica también son indicadores delas respuestas a los tiempos modernos, ciencia y arte siempre han habitadoen el quehacer y pensar humano.

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50 años del Instituto de Geografía y Conservación de RecursosNaturales (1959-2009). Palacio Arzobispal de Mérida

Mons. Baltazar Enrique Porras Cardozo

Arzobispo de Mérida

El entorno físico y humano ofrece el mejor perfil para conocer la historia,idiosincrasia y predestinación de un pueblo. El Pentateuco nos regala unlibro, al que llamamos Números, por la referencia a los censos que contieney la minuciosidad aritmética en el relato de cuestiones relacionadas con elculto y la tradición judía. El desierto, sobrecogedor escenario, imagen delperegrinar humano por la tierra, desarrolla la realidad psicológica de la pere-grinación hacia la tierra prometida, en una relación no siempre fácil y dócil,en la que se añoran otros caminos más placenteros y menos comprometi-dos. Es, quizá, el mejor tratado geográfico que brinda la biblia a los hombresy mujeres de todos los tiempos y lugares.

Evoco este texto bíblico porque se me antoja un símbolo fehaciente del que-hacer que conmemora la Universidad de los Andes, al celebrar los cincuen-ta años del Instituto de Geografía y Conservación de Recursos Naturales.Coincidencialmente, su fecha alboral, y desde entonces todos sus jubileos,se unen de forma indisoluble a los aniversarios de dos grandes hombres, alos que la geografía, entre otras disciplinas, y Venezuela, entre muchos paí-ses agraciados, le deben el reconocimiento de la pasión por el espacio en elque vivimos y la mirada profunda, amorosa y científica por su significadopara las generaciones de todos los tiempos. Son ellos, Alejandro Von Humboldt(1769-1859) y Agustín Codazzi (1793-1859), en el sesquicentenario de susmuertes.

La mirada del otro, la visión del extranjero que no extraño, nos ha servido eninfinidad de ocasiones para zambullirnos en la riqueza de nuestra propiarealidad y proyectarla para bien de propios y ajenos. La visión de D. PabloVila, catalán formado en Francia y radicado entre nosotros despertó en apro-vechados e inquietos hijos de la tierra, uno de ellos el trujillano Antonio LuisCárdenas, el amor por la geografía, como herramienta para prevenir y co-rregir problemas espaciales y fortalecer las potencialidades geográficas delpaís.


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Curiosamente, la influencia francesa en el desarrollo de la geografía comodisciplina académica en Venezuela, fue la misma que despertó en mí uninterés mayor por ella. Los rudimentos de geografía aprendidos en el Semi-nario Interdiocesano de Caracas de manos del Padre Miguel Antonio Salasy el Profesor Adolfo Ostos Bohórquez iban de la mano con el trabajo decampo que exigía recorrer lugares y describir con entonación y buen verbo,escenas varias del acontecer patrio o eclesiástico; fueron avío precioso parael futuro.

En este cincuentenario del Instituto de Geografía, abrimos las puertas yespacios del Palacio Arzobispal de Mérida, para esta exposición de los mo-destos pero promisorios orígenes de una rama frondosa de la Facultad deCiencias Forestales, como una actividad particular entre las muchas queunen a nuestras instituciones, en el quehacer común de rescatar la memoriacomo motor del futuro, reconocimiento a los pioneros y estímulo a quienestienen en la actualidad la responsabilidad de darle vida y savia a lasimplicaciones geográficas del entorno y vida andinas con proyección univer-sal.

El Instituto de Geografía y Conservación de Recursos Naturales. 50años de historia

Juan Carlos Rivero

Director del Instituto de Geografía y

Conservación de los Recursos

El Instituto de Geografía y Conservación de los Recursos Naturales está decumpleaños. Son 50 largos años de trabajo ininterrumpido en el cual el es-fuerzo y los logros de su gente: profesores, personal administrativo, técnicoy obreros, se ha combinado para hacer posible el crecimiento del conoci-miento a través de la labor de investigación que ha nutrido a la CienciaGeográfica en nuestro país.

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Conocimiento geográfico que ha ido nutriéndose y avanzando a través delestudio sostenido del espacio geográfico venezolano, reconociendo las múl-tiples variables que interactúan sobre él: viendo lo humano dentro de unavisión de evolución de la sociedad y, lo físico como los escenarios naturalesque le sirven de soporte a las sociedades y, a la vez, contribuyen a moldearla actividad humana en un proceso constante de coevolución sociedad-natu-raleza.

Su hija mayor, la Escuela de Geografía ha sido el semillero para la formaciónde geógrafos, cuyos estudiantes, como parte de la razón del hecho univer-sitario, han podido nutrir su formación con el valioso aporte de la sostenidalabor de investigación que se ha incubado en su seno del Instituto de Geo-grafía y Conservación de los Recursos Naturales; lo cual ha hecho posibleque la Geografía en nuestro país alcance un nivel de madurez para transitarpor nuevos estadios del más alto nivel.

La Exposición etnográfica El Instituto de Geografía y Conservación delos Recursos Naturales: 50 años de Historia, es solo una pequeña mues-tra del largo transitar de estos 50 años de vida institucional, donde se hasabido combinar, desde sus orígenes, una visión multidisciplinar ypluriepistemológica que ha nutrido los más importantes momentos de su tra-yectoria, respondiendo a la evolución de los tiempos en el devenir histórico.

Este crecimiento y madurez del Instituto de Geografía le ha otorgado unpiso sólido y cada día más vigente a la escuela de pensamiento geográficavenezolana, lo cual junto a su gente ha permitido que este Instituto de Inves-tigación Geográfica de la Universidad de Los Andes se haya proyectado ysiga proyectando, tal como la concibieron quienes como pioneros supierondelinear el camino hasta el presente.


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Inauguración de la exposición Instituto de Geografía y Conservación de los Recursos Natu-rales. 50 años de historia. Palacio Arzobispal de Mérida, 10 de marzo de 2009.AAM. Banco de Imágenes.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Rebeca Pérez. Nota de prensa. Exposición Instituto de ... pp. 197-198

CRÓNICAS, EVENTOS,NOTICIAS


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NOTA DE PRENSA. EXPOSICIÓN INSTITUTO DE GEOGRAFÍA Y CONSER-VACIÓN DE LOS RECURSOS NATURALES. 50 AÑOS DE HISTORIA.Museo Arquidiocesano de Mérida, marzo-junio 2009

Rebeca Pérez Arriaga*

La exposición Instituto de Geografía y Conservación de los RecursosNaturales. 50 años de historia se presenta en los espacios del MuseoArquidiocesano de Mérida con motivo de celebrarse los 50 años de la fun-dación de la primera institución universitaria dedicada a la investigación geo-gráfica de Venezuela. Momento especial cuando se conmemoran, también,los 150 años de la muerte tanto del padre de la geografía moderna AlejandroVon Humboldt como de Agustín Codazzi.

A través de esta muestra expositiva se expresa parte de la historia de laInstitución, lo cual permite al espectador hacerse una idea de una Geografíaque ha ido caminando al ritmo de los tiempos, de las corrientes del pensa-miento de la ciencia geográfica y del acontecer de las sociedades. Ello que-da expresado en un recorrido museográfico estructurado en tres aspectostemáticos: objetos-instrumentos y cartografía, registro histórico de la Revis-ta Geográfica Venezolana, registro fotográfico acerca de la historia delInstituto de Geografía y el personal que le da vida, y patrimonio culturalinstitucional.

El guión de la exposición se estructura a partir de:

1. Instrumentos y cartografía utilizados en la investigación geográfica (obje-tos) contrastando antiguas y modernas tecnologías. Se muestran algunas delas herramientas para la realización de trabajo campo y la elaboración de lacartografía; equipos para procesamiento de información y cartografía utili-

* Curadora de la exposición


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zados para la investigación geográfica. A través de la selección de los obje-tos geográficos usados como herramienta instrumental para la investigacióny enseñanza geográfica se pueden apreciar los avances de la geografía.

2. Registro histórico de la Revista Geográfica Venezolana, como expre-sión de la conformación y crecimiento de la escuela de pensamiento geográ-fico, transiciones de enfoques geográficos en la investigación, y los cambiosen la estética y estructura de la publicación periódica como respuesta a lostiempos modernos. Es parte del registro del principal órgano de divulgacióndel quehacer geográfico en el país.

3. Registro fotográfico de la instalación sede del Instituto de Geografía y elpersonal que labora en él; también se muestran los rasgos característicos dela estructura arquitectónica imbricada en un bosque así como la incorpora-ción de obras de arte dentro y en los alrededores del Instituto.

Mediante estos tres aspectos se logra establecer la lectura representativaacerca de la historia del Instituto de Geografía en 50 años, lo cual muestra elrecorrido desde corrientes de pensamiento geográfico propias de mitad delsiglo XX, con fuertes influencias iniciales de la Escuela Regional Francesa,hacia nuevos tiempos y paradigmas en la investigación de las ciencias geo-gráficas.

En el marco de la inauguración de la exposición Instituto de Geografía yConservación de los Recursos Naturales. 50 años de historia, los inte-grantes de la Academia Internacional de Flauta Dulce Eliécer RamónMartínez Gutiérrez, adscrita al Sistema Nacional de Orquestas Infantiles yJuveniles de Venezuela, ofrecerán un concierto bajo la Dirección del Pro-fesor Luis Alfonso Rodríguez Abreu.

La invitación es para el martes 10 de marzo a las 11:00 de la mañana en losespacios del Archivo Arquidiocesano (Palacio Arzobispal), ubicado en laavenida 4 con esquina de la calle 23, para la inauguración de esta exposi-ción con motivo de celebrarse los 50 a los de vida institucional del Institutode Geografía y Conservación de los Recursos Naturales.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Marlene Bauste. Presentación del libro Cuentas de una... pp. 199-203

PRESENTACIÓN DEL LIBRO CUENTAS DE UNA DEVOCIÓN. MANUSCRI-TO DE LA COFRADÍA DE NUESTRA SEÑORA DE LA CONSOLACIÓN DETÁRIBA 1788-1803. AUTORA: ANA HILDA DUQUE.Seccional de Jubilados, 14 de mayo de 2009.

Marlene Bauste*

Hilda Duque, oriunda de un hermoso pueblo entre majestuosas montañas, ElCobre, del Estado Táchira, habitado por gente amable, cálida, sensible y decachetitos colorados, con emoción y osadía, decidió transitar el camino delconocimiento y emprendió viaje y traspasar los límites hacia la lejana ciudadde Mérida con su valija cargada de esperanzas para ingresar a la IlustreUniversidad de Los Andes en la Escuela de Geografía. No sólo obtuvo eltítulo de Geógrafo el que le abrió las puertas al oficio de docente e investiga-dora en la Facultad de Humanidades y Educación, sino también obtuvo el deMagíster en Etnología, Mención Etnohistoria (CIET-ULA). En su afán decrecimiento no hay límites y, en la actualidad cursa en la Universidad de LosAndes dos doctorados, el de Ciencias Humanas y el de Antropología.

Profesora Titular Jubilada de la Escuela de Historia de la Universidad de losAndes. Desde 1991, Directora del Archivo Arquidiocesano de Mérida (AAM)y desde 1995, del Museo Arquidiocesano de Mérida (MAMSG). Su ampliaexperiencia y reconocida trayectoria la condujeron a la Dirección del Archi-vo Histórico de la Universidad de los Andes, durante dos períodos rectorales(2000-2008), y, a ser miembro de la Comisión Nacional de Cooperación conla UNESCO, encargada de velar por la memoria bibliográfica y fotográficadel país (2006).

En el AAM y MAM coordina, entre otros, los proyectos relacionados conLos Registros Parroquiales, Discurso Religioso, Vida Cotidiana Andinae Inventario de Bienes Culturales de la Iglesia, siendo pionera en el paísen la investigación sobre Discurso Religioso. Realiza una importante laborde rescate, preservación, conservación y difusión del patrimonio documen-tal y museístico venezolano.

* Coordinadora de los Servicios Bibliotecarios de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidadde Los Andes.


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Su profesionalismo y tenacidad la hicieron merecedora de las condecoracio-nes y distinciones de mayor reconocimiento tanto en el ámbito universitario,regional, nacional e internacional, entre ellos el PPI en el nivel II, el PEI,CONABA, CONADES.

Entre las distinciones, el Botón Honor al Mérito de la Alcaldía de Libertadordel Estado Mérida, Ciudadana Meritoria del Concejo Municipal de Liberta-dor, Edo. Mérida, Reconocimiento del Rectorado a la labor académica en elAHULA. Reconocimiento a la labor académica por la Facultad de CienciasForestales y Ambientales de la ULA. Lauro Alameda Jáuregui por la Alcal-día del Municipio Jáuregui del Edo. Táchira. Orden Ciudad de Boconó en suTercera Clase y Orden Bicentenario San Benito de Palermo en su PrimeraClase por la Arquidiócesis de Mérida.

Es Miembro Honorario de la Academia de la Historia del Táchira. Desdejulio 2008 Miembro Honorario de la Academia Boyacense de Historia, Tunja-Colombia, y de reciente designación, Miembro Correspondiente de la Aca-demia de Mérida.

En su infatigable labor, ha consolidado magnánimos proyectos como el delMuseo Arquidiocesano y Archivo Arquidiocesano de Mérida. Aunado a susgustos sin fin, también se ha preocupado por entender sus antepasados, lashistorias que asombran y justifican nuestra cotidianidad. De igual manera,en su haber, numerosas publicaciones que dan cuenta de su carácter perse-verante y sistemático, como Jáuregui y Silva: Contrapunteo Epistolar,Discurso Religioso en Mucurubá, Vida Cotidiana Andina y Padrones yCensos de Mérida (1558-1873). En el libro El Patrimonio EclesiásticoVenezolano: Pasado y Futuro en Venezuela. III tomos, publicó los capítu-los La investigación en el Archivo Arquidiocesano de Mérida, 1979-2005 y El Arzobispo Antonio Ramón Silva y la Investigación Museística.Coautora de Jáuregui siglo y medio después: Memoria delSesquicentenario de su Nacimiento, IV tomos. Articulista y colaboradoraen revistas indexadas y arbitradas de su especialidad. Entre esta rica pro-ducción intelectual, paso a compartir con ustedes esta obra, de diseño yedición impecable que hace honor a su contenido.

Esta obra, de la Colección Fuentes para la Historia Eclesiástica de Ve-nezuela del Archivo Arquidiocesano de Mérida en coedición con Edicionesdel Rectorado y Talleres Gráficos Universitarios en conmemoración a lasBodas de Plata Episcopales del Excmo. Mons. Dr. Baltazar Enrique Porras

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Cardozo, Arzobispo de Mérida, es una joya literaria por su contenido. Tratacon criterios y rigurosidad científica-histórica una situación en extremo deli-cada por las implicaciones de las autoridades ecle-siásticas y civiles alrededor de la devoción a laVirgen Nuestra Señora de la Consolación deTáriba, en la antigua Diócesis de Mérida deMaracaibo, hoy de San Cristóbal.

El libro está estructurado con un estudio prelimi-nar de ocho elementos o capítulos, epilogo, fuen-tes documentales e índices, la primera parte. Lasegunda, presenta la transcripción del Manuscri-to de la Cofradía Nuestra Señora de la Consola-ción de Táriba 1788-1803. Prologado por el Dr.Laureano Rodríguez, catedrático de la Universi-dad de Sevilla de España y Archivero del Real Monasterio de Santa Inés, dela misma ciudad, quien adjetiva el texto como un documento duro, ator-mentado y terrible, no por la dificultad que pudiera procurar su lectura,sino por su contenido, la polémica nada ejemplar entre el Síndico José Igna-cio Fortoul y el Presbítero Tomás Manuel Sánchez Carrillo, con una cadenade perversas y mutuas inculpaciones.

El libro, ofrece un análisis exhaustivo y detallado del documento, incluye unadescripción de las características internas del Manuscrito y de la metodolo-gía de descripción documental, lo que posibilita la investigación en las lideshistórico-religiosas. Sorprende como el documento es una fuente riquísimade información, no sólo, sobre la Cofradía de Nuestra Señora de la Consola-ción de Táriba, sino que aporta importantes datos de la primera época de laDiócesis de Mérida de Maracaibo y de su creación en el año 1778, siendoeste uno de los hechos que contribuyeron a concebir la nacionalidad venezo-lana, pues la región ocupada por los hoy estados Táchira y Trujillo, parte deBarinas, Apure y Zulia pertenecían al Virreinato de Santa Fe de Bogotá. Deigual manera, …a través del manejo de la Cofradía, se obtiene informa-ción sobre los acontecimientos ocurridos en la diócesis y se tiene noti-cia de la cotidianidad del andino venezolano a finales del períodocolonial …. Se deja claro que … la razón de la existencia de Táribacomo pueblo es la devoción a la Virgen de la Consolación, cuando el 6de agosto de 1602, el Visitador Antonio Beltrán de Guevara disponecrear una población circunvecina a la Capilla de Nuestra Señora de


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Táriba ….. Que los agustinos fueron los primeros evangelizadores delos pobladores de estas tierras andinas venezolanas entre 1572 y 1580.Las Cofradías se constituyeron en la forma de evangelizar y catequizar.…Doctrina y Cofradía van de la mano. …La Cofradía fue el vehículopara el reacomodo del imaginario cultural indígena…Aunque ésta enrealidad era parte de aquella, la doctrina, van a convertirse en dosnúcleos de poder antagónicos, con sus propios bienes y autonomía ad-ministrativa. Como símbolos opuestos, la Doctrina representará más alindígena clerical y oficial, mientras que la Cofradía a la iglesia laicaly popular. …Algunos datos sueltos dejan ver las tensiones frecuentesentre los curas y los doctrineros con los responsables de la cofradíapor asuntos de dinero. …se percibe la mentalidad patronista y regalistade la época; como se enfrentan la autoridad eclesial y la civil, Obispoy gobernador por la defensa y cuido de sus fueros.

Son pocos lo libros antiguos pertenecientes a cofradías, la razón es laindependencia de actuación, por una parte, de otra, el constante cam-bio de personas al frente de las mismas y de lugares, lo que ocasiona-ba que algunas de sus pertenencias como los libros y los estados decuentas, entre otros no tuvieran asiento fijo. La particular relaciónentre los curas y los mayordomos de las cofradías, favorecía el cuida-do de los bienes, lo que suscitaba enfrentamiento que debían ser re-sueltos por los visitadores o los prelados cuando pasaban por los pue-blos.

El libro aporta información sobre el primer obispo de Mérida, FrayJuan Ramos de Lora, en 1784-quien ocupa un lugar de honor en nues-tra Universidad- como hombre de gobierno, acertado en sus predic-ciones y decisiones. Intentó elevar la doctrina de Táriba a Parroquia.También del segundo Obispo de Mérida, Fray Manuel Cándido Torrijosy Rigueiros, dominico (1792-1794), de quien se tienen escasas noti-cias. Y así, un sinfín de interesantes asuntos que convocan con entusiasmoal escudriñamiento del documento. Los invito a lee el libro.

Esta presentación no podía finalizar sin resaltar cualidades personales de laautora que nos brindan la posibilidad de hacer una fotografía de la esenciaintegral de un ser que ha logrado realizarse en su condición de profesional yde mujer con aportes a la academia, a la investigación, a la comunidad y a lafamilia. Es detallista y observadora, capaz de captar lo imperceptible por

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Mayelis Moreno. Bautizo del libro Mérida en sus 450 años... pp. 203-206

otros. Es curiosa, humilde y leal, siempre pregunta en función de conocerhechos que nos revelen elementos importantes de nuestro entorno actual,virtudes que hacen de la Profesora Hilda una persona sociable y solidariacon buenos amigos con quienes comparte el gusto de comer, beber y reírsobre anécdotas vividas.

Debo agradecer a la autora por honrarme al elegirme para presentar suobra. Creo que detrás de la propuesta, subyace la sincera intención deadentrarme en el estudio de las cofradías, siendo este un tema que reciénabordo por razones de tradición familiar que me motivaron a fundar la Co-fradía del Santo Niño Jesús de Escuque de la Pedregosa Alta de Mérida,impulsada y orientada por la profesora Hilda, de quien siempre estaré agra-decida por su valioso apoyo y numerosos e invalorables consejos.

BAUTIZO DEL LIBRO MÉRIDA EN SUS 450 AÑOS. AUTORES: MONS. DR.BALTAZAR ENRIQUE PORRAS CARDOZO Y DR. JOSÉ MANUEL QUINTE-RO STRAUSS. Salón Rojo del Edificio del Rectorado de la Universidad de LosAndes, 19 de mayo de 2009.

Mayelis Moreno Castillo*

En el año 2008 se cumplieron 450 años de la fundación de la ciudad deMérida, hecho poco sonado en marcos de celebración por una tónica nega-tiva acerca del proceso histórico llevado a cabo en el territorio hoy venezo-lano a partir del siglo XV. Los españoles, iniciaron la ocupación en territoriosde lo que ellos mismos llamaron América; efectuando fundación de ciuda-des bajo lineamientos jurídicos previamente establecidos dentro del aparatajeinstitucional español.

* Ayudante de investigación del Archivo Arquidiocesano de Mérida-AAM.


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En 1558 Juan Rodríguez Suárez funda la ciudadde Mérida en lo que hoy corresponde a la pobla-ción de Lagunillas capital de Municipio Sucre.Poco tiempo después, de Bogotá llega Juan deMaldonado y hace preso a Rodríguez Suárez ar-gumentando había fundado la ciudad sin la autori-dad requerida para dicha empresa, levanta la ciu-dad y la traslada al lugar que hoy ocupa. La fun-dación de la ciudad de Mérida cumple entoncespara el 2008, 450 años y los dos únicos discursode los cuales tuvo conocimiento la Universidad deLos Andes pronunciándose en torno a dicha cele-

bración fueron los de Monseñor Baltazar Enrique Porras Cardozo y el Doc-tor José Manuel Quintero Strauss.

Estas dos piezas oratorias, tal como lo apunta el Doctor Mario Bonucci, sonla fuente de inspiración que encuentra el Rectorado de la Universidad deLos Andes y los emplea para hacer un homenaje a la Ciudad con la Publica-ción del Libro Mérida en sus 450 años, que recopila ambos discursos.

En mayo de 2009 la publicación es un hecho y el día martes 19 en el SalónRojo del Edificio Rectorado de la Universidad de Los Andes a las 10 de lamañana se bautiza.

Bautizo del libro Mérida en sus 450 años. Universidad de LosAndes, 19 de mayo de 2011.Foto: Raquel Morales. Colección AAM. Banco de imágenes.

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El acto contó con la presencia del Rector de la máxima casa de estudios dela Ciudad de Mérida, Dr. Mario Bonucci Rossini, el Secretario Dr. JoséAnderez, la Directora de Relaciones Interinstitucionales, Dra. Nancy Rivasde Prado - todos autoridades de la Universidad de Los Andes-, contó tam-bién con la estampa de la Profesora Ana Hilda Duque Directora de la Fun-dación Archivo Arquidiocesano de Mérida Pbro. Luís Eduardo Cardonay del Museo Arquidiocesano de Mérida Mons. Antonio Ramón Silva García,otras personalidades merideñas y por supuesto los creadores de las diserta-ciones Monseñor Baltazar Enrique Porras Cardozo Arzobispo Metropolita-no de Mérida, y el Doctor José Manuel Quintero Individuos de Número enla Academia de Mérida.

Al toque de campana se inicia el acto que contó con las palabras del Rectorde la Universidad de Los Andes Mario Bonucci Rossini, quien manifestó susatisfacción por la manera con la cual la Universidad de Los Andes agasajaa la Ciudad, es decir, con un libro que recoge discursos de tan distinguidaspersonalidades. Seguidamente el Doctor José Manuel Quintero Strauss, pro-nunció palabras siempre envueltas de historia al referirse a los detalles delacto; comenzando con el mismo Salón anteriormente llamado Rojo, por elcolor de sus alfombras y cortinas, en el que reposan piezas como el escrito-rio donde el rector Doctor Joaquín Mármol Luzardo firmaba documentosreferentes a la administración de la institución. Se detuvo en el detalle delcuadro de Fray Juan Ramos de Lora, pieza con génesis en un lienzo ubicadoen México en el convento San Fernando, y que por gestiones de su personacomo miembro de la embajada de Venezuela en México y de MonseñorBaltazar Enrique Porras Cardozo, fue trasladado a Mérida (Venezuela) per-maneciendo en el salón por algún tiempo, hasta que fue devuelto; en esetranscurrir fue elaborada una copia por el artista Francisco Lacruz y coloca-da en el salón hasta la actualidad, lo que hizo que el Salón ahora se llameSalón Fray Juan Ramos de Lora. Manifestó su agradecimiento a la Uni-versidad de Los Andes por tomar su discurso y publicarlo junto a los grafismosde su apreciado y admirado amigo Monseñor Porras. Aprovechó la oportu-nidad para elevar su voz para oponerse al cierre de la Academia de Mérida.

Monseñor Baltazar Enrique Porras Cardozo por su parte agradeció a laUniversidad de Los Andes por tomar su discurso, a propósito del aniversariode la ciudad y remitiéndose a la génesis de la Universidad rescata el espíritude Fray Juan Ramos de Lora al colocar la cuna de la Universidad de Los


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Andes. Asimismo hizo alusión a la importancia de llevar libros fuera del paíspara que fuesen conocidos y difundidos. Este libro Mérida en sus 450años sería llevado a Roma y un ejemplar entregado al Papa Benedicto XVI.Es decir la ocasión de viaje serviría para cultivar a partir de la publicaciónlos dotes de la ciudad que hasta ahora se ha ido quedando sin sus mayoresatracciones.

Toma la palabra el Rector de la Universidad de Los Andes quien concluye elacto reiterando el valor de la publicación y al toque de campana se repartenejemplares a los presentes.

Autoridades de la Universidad de Los Andes y Autores del libro Mérida en sus 450 años.Universidad de Los Andes, 19 de mayo de 2011.Foto: Raquel Morales. Colección AAM. Banco de imágenes.

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Arquidiócesis de Mérida. Boletín del Archivo Arquidiocesano de Mérida. Tomo XI. Nº 31. Enero-junio 2009.Mérida-Venezuela. ISSN: 1316-9173. Normas para los/as autores/as pp. 207-209

NORMAS PARA LOS/AS AUTORES/AS

1. Los artículos y/o trabajos deben ser inéditos.

2. Los artículos no deben exceder las 20 páginas y los trabajos las 50, inclu-yendo notas, citas, gráficos, figuras, mapas, planos, fotografías, fuentes do-cumentales, bibliohemerográficas, orales y digitales.

3. El título y/o subtítulo debe corresponderse con el contenido.

4. Se debe indicar nombre(s) y apellido(s) de los/as autores/as, instituciónde afiliación, especialidad, dirección postal y electrónica y la fecha en la queterminó el artículo y/o trabajo.

5. Debe incluir un resumen en español y en inglés con un máximo de 10líneas para los artículos y 20 para los trabajos y de 4 a 6 palabras clave.

6. Las notas y/o citas deben ir a pie de página, siguiendo los modelos:

Gianni Vattimo. Creer que se cree. 1996, p. 34.

Antonio Ramón Silva. Documentos para la historia de la Diócesis deMérida. 1908. Tomo II, p.84.

Idem.

Ibídem, p. 86

Fernando Campo del Pozo. Los agustinos en la Evangelización de Vene-zuela. Caracas, 1979, p. 101.

Antonio Ramón Silva. Ob. Cit., pp.88-89.

De aquí en adelante lo abreviaremos NT. (Nuevo Testamento). Asimismo,para referirnos al Antiguo Testamento utilizaremos AT.

7. Deben ser presentados en tamaño carta formato Microsoft Word, fuenteTimes New Roman punto 12, a doble espacio, con márgenes superior eizquierdo de 3,5 cm., e inferior y derecho de 3,0 cm. Los párrafos separadospor una línea y sin sangría. Las páginas numeradas en el borde superiorderecho.


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8. Los gráficos, figuras, mapas, planos y fotografías, deben incluir su co-rrespondiente leyenda y ser entregados en versión digital con 300 dpi deresolución.

9. Los autores/as deben enviar los artículos y/o trabajos vía correo electró-nico y tres copias impresas vía postal, una con los datos del autor y dos sinidentificación, a los fines de enviarlas a los arbitros para su evaluación.

10. Los artículos y/o trabajos recibidos no serán devueltos, independiente-mente de su evaluación.

11. Las fuentes documentales, bibliohemerográficas, orales y digitales de-ben ir al final del texto, y citadas de la siguiente manera:

Documentales:

Archivo Arquidiocesano de Mérida. Sección 17 Cementerios. Caja 1(1788-1932), doc. 17-0033; 3 ff.

Archivo Arquidiocesano de Mérida. Sección 45A Libros Parroquiales.Mucurubá. Gobierno. Libro s/n (1886-1990); 91 pp.

Bibliohemerográficas:

Libro: RUBIO MERINO, Pedro. Archivística Eclesiástica. NocionesBásicas. Bogotá: Consejo Episcopal Latinoamericano, 1998; 268 pp. (Co-lección Documentos CELAM, 151)

Revista: PORRAS CARDOZO, Baltazar Enrique. “Santiago HernándezMilanés. Un obispo olvidado”. En: Boletín Arquidiocesano. Mérida (Ve-nezuela): Arquidiócesis de Mérida. Nº 60, abril-junio 2001; pp. 113-123.

CARRERO, Gloria. “La cofradía de la Inmaculada Concepción de la Pa-rroquia El Sagrario de la ciudad de Mérida (1815-1941)”. En: Boletín delArchivo Arquidiocesano de Mérida. Mérida (Venezuela): Arquidiócesisde Mérida. Archivo Arquidiocesano de Mérida. ISSN 1316-9173. Tomo III,Nº 13, julio- diciembre 1993; pp. 28-48.

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Orales (opcional)

Ana María Peña. Maestra, 32 años. Tabay. Estado Mérida, 10 de marzo de1997.

Agricultor, 50 años. Mococón Alto. Mucurubá. Estado Mérida, 26 de mar-zo de 2004

Digitales http://www.mundoarchivistico.com.ar/lestanitrab.asp

13. Los autores/as deben enviar carta indicando que el artículo y/o trabajono ha sido ni será enviado a otra revista para su publicación.

14. Los artículos y/o trabajos que cumplan con estas normas deben hacerlosllegar con una carta dirigida al Director(a) Editor(a) del Boletín del Archi-vo Arquidiocesano de Mérida, a la siguiente dirección:

Archivo Arquidiocesano de Mérida. Palacio Arzobispal. Av. 4 Bolívar, es-quina calle 23 frente a la Plaza Bolívar. Apdo. 26. Mérida 5101-A. Telfs. 58274 2525786-2524307. Fax 58 274 2521238. Mérida-Venezuela.

Correo electrónico: [email protected] / [email protected]

Portal: www.arquidiocesisdemerida.org.ve

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