boletín internacional ain - oct 2013

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1 “En la oración, el cristiano aprende a compartir la misma experiencia espiritual de Cristo y comienza a ver con los ojos de Cristo. A partir de aquel que es luz de luz, del Hijo Unigénito del Padre, también nosotros conocemos a Dios y podemos encender en los demás el deseo de acercarse a él”. Encíclica Lumen Fidei “¿Queréis ser como Pilato, que no tiene la valentía de ir a contra- corriente?” (Papa Francisco en la Jornada Mundial de la Juventud). Dios, y de ahí que el místico alemán Ánge- lus Silesius dijera que el verdadero orante se convierte en aquel a quien reza. Incluso si el corazón parece estar frío y muerto, no es hipocresía arrodillarse para confesar nuestra incapacidad para rezar y anhelar a Dios. Si hacemos un sincero esfuerzo por rezar pese a todas las dificultades, la aridez interna y las distracciones, Dios no nos ne- gará Su gracia, pues Él ansía ser el centro de nuestro corazón para inspirarnos, y para guiar y realizar todo en nuestra vida. De esta forma, todas nuestras acciones se con- vierten en oración. Cuando nos acercamos a Dios y buscamos la comunión con Él, también nos acerca- mos cada vez más al prójimo y podemos vivir unos para otros. La Madre Teresa de Calcuta, que rezaba casi incesantemente el Rosario, le preguntó una vez a un semina- rista: “¿Cuántas horas rezas al día?”. El se- minarista respondió sorprendido: “Madre, Para conservar en nosotros la luz de la fe y poder compartirla con los demás, necesita- mos por fuerza la oración: esta es impres- cindible. La oración es lo más hermoso, lo más importante y lo más poderoso que el hombre puede realizar. Rezarle a Dios es la primera vocación del hombre. Como cria- turas procedemos del corazón de Dios, y, por eso, nuestro espíritu y nues- tro corazón ansían a Dios – nuestro Padre y amigo– y quieren permanecer en Él. Al igual que la respiración man- tiene con vida al cuerpo, la ora- ción colma de vida divina al alma. Sin la oración, el interior del hombre se muere. ¿Pero qué hacer para que la oración se con- vierta en la primera intención del corazón? Comencemos, sencillamente, rogando como los apóstoles: “Señor, enséñanos a orar”. (Lc 11,1) Debemos decidirnos, una y otra vez, por la oración y abrirle nuestro corazón a Dios. La oración transforma al hombre, sus sentimientos, sus pensamien- tos, sus decisiones y sus actos. La oración transporta al alma al mundo sobrenatural de de usted hubiera esperado un llamamiento a la caridad, a amar más a los pobres. ¿Por qué me pregunta cuántas horas rezo?”. En- tonces, la Madre Teresa le tomó de las manos y le dijo: “Hijo mío, sin Dios siem- pre somos demasiado pobres para ayudar a los necesitados. No lo olvides: yo solo soy una pobre mujer que reza, y cuando rezo, Dios deposita Su amor en mi corazón, y solo así puedo amar a los necesitados... ¡porque rezo!”. Queridos amigos: que ningún momento nos resulte tan impor- tante y valioso como aquel que dedicamos a la oración. Si somos una asociación de oran- tes, nunca nos faltarán los recursos econó- micos necesarios para satisfacer las numerosas peticiones que recibimos día a día. Quien se sume en Dios a la oración no pasa por alto ninguna necesidad. Os bendice vuestro agradecido P. Martin M. Barta Asistente Eclesiástico “La oración es lo más her- moso, lo más importante y lo más poderoso que el hombre puede realizar”. Foto: Grzegorz Galazka Permaneced firmes en la fe, sed fuertes. (1 Cor. 16,13) Nº 7. Octubre de 2013 Los donativos entregados a esta Asociación son deducibles en la Declaración de la Renta. C.I.F. nº R-2800175-H

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Page 1: Boletín Internacional AIN - Oct 2013

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“En la oración, el cristianoaprende a compartir la mismaexperiencia espiritual de Cristoy comienza a ver con los ojosde Cristo. A partir de aquel quees luz de luz, del Hijo Unigénitodel Padre, también nosotros conocemos a Dios y podemos

encender en los demás el deseo de acercarse a él”.

Encíclica Lumen Fidei “¿Queréis ser como Pilato, que no tiene la valentía de ir a contra-corriente?” (Papa Francisco en la Jornada Mundial de la Juventud).

Dios, y de ahí que el místico alemán Ánge-lus Silesius dijera que el verdadero orantese convierte en aquel a quien reza. Inclusosi el corazón parece estar frío y muerto, noes hipocresía arrodillarse para confesarnuestra incapacidad para rezar y anhelar aDios. Si hacemos un sincero esfuerzo porrezar pese a todas las dificultades, la aridezinterna y las distracciones, Dios no nos ne-gará Su gracia, pues Él ansía ser el centro

de nuestro corazón para inspirarnos, y paraguiar y realizar todo en nuestra vida. Deesta forma, todas nuestras acciones se con-vierten en oración.

Cuando nos acercamos a Dios y buscamosla comunión con Él, también nos acerca-mos cada vez más al prójimo y podemosvivir unos para otros. La Madre Teresa deCalcuta, que rezaba casi incesantemente elRosario, le preguntó una vez a un semina-rista: “¿Cuántas horas rezas al día?”. El se-minarista respondió sorprendido: “Madre,

Para conservar en nosotros la luz de la fe ypoder compartirla con los demás, necesita-mos por fuerza la oración: esta es impres-cindible. La oración es lo más hermoso, lomás importante y lo más poderoso que elhombre puede realizar. Rezarle a Dios es laprimera vocación del hombre. Como cria-turas procedemos del corazón de Dios, y,por eso, nuestro espíritu y nues-tro corazón ansían a Dios –nuestro Padre y amigo– yquieren permanecer en Él. Aligual que la respiración man-tiene con vida al cuerpo, la ora-ción colma de vida divina alalma. Sin la oración, el interior del hombrese muere.

¿Pero qué hacer para que la oración se con-vierta en la primera intención del corazón?Comencemos, sencillamente, rogandocomo los apóstoles: “Señor, enséñanos aorar”. (Lc 11,1) Debemos decidirnos, unay otra vez, por la oración y abrirle nuestrocorazón a Dios. La oración transforma alhombre, sus sentimientos, sus pensamien-tos, sus decisiones y sus actos. La oracióntransporta al alma al mundo sobrenatural de

de usted hubiera esperado un llamamientoa la caridad, a amar más a los pobres. ¿Porqué me pregunta cuántas horas rezo?”. En-tonces, la Madre Teresa le tomó de lasmanos y le dijo: “Hijo mío, sin Dios siem-pre somos demasiado pobres para ayudar alos necesitados. No lo olvides: yo solo soyuna pobre mujer que reza, y cuando rezo,Dios deposita Su amor en mi corazón, ysolo así puedo amar a los necesitados...

¡porque rezo!”.

Queridos amigos: que ningúnmomento nos resulte tan impor-tante y valioso como aquel quededicamos a la oración. Sisomos una asociación de oran-

tes, nunca nos faltarán los recursos econó-micos necesarios para satisfacer lasnumerosas peticiones que recibimos día adía. Quien se sume en Dios a la oración nopasa por alto ninguna necesidad.

Os bendice vuestro agradecido

P. Martin M. BartaAsistente Eclesiástico

“La oración es lo más her-moso, lo más importante ylo más poderoso que elhombre puede realizar”.

Foto: Grzegorz Galazka

Permaneced firmes en la fe,

sed fuertes. (1 Cor. 16,13)

Nº 7. Octubre de 2013

Los donativos entregados a esta Asociación son deducibles en la Declaración de la Renta.

C.I.F. nº R-2800175-H

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Estipendios

de Misa

Triple ayuda a los sacerdotesLa Iglesia existe para los pobres. ElPapa Benedicto XVI lo formuló así:“Junto a la presencia real de Jesúsen la Iglesia, en el Sacramento,existe la segunda presencia real deJesús en los más pequeños, en losoprimidos de este mundo, en los úl-timos, en los que quiere que nos-otros lo encontremos”.

Esto es algo que viven de forma especiallos sacerdotes, pues son ellos los que, porsu misma consagración, realizan la consa-gración al repetir las palabras de Jesús, ylos que, en muchos casos, también com-parten los estipendios de Misa con los po-bres. En Zambia, muchas parroquias sehan empobrecido tanto a causa del desem-pleo y las consecuencias del SIDA que nitan siquiera pueden financiar los viajes desus sacerdotes a los poblados más remo-tos. Gracias a los estipendios de Misa, el70% de las parroquias pueden celebrar al

menos una Misa al mes. Además, tam-poco es raro que el sacerdote traiga con-sigo medicamentos pagados con losestipendios de Misa. En estos pobladosnos encontramos con el sacerdote a losmás pequeños y oprimidos de este mundo.Gracias a vuestros estipendios de Misa(16.400 euros), 41 sacerdotes de la Archi-diócesis de Lusaka conviven así con suscomunidades.

La mayoría de los sacerdotes sabían en loque se metían, pues la situación no varía enlos seminarios. Incluso para los profesores,los modestos estipendios de Misa son laprincipal fuente de ingresos. Gracias a los8.400 euros para el año que viene, los sieteprofesores del seminario mayor de JohnFisher y Tomás Moro de Harare (Zimba-bue) pueden concentrarse exclusivamenteen la formación de los futuros sacerdotes yofrecer así un buen ejemplo de la vida fu-tura como sacerdotes. Precisamente en lospaíses pobres –y no solo en África–, los sa-cerdotes tienen a menudo que buscarse untrabajo para poder sobrevivir. Esto quitatiempo para la pastoral, a menudo para laoración y la santa Misa. Por lo que no solocorren el peligro de descuidar a los más pe-queños y oprimidos, sino también de mar-ginar su propia vocación. Los estipendiosde Misa son para ellos una triple ayuda: for-talecen la vocación, les apoyan a la hora deocuparse de los pobres y refuerzan la soli-daridad entre vosotros y estos sacerdotes.Y, no nos olvidemos, ellos presentan nues-tras peticiones ante Dios. •

Tanzania: Presencia real entre los máspequeños y oprimidos.

El Obispo de Sudán reprime las lá-grimas, porque le duele ver cómotienen que vivir a veces sus sacer-dotes: solos, pobres y desbordados.

Pero no es el único Obispo que, por falta derecursos, tiene que presenciar cómo sus sa-cerdotes realizan su servicio hasta la exte-nuación. Por ellos se dirige a nosotros. Lossacerdotes necesitan momentos de silenciocompartido, de oración fraternal y de cer-canía familiar. El alma del sacerdote tieneque repostar, y no solo espiritualmente:también el intercambio de experiencias ypoder abrir el corazón entre hermanos sirvepara reponer fuerzas. Por eso mismo, otroObispo, Mons. Melchisedec Sikuli Palukude la R.D. Congo, nos pide ayuda paraunos ejercicios espirituales para sus 41 sa-cerdotes (6.500 euros). Debido a los con-flictos armados y la ausencia de carreteras,

algunos solo pueden acudir en avión, yotros vienen de zonas con poblaciones ma-yoritariamente islámicas. Otro Obispo,Mons. Sosthène Bayemi de Camerún,quiere celebrar unas jornadas de estudiopara revivir el primer amor de sus sacerdo-tes (6.200 euros). Gracias a vosotros, todoesto es posible. •

República Democrática del Congo: Denuevo juntos, ejercicios espirituales parasacerdotes.

El tiempo del primer amor

El primer amor: El P. Weren-fried en su primera Misa el 25

de julio de 1940.

Todo donativo recibido se destinará a éste o a proyectos similares, con el fin de hacer posible la labor pastoral de Ayuda a la Iglesia Necesitada.

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Oración

Buscar consejo en la Sagrada Escritura“Ser hombre significa salir a la bús-queda”, escribió el Beato JuanPablo II, y también: “A fin de cuen-tas, toda búsqueda humana es unabúsqueda de Dios”. ¿Pero dónde sepuede buscar mejor? San Franciscode Asís responde: Leer la SagradaEscritura equivale a pedirle consejoa Cristo.

Vosotros habéis ayudado a millones de per-sonas a buscar este consejo de la vida y,además, desde muy temprano: en la Sa-grada Escritura para los pequeños –la Bi-blia del Niño– o en el librito del Rosario, laforma resumida del Evangelio. Desde suprimera edición en 2003, “El Rosario” hasido traducido a 14 lenguas y se han im-preso 2,2 millones de ejemplares. La ver-sión para los niños “Los niños rezamos elRosario” (desde 2009) ha alcanzado una tirada de 600.000 ejemplares en ocho len-

guas. Una religiosa de Brasil ve en la ora-ción de los niños una fuerza unificadoramundial. “Sin duda, la oración de los niñosservirá a todos. Jesús mira por los niños,pero también ve vuestra buena acción con-sistente en difundir esta obrita”.

Los niños buscan y encuentran. La pequeñaAngelina de México lo describe así: “Notengo mamá, pero mi maestro de catequesisdice que la Virgen María es mi madre en elCielo. Yo le hablo y ella me quiere mucho.La siento muy cerca de mí y, por eso, el

Rosario no me resulta largo. Yo le doy lasgracias por acogerme como hija y le pidoque proteja a todos los niños que no tienenmamá”.

En Uruguay unos niños van de casa en casae invitan a los niños y jóvenes a rezar consus padres, el Rosario. “Algunos se alegrande vernos, mientras que a otros no les inte-resa. Nosotros no perdemos el ánimo y lla-mamos a otra puerta más. Para nosotros, nosupone ningún problema; nosotros senti-mos con fuerza el amor de la Madre deDios”. •

Ayuda para sobrevivir: La compra derosarios de Belén.

Con devoción: Oración matinal en unaescuela católica del norte de India.

Ya llegaron: 500 libritos del Rosariopara niños de Manila (Filipinas).

“La misericordia de Jesús no es sóloun sentimiento, ¡es una fuerza que davida, que resucita al hombre!”

En ningún lugar están estas palabras del PapaFrancisco tan cerca de la realidad como entrelos niños no natos que van a ser asesinados.Y en el mundo hay pocos lugares donde dar-les muerte resulta tan fácil como en la ciudadde México. Pero ahí también está presente lafuerza que da vida en forma de 51 “Centrosde Ayuda para la Mujer”, fijos y móviles.Desde la fundación del primer centro (hace24 años), se han salvado casi 200.000 niños,y, entretanto existen estos centros en 15

países iberoamericanos. En todos ellos nosencontramos, enmarcado, el siguiente dicho:“La razón de existencia de este centro esCristo”. Todos sus colaboradores saben queesta iniciativa no funcionaría sin la oración.Cristo es la fuente de la misericordia. Poresta razón, está previsto erigir en México unacapilla de adoración para la labor de los cen-tros, donde se celebre a diario una SantaMisa y donde se adore el Santísimo Sacra-mento las veinticuatro horas del día. En estacapilla se pedirá misericordia para las ma-dres que han abortado, se rezará por lasalmas de los niños asesinados y por la salva-ción de quienes hacen posible el aborto a

nivel político y práctico; por el fin de la tra-gedia del aborto en todo el mundo y por losbienhechores y sus familias que harán posi-ble la oración en esta capilla. Nosotros leshemos prometido 11.500 euros. •

Uno de casi 200.000: Una madre felizcon su niño salvado.

Sin oración no funciona

Todo donativo recibido se destinará a éste o a proyectos similares, con el fin de hacer posible la labor pastoral de Ayuda a la Iglesia Necesitada.

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En Nepal, el Estado en el Hi-malaya de 24 millones dehabitantes, ubicado entreIndia y China, viven solo8.000 católicos. Ellos perte-necen a los pobres del país.“Nosotros los ayudamoscomo podemos”, nos es-cribe el P. Richard de la parroquia de la Resurrec-ción en Katmandú. “Sin los estipendios de Misa no sería posible, y sin ellosnosotros tampoco podríamos comprarnos medicamentos”, y añade que, gra-cias a esta ayuda, “los sacerdotes podemos ir de familia en familia y llevarlesbendiciones”. Según asegura, esta pequeña comunidad de católicos agra-dece “de todo corazón el sacrificio que hacéis por nosotros y por estas fa-milias”. El P. Richard y los demás sacerdotes nos han prometido que rezana diario por la Fundación y por los bienhechores y sus familias.

Necesidades, amor y agradecimiento. Vuestras cartas

Barón Johannes Heereman ,Presidente Ejecutivo

Dios los bendigaLa cantidad que les envío no puede serinterpretada como signo de riqueza ma-terial. Se trata de un pago que el Estadome debía y con el cual ya no contaba.Cuando llegó, decidí que ustedes, sinduda, sabrían mejor que yo en qué em-plearlo. Dios los bendiga a través de suFundación.

Una bienhechora portuguesa

Fuerza del BienSe puede apreciar una y otra vez cómo laIglesia está amenazada en lugares comoNigeria, por lo que es vital que no cese-mos en nuestras oraciones y nuestroapoyo. Ayuda a la Iglesia Necesitada esahora, más que nunca, una fuerza delBien.

Un bienhechor británico

Donativos y oración para necesitados Adjunto les envío un cheque por valor de200 dólares por su maravillosa labor, conla que contribuyen a erigir el Reino de

Dios en todo el mundo. Mi deseo seríapoder hacer más por todos los sacerdotesy católicos en los países devastados porla guerra y oprimidos de Oriente Pró-ximo. Gracias por todo lo que hacen. Misoraciones y mi rosario están con mis her-manos y hermanas en Cristo.

Una señora australiana

Gracias por el rosarioGracias por el maravilloso rosario queme han enviado. Precisamente hoy a me-diodía, en la retransmisión televisiva delRosario de Nuestra Señora de Lourdes –que rezo cada día–, hubo una oraciónpor los cristianos perseguidos. Tambiénlas Misas son importantes, pues noshacen buena falta para conservar nues-tra fe y la esperanza. Pronto cumpliré los84 y ya no estoy lo suficientemente firmecomo para ir siempre a Misa. No obs-tante, rezo de todo corazón por que todoslos cristianos y sacerdotes perseguidosrecuperen una vida normal.

Una bienhechora francesa

Redacción: Jürgen LiminskiEditor responsable: Kirche in NotEl Boletín es gratuito, aunque se aceptan donativos para ayudar a suenvío. Impreso en España. De licentiacompetentis auctoritatis ecclesiasticae.D.L.M.-11011-1986www.acn-intl.org

Los donativos pueden enviarse a: AYUDA A LA IGLESIA NECESITADABanco Popular 0075-0080-17-0601667548BBVA 0182-0930-34-0010800003Bankia 2038-1115-24-6000703295Banco Santander 0049-2674-59-2814342966La Caixa 2100 2415 42 0200140293

Los donativos entregados a esta Asociación sondeducibles en la Declaración de la Renta.C.I.F. n° R-2800175-H.Rogamos nos indique los cambios o errores en su dirección.

Ferrer del Río 14, Luis Antúnez 24-2º-2a, 28028 MADRID 08006 BARCELONATel. 91 725 92 12 Tel. 93 237 37 63

Pº de la Pechina 41, 8 46008 VALENCIA Tel. 96 011 22 84

www.ayudaalaiglesianecesitada.org

En Antioquía, según se puede leer enlos Hechos de los Apóstoles (11, 26),los discípulos fueron llamados porprimera vez “cristianos”. Esta ciudadturca (antes Siria) se encuentra nomuy lejos de Alepo, donde los cristia-nos viven desde hace meses en un in-fierno. Quien puede, huye de lastropas de Al Asad, de los rebeldes is-lamistas, del hambre, la miseria y lamuerte. En su día, el Cristianismo flo-recía en esta región, mientras que hoyla principal preocupación de los cris-tianos es la mera supervivencia. Laguerra siempre es un fracaso para lahumanidad, dijo el Beato Juan PabloII en relación con otra guerra en laregión: la de Iraq. También allí, loscristianos están en grandes apuros.

¿Acaso debemos limitarnos a obser-var? ¡No! Gracias a vuestra genero-sidad, podemos hacer algo más.Nosotros buscamos la forma dehacer llegar una ayuda a los refu-gios de la gente: alimentos, agua ymedicamentos. Los caminos son tor-tuosos y clandestinos, pero la ayudallega. Y hay algo más que tambiénpodemos y debemos hacer: rezar.Dios siempre nos escucha; Él conocenuestro corazón y se sabe todosnuestros nombres. Recemos por loshermanos y hermanas de la cuna denuestro nombre común.

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Siria

Con el espíritu de San Simón

Simón el Estilita, el monje de la columna, fue junto a los Padres de la IglesiaJerónimo y Agustín uno de los grandes santos del siglo V. Él vivió comoeremita cerca de la actual ciudad de los mártires de Alepo. Con su oracióny ayuno sobre una columna se convirtió, todavía en vida, en ejemplo deentrega ascética. Debido a su sabiduría, muchos acudieron a él para solu-cionar sus conflictos. San Simón mediaba, predicaba y pacificaba.

La influencia de San Simón sigue presentehasta hoy. El P. François Mourad fundócerca de Alepo una pequeña comunidadmonástica, donde enseñó a jóvenes siriosdeseosos de seguir el ejemplo del santo, yempezó a erigir un monasterio. Cuando losrebeldes islamistas ocuparon la zona entorno a Alepo, el P. Mourad se retiró a Gassanieh a un monasterio franciscano,desde donde se ocupaba de la poblacióncivil necesitada tanto cristiana como mu-sulmana. Pero, tarde o temprano, los isla-mistas también aparecerían por estemonasterio y, efectivamente, el 23 de junioasaltaron a disparos el edificio y lo saquea-ron. La gente que se había refugiado en elmonasterio huyó presa del pánico. El P.Mourad avanzó con los brazos abiertoshacia los asaltantes; quería hablar con ellos.Los islamistas lo mataron a sangre fría, ydespués destruyeron todo lo que no se po-dían llevar con ellos huyendo de allí.

Cuando cese la guerra en Siria, se necesi-tarán a personas como el P. François y susdiscípulos. Su monasterio será un oasis de

entrega. Ahora está vacío, pero se mantieneen pie como un símbolo de la presenciacristiana en un país sacudido por la guerray el fanatismo. Es el símbolo de una pre-sencia que se remonta a mucho antes delIslam y que llega hasta los orígenes delCristianismo. El Arzobispo sirio-católicoJacques Behnan Hindo, en cuya Diócesisde Hassaké-Nisibi se encuentra el monas-terio, considera que este legado espiritualimplica una responsabilidad. Él ordenó sa-cerdote al P. Mourad. “No saben lo agrade-cido que estaba este sacerdote a susbienhechores”, asegura. “Sin el apoyo deAyuda a la Iglesia Necesitada, no habríapodido erigir los muros de su monasterio.Siempre los tuvo presentes en la Patena du-rante la Misa”.

El Arzobispo considera que Ayuda a laIglesia Necesitada entiende la situación deSiria y la de los cristianos perseguidos eneste país. “Ustedes son los únicos que nosayudan en el proyecto del monasterio”.Por ello, el Obispo Hindo y el P. Françoisvolvieron a dirigirse a nosotros para la ins-

“… que es entregado por vosotros”: El P. François Mourad (izquierda) y elArzobispo Hindo en la Santa Misa.

Arriba del todo, la cruz: El monasteriode Simón el Estilita en la última fase deconstrucción.

Desde 422 hasta su muerte en 459, SanSimón vivió en una plataforma sobreuna columna. Hoy todavía se le repre-senta artísticamente en iconos.

talación de las puertas, las instalacionessanitarias y parte de la instalación eléc-trica: se trata solo de lo imprescindible.Los jóvenes monjes no vivirán encarama-dos a una columna, pero sí con el espíritude San Simón, pues pacificarán con suoración.Nosotros hemos destinado 20.000 euros aeste proyecto, lo cual no es mucho para unsímbolo de la Iglesia de los mártires y paraun oasis de oración, silencio y entrega. •

Todo donativo recibido se destinará a éste o a proyectos similares, con el fin de hacer posible la labor pastoral de Ayuda a la Iglesia Necesitada.

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Rumanía

María Radna: Fortaleza del alma para DiosLa primera capilla, que data del año1520, la hizo construir una viuda de-vota. Los Franciscanos y los creyen-tes la utilizaban para celebrar la Misa,incluso cuando gobernaban los oto-manos. En 1695, los turcos antes deirse prendieron fuego a la capilla,pero, milagrosamente, la imagen dela Virgen salió indemne. La gente si-guió acudiendo a María Radna, y laprimera gran peregrinación tuvolugar en 1709, tras la superación deuna epidemia de la peste.Desde 1750, María Radnaha sido reconocida ofi-cialmente por la Iglesiacomo lugar de peregrina-ción.

A partir de entonces, numero-sos peregrinos de toda Ruma-nía, Hungría y los Balcanesperegrinaban a ver a la Madrede Dios en la Diócesis de Ti-misoara, y María Radna seconvirtió en un santuario na-cional parecido al de Czesto-chowa en Polonia, Altöttingen Alemania, Lourdes en Francia o Fátimaen Portugal. Los comunistas pusieron fin altorrente de peregrinos, pero no pudieron aca-bar con la adoración clandestina. El monas-terio franciscano adyacente lo convirtieronen una residencia de ancianos. El cambio político de 1990 trajo venturas ydesventuras. Muchos católicos emigraron,

por lo que la diócesis pasó detener 151 parroquias a solo 73.Ciertamente, desde hace algu-nos años vuelven a acudir delejos los peregrinos, inclusolos suabos del Danubio deAlemania, pero el problemaradica en cómo atenderlos. Nohay estructuras para la aco-gida, la formación, las jorna-

das de retiro o los ejercicios para sacerdotes.La Madre de Dios es el centro, pero sumanto tiene agujeros. El ingreso en la UniónEuropea ofreció la posibilidad de erigir estasestructuras y de zurcir los agujeros, pues laUE subvenciona la rehabilitación de lugaresde interés turístico y cultural, y María Radnalo tiene de sobra. El P. Werenfried hubiera

dicho que se trata de una fortaleza para Dios.Para la gente de la región, “la peregrinacióna María Radna es el punto culminante detodo el año”, asegura el Obispo, Mons. Mar-tín Roos. Cada parroquia tiene asignado supropio día de peregrinación, en la que “ex-perimentan la comunidad de los creyentes yregresan fortalecidos”. Sobre todo para la ju-ventud es un acontecimiento que deja huella.“Con María se puede superar algún que otrobache”. Tras todo lo que han vivido, los ha-bitantes tienen hoy “más confianza en laIglesia que en la política”. Esto lo revelan lasencuestas.

Cada día acuden más de 200 peregrinos yeste número podría aumentar bastante. LaUE ve en María Radna un proyecto de desarrollo regional y está dispuesta a sub-vencionar con los millones necesarios larehabilitación de la iglesia y el monaste-rio, siempre y cuando la diócesis pague laparte obligatoria de un 2% y se ocupe delos aspectos puramente pastorales. El pro-blema es que este 2% equivale a más demedio millón de euros, y que la parroquiay la diócesis son demasiado pobres parapagar esta cantidad. Por esta razón, elObispo pide limosna entre sus Hermanosen Europa Occidental y entre fundacionescomo la nuestra. Nosotros le hemos pro-metido 100.000 euros para la rehabilita-ción de la fortaleza del alma de MaríaRadna. •

Cada vez acuden más: Hay peregrinaciones desde mayo hasta la fiesta de la Virgen del Rosario en octubre.

La iglesia de peregrinación: Juan Pablo II la declaró

basílica pontificia menor.

La imagen milagrosasobrevivió al incendiopor los turcos.

Todo donativo recibido se destinará a éste o a proyectos similares, con el fin de hacer posible la labor pastoral de Ayuda a la Iglesia Necesitada.