44 LA VANGUARDIA SOCIEDAD MARTES, 25 MAYO 1999

Un banco sin dinero que sólo factura tiempoUna entidad lleva un año en Horta-Guinardó reinsertando en el mercado laboral a jóvenes y amas de casa

ANTONIO ORTIBarcelonaH ay un banco en

Barcelona que esalérgico al dinero.Se trata del Bancodel Tiempo, unproyecto auspicia

do por la Comisión Europea quepermite intercambiar servicios prescindiendo del vil metal. Sus principales accionistas son amas de casa,jóvenes sin empleo y personas deocupaciones muy diversas —acupuntores, médicos, ingenieros, etcé

tera— que han encontrado en el trueque una forma de acceder a una serie de servicios que de otra formales quedarían vedados. Al igual quecualquier entidad financiera, el Banco del Tiempo dispone de una sedecentral —ubicada en el Centro deCultura Popular de Horta-Guinardó—, una base de datos, talonarios de cheques y saldos en los ques detallan las horas que otras personas nos han dedicado y las que hemos ofrecido a cambio.

Su modo de funcionamiento essencillo: tan sólo hace falta inscribir-se en una especie de registro y deta

llar cuáles son nuestras habilidades—hay quien repara electrodomésticos o coches, pasea perros, restauramuebles facilita asesoramientofinanciero—. A cambio, el Banco delTiempo ofrece una relación de socios —alrededor de un centenar— yde su respectiva especialización. Si,por ejemplo, Jordi Llompart deseafavorecerse de los servicios que presta Joan Gisbert, fontanero de profesión, sólo tiene que llamarle por telé•fono y acordar un momento paraverse. Cuando la tubería atascadavuelva a funcionar, Jórdi extenderáun cheque a Joan en el que consta-

rán las horas de.trabajo dedicadas atal menester. Con él podrá favorecerse del sinfín de servicios que elBanco del Tiempo ofrece, mientrasque Jordi, que da clases de inglés,quedará “endeudado” con los otrossocios por tantas horas corno hayadurado la reparación.

Así, personas con recursos económicos limitados, pero que disponende tiempo libre, pueden relacionar-se entre sí en condiciones de igualdad, ya que los talonarios tienén como única moneda de cambio la hora de trabajo y no hay diferencias enel precio por muy distinta que sea la

cualificación profesional. Si bienCalvino fue el primero en preconizar que “el tiempo es oro”, no ha sido hasta hace muy poco cuandouna serie de municipios italianos,como Venecia o Módena, se han decidido a impulsar estos singularesbancos que reniegan por definicióndel lucro y de las plusvalías en favorde la solidaridad social.

Según las entidades que apadrinan el proyecto, esto es, el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales,el Instituto de la Mujer, el Ayuntamiento de Barcelona, la ONG Salud y Familia y el Centro de CulturaPopular Montserrat —su ejecutorfinal—, el retrato robot del usuariose relaciona con una mujer —en el74% de los casos— que vive en unporcentaje muy alto en Horta-Guinardó —no se pagan los desplazamientos— y que se dedica preferentemente a la asistencia domiciliaria—hay desde canguros hasta cuidadores de ancianos— y a las labores domésticas. Tal vez por ello, TeresaBono, una de las cuatro mujeresque atienden el escaso papeleo quegenera la entidad, señala que suprincipal preocupación es efectuarcampañas por el barrio para quetambién los hombres se interesenpor un banco que ofrece como único dividendo ser útil.

El trueque está experimentandouna auténtica eclosión en España(en Barcelona se inició con el Intercanvi d’Ajuts i Serveis, en la Esquerra de lEixample) de la mano de un

El trabajo sólo se valora porlas horas invertidas, no por

la preparación que serequiere para hacerlo o la

dificultad que entrañe

buen número de cooperativas que.han rescatado un sistema de intercambio comercial que ya ensayaroncon éxito las sociedades primitivas.La Troca (en Vilafranca delPenedés), El Foro y Tercer Sector(en Madrid), Taula de Canvis (Mallorca), El Plan (Ibiza) o Cambalache (Burgos) disponen de monedapropia —nodín, fondón, iris, varear-se...— y posibilitan a sus socios ya nosólo acceder a ciertos servicios, sinotambién a productos ecológicos—hortalizas, frutas, miel, vino—.

Pero esto no es nada en relacióncon lo que está pasando en EE.UU.,Argentina, Suiza o Australia, dondeel trueque mueve anualmente milesde millones de pesetas. En EE.UU.,38 de los 50 estados de la Uniónhan realizado emisiones de dineroparalelas para restar protagonismoal todopoderoso dólar. Así, con billetes Horas de Itaca —una ciudadde 24.000 habitantes situada a 300kilómetros de Nueva York— puedepagarse el alquiler de la vivienda,darse un masaje, aprender japonéso echarse el tarot. El objetivo, tantoallí como en España, es el mismo:que personas en paro, que no tienendinero, puedan satisfacer sus necesidades utilizando sus capacidades,que a veces el mercado no valora..

exterior. El importe mínimo aproximado de financiación es de 750 millones de pesetas (4,51 millones de euros)o su contravalor en divisas. Las operaciones se realizan a medio y largo plazo y a un tipo de interés fijó o variable.

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