articulo implantes-cerámica

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Prácticamente la totalidad de las marcas decerámica definen en sus técnicas de estratifi-cación de la cerámica sobre metal, la impor-tancia de las dentinas opacas para “enmas-carar” la antiestética opacidad del opaquer.En mi opinión esto es un tremendo error, yaque, lo único que conseguimos actuando asíes acercar la opacidad a la superficie y porconsiguiente renunciar a conseguir la nece-saria profundidad de la que hablábamos alprincipio. Por lo tanto mi consejo es que, sal-vo en contadas excepciones, no se utilicenlas dentinas opacas para estos fines. Única-mente considero útiles estas masas en deter-minados efectos y en algunos casos comotransición de la estructura hacia el bordeincisal, aunque también para eso existenmejores alternativas como dentinas cromáti-cas, dentinas fluorescentes, dentinas túrbiaso una combinación de varias de ellas.

Caso 1

Donde más se evidencia el problema detranslucidez y profundidad es en la clásicatécnica de metal-cerámica al tener unabarrera opaca entre el centro del diente y lasuperficie de éste que anula totalmente latranslucidez del conjunto.

Afortunadamente no tenemos una “luz” enel fondo de la boca que evidencie éstedefecto, y por lo tanto tenemos posibilida-des de simular un aspecto natural.

Es habitual que en los estuches de cerámi-ca de todos los fabricantes que existen en elmercado, contengan diferentes tipos demasas cerámicas, dentinas de diferentestipos, incisales con o sin opalescencia,transparente y las llamadas dentinas opa-cas. Voy a comentar algo acerca de estasúltimas masas.

Para intentar simular la profundidad de los dientes naturales

TUD (TransparentUnder Dentin).

Siempre se habla de transparencia o translucidez de los dientes naturales, pero una característi-ca que se pasa por alto habitualmente es la profundidad de dicha translucidez. Si observamos aten-tamente un grupo de dientes naturales sanos ( ejercicio muy recomendable ), percibiremos unaserie de matices, contrastes y diferentes tonos cromáticos que no se encuentran en la superficieo cerca de ella, sino al contrario, se hallan a diferentes niveles de profundidad. Estos son los efec-tos que debemos intentar copiar si nuestro objetivo es conseguir restauraciones de aspecto natu-ral. Esto parece fácil de decir y mucho más complicado llevarlo a cabo. Voy a tratar de explicar latécnica que yo utilizo, bastante simple en su concepto, pero muy efectiva. En mi opinión siemprees importante tener un punto de partida y claridad de conceptos desde donde poder desarrollarnuestras capacidades.

Un artículo de:Javier Ruiz Giner, Zaragoza/España

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Fig. 1: Diferentes tonosde tranlucidos.

La alternativa que yo utilizo para las denti-nas opacas es todo lo contrario, es decir,masas translucidas cromatizadas en distintaintensidad según el efecto deseado (fig. 1).El croma incorporado a la masa translúcida,compensa en cuanto a color se refiere, lamenor capa de dentina. Por lo tanto, coloca-mos la masa transparente encima del opa-quer y debajo de la dentina. TUD (transpa-rent under dentin).

Para comprender el efecto del que estoyhablando, solo hay que colocar un objetodetrás de un cristal o plástico esmerilado, yalejarlo paulatinamente de la superficiepara ver como se difumina la silueta delobjeto (figs. 2 a la 4 ). El cristal en cuestión

actúa como un “velo”, y es así como lo hacenuestra dentina en la corona. El espacioentre el cristal y el objeto, al ser aire total-mente transparente simula nuestra masatranslúcida, aunque ésta al estar ligeramen-te pigmentada, mejora el difuminado delfondo.

Vamos a ver dos ejemplos prácticos. En elprimer caso tenemos una combinación deZirconia y metal (figs. 5 y 6). Sería unatemeridad por nuestra parte elaborar unasestructuras posteriores de zirconia en estetrabajo dado el poco espesor de los conec-tores (fig. 7). Prácticamente la totalidad delos fracasos de la zirconia que hemos tenidoen nuestro estudio, se ha debido a dos moti-

Fig. 2: Efecto TUD 1.

Fig. 3: Efecto TUD 2. Fig. 4: Efecto TUD 3.


vos principalmente; errores en la manipula-ción del material y del protocolo, el másimportante en mi opinión, errores en laindicación de algunos trabajos.

En la (fig. 8) vemos la cerámica que vamosa usar para cada uno de los materiales.Mismas coloraciones y pigmentos, diferen-tes coeficientes de expansión térmica.Primero vamos a estratificar los cuatro inci-sivos de zirconia con una estratificaciónmuy sencilla, pues así lo requería el caso. Loimportante es ver como se pueden “inte-grar” (palabra mágica) diferentes materia-les de una manera sencilla (figs. 9 a la 17).En los sectores posteriores vamos a aplicarla técnica que comentábamos anteriormen-

Fig. 5: Estructuras. Fig. 6: Estructuras.

Fig. 7: Altura de conector.

Fig. 8: Material utilizado. Fig. 9: Dentinas coloreadas.


Fig. 10: Dentina. Fig. 11: Dentina.

Fig. 13: Vista palatina.Fig. 12: Transparente.

Fig. 14: Incisal. Fig. 15: Bandeja de cocción.


te (TUD). En las (figs. 18 a la 20) hemoscolocado únicamente dentinas coloreadassobre el margen y transparentes encima delopaquer. Los tranparentes coloreados opor-tunos se consiguen mezclando una masaWindow (CL-W) con diferentes saturacio-nes de pigmentos IN-OVER, que son losque se utilizan en origen para colorear lasdiferentes dentinas (fig. 21). En la (fig. 22)vemos dos discos de transparente coloreadoa la izquierda y en la derecha, dos discosiguales cubiertos con un “velo” de dentinade 0,2 mm. Se puede observar la capacidadde escamoteo que tiene esta combinaciónde materiales, teniendo en cuenta que loque queremos disimular en este ejemploson unas letras negras.

Fig. 16: Bizcocho. Fig. 17: Visión palatina.

Fig. 19: Dentinas coloreadas. Fig. 20: TUD.

Fig. 18: Dentinas coloreadas.


Cubrimos con dentinas, translucidos y dife-rentes incisales para completar formas (figs.23 a la 34) y conseguir el bizcocho (fig. 35 y36). Se glasea y texturiza (figs. 37 a la 41).Trabajo recién colocado en la boca. Seobserva la poca diferencia de integracióndel conjunto entre un material y otro (fig. 42y 43 ).

Fig. 21: IN-OVER.

Fig. 23: Colocación de dentina.

Fig. 24: Dentina completada. Fig. 25: Dentina completada.

Fig. 22: Efecto escamoteante.


Fig. 26: Vista oclusal.

Fig. 28: Transparentes. Fig. 29: También en cara oclusal.

Fig. 30: Incisales. Fig. 31: Anatomía completada Dcha.

Fig. 27: Transparentes.


Fig. 32: Anatomía completada Izda.

Fig. 34: Oclusal. Fig. 35: Después de la cocción.

Fig. 36: Bizcocho completado. Fig. 37: Glaseado y pulido.

Fig. 33: Oclusal.


Fig. 38: Glaseado y pulido.

Fig. 40: Metal o Zirconia? Fig. 41: Zirconia o Metal?

Fig. 42: Colocación. Fig. 43: Borde incisal.

Fig. 39: Degradación de color.


Caso 2

El segundo caso es una rehabilitación sobreimplantes de conexión externa BTI, y se haprogramado una estructura de zirconiacementada sobre muñones metálicos cera-mizados y fresados debido a la divergenciade angulación en el eje de inserción de laschimeneas de los implantes. El recubri-miento de los muñones ha sido completadoparcialmente con cerámica rosa en la zonagingival debido a la necesidad de recons-truir en la prótesis la gran reabsorción óseasufrida por la paciente a lo largo del tiempo(figs. 44 y 45). En las figuras 46 y 47 vemosla estructura de zirconia antes y después de

la cocción de wash con masas fluorescentesen la zona de diente y no fluorescente en elárea de lo que va a ser encía.

Aunque existen materiales de infiltraciónde la zirconia de color “rosado”, mi prefe-rencia es estratificar la cerámica de encíasobre fondo “marfil”. Al fin y al cabo en elentorno intraoral el soporte de la capamucosa que deseamos copiar es tanto en elmaxilar como en la mandíbula, hueso. Losdistintos matices en el color de la encía, sondebidos a los distintos niveles de vasculari-zación y grosor de cada zona gingival.

Fig. 44: Muñones ceramizados. Fig. 45: En el modelo.

Fig. 46: Estructura de Zirconia. Fig. 47: Wash.


Vamos a empezar la estratificación con den-tina coloreada en la zona donde estará elmargen gingival de los dientes y la caraoclusal-palatina de éstos. (figs. 48 y 49)Seguimos con las masas transparentes condiferente coloración sobre el núcleo (TUD)(fig. 50), y completamos el primer nivel deestatificado con diversas dentinas fluores-centes, que darán distintos matices de pro-fundidad (fig. 51). Se cubre el primer nivelcon una capa de dentinas más o menos

translucidas, para completar el segundonivel cromático (figs. 52 y 53).

Por último se cubre la dentina con masastransparente e incisales hasta completar lamorfología anatómica deseada en el tercernivel. Gracias a la utilización de colorantesorgánicos en la mezcla de la cerámica,podemos observar mucho más gráficamen-te en las imágenes las diferentes masas uti-lizadas (figs. 54 a la 57).

Fig. 48: Dentina cromatizada. Fig. 49: Dentina cromatizada.

Fig. 50: TUD. Fig. 51: Dentinas fluorescentes.


Fig. 52: Dentinas. Fig. 53: Efectos.

Fig. 54: Transparentes e incisales. Fig. 55: Dentinas translucidas.

Fig. 56: Dentinas translucidas. Fig. 57: Incisal oclusal.


En la (fig. 58) se observa la primera capa deencía y la inevitable corrección de los dien-tes, debido a la contracción de la cerámicadurante el proceso de cocción. Segundo ymás importante estratificado de las masas“rosas” y pequeñas adiciones de borde inci-sal (fig. 59). Después de glasear y pulir lacerámica, “salen a la luz” los distintos mati-ces y pequeñas sutilezas que hemos idointroduciendo en los distintos niveles de laestratificación (figs. 60 a la 68).

En las fotos de la colocación de la prótesis enel paciente se percibe desde el primermomento las buenas sensaciones de integra-ción, cosa que tiene un mérito limitado enestas rehabilitaciones de cierta envergadura

Fig. 58: 1ª cocción rosa, 2ª cocción blanca.

Fig. 60: Acabado.Fig. 59: 2ª cocción rosa, 3ª cocción blanca.

Fig. 61: Diferentes tonos de encía. Fig. 62: Pequeños matices.


Fig. 63: Pulido manual. Fig. 64: Limitación de brillo.

Fig. 65: Vista general. Fig. 66: Efectos en palatino.

Fig. 67: Translucidez. Fig. 68: Desgastes oclusales.


(figs. 69 a la 72). Si se me permite un símiltaurino diré que, todos los que nos dedica-mos a esto sabemos que los toros mas peli-grosos hay que lidiarlos en la arena de lapequeña rehabilitación y del diente único, yasí como el matador de toros, para conse-guir éxito y satisfacción en esos casos, esimprescindible correr ciertos riesgos.

Conclusión

En ocasiones las cosas se nos ponen real-mente difíciles y creemos ser incapaces dealcanzar determinados objetivos que pare-cen solo al alcance de algunos “privilegia-dos o “divinos”. Utilizando una metáfora sepodría decir que, cuando deseamos alcan-zar algo que está colocado en lo alto de la

estantería más alta, nuestra máxima preo-cupación debe ser poseer la escalera lo sufi-cientemente larga que nos permita conse-guir nuestros anhelos. La capacitación yhabilidad técnica necesaria para alcanzarnuestros deseos están representados en esteejemplo por la escalera. Cuanto más altoqueramos llegar, más larga deberá ser ésta.No hay nada comparable en la vida de cual-quier profesional con vocación, a la satisfac-ción que se percibe ante un trabajo bienhecho y ese cúmulo de sensaciones ante loque alguien definiría como una aportaciónimportante. Deseo agradecer al Dr. Carmelo PlazaTolosa y a su equipo de la PoliclinicaBucodental su buen hacer en la consecu-ción de estos casos. �

Fig. 69: Colocación. Fig. 70: Aspecto de la superficie.

Fig. 71: Sonrisa. Fig. 72: Satisfacción.


Datos biográficosJavier Ruiz Giner es un artesano dental y director técnico del Laboratorio Dental EDK y del Estudio Artesano de Estética Dental JR.Ha publicado diversos artículos en revistas nacionales e internacionales. Dictante de cursos de formación y conferencias. Miembrodel Club Tecnológico Dental. Miembro y asesor técnico de Kalima Group Dental División. Especialista en cerámica dental sobremetal y dióxido de zirconio.

Dirección de contacto:Javier Ruiz Giner - C/Benito Feijoo 10-B • 50011 ZaragozaTel. 976 300200 - Movil 636 456356E-Mail: [email protected] - [email protected]

Javier Ruíz Giner

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