Ariananda Mahasaya Ridishta.

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Vuelvase rico meditandoAriananda Mahasaya Ridishta

Caracas, Venezuela 2018

NDICE

Prologo ………………………………………………………………………………….3

Las cadenas del conformismo………………………………………………...…………4

Nuestro problema más común ……………………………………………………..……8

¿Quién soy? …………………………………………………………………….………10

¿Cómo más me ayudará esta técnica de meditación?.......................................................18

Que es meditar…………………………………………………………………….……21

Preparación para la práctica………………………………….....………………………22

Callar la mente…………………………………………………………...……..………22

Controlar la respiración ……………………………………………….………..………23

Estado físico…………………………………………………………………….....……26

Ver a través de los parpados…………………………………………...………..………28

Primera practica: ver el futuro cercano…………………………………...………..……30

¿Con quién me estoy comunicando? ………………………………..…………….……34

Segunda práctica: obtener respuestas…………………………………………..….……38

Aprender a escuchar………………………………………………………………….…43

El mundo de los sueños. ………………………………………………………..………46

Variando las señales…………………………………………………………..…...……50

Tercera práctica: combinando las señales………………………………………………51

¿No estoy progresando? ……………………………………………………………..…56

Señales de que estamos progresando……………………………………………………58

Comunicación a través de numerología…………………………………………………59

Ejercicio de protección psíquica. ……………………………………………….………61

Cuarta Practica: defensa psíquica. ……………………………………………...………63

Parálisis de sueño………………………………………………………………….……64

Quinta Practica: Romper Parálisis de Sueño……………………….……...……………67

Cuarta dimensión o mundo astral………………………………………….……………68

Sexta Practica: Desdoblamiento astral…………………………………….……………72

Principios fundamentales …………………………………………….……………...…78

Ley de correspondencia…………………………………………………………………80

ley de resonancia, aprende a vibrar…………………………………………….….……84

ley de polaridad, los dos lados de la moneda…………………………………..……..…92

¿Qué es el amor incondicional? ……………………………………………………...…94

El miedo, nuestro mayor enemigo…………………………………………………..…101

Ley del tiempo, decantaciones cuerpos celestes. ………………………………….…..104

Ley de causa y efecto, el karma. ……………………………………………..…….….110

El ego………………………………………………………………………….………114

Ley del Dharma. …………………………………………………….………...………115

Ley de libre albedrio, ¿somos realmente libres? …………………….…….….………117

Mi mensaje …………………………………………………………..………………..120

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PROLOGO

Mi querido amigo lector, por unos segundos céntrese en este instante, interiorice en

sus emociones, y tómese unos segundos para pensar, cuáles son esos problemas que

aquejan su vida; y que en este preciso momento, lo hacen sentir frustrado, lo hacen sentir

agotado, lo hacen sentir triste y hasta desesperanzado; cuáles son esos problemas que

vinieron desde sus recuerdos a este preciso momento y que no lo hacen sentir en plenitud;

cuáles son las situaciones en su vida que le impiden sentirse completamente realizado en

este momento de su vida, vaya a su interior y analice.

¿Qué le quita la alegría?

¿Qué le quita la paz?

Tal vez sean problemas económicos o afectivos, tal vez inconformidad con su trabajo,

problemas de salud, sean cuales sean ya no importarán; porque desde este momento ya

no importa cuál sea la naturaleza de los problemas ha traído hasta aquí; si han sido

problemas que han afectado su vida desde hace mucho tiempo o desde hace poco, si ha

luchado tanto que llego al punto de sentir que ya no hay esperanzas. Desde este instante,

eso ya queda atrás, desde este instante, ya no se sentirá perdido o abrumado ante las

condicionantes que lo trajeron hasta este libro; puesto que, desde este momento,

encontrará entre estas páginas una herramienta interna y muy especial de su ser, una que

había ignorado que siempre ha existido en usted, y que le permitirá poder transformar su

vida por completo; llegando a un punto de felicidad, de plenitud, de éxtasis, de paz, que

nunca había podido alcanzar hasta ahora.

Desde este instante, siéntase animado y complacido porque usted desde ahora empieza

una nueva etapa más feliz en su vida; usted empieza desde ahora a recorrer el camino que

lo llevará hacia su más grande estado de plenitud.

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Las cadenas del conformismo.

“En qué momento llegamos a acostumbramos tanto a la infelicidad, que la hicimos

parte de nuestra vida”.

El ser humano se define así mismo como un ser de hábitos, nos acostumbramos a

recrear las mismas acciones que nos producen algún tipo de estimulación positiva, como

por ejemplo, elegir el mismo patrón de vestuario con el que nos identificamos y nos

sentimos cómodos, elegir el mismo tipo de comida que nos cause placer, disfrutar el

mismo tipo de series televisivas o películas; incluso tendemos a elegir al mismo patrón

de amigos y parejas que hayan causado una respuesta positiva en nosotros. Sin embargo,

esta naturaleza por sumir nuestras vidas en un sin fin de hábitos, ha provocado que nuestro

cerebro se sienta tan identificado con este patrón de conducta, que llegamos a incurrir en

él de forma inconsciente, habituándonos no solo a las cosas o situaciones que nos generen

estímulos positivos, sino que llegamos a habituarnos a situaciones en nuestras vidas que

nos causan conflictos emocionales, físicos y mentales; y llegamos a estar tan

acostumbrado a este patrón de conducta, que en ocasiones nos cuesta darnos cuenta de lo

acostumbrados que estamos a sufrir.

Sin embargo, esta no es más que una actitud aprendida, mas no es, una herramienta

interna del ser, que le permita coexistir en armonía con su ambiente, ya que debe

comprender usted, que el estado natural del ser es la “FELICIAD”; mas no es, la

aceptación de situaciones incomodas y dolorosas para nosotros, a través de un

conformismo basado en un hábito o en la resignación; ya que el hábito conlleva al

conformismo, cuando nos resignamos a habituarnos a hacer parte de nuestra vida

situaciones que nos hacen infelices.

Saque de su cabeza que debe conformarse a liderar de una manera dolorosa con una

situación que no le causa felicidad, saque de su cabeza que usted no puede cambiar las

situaciones que le rodean y que le causan descontento, saque de su cabeza que usted no

tiene el poder de transformar su entorno en un lugar más agradable para habitar, y saque

de su cabeza, que debe conformarse con esos patrones de conducta propios, que lo hacen

incurrir en situaciones que son perjudiciales para usted mismo; situaciones como por

ejemplo: tener un mal temperamento que lo haga estallar en ataques de rabia, y que lo

aleje de sus amigos y seres querido.

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De igual manera, también es típico escuchar opiniones como, “Soy de tal manera, y

no puedo hacer nada para cambiarlo”; el nacer de una manera determinada no implica

que usted deba conformarse con ser así el resto de su vida; no debemos habituarnos a

patrones de conducta que son perjudiciales para nuestra propia felicidad, no debemos

habituarnos a ser nuestro propio enemigo, no podemos conformamos con ser infelices;

acostumbrarse a la infelicidad no lo hará a usted feliz, acostumbrarse a la infelicidad no

es vivir en equilibrio.

La naturaleza humana podría considerarse una maravilla evolutiva, sus patrones de

conducta lo han llevado a ser la especie más eficiente del planeta, pero que tal si estos

mismos patrones se han vuelto un arma de doble filo; el instinto de supervivencia es algo

que compartimos con todos los seres vivientes, se consigue tanto en una ardilla como en

un insecto, en un pez, como en un ave; sin embargo, esa misma capacidad de raciocinio

tan maravillosa que contiene nuestra psique, hoy en día nos limita a encontrar nuestra

propia felicidad. Nos adaptamos y nos condicionamos a sistema de súper vivencia que

nos hacen daño, y perdemos el enfoque primordial de esta experiencia; “la vida es un

privilegio, no una obligación”; una vida basada en un mero instinto de súper vivencia y

adaptación, no nos hace diferentes a un animal, solo nos pone en situaciones más

elaboradas.

Una ardilla en su ambiente natural, debe acumular comida para no morir de hambre en

periodos de escases; según su percepción de tiempo de vida, trabajará incansablemente

durante la mayor parte de ella, para recolectar sin descanso los alimentos necesarios para

sobrevivir en las adversidades. Ahora, ¿Qué tiene de diferente un hombre que acude a un

trabajo durante treinta años de su vida, para garantizarle una pensión que le asegurará

recursos para no morir de hambre en su etapa de vejez?

La ardilla no tiene la capacidad cognoscitiva de un ser humano, ella no puede mirar

más allá de lo que su instinto evolutivo la conlleva a entender como patrón de vida. Sin

embargo, cada ser humano puede elegir en cada instante el tomar consciencia, si es su

vida realmente la experiencia que siempre soñó que seria, o si se ha sumido en un letargo

que no le permite si quiera darse cuenta que solo ha respondido a su instinto más básico

y más animal, el instinto de adaptación.

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Si el propósito de la existencia en este plano material fuera la supervivencia nuestros

cuerpos nunca encontrarían la muerte; el propósito del tiempo es degenerar la materia,

transcurriendo la existencia en un constante proceso de cambio infinito, en un juego

cíclico que le permite a un ser, entrar y salir de cada circunstancia existencial en la que

se ve envuelto.

Miles de situaciones conformarán nuestra experiencia de vida, miles de condicionantes

que nos provocarán felicidades o tristezas, pero el mayor acto de desamor que un ser

puede realizar hacia sí mismo, es conformarse con una existencia triste y dolorosa al hacer

parte de su vida cotidiana esas circunstancias que le causan pesares.

Entre en consciencia y piense: cuando fue que ocurrió, en qué momento llego a

quererse tan poco, que acepto que la tristeza y el dolor se volvieran parte de su vida.

Ya es hora de que se empodere, ya es hora de que entienda que usted merece ser feliz,

merece vivir en plenitud, vivir en permanente equilibrio con el entorno que lo rodea. Ya

es hora que usted entienda, que vivir apegados a situaciones incomodas por miedo a

perder lo poco que usted cree que tiene, eso no es vivir, eso jamás será vida.

Deje de aferrarse a situaciones que no le benefician, deje de aferrarse a su propio dolor,

póngale un alto a su instinto más básico y animal, haga un acto de amor por usted mismo,

y ábrase a sacar de su vida la infelicidad. El hombre que está naufragando en alta mar, y

le teme a darle la mano a un rescatista por miedo a soltar el flotador al que se aferra tan

desesperadamente, no tiene futuro, su futuro es hundirse por su propio miedo.

Sea más grande que su miedo, domínelo, vénzalo, no permita que siga condicionando

su vida haciendo que se aferre a aquello que no lo hace feliz. Para poder volar, debemos

soltar el peso extra; el peso que su propio miedo al cambio genera.

Todos los seres humanos perseguimos la felicidad, la idealizamos, la condicionamos,

la hacemos nuestra más grande meta, sin darnos cuenta, que a veces nos ponemos a

nosotros mismos en situaciones que nos alejan de ella, que la vuelven solo una ilusión, y

tendemos a esperar que un poder mayor a nosotros nos la materialice algún día; y de esta

manera, nos resignamos a que en nosotros no está el poder de cambiar nuestro entorno o

a nosotros mismos; nos lo dicen constantemente las religiones que buscan destruir nuestra

propia valoración para convertirnos en ovejas de su rebaño, en seres que necesitan su guía

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y dominio, condicionándonos así, a pensar que solo dios resolverá nuestros problemas

existenciales, pero hay que razonar, que ya dios hizo lo que debía hacer por usted, al darle

herramientas internas que le permitan alcanzar los más grandes sueños de su alma. Ya

dios obro al crear las sincronías que lo trajeron a encontrarse leyendo estas páginas del

presente material, que no tiene otro objetivo más, que darle a usted las herramientas

necesarias para que cambie por completo su vida, para que la alinee con el propósito que

siempre debió haber tenido, para ayudarle a usted, a encontrar su verdadera felicidad.

El acto de amor más grande que dios pudo haber hecho por usted, fue entregarle las

herramientas internas que lo permitan transformar su vida, en lo que su ser desea que sea.

Ahora sumase en un acto de amor propio y descubra lo que siempre ha habitado en usted,

y que, se convertirá, desde este momento en adelante, en la fuente de la mayor felicidad

y prosperidad que alguna vez haya experimentado.

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Nuestro problema más común.

El mundo que nos rodea se vuelve cada día más hostil, la constante sobre población y

escases de recursos impulsan al ser humano a sumir su vida en tareas y obligaciones

diarias que, aunque son necesarias para subsistir, absorben su tiempo por completo en lo

que se ha transformado en una carrera por la supervivencia. Razón por la cual dejamos

de disfrutar las maravillas y placeres que nos ofrece este plano existencial.

Entre tantos recursos que un ser humano puede atesorar, el tiempo, resultará siempre

el más preciado; Nikola Tesla, físico, inventor, ingeniero eléctrico, ingeniero mecánico y

el padre de la corriente alterna, es el responsable de los avances tecnológicos que fundaron

las bases de la era tecnologíca moderna. Él entendía que un ser humano sumido en las

responsabilidades cotidianas que implica existir en este plano vivencial, estaba tan

sumido en las condicionantes tan fuertes que implica subsistir en un mundo cada vez más

competitivo y cruel, que perdía de vista la razón más importante por la cual un ser humano

encarna en este plano, que es la autorrealización personal del ser; debido a esto, dedico

toda su vida al descubrimientos de nuevas tecnologías que permitieran hacer la vida más

fácil para todas las personas.

Ya que la vida en los años previos al descubrimiento de la energía eléctrica era muy

dura, imagínese ahora, todo el aparataje que pudo haberle implicado a usted, hacer una

acción sencilla, como por ejemplo, llevar luz a un hogar; o imagínese, preparar unos

alimentos cocinados bajo un fogón de leña, y todo lo que esto le implicaría, cuanto tiempo

no le habría consumido a diario realizar acciones tan sencillas en comparación con su

situación actual. Por ende, para Nikola Tesla, llevar energía eléctrica de forma gratuita a

todo el mundo, era su visión, era su sueño. De esta manera, al mejorar la calidad de vida

de las personas, estas pudieran tomarse el suficiente tiempo para interiorizar, para

profundizar en las características de su propio ser, y así, ir redescubriéndonos en un

camino de autopercepción y desarrollo interior, que solo nos llevaría a la verdadera

felicidad, a la felicidad plena, libre de condicionamientos externos.

Pero por muy nobles y loables que fueron sus intenciones, gracias a la avaricia, a la

inconsciencia, a la codicia, y a los antivalores que llevan en su interior algunos seres

humanos, estas tecnologías de energía gratuita, aún siguen sepultadas a la luz de la nueva

era tecnológica; esto por su puesto, para servir a intereses económicos de personas que,

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al concentrar el poder económico, pretenden dejar a sus seres cercanos un legado de

concentración de capital, más que dejar un legado a la humanidad.

Cada persona posee una cualidad, cada ser posee algún tipo de conocimiento, que,

usándolo de manera adecuada, puede aportar algo al desarrollo de la humanidad; y es mi

deber como ser humano apoyar este tipo de iniciativas progresistas, de manera que, yo

aporto mi grano de arena desde este instante, en el que usted está adquiriendo un nuevo

tipo de conocimientos, que le están permitiendo resolver sus más íntimos problemas, que

se han vuelto una condicionante de su felicidad, de su alegría, de su disfrute por esta vida.

Llevarlo hacia la resolución de todas sus afecciones con una sencilla técnica de

meditación, no parte desde el deseo de volver a todo el mundo millonario, no es mi

intención dejar en quiebra a todas las agencias de loterías; pero si es mi intención,

ayudarlo a hacer su vida más fácil, con mayor tiempo libre de disfrute, con mayor calidad

de vida, para usted y para los suyos; y esto lo lograremos en primera instancia, con la

resolución de esos problemas económicos que tanto nos esclavizan a una vida de trabajo

y esfuerzo constante.

Así que acompáñame en esta aventura y descubra cómo, usando la meditación como

aliada, logre no solo resolver mis problemas económicos, sino alinearme a mi propósito

de vida.

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¿Quién soy?

Era un joven de unos treinta y tantos, que vivía en el país más rico y a la vez más pobre

del planeta, “VENEZUELA”; en los tiempos del populismo y las dictaduras disfrazadas,

la situación de mi país llevo a la sociedad al borde de la hambruna y la miseria; soy de

una pequeña familia de cuatro miembros, madre, padre y un hermano mayor, aunque

contemporáneo a mí edad; y aunque todos éramos profesionales y contábamos con

nuestra propia compañía que fabricaba equipos electrónicos para el hogar, la situación

económica en mi país, nos llevó a situaciones como vernos en la necesidad de salir de

pesca para poder tener algo que comer, al menos una vez al día; situación por la que por

muchos años atravesaban la mayoría de mis compatriotas.

Al borde de la desesperación por no tener esperanzas de cómo cambiar nuestra

situación económica, y atravesando por ciertos problemas emocionales de índole

romántica, no solo me abrí a experimentar otras realidades que pudieran darle respuesta

al porque mi vida iba hacia el caño con descontrolada precipitación; sino que me propuse

a abandonar mi sistema de creencias, ya que basado en afirmaciones como (Cosas buenas

les suceden al bueno y justo de corazón, y cosas malas a quien daña a sus semejantes) no

le encontraba sentido a muchas realidades de la existencia humana.

Puesto que me había dado cuenta que justo en los momentos donde estaba muy

somnoliento, ya sea por estar recién levantado de la cama, o trasnochado por días sin

dormir, justo en esos momentos ocurrían fenómenos paranormales a mi alrededor

relacionados con Telekinesis, fenómenos a los que no le encontraba respuesta lógica.

Investigando un poco llegue a la conclusión, que estos efectos paranormales podrían

estar relacionados a la glándula pineal, puesto que esta, es una pequeña glándula

endocrina situada en nuestro cerebro, la cual al ser activada, no solo produce la hormona

Melatonina que está asociada directamente con la modulación de los patrones de sueño,

sino que se le atribuye la capacidad de alterar nuestra percepción sensorial; siendo capaz

de conectarnos con otros planos existenciales al producir una sustancia denominada

DMT; esta, ha sido asociada como la sustancia responsable de generar imágenes en

nuestros sueños, así como de generar estados de consciencia alterados.

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De esta manera podría explicar porque solo me ocurrían estos eventos paranormales

cuando estaba en estado de somnolencia.

Debido al hecho de ser la glándula pineal una glándula fotosensible, esta necesita la

carencia de luz por parte de nuestros receptores oculares para activarse y segregar el

DMT; de esta manera y sin saber nada al respecto, comencé a hacer pequeñas prácticas

de meditación. Simplemente reposaba en mi cama con la habitación lo más oscura

posible, para luego, por un periodo de tiempo de 15 a 20 minutos, solo trataba de relajarme

sin quedarme dormido; solo buscaba despejar mi mente, dejaba pasar los pensamientos

que llegaban a mí, sin analizarnos; inmediatamente, al cabo de varios minutos, los

resultados fueron increíbles.

Comencé a ver patrones de imágenes que se formaban cuando, al tener aún mis

parpados cerrados, trabaja de ver por mis ojos; entre nubes de una especie de energía,

trataban de formarse imágenes ante mí, cuando estas tomaban una forma reconocible, aun

siendo patrones burdos sin muchos detalles, mi intuición me decía que clase de imagen

se estaba mostrando ante mí; de pronto, entre la agitación y constante movimiento de las

nubes, una pirámide se revela entre ellas; por unos instantes, observo una pirámide con

un ojo en la punta, esta pirámide, tras unos segundos se abre a la mitad, para dar paso a

mostrarme a una mujer; esta, era una chica joven, con gafas y el cabello largo sujeto por

una cola; a pesar de que las imágenes que veía eran luminosas, yo intuí que era rubio su

tono de cabello, en su mano una cinta por la cual sujetaba a un perro grande; y tan pronto

como apareció, volvió a desvanecerse en esta nube de energía.

Salí de mi trance sin entender que había visto, o él porqué lo había visto; pero como

siempre nuestro cerebro está acostumbrado a menos preciarse, mi primer pensamiento

fue, “seguro fue una alucinación”, “no significará nada”.

Al día siguiente estando de compras por mi ciudad, iba caminando por la calle cuando

de pronto vino a mi mente el recuerdo de esa chica que había visto en mi primera

meditación; en ese instante veo a una chica rubia, de anteojos, acercarse en mi dirección;

ella estaba siendo arrastrada por un perro muy grande, que halaba de ella por una cinta

que sujetaba desesperadamente en su intento por dominar al animal; llegan hasta mi lado

y el perro sin ninguna explicación se para a mi lado y se sienta inmóvil, yo quedo atónito

con el evento, “Es esta la chica que justo vi ayer en mi meditación”; es lo que no dejo de

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pensar mientras ella descansa por uno segundos de la faena que su perro la había hecho

pasar.

Los dos nos miramos y no dejamos de sonreír, ella por su situación, yo, porque aún no

podía creer lo que estaba sucediendo; de pronto, tan rápido como el perro se detuvo sin

ninguna razón, retoma su marcha y la chica vuelve a salir arrastrada tras el impulso del

animal; yo sigo mi camino tratando de analizar lo que acababa de suceder, “seria

demasiada coincidencia que justo algo así pasara”, me digo a mi mismo mientras me abro

a la posibilidad, de que esa meditación pudo de alguna manera, haberme mostrado un

evento futuro, que aunque no tenía ninguna trascendencia en su naturaleza, si tendría

mucha en lo que respecta a esas nuevas realidades con las que estaba dispuesto a

experimentar.

Llego a mi hogar son emoción, aun recordando el evento ocurrido y su sincronía con

mis pensamientos; justo cuando recordé a la chica que había visto en mi meditación, esta

apareció ante mí. Motivado me dispongo a meditar nuevamente siguiendo la misma

técnica del día anterior; me recuesto en mi cama con la habitación totalmente a oscuras,

me relajo, me concentro en la velocidad de mi respiración, mientras con cada respiro, la

vuelvo cada vez más lenta; dejo que mis pensamientos vaguen solos por un tiempo sin

detenerme en ellos, luego de varios minutos, veo a través de mis parpados aun cerrados,

hasta que aparece esta nube de energía que no para de contorsionarse hasta que logra

transformarse en imágenes reconocibles para mí.

Durante varios días sigo esta práctica, sorprendiéndome como cada cosa que veo en

mis meditaciones, se materializa de alguna manera a las horas transcurridas de haberlo

visto; noto como las señales cuando estoy en ese trance, se hacen más fuertes; ya no veo

solo imágenes, si no que me transmiten emociones, sensaciones, y hasta algunas que otras

palabras que empiezo a balbucear y que guardan relación con las imágenes que me están

mostrando.

Decido poner a prueba una vez más esta conexión mística y en lugar de solo ver cosas

que se presentaran ante mí, me concentro en solicitar una información específica, aquí en

mi ciudad, existe un juego de lotería que consiste en adivinar un animal ganador; el sorteo

se realiza entre cuarenta animales a escoger, así que me propongo a tratar de adivinar,

cual de esos animalitos seria el ganador del siguiente sorteo; hago mi meditación y veo

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un numero claro en mi mente, el número (47), no es el animal que yo esperaba ver, pero

durante mi meditación no puede ver otra cosa; me dirijo hacia la agencia de lotería y me

sorprendo al saber que los animales están enumerados hasta el número (40); aun así,

nunca en mi vida había apostado en un juego de loterías, pero estando frente a la taquilla

para comprar mi boleto, siento un presentimiento muy grande hacia un animal en especial;

sin entender por qué de ese presentimiento, simplemente me dispongo a comprar el

tiquete por una cantidad de dinero muy pequeña, mi meta no era hacerme millonario ese

día, sino seguir comprobando si era real esto que me estaba sucediendo, así que compro

mi boleto y me retiro de la agencia.

Al día siguiente me dirijo a la agencia a verificar si había acertado en mi apuesta, lo

que, para mi sorpresa, había resultado ganador del premio de lotería; pero pienso, “esto

no prueba nada; aposté por un animal que nunca vi en meditación”; cuando me dispongo

a contar el dinero, en uno de los billetes, se encontraba escribo con un marcador de color

rojo el número (47) que había visto en mi meditación. Quedo en shock por la casualidad

tan grande de la que estoy siendo testigo, y pienso en llevar un paso más allá mis pruebas,

para tratar de entender a que se debía que estuviera teniendo estas premoniciones.

Sin comprender muy bien a que se debían las premoniciones que estaba recibiendo,

sin entender si había algún tipo de entidad detrás de todos estos mensajes, al día siguiente,

me propongo a obtener respuestas de la misma fuente que las estaba recibiendo; cierro

mis ojos una vez más en mi habitación, me dispongo a relajarme, a entrar en mi trance

meditativo, pero antes dirijo mi atención hacia mi interior; concentro mi atención en mis

pensamientos, y pido, que si hay alguna entidad que este escuchando mis palabras y sea

responsable de las premoniciones que estaba recibiendo, me diera una prueba de que era

real esto que me estaba sucediendo y no solo una serie de casualidades asombrosas.

Realizo mi meditación y por veinte minutos no logro ver otra cosa que un búho, como

siempre no entiendo que significa, así que solo dejo que pasen las horas para recibir una

señal que me indique a que se refiere este arquetipo.

Ese mismo día por la noche, en una reunión con unos amigos, una de las chicas nos

pide a mí hermano y a mí, la acompañemos a su casa puesto que su automóvil se había

averiado; con gusto mi hermano y yo aceptamos acompañarla, nos dirigimos a su hogar

y cuando faltan pocos metros para llegar, viene a mi mente la premonición del búho, y

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me pregunto cuándo será que me revelarán el significado. En ese instante, pasan al frente

de nosotros una pareja de pequeños búhos, a los que mi hermano me alerta con emoción

para que pueda verlos volar mientras se alejan de nosotros, nuevamente la sincronía de

mis pensamientos con las situaciones me impacta, y aunque me doy cuenta que hay algo

relacionado con el significado de los búhos, aun no entiendo cual sea.

Llego a mi casa y transcurre la noche, al día siguiente le comento a mi madre lo

sucedido, ella sorprendida al igual que yo, me sugiere que investigue en internet, cual es

el significado esotérico del tótem búho, puesto que en su significado podría estar mi

respuesta; acepto con gusto su sugerencia y corro a mi computador, en lo que me

propongo a averiguar tal significado, abro paralelamente una red social muy popular por

la que a menudo me divierto en mis periodos de ocio; instintivamente hago algo que jamás

acostumbro, y reviso una bandeja de mensajes de personas que aunque aún no están

agregados a mi cuenta de perfil, me pueden enviar mensajes para comunicarse conmigo;

en ese instante quedo impactado con el mensaje que encuentro.

“Carlos, como estas? Años sin saber de ti, soy Rengifo, tu amigo de secundaria, tú

hermano y tú, me llamaban Buhito”.

Sus palabras me dejan atónito, puesto que tenía 16 años sin saber nada de esta persona,

y que me escribiera justo en este instante era algo que no podía creer, sin perder más

tiempo y aun en shock, investigo el significado del tótem Búho y su significado fue

totalmente esclarecedor.

Tótem búho: es el tótem de los psíquicos y clarividentes, el mensajero de secretos y

presagios, siendo la unión entre el mundo visible y el mundo espiritual, otorga a su

poseedor la capacidad de crear una conexión intuitiva con otros planos existenciales.

Luego de este día, entendí que cuando meditaba, no veía simplemente cosas que

sucederían en el futuro cercano, sino que había una entidad que estaba tratando de

comunicarse conmigo.

Desde ese momento en adelante, base mis meditaciones en descubrir que era esa

consciencia que se comunicaba constantemente conmigo, ya no solo durante mis practicas

meditativas, sino durante las 24 horas del día, a través de intuiciones, mensajes en

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numerología, sueños lucidos y cualquier otra manera que encontrara de darme alguna

señal de su presencia constante.

Cada día más investigue, aprendí y me inmiscuí más en experimentar en otros planos

de consciencia, que pudieran hacerme a entender los diferentes procesos de la existencia

humana, desde una perceptiva que ninguna religión podría darme, desde mi propia

experimentación; de esta manera comprobé por mí mismo, leyes de física cuántica a

través del desdoblamiento hacia el plano astral o cuarta dimensión; y esta consciencia,

día a día, fue educándome y mostrándome verdades innegables de la realidad humana,

que llenaban los vacíos existenciales de los que había sido víctima durante toda mi vida.

Pasaron los meses y mi hambre por encontrarle un significado a mi vida, que fuera

más allá de este plano físico y las comodidades, alegrías y sufrimientos que puede ofrecer,

hizo que fueran revelándose ante mí, maestros espirituales, tan infinitos en su sabiduría

como en su amor por ayudarme a trascender espiritualmente; maestros como

Paramahansa Yogananda y Lahiri Mahasaya, me tomaron bajo sus alas mientras

sembraban en mí, una semilla que germinaría un despertar de consciencia.

Estos maestros espirituales, fueron cambiando en mí, el sistema de creencias obsoleto,

que me ataba a mis condicionantes existenciales karmaticas; enseñándome la perspectiva

adecuada, con la cual entender el propósito de mi ser con el universo en el que habitaba;

así progresivamente en su enseñanza, estos maestros me llevarían hasta mi gurú, el

Mahavatar Babaji.

Este amado Gurú, me enseñaría a aplicar todas las enseñanzas de mis maestros, en la

disolución de mi karma, a través del autoconocimiento y la autoexploración de mis

patrones de pensamientos; rebelando así, ese ego que condicionaba mi existencia, a

repetir las mismas circunstancias dolorosas una y otra vez.

Una vez quemado mi karma en las llamas del fuego alquímico de la sabiduría cósmica,

Se revelo ante mí el Buddha Ridishta, apodado de esta manera por mí, por ser el nombre

“Ridishta” su propia frecuencia vibratoria, manifestada en palabra, y por ser parte de la

luz de sabiduría divina más elevada de mi ser, al tratarse de mi supraconsciencia.

Este ser, que es pura consciencia cósmica manifiesta, comenzaría a enseñarme las

reglas evolutivas del ser humano, en base al estudio astronómico y astrológico, como

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fórmula matemática de los procesos evolutivos del ser humano, gobernado por las

emanaciones energéticas que ofrecen los cuerpos celestes que tienen regencia en él.

Todos mis maestros me harían entender, lo vacía e intrascendente que sería basar mi

experiencia en este plano, en la realización de logros materiales o sociales, en casarme,

tener una linda familia, etc. Nada de eso sería trascendente después de esta vida, y solo

me condenaría a un ciclo interminable de vidas regidas por los mismos patrones en los

que mi sistema de creencias atemporales, me llevara a vivir, una y otra vez, como un

circulo sin fin de alegrías y sufrimientos.

Sin embargo, no solo comprendí que la autorrealización espiritual seria mi único

escape de este plano existencial, también comprendí que, en la búsqueda de esa

superación personal, no necesariamente tenemos que vivir una vida con privaciones de

todo tipo, un verdadero ser autorrealizado, no es el que vive encerrado en un monasterio

privándose de comodidades para no apegarse a ellas; un ser consciente en que su

evolución espiritual es la prioridad más grande de toda alma que transita este plano, puede

tenerlo todo y aun así, no basar su felicidad en sus pertenencias personales, o en

situaciones o condicionamientos en los que se ve obligado a experimentar su existencia;

un ser autorrealizado puede vivir su vida disfrutando de esos placeres que tanto les gusta,

sin sentir apego o adicción hacia ellos.

No obstante, a medida que iba mejorando mi situación, esto por su puesto, al aplicar

mis nuevas percepciones existenciales a la resolución de los condicionamientos en los

que, mis propias acciones habían dirigido mi vida; podía notar la resistencia tan grande

que presentaba ante estos asuntos algún amigo que se acercara a mí, pidiendo consejos u

orientación; y no era para menos, una persona tan envuelta en los típicos problemas

cotidianos, no se le puede pedir que enfoque todas sus energías en la búsqueda de un

crecimiento espiritual. Una persona que sale de su hogar a las seis de la mañana al trabajo,

y llega a su hogar a las ocho de la noche, cansado, fatigado, sin más energías para hacer

algo más que cenar y dormir, y en muchos casos, verse en la obligación de atender los

oficios del hogar, atender a sus hijos, ayudarlos con las tareas, darle atención a su pareja,

etc. Como alguien con esa carga de responsabilidades podría dedicar su tiempo en algo

más que atender todo el embrollo que implica cumplir con sus tareas diarias.

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Esto me llevo a entender, que para poder ayudar a una persona a redescubrirse así

mismo, y liberar en él todo su potencial cósmico, primero debería darle las herramientas

que lo liberen de las ataduras materiales que genera hallarse en este plano existencial.

En tal sentido, basado en estas percepciones, me propuse a realizar el siguiente libro,

explicando las técnicas de meditación que podrán desarrollar una conexión cósmica en el

individuo que las practique; y que no solo servirá para echar una mirada hacia el futuro

para realizar predicciones de algún sorteo en una agencia de lotería; sino que obtendrá la

herramienta más útil que su consciencia terrena desconoce, y son innatas en él; y que le

permitirá transformar cualquier problema que aflija su vida, y lo ate a atravesar por

circunstancias dolorosas. Esta se trata de una herramienta evolutiva del ser, que lo llevará

directamente hacia su autorrealización y en tal sentido, hacia su máxima felicidad.

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¿Cómo más me ayudará esta técnica de meditación?

Aunque tal vez la principal razón por la cual usted llegó a este libro sea la resolución

de sus problemas económicos, estos que nos quitan el sueño por las noches, estos que nos

causan tristeza, ansiedad, angustia, por privarnos de tantas comodidades que aunque sean

necesarias o no, sentimos que en muchos casos nos privan de la alegría de la vida; y

aunque sin importar cuales sean nuestras condiciones sociales o culturales, el verse

envuelto en situaciones como por ejemplo, no poder cubrir los gastos estudiantiles de un

hijo, o incluso, no poder cubrir los gastos médicos de algún ser querido que se encuentre

en condiciones de salud desfavorables, son condicionantes que, con toda razón, nos

afectan emocional y psicológicamente; por lo que darle estabilidad financiera a través de

esta práctica meditativa es una de las situaciones que usted desde el momento en el que

comience a realizarla, podrá empezar a experimentar.

Sin embargo, el aseverar que la resolución de sus problemas económicos será lo más

positivo que este nuevo conocimiento le traerá a su vida, sería como afirmar, que el

descubrimiento de la energía eléctrica, solo nos permitió encender las bombillas de

nuestros hogares. De esta manera, para hacerle entender de una forma más amena los

beneficios que le traerán a su vida el practicar estos ejercicios meditativos, ahora a través

de un ejemplo muy sencillo, lo llevare a una condición con la que todos en cierto punto

de nuestras vidas hemos estado envueltos.

Utilice el poder de su imaginación por unos minutos, y visualice por unos momentos

una situación muy común en la que a menudo nos encontramos; imagine que usted ha

trabajado en el mismo puesto de trabajo durante tanto tiempo, que ya se ha tornado en

una monotonía frustrante, usted siente que está estancado en esta etapa de su vida, y sin

saber cómo o cuando esto cambiará; solo le ha quedado resignarse a que el destino mejore

su situación. Ahora imagine que recibe la maravillosa noticia, que dentro de un par de

meses se creará un nuevo puesto superior al suyo; ahora la emoción lo sobrepasa y

fantasea constantemente con que ese nuevo puesto de trabajo sea para usted.

Sin embargo su jefe tiene otros planes para ese nuevo cargo, así que de plano se lo

niega sin darle motivos; usted pasa los días en cólera, frustrado, decepcionado, ahora cada

vez que se sienta en tu puesto de trabajo, se siente más miserable que nunca; y como no

19

sería así, si siente que ese nuevo puesto, le podría dar más beneficios económicos,

pudiendo mejorar mucho más su calidad de vida.

De esta manera pasan las semanas, y ahora para usted, cada día que pasa se vuelve más

frustrante y denigrante tener que sentarse en ese sitio, a seguir haciendo lo mismo de

siempre.

De esta manera pasan los meses, y justo a días de que se estrene el nuevo puesto de

trabajo, usted se arma de valor, se dirige hacia la oficina de su jefe, y le vuelve a insistir

en que ese nuevo puesto debería ser para usted; él por su parte, de manera frívola y

reiterativa, se lo vuelve a negar; usted estalla en ira, y le exige al menos el poder saber el

porqué de su intransigencia; su jefe le responde, que de acceder a su petición, su situación

no mejoraría al hacerse responsable de este nuevo puesto de trabajo; más bien, se

encontrara sumido usted, en más responsabilidades, más estrés laboral, llegará más tarde

a su casa cada día, y tendrá que levantarse más temprano; sin mencionar que sus

honorarios profesionales, serán los mismo que su actual sueldo; en vista de esos motivos,

y por el gran aprecio que él tiene hacia usted, no lo sugirió para ocupar ese puesto.

Ahora usted, al volver a su puesto ya no se siente frustrado, ya no se siente denigrado,

no siente que la vida lo está atacando; ahora fíjese, en que usted sigue estando

exactamente bajo las mismas condiciones que estuvo durante los últimos meses; meses

por los que usted se sintió tan mal emocionalmente, que maldecía cada día su situación.

Sin embargo, ahora la agradece, ahora la acepta con paz y alegría al ver el cambio tan

trágico del que se libró, ahora usted vuelve a sonreír, y todo esto sin que su entorno se

haya modificado en lo absoluto; sin que nada fuera de usted se haya modificado, más que

su manera de entender la situación.

Eso mi querido lector, se define como hacer un salto cuántico; es un cambio de

consciencia que le permite poder cambiar su estado emocional con respecto a una

situación, al cambiar la manera de entender el problema, al entender, que nunca fue un

problema.

Ahora tómese un momento e internalice en sus emociones, piense en cada cosa que le

impide en este preciso momento ser totalmente feliz y estar en completa paz. Entre en

consciencia de que situaciones, a usted, lo hacen sentir triste, racionalice en que lo impide

20

sentirse completamente pleno; problemas económicos, amorosos, de salud, familiares o

de trabajo.

Ahora usted debe comprender, que por cada problema que consigamos en nuestra vida

podemos dar un salto cuántico; podemos lograr mirar las cosas desde un punto de vista,

en donde no importa cuál sea la naturaleza de un problema, podremos pasar de un minuto

a otro de sentir dolor, pena, rabia, frustración; a sentir paz, a sentir alegría, compasión, a

sentir amor en su expresión más pura.

Y no se trata de tener una paz alimentada por el cumplimiento de un deseo o resolución

de un problema que será algo temporal, algo que solo le durara mientras su deseo este

siendo satisfecho; esta será tener una paz y una alegría que no pertenece a ninguna

condicionante externa; sin importar que pase en nuestro alrededor, nada podrá afectarnos

emocionalmente, nada ni nadie, podrá volver a tener control sobre nuestra felicidad.

Ahora mi intención no es decirle como pensar, o cuales es la manera correcta de

entender cada situación que mancha su vida de insatisfacción y tristeza; cada individuo

posee una consciencia interna de poderosa sabiduría, sin excepciones, todos tenemos un

maestro interno que posee la sabiduría necesaria, para darle a usted siempre la forma

correcta de entender el mundo, y todos sus procesos de aprendizaje. Puesto que, es esta

misma consciencia de naturaleza divina, quien ha estado presente en cada etapa de su

vida, susurrando a sus oídos los consejos necesarios para ayudarlo a ser feliz; para guiarlo

en el camino hacia su propia realización, hacia alcanzar su propia felicidad.

Sin embargo, por más que esta consciencia haya tratado de establecer una

comunicación intuitiva con nosotros, el hecho de ni siquiera saber de su existencia, logra

que sea muy difícil entablar una comunicación; de la manera en que un mimo, no puede

comunicarse con alguien que tiene los ojos tapados ante su presencia, esta consciencia no

ha podido ayudarlo a atravesar sus procesos vivenciales; hasta ahora, puesto que, desde

este momento en adelante, al practicar esta sencilla técnica de meditación, usted logrará

entablar una línea de comunicación directa con este maestro interno, que es tan parte de

usted, como sus órganos más primordiales; y que desde este instante, no solo lo ayudara

a resolver sus problemas económicos, sino que lo guiara a encontrar la plenitud de su ser,

manifestada en felicidad.

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¿Qué es meditar?

Cuando escuchamos la palabra meditación, es normal que se nos venga a la

imaginación un hombrecito calvo meditando en un templo en los Himalayas, asociamos

esta idea a una práctica religiosa que nos obligará a desprendernos de todas nuestras

pertenencias para entregarnos a una vida de evolución espiritual, no obstante, caer en esos

clichés está ya algo pasado de moda, y resulta absurdo y hasta risible formarse tal

concepto de una palabra tan amplia.

Meditar es el arte de dirigir la atención de su mente en una sola actividad, una persona

que mira fijamente un programa de televisión, prestando su total atención a esta acción,

está meditando de la misma manera, en la que podría estarlo haciendo una persona en un

templo, rodeado de velas, incienso y mantras.

De ello se debe a que se hayan derivado infinidades de técnicas de meditación, unas

enfocando la mente en música binaural u otros estímulos sonoros como mantras, otras

técnicas en recreaciones mentales de objetos, donde se visualiza de la manera más

detallada un objeto durante un determinado periodo de tiempo; así como también en

técnicas de respiración, en ejercicios de energización de la columna vertebral, en el caso

del Kriya Yoga, la única técnica de meditación que conlleva a un desarrollo espiritual a

través de la modificación celular de un individuo, transmitida a mí por mis maestros

espirituales. Como muchísimas técnicas más, que se enfocan en centrar la mente en un

solo estimulo.

Los beneficios que puede conllevar el ejercitar adecuadamente una técnica de

meditación, pueden variar desde energizar el cuerpo físico, para tener un mejor

rendimiento en las jornadas diarias del individuo; como traer serenidad, al ayudar a

deshacernos del stress acumulado; así como también, puede ayudar a ralentizar nuestras

ondas cerebrales, lo que nos llevaría a un estado alterado de consciencia, donde el

individuo no solo se hace más perceptible a otras realidades, sino que a través de técnicas

como, desdoblamiento del alma y su cuerpo físico, la persona puede inmiscuirse y

experimentar en planos más sutiles, en donde estas realidades no son visibles para

nuestros ojos físicos. Técnica la cual, nos inmiscuiremos a fondo más adelante.

22

Preparación para realizar la técnica de meditación

Callar la mente

Es importante resaltar, que todas y cada una de las técnicas de meditación que podemos

practicar, tienen como base fundamental el disminuir el ruido psíquico presente en

nuestras mentes. Este ruido psíquico no es más que un constante flujo de pensamientos

de toda índole, planes, recuerdos, angustias, procesos analíticos, todos los pensamientos

que constantemente inundan nuestra cabeza y que por lo general se hace difícil controlar

su manifestación en nuestra psique.

Debemos entender que nuestros pensamientos son forma de energía, energía la cual,

aunque en este plano de tercera dimensión no es visible, no deja de ser algo existente.

Vivimos rodeamos de un mar infinito de energías que compartimos con el resto de

personas en nuestro entorno, y aunque no somos capaces de ser físicamente muy

perceptible a estas, nuestra psique puede percibir estas energías en forma de

pensamientos; así como también, visualización de imágenes, eventos y toda información

que el universo desee compartir con nosotros, por ende, tenemos que ver nuestras psiques

como un radio transmisor y receptor de energías inter dimensionales.

Debido a esto, cuando estemos realizando nuestra meditación, debemos abandonar

cualquier pensamiento que venga a nosotros; controlar su generación es tarea imposible,

ya que los pensamientos que vendrán a nosotros no solo serán nuestros, sino que también

serán parte de las personas cercanas a nosotros, de nuestro colectivo cercano, sin

mencionar que siento el plano astral atemporal, las energías que llegaran a nosotros

pueden o no estar siendo generadas en la misma línea de tiempo; por ello se recomienda

solo dejar pasar cada pensamiento que venga a nosotros, sin analizarlos, sin detenerse a

pensar de donde salieron o a quien pertenecen, solo dejar que todo aquello que llegue a

nuestra mente y que no sea la información que estemos buscando, sea ignorarla

completamente.

Se debe entender que basta con poner nuestra intención en solicitarle al universo una

información específica, este contestara de inmediato; solo debemos lograr abrir la

conexión lo suficiente como para poder acceder a esta información, ahí es donde entra en

juego el tercer ojo.

23

Este tercer ojo, no es más que la acción en conjunta de tres glándulas importantes; la

glándula pineal, la glándula pituitaria y el hipotálamo, estas se encuentran situadas en

nuestro sistema craneal, y que por medio de un trabajo en conjunto, logran conectar

nuestra consciencia con nuestro ser interior.

Aunque no debemos confundir el tercer ojo con la visión astral, que no es más que una

visión combinada entre tercera y cuarta dimensión, en nuestras meditaciones, guiaremos

nuestra atención y visión interna, al sitio donde está representada; es decir, guiaremos

nuestra atención al punto medio entre las dos cejas. Al poner nuestra atención en este

punto, no solo disminuiremos los procesos mentales al concentrar nuestro pensamiento

en una sola tarea, sino que tocaremos la puerta al punto de acceso cósmico que cada ser

posee como canal de conexión entre el dios creador y su creación.

Controlar la respiración.

Así como callar la mente es fundamental para lograr percibir las emanaciones cósmicas

transmitidas hacia nosotros, la respiración consciente forma una base fundamental de la

técnica, debido a que el ritmo de nuestra respiración, tiene una relación directa con la

frecuencia de nuestras ondas cerebrales; de esta manera, acelerando o ralentizando

nuestra respiración, podemos ejercer influencia directa sobre nuestra frecuencia cerebral

y por ende, sintonizar nuestra psique con otros planos existenciales más sutiles; esto

debido, a que esta conexión cósmica solo dará resultado cuando logremos sintonizar

nuestra frecuencia mental, con la frecuencia de los planos sutiles de donde extraeremos

la información solicitada.

Nuestro cerebro podría verse como el procesador de un computador casero; éste, opera

a determinadas frecuencias de procesamiento de información, lo que le permite adaptarse

a distintas condiciones y tareas diarias para las cuales, puede ser más eficiente al cambiar

la frecuencia de sus ondas cerebrales dependiendo el proceso en el que se encuentre.

Sin embargo, el proceso físico por el cual nuestro cerebro logra cambiar la frecuencia

de estas ondas, no solo sirve para adaptarse a distintas tareas, también puede conectarnos

con distintos estados de consciencia; por lo que aprender a utilizar estos estados a nuestra

voluntad, forma la piedra filosofal de nuestra técnica de meditación.

24

Existen varias frecuencias en las que opera nuestro cerebro; cada una, está diseñada

para desempeñar una mejor función en determinadas situaciones; estas son las siguientes:

Beta (12-30Hz)

Es la frecuencia más común en el cerebro de un adulto promedio mientras está

despierto. Manifiesta un estado de alerta, de sensorialidad aguda, y revela procesos

mentales asociados al razonamiento. Si bien el estado beta es indispensable para funcionar

cotidianamente, lo cierto es que cuando los niveles se mantienen en la región más alta del

espectro, entonces producen fuertes síntomas de estrés y ansiedad.

Alfa (7.5-12Hz)

Las frecuencias Alfa florecen dentro de estados de relajación, facilitando procesos

como la imaginación, la concentración, el aprendizaje y la visualización. Además, aquí

se gestan condiciones ideales para reprogramar nuestra mente, por ejemplo, sanando

ciertos miedos o experiencias dolorosas, como también reprogramándonos a nivel

subconsciente con sugestiones, buscando estados emocionales más armónicos y felices.

Siendo el estado Alfa la frontera entre el consciente y el subconsciente.

Alfa representa un estado de más escasa actividad cerebral y mayor relajación. Estas

ondas son más lentas y de mayor amplitud que la Beta. Una persona que ha terminado

una tarea y se sienta a descansar, se encuentra a menudo en un estado alfa; así como la

persona que está dando un paseo, disfrutando del paisaje.

Theta (4-7.5Hz)

Se refiere a ese estado en el que tu mente se encuentra entre el sueño ligero y la

atención despierta. Se puede alcanzar por medio de prácticas de meditación profunda o

en ocasiones se accede a él inesperadamente, justo antes de caer dormidos. También se

considera un estado propicio para experimentar sensaciones místicas, manifestaciones

etéreas de notable riqueza y para desarrollar la intuición.

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Delta (0.5-4Hz)

Cuando nuestro cerebro se sintoniza con estas frecuencias, quiere decir que nos

encontramos sumergidos en las profundidades del inconsciente; estas son las ondas de

mayor amplitud y menor frecuencia. Nunca llegan a cero, pues eso significaría la muerte

cerebral. Se generan ante un estado de ‘sueño profundo’.

Cuando nos vamos a dormir, las ondas cerebrales van pasando sucesivamente de Beta

a Alfa, Theta y finalmente Delta. Durante el sueño se producen ciclos en donde se van

alternando ondas cerebrales tipo Alfa, Theta y Delta.

Cuando una persona despierta de un sueño profundo, la frecuencia de sus ondas

cerebrales se va incrementando progresivamente, pasando de Delta a Theta, luego Alfa y

finalmente a Beta. Durante este proceso de despertar, no es extraño que una persona

permanezca en un estado Theta durante un tiempo (por ejemplo, unos 15 minutos). Esto

le permitirá tener un libre flujo de ideas, lo cual puede aportarle soluciones, ideas nuevas

o nuevos puntos de vista, siendo este un estado especialmente creativo y productivo.

Pero también es necesario asociarlo con el estado en donde estamos en conexión

directa con otros planos sutiles, esto debido a que nuestra glándula pineal aún se mantiene

activa, y por ende, segregando sustancias como el DMT, que le permite a nuestro ser,

conectarse con mayor facilidad con otros planos existenciales.

Las investigaciones han mostrado que, aunque un estado cerebral puede predominar

en un momento dado, los tres tipos de ondas restantes están también presentes en todo

momento; es decir, mientras una persona está implicada en una actividad mental,

produciendo ondas Beta predominantemente, las ondas Alfa, Theta y Delta se están

produciendo también, aunque sólo estén mínimamente presentes.

Ahora bien, resaltando que el estado Theta es el más óptimo para acceder a la conexión

con los planos eterios, comenzaremos nuestras prácticas utilizando el estado Alfa como

principio de conexión cósmico, ya que éste, se hace suficiente para lograr aperturar

nuestro tercer ojo hacia las energías etéreas emanadas por el dios cósmico, en respuesta

a nuestras inquietudes.

26

Estado físico.

La preparación física para la práctica es muy importante, debemos realizarla en un

momento de nuestro horario donde nos sintamos relajados, pero a la vez no estemos

agotados; realizar la práctica a altas horas de la noche puede ser contra producente; esto

debido a que, por lo cansado que se encuentra nuestro cuerpo, provocará que perdamos

la consciencia con facilidad, cayendo rápidamente en la etapa de sueño.

Sin embargo, aprovechar los procesos naturales del cuerpo es una clave para hacer que

la técnica funcione más efectivamente; por lo tanto, es muy útil que al practicar nuestra

meditación nos sintamos un poco agotados; esto provocara una relajación más rápida y

nuestro cerebro llegará más fácil a las frecuencias de baja oscilación, que es al estado a

donde queremos llevarlo.

Se aconseja llevar a cabo las prácticas de meditación en diferentes horarios, esto

ayudará a que usted mismo vaya conociendo cuales son las condiciones más óptimas para

su cuerpo, y así pueda ajustar sus prácticas a sus actividades diarias.

Existen varias condiciones que lo ayudaran a usted a entrar en estados de meditación

profunda con mayor facilidad:

• Meditar al levantarse: justo después de una siesta reparadora, de al menos ocho

horas, nuestro cuerpo esta lo suficiente descansado como para mantenerlo despierto

durante una jornada de meditación; sin embargo, ya que la glándula pineal justo está

cesando sus actividades, las oscilaciones de su frecuencia cerebral se encuentran bastante

ralentizadas como proceso natural del cuerpo en estado de somnolencia; lo que permite

tener la mente más relajada.

• Meditar a la hora de la merienda: al alimentarnos a la hora del medio día, donde

por lo general es la comida más fuerte del día, nuestro proceso digestivo demanda una

gran cantidad de energía para poder procesar los alimentos; esto provoca que nuestra

frecuencia cerebral baje de una manera sorprendente; y aunque realizar ejercicios de

respiración que contraigan nuestro abdomen no se recomienda durante el proceso

digestivo, puede ser muy provechoso aprovechar este estado físico para sutiles practicas

meditativas que no demanden ningún tipo de esfuerzo físico; desdoblamientos astrales,

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visiones, premoniciones, sueños lucidos, conexiones inter dimensionales, por lo general

son más frecuentes en este estado, que con la ayuda de algún otro estado físico.

• Utilizar el estado de trasnocho: aunque no se recomienda provocarse un estado

voluntario de trasnocho, a menudo por las condiciones de nuestro ajetreo existencial, nos

vemos envueltos en esta condición, que aunque causa estragos en nuestro sistema

nervioso, el cansancio físico lleva nuestra frecuencia cerebral a la barreta entre el estado

Alfa y Theta; dándonos una híper sensibilidad a la dimensión astral, que bien podríamos

utilizar para mejorar nuestra conexión interdimensional mientras dure este estado.

También hay que destacar, que resulta contra producente ingerir alimentos que

mantengas nuestro ritmo cerebral en estado de alerta, la cafeína y el chocolate, son

sustancias que nos impiden llegar a un estado de relajación profundo; por lo tanto, se

recomienda no consumir estos alimentos antes de realizar la práctica, o esperar a que se

hayan disipado sus efectos antes de iniciarla, si ya se han ingerido con antelación.

Otra consideración importante a la hora de realizar nuestra practica meditativa, es la

alineación de nuestra columna vertebral; sin importar cual posición usted elija para

realizar su práctica, debe tener siempre la salvedad (de mantener la columna vertebral

completamente recta), esto mejorara nuestra conexión al facilitar el flujo de energía a

través de nuestros centros energéticos situados en la columna vertebral.

Ahora bien, si el estar acostado boca arriba en una cama, es la postura en la que

podemos sentirnos más cómodos y por ende lograremos relajarnos con mayor facilidad,

esto podría resultar contra producente para muchas personas que caen en estado de sueño

con facilidad; para evitar esto, se recomienda que la persona adopte una posición corporal

que le permita estar relajado, pero a la vez, pueda contener el sueño. La posición del loto,

es la más recomendada para cualquier práctica meditativa; no obstante, para una persona

que se está iniciando en la meditación, la postura de las piernas que implica esta posición

puede resultar muy difícil; de esta manera se recomiendo cruzar las piernas con

normalidad, y conseguir una posición cómoda tanto para las piernas como para la espalda;

si le es difícil mantener la espalda erguida, recueste su espalda contra una superficie para

no generar incomodidades, que luego podrían tomar la atención de su mente durante la

práctica.

28

Ver a través de los parpados.

A pesar de que cada ser encarnado posee una conexión cósmica con su consciencia de

luz, con su Yo Superior, o lo que se conoce como maestro interno, esta conexión

fenomenal se irá profundizando a medida que nos sumerjamos en la constante practica

meditativa; llevándonos a desarrollar dones como una intuición desarrollada, la

clarividencia, la percepción del plano astral a través del desarrollo de la visión astral, entre

muchas otras destrezas que nos permiten comunicarnos de una manera más asertiva con

nuestro maestro interno.

Pero debemos resaltar, que no desde el primer momento en que comencemos a realizar

nuestras prácticas meditativas, obtendremos de respuesta, alguna visión profética, o

entraremos en un estado de consciencia alterado, dado que aunque en cada ser se

encuentra una conexión interdimensional irrompible con sus consciencias más elevadas,

esta se debe fortalecer con la constante práctica, para que nuestras manifestaciones se

vuelvan cada vez más profundas, más esotéricas y cada vez más cargadas de valiosa

información cósmica.

Ahora habiendo mencionado el planteamiento anterior, debemos hacer especial

énfasis, en que hay herramientas latentes en nosotros, a las que podemos asistir sin

ninguna practica previa, y que nos facilitaran la percepción de las energías sutiles con las

que sin tener consciencia, vivimos inmersos en un constante juego cósmico de acción y

reacción. Juego del que entenderemos las reglas más adelante.

A pesar de que nuestros ojos están limitados a cierto espectro de ondas de frecuencia,

estos son capaces de percibir pequeñas impregnaciones etéreas; impregnaciones en donde

nuestro Maestro Interno dejara su manifiesto como parte de expresión, en busca de

entablar una línea de comunicación con nuestra adormecida consciencia; y que, para

utilizar esta herramienta, solo debemos llevar a nuestro cerebro a ralentizar su frecuencia

de oscilación, hasta entrar en un estado de vibración por debajo de las ondas Alfas; es en

este momento, donde nuestra percepción de otros planos existenciales aumentará

exponencialmente a medida que se sigan ralentizando la frecuencia de nuestras ondas

cerebrales, pudiendo presenciar una nube cósmica volverse perceptible ante nuestra vista.

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No se trata de una visión dada por el llamado tercer ojo, no se trata de una destreza

especial desarrollada solo por algunas personas; se trata de un proceso físico de nuestro

cuerpo, que cualquier persona puede realizar con total facilidad, y que se vuelve una

herramienta muy útil de percepciones etéreas, donde se puede entablar una comunicación

efectiva con las consciencias cósmicas responsables de nuestro desarrollo evolutivo.

Los parámetros que se deben cumplir para poder realizar esta técnica, consiste en llevar

a nuestra mente a un estado de relajación lo suficientemente profundo, como para alcanzar

ondas cerebrales de por lo menos una frecuencia Alfa, lo que se consigue con mucha

facilidad.,

También es indispensable que nuestros globos oculares estén en absoluta oscuridad,

esto se debe, a que la glándula pineal alojada en nuestro cerebro es de tipo foto-sensitivo;

lo cual quiere decir, que se activa por medio de la oscuridad que percibe a través de

nuestros ojos; y hay que atribuirle a esta glándula, la segregación de una sustancia llamada

“Dimetiltriptamina” o “DMT”; el cual, es un enteógeno, al que se le atribuyen efectos

para normales como alteración de la consciencia y la conexión con otros planos

dimensionales.

Una vez estemos sumergidos en un proceso de relajación profunda, y nuestra glándula

pineal se encuentre activa, y por ende, segregando el DMT, mientras aún permanecen

nuestros parpados cerrados, miraremos a través de ellos; y este sería el otro motivo por el

cual, la practica debe realizarse en un ambiente con total oscuridad, o con algún pañuelo

que cubra nuestros ojos y nos eclipse por completo la luz del ambiente; ya que la

manifestación de la energía etérea que se presentara ante nuestra visión, lucirá como una

nube de luz blanca que irá contorsionándose hasta expresar formas arquetípicas de

acuerdo a nuestra percepción. De manera que, si nuestros parpados perciben un fondo de

luz blanca, no podríamos identificar la nube de luz etérea ante nosotros.

30

Primera práctica: ver el futuro cercano.

Nuestra primera práctica será muy sencilla, no nos concentraremos en recibir alguna

información concreta; solo iremos practicando la técnica de apertura del tercer ojo y la

técnica de ralentización de las ondas cerebrales. Esto nos irá llevando a alcanzar estados

meditativos cada vez más profundos; para esto, realizaremos esta práctica al menos una

vez al día durante tres semanas antes de pasar a la siguiente práctica.

Con este ejercicio, lograremos ir afinando los sentidos internos que nos conectan con

otros planos existenciales; podremos ir dilucidando pequeños eventos futuros que el

cosmos compartirá con nosotros, y que se materializaran en nuestro futuro cercano;

alguna imagen, una canción, una frase muy atípica, etc. Cualquier tipo de evento o señal

que nuestro ser interno crea necesario para ir mostrándonos, que efectivamente, estamos

estableciendo una línea de comunicación bidireccional con el cosmos.

Metodología:

Colóquese acostado boca arriba sobre su cama o en un sillón cómodo donde se le haga

fácil conciliar el sueño; cierre sus ojos, concéntrese en su respiración mientras su visión

interna se sitúa en el punto medio entre sus dos cejas. Durante los primeros cinco minutos,

sienta como su cuerpo se relaja con cada exhalación, sienta como cada parte de su cuerpo

pierde su tensión; en los siguientes cinco minutos, ponga su atención en su respiración,

trate de hacerla cada vez más lenta, pero sin necesidad de sentir asfixia.

Luego de los primeros diez minutos, con los parpados aun cerrados, utilizar sus ojos

para mirar a través de ellos. Si ha logrado un estado de relajación optimo, podrá observar

una nube etérea de luz contorsionarse una y otra vez para formar por instantes, siluetas

reconocibles para su percepción; en caso de no lograr observar esta manifestación,

mantener la vista interior a través de los parpados hasta que aparezca dicho fenómeno.

Por último, una vez respondías sus solicitudes, antes de salir de estado de trance,

agradecer a su maestro interno por su contacto y ayuda amorosa para con usted.

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Ejecución:

• Tan pronto cierre sus ojos haga su esfuerzo por despejar su mente, no se aferre a

ningún pensamiento transitorio, solo fije su visión interna a su tercer ojo; cuando aparezca

un pensamiento, comentario, recuerdo, etc. no lo analice, solo déjelo ir.

• En los primeros cinco minutos, inhale por la nariz lentamente, y al exhalar por la

boca, sienta como las tensiones de su cuerpo se van soltando; puede contraer los músculos

en la inhalación y relajarlos en la exhalación para familiarizarse con esta sensación.

Procure llevar una respiración pausada y relajada, de acuerdo a sus propias capacidades.

Puede llevar un ritmo de inhalación cercano a cinco o siete segundos para inhalar, y tres

segundos para exhalar; seguidos de dos segundos antes de volver a inhalar, el proceso es

parecido a un suspiro; con la diferencia de que el tiempo de inhalación es más prolongado.

• En los siguientes cinco minutos, procuraremos ir ralentizando cada vez más

nuestra respiración, contando mentalmente, utilizaremos tiempos iguales tanto para

inhalar como para exhalar, hasta que llegue un punto en donde sea lo suficientemente

lento como para sentirnos cómodos, y a la vez, no lograr ralentizarlo más; un tiempo

sugerido para la ralentización final, podría ser diez a doce segundos para empezar las

prácticas; a medida que sus capacidades pulmonares mejoren, usted podrá alargar sus

tiempos. (inhalación y exhalación serán por la nariz)

• Cuando empecemos a ver con los ojos cerrados a través de los parpados, debemos

mantener siempre una actitud relajada; ya que exasperarnos al poder visualizar esta nube

cósmica, acelerara nuestro ritmo cardiaco y por ende nuestras ondas cerebrales; perdiendo

la conexión que ya habíamos logrado.

Síntomas:

• Nótese como sus ondas cerebrales producen un sonido asociado a la frecuencia

con la que esté operando; notará que mientras más se relaja, el sonido no solo cambiara,

sino que se hará más intenso debido a que aumentara su percepción interna.

• Al ir relajándose sentirá como su cuerpo irá durmiéndose mientras su consciencia

sigue despierta; es natural que sienta algún dolor muscular durante este proceso de

32

entumecimiento; no será nada grave, cuando vuelva a incorporarse después de su práctica,

éste desaparecerá.

• Al activar nuestra glándula pineal, estamos entrando en contacto con planos sutiles

a los que no estamos acostumbrados a percibir con regularidad, o no de manera

consciente; es normal que durante las practicas, pueda sentir efectos paranormales como

escuchar voces, ruidos extraños, música, que se sienten en su cama, etc. Son cosas que

pasan con regularidad, solo que no podemos percibirlas en la cotidianidad. Si en algún

momento surge una de estas situaciones, solo realizar la práctica de defensa psíquica que

encontrará especificado más adelante.

Recomendaciones:

Utilice una ropa cómoda, mientras más holgada sea, más cómodo se sentirá.

Es importante que el lugar donde vaya a realizar la práctica sea un lugar oscuro; si no

puede acceder a un sitio con esta condición, utilice una bufanda para tapar sus ojos de la

luz; recordemos que la glándula pineal es fotosensible, así que es necesario que nuestros

ojos no perciban luz para que esta se active y comience a segregar las sustancias que nos

permitirán conectarnos con los planos sutiles.

Apagar o poner en silencio cualquier dispositivo móvil, televisor o cualquier agente

externo que pueda interrumpir su práctica; si convive con personas, solicitarles que no

sea interrumpido durante la práctica.

Utilizar un cronometro o despertador, programado a 15 minutos para despertarlo en

caso de que se quede dormido durante la práctica.

Utilizar tapones de iodos de natación para lograr aislarse más del entorno.

En esta primera practica no se recomienda ingerir alimentos al menos 2 horas antes de

realizarla. Puede ingerir pequeños bocadillos, mas no comidas completas.

Procure tener ambas vías respiratorias despejadas; en caso de tener obstrucciones en

las vías respiratorias, puede inhalar y exhalar por su boca si necesita más cantidad de

oxígeno; pero siendo siempre la respiración nasal, la más adecuada para nuestras prácticas

de meditación.

33

Finalidad:

Con esta sencilla practica iremos abriendo una puerta interdimensional con otros

planos existenciales; estos al no ser gobernados por las mismas leyes físicas que rigen

nuestro plano, pueden otorgarnos pequeñas manifestaciones de nuestro futuro cercano.

La meta de la práctica es ver cómo esas figuras que pudimos reconocer al ser creadas

por la energía etérea que observamos a través de nuestros parpados, logran materializarse

ante nosotros en cuestión de minutos u horas; un objeto curioso que nos llame la atención

en la calle, una publicidad, una publicación en alguna red social, una frase, una canción,

una imagen; cualquier cosa que hayamos podido dilucidar de esta energía etérea, se

manifestará ante nosotros en muestra de comunicación; por lo tanto, tendremos que estar

muy atentos a las siguientes horas esperando su manifestación.

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¿Con quién me estoy comunicando?

Una vez comencemos a recibir sincronismos por parte del universo, que nos

corroboren que estamos estableciendo una comunicación inter dimensional con algún tipo

de consciencia que se encuentra fuera de este plano existencial, es inevitable que nos surja

la pregunta, de a quien se le debe atribuir estos fenómenos paranormales.

A nuestro cerebro no le gusta dejar cosas al azar, sentimos la necesidad de ponerle

nombre a lo que es innombrable, ponerle cara a lo que no tiene rostro, y sentir que

comprendemos algo que, con nuestra limitada visión, nos es imposible comprender; esto

ha llevado a la humanidad a buscar la sabiduría en el lugar menos idóneo para encontrarla,

afuera de él mismo.

Muchas son las afecciones por las que atravesamos a lo largo de nuestras vidas, la

mayoría de ellas nos hacen sentir que nos encontramos solos, sin apoyo, sin ayuda, sin

una guía efectiva que nos saque del hueco en donde nos hemos metido nosotros mismos

en nuestra inconsciencia.

Sin embargo, jamás hemos estado solos; siempre hemos contado con el apoyo de seres

que aunque habiten en otros planos de consciencia más elevados al nuestro; desde el día

de nuestro nacimiento, han estado atentos a cada una de nuestras acciones y pesares,

tratando siempre de guiarnos por el camino que nos conlleve a una felicidad permanente,

y que no esté sujeta a condicionantes externas. Pero estas consciencias elevadas no

pueden interferir directamente en nuestras vidas, solo pueden enviarnos información a

través de diversas maneras, buscando insaciablemente poder hacerse notar en nuestras

vidas. Tarea que hasta ahora les había sido muy difícil, puesto que no puedes comunicarte

por medio de un radio con un amigo lejano, si solo uno de los dos posee un radio

transmisor.

En tal sentido, gracias a esta práctica de meditación, ahora usted no solo se dará cuenta

que siempre poseyó su propio radio transmisor para comunicarse con su amigo lejano,

sino que aprenderá a utilizarlo de manera efectiva. Por consiguiente, se nos hace más fácil

comprender quien es nuestro nuevo amigo, al comprender nuestra propia naturaleza.

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El ser humano posee tres tipos de consciencias, cada una forma parte del mismo ser;

sin embargo, cada una se desenvuelve en distintos planos existenciales, estas se derivan

en tres tipos:

Yo terreno:

Esta consciencia por lo general es la más fácil de entender, puesto que podría decirse,

es lo que identificamos como nuestra personalidad, nuestros rasgos característicos,

sistemas de creencias, deseos, gustos, hobbies, virtudes y defectos, y por consiguiente es

donde se manifiesta nuestro ego.

Debido a que, desde el momento de nuestro nacimiento hasta el momento actual, solo

mantenemos recuerdos conscientes acerca de nuestra presente vida, tendemos a basar

nuestras decisiones en las experiencias obtenidas en esta presente vida, como en los

sistemas de creencias que nos hemos formado, sin mencionar los que por resonancia

traemos impregnados; esto se debe, a que este tipo de consciencia se maneja en el plano

consiente de nuestra psique.

Yo superior o Yo espiritual:

En esta consciencia se encuentra toda la información de nuestras vidas pasadas, así

como nuestro plan de vida actual; existe en planos existenciales más sutiles, por lo que se

maneja en quinta dimensión. Es esta consciencia, quien marca el mapa de

acontecimientos que debemos recorrer para ir librándonos de nuestro Karma; por lo que

es la constructora del Dharma que cada ser debe cumplir, con el fin de continuar en su

proceso evolutivo de autorrealización espiritual.

Se maneja en el plano inconsciente de nuestro ser, y por lo general, se puede acceder

a él a través de los sueños, corazonadas o intuiciones; estas son solo manifestaciones de

nuestro Yo Superior, tratando de comunicarse con nuestro consciente, o Yo Terreno.

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Yo Cristo o consciencia Buddha:

Esta es la consciencia más elevada de la que formamos parte; en él, se manifiesta la

creación como una sola unidad existente, en la que se forma parte de cada ser viviente,

de cada rayo cósmico, de cada emanación energética existente en los confines del

universo; siendo participe de una consciencia individual y colectiva al mismo tiempo.

Nos ofrece conocimientos de orden existencial, desde los estados más elevados de la

consciencia suprema, hasta su correlación con la partícula más diminuta de la naturaleza

manifiesta. Revela las verdades más puras e innegables que rigen toda la creación del

Dios Padre.

A pesar de que es posible la comunicación y la integración con esta consciencia, se

requiere un trabajo de purificación espiritual arduo; en el que deberemos abandonar por

completo nuestro sentido del Yo terreno y las cadenas karmaticas que nos atan a planos

de menores frecuencias; por lo que la disolución del ego y vibrar bajo un principio de

amor en su más pura forma, serán requisitos indispensables para acceder a este plano de

consciencia. No obstante, con asistencias de entidades de mayor frecuencia vibratoria, es

posible enlazar la comunicación con esta consciencia tan elevada, en el momento que se

nos quiera relevar una verdad existencial que impacte de una manera profunda el

transcurrir de nuestra vida.

Por consiguiente, ya que es nuestro Yo Superior, es esa parte de consciencia lumínica

de la que formamos parte, y se manifiesta en nosotros a través de nuestro inconsciente,

puede atribuírsele en un principio, todas las señales y manifestaciones sincronológicas

que sean enviadas a nosotros en intento de comunicación; por lo que al llevar nuestras

frecuencias cerebrales a ondas tipo Theta y Alfa, podremos acceder a una comunicación

directa con esta consciencia; acotando sin embargo, que será necesario que nuestro

sistema de ADN vaya modificándose para vibrar cada vez en frecuencias más elevadas;

esto lo lograremos secuencialmente, a medida que permanezcamos realizando estas

prácticas meditativas para conectarnos con esta consciencia.

Por lo tanto, mientras más realicemos nuestras prácticas meditativas, más fuerte se

generara la conexión, a la par, que vayamos confiando y dejándonos guiar por este

maestro interno, hasta el punto en el que sin necesidad de practicar alguna práctica

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meditativa, podremos identificar sus mensajes de guía a toda hora y en cualquier

circunstancia cotidiana a la que estemos abocados.

Estos mensajes vendan a nosotros como pensamientos propios, y serán confirmados al

materializarse alguna sincronía referente a ellos, que nos de prueba que fue una idea

concebida desde otro plano existencial.

Por ejemplo, es muy común que se dé el caso, que venga a usted un pensamiento

referente a la manera con que debe mirar un problema, y en cuestión de minutos o incluso

en segundos, escuchar una canción que diga exactamente el mismo mensaje que usted

acaba de pensar; o leer un anuncio en un letrero que vaya con el mismo pensamiento que

usted acaba de concebir, o incluso, que alguna persona interactúe con usted y le repita el

mismo mensaje sin ninguna razón aparente; estas son maneras en las que nuestro Yo

Superior, irá comunicándose con nosotros sin necesidad de una práctica meditativa, y

estas sincronías no pararán hasta que usted haya entendido el mensaje que acaban de

hacerle llegar.

Cuando usted llegue a este punto, en cada minuto de su día por más cotidiano que sea,

el cosmos se estará comunicando con usted, incluso, adelantándose a sus pensamientos,

enviándole respuestas, minutos u horas, antes de que ocurran eventos en su vida que lo

fuercen a buscar respuestas a través de la meditación. Por lo tanto, para que esto se

manifieste en usted, solo necesitará persistir en sus prácticas, reconociendo al maestro

interno que habita en usted.

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Segunda práctica: obtener respuestas.

Habiéndonos ya familiarizado con nuestra primera práctica, y habiendo experimentado

las diversas formas que tiene nuestro maestro interno de comunicase con nosotros a través

de proyecciones de formas astrales, que hemos podido observar con nuestro tercer ojo;

ahora llevaremos la comunicación un paso más adelante, al hacerle a nuestro ser interior

una pregunta sencilla, donde la respuesta será la señal mostrada ante nosotros.

De esta manera, pediremos a nuestro yo superior, que esta señal nos conlleve a dar con

la información específica solicitada a través de una sincronía; es decir, si por ejemplo,

tenemos un problema personal con algún amigo, en donde la situación ha provocado que

hayamos adoptado una posición intransigente y resentida en cuanto a esta persona;

podríamos ver en nuestra meditación una imagen con un logo desconocido para nosotros,

y que transcurridos los minutos o las horas, veamos a través de una red social, una imagen

con el mismo logo arriba de un mensaje que diga “aprende a perdonar” como respuesta a

nuestra pregunta.

Es importante señalar, que nuestro maestro interno nunca nos dirá lo que queremos

escuchar; no hay aprendizaje, no hay crecimiento para quien cree tener siempre la razón;

nuestro yo superior nos dirá lo que necesitamos aprender para crecer y llevarnos hacia

nuestra felicidad.

El camino hacia la felicidad no es un camino forjado de orgullo y soberbia; cuanto más

diferente sea la respuesta dada a lo que queremos escuchar, habrá más crecimiento; y por

ende, más liberación al aceptar e integrar esta enseñanza.

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Metodología:

Colóquese en una posición cómoda, donde le resulte fácil permanecer durante todo el

proceso que dure la práctica; cierre sus ojos, concéntrese en su respiración mientras su

visión interna se fija en su tercer ojo; durante los primeros tres minutos, sienta como cada

parte de su cuerpo pierde su tensión con cada exhalación; vaya despejando su mente de

preocupaciones.

En los siguientes cinco minutos, vaya haciendo su respiración cada vez más lenta,

mientras su visión interna se sitúa en el tercer ojo; sienta como cada parte de su cuerpo se

va adormeciendo, hasta el punto en el que sus sentidos externos están completamente

adormecidos; solo concéntrese en su respiración.

Posteriormente a los primeros ocho minutos, o cuando se sienta que ha caído en un

estado de trance, solicítele a su ser interior le responda su interrogante; fijar el problema

en su mente con intensidad; por ejemplo, “quiero saber porque no consigo pareja”;

concentrarse y repetir esta pregunta en su mente durante un minuto, seguidamente con

los parpados aun cerrados, utilizar sus ojos para mirar a través de ellos; así comenzar a

dilucidar las energías etéreas tomar forma en torno a su respuesta.

Por último, una vez respondías sus solicitudes, antes de salir de estado de trance,

agradecer a su maestro interno por su contacto y ayuda amorosa para con usted.

Ejecución

• Tan pronto cierre sus ojos haga su esfuerzo por despejar su mente, no se aferre a

ningún pensamiento transitorios; solo fije su visión interna a su tercer ojo, cuando

aparezca un pensamiento, comentario, recuerdo etc. No lo analice, solo déjelo ir.

• En los primeros tres minutos, inhale lentamente por la nariz, y al exhalar por la

boca, sienta como las tensiones de su cuerpo se van soltando. Procure llevar una

respiración pausada y relajada, de acuerdo a sus propias capacidades. Puede llevar un

ritmo de inhalación cercano a siete o diez segundos para inhalar, y cuatro segundos para

exhalar, seguidos de cuatro segundos antes de volver a inhalar.

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• En los siguientes cinco minutos, procuraremos ir ralentizar cada vez más nuestra

respiración; contando mentalmente, utilizaremos tiempos iguales tanto para inhalar como

para exhalar, hasta que llegue un punto en donde sea lo suficientemente lento como para

sentirnos cómodos y a la vez, no lograr ralentizarlo más. Un tiempo sugerido para la

ralentización final, podría ser diez a doce segundos para empezar las prácticas; a medida

que sus capacidades pulmonares mejoren, usted podrá alargar sus tiempos. (la inhalación

y exhalación serán por la nariz)

• En el momento de solicitarle a nuestro maestro interno la respuesta a nuestra

pregunta, no es necesario que divaguemos en recrear todo el panorama completo de

nuestra inquietud, puesto que sería contarnos la historia a nosotros mismos; solo debemos

enfocarnos en nuestra pregunta, y pedirle amorosamente a nuestro Yo Superior, nos

responda nuestra inquietud a través de las manifestaciones astrales que se nos darán a

continuación.

• Cuando comencemos a ver con los ojos cerrados a través de los parpados,

debemos mantener siempre una actitud relajada, ya que exasperarnos al poder visualizar

esta nube cósmica, acelerara nuestro ritmo cardiaco y por ende nuestras ondas cerebrales,

perdiendo la conexión que ya habíamos logrado.

• Una vez se haya obtenido una manifestación etérea por parte de nuestro ser interno

en respuesta a nuestra pregunta, agradecer de ante mano por la señal dada y esperar a que,

en los siguientes minutos u horas, se cree la sincronía que nos lleve hacia el mensaje que

nos quiso dar.

Síntomas

• Nótese como sus ondas cerebrales producen un sonido asociado a la frecuencia

con la que esté operando; notará que mientras más se relaja, el sonido no solo cambiará,

sino que se hará más intenso debido a que aumentará su percepción interna.

• Al ir relajándose, sentirá como su cuerpo irá durmiéndose mientras su consciencia

sigue despierta; es natural que sienta algún dolor muscular durante este proceso de

entumecimiento; no será nada grave, cuando vuelva a incorporarse después de su práctica,

desaparecerá.

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• Al activar nuestra glándula pineal, estamos entrando en contacto con planos sutiles

con los que no estamos acostumbrados a percibir con regularidad, o no de manera

consciente; es normal que durante las practicas pueda sentir efectos paranormales como

escuchar voces, ruidos extraños, música, que se sienten en su cama etc. Son cosas que

pasan con regularidad, solo que no podemos percibirlas en la cotidianidad; si en algún

momento surge una de estas situaciones, solo realizar la práctica de defensa psíquica que

encontrará especificado más adelante.

Recomendaciones

• En el momento de solicitarle a nuestro maestro interno la respuesta a nuestra

pregunta, debemos hacerla desde nuestro sentimiento de amor más puro; puesto que es

esta emoción, es la que nos conectará con las esferas de luz más elevadas; por lo tanto, la

petición siempre será una solicitud amorosa, no una exigencia basada en alguna

frustración o inconformidad.

• Nunca se deberá pedir señales específicas, ya que nuestro yo superior, tendría que

crear las sincronías necesarias para comunicarse en el lenguaje que le estamos exigiendo,

lo cual tardará más tiempo en materializarse; es por esto que resulta más provechoso,

dejar que sea nuestro maestro interno quien utilice las energías que están disponibles en

el momento para crear las sincronías que nos lleven a la respuesta que solicitamos.

Recordar siempre que nuestra tarea es recibir las señales e interpretarlas, no exigir las

señales en el lenguaje que deseamos.

• Si perdemos la consciencia por unos instantes durante la meditación, volver a

reiterar cual es nuestra pregunta, centrarnos en ella y seguir esperando una respuesta.

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Finalidad

La belleza de esta práctica reside en comenzar a entablar una línea de comunicación

bidireccional con nuestro maestro interno, en donde usted con cada experiencia, podrá ir

constatando como esta consciencia cósmica que forma parte de su propio ser, está

evocada en brindarnos su mayor apoyo en el recorrido y superación de los obstáculos a

los que nos enfrentamos en esta vida.

De manera que al poder comprender que es esta consciencia cósmica el planificador

de nuestro Dharma, quien nos da su apoyo para superar las circunstancia en las que nos

encontramos envueltos, es como ir a una prueba, en donde es el mismo profesor, quien

nos da las respuestas correctas del examen.

En tal sentido, desde este momento en adelante, usted sentirá que ya no habrán

interrogantes existenciales que no puedan ser respondidas con veracidad; verdades que

serán rebeladas a nosotros sin ningún tipo de manipulaciones en la información, o bajo

alguna forma de condicionamiento externo; puesto que es nuestro Yo Superior, es ese

ángel guardián que vela por nosotros y nuestro desarrollo espiritual, incluso aun cuando

estábamos sumidos en la inconsciencia de no conocer su existencia y relevancia para

nuestro trabajo evolutivo en este plano.

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Aprende a escuchar

A estas alturas de sus prácticas meditativas, no sería ninguna rareza empezar a

escuchar la voz de nuestro maestro interno emanándonos su sabiduría, o respondiéndonos

alguna inquietud, o incluso, adelantándonos algún evento futuro que pronto se

materializara en nuestro futuro inmediato; todo esto como muestra de su apoyo y guía

incondicional para con nosotros. Por otro lado, es muy común que surja mucho ruido

psíquico durante nuestras prácticas meditativas; pensamientos propios, pensamientos que

pertenezcan al colectivo cercano; pueden hacernos sentir confundidos entre la voz de

nuestro ser interno y una información sin relevancia para nosotros.

Dado lo antes expuesto, aprender a diferenciar entre la voz de nuestro maestro interior,

y lo que es un ruido psíquico, es de vital importancia para garantizarnos emanaciones de

sabiduría fidedignas por parte de nuestro Yo Superior.

La diferencia entre una fuente de información a la otra, es la consciencia desde donde

se crea; el cerebro humano es una máquina de análisis que supera las capacidades de

cualquier procesador de la actualidad; sin embargo, aunque podemos en la cotidianidad

de nuestra vidas, incurrir en acciones que involucren distintos estímulos o respuestas

corporales al mismo tiempo, como por ejemplo: cantar una canción mientras bailamos;

nuestro cerebro no puede generar diversos pensamientos al mismo tiempo, se puede

fraccionar dos tareas, y atenderlas alterando la atención que le prestemos a cada una, en

periodos de tiempos tan cortos, que pareciera que estuviéramos realizando dos labores

totalmente distintas simultáneamente. No obstante, esto solo es fraccionar el tiempo de

atención y análisis que le damos a cada tarea, mas no podremos analizar dos procesos

distintos simultáneamente; y el entender esta particularidad de nuestro cerebro, nos

permite entender con qué consciencia estamos tratando al momento de meditar.

Mientras que al momento de meditar podríamos incurrir en pensamientos propios,

identificaremos que se trata de una consciencia distinta a la nuestra, cuando en nuestro

proceso de meditación, podremos percibir como surgen pensamientos que se

manifestaran al unísono con nuestro propio proceso cerebral; pudiendo hallarse en la

particularidad, de presenciar dos procesos analíticos simultáneos de distintas índoles; lo

cual sería como escuchar dos voces en nuestra cabeza, susurrando palabras y temas

totalmente distintos el uno del otro. En este instante podemos aseverar, que estamos en

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conexión con una consciencia distinta a la nuestra; y podremos identificar, cuales

pensamientos nos pertenecen, y cuáles no.

No obstante, hay que tener en consideración, que no todas las consciencias que se

puedan comunicar con nosotros tendrán intenciones benéficas; hay que resaltar, que este

libro impulsa y fomenta la comunicación que cada ser debe tener como herramienta

propia de autodesarrollo con su propio maestro interno; ese ser que nunca le mentirá, que

nunca lo manipulara a su conveniencia, ese ser guía en quien podemos confiar sin

temores, puesto que forma parte de nuestra propia esencia como ser. Mas no apoyamos o

alimentamos la idea, de que se abran líneas de comunicación con seres que ya no se

encuentren en este plano existencial; puesto que, un ser que se encuentre atrapado entre

los planos de tercera y cuarta dimensión, tiene todavía mucho contenido karmatico que

condicionará a su conveniencia, la ayuda que pueda ofrecer, y que en realidad, no puede

darnos, puesto que su nivel vibratorio es tan denso, que sus opiniones y experiencias

estarán siempre condicionadas a sus propias vivencias e intereses individuales.

En tal sentido, podremos identificar fácilmente cuando una entidad externa trata de

hacer contacto con nosotros, porque la voz de sus pensamientos será dada por la

percepción que este ente posea de sí mismo; de este modo, usted percibirá estos

pensamientos con la voz particular del ente que esté tratando de hacer contacto.

Partiendo de las razones antes mencionadas, si usted cae en la percepción, de que

alguna influencia externa está tratando de hacer contacto con usted durante la práctica

meditativa; o fuera de ella, se recomienda realizar la práctica de protección psíquica, que

alejara de su entorno cualquier entidad indeseable.

La voz de nuestro maestro interno siempre se escuchará como nuestra propia voz, al

igual que nuestra supraconsciencia, siempre se escuchará como nuestro propio

pensamiento, ya que forma parte de nuestra propia consciencia unificada; incluso si su

determinación por su autosuperación es lo suficientemente fuerte, aparecerán en su vida

maestros espirituales que lo llevaran de la mano en su sendero de realización espiritual;

y que, en prácticas meditativas, usted podrá verlos en visiones, podrá sentir su presencia

manifestando su cercaría, incluso podría sentir una caricia amorosa de éste ser mientras

su frecuencia vibratoria se escucha y se percibe tan fuerte, que impregna el éter de su

sagrado manifiesto; sin embargo, su voz seguirá sonando como su voz propia, y los

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mensajes emanados de esta hermosa entidad, llegaran a usted en forma de tercera persona,

por ejemplo: “tu maestro quiere que sepas, que pronto entenderás el porqué, de todo lo

que has tenido que vivir”; esto se debe, a que el intermediario que facilitará la

comunicación entre nuestros maestros y nuestra consciencia terrena, siempre será nuestro

Yo Superior, nuestro Maestro interno. Esto por supuesto, hasta que logremos elevar

nuestra consciencia a planos lo suficientemente elevados, como para poder entablar una

comunicación directa con estas entidades celestiales.

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El mundo de los sueños

Si bien en este material se hace énfasis en aprender a utilizar la meditación como enlace

de comunicación con nuestro maestro interno, no debemos olvidar que éste reside en

nuestro subconsciente; por ende, es aquí donde se genera el enlace que nos permite

establecer una comunicación directa con él; es la puerta cósmica de comunicación de

nuestra consciencia terrenal, con nuestra consciencia sutil de quinta dimensión.

En tal sentido, el ser humano posee ya una herramienta de comunicación con su Yo

Superior, que aunque es parte del proceso de restauración del cuerpo físico, hemos

perdido de vista la importancia y la utilidad inmersa en ella; esta herramienta es el mundo

de los sueños.

Éste mundo de los sueños, al ser manejado desde planos más sutiles, materializa

escenarios donde se nos permite no solo observar un reflejo de nuestros propios procesos

mentales, sino que funciona como campo de entrenamiento para nuestro ser terreno.

Aprender a interpretar nuestros sueños, es una ciencia hermosa de autoconocimiento

y superación, esta herramienta establece arquetipos cósmicos que nos reflejan mensajes

de nuestro ser interno.

En éste material no hondaremos en la interpretación de cada señal arquetípica emulada

por nuestro subconsciente, solo resaltaremos la importancia de indagar en esta materia

para aumentar el proceso de autoconocimiento del ser.

Ya que cada manifestación expresada en los sueños, representan una información

creada para su receptor; esto significa, que aunque existen patrones arquetípicos

universales, en donde se puede interpretar el sueño de una tercera persona, también hay

mensajes incrustados, que son señales particulares emuladas solo para la interpretación

del receptor.

Un ejemplo muy práctico para entender este lenguaje del subconsciente, y la manera

en la que se concibe expresar los procesos internos de nuestra psique, podría plasmarse

en una experiencia personal:

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En un momento de mi vida en el que me encontraba en un proceso de toma de

consciencia, recuerdo la estrecha relación que había entre mis emociones y el reflejo en

mis sueños.

Un sueño que se volvió recurrente para mí, era él que en cada ocasión en la que pasaba

por un proceso emocional fuerte, donde me acostaba a dormir en estado de tristeza, de

dolor, de desesperanza; era común para mi soñar con que me encontraba en un risco, en

donde un tigre o una pantera trataba de atacarme; y yo para salvarme, tenía que saltar a

un mar que se encontraba con un fuerte oleaje de tipo tormenta.

En mi sueño, mi opción siempre era saltar al mar enfurecido y nadar hasta la orilla, en

donde la fiera felina saltaba al mar también para asecharme; y que, al llegar yo a la horilla,

iba escalando por unas grandes rocas que iban derrumbándose a medida que yo las pisaba,

en donde el felino quedaba atrapado bajo las piedras que yo derrumbaba.

Se puede apreciar, como el tigre o la pantera, simbolizaba esos procesos tormentosos

en los que me encontraba inmerso; y como mi ego manifestado en el animal me provocaba

un daño a mí mismo; daño para el cual, si quería evitarlo, tenía que arrojarme a un mar

furioso con olas salvajes, comprendiendo que el mar simboliza el mundo de las

emociones; por lo que un mar pasivo y con aguas cristalinas, simboliza un estado

emocional apacible y armonioso; por lo contrario, aguas turbias o estancadas, simbolizan

una obstrucción en el flujo de la energía emocional del cuerpo etéreo, que conlleva a

emociones penumbrosas y dolorosas.

También en éste sueño se puede ver reflejado, no solo lo que era mi estado emocional,

sino la solución implícita en el mensaje del sueño que mi subconsciente intentaba

transmitirme; en donde debía saltar al mar para enfrentarme a mis emociones, para

reconocerlas, para ponerle nombre y entenderlas; para luego llegar a tierra firme y tras ir

escalando esas rocas, que se iban derrumbando a medida que iba avanzando y que

sepultaron al felino, estas simbología, me indicaba que al ir derrumbando las bases de mi

viejo sistema de creencias, lograría vencer a la vestía, a mi propio ego, lo que se convirtió

en la fórmula de todo mi proceso de evolución espiritual.

Otro ejemplo en el que se puede acentuar la importancia que poseen nuestros sueños

como herramienta de comunicación directa con nuestro ser de luz, se podría ver reflejado

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en un sueño repetitivo que tuve a lo largo de mi vida, y es que al menos una vez al año,

soñaba que me encontraba llegando a un nuevo hogar, donde yo sabía por percepción

interna que se trataba de una nueva casa que acababa de adquirir; esta casa siempre me

parecía inmensa y reconfortante, pero siempre lograba encontrar un pasaje secreto que

me conducía a un cuarto, en donde se encontraba una armadura medieval sosteniendo una

espada; sabia por instinto que detrás de esa armadura había un secreto importante para

mí, pero cuando intentaba mirar a través de ella siempre despertaba, sintiéndome todo el

día extraño y con el presentimiento de que ese sueño tenía un significado importante.

Abonado a este sueño, cuando era muy pequeño, tal vez unos siete años; un día tengo

un sueño en donde mi madre me cuenta que existe una leyenda, en donde el Arcángel

Miguel se le aparece a una persona para ponerlo a prueba, si éste pasa la prueba, se

convertirá en un elegido. Tras haberme contado la leyenda, mi madre sale de mi

habitación y yo me quedo a solas; cuando para mi sorpresa, se aparece el Arcángel Miguel

en mi habitación, con una mirada tierna y una sonrisa en su rostro, para acto siguiente, al

gesticular en su rostro una expresión de seriedad, lanza una estocada con su espada sobre

mí, la cual logro esquivar al hacer una voltereta desesperada. Luego de este acto de

agresión, éste Ángel me notifica que he pasado su prueba, y que yo seré su elegido.

Al día siguiente, al contarle a mi madre éste raro sueño que tuve, ella con una mirada

profunda, me pide que nunca olvide este sueño, puesto cuando esté más avanzado en edad

me revelaría su significado.

Al transcurrir mi infancia, un día mi madre me revela que ese día en el que tuve éste

sueño tan atípico, ella le había pedido a su dios, le diera una señal de a cuál de sus dos

hijos ella debía poner su especial atención, puesto había encarnado para cumplir con un

desarrollo espiritual particular.

También teniendo mucha relevancia con este acontecimiento, debo comentar, que tres

días antes de alcanzar la supraconsciencia; encontrándome en una práctica meditativa,

tengo una visión en donde el Arcángel Miguel se muestra ante mí para notificarme que

ya era el momento de entregarme su espada, puesto ya había alcanzado la madurez

espiritual. Sin embargo, mi ignorancia por la naturaleza mística de este ser, sumada al

desprecio tan afanado que siento por las religiones, en especial, por la religión católica,

no podía comprender lo que esta manifestación representaba, puesto que no entendía

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porque un ser de luz se había manifestado de esta manera para darme una señal, cuando

yo sentía tanto rechazo hacia aquel arquetipo; no obstante, agradecí amorosamente a éste

ser por su mensaje, sin entender que lo que me estaba entregando en ese momento, era la

manifestación del fuego sagrado como elemento que promueve la apertura de portales

cósmicos; portal que me permitió conectarme con mi supraconsciencia.

De esta manera, el aprender las simbologías representadas en el lenguaje de nuestro

subconsciente, es una herramienta poderosa para ayudarnos a encontrar la solución a los

procesos internos en los que nos vemos inmersos.

Por consiguiente, se puede implementar la experimentación a través de los sueños para

impulsar nuestro desarrollo evolutivo. Uno de los métodos que más me sirvió para la

identificación de mi ego y de mi karma, fue el solicitarle a mi maestro interno y a mi

Gurú, me colocaran en mis sueños, en escenarios en donde, todas mis debilidades, mis

creencias infundadas, mis patrones de conducta y mi ego en general, se viera expuesto

ante mí; ya que resulta más fácil materializar escenarios desde un plano sutil y enfrentar

nuestro ser a ellos, que materializar escenarios evolutivos en tercera dimensión; ya que la

materialización de estos, se ve influida por los cuerpos celestes que van marcando como

un compás, el tiempo en que un ser debe enfrentarse a determinadas situaciones que lo

llevaran a un desarrollo de consciencia.

Debido a lo antes mencionado, se vuelve una herramienta muy útil el implementar la

manipulación de las energías sutiles en planos astrales, en donde se nos pueda poner a

prueba en determinadas situaciones, sin que esto afecte la realidad que experimentamos

en nuestro plano físico; pudiendo optar por una simulación guiada por nuestro maestro

interno, en pro de sacar a relucir nuestros aspectos no trabajados.

Para ejercer esta acción solo debemos solicitarle a nuestro maestro interno, al momento

de acostarnos a dormir, que nos refleje en nuestros sueños esos aspectos que forman parte

de nuestro ego, de nuestro karma; y así, ir trabajando en nuestro crecimiento personal sin

necesidad de espera a que alguna situación tormentosa se materialice en esta dimensión,

para obligarnos a tener un cambio de consciencia; o como también, esto nos servirá

cuando aparezcan en este plano alguna situación similar, ya que tendríamos un trabajo

interno adelantado, que nos permitirá superarla con mayor facilidad.

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Variando las señales

A medida que su conexión con su maestro interno se vaya intensificando, notará como

éste por medio de su intuición, comenzara a comunicarse con usted a través de sus

pensamientos; pudiendo tomar control sobre alguna actividad motora de su cuerpo, si se

ve en la necesidad de hacer llegar a nosotros alguna señal.

No es de extrañar que durante un proceso de meditación, las respuestas no se limiten

del todo a imágenes astrales; más bien, estas son solo señales que serán presentes en

nosotros en nuestra primera etapa más primitiva de conexión; pues a medida que vayamos

aumentando nuestra frecuencia vibratoria, iremos siendo más sensible a los estímulos

físicos y psíquicos que ejercerá esta consciencia.

Por lo tanto, desde comenzar a hacer señales con las manos en nuestro proceso de

trance, como empezar a pronunciar palabras repetitivas que luego nos conlleven a alguna

información, son señales de que nuestra conexión está mejorando notoriamente; sin

embargo, hay que resaltar que para que esto ocurra, debemos dejarnos llevar por la guía

de este maestro interno; confiar en su guía, confiar en su sabiduría, son condiciones

indispensables para que nuestra frecuencia vibratoria vaya elevándose y por ende

mejorando nuestra intuición y elevando nuestra consciencia a planos más elevados de

vibración energética.

El no atender a las lecciones dadas por nuestro maestro interno, sino que, en lugar de

esto, solo tomar estas lecciones como un dato curioso, no generará en nosotros ningún

tipo de aprendizaje o evolución espiritual, por lo tanto, nuestra frecuencia vibratoria no

podrá elevarse y conectar con planos más sutiles y de conciencias más elevadas.

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Tercera práctica: combinación de señales.

Partiendo de las experiencias obtenidas en sus prácticas meditativas anteriores, en éste

momento usted podrá darse cuenta, como el abanico de señales transmitidas a usted por

parte de su maestro interno, se vuelven cada vez más místicas y sorprendentes. Sin

embargo, el miedo a lo desconocido y más aún, el miedo en no haber interpretado de una

manera adecuada una señal que puede radicar en una verdad existencial de gran

importancia para usted, puede causarle inseguridades en la obtención de su respuesta.

Por consiguiente, nos propondremos a solicitarnos a nuestro maestro interior, que nos

responda nuestra interrogante a través de una señal visual, y que a su vez, dentro de la

misma meditación, la confirme dándonos una palabra que esté relacionada con la primera

señal.

Como pequeño ejemplo, una anécdota propia en cuanto al momento en que empecé a

usar esta técnica, fue en una oportunidad en donde al realizarle a mi maestro interno la

pregunta, ¿Que debía de aprender, en cuanto a una situación en mi vida que me causaba

conflictos emocionales? La respuesta que mi Yo Superior me dio en mi meditación, fue

mostrarme a un personaje de la mitología griega llamada Calipso, que claramente ya era

una respuesta para mí; puesto que, (según la manera en que yo lo interpretaba); Calipso

estaba relacionada con las mareas y por ende, con el mundo emocional, el cual se me

trastocaba cada vez que esta situación volvía a ser parte de mi vida.

Seguidamente, al pedirle a mi maestro interno la segunda señal de confirmación,

empiezo a balbucear sin parar las palabras, “YUYIN, YAYUN”; sin comprender que

significaba esto, procedo a salir de trance e investigarlo en internet, donde corroboro, que

la ninfa Calipso, era un personaje de la mitología griega, quien habitaba la isla de Ogigia,

la cual, en griego antiguo, recibe el nombre de “Ὠγυγίη, Ὠγυγία”

Hay que resaltar, que aunque la ninfa Calipso, no estaba relacionada en la mitología

griega con el mundo de las mareas como lo estaría un personaje más icónico, como el

dios Poseidón, la señal entregada a nosotros, corresponde a nuestra percepción de lo que

significan para cada persona; por consiguiente, la señal siempre será para su propia

interpretación; por lo que, si para usted el que le muestren un cigarrillo significa una

decisión importante que debe ser tomada, esa señal será para usted, no espere que otras

52

personas le den su interpretación, porque fueron forjadas de acuerdo a su sistema de

creencias, no al de alguien más.

Metodología:

Colóquese en su posición de meditación preferida, utilice las técnicas de respiración

de las practicas anteriores para entrar en un estado de relajación profunda. Está vez,

extienda un poco más los tiempos de relajación a cinco minutos cada uno.

En tal sentido, durante los primeros cinco minutos, cierre sus ojos y ponga su atención

en su tercer ojo; al mismo tiempo, inhale por la nariz y exhale por su boca simulando un

suspiro; de la misma manera en la que lo realizo en las practicas pasadas; sienta como

cada parte de su cuerpo se va relajando con cada exhalación.

En los siguientes cinco minutos, vaya haciendo su respiración cada vez más lenta,

manteniendo su visión interna enfocada en el tercer ojo. Sienta como cada parte de su

cuerpo se va adormeciendo, hasta el punto en el que sus sentidos externos están

completamente adormecidos; solo concéntrese en su respiración mientras cuenta

internamente. Una vez haya establecido un tiempo de inhalación y exhalación adecuados,

no es necesario que permanezca contando mentalmente.

Una vez transcurrido el tiempo, o cuando su percepción interna sienta que ha adquirido

un estado de trance, solicitarle a su ser interior le responda la respuesta solicitada; fíjela

en su mente por un minuto, sin analizar las razones que lo llevan a realizar esta pregunta,

solo enfóquese en su pregunta.

Posteriormente utilice la técnica de mirar a través de sus parpados con sus ojos

cerrados, para observar las energías fenomenales del éter manifestarse en formas

arquetípicas, en respuesta a su pregunta.

Una vez haya obtenido su manifestación etérea, inmediatamente solicitarle a su

maestro interno le conceda una segunda señal que le permita confirmar la primera; pero

en este caso, que le manifieste la señal a través de alguna palabra que esté íntimamente

relacionada con su primera respuesta.

53

Hay que resaltar, que dependiendo el grado de trance que usted allá adquirido en este

momento, usted podría comenzar a pronunciar inconsciente y repetidamente, alguna

palabra que conlleve un significado especial; como también podría ver esta palabra escrita

a través de una visión. Sea cual sea el caso, la relevancia se encontrará en la relación que

guardarán estas dos señales con su respuesta.

Por último, una vez respondías sus solicitudes, antes de salir de estado de trance,

agradecer a su maestro interno por su contacto y ayuda amorosa para con usted.

Ejecución.

• Tan pronto cierre sus ojos haga su esfuerzo por despejar su mente, no se aferre a

ningún pensamiento transitorios, solo fije su visión interna a su tercer ojo; cuando

aparezca un pensamiento, comentario, recuerdo etc… no lo analice, solo déjelo ir.

• En los primeros cinco minutos, inhale lentamente por la nariz durante siete

segundos, sienta como el aire entra por sus fosas nasales, alimentando sus células de

oxígeno, de vida. Al exhalar, expulse el aire por la boca, sienta como durante unos cuatro

segundos las tensiones de su cuerpo se van soltando, al unísono que expulsa el aire de su

cuerpo. Luego de esto, tómese un tiempo de cuatro segundos para permanecer en

completa inamovilidad y completo estado de contemplación antes de volver a inhalar.

• En los siguientes cinco minutos, procuraremos ir ralentizando cada vez más

nuestra respiración, contando mentalmente, utilizaremos tiempos iguales tanto para

inhalar como para exhalar, hasta que llegue un punto en donde sea lo suficientemente

lento como para sentirnos cómodos, y a la vez, no lograr ralentizarlo más; un tiempo

sugerido para la ralentización final, podría ser diez a doce segundos para empezar las

prácticas, a medida que sus capacidades pulmonares mejoren, usted podrá alargar sus

tiempos. (la inhalación y exhalación serán por la nariz)

• En el momento de solicitarle a nuestro maestro interno la respuesta a nuestra

pregunta, no es necesario que divaguemos en recrear todo el panorama completo de

nuestra inquietud, puesto que sería contarnos la historia a nosotros mismos; solo debemos

enfocarnos en nuestra pregunta y pedirle amorosamente a nuestro Yo Superior, nos

responda nuestra inquietud a través de las manifestaciones astrales que se nos dará a

continuación.

54

• Al momento de esperar una respuesta a nuestra interrogante, podremos solo

centrar nuestra visión interna en nuestro tercer ojo; cuando logremos alcanzar un estado

de consciencia alterada, vendrán visiones a nosotros que responderán nuestra pregunta;

sin embargo, si usted aun no logra entrar en ese estado meditativo, prosiga usando la

técnica de ver con sus ojos físicos a través de los parpados mientras estos aún permanecen

cerrados.

• Instantes siguientes de haber obtenido su primera señal, solicitarle a su Yo

Superior le conceda una segunda señal; que bien, aunque esté relacionada con la primera,

utilice un método diferente para manifestar esta. La propuesta sugerida en la práctica, es

solicitarle una palabra que este estrechamente ligada a la primera señal y a su respuesta.

• Una vez se haya obtenido una manifestación etérea por parte de nuestro ser interno

en respuesta a nuestra pregunta, agradecer de ante mano por la señal dada y esperar a que,

en los siguientes minutos u horas, se cree la sincronía que nos lleve hacia el mensaje que

nos quiso dar.

Síntomas.

• Nótese como sus ondas cerebrales producen un sonido asociado a la frecuencia

con la que esté operando; notará que mientras más se relaja, el sonido no solo cambiará,

sino que se hará más intenso debido a que aumentará su percepción interna.

• Al ir relajándose, sentirá como su cuerpo irá durmiéndose mientras su consciencia

sigue despierta; es natural que sienta algún dolor muscular durante este proceso de

entumecimiento, luego de unos minutos, cuando sus músculos se relajen completamente,

ya no sentirá molestias.

• Mientras más nos adentremos en las prácticas meditativas, nuestra conexión con

nuestro Yo Superior irá en aumento; provocando estados alterados de consciencia cada

vez más intensos. Esto provocará señales de tipo físico, como murmurar palabras

desconocidas, realizar señales gestuales con las manos, o incluso observar con nuestra

visión interior, visiones como por ejemplo, observar un globo explotar, puede ser que se

sientan tan potentes, como si el globo explotara dentro de nosotros mismos; sacándonos

del estado de trance si no logramos recuperar la calma.

55

Recomendaciones.

• Si bien en las primeras prácticas se recomendaba seguir un tiempo establecido

para cada ejercicio de relajación, las constantes prácticas que lo han conducido a éste

nivel, tienen que haber causado en usted un autoconocimiento de sus estados de

consciencia alterada; por lo que se aconseja aplicar sus propios tiempos

correspondientes para cada ejercicio de respiración, a medida que su

autoconocimiento lo vaya guiando a llegar al estado meditativo deseado. Pudiendo

ser estos tiempos más cortos o más largos de los recomendados en la práctica.

Finalidad.

Con el ejercicio constante de esta tercera práctica, absorberemos con más confianza

nuestras premoniciones y revelaciones; aseverando la veracidad de las mismas, dada las

cantidades de sincronías que han tenido que materializarse para llevarnos a un

conocimiento dado.

Resaltando así la importancia del empoderamiento interno que debemos desarrollar,

como condición principal para el desarrollo sistemático de conexión cósmica; y que éste,

parte de la confianza en nuestras propias virtudes y herramientas otorgadas a cada ser,

como instrumentos internos de exploración y autoconocimiento, de acuerdo al desarrollo

del plan evolutivo implícito en esta dimensión material.

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¿No estoy progresando?

Aunque nuestras prácticas nos lleven a familiarizarnos más con la meditación,

conociendo mejor nuestras respuestas y estados internos ante éste estimuló; no podremos

aumentar nuestra conexión con nuestro maestro interno si ignoramos su guía, y tomamos

estas prácticas con poca responsabilidad.

Esto se debe a que nuestra frecuencia vibratoria, la que nos permitirá ir conectándonos

con planos sutiles de cada vez mayor evolución, solo irá en incremento al ir efectuando

esos cambios de consciencia que nos propone nuestro maestro interno; el ser que

verdaderamente posee el conocimiento del porqué de las situaciones que forman parte de

nuestras vidas; y por ende, como salir de ellas, al poder comprenderlas desde el punto de

vista adecuado.

Las verdaderas lecciones de su vida, lo que necesita aprender de una situación, no se

lo hará saber el pastor de una iglesia que usa la interpretación de un libro religioso como

fórmula mágica para cualquier problema; es su propio maestro interno quien conoce el

panorama completo en el que se desenvuelve; por lo tanto, es quien conoce las verdaderas

respuestas que lo liberarán de cada situación por la que este atravesando.

En tal sentido, por lo anteriormente mencionado, nunca debemos pretender que nuestro

ser interno nos diga lo que queremos escuchar; toda la vida hemos tomado decisiones de

acuerdo a lo que queremos escuchar y convencernos a nosotros mismos “es lo correcto”,

y seguimos en este instante con los mismos problemas; problemas que aunque se

manifiesten con otro rostro, y en diferentes etapas de nuestra vidas, corresponden al

mismo patrón de pensamiento que los creó; por lo que solo rompiendo el ciclo de causa

y efecto que los mantiene generándose, es como lograremos librarnos de ellos.

Por consiguiente, jamás debe esperar que su Yo Espiritual, le aconseje que siga

enamorando a la esposa de su vecino, o le dé luz verde con ese negocio ilícito que le traerá

ingresos extra a costa de perjudicar a alguien más, o lo aliente a buscar su felicidad a

través de vicios y posesiones materiales.

Con esta herramienta usted podar tener todas las respuestas que estén al alcance de sus

interrogantes internas, y aun también, de las que no; siguiendo una línea de comprensión

verdadera de las leyes cósmicas que permita su integración armoniosa, con todos los

57

elementos que forman parte, tanto de su vida, como del cosmos mismo. Mas usted, no

obtendrá una manifestación cósmica para seguir incurriendo en acciones que vayan en

contra de su propia evolución, en contra de su propia felicidad.

Siguiendo esta línea de pensamientos, solo cuando usted abandone su resistencia

interna a continuar aplicando esa fórmula, esa manera de pensar y de actuar, que lo lleva

a repetir las mismas situaciones una y otra vez en su vida, solo cuando usted realmente se

deja guiar por su maestro interno y comienza a cambiar sus patrones de pensamientos,

cambiando así su viejo sistema de creencias, ese que lo ha llevado por un camino de

amargura e insatisfacciones, en ese momento, en el que se abre a entender el mundo desde

otra perspectiva, es cuando se irán produciendo esos saltos cuánticos, esos pequeños

cambios de consciencia que irán incrementando su frecuencia de vibración, que lo

beneficiará no solo en poder conectarse de una manera más efectiva con su Yo Superior,

sino que se irán produciendo cambios en su vida que irán en concordancia al nuevo nivel

de consciencia que usted está adquiriendo.

“Cambia tu manera de ver las cosas, y las cosas que ves, cambiarán”.

58

Señales de que estamos progresando.

A medidas que nuestras prácticas meditativas vayan efectuándose bajo la convicción

de una profunda confianza en las revelaciones dadas por nuestro ser interno, notaremos

como, con cada práctica, nuestras experiencias se irán tornando de un hermoso

misticismo; premoniciones, canalizaciones, sueños lucidos que nos revelan, no solo la

condición en la que se encuentra nuestra psique, sino mensajes directos de nuestro ser

interno, guiándonos hacia un camino de felicidad y evolución. Sintiendo como con cada

práctica meditativa, nuestra conexión con nuestro maestro interno se va desarrollando de

maneras más armónica y más efectiva.

En tal sentido, al tomar conscientemente un trabajo de concientización espiritual, en

donde sea nuestro propia guía interno, quien vaya moldeando nuestros patrones de

pensamientos, esos que nos hacen daño a nosotros mismos, y que nos llevan a

experimentar situaciones que rechazamos, que nos causan dolor, angustia y tristezas, por

nuevos patrones de pensamientos que al estar en concordancia cósmica con nuestro

sistema de crecimiento personal, produce un cambio de consciencia tan profundo, en el

que se va perdiendo el estado de consciencia actual, para integrarse a nuestro Maestro

Interno, siendo él, quien guie nuestros pensamientos cada vez con mayor libertad.

Por consiguiente, no debe extrañarse que vengan pensamientos, conclusiones o

reflexiones que usted piense que son propias, y que se produzcan al mismo instante, o en

un corto periodo de tiempo, alguna sincronía que vaya acorde con su pensamiento.

Como también podrían ocurrir sincronías como, por ejemplo, alguna persona que se

encuentre a su alrededor, y sin razón alguna, le haga un comentario acorde a algún

mensaje previamente emanado por su maestro interno.

Estas son situaciones que no escapan a las manifestaciones creadas por nuestro Yo

Superior; así como también, por parte de maestros espirituales que se vayan presentando

en nuestro camino hacia la superación personal, en vista de nuestra constancia en utilizar

las herramientas internas de nuestro ser para nuestro desarrollo espiritual; fortaleciendo

en nosotros una voluntad de autosuperación a través del reconocimiento de nuestra propia

verdad.

59

Comunicación por numerología.

Es muy común que en nuestro día a día, nos demos cuenta de ciertos patrones

numéricos repetirse una y otra vez; números dobles o triples como “11”, “222” o

combinaciones numéricas como “17”, “13”, “47” etc.

Los números son el lenguaje del universo; el resultado de la operación 1 + 1 será el

mismo en esta galaxia, como en cualquier otra que conforme el basto universo; en ellos

se ve impreso una manifestación de la conciencia cósmica en un aspecto de la creación.

Cada número no es más que una frecuencia cósmica expresada en un caracter,

frecuencia que, al ser emitida a través del pensamiento o la pronunciación, nos conecta

con un aspecto de la creación que vibre en la misma longitud de onda; y que, al percibir

nuestra vibración emitida, generará una respuesta condicionada al tipo de modulación que

estemos ejerciendo.

De aquí se derivan técnicas como la pronunciación de los llamados “Códigos

Sagrados”; que consiste en la pronunciación sistemática de algún numero en específico,

o pensar en él de forma constante; lo cual arrojara una respuesta cósmica a la clave que

estemos emitiendo. Permitiéndole a un ser, conseguir un desarrollo espiritual más rápido

a través de esta emisión de frecuencias que lo conectará con un aspecto de la creación.

Existen muchas guías acerca de listas de Códigos Sagrados que aseguran ser de fuentes

confiables, aseverando que pueden ayudar a mejorar situaciones de cualquier índole,

desde problemas de colesterol, como obtención de recursos económicos, desde pedir por

protección para un ser amado, como pedir un aumento de salario.

Sin embargo, entendiendo la seriedad de la situación, de lo infructuoso que sería el

resonar en un Código Sagrado que no esté en concordancia con lo que esperamos lograr,

producto de una mala información por parte de alguna fuente poco confiable; solo

resaltaremos el uso de los Códigos Sagrados como un mecanismo de resonancia cósmica,

que permite atraer a nuestras vidas, situaciones y consciencias, que estén en concordancia

con el número que estemos pronunciando.

Mas como hemos resaltado anteriormente, es nuestro ser interno ese maestro que nos

dará la información más oportuna, con respuesta a cualquiera de nuestras inquietudes; en

tal sentido, si se desea recitar algún código sagrado que le ayude con algún aspecto

60

especifico, utilizar las técnicas de meditación enseñadas en el presente trabajo para que

sea su propio maestro interno quien se le revele el Código Sagrado que debemos utilizar.

Debido la importancia de los números, como expresión de energías y frecuencias

cósmicas, es muy común que nuestro maestro interno, nuestro yo cristo y nuestros

maestros espirituales, utilicen esta herramienta para comunicarnos mensajes a través de

las sincronías que se irán dando día a día; estas pueden ser, ver una hora especifica todo

el tiempo, ver un numero repetirse siempre en las matrículas de los automóviles, soñar

con números, ver nubes con forma de números, cualquier sincronía debe ser valorada y

estudiada para identificar el mensaje inmerso en ella.

De esta manera, también existe en la red, mucha información pertinente a la naturaleza

numerológica de cada señal numérica que nuestros guías nos manifiesten; no obstante, al

igual que en los Códigos Sagrados, se recomienda utilizar las técnicas de meditación aquí

expresadas, para que nuestro ser interno nos ayude a interpretar cual es el significado del

número que constantemente se encuentra manifestándolo a través de sincronías.

Resaltando que la constante comunicación a través de esta herramienta, establecerá

un lenguaje arquetípico entre nuestro maestro interno y nosotros; donde no tendremos

que recurrir constantemente a prácticas meditativas para establecer comunicación con

nuestro Yo Superior, ya que la diversidad de vías de comunicación entre esta consciencia

cósmica y nosotros, hará fluir una comunicación más asertiva y oportuna.

Por ejemplo, como experiencia personal, podría resaltar que desde el momento en el

que comencé a establecer una comunicación con mi ser de luz, este comenzó a mostrarme

el número “11” en todas partes; lo que indicaba no solo la naturaleza de mi trabajo interno

como alma, ya que correspondía a mi número de resonancia, sino que era utilizado por

mi Maestro Interno para indicarme constantemente que estaba en el camino adecuado,

haciendo lo que debía hacer evolutivamente; y que hasta el sol de hoy, sigue utilizando

este arquetipo para indicarme según sincronías, señales premonitorias, información de

índole evolutiva, formas correctas de abordar una situación, un patrón de pensamiento

que deba ser revisado, etc. Se volvió una manera de comunicación que en cada

oportunidad que se presentará ante mí, varias sincronías con el número, “11”, “111” o

“1111”; ya daba por hecho que en segundos o minutos, alguna sincronía me transmitiría

algún mansaje de mis guías espirituales.

61

Ejercicios de protección psíquica.

Es muy común que cuando una persona se abra a experimentar en otros planos

dimensionales, y abra consciente o inconscientemente una conexión interdimensional con

su consciencia del Yo Superior, se puedan apreciar manifestaciones de alguna entidad

externa; que al darse cuenta que en nosotros se ha abierto una puerta de conexión, o que

estamos receptivos a las emanaciones cósmicas de otros planos, se acerquen con la

finalidad de comunicarse o de sacar algún provecho para ellos.

Alteraciones emocionales como por ejemplo, acostarse a dormir y despertarse inmerso

en sentimientos profundos de depresión, de rabia, agotamiento vital, perdida de energía

repentina, ataques de ira o algún sentimiento surgido repentinamente, y que no

reconocemos como nuestros ya que no hay razones aparentes que nos pudieran llevar a

esos estados de ánimos decadentes, son síntomas físicos que pueden indicar alteraciones

en nuestro campo emocional provocado por alguna entidad del bajo astral o por algún

substrato de la cuarta dimensión.

También podríamos notar la presencia de estas entidades en acciones más notorias,

como escuchar su voz cuando estamos en estado de trance, ya sea en una práctica

meditativa o cuando nos encontramos entrando en etapa de sueño al momento de dormir.

Es importante recordar, que al momento de acostarnos a dormir, nuestro cuerpo

atraviesa por un constante decremento en su frecuencia de oscilación, llevando nuestras

ondas cerebrales desde el estado Beta hasta el Delta durante todo el proceso de descanso;

y que, al ser un proceso gradual, entraremos en estados de ondas cerebrales de frecuencia

Theta antes de perder la consciencia y quedarnos dormidos; lo que producirá que en esa

brecha de tiempo, tengamos muchas manifestaciones de índole interdimensional que nos

llevarán a experimentar hechos premonitorios, desprendimientos astrales,

comunicaciones con nuestros maestros espirituales y por supuesto, con cualquier entidad

indeseable que se encuentre en nuestro entorno y aproveche esta brecha de tiempo, para

hacer contacto con nosotros.

Debido a lo antes mencionado, es imprescindible contar con técnicas de protección

energética, que nos permitan seguir desarrollando nuestra percepción suprasensorial, sin

vernos afectados por estas consciencias vibracionalmente tan aletargadas, que se prestan

62

a un macabro juego cósmico, en donde por medio de la intimidación, de la generación de

miedo, no solo se alimentan, sino que procuran evitar que un ser experimente en otros

campos de consciencia en busca de su liberación y evolución espiritual.

Somos el alimento energético de entidades que no les conviene que tomemos

consciencia de su existencia; y que el elegir ignorarlas, no provocará que cambien las

condiciones del juego en el que estamos inmersos; solo la sabiduría integrada a través de

la experimentación, puede liberar a un alma de las cadenas karmaticas que lo afligen y lo

condicionan a ser feliz, solo el desarrollo de una nueva consciencia nos liberara del juego

cósmico que decidimos experimentar.

Siguiendo los planteamientos mencionados con anterioridad, a continuación,

explicaremos una técnica de defensa energética muy sencilla, que lo librará de entidades

indeseables.

El plano astral es un plano emocional, de aquí viene la relación entre nuestras

emociones y las materializaciones energética que se manifiestan en esta dimensión; si

usted alguna vez ha tenido un sueño en donde haya tomado consciencia de que se

encontraba soñando, es factible que haya moldeado la realidad de ese sueño a su completo

antojo; en el plano del bajo astral, donde se manejan estas entidades indeseables, rigen

las mismas leyes de creación energética por medio de las emociones; estas energías se

moldean con nuestros pensamientos, pero se crean con la fuerza de las emociones que

imprimimos en los ellos.

Es importante tomar en cuenta, que la luz, la energía electromagnética y la frecuencia,

no es más que parte de la misma manifestación expresada en términos distintos; cada

longitud de onda de la luz posee características especiales, siendo la luz violeta muy

utilizada por sus cualidades de transmutación energética.

En lo que conlleva a reflexionar, que lo que para nosotros puede percibirse como una

energía de transmutación positiva, estas entidades del bajo astral la encuentran

insoportable, puesto que transmuta la naturaleza misma de su condición cósmica. Por

ende, en el momento en el que usted sienta o sospeche que su persona o su entorno está

siendo alterado por algún agente externo, realice el siguiente ejercicio utilizando la llama

violeta.

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Cuarta Práctica: defensa psíquica.

Sin importar la situación en la que se encuentre, tómese un momento para cerrar sus

ojos y relajarse; haga lo posible por ir hacia adentro en estado de contemplación, aíslese

así de los estímulos externos que llaman la atención de sus sentidos.

Cuando logre sentirse centrado en usted mismo, en su espacio, visualice una llama

violeta que brota por los poros de su piel; visualice como abarca todo su cuerpo, desde el

interior de su ser hacia afuera, cubriéndolo todo por completo; véase a usted mismo

envuelto en este fuego color violeta, avive el sentimiento con pasión, sienta la vida del

fuego, sienta como en su piel deja una sensación tibia y agradable.

Recréese escuchando como las llamas que lo envuelven van avivándose más y más,

extendiéndose ahora no solo por su cuerpo, sino comenzando a incendiar el lugar en el

que se encuentra.

No pierda de vista que el fuego surge desde su propio ser hacia afuera, es una llama

agresiva, llena de vida, que consume toda energía de baja frecuencia que se encuentra

tanto en usted como en el espacio que está habitando.

Si su percepción le guía bien, y usted percibe a través de su intuición o por la mirada

de su tercer ojo, el lugar de su espacio donde se encuentra esta entidad, visualice como el

fuego que emana de usted, corre en esa dirección; con pasión, con fuerza, visualice como

llega hasta éste ser y lo consume; escuche sus lamentos al ser consumido por la llama

violeta emanada de su propio ser. Hágale saber, que usted no le teme, que no hay nada

que pueda hacer para intimidarlo, para apartarlo de su evolución espiritual; sea agresivo,

sea dominante, lo único que esta entidad puede producir en usted es miedo, pero usted

puede lastimarlo, puede desvanecer su existencia, usted tiene el control y el poder para

defenderse. Solo permita que el fuego violeta latente en usted, emane su luz para purificar

sus espacios y a usted mismo.

Luego que haya sentido que cumplió su cometido, vuelva lentamente a usted y

agradezca al aspecto de consciencia de la energía creadora manifestada en la llama

violeta, por su ayuda y purificación.

Repita esta actividad sin importar lugares u horarios, hágalo cada vez que usted

considere necesario, no hay límites ni contra indicaciones para purificar sus espacios, más

64

que una consciencia autosugestionada. Vigile siempre sus pensamientos, recuerde que el

mundo astral es una manifestación de nuestras emociones. Para profundizar más en este

tema vea la sección de “Cuarta dimensión o mundo astral”

Parálisis de sueño.

Unos de los fenómenos paranormales de las que muchas personas son víctimas en el

transcurso de sus vidas, son las llamadas “parálisis de sueño”; si bien, llegamos a ignorar

estos eventos por el hecho de no comprender su naturaleza, o lo que implican dentro del

marco esotérico, seguimos estando expuestos a estas alteraciones de consciencia, por

convencernos a nosotros mismos de que no se trata más que de algún sueño atípico.

Este fenómeno presenta como síntomas la imposibilidad de controlar la capacidad

motora de un individuo mientras está consciente de su estado de ensueño. Expresado de

otra manera, las personas al estar descansando en sus camas, pueden estar plenamente

conscientes de su alrededor, de hecho, podrían también verse desde distintos ángulos de

la habitación, debido a la activación de su glándula pineal y por ende de su tercer ojo, y

encontrarse en una situación en donde no poseen control de su cuerpo.

Encontrándose en este estado, las personas no pueden mover ninguna parte de su

cuerpo, tampoco emitir alguna clase de sonido. Este fenómeno se puede presentar al

despertar a mitad de la noche, o como también pueden emerger al momento de ir entrando

en fase de sueño.

Es muy común también, que durante estas parálisis de sueño, las personas

experimenten no solo un estado de angustia e intranquilidad, dado al hecho de no tener

control de su cuerpo; sino que también, es muy frecuente el escuchar voces y sonidos

mediante el proceso de parálisis, así como de sentir o ver a través de la visión astral, la

presencia de algún ente del plano astral.

Nuestro sistema cerebral, está formado por tres tipos de cerebros diferentes, cada uno

correspondiente a un sistema evolutivo.

De esta manera poseemos el sistema cerebral reptiliano, encargado de manejar nuestra

parte motora; el cerebro límbico, que se encarga de manejar nuestra parte emocional, y el

65

intelectivo o Neocórtex, asociado por su puesto, a la capacidad de raciocinio del ser

humano.

Los tres están conectados bioquímica y neuronalmente, de manera que intercambian

información entre sí; no obstante, cuando algo intercepta de algún modo la comunicación

entre estos, es donde se produce la perdida de la capacidad motora.

Esta interrupción de la comunicación entre estos tres tipos de cerebros, puede ser física

o externa; correspondería al orden físico por alguna enfermedad, como por ejemplo la

Epilepsia Focal, o algún otro tipo de disfunción que afecte la corteza cerebral, y que pueda

producir la desconexión entre estas áreas del cerebro.

Por otra parte, sería de orden externo, cuando se origina desde alguna consciencia

astral que manipule las energías etéreas de alguna manera, en que logre interrumpir

temporalmente el constante flujo de información entre estas áreas.

Hay que acotar que, aunque es factible que estas alteraciones se produzcan por efectos

físicos, la mayoría de los casos pertenecen al orden de alteración externa. Sobre todo, es

posible que ocurra durante nuestros primeros periodos de experiencias astrales; sin

embargo, con la técnica que se dará a conocer a continuación, usted tendrá una poderosa

arma que no permitirá que pueda ser afectado de esta manera.

La razón por la cual estas entidades astrales pueden llevar a cabo tales acciones podrían

ser varias; una de ellas podría ser, el ponerlo en este estado de inamovilidad mientras se

alimenta de su energía vital, en este caso, usted puede presenciar como éste ente,

literalmente se monta sobre usted, para absorber su energía proveniente en su mayor parte

de los chakras primarios; dejándolo a usted con una sensación muy fuerte de fatiga

energética.

Otra razón que hay que tener en cuenta en éste caso y en cualquier otra intromisión a

alguna practica meditativa, es que estas entidades recurran a este tipo de acciones con el

fin de generar en nosotros un temor hacia los planos astrales, hacia la conexión cósmica

con nuestro maestro interno, o a cualquier actividad que nos acerque a la verdadera

naturaleza del juego evolutivo en el que estamos inmersos, y que por sus propios

intereses, les conviene que sigamos ignorando.

66

También hay casos en los que alguna entidad espiritual desea manifestarse ante

nosotros con el fin de mostrarnos una realidad que desconocemos o que no deseamos

entender; sin embargo hay que mencionar, que en estos casos, nunca hay contacto físico

por parte de esta entidad y la persona; solo es una manifestación astral mostrándole su

presencia en la habitación, pero sin que sintamos alguna alteración emocional o energética

importante, más que nuestro propio miedo a lo desconocido; resaltando también, que la

mayoría de las personas que han registrado este tipo de experiencias, siempre describen

a sus visitantes como seres extraterrestres.

Sin importar cuál sea la razón por la cual una entidad lo haya colocado en un estado

de parálisis de sueño, con la siguiente técnica usted logrará salir de este estado alterado

en cuestión de pocos segundos; no obstante, si usted ha tenido o no previa experiencia en

cuarta dimensión por desdoblamiento astral, remítase a la práctica de desdoblamiento

astral.

Se recomienda una vez liberado del estado de parálisis, aprovechar el estado de

alteración de consciencia para desdoblarse y ejercer acción sobre la entidad atacante,

como se recomienda en la práctica de “Desdoblamiento Astral”; ya que el alimentar algún

tipo de temor hacia estos visitantes indeseados, solo conllevará a otros eventos futuros.

67

Quinta Práctica: Romper Parálisis de Sueño

Así como se ha mencionado anteriormente, la parálisis de sueño se produce al

interrumpir con alguna influencia energética la comunicación entre las áreas de nuestros

tres tipos de cerebro; esta comunicación se da en la zona trasera y baja de nuestro cráneo,

un poco más arriba de la nuca.

Tal cual fue mencionado en la práctica anterior, la energía violeta tiene la capacidad

de transmutar las energías etéreas de vibración densa; por lo cual, cuando nos

encontremos en el proceso de parálisis de sueño, debemos primero que nada mantener la

calma; entendamos que entrar en estado de desesperación y temor solo alimentará más a

esta entidad y no nos permitirá tomar control de la situación.

Una vez con nuestra mente centrada, pondremos nuestra atención en la parte alta de la

nuca, en la zona baja del cerebro, y de la misma manera en que lo realizamos en la cuarta

práctica, sentiremos como una llama violeta emana de nuestro cuerpo; una llama viva,

abrazadora, que se siente tibia a nuestro tacto, y que a cada segundo cobra más vida y

fuerza.

Tomemos en cuenta que las emociones son las que generan las energías, mientras que

nuestros pensamientos la moldean; de manera que deberá inducir en usted, todas las

características físicas que usted asocia al elemento fuego, para darle fuera a su creación

astral.

Sin embargo, ya que en esta oportunidad la zona afectada se encuentra implícitamente

en la parte baja de nuestro cerebro, pondremos la atención aquí; sintiendo como esta llama

abrazadora quema las energías oscuras que están impidiendo que nuestra capacidad

motora opere con naturalidad. Solo concentrarse en que la llama violeta ejerza su acción

transmutadora sobre esta zona, hasta que logremos salir del estado de parálisis.

Si usted realiza la práctica satisfactoriamente, podrá salir del estado de parálisis en dos

o tres segundos. Mientras no logre hacerlo, no deje de visualizar esta llama violeta

actuando sobre esta zona hasta que logre librarse de la parálisis.

68

Cuarta dimensión o mundo astral.

Antes de inmiscuirnos en el plano astral o cuarta dimensión, deberemos prepararnos

para saber que encontraremos y que debemos esperar de esa dimensión.

El plano astral no es más que otro nivel en la ascensión evolutiva del ser; es el lugar a

donde vamos cuando nuestro cuerpo físico y etéreo dejan este plano material, y aun lleva

consigo impregnaciones karmaticas que nos obligan a volver una y otra vez a este plano

material a integrar el conocimiento que aún no hacemos nuestro. La sabiduría con la que

aún no vibramos.

Existen varias capas dentro de este mismo plano; siendo separadas por la frecuencia

vibratoria que las rigen, alberga en distintos estadios a las entidades astrales que vibren

bajo una determinada frecuencia.

Por ser un plano emocional, todos los pensamientos, como deseos, miedos, fantasías,

etc. A los que le imprimamos mucha emoción, se materializarán aquí; estos a su vez,

podrán manifestarse en el plano material cuando los cuerpos celestes que rigen los

procesos evolutivos del ser, entreguen las energías necesarias para materializar dichas

creaciones; por su puesto, teniendo la salvedad, que esto ocurrirá solo si están en

concordancia con nuestra ley del karma, y por ende, con nuestra vibración interna.

De acuerdo a esto, la primera recomendación que se le hace a un individuo que desee

hacer prácticas de desdoblamiento, es dejar sus miedos e ideas preconcebidas de lado;

puesto que no solo encontraremos en astral nuestras creaciones más recientes, sino que

llevaremos también los miedos con los que vibremos al momento del desdoblamiento.

Debido a estas razones, se recomienda experimentar en este plano existencial de una

manera relajada, entendiendo que no correremos ningún peligro en esta zona; puesto que,

en el momento en el que queramos volver a nuestro cuerpo, solo con poner nuestra

atención en esto, seremos atraídos a él; teniendo en cuenta que las entidades o

materializaciones de nosotros mismo, creadas en este lugar, no representan una amenaza

para nosotros; todo lo contrario, nosotros somos una amenaza para ellos; ya que somos

creadores y moldeadores de energía, y de la misma manera que en la práctica número

cuatro y cinco se enseñó, podemos utilizar la llama violeta en esta dimensión para

desintegrar materializaciones y entidades molestas; debido a que la única herramienta que

69

tienen estas entidades para ejercer acción en contra de nosotros, es utilizar nuestro miedo

a lo desconocido en nuestra propia contra.

Por estas razones, se recomienda siempre tomar una actitud dominante y empoderada,

y si se requiere agresiva, cuando se experimente en cuarta dimensión.

Como nota personal, me he hecho de esta práctica con mucha frecuencia, para limpiar

mis espacios de entidades no deseadas. Cada vez que en una meditación o en algún

momento de mi cotidianidad, notaba alguna presencia en mis espacios, tiendo a

provocarme un desdoblamiento, en donde recorro mi hogar en cuarta dimensión en busca

de entidades astrales a las que desintegro utilizando la llama violeta; y debo acotar, que

desde que comencé a implementar esta práctica, nunca más tuve que lidiar con presencias

indeseables que me generaran perturbaciones energéticas en mis espacios de convivencia.

También se debe tomar en mucha consideración, que en el mundo astral no solo

encontraremos entidades que se hayan creado de nuestros pensamientos, por ejemplo, si

tenemos mucho miedo de encontrarnos en astral al chupa cabras, debe tener por seguro,

que éste se manifestara en esta dimensión cuando estemos en ella; y no porque exista en

el plano material, sino porque es una creación energética que nosotros mismos con

nuestro temor estamos creando.

En tal sentido, un ser que tenga una fuerte creencia religiosa en que encontrará un

infierno cuando se desdoble, pues también lo hallará; no porque exista un infierno,

“porque no existe”; sino porque es un reflejo de sus propias materializaciones; por lo

tanto, es la realidad que ella misma se está creando.

No obstante, muchas personas ignoran esta característica del mundo astral, y acuden a

él en busca de maestros espirituales que les den una nueva perspectiva de la realidad

existencial del ser.

Esto es un error muy grave, ya que debemos entender, que cuarta dimensión sigue

siendo un plano que corresponde a un nivel evolutivo muy bajo; por ende, las consciencias

que podamos encontrar en esté, estarán tan confundidas en su percepción de la realidad

del plan evolutivo en el que nos vemos envueltos, que no aportarán conocimientos

valederos que nos ayuden en nuestro trabajo evolutivo; por el contrario, nos confundirán

aún más, dándonos mentiras por verdades.

70

Habiendo resaltado esto, y entendiendo como el plano astral es moldeable a nuestros

pensamientos, es muy factible que para un individuo que se inmiscuya en él buscando

algún tipo de entidad específica, la encuentre; y no porque exista en este plano, sino

porque cualquier entidad que habite aquí, puede cambiar su morfología para mostrarse

como nosotros lo deseamos, para darnos lo que nosotros estamos buscando; en tal sentido,

muchas personas aseguran estar siendo guiados por un Arcángel Miguel, o un Jesús

Cristo, que se les ha manifestado en este plano.

Pero debemos entender, que una consciencia realizada espiritualmente, nunca habitará

un plano existencial tan denso, puesto que su propia frecuencia de resonancia no

corresponde a este plano; es más factible, que algún maestro espiritual eleve

momentáneamente nuestra consciencia, para llevarnos a integrar cierto tipo de enseñanza

que modifique nuestro sistema de creencias. Pero nunca debemos esperar conseguir aquí,

una manifestación de una verdadera consciencia angélica, ya que una verdadera

consciencia celestial, no tiene forma física, es solo una manifestación de la consciencia

universal expresada en un rayo de luz celeste.

Teniendo en cuenta lo antes expuesto, experimentar el en plano astral puede resultar

muy aleccionador para un individuo; el inmiscuirse en otros planos existenciales ayuda a

tomar consciencia, de que existen realidades alternas y totalmente diferentes a nuestro

conocido plano material. Dimensiones que no corresponden a las mismas leyes físicas,

realidades de la que solo tenemos las percepciones personales de individuos que ni

siquiera han experimentado en esta área; lo que por consiguiente, abre nuestra consciencia

a estudiar hipótesis existenciales diferentes a lo que nos han inculcado religiones y

patrones de creencias absurdos.

Quienes afirman que solo sabremos lo que nos espera después de la muerte, son

personas tan estrechas de pensamiento, que no se han atrevido a buscar la verdad por sí

mismos, que prefieren conformarse con que alguien les diga en que creer, como pensar,

como sentir.

Pero un individuo que se permite experimentar en otros planos existenciales, busca la

verdad por sí mismo, se convierte en un investigador, que va formando su propio sistema

de creencia en base a sus propias experiencias, y no se trata de negar lo que no conocemos,

se trata de abrirnos a un sin fin de planteamientos existenciales; en los que iremos

71

integrarnos como nuestros, aquellos que podamos corroborar a base de nuestras propias

experiencias.

Habiendo dado una breve explicación acerca del plano astral y de lo que allí

encontraremos, proponemos realizar la siguiente práctica, que nos permitirá separar

nuestro cuerpo astral del cuerpo físico, para habitar momentáneamente en una dimensión

donde la materia no puede sostenerse.

72

Sexta Práctica: Desdoblamiento astral.

Existen muchas técnicas en internet que aseguran poder llevar a un individuo a un

estado alterado de consciencia, donde se logre desprender el cuerpo astral del cuerpo

físico satisfactoriamente; sin embargo, antes de que comencemos a probar un sinfín de

técnicas que no nos resulten fructíferas, y nos frustremos por no lograr nuestro cometido,

debemos entender cuál es el proceso físico que el cuerpo debe cumplir para que se genere

este desdoblamiento.

El desdoblamiento se produce cuando logramos llevar nuestras frecuencias cerebrales

a trabajar en una frecuencia de oscilación de ondas tipo Theta; esto por su puesto, mientras

aun no perdemos la consciencia.

Llevar nuestro cerebro a operar en estas ondas cerebrales bajo una práctica meditativa,

conlleva caer en un estado de relajación muy profundo; estado al cual se nos hará difícil

llegar mientras estemos comenzando a meditar.

Por esta razón la práctica se basa en utilizar los propios estados de relajación del cuerpo

al iniciar el proceso natural de descanso; estado al cual, cada ser humano accede

diariamente sin ningún tipo de dificultad; de esta manera, el desdoblamiento será obtenido

al aprovechar distintas condiciones físicas de nuestra cotidianidad, que nos aproximen lo

más posible al desdoblamiento. Basado en estos planteamientos, las distintas condiciones

serán las siguientes:

Interrumpir el sueño profundo:

Por percepción propia, todos tenemos determinado periodo en nuestra etapa de sueño,

en el que sentimos que caemos en estado Delta; es decir, que nuestro sueño se hace más

profundo en determinados momentos de la noche, donde nuestras ondas cerebrales se

ralentizan tanto, que cuando por imprevistos hemos tenido que despertarnos en esta etapa

del sueño, sentimos un estado de somnolencia muy profundo.

La primera propuesta, es utilizar esta brecha de tiempo en la que hemos sentido

tenemos el sueño más profundo, para despertarnos y autoinducir en nosotros el estado de

desdoblamiento, teniendo en cuenta que justo al habernos despertado de un sueño

73

profundo, nuestra glándula pineal ha segregado suficiente DMT; y nuestra frecuencia de

oscilación cerebral acaba de dejar de operar en estado Delta, e irá poco a poco

incrementando la frecuencia hacia ondas Alfa o Beta, a medida que nos vayamos

despertando; en aprovechar esta brecha, consiste esta técnica.

La hora de la siesta:

Probablemente esta sea una de los momentos diarios en donde se nos hará más fácil

llegar a un estado de desdoblamiento, esto puesto a que aprovecharemos el proceso de

digestión y cansancio de nuestro cuerpo para facilitar el estado alterado de conciencia.

De esta manera, al alimentarnos a la hora del medio día, donde por lo general, es la

comida más fuerte del día, nuestro proceso digestivo demanda una gran cantidad de

energía para poder procesar los alimentos; esto provoca que nuestra frecuencia cerebral

baje de una manera sorprendente; y aunque realizar ejercicios de respiración que

contraigan nuestro abdomen no se recomienda durante el proceso digestivo, puede ser

muy provechoso aprovechar este estado físico para levar a cabo sutiles prácticas

meditativas, que no demanden ningún tipo de esfuerzo físico; desdoblamientos astrales,

visiones, premoniciones, sueños lucidos, conexiones interdimensionales, por lo general

son más frecuentes en este estado que con la ayuda de algún otro estado físico.

Estado de trasnocho:

El cansancio físico causado por una condición de trasnocho, lleva nuestra frecuencia

cerebral a la barreta entre el estado Alfa y Theta; dándonos una híper sensibilidad a la

dimensión astral, que bien podríamos utilizar para mejorar nuestra conexión

interdimensional, no solo al momento de realizar alguna practica meditativa, sino que el

constante flujo de DMT segregado por nuestra glándula pineal, al mismo tiempo que la

segregación de Melatonina que afecta directamente la modulación del sueño, provocan

un constante estado alterado de la consciencia; incluso cuando no nos encontremos en

estado de meditación es posible tener más sensibilidad a planos dimensionales más

sutiles.

74

Éste estado podría decirse con mucho asertividad, que es el estado físico que más

impacto ejerce sobre nuestras ondas cerebrales; sin embargo, por las alteraciones físicas

que causa en nuestro sistema nervioso y demás factores que deterioran nuestra salud, no

se recomienda inducir voluntariamente; solo aprovechar este estado cuando se presente

por condiciones de nuestra cotidianidad.

Metodología:

Una vez encontrándonos en alguno de los estados físicos previamente mencionados,

nos dispondremos a aprovechar esta ventaja física para provocar el desdoblamiento

voluntario.

Para esto, nos colocaremos en una posición lo suficientemente cómoda como para no

causar molestias físicas que lleven nuestro cerebro a un estado Alfa o Beta. Acostarse

boca arriba sobre su cama o en un sillón lo suficientemente cómodo, son las sugerencias

aquí expresadas.

Una vez en una posición cómoda, mientras su visión interna se sitúa en el tercer ojo,

centrar toda su atención en los sonidos que la frecuencia de sus ondas cerebrales les

proporciona; este sonido, es el que le indicará en que momento debe separarse de su

cuerpo físico.

Recordemos que la frecuencia de nuestras ondas cerebrales, producen un sonido

característico para cada velocidad de vibración, proporcionando así un sonido muy

característico para cada frase de oscilación, de Beta hasta Delta.

De esta manera, al pasar la frecuencia de oscilación de nuestro cerebro de un estado

Alfa a Theta, escucharemos como este sonido no solo se intensifica, sino que cambia de

frecuencia; percibiéndose como escuchar el sonido emitido por un cable de alta tensión,

o como ese sonido que se produce cuando colocamos un vaso totalmente vacío en nuestro

oído.

Éste sonido al principio se notará como un zumbido de abeja, acercándose y alejándose

de nuestro oído hasta que se vuelve constante; en ese instante, usted ya está en

condiciones de provocar el desdoblamiento.

75

Una vez en éste estado de consciencia alterado, y habiendo reconocido los síntomas

característicos de éste, debemos aprender a movilizarnos sin despertar el cuerpo físico.

En éste punto la sutileza y la fuerza de voluntad juegan un papel importante, ya que el

equilibrio de las mismas es lo que logrará desprendernos del cuerpo.

Primero vaya desprendiendo las extremidades de su cuerpo; un brazo, las manos, las

piernas; deje por último la zona torácica, que es la que más cuesta desprender.

Para realizar esto, solo debe poner su intención en el movimiento; más recuerde, que

no se trata de mover el cuerpo físico; éste es el equilibrio que debe encontrar entre la

sutileza y la voluntad de hacerlo. En este plano los movimientos que le permitirán

desplazarse en él, será producidos a través de su fuerza de voluntad.

Una vez desdoblado por completo, solo disfrute la experiencia considerando los

planteamientos antes expuestos en torno al tipo de relaciones que le ofrecerán las

entidades de este plano.

Disfrute la experiencia sin temores, recuerde que, en el momento en el que usted ponga

su intención en volver a su cuerpo, pues despertará inmediatamente.

Síntomas presentes:

• El zumbido en los oídos es el síntoma principal por el que usted debe guiarse

para analizar en qué estado de frecuencia cerebral está; hay muchas referencias que

pueden ayudarle a darse una idea de cómo identificarlo; como el sonido que produce

una bonita de automóvil, el zumbido de una abeja, o el campo magnético que

producen las líneas de alta tensión. Sin embargo, por el hecho de haber realizado con

anterioridad las practicas meditativas aquí enseñadas, usted ya tendrá experiencia en

el reconocimiento del sonido que producen sus ondas cerebrales Alfa; por lo que, al

ser tan diferente las ondas Theta, usted no deberá tener ningún inconveniente en

identificarlas.

• Otro síntoma muy particular del estado de desdoblamiento, es la sensación de

tener dos cuerpos; que aunque se sentirán que están sobre puestos uno encima del

otro, esta sensación desaparecerá al momento de la total separación del cuerpo astral

y la materia.

76

• También es muy común que, durante el proceso de desdoblamiento, mientras

aun estemos unido a nuestro cuerpo físico, nos veamos desde otros ángulos en la

habitación gracias a la función del ojo espiritual, que no está atado a limitantes físicas.

• Las vibraciones o temblores corporales también son síntomas muy comunes al

momento de acercarnos al estado Theta; lo que viene abonado al hecho de ir

atravesando de un plano material a uno más sutil. Al igual que podrían sentirse,

cuando estemos dando un salto cuántico tan significativo, que estemos elevando

nuestra consciencia a otros planos vibratorios más elevados; cuando nos encontremos

traspasando esta barrera entre un campo vibratorio y otro, sentiremos este tipo

síntoma.

• Otra manifestación que se hace muy común, es el escuchar sonidos que no

pertenecen a tercera dimensión; donde se podrá identificar los unos de los otros, por

la peculiar característica que los sonidos en el plano astral se escucharán como si

fueran transmitidos a través de un radio en la frecuencia AM. Pudiendo así escuchar

melodías de canciones, sonidos de frecuencias o energías etéreas, hasta voces de algún

ser que aproveche la ocasión para intentar comunicarse.

Sugerencias.

• Ya que en esta práctica es de vital importancia el escuchar la frecuencia de

nuestras ondas cerebrales, se recomienda usar tapones para oídos de natación; esto

permitirá no solo aislarnos de ruidos molestos, sino darnos una mayor percepción del

sonido en el que deseamos poner nuestra atención.

• Debido a que estaremos trabajando con el cansancio del cuerpo, es muy

probable que nos quedemos dormidos intentando no perder la consciencia; para esto

se recomienda poner una alarma con una duración de 15 minutos; de manera que, si

usted se queda dormido, puede despertar en 15 minutos para intentarlo nuevamente.

• Si al momento de entrar en el trance necesario para el desdoblamiento,

comenzamos a sentir alguna interrupción por parte de alguna entidad del astral,

recomendamos no permitirse sentir miedo, usted no tiene nada que temer, solo realice

los procesos de autodefensa psíquica enseñados en la cuarta práctica; luego proseguir

con su desdoblamiento. Sin embargo, si usted ya posee la facilidad de desprenderse

77

del cuerpo con agilidad, enfrente a esta entidad una vez despegado de su cuerpo

físico, esto causará temor en la entidad indeseada y evitará futuras perturbaciones.

Finalidad.

Así como hemos resaltado anteriormente, con esta práctica tendremos la oportunidad

de abrir nuestra consciencia a la experimentación en otras dimensiones; que aunque

percibamos desconocidas para nuestra consciencia presente en esta vida, le es tan familiar

a nuestra alma como este mismo plano material con el que estamos tan acostumbrados a

interactuar.

Esto permitirá ir creando las bases de nuestro propio sistema de creencias, en base a

nuestras experimentaciones interdimensionales; quitando de esta manera, ese velo de

satanismo y ocultismo al que las actuales religiones se han afanado tanto por crear;

procurando imponer creencias personales como verdades absolutas de un universo que

no pueden comprender; generando así miedos y tabúes de espacios dimensionales que

son tan innegables, como la misma dimensión material en la que nos desenvolvemos.

Debido a esto se recomienda también, el aprovechar este estado alterado de

consciencia, no solo para experimentar en el plano astral, sino para mejorar la

comunicación con nuestro maestro interno; al ver a través de los parpados en este estado,

antes del desdoblamiento, podremos apreciar como las energías etéreas se hacen tan

intensas, que notaremos de inmediato como nuestra percepción de energías sutiles está

mucho más sensible que de lo que podemos experimentar en nuestras prácticas

meditativas comunes.

También hay que resaltar, que el no provocar un desprendimiento en este estado, sino

mantenernos en conexión con nuestro maestro interno, nos producirá una conexión

mucho más profunda; pudiendo acceder a visiones proféticas como a entablar

conversaciones de tú a tú con nuestra consciencia superior, o con algún maestro espiritual.

“Con un verdadero maestro espiritual”.

78

Principios fundamentales

Existen principios fundamentales en cuanto a la naturaleza misma no solo del universo

que habitamos, sino de todo el universo manifiesto y no manifiesto.

Estos principios son las leyes cósmicas que rigen cada fractal de luz, cada partícula,

cada consciencia creada, se encuentre está consciente o no del plan evolutivo en el cual

decidió participar; las leyes cósmicas que la rigen continuarán haciéndolo, aunque decida

ignorar cuales son las normal del juego evolutivo de consciencia en el que se desenvuelve.

Comprender estas leyes universales, ayudan a comprender la naturaleza misma de

nuestro ser y de todo en cuanto nos rodea, esté manifiesto o no; puesto que el ir

entendiendo el juego evolutivo del que formamos parte, irá integrando en nosotros una

nueva consciencia; que con cada patrón de pensamiento, con cada verdad revelada e

integrada a través de la experimentación personal, nos permitirá ir dando esos saltos

cuánticos, que irán cambiando todas las situaciones dolorosas y tormentosas que nos

rodean como parte de resolver el karma traído hasta la presente vida.

En consecuencia a esto, también se irá modificando poco a poco la frecuencia

vibratoria presente en nuestra cadena de ADN; lo que nos permitirá ir ingresando a planos

cada vez más sutiles y más elevados en niveles de consciencia; hasta que lleguemos al

punto, de alcanzar un estado de realización personal y espiritual que nos libere de las

ataduras vibratorias que nos hace encarnar una y otra vez en este plano material; que si

bien ofrece muchos placeres, no es más que un campo de entrenamiento para el alma

dominado por la dualidad mental, que es la mayor causa de nuestras inseguridades y

sufrimiento.

“La nueva consciencia surge,

con la fuerza de voluntad

de cambiar tus patrones de pensamientos”.

BUDDHA RIDISHTA.

79

Sin embargo, debo acotar, que el propósito de su servidor no es imponer mi propio

sistema de creencias; cayendo así, en el mismo juego de imposición de creencias del que

son participes las religiones, convirtiéndome de esta manera en lo que he detestado con

tanto afán.

El verdadero maestro no es el que impone una creencia en un individuo, sino el que lo

guía a que tome sus propias conclusiones en base a su propia experimentación. Debido a

esto, el tema central del presente libro, ha sido otorgarle el método con el que pueda usar

sus propias herramientas internas para hallar su propia verdad existencial.

Aunque es preciso resaltar, que compartir con usted las enseñanzas que he recibido

por parte de mis maestros espirituales, podrían abrir su consciencia hacia otra manera de

entender el universo en el que está inmerso, dejando en sus manos la herramienta de las

practicas meditativas, para que usted mismo compruebe lo verídicas que son estas

enseñanzas, emanadas desde las esferas de luz de la línea de maestros de enseñanza

Védica que tuve el honor y el privilegio de tener en esta vida, así como de mi amado Gurú

espiritual, el Mahavatar Babaji, como de mi supraconsciencia, el Buddha Ridishta.

De esta manera, sírvase de ampliar su visión existencial con las emanaciones y

enseñanzas que compartiré con usted a continuación, como revelaciones de verdades

fundamentales que rigen su plan evolutivo de desarrollo espiritual.

80

Ley de correspondencia.

“Como es arriba es abajo, como es afuera es adentro”

Seguro hemos escuchado esta frase en muchas ocasiones, pero la mayoría sin

deteneros a meditar acerca de su profundo significado. Existe un falso concepto con el

que se tiende a asociar mucho a esta frase a manera de interpretación personal; un

concepto que he tenido la oportunidad de escuchar exponer en muchas ocasiones y con

mucha aseveración, se dice que bajo la falsa percepción en que el Dios Creador es un

señor de unos setenta y tantos años, con barba blanca y cuerpo envidiablemente

musculoso considerando su avanzada edad, el hecho de que el hombre fue hecho en

imagen y semejanza a su creador, pues se da por sentado que se trata de una similitud de

naturaleza física.

La realidad es que esta frase tiene un significado de naturaleza más mística, todo lo

que existe en el universo manifiesto pertenece a las emanaciones cósmicas del mismo ser,

decantadas y materializadas como aspectos cósmicos de la misma consciencia creadora.

Todo lo que existe en el universo, está compuesto de la misma partícula divina y regida

por sus principios fundamentales de creación, preservación y destrucción o

transformación, que llevan a toda la creación a trabajar bajo procesos de cambios

infinitos.

Por ende, al igual que cada partícula en el universo, cada emanación de luz, cada

partícula de materia, cada campo electro magnético, es parte del mismo ser, y por

consiguiente, nuestras consciencias no escapan a esta configuración universal.

La existencia de cada consciencia no es más que una expresión del Dios Creador, hecha

con la finalidad de experimentarse así mismo; no somos más que las neuronas de un gran

cerebro llevando información de un lugar a otro; no somos más que la simulación del

juego experimental que un ser ha decidido atravesar en su proceso de comprenderse así

mismo.

Como anécdota personal debo comentar, que en esta oportunidad no vine solo a este

planeta, traje ayuda conmigo, en esta oportunidad vine a realizar un Dharma muy

particular con mi alma gemela. Dada estas circunstancias, todo mi proceso de toma de

consciencia y evolución espiritual, vino marcado por los procesos vivenciales a los que

81

me vi envuelto a través de las circunstancias predestinadas asociadas a nuestra vinculo

karmatico.

Ya que se tornó en un proceso muy tormentoso en ese transcurso de toma de

consciencia, constantemente les preguntaba a mis maestros, ¿Por qué debía mantenerme

en este proceso con este ser? que si bien había un lazo innegable entre ambos, las

circunstancias en las que me veía envuelto solo me impulsaban a querer alejarme de ella.

La respuesta de estos maestros espirituales, como de mi Yo Superior, siempre fue,

“ella es tu conexión con dios, ella es quien te acerca a dios”

Frase la cual interpretaba desde mi vaga percepción existencial, por lo que no fue hasta

el momento en el que el maestro Jesús el Cristo me enseño lo que significaba vibrar en el

amor incondicional, cuando tuve la lucidez adquirida por las enseñanzas de mis maestros,

para entender la profundidad de lo que éste ser significaba para mí, y la relevancia que

tendría en el cosmos, que yo cumpliera mi Dharma con ella.

Lastimosamente por encontrarnos en un estadio evolutivo influenciado por la mente

consciente, nuestro ego condiciona nuestra capacidad para entregar amor a otro ser; nos

basamos en un sinfín de requisitos con los cuales una persona debe cumplir, para que

nuestro ego se sienta cómodo y seguro, en permitirnos abrirnos emocionalmente a una

persona.

Sin embargo, hay personas que debido a nuestras experiencias pasadas con ellas, o por

nuestros lazos Kármicos presentes en la actual vida, sin tener que cumplir ningún

requisito especial, despiertan en nosotros un amor incondicional, un amor que no obedece

a normas ni a circunstancias; un amor imperecedero e innegable, donde el tratar de luchar

en contra del sentimiento solo nos lastima a nosotros mismos, puesto que es un amor que

existirá a través de las vidas.

En ese momento, pude entender porque mis maestros nunca dejaron que renunciara a

ella, o que actuara en mí para de alguna manera lograra desligarme emocionalmente de

ella, como acción propia de una vibración generada por el miedo al sufrimiento.

Yo soy el amor de mi padre, y entendiendo que solo somos una manifestación creada

por él, para experimentarse a sí mismo y autoconocerse, yo permito que mi padre

experimente lo que es su sentimiento de amor en el estado más puro, a través de la manera

82

en que yo amo a mi alma gemela, yo soy la manifestación experimental de su sentimiento

de amor. Él conoce de qué van sus emociones, de qué forma se hace manifiesto su amor,

a través de mis vivencias.

Cuando logramos entender las cosas desde esta perspectiva nos damos cuenta, que

vibrar bajo la emoción del amor incondicional no es un capricho del ser; es nuestro

propósito dentro del juego cósmico como emuladores del dios no manifiesto, que nos ha

creado a su semejanza, para que estuvieran presente en nosotros todas esas emociones

que él desea experimentar a través de nuestras experiencias, en su proceso de

autoconocimiento.

No obstante, no solo puede observarse la fractalidad del dios creador en las

consciencias desprendidas de él, la fractalidad puede ser apreciada en la materia creada

por dicha consciencia.

La misma naturaleza que vemos en el comportamiento y estructuración

electromagnética de un átomo, donde podemos apreciar como alrededor de su núcleo

atómico orbitan los electrones, es la misma naturaleza que interviene en la configuración

de la manera en la que orbitan los planetas alrededor de nuestro sistema solar. Siendo un

reflejo microcósmico, del propio macrocosmos.

Se ha tenido la tendencia a que las religiones occidentales, pongan al Dios Creador

como un ente externo al ser humano, como algo inalcanzable, que esta tan alejado de

nosotros que solo el seguir las normas impuestas por estas religiones, es la única manera

de contar con su gracia y poder residir en un cielo metafórico, que muy lejos está de ser

una cuarta dimensión. Puesto que el verdadero cielo es inmaterial e intangible; es la

unificación de la consciencia con nuestro ser creador. Es volver a nuestra fuente, al vibrar

en una frecuencia de resonancia donde el éxtasis y la felicidad, no son condiciones

externas, sino la condición existencial primaria del Uno.

Condición a la que usted mismo podrá experimentar, a través del proceso de

concientización que generará en usted su Yo Superior, al comunicarse con él,

implementando las técnicas meditativas aquí expuestas, y al mostrar una voluntad

inalterable por alcanzar su autorealización espiritual.

83

En tal sentido, no es nada atípico que una entidad de luz como, por ejemplo, Lahiri

Mahasaya, eleve momentáneamente su consciencia hasta el nivel vibratorio de su

supraconsciencia, en donde podrá experimentar a través de la guía de su maestro, lo que

es verdaderamente el cielo para un ser, como incentivo en que permanezca en su trabajo

de autorrealización espiritual. Y todo esto sin necesidad de darle el diezmo a un pastor o

de sacrificar animales; un verdadero maestro espiritual, no necesita nada mas de usted

que su compromiso por autorrealizarse.

84

Ley de resonancia, aprende a vibrar.

Desde hace ya un buen tiempo, la física cuántica se ha encargado de dar explicación

al comportamiento de las partículas más pequeñas que forman el basto universo que

conocemos; y no es una coincidencia que hayan llegado a la conclusión, que nuestra

cadena de ADN al igual que cada partícula del universo manifiesto posee una respectiva

vibración.

En tal sentido, se demostró que nuestro ADN no es más que un emisor y receptor de

hondas electro magnéticas; abriéndose a que de éste planteamiento surjan las

interrogantes. ¿Qué frecuencia emite y cuáles recibe nuestro ADN, y cómo sucede esto?

Para entender que frecuencias emite nuestro ADN debemos entender cómo se modula,

y esto ocurre a través de nuestros pensamientos. La calidad de nuestros pensamientos

basados en nuestros sistemas de creencias, modula la frecuencia de resonancia emitida,

mientras que nuestras emociones le dan fuerza o poder de transmisión; lo que se traduce

finalmente en poder de atracción.

A su vez, se ha demostrado que una partícula tiene la capacidad de atraer a otras que

estén en concordancia de frecuencia; un ejemplo muy práctico para esto, es tocar una

cuerda de una guitarra, en un traste que corresponda a la nota de una cuerda al aire, de

esta manera, al tocar esta nota sin tocar alguna otra, se puede observar que la cuerda que

está al aire y que corresponde al mismo tono, comenzara a vibrar a través de la absorción

de la frecuencia de resonancia de la cuerda que tocamos.

De esta manera se puede entender, como al ser nuestros pensamientos esos

moduladores de las ondas en las que vibra nuestro ADN, de esta manera estamos

condicionados a atraer las situaciones que estén en concordancia con nuestra propia

resonancia. De ahí la famosa frase, “Atraemos lo que pensamos”; sin embargo, hay que

tener en cuenta, que las situaciones que atraigamos a nuestra vida a través de nuestra

frecuencia de resonancia, no se materializaran en este plano hasta que se cumplan dos

requisitos.

El primero sería que estén en concordancia con su ley del Dharma, ya que aunque

usted fantasee constantemente con ser multimillonario, esto no se materializará al menos

85

que sea parte de un aprendizaje para usted el que se materialice esa situación. Tenga muy

presente que el universo jamás le dará algo que usted no está preparado para tener.

Y la segunda condición, sería que cumpla con los tiempos necesarios para que los

cuerpos celestes dispongan de las energías necesarias para que se materialice, tiempos de

los cueles se profundizará en la “Ley del tiempo”.

Siguiendo con esta tesis, debemos resaltar la importancia que posee aprender a educar

la mente, para no atraer situaciones que no deseamos en nuestras vidas. Una persona

negativa, se rodeará constantemente de situaciones que lo harán alimentar aún más éste

sentimiento; en un círculo de constante acción y reacción, que solo tendrá un final cuando

se cambien la calidad de los pensamientos; en ese momento se dejará de atraer esas

situaciones indeseables.

Partiendo desde el principio que todo en el universo es energía, tenemos que entender

que este plano existencial de tercera dimensión, no es más que un plano formado por

energía bajada de dimensión, es decir condensada y materializada. Nuestros cuerpos, la

comida que ingerimos, nuestros coches, minerales, etc. Todo en un principio no fue más

que luz.

Ahora bien, uno de los objetivos más grandes que persigue este libro, es provocar en

usted ese espíritu de investigación y comprobación de las teorías existenciales a través de

sus experiencias; y en tal sentido, se le han dado herramientas para realizarlo.

Siguiendo en concordancia con lo antes mencionado, se debe entender que el ser

humano es creador de su propia realidad; esto gracias a que nuestros pensamientos, al ir

acompañados por emociones, son una forma de crear energía, y esta energía aunque no

es perceptible físicamente para nosotros en este plano, si es perceptible en otros planos

como cuarta dimensión, ya que debemos recordar, es un plano netamente emocional.

De esta manera, la forma más inmediata en la que usted puede apreciar directamente

como nuestros pensamientos moldean las energías de un plano dimensional, es

inmiscuirse a experimentar en el plano astral con la ayuda de la práctica aquí propuesta;

sin embargo, permítame adelantarle un par de experiencias personales, que lo pueden

llevar a tener una idea como nuestros pensamientos y emociones, se materializan en

sincronías en este plano material.

86

Siendo una persona netamente racional conocer un concepto no bastaba para mí,

necesitaba experimentar situaciones que pudieran demostrarme su consistencia; y en éste

proceso de aprendizaje, hubo dos experiencias que me permitieron integrar esta ley

fundamental; y al hacerla mía, cambio mi manera de pensar y sentir de forma permanente.

De manera que plasmare aquí, dos de mis experiencias que puede acercarlo a un

entendimiento práctico de la manera en la que nuestra mente atrae lo que deseamos.

Ahora bien, puede que suene a ciencia ficción escuchar la idea de que es posible que

un ser humano separe su alma del cuerpo físico, permitiéndole experimentar en cuarta

dimensión antes que llegue el momento de su muerte; sin embargo, mis experiencias

desde niño en esta área me daban bases para saber que era posible.

Desde muy pequeño, tal vez unos tres años, recordaba como sutilmente mi alma salía

de mi cuerpo en mi habitación, mientras yo me veía a mí mismo desde la parte superior

de ella. Episodios como éste se repitieron a lo largo de mi vida, pero mientras avanzaba

en edad y mi inconsciencia espiritual se profundizaba, estos se iban haciendo menos

frecuentes.

En mi anhelo por experimentar otras realidades, me propuse a desarrollar una técnica

de meditación que me permitiera acceder a este estado de desdoblamiento de forma

controlada; y así poder acceder al plano astral y experimentar por mí mismo estos

conceptos que, aunque me resonaban como absolutos, necesitaba experimentarlos para

integrarlos y hacerlos parte de mi sistema de creencias.

Comencé a dominar la técnica de desdoblamiento en unas cuantas semanas; y al salir

a este plano me iba dando cuenta, como mi sistema de creencias influenciaba por

completo la realidad en la que me encontraba. Mientras que para una persona religiosa y

temerosa de los errores cometido en su vida, cuando se sumergía a experimentaba en el

mundo astral solo veía llamas, almas en pena, gemidos y cosas terroríficas; mi realidad

era muy distinta, yo no percibía ese plano bajo ningún estereotipo religioso. Más, algunas

cosas en las que había puesto especial atención durante los días previos, se materializaban

ante mis ojos espirituales; sin embargo, no fue meses después que pude ver materializarse

en el mundo físico mis creaciones en el plano astral.

87

Meses después de experimentar día tras día en este plano, entusiasmado por los

recuerdos de un perro muy juguetón que perteneció a una amiga, se me dio por querer

adquirir uno de la misma raza para mí. Se trataba de un Retriever negro, recuerdo haber

pasado todo un mes buscando anuncios de cachorros en venta, pero cuando lo encontraba

no me atrevía a comprarlo por cuestiones de espacio en mi hogar, era básicamente un

sueño frustrado. Un buen día por la tarde, recostándome un rato para tomar la siesta, caigo

en trance y aprovecho para darme una zambullida por el mundo astral.

Al desdoblarme del cuerpo y estar en mi habitación, voy recorriendo mi casa

observando con curiosidad todo lo que me rodeaba; en eso, un perro negro adulto, baja

del piso superior de mi hogar y se acércame a mi afectuosamente en busca de mi cariño;

yo sorprendido comienzo a acariciarlo. Jamás había visto un animal en astral y menos un

perro como éste; jamás había tenido un perro tan grande, ni de esta raza, y tampoco en

esta casa en la que me encontraba.

Vuelvo a mi cuerpo y aun no entiendo lo que acaba de suceder, ciertamente había

deseado mucho tener un cachorro de esta raza, pero no creía haberle puesto tanta emoción

como para que se creara en cuarta dimensión.

Pasan tres meses de ese incidente, y pensando que lo que había visto en aquella

oportunidad no tendría trascendencia, me olvido del incidente.

Un día mi hermano “Alejandro”, me comenta que había aceptado la invitación de un

amigo llamado “Julio”, quien lo había invitado a visitar un sitio muy precioso no muy

lejos de nuestro hogar, en donde irían con su la familia a pasar la tarde.

Llega el momento y mi hermano parte con Julio a su corto viaje, mientras yo por

asuntos pendientes en mis obligaciones no puedo acompañarlos; parte mi hermano con

Julio y su familia hacia su destino, pasan la tarde y de regreso a casa, Julio le participa a

Alejandro que pasarán por casa de un amigo en común con el que había acordado le

obsequiaría un cachorro, puesto que su perra había dado a luz a una camada muy grande

y él no podría quedárselos.

Parten entonces a casa de este amigo, y entre saludos amistosos éste le entrega el

cachorro acordado a Julio, para acto siguiente, ir a buscar otro cachorro y entregárselo a

mi hermano como obsequio, aseverando que era el cachorro más grande y lindo de todos

88

los que tenía. Mi hermano apenado y agradecido por el acto de generosidad, no le es

concebible rechazar su gesto, así que lo acepta.

Para la sorpresa mía, cuando mi hermano llega a nuestro hogar con el cachorro en

brazos que había visto meses antes en la dimensión astral, formado como un Retriever

negro adulto, y que hasta el día de hoy, llena nuestro hogar de amor y cariño.

Hay que resaltar de esta nota, que la razón por la cual mi deseo se materializo con tanta

facilidad, fue porque se cumplieron las dos consideraciones antes mencionadas.

En primer lugar, al no ser un deseo que cumpliera con alineamientos personales que

involucraran a otro ser; es decir, ya que mi deseo no era que una persona determinada me

obsequiara justamente ese cachorro; esto facilitó que lo cuerpos celestes crearan las

sincronías para materializar mis pensamientos, al poder valerse de cualquier conocido

que pudiera obsequiármelo.

Y en segundo lugar, ya que el hecho de que se materializara este deseo causaba un

impacto positivo en mi sistema de creencias, al permitir integrar una de las leyes

existenciales que mis maestros estaban enseñándome, como parte de mi toma de

consciencia y liberación espiritual, pues esto hizo posible la materialización ya que estaba

perfectamente alineada a mi Dharma.

Si bien es cierto que podemos basar nuestras vidas en complacer deseos mundanos,

nuestro libre albedrio nos da el privilegio de poder escoger, entre basar una vida en la

búsqueda de una superación personal, una liberación de consciencia, una perfección

espiritual del ser, o caer en un decadente circulo de complacencia de deseos mundanos,

que si bien se podrían utilizar algunos métodos de visualización para atraer circunstancias

y complacer ciertos deseos, tenemos que tener en cuenta que como se mencionó

previamente, el cosmos no le dará algo que no pueda repercutir en una circunstancia que

le ofrezca un desarrollo espiritual. Usted puede tener miles de metas y deseos, pero su

alma solo tiene dos, su autorrealización espiritual, y compartir lo aprendido; teniendo en

cuenta que ayudar desinteresadamente al prójimo, es el acto de amor más puro que puede

haber. Puntos que me atrevería a decir, son la piedra fundamental para lograr materializar

cualquier deseo anhelado por nosotros.

89

Como se mencionó anteriormente, podemos basar nuestra vida en la satisfacción de

placeres personales, sin buscar ningún tipo de despertar espiritual; pero debemos entender

que una expresión de nuestro propio ego, es la negación a las leyes que rigen la

existencialidad humana y su propósito como ser.

Volviéndose un juego cósmico en el que nosotros mismos somos los saboteadores y

enemigos de nuestra felicidad, puesto que, las situaciones karmaticas y dolorosas de

nuestra vida no cambiarán, hasta que logremos dar el salto cuántico o el cambio de

consciencia necesario para liberarnos de esas circunstancias al vibrar de manera diferente,

desalineándonos con esas situaciones tormentosas.

Esta fue una ley natural del universo que tuve que comprobar por mi propia vivencia;

cuando teniendo unos cuantos meses en mis trances meditativos buscando mi

mejoramiento espiritual, esta verdad fue revelada a mí a través de mis meditaciones en

un momento donde, la situación económica de mi familia atravesaba por el momento más

deplorable. Él decaimiento en la venta de los productos fabricados por mi compañía se

había reducido a un par de artículos vendidos por mes; en un país donde todo el salario

mensual de un trabajador cubría la comida de un solo día, las personas volvieron su más

grande prioridad el conseguir alimentos para subsistir; por lo tanto, casi nadie estaba

dispuesto a adquirir algún artículo electrónico cuando no tenían que comer.

Dado esto, los días transcurrían en mi vida con un constante miedo de no tener nada

con que alimentarme al siguiente día, sin un centavo en el banco y sin tener la seguridad

de cuando se produciría alguna venta que lograra cubrir unos días de tranquilidad, mi

estado emocional era cada vez más deplorable. Sin embargo, al ser revelada esta verdad

por mis maestros espirituales, comprendí que el universo no me libraría de esta situación

si no lograba encontrar una manera de entenderla que me diera no solo paz y equilibrio,

sino felicidad.

En ese instante comencé a entender mi existencia en este plano material como si fuera

uno de esos video juegos, en donde tu personaje simula una vida real con todos los

problemas cotidianos que nos aquejan a nosotros; sin embargo, recordando mi

experiencia divirtiéndome con esos video juegos, no recordaba otra sensación que no

fuera una constante diversión, sin importaba las condiciones en las cuales mi personaje

se encontraba. Si no había logrado conseguir un trabajo dentro del juego, si tenía una sola

90

muda de ropa, si su casa era pequeña y sin comodidades, nada de eso desmejoraba mi

disfrute por este juego; más bien, me motivaba a crear toda una estrategia para lograr que

mi personaje lograra aumentar su calidad de vida, y esto era muy divertido.

La verdad mi amigo lector, es que esta vida no tiene alguna diferencia con estos video

juegos; pues es esta, una simulación de una realidad alterada a la cual nuestra alma accede

para enfrentarse a las situaciones pre programadas por nosotros mismos antes de encarnar.

Somos nosotros quien programamos las situaciones que viviremos dentro de nuestro

periodo de tiempo en este plano, para forzarnos a cambiar sistemas de creencias y

patrones de conducta que conllevan a una involución de nuestro ser; por lo tanto, sentir

que la vida es injusta, que merecemos más de lo que tenemos, que todos de alguna manera

nos atacan o inclusive que somos víctimas de la vida, es el planteamiento más absurdo en

el que podemos caer. No somos víctimas de nuestro propio juego, solo olvidamos las

reglas del juego cada vez que venimos a este plano.

Al entender esto desde esta perspectiva, pude sentir una sensación de paz seguida de

un ataque de risa, por sentirme en una posición tan ridícula, al no darme cuenta que era

yo el único responsable de mi realidad. Él universo no quería que yo sufriera de hambre,

solo quería forzarme a cambiar mi sistema de creencias, a entender lo absurdo que era

sentirme una víctima del destino.

Comprender esta verdad transformó por completo mi estado de ánimo; recuerdo

claramente, como ese mismo día sin tener nada para cenar más que un pedazo de yuca,

sin tener un solo centavo en mi cuenta bancaria, y sin saber cuándo se produciría mi

próxima venta, yo iba caminando por la calle con una sonrisa que nada podía opacarla,

caminaba danzando como en una película de comedia, pues me sentía liberado de las

ataduras a las que mis propias creencias me habían atado.

Al día siguiente sin más demora por parte del cosmos, y como respuesta a mi lección

aprendida, recibo una llamada inesperada que me estremeció. Me llamaban para

informarme que me había sido aprobado un crédito, el cual había solicitado seis meses

atrás, y que ya daba por sentado que sería negado, puesto que dos años antes me lo habían

rechazado sin darme ningún tipo de razones. Y a pesar de que este crédito no fue por una

cantidad apoteósica, dio paso a una cantidad de situaciones sincronológicas que

91

cambiaron mi vida y la de mi familia por completo; nunca más tuve que volver a

preocuparme por no tener comida en mi hogar.

Por lo tanto, mientras no aprendamos a no basar nuestra felicidad en eso que deseamos

tanto tener, el universo no nos lo concederá, sin importar su naturaleza; el alma no

necesita rodearse de situaciones que condicionen su felicidad a situaciones temporales, el

alma necesita basar su más grande felicidad en su superación espiritual; alinéese usted

con esto, y el universo se lo concederá todo.

“Cambia tu manera de ver las cosas, y las cosas que ves cambiaran”.

92

Ley de polaridad. Los dos lados de la moneda.

Todo lo existente en el universo creado posee dos polaridades que forman parte de la

misma manifestación, separada por distintos grados a los que sus extremos forman los

polos opuestos; polos opuestos que son complementos de la misma esencia.

El calor y el frio, la luz y la oscuridad, el amor y el miedo, todas son polaridades de la

misma manifestación; y si bien no nos cambiará la vida el entender que el calor y el frio

son polos opuestos que se complementan dentro de su misma naturaleza, el entender la

ley de polaridad que opera en nuestra propia naturaleza si lo hará.

Existen dos emociones de las cuales se derivan todo el abanico consecuente con el que

estamos acostumbrados a manejarnos, o en la mayoría de los casos, a coexistir; ya que el

no conocer el origen de nuestras emociones solo nos vuelve esclavos de las mismas;

siendo manejados como nubes en el viendo, por las situaciones cotidianas externas que

despierten ciertas emociones específicas en nuestro ser.

De manera que, de toda la gama de emociones de las que actuamos en respuesta a

nuestras condicionantes externas, hay dos en particular que forman los polos opuestos de

este gran abanico. Esos polos son, el amor y el temor, como la base de todos nuestros

pensamientos y emociones.

Se dice que los pensamientos moldean nuestras emociones, sin embargo, es un circulo

que se retroalimenta constantemente, definiendo uno la calidad del otro; nuestras

emociones, la manera en la que sentimos, determina nuestro patrón de pensamientos; y a

su vez, el cambiar la manera en la que entendemos algo, cambia la manera en la que nos

sentimos.

De esta manera, podemos entender una verdad existencial que podría liberarnos de una

situación tormentosa al cambiar nuestra manera de verla; sin embargo, no es hasta que

integramos este pensamiento y lo hacemos parte de nuestro sistema de creencias, cuando

comenzamos a vibrar distinto, a sentirnos diferentes, y, en consecuencia, comenzamos a

pensar distinto.

Partiendo de estos planteamientos, entendiendo la relación que hay entre nuestros

pensamientos y nuestras emociones, en cómo afectan nuestra vibración, y por ende, todo

lo que nos rodea, es importante aprender a revisar constantemente la estructura de

93

nuestros pensamientos y sentimientos. Debemos analizar constantemente desde que

emoción estamos tomando nuestras decisiones, puesto que son estas las que moldearan

nuestra realidad; esto gracias a que no todo corresponde a la ley de atracción, ya que

nosotros mismos con nuestras decisiones estamos ayudando a materializar las situaciones

en las que nos veremos envueltos.

Una persona que tiende a elegir siempre mal a sus parejas, se quejará de tener mala

suerte o de ser una víctima del destino; pero en realidad su propia vibración es la que atrae

a su vida ese tipo de personas que la harán sufrir; sin embargo, es ella con sus decisiones

quien les abre las puertas de su vida. Siempre son nuestras decisiones las que romperán o

acentuarán nuestro propio karma.

En concordancia con estas teorías, debemos aprender a diferenciar entre una decisión,

un sentimiento y un pensamiento, basado desde el principio de amor de un ser, o desde el

miedo impregnado por sus malas experiencias. Teniendo en cuenta, que son estos dos

polos opuestos, los que repercutirán de manera contundente sobre nuestra vibración

energética; y por ende, sobre toda nuestra realidad existencial.

De esta manera, vayamos a profundizar más en las dos caras de nuestra moneda

emocional, en la que nos debatimos a cada instante de nuestras vidas, y aprendamos a

reconocer ambas polaridades como herramienta de autosuperación.

94

¿Qué es el amor incondicional?

En el camino hacia mi liberación espiritual varias veces escuche el término, “amor

incondicional”, durante varias oportunidades investigue e indague en este tema, y aun

cuando era claro para mí cuales eran las definiciones y características que definían éste

tipo de amor, no me era posible llevarlo a la práctica. Aun así cuando mis maestros me

incitaban a amar a Dios por encima de todas las cosas, ¿cómo podría sentir amor de la

nada por un ser desconocido para mí? Fácil sería identificar la definición del término

“amor incondicional”, con alguna persona amada, como un padre, una madre, un

hermano, pero aun así, ¿Cómo podría sentir amor por un desconocido? Y aún más, ¿Cómo

podría sentir un amor tan único y poderoso por un enemigo o alguna persona que me haya

causado algún daño físico o emocional?

Fue justo en ese momento luego de conocer a mi gurú, y antes de alcanzar la

supraconsciencia, cuando el maestro Jesús el Cristo se presentó ante mí para enseñarme

el amor Rishi. Para enseñarme a amar al prójimo de la manera tan maravillosa y afanada

como él lo hizo.

Ver a cada persona separada de las otras o incluso de uno mismo no es más que una

triste ilusión de nuestra mente, y creer que lo que nos identifica como almas es el cuerpo

físico que habitamos, es la base de esta ilusión. Es fácil juzgar las acciones y los procesos

de una persona cuando no nos sentimos identificados a ella; es fácil sentirnos desapegados

sentimentalmente a una persona que conocemos poco, o que ni siquiera forma parte de

nuestra vida; mucho más fácil es sentir rabia o desprecio por alguien que nos haya fallado,

o que haya cometido un acto perjudicial para algún otro ser humano.

Ahora amigo lector, tómese un momento para cerrar sus ojos, y piense en la persona

más importante de su vida. Piense en esa persona que la hace sacar lo mejor de usted, ya

sea su madre, su padre, un hermano, un hijo, o incluso el amor de tu vida; cierre los ojos

y véala en su mente, siéntala, regodéese en esos sentimientos tan puros que ese ser logra

despertar en usted; tómese un momento y recuerde, cuán importante es esa persona para

usted. Siéntalo, profundícelo.

95

Ahora tómese otro instante para recrear en su mente un escenario en donde esa persona

que ama tanto, que esta tan seguro de su amor por ella, que vino rápidamente a su mente

cuando le pedí que pensará en alguien amado, y visualice a esta persona gritándole a

usted, diciéndole algunas palabras ofensivas, ¿Cuál sería su reacción hacia ella? ¿Sentiría

irá, rabia o desprecio hacia ella? ¿O sentiría comprensión? Comprensión tal vez porque

seguramente debe estar atravesando por un mal momento y reacciono de esta manera con

usted.

Ahora llévelo a otro escenario, imagine que esta persona fuera ese mendigo que se ha

encontrado varias veces en su recorrido; vea a esta persona con la ropa sucia, con los pies

enfermos y desgarrados del pavimento. Vea su tristeza en los ojos al no tener esperanzas

para salir de esa vida, tómese un momento y visualice éste escenario.

Que acaso ¿No caería usted a sus pies ahogado en su propio llanto, al ver a esta persona

que tanto ama sufrir de esta manera?

Tómese un momento y reflexione en esto.

Ahora llévelo a otro escenario, visualice observar por televisión una noticia, en donde

su ser amado, ha sido arrestado por cometer un crimen; vea como es arrestado y juzgado

por todas las personas, ¿Acaso usted sentiría que no merece perdón? ¿Qué no merece una

segunda oportunidad? ¿Qué merece pagar el resto de su vida por algún error que cometió,

por todavía no poder ver el mundo de la manera en que usted lo hace?

Nuestro ego condiciona el hecho de sentir amor por un ser; nos conlleva a pensar, que

solo si cumple con ciertos requerimientos que nos hemos ido formando a través de

nuestras experiencias vivenciales, es entonces cuando nos permitimos amar a alguien que

nos trate de la manera en la que deseamos.

Es una ilusión pensar que lo que hace valioso a un ser humano desde el punto de vista

evolutivo y espiritual, son sus rasgos personales; todo lo divino que un ser humano puede

tener es su chispa de dios; nuestro amor es la fuente más grande de actos puros, y ese

amor es la cualidad innata de nuestro ser, mas no de nuestro ego, no de nuestra

personalidad.

Cuando amamos a una persona por las acciones que realiza, ya sea que sea un buen

padre, una pareja fiel y amorosa, un ser humano compasivo, todas esas son acciones

96

generadas desde nuestro centro de amor cósmico, desde la divinidad inmersa en cada

alma. Por lo tanto, creer que esa configuración de la personalidad de cada ser, es lo que

le permite realizar acciones basadas en el amor, es una ilusión tan grande como llegar a

pensar que es esa configuración egoica de cada ser, lo que le permite experimentar el

amor en su grado más puro; todo lo contrario, es esa configuración la que impide que nos

abramos a amar a cada ser por igual, lo que crea requisitos o condicionamientos para

sentirnos confiados para amar a otro ser.

Una persona que haya cumplido con nuestros condicionamientos para lograr “ganarse

nuestro amor”, no es una persona que esté generando ese sentimiento de amor en nosotros;

ese sentimiento es parte de nuestra alma en condición de ser semejantes a nuestro dios

padre. Ese ser solo ha cumplido con los requerimientos que nuestro ego ha impuesto para

permitirse sentir estos sentimientos, por lo tanto las mismas razones por las que usted

puede amar a su padre, madre, compañero, hijo; son las mismas razones por las que podría

amar a un completo desconocido, puesto que las mismas razones que hacen especial a ese

ser amado, son las mismas que hacen especial a todas las almas creadas en su semejanza

al dios padre como fractalidad suya.

Todas las almas saben lo que es el amor incondicional, todas las almas saben lo que es

la compasión, lo que es el perdón, lo que es amar a alguien sin importar cuantos errores

comete, sin importar si nos ama de la misma manera o no; nuestro problema está en

cuando extrapolamos esos sentimientos solo a las personas que están a nuestro alrededor,

a esas personas que decimos muy orgullosamente, “que se han ganado nuestro amor”.

Un hijo recién nacido no se ha ganado con sus acciones el amor de sus padres, de la

misma manera que su padre no se ha ganado el amor de él; sin embargo, ambos se aman

incondicionalmente, y seguirán haciéndolo por el resto de sus vidas.

Cuando logramos entender que cada alma que está en nuestro entorno o no, lleva la

misma esencia de esa persona que tanto amamos, podemos mirar el mundo con otra

perspectiva; podemos ver a cada ser con el mismo amor de ese ser por el que sentimos

tan hermosos sentimientos; podemos tener cuerpos diferentes, pero cada alma es una gota

de agua que forma parte del mismo océano, idénticos en los aspectos más esenciales a

nuestra fuente creadora.

97

De esta manera el maestro Jesús lograba ver en cada ser esa misma alma por la cual

sentía tanto amor, tanta devoción, sin importar si era amigo o enemigo, si lo amaba o lo

despreciaba, si lo recibía con una sonrisa o con un insulto; el entendía que era el mismo

ser atravesando procesos distintos, el mismo ser llamado “Dios”.

Si aún le cuesta entender esta verdad fundamental ubíquese en el siguiente escenario;

piense por un momento en esa persona a la que ha logrado amar tanto en esta vida, y no

solo se deje llevar por la condición que tenga con usted; no se guie solo porque sea su

hijo, madre, hermano, etc. Piense en esa persona a la que ama, por ser ese ser humano tan

increíble que es.

Recree cuáles son esas características que adora tanto de ella, encuentre ese lado

amoroso que tanto ama en esa persona, esa luz interior que posee y por la cual ese ser

especial ha llegado a formar una parte tan importante en su vida; recuerde esas cosas tan

maravillosas que ha hecho por usted y por las cuales, (aunque sea un triste

condicionamiento de su ego), usted considera es “digno” de su amor.

Ahora imagine con todo su pesar, que esa persona deja este plano existencial para ir a

un plano donde es posible, encuentre mayor felicidad. Un plano en donde su traje

corpóreo ya no la acompañará; sin embargo, su esencia como alma se irá intacta, al igual

que su amor por usted.

Imagine ahora que por algún medio, usted sabrá que esta alma tan especial, tan única

he invaluable para usted, vendrá nuevamente a este mundo a seguir experimentando el

milagro de la vida; esta vez desde un nuevo cuerpo, en donde de una manera que por

ahora escapa de su entendimiento, éste ser decide reflejar al padre creador, y dividirse

como alma para continuar experimentando la dualidad a través de dos seres, a través de

dos vivencias distintas, de dos formas de consciencia tan idénticas el uno al otro, que cada

una es un ser completo en imagen y semejanza a su otro igual.

Estas criaturas nacen como mellizos, nacen bajo su mismo núcleo familiar más

cercano, crecen cerca de sus ojos donde su amor puede saciarse de ese ser; ese que en su

existencia pasada significo tanto para usted; ese ser a quien usted no logra ver con otros

ojos más que como a esa persona con quien compartió esas experiencias tan hermosas

que jamás podrá sacar de su corazón.

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Internalice esto por unos minutos.

Experimente sus sentimientos.

Déjelos fluir.

Ahora sienta como sin importar que cuerpo ocupe esta alma, usted lo amará

incondicionalmente sin hacer distinción alguna de a que mellizo sea; su amor

incondicional será igual para ambos; pues ambos, son el mismo ser que usted tanto amó,

ese ángel amado con el que usted era y seguirá siendo incondicional hasta el final de sus

días.

Tómese unos instantes, e Internalícelo.

Ahora pregúntese, si cada alma es una fragmentación del dios creador, ¿Qué diferencia

puede haber entre estos mellizos, y los otros individuos de su vínculo familiar? ¿Qué

diferencia habría entre estos mellizos y las personas con las que se regodea? ¿Qué

diferencia habría entre este ser, al que usted logró amar tanto por la bondad de su corazón,

al resto de las almas creadas bajo la misma acción de división de la consciencia creadora?

¿Qué acaso piensa que este ser siendo semejante al dios creador, al igual que cada alma

creada, es el único que puede tener un corazón tan hermoso?

¿O acaso usted piensa que fue su personalidad encarnada, o en otras palabras su Ego,

lo que le permitió a este ser llegar a recrear actos de amor tan hermosos?

Lo más precioso que puede tener un ser humano es su parte divina, todo acto de amor

se origina desde la chispa de luz que el padre creador nos otorgó al hacernos a su

semejanza. No somos una copia del padre, somos una extensión de él mismo; recuerde

siempre que no somos más que neuronas de un cerebro celestial llevando información de

un extremo a otro, recopilando datos con nuestras vivencias, para que éste ser supremo

pueda experimentar y conocerse así mismo a través de nosotros.

De esta misma manera, así como un alma necesita encarnar para experimentar de que

van las emociones, para interiorizar a través de las experiencias esas lecciones que debe

aprender, y que al estar en otro plano puede conocerlas, pero es solo a través de la propia

experimentación en este plano es que logra integrar su aprendizaje; de esta misma manera,

nuestro padre creador necesito conocerse así mismo a través de la subdivisión de su

99

consciencia, en las infinidades de existencias del universo. De esta manera podemos

comprender, que así como este ser amado que ahora forma parte de dos mellizos, de la

misma manera siguen siendo la misma esencia celestial, dividida infinitas veces para

lograr experimentarse así mismo desde un número incalculable de consciencias.

Por lo tanto, no es más que una ilusión de separación no ver a estos mellizos con los

mismos ojos de amor que al resto de las almas que nos acompañan en esta aventura de

vida; no es más que una triste ilusión no ver en cada ser ese potencial de amor infinito

que yace como condición natural en cada uno de nosotros; piense por un momento, ¿Si

nuestro Dios Padre no merece nuestro amor incondicional, entonces quien lo merece?

Cuando dejemos de mirar a nuestros semejantes con ojos de prejuicio, de condenación,

de ira, de intolerancia, y comenzaremos a mirarlos con los ojos de la compasión, de la

compresión, del respeto, del amor incondicional, comenzaremos a hallar en cada ser que

veamos a nuestro alrededor, a un pequeño dios en formación y crecimiento. Y en tal

sentido, por qué no habríamos de mirar sus fallas con la misma compasión que tendríamos

de ver a un ser amado cometer un error por ignorancia, por qué no creer en el potencial

que tiene cada alma en autorrealizarse; odiemos a las malas acciones del hombre, no al

dios que reside en él.

Tendemos a caer en la ilusión de experimentar la materia solo a través de nuestros ojos

físicos, tendemos a crearnos toda una idea de cómo es una persona solo por lo que

podemos observar de él; concebimos en nuestra mente, todo un patrón de conducta de lo

que una persona es como ser, de cuáles son sus intenciones, sus inclinaciones, virtudes y

defectos. A veces, vamos por la vida levantando falsos juicios en contra de personas que

ni siquiera nos damos la oportunidad de conocer, sin siquiera abrirnos a la posibilidad de

conocer la realidad existencial de una persona y de los procesos en los que se encuentra

inmerso.

Se nos hace muy fácil levantar apresuradamente juicios y lo tomamos como una

habilidad para intuir la verdadera naturaleza de cada persona; lo que nos conlleva a vivir

experimentando la ilusión que nosotros mismos nos creamos de nuestro entorno.

100

Nos encontramos inmersos en el espejismo que nosotros mismos nos creamos, y nos

convencemos es la realidad innegable de la naturaleza de un ser. Nuestro Ego, nuestro

falso sentido de lo que somos como individuo, es nuestra condicionante más grande. Es

nuestro velo de cegués que tiende a comparar las condiciones de los demás con las de

nosotros mismos, tendiendo a juzgar las vivencias y experiencias de los demás con las

nuestras.

Si el gran maestro Jesús el Cristo renaciera en esta época, se encontraría frente a un

gran desafío, dado a la capacidad humana para juzgar la materia según sus propias

condiciones y experiencias. De esta manera, tendría Jesús que volverse un renombrado

artista o personalidad de la farándula internacional para captar la atención de las personas;

tendría Jesús que hacer trucos de magia como convertir el agua en vino y multiplicar la

comida en shows televisivos, a fin de captar la atención de las personas; y aun así, estos

pensarían que solo son efectos especiales, y de que solo se trata de otro charlatán más.

¿Por qué el ser humano debe permitir que su ego lo condicione tanto, que el pobre

Jesús tenga que hacer trucos de magias alusivos a un elevado desarrollo espiritual, para

que una persona rompa la barrera de su ego y encuentre la sabiduría en sus palabras?

¿Por qué alguien debe cumplir con ciertos requisitos mentales que nosotros mismos

nos hemos autoimplantados para que valoremos su opinión?

El ser con verdadera consciencia Cristica es el que encuentra la sabiduría del cosmos

en las palabras de cada persona. Cada ser, no es más que el cumulo de experiencias

acumuladas vidas tras vidas; cada ser, contiene sabiduría cósmica sin importar cuales sean

sus circunstancias económicas, culturales, religiosas, étnicas, etc. Cada alma lleva un

conocimiento acumulado que proviene de su parte más cercana a la fuente primaria.

Por qué caer entonces en la ilusión de juzgar a la materia a través de nuestros ojos

físicos, cuando un niño de 8 años, o el señor del puesto de frutas, o esa persona que tanto

resentimiento le tiene, podría enseñarle cosas tan hermosas que cambiarían su estado

anímico, o la manera errónea en la que su psique comprende una realidad existencial.

No existe el amor en un acto de prejuicio, no existe el amor incluso en un acto de

juicio, solo existe el amor en la valoración de cada alma y su sabiduría implícita, en la

comprensión de los procesos experimentales de cada persona, en la condolencia al dolor

101

ajeno, en el apoyo incondicional, respetando siempre el proceso evolutivo de cada

individuo y en el ayudar al prójimo a entender, lo que ya hemos entendido nosotros.

De esta manera debemos revisar siempre la calidad de nuestros pensamientos,

buscando que cada manera de comprender una situación nazca desde nuestro principio de

amor, al igual que cada acto realizado no contenga otra finalidad más que manifestar el

amor que yace en nosotros.

El miedo, nuestro mayor enemigo.

El miedo sin duda alguna es el más astuto de nuestros enemigos, que se ha camuflado

como un aliado en la supervivencia evolutiva terrena; es la condicionante a nuestro

instinto de autoprotección, el que nos resguarda de situaciones riesgosas que impliquen

un peligro para nosotros, para nuestra súper vivencia y nuestro estado emocional.

Sin embargo, esta misma cualidad es lo que produce que un individuo se aferre a una

zona de confort que le resulta tormentosa, pero prefiere quedarse ahí por miedo a ir a otro

lugar o situaciones en donde podría encontrar mayor infelicidad; lo que conlleva a

mantenernos atados a las mismas situaciones dolorosas que afligen nuestras vidas por

miedo a arriesgarnos a buscar mejorar nuestras condiciones.

No obstante, aunque dado el contexto pudiera parecer un mecanismo de autoprotección

necesario, como el no exponerse a actividades físicas que amenacen nuestra

sobrevivencia. Sin embargo en lo que respecta a la realización personal de un ser, es el

peor enemigo de un ser humano. El miedo es, el padre de todos nuestros pensamientos

negativos, y nuestros pensamientos negativos a su vez, están formados por dos

condiciones.

La primera es el temor a que una circunstancia en nuestras vidas cambie para una

situación menos favorable, abarcando aquí el miedo a lo desconocido; y la segunda

corresponde el miedo a que una situación por la que estemos atravesando, permanezca de

la misma manera por un indeterminado periodo de tiempo.

102

De esta manera no solo vibramos en el temor al cambio, sino que nos aferramos al

miedo, a que esa situación a la que conscientemente nos anclamos, se prolongue

indeterminadamente en el tiempo.

Si por ejemplo sentimos miedo de que nos despidan de nuestro empleo, si tenemos

miedo que nuestra pareja deje de amarnos, o incluso el miedo a poner sus esperanzas en

este nuevo conocimiento y que la información que le pueda aportar este libro no lo ayude

a mejorar su vida, son ejemplos que corresponden a una de estas dos corrientes de

pensamientos.

Estudios realizados han demostrado que una persona común genera un aproximado de

60 mil pensamientos diariamente, de los cuales el 94% son repetitivos y el 80% son

negativos; ahora podemos hacernos una idea de cuánto el miedo puede condicionar la

mayoría de nuestros pensamientos y por ende la realidad que nos rodea, al estar

constantemente atrayendo con nuestra vibración esas condiciones que no deseamos para

nosotros mismos.

Podría decirse que independientemente de cuales sean las condiciones en las que cada

alma encarne a en este mundo, y cuales sean sus karmas a trabajar, el miedo representa el

karma más grande que puede tener un alma, puesto que condiciona la mayoría de nuestros

patrones de pensamientos a lo largo de nuestras vidas.

Ahora bien, habiendo entendido la participación tan grande, y en la mayoría de los

casos imperceptible, de la manifestación de este sentimiento en nuestras vidas, es

necesario generar un punto de comprensión de las leyes que rigen nuestros planos que

nos permita erradicar estos patrones de pensamientos autodestructivos.

Existe una ley innegable en el cosmos a la que todos los grandes Gurús y maestros han

concordado, y es que con la eliminación de cada karma presente en un aspecto de nuestra

vida, éste aspecto se transforma inmediatamente, liberándonos de las situaciones

tormentosas que lo creaban.

Basar nuestra voluntad, acciones y tren de pensamientos, en la identificación y

sanación de cada uno de nuestros karmas, es el mayor acto de evolución, de liberación y

mejoramiento personal, que podemos hacer en acto de amor hacia nosotros mismos. Es

tomar un bus en vía directa hacia nuestra propia felicidad y autorrealización.

103

El tránsito de un alma a través de este plano existencial, es como una persona

caminando por un sendero desconocido para él; en donde, en su tránsito, atraviesa veredas

y calles que pueden ser tanto agradables como desagradables, en donde muchas veces su

propia inconsciencia lo hace detenerse y dar vueltas en un lugar que le resulta incómodo

y poco amistoso, un lugar que le genera dolor y angustia, atrapado por su propio karma

que le lleva a transitar una y otra vez por la misma calle sin encontrar salida. Pero el ser

que busca su autorrealización espiritual y se compromete a identificar y sanar sus karmas,

recibe un rayo de luz cósmica que le indica el camino a transitar para salir de este lugar

hacia un lugar mucho más feliz y agradable para él.

Por lo tanto, el único temor al que el ser humano debe someter su ser, es a seguir

viviendo en la ignorancia espiritual que lo llevará a repetir los mismos patrones de

conducta, y por ende, a seguir atrayendo a su vida las mismas situaciones tormentosas

que lo afligen; solo la sabiduría cósmica, es capaz de librarnos de nuestras cadenas

karmaticas. Así que si se da permiso de experimentar un miedo, que sea el de permanecer

estancado en una condición de ceguera espiritual.

104

Ley del tiempo, decantaciones de los cuerpos celestes.

Podría decirse sin duda alguna que el tiempo es uno de los factores que más

condicionan la vida del ser humano; determina el instante en la línea de tiempo y espacio,

con la cual desarrollamos la mayoría de las actividades de nuestra cotidianidad.

Muchas veces sentimos que la percepción que tenemos de éste pareciera alterada,

percibiendo como si transcurriera más rápido cuando realizamos alguna actividad que nos

guste, o por el contrario, se haga más lento cuando nos encontramos en un proceso que

nos cause inconformidad o desagrado; pero estas solo son ilusiones de nuestra percepción,

por nuestra naturaleza a aferrarnos a las situaciones que nos den placer y rechazar las que

nos lo restan; sea cual sea el caso, pareciera que siempre estamos en una constante

inconformidad con el transcurrir del tiempo.

En torno a su transcurrir hemos creado estructuras organizativas que marcan el compás

de nuestras labores diarias; una zona horaria para el trabajo, para dormir, para disfrutar

de nuestros hobbies, un tiempo de edad para comenzar y culminar los estudios etc. Hemos

creado normas que regulan según el tiempo, el inicio y el final de las acciones que

ejecutamos en éste plano material. Pero se abre la pregunta, así como hemos creado

normas para adaptar nuestros procesos al transcurrir del tiempo, ¿Existirá un compás que

marque el periodo de nuestros procesos vivenciales? Y si es así, ¿Quién lo determina?

La respuesta a estas interrogantes se manifiesta cuando logramos entender, quien o

que, es el responsable de la duración de nuestros procesos; así como para respondernos a

la interrogante ¿Quién soy? Primero debemos respondernos ¿Qué soy? De esta manera

debemos comprender quien o que consciencia nos rige, para comprender que

condicionantes afectan nuestras vidas, nuestras experiencias, y el periodo en el que se

desarrollarán.

Es común que ciencias como la astrología cause ciertas opiniones encontradas, y con

mucha razón, el mal uso que unos seres le han dado, han provocado que nos hayamos

formado una mala opinión de esta, y me incluyo completamente en ese comentario, puesto

que, era una de los que aseveraba, solo se trataba de falacias utilizadas para llenar

tabloides de revistas.

105

Sin embargo, mis experiencias extra sensoriales fueron cambiando poco a poco mi

manera de entender esta ciencia; a través de ellas fui entrando en consciencia, como mi

opinión acerca de este tema, había sido tan infundada como apresurada.

Hay que tener en cuenta que el negarse a comprender una realidad fundamental que

explica los procesos experimentales del ser humano, no hará que esta ley deje de operar

en nosotros, solo nos hará más esclavos de una ley que nos negamos a conocer,

transitando por la vida condicionados por la ignorancia a las normas que rigen nuestros

procesos internos y externos.

De esta manera, al abrirme a la posibilidad de que efectivamente, “no me las sabias

todas”, fui dándome cuenta de cómo había personas que interpretaban los sucesos

estelares de una manera tan acertada, que era innegable caer en consciencia que existiera

una relación entre mis experiencias terrenales y los procesos de los cuerpos celestes.

Aunque debo mencionar, que las situaciones que comenzaron a hacer eco en mí, y me

hicieron entender la estrecha relación entre las emanaciones de los planetas de nuestro

sistema solar, y los procesos de aprendizaje en los que me encontraba transitando, era

cuando por intereses personales le preguntaba a alguno de mis maestros, que me

profetizara la fecha en la que se materializarían ciertas circunstancias que esperaba con

ansias, ciertas circunstancias que eran importantes para mí, y al tener respuesta a través

de mis estados meditativos, las fechas en las que mis maestros profetizaban se cumplirían

dichos eventos, no solo coincidían perfectamente, sino que llamaba mucho mi atención

que justo esos días, todos los astrólogos coincidían en que por la configuración de los

planetas regentes se me materializaría dicha situación, dado la configuración que

disponían los cuerpos celestes en dicha fecha.

Por otro lado, otra prueba más para mí en cuanto a esta realidad, sería la profecía que

mi gurúji Babaji hizo en cuanto a que, dada mi configuración astrológica en mi carta

natal, con el último eclipse que cerraría la serie de eclipses leo-acuario, se daría en mí el

ultimo aprendizaje necesario para alcanzar la supraconsciencia, evento que se materializo,

a los siete días trascurrido el eclipse. Desde este momento en adelante, las lecciones de

mi nuevo maestro eran de carácter evolutivo, del plan cósmico que envuelve la creación

del dios padre, y de la manera en la que los cuerpos celestes rigen el plan evolutivo de

este planeta; aseverándome la relevancia que tenían los cuerpos celestes al ser

106

decantaciones energéticas de los rayos cósmicos que expresan aspectos de sabiduría de la

fuente primaria.

“Las decantaciones son el maestro del tiempo, ahí está la clave.

Son el algoritmo primordial.

La raíz binaria de la conversión de la materia en lo que siempre debió ser,

la fórmula matemática del ser.

Las decantaciones son la capacidad cognoscitiva del ser humano.

Los rayos de sabiduría emanados de los cuerpos celestes”.

BUDDHA RIDISHTA.

El proceso evolutivo de un ser humano viene sujeto a las experiencias vivenciales que

atraviesa durante cada proceso de encarnación; la decantación de la luz primordial que

posee cada cuerpo celeste, no solo imprime en cada ser un sello regente en el cuerpo que

habitará durante cada vida, sino que estas influencias emanadas de cada planeta, alterará

aspectos de su capacidad cognoscitiva, llevándolo a experimentar determinadas

situaciones por las que será envuelto al actuar bajo la ley de causa y efecto, según su

impregnación karmatica.

Cada cuerpo celeste posee una vibración particular, que al refractar la emanación

energética del astro regente de nuestro sistema solar, emiten una fractalidad de la

consciencia cósmica expresada en energía electro magnética.

Cada constelación planetaria que influye sobre el proceso evolutivo del ser humano,

se convierte en una puerta cósmica, que en conjunción a nuestro sol, emanará un aspecto

de la consciencia primaria; dejando en el cuerpo terrestre de cada alma, un sello vibratorio

producido por la configuración del cumulo de planetas que hacen reflejo a su carga

Karmatica.

107

También es importante resaltar, que el constante transito que estos cuerpos celestes

hacen durante el transcurrir de vida de un individuo, marcarán todo un conjunto de

circunstancias externas, que expondrá a cada ser a desenvolverse en las circunstancias

que, de acuerdo a su ley de casusa y efecto, necesita atravesar para obtener un desarrollo

espiritual.

De esta manera, los ciclos dentro de cada encarnación del ser humano, se ven regidos

por las decantaciones de energías primarias que los astros van entregándole durante su

proceso evolutivo, siendo el reloj cósmico que marca las pautas de los ciclos de

experimentación dentro del plan evolutivo en el que se ve envuelto cada ser.

En tal sentido, los planetas de nuestro sistema solar, marcarán con su tránsito a través

de las puertas estelares de las constelaciones que afectan en mayor medida nuestro campo

magnético los tiempos en los que cada ser deberá transitar por distintas circunstancias,

sean agradables para él o no, el tiempo y el orden cronológico para cada evento lo

marcarán los astros en su tránsito por la bóveda celeste.

Entendiendo la regencia que poseen estos cuerpos sobre nosotros, se debe resaltar que

el ser humano siempre estará sujeto a sufrir las emanaciones de los planetas que hagan

resonancia con su cuerpo; sin embargo, su capacidad cognoscitiva no se verá alterada en

manera negativa por dichas emanaciones, si la conexión con su supraconsciencia, o con

su yo superior, condiciona en él las acciones karmaticas que ejecutará en total respuesta

a su ley de Dharma. De esta manera haremos nuevamente hincapié, en la importancia de

las técnicas de conexión que se han enseñado en este libro como herramienta de evolución

espiritual, al permitirle a usted, tener una brújula cósmica que le ayudará siempre

entender, cual es la manera adecuada de actuar ante cada situación que se presente en su

vida.

En tal sentido, podría entenderse, que las emanaciones de los cuerpos celestes nos dan

un impulso energético que afecta directamente nuestra capacidad de raciocinio, nuestra

toma de decisiones, la manera en la que percibimos un evento, la manera en la que nos

sentimos con respecto a una situación en particular, impulsándonos a superar

circunstancias que nos arrojaran una elevación de consciencia.

108

De esta manera, al entender la forma en la que nuestro plan de elevación de consciencia

es ejecutado, no se le debe tener miedo a las energías celestes y a su influencia sobre

nuestra psique; los astros no solo marcan los inicios y finales de procesos de aprendizaje,

que bien puede ser fuertes o leves, también nos emanan energías que pueden aprovecharse

de la manera correcta.

Si por ejemplo, un cuerpo planeta, emana una energía que alimenta su sentimiento de

pasión, es un error tomarlo como una influencia negativa; todo aquello que nos pueda

llevar a un estímulo positivo para nuestra alma, es algo que no nos resta; no hay porque

luchar y reprimir estas emanaciones, el permitirnos disfrutar sanamente de estas

influencias cósmicas es un acto de amor propio, el consentirnos a nosotros mismos, es un

acto de amor propio.

De esta manera siguiendo el mismo ejemplo, si un cuerpo celeste influyera en su

energía sexual, porque no habría de disfrutar de esta energía desde su centro de amor; si

se entiende que nuestro propósito fundamental, es ser una simulación manifiesta de las

emociones de nuestro Dios creador.

Solo debemos tener en cuenta, la polaridad en la que podamos manejar estas energías,

sin caer en polaridades negativas que nos generen un impacto karmatico negativo.

En tal sentido, debemos tener en cuenta, que, hay dos condicionantes que deben

cumplirse para poder aprovechar cualquier tipo de emanación de los cuerpos celestes;

esas son:

Que la acción de disfrutar de estas energías esté en alineamiento con nuestro Dharma.

Como ejemplo práctico, no por el hecho de querer disfrutar esta emanación celeste, usted

va a serle infiel a su conyugue, o va a jugar con los sentimientos de otro ser para buscar

una autosatisfacción. Siempre se debe tener en cuenta cual es el horizonte que se trazó

nuestra alma en esta experiencia de vida, y tomar todas nuestras decisiones en esa

dirección.

Y la segunda condición seria, que el disfrutar de estas emanaciones, no nos genere

algún habito que se pueda volver una adicción, que luego que estas emanaciones

disminuyan, nos queden patrones de conducta, de pensamientos, o se haya generado un

hábito, que se pueda volver parte de un karma negativo.

109

Al poder comprender a través de los astros cuales son los tiempos que rigen cada

proceso experimental que atravesamos, hay que hacer énfasis en que se debe entender,

que el tiempo que deba durar cada proceso, es lo que permitirá la transformación de la

consciencia durante el tiempo transcurrido, en tal sentido, no debe caer en ansiedades por

el transcurrir del tiempo, puesto que ese periodo será necesario para la materialización de

cada panorama y cada circunstancia que se manifieste en nosotros mismos como en

nuestro exterior.

Existe una anécdota muy hermosa que menciona a un hombre, que ve con

preocupación, como una mariposa trata de salir con mucha dificultad de su crisálida. Esta

mariposa, solo ha logrado abrir una pequeña hendidura, donde el hombre puede ver como

con sus patitas, trata de romper la crisálida sin tener éxito.

Pasa el transcurrir de una hora ya, y el hombre desesperado por no ver avances en el

trabajo de la mariposa, busca una navaja y procura ayudarla rompiendo la crisálida lo

suficiente como para que esta salga por completo.

Pero entonces el hombre se percata que algo sucede, la mariposa, aunque ya salió de

la crisálida, no puede volar, y es que sus alas son diminutas, se encuentran atrofiadas.

El hombre sin comprender el porqué de este evento, investiga rápidamente la situación

para llegar a la conclusión, de que ese esfuerzo que la mariposa estaba haciendo por salir

de la crisálida, era lo que provocaba que su cuerpo drenara sangre hacia sus alas, lo que

la conllevaba a que se desarrollará a plenitud; y él, en su desconocimiento, al tratar de

ayudar a la pequeña mariposa, interrumpió el tiempo necesario que a esta criatura le

llevaba desarrollarse por completo.

De esta misma manera, cada marco de tiempo en que los cuerpos celestes se demoran

en iniciar y concluir situaciones en nuestras vidas, marcan el tiempo necesario que nos

permitirá desarrollarnos en consciencia, y, por ende, trascender las situaciones

correctamente, sacando un aprendizaje de cada experiencia vivida.

110

Ley de causa y efecto, el karma.

Lamentablemente la desinformación que un individuo puede tener con respecto a esta

ley, es sin lugar a dudas la causa principal de todas las situaciones que le causarán

sufrimientos y angustias a lo largo de su vida.

Así como se ha mencionado con anterioridad, el alma no encarna en este plano

dimensional para aprender a través del dolor, el dolor, es una consecuencia de nuestra

inconsciencia, de nuestra ignorancia en no comprender los procesos evolutivos por los

cuales el alma atraviesa vida tras vida.

El vivir bajo la ignorancia de las leyes que rigen nuestras vidas, solo nos hace unas

marionetas de las energías emanadas de los cuerpos celestes, actuado bajo la

programación cognoscitiva del planeta que nos esté influenciando en nuestra toma de

decisiones.

El ser que decide en su magna ignorancia, no atender a las normas cósmicas que rigen

el plan evolutivo en el que decidió formar parte, es solo un zombie, un muerto en vida,

un desperdicio de materia.

Ahora bien, seguro todos hemos escuchado mencionar antes a la ley de causa y efecto,

parece sencillo de entender, toda acción genera una reacción. Sin embargo, extrapolar

esta ley primordial al plano energético, es lo que cambiara por completo nuestro entorno

y las situaciones que experimentamos a lo largo de nuestra vida. Entendiendo por su

puesto, que toda situación en el plano terrenal, tiene su origen en el mundo energético, y

por ende, en los planos etéreos.

El karma no es una consciencia universal que está en constante vigilia de cada acción

que ejecutamos, y que nos devuelve como un bureman cada situación por igual. No es un

agente del destino deseoso por pagarnos con la misma moneda que hemos pagado a otros.

Siguiendo el fundamento del principio de acción-reacción, se puede comprender que

cada acción que ejecutamos en nuestras vidas, genera una impregnación energética que

repercutirá directamente sobre la vibración de nuestro ADN, lo que provocará como

consecuencia, que volvamos a atraer a nuestra vida las situaciones que vayan en

concordancia con nuestra vibración; cayendo en un círculo de acción-reacción del que

111

solo escaparemos al cambiar el principio de polaridad emocional con el que estamos

eligiendo las acciones a tomar.

Partiendo desde este principio de definición, entendiendo que cada acción generará

una reacción que podría repercutir entre un karma positivo o negativo, se pueden

identificar la existencia de otros tipos de karma, estos son los siguientes:

Karma positivo: es la impregnación energética que se ha generado como el resultado

de una acción tomada desde la polaridad del amor, recordando que es el amor, el principio

universal de más alta vibración.

Karma negativo: igual que al anterior es la impregnación energética resultante de

nuestras acciones, teniendo la salvedad, que estas han sido tomadas desde la polaridad

del miedo; en consecuencia, solo nos condiciona a atraer situaciones tormentosas a

nuestras vidas.

Karma individual, este corresponde a todo el cumulo de karma negativo que un

individuo a acumulado a lo largo de todo su proceso evolutivo; de aquí viene dado el

hecho, que nazcamos bajo un código genético impreso en nuestro ADN, que resonará en

concordancia con nuestro Karma individual.

Karma familiar: partiendo desde el hecho en el que es muy común que las almas

encarnen dentro de un mismo grupo específico, en donde sus estrechos lazos que han

formado vida tras vida facilite de alguna manera su interacción en cada vida, también

estos vínculos pueden ser producto de malas experiencias, en donde las almas vuelven a

encarnar juntas para limpiar las malas experiencias de vidas anteriores; trayendo de vuelta

a este plano, una impregnación energética negativa que dificultará su trato.

Se puede apreciar muchos de estos casos, en personas que comparten relaciones de

amor-odio, con un padre, un hermano, una madre u otro miembro cercano del mismo

grupo familiar, en donde las almas por las circunstancias que condicionan su vida, se ven

forzadas a tener vínculos cercanos con aquellas almas con las cuales necesitan resolver

su Karma.

Karma colectivo: si bien es menos conocido que los anteriores, no deja de regir el

estado de consciencia de un ser; esté karma pertenece a la idiosincrasia de un sitio

particular, son los patrones de comportamiento que el colectivo posee, y afectará en

112

mayor o menor medida a cada ser, de acuerdo a su nivel de consciencia; por ejemplo, en

un pueblo donde la mayoría de las personas tengan tendencias racistas, habrá personas

que aunque vivan en ese sitio, no resonarán con ese patrón de comportamiento involutivo.

Karma planetario: está condicionado al tipo de plan evolutivo en el que decidimos

formar parte, al elegir a nuestro planeta como ese parque de diversiones en donde el alma

atravesaría por las experiencias, que serían determinadas cronológicamente por los

cuerpos celestes que rigen nuestros procesos de aprendizaje.

No obstante, debemos resaltar, que la fórmula mágica para erradicar nuestro karma

será el trabajo en conjunto entre la autoexploración y la sabiduría cósmica. Uno no puede

existir sin el otro, puesto que la sabiduría que nuestro Yo Superior puede ofrecernos, a

través de nuestras prácticas meditativas, irán sembrando en nosotros esos sistemas de

creencias basados en las leyes cósmicas que rigen nuestro ser, e irán reeducando nuestra

psique en la manera correcta en la que debemos atravesar cada situación de nuestras vidas;

así como también, nos permitirá poseer el conocimiento necesario para que a través del

proceso de autoexploración interna, vayamos identificarnos ese karma presente en

nosotros que no solo es el responsable de todo nuestro entorno, sino que también nos

condiciona a la existencia obligatoria entre este plano material y el plano astral.

En tal sentido, el desconocer la ley de causa y efecto a nivel energético, nos condena

a vivir bajo la influencia de los cambios de consciencia, que propician en nosotros los

cuerpos celestes que rigen nuestro plan evolutivo. Trabajando así en su ley, superando

cada proceso de acuerdo a la temporalidad que estos mismos denotan.

Viviendo de esta manera, en una ceguera que en muchos casos es selectiva, puesto que

se pretende desconocer los procesos que marcan nuestras experiencias, como manera de

facilitar nuestras vidas al tener menos variables que manejar en ella; sin embargo, son

estas variables las únicas que vale la pena realmente comprender y actuar en consecuencia

a ellas, ya que son las que fundamentalmente intervienen en el juego cósmico que define

el plan de encarnación de un alma.

El trabajar diez años afanadamente para tener un mejor cargo, el tener una hermosa

familia, el tener poder económico para complacer caprichos materiales, el ser el mejor

guitarrista del mundo, o un abogado exitoso, el graduarse con honores de una cotizada

113

carrera, nada de esto traerá más trascendencia para el cosmos como su propia

autorrealización espiritual; base su vida en la complacencia de estas metas que solo son

relevantes para la autosatisfacción de su Ego, y le aseguro que vida tras vida seguirá

atravesando un circulo interminable de gozo y dolor.

Tome en cuenta que nada pasa por accidente, si este material bibliográfico ha llegado

a sus manos, es una oportunidad que le está otorgando el cosmos para tomar consciencia,

en que vale más basar la vida en la complacencia de los deseos del alma, que en los del

ego; puesto que el alma solo desea alcanzar la liberación para regodearse en la felicidad

infinita que causa el volver a fundirse en la consciencia del dios creador, mientras que la

complacencia de los deseos del Ego, solo lo llevaran a basar su felicidad en situaciones

temporales; y la felicidad temporal, no es verdadera felicidad.

114

El Ego.

Si bien hemos mencionado que el karma es la respuesta vibratoria resultante de

nuestras acciones tomadas, podría entenderse como el Ego, a todo ese patrón de conducta

que nos lleva a generar o a acentuar nuestro Karma negativo.

Se va gestando como resultante de nuestras experiencias, y establece sistemas de

creencias que no corresponden a un principio de consciencia cósmica; de esta manera

crea en nosotros una falsa identificación del ser, conllevándolo a vivir bajo una ilusión de

separación de la unidad. Estos son pensamientos que, al no provenir desde un principio

de amor, van formando sistemas de creencias que responden a la polaridad del miedo.

El Ego es ese falso sentido de identidad, en donde un ser se percibe así mismo como

un evento aislado del universo, en donde su línea de pensamiento seguirá esta ilusoria

percepción.

Una persona que piensa que está separada de los demás eslabones del cosmos, no

concibe ver al prójimo con ojos de afecto, no lo siente cercano, no los percibe como una

parte de su mismo ser, y por ende, nunca se sentirá integrado a la unidad. Una persona en

éste estado de percepción, puede caer en pensamientos clasistas, racistas, xenofóbicos y

todas aquellas percepciones separatistas que apoyen su sentido de disgregación.

Solo cuando en un ser cesen estas percepciones individualistas, podrá comenzar a

caminar en las sendas del verdadero amor cósmico, liberando a su consciencia de las

falsas perspectivas que imprimieron en él, una visión adaptada al juego evolutivo por el

que está atravesando.

“Soy un rayo celeste que viaja por el cosmos.

Yo soy tu reflejo.

No se te ha dado un nombre para que lo hagas parte de tu Ego.

Se te ha dado, para que te alinees con tu propósito.

Tú no eres un nombre, no necesitas un nombre.

Tú solo eres, lo que eres.”

BUDDHA RIDISHTA.

115

Ley del Dharma.

Se puede definir como Dharma, al plan que cada alma se traza en recorrer mientras

transita por cada encarnación, en busca de la disolución de su carga karmatica.

Corresponde a la experimentación a través de todo un cumulo de situaciones, que

gracias a las emanaciones energética por parte de la configuración de los planetas que

conforman nuestro sistema solar, situados en la línea de tiempo y espacio adecuados, se

le facilita al ser, un patrón de conducta que irá determinado por la alteración en la

capacidad cognoscitiva por la que se ve afectado, al encontrarse bajo la impregnación

energética de un cuerpo celeste que emane sobre él, un aspecto de sabiduría decantado de

la consciencia cósmica que rige nuestro sistema planetario.

En palabra más fáciles de entender, a lo largo de la vida de un individuo, se le irán

presentando situaciones externas, que con la ayuda de las energías cósmicas, provocarán

un salto cuántico o un cambio de consciencia en el individuo, que lo ayudará a la

disolución de un aspecto karmatico; todo esto, como parte de un plan trazado por su

propia alma en busca de su desarrollo de consciencia y disolución del Karma.

Alinearse con el Dharma que nuestra alma se traza en cada encarnación, produce

impactos positivos en la vibración energética, y por ende, en las condiciones externas en

las que se desenvuelve; por lo tanto el conocer este plan evolutivo que cada ser se ha

trazado, es un mapa que conduce en vía directa hacia la autorrealización del alma.

Para conocer cuál es el Dharma de un individuo, puede utilizar las herramientas

meditativas aquí enseñadas, para que a través de la conexión con nuestro Yo Superior,

éste nos revele cual es el camino a seguir para nuestra liberación espiritual.

Sin embargo, si desea conocerlo a través de medios menos confiables, por involucrar

la interpretación de terceras personas, usted puede realizar una consulta de su Carta Natal,

bajo la tutoría un astrologo especializado en el área de astrología evolutiva. O como se

recomienda aquí, instruirse en el área de astrología evolutiva, para que sea su mismo

maestro interno, quien condicione la interpretación intuitiva que usted mismo hará sobre

su Carta Natal.

Una vez que se tiene pleno conocimiento de nuestro Dharma, se debe tener plena

confianza en los tiempos trazados por los astros, para ir cumpliendo con cada fase de él;

116

puesto que serán los mismos cuerpos celestes quienes vayan marcando como un compás,

los tiempos en lo que se deberá ir manifestando su ejecución.

Debo admitir, que lloré el día que mis maestros me informaron que ya era el momento

de empezar a escribir éste libro, al igual que lloré mientras iba redactándolo por las

primeras semanas; no me sentía preparado para la responsabilidad, siempre les pedí a mis

maestros que no quería empezarlo hasta haber alcanzado la supraconsciencia; sin

embargo, he comprobado que según los periodos cronológicos astrales, era el momento

mejor aspectado para su elaboración. Nunca se nos permite elegir nuestros tiempos, solo

podemos elegir como enfrentar las circunstancias de la vida.

117

Ley de libre albedrio, ¿somos realmente libres?

Tendemos a pensar que somos dueños y completos responsables de nuestras acciones

y pensamientos, tendemos a creer que lo único que rige nuestra psique son nuestros

propios procesos internos; creemos ser libres de elegir nuestros pensamientos, puesto que

no tenemos condicionantes externas que controlen lo que pasa dentro de nuestras mentes.

Hemos ya mencionado como los cuerpos celestes que orbitan nuestro sistema solar,

ejercen influencia sobre los procesos racionales de nuestra psique, así como mencionamos

que, con su tránsito a través de la bóveda celeste, marcan el principio y el final de cada

etapa de aprendizaje en los distintos escenarios que se van presentando a lo largo de

nuestras vidas; y en la misma manera, hemos explicado ya, como nuestra configuración

karmatica atrae a nuestras vidas las situaciones que estén en similitud de resonancia con

nuestra vibración energética.

Dadas tantas influencias que condicionan tanto nuestro entorno, que nos influyen en

nuestros procesos mentales como a las personas con las que compartimos, ¿Cómo

podríamos decir que somos realmente libres?

Una persona que decide mudarse de una ciudad a otra, puesto que, por su condición

de Karma presente, encarna en esta vida con una afección en su sistema respiratorio que

empeorará a cierta edad, y al mismo tiempo se crearán las sincronías necesarias por los

mismos cuerpos celestes que rigen su etapa de enfermedad, condicionando su etapa de

transición de una ciudad a otra, e influyendo en su psique para que a través de las energías

decantadas de un astro, sienta el impulso de mudarse de un lugar a otro; pregúntese lo

siguiente. ¿Qué tan libre podría ser esta persona?

Si podemos mirar ahora la vida desde un nuevo panorama, podemos entender que su

sentimiento de libertad, solo reside en su desconocimiento de las leyes universales

evolutivas; en consecuencia, lo que él cree es libertad, es la ignorancia que posee acerca

de las leyes fundamentales que lo rigen.

Pero entonces si los cuerpos celestes no solo influyen en las energías que motivan a

nuestra psique a tener cierto patrón de pensamiento, sino que prácticamente, nos empujan

a tomar las decisiones al crear las sincronías necesarias para impulsarnos hacia

determinadas acciones, ¿Qué es lo que realmente podemos elegir en nuestras vidas?

118

Las situaciones que forman parte del gran parque de diversiones que condicionan

nuestras vidas, no son más que eventos que nos ponen a prueba en determinadas

situaciones particulares; en las que debamos aprender a cambiar nuestra manera de

entenderlas, de vibrar ante ellas, al decidir tomar acciones desde un principio de amor o

de temor.

En cada instante, en cada situación que se nos pueda presentar a lo largo de nuestras

vidas, nuestro libre albedrio consiste en la elección que tenemos para afrontar las

situaciones que se nos presentan, tomando acción desde alguno de los dos polos

emocionales, el amor y el temor.

Cada decisión tomada bajo la elección de uno de los polos, tiene la capacidad de, o

mantenernos experimentando las mismas situaciones tormentosas que forman parte de

nuestro karma negativo, si se toman las decisiones desde la emoción del temor; o por el

contrario, si es tomada bajo el amor, se dispondrá a disolver este karma negativo, para ir

alineándonos con cada decisión basada desde el principio de amor, a nuestro Dharma.

Recordemos que este Dharma, no es más que el plan que se trazó nuestra alma como

camino a recorrer para la disolución de cierta impregnación de su Karma negativo; es el

recorrido a través de las situaciones que dispondrán los cuerpos celestes, él que le

conducirá al alma a contrarrestar el karma presente en él; por lo tanto, podría decirse, que

es el plan de vida que cada ser planea en pro de su liberación espiritual.

Debemos mencionar de igual manera, que la acción de amor propio más grande que

un ser puede realizar, es la búsqueda de su despertar espiritual, de su desarrollo evolutivo,

y por ende de su liberación karmatica.

Es tan imprescindible que se cumpla con esta acción de amor, que nuestros maestros

y guías espirituales, no podrán ejercer mayor acción en pro de la toma de consciencia de

un ser, que no tiene la motivación de superarse espiritualmente.

Siendo esta elección, la más importante que cada alma debe tomar, como la iniciación

de un despertar espiritual que lo conducirá a una toma progresiva de consciencia;

llevándolo a su propio desarrollo personal, a la alineación con su ley de Dharma, y en tal

sentido a su autorrealización.

119

Teniendo cada ser el privilegio cósmico, de poder tomar esta decisión en cada instante

de su vida, sin importar que periodos de aprendizaje este atravesando, esta será una

decisión que marcará un ante y un después en la evolución de cada ser.

“Tienes que respetarlos.

Dejarlos tomar sus decisiones.

Para actuar en la ley, tienes que respetar las formas.

La autosuperación.

El autodesarrollo.

Para llegar al resultado final.

La autorrealización”.

BUDDHA RIDISHTA.

120

Mi mensaje.

Mi amigo lector, antes de agradecerle por tomarse el tiempo necesario para inmiscuirse

en las páginas de este libro, quiero que tome un minuto de su tiempo, para darse las gracias

a usted mismo, por haberse abierto a esta experiencia, por no haber rechazado una

enseñanza, tal vez nueva, tal vez muy distinta a los paradigmas que ya estaban instalados

en usted, que lo condicionaban a una vida llena de ataduras karmaticas e infinitos ciclos

de sufrimiento.

Tómese un tiempo para sentirse orgulloso de usted mismo, por haberle dado a su alma

la libertad para comunicarle esas cosas que tan afanadamente ha querido decirle desde el

inicio de su vida; siéntase complacido que desde ahora, usted cuenta con un conocimiento

que le va a permitir experimentar el mundo de una manera distinta, donde las ilusiones

creadas para distraer a las almas de su verdadero propósito, ya son visibles para usted;

éste sin duda alguna es un nuevo renacer para su ser, éste es el inicio que marca un antes

y un después en su vida. Siéntase complacido por su nuevo estado de consciencia y por

todos los cambios positivos que esto conllevara a su vida.

La intención de este libro nunca fue concentrar la atención de las personas en la

complacencia de deseos mundanos; la intención no ha sido volver a todo el mundo rico y

quebrar las casas de apuestas, ni menos aportar más ilusiones al plano material que

distraigan más a las almas, retirando su atención de la razón fundamental que impulsa a

cada alma a tomar este camino evolutivo. La verdadera riqueza que éste libro entrega, es

el despertar de una consciencia que día a día se vuelve más hambrienta de desarrollo

espiritual, de su unificación al cosmos como una gota de agua que vuelve al océano

infinito del que ha olvidado que forma parte, y que solo ahí encontrara su verdadera

felicidad.

Por su puesto que al luchar contra sus cadenas Karmaticas, al alinearse a su ley de

Dharma, su vida entera comenzará a cambiar para mejor; así como lo mencioné desde un

principio no venimos a este plano a sufrir hambrunas y pesares; por supuesto que su

situación económica mejorará al igual que todos los ámbitos que forman parte de su vida;

pero esto será más gracias a su resolución del Karma a través de su despertar de

consciencia, que al usar estas prácticas meditativas para ver resultados de loterías.

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Parte del nombre espiritual que me dieron mis maestros en anteriores vidas, significa

“el enemigo”; “el que se opone”; y eso soy, me declaro enemigo del Karma, me declaro

enemigo de la inconsciencia, me declaro enemigo de la maldad, de las reglas y las leyes

absurdas, de las normas y los patrones sociales que nos condicionan a ser ignorantes de

las verdades universales del alma como mínimo común, para ser aceptados y así encajar

dentro de una sociedad decadente, y más aún, me declaro fiel enemigo, de todas las

formas y estructuras creadas por el hombre que lo alejan de su propósito fundamental.

Haga un acto de amor hacia usted mismo, y conviértase en un enemigo de su propia

infelicidad, de sus ataduras, de sus patrones de conducta que lo hacen atravesar

situaciones dolorosas; vuélvase enemigo de su karma, y de todas aquellas cadenas que lo

han mantenido en el desconocimiento de lo valiosa que es su existencia para el cosmos;

vuélvase enemigo de las formas que usted mismo se ha creado y las que ha permitido que

otros implanten en usted, y que lo alejan de su ser de luz.

Ya es momento de tomar consciencia, y evocar nuestras vidas en metas que generen

un impacto profundo y positivo en nosotros mismos, así como en la vida de las personas

que comparten esta experiencia de vida con nosotros; ya basta de basar la vida en la

complacencia de deseos mundanos que nos causarán alegría cuando los tengamos y

tristeza cuando ya no, ya hemos tenido centenares o miles de vidas complaciendo los

mismos deseos, y cada vida volvemos por más; ya es momento de tomar consciencia y

hacer algo diferente, probar algo distinto, buscar obtener una fuente de felicidad que no

dependa a ninguna condición externa.

Si usted puede crearse durante toda su vida un hábito adictivo, como el fumar, el tomar

bebidas alcohólicas, o algún patrón de conducta como sentarse todos los días a ver un

partido de deportes, ¿Por qué no puede también crearse un hábito reflexivo de

autoconocimiento? Hábito que lo llevará a un nuevo nivel existencial. Este será el único

hábito que realmente transformará su vida para bien.

El cambio de vida que usted desea no le caerá del cielo, ni se lo otorgara el seguir las

doctrinas de alguna religión; crea en usted mismo y en su capacidad de mejorar su vida,

nadie más que usted tiene el poder para resarcir sus acciones pasadas; usted no debe ir a

un templo, a un país exótico, o aislarse en una montaña para conectarse con la sabiduría

cósmica, al único sitio que debe ir, es hacia adentro; sus maestros, sus guías, y la

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consciencia cósmica, (la cual puede estar seguro que posee más sabiduría que cualquier

pastor religioso), siempre habitará dentro de usted, apoyándolo en cada momento, y

otorgándole ese poder de transformación, que lo llevará a su propia realización.

“Yo estoy aquí siempre presente.

Me estás buscando en las estrellas.

Yo estoy aquí y allá.

Habitando cada espacio como mío.

Yo siempre estoy aquí contigo, en ti.

Nunca te dejare solo”.

BUDDHA RIDISHTA.