ARDIENDO

Erin E. Keller

Ttulo original: Firing

Erin E. Keller

Traduccin y formatos: Traductores Annimos

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro o e-book puede ser

reproducida o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio, electrnico o

mecnico, incluyendo fotocopias, grabaciones, o por cualquier sistema de

almacenamiento y recuperacin de informacin sin el permiso por escrito de la

editorial.

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Correo electrnico de la autora: chase.ta@gmail.com

Esta es una obra de ficcin. Cualquier parecido con personas vivas o muertas es pura

coincidencia.

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Ethan es un hombre que teme admitir sus preferencias

sexuales. Tiene tanto miedo que prefiere aceptar sumisamente

los intentos de sus amigos por emparejarlo antes que admitirse a

s mismo y a los dems lo que siente. Su trabajo en el cuartel de

bomberos tampoco se lo hace fcil.

Adam es un escritor que acaba de pasar por una dolorosa

ruptura. Es sencillo, sensible, creativo y sabe lo que quiere. Y lo

que quiere es al bombero que le salv la vida tras el incendio de

su casa. El hombre que lo atrae y lo inspira al mismo tiempo. Su

hroe.

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Captulo Uno

Entonces? Has visto a la hermana de Janice? Es una

diosa, verdad? pregunt John mientras ataba los cordones de

sus botas, inclinado hacia adelante con un pie sobre el banco y la

cabeza girada hacia su compaero.

S, es muy bonita respondi Ethan sentado junto a l,

intentando tambin atarse las botas.

Bonita? Bonita?! De acuerdo, s, John estaba

evidentemente sorprendido por el trmino usado por Ethan.

Podra ser perfectamente una de las chicas de Hugh Hefner1 y

t la defines como bonita?

A Ethan solo le sali sonrer. Levant apenas los hombros.

Qu quieres que te diga, John? Me parece bonita.

S, s, est bien. Pero ya que ayer por la noche os fuisteis

juntos...bueno... qu pas entonces?

La acompa hasta su casa. 1 Creador de la revista Play Boy. Famoso por vivir en una mansin rodeado de

conejitas Play Boy (chicas hermosas y voluptuosas que posan desnudas en las pginas de sus revistas)

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Y...?

La acompa hasta su casa.

John mir a su amigo como si le hubieran crecido dos

cabezas.

No, espera. T la acompaaste hasta su casa... y eso es

todo?

Eso es lo que acabo de decir.

Nada... nada?

Nada.

Ni siquiera un roce?

John, basta por favor!

No. Basta t, Ethan! Ya no s qu ms hacer contigo!

Consegu arreglar lo de anoche y t... nada?

Veo que has cogido al vuelo el significado de mis

palabras.

John sacudi la cabeza, frustrado, mascullando algo

ininteligible. Ethan termin de atarse los cordones de las botas y

se levant del banco acomodndose la cintura de los pantalones

del uniforme. Abri su casillero y cogi la chaqueta.

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Ethan era uno de tantos bomberos de Nueva York y John

era uno de sus mejores amigos, as como su jefe de escuadrn.

Haca meses que estaba tratando de encontrarle una chica, le

haba presentado a todas las mujeres posibles e imaginables con

la esperanza de emparejarlo de alguna manera. Le disgustaba

verlo siempre solo. Pero sobre todo, lo consideraba un hombre

muy guapo (lo cual, de hecho, era verdad) y no poda

comprender que no tuviera una mujer a su lado.

Con su corto cabello castao, sus grandes ojos azules, sus

labios carnosos y un rostro perfectamente simtrico, Ethan

formaba parte de esa clase de tipos que podran tener a

cualquiera que quisieran. Invariablemente y en cada caso. Sin

excepcin. Sin embargo, Ethan estaba solo, por su cuenta.

Siempre.

Lo que John no saba era que Ethan estaba pasando por un

momento muy particular: estaba considerando seriamente la

posibilidad de ser gay y aquello le preocupaba profundamente.

Haba tenido muchas relaciones en su vida, todas con mujeres;

sin embargo, ninguna de ellas tuvo xito. Por otro lado, en las

ltimas semanas, se encontr ms y ms a menudo navegando

en internet por sitios gay para adultos, con la curiosidad

apretndole el estmago. Se descubri mirando algunas escenas

con los ojos entrecerrados, como si al hacerlo de ese modo

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pudiese eludir un poco el deseo, pero la reaccin de su cuerpo

era difcil de ignorar. Tena miedo. Tena miedo de que si admita

abiertamente a s mismo y a los dems aquella verdad, su mundo

se vendra abajo, tena miedo de perder a sus amigos, a John

sobre todo. Por no hablar del trabajo. Un bombero gay! Si casi

pareca que se tratara de un chiste.

El altavoz grazn antes de difundir el anuncio. Un incendio

en Greenwich Village2. El ensimo incendio en Greenwich Village.

Haca ya varias semanas que, peridicamente, un loco

prenda fuego a algunas casas de la zona despus de robar todo

lo posible. Los detectives estaban investigando, pero al parecer

todava no haban llegado a nada.

Salieron de inmediato con las sirenas a todo volumen.

Ethan adoraba su trabajo, aunque a veces era realmente muy

difcil tener que enfrentarse a ciertas situaciones. Le gustaba

sentir la adrenalina corriendo por sus venas tanto como le

gustaba ayudar a los dems. Estaba hecho para aquello, era su

vida.

A pesar del trfico nocturno, llegaron a su destino

rpidamente. John baj de un salto del camin y, junto el que se

encargaba habitualmente de la manguera, comenz a

2 Distrito del Sur de Manhattan (Nueva York) caracterizado por su intensa actividad cultural y artstica

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desenrollarla. Las llamas escapaban de la planta superior de una

casa blanca, la tpica casa del Village, el barrio de los artistas.

Ethan, junto con un compaero, se acerc a la carrera hasta

la puerta, bajo la mirada aterrorizada de algunos de los vecinos

de la casa.

Hay alguien ah dentro? preguntaron antes de

derribarla pero despus de comprobar que no haba peligro de

un retroceso de las llamas.

Ah vive un muchacho dijo una mujer de mediana edad

. Es muy querido. No lo he visto hoy... No s si est dentro o

no.

Ethan entr a la carrera. El humo haba invadido la planta

baja. Empez a subir las escaleras rpidamente mientras su

colega esperaba en la puerta la llegada de John con la manguera.

Cuando estuvo en el piso superior, se cubri con el brazo

para abrir de una patada todas las puertas que encontraba en su

camino. Estaba a punto de continuar a la siguiente cuando

percibi algo. Esto lo catapult al interior de esa habitacin

donde vio unos pies que asomaban detrs de un escritorio.

Lo encontr! grit con todo el aliento que tena en el

cuerpo, sintiendo cmo sus colegas suban para unrsele arriba.

Volvi su atencin al joven tumbado en el suelo.

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Hey, puedes orme? Todo est bien... permanece

tranquilo... ya te sacar de aqu...

Le palp el cuello para sentir el pulso. Era dbil. Y no

perciba el aliento.

Meti una mano suavemente bajo el cuello del chico

inclinndolo ligeramente mientras que con la otra le bajaba la

barbilla para abrirle la boca, presion con los dedos para obstruir

la nariz y se inclin sobre l, apoyando los labios sobre los suyos

e insuflando aire en sus pulmones.

OXGENO! grit hacia sus colegas que, mientras tanto,

estaban conteniendo el fuego proveniente de las habitaciones

vecinas.

Luego volvi a mirar al hombre debajo de l. Se inclin

sobre l de nuevo, continuando con la respiracin boca a boca

hasta que sinti cmo le empujaban desde atrs y dos

paramdicos se ubicaban al lado de la vctima, colocndole una

mscara de oxgeno sobre la cara.

Ethan dio un par de pasos hacia atrs, sin apartar los ojos

del joven. Desde luego, no era el momento de pensar en ciertas

cosas, pero ese chico era de verdad guapsimo.

Se dio la vuelta de golpe y alcanz a sus colegas que, entre

tanto, haban logrado extinguir las llamas. Ethan se quit el casco

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y se pas el antebrazo por la frente. John se acerc y le apoy

una mano sobre el hombro.

Nuestro hroe! dijo riendo entre dientes Si fueras

as de rpido tambin para conseguirte una chica yo sera ms

feliz!

Ethan inclin la cabeza hacia atrs, rodando los ojos.

John, eres estresante, sabes?

John no respondi, pues dirigi la mirada sobre el hombro

de Ethan para observar cmo los paramdicos sacaban al chico

sobre la camilla.

Pobre chico, espero que se recupere.

S respondi Ethan, y un momento despus se oy

toser al joven desconocido.

Ethan sonri aliviado y John le dio una palmada en la

espalda.

Buen trabajo, amigo.

Gracias.

***

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Seor, qudese acostado. Tenemos que llevarlo al

hospital.

No, no, estoy bien, de verdad.

Permtame insistir: es mejor si viene al hospital.

He dicho que estoy bien.

Ethan oy esas palabras, tan pronto como sali de la casa.

El chico estaba tratando de levantarse de la camilla, mientras

uno de los dos paramdicos pona las manos sobre sus hombros

intentando disuadirlo y hacer que se volviese a acostar.

Ethan se qued mirando la escena desde la acera por un

momento, sin saber qu hacer. Justo en ese momento, el joven

volvi la cabeza hacia donde l estaba y sus ojos se encontraron.

Ethan se dio cuenta de que haba contenido el aliento por un

segundo, sorprendido por aquellos ojos verdes tan bellos;

tambin se aterroriz. Hizo una mueca que supuestamente era

una sonrisa y luego se puso en movimiento como para dar la

vuelta.

Hey

La llamada fue seguida de un acceso de tos seca.

Seor, por favor, vuelva a acostarse.

La voz del paramdico.

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Hey!, disculpa!

La llamada se hizo un poco ms potente y fue acompaada

por otro acceso de tos.

Ethan volvi a girarse hacia el muchacho y se seal con un

dedo. El otro asinti y le hizo seas de que se acercara. Ethan se

sinti incmodo y tenso, pero de todos modos se encamin en

su direccin, mientras enumeraba mentalmente para calmar los

nervios. Ciertamente, la adrenalina an segua en circulacin,

pero en ese momento la cosa que lo tena ms agitado eran los

ojos del joven, que no se despegaban de l. Cuando estuvo al

lado de la camilla, Ethan le ofreci nuevamente una sonrisa

incierta.

El paramdico tiene razn, haras mejor en acostarte

dijo despus de aclararse la garganta.

Has sido t? Ethan arque las cejas un poco

sorprendido y el muchacho continu: Quien me salv, digo...

has sido t?

Ethan se sinti enormemente avergonzado, aunque en

todos los sentidos las cosas haban sido tal cual.

Oh, bueno, no... o sea, s ... yo te encontr, pero... sabes

... somos un equipo. No es solo mrito mo.

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Se pregunt cmo el chico haba adivinado que haba sido

l quien lo haba encontrado, pero no tuvo tiempo de decir nada

antes de notar una mano extendida en su direccin.

Mi nombre es Adam. Muchsimas gracias. Yo

realmente Acceso de tos. No s cmo darte las gracias...

otro acceso de tos.

Ethan le devolvi el apretn de manos y sonri.

Para empezar, podras dejarte llevar al hospital.

Pero estoy bien.

Tienes necesidad de un poco de oxgeno, te lo aseguro.

En ese momento, un agente de polica se acerc a la

camilla.

Es usted el seor Cades?

Adam hizo un gesto afirmativo con la cabeza.

Si no fuera mucha molestia, me gustara hacerle algunas

preguntas.

Ethan en ese momento se sinti fuera de lugar y dio un

paso atrs, dejando que el paramdico y el oficial de la polica

prosiguieran con su trabajo, pero l vio claramente a Adam

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estirando el cuello para buscar su mirada, hasta que desapareci

de la vista.

***

Adam fue ingresado en el hospital por una noche, para

ponerle oxgeno y controlar el hematoma que tena en la parte

posterior de la cabeza. Su madre lleg a la carrera junto con su

hermana una hora despus de su ingreso.

Adam! Oh, Dios mo! Cmo ests? Mi nio...

Adam sonri desde su cama. l estaba bien, excepto por

algo de tos y un vago dolor de cabeza.

Bien, mam, de verdad.

Bien... cmo puedes decir que ests bien? Te han

asaltado.

Pero tambin me han salvado, verdad?

Pronunciando esas palabras, Adam record a aquel

bombero. No lograba explicarse el porqu, pero cuando lo haba

visto, sinti que haba sido l quien lo haba salvado. l estaba

inconsciente en aquel momento, pero tal vez fuera su mirada, all

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sobre la acera, tan preocupada, lo que lo llev a suponer que

haba sido l. Quera agradecerle mejor y decidi que, tan pronto

como saliera del hospital, pasara por el cuartel de bomberos.

Adam viva solo desde haca unos pocos aos. Era escritor a

tiempo completo y prefera vivir en soledad para poderse

abstraer del mundo y as dedicarse a su trabajo. Su madre y su

hermana insistan en que encontrase un compaero. La relacin

con Bill, su ex, haba terminado haca ms de un ao y las dos

crean que Adam necesitaba de alguien que estuviese junto a l.

l tena mucho para dar, pero tambin necesitaba de alguien

para mantenerlo con los pies en la tierra, hasta l era consciente

de ello. Inclusive en aquel momento, Adam percibi que no

estaba escuchando a su madre y a su hermana, por lo que sonri,

tratando de no dejar ver el hecho de que, por ensima vez, se

haba dejado llevar por divagaciones.

Cuando lleg la maana, prcticamente mientras an

amaneca, tom sus cosas, firm la hoja de alta y volvi a su

casa. El piso superior haba sido devastado y se necesitara un

poco de tiempo antes de que pudiera volver a vivir all. Por

suerte, el ordenador porttil con su ltimo trabajo lo haba

dejado en la oficina de su editor el da anterior. As que se fue a

la casa de sus padres, se dio una ducha y se mud de ropa, ya

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que su madre siempre conservaba algo suyo en la casa. Tom un

rpido desayuno y sali.

Tena algo importante que hacer.

***

Ethan estaba en el cuartel esperando que su turno

nocturno acabara. Despus de la intervencin de la noche

pasada, por fortuna, no haba habido otras llamadas. No vea la

hora de poder tumbarse sobre el sof y dormir un poco.

Decidi tomar una ducha para quitarse de encima el holln

y el olor acre del humo. Se estaba enjabonando el pelo cuando

comenz a pensar en Adam, as le pareci recordar que se

llamaba. Puso su cara bajo el chorro de agua caliente, dejando

que la salpicadura le inundara la cara y el pelo, inclinando la

cabeza hacia atrs. Como un destello, volvi a ver los ojos del

joven y casi se estremeci ante el recuerdo de la intensidad de

aquella mirada. Neg ligeramente con la cabeza y continu

enjuagndose. Y entonces, otro destello: la respiracin boca a

boca. Esta vez Ethan abri los ojos de repente, jadeando. La

sensacin que estaba experimentando le result muy familiar y

al mirar hacia abajo, su ereccin fue la prueba de que era lo que

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sospechaba. Se apoy con una mano en la pared de la ducha,

tremendamente tentado de satisfacer aquella necesidad.

Empez a acariciarse lentamente, demorndose en el recuerdo

de aquellos labios suaves y calientes que haba sentido bajo los

suyos, pero tan pronto como el primer gemido se elev de su

garganta se detuvo inmediatamente, y gir la perilla del agua a

"fra". Por lo menos la diferencia de temperatura le distraera,

aunque fuera brevemente, de sus pensamientos. Sali

velozmente de la ducha, se puso una toalla alrededor de la

cintura y se dirigi hacia los vestuarios, cruzndose con John en

el camino.

Hey, Ethan! Hay una persona buscndote!

Ethan le ech un vistazo a medio camino entre el asombro

y la reflexin.

Buscndome? Quin es?

Es el tipo de anoche dijo John casualmente. Est en

la entrada, pregunt por el bombero que le haba... salvado la

vida. As lo dijo agreg, y se ri entre dientes.

Ethan tuvo nuevamente una clara visin de la noche

anterior y la ereccin volvi a hacerse evidente.

Ethan pens Por amor de Dios!, qu diablos me est

pasando?

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Consider por un momento la posibilidad de ir al encuentro

del tipo as como estaba, o sea, medio desnudo, pero no era una

idea aceptable. As que entr a los vestuarios y se puso

pantalones vaqueros y una camiseta.

***

Adam estaba de pie en el porche del cuartel, a un lado del

portn grande de entrada. Cuando vio a Ethan, lo reconoci

inmediatamente y levant una mano en seal de saludo,

desenfundando una sonrisa contagiosa.

Ethan le devolvi la sonrisa, no pudiendo hacer otra cosa

ms que concluir que la belleza que haba notado la noche

anterior era realmente desconcertante. Adam llevaba vaqueros y

una camisa blanca arremangada y sus brazos parecan ser muy

fuertes, lo que provoc un estremecimiento en el bombero. Era

un hombre alto, de cabellos claros, desordenados, que caan

sobre un impresionante par de ojos verdes. El cuerpo era

delgado, pero dada la considerable altura, tena un aire...

imponente. De pronto, la boca de Ethan se sec y las puntas de

sus dedos hormiguearon.

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Adam avanz en su direccin, tendindole la mano y

deslizando la mirada sobre la figura de Ethan.

Hola dijo el bombero estrechndole la mano y rezando

para que su cuerpo no lo traicionara justamente en aquel

momento. Si todava albergaba algunas dudas acerca de su

preferencia sexual, este hombre las estaba pulverizando todas.

Hola respondi Adam, sonriendo de nuevo.

Veo que te sientes mejor. No ser que te has escapado

del hospital, verdad?

No, no, me dieron el alta. Todo est bien...

Me alegro de ello.

... gracias a ti...

Ethan sinti que se sonrojaba e inclin la cabeza hacia

delante metiendo las manos en los bolsillos.

No tienes que agradecerme, de verdad. Es mi trabajo.

Trabajo que en aquel momento le estaba trayendo algn

problema, ya que solo el recuerdo de lo que haba hecho la

noche anterior le expanda los pantalones vaqueros.

S, s que es tu trabajo, y yo realmente admiro lo que

hacis, en serio. Pero quera darte las gracias de manera

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adecuada. O sea, anoche intent hacerlo pero... me arrastraron

a la fuerza! Adam se ri entre dientes mientras se rascaba la

nuca.

Tambin Ethan sonri y se le escap una frase que hubiera

querido evitar.

Arrastrarte a la fuerza no debe haber sido fcil. Ests...

bien construido.

Pero de dnde haba salido eso?

Adam parpade un par de veces, obviamente sorprendido,

pero hizo como si nada.

Vas... vas de salida? pregunt en su lugar.

Ethan se volvi y dio un vistazo al reloj grande del cuartel.

Uh, s. Justo en este momento.

Puedo invitarte a tomar algo? Vi que hay un bar aqu

cerca.

Pero no hay necesidad de eso...

Insisto dijo Adam clavando esos ojos verdes de gato en

los suyos, solemne. Ethan se puso serio y le devolvi la mirada

mientras haca un gesto afirmativo con la cabeza.

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Adam sonri de nuevo, su seriedad disipada en un segundo,

eliminada de un soplo por aquella sonrisa deslumbrante.

Puedo saber cmo te llamas? pregunt entonces

mientras sala por el portn y se diriga hacia la acera.

Ethan.

Soy Adam.

Lo s... susurr el bombero, sintindose avergonzado,

como si conocer su nombre no estuviera permitido. Como si el

hecho de que el chico se lo hubiera dicho en un momento de

escasa lucidez significara que l haba tomado posesin de una

informacin sumamente privada, prohibida.

***

Entraron en el local y se apoyaron en el mostrador. Dada la

hora solo ordenaron dos cafs.

Hace mucho que haces este trabajo? le pregunt

Adam.

Unos cuantos aos... tal vez demasiados.

Por qu?

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Porque nunca te acostumbras a ciertos escenarios.

Adam observ a aquel hombre tan fuerte y valiente y no

pudo dejar de preguntarse qu tipo de vida tena fuera del

horario laboral. La suya, su vida, era tranquila, quizs demasiado,

y le fascinaba muchsimo que Ethan, por el contrario, pusiera la

suya propia en peligro por la de los dems. Estaba a punto de

preguntarle algo ms cuando un silbido llam la atencin de

ambos: John haba entrado en el local y se estaba acercando.

Hey, Ethan! Te estaba buscando! Comenz el

hombre, lanzando luego un vistazo hacia Adam Hola...

Hola respondi este con una sonrisa.

Qu pasa? pregunt Ethan.

John le dio un codazo.

Hoy ests solicitado, amigo! Estn aqu Janice y su

hermana! T dices que solo la has acompaado a su casa, pero...

me parece que has dado en el blanco!

Ethan se qued helado.

Adam, en cambio, sigui bebiendo su caf, dndole el perfil

y pensando, Adam, no todo el mundo es gay...

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Ella es... estn aqu... aqu? pregunt Ethan rezando

para que John dijera que no. Tal vez estaban en la estacin de

bomberos.

S. Estn aqu fuera. Queran tomar el desayuno con

nosotros antes de que nos furamos a casa. Voy a llamarlas!

No, John! intent Ethan, pero el amigo ya haba

cruzado la puerta de salida.

Adam baj la cabeza siempre sin girarse y solt una risita.

Ethan lo mir perplejo.

Por qu te res?

No, nada. Es cierto... ests solicitado... Y finalmente

llev sus ojos hasta los de Ethan, detenindose un momento ms

de lo necesario. Ethan permaneci perdido en aquella mirada

hasta que Adam mir hacia otro lado y tom dinero de su

bolsillo. Puso el cambio sobre el mostrador y luego le tendi la

mano de nuevo a Ethan.

De todos modos, ha sido un placer. Gracias de nuevo.

Mo. El gusto ha sido mo... murmur Ethan

observando al joven dirigirse hacia la puerta, viendo cmo se

cruzaba con Janice y Cheryl, su hermana.

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***

En el trascurso de una semana, la casa de Adam casi haba

regresado a su estado normal. No habra podido resistir un da

ms en casa de su familia. Los amaba, s, pero eran totalmente

ruidosos. A l le encantaba el silencio de su casa, sus espacios,

aunque a veces se senta solo. No haba sido fcil acostumbrarse

a la ausencia de Bill despus de que se hubiera ido de all, pero

haba encontrado el equilibrio y estaba muy orgulloso de eso.

Durante aquella semana haba pensado a menudo en Ethan

y ms de una vez haba estado tentado de presentarse

nuevamente en el cuartel de bomberos, pero habra sido

vergonzoso para ambos.

No saba cmo comportarse con l y no haba tenido

tiempo suficiente para comprenderlo. Haba habido momentos

en los cuales haba percibido extraas vibraciones procedentes

del bombero, pero despus de haber escuchado sobre aquella

muchacha prcticamente se haba convencido de que haba muy

poco que entender.

Haba ido a recuperar el ordenador porttil a la editorial, y

haba comenzado a escribir algo nuevo. La historia de un hroe al

26

que haba dado los rasgos de Ethan. Tal vez era un poco pattico,

pero quera conservarlo en su cabeza tanto como fuera posible.

Aquel da estaba prevista la presentacin de su ltimo libro

en una de las libreras cntricas de la ciudad. Sera un largo da.

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Captulo Dos

Ethan haba pasado una semana muy extraa. Quera

volver a ver a Adam y muchas veces durante aquellos das haba

planeado pasar sin querer por delante de su casa, pero estaba

en el otro lado de la ciudad y el Village no era precisamente su

zona.

John, por otro lado, haba insistido de todos los modos

posibles para que le diera otra oportunidad a Cheryl, y l,

finalmente cedi.

Fue a cenar con ella una noche y fue casi vergonzoso ver

las seales que aquella chica le lanzaba. Cuando se encontr con

su pie en medio de las piernas debajo de la mesa, Ethan casi

salt.

Esa misma noche se esforz por tener relaciones sexuales

con ella. Era realmente muy bella y tal vez, quin sabe, podra

dejarle en claro que en el fondo le gustaban las mujeres todava.

Ella era clida, apasionada, y Ethan se haba esforzado para

quedar bien. Lstima que, durante el acto sexual, pensase en

otra cosa. Ms precisamente, en otra persona. O sea, el

experimento no sali segn lo planeado.

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Cuando se despert a la maana siguiente, vio a Cheryl

paseando por el apartamento con una camisa suya puesta.

Bueno, aquello era algo que no entenda. Acaso no tena su

propia ropa?

Ella se acerc a la puerta, apoyndose contra el marco y l

trat de sonrerle lo ms naturalmente posible.

Buen da, tesoro.

Tesoro? No, eso no sonaba bien, para nada.

Hola respondi l bostezando.

Escucha, quieres acompaarme a alguna parte?

Ethan pens en sus tareas pendientes del da. Era su da

libre. No quera pasarlo con ella, pero tena que encontrar el

momento de decirle que aquello no funcionaba, que no estaba...

interesado. Por lo que, si no pasaba un poco de tiempo con la

chica, no tendra la oportunidad adecuada para hacerlo.

l asinti con la cabeza y sali de la cama para encontrarse

de inmediato con las manos de ella sobre su cuerpo desnudo y

su lengua en el cuello. Ethan se ech a rer y la apart con

suavidad.

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Tomar una ducha... de lo contrario no saldremos ms.

Entr en el bao suspirando y dijo, en voz alta: Dnde

quieres ir?

Tengo que comprar un regalo. Pensaba en un libro...

***

Adam nunca pens que hubiera tanta gente interesada en

su libro. No era la primera vez que haca presentaciones, pero l

segua siendo el chico sencillo de siempre y no estaba

acostumbrado al xito que haba logrado.

Principalmente, los que se le acercaban para que les

autografiara el libro eran chicas jvenes, lo cual tambin era

extrao, ya que no era un libro especficamente ideado para el

pblico femenino, ni un libro romntico. Su agente haba

organizado todo, hasta los ms mnimos detalles y lo estaba

asistiendo, llevando la cuenta de los libros vendidos. Un record,

al parecer.

De repente, mientras le entregaba el libro a una lectora,

Adam tuvo la impresin de haber visto un rostro que le era

familiar entre la gente y el corazn comenz a latirle ms rpido.

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Haba visto a Ethan? Era posible? Pensaba en l con tanta

frecuencia que ya tema tener alucinaciones. Sin embargo, le

pareci que era l...

Comenz a moverse sobre la silla estirando el cuello tanto

como era posible, mirando a travs de la multitud de personas

delante de l. No resisti ms y se puso de pie, sobrepasando a

todos con su altura y haciendo caso omiso de las dos chicas que

estaban frente a la mesa esperando por un autgrafo.

Las mir con una sonrisa y se limit a decir:

Disculpadme un momento...

Camin alrededor de la mesa y pas en medio de las

personas que comenzaron a murmurar.

Ethan estaba de espaldas, intentando leer la parte de atrs

de la cubierta de un libro. Era l. Adam respir profundamente

tratando de reprimir una gran sonrisa.

Ethan?

El otro se sobresalt casi lanzando al aire el libro que tena

entre las manos y se dio la vuelta de golpe. Sus ojos se abrieron

un poco ms de lo habitual e, incluso a pesar de que Adam se

haba convencido de estar equivocado, le pareci ver un atisbo

de rubor colorearle las mejillas.

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Adam?!

Ethan no poda creer lo que vea con sus propios ojos.

Adam estaba all, delante de l, y le estaba regalando una sonrisa

que le haba, de improviso, iluminado el da.

Adam dio un paso hacia adelante sonriendo an ms, si era

posible. Luchaba con todas sus fuerzas por contener la emocin

que estaba experimentando, por lo que se las arregl para evitar

abrazar a Ethan en un impulso.

Hola! Qu casualidad! exclam nerviosamente

pasndose una mano por el pelo.

S-s, ciertamente balbuce Ethan. Qu ests

haciendo aqu?

Adam seal a la multitud de personas a sus espaldas.

Estoy presentando mi libro.

Ethan sinti que se hunda en la vergenza.

Oh. T... o sea... eres escritor.

As parece se ri entre dientes Adam.

El rumor comenz a crecer.

Mira, tengo que volver all... Ya sabes, autgrafos y esas

cosas, pero...

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Pero? pregunt Ethan ansioso.

Pero me preguntaba... si te parece, juntarnos para

conversar... tal vez ms tarde...

En ese momento, Cheryl se acerc.

Tesoro, ya encontr el libro. Oh! Hola dijo, sonriendo

al notar a Adam.

Todava con eso de "tesoro"! pens Ethan apretando los

labios.

Hola respondi Adam cortsmente tomando nota del

"tesoro" y volviendo su mirada hacia Ethan. Bueno, me voy

aadi, volviendo a desaparecer entre la gente.

Se sent a la mesa, de repente deprimido. Tena que dejar

de pensar en Ethan.

Tom el libro que una de las dos chicas le entreg, y

cuando lo abri, una mano apareci de repente e hizo deslizar

una nota a travs de las pginas.

Adam levant la vista de golpe y vio los ojos de Ethan y su

sonrisa.

Llmame dijo solo esa palabra antes de desaparecer de

nuevo, engullido por la multitud.

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Adam sonri.

***

La sesin de autgrafos se prolong hasta el medioda.

Cuando finalmente todos se haban ido, Adam se puso de pie y

se desperez. Su agente estaba visiblemente satisfecho y l, en

cambio, no vea la hora de salir de all.

Vamos a ir a almorzar, Adam?

No, lo siento. Tengo cosas que hacer, ser en otra

ocasin. respondi dirigindose apresuradamente hacia la

salida.

Comenz a caminar rpidamente y en poco tiempo lleg a

su casa.

Se sent en el sof y tom la nota que Ethan le haba

pasado. Se senta agitado como una chica ante su primera cita.

No era nada de eso, era simplemente un nmero de telfono,

pero era su nmero de telfono, era un contacto con l.

Se puso cmodo intentando relajarse e hizo la llamada.

Un solo timbrazo y luego la voz de Ethan rompi el silencio.

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Hola?

Hola, soy Adam.

Hola...

Silencio incmodo.

Todo bien? pregunt Ethan.

S, gracias. Por fin termin de firmar autgrafos. Nunca

me acostumbrar a estas cosas.

Eres famoso, entonces!

Risita.

Eso dice mi editor, pero yo no estoy convencido.

Demasiado modesto!

Otra risa.

Silencio.

Adam estaba tratando de obligarse a decir algo, pero sus

pensamientos estaban totalmente confusos. Entonces record a

la chica

Te estoy interrumpiendo? Tal vez estabas haciendo

algo...

No. No molestas. Estoy en casa. Solo.

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Oh, est bien. No quisiera que tu novia...

No es mi novia.

Adam percibi el duro tono de su voz.

Ah, lo siento... yo cre...

Ella, tambin, al parecer.

Ahora haba amargura en su voz.

Tenis algn problema?

No, soy yo el del problema. Ella no est involucrada.

Adam no saba qu decir. La conversacin estaba tomando

un giro extrao.

Estoy seguro de que todo se resolver...

No lo creo.

Lapidario.

Adam se pregunt si debera insistir en el tema o no.

Finalmente pens que, dado que no conoca a Ethan casi nada,

no tena el derecho a inmiscuirse.

Silencio.

Y t? pregunt Ethan Hay una seora Cades en

alguna parte?

36

Adam se ri.

No, yo dira que no.

Extrao.

Por qu? le pregunt Adam con el corazn latindole

cada vez ms rpido.

Porque eres guapo como para quitar el aliento hubiera

querido responder Ethan.

Porque eres un buen tipo e, incluso, famoso se limit

en cambio a decir rindose entre dientes.

S, pero... digamos que es ms probable que haya un

seor Cades que una seora Cades.

Ethan dej de respirar.

Silencio.

Adam tema haber dado un paso en falso y contuvo a su vez

la respiracin por un momento.

Hola? prob con voz dubitativa.

S-s. Estoy aqu.

Lo siento, fui demasiado directo.

No, no, por favor.

37

Te molesta eso?

No, en absoluto.

Silencio.

Ethan pens mil cosas juntas y se dio cuenta de que estaba

empezando a tener calor.

Hay un seor Cades, entonces? pregunt rezando

para que el otro no percibiese lo agitado que estaba.

Tampoco esta vez fue Adam quien ri.

Ethan no poda creerlo. Se aclar la garganta, pero decidi

no insistir ms en ese tema.

Qu estabas haciendo? pregunt, para cambiar de

tema.

Nada. Acabo de llegar y me tumb en el sof... y te

llam.

Tambin yo... le dije que necesitaba estar solo.

Para pensar?

S.

En algo en particular?

S.

38

Que no puedes decirme...

Silencio.

Bueno, no insisto dijo Adam rompiendo el silencio.

Ahora o nunca.

En ti Ethan lo descoloc.

E-en m? El corazn de Adam empez a latir como

loco.

S susurr Ethan.

Y... por qu? Adam tena la boca seca, las puntas de

los dedos heladas y estaba temblando.

No lo s, pero no puedo parar.

Oh.

Es tonto, verdad?

Yo no dira eso.

Por qu? pregunt Ethan, esperando que la respuesta

fuese aquella que l tanto quera or.

Porque tambin a m me pasa lo mismo.

S!

En serio?

39

Ahora era el corazn de Ethan el que galopaba.

S. Risita. No sabes cuntas veces pens en buscarte

en el cuartel.

No sabes cuntas veces he querido pasar por tu casa.

Silencio.

Fue Adam el primero en hablar.

Pero... entonces... es decir, te vi con ella...

Exactamente. Esto es lo que quera decir antes. Yo no

estoy hecho para estar con ella, o con otras. A decir verdad, es

algo que comprend definitivamente despus de que te conoc. El

problema es que mi amigo me quiere emparejar.

Adam rompi a carcajadas.

No te ras! No hay nada de qu rerse! Ethan fingi

estar ofendido. Yo le he dado esta ltima oportunidad, pero

sin duda sali mal.

Pero... perdname por preguntarlo... habis tenido

relaciones sexuales? Sabes, por lo general eso es la prueba

definitiva.

S, s, lo intent.

Todo sali mal?

40

No, eso no...

Adam no entenda.

Bueno, entonces, si todo sali bien, tal vez necesites

volver a evaluar la situacin... dijo decepcionado.

Me fue bien porque pensaba en ti todo el tiempo

escupi Ethan en un suspiro.

Si Adam no hubiera gozado de buena salud, probablemente

hubiera muerto de un ataque al corazn. Respir profundamente

con la boca abierta.

Realmente estabas pensando en m? susurr.

La voz de Ethan cambi a baja y peligrosamente ertica.

S...

Adam tena la sensacin de que estaban a punto de entrar

en un rea caldeada. Tal vez porque sus pantalones vaqueros se

haban vuelto repentinamente molestos y estrechos.

Ethan por su parte hablaba con los ojos cerrados, tumbado

en el sof con la cabeza apoyada en el apoyabrazos, reviviendo

en su mente esas fantasas.

Incluso el tono de voz de Adam se volvi ms grave. Y as,

como si nada, decidi cruzar la lnea.

41

Y qu cosas estabas pensando?

Ethan se ech a rer y luego respir hondo. Su voz se haba

enronquecido y Adam sinti un estremecimiento recorrerle todo

el cuerpo.

Pens en tu boca... s que no est bien, pero cuando te

reanim sent tus labios tan suaves y clidos, y... bueno... pens

en tu boca.

Ya veo... Una sensacin de calor lquido se derramaba

desde el estmago de Adam al resto de su cuerpo.

Entonces cerr los ojos y pens que era tu espalda la que

estaba acariciando...

Adam se aclar la garganta y dej escapar un resoplido.

Ethan abri los ojos.

Lo siento, me estoy pasando de la raya.

No! No, no te ests pasando. Digamos que me estoy

involucrando un poco demasiado...

Te est excitando? Ethan estaba ms sorprendido que

Adam de las palabras que salan de su boca, pero no poda parar.

S admiti Adam en un susurro.

A m tambin.

42

Por un momento no hubo ms palabras, solo un silencio

cargado de erotismo.

Ethan, yo...

Qu?

Me gustara... que continuaras relatndome las cosas que

has imaginado...

Imagin que en lugar de la suya, era tu lengua la que

estaba en mi boca, que en lugar de las de ella, eran tus piernas

las que estaban entrelazadas en mi espalda...

Adam dej escapar un gemido y Ethan se detuvo un

segundo para permitirse deslizar una mano en su bxer. Saba

que Adam tambin estaba haciendo lo mismo y eso lo excitaba

an ms.

Ni siquiera se conocan, sin embargo, era como si

estuvieran teniendo sexo en la primera cita. Pero era ms fcil de

lo que nunca hubiera imaginado.

Me gustara que estuvieras aqu ahora mismo... agreg

Adam esta vez. Quisiera sentir el olor de tu piel... me gustara

lamer cada centmetro... me gustara tocar y...

Ethan dej escapar un gemido ms fuerte.

Te ests tocando? pregunt Adam jadeando.

43

S... s... contina...

Adam se desabroch los vaqueros y se los baj por los

laterales junto con el bxer para poder moverse mejor.

Ethan... yo... no s cunto...

Te lo ruego, contina...

Adam trat de continuar mientras la excitacin se lo

permitiera y el orgasmo se acercara. Ethan lo escuchaba y sentir

sus gemidos lo estaba volviendo loco.

Quisiera verte gozar... quisiera hacerte venir con mi

boca...

Tan pronto como dijo esas palabras, Adam lleg a su clmax

y el orgasmo lo hizo arquearse contra el sof, mientras que el

nombre de Ethan escapaba de sus labios en una exclamacin de

profundo placer. Al otro lado de la lnea las respiraciones de

Ethan se hicieron ms y ms rpidas hasta que un largo gemido

lleg a los odos de Adam.

Hubo unos minutos de silencio y de furiosos latidos

resonando en sus odos.

Ethan? pregunt Adam despus de un tiempo.

Hmm?

44

Un leve gruido como respuesta.

Yo... Se aclar la garganta. Est todo bien?

Mmmhh, s... respondi Ethan con voz ronca Fue...

joder!

S, es cierto... solo pudo decir Adam.

Los dos estaban aturdidos y sin palabras.

Adam no se sorprendi tanto de lo que haba hecho, como

del hecho de que Ethan lo hubiese instado a hacerlo.

Te puedo llamar en un rato? le pregunt finalmente,

Ethan.

Claro, est bien.

De acuerdo, hasta luego.

Y puso fin a la llamada telefnica. En la mente de Adam

comenzaron a girar miles de pensamientos y miles de temores.

Qu pasara ahora?

***

45

Adam esper unos minutos, todava sacudido por lo que

haba sucedido haca un momento, luego se levant y fue al bao

a lavarse sin dejar de pensar en Ethan y en su voz. Haba sido

realmente increble encontrarse tan rpidamente a gusto con l,

pero llegar directamente a tener sexo por telfono, bueno eso

haba sido desconcertante.

Ethan le haba dicho que lo volvera a llamar, as que tuvo

todo el tiempo el telfono mvil bien a la vista sobre el estante

del cuarto de bao, esperando ansiosamente a que sonara. Pero

no sucedi.

Pas una hora entera y Adam continuaba con el telfono

entre las manos, luchando contra el impulso de llamarlo l

mismo. Si le haba dicho que lo llamara, lo hara, no? No iba

a precipitarse. No quera presionarlo, casi no se conocan.

Tal vez se haba distrado con alguna cosa, Adam incluso se

lleg a vislumbrar la posibilidad de que hubiera otros motivos.

Decidi no pensar demasiado, tom su ordenador porttil y

continu trabajando en el boceto de su nueva novela.

***

46

Ethan, despus de cortar la comunicacin, se mantuvo por

un tiempo mirando al vaco. No saba exactamente cmo se

senta. Lleno de vergenza, seguro. Pero, cmo se le haba

ocurrido hacer una cosa de ese tipo? No era una sensacin

agradable la que experimentaba, todo lo contrario. Se senta

equivocado. Escuchaba en su cabeza todas aquellas

conversaciones sobre los homosexuales, las bromas, las

alusiones. Estaba realmente listo para hacer frente a ellas?

Estaba preparado para salir3?

Adam le gustaba, por supuesto, pero sera capaz de

mostrarse en pblico con l, de esa manera? Todos sus temores

volvieron a tomar forma y se qued sin aliento.

Sali a prisa del cuarto de bao, tom el telfono y llam a

John.

Hey, amigo!

Hola, John... qu ests haciendo?

Estoy en el cuartel.

Cmo es eso?

No has escuchado el mensaje que te dej?

3 Con salir se refiere a la sobreentendida frase de salir del armario, o sea, a declararse pblicamente

homosexual.

47

Ethan mir la pantalla del telfono mvil y vio el aviso

parpadeando.

Lo siento, no me haba dado cuenta. Pas algo?

No, tranquilo. El jefe nos pregunt si hoy, a pesar de que

era nuestro da libre, podamos venir a acomodar un poco los

materiales...

Entonces voy!

No, est bien... hemos terminado. Pero si quieres unirte a

tomar una cerveza.

Ya voy! repiti.

Cualquier cosa con tal de no pensar.

***

Adam no lograba escribir ms de una frase sin tomar el

telfono en la mano. Ahora ya haban pasado ms de tres horas.

No es que Ethan debiera llamarlo inmediatamente despus, pero

el silencio tena algo de terrible, algo de inquietante.

An cuando una pequea voz dentro de s mismo le

desaconsejaba hacerlo, decidi ir a buscarlo. De una u otra forma

48

se enterara de lo que ocurri. Era tarde y probablemente Ethan

estaba en casa, pero no saba dnde viva. Seguramente, sin

embargo, en el cuartel alguien podra darle alguna indicacin.

Detuvo el automvil junto al portn, sali y mir a su

alrededor. Vio a un bombero cruzar por el vestbulo de entrada y

levant una mano para llamar su atencin.

Disculpe

El bombero hizo una pequea carrera para llegar a l.

Dgame.

No s si puede serme de ayuda, pero sabe dnde puedo

encontrar a su colega... Ethan Parker?

Por supuesto, est en el bar que est aqu cerca.

Adam sinti un horrible presentimiento invadirlo.

Agradeci gentilmente al bombero y tom una profunda

respiracin antes de iniciar los pasos que lo conduciran al local.

***

Mira quin est aqu! exclam John con entusiasmo.

49

Ethan por un momento se congel en el taburete y luego se

gir lentamente. Dej escapar un suspiro de alivio cuando vio a

Cheryl avanzar contonendose hacia l. Sonri de lado y bebi

otro sorbo de su ensima cerveza.

Hey la salud arrastrando las palabras.

Hey... respondi ella sonriendo y acercndose,

zambullndose en su lbulo izquierdo. Me hiciste falta,

sabes?

John alz las cejas con aire de complicidad y Ethan sonri

sarcsticamente.

T tambin, tesoro. Nunca haban salido palabras

ms absurdas y equivocadas de su boca. Agradables como uas

araando una pizarra.

La mujer se sent sobre los muslos de Ethan mientras se

segua ocupando de su lbulo, acariciando su pecho, y John

explot en una enorme carcajada.

Joder, Ethan! S que sabes arreglrtelas con las mujeres,

eh!

Ethan se ri entre dientes, rezando para que la cerveza le

ayudase a perderse y entumecerse.

De pronto, as, de la nada, John dijo:

50

Hey, Ethan, dime algo... acaso t sabas que el tipo que

has salvado, es un escritor? E incluso que es gay?

Ethan sinti cmo su garganta se estrechaba y fingi estar

sorprendido.

En serio?

S, le gusta... risita... la polla!4 No entiendo qu se

puede encontrar en otro hombre. Me dan ganas de vomitar solo

de pensar en ello...

Ethan intent rer, esperando que John se tragase toda la

mentira que estaba escondida tras aquella risa.

T qu piensas de eso? lo interrog entonces su

colega y a Ethan le vinieron reales ganas de vomitar, y no por

beber demasiado.

Tambin a mi me impresiona... dijo, y fingi un

estremecimiento de repulsin.

Una Coca Cola, por favor.

4 Es un juego de palabras. La palabra que utiliza es cazzo, que adems de referirse

groseramente al pene se usa como una interjeccin coloquial grosera (algo parecido al uso que los espaoles le dan a la palabra coo). La gracia est en que John ya ha usado esa palabra en su anterior intervencin, slo que la he traducido por joder porque polla o pene no se usan como interjeccin en espaol.

51

Ethan se congel en serio esta vez. Cheryl estaba todava

atacando su oreja izquierda y John puso la expresin de un nio

que fuera sorprendido con las manos en la masa.

Una Coca Cola, por favor. Aquella voz a sus espaldas la

conoca bien...

Cerr los ojos, respirando profundamente y se sinti morir.

Fsica y emocionalmente. Detrs de l estaba Adam. Su voz no se

le olvidara jams en toda la vida. Haban estado compenetrados

en la charla de tal manera, que no se haban dado cuenta de su

presencia.

Ho-hola se dirigi John a Adam con aspecto culpable

antes de dar vuelta el taburete y empezar a mirar fijamente las

copas que estaban detrs del mostrador.

Hola respondi el otro, y Ethan sinti claramente la

hoja de un cuchillo clavndose entre sus omplatos. Levant

apenas la barbilla y comenz a girar sobre el taburete, haciendo

que Cheryl se pusiera de pie.

Cuando estuvo enfrentado a Adam lo observ, pero el otro

estaba bebiendo su Coca dndole el perfil.

Adam susurr.

52

Esper a que este se girase o por lo menos diera la

impresin de haberlo odo, pero nada sucedi.

Adam... lo intent de nuevo.

Lo nico que Adam hizo fue golpear un poco fuerte el vaso

sobre la superficie, tomar dinero de su bolsillo y ponerlo sobre el

mostrador sin darse la vuelta en ningn momento.

Ethan apenas alarg una mano para ponrsela sobre el

brazo, pero Adam lo esquiv rpidamente, baj la cabeza,

dejando que el cabello le recubriese los ojos y sali sin decir una

palabra.

53

Captulo Tres

Seis meses ms tarde.

La vida de Adam y Ethan obviamente continu, a pesar de

todo, pero de una manera completamente diferente. Ambos

quedaron un poco perturbados por aquella, si bien breve,

tambin intensa y desagradable experiencia.

Ethan haba seguido su vida, sin sobresaltos extraos,

trabajo, hogar, ocasionalmente Cheryl y una idea fija en la

mente: Adam.

Aquella fatdica noche, apenas sali del local, borracho a

ms no poder, haba intentado llamarlo, pero una voz

electrnica le haba informado que no estaba autorizado para

hacer esa llamada. Adam haba bloqueado su nmero. Por un

momento pens en comprar otro chip, cambiar el nmero, o ir a

buscarlo a su casa, pero para qu?

54

Se haba comportado de una manera horrible y, sobre todo,

todava no haba encontrado el valor de enfrentarse a sus

"problemas", si se pudieran llamar as.

Adam, por su parte, haba pasado la noche vomitando. A la

maana siguiente, en lugar de cancelar el proyecto que estaba

escribiendo, se sent frente a su ordenador y se zambull en la

escritura, trasformando lo que podra haberse convertido en un

desahogo rencoroso, en un libro delicado, en el que el hroe

tom los rasgos del Ethan que l hubiera deseado. Nada de odio,

ni siquiera rencor, solo deseo desvanecindose.

Y ahora, meses despus, el libro ya estaba acabado e

impreso en tiempo rcord. Su editor se haba mostrado

entusiasmado y haba dicho que estaba seguro que sera un xito

tanto en crtica como en ventas al pblico.

***

Como cada vez que tena el turno de la maana, Ethan se

detuvo en el puesto de revistas que estaba al lado del cuartel y

compr el peridico, lo puso bajo el brazo y se dirigi a los

vestuarios. Tom su taza, la llen de caf y se sent a la mesa,

suspirando levemente. A pesar de que ya haba pasado algn

55

tiempo an no se haba perdonado por lo que haba sucedido y

el recuerdo de Adam volva todos los das para atormentarlo.

Abri el peridico y comenz a hojearlo distradamente,

sorbiendo el caf a la espera de que llegase John.

Cuando lleg a la quinta pgina, literalmente expuls el

caf que tena en la boca.

Una pgina entera estaba ocupada con la publicidad del

lanzamiento del nuevo libro de Adam. Hroe. La portada era

negra con un bombero en el momento de escapar de una casa

en llamas.

El corazn comenz a martillearle en el pecho, en los odos,

en las venas ms ntimas de su cuerpo. Los ojos comenzaron a

arderle y tuvo que estrujarlos varias veces para volver a enfocar

la imagen que estaba viendo.

Bajo la gigantografa de la cubierta estaba escrito: Adam

Cades, hoy entre las 14:00 y las 17:00 presentar su nuevo libro

en la librera The Hole.

De nuevo. De repente todo regres con la fuerza de un

huracn. Quiz fuese una seal del destino? Quizs se pudiera

comenzar otra vez desde el principio?

56

Ethan cerr el peridico con fuerza reducindolo a una

maraa de papel y bebi an un poco ms de caf con la mano

temblorosa. Tendra que ir a esa librera. No le importaba lo que

sucediera, tena que ver a Adam, tena que pedirle disculpas.

***

La mano de George aferraba la de Adam.

Nervioso?

Siempre dijo Adam sonriendo.

Sin embargo no creo que sea tu primera vez.

No, de hecho, pero no estoy hecho para estas cosas.

Entraron juntos a la librera y el agente de Adam les

acompa hasta la zona destinada a la presentacin del libro.

George era un chico simptico, Adam lo haba conocido

haca solo un mes durante una de sus carreras matinales, y

haban comenzado a verse, primero espordicamente y luego

con ms regularidad. Adam no se senta realmente preparado

para una relacin real, pero tal vez el viejo refrn de que un clavo

saca a otro clavo, funcionara.

57

George haba insistido en acompaarlo a la presentacin,

dado el nerviosismo de Adam. Le haba preguntado si el libro

estaba inspirado en lo que haba pasado haca un tiempo atrs,

pero Adam haba evadido la pregunta.

La gente comenz a acudir masivamente a la librera y, a

pesar de la tensin, Adam se conduca de una manera natural,

distribuyendo sonrisas, autgrafos y dedicatorias.

A Ethan le haba tomado una buena media hora decidirse a

entrar en la librera. Las piernas no le respondan bien y mucho

menos el cerebro.

Una vez que se arm de valor, se lanz y empez a abrirse

paso entre la gente que protestaba ligeramente por aquellos

empujones.

Permiso... perdn... permiso...

Adam tena la cabeza baja y firmaba el ensimo libro.

Sonrea, y Ethan se concentr en aquella media sonrisa, oculta

tras los mechones de su cabello. Una sonrisa que

inmediatamente llen el vaco que haba sentido durante todos

esos meses. Todos esos aos. Cmo haba podido ser tan

estpido?

58

Cuando Adam levant la cabeza y se lo encontr frente a l,

su sonrisa desapareci en una dcima de segundo y la mandbula

se tens.

Ethan esboz apenas una sonrisa, con el aspecto ms

culpable que se pueda imaginar.

Hola dijo a media voz vi... bueno... tu nuevo libro,

y...

Qu quieres?

La voz de Adam pareca venir de una cueva hmeda y fra.

Ethan mir hacia abajo y le entreg el libro. Adam sonri

sarcsticamente y alz las cejas.

Quieres una dedicatoria, Ethan? Y qu es lo que

quieres que escriba? Espera, djame pensar... Con amor,

Adam? O... no, no... Tal vez sea mejor... Esfmate?

Las personas alrededor de Ethan comenzaron a mirarse

entre s, un poco incmodas por lo que estaban presenciando.

Apareci una mano sobre el hombro de Adam.

Todo bien? le pregunt George mirando de soslayo a

Ethan.

59

Todo bien, George respondi Adam mirando fijo a los

ojos de Ethan, quien respir hondo al sentir cmo se le revolva

el estmago.

Yo...

Ya basta, Ethan. Qu quieres?

Te lo dije... le pas el libro sin dejar de temblar Y

luego...

Ah-ah-ah, basta! Adam lo detuvo con una mano

levantada, mientras que con la otra tomaba el libro Y luego,

nada. Garabate algo en la cubierta interior y le devolvi el

libro de mala manera.

Ahora, vete de aqu.

No fue el volumen de voz, pero s el tono lo que hizo

retroceder a Ethan, que tom el libro e inmediatamente se

retir, engullido por la multitud.

Adam cerr los ojos para no ver cmo desapareca, e

intent pintar una sonrisa en su cara otra vez, aunque ya no era

la misma de antes.

Haberle regalado al pblico al Ethan que le hubiera

gustado tener a su lado, era una cosa; encontrarse de frente con

60

el Ethan que lo haba rescatado, pero luego se haba redo de l,

hirindolo profundamente, era otra.

***

Ethan sali de la librera como en trance, se dirigi hacia su

casa, tom el mvil y llam a John, advirtindole que no se

senta bien y que por un par de das no ira a trabajar.

Apenas entr en su apartamento se dej caer sobre el sof

y se llev ambas manos sobre el rostro, respirando con toda la

fuerza de sus pulmones como si fuera presa de un ataque de

pnico. Le entraron ganas de llorar y, sin que se diera cuenta, las

lgrimas comenzaron a resbalarle por las mejillas. Permaneci

as durante mucho tiempo, sintiendo cmo el dolor se deslizaba

y lo comprima. Cuando logr calmarse, mir el libro

abandonado junto a l y lo tom.

Observ el garabato que deba ser la firma de Adam y

comenz a leerlo.

Termin de leerlo ya avanzada la noche y sali de ello ms

devastado que nunca.

61

Era un libro que hablaba sobre un hroe al que Adam haba

dotado con sus rasgos, pero era un hroe que haba tenido el

coraje de amar, que haba luchado para conservar lo que crea

que era importante. Un hroe que no era l.

De acuerdo murmur para s, eres un idiota! No te

mereces que escribiera un libro acerca de ti! Cretino! Ahora

levanta el culo y trata de solucionar este problema...

Entonces, como un relmpago, record la mano de George

sobre el hombro de Adam.

Mierda! estall esta vez. Y si era demasiado tarde?

Tena que actuar y actuar ahora.

***

Un toque de llamada.

Es el timbre? pregunt con voz soolienta George.

Adam mascull algo, se volvi y mir el reloj: 06:30.

Otro sonido.

Mierda, es el timbre! respondi Adam alzndose de

golpe Pero quin es el que jode a esta hora?

62

Crees que hicimos demasiado ruido anoche? Tal vez

algn vecino se ha molestado dijo George con picarda

girndose entre las sbanas.

Adam se ri entre dientes y se dirigi al piso inferior,

detenindose primero para mirar por la ventana quin estaba

fuera.

Mierda! sise entre dientes.

Abri apenas la puerta y trat de hablar con calma. Ethan

estaba delante de l.

Pero qu tienes en la cabeza? Qu quieres? Y sabes

qu hora es?

Ethan pareci perplejo, mir el reloj y se dio cuenta del

horario. Maldijo entre dientes y trat de sonrer.

Lo siento, pero tena que verte.

Yo no replic lacnicamente Adam empezando a cerrar

la puerta.

Espera! dijo Ethan, pero Adam ya haba cerrado.

Ethan saba que no iba a ser recibido con los brazos

abiertos, pero por lo menos esperaba tener la oportunidad de

explicarse. Apoy la frente contra la puerta y suspirando empez

a hablar.

63

Adam... no s si ests ah... quera decirte cunto lo

siento... nunca quise que oyeras... de hecho, nunca quise decir o

hacer lo que dije e hice...

Un violento puetazo desde el interior de la puerta hizo

rebotar la cabeza de Ethan quien se detuvo por un momento

observando el umbral frente a l antes de girarse y regresar a la

acera.

Adam volvi al piso superior temblando de ira.

George todava estaba tumbado en la cama, incorporado

sobre los codos.

Quin era?

Nadie.

Y nadie le dio un puetazo a la puerta? El sonido lleg

hasta aqu.

No quiero hablar de eso...

Era el mismo tipo de hoy?

No. Quiero. Hablar. De ello.

George entrecerr los ojos, irritado, pero no agreg nada

ms.

64

Muy bien, viendo que ya estoy despierto, voy a darme

una ducha. Planes para hoy?

Necesito correr! dijo Adam ponindose la ropa

deportiva y las zapatillas para la ocasin.

Te acompao.

No.

S.

Adam suspir. Bien, esto era algo que George tendra que

aprender: respetar sus espacios.

Est bien... respondi sumisamente.

Esper hasta que tambin George estuviera listo y salieron

a correr juntos.

***

Corrieron por la parte Este de Central Park durante una

buena hora y luego se sentaron en un banco a beber cada uno de

su botella de agua.

Adam...

65

Adam se gir de golpe en direccin a la voz.

Otra vez t?! pregunt ms incrdulo que enojado.

Haba que admitirlo, Ethan era perseverante.

S, otra vez yo, y si no te decides a escucharme, te seguir

a donde vayas.

George se puso de pie.

Es un delito penado por la ley perseguir a la gente,

sabes? advirti con clera mal disimulada en su voz.

Lo s respondi Ethan en voz baja mientras continuaba

observando fijo a Adam. Pero yo no estoy hablando contigo

concluy, fijando luego la fra mirada sobre aquel hombre al que

quera pulverizar.

Pero yo s gru George.

Adam se puso de pie.

Vamos, George. Y comenz a girarse.

Ethan permaneci quieto un momento y luego abri los

brazos gritando.

LO SIENTO, ADAM! LO SIENTO TANTO QUE QUISIERA

MORIRME! SOY UN IDIOTA, est bien as? Me daba

vergenza y no tuve el valor de decirle la verdad a nadie! YO

66

TENA MIEDO! Tena tanto, pero tanto miedo como para no

haber admitido jams, ni siquiera a m mismo, que era gay!

Mierda, no es fcil! MRAME! Estoy aqu, en medio de Central

Park gritando como un idiota! TE PUEDES DAR LA VUELTA

POR LO MENOS?!

Adam inclin ligeramente la cabeza sobre los hombros ante

esas palabras y no pudo hacer otra cosa ms que darse la vuelta.

Ethan lo observ con ojos tan angustiados que Adam casi

sinti lstima por l.

Ethan, est bien. Yo te escuch, lo entiendo...

No, te aseguro que no has entendido, lo puedo ver en tus

ojos.

Adam sonri.

Te dije que lo entiendo, est todo bien, ahora puedes irte

a casa.

Yo no me muevo hasta que me hables.

Te estoy hablando.

As no; as es como si me hablaras solo porque tuvieras

que hacerlo, yo quiero que hables conmigo... de verdad.

Me ests pidiendo mucho, Ethan.

67

Lo s.

George estall.

Podemos terminar? Luego se volvi hacia Ethan.

QU MIERDA QUIERES, DE TODOS MODOS?

Adam. Quiero a Adam.

Lo dijo con calma, como si fuera la cosa ms natural del

mundo. No le importaba nada en absoluto. Todos podan or

aquello, John, sus padres, sus amigos. Ni siquiera le import el

haberle admitido a un hombre que quera a su pareja en la cara.

Era as y listo.

No quit los ojos de encima a Adam y vio claramente que

aquellas palabras haban dado en el blanco, por desgracia el

puo de George tambin dio en el blanco que fue su pmulo,

envindolo al suelo.

ESTS LOCO? grit Adam a George que estaba casi

echando espuma por la boca de rabia.

Ethan se incorpor sobre un codo, frotndose la mejilla.

Fue el turno de George de gritar.

NO, NO ESTOY LOCO! PERO NO QUIERO PASAR POR

UN TONTO!

68

Bueno, eso es exactamente lo que eres, visto cmo te

ests comportando! respondi Adam con amargura.

Ethan se sorprendi de cmo, incluso sin gritar, Adam

tena la capacidad de silenciarte con el tono de su voz.

George seal a Ethan.

Qu se supone que deba hacer? Quedarme

escuchando mientras dice que te quiere?

Adam no contest y cambi la mirada de George a Ethan, y

luego de nuevo a George.

Este ltimo endureci su tono de voz.

Adam... respndeme.

Adam lo mir a los ojos siempre en silencio.

IROS5 A LA MIERDA! sise George entre dientes

dndoles la espalda y huyendo lejos de ellos.

Adam permaneci un momento ms mirando a Ethan en el

suelo. En su cabeza se repeta la frase que el otro haba

pronunciado: Adam. Quiero a Adam.

5 Iros es una expresin que es incorrecta. Segn la RAE sera: idos. Pero esto en el lenguaje hablado no

se utiliza nunca. Lo lgico es emplear iros, dado que es utilizado por un personaje en un dilogo y no tiene por qu atenerse a las normas de la RAE, sino a lo que es ms habitual en el lenguaje hablado.

69

Podra ser cierto, a pesar de todo? Que este hombre lo

quisiera en serio? Que hubiera salido del armario de una

manera tan teatral por l?

La sombra de una sonrisa apareci en sus labios y Ethan la

descubri enseguida, bebindola como un hombre sediento

perdido en el desierto. Se dio un pequeo impulso y permaneci

sentado mientras continuaba frotndose la mejilla.

Adam se puso en cuclillas frente a l y, tmidamente, toc

el pmulo de Ethan quien dio un pequeo sobresalto.

Ya se puso rojo murmur Adam intentando revisar el

moratn.

Ethan no poda apartar los ojos de Adam. Estaba tan cerca

que hubiera podido besarlo. Solo por ese instante hubiera

incluso aceptado ser golpeado salvajemente por George.

Perdname. De verdad lo siento mucho... susurr.

Shhh respondi solamente, Adam fijando su mirada en

la del otro.

No, Adam, no te merecas eso. Yo tena miedo y me

comport como un cretino... y no debera haberlo hecho porque

no hago ms que pensar en ti y...

70

Los labios de Adam se apoyaron suavemente sobre los

suyos amortiguando sus palabras. Eran labios casi conocidos,

varoniles, labios que podran traerle problemas, labios que le

habran hecho sellar pactos con su vida, labios que se estaban

forjando un lugar por derecho en esa misma vida. Ethan los

sinti temblar contra los suyos, deseosos, temerosos quizs y sin

embargo, decididos a lo que queran.

71

Erin E. Keller vive con su esposo y varios gatos en una casa

al lado de un campo de trigo. Escribe desde hace cinco aos, a

veces con su nombre real, otras bajo un seudnimo. Le gusta

dejar vagar la mente en el mundo real ms que en el fantstico,

por lo que sus historias van desde lo contemporneo a lo

histrico, las novelas negras o el suspense, en lugar de contar

historias de hadas del bosque o criaturas morfolgicamente

inhumanas. Le encanta escribir sobre el amor.