PROYECTO

“ANALISIS TAXONOMICO DE LOS MATERIALES OSEOS HALLADOS EN METEPEC CERRO DE LOS MAGUEYES”

Antropólogo Físico. LUIS ALFONSO GONZALEZ MIRANDA Investigador de la Dirección de Antropología Física del INAH. Arqueóloga. MARIA DEL CARMEN CARBAJAL CORREA Investigadora del Centro INAH Estado de México.

Octubre de 2003.

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INTRODUCCION Muchos de los aspectos culturales de la humanidad se manifiestan de un modo más claro en la educación, la política y la economía. Tal aseveración tiene que ver con México, que desde sus orígenes prehispánicos, ha mostrado tener un alto grado de cultura, través de grupos muy diversos tales como los olmecas, teotihuacanos, zapotecas, toltecas, matlatzincas, mexicas, mayas, entre otros. Todos ellos fueron creadores de complicados sistemas calendáricos, inventores del cero, introductores del urbanismo arquitectónico, etcétera. Todos estos grupos tienen la característica de haber formado parte de la macroárea llamada Mesoamérica, pues compartieron y desarrollaron elementos religiosos específicos de las altas culturas agrícolas basadas en una religión politeísta, misma que se mezcla con el mito, la naturaleza y el cosmos. Hombres creadores de dioses, dioses tutelares, dioses bélicos, dioses benefactores, hombres que lograron la fuerza de la superación a través del trabajo, la organización y la unión de alianzas para alcanzar fines comunes. También compartieron otros rasgos culturales específicos mesoamericanos logrados en la época prehispánica, y que en la actualidad conforman nuestro patrimonio cultural; herencia

que en el transcurso de los años y a través de investigaciones se acrecienta, surgiendo y sugiriendo al mismo tiempo la necesidad de la protección y la difusión de ese patrimonio que es nuestro, a fin de crear conciencia en la población del importante legado cultural que nos dejaron los antiguos habitantes de esta

región.

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UBICACIÓN DEL SITIO Metepec se localiza entre las coordenadas extremas: de 19º 17´, y 19º 13´ latitud norte; 99º 31´ y 99º 39´ longitud oeste, sobre una altitud media de 2610 metros sobre el nivel del mar, en el Estado de México, a 6 kilómetros al sureste de Toluca. Limita al norte con los municipios de Toluca y San Mateo Atenco; al sur con los de Chapultepec, Mexicalcingo y Calimaya; al este, con Tianquistengo y al oeste con Toluca (INEGI 1993: 3) [Figura. 1].

El sitio arqueológico “Cerro de los Magueyes” se ubica entre los barrios del Espíritu Santo y el barrio de San Miguel. El cerro está limitado, al norte por la calle Estado de México, al sur por terrenos particulares y una escuela preparatoria, al este por la calle La Vía y al oeste por la carretera a Tenancingo (Carbajal 1997: 16) [Figura. 2]. El tipo de maguey que había en la región es el textilero, mismo que le dio nombre a la región, y

proviene del náhuatl metl “maguey” y tepetl “cerro”, refiriéndose al lugar donde se cultivaba este tipo de cáctacea [Figura. 3].

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ANTECEDENTES ARQUEOLOGICOS Con los únicos trabajos arqueológicos con que se cuenta para el área de Metepec son los efectuados por José García Payón (1935), Wanda Tommasi (1975), Yoko Sugiura (1979) y María del Carmen Carbajal Correa (1992 y 1993). García Payón en 1935 en terrenos de Metepec, registro “...una enorme cantidad de cabecitas de los tipos C-1 y C-3, cajetes sencillos de paredes gruesas y vasijas de cuerpo compuesto, que datan del período Formativo o Preclásico que corresponde del 1800 al 1300 a. C.” En 1979 Yoko Sugiura1, efectuó una investigación de superficie del Valle de Toluca la cual también incluyó

a Metepec, en su registro de sitios el Cerro de los Magueyes quedo catalogado con el número 143; al noroeste de la cabecera municipal registro otro lugar como el 193, el cual en 1992 a este sitio se le dio el nombre de “La Providencia”, por haberse llevado a cabo un rescate arqueológico2 por parte de la arqueóloga Carbajal Correa, donde obtuvo información respecto a una ocupación teotihuacana3 que se ubica a partir de la fase Xolalpan 450 d. C. hasta la fase Metepec y Protocoyotlatelco del 600 al 800 d. C. Es hasta el año de 1993 cuando en el Cerro de los Magueyes se inicia el rescate arqueológico de este sitio por parte de esta misma investigadora quien estuvo a cargo del trabajo de campo4, a causa de la construcción de una caja de agua obra de infraestructura que realizó el Ayuntamiento de Metepec, hallando un “centro funerario” en la parte norte de la cima del cerro de los Magueyes, se distinguió por haber sido un sitio específico donde 1 Investigadora del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM. Realizó un recorrido intensivo en superficie de la parte centro-sur del valle de Toluca, en Metepec éste sitio fue registrado como “sitio 193”, la información que obtuvo la reportó en su artículo: titulado "El material cerámico formativo del sitio 193, Metepec, Estado de México. Algunas consideraciones". 2 Informe mecanoescrito del Rescate Arqueológico en el sitio “La Providencia, Carbajal 1992-1993, Archivo del CINAHEM. 3 Con esto se constata una vez más que Teotihuacan, pobló diversas regiones entre ellas se encuentra el valle de Toluca. 4 También participaron en este rescate los arqueólogos, Norma L. Rodríguez, Guizzela Castillo Moreno y Raúl Aranda, así como diez ayudantes de campo.

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los antiguos habitantes de Metepec durante el Posclásico Tardío, tanto matlatzincas como de mexicas enterraban a sus muertos. También se obtuvo durante el transcurso de la excavación arqueológica una “unidad habitacional” a 100 m hacia el norte del cerro, debido a la presencia de objetos de desecho manufacturados en lítica y en obsidiana en el interior de un basurero, en el cual también se hallaron fragmentos de cerámica del tipo Azteca III, lo que puede indicar que la gente que vivía allí entre sus actividades de producción era la de elaborar instrumentos como buriles, navajillas, raederas, raspadores y perforadores, y que además parte de esta producción se asignó para ofrendarla a sus muertos. TRABAJO DE CAMPO Los materiales culturales y los restos óseos humanos que se obtuvieron de los trabajos de excavación, se realizaron sobre la cima norte del cerro de los Magueyes, se registraron de acuerdo a la nomenclatura general de campo; establecida por medio de una cala en dirección sur – norte y de una cuadrícula extensiva. El punto cero se situó en el extremo sur donde se inició la traza de la cala. Posteriormente este punto fue trasladado hacia el oeste, donde se ubicó el punto a partir del cual se hizo la intersección de los cuadrantes para la

cuadrícula, dividida en cuadros de 2 x 2 m.

Esto se hizo con el fin de poder ubicar los materiales arqueológicos y registrar el lugar exacto de su hallazgo dentro del plano general de excavación, para lo cual primero se establecieron dos cuadrantes, el NE y el NW. Posteriormente, se trazó la cuadrícula del área de

excavación de 124 m2, por medio de cuadros de 2x2 m de lado de este a oeste y de sur a norte; se efectuaron dos ampliaciones a la traza original denominadas como “Ampliación oeste” y “Ampliación este”, las cuales también fueron cuadriculadas de igual manera [Figura. 4].

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Tomando en cuenta la cuadrícula de excavación, los entierros de acuerdo con su filiación étnica5 se distribuyeron de la siguiente manera: Los 69 enterramientos matlatzincas se localizaron en la parte central y norte, los 27 mexicas estaban en el lado noroeste y oeste, a 22 no se les pudo determinar el grupo étnico al cual pertenecían porque carecían de objetos cerámicos diagnósticos ofrendados a ellos, y se encontraron hacia el sur, y por último en el extremo centro poniente se encontró un osario con 124 restos óseos humanos de varios individuos6. RESULTADOS OBTENIDOS DEL TRABAJO DE CAMPO Durante los trabajos de campo que se efectuaron en el cerro de los Magueyes, se obtuvieron 118 entierros; gracias a los cuales se pudo acercar al conocimiento con respecto de las costumbres funerarias practicadas en este cerro se pudieron establecer practicas mortuorias diferentes, cuando más de un grupo étnico comparte un mismo centro funerario. La matriz predominante sobre la cual fueron depositados los entierros en el cerro de los Magueyes fue en el tezontle, y en cuanto al lecho, en la mayoría de los casos, fue también de tezontle, aunque algunos otros fueron colocados sobre el tepetate. Por este motivo, el mayor número de estos entierros corresponde a la categoría de tipo directo. Con base en la clasificación de Romano (1974: 86), se encontró que los entierros más representativos para este sitio tanto para matlatzincas como para mexicas son: los primarios y secundarios, directos individuales. En cuanto a los entierros indirectos, tres se hallaron en el interior de una fosa circular no profunda, y uno de ellos se encontró depositado en el interior de una jarra a manera de urna funeraria, que contenía los restos óseos de un individuo incinerado mexica. 5 Se tomaron en cuenta los siguientes parámetros arqueológicos, e históricos para determinar la filiación étnica de los diferentes grupos que fueron enterrados en el Cerro. En cuanto al primer parámetro, se tomo en consideración la cerámica asociada a los entierros, a este respecto Sugiura menciona: ”...los materiales cerámicos nos permiten profundizar en el entendimiento de la identidad étnica, puesto que en ella está plasmada una gran cantidad de información relevante” (Sugiura, 1991:259), también se tomo en cuenta la cuadrícula de excavación en donde se encontraron los entierros. Históricamente se consigna lo siguiente: “...podemos decir que la conquista del imperio tenochca sobre el área otomiana provocó uno de los fenómenos más complejos de movimiento de población prehispánica”. Más adelante menciona: “...que en muchos señoríos conquistados había un cierto número de enclaves imperiales que fueron repoblados o fundados con migrantes procedentes de la cuenca de México,... los nuevos pobladores se establecieron casi siempre dentro o al lado de los otomianos, pero en “barrios” o calpolli separados. Esto implica que se debe incluir a partir de entonces a los mexicas como un elemento étnico, lingüístico y cultural determinante en la nueva geografía humana de esta región”(García 1999: 72, 73, 85). 6 Posiblemente el osario de este sitio se refiera a: “... donde ponían los huesos de los que habían cautivado... hacían sacrificio al dios de las batallas: ayanatzyhtama-yo” (Carrasco, 1987: 157).

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En cuanto a la forma en que fueron colocados los cadáveres en este sitio, la más representativa es la flexionada, con sus diversas variedades, aunque la más sobresaliente es la de decúbito dorsal, para matlatzincas y mexicas respectivamente. Durante el proceso de exploración de los esqueletos en este lugar se llevó a cabo el registro de la orientación general; de acuerdo con lo antes mencionado, se determinó que el plano de orientación general más representativo es el de norte a sur, para los individuos matlatzincas, por lo que se refiere a la orientación general que guardaban los entierros primarios mexicas, sobresale la de oeste a este. El sistema de enterramientos de Metepec se puede interpretar como parte de un esquema cosmogónico preconcebido por la propia sociedad prehispánica mesoamericana. En Metepec, se observa que durante el Posclásico Tardío, el cerro es considerado el lugar idóneo para enterrar a sus muertos, mismos que adquirían relevancia al momento de su muerte, ya sea que ésta se haya producido por sacrificio o por causas naturales. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Dentro del campo de la antropología física en general y de la osteología en particular, la única forma posible de conocer algunas de las características físicas de las poblaciones que nos antecedieron en el tiempo y en el espacio, es mediante el estudio de sus restos óseos, con los cuales es posible llegar a conocer sus diferencias y similitudes de los antiguos habitantes de nuestro actual territorio nacional, como es en el presente caso en donde se pretende tipificar a estas dos diferentes poblaciones, que habitaron esta región del valle de Toluca durante el Posclásico Tardío. HIPÓTESIS Tomando en consideración algunos caracteres métricos – morfológicos, tanto del cráneo como de esqueleto postcraneal, y por medio de los 30 caracteres epigenéticos ó no métricos del cráneo, se identificará morfológicamente a esta población que habito la región de Metepec en época prehispánica durante el Posclásico Tardío y que fue enterrada en el cerro de los Magueyes, con el objeto de poder determinar la filiación étnica a la cual pertenecían. Con base en esta serie de rasgos antropofísicos antes descritos, se pretende probar si se trata de uno o varios grupos étnicos, ya que de acuerdo con los datos arqueológicos e históricos esta población es multiétnica.

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OBJETIVO GENERAL Se caracterizará morfometricamente, a esta población por medio de las medidas absolutas y los índices que tengan clasificación en la Convención Internacional de Mónaco, así mismo se tomaran en consideración los 30 caracteres epigenéticos ó no métricos del cráneo propuestos por Berry y Berry, para observar diferencias y semejanzas intragrupales y extragrupales y conformar matrices de distancias biológicas. OBJETIVOS PARTICULARES. Se obtendrán datos paleodemográficos para poder valorar la esperanza de vida y la mortalidad de esta población, tomando en consideración el sexo y la edad de los individuos, de la cual se tomará el límite inferior y el límite superior en intervalos de 5 años, sobre la base del análisis propuesto por Acsadi y Nemeskeri (1970), Ward y Weiss (1976) Steinbock (1976), Blakely (1977) Robbins (1977) y Márquez y Hernández (2001). Se determinará el cálculo de la estatura por medio de las tablas de Genovés (1966), y se aplicara la clasificación de Comas (1976). Se identificarán los padecimientos de tipo patológico detectados en el material óseo, de los antiguos habitantes de la región de Metepec los cuales prevalecieron en esta población, para lo cual se utilizará el análisis macroscópico y el radiológico, para poder establecer el diagnóstico diferencial y así poder agrupar los padecimientos de acuerdo con su etiología Jaén (1977), Steinbock (1976), Ortner y Putschar (1981), Zimmerman (1982) Campillo (1983) y Jaén, Bautista y Hernández (1991). Se registrarán una serie de marcadores en estos materiales, para valorar el grado de salud y nutrición de esta población tales como: espongio hiperostosis7, hipoplasia del esmalte8, líneas de Harris9, enfermedades dentales10, además del registro de padecimientos degenerativos en articulaciones11, infecciosos12 y traumatismos13.

7 Afecta sobre todo la bóveda craneana y al techo de las orbitas. 8 Se registrará sólo en los incisivos centrales y caninos de la dentición permanente. 9 Se observan en las epífisis y diáfisis de los huesos largos, pero en el hueso donde más se preservan estas líneas es en la tibia. 10 Se tomará en cuenta sólo la dentición permanente; y se cuantificará el número de dientes observados, los perdidos ante mortem, los que presentan caries, el número de alvéolos y el número de abscesos. 11 Los cuales se observaran en el hombro, codo, cadera, rodilla, vértebras (cervicales, dorsales y lumbares) y en la articulación tempo – mandibular, en la muñeca y en los huesos de la mano. 12 Se registrará la presencia de periostitis primero en la tibia y después en el del esqueleto. 13 Se observarán en la cintura escapular, brazos, manos, piernas, cara, proceso nasal y bóveda craneana.

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Se tomarán en consideración las practicas de tipo cultural que presenta el material óseo como son la deformación craneana, y la mutilación dentaria. Respecto al primer aspecto de tipo cultural este se reconocerá a nivel morfoscópico, de acuerdo con lo propuesto por Dembo e Imbelloni (1938) y Romano (1965); para la mutilación dentaria se utilizara la tabla de clasificación de Romero (1986). Se registrarán las huellas de corte en los huesos que son evidencias de tipo ritual a causa del sacrificio humano, para lo cual se tomara en consideración la metodología propuesta por Pijoan (1997). Finalmente se hará un análisis comparativo de los resultados obtenidos de esta población, con los resultados que se obtuvieron en 1975 por parte de Lagunas, Zacarías y Daltabuit; de los antiguos pobladores de Teotenango, para verificar si existen o no diferencias en cuanto a estas poblaciones de estos dos sitios, así como con poblaciones de otros sitios que habitaron la Cuenca de México durante este mismo periodo cultural, si es que se cuenta con este tipo de datos que tipifiquen a su población. ANALISIS DEL MATERIAL ÓSEO Edad y Sexo La edad de los individuos se determinara, a partir de la unión epifisiaria principalmente de los huesos largos Ubelaker (1989: 69); o bien por el grado de obliteración de las suturas craneales de acuerdo con Meindl y Lovejoy (1985. 57-66); también se observara el grado de obliteración de la sutura esfenobasilar (Ferembach 1979: 27), así como también la obliteración de las suturas exocraneales (Meindl y Lovejoy 1985. 57-66); se aplicara la sinostosis de los huesos maxilares, sobre la base de las cuatro suturas maxilares propuestas por Mann (1990); se aplicaran los marcadores propuestos por Krogman e Iscan (1986: 106-107) entre los cuales se consideraron los siguientes: el cierre de la epífisis proximal de las clavículas, el grado de rugosidad de la superficie auricular de la pelvis, los procesos de cambio que sufre la sínfisis púbica desde la adolescencia hasta los 50 o 55 años de edad, propuesta por Tood (crf. Krogman e Iscan 1986:151) y por último, se apreciara el grado de unión de los cuerpos de las vértebras sacras (Genovés 1962:109). Para la determinación del sexo tomaran en cuenta las características morfoscópicas de la cintura pélvica (Ferembach 1979: 11-15 y White 1991:327), del cráneo (Olivier 1960:170-

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171 y White 1991: 320), y en los huesos largos se utilizaron los criterios de (Genovés 1962: 109; Krogman 1962: 143-144, y 146; Brothwell 1965:56-57 y Ubelaker 1989: 52-55). Una vez determinada la edad y el sexo de los se les aplicara la clasificación de rangos de edad propuesta por Hooton (1947: 732-742). METODOS Y TÉCNICAS A EMPLEAR Caracteres métricos – morfológicos Medidas del cráneo cerebral. Las medidas absolutas que aquí se van tomar es con el fin de caracterizar la filiación étnica, de los esqueletos enterrados en el cerro de los Magueyes y son las siguientes.

Diámetro anteroposterior máxima o Longitud máxima del cráneo, se toma de la glabela a opistiocráneo (g – op) con un compás de ramas curvas, la glabela es el punto más prominente entre las arcadas supraorbitarias, el opistocráneo es el punto mas saliente del occipital [Figura 5]. Clasificación Masculinos Femeninos Muy corto X – 169.99 X – 159.99

Corto 170 – 179.99 160.00 – 169.99 Medio 180.00 – 189.99 170.00 – 179.99 Largo 190.00 – 199.99 180 – 189.99

Muy largo 200.00 – X 190.00 – X

Diámetro transverso máximo o Anchura máxima del cráneo, se toma de eurion a eurion (eu – eu) con compás de ramas curvas, el eurion es el punto en la pared del cráneo proyectado más lateralmente, no tiene localización fija; hay que buscarlo por mediciones, suele estar en el parietal pero puede coincidir con la escama del temporal [Figura 5].

Clasificación Masculinos Femeninos Muy estrecho X – 169.99 X – 159.99

Estrecho 130.00 – 139.99 125 – 134.99 Medio 140.00 – 149.99 135.00 – 144.99 Ancho 150 – 159.99 145 – 145.99

Muy ancho 160.00 – X 155.00 – X

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Diámetro bicigomático o anchura de la cara, se toma con el compás de ramas rectas del zygion al zygion (zy – zy), el zygion es el punto más lateral del arco zigomático [Figura 5].

Clasificación Masculinos Femeninos Muy estrecha X – 121.99 X – 113.99

Estrecha 122.99 – 129.99 114.00 – 121.99 Media 130.00 – 137.99 122.00 – 129.99 Ancha 138.00 – 145.99 130.00 – 137.99

Muy ancha 146.00 – X 138.00 – X Diámetro frontal mínimo distancia directa entre uno y otro Fronto - temporal (ft – ft), se toma con el compás de ramas curvas [Figura 5].

Diámetro porion bregma(po – b), se toma con compás de ramas curvas tanto del lado derecho como del lado izquierdo, el porion es el punto más alto en el borde superior del conducto auditivo externo, el bregma es el punto de intersección de las suturas coronal y sagital [Figura 6].

Diám Po der – Br = Diám Po izq – Br =

Clasificación Masculinos Femeninos Muy bajo X – 106.99 X – 102.99

Bajo 107.00 – 112.99 103.00 – 108.99 Medio 113.00 – 118.99 109.00 – 114.99 Alto 119.00 – 124.99 115.00 – 120.99

Muy alto 125.00 – X 121.00 – X

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Diámetro basion – bregma (ba – b) o altura del cráneo, se toma con compás de ramas curvas, el basion es el punto de intersección del borde anterior o ventral del foramen mágnum, el bregma es el punto de intersección de las suturas coronal y sagital [Figura 7].

Clasificación Masculinos Femeninos Muy bajo X – 121.99 X – 115.99

Bajo 122.00 – 129.99 116 – 123.99 Medio 130.00 – 137.99 124.00 – 131.99 Alto 138.00 – 145.99 1332.00 – 1329

Muy alto 146 – X 140 – X Diámetro nasion – basion (n – ba) se toma con el compás de ramas curvas, el nasion es el punto en la intersección de la sutura nasofrontal y la línea mediosagital, el basion es el punto de intersección del borde anterior o ventral del foramen mágnum [Figura 7]. Medidas del cráneo facial. Diámetro basion – prostion (ba – pr) se toma con el compás de ramas curvas, el basion es el punto de intersección del borde anterior o ventral del foramen mágnum, prostion punto anteroinferior en el borde alveolar del maxilar entre los dos incisivos medios [Figura 7].

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Diámetro nasion – prostion (n – pr) o diámetro naso – alveolar, se toma con el compás de ramas rectas, el nasion es el punto en la intersección de la sutura nasofrontal y la línea mediosagital, prostion punto anteroinferior en el borde alveolar del maxilar, entre los dos incisivos medios [Figura 8].

Clasificación Masculinos Femeninos Muy corto X – 63.99 X – 59.99

Corto 64.00 – 68.99 60.00 – 64.99 Medio 69.00 – 73.99 65.00 – 69.99 Largo 74.00 – 78.99 70.00 – 74.99

Muy largo 79.00 - X 75.00 – X Diámetro nasion – gnation (n – gn) o diámetro naso – mentoniano, se toma con el compás de ramas curvas, el nasion es el punto en la intersección de la sutura nasofrontal y la línea mediosagital, el gnation es el punto mas bajo en el borde inferior externo de la mandíbula [Figura 8].

Clasificación Masculinos Femeninos Muy corto X – 105.99 X – 97.99

Corto 106.00 – 113.99 98.00 – 105.99 Medio 114.00 – 121.99 106.00 – 113.99 Largo 122.00 – 129.99 114.00 – 121.99

Muy largo 130.00 – X 122.00 – X

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Medidas de la nariz Anchura de la nariz es la anchura máxima de le abertura piriforme, se toma con el compás de ramas rectas [Figura 8]. Altura de la nariz se toma con el compás de ramas rectas, del nasion al subnasal (n – sn), el nasion es el punto en la intersección de la sutura nasofrontal y la línea mediosagital y el subnasal es el punto más bajo del borde inferior de la abertura nasal proyectada en la espina [Figura 8]. Medidas de la órbita

Altura de la órbita

distancia directa entre el borde superior e inferior de la órbita, perpendicularmente a la anchura, se toma con el compás de ramas recta y se toma la mediada en el mismo conato del borde orbital; se tomara esta medida en la órbita del lado derecho e

izquierdo [Figura 9]. Anchura de la órbita se toma oblicuamente desde el maxilo frontal al ectoconquio (mf - ec), se toma con el compás de ramas rectas, el maxilo – frontal punto de encuentro de la sutura maxilo – frontal con el borde orbitario interno y el ectoconquio es el punto más lateral del borde externo de la órbita [figura 9]. Indices del cráneo cerebral Índice craneal horizontal = Diámetro transverso máximo x 100 Diámetro anteroposterior máximo

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Clasificación Dolicocráneo Hasta 74.9 Mesocráneo 75 – 79.9 Braquicráneo 80 y más

Indice vértico longitudinal = Diámetro bregma – basion x 100 Diámetro anteroposterior máximo

Clasificación Camecráneo Hasta 69.9 Ortocráneo 70 a 74.9 Hiipsicráneo 75 y más

Indice vértico transversal = Diámetro bregma – basion x 100 Diámetro transverso máximo

Clasificación Tepeinocráneo Hasta 91.9 Metriocráneo 92 – 97.9 Acrocráneo 98 y más

Índice del cráneo facial Indice facial superior = Diámetro nasion – prostion x100 Diámetro bicigomático

Clasificación Eurinos Hasta 49.9 Mesenos 50 – 54.9 Leptenos 55 y más

Índice orbitario Altura de la órbita x 100 Anchura de la órbita

Clasificación Camaecono Hasta 82.9 Mesoconco 83 – 88.9 Hipsiconco 89 y más

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Índice nasal. Anchura de la nariz x 100 Altura de la nariz

Clasificación Leptorrino Hasta 82.9 Mesorrino 83 – 88.9 Camerino 51 y más

ESQUELETO POSTCRANEAL. Húmero Perímetro mínimo: Es la circunferencia menor de la diáfisis, se mide debajo de la tuberosidad deltoides. Se mide con la cinta métrica. Longitud máxima: Es la distancia entre el punto más alto de la cabeza humeral al punto más saliente de la tróclea y se mide con la tabla osteométrica. Diámetro máximo o antero – posterior máximo: Es la medida mayor tomada en la parte media de la diáfisis, con el compás de ramas rectas. Diámetro mínimo o transverso mínimo: Es la medida menor tomada en el mismo sitio que la anterior.

Indice de robustez* = Perímetro mínimo x 100 Longitud máxima

Indice diafisiario = Diámetro mínimo x 100 Diámetro máximo Clasificación

Platibraquia X – 76.5 Euribraquia 76.6 – X

Cúbito Perímetro mínimo: Es la circunferencia menor de la diáfisis del cúbito, se toma en el tercio distal con la cinta métrica. Longitud máxima: Es la distancia máxima entre la parte más alta del olécranon y la punta de la apofisis estiloides, y se toma en la tabla osteométrica.

* Este índice no tiene clasificación, pero determina el grado de robustez del húmero.

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Diámetro anteroposterior subsigmoideo: Medida en línea recta que va del borde anterior al posterior del hueso a nivel del borde inferior de la superficie articular subsigmoidea, se toma con el compás de ramas rectas. Diámetro transverso subsigmoideo: Medida en línea recta, perpendicular a la medida anterior, se toma al mismo nivel con el compás de ramas rectas.

Indice de robustez** = Perímetro mínimo x 100 Longitud máxima

Indice de platolenia = Diámetro transverso subsigmoideo x 100 Diámetro anteroposterior subsigmoideo

Clasificación Platolenia X – 79.9 Urolenia 80.0 – 99.9

Hiperurolenia 100.00 – X Fémur Longitud máxima: Se toma con la tabla osteométrica, de la parte más superior de la cabeza del fémur al punto más prominente del cóndilo interno, siguiendo el eje del hueso apoyando éste sobre su parte posterior. Diámetro transverso a la mitad de la diáfisis: Distancia en línea recta entre los bordes interno y externo del hueso, a la de la diáfisis se toma con el compás de ramas rectas. Diámetro anteroposterior a la mitad de la diáfisis: Distancia entre la superficie anterior y posterior de la diáfisis a ese nivel, se toma con el compás de ramas rectas perpendicularmente a la medida anterior. Longitud fisiológica(o longitud en posición oblicua): Se mide con la tabla osteométrica, del borde más superior de la cabeza femoral a la parte más inferior de ambos cóndilos. Diámetro transverso subtrocantérico: Esta medida se toma con el compás de ramas rectas, en la base del trocánter menor. Diámetro anteroposterior subtrocantérico: Esta medida se toma con el compás de ramas rectas, perpendicular a la medida anterior en el mismo sitio. ** Este índice no tiene clasificación, pero determina el grado de robustez del cúbito.

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Indice de robustez = Diámetro transv. + Diámetro a. p. x 100

Longitud fisiológica Indice pilástrico = Diá. Ap. a la mitad de la diáfisis x 100

Diá. Tran. a la mitad de la diáfisis Clasificación

Pilastra nula X – 99.9 Pilastra débil 100.0 – 109.9 Pilastra media 110 – 119.9 Pilastra fuerte 120 – X

Indice platimérico = Diámetro anteroposterior subtrocantérico x 100 Diámetro transverso subtrocantérico

Clasificación

Platimeria X – 94.9 Eurimeria 85.0 – 99.9

Estonomeria 100.0 - X Rasgos no – métricos o Discontinuos. Aquí se presenta la lista de Berry y Berry, por parte de Salas y Pijoan (1982), con el objeto de unificar los métodos y técnicas que se deben seguir para la obtención de dichas características y donde se localizan estos 30 caracteres, que son los que más han sido utilizado para el estudio de los diferentes grupos que conforman la población mexicana ya

desaparecida en el tipo y en el espacio [Figura 10]. 1.-Tercera línea curva occipita presente. Existe en algunas ocasiones una tercera línea (la más alta), que se levanta de la protuberancia occipital externa superior y

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forma un arca hacia delante. Este rasgo se puede apreciar mejor al tacto que a la vista y se cuantifica bilateralmente. 2.-Hueso lambdoideo presente. Se localiza en la unión de las suturas sagital y lamboidea (la posición de la fontanela posterior). Esta característica es cuantificable cuando las suturas se encuentran claras. Se cuantifica como única. 3.-Huesos wormianos en la sutura lambdoide presentes. Uno o mas huesecillos pueden encontrarse en el trayecto de la sutura lambdoides. Esta característica al igual que la anterior se puede cuantificar únicamente cuando se aprecia con claridad la sutura y esa región no se encuentra rota. Se considera bilateralmente. 4.-Agujero parietal presente. Cerca del borde superior del parietal y en ocasiones en el mismo borde (sutura sagital) se encuentra el agujero parietal, el cual atraviesa este hueso. Se cuantifica su presencia atravesando un alambre delgado, sin embargo en ocasiones se observa su presencia a simple vista. S e considera bilateralmente. 5.-Hueso bregmatico presente. Se localiza en la unión de la sutura sagital con la coronal. Se cuantifica su presencia de manera única. 6.-Metopismo presente. La sutura métopica o medio frontal desaparece durante los dos primeros años de existencia. En algunos individuos esta sutura persiste toda la vida, ya sea de manera parcial o completa. Este rasgo se cuantifica como presnte cuando abaraca el 50% o más del frontal. Se cuatifica su presencia de manera única. 7.-Huesos wormianos en la sutura coronal presentes. Es la presencia de uno o mas huesecillos en esta sutura. Esta característica se toma cuando la sutura se ve con toda claridad. Se cuantifica bilateralmente. 8.-Hueso epipterico presente. Es un hueso sutural que se localiza en pterion. Su forma es variable y puede ser hasta en forma de astilla ósea. Se cuantifica bilateralmente. 9.-Articulación fronto – temporal presente. En la mayoría de los casos el frontal y el temporal están separados por el ala mayor del esfenoides. Sin embargo, en algunas ocasiones están en contacto directo. Este rasgo es difícil de cuantificar, ya que en ocasiones ambos extremos de la sutura están obliterados. Se cuantifica bilateralmente. 10.-Hueso en la escotadura parietal presente. Se localiza en donde la sutura escamosa se une con la temporo –parietal formando una escotadura. Se cuantifica bilateralment.

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11.-Hueso asterico presente. Se localiza en asterion, es decir en la unión de la sutura temporo – patrietal con la lambdoidea. Se cuantifica bilateralmente. 12.-Exostosis auditiva presente. Son protuberancia óseas que se encuentran en las paredes del conducto auditivo externo. Se cuantifica bilateralmente. 13.-Dehiscencia de la placa timpánica (agujero de Hushke) presente. Este agujero se encuentra en el piso del meato auditivoexterno. Se cuantifica bilateralmenete. 14.-Agujero mastoideo exutural presente. El agujero mastoideo por lo general se localuiza en la sutura occipito – mastoidea, sin embargo en ocasiones se encuentra fuera de la sutura. Para cuantificarlo se usa un alambre o nua agujaque deben atravesar hasta la cara endocranial. Se observa bilateralmente. 15.-Agujero mastoideo exsutural y sutural ausente. En este rasgo se cuantifica la presencia de la ausencia. Para mayor facilidad se pueden tomar de manera simultanea el rasgo 14 y se cuantifica bilateralmente. 16.-Agujero condilar posterior presente. El canal condilar posterior comúnmente perfora la fosa condilar que se encuentra inmediatamente por detrás de los cóndilosde occipital. Este rasgo se toma en cuanta cuando puede ser atravesado por una aguja o alambre y cuando esa parte del hueso nos esta rota. Se cuantifica bilateralmente. 17.-Cóndilo occipital bipartido presente .En ocasiones el cóndilo está dividido en dos facetas. Se toma bilateralmente. 18.-Tubérculo precondileo presente. Este tubérculo algunas veces se localiza en la parte posterior y media de la apófisis basilar. Se cuantifica su presencia en la parte media. 19.-Agujero condilar anterior doble o canal hipogloso doble presente. Este canal perfora la parte anterior del cóndilo occipital y da paso al nervio hipogloso. Únicamente se considera esta característica cuando el canal está realmente y dividido por un puente óseo, y se aprecia mejor mirando dentro del agujero occipital. Se toma bilateralmente. 20.-Agujero oval incompleto presente. El agujero oval se localiza en el esfenoides, en la base del cráneo y se cuantifica cuando la pared postlateral está incompleta, de manera que este agujero se continúa con el redondo menor. Se toma bilateralmente.

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21.-Agujero redondo menor abierto presente. Se localiza junto al agujero oval y se cuantifica cuando la pared posterior de este agujero esta ausente y se continua con la fisura del agujero rasgado anterior. Se cuantifica bilateralmente. 22.-Agujero palatino posterior accesorio presente. Se localizan en ambos lados del borde posterior del paladar óseo, inmediatamente por detrás del agujero palatino mayor o anterior. Debe introducirse un alambre o aguja para ver si el agujero perfora el palatino. Se toma bilateralmente. 23.-Torus palatino medio presente. Es una elevación ósea o exostosis benigna, que se presenta en la sutura media en la bóveda palatina. Se toma de manera única. 24.-Torus maxilar presente. Puede existir una exostosis ósea que se localiza en la parte lingual de los bordes alveolares correspondientes a los molares. Este rasgo es cuantificable cuando los maxilares están completos y no presentan reabsorción alveolar o alguna lesión en el hueso que no haga clara su observación. Se toma bilateralmente. 25.-Agujero cigomático facial ausente. Por lo general este agujero se encuentra en la porción lateral del malar y únicamente se cuantifica como ausente cuando un alambre delgado se introduce en este agujero y no atraviesa el malar, o cuando no existe. Se cuantifica bilateralmente. 26.-Agujero supraorbital completo presente. El agujero o escotadura supraorbitaria se localiza en el tercio interno del margen superior de la órbita (borde anterior del frontal). Este rasgo se toma como presente cuando el agujero esta completamente formado. Se toma bilateralmente. 27.-Agujero frontal accesorio presente. Es un agujero secundario bien definido, por lo general en posición lateral y cerca de la escotadura o agujero supraorbitario. Se toma cuando la aguja o alambre atraviesa el hueso y es bilateral. 28.-Conducto etmoidal anterior ex – sutural. Normalmente se localiza en la unión del frontal con el etmoides, en la pared medial de la órbita. Sen embargo, en ocasiones se localiza por encima de la sutura. Se cuantifica bilateralmente. 29.-Conducto etmoidal posterior ausente. Se encuentra por detrás del anterior, sobre la misma sutura. Se cuantifica bilateralmente. 30.-Agujero infraorbital accesorio presente. El agujero infraorbital accesorio es común que este presente por debajo del borde orbitario y es único, no obstante, este agujero puede estar

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dividido por un puente óseo o pueden existir uno o mas agujeros. Se cuantifica su presencia bilateralmente, haciendo pasar una aguja o alambre. ACTIVIDADES A DESARROLLAR Se contempla un tiempo aproximado, para llevar a cabo la primera fase de esta investigación de tres años. Respecto a los resultados parciales de la presente investigación, se darán a conocer tanto en coloquios como en congresos y en publicaciones por medio de artículos, conforme se vaya avanzando en el trabajo. Finalmente los resultados generales se conjuntarán en un libro. Respecto a la metas mediatas, se elaborara un catalogo y un banco de datos de los entierros del Cerro de los Magueyes de Metepec, Estado de México, para lo cual se contara con la participación de la arqueóloga Maria del Carmen Carbajal Correa.

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