del bingo tradicional al bingo electrónico
Post on 09-Jul-2015
1.272 Views
Preview:
TRANSCRIPT
Del Bingo Tradicional al Bingo Electrónico
Nuevas máquinas electrónicas sustituyen al tradicional juego del bingo con
cartones
Las nuevas máquinas de bingo electrónico
que se han instalado en la región de Murcia han
revolucionado la tradicional forma de entretenerse
con este antiguo juego de azar. Estas máquinas,
que se utilizan en países como Brasil, Honduras y
México desde hace varios años, se encuentran
actualmente en la mayoría de salas de bingo de
ciudades de la geografía española, como Madrid,
Valencia y Alicante, entre otras.
Como comenta Ana María García Piqueras,
coordinadora de Metronia –empresa líder de este
sector en España- en la Comunidad Valenciana y
Murcia, todo empezó con la creación del grupo
FB, que más tarde se disolvió dando lugar a dos
de las empresas de máquinas de bingo electrónico
más importantes de nuestro país: Metronia y Zitro,
que actualmente son competencia.
Hace tan solo unos meses que las máquinas
se instalaron en las salas de bingo de la región y
ya han tenido una gran aceptación por parte del
público. En Murcia, se encuentran en las salas del
Bingo Romea, Coliseum y Plaza, así como en el
casino; mientras que en Cartagena las podemos
encontrar en el Bingo Cartagena y en el Bingo
Hotel Alfonso XIII. En muchas salas, incluso,
funcionan mejor las máquinas electrónicas que el
bingo tradicional. “Es lo que ahora está dando
vidilla al mundo del bingo, y que poco a poco está
suplantando la forma tradicional de juego. Es el
bingo del futuro”, asegura Pamela Pérez Inglada,
comercial y azafata de Metronia en la Comunidad
Valenciana y Murcia.
El éxito de esta nueva modalidad de juego
se debe, entre otras cosas, a la rápida forma de
ganar dinero. Por lo general, estas máquinas dan
premios más altos con menos apuestas de dinero
que en el bingo tradicional: “He visto a un cliente
ganar hasta 2 premios de 2.250 euros cada uno en
una misma tarde. Cuánto más apuestas, más
ganas”, dice Pamela Pérez. Por otro lado, las
máquinas electrónicas se encuentran en salas de
bingo independientes, íntimas, que hacen que
muchos clientes prefieran el juego en este tipo de
salas. Según Carmen Sáenz Ellorieta, responsable
de la sala de máquinas del Bingo Paseo Alfonso
XIII de Cartagena, “hay un trato personal directo
con el cliente, al que se le invita a cualquier tipo
de bebida o incluso comida, sobre todo en las
horas del desayuno y del café. Esto contribuye a
1
que el cliente se sienta más a gusto y disfrute
mejor de la intimidad de su juego”, comenta.
Respecto al tipo de clientela de estas salas,
Pamela Pérez y Carmen Sáenz coinciden en que
acude a ellas todo tipo de gente, aunque han
tenido una mayor aceptación entre los jóvenes. “A
la gente mayor le cuesta un poco más –dice
Pamela Pérez-, aunque el que las prueba no vuelve
al bingo tradicional”. Carmen Sáenz hace una
apreciación respecto a los clientes de la sala de
Cartagena, en la que la mayor parte de ellos son
mujeres: “Hay de todo, aunque lo habitual son las
típicas amas de casa, cuyos maridos están
trabajando y encuentran en esto una forma de
diversión”, opina.
Muchos clientes juegan por diversión, pero
lo cierto es que hay un gran número de ellos que
muestran problemas de adicción. Carmen Sáenz
dice que hay gente que se siente muy sola, “les
das un poco de pie y te cuentan sus vidas –
asegura. Muchos clientes acuden a estas salas para
evadirse de sus problemas, y llegan a pasar horas e
incluso días enteros jugando a las máquinas
pensando que van a salvar el mes, y luego
descubren que han perdido todos sus ahorros. Lo
mejor es no involucrarte, porque da pena ver a
mucha gente así”, añade. “Ves cosas graves, pero
tienes que hacer de tripas corazón porque es tu
trabajo”, opina Pamela Pérez. No solo gente con
problemas económicos acude a estas salas
esperanzada de poder salvar el mes. También lo
hacen personas con buena situación económica,
que buscan una forma diferente de “gastar” su
dinero. “Lo máximo que he visto a una persona
gastarse en 5 minutos han sido 600 euros”, dice
Pamela Pérez. “La gente no controla. Hay mucha
dependencia y ludopatía”, asegura Carmen Sáenz.
A pesar de los posibles problemas que el
uso de estas máquinas puede generar en las
personas, cada uno es responsable del uso que
haga de éstas y deberá saber hasta dónde llega el
límite de cada uno. El buen uso de estas máquinas
de azar, como si de cualquier otra forma de
diversión se tratara, no tiene porqué derivar en
problemas adictivos.
Inmaculada Reinoso
2
top related