curarse es cuestión de tiempo, pero a veces también … · diferentes procesos para conservar el...
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"Curarse es cuestión de tiempo,
pero a veces también es cuestión de tener la oportunidad”
Hipócrates
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¿Quiénes somos?
Somos una asociación que investiga,
fomenta y difunde los beneficios de la
leche de yegua de calidad.
Un grupo de personas abiertas
y con ganas de ayudar que hemos
quedado sorprendidas de las posibilidades
que puede tener un alimento tan natural como la leche de yegua.
Una sorpresa compartida ha hecho que pacientes, médicos, biólogos,
biotecnólogos, diseñadores, veterinarios, ganaderos, productores, etc. nos
ayudamos con una finalidad en común.
eQuaid Research trabaja intensamente con muchos productores para asegurar
una buena calidad de la leche y sobretodo no dañar el producto en los
diferentes procesos para conservar el máximo de propiedades. Es por eso que
proporciona un sello de garantía cuando la leche de yegua cumple las
condiciones de calidad y controla el etiquetado para garantizar que se informa
al consumidor del contenido y propiedades.
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¿Qué hacemos?
Intentamos mejorar el bienestar y la salud de las personas con las
ventajas que nos dan los équidos con su leche.
Recogemos datos de consumidores, pacientes y médicos que
aconsejan este alimento para poder hacer valoraciones de los
beneficios que nos aporta la leche.
Damos soporte a iniciativas y estudios que están relacionados con la
leche de yegua.
Buscamos nuevas técnicas para conseguir una leche de máxima
calidad.
Buscamos posibles aplicaciones de la leche en otros alimentos y/o
productos dermatológicos y de cosmética.
Ayudamos a los productores a encontrar la mejor forma de producción
y comercialización del producto, para conseguir una máxima garantía
de calidad y de precio justo.
Impulsamos estudios médicos para conocer cómo actúa la leche de
yegua en distintas patologías.
Objetivos
Recuperar un alimento muy antiguo que posiblemente se abandonó por
su difícil producción.
Conseguir una explotación sana y respetuosa con los équidos, donde
su bienestar sea prioridad.
Impulsar estudios médicos para tener evidencias de la importancia que
puede tener la leche de yegua en el tratamiento de distintas patologías.
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Copyright
Este texto ha sido creado por eQuaid Research Ass.
y su diseño tiene todos los derechos reservados.
Queda totalmente prohibida su copia o reproducción
sin permiso explícito de eQuaid Research Ass.
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Contenidos
1. Introducción a la leche de yegua
1.1 La leche de yegua
1.2 Antecedentes históricos
1.3 Composición general
2. Propiedades en general
3. Advertencias y especial atención
4. Composición específica teórica
4.1 Composición específica
4.2 Características de algunos componentes
5. La leche de yegua eQuaid en distintas especialidades médicas
5.1 Psicología
5.2 Digestología
5.3 Pediatría
5.4 Dermatología
5.5 Inmunología
5.6 Oncología
5.7 Hematología
5.8 Ginecología
5.9 Geriatría
6. Situación de la investigación biomédica
7. Formatos de leche de yegua eQuaid
8. Colaboradores científicos
9. Referencias
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1. Introducción a la leche de yegua
1.1 La leche de yegua
La leche de yegua es un alimento natural.
Los caballos (o más bien las yeguas) disponen, como todas las hembras de los
mamíferos, de glándulas mamarias que secretan lo que tiene que ser el único
alimento para sus hijos durante los primeros estadios. Esta es una sustancia
acuosa de color blanquecino que contiene agua, proteínas, grasas y azúcares
además de vitaminas, minerales y de otras sustancias nitrogenadas. Una de sus
funciones es aportar todos los elementos necesarios para un desarrollo
adecuado y rápido de la cría en cuestión. Además de proporcionarle la energía
que necesitará para vivir alerta y activamente.
La leche de yegua es, en composición química y particularmente en contenido
proteico, de las más parecidas a la leche humana. (Businco et al. 2000)
1.2 Antecedentes históricos
Los équidos son animales que
prácticamente no se han explotado
desde el punto de vista del consumo
humano. Hay algunos productores de
potro, pero normalmente viven en alta
montaña y tienen posiblemente la mejor
alimentación que se les puede ofrecer.
También hay que tener en cuenta que
prácticamente no se han medicado, es decir, han estado apartados de los
antibióticos y de los productos químicos. Eso ha permitido que su microbiota
intestinal no se viese tan alterada como la de otras especies.
Antiguamente los médicos ya habían recomendado la leche de yegua, pero se
fue dejando de consumir posiblemente por el coste más elevado de producción.
Según referentes históricos, la domesticación del caballo tuvo lugar en Asia
central, concretamente al actual Kazakhstan. Outram et al. en un artículo
publicado a la revista Science el 2009 apuntan que la cultura eneolítica de los
Botai es la candidata más firme a ser la primera cultura que domesticó el
caballo. Además de pruebas arqueológicas que demuestran la domesticación y
la monta de los caballos por parte de los Botai, también encuentran indicios
para pensar que aprovechaban la leche.
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En recipientes de cerámica del año 3.500 a.C. se detectaron ciertas grasas que
sólo pueden encontrarse en la leche de yegua. Por todo esto, concluyen que los
Botai consumían leche de yegua y tal vez obtenían derivados como lo hacen los
actuales pobladores de Asia central. Allí, por ejemplo, la bebida nacional de
Mongolia es un derivado de la leche de yegua (Koumiss o Airag).
1.3 Composición general
Yegua Humana Vaca
Grasas (g/kg) 5-20 35-40 35-39 Proteína total (g/kg) 15-28 9-17 31-38 Lactosa (g/kg) 58-70 63-70 44-49 Cenizas (g/kg) 3-5 2-3 7-8 Valor energético (kcal/kg) 390-550 650-700 650-712
Fuente: Malacarne et al. (2002)
Comparada con la leche humana y con la leche de vaca, la leche de yegua es la
menos grasa de las tres. Tiene un contenido en proteínas que se encuentra
entre la leche humana y la de vaca, que es la que más tiene. Tiene un
contenido de lactosa parecido al de la leche humana, que es más alto que el de
la leche de vaca.
De los tres tipos de leche comparadas, la leche de yegua es la menos
energética, pero se tiene que tener en cuenta que una gran parte de la energía
aportada por esta leche proviene de los azúcares y no de las grasas. Es por
esto que la energía que nos aporta la leche de yegua es, en gran parte, energía
rápida que gastamos durante el mismo día y no energía de metabolización lenta
como la que proviene de las grasas saturadas de la leche de vaca.
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2. Propiedades en general
La leche de yegua actúa sobre nuestro organismo ayudándonos a mejorar el
funcionamiento. Tiene todo un seguido de beneficios que nosotros dividimos en
tres bloques.
Al primer bloque lo llamamos bienestar y actividad. La leche de
yegua no nos da bienestar y actividad, sino que nos ayuda a
conseguirlo nosotros mismos. Debido a su aporte en aminoácidos
esenciales como el triptófano, la tirosina y la cisteína, la leche de
yegua induce la síntesis de serotonina (Uniacke-Lowe et al. 2010, Csapó-
Kiss et al. 1995). La serotonina es el neurotransmisor que utilizan las
vías neuronales encargadas del estado de ánimo, hambre, sueño
y deseo sexual. Si aportamos a nuestro cuerpo los aminoácidos esenciales que
necesita para sintetizar este neurotransmisor, todas estas vías neuronales tan
relacionadas con las sensaciones positivas tienen opción a funcionar y regularse
mejor. Al regularse, la síntesis y la degradación de serotonina regula el equilibro
dinámico de los neurotransmisores, favoreciendo el buen funcionamiento
nervioso.
El segundo bloque nosotros lo llamamos energía y buen
funcionamiento. La energía que nos aporta la leche de yegua
deriva principalmente de la lactosa. Aunque la leche de yegua
tiene un contenido calórico menor que la leche de vaca, la mayor
parte de estas calorías se deben a los azúcares y no a las grasas
(Malacarne et al. 2002, Uniacke-Lowe 2010). Por lo tanto, la energía que
nos aporta la leche de yegua es una energía inmediata ya que los azúcares son
mucho más rápidamente metabolizables que no las grasas. El buen
funcionamiento se debe a la cantidad de aminoácidos esenciales (de forma libre
y en la estructura proteica), vitaminas, minerales, ácidos grasos poliinsaturados
y microbiota intestinal que nos aporta la leche de yegua.
En la leche de yegua también encontramos, en distintas cantidades, las
vitaminas A, B1, B2, B3, B5, C, D, E i K (Csapó et al. 1995). Y una buena variedad de
minerales (P, Cu, Mg, K, Zn, Na, Fe i Ca) (Csapó-Kiss et al. 1995).
De la pequeña cantidad de grasas que contiene la leche de yegua (+- 1,2%)
casi la mitad son ácidos grasos poliinsaturados, son aceites tipo omega 3 y 6
(Csapó et al. 1995, Malacarne et al. 2002, Haddad et al. 2011). Son estas grasas, las
llamadas cardiosaludables, las que hacen que esta leche sea un alimento tan
completo ya que favorecen la absorción de todas las vitaminas y minerales
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presentes en la leche de yegua y en nuestra dieta. Además de contribuir a
disminuir los niveles de colesterol.
El tercer bloque, lo llamamos reforzamiento de las defensas. La
leche de yegua es muy rica en sustancias activas, enzimas
naturales que ayudan a regular la microbiota intestinal limitando el
crecimiento de las bacterias no deseables y potenciando el
crecimiento de las deseables como las bifidobacterias y bacterias
lácticas (Foekel et al. 2009). Al ayudar a mantener una microbiota
intestinal adecuada también ayudan a reforzar las defensas y a
mejorar las patologías derivadas de descompensaciones en la microbiota
intestinal. Además, también nos aporta inmunoglobulinas como la A, la M y la G
que actúan como marcador de aquellos microorganismos que podrían resultar
patógenos, facilitando así la tarea de nuestras defensas (Uniacke-Lowe et al. 2010,
Malacarne et al. 2002, Foekel et al. 2009). También encontramos en la leche de yegua
una serie de proteínas que, al ser digeridas, liberan péptidos bioactivos con
variadas propiedades. Entre las cuales destacamos las reguladoras de la
tensión arterial, antimicrobianas y antiinflamatorias (Uniacke-Lowe et al. 2010, Nagpal et
al. 2011).
3. Advertencias y especial atención
Fruto de la experiencia en pacientes y de la información existente sobre la
composición de la leche de yegua podemos indicar casos y situaciones
específicas en que hay que prestar atención.
Tumores de origen hormonal
La leche de yegua contiene estrógenos, es importante prestar atención en cada
caso específico y si es el caso, qué tratamiento de supresión hormonal se
utiliza.
Radioterapias
Desaconsejamos el consumo de leche de yegua a aquellos pacientes que estén
bajo tratamiento de radioterapia mientras dure el tratamiento. La leche de yegua
es antioxidante. Se aconseja dejar de tomar la leche de yegua un par de días
antes del tratamiento de radioterapia y volver a tomarla unos días más tarde.
Alergias específicas a la leche de yegua
No consumir leche de yegua si se ha detectado una alergia específica a ésta.
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4. Composición específica teórica
4.1 Composición específica
Los componentes en mayor proporción y/o más importantes de la leche se
muestran en las siguientes tablas junto con la cantidad de cada uno.
La segunda columna hace referencia a la cantidad total de cada componente en
la leche de yegua. La tercera es la columna comparativa en relación a las
cantidades totales presentes en la leche humana. Finalmente, la última columna
muestra la cantidad de cada componente presente en las proporciones
recomendadas para cada producto (descritos en el apartado 8).
Leche de yegua
TOTAL (g/kg) Leche humana TOTAL (g/kg)
Leche de yegua Dosis (mg)
Grasas 12,10 36,40 242
Ácidos grasos
saturados 6,75 19,95 135
Ácidos grasos
monoinsaturados 3,05 13,50 61
Ácidos grasos
poliinsaturados 2,3 2,9 46
Proteínas 21,4 14,2 428
Proteínas del suero 8,3 9,23 166
β-lactoglobulina 2,55 0 51
α-lactoalbúmina 2,37 2,92 47,4
Albúmina sérica 0,37 0,38 7,4
Inmunoglobulinas 1,63 32,6
IgG 0,38 0,046 7,6
IgA 0,47 1,3 9,4
IgM 0,03 0,033 0,6
Lactoferrina 0,58 1,89 11,6
Lisozima 0,87 0,27 17,4
NPN 0,381 0,38 7,62
Caseínas 13,56 4,97 271,2
αs1-caseína 2,4 0 48
αs2-caseína 0,2 0 4
β-caseína 10,66 4,5 213,2
κ-caseína 0,24 4,8
Lactosa 63,7 67 1274
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Leche de yegua
TOTAL (g/kg) Leche humana TOTAL (g/kg)
Leche de yegua Dosis (mg)
Vitaminas
A 0,00034 0,0004 0,0068
B1 0,00039 0,00000016 0,0078
B2 0,00011 0,00000035 0,0022
B3 0,00072 0,000002 0,0144
B5 0,00277 0,00000225 0,0554
C 0,0238 0,00000004 0,476
D 0,0000032 0,0015 0,00006
E 0,001342 0,048 0,02684
K 0,000043 0,0000012 0,00086
Aminoácidos libres 0,312 6,24
Ácido aspártico 0,006 0,0056 0,12
Treonina* 0,0357 0,0099 0,714
Serina 0,0897 0,0068 1,794
Ácido glutámico 0,0992 0,2215 1,984
Prolina 0,0161 0,0067 0,322
Glicina 0,0101 0,0083 0,202
Alanina 0,0066 0,0193 0,132
Cistina 0,0006 0,0035 0,012
Valina* 0,0167 0,0081 0,334
Metionina* 0,003 0,0018 0,06
Isoleucina* 0,0016 0,0029 0,032
Leucina* 0,0035 0,00695 0,07
Tirosina* 0,0028 - 0,056
Fenilalanina* 0,0057 - 0,114
Lisina* 0,0088 0,0149 0,176
Histidina* 0,0066 0,00186 0,132
Arginina 0,0019 0,0047 0,038
Cenizas 4,2 2,2 84
Calcio (Ca) 0,8 0,233 16
Fósforo (P) 0,562 0,14 11,24
Magnesio (Mg) 0,118 0,0317 2,36
Potasio (K) 0,384 0,404 7,68
Azufre (Na) 0,139 0,096 2,78
Cobre (Cu) 0,00023 0,00016 0,0046
Zinc (Zn) 0,0018 0,0008 0,036
Total sólidos 120 2400
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TABLAS: Comparación de la composición de la leche de yegua con la humana.
Cantidad de los componentes de la leche de yegua en una porción de 20ml.
* Aminoácidos esenciales
Fuentes en relación a la leche de yegua:
(Malacarne et al. 2002), (Uniacke-Lowe et al. 2010), (Dewey et al. 1984), (Csapó-Kiss et al. 1995),
(Schryven et al.2008), (Potocnik et al. 2011), (Marconi et al. 1998), (Csapó et al. 1995)
Fuentes en relación a la leche humana:
(Malacarne et al. 2002), (Agostini et al. 2000), (Garza et al. 1983), (Forsum et al. 1980), (Atkinson et al.
1980), (Gerbe-Medhin et al. 1976), (Lönnerdek et al. 1976), (Svanberg et al. 1979)
4.2 Características de algunos componentes
Es importante destacar que es toda la composición en conjunto de la leche de
yegua la cual se intuye que actúa con sinergia y por esto es un alimento muy
saludable. Aunque como se ha visto, la composición es muy amplia, sólo se
explicarán las proteínas del suero, ya que estas son muy propias de la leche de
yegua (y de la leche materna humana).
LACTOFERRINA
Esta proteína tiene capacidad antimicrobiana, cualidad
muy útil para la protección de nuestro organismo.
Proporciona protección contra bacterias patógenas
que colonizan o invaden las mucosas. Se utiliza como
preventivo de infecciones intestinales pediátricas. La
lactoferrina también se utiliza como antibiótico natural
como el lisozima o bien como antibióticos que sean
efectivos contra bacterias que han desarrollado resistencia a diversos
antibióticos diferentes (Drago, 2006).
La lactoferrina también presenta la capacidad para unir el hierro y transportarlo
al torrente sanguíneo. Además, tal como se ha dicho, presenta una actividad
antimicrobiana actuando contra las bacterias Gram positivas y Gram negativas,
pero también contra algunos virus y hongos. Esta capacidad de defensa puede
presentar varios mecanismos, uno es unir el hierro de los patógenos y de esta
forma poder destruirlos y ganarlo (Rodríguez-Franco et al. 2005).
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Con todo esto, la lactoferrina tiene un papel modulador de la respuesta
inmunológica. Estimula o inhibe diversos componentes hormonales y células
implicadas en la prevención y/o resolución de infecciones y de la inflamación
asociada a éstas (Drago-Serrano et al. 2008).
Hay que decir también, que aparte de tener actividad antimicrobiana, esta
proteína también presenta otras capacidades como inmunoreguladora,
antiinflamatoria, antioxidante y anticancerígena (Öztas et al. 2000).
Es por todas estas características que la lactoferrina es indicada para personas
con anemia (por la capacidad de obtención y transporte de hierro), pero
también para todos en general, ya que permite tener un refuerzo de defensas
muy útil frente a ciertos patógenos.
β-LACTOGLOBULINA
Esta proteína no está presente en la leche humana. Tiene calidades
antimicrobianas y antivirales. Es capaz de inhibir patógenos a nivel
gastrointestinal, de promover la respuesta inmunitaria del organismo y de
regular el desarrollo de la célula (Schanbacher et al. 1997).
Además, la β-lactoglobulina tiene la capacidad de transportar los minerales a
través de la pared intestinal y así facilitar la absorción. Facilita, también, la
absorción de las vitaminas liposolubles como es el retinol (vitamina A) (Apaza et al.
2011).
α-LACTOALBÚMINA
La proteína sérica α-lactoalbúmina presenta funciones muy
diversas beneficiosas para nuestra salud.
En referencia a los minerales, ésta proteína ayuda a la
absorción adecuada de éstos, sobretodo del calcio (Apaza et
al. 2011).
Es bactericida, y además ayuda a digerir la lactosa.
Otra calidad que tiene es que es una fuente de aminoácidos esenciales, como
el triptófano que actúa de precursor de la serotonina (neurotransmisor) y a partir
de ésta se sintetiza la melatonina, favorable actuando de reloj biológico (noche y
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día), en casos de insomnio, TDAH, Alzheimer, depresión, fatiga crónica,
fibromialgia, migrañas, colon irritable, osteoporosis y epilepsia.
La melatonina también es utilizada para el tratamiento contra el cáncer (de
mama, cerebro, pulmón, próstata, cabeza, cuello y gastrointestinal) así como
por los efectos secundarios que provoca el tratamiento con quimioterapia.
INMUNOGLOBULINAS
Estas moléculas son muy importantes para defender el organismo identificando
y neutralizando agentes extraños. Su correcto funcionamiento es esencial para
defender al cuerpo frente a diversos microorganismos patógenos.
Principalmente se encuentran tres tipos distintos de inmunoglobulinas (de cinco
que hay en total) en la leche de yegua. Estas son IgG, IgA e IgM.
La inmunoglobulina G es la única que tiene la capacidad de atravesar las
membranas biológicas. También es importante decir que a la hora de
producirse una respuesta inmunitaria secundaria, la mayoría de
inmunoglobulinas pertenecen a este tipo.
La inmunoglobulina A puede ser secretada por las mucosas y las glándulas
exocrinas, haciendo su acción más importante a la superficie de las mucosas y
líquidos biológicos (como el líquido cefalorraquídeo, la secreción bronquial, las
lágrimas, la saliva, etc.). De esta forma, este tipo de inmunoglobulina tiene la
capacidad de proteger los puntos más vulnerables del organismo: los ojos, la
boca, el aparato digestivo, el sistema respiratorio, la vagina, etc.
Finalmente, la inmunoglobulina M es la encargada de desarrollar un papel de
defensa a los espacios intravasculares, este tipo es el primer mecanismo de
inmunidad adaptativa que se forma (respuesta primaria).
Así pues, se puede apreciar que tener un refuerzo de defensas día a día puede
ser beneficioso para nuestro cuerpo ya que puede actuar con más efectividad
delante de patógenos.
ALBÚMINA SÉRICA
Esta proteína se encarga de transportar sustancias
como los ácidos grasos, aminoácidos, esteroides,
metales (como el calcio) y varios fármacos a través
de la sangre. Transportará estos componentes a los
órganos donde sean necesarios.
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LISOZIMA
La lisozima facilita la digestión de las caseínas, libera azúcares al
intestino que constituyen factores de crecimiento para algunas
bacterias esenciales a nuestra microbiota intestinal y tiene
actividad bacteriostática sobre numerosas especies bacterianas
(Alais, 2003).
Esta proteína tiene actividad antibiótica. Actúa sobre algunas bacterias y las
disuelve mediante la eliminación del componente polisacárido de sus paredes
celulares (Garg, 2010). Además, también tiene propiedades antiinflamatorias
(Shellhorn et al.1995). El hecho que tenga estas propiedades y que esté presente a
la saliva, ayuda a destruir las bacterias que pueden entrar junto con los
alimentos y de esta forma se protege una zona de muy fácil acceso para
patógenos.
Juega un importante papel en la regulación del cáncer. La lisozima es un
antioxidante que actúa como regulador o “freno” en la replicación del ADN
(como control en la multiplicación celular). Se enviará una señal que llegará
hasta el gen tp53 el cual es un supresor tumoral. De esta forma, este gen se
activará y llevará a cabo su acción antioncogénica o de supresión tumoral. Si no
hay lisozima, se podría activar la replicación del ADN de las células
cancerígenas y también los factores de crecimiento para éstas células. Cuando
esto sucede, éste déficit de lisozima puede originar tumores (malignos o
benignos)(Llacuna et al. 2012).
La presencia de lisozima en la leche de yegua nos es muy beneficiosa ya que
nos protege frente a de varias enfermedades infecciosas, pero también de
enfermedades no transmisibles. Es tan elevada la importancia de esta enzima
que hasta en China se está llevando a cabo un proyecto para conseguir leche
rica en lisozima a partir de vacas transgénicas, modificadas genéticamente (Yang
et al. 2011).
Actualmente también se utiliza el lisozima como protección en alimentos
procesados como el queso.
16
5. La leche de yegua eQuaid en distintas especialidades médicas
Es un alimento muy completo que puede aportar al organismo nutrientes muy
variados, desde vitaminas, minerales, proteínas y aminoácidos hasta péptidos
bioactivos, ácidos grasos poliinsaturados y microbiota intestinal.
A lo largo de las siguientes páginas se relacionan componentes de la leche de
yegua con patologías clasificadas por especialidades médicas. Mediante
testimonios, de una gran diversidad de gente, se ha visto que la leche de yegua
eQuaid puede ser de ayuda en estos diversos aspectos. A lo largo de las
explicaciones se van citando artículos científicos, los cuales se dan las
referencias completas al final.
Lo que se describe son indicios que día a día estamos más cerca de
convertirlos en evidencias médicas.
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5.1 Psicología
La leche de yegua mejora el estado anímico de la mayoría de los consumidores
debido al aporte en aminoácidos libres. Esta mejora se consolida gracias a una
de las proteínas presentes en esta leche que es la α-lactoalbúmina. Esta, entre
otras, es una fuente de aminoácidos esenciales como el triptófano y la tirosina
que actúan de precursores de la serotonina, un neurotransmisor que como
sabemos es muy importante para nuestro bienestar. (Uniacke-Lowe et al. 2010, Csapó-
kiss et al. 1995)
La serotonina es el neurotransmisor que utilizan las vías neuronales encargadas
del estado de ánimo, el hambre, el sueño y el deseo sexual. Con la aportación a
nuestro cuerpo de los aminoácidos esenciales que necesita para sintetizar este
neurotransmisor, todas estas vías neuronales tan relacionadas con las
sensaciones positivas tienen opción de funcionar y regularse mejor. Al regularse
la síntesis y la degradación de serotonina se regula el equilibrio dinámico de los
neurotransmisores, favoreciendo de esta forma al buen funcionamiento
nervioso. Además, esta leche consta de otros componentes que favorecen este
bienestar descrito. Contiene magnesio el cual está presente en la transmisión
nerviosa y proporciona energía a las neuronas además de ser relajante
muscular.
A parte de mejorar el estado de ánimo, nos aporta energía. Esta energía deriva
principalmente de la lactosa. Así, la energía que nos aporta deriva de azúcares y
no de grasas ya que tiene una cantidad pequeña de estas. Además, tiene una
alta variedad de vitaminas, minerales, ácidos grasos poliinsaturados (omega 3 i
omega 6) y aminoácidos esenciales (tanto en forma libre como formando parte
de proteínas). (Csapó et al. 1995, Malacarne et al. 2002, Haddad et al. 2011).
Con todo esto, se ha visto que la leche de yegua puede ayudar a las personas
con el estado de ánimo bajo, con depresión y con problemas como el estrés y
la ansiedad.
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5.2 Digestología
La leche de yegua puede ayudar a mejorar ciertos problemas digestivos
derivados de la desestabilización de la mircobiota intestinal. Puede actuar como
prebiótico y probiótico, la combinación de lisozima y la lactoferrina limitan el
crecimiento de microorganismos no-deseables y favorecen el crecimiento de
bifidobacterias y bacterias lácticas como el Lactobacillus plantarum y el
Lactobacillus salivarius.
Tiene un porcentaje alto de lisozima, que es una proteína antimicrobiana que
limita el crecimiento de bacterias causantes de infecciones intestinales y diarrea.
Tiene actividad bacteriostática, contra las enterobacterias y bacterias Gram
positivas. También como se ha dicho favorecen el crecimiento de otras
bacterias que son beneficiosas para el tracto gastrointestinal liberando azúcares
al intestino que constituyen factores de crecimiento para ellos (Alais, 2003).
El efecto antiinflamatorio de algunos de los péptidos bioactivos derivados de la
digestión de las proteínas de la leche puede jugar un papel importante en el
alivio de la inflamación intestinal asociada a diversas patologías digestivas como
colon irritable. Cabe tener en cuenta también los posibles efectos reguladores
de la quimiotaxi y el estallido oxidativo responsables de la inflamación por parte
del lisozima y los ácidos grasos omega 3 y omega 6 (Foekel et al. 2009). Estos
ácidos grasos poliinsaturados (omega 3 y omega 6) tienen también una función
antiinflamatoria igual o más importante que los péptidos bioactivos, así, también
pueden representar una gran ayuda en estos casos de patologías digestivas.
En el caso concreto de la enfermedad de Crohn, por ejemplo, destacar que el
contenido de butirato y de bacterias productoras de butirato que tiene la leche
de yegua puede ayudarnos a tener en buen estado los colonócitos y evitar
agravamientos de la enfermedad.
Por lo que hace las personas intolerantes a la lactosa, esta leche tiene algunas
ventajas. Lleva bacterias probióticas productoras de la enzima lactasa que
ayudan a metabolizar la lactosa. Se intuye que el actual incremento de
intolerantes a la lactosa es debido, en parte, al abuso de los antibióticos que
han dejado las microbiotas intestinales descolonizadas de bacterias
productoras de lactasa. Es por eso que una adecuada recolonización puede
favorecer a la mejora de la intolerancia a la lactosa. Así, esta función estimula la
lactasa residual que aún queda en los enterócitos de la persona, potenciando la
acción y mejorando la intolerancia a medida de ir consumiendo esta leche.
Además, contiene magnesio, importante para tratar trastornos intestinales como
la enfermedad del colon irritable.
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5.3 Pediatría
El hecho de que la leche de yegua eQuaid sea un alimento tan completo, se
puede considerar uno de los mejores alimentos que se les puede dar a los
niños.
Se ha visto que puede ayudar a los niños especialmente a reforzar el sistema
inmunitario, en trastornos digestivos, flatulencias y problemas dermatológicos.
La información más detallada se encuentra al apartado de inmunología,
digestología y dermatología.
Por lo que hace en los bebés que no sean amamantados por la madre, la leche
de yegua les puede proporcionar componentes (sobretodo proteínas) que
también están presentes en la leche humana materna, pero que son difíciles de
encontrar en otras leches. Es muy importante que estos bebés sean
alimentados con leche el máximo de parecida a la leche materna. Por este
motivo aconsejamos complementar la leche maternizada con leche de yegua
eQuaid para asegurar que el bebé recibe todos los nutrientes que necesita.
A medida que el niño va creciendo, la leche le puede ayudar a crecer sano,
evitando problemas de desnutrición.
5.4 Dermatología
Personas con afectaciones de piel que han probado la leche de yegua han visto
como mejoraban sus problemas dérmicos, así pues, esta leche puede tener un
papel importante en la dermatología. Aunque no se sepa exactamente el
mecanismo y el porqué de esta mejora, se ha visto que con una pequeña dosis
diaria y con los productos de cosmética hechos con leche de yegua, los casos
de psoriasis, pieles atópicas, eczemas, etc. notan una clara mejoría.
Parece que parte de los beneficios vistos en casos de dermatitis atópica se
pueden deber al efecto regulador de la microbiota intestinal que tiene la leche
de yegua.
En casos de psoriasis se ha visto que después de un consumo continuado de
leche se reduce la virulencia de los brotes de la enfermedad así como el área
afectada al inicio del brote. Es preciso decir, pero, que no es una cura definitiva.
La leche de yegua tiene varios componentes que se pueden relacionar con la
cualidad que tiene para mantenernos la piel sana. Consta de la mayoría de
20
aminoácidos, tanto libres como en las proteínas, de los cuales podemos
destacar la serina que es un hidratante para la piel y la cistina la cual tiene un
gran contenido en azufre, que es indicado para trastornos cutáneos.
También cabe resaltar que contiene una buena cantidad de vitaminas que
ayudan al funcionamiento de nuestro organismo. Para seguir con el caso que
nos ocupa, hace falta resaltar la vitamina A o retinol que contribuye en la salud
de la piel y la vitamina C o ácido ascórbico que ayuda a prevenir o mejorar
afecciones de la piel. Ayuda a mantener el colágeno saludable a la piel y reparar
tejidos dañados.
5.5 Inmunología
La leche de yegua puede tener un papel muy importante en el sistema
inmunitario debido a algunos de los componentes principales. Primeramente,
cabe decir que esta leche lleva Inmunoglobulina G, Inmunoglobulina A e
Inmunoglobulina M.
Como se ha dicho anteriormente, la IgG es la única que tiene capacidad para
atravesar membranas biológicas. En el momento en que se produce una
respuesta inmunitaria secundaria, la mayoría de inmunoglobulinas pertenecen a
este tipo. La IgA puede ser secretada por las mucosas y las glándulas
exocrinas, haciendo su acción más importante en la superficie de las mucosas y
líquidos biológicos. La IgM es la encargada de desarrollar un papel de defensa
a los espacios intravasculares.
A parte de las inmunoglobulinas descritas, es preciso nombrar también a las
proteínas del suero que posee la leche de yegua eQuaid.
La lactoferrina tiene actividad antimicrobiana. Así, proporciona protección contra
bacterias patógenas que colonizan las mucosas. Es utilizada como antiséptico
natural (Drago, 2006). Presenta actividad antimicrobiana actuando contra
determinadas bacterias Gram positivos y Gram negativos, pero también contra
algunos virus y hongos (Rodríguez-Franco et al. 2005). Tiene un papel modulador de la
respuesta inmunológica. Estimula o inhibe diversos componentes hormonales y
celulares implicados en la prevención y/o resolución de infecciones y de la
inflamación asociada a éstas (Drago-Serrano et al. 2008).
La lisozima también tiene actividad antiséptica. Actúa sobre algunas bacterias y
las disuelve mediante la eliminación del componente polisacárido de sus
paredes celulares (Garg, 2010). Además, tiene actividades antiinflamatorias (Shellhorn et al. 1995).
21
La β-lactoglobulina tiene propiedades antimicrobianas y antivirales. Es capaz de
inhibir patógenos a nivel gastrointestinal, a promover la respuesta inmunitaria
del organismo y regular el desarrollo de la célula (Schanbacher et al. 1997).
La α-lactoalbúmina es bactericida, tiene un efecto antimicrobiano y es un agente
inductor de la apoptosis.
A partir de las proteínas de la leche, al ser diferidas, liberan péptidos bioactivos
con muchas variadas propiedades. Entre las cuales se destacan las reguladoras
de la tensión arterial, antimicrobianas y antiinflamatorias (Uniacke-Lowe et al. 2010,
Nagpal et al. 2011).
Las proteínas descritas contienen los aminoácidos imprescindibles para el
correcto funcionamiento del organismo, pero además, contiene aminoácidos
libres de más fácil absorción. Entre ellos, referente a la inmunología destacan
los siguientes:
El ácido aspártico ayuda al sistema inmunitario ya que provoca una producción
más elevada de inmunoglobulinas y anticuerpos. La serina es útil para el
correcto mantenimiento de un sistema inmunológico saludable y ayuda en la
producción de anticuerpos. La lisina tiene grandes propiedades antivíricas y
mejora la función inmunitaria y la producción de anticuerpos. La histidina es
necesaria para la producción de glóbulos rojos y blancos en sangre. Mejora la
respuesta inmunitaria.
La leche de yegua tiene una variedad importante de vitaminas de las cuales
destacan, en relación al sistema inmunitario, las que se muestran a
continuación:
La vitamina A o retinol aumenta la función inmunitaria. La vitamina B2 o
riboflavina regula el crecimiento de los glóbulos rojos y ayuda a mantener un
sistema inmunitario fuerte. La vitamina B5 o ácido pantoténico es requerido para
la formación de anticuerpos, minimizar el efecto tóxico de algunos antibióticos y
ayudar a cicatrizar las heridas. La vitamina C o ácido ascórbico ayuda a
combatir enfermedades víricas y bacterianas. La vitamina E o tocoferol regula la
unión de las plaquetas y aumenta la respuesta inmunológica, por ejemplo
estimulando los eritrocitos para que adquieran más resistencia.
Así pues, no es la acción de cada componente individualmente, sino la suma de
todos estos que nos proporciona una ayuda para el organismo frente a diversos
patógenos.
22
5.6 Hematología
Se ha visto que personas con determinadas alteraciones hematológicas, tomar
leche de yegua les puede suponer una mejora.
Primeramente, comentar el caso de las anemias. A parte del contenido en hierro
que aporta la leche, hay otro componente que incluso es más importante en
este caso. La leche de yegua eQuaid lleva la proteína llamada lactoferrina o
lactotransferrina. Esta proteína tiene la capacidad para fijar el hierro y
transportarlo por el torrente sanguíneo (Rodríguez-Franco et al. 2008). El hierro fijado a
la proteína deja de estar a libre disposición de los posibles patógenos que lo
necesitan para su metabolismo, inhibiendo así el crecimiento de los mismos. De
esta forma se explica su acción bacteriana y parece ser que también antivírica.
La lactoferrina es resistente al pH ácido del estómago.
Algunos de los componentes de la leche pueden ayudar a estabilizar los niveles
de azúcar en sangre como por ejemplo los aminoácidos alanina y valina.
Por lo que hace la regulación de los niveles de colesterol, en este caso el
aminoácido metionina puede ayudar a evitar la acumulación. Las grasas
poliinsaturadas como la omega 3 y la omega 6 presentes a la leche, sin duda,
proporcionan una ayuda a la hora de bajar el colesterol en casos de
colesterolemia. Es necesario prestar atención también a algunas de las
vitaminas que proporciona. La vitamina B3 o niacina ayuda a disminuir los
niveles de colesterol y triglicéridos, estabiliza la glucosa en sangre, favorece la
circulación y ayuda a reducir la presión arterial. La vitamina B5 o ácido
pantoténico ayuda también a reducir los niveles de colesterol en sangre y a
disminuir los niveles de tensión arterial. Finalmente, la vitamina E o tocoferol
ayuda a combatir el colesterol y los triglicéridos y participa en la protección
contra la anemia.
Aparte, otro de los papeles importantes que puede tener la leche de yegua es
facilitar la absorción de algunos de los compuestos que nuestro organismo
necesita. Un caso muy claro es el del calcio, el cual conseguimos absorberlo
mejor gracias a que viene acompañado de la vitamina D, la lactosa y los
estrógenos. Así, una dieta que cumple los requerimientos de calcio de nuestro
cuerpo, además de otras cosas, puede prevenir las enfermedades como la
hipertensión arterial. (Hernández et al. 1999)
23
5.7 Oncología
La leche de yegua puede tener unos beneficios interesantes en tratamientos
oncológicos debido a ciertos componentes presentes a la leche. Primeramente
se muestran las proteínas del suero.
La lactoferrina o lactotransferrina es una proteína inmunoreguladora,
antiinflamatoria, antioxidante y anticancerígena (Öztas et al. 2000).
La melatonina que se sintetiza a partir de los aminoácidos esenciales de la
proteína α-lactoalbúmina como el triptófano, se utiliza para el tratamiento contra
el cáncer, así como para los efectos secundarios que provoca el tratamiento con
quimioterapia.
La lisozima tiene un rol importante en la regulación del cáncer. Es un
antioxidante que actúa como regulador o “freno” en la replicación del ADN
(como control celular). Se envía una señal que llega hasta el gen tp53, el cual se
transcribe en la proteína p53 que es un supresor tumoral. De esta forma, este
gen se activa y lleva a cabo su acción antioncogénica o de supresión tumoral. (Llacuna et al. 2012)
A parte de estas proteínas descritas, también es importante nombrar la vitamina
C i la E, las cuales son antioxidantes como la lisozima. La vitamina E potencia la
acción del selenio en tratamientos para combatir el cáncer.
La composición bacteriana probiótica de la leche de yegua puede jugar un
papel importantísimo, sobre todo por el contenido en bacterias del grupo
Bifidobacterium y Faecalobacterium. Estas son bacterias que degradan hexosas,
pentosas y alcoholes hasta acetato, propionato y butirato (AGCC) (ácidos
grasos de cadena corta).
El butirato también está descrito en la bibliografía actual por su capacidad
anticancerígena. Aunque aún no se conocen con profundidad los mecanismos
de actuación, se sabe que el butirato inhibe las células tumorales del colon, y
por el contrario estimula el crecimiento de sus células epiteliales.
24
Estamos pendientes de demostrar, a través de estudios clínicos, estas
calidades de la leche de yegua, pero sí que a través de estudios
observacionales se ha demostrado que puede ser una ayuda importante para
mejorar la recuperación después de tratamientos con quimioterapias
reduciendo los efectos secundarios. Los efectos secundarios de la
quimioterapia comprenden, entre otros, náuseas, falta de hambre y una gran
bajada de las defensas. Es sobre estos efectos secundarios que la leche de
yegua puede intervenir.
La leche de yegua induce la síntesis de serotonina (debido a su alto contenido
en triptófano y tirosina) y así ayuda a mejorar el estado de ánimo del paciente
ayudándolo también a recuperar el hambre. La regeneración de la microbiota
intestinal puede mejorar la regulación del tránsito digestivo y así ayudar a reducir
el malestar y las náuseas.
El alto contenido de lisozima, lactoferrina, IgA y péptidos bioactivos hacen que
la leche de yegua eQuaid sea de gran ayuda a la hora de reforzar las defensas.
Hay que tener presente que en tumores de origen hormonal, en los cuales se
estén haciendo tratamientos de supresión hormonal, la leche de yegua lleva
estrógenos conjugados.
Comentar también que en el caso de tratamientos con radioterapias se debe
prestar atención porqué la leche de yegua tiene antioxidantes naturales.
Tumores de origen hormonal
Hay que tener presente que en tumores de origen hormonal, en los cuales se
estén haciendo tratamientos de supresión hormonal, la leche de yegua lleva
estrógenos conjugados, es importante prestar atención en cada caso específico
y si es el caso, qué tratamiento de supresión hormonal se utiliza.
Radioterapias
Desaconsejamos el consumo de leche de yegua a aquellos pacientes que estén
bajo tratamiento de radioterapia mientras dure el tratamiento.
La leche de yegua es antioxidante. Se aconseja dejar de tomar la leche de
yegua un par de días antes del tratamiento de radioterapia y volver a tomarla
unos días más tarde.
25
5.8 Ginecología
Se ha visto que la leche de yegua eQuaid puede ser muy útil para mujeres con
menopausia. En el momento en que las mujeres entran en este proceso, dejan
de producir la misma cantidad de estrógenos que cuando estaban en edad
fértil. Esta es una de las razones por las cuales es difícil absorber igual de bien
el calcio ya que los estrógenos facilitan esta acción. Para prevenir problemas
óseos, solucionarlos o solo para que no se agraven, la leche de yegua puede
ser de ayuda. Esta, como se ha comentado en el apartado de hematología,
tiene estrógenos, vitamina D y lactosa. Estos tres componentes ayudan al
organismo a absorber el calcio con mejor efectividad.
A partir de diversos testimonios también se ha visto que la leche de yegua
puede ayudar a la hora de regular los sofocos típicos de este periodo.
5.9 Geriatría
En los pacientes que se engloban dentro del campo de la geriatría, se ha visto
que la leche de yegua eQuaid les puede ser muy efectiva. Son personas que
perciben rápido sus beneficios; en un primer momento les ayuda a subir el
estado anímico (más detallado en el apartado de psicología). Seguidamente les
da energía derivada de los azúcares de rápida metabolización como la lactosa.
La leche de yegua actúa internamente ayudando a que el organismo pueda
acceder a todos aquellos nutrientes que le sean necesarios como vitaminas,
minerales, proteínas… Parece que además, también ayuda a absorber mejor los
nutrientes de la dieta, que ya son más difíciles de absorber debido a la edad.
Las especialidades descritas son solo algunas en las cuales la leche de yegua
puede representar beneficios día a día. Se está estudiando y valorando en qué
otros aspectos puede influir la leche de yegua eQuaid. Está claro que es uno de
los mejores alimentos que podemos incorporar a la alimentación. Cada vez
estamos más cerca de conseguir que estos indicios descritos pasen a
evidencias dentro del mundo médico.
26
6. Situación de investigación biomédica
Si bien la leche de yegua se ha estado utilizando desde hace mucho tiempo
como remedio natural en muchas patologías y como vigorizante, se ha hecho
muy poca investigación al respeto.
Hay numerosos autores que han publicado estudios sobre la composición de la
leche de yegua y como ésta puede servir como complemento en nutrición
humana, sobretodo en bebés, gente mayor y convalecientes (Malacarne et al. 2002,
Uniacke-Lowe et al. 2010, Csapó-Kiss et al. 1995, Haddad et al. 2011, Foekel et al. 2009). Su
digestibilidad por parte de enzimas digestivas humanas ha estado bien
estudiada, así como también sus semejanzas con la leche humana. Estos
estudios han concluido que la leche de yegua tiene una gran semejanza con la
leche humana, por lo que respecta a la composición lipídica y proteica y la
forma como es digerida por parte de enzimas digestivas humanas (Inglingstad et al.
2010).
Se ha valorado la respuesta alérgica en distintos individuos alérgicos a la leche
de vaca. Fruto de estos estudios se ha destacado la baja respuesta alérgica
que provoca la leche de yegua en humanos (Maldonado et al. 2005, Businco et
al. 2000), aunque también se han registrado y publicado casos puntuales en los
que la leche de yegua ha inducido una respuesta alérgica en algunas personas
(Gall et al. 1995).
Otros autores se han centrado en los efectos inmunomoduladores de la leche
de yegua. Algunos han concluido que determinados componentes presentes en
la leche de yegua regula ligeramente la respuesta de las células de defensa,
además de tener un cierto efecto regulador de la respuesta inflamatoria (Foekel
et al. 2009). Aún así, reconocemos que se ha hecho muy poca investigación al
respeto y que son necesarios más estudios para poder aceptar o bien descartar
definitivamente los efectos de refuerzo de defensas que se han atribuido desde
hace mucho tiempo a la leche de yegua. Si bien aceptamos que los contenidos
de lisozima, lactoferrina e inmunoglobulinas suponen una buena base para
creer que se tendrían que dar estos efectos.
27
Muy pocos han estudiado recientemente sus beneficios en patologías
concretas. Entre los cuales hay un estudio clínico realizado con pacientes que
sufren dermatitis atópica, en los que se ha valorado un índice de afectación de
la atopia y la concentración de bifidobacterias y bacterias lácticas en heces
(Foekel et al. 2009). No obstante, a finales de los años 70 y principios de los 80
se hizo cierto volumen de investigación que hoy en día es difícil de encontrar, ya
que no se encuentra en versión digital y no está escrita en inglés sino que se
encuentra escrita en alemán y ruso en bibliotecas de universidades alemanas y
rusas respectivamente. Aún así, de sus contenidos han trascendido beneficios
sobre la salud humana en artículos más recientes publicados en estos países,
destacando especialmente beneficios en patologías hepáticas mediante la
regulación de la actividad de las transaminasas encontradas por Il’iasov &
Shaǐkhiev 1968. Si bien los artículos que citan dichos beneficios no especifican
los mecanismos de acción.
Fruto del conocimiento basado en artículos científicos, de la experiencia en
múltiples pacientes y de los indicios que muestran algunos artículos basados
principalmente en la composición de la leche, la asociación eQuaid Research,
reforzada por organismos como universidades, hospitales y otros profesionales
saca adelante la investigación por lo que a las propiedades de la leche de
yegua se refiere y las patologías en las cuales puede influenciar.
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7. Formatos de leche de yegua eQuaid
Desde la asociación eQuaid Research se han clasificado tres tipos de leche diferentes
según las calidades y propiedades de cada una de ellas para las diferentes necesidades
de los consumidores. Las leches se recogen de diferentes productores y granjas
europeas y dependiendo de las condiciones de cada granja y de los procesos de
conservación que se utilizan, se clasifican en el grupo más adecuado en relación a las
calidades y propiedades.
eQuaid complet
Actualmente es la leche de más calidad y con más propiedades. Tiene el
mejor origen y el mejor proceso de conservación posible. Mantiene la
microbiota de yeguas de alta montaña. Es la más recomendada,
especialmente para problemas digestivos o relacionados con la microbiota
intestinal. Certificada por eQuaid Research.
eQuaid activ
Especialmente indicada para hacer un mantenimiento, para bebés y
deportistas. Está certificada por eQuaid Research.
eQuaid bio
Leche que proviene de granjas con certificado ecológico bio con
propiedades y aplicaciones similares a eQuaid activ.
Dosis recomendadas
Se recomienda empezar con una cantidad de 2 gramos de leche en polvo (la equivalente
en la leche congelada son 20ml). Se pueden aumentar las dosis en caso de necesidad.
Para la dosis de mantenimiento en general se recomienda 1g o 500mg diarios. No hay
ninguna contraindicación en tomar la leche de forma continuada, al contrario, es un
alimento muy saludable. Se puede consumir como un alimento habitual, no hace falta
hacer pausas ni períodos de reposo.
Es preciso revisar la página 7 donde se muestran las advertencias y contraindicaciones
para casos en concreto (como en tumores de origen hormonal o radioterapias).
Cosmética eQuaid
La cosmética eQuaid se ha creado para ayudar a mantener una piel sana y para
problemas dermatológicos como pieles atópicas, psoriasis… Ayuda a la protección y
aporta los elementos necesarios para facilitar una regeneración celular rápida y efectiva.
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8. Colaboradores científicos
Dra. M.Mercè Olivé - Especialista en Analisis Clinics . Labco - General lab Sabadell.
Dra. M.Angels Calvo Torras - Catedràtic de Microbiologia - Universitat Autònoma de Barcelona.
Dra. Gisela Grimé Vila - Microbiologia - Universitat Autònoma de Barcelona.
Dr. Luis Eduardo Monroy - Cardioleg – Clinica Pilar Sant Jordi Barcelona
Dr. Xavier Aldeguer - Digestoleg – Hospital Trueta Girona
Dr. Ángel González - Hematoleg – Clinica Pilar Sant Jordi
Dr. Jaume Pérez Payarols - Investigacio i innovació – Hospital Sant Joan de Deu
Dra. Marta Martin - Digestologia – Hospital Brogi
30
10. Referencias
Businco, L.; Giampietro, P.G.; Lucenti, P.; Lucaroni, F.; Pini, C.; Di Felice, G., Iacovacci, P.; Curadi, C. and Orlandi, M.; Allergenicity of mare’s milk in children with cow’s milk allergy. Journal of Allergy and Clinical immunology. 2000 1031-1034
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Notas:
32
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