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1
ATENCIÓN INTEGRAL A LA PRIMERA INFANCIA
Convenio 529 de 2013
ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN EN QUE VIVEN LAS MUJERES GESTANTES,
LACTANTES CON SUS NIÑOS Y NIÑAS EN CENTROS DE RECLUSIÓN EN
COLOMBIA.
DOCUMENTO FINAL DE RECOMENDACIONES PARA MEJORAR EL
CONTEXTO PARA LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS DE PRIMERA INFANCIA QUE
PERMANECEN CON SUS MADRES EN LOS CENTROS CARCELARIOS, CON
BASE EN LA RUTA INTEGRAL DE ATENCIÓN DE LA ESTRATEGIA DE CERO A
SIEMPRE.
ALDEAS INFANTILES SOS COLOMBIA
Bogotá, Abril de 2014.
2
Contenido
presentación ............................................................................................................................ 4
1. MARCO DE REFERENCIA ........................................................................................ 7
1.1. EXPERIENCIAS INTERNACIONALES Y NACIONALES DE NIÑOS Y
NIÑAS DE PRIMERA INFANCIA EN CENTROS PENITENCIARIOS O RECLUSIONES.
7
1.2. DOCUMENTACIÓN BASES POLITICAS Y LEGISLATIVAS EN
COLOMBIA 13
1.3. ...................................................................................................................................... 14
1.4. METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN .................................................... 14
2. SITUACIÓN DE LA ATENCIÓN INTEGRAL A LA PRIMERA INFANCIA EN
ENTORNOS CARCELARIOS DESDE LOS ESTRUCTURANTES ........................................ 17
2.1. Descripción general de la situación ................................................................. 20
2.1.1. Cuidado y Crianza .......................................................................................... 31
2.1.2. Salud, Alimentación y Nutrición ................................................................... 42
2.1.3. Educación Inicial ............................................................................................. 55
2.1.4. Recreación ...................................................................................................... 61
2.1.5. Participación y construcción de ciudadanía. .............................................. 65
2.2. Caracterización de cada una de las Reclusiones ......................................... 72
2.2.1. Reclusión Mujeres de Bogotá ..................................................................... 72
2.2.2. COJAM Reclusión de Mujeres Jamundí ..................................................... 76
2.2.3. Reclusión de Mujeres de Bucaramanga ..................................................... 79
2.2.4. Reclusión de Mujeres de Cúcuta ................................................................. 82
2.2.5. Reclusión de Mujeres de Pereira ................................................................. 85
2.2.6. COIBA Reclusión DE Mujeres de Ibagué ................................................... 89
3
2.2.7. Reclusión de Mujeres de Popayán .............................................................. 92
2.2.8. COPED Reclusión de Mujeres de Medellín ............................................... 94
RECOMENDACIONES PARA MEJORAR LA ATENCIÓN INTEGRAL PARA LOS
NIÑOS Y LAS NIÑAS DE PRIMERA INFANCIA EN CENTROS DE RECLUSIÓN ............ 98
4
PRESENTACIÓN
El presente análisis tiene el propósito de contribuir con información referida a la
situación de los niños y niñas que viven con sus madres en las Reclusiones de Mujeres
en Colombia, es un insumo importante en el proceso de implementación de la política
pública de infancia y adolescencia, además, se constituye en una herramienta útil para
evidenciar el nivel de cumplimiento de los derechos de los niños y niñas en éstos entornos
e identificar desigualdades en el ámbito de la aplicación de las atenciones a esta
población, en el marco de la movilización de la arquitectura institucional bajo la estrategia
de Atención Integral para la Primera Infancia “ De Cero a Siempre”.
La Investigación surge en el marco del plan de acción del Convenio 529 de 2013, en
el que a través de una alianza público-privada se ejecutaron acciones en pro de la primera
infancia, Uno de los objetivo de esta alianza era fortalecer la Ruta Integral en los
territorios, de ahí surgen subprocesos para el desarrollo de pilotos, desde la operación de
Aldeas Infantiles SOS Colombia y con el respaldo de una mesa técnica conformada por ,
la Presidencia de la República, el ICBF, el INPEC el Ministerio de Salud y el Ministerio de
Educación, en ese contexto se desarrolla la investigación: “ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN
EN QUE VIVEN LAS MUJERES GESTANTES, LACTANTES CON SUS NIÑOS Y NIÑAS
EN CENTROS DE RECLUSIÓN EN COLOMBIA”, esta iniciativa no se habría podido
desarrollar sin el apoyo de todo el equipo humano e institucional de las organizaciones
pertenecientes a este subproceso y particularmente a los Centros del INPEC, sus
direcciones, profesionales y a las mujeres privadas de libertad que participaron con sus
relatos y disposición para las actividades.
La investigación partió desde la documentación, recolección de información en
visitas de campo y el posterior análisis de los hallazgos, de esta forma se desarrollaron
tres productos: el primero consistió en una propuesta de evaluación de la dotación de los
espacios en los centros carcelarios donde viven los niños y niñas con sus madres y
mujeres gestantes, en la que se reporta todo el análisis de los entornos y sugerencias
desde el campo de la Arquitectura; segundo, una propuesta de sensibilización y
cualificación elaborada por la profesional en Gestión pedagógica tomando como base los
resultados de la investigación y por último, el presente documento que contiene las
recomendaciones para mejorar el contexto en el que habitan los niños y niñas que se
encuentran con sus madres en centros de reclusión y mujeres gestantes desde la Ruta
Integral de Atención de la estrategia de Cero a Siempre.
En este texto se encuentra un marco referencial desde la revisión de la situación en
Iberoamérica, la legislación y políticas en Colombia, la metodología avanzada en la
investigación.
5
En seguida presenta el apartado de análisis partiendo de un contexto general para
posteriormente hacer un análisis por cada centro de reclusión, los resultados generales de
la investigación muestran que la arquitectura de los lugares corresponde a instituciones
de control y fuertes esquemas de disciplina, y aunque se parte de que los niños y niñas no
son prisioneros, viven el esquema generado por la prioridad en seguridad en los centros
penitenciarios y reclusiones, sufriendo las consecuencias propias del sistema carcelario
en Colombia.
La situación de los niños y las niñas se enmarca en un rango de vulneración de
derechos, hecho que precisa la necesidad de un estudio de mayor profundidad para la
primera infancia desde la pre concepción hasta los tres años de vida que es la edad límite
trazada en Colombia para permanecer en la cárcel con sus madres, así mismo para
conocer lo que sucede cuando dejan este contexto y poder formular políticas públicas
para la restitución y la garantía de los derechos de la primera infancia en el país.
Esta investigación se limitó a estudiar reclusiones que tienen el programa de ICBF e
INPEC, reconociendo el trabajo de estas instituciones, es necesario continuar trabajando
para que la atención integral sea un trabajo intersectorial desde el reconocimiento de los
niños y niñas como sujetos de derechos, buscando garantizar el acceso pleno a las
realizaciones de sus derechos humanos y en un estudio a nivel nacional de todos los
centros de reclusión aunque no cuenten con el convenio entre estas entidades.
Las condiciones de cumplimiento de la Ruta Integral de Atención a la Primera
Infancia, se analizan en primer lugar como una importante herramienta para la garantía de
derechos de los niños y niñas; por esta razón el análisis se aborda desde los
estructurantes como uno de los organizadores de la Ruta, cada uno se profundizará en
este informe, sin desconocer lo crucial de cada organizador de la ruta.
La situación en los centros de reclusión debe manejarse desde la responsabilidad
en la etapa de la pre concepción; todos los cuidados y facilidades que tienen garantizarse
en la gestación para las mujeres privadas de libertad desde sus procesos penales,
condenas y en las reclusiones. La verificación de la idoneidad del contexto en el primer
mes de vida del niño, la niña y hasta los seis meses que pueden estar en la cárcel o fuera
de ella (dado que en Colombia existe una ley que permite solicitar suspensión de la pena
por maternidad hasta esa edad); y desde los seis meses a los tres años, etapa
fundamental en el desarrollo en la que viven en contextos limitantes como los que
caracterizan a los centros penitenciarios, y finalmente los niños y niñas de tres a seis
años, que quedan sin la protección del programa, de esta población no se obtuvieron
fuentes precisas sobre su situación.
6
Los destinatarios, que son aquellas personas que conviven con los niños y las niñas
en este caso, debería considerarse a sus madres, otras mujeres reclusas, personal del
sistema penitenciario, y en caso de que exista una red de apoyo, las personas que la
componen, además, de la atención directa a niños y niñas con madres o padres privados
de libertad.
Los entornos se analizan con mayor detenimiento en la propuesta de evaluación de
dotaciones, la conclusión general es que la cárcel su convierte en su hogar; el Centro de
Desarrollo Infantil cuando existe es su entorno educativo, solo 8 cárceles del nivel
nacional cuentan con este programa, del orden departamental, municipal o distrital se
desconoce la situación; el Entorno Salud es un gran reto, se reconoce que cuentan con la
afiliación al régimen de seguridad social pero además de las limitaciones propias del
sistema de salud en Colombia no hay procedimientos de traslado efectivo y oportuno para
la atención en esta materia; y el entorno de espacios públicos algunos espacios de
convivencia en la cárcel tratan de asemejarse, sin embargo, según los hallazgos de la
investigación las niñas y los niños no acceden a espacios propios de la cultura y pocos
cuentan con tutores que les brinden oportunidades significativas y continuas de conocer
entornos diferentes a la cárcel.
Se espera un abordaje de todas aquellas instituciones del Estado y el Sector no
gubernamental, para generar el reconocimiento de la situación que viven los niños y niñas
porque al ser hijos o hijas de mujeres privadas de libertad, se encuentran en una situación
de vulnerabilidad que requiere una atención especializada. Quienes tienen el beneficio de
estar en el programa de ICBF e INPEC cuentan con algunas acciones que buscan aportar
a su desarrollo integral y aunque limitadas, se observa que propenden por garantizarles la
atención, pero cada madre asegura tener más de un hijo o hija y de la situación de estos
otros niños o niñas, no hay información precisa.
Finalmente, el documento cierra con algunas recomendaciones elaboradas por el
equipo de investigación1 de Aldeas Infantiles SOS Colombia partiendo de una mirada
construida en el acercamiento a estos contextos, desde los que se identificaron algunos
retos para ser asumidos en trabajos de mayor cobertura y tiempo en el tema del análisis
1 Dirección General: Ángela Rosas. Dirección de Gerencia: María Inés Cuadros. Coordinación: Marcela
Forero. Profesional de Gestión: Andrea Salgado. Pedagoga. Investigadoras: Nubia Rosas. Psicóloga. Ivon Porras. Psicóloga. Sandra Rincón. Arquitecta. Asistente de Investigación: Ximena Alcorro.
7
de la situación en que viven las mujeres gestantes, lactantes con sus niños y niñas en
centros de reclusión en Colombia.
1. MARCO DE REFERENCIA
1.1. EXPERIENCIAS INTERNACIONALES Y NACIONALES DE
NIÑOS Y NIÑAS DE PRIMERA INFANCIA EN CENTROS
PENITENCIARIOS O RECLUSIONES.
Se realizó una búsqueda a través de internet sobre la situación de niños y niñas de
primera infancia hijos e hijas de privados de libertad, se logró la consulta de 20 países de
Iberoamérica, los resultados indican que se presenta una limitación de número de fuentes
que traten el tema, no existe mucha información al respecto de las políticas manejadas en
cada país para los niños y niñas de primera infancia que viven con sus madres en las
cárceles, para ampliar la información se tomó como referencia la situación de las mujeres,
o noticias relacionadas con la situación en cárceles, de esta forma se obtuvieron reportes
periodísticos en su gran mayoría, reportes de fundaciones u ONG's, algunas tesis de
grado y dos reportes de entidades responsables en cada país de la situación de derechos
humanos.
Dado que el contexto de las noticias periodísticas suelen estar vinculadas a un
evento nacional, se encontraron referencias en tiempos concretos, teniendo fuentes
desde el 2003 hasta el 2013, con falta de datos completos en todos los países o fuentes
de verificación de la información obtenida.
A continuación se presenta una tabla de resumen de los países consultados:
PAIS EDAD LÍMITE
POBLACIÓN
DE NIÑOS Y NIÑAS.
SERVICIOS CONDICIÓN DERECHOS
8
Canadá
4 años, alojamiento fines de semana hasta los 12 años.
A 2004 se
estimaba que 25000
tienen a su madre en
prisión. Con cierre de
programa no hay cifras
de convivencia.
Programa materno infantil, Servicio médico psicológico y de fomento de la lactancia y el vínculo materno infantil.
Orden de la corte
suprema de justicia
ordena reabrir el
programa. Se sugiere
revisar políticas judiciales
con enfoque de género.
Estados Unidos
Varía de un estado a otro; mínimo 48 horas a máximo 24 meses.
2700.000 tienen
a un padre o madre en
la cárcel. 4 y 7% de
las reclusas
embarazadas.
Módulo de maternidad o guardería en dos cárceles. Estándares de atención a mujeres embarazadas o manejo de aborto.
Conflictos atención humana en etapa de gestación y vinculación familiar o revinculación con madres presas.
México
6 años. 103 en DF. 400
en el país y 48
embarazadas.
No hay unificación
en DF hay Servicio de
pediatría. Centro de
cuidados, estimulación y
aprendizaje. Alimentación
aparte.
Limitaciones en
acceso a Salud.
Educación no certificada.
Riesgos higiene.
El
Salvador
No se identifica edad límite.
93 infantes y 14
mujeres embarazadas
en Ilipango. Posibles
150 en otras cárceles.
Centro de
Desarrollo Infantil y
pabellón materno infantil
de la cárcel. Proyecto
construcción de una
cárcel exclusiva.
Infraestructura deteriorada, hacinamiento, CDI (habitación con juegos sin uso), déficit acceso al agua.
Nicar
agua
Orden
judicial
permanencia de
una caso seis
meses.
A 2012 periódico la Prensa reporta un caso.
Se estaba
estudiando adecuación de
un lugar.
No se localizó reportes de cómo se desarrolló la situación.
Guatemala
4 años. A 2013, se
reportan 74 a nivel
nacional.
Guarderías al
interior de las prisiones,
equipo de trabajadoras
sociales, un médico, una
educadora y una
psicóloga.
Limitaciones en
acceso pleno, están
felices pero hay dudas
frente a su desarrollo.
9
Hond
uras
4 años. 10 niños y niñas.
Módulos de
menores en Hogar Casa.
Se está creando proyecto
intersectorial para mejorar
condiciones.
Limitaciones en
asistencia sanitaria. No
hay recursos para
alimentos ni
medicamentos.
Cost
a Rica
3 años. A 2006 25 niños
y niñas en una cárcel.
Casa Cuna ubicada
en la cárcel pero
independiente. Salen a un
jardín cercano en Bus
Hay acompañamiento
psicosocial.
Desigualdades por
recursos propios,
atención en cárcel con
traslado al hospital.
Madres desconocen
proceso educativo.
Panamá
La Ley 55/2003.
Sin datos Existe orden de que en los centros femeninos se den pabellones para maternas y madres con sus niños y niñas.
Sin datos sobre desarrollo de la ley.
Vene
zuela
En cárcel
de Sabaneta
encontraron
hasta de 9 años.
300 niños
fueron sacados de la
cárcel, se reportaban
56 como rehenes.
Vivian hace más de 5 meses.
Sin datos de situación actual o general.
Colo
mbia
(Reporte
Bucaraman
ga, Bogotá,
Medellín,
análisis de
programa
ICBF
INPEC)
3 años. A 2012 140
niños y niñas en el
país según fuente
ICBF a reportaje
periodístico.
Gestantes en patios comunes, madres y niños celda individual en patio especial. Jardín ICBF en cárcel. Traslado para atención médica. Obligación de acudiente llevárselo una semana al mes.
Hacinamiento, falta de acceso a salud, espacios no adecuados a exigencias educación, desvinculación familiar. Ambiente de violencia.
10
Brasil
La
permanencia
varía de 4
meses a 6 años.
197 embarazadas. De 46 a 520 con hijos, 234 lactantes y 286 con niños mayores.
Cárceles para mujeres con lugares para amamantar.
Falta de políticas
preventivas para la mujer
y el crimen. Dificultades
con VIH en cárceles. No
hay claridad de espacios,
personal ni atenciones.
Falta de opciones de
reintegración social.
Entorno hostil y de
hacinamiento.
Discriminación a mujeres
gestantes en los
hospitales.
Ecua
dor
3 años. Política “Ecuador Sin Niños en las Cárceles” para edades posteriores.
A 2012 se reportan 203 a nivel nacional.
Creación de Centros del Buen Vivir o Centros de acogida, subsidio a familia, seguimiento de trabajo social.
No se encontraron reportes de los niños/as en las cárceles, hay limitaciones en el desarrollo del programa de los mayores.
Bolivia
Ley 2026 artículo 30
Hasta los
6 años. A 2013
se encontraron
hasta los 12
años.
2014 niños y niñas viven en cárceles periódico la razón 2013.
No hay programas específicos. Una cárcel tiene acuerdo con un colegio de una fundación.
Abuso sexual,
condiciones de violencia,
condiciones de, consumo
de drogas, encierro, no
hay una política clara de
apoyo a acceso a
derechos.
11
Perú 3 años. 187 niños y niñas a nivel nacional
En cárcel con
mayor cantidad pabellón
exclusivo para madres y
embarazadas y una cuna
que con salones divididos
por edades con buena
dotación, reciben paseo
mensual. Dos meses
antes empiezan
preparación de
separación.
Ambientes inadecuados. Falta de política de género.
Dificultades en acceso psicosocial, educativo, salud, alimentación e higiene.
Chile Hasta los 2 años, posibilidad de ampliar a 6 años.
1.465 niños y
niñas de dos años,
durante el año 2008
han sido insertos en el
programa Residencias
Transitorias, de 42.222
niños, niñas y jóvenes
menores de 18 años
que tienen, padre o
madre, privados de
libertad.
Casas alternas en las cárceles, se está haciendo inversión para hacerlas acogedoras, cuentan con sala de estimulación para los niños y niñas. Juez de familia decide situación de niño o niña.
No se reportan muchos datos. Problemas de procedimientos generan tardanza en obtención de beneficios para traslado a residencias transitorias.
Para
guay
Permanecen hasta los 3 años
13 niños y niñas con sus madres y 13 embarazadas en una cárcel.
Pabellón exclusivo “amanecer” separado del resto del penal, hay una sala de juegos y aprendizaje.
No hay reporte de
los niños y niñas, la cárcel
tiene sobrepoblación,
infraestructura
inadecuada, poca
salubridad e higiene.
12
Uruguay
No se identificó este dato.
33 niños y niñas a 2006 en 9 centros carcelarios del país.
Plan nutricional
Especial. En Cárcel
Nacional van a una
guardería y hay Pabellón
especial. Organizaciones
de derechos de niños y
niñas vinculadas. Servicio
de salud de hospital local.
Inadecuada infraestructura. Proyecto hogar maternal sin realización, Ausencia programa específico y nacional para niños/as y madres gestantes.
Argentina
4 años. Política
2007 arresto
domiciliario para
madres de
menores de 5
años.
128 en Hoyos y
20 embarazadas.
(Provincia de Buenos
Aires)
Se estima 160
en el país a 2008. ADC.
Cárcel con más número tiene: médico, psicología, supervisión actividades y alimentación. Educación en jardín de funcionarios externo. Patio de cocinar.
Juez de familia
arbitrará los medios para
garantizar situación de
niño o niña.
Limitación de vínculos sociales y contacto con sus otros familiares. Restricción acceso a salud, y recreación. No se accede a profesionales de derechos y niñez. Limites educación en tiempo y en otros no existe, además de no participación de la Madre. Jardín sin contextualización ni calidad.
España (Datos, Sevilla, Aranjuez y caso Madrid)
3 años. Real Decreto 190/96.
3137895029.
Se estima que hay 150 niños y niñas en cárceles.
Sevilla: “Escuela de
madres” Actividades
complementarias de ocio
para los niños incluye
frecuentes salidas.
(Aranjuez)Modulo familiar, jardín.
(Madrid) Guardería
en cárcel.
Se considera que hay buenas condiciones pero se asegura que el Desarrollo está atrasado, por ambiente poco enriquecido entre barrotes y paredes grises.
Las principales conclusiones son:
Los estudios centrados en situación de la mujer, pocos estudios abordan
directamente situación de los niños y las niñas.
Edades de permanencia dispersas (mínima horas o días en algunos Estados de
EEUU y máximas en Bolivia 12 años o más)
Las Modalidades de atención buscan la permanencia de los niños y niñas con sus
madres variando el tiempo. Ecuador se encuentra en proceso de salida de los niños y
13
niñas de las cárceles. Se hallaron Estrategias de residencias transitorias en Chile así
como módulos independientes en otras.
Estadísticas nulas en casi todos los países, los más organizados dan porcentajes
desde fuentes externas refieren porcentajes sin cifras claras como EEUU o Chile, datos
varían de 100 en promedio en casos de cárceles con más niños, variabilidad de 150 en
España como mínimo.
En cuanto a los servicios no hay datos completos aún, guardería o alguna
modalidad de atención educativa o alterna, se plantea en casi todos y en algunos
complementario con apoyo de ONG's.
Reportes de derechos vulnerados en general, a excepción de España, algunos
estados de EEUU y Canadá pero asegurando afectación en el desarrollo pero no
evidencias de consolidación de futuro
1.2. DOCUMENTACIÓN BASES POLITICAS Y LEGISLATIVAS EN
COLOMBIA
Actualmente, Colombia vive un proceso de desarrollo de sus políticas y legislación
de atención a la primera infancia, en respuesta a sus compromisos internacionales y
principios de nivel nacional.
La presente investigación se sustenta en los lineamientos internacionales ratificados
por Colombia, la legislación y las políticas nacionales a favor de la primera infancia que se
presentan en el documento de la metodología de la investigación, a continuación se listan
los documentos referenciados.
La convención sobre los derechos del Niño, 1989.
La constitución política de Colombia de 1991
La ley 1098 de 2006, el código de infancia y adolescencia.
El Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014 Prosperidad para todos
La Estrategia Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia “De Cero a Siempre"
El código penitenciario - Ley 65 de 1993.
Lineamiento técnico-administrativo para la modalidad ICBF-INPEC “Atención A Niños
Y Niñas Hasta Los Tres (3) Años De Edad En Establecimientos De Reclusión De
14
Mujeres”
Fundamentos técnicos de la estrategia de Cero A Siempre.
Convenio marco 125 de 2013.
1.3.
1.4. METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN
El abordaje metodológico mixto, recupera algunos datos cuantitativos y cualitativos
basados en el desarrollo de 5 fases:
Fase 1. Elaboración de los instrumentos, visita de reconocimiento y pilotaje de
los instrumentos, Como producto de esta fase se contó con el diseño de una encuesta y
una entrevista semi- estructurada para madres, una encuesta y grupo focal para
profesionales, una observación participante para los niños y las niñas.
Fase 2. Selección de la muestra, Tomando como base los datos facilitados por el
INPEC de sus dependencias, se seleccionaron 8 Centros de Reclusión para Mujeres que
contaban con el Convenio de atención a la primera Infancia entre INPEC, ICBF y
operadores en cada regional.
Fase 3. Recolección de datos, Esta fase se desarrolló a partir del 28 de Noviembre
y se finalizó el 15 de febrero. Como respuesta a la dinámica encontrada se realizaron
algunas adaptaciones en el proceso de recolección de datos. Se aplicaron las encuestas
a un gran porcentaje de las madres en los centros de reclusión, se realizaron un número
menor de entrevistas en cada espacio debido a la capacidad de manejo de tiempo.
Observaciones participantes con los funcionarios de los centros de desarrollo infantil
según disponibilidad de personas y observación con los niños y las niñas en su entorno
educativo y en la celda o patio. Los centros de reclusión y fechas de recolección de datos
son:
RM BOGOTÁ
28 Y 29 DE NOVIEMBRE
DE 2013
RM
JAMUNDI
2 Y 3 DE DICIEMBRE DE
2013
15
RM
POPAYAN
4 Y 5 DE DICIEMBRE DE
2013
RM PEREIRA
9 Y 10 DE DICIEMBRE
DE 2013
RM
MEDELLIN
11 Y 12 DE DICIEMBRE
DE 2013
RM CUCUTA
16 Y 17 DE DICIEMBRE
DE 2013
RM
BUCARAMANGA
18 Y 19 DE DICIEMBRE
DE 2013
RM IBAGUE
14 Y 15 DE FEBRERO
DE 2014
Entre funcionarias/os, madres, niños y niñas se estima la participación total de 217
actores en el proceso de recolección de datos.
Fase 4. Análisis de datos,
Con respecto a las encuestas realizadas a madres, la población encuestada
correspondía en algunos casos al total de las madres inscritas en el programa de atención
a niños y niñas en las reclusiones, en otras ciudades, el grupo de madres encuestadas se
encontraban en el patio para el día de la visita; la cuantificación general de la población de
madres encuestadas de las ocho (8) reclusiones de mujeres fue:
No.
CIUDAD ENCUESTAS
REALIZADAS A MADRES
1 Bucaramanga 12
2 Cúcuta 8
3 Pereira 13
4 Ibagué 8
5 Bogotá 14
6 Medellín 12
7 Popayán 4
8 Jamundí 9
TOTAL 80
Las encuestas se transfirieron a una base de datos teniendo en cuenta el proceso
de codificación y etiquetado, posteriormente, el análisis
16
descriptivo se llevó a cabo mediante el uso del programa estadístico SPSS2. Derivado de
este proceso se cuenta con gráficas de cada variable considerada en los instrumentos y
se desarrolló el proceso de análisis de los datos y su correlación con la caracterización de
los actores participantes.
Por otra parte la información cualitativa producto de entrevistas se digitalizó e
ingresó al programa ATLAS/Ti, de ahí se cuenta con la gráfica de conteo de palaras y la
identificación de las categorías de análisis a desarrollar según los hallazgos de un total de
9 entrevistas realizadas, se tomaron como muestra para el análisis las entrevistas que
contaban con condiciones óptimas de sonido para procesarlas en el sistema.
La cuantificación general de las personas de la población de instituciones
encuestadas de las ocho (8) reclusiones de mujeres fue:
No.
CIUDAD ENCUESTA
S INSTITUCIÓN
1 Bucaramanga 4
2 Cúcuta 4
3 Pereira 5
4 Ibagué 4
5 Bogotá 7
6 Medellín 5
7 Popayán 3
8 Jamundí 5
TOTAL 37
Frente a las observaciones realizadas se digitalizó la información para incluir los
hallazgos derivados de esta herramienta bajo los estructurantes de la RIA y se realizó una
triangulación con las variables identificadas en las encuestas y entrevistas. El total de
participantes en el proceso de observaciones fue:
Centro
carcelario
Cantidad
de niños
Cantidad
de niñas
RM BOGOTÁ 17 15
RM IBAGUE 3 2
RM POPAYAN 1 1
RM JAMUNDI 14 6
2 Con amplio uso en ciencias sociales
17
RM PEREIRA 5 5
RM MEDELLIN 5 7
RM CUCUTA 3 3
RM
BUCARAMANGA 3 10
TOTAL 51 49 100
Fase 5. Socialización y presentación de resultados. Durante el mes de Febrero
de 2014, siguiendo el requerimiento de la Comisión Intersectorial de la Primera Infancia y
por la dinámica de trabajo institucional, se preparó una presentación de los hallazgos
preliminares de la investigación. El eje de análisis considerado para la presentación fue
evidenciar los datos sistematizados y realizar una reflexión desde la Ruta Integral de
atención de la Primera Infancia y las recomendaciones o conclusiones obtenidas en el
acercamiento a este escenario en el que transcurre la vida de algunos niños y niñas en
nuestro país, dado que se reconoce que una investigación más amplia debería poder dar
un panorama completo tomando todos los centros de reclusión para mujeres y pabellones
de mujeres de todo el país dependientes de diferentes entidades.
2. SITUACIÓN DE LA ATENCIÓN INTEGRAL A LA
PRIMERA INFANCIA EN ENTORNOS
CARCELARIOS DESDE LOS
ESTRUCTURANTES
Explorar la situación de las gestantes, los niños y las niñas que viven con sus
madres en algunas de las reclusiones del país es un ejercicio complejo, algunas de las
condiciones diversas y en ocasiones problemáticas que caracterizan esta realidad, son:
(1) Las condiciones disciplinarias propias del régimen penitenciario y carcelario, en
18
el que los procesos de seguridad llevan a la continua regulación por medio de
rutinas poco flexibles, que incluyen en sus procesos a las madres gestantes, los
niños y las niñas, en varias de sus características pueden ser, contrarias a los
requerimientos físicos y emocionales de esta población.
(2) La diversidad poblacional, dada por la riqueza cultural y étnica del país, además
de las diversas condiciones familiares y socioeconómicas de la población en las
reclusiones.
(3) Las adaptaciones realizadas en cada reclusión a las reglamentaciones dadas
para el tratamiento a gestantes, niños y niñas, las cuales deben responder a la
realidad de cada contexto; estas adaptaciones son desarrolladas por los
funcionarios a cargo de la seguridad y tratamiento penitenciario, generándose
asimetrías entre las condiciones en las que conviven las madres gestantes, los
niños y las niñas en las diferentes reclusiones.
(4) Las diferencias en la infraestructura de las reclusiones y complejos
penitenciarios, que particularmente afectan condiciones como iluminación, la
ventilación y diversidad en el paisaje visto por las madres, los niños y las niñas.
(5) Las diferencias actitudinales, comportamentales y emocionales de las madres,
evidenciándose algunos casos de madres responsables y amorosas y en otros
madres indiferentes y agresivas.
(6) Las diferencias en las redes de apoyo de la población objetivo, visibles en las
posibilidades de las madres, los niños y las niñas de acceder a dotaciones de
los mínimos vitales y enriquecimiento a los espacios en los que transcurre la
vida de los niños y las niñas.
Es importante recordar que esta información corresponde a las ocho (8) reclusiones
de mujeres visitadas por el equipo de investigación, en las que opera el convenio INPEC –
19
ICBF. En el país; existe también otro conjunto de reclusiones distritales o municipales,
que están bajo la administración del INPEC o las Alcaldías, y de las cuales en este
estudio no se cuenta con información sobre la situación de las gestantes y de los niños y
niñas en su interior.
Los resultados obtenidos y presentados a continuación dan cuenta de la urgente
necesidad de implementar la RIA3 y hacerla extensiva a los todos los niños, las niñas y
adolescentes hijos(as) de las mujeres privadas de la libertad en el país; para que sus
historias principalmente cargadas de narraciones de carencias y falta de oportunidades no
se repitan; una mejor forma de atención a madres gestantes y madres con sus hijos e
hijas puede motivar una reflexión con relación a la pena privativa de la libertad en mujeres
cabeza de familia y con hijos menores de 18 años, casos en los que la falta de
acompañamiento y condiciones de apoyo suficiente pueden ampliar las brechas de
desigualdad en las familias, permitiendo que se perpetúen sus condiciones de
vulnerabilidad frente al delito.
Para efectos del presente análisis, en cada una de las ocho (8) reclusiones
visitadas por el equipo en las cuales existe el Convenio INPEC- ICBF - Operador, se
entrevistaron 11 madres, y ochenta madres contestaron una encuesta sobre la situación
actual en la vivencia con sus hijos e hijas. También se aplicaron encuestas al 100% de los
funcionarios que se encuentran ejecutando el convenio tripartito y presentes al momento
de la visita; se incluyen también observaciones realizadas por las dos directoras que
conversaron con el equipo en las visitas en las ciudades de Pereira e Ibagué, asimismo,
se incluyen algunas observaciones realizadas durante dos días por el equipo de
investigación en cada reclusión. El instrumento construido para el desarrollo del grupo
focal en la investigación, no fue aplicado en estos contextos, debido a que no se pudo
contar con el mínimo requerido de personas para implementar la metodología, en el
momento de las visitas se contaba en las reclusiones con la coordinadora del programa
(Bogotá, Pereira, Medellín, Bucaramanga, Cúcuta, Popayán, Bucaramanga e Ibagué)
quien tiene otras funciones administrativas en el INPEC (a excepción de Bogotá), con la
3 Ruta Integral de Atenciones
20
docente (a excepción de Ibagué), y con dos o tres mujeres privadas de la libertad que
apoyan los programas de los niños y las niñas; solo en las reclusiones de Cúcuta y
Bucaramanga se logró hablar con las psicólogas.
Para facilitar la comprensión del análisis se divide este capítulo en dos partes. En
la primera parte se encuentra una descripción general de la situación de las reclusiones,
tomando como base los resultados de las Encuestas de Madres e Instituciones y las
entrevistas a madres, con relación a los estructurantes propuestos como organizadores
de la Ruta Integral de Atención en la estrategia de atención a la primera infancia, y que
garantizan a cada niña y a cada niño su desarrollo integral se tienen:
El cuidado y la crianza.
La salud, la alimentación y la nutrición.
La educación inicial.
La recreación.
El ejercicio de la ciudadanía y la participación.
En la segunda parte se presenta una caracterización general de la situación
encontrada en cada reclusión, elaborada a partir de los datos de análisis de las
observaciones y las encuestas.
2.1. Descripción general de la situación
La mirada general para la investigación diagnóstica realizada, se sitúa en el
reconocimiento de las niñas y los niños como ciudadanos sujetos de derechos,
privilegiando el que puedan hacer uso adecuado de entornos y entablar relaciones que
propendan por su desarrollo infantil, indispensable para su fututo. La fuente privilegiada
de información sobre las condiciones de vida de los niños y niñas desde la etapa
gestante, fue la observación de sus interacciones, el reporte de las madres y personal a
cargo del cuidado y protección de los niños y niñas, provenientes de los convenios
tripartitos elaborados entre el ICBF, el INEPC y una fundación o corporación ejecutora
21
SOBRE LOS PARTICIPANTES EN ENCUESTAS
En la aplicación de las encuestas a madres se resaltan los siguientes datos
descriptivos de la población:
22
Con relación al Estado Civil el 51% de las madres encuestadas son mujeres
solteras, seguidas por un 40% de mujeres en unión libre, 4% de mujeres casadas, 4% de
mujeres separadas y 1% de mujeres viudas, la mayoría de ellas no cuenta con una familia
nuclear, lo cual es necesario verificar para el manejo de redes de apoyo de los niños y las
niñas y el derecho a tener contacto con su padre, diversas experiencias internacionales
han buscado corroborar el cumplimiento de este derecho de los niños y las niñas
independiente a la relación entre padres.
Con relación a la Edad de las madres encuestadas, 33 estaban entre los 18 y 24
años, 32 entre los 25 y 32 años, 12 entre los 33 y 40 años y 1 no respondió. Como
supone se requiere un trabajo en las mujeres de edad fértil.
23
Con respecto a la cantidad de hijos/as de las madres privadas de libertad, el 79%
dijo que tenía de uno a tres hijos, el 16% tiene de cuatro a siete hijos/as, el 4% no sabe o
no responde y el 1% dijo tener más de 7 hijos/as. Aunque la herramienta no lograba dar
precisión frente a cuantos tienen solo un hijo/a es necesario reconocer que es significativa
la posibilidad de varios hijos/as de una mujer privada de libertad, sustentando la
necesidad de abordar una atención especializada para todas y todos los descendientes
de las personas privadas de libertad.
Frente a la fuente de sostenibilidad para complementar los recursos para la
manutención básica de ellas como madres gestantes, lactantes o para sus hijos/as, el
51% declaró depender de familiares, enseguida está el 25% que depende de su pareja, el
12% depende de otras fuentes, el 5% de oficios, el 1% de ventas, el 1% de ayudas y el
5% declara no tener ningún apoyo. Al tener familias monoparentales la mayoría se
sustenta a partir del apoyo de su familia extensa, para quienes cuentan con una pareja
suele destacarse la ayuda que les brindan, en un porcentaje medio esta una fuente sin
claridad de datos y preocupa para el manejo de post- penadas que solo un 5% cuente con
ingresos por oficios, además de no tener claridad quienes no cuentan con ningún apoyo
es decir 4 casos como cumplen las responsabilidades asignadas de manutención para
sus hijos e hijas.
De igual forma, es totalmente diversa la fuente de sostenibilidad, lo que no se
profundizó en el estudio es la continuidad y calidad de ese sostenimiento obtenido, lo cual
limita las condiciones de acceso a bienes y dotaciones requeridas para la atención en la
gestación y las condiciones de la crianza.
En relación a la escolaridad de las madres que desarrollaron las encuestas, la
población se caracteriza así:
24
25
Del número total de madres encuestadas: 2 mujeres no tienen estudios, 15 tienen
primaria incompleta, 7 tienen la primaria completa, 34 tienen la secundaria incompleta, 15
lograron completar la secundaria, 6 mujeres privadas de la libertad tienen un técnico o
tecnológico y 1 cuenta con una carrera universitaria, dos mujeres indicaron que no saben
o no responden.
El nivel de estudios es variable, pero se reconoce que la mayor está en el rango de
estudios básicos incompletos, en seguida se encuentra el grupo que completo sus
estudios básicos, y el grupo más pequeño corresponde a quienes accedieron a una
educación superior que permitiera el acceso a un trabajo, lo cual ratifica las conclusiones
generales de la situación de mujeres privadas de libertad con quienes se requiere un
trabajo de políticas sociales y económicas que permitan dar alternativas de sostenibilidad
y eviten acudir el crimen como solución de su situación de vida al no contar con una
preparación adecuada.
En el caso de las encuestas realizadas a Instituciones la población encuestada
eran mujeres privadas de la libertad que redimen condena apoyando labores de servicios
generales, aseo y cuidado de los niños y las niñas en las centros de atención de las
reclusiones, profesionales contratados por el ejecutor del convenio tripartito, y en
ocasiones el director o coordinador, que era del personal del servicio de vigilancia y
custodia o profesional contratado por el INPEC en un área relacionada con tratamiento y
desarrollo en la reclusión; es importante destacar que solo en el caso de Bucaramanga la
profesional del convenio tripartito tenía el cargo de coordinadora del jardín. También en
algunos casos se contó con la posibilidad de encuestar personas que desde algún
proyecto de la alcaldía o de convenios de práctica podían hacer parte del programa en el
momento de desarrollo de esta investigación.
Los profesionales encuestados se encontraban en el desarrollo del programa para
el día de la visita; de los participantes que respondieron las encuestas de institución
podemos resaltar, que ningún encuestado fue hombre, la totalidad de las personas que
resolvieron encuestas de institución fueron mujeres, en su mayoría de 26 a 40 años.
26
La población encuestada muestra que las edades de quienes están con los niños y
niñas en el programa oscilan entre 31 y 40 años siendo el grupo principal conformado por
13 de ellas, seguidas de un grupo de 10 mujeres que está entre los 26 y 30 años; los
porcentajes más bajos están entre los de 20 y 25 años con 6 mujeres y los mayores de 40
con 8 mujeres. En cuanto al estado civil, 14 de ellas afirmaron ser solteras, 11 que están
en unión libre, 7 de ellas casadas y 5 viudas. La representación es la siguiente:
27
De acuerdo a los datos, la mayor parte de la población que participó en la
encuesta de institución es universitaria y pertenece a las fundaciones o corporaciones del
convenio tripartito y al INPEC, seguida de secundaria incompleta rango en el que se
encuentra el mayor número de mujeres reclusas que apoyan el programa, hay solo 5
participantes que tienen estudios técnicos o tecnológicos la mayoría son las pedagogas
responsables de la educación inicial y finalmente solo 3 cursan o han cursado estudios de
especialización, así como solo hay 2 que están cursando secundaria o universidad.
Estos datos evidencian que no hay una tendencia a contar con personal
especializado para las labores de atención a los niños y las niñas en primera infancia, se
podría decir que hay un nivel medio entre los profesionales dado que se cuentan con
universitarios y técnicos por parte del convenio tripartito y de igual forma debe
considerarse para los programas de cualificación que hay un número significativo de
personas vinculadas en la atención que cuentan con estudios incompletos.
En relación al reconocimiento de la labor que desempeñan de 37 participantes, 17
de ellas tienen labores relacionadas con pedagogía, 8 manifiestan que no saben cuál es
su labor específica pues hacen acciones en diferentes campos, 4 están en el área de la
salud y dos en vigilancia y custodia. La relación grafica es la siguiente:
28
Cabe resaltar como en la auto percepción de las personas ligadas al entorno
educativo consideran que su rol está relacionado con pedagogía, lo cual es vital
dado que en toda interacción se generan aprendizajes, se requeriría profundizar si
su intencionalidad y estructuración están aportando al desarrollo integral de los
niños y las niñas que cuentan con ambientes poco enriquecidos para la facilitación
de sus potencialidades. De igual forma debe considerarse en el proceso de
cualificación el empoderamiento del rol que toda persona vinculada a la crianza y
cuidado de los niños y niñas de primera infancia juega, dado que un 22% no se
identifican con una función. Y las personas de Vigilancia y custodia también se
sienten apartadas de la atención a los niños y las niñas.
Frente a los años en la institución, los casos de mayor tiempo de pertenencia a los
programas corresponde al personal de vigilancia y custodia en el que se encontraron
funcionarios de más de 6 años de labor con la institución. La relación del tiempo en la
institución y el tiempo de experiencia en estas labores muestra que hay experiencias
previas a las que desarrollan actualmente y con el mismo grupo de niños, niñas y madres,
casi un 84% que son 31 mujeres tienen entre 1 y 3 años de experiencia en esta área, 2
personas de 4 a 6 años y solo 4 no manifestaron el tiempo de experiencia por tener solo
unos pocos meses en la labor. La relación grafica es la siguiente:
29
El tiempo que llevan las participantes encuestadas, en la institución al
programa es muy corto, pues 23 de 37, que corresponde a más de un 62% llevan
menos de un año, esto debido a que los convenios tripartitos que incluyen varios
profesionales iniciaron en 2013 y las mujeres reclusas que apoyan el programa
rotan con frecuencia, razón por la que el nivel de capacitación tanto a personal de
apoyo como a madres no tiene una permanencia superior a un año, delimitando la
necesidad en los procesos de cualificación de una frecuencia, gestión del
conocimiento y repetición recurrente.
Finalmente vale la pena resaltar que para 24 personas del programa el mayor
contacto es con madres y sus hijos e hijas, 10 de ellas solo con hijos e hijas y solo 3
personas manifiestan que su contacto es solo con madres.
30
Además de las encuestas se desarrollaron 11 entrevistas en las ocho (8)
reclusiones visitadas, se entrevistaron madres que conviven con sus hijos hasta los tres
años y que actualmente están con sus hijos e hijas, en condición de gestantes y lactantes
Se seleccionaron algunas narraciones para retomar citas textuales, que dan cuenta de
31
una representación de las reclusiones visitada. En la presentación de datos no se
presenta información personal de las participantes, como tampoco los lugares de
desarrollo de las entrevistas, pues esta condición hace parte de la privacidad que se
garantiza en investigaciones de este tipo. Para la profundización de datos se privilegiaron
las entrevistas que lograron desarrollarse en un tiempo y condiciones de privacidad
adecuada, como también los audios con mejor calidad, pues los niveles de ruido en las
reclusiones son muy altos y de difícil registro en sistemas de grabación.
ANÁLISIS DESDE LOS ESTRUCTURANTES
A continuación se encontrarán cinco aspectos específicos a analizar,
conocidos como los estructurantes de la atención a la primera infancia, que fueron
definidos al “referirse a la atención integral, la Estrategia se plantea el reto de definir de
manera colegiada cuáles son sus estructurantes, de tal suerte que sean significativos,
coherentes y consistentes”4; estos cinco aspectos conforman la atención integral que
debe ser garantizado a cada niña ya cada niño para asegurar su desarrollo integral.
Se conservará en cada ítem una correlación con los demás organizadores de la
RIA, de tal manera que se visibilice su integralidad como fundamento en el compromiso
con el desarrollo de la primera infancia.
2.1.1. Cuidado y Crianza
4 Estrategia de atención integral a la primera infancia FUNDAMENTOS POLÍTICOS, TÉCNICOS Y DE
GESTIÓN. 2013.
32
Este estructurante de la atención integral “busca favorecer y fortalecer los vínculos
entre las niñas y los niños, con su familia y con las personas responsables de su cuidado a través
de la creación de ambientes enriquecidos, seguros, protectores, incluyentes, participativos y
democráticos.
El desarrollo de la línea técnica de este estructurante se compone de dos grandes campos
de actuación. El primero relacionado con la formación y el acompañamiento a familias por su papel
preponderante en este aspecto, y el segundo relativo al restablecimiento de derechos, en el
entendimiento de que el cuidado está también relacionado con aspectos de prevención y
protección para salvaguardar la integridad de las niñas y los niños”5.
En este punto el relato de una de las internas nos permite apreciar temor por la
seguridad de los (las) niño o niñas en el sistema penitenciario y carcelario.
“Esto no es un lugar adecuado para mi hija, aquí se ve el lesbianismo,
grosería, peleas. Yo trato de mantener la niña distraída para que no ponga atención
a lo que pasa; vivo pendiente de ella, ¡me da miedo que le pase algo, porque yo no
quiero que mi hija pase lo que yo pase! Frase participante.
5 Ídem.
33
Por lo anterior, este estructurante requiere el establecimiento de un programa de
formación6 que vincule los familiares y cuidadores/as de los niños o niñas, y que
desarrolle acciones para el mejoramiento de la convivencia en los patios en los que se
encuentran los niños y niñas, de manera permanente, de igual manera el
acompañamiento7.En virtud a que la celda y el patio se configura como el Hogar de los
niños(as) en las reclusiones, se analiza ¿qué tanto este espacio brinda acogida y afecto
en coherencia con la labor de cuidado y crianza desempeñada por sus integrantes, así
como cuáles son los referentes sociales y culturales básicos con los cuales comienza a
moverse en sociedad ese niño o niña?
En cuanto al espacio de la celda, de conformidad con la observación realizada en
las reclusiones visitadas, cumplen el criterio las reclusiones de Pereira y Bucaramanga,
en cuanto al patio ninguna reclusión cuenta con el espacio adecuado por razones de
hacinamiento, mezcla de internas y condiciones de encierro y la relación de poder y
sumisión que se ejerce desde la guardia, como lo explica la siguiente cita que nos
contextualiza en el tema:
“Muy difícil, durísimo. (Lágrimas) Es durísimo ver como encierran a un niño. Y
¿cómo les dices que le abran? Es bastante duro. Y yo quiero sacar a mi hijo de
aquí. Te humillan, ¡cómo te cohíben! o sea, uno es el que está pagando, pero ver
¡como a un niño no lo dejan salir! Uno con esa impotencia, el sale cada 8 o 15 días.
Por mí, si supiera que no lo va a afectar, ni le va a faltar nada, ¡yo lo dejaría! A mí
me pasan a otro patio y yo resistiría. Aquí uno no comparte con los niños, aquí solo
está con ellos un rato. Es más el tiempo que permanece encerrado que con uno;
por lo menos él sale, imagínese los que no salen”.
En el relato de la madre privada de la libertad, se encuentran dos elementos
centrales: por un lado, su estado emocional de frustración frente a no poder tener control
de las contingencias en el cuidado de su hijo o hija y por otro, su interés por mantener el
6 “serie de acciones con intención educativo cuyos propósitos se orientan a facilitar a las familias la
reflexión sobre sus dinámicas, la apertura a otras alternativas y la construcción y el enriquecimiento de nuevas prácticas y patrones de relación” Libro de cero a Siempre, p.144
7 Proceso, que tiene el propósito de estar al lado de las familias en sus procesos de desarrollo. (ídem)
34
vínculo a pesar de las circunstancias para brindar la estabilidad que le permita un
desarrollo socio-afectivo normal, ante la inseguridad de saber que su red de apoyo pueda
dar un ambiente de seguridad y bienestar a al niño o la niña. En este discurso emerge
también un elemento importante y es un grupo de esta población de primera infancia que
no cuenta con una red familiar de apoyo. Frente al cuidado y crianza que hace énfasis en
favorecer ambientes participativos y democráticos se evidencia que las normas establecidas a
personas privadas de la libertad suelen carecer de estas condiciones, en cambio las que se
establecen se basan en el control y el disciplinamiento riguroso, que como es mencionado aunque
se destina a las madres, termina siendo el ambiente de crianza de niños y niñas.
En una de las observaciones un niño acompañaba a su madre en la entrevista y al finalizar
el día, éste expresaba angustia y repetía la palabra “conteo, conteo, mami el conteo”, sabía que la
hora de encierro estaba por iniciar y debían estar en el conteo y temía por la ruptura de la rutina y
sus posible consecuencias, esta es una muestra de cómo los niños interiorizan los controles
estrictos en su configuración del mundo, más allá de capacidad de elección y diversidad, asimilan
el cumplimiento de rutinas y refuerzos negativos.
Por otra parte, se habla de ambientes enriquecidos y seguros, pero los referentes
sociales y culturales básicos con los cuales comienza a moverse en sociedad ese niño(a),
son los propios de la cultura carcelaria, los referentes sociales son las internas del patio,
como se puede evidenciar en el siguiente relato:
“Se puede decir que uno tiene tres clases de convivencia: una con los niños,
otra con la compañera de celda y otra con las compañeras de patio. Yo permanezco
sola, porque como le dije: aquí llega mucha muchacha de fuera, de la calle. No me
gusta esa vida donde se tratan de “hueva, parche…”. ¡La soledad no es buena!
llega el momento que se entra en depresión”
Las narraciones marcaban situaciones de drogadicción, violencia por peleas
entre internas o control de fuerza de la guardia para el manejo de situaciones, vocabulario
y costumbres centradas en el insulto y el engaño, estos son algunos de los ejemplos de
convivencia que afrontan los niños y niñas, cuando se opta por apartarse, además de la
depresión de la madre, se configura un ambiente aún más limitado, con pocos estímulos a
35
su alrededor, como aquellos derivados de observar paredes grises, barrotes, poco sol,
rejas o casi ningún panorama más allá de las celdas y una única fuente alternativa en la
televisión del patio que al ser compartida su programación suele ser para adultos la
mayoría del tiempo.
Teniendo en cuenta las diversas formas de organización familiar de las personas
privadas de la libertad, se deben considerar tres aspectos: el tipo de familia de
procedencia, el tipo de familia que conformó y la familia que se configura en la reclusión,
en este sentido se encontró que la mayoría proviene de hogares disfuncionales: “mi
mamá y papá parecían perros y gatos; mis hermanos se la pasaban debajo de la cama,
mis papas peleaban todo el tiempo”; o con historias de abandono: “Porque mi mamá me
tuvo a mí muy joven, me dejó votada”; separación de sus padres o escape de sus hogares
por violencia intrafamiliar o pobreza:
“A raíz de esto mis padres se separaron y nos fuimos a vivir donde el abuelo;
pero él nos sacaba todo el tiempo en cara las cosas; entonces mamá nos llevó a
donde la abuela y nos dejó ahí y se fue a trabajar (se eliminó el lugar de la
transcripción). Trabajaba en casas, nos visitaba de vez en cuando. Yo le decía -
que estuviera con nosotros, pero ella decía -que no y seguía en (se eliminó el lugar
de la transcripción). Entonces, me desordené, ya no cuidaba a mis hermanos, me la
pasaba en la calle. Una vez, mi mamá llegó y yo llegué a las 8 de la noche y me dio
una pela que no he olvidado. Entonces a los 10 años me fui de la casa, llegué a (se
eliminó el lugar de la transcripción) al peor parque que hay, porque allí está lo peor,
prostitutas, drogadictos, desechables. Por allí pasaba una niña de las que había
conocido en los hogares de paso donde estuve y me fui con ella, empecé a conocer
la droga a robar….”Frase de una participante
En cuanto a las familias que conforman se caracterizan por embarazos antes de la
mayoría de edad “Yo tenía 15 años, entonces yo quedé embarazada y todas esas cosas
se dañaron”, también por tener varios hijos de diferentes relaciones afectivas, algunas de
ellas con personas privadas de la libertad, al margen de la ley o fallecidos en hechos de
36
violencia. A continuación aparecen algunos apartes de la forma cómo funciona la vida
familiar ahora que se encuentran en reclusión, es destacable la atención de la situación
de los niños de esta mujer que tiene cuatro hijos(as):
“hija de 11 años con papá de 30 años, la relación está rota, la niña no lo
conoce, cree que vive con la abuela, ya que no sabe nada de ella desde que está
recluida; hijo de 7 años, con papá de 28 años, se encuentra en la cárcel, el niño vive
con la hermana mayor, no la visita en la reclusión porque vive lejos; hija de 4 años,
cuando salió de la reclusión fue entregada a unos tutores, al parecer fue abusada
sexualmente y por tanto hace 4 meses está bajo la tutela del ICBF, hija de 3 años
desde que salió de la reclusión a los dos años de edad (fue retirada del programa
antes por problemas de salud) vive con unos tutores”
Este relato presenta falta de
control de la crianza de los hijos por parte
de la persona privada de la libertad, con
el agravante que los niños o niñas
miembros de una misma unidad familiar
se encuentran dispersos en manos de
algunos familiares y conocidos, otros
simplemente en desprotección y
abandono8. En este sentido el fortalecimiento de las dinámicas familiares que se orienten
hacia “patrones de interacción afectuosos, cálidos, solidarios, respetuosos, equitativos y
participativos” ¿dónde se pueden dar?, es necesario que las voces de los niños y niñas y
sus familias sean escuchadas. El ejercicio de control, tendiente a silenciar requiere una
transformación hacia la participación ciudadana; por ello hace falta un trabajo para
empoderar a las familias en el ejercicio de sus derechos, la construcción o fortalecimiento
de las redes familiares o de apoyo. En este sentido, se debe reconocer a las familias de
las personas privadas de la libertad como sujetos colectivos de derechos.
8 Factor que ha perpetuado la cadena generacional de delincuencia por vulnerabilidad social,
económica y afectiva entre otras.
37
Desde los órdenes cuantitativos relacionados con cuidado y crianza podemos
resaltar que en preguntas como: ¿Considera que en su ambiente familiar se presentan
situaciones de violencia o maltrato?, un total de 73 encuestadas que corresponde al
91.3% de la población respondieron que NO han presentaban situaciones de violencia o
maltrato en su familia y sólo 7 mujeres respondieron que SI con el 8.8%. En una primera
mirada esto correspondería a patrones de familias protectoras, pero al ampliar las
historias desde el proceso de entrevistas, se observaron esquemas de violencia
intrafamiliar repetitivos en las familias. Es probable que las madres respondan la encuesta
pensando en la familia que ellas construyen con sus hijos, dejando de lado toda historia
de pareja o de familia extensa que incluya violencia. También puede existir un sesgo de
respuesta debido al temor que les genera perder a sus hijos o hijas por condiciones de
maltrato.
A las preguntas ¿Cuenta con familiares o personas que puedan apoyarle en la
crianza de su hija/o? y ¿Ha recibido usted orientación para la crianza de su hija/o en la
cárcel? Se muestran otros aspectos propios del cuidado que involucran la institución y la
familia extensa. Es común que las personas privadas de la libertad cuenten con apoyo de
la familia extensa, en este caso el 75% afirman que SI cuentan con la familia, y cuentan
entre estos a: amigos, padre, abuelos, y tíos; hay un 25% que no cuenta con ningún
apoyo, lo cual inquieta sobre cómo se logra el acceso a pañales, juguetes, ropa, que
38
según comentarios de las madres son los principales elementos de apoyo familiar y en
algunas reclusiones no hay recursos suficientes para estos elementos o se limitan desde
un objetivo institucional de generar mayor compromiso de las madres para que ellas sean
las que brinden estos elementos básicos.
En cuanto a la pregunta sobre la orientación para la crianza de hijos e hijas, 47
madres expresaron SI tener respaldo en este sentido de Trabajo Social, Psicología, y
formación para madres FAMI; 13 madres expresaron que NO, a las que se suman 20
encuestadas que prefirieron no responder, según estas últimas, la capacitación existe,
pero no tiene en cuenta sus dificultades en la reclusión y fuera de ella, según las madres
son momentos de integración pero no persisten las enseñanzas a largo plazo.
39
COMENTARIOS SOBRE OTROS ORGANIZADORES DE LA RIA CON
RESPECTO A ESTE ESTRUCTURANTE
Otro de los organizadores de la RIA, son los momentos, en estos se inicia con la
atención a los actores adultos en edad fértil para trabajar desde la pre concepción, una de
las primeras cuestiones a entender en el tema de madres en las reclusiones, implica
saber cómo toman la decisión de concebir un hijo o hija en prisión, razón por la que es
importante reconocer que de las 80 madres encuestadas 48 llegaron en embarazo y las
32 restantes quedaron embarazadas en la reclusión.
Las razones por las que una madre gesta un niño o niña en la reclusión pueden ser
variadas y la referenciación de esta tendencia dentro de la población general de privadas
de libertad es incierta (se dieron comentarios de abortos auto provocados), no se
estableció a profundidad la prevalencia de las causas, entre las narraciones se habla de
compromisos para retener la pareja; no uso de los condones suministrados en las visitas
conyugales por prejuicios; embarazos no planeados, entre otras razones, pero una de las
más preocupantes, es cuando se decide quedar en embarazo por recibir la prisión
domiciliaria o suspensión de la pena por algunos meses; en esta condición se
instrumentaliza a los niños y niñas y además de esto las mujeres que optan por ello no
reconocen que las prisión domiciliaria es difícil de lograr aun con uno o varios hijos o hijas,
40
pues depende del delito, así como la suspensión de condena, que solo se da por unos
meses, en los cuales no disminuye el tiempo de la pena y después se debe regresar a la
reclusión dejando a su hijo o hija en manos de terceros o llevándolo a la reclusión como
única opción posible, una de las madres expresa, que había hablado con su pareja y su
búsqueda inicial era la prisión domiciliaria:
“…No, yo ya lo había hablado con él, más que todo lo quería para ponerme en
beneficio”
Posteriormente esta madre no logra la domiciliaria y reconoce que fue una
decisión apresurada ya que ella y su bebe estarían mejor fuera de la reclusión junto a la
familia, también es de resaltar que el padre del bebe actualmente no apoya a su hija.
Otro de los momentos es la gestación, el primer elemento de cuidado es el
traslado que deben tener a un patio de madres – hijos e hijas, que le permite mejores
condiciones que las encontradas en un patio común; a la pregunta: ¿Usted vivió su
embarazo en un patio especial para las mujeres embarazadas o con niñas y niños?, 50
madres de 80 encuestadas, afirmaron que SI vivieron su embarazo en un patio especial;
es de interés no dejar pasar que 23 de ella NO lograron esta condición, que es un número
significativo de mujeres que viven en condiciones de hacinamiento, expuestas al humo de
cigarrillo y a conflictos propios de los patios en general de las reclusiones; 7 madres no
respondieron, por no haber estado en su embarazo en la reclusión.
Adicionalmente, cuando logran el beneficio de poder ir a sus casas para la etapa
final del embarazo, algunas de ellas comentaban que las condiciones de suspensión de la
condena no eran las óptimas y que vivir fuera de la reclusión mientras llegaba el momento
del parto en ocasiones las exponía a vivir en condiciones económicas mínimas, pues
llegan a sus familias a residir y sin la posibilidad de aportar económicamente, esperando
recibir las condiciones de cuidado de sus familias, en este punto debe considerarse el
imaginario cultural de una madre relacionada con crimen que suele generar prejuicios de
interacción negativos; 16 madres no respondieron a la pregunta, y expresaron no tener
conocimiento en el tema.
41
Estas condiciones también afectan el tiempo vital denominado del nacimiento
al primer mes, en el cual el cuidado del postparto y atención inicial a l niño o niña recién
nacido es vital, se requiere mayor profundización para saber quiénes viven esta etapa en
la cárcel o fuera de ella, y cuáles son las condiciones para vivir esta etapa.
Frente a actores como se ha mencionado, las narraciones evidencian que las
demás reclusas y el personal de guardia, juegan un rol vital como los adultos involucrados
en el cuidado y crianza de los niños y niñas en reclusiones.
Frente al tema de los entornos como se ha discutido, el entorno hogar fuera
de la cárcel, no ha sido caracterizado o no se reportaron seguimientos para verificar sus
condiciones, el entorno hogar dentro de la cárcel no es un ambiente apropiado para el
cuidado de los niños y las niñas.
En cuanto a las atenciones especializadas se habla de revisar situaciones de
familias con historial de inadecuados ambientes, lo cual es un tema que se cumple en las
personas privadas de libertad, también se habla del abandono por parte del padre y
aunque se necesita un estudio a profundidad para establecer el vínculo y calidad de esta
relación hay muchas narraciones de procesos de crianza asumidos totalmente por las
madres.
42
2.1.2. Salud, Alimentación y Nutrición
“La preservación de la existencia de niñas y niños en condiciones dignas es
parte de la promoción de su bienestar y a la vez una forma de prevenir situaciones que los
pongan en riesgo. En ese orden de ideas, la salud, la alimentación y la nutrición son más
que derechos fundamentales, son los mínimos vitales para el desarrollo infantil, frente a lo
cual se presentan las siguientes situaciones, que marcan claras diferencias por reclusión
y capacidades familiares. El bienestar físico, mental y social de las niñas y los niños
resulta de la interacción de determinantes biológicos, sociales, políticos, económicos,
ambientales y culturales, configurados por las circunstancias en las que nacen, crecen y
viven.
Las niñas y niños que crecen y se desarrollan en un óptimo estado de salud
tienen mayor oportunidad de disfrutar su existencia y aportar al bienestar de las
comunidades a las que pertenecen”9
En este estructurante deben valorarse la salud materna, infantil y el nivel de
nutrición de los niños y niñas, mediados por el acceso al sistema de salud y la
alimentación recibida.
“Para mi hijo gracias a Dios bien, porque tiene una IPS; pero aquí el servicio
es pésimo. Aquí no hay médico a pesar que dicen que lo hay… Aquí viene un
médico de 8 a 4 de la tarde. Aquí si un niño se enferma, tiene que esperar hasta el
otro día, si viene el médico. ¿Qué pasa con mi hijo, si se enferma? - llamo a la tía y
ella aparece. Pero aquí hay muchas que no tienen familiares. Aquí no dan los
medicamentos así lleven 8 o 15 días. Aquí los niños tienen que mejorarse sin
medicamentos porque estos nunca aparecen. Aquí muchas veces tenemos que
intercambiar los medicamentos, empezar a preguntar ¿quién tiene esto o aquello?
Esto es muy dispendioso porque usted sabe que un niño no da espera, un adulto
aguanta. Aquí no hay servicio de urgencia o a la guardia le da pereza llevarlo. Si
9 FUNDAMENTOS. 2013.
43
señora, es pésimo… Aquí las mujeres han tenido que hacer la labor de parto allí,
porque no hay transporte y los caminos son malos. Aquí han devuelto remisiones
porque CAPRECOM no paga; entonces, no atienden”.
Este testimonio de una de las madres privadas de la libertad nos permite observar
los mecanismos de desigualdad propios de la dinámica del acceso a la salud actualmente,
los beneficios son de quienes cuentan con una red de apoyo y tienen poder adquisitivo, se
grupo cuenta con oportunidades, las demás personas están limitadas por la oferta y
además, al estar privadas de libertad dependen totalmente de quien pueda apoyarlas para
llevar a sus hijos al médico, hacer todos los trámites requeridos y cumplir los gastos que
esto implica, esta situación no tuvo un análisis muy profundo. Sin embargo, esta mirada
es desde de la madre, y el continuo salud-enfermedad, pero actualmente se habla de la
promoción de la salud y prevención de la enfermedad, y se reconoce que es una
transformación que aún debe asumirse culturalmente y en el sistema de salud, pero existe
una mayor inquietud de cómo se logra la práctica de esta perspectiva para los niños y
niñas que viven en centros de reclusión.
El reporte general es que la atención a salud en un gran porcentaje de los casos es
atendida por el médico general o enfermera en la reclusión, desde la revisión o
consideración de estos si se determina que es una emergencia se contacta a quienes
tienen un tutor, para que se desplacen a la cárcel y puedan trasladar al niño o niña a un
centro de salud, la mayoría expresan tener inconvenientes de acceso debido a su
afiliación a CAPRECOM y la situación de dificultades administrativas que presenta esta
vinculación. Se encontraron declaraciones de preocupación por el tiempo y
procedimientos que implican esta directriz restando la oportunidad a una atención
oportuna y de calidad. Se requeriría mayor
profundidad para saber que opciones se
siguen ante la limitación o inexistencia de
tutores y la calidez del trato, capacidad
técnica y de instalaciones para la atención a
los niños y niñas de primera infancia en el
44
servicio de sanidad de la reclusión y cuando se trasladan a otros centros de salud.
Con respecto a la alimentación se cuenta con un plan nutricional diseñado por la
profesional del CDI, los alimentos son preparados de forma exclusiva para los niños y las
niñas, la mayoría de proceso de alimentación se da por parte de las cuidadoras en
quienes se denota una mayor preocupación por el tiempo y manejo del aseo, que por una
rutina de alimentación, en la que se fortalezca el vínculo, excepto en Bucaramanga donde
los niños y niñas comparten con sus madres esos momentos en el comedor de la
reclusión, creando el respaldo familiar y significado cultural del momento de alimentación.
A este respecto tendrían que prepararse las condiciones para que las comidas se
constituyan en espacios de solidificación del vínculo, de tranquilidad y amor. En la
mayoría de reclusiones los alimentos son recibidos por las internas quienes comen en los
corredores o patios o celdas. Las reclusiones que cuentan con comedor son pocas, en
algunas en los patios se tiene habilitado un espacio para sentarse pero es insuficiente
para el número de internas, por tanto es un momento traumático y característico de la
cultura carcelaria, en donde el castigo y la humillación hacen parte del ritual.
En la observación se encontró el disciplinamiento propio de los sistemas
carcelarios, con horarios precisos que se ajustan a los requerimientos de atención de los
funcionarios de tratamiento penitenciario a cargo del programa, por encima del derecho
superior del niño a otro manejo del tiempo requerido para su desarrollo, es así como los
niños duermen, comen, son aseados y juegan de conformidad con la decisión de los
funcionarios a cargo y los rituales establecidos para el control en la reclusión, situación
más o menos regular en todas las reclusiones que incluye 7 horas de acompañamiento
(8:00 a.m. a 3:p.m) desde los seis meses en los que la alimentación está a cargo del
programa de atención, el resto es el tiempo del encierro, en el que la responsabilidad de
la interna se pone a prueba y cumple según sus posibilidades económicas y capacidades
o habilidades para dar la alimentación en las 17 horas restantes para los niños y niñas.
Otro aspecto que llama la atención es lo que ocurre durante los primeros mil días
de vida de las niñas y niños hijos de mujeres privadas de la libertad, cuando éstas salen a
45
licencia durante seis meses; ya que el sistema de protección pierde contacto con ellas y
sólo a su regreso con el hijo hija o sin él se restablece ese canal con la institucionalidad.
Es importante preguntarse cómo la persona privada de libertad sin acceso a un empleo en
el marco de familias conflictivas o condiciones socioeconómicas deficientes podrá con un
recién nacido proveerlo de las revisiones médicas necesarias y tener una alimentación
que asegure la calidad de su leche materna. Así mismo es necesario plantearse la
pregunta por las fuentes de las que provendrán los recursos para el sostenimiento del
niño o niña en estos meses, cuando no se tiene red de apoyo y se permanece en la
cárcel.
Si se parte de una perspectiva de los determinantes sociales10 de la salud, se
debería garantizar las condiciones equitativas desde la pre concepción y ello no ocurre
porque algunas permanecen en los patios estando embarazadas, hasta que es visible y sÍ
hay cupo ingresa al programa con lo que le permiten compartir una celda comunal en el
patio de las maternas y recibir una galleta y bienestarina como complemento nutricional.
Al vincular a la problemática los factores que hacen referencia al estilo de vida, los cuales
dependen del contexto, los factores familiares, ingresos, valores, lugar de residencia, el
sexo y la edad, se complejiza la estructura que debería tenerse para afrontar soluciones
viables y consistentes. Desde aquí los factores ambientales relativos a la limpieza,
contaminación, etc. son analizados desde los relatos como:
“Los baños huelan horrible, el ambiente es horrible los niños se enfermen, que
no haya agua porque no hay sanidad, para rematar todas las celdas cerradas. No
hay mecato para darle al niño. Para rematar la pelea entre compañeras y la
dragoneante castiga a todas, pero no todo es malo también nos colaboran a veces
con los niños”
Se ha mencionado en la evaluación de infraestructura las condiciones deficientes de
higiene, acceso al agua, humedad, ventilación, control de plagas, iluminación, desde las
10 Son las circunstancias resultado de la distribución del dinero, el poder y los recursos a nivel
mundial, nacional y local, que depende a su vez de las políticas adoptadas, en que las personas nacen, crecer y viven.
46
observaciones participantes por los diálogos se crearon hipótesis de que se presentan
cuadros de problemas respiratorios, digestivos, problemas en la piel, en esta sección
encontraba una pregunta de donde prevalecen la gripe, pero con certeza no hay una
fuente para determinar la prevalencia de condiciones que afectan la salud de los niños y
las niñas en las cárceles, el análisis de esta situación requeriría un seguimiento más
detallado.
En relación con la salud, la alimentación y nutrición de la mujer privada de la
libertad gestante, se requiere un estado físico y emocional que no es consecuente con la
situación penitenciaria, así como una higiene personal, que riñe con las condiciones de
los patios, en especial en el área de los baños, debe abstenerse del consumo de
sustancias psicoactivas y contar con controles prenatales antes de las semana doce de
gestación, situación que no ocurre, debido a las restricciones en el acceso a servicio
médico en la reclusión; la inclusión en programas de recuperación nutricional y el
consumo de nutrientes, debe darse desde el inicio de la gestación, lo que requeriría por
parte del INPEC, el empleo de pruebas periódicas para detectar el estado de embarazo
de las mujeres privadas de la libertad, para su detección temprana; así como la detección
de condiciones que afectan la gestación y la prevención de infecciones de transmisión
sexual, mediante exámenes de laboratorio y tratamiento oportuno. Un elemento vital,
durante este período es la consejería sobre estilos de vida saludable, lactancia,
sexualidad, buen trato y por supuesto su acompañamiento durante el periodo de
suspensión de la pena por el parto (6 meses), para verificar el estado de salud y nutrición
del recién nacido.
El seguimiento debe hacerse a su desarrollo, esquema de vacunas, detección
oportuna de enfermedades, tratamiento hospitalario y ambulatorio, verificar la posibilidad
de la madre de brindar lactancia materna o complementaria y los elementos básicos para
su bienestar, si no cuenta con una red de apoyo que colabore con su sostenimiento y del
bebé, debe suministrarse la capacitación y oportunidades laborales que le permita
sostener y asumir la responsabilidad que implica el cuidado de una niña o niño.
47
En los órdenes cuantitativos es de resaltar preguntas como:
¿Qué cuidados especiales tuvo en los primeros cuarenta días posteriores
al parto?
¿Su hija/o ha presentado alguna de estas enfermedades en el último mes?
¿Su hijo/hija se encuentra afiliado a un sistema de salud?
Las madres en su mayoría expresa no tener cuidados especiales, en la reclusión
según comentan son casi imposibles, y en sus casa la situación económica en ocasiones
no lo permite; 30 madres encuestadas afirman que no tuvo cuidados especiales de post-
parto, 19 madres comentan que tuvieron alimentación especial. Lo cual referiría a que no
se cumplen las acciones determinadas en la RIA para el primes mes de vida.
Otro tema de interés es la incidencia de enfermedades, 27 madres encuestadas
afirman que en el último mes se ha presentado gripa en sus hijos e hijas, algunas
comentaron que es común ver los niños y niñas con síntomas gripales en la reclusión. La
mayoría de las madres (47 de las madres encuestadas) afirmaron que sus hijos se
encuentran afiliados a un sistema de salud, lo preocupantes es que 15 madres
respondieron que NO y no especificaron porqué, y 18 encuestadas madres no
respondieron, según ellas porque no saben. No se logró establecer de otra fuente una
verificación de la afiliación al sistema, se haría necesario verificar esta información para
ver su estado de vinculación y frecuencia de acceso al servicio, además de continuidad en
los procedimientos sugeridos.
48
49
A los profesionales, técnicos y demás personas que acompañan los procesos en el
Jardín se les preguntó: ¿Considera que se deben hacer cambios en la asistencia médica
para la permanencia de los niños y niñas que están en las reclusiones y sus madres?, a lo
cual se mostraron muy preocupados pues califican como deficiente la atención médica a
gestantes, niños y niñas; 25 personas de institución contestaron que SI es necesario los
cambios en: Prevención ante las enfermedades, acceso a médicos especializados,
prioridad de emergencias, solo 9 personas de instituciones consideraron que NO son
necesarios los cambios.
50
La limitación a que la cobertura en salud en la mayoría del tiempo se presta en el
servicio carcelario, y que ésta es evaluada por los profesionales como deficiente, se
resalta la necesidad de dar alternativas de calidad al proceso de atención de los niños y
las niñas y de fortalecer las acciones de promoción y prevención de las EPS y del sistema
de salud pública en su primer nivel, que en los centros de reclusión sean un foco
prioritario de la atención a la comunidad que se brinda.
En nutrición las madres expresaron lactar a sus hijos, 53 madres de 80
encuestadas manifestaron que Si lactaron a sus hijos y afirmaron que no hay una
alimentación especial para este periodo. Según las encuentra los periodos de lactancia se
extienden principalmente hasta los 6 meses, edad en que salen al Jardín, muchas
expresan que en este tránsito sus hijos e hijas dejan de lactar por el contacto con otros
alimentos.
51
Los tiempos en el programa, son tiempos en los que la madre está ausente, se
comentó que se promueve la lactancia materna pero el manejo del horario y ausencia de
lactarios deja la inquietud de cómo se maneja en la etapa complementaria, además de las
declaraciones de las madres de abandonar el proceso.
Con respecto al proceso de vacunación en la encuesta la generalidad de las
madres señalaron X a todas las vacunas referenciadas, sin relación al esquema según la
edad, en el momento de la entrevista al profundizar sobre el tema de las vacunas las
respuestas eran dispersas entre niños y niñas que contaban con ellas, niños y niñas que
el espacio de atención de ICBF se encargaba del tema, niños y niñas que tenían
dificultades por la disponibilidad del tutor para este tema, se requiere un seguimiento más
específico para determinar el cumplimiento en el esquema de los niños y niñas que
permanecen con sus madres en las cárceles.
Para el proceso de crecimiento y desarrollo, las respuestas eran similares al
acceso a la vacunación, ninguna madre referencio tener conocimientos claros al respecto,
52
la nutricionista o la directora del CDI hacen toma de talla y peso.
COMENTARIOS SOBRE OTROS ORGANIZADORES DE LA RIA CON
RESPECTO A ESTE ESTRUCTURANTE
Frente a los momentos, en la parte de pre concepción no se logró claridad del
manejo de la salud sexual y reproductiva con las mujeres en edad fértil en los centros de
reclusión, la investigación limitada a 8 centros y sin fuentes de verificación precisa para
este tópico, deja la alerta de profundizar en las prácticas de las mujeres privadas de
libertad en la responsabilidad de su vida sexual y capacidad reproductiva, desde las
revisiones junto a las entidades que soportaron el trabajo técnico se aseguró que desde el
ICBF y el sector salud se adelantan talleres sobre el tema, la interiorización y generación
de hábitos de vida de las mujeres privadas de libertad, requieren un abordaje más
profundo y de nivel nacional.
En cuestiones de salud las madres gestantes y las demás madres que pasaron su
gestación en la reclusión expresaron ante la pregunta ¿Qué especialidad le brindó
asistencia durante el embarazo?, que predomina la atención del médico general, médico y
enfermería y solo enfermería en ocasiones. Lo que más exigen es atención especializada
en gineco-obstetricia. Y en cuento a nutrición es importante la mayoría de las madres no
recibe alimentación especial en esta fase de la vida, a la pregunta ¿Recibió una dieta
diferente a la habitual durante el embarazo en reclusión?,55 madres encuestadas de 80
participantes respondieron que NO recibían una dieta diferente, para 16 madres de las
encuestas SI hay alimentación diferenciada durante el embarazo, 9 de ellas no respondió,
pues no pasaron su gestación en la reclusión. Es de anotar que el complemento
alimenticio dado a las madres es un vaso de bienestarina o colada con dos galletas de
soda una vez al día.
53
Con respecto a las acciones planteadas por la RIA para la etapa de
gestación y lactancia frente a cuidados de salud, alimentación y nutrición así como el
proveer complementos nutricionales, no se evidenciaron como presentes desde las
encuestas y comentarios de las mujeres privadas de libertad.
Frente al trabajo con diversos actores y la compresión de guardianes y
familia frente a las características y cuidados propios de salud en los momentos de cada
etapa de la primera infancia, no se hicieron notorios y por la declaración de imposibilidad
54
decuidados especiales, se evalúa que más allá de las capacitaciones se debería verificar
la apropiación y recursos para dar respuesta. Los niños y niñas como beneficiarios
directos de la atención de profesionales en salud y de una actitud de bienestar de los
demás actores involucrados, no hay precisiones de su estado de salud, información de las
madres de sus condiciones de crecimiento y desarrollo.
Para el entorno Salud se podría considerar como en otras experiencias
internacionales la opción de un servicio de pediatría en los centros de reclusión,
mecanismos de salida de los niños y niñas más agiles desde los guardias y con la
compañía de sus madres, además de un seguimiento por parte de un profesional que
evalúe y oriente a las madres y otros adultos vinculados en el cuidado, en el proceso de
desarrollo propio de cada niño o niña.
Las atenciones especializadas hablan de seguimiento a situaciones de desnutrición,
incumplimiento del esquema de vacunación, falta de afiliación al sistema entre otros, y
aunque esta investigación no genera datos específicos sobre esta situación, si hace
visible la posibilidad de vulneración en estos aspectos razón por la que se requiere
verificar sí existe un sistema propio que centralice esta información o se debería trabajar
intersectorialmente para comprobar estos temas.
55
2.1.3. Educación Inicial
“Como derecho impostergable de la primera infancia, la educación inicial se
constituye en un estructurante de la atención integral cuyo objetivo es potenciar de
manera intencionada el desarrollo integral de las niñas y los niños desde su nacimiento
hasta cumplir los seis años, partiendo del reconocimiento de sus características y de las
particularidades de los contextos en que viven y favoreciendo interacciones que se
generan en ambientes enriquecidos a través de experiencias pedagógicas y prácticas de
cuidado”11.
La educación inicial como la atención intencionada para el desarrollo integral de
los niños y las niñas, es difícil de considerar en su capacidad de impacto en una visita y
observación, desde diversos estudios y declaraciones a nivel nacional e internacional se
ha partido del precepto que en las reclusiones hay limitaciones para el desarrollo de los
niños y las niñas, por lo cual en otros países se ha propuesto realizar evaluaciones
puntuales para caracterizar el desarrollo de los niños y las niñas, desde la observación
participante en unas horas de la jornada de los centros, se observaron niños y niñas con
un nivel distinto de expresión, movimiento e interacción que pudiera observarse en otros
espacios de primera infancia, pero para las agentes no había ninguna situación particular
y las madres contestaron en la encuesta:
A la pregunta de selección múltiple: “Considera que el
desarrollo de su hija/o en el centro reclusión ha sido”, 50 de
las encuestadas con el 62.5% afirmaron que es adecuado,
con el 30%, 24 manifestaron no responde, no sabe.
11 Fundamentos estrategia de atención integral para la primera infancia.
56
En su mayoría lo consideran adecuado, pero comentan de falta de capacidad
de los niños y las niñas a responder a entornos y personas diversas por la monotonía de
su vida en los centros de reclusión, el siguiente porcentaje de mayor número es el de no
sabe y no responde, quizá por una falta de conocimiento pero habría que profundizar para
saber su percepción y en un pequeño porcentaje pero significativo al hablar en la Ruta de
atención a cada uno y cada una, se habla de niños y niñas con un desarrollo inadecuado.
Frente a configurar una educación que responda a las características y
particularidades del contexto, no se reconoció o comentó la generación de respuestas
específicas que respondan a las particularidades del transcurrir de la primera infancia en
un centro de reclusión, es un tema que seguramente no puede generar respuestas
inmediatas pero que merecería una reflexión más profunda.
El ambiente enriquecido que fortalezca la interacción se ve limitado por la falta de
personal que pueda dar un cubrimiento a los diferentes momentos que marcan un
desarrollo y experiencias diferentes, la falta de acceso a material didáctico y espacios
diversos espacios, hace que por parte de las agentes se considere que se hace un
trabajo desde las opciones que encuentran en cada reclusión sin ser las ideales para
generar acciones pedagógicas, porque es difícil el acceso de los profesionales externos a
la reclusiones, así como también el ingreso de materiales para el desarrollo didáctico,
57
pues al estar los centros infantiles al interior de algunos patios, algunos elementos están
totalmente prohibidos.
Sobre la planeación se pudieron ver varias minutas, en ellas no se hacía evidente
la participación activa e intencionada de los niños y las niñas en su construcción, reto que
se enfrenta en todos los espacios de atención a la primera infancia, en algunas ocasiones
las actividades que se observaron en el momento eran diferentes y se enfocaban en
experiencias de cuidado, más que en experiencias pedagógicas.
Como impulsadora del desarrollo la educación inicial establece las actividades
rectoras como posibilitadoras del aprendizaje: juego, arte, literatura y exploración del
medio:
En la observación fue posible ver el juego en los niños y niñas en la mayoría fue
un juego libre, no se evidenciaron durante las visitas los juegos que podrían ser
tradicionales o parte de la apropiación cultural, se limitan con los objetos accesibles del
lugar. En los espacios se destacó una actitud de observación para el cuidado de los niños
y las niñas, no se hizo evidente en ese tiempo la interacción o proposición de las
maestras durante el juego.
En otras actividades dirigidas por la pedagoga que involucraban canto, baile o
pintura, se evidenció la homogenización de las actividades en un grupo heterogéneo, así
como una tendencia a trabajar en el seguimiento de órdenes, cuidado de la limpieza al no
tener delantales o más prendas de cambio, y manejo de la mesa para todas las edades y
durante todo el tiempo de liderazgo de la agente educativa.
En unos centros se observó que cuentan con literatura infantil adecuada y fue
posible presenciar la lectura a los niños de un cuento, también hay títeres y elementos
que permiten la expresión y comunicación con los niños. En otros lugares no se evidenció
el manejo de actividades de literatura. Sin embargo, se destaca que se observaron
algunos intentos de alfabetizar prematuramente mediante planas, se requiere continuar en
todos los espacios de educación inicial la superación de esta atención como preparatoria
58
de la escuela.
Sería interesante involucrar durante los dos primeros años a la madre de una
forma más intensa en el cuidado y desarrollo de su hijo o hija y que se generaran
actividades diarias para el fortalecimiento del vínculo, capacitación en crianza, desarrollo
de proyecto de vida, preparándola para generar un sostenimiento económico alternativo,
en la toma de decisiones, métodos de planificación familiar, entre otros. De esta manera
disminuirá la ansiedad de la madre y la posibilidad de un comportamiento agresivo con el
niño o niña, así mismo se articularía el tratamiento penitenciario en una población
particularmente vulnerable y discriminada, con el fin de brindar un espacio para las voces
de las madres se incluye el siguiente fragmento de entrevista.
“Que nos re socialicen verdaderamente y esto no es solo para las
embarazadas o las que tenemos hijos sino para todas. Aquí hay una psicóloga para
trabajar como con 1000 personas, Que nos capaciten en cosas que sirvan para
defendernos cuando salgamos, Nos dicten charlas que no sirvan para interactuar”
El personal que trabaja con las madres – hijos e hijas, resaltaron que en general la
dificultad evidente para llevar a cabo esta acción es, saber cuál es el trato asertivo que se
debe dar a estas madres, que se encuentran en una situación significativamente diferente
a la de cualquier otro programa de ayuda social; desde su opinión por estar las madres,
privadas de la libertad, tienden a ser más exigentes y conflictivas, por lo cual el personal
sugiere capacitación en manejo de la población materna en reclusión específicamente.
Actualmente cuentan con capacitaciones en manipulación de alimentos cada 6 o 10
meses, nutrición una vez al mes, y eventualmente en valores, prevención de
enfermedades y manejo docente.
59
Emerge en este estructurante, las necesidades de las niñas y los niños de primera
infancia que no obtienen el cupo en las reclusiones o cuyas madres están privadas de la
libertad en otras penitenciarias y cárceles del país que no cuentan con el Convenio. La
información al respecto no es clara y requeriría de un estudio de mayor profundidad y
seguimiento nacional.
COMENTARIOS SOBRE OTROS ORGANIZADORES DE LA RIA CON
RESPECTO A ESTE ESTRUCTURANTE
Con respecto a los momentos planteados en
la ruta se propone que el entorno educativo apoye
en la pre concepción el manejo de la concepción
del niño y niña como sujetos de derechos, los
facilitadores o barreras del desarrollo y la
importancia que tienen para este los vínculos
afectivos adecuados entre adultos y niños y niñas.
Como se menciona en el apartado de la entrevista
se podría vincular al personal en algunas acciones
formativas intersectoriales para las mujeres en
edad fértil en las reclusiones para que puedan
desarrollar estos aprendizajes y ser conscientes de
los que supone tener un niño o niña en el contexto de privación de libertad.
En la etapa de gestación se supone que debe darse todo un acompañamiento en
los aprendizajes propios de embarazo, el parto, la lactancia y el arte de cuidar y criar, se
hace la salvedad de que se otorgarán en la etapa de escolarización pero reconociendo la
deserción educativa ligada a las personas privadas de libertad, es vital que la educación
inicial considere como puede generar facilidades en la formación para las madres
gestantes vinculadas a su espacio.
60
En el primer mes de vida y hasta los seis meses no hay conexión del espacio
brindado por el convenio con las madres privadas de libertad y sus hijos e hijas, sería
importante ver si las mujeres que pasan esta etapa en sus hogares están ligadas a las
modalidades de atención familiar de su contexto y como se puede generar un espacio
familiar con sus acciones prácticas como son propias de esta modalidad, para quienes
pasan este tiempo en las cárceles.
Desde los seis meses hasta los tres años de edad que es la etapa según
aprobación de la ley Colombiana para estar en el programa, como se destaca se
considera que hay un acceso al entorno educativo para los niños y niñas, que este
requiere una evaluación para determinar la igualdad de oportunidades y enriquecimiento
desde el contexto propio de desarrollo de estos niños y niñas y una vinculación más activa
con las madres, familias desde brindar facilidades locativas y de dotación como se sugiere
en las recomendaciones de infraestructura.
En la educación los diversos actores del contexto desempeñan un rol importante, es
por esto que la Estrategia propone la formación de los actores vinculados a la vida de los
niños y las niñas, aspecto que se profundizará en el producto de esta investigación
denominado propuesta de sensibilización y cualificación. De igual forma se reconoce el
papel fundamental que cumplen las agentes educativas, un grupo central en esta
formación y que debe tener en cuenta su alta rotación, las mujeres reclusas que redimen
pena en esta actividad son rotadas en promedio cada seis meses, los profesionales
cambian cada contrato que puede ser de seis a ocho meses. Del personal encontrado en
las visitas cerca de un 80% no tenían más de un año de labores y no tenían en referencia
las capacitaciones hechas por ICBF, ya que han sido fuera del tiempo en que ellas han
estado, por lo cual iniciar una sistematización y gestión del conocimiento, permitiría una
memoria permanente de las acciones dadas en el programa.
Las atenciones especializadas y diferenciales ligadas a la educación inicial están
enmarcadas en la capacidad de reconocer la diferencia y dar respuestas específicas a
una situación propia de condiciones de vida, cultura, raza, situación de discapacidad. No
61
se observaron niños. niñas y acciones con condiciones diferenciales, en el caso de
discapacidad se aclaró que existe una política de no aceptación de niños y niñas en esta
condición por falta de capacidad de respuesta institucional.
2.1.4. Recreación
“Este estructurante busca promover la construcción de la autonomía y la
autodeterminación de las niñas y los niños a través del favorecimiento de experiencias
significativas que privilegien y promuevan el disfrute, el esparcimiento, la libre expresión
creativa y el deseo de ser en relación con el mundo.”12; la posibilidad de recrearse se
constituye en el área de menor desarrollo en las reclusiones del país, ya que la movilidad
y exploración es mínima, además fuera del Centro Infantil en muchas reclusiones no se
cuenta con otro espacio para los niños y niñas, lo cual resulta ser más significativo los
fines de semana y festivos que no hay servicio de atención del programa y los niños y
niñas expresan frecuentemente su aburrimiento con llanto y pataletas frecuentes, una de
las madres comenta:
“… Pues es que la niña se me estresa mucho, por el encierro, no sé cómo un
poquito más de recreación, porque cuando ella sale a la cancha ella se siente
mejor”
Los niños y niñas no muestran agrado al estar encerrados en las celdas según
comentan las madres, ellos prefieren espacios abiertos, una de las madres entrevistadas
expresa:
“Compartir diariamente con nuestros hijos y con los otros rompiendo así el
individualismo y mundo que cada uno se crea en su celda. Que nos dieran los fines
de semana acceso a este lugar” (hace referencia al espacio del jardín, como único
espacio para la lúdica de los niños)
12 Fundamentos Estrategia de Atención Integral para la primera infancia.
62
Plantear la recreación en la atención integral para la primera infancia nos pide
trabajar en acciones prioritarias:
El desarrollo de lo lúdico requiere de la resignificación de la recreación y el ocio, en
nuestro medio está ligado al espacio físico por lo cual hablar de la libre voluntad, el
disfrute, la posibilidad de desafiar las barreras y limitaciones en una institución creada
para privar la libertad, es un reto para desarrollar el goce, descanso y diversión en un
medio de disciplinamiento y castigo. Se requiere poder analizar la opción de participación
en la recreación, más allá de un espacio físico y objetos.
Existe una identificación de las barreras por parte de las madres y agentes
educativas, es necesario trabajar en la superación y generación de alternativas para la
recreación y el ocio.
El favorecer las oportunidades de exploración y creatividad actualmente depende de
la capacidad del adulto para facilitar al niño o niña en el entorno educativo por parte de las
agentes, en el hogar por parte de las madres privadas de libertad o espacios públicos por
parte de los tutores, opciones concretas de participación con la construcción y expresión
de la libre voluntad de los niños y las niñas, la cual se define en su gran mayoría como
limitada.
No solo se espera con la ampliación de espacios lúdicos y recreativos mejor
desarrollo de los niños y niñas, también la madre expresa que sería una forma de hacer
más solidarias las relaciones entre las madres. Varias madres expresan que han podido
ayudar en los jardines y esto les ha permitido aprender, lo cual les motiva a pensar en
estar apoyando de forma más activa las acciones en los momentos que no descuentan ni
en educativas, ni en talleres, ellas quisieran poder apoyar el programa para mejorar las
condiciones de los niños y niñas ya si también ellas tener una vida más activa, que se
espera pueda repercutir positivamente en la vida de sus hijos. Una madre comenta:
63
“…Para yo poder seguir ayudándole a la profesora, porque a mí me gusta
mucho, ósea me enfoque tanto en esto y aprendí tanto que yo creo, yo estoy en
este patio pero quisiera estar allá colaborando”
Cuando hay pocas opciones para las madres están disminuyen sus posibilidades
creativas, algunas madres no salen en el día de los patios y en la tarde y noche al estar
con sus hijos e hijas, tiene pocas opciones para que los niños y niñas estén a gusto al
interior de la celda, una de las conversaciones de las entrevistas muestra esta realidad:
Investigador: Y ¿tú qué haces para poder correrla de ahí, qué te inventas?
Madre: Le traigo la pelota, así otro cualquier juego para que vea que no hay que
salir.
La recreación por estar íntimamente ligada a la concepción de educación tiene un
lugar preponderante en las actividades del jardín en el que cuenta con los elementos,
personal contratado para su atención, constituyéndose en un entorno principal para la
actividad física, el arte y la lúdica a través de los cuales se forman como seres humanos
creativos, sensibles y solidarios. Sin embargo preocupa que en este espacio la actividad
diferente a alimentar, limpiar o dormir ocupe la mayor parte del tiempo.
Por otra parte, dadas las condiciones socio-culturales de las mayoría de las
madres beneficiarias del programa, quienes no saben ¿cómo generar espacios de juego
con sus hijos?, porque en sus historias de vida fueron víctimas de abandono, trabajo
infantil o vivieron en contexto de delincuencia; y sumado a ello, de conformidad con la
ENDS, 2010, citada en los fundamentos políticos y técnicos de la gestión de cero a
siempre (pág. 49) dentro de las principales actividades de recreación que desarrollan los
cuidadores de niños(as) cuando están en casa, salir a pasear ocupa el 78%, condición
restringida a una hora de sol en las reclusiones nuevas y al desplazamiento a su jardín
cuando está afuera del patio en las construcciones viejas. Por lo que en este punto se
sugiere capacitar a las madres en juegos, rondas, lectura de cuentos y brindarles la
posibilidad de espacios de juego del jardín los fines de semana o de una zona donde
puedan recrear los niños y niñas. También se pudo observar que en la mayoría de los
64
jardines se cuenta con material suficiente y en ocasiones almacenado, este podría ser
distribuido en la población carcelaria con niñas y niños del programa y fuera del programa,
pero en el rango de edad que permita su disfrute; o en su defecto realizar un sistema de
préstamo, similar al de las bibliotecas para facilitar el acceso de los niños(as) a este
material.
COMENTARIOS SOBRE OTROS ORGANIZADORES DE LA RIA CON
RESPECTO A ESTE ESTRUCTURANTE
En el trabajo por los momentos debe tenerse en cuenta la importancia de la
recreación en la orientación que se dé a las mujeres privadas de libertad en la pre
concepción.
En el caso de las gestantes la recreación también es mínima, es común notar que
la sola posibilidad de movilidad no tiene mayor alcance en las reclusiones, una madre
gestante comenta en entrevista:
“Si pero como uno nunca mantiene cuando uno no tiene descuento, así como
yo que no tengo descuento no hay patio no hay nada, yo me la mantengo es en mi
celda durmiendo”
Uno de los aspectos críticos encontrados es la falta de recreación y actividad física
en las embarazadas, (pasan horas sentadas o acostadas en el piso en los patios, ello
comporta riesgos físicos y psicológicos que luego influyen en el comportamiento social de
la madre, generándose situaciones como adicciones, agresiones, etc. que luego redunda
en el niño o niña en gestación.
Sí se asegura un trabajo de toma de conciencia desde la pre concepción y
se refuerza en la gestación, es más factible que se aproveche y se generen
espacios de ocio y recreación d las madres junto a sus hijos o hijas en el momento
que pasan de forma independiente del nacimiento hasta los seis meses.
65
Como se comenta es necesario revisar las opciones de recreación y ocio que
puedan apoyar a estructurar a agentes, madres y tutores de los niños y niñas en los
centros de reclusión.
En cuanto al trabajo de actores como se ha mencionado deben involucrarse todos,
desde la resignificación, hasta la superación de barreras y orientación para favorecer las
oportunidades de recreación y ocio, reconociendo su importancia para los niños y niñas y
para ellos/as mismos/as.
En cuanto a la recreación con respecto a los entornos, se planteó como es
necesario verla en todos los entornos, por ejemplo en el de salud para vitalizar y hacer
más amigable los momentos de vivir una enfermedad.
Con respecto a las atenciones especializadas, debería considerarse la situación de
los niños y niñas en los centros de reclusión para generar alianzas intersectoriales que
permitan dar respuestas a una situación tan particular.
2.1.5. Participación y construcción de ciudadanía.
“Este estructurante de la atención a la primera infancia busca favorecer la
construcción del sentido de identidad personal y colectiva en la diversidad, a través de la
promoción de la participación de las niñas y los niños en sus entornos, como ejercicio de
libertad y de inclusión de acuerdo con los distintos momentos del ciclo vital, reconociendo
sus múltiples formas de expresión y las diversas manifestaciones de lo que significa ser
escuchado, percibido, tenido en cuenta y tomar parte activa de las decisiones sobre la
propia vida y la de los grupos y comunidades a los que se pertenece.”13
La construcción de identidad es un tema complejo de analizar, como se ha hecho
evidente en otros apartados a partir de las encuestas, entrevistas, observaciones durante
dos días, es difícil generar una apreciación objetiva al respecto, se requeriría un análisis
13 Ídem.
66
de mayor amplitud para conocer el efecto del transcurrir de la primera infancia en
penitenciarias.
La construcción del sentido de la identidad personal se ha documentado y soportado
ampliamente para la primera infancia, aunque de esta etapa no exista una memoria
explicita, se habla de que se sientan las bases de la personalidad, actitudes e inteligencia
emocional de las personas, en Colombia existe poca documentación de cómo se
desarrolló la identidad de niños y niñas que hayan vivido su primera infancia en una
reclusión, en otros países se encuentran reportes de que aunque no existan recuerdos
propios, hay resistencia a lugares cerrados o respuestas inconscientes a exigencias
sociales comunes, es difícil el paso de adaptación a vivir en sociedad. En un documental
del canal RCN, transmitido en la televisión Colombiana en el mes de Marzo de 2014,
entrevistan a una niña que narra sus recuerdos negativos del tiempo en el que vivió en la
reclusión de mujeres pero que de igual forma tiene un buen recuerdo y extraña mucho a
su madre.
Se ha descrito en el estructurante de cuidado y crianza que el ambiente carcelario
se caracteriza por un entorno hostil y de violencia, ¿qué aporta esto a la estructuración de
la identidad personal y colectiva de un niño o niña? Se presenta el siguiente testimonio
para reflexionar en este tema:
“Por ejemplo, esta mañana se agarraron dos; ¿qué hice yo? - papi venga, nos
entramos a la celda, - mira cantemos,… Yo sé que es una forma evasiva, pero yo no
puedo permitir que mi hijo… -Papi ven; uno trata de cambiar esa situación por algo
agraciado. Esto es a raíz que no se trabaja el stress, el encierro, la integración”.
El sentido de construcción de lo colectivo depende totalmente de las condiciones del
contexto, la consolidación de lo diverso e inclusivo, del respeto y el deber, de las
libertades y obligaciones están mediados en lo que los niños y niñas reciben desde el
ejemplo de los adultos, si el estrés, el encierro y la falta de integración son la definición
colectiva de un entorno ¿Cómo afectará esto la configuración de sociedad y del otro que
67
forman estos niños y niñas?
Por ejemplo se dice que la alimentación, más allá de nutrición se establece como un
proceso de carácter bio-psicosocial y cultural, que es acompañado de un ritual con una
connotación simbólica, que interviene en la construcción de identidad y sentido de
pertenencia a una familia y a una comunidad, pero estos espacios en su mayoría se viven
en el Centro de Desarrollo Infantil, temores frente a que las madres comercialicen la
comida o la consuman han hecho que en muchos espacios tomen la decisión de realizar
esta actividad solo en el entorno educativo.
La falta de espacios de interacción, los narra una madre:
“Por ejemplo - si a mí me entregan el niño a las 4 de la tarde, nosotros no nos
vemos las caras sino los fines de semana, entonces no hay integración”
Este fomento del vínculo madre e hijo o hija, es un reto que enfrenta el mundo actual y
aunque se toma la decisión por el niño o niña de estar en una cárcel para que se preserve este
vínculo por su protección y desarrollo se limita éste al entrar en el programa de educación inicial.
Con relación a la etapa de la gestación, se preguntó: ¿Durante su embarazo, realizó
acciones de estimulación para fortalecer el vínculo emocional con su hijo/a?, 52 madres
encuestadas respondieron que SI realizaron estas acciones, 12 de ellas afirmaron que NO,
68
Nuevamente se tiene un grupo de mayoría que afirma hacerlo, y otros dos grupos
sin respuesta o con una respuesta negativa, se requiere ver como se fortalece la
participación desde la gestación, más allá de la estimulación y en el reconocimiento de
ese niño o niña.
Pero de igual forma la identidad colectiva no depende de una figura solamente como
lo es la madre, estudios a nivel internacional reconocen que una de las problemáticas
centrales es el imaginario social de responsabilidad y culpabilidad de la madre como
absoluta responsable de los hijos o hijas esto hace que ellos deban estar en los centros
de reclusión con ellas y como se ha mencionado por más que no es la intención directa,
no hay un ejercicio de libertad, sino se toma la decisión por ellos y ellas de vivir su
desarrollo en una situación de privación de la libertad.
La opción para no solo estar en el espacio de penitenciaria son los tutores pero
podemos observar la preocupación de las madres que se manifiesta en el siguiente
testimonio:
Los tutores son el acudiente en mi caso mi familiar, pero hay otras que no
tienen; en ese caso es la amiga o una persona que visite. ¿Cómo se van a sacar
niños amenazando a las madres que se lo van a quitar? ¿Cómo vamos a construir
69
niños que amen la vida, amenazándolos y en un entorno como éste? Aquí la gente
no habla, el día que vino la Procuraduría las observaciones fueron anónimas porque
se tiene miedo de que le saquen el niño. Hay mucha presión. Los niños salen a los
tres años pero no se les hace seguimiento. ¡Una compañera está sufriendo porque
tiene 4 hijos y están en la calle y ahorita le sacan al que tiene y no sabe qué hacer!
Hay niños y niñas que no cuentan con tutor o su tutor en los casos en los que lo
tienen, no cuenta con la capacidad económica o con el tiempo para estar al tanto de las
necesidades del niño y la niña, ausentándose de las reclusiones por largos periodos de
tiempo, que además de ser un tiempo donde niños y niñas pierden contacto con el mundo
social fuera de la reclusión, tampoco pueden generarse salidas médicas de emergencia.
Otro rol vital de los cuidadores, será el apoyo al egreso y su configuración de
identidad colectiva y personal que faciliten a los niños y niñas en su segunda etapa de la
primera infancia fuera de los centros de reclusión, en relación con el tema del egreso es
sabido que en varios casos los niños y niñas egresan sin la madre, y actualmente no hay
ningún tipo de seguimiento al estado de derechos de estos niños y niñas; antes de la
salida, ICBF valida el tutor que se hará cargo del niño o niña, y en algunos caos a pesar
de ser una persona con la mejor intención de cuidado no cuenta con las condiciones
socio-económicas para hacerlo, dejando a los niños y niñas expuestos a situaciones de
maltrato, descuido y malnutrición.
Muchas madres expresan que a pesar de las incomodidades propias de la
reclusión es mejor que los niños y niñas estén allí con ellas, pues fuera no cuentan con
sistema estable que les acoja. Pero al cumplir tres años los niños y niños deben salir
cuenten o no con un buen sistema familiar de acogida; ante el egreso no hay programas
establecidos, según comentan los profesionales, las madres hablan un par de veces con
la psicóloga, y a los niños se les hace una fiesta de salida, y aunque estas dos acciones
tiene la mejor intención no son suficientes para asegurar la participación de los niños y las
niñas en esta decisión de gran afectación en su vida.
70
Uno de los fundamentos para la atención a la primera infancia es el reconocimiento
como sujetos de derechos, a quienes debemos garantizar como Estado sus derechos,
pero se reconoce un imaginario estigmatizado de temor y amenaza frente a la entidad que
protege a los niños y niñas en el país como lo es ICBF, por lo cual no hay una red de
trabajo entre las madres y la institución para velar por los derechos de los niños y niñas
sino que se esconde y restringe información.
En la actualidad algunas de las entidades del Estado son vistas como instituciones
que vulneran y no protegen los derechos; esta visión de las personas en reclusión se
genera principalmente por el poco contacto institucional, que se disminuye en gran
medida en estos espacios, generando situaciones como: citaciones fuera de la prisión
para procesos de adoptabilidad de hijos e hijas de las reclusas, cuando ella no pueden ir a
cumplir estas citas; desconocimiento de tiempo real de condena, después de dos o tres
años de condena y varias acciones de descuento; incomprensión sobre la exclusión de
programas como familias en acción o programas de acceso a vivienda; entre otras. Estas
situaciones fueron comentadas por las mujeres privadas de la libertad y por funcionarios
que las acompañan en las reclusiones.
Otro tema en el que se puede tener participación y vínculos con otras personas, es
el espacio para las visitas, en el que no solo se encuentran los niños y niñas que viven en
la cárcel sino que existe la presencia de niños o niñas que visitan a sus madres internas
en las reclusiones, el reconocimiento de su interés superior, el ser escuchados,
percibidos, tenidos en cuenta y tomar parte activa de las decisiones sobre la propia vida y
la de los grupos y comunidades a los que se pertenece, como sus familias, el contexto de
la reclusión de mujeres, su CDI, no se observaron.
Niños y niñas de visita cumplen los protocolos institucionales preestablecidos para
la seguridad de retención de las privadas de libertad, niños y niñas que viven en las
cárceles con sus madres cumplen los protocolos de seguridad según la penitenciaria y la
dirección en la que vivan, pero no se identificaron mecanismos de participación donde se
retomen sus expresiones donde, más allá de tener en cuenta sus necesidades, se
71
busquen sus opiniones, gustos, propuestas e intereses generando respuestas y haciendo
válida su participación.
Es decir, ello implicaría un cambio radical en la organización, disposición y
prácticas durante la visita y estadía de los niños o niñas, ya que el castigo a la persona
privada de libertad no pueden ser violatorio de los derechos superiores de los niños(as).
COMENTARIOS SOBRE OTROS ORGANIZADORES DE LA RIA CON
RESPECTO A ESTE ESTRUCTURANTE
Los momentos para la participación y construcción de ciudadanía se centran
nuevamente en la toma de conciencia de lo que significa ser madre y lo que implica para
ese niño o niña desarrollarse en una situación de privación de la libertad, en la gestación,
durante el primer mes y hasta siempre, se debe apoyar a las madres para reconocer las
formas de expresión de sus hijos e hijas y hacerlos participes de su vida.
Frente a los actores es necesario reconocer a los niños y niños como sujetos de
derechos por parte de todos y todas, madres privadas de libertad, otras mujeres que
convivan con ellos, personal del INPEC, Personal de los programas de educación inicial,
entorno de salud cercano, entidades de recreación y cultura, entidades de protección de
derechos. Sin derivar la responsabilidad a una sola entidad, la garantía de derechos para
los niños y niñas es corresponsabilidad de todos, El Estado, la sociedad y la familia, la
construcción de ciudadanía de los niños y niñas que viven con sus madres en las cárceles
es un asunto de análisis interinstitucional, intersectorial y un compromiso de país.
La participación es un reto en todos los entornos para primera infancia, aún más un
reto para cuando se están buscando asemejar contextos restringidos como el carcelario a
la atención integral de los niños y niñas, el trabajo de participación en primera infancia
requiere mayores esfuerzos y con más énfasis en este tipo de contexto.
72
En las atenciones especializadas se reconocen mecanismos establecidos para
verificar y revisar el cumplimiento de los derechos de las mujeres privadas de libertad
pero en el sistema de protección de los niños y niñas esta responsabilidad y mecanismo
no está claro, a pesar de hablar de una situación donde se puede generar una hipótesis
de que no existe un acceso pleno a los derechos de los niños y las niñas que viven con
sus madres en centros de reclusión en el país, no se percibió un mecanismo preciso que
estudie la situación de derechos de estos niños y niñas durante su estancia en el centro
de reclusión y como lo expresan las madres, aún más preocupante al salir de ellas.
2.2. Caracterización de cada una de las Reclusiones
2.2.1. Reclusión Mujeres de Bogotá
Se encuentra ubicada en el Barrio
Entre Ríos en la ciudad de Bogotá, siendo
construida en 1957. Actualmente sostiene la
misma realidad de hacinamiento que tienen
las reclusiones del país, que corresponde a
un índice del 55,2 %, según las cifras del
Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario
(INPEC) citado por (Salazar, 2014). El cupo
de internas es de 129814.
La mayoría de gestantes, madres y
sus hijos e hijas se encuentran ubicados en
un mismo patio, pero no es exclusivo para ellos y ellas por las condiciones de
hacinamiento, comparten el patio con las personas de diferentes edades y delitos. En este
patio las madres cuentan en el primer piso del patio con celdas individuales para
compartir con sus hijos, y para los momentos fuera de la celda, existe un pequeño
espacio para un salón que cumple las funciones de ludoteca, comedor y centro de
14 Información reclusiones de mujeres de la Procuraduría en
http://www.procuraduria.gov.co/portal/media/file/descargas/publicaciones/mujeresyprision_anexo2_sistematizacion.pdf
Celda común segundo piso
73
actividades, y tiene un pequeño parque infantil, que a pesar de no contar con los
estándares para niños y niñas de cero a tres años, permite al patio tener un ambiente
diferenciado a los demás. Según cometan las madres hay problemas de salubridad en
general por mal estado de las locaciones, además el agua es racionada durante el día.
En ocasiones se presenta según el relato de las madres y personal INPEC, la presencia
de mujeres consumidoras de psicoactivos, quienes prefieren áreas de consumo como los
baños, que en el caso del patio de niños y niñas es una directa contaminación para los
espacios públicos de los niños, niñas y sus madres.
Otra necesidad identificada como prioritaria es la protección de las madres
gestantes, mejorando los espacios de alojamiento y nutrición. Por las condiciones de
sobrecupo, el personal INPEC explica que hay madres que se han ubicado en zonas no
adecuadas para su etapa, pero no hay como organizar mejores condiciones con las
problemática de déficit de cupos y deterioro de locaciones de la reclusión en general. Las
madres gestantes que están en estos lugares inadecuados comentan que deben estar
largas horas al interior del espacio adaptado para ellas, reconocido como celda común,
donde además del evidente sobre cupo, no hay condiciones para un descanso adecuado,
además de existir enorme riesgo de contagio de infecciones por las inadecuadas
condiciones sanitarias, las zonas comunes son mínimas o inexistentes, además de tener
un servicio médico con pocas posibilidades de atención profesional o exámenes
especializados y poca diversidad de medicamentos.
En la atención a los niños y las niñas, es uno de los programas más completos,
cuentan con directora de jardín (profesional INPEC), psicología (dos veces a la semana),
nutricionista (dos veces por semana), tres pedagogas (de lunes a viernes) y cuatro
mujeres reclusas que están en el programa de redención de penas por esta labor.
Además de estos servicios propios del convenio, también se han logrado convenios de
práctica con la Universidad Javeriana desde la Licenciatura de Pedagogía Infantil, durante
la visita se logró contacto con la coordinadora de practicantes de la universidad. Gracias
también al contacto que se logró con la delegada de la Secretaria Distrital de Salud, se
determinó que hay acompañamiento de esta entidad, no solo en la revisión constante y
74
las recomendaciones de cambio, sino también por la visita bimensual de un ingeniero de
alimentos para la inspección y mejora del lugar.
La siguiente tabla presenta la distribución de la población de gestantes, niñas y
niños, según datos suministrados por la coordinadora del programa:
Gestantes Nacimiento
al primer mes
Primer mes
a tres años
Total
beneficiarios(as)
Sin Confirmar 3 32 35
Ilustración 1. Distribución de la población de gestantes, niños(as) en la RM Bogotá
En cuanto al acceso que tiene las madres a productos y bienes de consumo
personal los cuales incluyen lo requerido para sus hijos, es de resaltar que en Bogotá
tiene apoyo externo a la reclusión para los elementos básicos, en ocasiones al
presentarse ausencia de esta posibilidad el programa provee elementos básicos, así
como también pueden compartirlos entre las madres o comercializarlo desde un sistema
de truque. Otra ventaja de esta reclusión es la variedad de actividades relacionadas con
educación, cursos y talleres, en las que las madres descuentan tiempo de condena, pero
en pocas ocasiones estos trabajos les proveen usufructo económico.
Con respecto a temas de salud las madres expresan el deseo de contar con un
trato más comprensivo para con las maternas, en especial en el tiempo próximo al parto
cuando ellas no han logrado salir a la detención de pena; también se espera menor
tiempo de espera para la atención de los niños y niñas, así como para contar con la
atención de un médico especialista en infancia. En Bogotá se cuenta con el mayor
número de madres, hijos e hijas, varios de ellos no cuentan con tutores o aun contando
con ellos estos en ocasiones no tiene la solvencia económica suficiente para visitarlos con
frecuencia o llevarlos fuera de la reclusión a actividades diferentes a las relacionadas con
salud o por situaciones de emergencia como la última epidemia de varicela.
La población que participó en las encuestas en la reclusión de mujeres de Bogotá,
fue del 40% del total de madres beneficiadas con el convenio ICBF – INPEC, es decir un
total 14 madres. Esta muestra nos permite ver de la población que la mitad de las mujeres
75
dice estar en unión libre; un 75% que equivale a 10 mujeres aproximadamente tiene entre
uno y tres hijos; casi el 50% está entre los 25 y 32 años y la escolaridad más avanzada
es secundaría incompleta, teniendo en cuenta que hay dos madres una con universidad y
otra con estudios técnicos.
¿CU
ÀNTAS
HIJAS/OS
TIENE?
¿CUÀL ES
LA ESCOLARIDAD
ALCANZADA?
¿CUÀNTOS
AÑOS TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO CIVIL?
T
otal S
OLTERA
U
NIÒN
LIBRE
SEP
ARADA
V
IUDA
UNO
A TRES
PRIMARIA
INCOMPLETA
DE 18 A 24
AÑOS 1
1
PRIMARIA
COMPLETA
DE 33 A 40
AÑOS 1
1
SECUNDARI
A INCOMPLETA
DE 18 A 24
AÑOS 1 1
2
DE 25 A 32
AÑOS 1
1
DE 33 A 40
AÑOS 1 1 2
SECUNDARI
A
DE 25 A 32
AÑOS 1
1
TÈCNICA O
TENOLÒGICA
DE 25 A 32
AÑOS 1
1
UNIVERSITA
RIA
DE 33 A 40
AÑOS 1
1
CUAT
RO A SIETE
PRIMARIA
INCOMPLETA
DE 33 A 40
AÑOS 1
1
NO SABE,
NO RESPONDE 1 1
PRIMARIA
COMPLETA
DE 25 A 32
AÑOS 1
1
SECUNDARI
A INCOMPLETA
DE 25 A 32
AÑOS 1
1
TOTAL 1
4
76
2.2.2. COJAM Reclusión de Mujeres Jamundí
Es un complejo penitenciario y carcelario diseñado con los últimos estándares de
estructura para reclusiones de alta seguridad. Fue inaugurado en el 2010, en el
corregimiento Bocas del palo - municipio de Jamundí, cercano a la ciudad de Cali, cuenta
con una capacidad de 4.700 cupos y una superficie de 400.000 m2. El pabellón cuenta
con: guardería 22, condenadas 671 sindicadas 414 total 1659.
Para el momento de la visita la organización ASOHIVA opera el programa dirigido
a las madres gestantes, los niños y las niñas en la reclusión, los operadores expresaron
que contaban con una psicóloga y una enfermera que visitaba el lugar 1 vez al mes, se
constató que no hay nutricionista, también se pudo interactuar con las dos profesoras,
quienes durante la visita realizaron diferentes actividades pedagógicas dentro de las
instalaciones del jardín; es de resaltar el trabajo artístico que desarrollan con los niños y
niñas. Además de las personas contratadas por el operador, también se cuenta con el
apoyo de algunas mujeres en redención de pena, quienes se encargan de la limpieza del
lugar, cocción de alimentos, cambio de pañales y apoyo en las labores de bañar, vestir a
los niños y niñas. Las personas que trabajan en
la reclusión en el servicio a los niños, niñas y
sus madres, presentan dificultades para la
acceder al centro por las condiciones de la vía,
además de estar fuertemente marcadas las
restricciones para el ingresar por las
condiciones propias de centro de alta
seguridad.
Se observaron condiciones inadecuadas
en la infraestructura, por ejemplo en el salón en
el que los niños descansan existe una división
que no cumple ninguna utilidad y donde los
77
niños y las niñas se golpean; la predominancia del cemento en los elementos accesorios
tales como mesas o repisas, están justo a la altura de los niños y niñas caminadores
corriendo el riesgo de lastimarse. Tiene una zona verde en buenas condiciones, con
algunos juegos e incluye una zona sombreada, espacio de gran utilidad para las
actividades con los niños, que puede ser mejorada en relación a las probables
inundaciones que pueden darse. Es inquietante ver el paisaje en general con predominio
de rejas, concertinas y edificaciones grises, propias de un complejo de alta seguridad, que
termina siendo el único paisaje, pues no hay visibilidad del ambiente propio del exterior de
la reclusión. Cabe destacar que la presencia del jardín dentro del mismo patio donde
viven madres y gestantes con sus hijos e hijas, restringe aún más el cambio de ambientes
para el niño y la niña.
En el tema de salud se escucharon varias inconformidades con el servicio, de igual
manera se constató que dentro del jardín hacen falta elementos que puedan verificar talla,
peso y termómetros; además el espacio para la revisión de la enfermera es mínimo. No
hay un espacio para la revisión de la enfermera. La siguiente tabla presenta la distribución
de la población de gestantes, madres y niños(as), datos suministrados por la coordinadora
del programa:
Gestan
tes
Lact
antes
(afuera)
Nacimie
nto al primer
año
Prime
r mes a
tres años
Total
Niños/as
Beneficiarios(as)
18 7 8 12 20
Ilustración 2. Distribución de gestantes, niños(as) en COJAM JAMUNDI
El grupo que participó en las encuestas desarrolladas en este estudio fue de 9
madres; seis de ellas expresaron ser solteras, las demás están en unión libre, no hay otra
condición de estado civil. Cuatro de ellas están entre los 18 y 24 años, el resto del grupo
es menor de 40 años. Seis de las madres expresaron tener entre uno y tres hijos, entre
cuatro y siete dos madres y más de siete una madre. La escolaridad máxima de las
78
madres es de secundaria incompleta, teniendo en cuenta que varias de ellas en la
reclusión lograron reiniciar sus estudios en básica secundaria. Esta es la muestra
representativa que participo en las acciones desarrolladas en las reclusiones entorno al
estudio de la situación de las madres y sus hijos e hijas en las reclusiones del país.
¿CUÀNTAS HIJAS/OS TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO CIVIL?
¿CUÀNTOS AÑOS TIENE?
¿CUÀL ES LA ESCOLARIDAD ALCANZADA?
TOTAL
PRIMARIA INCOMPLETA
PRIMARIA COMPLETA
SECUNDARIA INCOMPLETA
UNO A TRES
SOLTERA
DE 18 A 24 AÑOS
1 1 2
DE 25 A 32 AÑOS
1 1
DE 33 A 40 AÑOS
1 1
UNIÒN LIBRE
DE 18 A 24 AÑOS
2 2
CUATRO A SIETE
SOLTERA
NO SABE, NO RESPONDE
1 1
UNIÒN LIBRE
DE 25 A 32 AÑOS
1 1
MÀS DE SIETE
SOLTERA
DE 18 A 24 AÑOS
1 1
TOTAL 9
79
2.2.3. Reclusión de Mujeres de Bucaramanga
La reclusión de mujeres de Bucaramanga, se encuentra ubicada en la vía
Palenque – Chimitá, su área aproximada es de 30.000 metros cuadrados, con capacidad
para albergar 224 Internas, al momento de la visita, según el informe del personal de
custodia y vigilancia, estaban en la reclusión: 530 mujeres.
La guardería se encuentra ubicado al lado de los consultorios de atención médica
y enfermería; cuenta con cocina, habitación de cunas, salón y 1 baño, oficina
administrativa y baño, observándose de
primera mano el poco espacio con el que
cuentan para el cuidado de los niños y las
niñas.
El programa es operado por la
Fundación Volver a Sonreír. En el momento de la
visita se encontraba una funcionaria
administrativa quien coordina el programa, un
practicante en pedagogía y tres reclusas en el
cargo de auxiliares, estas últimas se
encargan del cuidado de los bebés, aseo del lugar
y elaboración de alimentos. Es de anotar que la
presencia de practicantes implica una
actualización frecuente. La reclusión está en la
búsqueda de mayor autonomía de las
madres y les ha delegado la consecución de los elemento necesarios para ellas y sus
hijos, lo cual ha generado mucha preocupación en algunas de las madres pues tiene
pocas posibilidades de contar con apoyo externo y dentro de la institución no hay formas
suficientes de conseguir dinero; la coordinación ha motivado la elaboración de obras
manuales decorativas que después serán vendidas, pero este dinero será para el bien
común de los niños y niñas, más no para dificultades de manutención específicas.
80
Esta es una de las reclusiones con mejor gestión de recursos, con una amplia red
de organizaciones que apoyan las necesidades de los niños y niñas, como la Fundación
Alas Nuevas, quienes brindan ayuda a las internas en los aspectos legales. En el
momento de la visita los cupos del programa estaban llenos y no alcanzaba incluir caso
de lactantes, quienes recibían dos veces al día la visita de sus bebes para este proceso,
lo que generaba más gastos de tiempo y dinero de la familia extensa. Según comenta la
coordinadora los cupos para los niños y niñas en la reclusión depende del
comportamiento de la madre, pero en las madres sigue siendo un proceso muy subjetivo y
poco equitativo. A continuación se presenta el número de beneficiados según reporte de
la coordinadora del programa en la reclusión:
Gest
antes
Lacta
ntes
(afuera)
Nacimien
to al primer
mes
Primer
mes a tres
años
Total
Niños/as
Beneficiarios(as)
8 2 3 10 13
Ilustración 3. Distribución de gestantes, niños(as) en la RM Bucaramanga
La caracterización de las madres que hicieron parte del estudio se caracterizaban
por ser mujeres principalmente entre los 18 y 32 años principalmente; once madres tiene
entre uno y tres hijos, una de ellas no específico su número de hijos. En esta ciudad
encontramos madres con estudios tecnológicos, pero predomina la secundaria
incompleta. Siete mujeres se reconocen solteras, tres en unión libre, en cuento a casada y
separar una mujer se una a cada condición.
81
¿CUÀNTAS
HIJAS/OS TIENE?
¿CUÀL ES LA ESCOLARIDAD
ALCANZADA?
¿CUÀNTOS AÑOS
TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO CIVIL?
Total
SOLTERA
CASADA
UNIÒN LIBRE
SEPARADA
UNO A TRES
NINGUNA DE 25
A 32 AÑOS 1 1
PRIMARIA INCOMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
PRIMARIA COMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
2
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
DE 33 A 40 AÑOS
0
1
1
SECUNDARIA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
MAYOR DE 40 AÑOS
1
1
TÈCNICA O TENOLÒGICA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
NO RESPONDE,
NO SABE
SECUNDARIA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
TOTAL 1
2
82
2.2.4. Reclusión de Mujeres de Cúcuta
El complejo penitenciario y carcelario de Cúcuta fue inaugurado en el 2010, también
considerado de alta seguridad, es construido con los estándares acordes a este sistema,
predominando construcciones de cemento y fuertemente blindada. Posee un 74,9% de
sobrepoblación, ya que de los 1.275 cupos registra 2.230 mujeres15. La foto que aparece
de lado derecho de la página presenta la condición permanente de luz de los pasillos del
patio de madres, hijos e hijas, por temas de seguridad las ventanas son reducidas y en
esta reclusión este pabellón se caracteriza
por espacios comunes pequeños,
disminuyendo condiciones de iluminación y
aireación.
En relación con la atención médica de
las gestantes, la madres solicitan servicio 24
horas y siete días de la semana, así como
también mejorar los controles prenatales, de
crecimiento y desarrollo, acceso a
medicamentos y exámenes especializados.
Aquí el agua potable se restringe por tiempos
en el día, generando algunos problemas de
orden y aseo, según la institución por
condiciones de orden municipal. En cuanto a las posibilidades de trabajo y educación en
la reclusión, para la fecha de la visita no estaban abiertos los espacios de educación,
según comentaron las madres los talleres de capacitación en labores tienden a ser los
mismos y algunas mujeres después de tomarlos ya no tienen mayores opciones, así que
tiene den a repetir o a no inscribirse más en ellos. De las labores que aprenden, elaboran
artes manuales en los patios y las comercializan entre ellas, entre las personas que llegan
a visitas o sus familias extensas les apoyan en esta comercialización, es de anotar que
los beneficios económicos son mínimos.
15
Vanguardia.com en http://www.vanguardia.com/actualidad/colombia/227681-son-
reclusas-y-tienen-derechos
83
En esta reclusión la movilidad de los niños también es mínima, debido a la
presencia del jardín al interior del patio de madres, hijos e hijas; por las condiciones de
poca iluminación se permiten tiempos de salida a una zona verde común, donde también
hay un espacio deportivo, esta salida en ocasiones se realiza en el horario en que los
niños y las niñas están en el jardín, dejando la inquietud sobre los momentos de mayor
movilidad de los hijos e hijas de las madres internas, de la misma manera el tiempo de luz
y aireación de las madres junto a sus hijos e hijas los fines de semana y festivos queda
supeditado a la disponibilidad de guardia.
Lo que respecta al Jardín como fue mencionado se encuentra al interior del patio,
hay mejor iluminación y ventilación pero no es un espacio que permita a los niños y niñas
correr o desarrollar otras actividades que mejore sus recursos motrices. En general las
instalaciones del jardín son poco adecuadas para la estatura de los niños y por tanto
muchos espacios son subutilizados. En esta reclusión la cocina puede ser mejor
adaptada, permitiendo contar con espacios para guardar los alimentos y utensilios,
además de impedir el fácil acceso de los niños y niñas.
El operador del convenio tripartito en la Fundación Cenabastos; al momento de la
visita se encontraban en servicio una profesional técnica en primera infancia quien
coordinaba la operación diaria del programa y orientaba las acciones pedagógicas con los
niños y niñas según comentó, la acompañaban dos mujeres reclusas que están en esta
labor para disminuir el tiempo de condena, esta últimas se ocupan del aseo de los niños y
niñas, de alimentar y preparar los alimentos, así como también del aseo general del lugar.
En la visita se evaluaba con la pedagoga la necesidad de contar con asesoría
para el trabajo con niños y niñas de 6 meses a tres años de edad, pues los conocimientos
de las personas que actualmente están en la operación diaria son muy básicos, por
ejemplo, el horario de permanencia de los niños y niñas en el jardín se ocupa mayormente
de actividades relacionadas con descanso y sueño, aseo persona y alimentación, los
demás espacios lúdicos o de aprendizaje cuentan con menor planeación en la
organización de la rutina diaria.
84
Según comenta quien coordina el jardín se cuenta con apoyo semanal de una
psicóloga y quincenal de nutricionista, sobre este apoyo se espera mejore, pues
actualmente los profesionales rotan y sus visitas pueden no corresponder a los horarios
de la reclusión, generándose largas esperas para el ingreso o choque de horarios con las
horas de sueño de los niños y niñas, y por tanto se convierte en mínimo el contacto con
ellos y sus madres. A continuación se reporta el número de beneficiados según reporte de
la coordinadora del programa:
Gestantes
Lactantes (afuera)
Nacimiento al primer mes
Primer mes a tres años
Total Niños/as Beneficiarios(as)
3 2 0 6 6
Ilustración 4. Distribución de gestantes, niños(as) en la RM Cúcuta
La caracterización de las madres que participaron en la aplicación de las encuestas,
resulta ser muy significativa, pues solo quedó fuera de la muestra una madre, por tanto se
ha logrado la observación de condiciones generales del grupo de madres beneficiadas.
Se encuentra que 5 madres están entre los 18 y 24 años, dos madres están entre los 33 y
40, y una de las madres es mayor de 40 años, condición poco común en lo que se ha
encontrado en general en otras reclusiones. La mayor parte de las mujeres se ubican en
la soltería como estado civil, solo dos madres en unión libre y una se encuentra separada.
Seis de las madres tiene entre uno y tres hijos y dos de ellas entre cuatro y siete; en
cuento a la escolaridad se encontró una madre con secundaria completa, un mayor
número de madres con secundaria incompleta y resulta inquietante encontrar una madre
que está entre los 18 y 24 años con primaria incompleta.
¿C
UÀNTAS
HIJAS/OS
TIENE?
¿CUÀL
ES LA
ESCOLARIDAD
ALCANZADA?
¿CUÀNTO
S AÑOS TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO CIVIL?
Total
SOLT
ERA
UNIÒ
N LIBRE
SEP
ARADA
UN
O A TRES
PRIMA
RIA
INCOMPLETA
DE 18 A
24 AÑOS 1
1
85
PRIMA
RIA
COMPLETA
DE 18 A
24 AÑOS 1
1
SECUN
DARIA
INCOMPLETA
DE 18 A
24 AÑOS 1
1 2
DE 33 A
40 AÑOS 1
1
SECUN
DARIA
DE 33 A
40 AÑOS 1
1
CU
ATRO A
SIETE
SECUN
DARIA
INCOMPLETA
MAYOR
DE 40 AÑOS 1
1
SECUN
DARIA
DE 18 A
24 AÑOS 1
1
TOTAL 8
2.2.5. Reclusión de Mujeres de Pereira
En el patio se encuentran al momento
de la visita 396 internas, según datos del
cuerpo de seguridad y custodia de la
institución. Esta reclusión presenta desde su
fachada amplias zonas verdes, arborización y
un ambiente natural privilegiado,
disminuyendo evidentemente los esquemas
predominantes de las reclusiones. Igual a
Bogotá posee las instalaciones del jardín
fuera de los patios, favoreciendo la movilidad
de los niños y las niñas, facilitando el cambio
desambiente y minimizando los riesgos
permanentes de contaminación, poca
iluminación o ventilación propias de los
jardines que están dentro de las instalaciones de los patios.
El operador del programa en Pereira es la Cooperativa De Asociaciones De
86
Hogares Comunitarios De Bienestar COOASOBIEN. La coordinación del jardín está en
manos de un funcionario INPEC, quien además de esta labor también debe atender
asuntos relacionados con procesos productivos, educativos y de trabajo social; el
operador ha contratado una pedagoga y apoyo semanal de psicología y eventual de
nutricionista. Tres mujeres reclusas acompañan el proceso del jardín diariamente con el
fin de disminuir su tiempo de condena, atienden temas de aseo a instalaciones y aseo,
alimentación y acompañamiento a los niños y niñas. Las instalaciones cuentan con un
área administrativa, dos salones de actividades, habitación para el descanso, cocina,
baños y zona verde. Un lugar con excelente ventilación, iluminación, además de ser
amplio, lo que mejora la movilidad de los niños y niñas, es un lugar agradable para las
personas que están desarrollando sus labores allí, así como también para los niños y
niñas, y las madres que en ocasiones asisten para reuniones de capacitación; otra
ventaja a considerar del lugar es la vista que tiene a la calle, posibilitando en los niños el
constante contacto con la cotidianidad fuera de la reclusión.
Cuando los niños y niñas se trasladan al interior de la reclusión, pueden contar
con una celda adecuada en espacio y condiciones generales, en comparación con las
vistas en otras reclusiones, además de poder compartir el espacio con otra persona, ya
sea una madre gestante o una madre con su hijo o hija. En los espacios comunes de la
reclusión (comedores, patio, pasillos, subrayando que son espaciosos e higiénicos y
propenden un ambiente comunal colaborativo), las madres y sus hijos e hijas tiene
contacto con las demás mujeres que allí habitan, quienes se consideran un sistema de
protección para los niños y niñas, pues en general las mujeres de la reclusión valoran la
presencia de los niños y las niñas en este contexto.
Un valor agregado a la permanencia de las madres en esta reclusión es que todas
pertenecen a procesos de estudio y/o trabajo, se destaca a nivel nacional el tratamiento
penitenciario de conformidad con la Sentencia T286/11 y en virtud a que la Directora de la
reclusión ha logrado articular la empresa privada y el apoyo de la Alcaldía Municipal y/o
Gobernación para la inclusión de empleo en ocupaciones, empresa de confección satélite
de altas marcas, proyectos de tendederos, cajas, uniformes, así como impactar en las
87
familias en actividades educativas y de mejoramiento de las condiciones de vida como el
proyecto de siembra.
Con referencia a esta experiencia exitosa, puede decirse que la misma es una
invitación a fortalecer el programa de post-penadas, generando alternativas
ocupacionales diferentes al delito, contextualizadas a las regiones y sistemas comunales
a los que egresa.
La dirección de la reclusión ha logrado desarrollar programas que incluyen el
fortalecimiento de lazos familiares y mejores programas de post-penados; en esta
reclusión se han desarrollado acciones de huertas familiares y se asegura que todas las
madres hagan parte de los procesos educativos o productivos en la reclusión, teniendo en
cuenta que en estos últimos se ha logrado que las mujeres que egresen sean cubiertas
con un convenio con empresas que puedan brindarles trabajo en su situación de libertad.
En temas de salud las madres no tienen quejas del servicio para ellas y sus hijos e
hijas, y cuando encuentran alguna contrariedad en el servicio los funcionarios INPEC del
área de tratamiento y desarrollo, o la coordinadora del jardín solucionan el problema.
Es de resaltar que la dirección, el personal de guardia y los funcionarios INPEC
tienen muy buena comunicación con todas las internas, pero son aún más diligentes en
casos de madres y sus hijos e hijas, cuando a estos se les presenta algún problema de
orden institucional. Expresan que desde su experiencia, han pensado en habilitar canales
más directos entre las instituciones y las mujeres de la reclusión en especial ICBF,
institución de la cual se tiene una imagen desmejora por el distanciamiento existente con
la sede Pereira. A continuación se enuncia el número de beneficiados en el programa, por
datos suministrados por la coordinadora del jardín:
88
Gestan
tes
Lact
antes
(afuera)
Nacimie
nto al primer
mes
Prime
r mes a
tres años
Total
Niños/as
Beneficiarios(as)
1 2 0 10 13
Ilustración 5. Distribución de gestantes, niños(as) en la RM Pereira
En esta reclusión se logró la participación de 13 madres en la aplicación de
encuestas y desarrollo de otras actividades del estudio, de las 14 que hacen parte del
programa, logrando así una caracterización muy significativa de esta población. Siete de
las trece madres están entre los 25 y 32 años, seguido por el grupo de madres entre los
18 y 24 años, solo encontramos una madre mayor de 33 años. La mayor parte de las
madres tienen entre uno y tres hijos; siete de ellas se declaran en unión libre, solteras,
casadas y separadas hay dos para cada condición. En cuanto a la escolaridad se
encontraron 4 madres con secundaria completa, seis con secundaria incompleta, dos con
primaria incompleta que están entre los 25 y 32 años. Es importante resaltar que las
madres expresaron que han acabado su bachillerato en la reclusión, pues en esta
institución se siente la obligación de seguir capacitándose.
¿CUÀNTAS HIJAS/OS TIENE?
¿CUÀL ES LA
ESCOLARIDAD ALCANZADA?
¿CUÀNTOS AÑOS TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO CIVIL?
Total S
OLTERA C
ASADA UNI
ÒN LIBRE SEP
ARADA
UNO A TRES
NINGUNA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
1
3
4
SECUNDARIA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
DE 25 A 32 AÑOS
2
1 3
CUATRO A SIETE
PRIMARIA INCOMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1 2
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
DE 33 A 40 AÑOS
1
1
89
TOTAL 13
2.2.6. COIBA Reclusión DE Mujeres de Ibagué
Ubicada en la zona de Picaleña; al
momento de la visita el número de mujeres que
están en la reclusión no es claro, pues las tablas
de ingreso no hay un número total definido. Se
confirmó por medio del personal de guardia y
custodia, que la reclusión estaba pensada para
aproximadamente 500 mujeres, pero en este
momento tenían sobrecupo, encontrando
alrededor de 800 mujeres en los patios.
Específicamente en la zona de madres e hijos hay
que tener en cuenta que comparten su espacio
con mujeres de la tercera edad y discapacitadas;
según los registros expuestos al ingreso del patio
por la guardia del penal, para la fecha de la visita a la reclusión el patio donde estaban las
gestantes, madres, hijos e hijas tenían a 18 mujeres, ocho (8) de ellas reconocidas como
gestantes, y tres (3) en categoría de otros, lo cual corresponde a las madres con su hijos
menores de tres años, al ingresar al patio estas cifras no corresponden a la cantidad de
niños del patio y que asisten al programa, que en este caso son: cuatro (4) niños y niñas y
uno (1) que está en proceso de ingreso por no tener seis (6) meses cumplidos.
E patio en el que están las madres con sus hijos e hijas y las madres gestantes,
queda al lado del patio reconocido como UTE (unidad de tratamiento especial), donde al
ser necesario utilizan gases lacrimógenos para controlar disturbios, además de ser un
espacio donde llegan reclusas por comportamientos inadecuados, la mayoría de veces
contra su voluntad y expresando comportamientos de impacto especial a la zona de
90
madres e hijos (autoagresiones, gritos, discusiones, agresiones, etc.). La zona
administrativa y de guardia queda a las afueras del complejo penitenciario. Las nomas de
disciplina y seguridad son estrictas, por lo cual según comenta el personal de vigilancia y
custodia las mujeres pueden llegar a acudir a la autoagresión para poder moverse a otras
áreas del complejo penitenciario fuera de sus celdas.
En el patio es donde las madres pasan la mayor parte del tiempo compartido con
sus hijos e hijas, en este no cuentan con juguetes o decoración especial en las celdas y
los espacios comunes son muy pequeños y al ser compartidos con mujeres de tercera
edad y discapacitadas es poco probable tener elementos adicionales de juego para los
niños y niñas, y según expresa la guardia y las madres esta inclusión de juguetes y
elementos para las madres, los niños y niñas podría generar conflicto entre las internas.
También se resalta la poca luz que ingresa a esta zona en el día y el peligro para el juego
de los niños y niñas por obstáculos en las celdas y pasillos del patio.
Las celdas son de uso individual en el patio en el que están los niños y las niñas,
cuenta con baño, y muy poco espacio para el movimiento, las madres han apropiado el
diseño de las celdas y han logrado generar orden en los elementos que tienen propios y
de sus hijos e hijas. Para el momento de la visita no se había dado inicio a clases y
programas de redención de pena, pero según comentaron las madres y personal de
seguridad y custodia, en próximas semanas se iniciaría; las madres principalmente
asisten a cursos y estudio, pero no ejercen ninguna labor remunerada.
Es una reclusión de máxima seguridad, de carácter mixto, por lo cual hombres y
mujeres comparten el mismo complejo penitenciario, y a pesar de estar en zonas
separadas, comparten un lugar común de sanidad. El centro de atención de los niños y
niñas se encuentra cerca al patio donde están las madres, pero no dentro del mismo, lo
cual es una ventaja para el cambio de ambiente y la movilidad de los niños; la reclusión
cuenta con jardines y zonas verdes pero en la mayoría de casos rodeada de mallas de
protección y seguridad, que impiden total acceso y visibilidad; por la gestión de la
dragoneante que dirige el programa, los niños y niñas pueden acceder a estas zonas
91
verdes; la dragoneante directora del jardín es profesional de psicología. Al momento de la
visita no estaba operando el convenio tripartito por vencimiento de contrato, por lo cual el
INPEC era responsable de la alimentación, cuidado y atención en general de los niños y
niñas. La presencia privilegiada dentro del jardín en esta reclusión fue de las madres, sus
hijos e hijas, quienes asisten con frecuencia al jardín; las tres mujeres internas que hacen
apoyo al programa y la guardia que tiene contacto constante con los niños y las niñas. La
falta de convenio generaba que en esa fecha no contaran con apoyo de profesionales, ni
de complementos nutricionales.
Las instalaciones del centro de atención de los niños y niñas son grandes, cuentan
con excelente iluminación, ventilación y decoración colorida que da otro matiz a las
paredes grises; el problema permanente es el servicio de agua en la reclusión, el cual es
poco e intermitente, y afecta mucho el desarrollo de las labores con los niños y niñas en
este centro. A continuación se presenta el número de beneficiados en el programa, se
resalta que el programa en esta reclusión lleva ocho meses y el número de niños y niñas
es bastante reducido, pero el número de gestantes es alto y varias de ellas han
contemplado quedarse con su hijo o hija en la reclusión cuando nazca. Estos datos son
suministrados por la directora del jardín:
Gestante
s
Nacimiento
al primer año
Primer
mes a tres
años
Total
beneficiarios(as)
8 1 4 5
Ilustración 6. Distribución de gestantes, niños(as) en la RM Ibagué
De las trece madres entre gestantes, lactantes y con sus hijos e hijas, que están en
el programa, participaron en el estudio 8 de ellas. La caracterización se destacó por ser
una población mayoritariamente joven, la mitad está entre los 18 y 24 años y la otra mitad
entre los 25 y 32 años. Encontramos madres con estudios tecnológicos y secundaria
completa, cinco de ellas están en el rango de estudios incompletos de primaria y
secundaria. La mayoría de las madres tienen entre uno y tres hijos.
92
¿CUÀNTAS
HIJAS/OS TIENE?
¿CUÀL ES LA ESCOLARIDAD
ALCANZADA?
¿CUÀNTOS AÑOS TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO CIVIL? Tot
al SOLTERA
UNIÒN LIBRE
UNO A TRES
PRIMARIA INCOMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1 1
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
2
2
SECUNDARIA
DE 18 A 24 AÑOS
1 1
TÈCNICA O TENOLÒGICA
DE 25 A 32 AÑOS
2 2
CUATRO A SIETE
PRIMARIA COMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
NO RESPONDE,
NO SABE
PRIMARIA INCOMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
1 1
TOTAL 8
2.2.7. Reclusión de Mujeres de Popayán
La reclusión de mujeres de Popayán emergió desde unas instalaciones
originalmente diseñadas para un internado; es una construcción de varios años de
antigüedad pero conservad en muy buenas condiciones, al ingreso se observan zonas
verdes y antes de entrar al área de patios se encuentra la entrada independiente para el
jardín. Este ingreso solo le da una parcial independencia al área de los niños y niñas,
pues el jardín limita con los patios internos y específicamente con la UTE (unidad de
tratamiento especial), lugar que puede ser de alto riesgo por los sobresaltos disciplinario
que puedan darse. Al comentar esta condición con el personal de guardia y custodia ellos
expresan que esta es una de las reclusiones más tranquilas, donde eventualmente se
presentan conflictos y son de menos alcance. El jardín cuenta con un cuarto para dormir,
una sala de estudio, donde también comen los alimentos aprovechando las mesas y
sillas, una cocina, un baño y un pequeño patio. Hace poco tiempo el espacio del jardín se
redujo por orden de la dirección, para abrir un salón de formación en panadería.
93
El operador del convenio tripartito a la fecha de la
visita era la Asociación De Hogares Comunitarios De
Bienestar: El Limonar. El jardín cuenta con una coordinadora
que es funcionaría INPEC, encargada también de la oficina
de trabajo social de la reclusión, lo cual le deja poco tiempo
para el apoyo al Jardín, priorizando su labor en la
consecución de recursos y atención a las madres gestantes,
lactantes y con niños y niñas, en cuento a necesidades de
traslado, salidas, suspensión de pena, salud, seguimiento a
tutores; quien está encargada de la operación diaria del
Jardín es la pedagoga contratada por la El Limonar, también
se encuentran dos mujeres reclusas en labor de redención de
condena, encargadas de aseo y alimentación. Es la reclusión
con menos número de niños y niñas, pues tan solo hay dos
en el programa y tres gestantes en el momento de iniciar la
visita, pero al terminar la misma ya había salido una de las
gestantes a suspensión de pena.
Las condiciones para las madres y sus hijos en los patios y las celdas no son
negativas, pues las celdas a pesar de ser compartidas cuentan con otras facilidades como
el baño y el espacio. En cuestiones de salud, las madres en esta reclusión expresan que
ellas y sus hijos cuentan con un servicio adecuado. Con respecto a las opciones de
estudio y capacitación la reclusión cuenta con adecuadas estrategias para el desarrollo
académico y talleres permanentes de labores, los productos construidos son
comercializados desde la reclusión, el usufructo económico restablece los insumos y
apoya las necesidades de las mujeres. Una de las peticiones de las madres fue el
establecimiento de programas de egreso más estables, pues las mujeres al salir no
cuentan con opciones adecuadas de empleo y terminan regresando al penal; de igual
manera, los niños y niñas que egresan también son motivo de preocupación pues algunos
de ellos salen sin sus madres y en los hogares en los que son acogidos por sus tutores no
94
cuentan en la mayoría de casos con la estabilidad económica para acogerlos. A
continuación se presenta el número de niños y niñas beneficiados, reportados por la
coordinadora del Jardín:
Gestantes Nacimiento
al primer mes
Primer mes
a tres años
Total
Niños/as
Beneficiarios(as)
2 0 2 2
Ilustración 7. Distribución de las gestantes, niños(as) en la RM Popayán
Toda la población beneficiada del programa de atención a niños y niñas participó
de las encuestas, lográndose una caracterización completa del grupo. Todas las madres
se reconocen como solteras, están entre los 25 y 40 años, han cursado la secundaria
completa o están en este mismo nivel académico incompleto; la mitad de ellas tiene entre
uno y tres hijos, la otra mitad entre cuatro y siete hijos.
¿CUÀNTAS HIJAS/OS
TIENE?
¿CUÀL ES LA ESCOLARIDAD ALCANZADA?
¿CUÀNTOS AÑOS TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO
CIVIL? Total
SOLTERA
UNO A TRES
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1 1
SECUNDARIA DE 25 A 32
AÑOS 1 1
CUATRO A SIETE
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1 1
DE 33 A 40 AÑOS
1 1
TOTAL 4
2.2.8. COPED Reclusión de Mujeres de Medellín
La reclusión de mujeres en Medellín hace parte del complejo penitenciario el
Pedregal. Es un diseño de alta seguridad, donde se privilegia la construcción en cemento,
con el privilegio de estar situada en una montaña que le
95
brida un entorno natural. El operador de convenio tripartito es la Corporación Campos de
Siembra.
Es de resaltar que la administración municipal hace varios años conoce la
permanencia de los niños en la reclusión, y ha incluido a las madres, sus hijos e hijas en
las acciones de apoyo comunitario en primera infancia, en servicios de psicología,
pedagogía, recreación y deporte, y nutrición, también ha establecido espacios dotados de
elementos lúdicos para el compartir de las madres, sus hijos e hijas; se espera que el uso
de estos espacios puedan ser más frecuentes y aun en ausencia del apoyo de la alcaldía
municipal.
Uno de los problemas más destacados entre las madres es el servicio de salud
tanto para gestantes como para lactantes, y madres con hijos e hijas menores de tres
años no lactantes; la distancia que tiene la reclusión de la ciudad hace que los llamados
de urgencia no sean inmediatos, por lo cual los embarazos desarrollados hasta ultimo
termino en la reclusión son de alto riesgo, no solo por la dificultad de respuesta de las
ambulancias, sino por la ausencia de exámenes especializados, medicamentos
adecuados y atención médica especializada para gestantes. Es necesario resaltar que el
patio en el que residen gestantes, niños, niñas y sus madres, es el sótano de un edificio
de varios pisos, allí la luz del sol no llega de forma directa, como se evidencia en la
fotografía, solo se cuenta con rayos de luz por dos puertas que permiten su ingreso, pero
96
obstaculizan el viento por el plástico que las recubre. Estas características hacen del patio
y las celdas lugares permanentemente fríos, donde abundan las gripes, alergias y
problemas respiratorios, sobre todo para niños y niñas, quienes tampoco cuentan con un
servicio médico especializado.
En cuanto a la manutención, las madres expresan que varias familias no cuentan
con los recursos suficientes para movilizarse hasta la reclusión con frecuencia, hay
desarrollo de talleres pero no todos generan ingresos y los cupos son limitados. En
cuanto a la educación, todas las mujeres pueden acceder a ella, pero en la época de la
visita no estaba en servicio este proceso.
Los niños y niñas de lunes a viernes egresan del patio para asistir al Jardín, que
esta fuera del área de las celdas. El jardín cuenta con los espacios adecuados para los
niños y niñas: dos salones, un cuarto de sala cuna, cocina, un baño y zona de comedor.
Las ventanas son muy pequeñas y también están cerradas, obstruyendo la ventilación y
una óptima iluminación; cuentan con un pequeño jardín encerrado con rejas que no es
adecuado para niños y niñas de tres años, y a pesar de tener amplias zonas verde cerca,
no son muy prácticas para el juego de los niños y niñas por ser laderas donde pueden
caer con facilidad.
El operador en el momento de la visita estaba en cambio de pedagoga, según se
reportó hay servicio de psicología semanal y nutricionista quincenal. Hay tres mujeres
reclusas en redención de condena apoyando los servicios de alimentación, aseo general,
cuidado y aseo de los niños y niñas. El jardín cuenta con una coordinadora que es
funcionaria INPEC, profesional en psicología, que además tiene otras funciones
adicionales a esta, ella reportó el siguiente registro de beneficiarios:
Gestantes Nacimiento al primer año
Primer mes a tres años
Total Niños/as
Beneficiarios(as)
Sin reporte 6 6 12 Ilustración 8. Distribución de las gestantes, niños(as) en la COPED RM
97
No se logró registro del número total de gestantes, pero en las encuestas y otras
actividades del estudio hubo participación de varias de ellas. De las participantes en las
encuestas se encontró la siguiente caracterización. Siete de las doce madres están entre
los 25 y 32 años, las cinco restantes entre los 18 y 24, diez de ellas tienen entre uno y tres
hijos y se ubican en la soltería como estado civil. A nivel académico hay una madre con
nivel tecnológico y tres con secundaria completa, las demás están con secundaria y
primaria incompleta.
¿CUÀNTAS HIJAS/OS TIENE?
¿CUÀL ES LA ESCOLARIDAD ALCANZADA?
¿CUÀNTOS AÑOS TIENE?
¿CUÀL ES SU ESTADO CIVIL?
Total
SOLTERA UNIÒN LIBRE
UNO A TRES
PRIMARIA INCOMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
DE 25 A 32 AÑOS
1 1
PRIMARIA COMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1 1
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
2
2
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
SECUNDARIA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
DE 25 A 32 AÑOS
2
2
TÈCNICA O TENOLÒGICA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
CUATRO A SIETE
PRIMARIA INCOMPLETA
DE 25 A 32 AÑOS
1
1
NINGUNO
SECUNDARIA INCOMPLETA
DE 18 A 24 AÑOS
1
1
TOTAL 12
98
RECOMENDACIONES PARA MEJORAR LA
ATENCIÓN INTEGRAL PARA LOS NIÑOS Y LAS
NIÑAS DE PRIMERA INFANCIA EN CENTROS DE
RECLUSIÓN
Las siguientes recomendaciones emergen del análisis general del entorno de cada
reclusión y la observación puntual de los estructurantes de la atención a la primera
infancia globalizando las ocho (8) reclusiones visitadas. También se incluyen las
versiones procedentes de las encuestas institucionales, desarrolladas por profesionales,
técnicos, tecnólogos y las demás personas que diaria o semanalmente desarrollan
acciones en los Centros Infantiles de las reclusiones. Resumiendo las opiniones las
personas anteriormente mencionadas y el análisis del equipo de investigación, se pueden
determinar acciones en diversos aspectos:
Acciones concretas para la situación actual:
1. Se requiere realizar un estudio más concreto que verifique la situación de
acceso pleno a los derechos humanos para los niños y niñas que viven en
centros de reclusión con sus madres, con mayor amplitud de tiempo
cobertura a nivel nacional, con el apoyo en los sistemas y diversos
mecanismos de análisis de las condiciones de vida de este grupo
poblacional que vive en una situación de vulnerabilidad.
2. Realizar mejoras locativas a corto plazo en ventilación, iluminación,
higiene, humedad y seguridad en los patios donde permanecen los niños y
niñas con sus madres y mujeres gestantes16. Acceso a horas de luz diarias
sin restricciones en los patios donde no hay luz solar.
16 Para ampliar esta información remitirse a la propuesta desde la evaluación de la infraestructura,
resultado de esta investigación.
99
3. El personal sugiere que la capacitación, dirigida a las madres por parte de
pedagogía, nutrición, salud y psicología, pudiera mejorarse en temas para
su beneficio y que se desarrollaran mensualmente. Y las capacitaciones al
personal para la atención a niños y niñas hasta los tres años pudieran
hacerse de forma trimestral.
4. Se recomienda por parte de los participantes de instituciones se mejoren
los procesos de acceso para quienes trabajan en los Centros Infantiles de
las reclusiones.
5. Se debe contratar personal con excelente experiencia en primera infancia
y trabajo en situaciones sociales de riesgo, para que pueda resolver los
grandes retos que significa el trabajo pedagógico en el contexto carcelario
y capacitarle en el tema de la cultura y procedimientos propios de la
reclusión, de tal manera que facilite el desempeño en el sistema cotidiano
de la prisión.
6. Se requiere un trabajo de formación en lineamientos nacionales e
internacionales para los funcionarios de tratamiento penitenciario, guardia,
policía, fiscalía, jueces y demás involucrados en el proceso de
penalización de las mujeres a fin de velar por sus responsabilidad de
mantener la paz y el orden pero proveer un ambiente adecuado a los
derechos superiores de los niños y niñas, desde el momento de detención
hasta la finalización del proceso de convivencia de los niños y niñas en los
centros de reclusión.
7. Se reconoce el trabajo realizado por el ICBF en formación, orientación y
planificación con el personal del programa pero en acciones futuras es
necesario verificar la contextualización al ambiente de la reclusión,
adaptando los planes de atención, en coordinación a los tiempos y
100
movimientos propios de la prisión, por lo cual es importante contar con el
personal de vigilancia y custodia INPEC, asesorando desde las
posibilidades de la reclusión las adaptaciones propuestas y por contando
con el aval de las directivas del INPEC.
8. Los días de visita deben ser un espacio para el trabajo familiar y
particularmente importantes para identificar las necesidades, apoyar el
proceso emocional y brindar herramientas para la resolución de
problemas de niños, niñas y sus familias, vinculadas a las personas
privadas de libertad.
9. Los participantes solicitan mejorar los servicios de salud a madres
gestantes, madres lactantes y niñas y niñas menores de tres años para
ello se requiere:
- Verificar en los sistemas pertinentes el estado de afiliación al sistema de salud de
cada niño y niña y su cumplimiento del esquema de salud.
- Facilitar procedimientos propios en los centros de reclusión donde madres y
guardias puedan proveer un traslado oportuno de los niños y niñas en situaciones
de emergencia
- Coordinar las acciones comunitarias del primer nivel de salud pública o programas
de las EPS para acercar los servicios de promoción y prevención a la población,
en especial para el acceso oportuno a completar el esquema de vacunación de
cada uno de los niños y niñas para no depender de la variabilidad de este
procedimiento en cada centro de reclusión. Además de vincular a las madres en
estas jornadas para que se apropien del proceso de salud de sus hijos/as.
- Realizar un seguimiento epidemiológico para generar intervención adecuada en la
condición de salud de los niños, niñas, madres lactantes y madres gestantes
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correlacionadas con la permanencia en las reclusiones.
- Es importante que se verifique la opción del profesional o auxiliar de enfermería
constante con manejo y dotación para la atención en primeros auxilios y
procedimientos básicos en los centros de desarrollo infantil, por la cantidad de
niños y niñas quizá no cumplen las exigencias del sistema pero por la dinámica
propia es una modalidad institucional que requiere este servicio. Así como el
suministro de medicamentos pertinentes para primera infancia y mujeres
gestantes.
10. Dentro del programa de atención a la primera infancia brindado
actualmente por los operadores de ICBF-INPEC, es necesario incluir
acciones de la modalidad familiar dirigidas a las madres privadas de
libertad pero también el reto es fortalecer las capacidades de las familias
(madre, hijos e hijas, tutores y otros familiares que apoyen la madre en
caso de tenerlo) en donde se privilegie la equidad, corresponsabilidad y
cuidado compartido; cualquier acción de acompañamiento tendrá que
involucrar dentro de esa nueva configuración de familia a los tutores de los
niños(as), ya que las reclusiones generan proceso de crianza que
involucran el mundo dentro y fuera de la reclusión.
11. Se reconoce que es ideal que la preparación y lugar para consumir los
alimentos se continúe donde se realiza actualmente, los programas del
ICBF por su higiene e instalaciones, pero se requiere revisar puntualmente
como se manejará la alimentación los fines de semana y luego del tiempo
de encierro para los niños y las niñas, generando espacios de
socialización y alimentación continua. Y la opción de incluir a las madres
gestantes y lactantes en esos planes nutricionales para asegurar y mejorar
la situación actual del complemento nutricional.
12. Se pueden generar recursos documentales en temas de salud, nutrición,
102
pedagogía, desarrollo moral, desarrollo de vínculos materno-filiales,
resolución de conflictos, entre otros, contextualizados para las reclusiones,
que serían parte de la formación para el ingreso del personal, que cambia
con frecuencia ya que existe una alta rotación del personal de los centros
infantiles, debe ser constante el programa de inducción y re-inducción al
personal vinculado a la atención integral de niños y niñas.
13. Se requiere un programa de apoyo psicosocial más completo desde la
llegada hasta la salida del niño y niña del centro de reclusión, para ellos y
ellas y para sus madres, donde se valoré el tiempo de fortalecimiento del
vínculo y se dé un trabajo familiar integral para que la red de apoyo
comprenda la situación de los niños y las niñas y sus características
propias de socialización para apoyarle en su transición de un espacio de
rutinas y control a la dinámica social en libertad. El programa de
seguimiento debe ampliarse algún tiempo después de la salida para
garantizar las condiciones adecuadas de vida para estos niños y niñas.
Acciones de medio y largo plazo para el manejo de la situación actual:
1. Es necesario generar un lineamiento estándar de los centros de reclusión
para generar condiciones y oportunidades igualitarias a todas las madres
gestantes, lactantes y sus hijos e hijas, para ello debe empezar a
sistematizar y documentar las experiencias exitosas en las reclusiones y
Centros infantiles para retomar buena prácticas en espacios, adaptaciones
de procedimientos, manejo de alianzas con Universidades que puedan
proveer estudios, alianzas con Alcaldías y programas culturales o
deportivos, manejo de programas de post- penadas y propuestas
pedagógicas entre otras.
2. Garantizar la protección integral de los niños y las niñas viviendo en
centros de reclusión requiere la organización de acciones integrales en
103
torno a esta situación incluyendo el restablecimiento de los derechos de
madres gestantes y madres o padres en situación de privación de la
libertad y sus familias, y en especial atención a las situaciones de
vulneración identificadas, para lo cual se debe fortalecer el trabajo
interinstitucional e intersectorial por parte del Sistema Nacional de
Bienestar Familiar a nivel nacional, departamental, distrital y municipal y
local con sus operadores de carácter público o privada, pero en especial
énfasis desde la orientación del ICBF, Ministerio de Salud y Protección
Social, Ministerio de Educación, Ministerio de Cultura, Defensoría del
Pueblo, Procuradurías; en coordinación con el INPEC, direcciones
territoriales de Cárceles y el sistema judicial.
3. El asegurar la capacidad de acción de las organizaciones del Sistema
requiere diseñar procedimientos de contacto como jornadas de
acercamiento y posibilidad de acceso de las personas privadas de libertad
a sus servicios, así como una campaña para mejorar la imagen
institucional y posicionamiento del Sistema como aliado de las personas
privadas de libertad para ellas y sus hijos e hijas en cualquier edad de la
infancia, adolescencia y juventud, el rol del personal penitenciario para
cambiar los imaginarios actuales, es vital.
4. Incluir ante el del niño, niña y en el caso que corresponda junto a su
madre, acompañamiento en el tiempo de adaptación a la libertad para
garantizar la disminución de causas que aumentan el abandono,
desprotección o riesgo de maltrato de los niños y niñas.
5. Desde Salud se podría habilitar el servicio de Pediatría y Ginecobstetricia,
asegurando una atención con los servicios e instrumentos adecuados para
los niños, niñas y mujeres gestantes.
6. El ICBF podría caracterizar la situación de cada uno de los niños y niñas
104
con respecto a su tutor, solvencia económica, periodicidad de contacto,
capacidad de respuesta de apoyo en atención de salud, condiciones de
bienestar ofrecidas en su contexto cotidiano, dinámica en el tiempo de
salidas, para evaluar si los tutores están cumpliendo el rol que se ha
planteado para el acceso de derechos de los niños o niña, o si su apoyo es
limitado; además de evaluar los casos de los niños y niñas sin tutor, y
proveer soluciones para las limitaciones e inexistencias de las facilidades
de la red de apoyo.
7. Es importante que se diseñe una atención especializada para los infantes
o personas con alguna condición de discapacidad que dependan de la
persona o personas detenidas.
8. Se debe analizar la opción de permitir que los niños y niñas accedan a
entornos educativos de su comunidad para proveer un acceso a
estructurantes y entornos en igualdad de oportunidades a las de su
contexto.
Acciones a considerar para cambiar la estrategia actual:
En cumplimiento de las directrices actuales de los derechos para las personas
privadas de libertad y los niños y las niñas, casi todos los países en Iberoamérica
permiten la permanencia de niños y niñas en primera infancia en los centros de reclusión
con sus madres, pero ante las polémicas de sí se beneficia el derecho de la madre pero
no se guarda el derecho superior del niño o la niña, aunque con dificultades hay otras
propuestas a analizar y viabilizar en nuestro contexto.
1. Instaurar Políticas de justicia y trato a privados de libertad con enfoque de género:
El sistema de justicia debe revisar si hay discriminación por género a la hora de
aplicar las condenas, la generación de alternativas en el cumplimiento de las
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acciones legales en delitos no violentos cometidos por las mujeres cabeza de familia o
con hijos o hijas, entre otras. (Ejemplo Argentina)
2. Se debe revisar la posibilidad de proveer los mecanismos que permitan mantener
de una forma adecuada el vínculo madre e hijo/a y padre- hijo/a, pero ante todo la
garantía al goce pleno de sus derechos como niños y niñas en especial a tener
una familia y las garantías para un adecuado ambiente que favorezca su
desarrollo. (Ejemplo Estados Unidos)
3. Se pueden construir modalidades de permanencia para las los niños y niñas y sus
madres (y padres como el caso de Sevilla), con un ambiente más familiar que
permita un ambiente más adecuado para el desarrollo de los niños y niñas
(ejemplo residencias transitorias en Chile y Casa cunas Costa Rica)
Se requiere propiciar un Sistema de evaluación y seguimiento, que tenga como
objetivo central el interés superior del niño o niña, para tomar la decisión si debe entrar al
centro de reclusión o estar con su red de apoyo, o si requiere un respaldo del sistema de
bienestar (hogares de protección, familias sustitutas, apoyos sociales a la familia),
verificar acciones al momento de la captura de la madre17 , seguimiento específico al
tiempo de licencia en arresto domiciliario, acompañamiento continuo durante los tres años
que permanezca en la cárcel revisando su acceso pleno a los derechos, hasta el proceso
de separación al cumplir los tres años, para evaluar si la red de apoyo está en
condiciones de asegurar su bienestar y hacer seguimiento para asegurar sus condiciones
de vida al salir de la reclusión. (Aunque para una edad superior programa de Niñez Cero
en la cárcel del Ecuador).
17 No olvidar que es posible que existas hombres a cargo de niños(as), sin red de apoyo.
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