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Almacenamiento en dos sitios del Epiclásico: Xochicalco (Morelos) y Cacaxtla (Tlaxcala)

Claudia ALVARADO L., Si lvia GARZA T., Norberto GONZÁLEZ C. y Beatriz PALAVICINI B.*

El almacenamiento es una estrategia econón11ca que permite asegurar el aprov1s1onam1ento para el futuro. Conforrne las socie­dades trascienden, sus necesidades van cambiando y van surgiendo los elementos necesarios para garantizar la rntegracrón econon11ca de los sistemas polltrcos y el buen func1onarn1ento de las 1nst1tuc1ones. Es el palacio, construcción monumental y de comp!eJ1dad arqu1tectón1ca ubicada dentro del contexto urbano, un ed1f1c10 multifunc1onal con acceso controlado y c1rculac16n restringida. que asegura la protección de lo alrnacenado y de lo adm1n1strado Xoch1ca!co, ciudad-Estado característica del periodo ep1clás1co, fue fundada alrededor del año 650 d.C. y abandonada y destruida para el 1000 d.C. Debido a su situación estratégica donde el acceso al agua estaba físicamente restringido, los constructores de la ciudad crearon un complejo s1sterna de recolecc1on y aln1acenamiento de agua. En cuanto al almacenamiento de granos y ahrnentos, éste se realizaba en graneros dispuestos en la parte central de la ciudad. así como en grandes t1na1as asociadas a las areas de preparación de altn1entos. Otros niatenales y ob1etos de concha y piedra verde fueron almacenados y resguardados en ed1f1c1os particulares denotando la 11nportanc1a de los bienes almacenados Por otra parte, Cacaxtla, s1t10 contemporáneo de Xocl11calco, 111uestra ele1nentos utilizados para el aln1acenam1ento t.fe diversos n1atenales y granos dentro del Gran Basamento, que es un e¡emplo más de un ed1f1c10 de carácter palaciego y que confirn1a lo que en cierta forrna aquí se expone.

Storage in Xochicalco (More/os) and Cacaxtla (Tlaxcala) during the Epiclassic period

Asan economical strategy, storage 1s fundamental to guarantee supply far the future. In the developrnent process of tt1e soc1e­t1es, lile needs change and new elements appear to assure the econom1cñl 1ntegnty or the pol1t1cal systems and the appropnate work of the inst1tut1ons. lt 1s the palace, wh1ch IS a cornplex and mult1funct1on construction located 1n the urban context, w1th a control access and a restncted c1rculat1on, wl11ch is respons1ble of tlle storage and adm1nrstrat1ve tasks. Xoch1calco, a c1ty-State frorn the Ep1class1c penad, was founded around 650 A.O. and abandoned around 1000 A D. Beca use of 1ts strateg1c locat1on, water access resulted d1ffrcull and 1ts inhab1tants had to create a systern to collect and store 1t. For food and cereals, the people used grananes located 1n the core of the c1ty, as well as large earthenware assoc1ated to the areas for food preparat1on. Other k1nd of materrals and art1facts made w1th shells and green stone were stored and preserved 1n spec1f 1c bu1ld1ngs show1ng th11 1mportance of the stored goods. On the other hand, Cacaxtla presents sorne areas used to store d1fferent matenals and cereals 1n the Gran Basamento. Tl11s building 1s another exan1ple of a palace that corroborates 1n a certa1n way what we expose 111 t111s paper.

Introducción

El acto de almacenar es un acto económico, el cual se basa en un supuesto de escasez y/o en la producción de exceden­tes Se almacena para asegurar el abasto de un bien detern1inado para su uso formal en un tiempo futuro y este proceso constituye también la principal estrategia econórn ica que asegura el desarrollo de act1v1dades ajenas a la producción de alimentos. Gracias al almacenamiento, tas sociedades trascienden el nivel de subs1stenc1a y é1rnr>l1an sus expectativas de participar en diferentes tipos de intercanlbro, tanto a nivel interno, como con otros grupos hu11lanos Las fam1!1as

• Centro INAH t~orel~

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lrnac nan us bienes de consumo como una estrategia para asegurar la subsistencia de s.us miembros Y superar la pr canedad que 1111phca la dependencia de las cond1c1ones med1oamb1entales ~n la produccion agricola. En este caso, 1 objetivo directo es garantizar a lo largo de un periodo la d1spon1b11tdad de alimentos y, por 10 tanto, la sobrev1venc1a

de la fan111ta en las mejores cond1c1ones posibles. . Por otra parte en las sociedades comple¡as, las estrategias de almacenamiento tienen corno propósito garantizar la 1ntcgrar.16n económica de los sistemas pollt1cos y el buen funcionamiento de las inst1tuc1ones. En este caso el objetivo del aln1accnan11ento es, pnmero, la subs1stenc1a de quienes no producen alimentos y, segundo, contar con bienes des t1nado5 a la 1nserc1on de las unidades políticas en un sistema de mercados. Durante el penado epiclás1co (600-1000 d.C.) en el Centro de México, se observa el surg.imient~ de asentamientos urbanos con diferentes grados de fortificación, que exhiben la presencia de complejos arqu1tectón1cos que se pueden 1dent1f1car con10 "palacios": edif1c1os donde se ev1denc1an actividades de carácter adrn1nistrat1vo Y pol1t1co. En este caso, nos refenmos al concepto de palacio traba1ado por Linda Manzanilla (Manzanilla 1985a; 2001 ), como un complejo arqu1tectón1co que implica la representac1on material del poder político. Para poder hablar de la presencia de un palacio como 1nst1tuc1ón más que como ed1f1c10, tenemos que encontrar: 1. una construcción de caracter monumental insertada en un contexto urbano, pero a la vez aislada del comun de la gente. La rnonumentalidad de estos edificios es el primer indicador de la presencia de un fuerte control sobre la mano de obra y el abasto de materiales de construcción; por otra parte, la situación estrategica del palacio dentro del plano urbano sugiere también una pos1c1ón pr1v1legiada de sus ocupantes dentro de la cadena de toma de dec1s1ones al interior

del nucleo urbano: 2. una comple¡1dad arqu1tectón1ca tal que perm1t1era el desarrollo de diversas act1v1dades propias de esta institución: los palacios son ed1f1cios mult1func1onales, en el sentido de que albergaron a personas dedicadas, en primer lugar, a la adn1in1strac1ón de bienes (los cuales varían mucho de acuerdo al caso) pero, derivados de esta act1v1dad principal, encontran1os que los palacios fueron escenarios de tomas de decisión, residencias de ciertos func1onar1os y testigos de ceremonias religioso- protocolarias; 3. un acceso controlado, una circulación restringida y una fortif1cac1ón son necesarios para garantizar la protección de lo aln1acenado y administrado. Gran parte de esta compleja planeac1ón se enfocaba a garantizar cierta autonomía tunc1onal del palacio y de sus ocupantes, que les permitiera enfrentar agresiones desde el exterior.

Xochicalco

Xoch1calco fue la sede de una unidad polít1co-económ1ca que identificamos como una ciudad-Estado característica del periodo ep1clásico (Marcus 1989: 201 ). El sitio arqueológico se localiza al oeste del Estado de Morelos, donde existen vanas elevaciones de terreno circundadas por amplios valles de tierras fert1les. La estratégica ubicación del centro de la ciudad, sobre la cima del Cerro Xoch1calco, rodeada de más elevaciones de terreno con vestigios arquitectónicos que reflejan su carácter defensivo, fue resultado del álgido momento que se vivio en Mesoamérica una vez que la gran ciudad de Teot1huacan perdió su hegemon1a en el centro de México. Fundada alrededor del. año 650 d.C., la ciudad se desenvolvió en un estado de aparente calma; sin embargo, los datos obtenidos de los trabajos de excavación en la zona revelaron que hacia el año 1000 d.C. hubo una revuelta interna que culmino con la destrucción y el abandono abrupto de la ciudad. Como es característico en las c1uda~es del Ep1clas1co, Xochicalco presenta una serie de barreras arquitectónicas que, co111b1nadas, constituyeron un sof1st1cado sistema de defensa. Destaca el Cerro Xochicalco como un sistema defensivo per se, que, con las elevadas y escarpadas laderas, ayudaba a evitar cualquier tipo de ataque externo (Figura 1 ). Por otro lado, en la !adera sur, en la parte menos inclinada, se detectó una muralla con una elevación de por lo menos ocho nietros que esta respaldada por una fosa de aproximadamente dos metros de profundidad.

Aprovechamiento y uso del agua

Una de las pnondades de los constructores de Xo ¡, 1 · sistema de redes de recolección Y almacenan11ent~ ~caco, aunado a este .sistema defensivo, fue la creación de un fundamental del plano arquitectonico de cada edificio ~nagua (Figura 2), m1s,ma que cons1st16 en 1nclu1r como parte al foso en donde se acondicionaron represas (Figura J) Edrenaje que condu~1a el agua a nivele~ 1nfer1ores hasta. llegar los habitantes de la ciudad disponer de una reserv d · stas represas funcionaban como depos1tos, que perrn1t1an a

a e agua para el consumo cot1d1ano.

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Figura l. Vista aérea de la ciudad en la que se aprecia su estrateg1ca localización

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Los drena¡es de los conjuntos arquitectónicos de la parte mas alta de la ciudad desembocan a su vez en depos tos construidos para almacenar y disponer de agua, tanto para el consumo cot1d1ano como para la reahzac ori de r tos cere1nor11as. l'al es el caso de "La Cisterna", deposito de forrna cuadrangular, al parecer construido sobre el patio de una subestructura (Figuras 2, 4a y 4b). Las d1mens1ones de este depósito son de 11 x 12 m de lado y una profu d1dad pron1ed10 de 2.50 n1. Al oeste de La Cisterna, existe una escalera que conduce hacia el 1ntenor de la m sma, es preci­samente por deba10 de uno de los peldaños, que se encuentra el drenaie que alimentaba este depos to. m entras que el drenaje que en su mornento sirvió para vaciarlo se localiza en el lado opuesto y conduce al toso. Ha} qu resa tar el hecho de que '·La Cisterna" se alimentó con el agua de lluvia que se captaba en un patio rodeado por u fan salon, un temascal y un pórtico. Todo este conjunto probablemente servía para los rituales de punf1cac16n asociados 1uego de pelota, el cual se ubica en un nivel 1nrnediatamente inferior, de allí su probable relación con act1v dades más de carácter ceremonial y ritual que con el uso cot1d1ano del agua. Muy distinto resulta otro depósito en la Estructura 5 de La Acrópolis (Figuras 2 y 5): el centro del patio presenta una ca1a de piedra que recibfa agua del desague proveniente del patro oeste de La Acrópolis Este elemento constructivo, un1co en la ciudad, con una dimensión de 1.80 x 1.90 m, s1rv16 para abastecer de agua a la Estructura 5, caracterizada por una sene de areas de act1v1dad relacionadas con el alrnacenamrento y la preparación de alimentos.

Almacenamiento y preparación de alimentos

La ciudad cuenta con vanos espacios dispuestos en diversos puntos del centro urbano. Al norte de la Estructura 5, dentro del conjunto reconocido con10 La Acropolls, se encuentra una hab1tac16n que incluye cuatro "graneros", los cuales son espacios cerrados conectados, cuyo acceso sólo se hacia por uno de los cuartos, por mP.d10 de un espacio abierto localizado a metro y r11ed10 del piso de la habitación. Suponemos que para poder alcanzar la entrada fue necesario el uso de una escalera de rriatenal perecedero (Figuras 2, 6a Y 6b). Este tipo de espacio para el almacenamiento se repite en la Estructura 4, que, a diferencia de los arnba mencionados, presenta una escalera de piedra al interior (Figuras 2 y 7). Tanto la Estructura 5 de La Acrópolis, corno la Estructura 4 en el Sector G han sido considera das como espacios habilitados para ta preparac1on y almacenan11ento de alimentos. _A pesar de que en_ el mismo sector se encuentran tarnbién las estructuras 6 y 7, éstas no han sido consideradas como areas de preparac1on de alimentos. Actualmente se reali¿an análisis químicos de muestras obtenidas en los pisos de los ~lamados graneros, con los cuales esperamos recabar mayor informacion sobre qué era lo que se almacenaba en este tipo de espacios. Otra forma de almacenaje, fuertemente ligada a las áreas de preparación y almacenamiento de alimentos mencio­nadas anteriormente, fue el uso de grandes tinajas (Figura 8). Con los tiestos recuperados y armados, se ha podido determinar la presencia de dos formas en las tinajas (Garza y Gonzalez 2006: 131) Un primer tipo, son aquellas con

16

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AlMACTNAMIENTO PREHISPANICO DE: NORTE DE M XICO AL ALTIPtANO CENTRAL

• Figura 6 a y b. a} Graneros ubicados en la Estruc tura 5 de la Acrópolis; b) interpretación -• Figura 7. Granero de la Estructura 4 del Se tor G con la escalera al interior e

boca de diámetro pequeño, cuello alto y un promecho de 108 cm de altura y 87 cm de diámetro máximo en su cuerpo (Figura 9). Al igual que de los pisos, también se tomaron muestras del interior de estas tinajas que fueron enviadas al Dr. Luis Barba (2003) para sus análisis qufmicos. Los resultados preliminares arrojaron datos entre los que destacan la presencia de ácidos grasos. Lo que nos hace pensar que estos tipos de recipientes no fueron utilizados para conte­ner los granos s61ido6, sino que quizá su función fue más para la preparación de alimentos ya que los ácidos grasos debieron impregnarse por la cocción de los alimentos. Un segundo tipo de tinajas, son las que presentan 86. 7 cm de altura en promedio y 65 cm de ancho máximo, su silueta es más recta que la del tipo anterior, su boca más am~lra y su cuello más corto CFagura 10). Los resultados de los análisis químicos en este tipo de vasijas resultaron negativos en 6cidos arasos y positivos en la presencia de un pH elevado asociado a alto contenido de carbonatos, posiblemente como producto de las cenizas agregadas al agua para quitarle dureza y hacerla potable (Barba 2003). 1ol cfntaros o ánforas encontradas en Xoch1calco están igualmente asociados al almacenamiento y/o a la acarreo de ...,. Son de cuello alto y estrecho, de menor tamat\o que las tinajas, con un promedio de altura de 48 cm Y 28 cm di diác1mo, asf como tres asas distribuidas en el cuerpo para permitir su traslado en la espalda (Figura 11 ). T111110 los graneros mmo las tinajas se asocaan enbe sf, a su vez, a ed1fic1os cuya distr1buc1ón es muy semejanted ª 81ddldos habilact0nales, pero sus dirnenslOMI y las asoctaciones con artefactos como metates y manos de moh:O: •·•e.n activldldes relacionadas con la de alimentos. En este caso los alimentos habr1an estado destin n a gai11nes trabljabln en las áraas oercanes 1 dichas estrucbafas, es decir en La Acrópolis y en los ed1fic1os que rodea a la Pirámide de las Serpientes Emplumadas, razón por la cual hemos definido estos ed1fic1os como áreas de servrcro

Figura 8. Tipos de t1na1as armadas Acrópolis y la Estructura 4 del Seci

Fi1ura 10. Tipos de tina1as asoc1ao

Almacenamiento de otros

Diferente resulta el hecho dJ consistente en conchas proc Pac1f1co (Frgura 12). Son 1nt arroJan los estudios de este liano Melgar en los que resé de la colecc16n de conchas d trabajadas como en proceso (elementos 1 y 77) del Seco análisis de los materiales del concluido que los objetos de área superior al Sector 8, ~ el material recuperado en 1

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Figura 8. Tipos de t1na1as armadas halladas en la Estructura 5 de la Acr6pohs y la Estructura 4 del Sector G

figura 10. Tipos de t1na1as asociadas al almacenamiento de agua

Almacenamiento de otros materiales

D ferente resulta el hecho del hallazgo de materia prima consistente en conchas procedentes, en su mayor1a, del Pacífico (Figura 12). Son interesantes los resultados que arro1an los estudios de este material por el arqlgo. Em1-llano r\11elgar en los que resalta la presencia de un 95% de la colección de conchas de Xochicalco, tanto de las no traba1adas co1no en proceso de elaboración, en el tiradero (elementos 1 y 77) del Sector B. Durante los traba1os de análisis de los materiales del Proyecto Xoch1calco, hen1os concluido que los objetos de dicho tiradero proceden del área superior al Sector B, es decir de La Acrópolis Todo el material recuperado en el tiradero del Sector 8, es material que en algún momento anterior al conflicto que se desató en el 1nter1or de la ciudad, estuvo ubicado en la Acrópolis Hecho que nos permite corroborar la idea de

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Figura 9. Tipos de tinajas asociadas al almacenamiento de granos o para la preparac1on de grandes cantidades de alimento

Figura 11. Cántaros ut1ltzados para el ac rreo del gua

Agura 12. Conchas encontradas en el llr d ro (El mento 1 y 77) del Sector B

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Figura 13. Figurillas antropomorfas: a) femeninas y b) masculinas

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que La Acrópolis estructura de orden palaciego, fungió como area de almacenamiento y producc1on de materiales de acceso restr1ng do y con alto valor económico. Como argumento a favor de esta hipótesis, es importante hacer mencion de la presencia de objetos trabajados de concha en lugares como la P1rám1de de las Serpientes Emplumadas en cuya ofrenda se encontraron alrededor de 158 objetos. Los trabajos de anahs1s sobre huellas de manufactura a través del microscopio electrónico han perm1t1do 1dent1ficar la forma en que los objetos de concha encontrados en el tiradero fueron realizados y que las huellas 1dent1f1cadas co1nc1den con las huellas de los matenales recuperados de la ofrenda de la P1rám1de de las Serpientes Emplumadas. Otro caso de posible acto de almacenamiento es la presencia de objetos elaborados en d1st1ntos tipos de piedra verde como figunllas antropomorfas (Figuras 13 a y b) y/o cuentas de diversos tipos y tamaños . AJ excavar la Estructura 6 en el Sector G, la cual se conforma por cuatro patios rodeados de cuartos, se hallo una inusual cantidad de este tipo de materiales. Vale la pena hacer notar que la misma proporc1on y los mismos tipos de figuntlas y cuentas encontradas en esta Estructura, también se encontraron en el Bastión Este, localizado en la primera terraza de lado sur de la ciudad que corresponde a uno de los ant iguos accesos a Xochicalco. S1 bien, al momento de la excavación de la Estructura 6, dicha concentración fue descubierta en los patios, es razonable suponer que su lugar ongrnal no fuese ah1· en efecto es posible que eJ lugar del hallazgo fuese resultado de la destrucción y saqueo del que fueron obJeto tanto Ja Plaza Pnnc1pal como La Acropolls, en el último momento de Xochicalco. Todo apunta que estos objetos or1g1nalmente se encontraban almacenados en uno de los cuartos que conforman la Estructura 6.

El Gran Basamento de Cacaxtla El sitio arqueológico de Cacaxtla se locahza al sur del Estado de Tlaxcala (lópez y Moltna 1991). A pesar de que 1ª ocupacaón de esta ciudad caracteristica del Eptclás1co 1n1c16 más tempranamente (400 d C.}, se ha considerado que su auge fue para este penodo mesoamencano, coexistiendo con la ciudad de Xoch1calco y compartiendo las caractenst e s

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Al igual que Xoch1calco. Cacaxtla es un centro nucleado que presenta ev1denc1a de fortificación, la cual se manifiesta mayormente en el entorno del Gran Basamento: la presen c1a de barreras arqu1tectonicas como taludes y murallas, as1 como fosos excavados en el tepetate del cerro, son los principales 1nd1cadores de una estrategia defensiva en este sector: En el Gran Basamento se observa una comple¡a organización del acceso y de la circulac1on: la ausencia de una entrada franca y la presencia de galerías y pórticos en la penfer1a parecen apuntar a un complejo arqu1tectón1co que buscaba mantener vigilado su entorno y d1f1cultar la circulac1on a quienes fuesen ajenos a este espacio Una de las venta1as de Xochicalco sobre Cacaxtla es que se trabaja con contextos arqueológicos pr1marros; por el contrario, en ésta última ciudad no es posible realizar las 1nvestigac1ones de la misma manera debido a la sobreposi­c1on de estructuras arquitectónicas en sus diferentes etapas constructivas. La cantidad de estructuras sobrepuestas rmplrca '? desocupación programada de los complejos arqu1tecton1cos antes de que los habitantes de Cacaxtla procedieran a cubrirlos con una nueva etapa constructiva, por lo que el contexto general de dicho s1t10 no arro¡a la 1nformac16n referente a la función de los edificios. En Xoch1calco, muy al contrario, el abrupto abandono en razón de los conflictos internos (Garza y González 1995: l 00) que se suscitan alrededor del año 1000 d.C. (Garza et al. en prensa), permite que los materiales arqueológicos se encuentren in s1tu y permitan hasta cierto punto establecer la func1on del edificio. La primera ev1denc1a de espacios arqu1tectón1cos asociados al almacenamiento se encontró durante la segunda tempo­rada de exploración en el sitio. Se trata de una habitación que es parte de un complejo arquitectónico al norte del patio del Mural de la Batalla. Este complejo arqu1tectón1co se conoce sólo parcialmente, pero sus espacios de caracter

Figura 14. S1m11itudes entre CacaxtJa y Xochicalco· en la primera se reconoce un sapo plasmado en un mural y en Xochlcalco una escultura en piedra del mismo animal utihzado como gárgola

n1onumental y la presencia de pintura mural son 1nd1cadores del caracter palaciego de este complejo arqu1tecton1co. La pequeña habitación de la que hablamos presenta una sene de receptaculos cuadrangulares hechos con adobe y recubiertos de estuco, cada uno de aproximadamente 40 x 48 cm en planta (Figura 15). Sus descubridores 1dentif1caron huellas que sugieren la presencia de dos niveles de este tipo de receptaculos y la posibilidad de que tuviesen una tapa aunque no fue posible recuperar ningún tipo de restos animales o vegetales al momento de la excavación. No cabe duda, sin embargo, que estos cajones s1rv1eron para mantener separados ciertos materiales ~>rev1amente seleccionados Y/o clas1f1cados; la ubicación del cuarto nos advierte por otra parte que dichos materiales se encontraban resguardados Y que fueron de valor para los ocupantes del ed1f1cio, un palacio entonces. Tareas como la clasificación, la selección y el almacenamiento de materiales apreciados por los ~rupos sociales en el poder son act1v1dades administrativas, independientemente del uso final y de la naturaleza que tuviesen dichos materiales. En otro con1unto arquitectónico del Gran Basamento, existen pequeñas hab1tac1ones cuyos accesos se encontraban tapiados, por lo menos parcialmente y que, al parecer, servfan como almacenes esta vez asociados a un area de caracter

Pnmord1almente habitacional.

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Figura 15. Uno de los receptaculos localizados en el basamento de Cacaxtla

Ftgura 16. Cuexcomate encontrado ba10 el basamento de Cacaxtla

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Otras estructuras de almacenamiento en el Gran Basamento son los famosos cuexcomates hallados durante los trabajos para la colocacion de la gran techumbre metálica {Ram1rez A. 1990). Estos cuexco. mates corresponden a una etapa constructiva anterior a la descrita previamente, fueron elaborados con adobe y recubiertos de barro y estuco por el lado exterior. La forma que acusan es la conocida etnográficamente para este tipo de estructuras: una silueta ovoidal sobre una base circular. Se habla de que se identificó un total de seis cuexcomates, pero actualmente sólo uno se conserva en exhi­bición {Figura 16) Por desgracia se desconoce información precisa sobre si se realizó algun análisis del contenido y cuáles fueron los resultados. En este caso, si bien falta la mayor parte de la informa­ción de excavación, la forma basta para identificar su función, un almacén dedicado al resguardo de granos. las dimensiones de dichos cuexcomates, su número, as1 como su ubicación como parte de un palacio, nos remiten a la hipótesis de un control adm1n1strativo sobre los bienes -alimenticios- desarrollados por los habitantes de este co1nple10 arquitectónico.

Algunas conclusiones

El penado ep1clás1co (650-900/950 d.C.) en el Centro de México se caracteriza por la presencia de unidades político-adm1n1strativas que revisten patrones de asentamiento de indudable carácter urbano. Dichas ciudades presentan complejos arquitectónicos bien defini­dos, entre los que es posible 1dent1f1car la presencia de palacios. Tanto en el caso de Xochicalco como en el de Cacaxtla, los palacios presentan dimensiones monumentales, barreras arqu1tectón1cas Y accesos controlados; todos están compuestos por más de un conjunto arquitectónico, cada uno de ellos aparentemente con una función distinta. Así se entrelazaban funciones residenciales, adm1n1strat1vas y probablemente de producción. En consecuencia, encontramos áreas de almacenamiento de diferentes características, de acuerdo con los productos a guardar. Una constante fue el almacenamiento de alimentos, conducta que está relacionada con la fortificación de estos comple1os arquitectóni­cos, como estrategia de sobrevivenc1a en caso de posibles ataques. La fortificación sin la garantía de alimentación perdería sentido práctico Otros productos, de circulación restringida como las con­chas y los objetos de piedra verde, producidos y/o almacenados en estos recintos, estaban quizá destinados a ser distribuidos entre los miembros de las diferentes instituciones que encabezaban el gobierno y, a la vez, servían posiblemente para insertar a la ciudad dentro de los sistemas de intercambio regionales. lo anterior plantea que, en la plan1ficac1ón de las ciudades-Estado del Ep1clásico, el almacena miento fue un factor primordial en el que se basó gran parte de la logística de funcionamiento de este tipo de asentamientos.

En defin1t1va, encontramos que los bienes almacenados fueron tanto alimentos como los llamados "bienes de pres t1g1011

, en el primer caso, el centro urbano no productor atrae los bienes de subs1stenc1a, mientras que en el caso de los bienes de prest1g10, es muy probable que fuera parte de la 1nserc1ón de la ciudad en un sistema de red1stnbucron e 1ntercamb10 más complejo. Ahora bien, falta aún def1n1r con más prec1s16n tos bienes almacenados y, sobre todo falta 1nvest1gar los posibles mecanismos de d1stnbuc1ón: sistemas de pesos, n1ed1das y equ1valenc1as, rutas Y radio de 1ntercamb10, etcétera.